Relaciones matriz-filial: Deducciones por doble imposición de

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Relaciones matriz-filial:
Deducciones por doble imposición de dividendos
y plusvalías.
Acreditación por la pérdida del valor de la filial.
Deducción del fondo de comercio financiero
ASDRÚBAL CASARES GARCÍA
NIEVES PALAU FAYOS
Agencia Estatal de Administración Tributaria
SUMARIO
I. DEDUCCIONES POR DOBLE IMPOSICIÓN INTERNACIONAL DE DIVIDENDOS Y PLUSVALÍAS. 1. Introducción. 2. Medidas
para evitar la doble imposición internacional contenidas en el Real Decreto legislativo 4/2004, de 5 de marzo,
por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley del Impuesto sobre Sociedades (TRLIS): matriz residentefilial no residente. 2.A. El método de exención (art. 21 TRLIS). 2.B. El método de imputación y deducción en
la cuota para evitar la doble imposición internacional de dividendos y participaciones de dividendos. 3. Las
medidas antielusión. 4. Medidas para evitar la doble imposición internacional en las relaciones matriz-filial
contempladas en los convenios. 4.A. Tributación de los dividendos en el Estado de residencia. 4.B. Tributa­
ción de los dividendos en el Estado de la fuente. 4.C. Los dividendos procedentes de participaciones empre­
sariales. 4.D. Los métodos para evitar la doble imposición. 4.E. Relación de los convenios con las normas
internas.—II. EL FONDO DE COMERCIO FINANCIERO. 1. Introducción. 2. Definición. 3. Requisitos. 4. Importe.
5. Contabilización. 6. Compatibilidades. 7. Obligaciones formales. 8. Ejemplos. 9. Análisis conjunto de los
diversos aspectos y referencia a las consultas tributarias. 9.1. Consulta número V0379-05, de 9 de marzo de
2005. 9.2. Consulta número 1490-02, de 4 de octubre de 2002. 9.3. Consulta número V0135-03, de 28 de
noviembre de 2003. 9.4. Consulta número V1316-05, de 4 de julio de 2005. 9.5. Consulta número 0109-05,
de 17 de marzo de 2005.
Palabras clave: Fiscalidad financiera, Fiscalidad internacional, Impuesto sobre Sociedades, medidas unilaterales
para evitar la doble imposición internacional, métodos de exención, fondo de comercio financiero.
I. DEDUCCIONES
— La legislación interna.
POR DOBLE IMPOSICIÓN
— La legislación contenida en los Convenios
para evitar la Doble Imposición (CDI).
INTERNACIONAL DE DIVIDENDOS Y
PLUSVALÍAS
— Las repercusiones de la transposición en la
legislación interna de la Directiva 123/2003
matriz-filial de la Comisión Europea.
1. Introducción
Se trata de resumir someramente los métodos
para evitar la doble imposición internacional en el
reparto de dividendos que pueda efectuar una filial
a favor de su matriz y en la enajenación de la parti­
cipación de la filial suponiendo que la matriz es
residente en España y la filial es no residente y vice­
versa y ello aplicando:
De analizar las medidas antielusión contenidas en:
— En los Convenios para evitar la Doble Impo­
sición y especialmente en sus Comentarios.
— En la legislación interna tanto en la norma­
tiva de cada tributo, como en el Impuesto
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sobre la Renta de No Residentes y en la
propia Ley General Tributaria
pen en entidades que sí daría derecho a la
exención básicamente por realizar activi­
dades empresariales.
— No se integra en la base imponible de la
entidad, que haya aplicado la exención a los
dividendos, la provisión por depreciación
de la cartera motivada por el reparto del
dividendo. Ello parece lógico para evitar
supuestos de desimposición excepto que
otra entidad residente la hubiera transmiti­
do anteriormente y no hubiera podido apli­
car la exención en cuyo caso se produciría
un supuesto de doble imposición ya que
tributaría la no residente y la transmitente
en cuyo caso podría aplicar el sistema de
imputación ya que podría probar que un
importe equivalente a la provisión tributó
en España por una transmisión anterior.
También estarán exentas las rentas derivadas de
la transmisión de participaciones en (incluyendo
disoluciones, liquidaciones y separación de socios)
entidades no residentes cuando:
— Se participe directa o indirectamente al
menos en el 5 por 100 del capital de la
entidad no residente. El porcentaje reque­
rido debe ser anterior a la transmisión, es
decir, que este requisito deberá cumplirse
el día en que se produzca la transmisión.
— La exención se refiere a la renta que se pro­
duce en la transmisión abarcando las reser­
vas contables de la filial como las latentes.
— La renta negativa de la transmisión de la par­
ticipación sí se integra en la base imponible.
— Los requisitos de actividad de la filial son los
mismos que en el caso de los dividendos.
— Se exigen los mismos requisitos de tributa­
ción en el extranjero y residencia que en el
caso de los dividendos. El cumplimiento
parcial de este requisito supondría analizar
la renta derivada de la transmisión.
— La persona o entidad adquirente de la par­
ticipación no ha de residir en un paraíso
fiscal, para poder aplicar la exención.
2. Medidas para evitar la doble imposición
internacional contenidas en el Real
Decreto legislativo 4/2004, de 5 de
marzo, por el que se aprueba el Texto
Refundido de la Ley del Impuesto sobre
Sociedades (TRLIS):
matriz residente-filial no residente
La doble imposición internacional económica
de dividendos y plusvalías en las relaciones matrizfilial es abordada a través de los métodos de exen­
ción (art. 21 del TRLIS) y de imputación (art. 32
TRLIS) que opera en la cuota.
2.A. El método de exención (art. 21 TRLIS)
Están exentas los dividendos o participaciones
en beneficios de entidades no residentes cuando se
cumplan los siguientes requisitos:
— Se aplica tanto a entidades residentes en
España como a establecimientos perma­
nentes de entidades no residentes situados
en España.
— El porcentaje de participación en la filial no
residente debe ser al menos del 5 por 100,
tanto de forma directa o indirecta. Dicho
porcentaje de participación debe mantener­
se de forma ininterrumpida durante un año
anterior al día en que el dividendo sea exigi­
ble, o mantenerse posteriormente durante
el tiempo necesario para completar el año.
— Se requiere que la entidad participada haya
estado gravada por un impuesto de natu­
raleza idéntica o análoga. Se establece un
criterio muy laxo, para entender cumplido
este requisito. Se entiende cumplido si
existe Convenio para evitar la doble impo­
sición, que contenga cláusula de intercam­
bio de información.
— Se excluyen a los dividendos de filiales resi­
dentes en territorios calificados como
paraísos fiscales (sí podría aplicar el méto­
do de deducción). En principio no habría
problemas para considerar exentos los
dividendos incluso si la filial no gozase de
deducciones o bonificaciones, sería más
dudoso si la renta de la filial que origina el
posterior dividendo estuviera exenta.
— Se exige que los beneficios que se repartan
o en los que se participan procedan de la
realización de actividades empresariales o
procedan de holdings que a su vez partici­
2.B. El método de imputación y deducción en
la cuota para evitar la doble imposición
internacional de dividendos
y participaciones de dividendos
Se permite deducir de la cuota íntegra de la
matriz el importe del impuesto efectivamente
pagado por la filial extranjera sobre los beneficios
con cargo a los cuales se distribuyen los beneficios,
y en la cuantía correspondiente a tales dividendos,
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Relaciones matriz-filial: Deducciones por doble imposición de dividendos y plusvalías. Acreditación de la pérdida de valor de...
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método de exención e imputación para evitar la
doble imposición en las relaciones matriz-filial.
— El método de exención se excluye cuando
la entidad participada o la adquirente sea
residente en paraísos fiscales. No se espe­
cifica nada para los casos en que la filial
realice su actividad en paraísos o tenga a su
vez filiales en dichos países o territorios.
— El artículo 20 3. b) niega la exención a las
plusvalías y dividendos procedentes de
filiales que desarrollen su actividad con la
finalidad principal de disfrutar de la exen­
ción y se establece tal presunción cuando
la actividad efectuada por la matriz o una
filial española cese y se traslade a una filial
extranjera salvo otro motivo económico
válido. Parece que se trata de privar de la
exención a deslocalizaciones producidas a
partir de la entrada en vigor del DecretoLey 3/2000 que obedezcan a motivos prin­
cipalmente fiscales exigiendo que sea la
Administración tributaria quien pruebe
prácticamente que la decisión empresarial
es a todas luces ineficiente desde la racio­
nalidad económica y que a pesar de ello se
compensa por el ahorro fiscal.
— De acuerdo con el apartado 4.o del artícu­
lo 21 la renta negativa en la transmisión de
las filiales no residentes que hubiera sido
transmitida anteriormente con plusvalía
por otra entidad con la que se forme
grupo no se computará hasta el importe
de dicha plusvalía.
— En el caso de participaciones involucradas
en operaciones de reestructuración empre­
sarial amparadas en el régimen especial del
Capítulo VIII del Título VII del TRLIS, el ar­
tículo 21 advierte que la exención sólo se
aplicará a la plusvalía generada a partir del
momento en que haya tenido lugar la ope­
ración de fusión, escisión, canje, etc., ampa­
rada en el citado régimen.
Se debe señalar que se deberían aplicar las nor­
mas antielusión no específicas contenidas en la
LGT o en los propios CDI dependiendo del caso a
estrategias que pudieran ser consideradas princi­
palmente elusivas como:
— Trasladar artificialmente los beneficios a las
filiales residentes en países de baja tributa­
ción y las pérdidas derivadas enjugarlas vía
provisión.
— Minorar los valores teóricos de las filiales
no residentes a través de operaciones con
paraísos fiscales.
siempre que el importe del impuesto extranjero se
integre en la base imponible de la matriz.
En la práctica esta deducción se aplicará cuando
no pueda aplicarse la exención.
La aplicación de esta deducción requiere el
cumplimiento de los siguientes requisitos:
— Los dividendos deben computarse en la
base imponible.
— Se exige un grado de participación en la
entidad no residente, del 5 por 100, al
igual que en el método de exención. Igual­
mente tal participación debe poseerse
ininterrumpidamente durante el año ante­
rior al día en que el dividendo sea exigible,
o en su defecto, se mantenga posterior­
mente hasta contemplar ese plazo.
— La entidad residente ha de integrar en su
base imponible el impuesto satisfecho por
la filial correspondiente a los dividendos.
— Tiene también la consideración de impues­
to efectivamente pagado no sólo los de la
filial de primer nivel sino también los de las
filiales de segundo y tercer nivel, siempre
que también se cumplan respecto de estas
últimas los requisitos de porcentaje de
participación y el concerniente al tiempo
de tenencia.
— Esta deducción juntamente con la del ar­
tículo 31 (que trata de evitar la doble
imposición jurídica que se puede producir
cuando el país de la fuente grave los divi­
dendos ya sea por el Convenio de doble
imposición o por su legislación interna) no
puede exceder de la cuota íntegra que
España correspondería pagar estas rentas
si se hubieran obtenido en territorio espa­
ñol sin que el exceso sea gasto deducible.
— Si hay insuficiencia de cuota se puede prac­
ticar la deducción en los diez años inme­
diatos y sucesivos.
— No tiene la consideración de partida fiscal­
mente deducible en la matriz la deprecia­
ción de la participación, consecuencia de la
distribución del beneficio cualquiera que
sea la forma o el periodo en que se refleje,
ya sea por dotación en la transmisión,
salvo que los citados dividendos hayan tri­
butado en España como consecuencia de
una transmisión anterior.
3. Las medidas antielusión
A continuación se resumen las medidas antielu­
sión contenidas en el TRLIS y relacionadas con el
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Cuadernos de Formación. Colaboración 12/06. Volumen 2/2006
— Trasladar operaciones que no serían dedu­
cibles fiscalmente en la matriz o en la filial
española a filiales no residentes o jugar con
las normas contables de cada país de resi­
dencia de la filial.
— Situar las participaciones respecto de las
que se han computado plusvalías exentas o
pérdidas integradas en la base imponible,
derivadas de transmisiones intra grupo, en
las filiales extranjeras ya que en caso de
plusvalías exentas las pérdidas posteriores
no computarán en España, y en caso de
pérdidas integradas, las plusvalías posterio­
res no estarían exentas en España de
manera tal que es más conveniente inten­
tar que la pérdidas computen en otro país
y que la plusvalías puedan estar exentas en
otro país (SANZ GADEA).
pagados por un Estado contratante pue­
den someterse a tributación en el Estado
de residencia de acuerdo con la legislación
interna de dicho Estado.
4.B. Tributación de los dividendos en el
Estado de la fuente
— El apartado 2 del artículo 10 reconoce al
Estado de la fuente la facultad de gravar los
dividendos, señalando que dicho gravamen
será deducible del impuesto aplicable por el
Estado de residencia conforme al artículo
23 del CDI, por lo que se reconoce que el
impuesto recaudado en el Estado de la
fuente tiene preeminencia sobre el aplicado
en el Estado de residencia. Pero a diferen­
cia de lo establecido por el apartado 1, que
no establece límite cuantitativo al impuesto
exigido el Estado de residencia del precep­
tor, el apartado 2, fija un límite cuantitativo
que no puede ser sobrepasado por el
impuesto en el Estado de la fuente (normal­
mente el 10 o el 15 por 100 o el 5 por 100
en las participaciones empresariales).
4. Medidas para evitar la doble imposición
internacional en las relaciones matrizfilial contempladas en los convenios
La tributación de los dividendos aparece regula­
da en el artículo 10 del Modelo de Convenio de la
OCDE (MC) y en los propios convenios suscritos
por España (CDI) mientras que el artículo 23 con­
tiene los métodos para evitar la doble imposición.
4.C. Los dividendos procedentes de
participaciones empresariales
— La mayor parte de los CDI distinguen
entre los denominados dividendos proce­
dentes de una inversión directa o empre­
sarial y los restantes dividendos.
— Para aplicar el régimen más favorable de
las participaciones empresariales se exige
que el perceptor sea una sociedad que a su
vez posea una determinada participación
en el capital de la sociedad que los distri­
buye y de esa manera serán gravados a un
tipo inferior en la fuente.
— Los Comentarios oficiales núm. 10 señalan
la necesidad de evitar una cascada imposi­
tiva y facilitar las inversiones internaciona­
les, por ello se considera que cuando una
sociedad de un estado posee una partici­
pación directa de al menos el 25 por 100
en una sociedad de otro Estado, está justi­
ficado gravar menos la distribución de
beneficios de esta última sociedad a la
matriz extranjera y reconocen expresa­
mente los Comentarios que ese objetivo
dependerá también de la forma de tributa­
ción en el Estado de residencia.
— La mayor parte de los CDI firmados por
España fijan un tipo máximo del 10 por
100 o del 5 por 100 e incluso algunos lle­
4.A. Tributación de los dividendos en el
Estado de residencia
— Los apartados 1 y 2 del artículo 10 estable­
cen un reparto del gravamen de los divi­
dendos entre el Estado de la fuente y el
Estado de residencia, en concreto el apar­
tado 1 reconoce al Estado de la residencia
del preceptor de los dividendos, la facultad
de gravarlos, y el apartado 2, otorga al Esta­
do de la fuente la potestad de establecer un
gravamen limitado sobre los mismos.
— El número 8 de los Comentarios al MC
aclara que el artículo se refiere sólo a los
dividendos abonados por una sociedad
residente de un Estado contratante a un
residente del otro Estado contratante y
que dicho artículo 10 no se aplica a los
dividendos pagados por una sociedad resi­
dente de un tercer Estado, ni a los dividen­
dos pagados por una por una sociedad
residente de un Estado contratante que se
abonen a un establecimiento permanente
que una empresa de dicho Estado posea
en el otro Estado contratante.
— Tanto el MC como los CDI firmados por
España establecen que los dividendos
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Relaciones matriz-filial: Deducciones por doble imposición de dividendos y plusvalías. Acreditación de la pérdida de valor de...
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gan a declarar la exención (actualmente
aplicable para todas las matrices de la
Unión Europea).
— La mayoría de los Convenios para evitar la
doble imposición exigen un porcentaje de
participación del 25 por 100 de forma
directa, aunque otros significativos, como
el de EEUU, admite las participaciones
indirectas.
— El MC coincide en no exigir que la socie­
dad perceptora de los dividendos haya
poseído la participación mínima, que justi­
fica la aplicación del tipo reducido, duran­
te un período de tiempo mínimo
determinado con objeto, como señalan los
Comentarios, de aplicar con amplitud el
precepto y evitar investigaciones tributa­
rias considerables. Los CDI firmados por
España adoptan este criterio y no estable­
cen requisitos temporales.
— Se establecen cláusulas especiales para las
Sociedades transparentes e Instituciones
de inversión.
en el marco de los dividendos matriz-filial,
debido a la amplia exención que establece
el artículo 21 del Texto Refundido del
Impuesto de Sociedades.
— Para el profesor Calderón Carrero la apli­
cación alternativa de la normativa unilate­
ral resulta adecuada cuando el principio de
no agravación se haya recogido, ya sea a
nivel interno o convencional, en estos
casos el contribuyente podría optar (Con­
venio EE. UU. o Canadá).
— Para SANZ GADEA, con la propia redacción
del artículo 21 del Texto Refundido del
Impuesto de Sociedades, cuando se refie­
re “a países con los que España tenga sus­
critos CDI, etc.” se abre la puerta del
método de exención, aun cuando el Con­
venio de doble imposición establezca
métodos de imputación y posiblemente
sea una manifestación del principio de no
agravación. Este autor entiende que si el
Estado de residencia no grava las rentas no
existe, en consecuencia, doble imposición
y por lo tanto no cabe aplicar Convenio
para evitar la doble imposición.
4.D. Los métodos para evitar la doble
imposición
— Los Convenios para evitar la doble imposi­
ción permiten articular medidas de política
fiscal y económica a través de los métodos
basados en técnicas de exención o imputa­
ción, o a través de otro tipo de cláusulas
combinan tanto la exención como las de
imputación de impuestos no pagados (tax
sparing). Así el artículo 23 A combina la
exención tributaria para las rentas que pue­
dan gravarse en el Estado de la fuente, con
el método de imputación para las rentas
cuya tributación en la fuente resulten limi­
tadas por e propio convenio; por su parte
el artículo 23 B recoge el método de impu­
tación con carácter general, aunque tam­
bién recoge una cláusula de progresividad.
II. EL
FONDO DE COMERCIO FINANCIERO
1. Introducción
De las varias acepciones del fondo de comercio
existentes, el Real Decreto Legislativo 4/2004, de 5
de marzo, por el que se aprueba el Texto refundi­
do de la Ley del Impuesto sobre sociedades, (en
adelante TRLIS), se pronuncia sobre tres: El fondo
de comercio que se podría llamar genérico (artícu­
lo 11.4 TRLIS), el fondo de comercio financiero
(artículo 12.5 TRLIS) y el fondo de comercio de
fusión (art. 89 TRLIS).
De acuerdo con la Resolución del Presidente
del Instituto de Contabilidad y Auditoria de Cuen­
tas de 21 de enero de 1992, por las que se dictan
normas de valoración del inmovilizado material, el
Fondo de Comercio se define como el conjunto
de bienes inmateriales tales como la clientela,
nombre o razón social, localización, cuota de mer­
cado, y nivel de competencia de una empresa,
capital humano, canales comerciales y otros de
naturaleza análoga que impliquen valor para la
empresa.
El fondo de comercio es en definitiva un valor
tangible, que se valora a efectos contables por la
diferencia entre el importe satisfecho en la adquisi­
ción de una empresa, o parte de la misma, y la
4.E. Relación de los convenios con las
normas internas
— El artículo 96 de la Constitución Española
ha dado origen a la teoría de la supralega­
lidad de los tratados, ya que no pueden ser
modificados ni derogados por leyes nacio­
nales ni posteriores.
— En determinadas ocasiones la normativa
interna puede ser más eficaz que la conve­
nida para lograr el objetivo de evitar la
doble imposición, y esto puede producirse
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Cuadernos de Formación. Colaboración 12/06. Volumen 2/2006
suma de los valores identificables de los activos
individuales adquiridos menos los pasivos asumidos
en la adquisición. El valor de mercado de los acti­
vos, de acuerdo con las normas de valoración del
Plan General de Contabilidad, será el límite máxi­
mo a considerar para su valoración. Los pasivos se
valorarán a su valor actual, sin perjuicio de contabi­
lizar el valor de reembolso, teniendo en cuenta el
tipo de interés de mercado. En resumen, el Fondo
de Comercio será en exceso de precio pagado
sobre el valor contable ajustado a precios de mer­
cado de una empresa y el patrimonio neto ajusta­
do de la misma.
No obstante, para que el Fondo de Comercio
sea objeto de contabilización y figure en el activo
del balance, la adquisición del mismo debe haber
sido a título oneroso. Esta exigencia es debida al
hecho de que el adquirente, de acuerdo con el
principio del valor de adquisición, contabiliza como
contravalor del precio efectivamente pagado la
totalidad del patrimonio adquirido, con las limita­
ciones valorativas exigidas por la normativa vigente,
surgiendo por diferencia el Fondo de Comercio.
Así, una empresa no puede contabilizar su pro­
pio Fondo de Comercio, debe de ser un tercero
quien se lo reconozca y pague por ello para que
ese valor intangible pueda ser contabilizado, por lo
que si en el activo del balance de una empresa hay
una cuenta de fondo de comercio es porque esta
empresa ha adquirido a otra empresa.
Ahora bien, y entrando ya en el tema que nos
ocupa, ¿qué ocurre cuando se adquiere de forma
onerosa parte o el 100 por 100 de las acciones de
otra sociedad y el precio pagado es superior al
valor neto contable de la sociedad adquirida?. En
tal caso, surge el Fondo de Comercio Financiero,
que se corresponde a la parte del precio de adqui­
sición de la participación en el capital de otra socie­
dad que excede del valor teórico de la misma y que
se corresponde con un fondo de comercio tácito
de la entidad participada no registrado en su con­
tabilidad, es decir, el valor de dicho inmovilizado
inmaterial está incorporado en el precio de adqui­
sición.
El Fondo de Comercio Financiero surge cuando
se satisface por unas acciones un precio superior al
valor que teóricamente tienen en el momento de
su adquisición. Este valor teórico se suele derivar
del balance de la entidad emisora de las participa­
ciones previo a la adquisición de fecha mas cercana
a la misma. El sobreprecio se satisface por la exis­
tencia de plusvalías que el mercado valora pero
que no se hallan reflejadas en el balance (tácitas),
bien presentes bien futuras. Dichas plusvalías táci­
tas presentes pueden provenir, por ejemplo, de
elementos patrimoniales infravalorados o de deu­
das sobrevaloradas; las plusvalías tácitas futuras
pueden provenir, por ejemplo, de las expectativas
de superbeneficios.
Contablemente el fondo de comercio financie­
ro no tiene relevancia alguna, en el sentido de que
no se contabiliza de manera separada al valor teó­
rico de la participación pues ello sería contrario a lo
dispuesto en la Norma de Valoración 8.a del Plan
general de Contabilidad, que a este respecto dis­
pone que “Los valores negociables (...), sean de
renta fija o variable, se valorarán en general por su
precio de adquisición a la suscripción o compra.
Este precio estará constituido por el importe total
satisfecho o que deba satisfacerse por la adquisi­
ción, incluidos los gastos inherentes a la opera­
ción...”. En consecuencia, la adquisición de la
totalidad del capital social de otra entidad se valo­
rará por su precio de adquisición, no pudiendo, en
principio, contabilizarse un activo de inmovilizado
inmaterial (fondo de comercio financiero). Es decir,
este estará implícito en el precio de adquisición de
las acciones.
2.
Definición
El artículo 12.5 del TRLIS, establece “cuando se
adquieran valores representativos de la participa­
ción en fondos propios de entidades no residentes
en territorio español, cuyas rentas puedan acoger­
se a la exención establecida en el artículo 21 de
esta ley, el importe de la diferencia entre el precio
de adquisición de la participación y su valor teórico
contable a la fecha de adquisición se imputará a los
bienes y derechos de la entidad no residente en
territorio español, de conformidad con los criterios
establecidos en el Real Decreto 1815/1991, de 20
de diciembre, por el que se aprueban las normas
para la formulación de cuentas anuales consolida­
das, y la parte de la diferencia que no hubiera sido
imputada será deducible de la base imponible, con
el límite anual máximo de la veinteava parte de su
importe, salvo que se hubiese incluido en la base
de la deducción del artículo 37 de esta ley sin per­
juicio de lo establecido con la normativa contable
de aplicación”.
“La deducción de esta diferencia será compati­
ble, en su caso, con las dotaciones a que se refiere
el apartado 3 de este artículo.”
3.
Requisitos
Tras la creación del artículo 12.5, el fondo de
comercio financiero va a poder ser, sin embargo,
fiscalmente amortizable, en los términos que a
continuación se indican:
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Relaciones matriz-filial: Deducciones por doble imposición de dividendos y plusvalías. Acreditación de la pérdida de valor de...
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depreciación del valor de la participación, pero
incompatible con la deducción por actividades de
exportación, regulada en el artículo 37 del TRLIS.
Es importante añadir, que la introducción del
artículo 12.5 no es retroactiva, pudiendo aplicarse
únicamente a los fondos de comercio financieros
que, en las condiciones descritas, se generen por
inversiones realizadas en periodos iniciados a par­
tir de 1 de enero de 2002. Es decir, no es aplicable
a adquisiciones anteriores a periodos impositivos
iniciados antes del 1 de enero de 2002, aún cuan­
do la depreciación del fondo de comercio financie­
ro tenga lugar en periodos impositivos iniciados
con posterioridad a dicha fecha.
— Siempre que se trate de participaciones en
los fondos propios de entidades no resi­
dentes.
— Que el sujeto pasivo posea, al menos, el 5
por 100 en el capital de la entidad no resi­
dente.
— Que tal participación se posea desde, al
menos, el año anterior a la nueva adquisi­
ción.
— Que las rentas obtenidas por la entidad no
residente tengan carácter empresarial.
— Que, además, tales rentas hayan tributado
por un impuesto similar al Impuesto de
Sociedades Español.
En tales condiciones, resultará fiscalmente
deducible el fondo, a razón de un porcentaje máxi­
mo anual del 5 por 100.
Para que pueda ser fiscalmente amortizable el
fondo de comercio financiero, las rentas proceden­
tes de las participaciones que se adquieren, han de
poder acogerse al régimen de exención, para ello,
la entidad no residente, ha de cumplir las condicio­
nes establecidas en ese régimen (mas arriba deta­
lladas) en lo que se refiere a la realización de
actividades empresariales, etc. Pues bien, estos
requisitos exigidos a la entidad no residente deben
cumplirse todos los ejercicios en que se aplique la
deducción en base, y no solo en el ejercicio de
adquisición de la participación.
5. Contabilización
Los gastos no son fiscalmente deducibles si no
se han imputado contablemente en la cuenta de
pérdidas y ganancias, excepto que expresamente el
propio TRLIS permita la deducción de gastos no
contabilizados.
La deducibilidad fiscal del fondo de comercio
financiero no está condicionada a su imputación
contable en la cuenta de pérdidas y ganancias.
Puede haber, pues, un gasto fiscal en concepto de
amortización del fondo de comercio financiero
que, sin embargo, no tendrá la consideración de
gasto contable, excepción a la que el inciso final del
artículo 12.5. primer párrafo del TRLIS da expresa
cobertura. Las diferencias que por este motivo sur­
jan tendrán, pues, carácter temporal, comenzarán
siendo negativas y revertirán a positivas en el
momento en que se enajene la participación.
Por último, habría que añadir que el Plan Gene­
ral de Contabilidad, en su Norma de Valoración 5.a
C). establece que la amortización del fondo de
comercio se efectuará en el periodo en que contri­
buya dicho fondo a la obtención de ingresos por
parte de la sociedad adquirente, por lo que en caso
contrario, por ejemplo, si la empresa adquirida
fuese inactiva, la deducibilidad del fondo de comer­
cio mediante su amortización no sería ni contable
ni fiscalmente procedente en la medida en que
dicho fondo no contribuya a la obtención de ingre­
sos en la entidad adquirente.
4. Importe
No formará parte del fondo, en cualquier caso,
la parte de plusvalía que, de acuerdo con los crite­
rios contenidos en el Real decreto 1815/1991, de
20 de diciembre, por el que se aprueban las nor­
mas para la formulación de las cuentas anuales con­
solidadas, resulte imputable a los bienes y derechos
de la entidad no residente.
La remisión para la imputación de parte de las
plusvalías a los bienes de la entidad no residente debe
entenderse hecha, concretamente al artículo 23.4
del citado Real Decreto 1815/1991. En virtud del
mismo, la parte de la plusvalía imputable a los bienes
de la entidad no residente, y, por ende, no conside­
rable como fondo de comercio financiero, será el
resultado de multiplicar la diferencia entre el valor de
mercado y el teórico contable para la entidad no
residente del elemento causante de la plusvalía por el
grado de participación de la residente en la no resi­
dente. Ambas magnitudes deben tomarse según su
valor en la fecha de adquisición de la participación.
La amortización del fondo será compatible con
la dotación de la correspondiente provisión por
6. Compatibilidades
La deducción en la base imponible del fondo de
comercio financiero es incompatible con la deducción
en la cuota íntegra por actividades de exportación.
Cuando la misma adquisición de la participación
en la entidad no residente permita aplicar ambos
incentivos, lo normal es que el sujeto pasivo opte
61
Cuadernos de Formación. Colaboración 12/06. Volumen 2/2006
por aplicar la deducción en la cuota por actividades
exportadoras dado que ello supone una deducción
de determinado porcentaje del importe de la
inversión en el mismo periodo impositivo en el que
se realiza la misma, mientras que la deducción del
fondo de comercio financiero incorporado en el
precio de adquisición se deduce a nivel de base
imponible y durante un periodo de 20 años.
El TRLIS establece de forma expresa la compa­
tibilidad de la deducción del fondo de comercio
financiero incorporado en el precio de adquisición
con la deducción de la provisión por depreciación
de valores mobiliarios, cuando la entidad no resi­
dente vea disminuido su valor teórico final respec­
to al del inicio del ejercicio, cualquiera que haya
sido su causa, como puede ser la obtención de pér­
didas en ese ejercicio o la distribución de reservas
que estuviesen incorporadas igualmente en el pre­
cio de adquisición de la participación.
Por otro lado y dado que no se establece una
incompatibilidad expresa en el TRLIS, parece posi­
ble que la misma adquisición en la entidad no resi­
dente posibilite la deducción en la base imponible
del fondo de comercio financiero incorporado en el
precio de adquisición de la participación, como de
la deducción por inversiones para la implantación
de empresas en el extranjero, con la particularidad
de que la primera deducción es irreversible si no se
transmite la participación, mientras que la segunda
revierte a la base imponible en los periodos imposi­
tivos posteriores al de la realización de la inversión.
— Justificación de los criterios de homogenei­
zación valorativa y temporal, así como de
la imputación a los bienes y derechos de la
entidad participada de la diferencia exis­
tente entre el precio de adquisición y el
valor teórico contable de las participacio­
nes en la fecha de su adquisición.
La información requerida se refiere solamente a
la entidad directamente adquirida.
Esta información no es necesario que conste en
la memoria de las cuentas anuales, pero sí debe
facilitarse en todos y cada uno de los periodos
impositivos en los que se practique la deducción,
con independencia de la fecha de adquisición.
El valor teórico contable de la entidad no resi­
dente debe homogeneizarse a los principios conta­
bles españoles, de acuerdo con los criterios de
valoración que siga la entidad residente que
adquiere la participación, según el procedimiento
establecido en la normativa de formulación de
cuantas anuales consolidadas, ya citada.
8. Ejemplos
— La sociedad A, sujeto pasivo del impuesto,
adquiere en el ejercicio 2002, por 1.000 euros una
participación adicional (8 por 100) en el capital de
la sociedad B, no residente, cuyo valor teórico es
en dicho momento de 500 euros.
Se supone el cumplimiento de todos los requi­
sitos exigidos en el artículo 12.5 del TRLIS.
Los valores teóricos y de mercado, en la fecha
de adquisición, de uno de los inmuebles de B, son,
respectivamente, 600 y 800 euros.
La participación se vende en su totalidad en el
ejercicio 2004, por 2.500 euros, y no ha experimen­
tado depreciación alguna durante todo ese tiempo.
La plusvalía generada por la adquisición es de
1000 – 500 = 500 €.
De esta cantidad, una parte procede imputarla al
inmueble de B, concretamente 0,08 x (800 – 600) =
16 €.
El fondo de comercio financiero que se produ­
ce asciende, por tanto, a 500 – 16= 484 €, que la
sociedad A amortizará a razón de un 5 por 100
anual. Por tanto, tendremos el siguiente cuadro de
diferencias:
7. Obligaciones formales
Los sujetos pasivos del Impuesto de sociedades
que practiquen la amortización del fondo de comer­
cio financiero por la adquisición de participaciones en
entidades no residentes deben presentar, junto con
la declaración del impuesto de los ejercicios en los
que realicen esa deducción, la siguiente información:
— Identificación y porcentaje de participa­
ción de la entidad no residente directa­
mente participada.
— Descripción de las actividades que realiza.
— Valor y fecha de adquisición de las partici­
paciones así como el valor teórico conta­
ble de las mismas determinado a partir de
las cuentas anuales homogeneizadas.
Año
2002
2003
2004
Total
Contable
—
—
—
—
Gasto
Fiscal
124,2
124,2
435,6
484,0
Diferencia
1–24,2
1–24,2
–435,6
–484,0
Contable
—
—
1.500,0
1.500,0
62
Ingreso
Fiscal
—
—
1.984,0
1.984,0
Diferencia
—
—
484,0
484,0
Diferencia
–24,2
–24,2
–48,4
—
Relaciones matriz-filial: Deducciones por doble imposición de dividendos y plusvalías. Acreditación de la pérdida de valor de...
A SDRÚBAL C A SARES G ARCÍA y N IEVES PALAY FAYO S
— Una sociedad residente adquiere a mitad
del ejercicio 2002 el 50 por 100 de participación en
el capital de una entidad no residente que cumple
los requisitos para que sus rentas gocen de exen­
ción. El precio de adquisición de dicha participa­
ción asciende a 38.000 €. Los fondos propios de la
entidad no residente al inicio y al cierre del ejerci­
cio 2002, son los siguientes:
Fondos Propios
Capital
Reservas
Beneficio 2001
Beneficio 2002
01-01-2002
10.000
20.000
14.000
— El supuesto 7.2 con la diferencia que la
participación se ha adquirido al inicio del ejercicio
2002, la entidad no residente obtiene en ese ejer­
cicio una pérdida de 8.000 € y no se deprecia el
mayor valor imputable a los elementos patrimonia­
les de la entidad no residente.
Fondos Propios
Capital
Reservas
Beneficio 2001
Beneficio 2002
31-12-2002
10.000
20.000
12.000
18.000
01-01-2002
10.000
20.000
14.000
31-12-2002
–10.000
–20.000
–12.000
1–8.000
Valor teórico a la fecha de adquisición de la parti­
cipación: 0.5 (10.000 + 20.000 + 4.000) = 17.000 €.
Diferencia entre el precio de adquisición y el
valor teórico: (38.000 – 17.000) = 21.000.
Mayor valor imputable a los elementos de la
entidad no residente: 5.000 €.
Fondo de comercio incorporado en el precio
de adquisición de la participación de la no residen­
te: 21.000 – 5.000 = 16.000 €.
Dicha cantidad es fiscalmente deducible con el
límite anual máximo de la veinteava parte de su
importe. Por tanto, en el ejercicio 2002 y siguientes
la deducción supone un importe de (16.000 / 20) =
800 €.
La mitad del beneficio generado en el ejercicio
2001, fue distribuido en mayo del ejercicio 2002.
Determinados elementos patrimoniales de la enti­
dad no residente están valorados contablemente
por un importe de 10.000 €, cuando su valor de
mercado es de 20.000 €.
De acuerdo con estos datos:
0.5 x (10.000 + 20.000 + 2.000 + 4.000) = 18.000 €.
El valor teórico correspondiente a la participa­
ción en la entidad no residente es la fecha de adqui­
sición es de 18.000 €. Dado que la mitad del
beneficio del ejercicio 2001 se ha distribuido antes
de la adquisición, debe computarse un importe de
2.000 € en los fondos propios de la entidad no resi­
dente para calcular el valor teórico. En cuanto al
beneficio del ejercicio 2002 se ha imputado de
forma lineal en ese ejercicio y, por tanto, a efectos
del valor teórico se considera que a la fecha de
adquisición (mitas del ejercicio) el beneficio corri­
do es de 4.000 €.
En definitiva, la diferencia entre el precio de
adquisición y el valor teórico de la participación en
la fecha de adquisición es de (38.000 – 18.000) =
20.000 €.
Por otra parte, la parte de dicha diferencia
imputable a los elementos de la entidad no residen­
te es de 0.5 x (20.000 – 10.000) = 5.000 €.
El fondo de comercio financiero incorporado en
el precio de adquisición de la participación de la
entidad no residente asciende a 15.000 €. (20.000 –
5.000 = 15.000).
Dicha cantidad de 15.000 es fiscalmente deduci­
ble con el límite anual máximo de la veinteava parte
de su importe. Por tanto, en el ejercicio 2002 la
deducción supone un importe de 0.5 x (15.000 / 20)
= 375 €, dado que la participación se adquirió a
mitad del ejercicio, ascendiendo el importe para los
siguientes ejercicios a 15.000 / 20 = 750 €.
9. Análisis conjunto de los diversos
aspectos y referencia a consultas
tributarias
La amortización del fondo de comercio finan­
ciero, como ya se ha indicado, procede respecto
de participaciones en entidades no residentes
cuyas rentas puedan acogerse a la exención del
artículo 21 del TRLIS. En consecuencia, las normas
antielusión previstas en el mismo serán aplicables a
los efectos de dicha amortización.
Un supuesto que reviste cierto interés es aquel
en que la participación sobre una entidad no resi­
dente que es filial de un grupo multinacional con
base en el extranjero se ubica en el balance de una
residente en territorio español filial de dicho grupo
a los efectos de aplicar la deducción del artículo
12.5 del TRLIS. Esta operación podría disminuir
sustancialmente y de forma no muy justificada la
base imponible del Impuesto de Sociedades de la
citada entidad residente.
Tratándose de una adquisición a otra entidad del
grupo mercantil no residente en territorio español
podría, tal vez, regularizarse en base a la finalidad
puramente fiscal de la operación. Si la adquisición
es originaria no cabe tal argumento. En el primer
63
Cuadernos de Formación. Colaboración 12/06. Volumen 2/2006
artículo 15.1 del TRLIS que establece que “los ele­
mentos patrimoniales se valorarán por su precio de
adquisición o coste de producción”.
En consecuencia, el elemento adquirido no es
un fondo de comercio en sentido estricto, sino la
participación en el capital social de otras dos enti­
dades que deberá valorarse por el coste total de
adquisición. Únicamente, tendrá la consideración
de deducible la dotación contabilizada por la
depreciación de la participación adquirida con el
límite de la diferencia de los valores teóricos con­
tables al inicio y al cierre del ejercicio de las entida­
des participadas.
caso no hay, propiamente hablando, una inversión
en el exterior que es lo que se trata de fomentar.
Entre las consultas de la DGT hay que mencio­
nar varias.
9.1. Consulta número V0379-05,
de 9 de marzo de 2005
Esta consulta contempla el supuesto de una
entidad que adquiere mediante escritura pública el
35 por 100 de las acciones de otras dos sociedades
anónimas. En la escritura pública de compra queda
claramente desglosada la cantidad que correspon­
de al 35 por 100 del valor de los fondos propios de
cada sociedad y la cuantía que se paga por el fondo
de comercio financiero.
La entidad pretende amortizar una veinteava
parte del importe pagado en concepto de fondo de
comercio financiero.
La contestación a la citada consulta va analizan­
do las diversas posibilidades que pueden plantearse.
Así, el artículo 11.4 del actual TRLIS, regula la
amortización del fondo de comercio en sentido
estricto. Sin embargo, el concepto de fondo de
comercio contemplado en este artículo no incluye
el fondo de comercio financiero incorporado en el
precio de adquisición de las participaciones.
En este sentido, la Resolución del Presidente
del Instituto de Contabilidad y Auditoria de Cuen­
tas (21 de enero de 1992) por las que se dictan
normas de valoración del inmovilizado inmaterial,
el Fondo de Comercio se define como “el conjun­
to de bienes inmateriales tales como la clientela,
nombre o razón social, localización, cuota de mer­
cado, y nivel de competencia de una empresa,
capital humano, canales comerciales y otros de
naturaleza análoga que impliquen valor para la
empresa”. Y añade que, “el tratamiento estableci­
do en esta Resolución para el Fondo de Comercio
no será válido en caso de adquisición de acciones o
participaciones de otras empresas”.
Tampoco resulta aplicable a la operación descri­
ta lo dispuesto en el artículo 12.5 del TRLIS, dado
que contempla la deducibilidad del fondo de
comercio financiero surgido como consecuencia
de la adquisición de participaciones en entidades
no residentes, circunstancia que no concurre en el
caso analizado.
Por otra parte, tampoco se puede encuadrar
este fondo de comercio, en el artículo 89 del
TRLIS, puesto que no se trata de una operación de
concentración de dos sociedades.
Concluye la consulta, que para valorar esta
adquisición habrá que estar a lo dispuesto en el
9.2. Consulta número 1490-02,
de 4 de octubre de 2002
El interés de esta consulta radica en dos puntos.
Por una parte el análisis que realiza sobre si la dedu­
cibilidad del fondo de comercio financiero está con­
dicionada a su contabilización e imputación a la
cuenta de pérdidas y ganancias. Por otra parte si ha
de tenerse en cuenta para la cuantificación del men­
cionado fondo el valor teórico de la entidad direc­
tamente participada o bien el valor teórico contable
de las sociedades operativas de segundo o ulterior
nivel. Establece, asimismo, la mecánica a seguir para
determinar el importe de la diferencia no imputable
a los bienes y derechos de la no residente.
La entidad residente prevé adquirir una entidad
A (holding holandesa) que participa a su vez en dos
sociedades operativas, francesa la entidad B e irlan­
desa la entidad C. La adquisición de la Holding
holandesa se realiza por un coste superior al valor
contable de las sociedades B y C. Las rentas que
obtiene la residente de la entidad A podrán acoger­
se a la exención regulada en el artículo 21 del
TRLIS.
a) Sobre la primera de las cuestiones, es decir,
si la deducibilidad del fondo de comercio financie­
ro está o no condicionada a su imputación contable
en la cuenta de pérdidas y ganancias de la residen­
te en España, se realiza la siguiente argumentación:
El artículo 12.5 del TRLIS considera deducible,
con el límite anual máximo de la veinteava parte de
su importe, la diferencia entre el precio de adquisi­
ción de la participación y su valor teórico contable
a la fecha de adquisición que no hubiera sido impu­
tada a los bienes y derechos de la entidad no resi­
dente (fondo de comercio financiero) “... sin
perjuicio de lo establecido en la normativa contable
de aplicación”. Esta referencia a la normativa con­
table es debida a que la corrección valorativa del
fondo de comercio financiero no tiene un trata­
miento unitario en el ámbito de la contabilidad.
64
Relaciones matriz-filial: Deducciones por doble imposición de dividendos y plusvalías. Acreditación de la pérdida de valor de...
A SDRÚBAL C A SARES G ARCÍA y N IEVES PALAY FAYO S
b) Respecto a la cuestión sobre si la diferencia
a la que se refiere el artículo 12.5 del TRLIS surge
por comparación del coste de adquisición de la
participación para la entidad española residente y
el valor teórico contable de la entidad intermedia
(holding holandesa) o los valores teóricos contables
de las sociedades operativas B y C, la contestación
a la consulta establece el mecanismo para la deter­
minación de la mencionada diferencia, de la
siguiente manera:
Para determinar el importe de la diferencia no
imputable a bienes y derechos, se procederá de la
siguiente forma:
— Se tomará el precio de adquisición de la
participación, del que se restará su valor
teórico contable fijado en la fecha en la
que se adquirió la participación.
— El citado valor teórico reflejará la parte
proporcional de los fondos propios de la
sociedad no residente en territorio espa­
ñol que corresponda a la participación
ostentada sobre ella, una vez realizadas las
homogeneizaciones, valorativa y temporal,
dispuestas en los artículos 17 y 18 del
Anexo del Real Decreto 1815/1991.
— La diferencia positiva existente entre las
magnitudes anteriores se imputará a los
bienes y derechos de la entidad no resi­
dente hasta el límite del valor de mercado
del elemento patrimonial de que se trate,
calculado en función del porcentaje de par­
ticipación en el capital social de la entidad.
— La diferencia que subsista será deducible
con el límite anual máximo de la veinteava
parte de su importe.
— El citado cálculo se realizará exclusivamen­
te sobre las participaciones directas en la
sociedad no residente adquirida por el
sujeto pasivo.
Por tanto, la diferencia a que se refiere el ar­
tículo 12.5 del TRLIS surgirá por comparación del
coste de adquisición de la participación en la enti­
dad holding holandesa y su valor teórico, sin que se
tenga en cuenta a estos efectos el valor teórico
contable de las sociedades operativas de segundo o
ulterior nivel.
Así, de acuerdo con la Norma de Valoración 8.a
del Plan General de Contabilidad, no procede el
registro contable del llamado fondo de comercio
financiero de forma independiente, sino que debe
formar parte del precio de adquisición de la parti­
cipación.
Asimismo, el Instituto de Contabilidad y Audito­
ria de Cuentas, en la consulta número 3 del BOICAC
de 27 de noviembre de 1996, considera que “a efec­
tos de determinar el importe de las posibles correc­
ciones valorativas por depreciación de las
participaciones en el capital no admitidas a cotiza­
ción en un mercado secundario organizado y de las
participaciones en el capital de sociedades del grupo
o asociadas, admitidas o no a cotización en un mer­
cado secundario organizado, establece la citada
norma de valoración que se comparará el precio de
adquisición con el valor teórico contable que corres­
ponda a dichas participaciones, corregido en el
importe de las plusvalías tácitas existentes en el
momento de la adquisición y que subsistan en el de
valoración posterior. En tal sentido, será necesario
identificar de forma clara en el momento de la adqui­
sición las posibles plusvalías tácitas que conlleve la
participación en el capital adquirida. Si se identifica
una plusvalía tácita en la sociedad participada que se
corresponde con un fondo de comercio de la misma,
habrá que considerar dicha plusvalía a los efectos de
calcular la corrección valorativa de las participacio­
nes adquiridas”. Lo que equivale a valorar la posible
corrección valorativa de forma conjunta sobre todos
los elementos, materiales e inmateriales, que confor­
man el valor contable de la participación.
Sin embargo, la norma vigésimo octava de la
Circular 4/1999, del Banco de España, obliga a
amortizar el fondo de comercio financiero a través
de la dotación contable a un fondo específico, salvo
por la parte que pudiera ser absorbida por un
incremento de los respectivos valores teóricos.
No obstante, desde el punto de vista fiscal, la
diferencia entre el precio de adquisición de la par­
ticipación y su valor teórico contable a la fecha de
adquisición no imputable a los bienes y derechos
de la entidad no residente en territorio español
será deducible, con el límite anual máximo de la
veinteava parte de su importe, con independencia
de la forma en que, en su caso, hubiera sido conta­
bilizada. De este modo y según se haya contabiliza­
do o no la diferencia, su deducibilidad fiscal surgirá
en el resultado contable del ejercicio o como
corrección a dicho resultado.
Por lo tanto, la deducibilidad fiscal del denomi­
nado fondo de comercio financiero no estará con­
dicionada en la entidad residente a su imputación
contable en la cuenta de pérdidas y ganancias.
9.3. Consulta número V0135-03,
de 28 de noviembre de 2003
En esta consulta se plantea el supuesto en que
una sociedad residente recibe la aportación no
dineraria de una rama de actividad, en virtud de
una operación acogida al régimen especial del capí­
tulo VIII del Título VII del TRLIS. Entre los activos
65
Cuadernos de Formación. Colaboración 12/06. Volumen 2/2006
adquiridas directamente, y su valor teórico contable
en la parte que no resulte imputable a bienes y
derechos, en la medida en que cada una de las
sociedades operativas cumpla los requisitos estable­
cidos en el artículo 21 del TRLIS respecto a la exen­
ción de dividendos y plusvalías de fuente extranjera.
Una vez determinado el cumplimiento de lo
previsto en el artículo 12.5 del TRLIS, en la medida
en que las entidades B y C se disuelven, el precio
de adquisición (para la residente) de estas partici­
paciones que se anulan, se conservará en la partici­
pación recibida en el capital de la entidad A. Ello,
dado que la entidad A habrá ampliado su capital
como consecuencia de la fusión realizada.
Dado, además, que esta operación de fusión se
acoge al régimen especial mencionado, y, en parti­
cular, a la sucesión en los derechos y obligaciones
de las participaciones anuladas (ya analizada en la
consulta anterior), el fondo de comercio imputable
a la participación en la sociedad A, será la suma de
los fondos de comercio existentes en las tres socie­
dades inicialmente adquiridas.
Concluye, por tanto, la consulta, que la realiza­
ción de esta operación de fusión por absorción,
realizada como consecuencia de la reestructura­
ción empresarial, no afecta a la deducibilidad de las
diferencias entre el precio de adquisición de las
participaciones en dichas sociedades y sus valores
teóricos contables a la fecha de adquisición que no
fue imputable a los bienes y derechos de las referi­
das sociedades.
de la rama de actividad, se incluyen títulos repre­
sentativos del 10 por 100 del capital social de una
sociedad operativa portuguesa que cotiza en bolsa.
Estas participaciones fueron adquiridas por la
entidad aportante de la rama de actividad en el
ejercicio 2002 a una entidad que no formaba parte
de su grupo fiscal por un precio superior a su valor
teórico contable en la fecha de adquisición no sien­
do dicha diferencia imputable a un mayor valor de
los bienes y derechos de la entidad portuguesa.
La consulta indica que el actual artículo 90 del
TRLIS señala que cuando tiene lugar una sucesión y
esta es a título no universal, la transmisión de los
derechos y obligaciones tributarias de la transmi­
tente a la adquirente, se producirá únicamente res­
pecto de los inherentes a los bienes y derechos
transmitidos.
El interés de esta consulta radica en que señala
que, a tenor de lo establecido en este artículo,
suponiendo que, tal y como se indica en el escrito
de la consulta, es de aplicación el régimen especial
del capítulo VIII del Título VII del TRLIS a la opera­
ción mediante la que se reciben las acciones de la
sociedad portuguesa, la entidad adquirente podrá
mantener la deducibilidad del fondo de comercio
financiero que previamente hubiera acreditado la
entidad transmitente, siempre que, obviamente,
los requisitos que condicionan dicha deducción
sean asimismo mantenidos.
9.4. Consulta número V1316-05,
de 4 de julio de 2005
9.5. Consulta número 0109-05,
de 17 de marzo de 2005
En este supuesto, una entidad operativa resi­
dente pretende expandir su negocio en Portugal.
Para ello, entre otras alternativas, se plantea la
adquisición directa del 100 por 100 del capital de
tres entidades portuguesas (A, B y C) que desarro­
llan la misma actividad en dicho territorio. De
forma inmediata y al objeto de simplificar su
estructura organizativa se llevaría a cabo una fusión
(mediante la aplicación del régimen fiscal especial
de fusiones, escisiones, aportaciones de activos y
canje de valores), absorbiendo A a B y a C.
La consulta formulada es si la deducibilidad del
fondo de comercio financiero, prevista en el artícu­
lo 12.5 del TRLIS, se vería afectada como conse­
cuencia de los procesos de reestructuración
empresarial, o sería deducible con los mismos lími­
tes y condiciones que existían antes de la reestruc­
turación.
En el supuesto planteado, la entidad residente
puede deducirse la diferencia positiva entre el pre­
cio de adquisición de la participación en el capital de
cada una de las sociedades operativas portuguesas
La última de las consultas a comentar, plantea el
supuesto de una entidad residente en España que
está negociando la adquisición de un grupo de
sociedades residentes en Alemania. Tales entidades
revisten la forma jurídica de sociedades comandita­
rias que no son sujetos pasivos del impuesto sobre
beneficios alemán, sino que sus beneficios se impu­
tan a los socios en proporción a sus participacio­
nes, los cuales sí son sujetos pasivos en Alemania.
El interés de la consulta reside en el análisis pre­
vio que realiza y que debe resolverse previamente,
sobre si las rentas procedentes de dichas entidades
no residentes pueden o no acogerse a la exención
establecida en el artículo 21 del TRLIS. Ello, como
requisito previo y necesario para la aplicación del
artículo 12.5 del TRLIS.
Dentro de ese análisis que se señala, destaca el
punto referente a la tributación de la entidad parti­
cipada por un impuesto extranjero de naturaleza
idéntica o análoga al Impuesto de Sociedades.
66
Relaciones matriz-filial: Deducciones por doble imposición de dividendos y plusvalías. Acreditación de la pérdida de valor de...
A SDRÚBAL C A SARES G ARCÍA y N IEVES PALAY FAYO S
La consulta resuelve esta cuestión de la siguien­
te forma: Existe Convenio entre España y Alema­
nia para evitar la doble imposición y prevenir la
evasión fiscal en materia de Impuesto sobre la
renta y Patrimonio, contemplando su artículo 26 el
intercambio de información.
Si bien la entidad participada no está sujeta al
Impuesto sobre Beneficios Alemán, sí están sujetos
al mismo sus socios por el beneficio que se les
imputa. En definitiva, cabe entender cumplido este
requisito cuando, en un supuesto como este, los
beneficios de la participada se imputan a los socios,
estando los mismos sujetos al Impuesto sobre
Beneficios al que le resulta de aplicación el mencio­
nado Convenio.
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