ENFERMEDADES BACTERIANAS

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ENFERMEDADES BACTERIANAS
LOQUE AMERICANA
AGENTE CAUSAL
Se trata de una enfermedad bacteriana
cuyo agente causal es Paenibacillus
larvae subsp. larvae, bacilo Gram +
esporulado. Sus formas vegetativas
miden entre 2,3 a 5 micrómetros de
largo por 0,5 a 0,6 micrómetros de
ancho, móviles mediante flagelos
perítricos. Sus esporas son ovaladas,
miden 1,3- 1,5 por 0,6 0,7 micrómetros
y pueden visualizarse al microscopio
sus movimientos brownianos,
Colonia de Loque Americana in vitro.
mediante la técnica de gota pendiente
(Hanging drop, Apéndice 2) modificada, característica que diferencia a las
esporas de esta especie de otros bacilos esporulados que afectan a las
abejas.
Esta bacteria puede soportar altas temperaturas, la desecación, algunos
desinfectantes químicos y puede permanecer viable en el medio
ambiente y material apícola al menos durante 45 años. Las esporas
pueden inactivarse por medio de altas temperaturas (140ºC) y presión o
radiaciones gamma.
PATOGENIA
Las esporas ingresan en la colmena por medio de abejas pecoreadoras
que las traen en sus buches melarios, abejas pilladoras de colmenas
infectadas, a través de las herramientas del apicultor, por la introducción
de cuadros con cría infectados, intercambio de material de colmenas
enfermas y alimentación con miel.
Una vez dentro de la colmena, las esporas son llevadas a la cría por
medio de las abejas nodrizas que las depositan junto con el alimento en
las celdillas. Las larvas ingieren estas esporas que adoptan sus formas
vegetativas, dadas las condiciones adecuadas que tiene el intestino,
como pH y tenor de oxígeno. Cuando la larva deja de ser tal y alcanza su
estado de prepupa, las bacterias que aún no fueron eliminadas por las
heces, migran introduciéndose, gracias a sus flagelos, en las células
endoteliales del intestino, llegan a la hemolinfa y se reproducen hasta
provocar la muerte en este estado o en uno posterior (pupa). Si bien no
se ha comprobado con exactitud la cantidad de esporas necesarias para
provocar la enfermedad en una colonia, algunos autores consideran que
para una larva de 48 hs de vida, son necesarias millones de esporas,
mientras que para una larva de 24 hs, alcanza con solo diez o menos
esporas. Se ha comprobado que las larvas de las abejas reinas son más
susceptibles que las de obreras y estas a su vez son más susceptibles que
las de zángano.
MANIFESTACIONES
Los cuadros de las colmenas afectadas
presentan características particulares de
la enfermedad. La cría es salteada y los
opérculos se ven hundidos y roídos (por
acción de las abejas limpiadoras que
intentan sacar las crías ya muertas), en
otras celdas se pueden observar las
prepupas que han perdido su posición
natural, se ven estiradas y sin brillo, el
color va pasando del blanco brillante
Foto 1.
original a un amarillo pálido para
convertirse más adelante en un material
viscoso, pegajoso y amorfo, de color
marrón. Los opérculos pierden su color
café característico para tornarse castaño
oscuros, casi negros. Transcurridos unos
10 o 15 días desde la muerte de la larva,
aparece la característica patognomónica
de la enfermedad, un material viscoso
que al introducir un palito dentro de la
celda que lo contiene y luego al retirarlo, Foto 2.
se estira hasta una longitud que supera los 2,5 cm. de ahí el nombre que
se le ha dado a este material: “chicle” (Foto 1). Más adelante este “chicle”
se seca y se fija fuertemente al fondo de la celda. En este momento se lo
denomina “escama" (Foto 2). Si sometemos este material a luz
ultravioleta, podemos visualizar cierta fluorescencia. Cuando las abejas
intentan limpiar las celdas, no hacen más que reiniciar el ciclo de la
enfermedad, llevando estas esporas de una celda a otra. Otra
característica de las colmenas infectadas es el olor nauseabundo que
despiden.
DIAGNÓSTICO
El diagnóstico clínico, puede confirmarse mediante la observación de los
cuadros, cuando están presentes las características señaladas en el punto
anterior.
Para el diagnóstico de laboratorio hay que enviar un trozo de panal
sospechoso de 10 cm2 envuelto en papel absorbente y luego en una caja
de cartón, o bien el cuadro entero para permitir al laboratorista tener una
visión completa de las características del cuadro. Junto a la muestra se
debe enviar una breve reseña de los síntomas observados en las
colmenas.
Las abejas nodrizas contaminan las larvas
con esporas de L.A. al momento de alimentarlas.
La escama es casi imposible de
remover. Sin embargo, a veces,
las obreras mastican las paredes
de la celda con escamas.
1
2
Esporas. Forma
infectiva de L.A.
Bacterias.
Forma
La abeja limpiadora intenta
reproductiva
remover las escamas
de L.A.
contaminadas con esporas de L.A.
Pocas semanas después,
la larva muerta se
deseca formando
una escama. La
escama contiene millones
de esporas de L.A.
5
3
La abeja infectada muere luego
que la celda fue operculada.
4
La larva muerta toma forma de
masa sin líquido (chicle).
Las abejas limpiadoras
detectan y remueven las
larvas muertas con
esporas de L.A.
TRATAMIENTO Y MEDIDAS DE MANEJO
Recuperación del Material Vivo
Una vez evaluada la conveniencia de recuperar el material vivo, debemos
decidir qué método realizamos. Existen dos métodos para este
procedimiento: Trasiego Directo o Cepillado y Trasiego Doble o
Paqueteado. Elegiremos uno u otro de acuerdo a la época del año,
posibilidad de recurrencia y practicidad del método. También debe
evaluarse la posibilidad de aplicar el mejor tratamiento de acuerdo a los
materiales disponibles por el apicultor. Se debe entonces proceder de la
mejor manera posible pero dejando bien claro cuál es el procedimiento
más efectivo.
Trasiego directo o cepillado
1 - Encontrar a la reina y mantenerla
enjaulada fuera de la colonia.
2 - Cepillar o sacudir las abejas de la
colmena enferma dentro de una
cámara previamente esterilizada o
bien, de primer uso.
Antes de iniciar la sacudida podemos
rociar con agua a las abejas para
facilitar el procedimiento y evitar que
vuelen demasiado.
3 - Una vez sacudidas todas las abejas,
incorporar cuadros nuevos con sus
láminas de cera estampada, un
alimentador con jarabe y liberar la
reina.
4 - Administrar una dosis de Antibiótico Amplio Espectro®o Tilobac P y
proteger con un "poncho" (nylon que se coloca encima de los marcos y
que sirve para recubrir la colmena y protegerla del frío).
No es conveniente volver a abrir la colmena hasta los cinco o siete días
posteriores cuando se aplica la otra dosis de Antibiótico de Amplio
Espectro®.
Trasiego doble o paqueteado:
1 - El método consiste en trasegar
todas las abejas de la colmena a un
portapaquete (caja pequeña con una
abertura superior por donde se
introducen las abejas).
Si la cantidad de abejas trasegadas no
alcanzan a pesar entre 1,2 Kg a 1,5 Kg,
se debe reforzar con abejas de otras
colonias.
2 - Previo al encierro de las abejas se
debe encontrar la reina y enjaularla.
3 - Este paquete se deja bien cerrado
en un lugar oscuro y ventilado durante
48 hs., luego se abre y se introduce en
una colmena nueva con cuadros
nuevos con sus láminas de cera
estampada y se deja abierto para que
las abejas liberen la reina y se vayan
entre los cuadros.
4 - También se aplica el tratamiento medicamentoso a base de
Antibiótico de Amplio Espectro® y se cubre con un "poncho".
Este último método si bien es más trabajoso, más caro y es necesario
más material y tiempo disponible, es el más efectivo en cuanto a la no
recurrencia de la enfermedad.
Se ha comprobado que realizando un cepillado hay recurrencia del 20%
mientras que por medio del paqueteado, se reduce al 3%.
RIESGO DURANTE LA COSECHA Y EXTRACCIÓN DE MIEL
Mucho se ha comentado y escrito en el mundo, sobre los mecanismos de
contagio, los métodos de control y esterilización de las colmenas, pero
poca información se posee sobre la producción de miel en colmenares
con LA.
Primeramente debemos decir que no muchos apicultores revisan
exhaustivamente las colmenas antes de la extracción, la razón de esto es
obvia, considerando la época del año y la cantidad de tiempo que
pueden perder para realizar esta tarea. A veces es común que al salir de
la primavera los apicultores revisen rápidamente las colmenas, para
emparejarlas y darles los últimos preparativos para la temporada de miel,
durante esta pequeña revisión ellos observan 2 o 3 cuadros, con lo cual
en colmenas con 10 marcos de cría como aproximadamente presentan a
final de la primavera, en el mejor de los casos ellos tienen un 25% de
posibilidades de poder encontrar signos clínicos de las enfermedades de
la cría y separar las colmenas enfermas, para minimizar los riesgos de
contagio y diseminación de Loque Americana.
Según Goodwin & Haine (1994) si se revisan todos los panales de
colmenas dudosas tenemos aproximadamente un 85% de posibilidades
de encontrar la enfermedad, sin embargo si solo chequeamos 3 panales
de la cámara de cría, estamos localizando menos que el 50% de las
colmenas enfermas.
Por lo antes dicho, se recomienda la revisión primaveral de todos los
cuadros de cría de la cámara para obtener un buen diagnóstico.
CONTAGIO DURANTE EL PROCESO DE EXTRACCIÓN DE MIEL
El proceso de extracción de miel, tiene actualmente cuatro puntos críticos
de contagio:
1. El almacenado de las alzas melarias antes y después de
la extracción.
2. El desoperculado
3. Los canastos
4. El extractor de miel
Y un punto de contagio inevitable:
5. La colocación de las alzas mojadas, nuevamente en las
colmenas
1. El almacenamiento de las
alzas que provienen del campo, suele
ser un factor no muy cuidado por los
apicultores y que puede producir un
fuerte problema de pillaje, según la
época en que la extracción se realice.
Fundamentalmente durante las
primeras sacadas de miel, este
problema se ve totalmente
minimizado, porque se realiza en una
época con fuerte entrada y escaso o
nulo pillaje. A medida que la estación
avanza, los problemas de pillaje se
agudizan y el problema de contagio
pasa a ser grave.
Si bien el contagio pareciese ser
siempre un problema de las abejas
que vienen a pillar, o sea DEL OTRO, en teoría las abejas de colmenas
muy enfermas, pueden dejar gran parte de los esporos que llevan en los
cuerpos dentro de los opérculos de miel que ellas están pillando. Por lo
cual no es descabellado pensar que en las miles de visitas que recibe un
panal mojado expuesto al pillaje, puedan quedar adheridos a él, miles o
millones de esporos de Paenibacillus larvae, muchas veces superiores a
los que se necesitan para iniciar una infección en una larva.
Por otro lado, a nadie le puede asombrar que las abejas que pillan
panales de colmenas enfermas, llevan a sus colmenas miel con un
inoculo mas que suficiente para iniciar una infección. Este, que ha sido
el modo mas común de contagio entre los apicultores de una misma
región, lo es también para el resto del país.
2. El desoperculado
El desoperculador, puede ser un foco
de contagio fundamentalmente los
automáticos. La posibilidad de
contagio en el desoperculador pasa
por el hecho que queden retenidos en
la cuchilla o en los pelos restos de
miel y esporos, que al desopercular el
próximo cuadro puedan ser
trasmitidos. Los desoperculadores
automáticos, ya sean fríos o calientes,
son difíciles de limpiar luego de cada
extracción, pero no imposible. (los
desoperculadores en frío con pelos de
tanza, han sido confeccionados para
una limpieza fácil entre las
extracciones).
En las cuchillas manuales esto puede ser solucionado fácilmente con un
poco de agua y una esponja, luego de extractar alzas de colmenas
sospechosas
El riesgo del desoperculador es el menor de todos en el proceso de
extracción, porque existe una probabilidad muy grande que la miel
contaminada que pueda acumularse luego del pasaje por el
desoperculador, vaya a ser expulsada en el extractor, hacia las paredes
por la fuerza centrifuga y de esta manera eliminarse del cuadro . Por lo
cual si bien teóricamente existe un riesgo, este se podría considerar
despreciable, con lo cual la limpieza del desoperculador luego de cada
extracción es una tarea que se puede descartar.
3. Los canastos
Los canastos si bien se pueden contaminar con miel con esporos de
Loque Americana, no producen un factor de riesgo, ya que la miel que
se pueda acumular en su estructura seguramente será despedida por la
fuerza centrifuga durante la extracción.
4. El extractor
Si bien el extractor es y ha sido un factor importante de contagio dentro
de la sala de extracción, esto pareciera no ser relevante desde el punto
de vista técnico. Pocas son las probabilidades, que tiene la miel
contaminada que se escurre por las paredes del extractor de volver
nuevamente hacia los marcos y panales de las nuevas alzas.
Algunos estudios son necesarios para dilucidar la verdadera importancia
de este procedimiento, que sin lugar a
dudas juega un rol preponderante en
la construcción de salas comunitarias
de extracción.
La posible contaminación del extractor
es fácilmente solucionable mediante
una exclusa de lavado en el extractor,
que permita que entre una extracción
y la siguiente o entre un productor y el
siguiente, el extractor pueda ser
lavado fácilmente.
5. La colocación de alzas
mojadas
Este es hoy, el problema a solucionar.
Goddwin y col (1992) demostró la real
importancia de este hecho. Este autor
colocó 20 alzas extractadas de colmenas enfermas (con menos de 20
celdas afectadas) sobre colmenas sanas y 20 alzas extractadas de
colmenas sanas en otras 20 colmenas sanas, dentro del mismo colmenar
y verifico que no se produzca pillaje.
Se encontró que dos (2) días después de colocadas las alzas
extractadas, las abejas de todas las colmenas, (las que tenían alzas
sanas y alzas enfermas), tenían gran carga de esporos de Loque
Americana en su cuerpo. Además comprobó que en 4 meses 4 colmenas
de alzas sanas y 8 colmenas de alzas enfermas habían desarrollado
signos clínicos de Loque Americana.
Este hallazgo sorprendió a la gran mayoría de los técnicos de campo y
demostró la verdadera IMPORTANCIA del monitoreo constante de las
colmenas antes de la cosecha. Si bien el autor, explica este hecho
mediante dos razones lógicas: la deriva y el pillaje, a nivel productor y
más aun a nivel de colmenar estos dos hechos ocurren diariamente
todos los años en esa época.
Además encontraron datos que concuerdan con los obtenidos por el
PROAPI todos estos años: los primeros síntomas visibles comenzaron a
ocurrir luego de 35 días, lo cual confirma la velocidad con la que se
manifiesta la enfermedad en el otoño (época del año donde se
producen la mayor parte de los síntomas de Loque Americana) y las
últimas colmenas se enfermaron 4 meses después de colocadas las
alzas, lo cual indica que muchas de las colmenas sanas que enferman
durante los primeros meses de primavera pueden haber recibido su
inóculo durante la cosecha en un alza de miel extractada.
Este hecho, el más importante desde el punto de vista epidemiológico,
se minimiza monitoreando las colmenas antes de entrar en la cosecha y
separando las colmenas sanas de las enfermas en colmenares lazareto.
Una vez terminada la cosecha en las colmenas sanas, se efectúa la
misma tarea en el colmenar lazareto, minimizando de esta forma el
riesgo de contagio. Por último, se realiza el tratamiento adecuado en las
colmenas confinadas.
RECUPERACIÓN DEL MATERIAL INERTE
Hay varios métodos para este procedimiento y pueden clasificarse de la
siguiente manera:
Calor - Fuego Directo: Consiste en
flamearse alzas, pisos y techos por
medio de un soplete. El material debe
quedar con aspecto corchoso en un
espesor de aproximadamente 0,5 cm.
Calor - Chimenea o Torre: se arma
una torre de unas cinco o seis alzas, se
embebe el interior con Kerosene, se
agrega un trapo también embebido
con el combustible y se enciende. Se
deja actuar la llama aproximadamente
unos cinco minutos hasta que el alza
superior toma el aspecto corchoso
mencionado.
Calor - Inmersión: puede
introducirse el material de madera en
bateas con parafina o aceites
vegetales a una temperatura de 140150ºC. Se deja actuar inmerso durante
al menos 15 minutos.
Fuego Directo
Calor y Presión: para este método
pueden utilizarse autoclaves de
grandes dimensiones que algunos
apicultores han logrado construir. Se
lleva la temperatura a 121ºC y con una
presión de 1 atmósfera de autoclave (2
en total), se deja actuar entre 15 y 20
minutos.
Químicos: no son muchos los
productos químicos capaces de
destruir a las esporas de Paenibacillus
larvae larvae. Estos productos no son
recomendados debido a su alta
peligrosidad al momento de
manipuleo.
Inmersión
Sin embargo el uso de soda cáustica al 10% para sumergir el
material de madera durante 10 minutos logra la eliminación de la mayor
parte de las esporas.
También el óxido de etileno, aunque su uso es engorroso,
peligroso y de alto costo.
El hipoclorito de sodio (lavandina) al 0,5%, no es efectivo.
Irradiación: es el método más eficaz, además permite la esterilización
de los panales, inclusive aquellos con larvas muertas por la enfermedad
en sus estadios de chicle o escama. Consiste en exponer al material a
una fuente de Cobalto 60, durante un tiempo y una dosis determinada,
de manera que los rayos gamma produzcan esterilización del medio y la
inhibición de la actividad bacteriana.
Eliminación del material inerte:
hay casos en los que no es
conveniente conservar el material. Se
procede de la siguiente manera:
1- Debemos realizar un pozo de una
circunferencia y profundidad
considerables en relación al volumen
del material que vamos a quemar.
2- Realizar el procedimiento cuando la
mayor cantidad posible de abejas está
dentro de la colmena.
3 - Con una esponja o un trapo
embebido en kerosene o algún otro
insecticida, eliminar las abejas.
4 - Luego se procede a quemar todos
los cuadros de la colmena afectada,
tomando las precauciones necesarias
para no derramar la miel. Luego se
echarán al fuego los techos, alzas y
pisos y se tapa el pozo para evitar el
pillaje de los restos de cera y miel que
pudieran quedar.
TRATAMIENTO MEDICAMENTOSO
Ver indicaciones de uso de
ANTIBIOTICO DE AMPLIO ESPECTRO ®
y TILOBAC P (carpetas técnicas)
Se debe tener muy en cuenta el riesgo
que significa el uso de sustancias
químicas para la prevención de las
enfermedades debido a las posibilidades de que permanezcan residuos
de las mismas en los productos de las colmenas afectando la salud de
los consumidores. Además, el incorrecto uso de estos productos
predispone al desarrollo de farmacoresistencia por parte de los agentes
que se pretende eliminar.
Debe recordarse y tenerse en cuenta que los antibióticos no tienen la
capacidad de destruir los esporos del Paenibacillus larvae larvae dejando
latente la potencial infección en las colonias. Por este motivo, se
recomienda la técnica del paqueteo o cepillado y el uso de jarabe
medicamentoso luego de instalados. Así, el antibiótico elimina las
formas vegetativas que podrían haber eclosionado.
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