LA CATEDRAL DE SEVILLA. TALLERES Vista aérea de la Catedral de Sevilla A la vuelta de nuestras vacaciones de Navidad, retomamos nuestras tareas escolares y nos encontramos con una grata sorpresa. El día 23 de enero del recién inaugurado 2013, o como dicen algunos supersticiosos 2012 más uno, nuestras maestras nos habían inscrito en un taller para conocer el patrimonio monumental de la Catedral de Sevilla. Interior de la nave lateral de la Catedral de Sevilla A las nueve de la mañana, todos los alumnos del aula de Sordociegos, Primaria y Secundaria nos reunimos en la recepción de la Residencia para salir juntos a coger el autobús que nos llevaría, en primer lugar, hasta los Jardines de Murillo. Desde aquí nos fuimos caminando por la calle de San Fernando y llegamos a la Avenida de La Constitución. A algunos de nuestros compañeros les llamó la atención los coches de caballo y uno de ellos, incluso, hizo un comentario simpático sobre el olor característico de estos nobles animales. Llegamos hasta la calle Alemanes, por donde accedimos a la Catedral a través de la puerta del Patio de los Naranjos. Nuestro monitor, Borja, salió a recibirnos con gran entusiasmo y, como hacía bastante frío y teníamos que desayunar, nos invitó a hacerlo, sentados en unos bancos al solecito, en la Plaza del Triunfo. Patio de los Naranjos ¡Qué bien nos supo y cómo lo agradecieron las palomas que recogían nuestras migas! Volvimos al Patio de los Naranjos, donde Borja nos preguntó qué era una catedral y quedó claro que era la iglesia más grande de la ciudad. A continuación nos preguntó cuántos años habían pasado desde su construcción hasta ahora y fue “Jero” el que dio la respuesta exacta. Antes de entrar en el Templo, las monitoras que acompañaban a Borja nos repartieron unos planos en escala de la planta del edificio, totalmente adaptados para nosotros. ¡¡MAGNÍFICO!! Lo primero que hicimos, ya en el interior del edificio, fue cogernos de la mano y rodear una gran columna para poder apreciar, de esa manera, lo enorme que era. Nos contaron que se construyó con piedra arenisca. ¡Y es verdad! Alumnos en corro alrededor de una de las columnas de la Catedral para apreciar su magnitud Pudimos arañar con nuestras uñas y notar el desprendimiento de la arenilla. ¡Qué impresión nos llevamos cuando entramos en la capilla, donde, supuestamente, iban a enterrar a un obispo! Borja nos fue explicando, con la ayuda voluntaria de alguno de nosotros, la longitud, la forma, los materiales empleados y la figura yacente del obispo. ¡Qué ilusión nos hizo sentarnos en los sillones de madera tallada del coro de la Catedral! Nos enseñaron objetos utilizados en la Santa Misa: Cáliz, Biblia, Plato donde se reparte Las Sagradas Formas... y todo ello envuelto en un agradable aroma a incienso. Distintos momentos del viaje por el recinto de la Catedral de Sevilla Y antes de salir del Coro, David, por suerte, pudo, con el consiguiente asombro del vigilante, hacer sonar las campanas del coro. Los alumnos sentados disfrutando de baile y música Después, sentados en el suelo, escuchamos el órgano de la Catedral y vimos cómo bailaban Los Seises e, incluso, pudimos practicar algunos pasos de ese baile tan antiguo. Vista de la Giralda de Sevilla Por último, aceptando el reto que nos proponía Borja, nos atrevimos a subir las treinta y cinco rampas de la Giralda. Una vez arriba, con nuestras ayudas ópticas, algunos pudimos ver la ciudad a vista de pájaro y además todos aprovechamos las explicaciones de nuestros monitores. Los alumnos disfrutan de las vistas desde la torre de la Giralda La bajada fue rápida y enseguida emprendimos el camino de vuelta al cole, andando.