LÍNEAS PRINCIPALES D EL PENSAMIENTO DE MARX ONTOLOGÍA Y SOCIEDAD/POLÍTICA La concepción idealista de Hegel era la predominante en Alemania desde el primer tercio del siglo XIX, concepción que aunque tuvo muchos seguidores también contó con muchos detractores, uno de ellos será Marx quién optará por llevar a cabo una inversión total de la dialéctica hegeliana, a partir de una concepción materialista de la realidad y de la historia. Marx parte del materialismo dialéctico (Explicación del desarrollo y evolución de la REALIDAD, entendiendo que ésta es material y en cambio constante, siendo la dialéctica lo que explicará dicho cambio) para llegar a una concepción materialista de la historia, pues la historia en tanto que es historia de los hombres es inseparable de sus condiciones materiales de producción, en la medida en que para hacer historia los hombres han tenido que estar en condiciones de poder vivir, y es por tanto necesario presuponer la actividad de la producción. Marx propone una explicación del desarrollo y evolución de la HISTORIA, como parte de la realidad (y por tanto, material y cambiante). Según Marx, la base de la historia es la economía, por lo que la historia sólo puede ser comprendida a través de un estudio de las condiciones de producción de cada época. Además la base económica determina las formas de pensar y de conciencia de los hombres porque la sociedad está compuesta por: una INFRAESTRUCTURA (base económica) Conjunto de las Fuerzas productivas y las relaciones de producción y una SUPERESTRUCTURA (ideología). La ideología depende de la base económica, por lo que la forma de pensar de cada época es la ideología de la clase dominante. Por lo que la ALIENACIÓN se da en ambos niveles: La alienación económica implica la ideológica, por lo que es preciso acabar con la alienación en el trabajo para eliminar la ideológica. ANTROPOLOGÍA Y CONOCIMIENTO Para Marx, el auténtico conocimiento es la praxis; según Marx los seres humanos somos libres en tanto que somos dueños de nuestra propia actividad (praxis), siendo el trabajo nuestra actividad principal (el hombre se hace a sí mismo a través del trabajo, a través de la transformación y humanización de la naturaleza). El problema es que en la sociedad capitalista el hombre deja de ser dueño de su propia actividad y por ello se ve forzado a vender su fuerza de trabajo, este hecho hace que el ser humano se aliene entendido como la pérdida de algo que nos es esencial, además la alienación se produce a tres niveles: FRUTO DEL TRABAJO (Porque no nos pertenece), ACTO DE TRABAJO (Porque las condiciones y exigencias las ponen otros) y COMO DESHUMANIZACIÓN. Esta deshumanización de la producción y alienación del ser humano está propiciado por una división de trabajo basada en una diferenciación entre trabajo físico e intelectual, lo que divide la sociedad en dos clases sociales antagónicas, la burguesía (dueños de los medios de producción) y el proletariado (sólo poseen su fuerza de trabajo), esta desigualdad genera que el proletariado se vea obligado a vender su praxis lo que implica que el ser humano se aliene. Según la teoría del valor toda mercancía posee dos valores, valor de uso: el valor que una mercancía posee para satisfacer una necesidad y valor de cambio: El precio de esa mercancía en el mercado. El problema radica en que, en la sociedad capitalista el valor de uso es sustituido por el valor de cambio, por lo que todas las mercancías (incluido el proletariado que se compra por un salario) se rigen por las leyes económicas (oferta-demanda) lo que genera plusvalía, entendida como la diferencia entre el salario del obrero y su producción (beneficio del capitalista), además para aumentar este beneficio el capitalista explota al trabajador. Para superar esta explotación Marx propone un estudio del modo de producción que propicia y posibilita esta situación para poder transformar la situación y lograr la realización del hombre, a través de la lucha de clases. El problema es que, a diferencia de otras épocas donde existían distintas clases o estamentos, en la sociedad capitalista sólo existen dos y la diferencia entre ellas radica en la propiedad privada de los medios de producción. La solución que propone Marx es que el proletariado tome conciencia real de su situación de explotación (conciencia de clase) y se levante contra los capitalistas. Sólo así se podrá poner fin al capitalismo, lo que implicará, el fin de la propiedad privada y de las clases sociales y el triunfo de la sociedad comunista, donde las mercancías sólo poseerán un valor (el valor de uso) y el hombre vuelva a humanizarse a través de la praxis.