Facilita tu digestión con un masticado perfecto Escrito por Maru Martínez Martes, 18 Septiembre 2012 09:54 Para masticar la comida correctamente se recomienda hacer movimientos de apertura y cierre, así como de un lado para otro El ritmo acelerado con el que vivimos día a día nos ha condicionado en muchos casos a comer rápido, sin considerar que hay cosas muy sencillas que nos brindan enormes beneficios como masticar bien. La odontopediatra Verónica Soberón Espinosa señala que desde muy temprana edad es bueno enseñar a todo niño la manera correcta de usar sus dientes a la hora de comer, además de instruirles sobre el proceso básico que comienza una vez masticado el alimento y que tiene relación con su digestión. Explica que masticar de 20 a 30 veces cada bocado significa sacar el máximo provecho a los nutrientes contenidos en los alimentos, ya que para que el organismo pueda tener acceso a vitaminas, minerales y proteínas es necesario que lleguen bien masticados y ensalivados al estómago. La diferencia es notable cuando se mastica menos de cinco veces cada bocado, ya que se obtiene solamente un 40 por ciento de los nutrientes contenidos; en cambio, si se hace más de 20 veces, el aprovechamiento mejora notablemente de un 80 a un 95 por ciento. Los dientes tienen una función primordial en este proceso. “Los incisivos son los dientes frontales, tenemos cuatro superiores y cuatro inferiores y se encargan de morder el alimento. Tenemos cuatro caninos, dos superiores y dos inferiores y son los que rasgan los alimentos. Los molares en los adultos son ocho superiores y ocho inferiores y son los que de trituran el alimento”, indica la especialista en odontología infantil egresada de la Universidad Autónoma de Nuevo León. Para masticar la comida correctamente recomienda hacer movimientos de apertura y cierre, así como movimientos de lateralidad. 1/3 Facilita tu digestión con un masticado perfecto Escrito por Maru Martínez Martes, 18 Septiembre 2012 09:54 “Es masticar con la boca cerrada y pasar el bocadillo de un lado a otro. Es importante utilizar ambos lados de la boca, al masticar ayudamos a que haya una auto limpieza, que si masticamos por uno solo”, explica. Y para resaltar la importancia de este mecanismo, lo asemeja con la recomendación que por vida hemos escuchado: para que los niños crezcan sanos y fuertes aparte de tener una alimentación balanceada tienen que hacer ejercicio. “La boca tiene que hacer ejercicio para que crezca y el único ejercicio que podemos hacer con la boca es masticar, entonces si a nuestros hijos les ponemos bocados chicos, suaves, dejan de masticar, deja de haber crecimiento en los maxilares y por eso hay tanto problema. A veces se maneja: ‘Es que tiene los dientes muy grandes’, pero no, más bien tiene los maxilares muy chiquitos porque no se desarrollaron de la manera adecuada”, comenta. En el caso de los adultos, señala que cuando no se da la mordida adecuada se padece de dolores de cabeza, articulación, de espalda, además del bruxismo que se refiere al hábito involuntario de apretar o rechinar los dientes por la noche. Para el cuidado de los dientes, Soberón Espinosa, certificada por el Consejo Nacional de Odontología Infantil, puntualiza que la primera visita al dentista debe ser a los seis meses, porque a esta edad es cuando probablemente salgan los dientes y hay que enseñarles a los papás a mantener su boca limpia, ya que empiezan a consumir más alimentación sólida. Luego, la próxima visita es los tres años, porque se tiene toda la dentadura infantil o dientes de leche ya presentes en boca. “Y a los siete años empezamos a tener una dentadura mixta que es dientes de leche y dientes permanentes y es aquí la edad más crítica para detectar problemas, poner manos a la obra, resolverlos en estad edad, y no esperar a que el niño termine de mudar que es alrededor de los 12 o 13 años porque muchas veces el problema ya se hizo grande", explica. El que los dientes de leche estén sanos ayuda a que se tenga un buen desarrollo de los maxilares. 2/3 Facilita tu digestión con un masticado perfecto Escrito por Maru Martínez Martes, 18 Septiembre 2012 09:54 “Muchas veces creemos que sólo nos sirven para morder, pero nos sirve para que los niños puedan aprender a hablar, ya que cuando empiezan a perder piezas desde pequeños tienen problemas de lenguaje”, dice. Así como el hábito de limpieza y cuidados de las piezas son base para los procesos de masticación y el digestivo, la odontopediatria nos dice que hay que sumarle otros hábitos sanos, como sentarnos en la mesa a comer, no frente a la televisión, ni computadora; asignar como mínimo media hora para comer, masticar bocados pequeños, así como utilizar utensilios y socializar. 3/3