ISSN 0001-4605 Revista de reflexión y diálogo de los Jesuitas del Paraguay Abril 2011 - Nº 313 - G. 20.000.- La lucha por la tierra… continúa © Piero Tesei Nº 313 - Abril 2011 Nº 313 - Abril 2011 Índice Vice-Presidente Sánchez 612 c/Azara Casilla de Correo 1072 Tel/Fax: (595-21) 233 541/3 [email protected] www.cepag.org.py Tercera Época Año XLII. Fundada en mayo de 1923 por Monseñor Aníbal Mena Porta La Revista Acción es editada por el CEPAG (Centro de Estudios Paraguayos Antonio Guasch) de los Jesuitas del Paraguay. El CEPAG es un centro de investigación y acción social inspirado en la misión de los Jesuitas: proponer, en medio de la cultura y la sociedad en la que vivimos, la fe cristiana y la lucha por la justicia en un diálogo abierto a todos y todas Director José María Blanch, sj Jefa de Redacción Stella Ruffinelli Secretaría Magalí Casartelli Consejo de Redacción Melquíades Alonso, Galo Bogarín, Margot Bremer, Milda Rivarola, Fides Gauto, Gabriel Insaurralde, Oscar Martin, Bartomeu Melià, Tomás Palau, Francisco de Paula Oliva, Luis Rojas Villagra, Estela Ruiz Díaz, Luís E. Ughelli Difusión, suscripción y distribución: Vice-Presidente Sánchez 612 c/Azara [email protected] Telefax: (595-21) 233 541/3 Diseño y diagramación: Karina Palleros Fotografías: Archivo CEPAG y Banco de imágenes Impresión: Grafi Express Ecuador 2.532 c/Yvyra Pyta, Tel.: 550 008 - Fax: 559 756 Precios G. 20.000 el ejemplar. Números atrasados G. 20.000 Suscripción 10 ejemplares G. 150.000 / US$ 50 Acción no se responsabiliza por los juicios y opiniones de los artículos firmados. Editorial Reforma Agraria, una cuenta pendiente Actualidad Concesión de aeropuertos: un despropósito económico del MOPC Aníbal Amado Nunes Na’teema-Amyep (Campo Largo) a los cincuenta años de su fundación Hannes Kalisch Bicentenario La Soberanía Nacional ayer y hoy. Celebración del 1º de Marzo Tema del Mes: Puerto Casado “Pueblo casadeño entre crisis y la lucha por la soberanía: memoria, identidad y arraigo” Regina Kretschmer 2 4 7 10 14 Puerto Casado: etapas de la larga lucha por la tierra 18 José Nicolás Morínigo Alcaraz Acaparamiento de tierras y violación de los derechos humanos: viejos problemas en nuevos escenarios Regina Kretschmer 23 Los pueblos indígenas en la región casadeña y su lucha por la inclusión en la sociedad regional y nacional Enrique Amarilla Ayala 28 Internacionales El Foro Social Mundial... Cristina Coronel Ovelar Pensar y creer La lucha por la dignidad indígena en la época de la Independencia. Margot Bremer, rscj Arte y Letras Palestina: un libro de crónicas de Mario Casartelli Blas Brítez 32 34 38 Reforma Agraria, una cuenta pendiente De los seis ejes fundamentales del Programa de Gobierno de Fernando Lugo 2008-2013, la Reforma Agraria es uno de los componentes más polémicos y sin señales de avance en lo que va del tercer año de gobierno. La Reforma Agraria en el imaginario rural no se circunscribe única y exclusivamente al reparto de la tierra, pero tampoco se puede avanzar en otro componente sin el reparto de la tierra. Es decir, la distribución de la tierra es una condición necesaria pero no suficiente. La Reforma Agraria tiene ver con varios componentes, como la implementación de infraestructura vial y de servicios públicos básicos (electricidad, agua, puestos sanitarios y escuelas), plan de producción, mejoras tecnológicas, asistencia técnica, acceso al crédito, seguridad alimentaria, diversidad productiva y cuidado del medio ambiente (cuencas hídricas, uno apropiado de agroquímicos). En otras palabras, todos estos factores convergen para lograr el arraigo rural y el bienestar de las familias rurales, fortaleciendo los asentamientos campesinos a través de 2 las organizaciones genuinas que expresen sus necesidades. Las diversas organizaciones campesinas, de una u otra forma, y diferentes medios vienen expresando estas demandas hasta ahora con mucha madurez política; el campesinado ha esperado pacientemente que el gobierno pudiera avanzar en cualquiera de estos frentes que se define como Reforma Agraria. Y ni hablar de las tierras indígenas, cuyas demandas han sido históricamente conculcadas y las pocas conquistas logradas han retrocedido. Los asentamientos rurales de los últimos veinte años no han sido el resultado de una estrategia planificada y de una política agraria dirigida desde el gobierno, sino son logros de la lucha campesina por la tierra, vía ocupación, que casi siempre ha venido acompañada por represiones, muertes, apresamiento o encarcelamiento. El gobierno ha ensayado diferentes fórmulas desde el Instituto de Desarrollo Rural (INDERT), la creación de la Coordinadora Ejecutiva para la Reforma Agraria (CEPRA), editorial anuncio de la recuperación de tierras mal habidas, pero en la práctica poco se ha avanzado en el tema de la distribución de la tierra, siendo este país de una economía eminentemente agrícola y con un coeficiente de concentración de la tierra más alto del mundo. A la serie de ocupaciones históricas de tierra como reclamos de derecho se han sumado en los últimos años la reivindicación de Casado, en donde la enajenación del patrimonio incluye a los propios ocupantes históricos de la tierra. En este sentido Casado es un símbolo de la lucha por la dignidad y el reclamo legítimo de acceder a la tierra. redistribución de la tierra y la recuperación de los bienes mal habidos. Queda poco tiempo para este gobierno a fin de cumplir con su compromiso y al mismo tiempo la larga paciencia y comprensión de los movimientos campesinos pareciera ser que están llegando a su punto más crítico. La Reforma Agraria sigue siendo el tema pendiente de este gobierno y la forma de sectorizar la política agraria ya está demostrada aquí y afuera del país que conduce necesariamente al fracaso. Urge rectificar rumbos y actuar rápido. En contraste a la lucha de Casado surge el segundo cambio de personas en el INDERT (ex Instituto de Bienestar Rural, IBR) , donde los terratenientes y grandes productores son quienes presionan al gobierno por sostener a un presidente no precisamente porque se ha abocado a la distribución de la tierra y atención a los asentamientos campesinos sino más bien por ser portavoz y ejecutor de los intereses de quienes no precisamente están con la Nº 313 - Abril 2011 3 actualidad 4 Concesión de aeropuertos: un despropósito económico del MOPC Aníbal Amado Nunes* La economía es la razón de ser de la política, en tanto ésta sea una actividad de quienes rigen o aspiran regir los asuntos públicos en la búsqueda del bienestar del pueblo. Por eso es muy difícil abstraerse de la política para opinar sobre la concesión de obras y servicios públicos al sector privado. De todos modos trataré de ilustrar al lector de la manera más simple y objetiva posible, por qué afirmo que es un despropósito económico la iniciativa del MOPC de otorgar en concesión los aeropuertos Silvio Pettirossi, Guaraní y el aeródromo de la ciudad de Mcal. Estigarribia. La Dinac como empresa es un monopolio natural en el Paraguay Un monopolio natural es un caso particular de los monopolios, en el cual una sola empresa puede producir todos los bienes o servicios que demanda el mercado, con un costo menor que si hubiera varias empresas compitiendo. Vayamos al ejemplo. El Aeropuerto Silvio Pettirossi tiene una capacidad instalada para brindar servicios a 1.200.000 pasajeros por año. Hasta el año 2.009 –según datos estadísticos de la Dirección Nacional de Aeropuertos Civiles (Dinac)– el tráfico de pasajeros internacionales y nacionales por año, no superó los 700.000. Por eso afirmamos que la Dinac como empresa es un monopolio natural acá en el Paraguay. Y un monopolio natural que brinda servicios públicos, por experiencias –según los tratadistas–, no debería estar en poder del sector privado. Así por ejemplo, en EE.UU. los servicios públicos mantenidos por empresas privadas son un tercio más caros e ineficientes que los servicios mantenidos por * Doctor en Ciencias Económicas. Director de la carrera de Economía de la Universidad Nacional del Este (UNE). Vicepresidente de la SEPPY (Sociedad de Economía Política del Paraguay). actualidad el sector público. Y en América Latina este sistema ha llevado, además de la reducción de la fuerza de trabajo, a un incremento de los precios al consumidor. Estos datos no los inventé yo. Evidentemente, la intención del proyectista es que un monopolio natural como la Dinac, que está en poder del sector público, pase a manos del sector privado. En consecuencia, ¿es o no un despropósito económico concesionar nuestros aeropuertos? Las cifras reales de los estados financieros de la Dinac • Desde el año 2007 hasta el 31.12.2010, la Dinac ha generado utilidades que suman G. 146.434.123.516 (guaraníes ciento cuarenta y seis mil cuatrocientos millones ciento veintitrés mil quinientos dieciséis). • De estas utilidades, en el mismo período, ha transferido al Ministerio de Hacienda G. 82.500.000.000 (guaraníes ochenta y dos mil quinientos millones). • De no haber transferido esa cifra al Ministerio de Hacienda, sin tener en cuenta lo transferido antes del año 2007, el Patrimonio Neto Real de la Dinac ya debió ser de G. 362.478.964.176 (guaraníes trescientos sesenta y dos mil cuatrocientos setenta y ocho millones novecientos sesenta y cuatro mil ciento setenta y seis). • La Rentabilidad Neta, siempre en el mismo lapso, del 26,93% que fue en el año 2007, subió al 30,72% en el año 2010. • La Rentabilidad sobre el Patrimonio Neto se mantuvo en torno del 20% desde el año 2007. • El Nivel de Endeudamiento al 31.10.2010, es apenas del 12,15%. Con estas cifras, sin que se sepa aún: cuánto es la inversión que se necesita para mejorar sustancialmente los servicios, y cuánto es el canon que deberá abonar el concesionario, usted como empresario; ¿arrendaría su empresa en forma urgente? En consecuencia, ¿es o no un despropósito económico concesionar nuestros aeropuertos? Nº 313 - Abril 2011 Estudios de factibilidad económica Hasta hoy, no se han realizado ni tan siquiera estudios de prefactibilidad económica para tener una idea seria de lo que debería invertirse en el Aeropuerto Silvio Pettirossi para modernizar los servicios aeroportuarios, y obviamente a cuánto ascendería el canon que debería abonar el concesionario. Un estudio para saber si es factible o no económicamente concesionar nuestros aeropuertos no puede llevar más de tres o cuatro meses. Entonces, cuál es la urgencia de crear primero la ley que autoriza ya a otorgar en concesión un servicio público, antes de saber si económicamente conviene o no, tanto al Estado como al concesionario. En consecuencia, ¿es o no un despropósito económico cambiar el orden lógico de las acciones? Preservación de los recursos del Estado En la exposición de motivos remitida por el MOPC a través del Ejecutivo, se habla de la necesidad de preservar los recursos del Tesoro como una de las principales justificaciones para otorgar la concesión. Nada más falaz teniendo en cuenta que la Dinac no necesita de recursos del Tesoro para su funcionamiento. Al contrario, además de generar sustanciosas utilidades, está transfiriendo anualmente entre 20 y 30 mil millones de guaraníes al Ministerio de Hacienda. En consecuencia, ¿es o no un despropósito económico concesionar nuestros aeropuertos? Conclusiones Luego del análisis patrimonial, económico y financiero de los estados contables de la DINAC, de los cuatro últimos años, quienes están a favor de concesionar nuestros aeropuertos esgrimen como último argumento la caracterización de que el estado es mal empresario, en comparación con la empresa privada. Este argumento, aún cuando no puede negarse que el sistema prebendario y clientelista del Paraguay desde hace más de 50 años, internalizó en las empresas públicas la incorporación masiva de funcionarios con escasa preparación académica, sin más curriculum que la “recomendación política” de 5 los gobiernos de turno, no debe ser motivo para regalar al sector privado justamente las empresas públicas que no son deficitarias. Por el contrario, el gobierno debe insistir en la profesionalización de los funcionarios públicos, de manera tal que sobre todo las empresas estatales de carácter estratégico sean gerenciadas por gente capaz. La eficiencia en la gestión empresarial no tiene que ver con el sector involucrado, sea éste el público o el privado. Sí tiene que ver con la cualificación del factor humano encargado del gerenciamiento de las empresas, sean éstas – repito – públicas o privadas. En consecuencia, ante la aprobación del proyecto de ley de concesión de nuestros aeropuertos por parte de la Cámara de Diputados, éste quedó sancionado. Ahora queda en manos del Ejecutivo su promulgación o veto. Obviamente es casi improbable que el propio proyectista de una ley, al ser sancionado su proyecto, lo vete. De todas maneras, es importante aclarar que el referido proyecto de ley no concesiona los aeropuertos; sólo autoriza al Poder Ejecutivo a concesionar, siempre y cuando los estudios de factibilidad a realizarse satisfagan las expectativas del gobierno, tanto en el aspecto económico como en el aspecto estratégico. Esto quiere decir que la licitación pública para la concesión de los aeropuertos puede quedar desierta, si las propuestas de los oferentes no llenan esas expectativas. Sr. Presidente: quedará en sus manos otorgar o no la concesión de nuestros aeropuertos. Haga historia. UTILIDAD LÍQUIDA REAL POR AÑO Utilidad líquida real = Utilidad según balance + Transferencias al sector público TRANSFERENCIAS AL SECTOR PÚBLICO TOTAL TRANSFERENCIAS AL SECTOR PÚBLICO G. 82.500.000.000 AL CAMBIO DE DÓLARES A G. 4.750 = $ 17.368.421. 6 actualidad Nuestra comunidad enlhet Na’teema-Amyep (Campo Largo) a los cincuenta años de su fundación Hannes Kalisch* Los enlhet son aquel pueblo chaqueño en cuyo territorio se instalaron las colonias mennonitas. Rodeado de estas colonias, hoy todo el pueblo vive estrechamente ligado al mundo mennonita, sea en comunidades con título propio, sea en barrios de los centros de los inmigrantes. Coincidentemente, se plantea una asimilación de estas comunidades al modelo económico dominante, el cual sirve para definir lo que es éxito o no. Campo Largo o Na’teemaAmyep es una de dichas comunidades enlhet. Tal como era normal, comenzó como ‘misión’; recibió su título de propiedad en el año 2000 y hoy viven allí 850 personas sobre 6.000 hectáreas. En setiembre del 2010 festejó los cincuenta años de su fundación. Para esta ocasión, un grupo de pobladores reflexionó sobre el pasado y el presente de su comunidad. Esta reflexión se ha traducido en el documento que sigue y que es firmado por los líderes Ernesto Maldonado, Fernando Negro, Esteban Antonio, Evencio Froese, Martín Cabañas y Leo Antonio. Vale recalcar que el pueblo enlhet o enlhet norte no debe confundirse con el emparentado pueblo enxet o enxet sur, el cual es mucho más conocido a nivel nacional; este último ocupa el espacio al este del territorio enlhet y habla una lengua distinta. Nº 313 - Abril 2011 Campo Largo se ha conformado por familias que provienen básicamente del sur y del oeste de esta comunidad. Hasta un poco antes de la Guerra del Chaco entre Paraguay y Bolivia (19321935) no había personas blancas en esta región del Chaco y los enlhet eran los dueños únicos de su país. Con la Guerra del Chaco eso cambió. Durante la guerra misma estaban expuestos a la violencia militar. Había muchos encuentros de terror con los soldados, y por temor a los militares no podían moverse libremente. Para varios grupos les parecía ser una opción acercarse a los fortines, donde encontraron un poco de amparo de la violencia incalculable, aunque, al mismo tiempo, implicaba que sus mujeres eran fácilmente objetos de los deseos de los soldados. Inmediatamente después de la guerra, muchos enlhet eran víctimas de enfermedades traídas desde fuera. Se estima que la mitad o más del pueblo murió a causa de las mismas. Lo cruel que era aquel tiempo se muestra en que los ancianos nos relatan repetidamente acerca de personas que se volvieron locas por lo que sufrieron. Un poco antes de la guerra, en el norte habían llegado los inmigrantes mennonitas a Loma Plata (1927, Colonia Menno) y Filadelfia (1930, Colonia Fernheim), lugares que en lengua enlhet se llaman Paeklha’pe’ y Lhaapangkalvok, respectivamente. Después de la guerra, los enlhet sureños comenzaron a hacer viajes temporales a la Colonia Menno y a la aldea Friedensfeld de Fernheim (Lhaptaana), para conocer a sus nuevos vecinos. Al mismo tiempo, estos vecinos vinieron explorando la región al sur de sus colonias, de donde es la gente que hoy vive en Campo Largo. Finalmente, en los años 1947 y 1948 se fundaron dos nuevas colonias mennonitas en dicha región: Neuland (con el centro Neu-Halbstadt, Peetempok) en el oeste y Paratodo (Lhamalhtengyava’) en el sur. * Miembro de Nengvaanemquescama Nempayvaam Enlhet, dedicado a la recopilación de relatos de los pueblos enlhetenenhet y su posterior edición en forma monolingüe. 7 de Campo Largo –que ahora es la Colonia Neuland– experimentaban cómo su país fue poblado por extranjeros. Seguían viviendo en sus lugares tradicionales, pero al mismo tiempo hacían viajes a Neu-Halbstadt para ver lo que estaba pasando allá. Sin embargo, en la medida en la que se poblaba su país, sus posibilidades de moverse se limitaban rápidamente y cada vez más se quedaban allá. A ellos, los inmigrantes les asignaron Ya’yeem-Peehe al este de Neu-Halbstadt para asentarse allá. Paralelamente, los enlhet que vivían en los alrededores de Waldsrode fueron reasentados en Maapekmentek en las cercanías de esta aldea. La línea azul muestra el territorio enlhet tradicional sobre el mapa actual. Además, se indican los lugares mencionados en el texto (fuente: Nengvaanemkeskama Nempayvaam Enlhet). Pronto, los enlhet de la región de Paratodo fueron reasentados por los inmigrantes en un lugar único cerca de Lolita (Na’tee-Lhyeenep) llamado Nueva Vida (Lha’akme-Taalha). Algunos, sin embargo, preferían buscarse otros lugares para vivir y se fueron a la aldea mennonita Waldsrode (Nempeena-Amyep) que pertenece a la Colonia Neuland y que se había fundado recientemente. Allá, pues, había llegado un predicador nivaclé de origen argentino, del cual se decía que sabía sanar a la gente y al cual querían ver. Con el tiempo, también otras familias de los alrededores comenzaron a mudarse a Waldsrode. Después de la violencia de la guerra y las enfermedades, combinada con la llegada de los extranjeros, pues, ya no pudieron vivir de la manera tradicional en sus lugares de origen. Entonces, preferían juntarse con otros grupos de enlhet en algunos lugares no-tradicionales, en vez de vivir separados en los alrededores de diferentes asentamientos mennonitas. Mientras tanto, también los enlhet al oeste 8 Un poco más tarde, los mennonitas iniciaban la fundación de una misión que se llamaba Campo Largo (Na’teema-Amyep) y en el 1963 la gente de Maapekmentek fue reasentada nuevamente allí. Al mismo tiempo, se trataba de persuadir a los enlhet de Ya’yeem-Peehe a mudarse también a Campo Largo; algunos se fueron voluntariamente, otros entendieron que se iba a deportarlos en un lugar de difícil acceso si no se van, y después ellos también se fueron. Otro grupo importante de la gente de Ya’yeem-Peehe, en cambio, se mudó a la misión Ya’alve-Saanga. Por eso, hoy en Neu-Halbstadt no viven enlhet, aunque muchos de los pobladores actuales de Campo Largo son de procedencia de este lugar. Aún cuando se había fundado la misión Campo Largo, algunos grupos seguían sin encontrar un lugar propio para vivir sin molestar a nadie. Ellos también se fueron a Campo Largo. De cierta manera, entonces, el asentamiento en la nueva misión Campo Largo expresa que los enlhet habían perdido su país propio. La pérdida de sus ovejas y cabras que tenían cuando vivían en sus lugares propios la percibieron como un claro símbolo de esa pérdida. A consecuencia de todos estos movimientos, los enlhet de Campo Largo tienen parientes en otras comunidades, como ser sobre todo Ya’alve-Saanga, Paz del Chaco, Nueva Vida y Paratodo. Además tienen parientes entre los nivaclé, por ejemplo en Campo Alegre. En aquel tiempo, pues, cuando los enlhet construían propiamente su vida, convivían con mucha amistad actualidad con los nivaclé; había numerosos matrimonios mixtos y muchos hablaban ambos idiomas. Al principio, los nuevos pobladores vivían bien en Campo Largo. Les gustó que se repartían víveres entre la gente de la misión y que recibieron apoyo material. La tierra era nueva y buena para plantar. Además, había muchas posibilidades para seguir viviendo de la caza y de las frutas del monte. De hecho, los viajes de caza, el ‘teyaanyam’, a lugares en los alrededores de Campo Largo eran importantes para la gente. Usaban, pues, una gran variedad de alimentos que encontraban en el monte y en el campo; su comida era diversificada y mucho les gustó la carne silvestre. El monte era su almacén, y su fuente de trabajo era conseguir lo que daba el ambiente. Paulatinamente, sin embargo, el monte ha desaparecido, y los dueños de las tierras vecinas tratan cada vez más restrictivamente los derechos de acceso. Las mujeres experimentan eso cuando tienen que traer leña, y casi todos extrañan los viajes de caza. Observan que se disminuyeron las posibilidades de vivir de la mano propia y cada vez más se depende de la plata. Aún así, se aprovecha lo poco que queda. En la época del algarrobo a finales del invierno, por ejemplo, mucha gente alivia su hambre con las vainas de este árbol. Es, pues, así que dentro de la comunidad no hay muchas posibilidades para mantener a su familia, y es frecuente que aquellos que no salen para trabajar afuera tienen hambre. Los productos de consumo que se usan, en cambio, por ejemplo las motos, provienen del trabajo para patrones externos (aunque es cada vez más difícil encontrar trabajo). Pero salir para vivir significa separarse de sus familias, y a muchos, tal separación les cuesta bastante. mientras que antes las posibilidades de acceso al medioambiente para todos eran las mismas, hoy el que no tiene plata queda excluido de aquello que aparenta estar accesible: la vida de hoy está determinada por una dependencia del dinero. Esta dependencia es pesada. Los recursos de muchas familias, pues, son muy limitados: mientras que antes el acceso al medioambiente implicaba fuentes de trabajo y comida para todos, hoy ya no hay fuentes de trabajo ni comida para todos. La dependencia del dinero hace que ya no sea fácil hacer trabajos voluntarios en la comunidad, porque, a diferencia de antes, ya no se come si no se gana dinero. Surge, incluso, una nueva idea entre algunos de que ya no se ayuda al otro si no lo paga. El tractor es un símbolo de dicha dependencia del dinero, porque, por más que aparenta ser útil, sólo se lo puede usar si hay plata para pagarlo. Hay, entonces, personas que dicen que hubiera sido mejor mantener los caballos y los carros que se usaban al principio, para evitar tal dependencia. Campo Largo comenzó como misión y mucho se recuerda el trabajo del misionero mennonita. Instó, por ejemplo, a la gente a almacenar la cosecha del campo en vez de compartirla y usarla entre todos. Advirtió, también, que es peligroso seguir con las antiguas fiestas, porque podrían traer la ira de Dios. Por eso, hoy se ha dejado mucho de aquello que para los ancianos era importante. Sin embargo, tratamos de mantener el nengelaasekhammalhkoo, el respeto y el apoyo mutuo, que nos enseñaron nuestros abuelos. Así nos es posible seguir juntos en nuestra comunidad y mantener la alegría. Na’teema-Amyep, el 3 de setiembre del año 2010. En el centro mismo de la comunidad Campo Largo hay cierta infraestructura, por ejemplo tres tractores, galpones, un almacén de consumo, un surtidor. Las inversiones correspondientes provienen de la estancia comunitaria que es mantenida en cooperación con la Asociación de Servicios de Cooperación Indígena Mennonita (ASCIM). Sin embargo, a dicha infraestructura se accede sólo a través del dinero. Entonces, Nº 313 - Abril 2011 9 La Soberanía Nacional ayer y hoy Celebración del 1º de Marzo La pertinaz llovizna de la tarde noche del 1 de marzo no impidió la participación del público en el acto denominado “La Soberanía Nacional ayer y hoy”. El evento se realizó frente a la Casa de la Independencia, donde se contó con la disertación de León Pomer (Argentina), Sergio Guerra Villaboy (Cuba) y Richard Alan White (Estados Unidos), que hicieron referencia a la independencia del Paraguay, resaltando principalmente la figura del doctor Gaspar Rodríguez de Francia y los López. A continuación, retazos casi completos de sus palabras. León Pomer señaló que la Guerra de la Triple Alianza no fue la guerra de Brasil, Argentina y Uruguay. En el caso argentino fue la guerra del gobierno de Mitre pero no del pueblo argentino. “Hace años, ya ni me quiero acordar cuántos, yo publiqué mi investigación titulada ‘Cinco años de Guerra Civil en Argentina’ El comandante en Jefe del ejército argentino en el frente de batalla, el general Mitre, tuvo que retirar tropas del frente que luchaban contra los paraguayos para luchar contra los argentinos que cuando escuchaban que por ahí se acercaba el reclutador de los supuestamente voluntarios que iban alegremente a la guerra engrillados. Un herrero una vez le pide a un jefe militar: ‘Por favor, devuélvame los grillos de los voluntarios 10 de la Guerra del Paraguay’. Ese herrero no sé si lo sabía o no lo sabía, pero era un ironista”. El disertante comentó además que ejércitos enteros, con sus oficiales a la cabeza, se desbandaron por negarse a seguir participando de la guerra contra el Paraguay. Este hecho sucedió incluso por encima de la potestad del general Justo José de Urquiza, cuya autoridad era tenida como absoluta. “Acá hubo dos pueblos que jugaron papeles diferentes y de magnitud diferente, uno fue el pueblo paraguayo, que es el gran protagonista de la guerra”. Pomer resaltó además que la figura del mariscal Solano López no hubiera sido posible si éste no hubiera encarnado la voluntad de pueblo paraguayo que vio en él un representante de la voluntad del pueblo cuyo heroísmo increíble llegó a dejar perplejo al comandante en Jefe del Ejército brasilero, el duque de Caxias. “Caxias le escribe una carta al emperador donde le dice: ‘Este Solano López ha de tener un don sobrenatural porque los tiene como electrizados a los soldados paraguayos’. Lo que el duque de Caxias no entendió es que cuando un pueblo tiene poderosos motivos para defender su terruño, su tierra, para defender su cultura, su idioma, su historia, entonces ese pueblo es invencible hasta casi la destrucción total. Acá bicentenario hubo una doble inmolación, no solamente la inmolación personal de Solano López. Un pueblo entero prácticamente llegó al borde de la inmolación total. Es un hecho que hubiera necesitado un Homero para cantarlo como corresponde”, señaló. Siguiendo con el resumen histórico, dijo que la guerra tuvo un fuerte rechazo de parte del pueblo argentino, sobre todo en las provincias con influencia del guaraní. A ello se sumaba el odio que despertaba en la población la milicia, pues desde tiempos coloniales era como un castigo para el pueblo. “Hoy afrontamos un desafío en un momento en que personalmente me permito calificar como excelso de Sudamérica. Nos recuerda la historia tantos gobiernos diferentes entre sí pero con un elemento común: la voluntad autonómica, la voluntad de defender los intereses nacionales y populares más allá de los dictados del imperio”. Pomer recordó además que tanto el ex presidente argentino Néstor Kirchner y la actual presidente Cristina de Kirchner han rendido un homenaje a la figura del mariscal López, lo cual suscitó la reacción del diario La Nación de Argentina. “Estamos empeñados en una lucha política, ideológica, cultural. Como somos ob- jeto de la ofensiva cultural brutal con carga de mentira, deformación, omisión, exageraciones, deformaciones, como tal vez no las hubo en ningún momento de la historia, tenemos que reaccionar del punto de vista cultural, un momento fundamental de la lucha política para deshacer los infundios que todavía invaden los cerebros de millones de personas”, finalizó. A decir del expositor cubano Sergio Guerra Villaboy, el Paraguay fue el único país de Latinoamerica que alcanzó una verdadera independencia. Villaboy expresó que el Paraguay no sólo logró la independencia política sino que bajo la dirección del doctor Francia se logró lo que no se consiguió en otras naciones americanas: la independencia económica, la protección de los valores nacionales, la creación de una nación de iguales, una nación para todos. “En la independencia de América Latina los grandes libertadores como Bolívar, como Hidalgo, como Morelos, como Mariano Moreno, pensaron que la independencia no sólo fuera una transformación política sino que estuviera acompañada de cambios sociales”. “José Martí, nuestro prócer nacional, lo resumió en una de sus bellas frases refiriéndose a que la independencia no podría ser sólo un cambio político sino que tendría que ser un cambio de espíritu. Y lamentablemente el proceso independentista latinoamericano, si bien concibió la independencia política, acontecimiento que no podemos menospreciar, sin embargo no condujo a una verdadera transformación social”, agregó. El catedrático cubano señaló que Paraguay fue el único territorio hispanoamericano donde la independencia política estuvo acompañada de profundas transformaciones sociales. En ello se diferencia a los otros países donde las clases dominantes, grandes terratenientes y la Iglesia, tomaron el poder político dejando de lado las consignas de la participación popular que propiciaron la independencia de sus países. Afirmó que el proceso paraguayo fue una verdadera revolución de independencia y que Nº 313 - Abril 2011 11 ello no se acabó con la muerte del doctor Francia. Destacó al prócer diciendo que creó un Estado con mayúsculas, que se preocupaba por la defensa de los valores nacionales, el reparto equitativo de las riquezas y el freno a la penetración del capital extranjero. Señaló además que esa labor fue continuada por el gobierno de Carlos Antonio López, quien abrió el país al mundo y logra consolidar la independencia nacional. Recalcó que la independencia económica del Paraguay fue el principal motivo que propició la Guerra de la Triple Alianza. “Los grandes capitales, como ha demostrado León Pomer en su extraordinario libro, se ensañaron con este país. Aprovecharon a las oligarquías de los países vecinos, las manipularon y las lanzaron contra la tierra paraguaya que resistió heroicamente y que además dejó su sangre en esta tierra defendiendo la nación frente al capital extranjero y defendiendo los valores nacionales. Y todo aquello precisamente que estamos conmemorando hoy se simbolizó con el fin de esa nación diferente a las del resto de América Latina, con la muerte del mariscal Solano López en los campos de Cerro Corá”. Finalizando su ponencia, Guerra Villaboy relató la historia de un estudiante que conoció la historia del Paraguay en la Universidad de La Habana a fines de los años 60. Dijo que este estudiante conoció la historia del Paraguay a través de un libro de dos tomos de Pablo Max Insfrán que hablaba sobre la intervención norteamericana en Paraguay, mencionando la expedición militar enviada contra el país en 1858 (el incidente del “Water Wich”). “Aquella historia del Paraguay apasionó a este estudiante porque encontraba tantas similitudes con la historia cubana asediada por los Estados Unidos, un país que desde entonces defiende su soberanía como la defendió Paraguay en el siglo XIX. Y aquella semejanza me llevó, de esto ya hace 40 años, a publicar mi primer artículo precisamente sobre la intervención norteamericana en Paraguay. De aquellos artículos salió este libro hecho con el corazón. Muchas gracias”, dijo finalmente. 12 Richard Alan White centró su discurso en la idea de que la leyenda negra de Francia está escrita por sus enemigos. Dijo que la historia del Paraguay debe pertenecer a los paraguayos y que en los años de estudio de la historia no encontró otra figura de la magnitud del doctor Francia. “Al leer la historia convencional se denuncia al doctor Francia como el peor tirano de Latinoamérica, un monstruo que caprichosamente ejecutó a sus enemigos, que gobernó el país con una feroz red de espías. Bueno, me cansé, como dijo Willian Shakespeare: me parece que ustedes están protestando demasiado. Y me puse a investigar más profundamente sobre el asunto. Y resulta que lo que han tomado como la historia del Paraguay en realidad es una repetición de una polémica contemporánea de los enemigos del doctor Francia basados en Buenos Aires principalmente”. White explicó que estos ataques se han tomado como la verdadera historia o guerra del Paraguay y que ésta ha sido escrita por los dominadores y enemigos que relataron los primeros 60 años de independencia. Contó que al investigar miles de documentos en el Archivo Nacional de Asunción pudo ver que esos ataques eran infun- bicentenario dados. Contó además que hay tres mitos relacionados a la historia del doctor Francia. Uno de ellos es que ejecutó arbitrariamente a sus enemigos. “En 27 años de gobernar al Paraguay él ejecutó máximo 40 personas, más bien dicho quizás como 25 personas. Aclaro que estoy en contra del castigo capital. Entre 1796 y 1805, en diez años, el gobernador Rivera para el mantenimiento de rutina de la sociedad integral ejecutó a 260 personas. No por tradición, no por subversión, pero para el mantenimiento y rutina de una sociedad dependiente, una sociedad de clases, de privilegio y una sociedad de pobreza para la mayoría de los paraguayos”. Otro mito que mencionó el historiador norteamericano es el de la red de espías. Comentó que entre todos los documentos que revisó no se encontró ni un solo comprobante de que se haya pagado a espía alguno durante la época del doctor Francia. Señaló que era el pueblo paraguayo quien denunciaba las actividades de los que pretendían atentar contra la independencia nacional. Se refirió al último mito de la era de Francia, diciendo que éste abrió una válvula de escape Nº 313 - Abril 2011 por Encarnación para poder evadir el bloqueo del río de parte de Buenos Aires. A través de esta vía logró que se puedan exportar productos y ayudó a diversificar la agricultura, beneficiando al pueblo. “En Paraguay crecieron dos industrias dentro del modelo verdaderamente independiente, una fue la del hierro y la otra la de textiles, el algodón. En Inglaterra había productos básicos de hierro como machetes, sartenes, hacha y textiles. En 1864 el Paraguay ha llegado a un punto no para competir globalmente, pero estuvo exportando el hierro y los textiles. Pero cuando piensa en el mercado regional del Río de la Plata, Paraguay, el modelo de independencia, sus industrias forman una amenaza para Inglaterra. Es aquí donde entra el cuarto aliado en la Guerra del 70. Inglaterra financió a Argentina y Brasil antes, durante y después de la guerra”, explicó. “Francia se estableció con el oficio de Defensor de los Pobres. Fue el primer rey desde Cerro Corá. En 142 años el Paraguay tiene por suerte otra vez un verdadero Defensor de los Pobres, el presidente Fernando Lugo”, finalizó diciendo el historiador norteamericano. 13 tema del mes 14 “Pueblo casadeño entre crisis y la lucha por la soberanía: memoria, identidad y arraigo” Regina Kretschmer* Puerto Casado En Puerto Casado se respira la historia, pero no la historia como simples hechos del pasado sino como eje estructurador de las trayectorias sociales (de las familias y de la comunidad) y del presente que incide en el rumbo que tomará el futuro. Es la historia hecho presente que explica el arraigo de los casadeños a su tierra. Historia y memoria, presente y futuro están íntimamente vinculados entre sí y relacionados con la tierra. La configuración social de la población casadeña es muy particular y se inició con la instalación de la empresa de la empresa de Carlos Casado en esa región anteriormente habitada por pueblos indígenas. Campesinos sin tierra de todo el país llegaban a fines del siglo XIX a los nuevos poblados a lo largo del río Paraguay en búsqueda de trabajo, expulsados de sus tierras por los nuevos dueños que se apoderaron del Paraguay luego de la Guerra de la Triple Alianza. Los nuevos pobladores imprimieron, a lo largo de un siglo, sus propios significados y enlazaron un profundo sentimiento de arraigo a su nuevo espacio de vida. De esa forma surgió una nueva sociedad con características culturales y sociales propias, resultado de la fusión de culturas de migrantes en un nuevo entorno y marcada por la cultura obrera y el régimen socio-político y económico instalado por la empresa. *Antropóloga y doctorando en Estudios Sociales Agrarios de la Universidad Nacional de Córdoba. tema del mes El empresario Carlos Casado, inmigrante español en Argentina, aprovechó hábilmente la coyuntura política de la posguerra y adquiere aproximadamente 5 millones de hectáreas, convirtiéndose en el mayor propietario del Paraguay. En la lejanía del Chaco estableció la empresa más moderna de la época y creó (¡¡en el umbral del siglo XX!!) una perfecta red de interconexión entre los espacios de produccióncomercialización-consumo: desde el interior del Chaco transportaba el tanino río Paraguay abajo a los puertos en Rosario y Buenos Aires y de ahí a los polos comerciales en Inglaterra. La empresa –la primera en Argentina en exportar granos a Europa– acumuló su fortuna gracias a las enormes riquezas que le otorgaban el Chaco generoso y la mano de obra paraguaya. El sistema de enclave fue diseñado con el único objetivo de acumulación capitalista sin engendrar un desarrollo social y económico sustentado y autónomo. Un hecho que irrumpe al Paraguay es la guerra del Chaco. Puerto Casado era la puerta de entrada para las incursiones del ejército paraguayo al interior del Chaco, gracias a la amplia red de vías férreas y caminos con depósitos a lo largo de los caminos. También la guerra se convirtió en un gran negocio para el empresario: por cada kilómetro de tren que usaban las tropas y por cada kilogramo que almacenaba en sus depósitos, el empresario cobraba al Estado. Eso consta en los libros contables de esa época. Al interior de su inmensa propiedad reinaba un régimen político y social particular que estructuraba la cotidianidad de la gente con las normas y pautas incorporadas como habitus en la vida social de los pobladores. Casado controlaba todo. Profesiones independientes estaban prohibidas, una vez que un miembro de la comunidad no trabajaba más en la estructura empresarial, tenía que abandonar el lugar. Los hijos de los obreros sabían que iban a trabajar en la fábrica como sus padres; el destino individual estaba prediseñado. La posesión de chanchos, gallinas, huertas o chacras estaba prohibida y su tenencia Nº 313 - Abril 2011 causaba el traslado forzoso. Toda la alimentación había que comprar en el único almacén del pueblo de la propiedad de la empresa. El poblador tenía interdicto de resolver desperfectos en las instalaciones eléctricas o de agua en su hogar; la fábrica se encargaba. Era un sistema perfecto (y perverso) de generar una dependencia absoluta del patrón, en todas las dimensiones de la vida. Hoy la gente se recuerda de esa época con contradicciones: añora el pasado pero con plena conciencia de que su vida fue controlada, y ella explotada por los empresarios sin tener autonomía ni la libertad de tomar decisiones sobre su propia vida. En la retrospectiva, los casadeños señalan a la década del 70 como una época donde se evidenciaban transformaciones estructurales: obreros de las fábricas tanineras cerradas se asientan en Casado, comerciantes (macateros) llegan al puerto, el almacén de consumo es tercerizado. También se crean la municipalidad, que inicia algunas obras de urbanización para la creciente población, y la infaltable seccional colorada. La empresa cede progresivamente su control absoluto, transfiriendo sus poderes a nuevos poderosos. Pero esa ‘apertura’ era consecuencia del declive de la demanda del tanino en el mercado mundial que obliga al empresario reducir gradualmente las actividades fabriles y, en consecuencia, desmantelar progresivamente el sistema de control. En esa época hay nuevos intentos de sindicalización y de organización de los estudiantes secundarios,1 reprimidos por la alianza de los empresarios con la dictadura. Es en la década del 80 cuando surgen los primeros reclamos de tierra de parte de los pobladores más estigmatizados y de los estratos más bajos de la estructura social: los indígenas y los hacheros. La conquista del complejo Riacho Mosquito en la década del 80, tierra indígena de 30.000 hectáreas, fue la primera conquista de tierras indígenas con la nueva Ley 904. Los hacheros del obraje San Carlos, con el apoyo del pa’i Zislao a su lado, iniciaron a fines de los 80 acciones de protestas, que se prolongaron durante años, 15 por las inhumanas condiciones en que vivían y trabajaban: primero por salario y condiciones humanas de trabajo, y luego por tierra para asentarse en una nueva colonia en tierras fiscales. Luego de iniciales promesas de parte del entonces IBR, el sueño, por parte de los hacheros de San Carlos, de tierra propia y una comunidad se disolvieron en el aire por su apropiación de parte de brasileños, en los inicios del 90. Estos primeros conflictos –indicios de transformaciones económicas y sociopolíticas–quedaron desapercibidos por la gran mayoría de los casadeños que seguían confiando en la continuidad de la fábrica. Pero la generación joven percibía las señales del cambio y empezó a preocuparse por la suerte de su pueblo. Fue el sindicato, vinculado a la combativa Central Unitaria de Trabajadores (CUT) de los primeros años de la transición democrática, que planteó la entrega de tierra de parte de la empresa a los pobladores. El Estado seguía siendo manteniéndose ausente en esa región marginada. Con el cierre definitivo de la fábrica, se profundiza la crisis social de la comunidad. La gente comenta la sensación de desesperación que sentían cuando pasaron, por la avenida principal, la fila de personas con sus quehaceres de mudanza: “Se va a acabar nuestro pueblo”. Muchos se fueron y buscaron un mejor horizonte en otros lugares. Pero muchos se quedaron y desarrollaron una gran creatividad para permanecer en su pueblo. A pesar de la crisis o como respuesta a ella, se ha generado una diversificación social en un medio ambiente generoso. Una gran parte de la población se dedican a trabajos temporales (changas) pese a tener una profesión. Ña Narcisa, una líder natural de su barrio, inventa mil trabajos –hacer pan, dulces, costura, limpieza y tantos otros quehaceres– mientras su marido trabaja en las colonias menonitas. A pesar de los pesares, ella siempre encuentra tiempo y energía para aconsejar y animar a las madres vecinas a resolver los problemas de sus hogares y del barrio. Otros se convirtieron en artesanos y son un ejemplo de la creatividad humana y de la dialé- 16 ctica entre tradición e innovación. Ellos recrearon sus conocimientos, adquiridos en los talleres de la fábrica, para elaborar las características guampas. En ese momento, cuando la población emprendía los primeros pasos para la expropiación de las tierras de Casado y cuando la gente se desempeñaba en concretar nuevos proyectos de vida –ya había como 60 ganaderos, pequeños comerciantes, oleros etc. – interrumpe la noticia en el pueblo que un nuevo dueño compró las tierras de 400.000 hectáreas, con pueblo incluido. Los nuevos dueños empiezan a presionar e intimidar a la comunidad, expulsan a algunos de sus establecimientos, derrumban algunas casas en el pueblo, cierran los accesos a bosques, chacras y al río. Ante esa situación, la población empezó a movilizarse, hasta lograr recuperar el acceso al rio, el monte y a los campos –espacios elementales para obtener alimentos e ingresos monetarios–. En la actualidad, la población casadeña enfrenta el impulso de volver a la producción agropecuaria y a la pesca para subsistir. En este nuevo escenario, los casadeños procuran redimirse, conformando organizaciones sociales, como la cooperativa, comité de productores, la comisión pro tierra y diversas asociaciones con el objetivo de buscar el bien común para toda la población. Don Tito, que creció junto a su padre en el monte y conoce, desde chiquitito, el ambiente chaqueño, se asentó cerca del riacho Mosquito para dedicarse a la ganadería. Otros, como don Elvio, convirtieron a la pesca en su principal profesión y estudian los ciclos de vientos y de corrientes de agua para alimentar a su familia del río. Su hijo de 12 años aprendió ya los oficios en el río y encuentra una gran satisfacción en él. Don Elvio ya identificó su lugar de vida una vez cuando se expropie la tierra. “Ahí cerca del riacho…, ahí hay muchos peces y también la tierra es buena para plantar para nuestro autoconsumo”. También el marido de ña Morocha se dedica a la pesca y viaja durante cuatro días de la tema del mes semana río abajo. Mientras tanto, ña Morocha permanece en su hogar y trabaja la tierra conjuntamente con otras mujeres. Es una mujer fuerte que incentiva a las demás a plantar para vivir y vende, con una gran sonrisa en la cara, sus productos en la feria que se realiza periódicamente en el ex hotel de Casado. Otros eligieron a la agricultura como fuente para alimentar a su familia y algunos descubren en esa profesión una nueva perspectiva de vida. Así, don Noguera descubrió también un sentimiento de libertad y autonomía que desconocía en su vida anterior como empleado. Con esa alegría, motiva a la gente a trabajar la tierra. Ña Esther, cuya familia siempre vivía de la agricultura en un banco río abajo, transmitió sus conocimientos a sus hijos. Quedando temprano viuda, ella peleó la vida para dar de comer a sus hijos. “También las mujeres somos valiosas en esa vida”, dice ella y así enfrentó, como tantas otras mujeres en Paraguay, la cotidianidad de alimentar y educar a sus hijos. Esa es la dignidad del pueblo casadeño, la dignidad que le otorga el trabajo –la gente no quiere limosnas– y el profundo sentimiento de arraigo a su tierra. “¿Para qué me voy a ir? ¿Y a dónde?”, dice ña China, una anciana de 80 años y como ella piensan muchos, “aquí están enterrados mis abuelos/as, mis padre y madre. Aquí es mi lugar y aquí me quiero morir”. La tierra –la de sus antepasados, de ella como de las generaciones futuras– es su fuente de vida. Perder la tierra es perder la identidad y la memoria. Perder la tierra es perder la vida y el futuro. 1 En la década del 30 grandes huelgas sacudían las fábricas tanineras en todo el Alto Paraguay. Nº 313 - Abril 2011 17 Puerto Casado: etapas de la larga lucha por la tierra José Nicolás Morínigo Alcaraz* En el año 1885 el Gobierno de Bernardino Caballero inició la venta de tierras públicas. Gran parte de las tierras del Chaco fue adquirida por Carlos Casado del Alisal, que sustituyó la presencia del Estado y con ello permitió un progresivo debilitamiento en el norte del Chaco, que debe corregirse. Periódicamente nos recuerdan que el tema Casado, no puede ni debe pasar al olvido. Esta tarea fundamental la realiza la antropóloga Regina Krestchmer1, para quien la historia de Casado es una larga lucha del pueblo, por la tierra. Pudieron cambiar los actores, los que analizan el tema y el tiempo histórico, pero la persistencia de sus legítimos dueños no pasa ni pasará. El pueblo de Puerto Casado sigue “entre la crisis social y la lucha por la soberanía”. Con una identidad que no es solamente obra de un “aquí y ahora” porque se integra a las luchas del pasado que forman parte de la memoria colectiva de un pueblo que garantiza la continuidad de su propio arraigo. Cuando en el Senado se estudiaba la ley que dejaba sin efecto la Ley Nº 2730, que expropiaba 52.000.000 hectáreas en el lejano Puerto Casado, expresé que en 6 meses estábamos cambiando una ley que fue sancionada por el Poder Legislativo y promulgada por el Poder Ejecutivo. Con ese acto solo expresábamos la inestabilidad en las decisiones del Estado paraguayo. * Ex senador nacional. 18 tema del mes Por eso, es de fundamental importancia analizar la historia y estudiar el proceso por el que atravesaron Puerto Casado y su población, a través de seis etapas que nos brinda la lucha por la tierra y el arraigo de la población en las tierras de Puerto Casado. 1ª etapa: La compra fraudulenta de la tierra, 1885 – 1899 Puerto Casado se inicia con la compra ilegal de la tierra en el año 1885 que establecía que “Ningún interesado podrá adquirir del Estado en cada zona del Chaco, más de un lote por sí ni por interpósita persona”. El Equipo Nacional de Misiones de la Conferencia Episcopal Paraguaya en el año 1986 publicó un relatorio elaborado por Gladis Casaccia y Mirna Vázquez, con la colaboración de María José Rolón.2 Se encuentra en el documento denominado “La lucha por la tierra. En defensa de la vida. El pueblo Maskoy frente a Carlos Casado SA”. En ese documento se expresa que investigaciones realizadas en los archivos públicos han permitido localizar la documentación referida a 2.879 leguas cuadradas adquiridas por Carlos Casado del Alisal. Se realizó a través de 28 escrituras públicas: dos de ellas a través de compras directas al Estado paraguayo –135 leguas cuadradas–,15 escrituras a través de intermediarios directos, siendo Casado el segundo comprador –1.644 leguas cuadradas– y 11 escrituras a través de dos intermediaciones , siendo Casado el tercer comprador –1.100 leguas cuadradas–. No hay dudas de que el punto de partida del problema de Casado es la compra fraudulenta de tierras del Estado realizada por Carlos Casado del Alisal, que en 1865 en Santa Fe fundó el Banco Casado que luego fue vendido al Banco de Londres. tanineras, que oscilaban de 1.000 a 2.000 habitantes estables. Estos centros poblacionales crecieron vegetativamente y con la llegada de nuevos migrantes para el trabajo en las tanineras. Se impone una economía de enclave, que establecía vínculos directos con el mercado internacional y controlaba las relaciones sociales en el puerto, que estaban condicionadas por los cambios coyunturales de los precios del tanino, en el mercado. No había municipio y la empresa asumía el control de la zona. El comercio estaba restringido y si bien es cierto que la fábrica producía energía eléctrica, existían guardias que recorrían las calles para evitar un uso que ellos consideraban imprudente, aunque casualmente ellos se encontraban al margen de esa norma. Las casas hasta ahora tienen una parte de la puerta de entrada cubierta con tejido metálico; así, si se utilizaba la luz ésta se filtraba y el guardia obligaba al usuario a que lo apague. La empresa taninera tenía su almacén y los que trabajaban en la fábrica obtenían como adelanto unos vales, que Rubén Domínguez, compositor y ejecutor de guitarra y habitante de esas zonas en su infancia, lo denominó Vale Morotî. El vale entregado por la empresa podía ser cambiado por bienes de consumo, en un transacción en donde unos aportaban el sudor del trabajo y el otro el negocio, de la intermediación, como consecuencia del control y de la distancia. La primera etapa es la antesala de lo que será la lucha por la tierra en Puerto Casado. La empresa Casado también estableció extensas tierras dedicadas a la explotación ganadera, que si bien era importante no podía sustituir a la relevancia económica de la fábrica. Solo a partir de 1936 el Gobierno de Rafael Franco declaró Puerto Libre a Puerto Casado SA. A partir de entonces se podía entrar y salir libremente. Fue la primera medida de una presencia real del Estado paraguayo. 2ª etapa: La instalación de la fábrica de extracto de quebracho (tanino) y la creación de establecimientos ganaderos, 1889-1976 En esta etapa se establecen las poblaciones 3ª etapa: La creación del Distrito de La Victoria y la Municipalidad, 1976-1984 Por Ley 619 del 17 de diciembre se crearon el Distrito de La Victoria y una Municipalidad de tercera categoría. El distrito se crea no como Nº 313 - Abril 2011 19 consecuencia de una donación como estamos acostumbrados a escuchar o leer. La cesión de las tierras fue como consecuencia de una compensación entre la empresa, que así pagó los tributos que debía al Estado paraguayo. Después de más de medio siglo el Estado y la nación que antes defendieron esas tierras, por fin establecían una institución concreta que daba sentido y realidad al Estado. La Empresa Casado SA como consecuencia de la caída del tanino y sobre todo por el informe realizado por el Instituto de Bienestar Rural que en el año 1977 expresaba a través de un documento: “La empresa Carlos Casado es el más grande latifundio improductivo de la República del Paraguay, constituyéndose en una traba para el desarrollo económico y social de la región Occidental”.3 Sin embargo, el Estado seguía y sigue ausente como impulsor de la población casadeña que en la guerra fratricida con Bolivia fue bombardeada por aviones de ese país, “y aún ahora los nombres borrosos de los muertos (en la guerra) están ahí, en la inmutable torre de la iglesia, desde donde se divisa el viejo pueblo, de calles grises por donde caminaron cientos de soldados y oficiales rumbo al frente de esa guerra entre hermanos, que todos en el presente lo lamentamos”4. El 24 de septiembre de 1984 se entregaron a la Municipalidad 260 ha para asiento del pueblo. Es urgente y necesario investigar a quién ahora pertenecen esas tierras y cómo llegaron a ser sus propietarios. ¿Quién y cómo se hizo la transferencia? Lo importante es conocer que el procedimiento haya sido legítimo y fundado en la ley y que normalice definitivamente esta situación. 4ª etapa: La venta de las tierras de Casado y las dos formas de anunciar la venta que realiza la empresa El 28 de setiembre de 2000 la empresa comunica a sus accionistas que se firmó la escritura de transferencia de las tierras de la sociedad, que incluye los galpones, la ex fábrica, las instalaciones portuarias y los bienes de uso, materiales 20 y repuestos que se encuentran en las fracciones vendidas y la totalidad de la hacienda vacuna y caballar. La venta se realizó por 22.500.000 dólares5 a la secta Moon a través de una empresa denominada Atenil SA. El mismo comunicado que informa sobre la venta señala que el precio de la venta ha generado “una pérdida de 800.000 dólares”. Pero cuando se discutía en el Senado la ley de expropiación el senador Domingo Laíno expresó: “… este documento de la Escribanía Livieres, “actos y contratos civiles y comerciales”… y “en este documento de la Escribanía Livieres solo aparecen 18.124.000 dólares”. En esta primera comunicación se reconoce una pérdida de 800.000 dólares, aunque el ex senador Domingo Laíno viendo el precio que aparece en un documento expresa: “¿Acaso la diferencia de 4.260.000 dólares fue ocasionada por la empresa para evadir tributos?”6. Pero cómo se puede comprender el tema, en este caso en el precio en una relación en donde el aspecto formal y contractual es el que pesa. Pero la segunda comunicación de la venta frente a una parte de la población de Puerto Casado es llamativamente una suerte de negación de los derechos humanos elementales. Dice el tema del mes comprender esta diferencia es no comprender el sentido profundo de la religión y de la ética. Las dos maneras de anunciar la venta de las tierras constituyen dos maneras de comprender el derecho sobre las cosas. El derecho del propietario es total, es una repetición de la concepción del derecho romano. Siglos de historia y vida humana, de trabajo y sufrimiento, pasaron inútilmente para los amos de Puerto Casado. que comunica la venta de las tierras: “les comunico que desde este mismo momento están a cargo del nuevo propietario”. La población de Puerto Casado no tenía derecho a hablar ni manifestarse. Eran simplemente unas sombras humanas, sombras convertidas en pueblo. Pero en este proceso tampoco participan el Estado, ni el Gobierno como su administración. En este lejano pedazo del Paraguay se compran y venden tierras incluida su población. Emergen desde el fondo de la historia para convertirse en realidad, los nuevos siervos de la gleba, siervos que eran vendidos como algo adyacente a la tierra. La dignidad humana en Puerto Casado no existe, solo existen los propietarios, los que no son solo tienen derecho a ser cuando el nuevo propietario se haga cargo de ellos; ahora comprendo muy bien la expresión romana que decía que “lo accesorio sigue a lo principal”. Para Atenil SA que compró las tierras lo mismo que para Casado SA que lo vendió, lo principal eran la tierra y la propiedad sobre ella. Para la Iglesia Católica que está allí acompañando a los casadeños, no solo con sus sermones sino con plena conciencia de su misión, lo principal son los seres humanos. No Nº 313 - Abril 2011 5ª etapa: Marchas, ley de expropiación y sus efectos, Julio 2005-septiembre 2006 La ley de expropiación de las tierras no fue una cesión a una iniciativa de los políticos. Fue producto de la movilización popular con el apoyo decidido de la Parroquia Católica. Allí estaban presentes tanto el padre Martín como el padre Zíslao (salesianos)7 acompañando el proceso emprendido por la mayoría del pueblo casadeño. Ellos tuvieron que enfrentar incomprensiones realizadas con mucha presión, pero se mantuvieron y siguen firmes con la idea que Casado es de los casadeños. La primera marcha de los pobladores de Puerto Casado se realizó durantes seis días. Un sector, compuesto de 450 personas, partió de la escuela Pa’i Puku y en el Km. 140 Estancia Alborada se le unió otro contingente. Juntos los dos grupos suman alrededor de 1.200 personas, hombres adultos y mujeres adultas, jóvenes e incluso niños que caminaron alrededor de 156 kilómetros para demostrar que el apoyo a la causa de los pobladores de Puerto Casado surgía desde adentro. La segunda marcha empezó el 7 de julio de 2006. La ley de expropiación de las tierras de Casado ya fue promulgada pero no se cumplía. Por eso esta segunda marcha, para que se implemente en el plano práctico lo que se establecía en la ley. La tercera marcha se inició el 14 de mayo de 2007 y tenía como finalidad demostrar que el espíritu de los casadeños seguía firme con la fe puesta en que, más temprano o más tarde, las tierras serían de los pobladores de esta zona del Paraguay. 21 La ley sancionada por el Poder Legislativo y promulgada por el Presidente de la República tuvo plena vigencia hasta la derogación de la ley. Muchas personas entraron a ocupar parte de inmueble, ellas tenían pleno derecho a hacerlo y lo hicieron demostrando que era posible en algunas áreas realizar actividades agrícolas. Tuve la suerte de conocer los alrededores de la zona del cerro Galván donde estaban los maizales y la mandioca. El trabajo humano y la naturaleza fueron capaces de demostrar que allí existen posibilidades reales de asentamiento y producción para la vida, además de otras producciones en otros rubros de actividades económicas. 6ª etapa: Ley que deja sin efecto la ley anterior y dona 30.000 ha en dos fracciones separadas y en tierras anegadizas. 2007- hasta este momento La sexta etapa se inicia con la sanción y luego promulgación de la Ley 3294 que dejó a la población de Casado igual a como estaba: con preocupación, dudas y la voluntad de continuar en la lucha. He visto en los últimos periodos una auténtica movilización popular: indígenas, paraguayos y paraguayas descendientes de los que mucho antes habían llegado a Puerto Casado, a otros más jóvenes pero vinculados a la vida de Puerto Casado y muchos niños que no se sienten extraños sino la continuidad del pueblo casadeño. Jurídicamente todo es posible replantear. Este largo proceso se inició violando la ley, y la compra de Carlos Casado se realizó violentando la misma ley que permitía comprar, pero con algunas limitaciones que no fueron consideradas por Carlos Casado. Recuerdo cuando se discutió la Ley 2394, después de meses de no poder asistir al Senado como consecuencia de un grave accidente de ida a un mitin que se hacía por la desaparición de un periodista que después apareció en París, Francia. Llegué al Senado y recorrí sus pasillos en un andador utilizado para estos menesteres. Era el día de discusión en el Senado de la ley que dejaba sin efecto la ley de expropiación. Me 22 senté en mi asiento y desde allí participé para impedir que esta ley retrógrada sea sancionada. Perdimos y frente a esa situación dije algo que ahora vuelvo a repetir: La lucha por la tierra de Casado no terminó. Pasará, no sé si un tiempo corto o largo, pero de algo estoy seguro: los que permitieron la continuidad de Puerto Casado deben ser los dueños de esas tierras. Y es hora de negociar, ahora que todavía es posible. La lucha por la tierra unida a la ausencia del Estado es una realidad sentida y vivida por el pueblo casadeño. Tantas alteraciones a la ley se han realizado a lo largo de este proceso de extrañamiento de la población de las tierras chaqueñas que esta es la primera vez que se hace una donación sin consultar a quienes serán los beneficiarios de la donación. Y toda donación se perfecciona solo cuando el beneficiario lo acepta o de lo contrario las donaciones de deudas tendrán una vigencia que convertirá las obligaciones en una trampa como consecuencia del transcurso del tiempo y las desinteresadas donaciones de bienes con obligaciones incluidas. 1 Kretschmer, Regina: Desarrollo socio-ambiental y comunitario del distrito La Victoria. Departamento Alto Paraguay. Coordinadora. Fotocopiado. Asunción. Noviembre 2010. 2 Equipo Nacional de Misiones: La lucha por la tierra. En defensa de la vida. El pueblo maskoy frente a Casado SA. Relatorio elaborado por Gladis Casaccia y Mirna Vázquez con la colaboración de María José Rolón. Asunción, 1986. 3 Instituto de Bienestar Rural: Gabinete Técnico. Anexo 2. Expediente 2664/ 66. Citado por el senador Domingo Laíno en el libro “Puerto Casado. Verbo e imagen de la dignidad”. Fondec. Asunción, 2006. 4 Morínigo, José Nicolás y Alfonso Olmedo: Puerto Casado. Verbo e imagen de la dignidad. Fondec. Asunción. 2006 5 Nota de Carlos Casado a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires por la cual se comunica que la venta de las tierras de la Empresa Carlos Casado por valor de 22.500.000 dólares. Dice el documento que el precio es al contado y que la venta incluyen los galpones, la ex fábrica, las instalaciones portuarias y los bienes de uso, materiales y repuestos que se encuentran en las fracciones vendidas y la totalidad de la hacienda vacuna y caballar. 6 Morínigo, José N. Alfonso Olmedo: Puerto Casado. Verbo e imagen de la dignidad. Defensa del Proyecto de Ley de expropiación de las tierras de Puerto Casado. Exposición del senador Domingo Laíno. Pág. 57. 7 El padre Martín es español. Párroco de la Iglesia Católica de Puerto Casado desde hace mucho tiempo. El padre Zíslao es un sacerdote polaco que trabaja en Puerto Casado desde hace 32 años. Ambos pertenecen a la congregación salesiana y el trabajo que realizan es el fundamento de una Iglesia que hace una opción práctica por los pobres. tema del mes Acaparamiento de tierras y violación de los derechos humanos: viejos problemas en nuevos escenarios Regina Kretschmer* Casado: acaparamiento de tierras y violación de los derechos humanos Casado es un ejemplo paradigmático que demuestra las contradicciones que genera el actual sistema político y económico –con las dos caras: el desarrollo de unos pocos y la crisis de la población– y, en específico, las múltiples consecuencias del acaparamiento de tierras para la población. Siendo una tierra relativamente virgen, con un medio ambiente poco alterado por la acción humana, las tierras están ubicadas en un lugar estratégico: al lado del río Paraguay, que no solo garantiza el acceso a agua sino también constituye una de las principales vías de transporte en el continente (la Hidrovía). A eso se suma la excelente calidad de la tierra con altos niveles de nutrientes, escasos en el mundo y esenciales para la agricultura. Las medidas de presión de los nuevos “dueños” junto con la inacción del Estado paraguayo imposibilitan la proyección social y económica de su población y ponen en entredicho un derecho humano fundamental: el acceso a la alimentación así como los medios para procurarlos (la tierra fundamentalmente).1 Hay productores en Puerto Casado que pudieran garantizar la seguridad alimentaria (y la soberanía alimentaria) pero se ven afectados por la inseguridad jurídica, el conflicto de tierra, los atropellos de parte de la empresa y la criminalización de los dirigentes sociales, junto a campañas de desprestigio de una parte de la prensa nacional. *Antropóloga y doctorando en Estudios Sociales Agrarios de la Universidad Nacional de Córdoba. Nº 313 - Abril 2011 El Estado comete claramente un acto de violación de derechos humanos al no garantizar la disponibilidad de alimentos o los medios para procurárselos (tierra). El Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC) de las Naciones Unidas, ratificado por el Estado paraguayo, considera en el artículo 11 el derecho humano a la alimentación y lo define de la siguiente manera:“disponibilidad de alimentos en cantidad suficiente y de calidad apropiada para satisfacer las necesidades alimentarias de los individuos; la accesibilidad 23 física y económica universal, incluso de los grupos vulnerables, a alimentos adecuados, libres de sustancias nocivas y aceptables para una cultura determinada; o los medios para procurárselos”. Las Directrices Voluntarias recomiendan a los Estados adoptar una estrategia nacional para la realización progresiva del derecho a una alimentación adecuada basada en los derechos humanos y en el contexto de la seguridad alimentaria nacional como parte de una estrategia nacional general de desarrollo (directriz 3.1). De manera explícita, recomiendan que las estrategias nacionales se ocupen del acceso a los recursos y los mercados (directriz 3.3). Que Casado no es un caso aislado sino la expresión de un problema estructural, demuestra las múltiples denuncias de agresiones sobre las tierras y la expulsión campesina e indígena. Los casos documentados son los ex obreros de la fábrica de Casado que demandan tierras fiscales para su asentamiento (ex Puerto Mihanovich y ex Obraje San Carlos) y comunidades indígenas –antiguos dueños de esas tierras cuyos derechos están respaldados por la Constitución Nacional y diversos convenios internacionales– que son atropelladas (comunidades de Karanday, Puerto María Elena, y Ayoreos en aislamiento voluntario). (Glauser 2009). Esto demuestra, por un lado, la complicidad de organismos estatales con los intereses del agronegocio (venta de tierras fiscales y otorgación de licencias ambientales) y, por otro, la violación de los derechos humanos de la población. Datos de la FAO señalan que Paraguay encabeza los países latinoamericanos con mayor proporción de exportaciones agroalimentarias sobre el total de ventas al exterior (50%) pero también figura entre los cinco países latinoamericanos con las más altas tasas de desnutrición (más de 10% ). 24 El departamento del Alto Paraguay: nuevo objeto de inversión El departamento del Alto Paraguay –una de las últimas áreas silvestres del Paraguay– se ha convertido en los últimos años en una región hacia donde avanza el agronegocio. Con una baja densidad geográfica y una infraestructura pobremente desarrollada, es aislado de los principales centros urbanos y rutas comerciales. La población, marginada socialmente, se concentra principalmente en pequeños pueblos a lo largo del rio Paraguay y en pequeños poblados en el interior del Chaco. Ese departamento, escasamente presente en el imaginario social paraguayo, ha sufrido profundas transformaciones económicas en los últimos diez años. La frontera agraria ha avanzado, desde diferentes direcciones, hacia el Alto Paraguay: desde el Brasil y desde las colonias menonitas. Ambos actores económicos buscan su expansión territorial, impulsada por la creciente demanda mundial de alimentos, y entran en competencia entre sí en la apropiación de nuevas tierras. A eso se suma la Atenil SA, que posee diferentes propiedades a lo largo del río Paraguay, y propietarios de origen uruguayo y norteamericano. El siguiente gráfico visualiza la transformación agraria del Alto Paraguay donde aun coexisten áreas de ganadería extensiva con menor intervención sobre los sistemas ecológicos (color verde), con áreas de cambio del uso de la tierra desde una cobertura vegetal natural hacia la ganadería semi-intensiva (color amarillo). El estudio de Luis Galeano demuestra la intensificación del proceso de extranjerización de las tierras en el departamento del Alto Paraguay: el 34 % de las propiedades de 100 y más hectáreas se encuentra en manos de extranjeros. Varios de esas adquisiciones se realizaron sobre antiguos latifundios y tienen extensiones de 25.000 hasta 50.000 hectáreas.2 A eso se suma la denuncia de tierras malhabidas, documentadas en el informe de Verdad y Justicia, donde, llamativamente, muchos datan de la década del 90. tema del mes Nº 313 - Abril 2011 25 La puesta en valor de esa región ha generado considerables aumentos de precios: “En efecto, de los 40 a 50 dólares que costaba cada hectárea de tierra hace unos cuatro años atrás, hoy la misma dimensión se está cotizando entre 250 a 300 dólares.” (Galeano, Luis, 2010: 28). Actual escenario mundial La tierra se convierte en la actualidad en un privilegiado objeto de especulaciones y de inversiones en un contexto de expansión de la industria alimenticia y de agrocombustible en el marco de una reestructuración económica a nivel mundial.3 A diferencia de épocas anteriores, cuando la inversión en tierras era considerada riesgosa, ahora es clasificada como resistente a la inflación y con escasa volatilidad. La convergencia de una serie de crisis en el año 2008 (financiera, energética y alimentaria) ha configurado nuevos escenarios, con nuevos actores y renovadas estrategias económicas, resultado de la redirección de flujos de capitales financieros en mercados inmobiliarios. Cómo esa crisis ha impactado en las poblaciones demuestra la cantidad de revueltas de hambre a nivel mundial (en 2008 se registraron 80 protestas) y se ha convertido en un factor de inestabilidad política. A partir de esas crisis, nuevos conglomerados agrarios (fusión de diferentes empresas) surgieron; corporaciones alimentarias y el capital financiero, con escasa experiencia en agricultura, se prometen lucrarse con la crisis alimentaria. Por otro lado, hay Estados que invierten en la producción de alimentos en diferentes regiones del mundo, a través de la compra o arriendo de tierras, para garantizar la seguridad alimentaria de su propia población.4 “Los nuevos propietarios agrícolas que emergen hoy son gestores de fondos de capital privados, operadores de fondos especializados en tierras agrícolas, fondos de cobertura, fondos de pensiones, grandes bancos y similares. El ritmo y extensión de su apetito es notable -pero no es sorprendente, dada la presión por recobrarse de la crisis financiera. Si bien no existe infor26 mación de muchas fuentes, miles de millones de dólares se destinan a adquirir tierras con proyectos “de dinero fácil”. Y algunos de estos dólares provienen de fondos de retiro acumulados a través de años de trabajo por parte de profesores, funcionarios civiles y obreros de países como Estados Unidos y el Reino Unido.” 5 Actualmente hay 1,5 millones de hectáreas de tierras cultivadas en el mundo y se estiman reservas de 2,7 millones de hectáreas de tierras.6 ¿Cuáles tierras son el objeto de especulación e inversión? Son tierras cubiertas con monte, sabanas (como el Chaco por ejemplo), territorios indígenas y campesinos, territorio de pastores seminómadas (como en África), tierras de farmers y también latifundios improductivos o con una economía extractiva. El acaparamiento de tierra significa un directo ataque a campesinos, pequeños ganaderos criollos, pescadores e indígenas y sus formas tradicionales de producción, tenencia de tierra y relacionamientos con la naturaleza. Como los modos de producción y consumo están íntimamente ligados a los sistemas sociales y culturales, el acaparamiento de tierra atenta contra la diversidad cultural y social y contra el medio ambiente (Fritz Ibid.). América Latina es considerada como aquel continente con mayores reservas de tierras en el mundo; Brasil encabeza la lista, seguido por Argentina y Paraguay.7 En Paraguay, la India y también Qatar negocian con el Estado el arriendo de tierras o cooperación, las empresas Calyx Agro, CRESUD, CAZENAVE adquirieron tierras en Paraguay.8 Futuros escenarios para Paraguay El acaparamiento de tierras se inscribe en una historia de saqueo de recursos naturales y expulsión de las poblaciones en América Latina, el ritmo y la dimensión en la actualidad son alarmantes y nos colocan ante una serie de problemas y desafíos. En primer lugar, implica una creciente presión de parte de corporaciones, multinacionales tema del mes y del capital financiero sobre las tierras campesinas e indígenas. Organizaciones sociales de todo el mundo temen un fin de la agricultura, y de la soberanía alimentaria, si el proceso de acaparamiento de tierras sigue con el actual ritmo de expansión. Esto, a su vez, acentúa la imposibilidad de los sectores urbanos de acceder a alimentación, por el aumento de sus precios por la exportación de alimentos e insumos para agrocombustibles. Tanto Puerto Casado como las denuncias de las organizaciones sociales de la región Oriental demuestran la conflictividad que ha adquirido la disputa por la tierra y la agudización de la criminalización de las luchas sociales. El auge del acaparamiento de tierras complica aún más las posibilidades de implementar una Reforma Agraria en el país. La expulsión de las poblaciones rurales de sus tierras acentúa el proceso denominado por Mikes Davis “planeta de las villas miserias”, un nuevo fenómeno de urbanización de la pobreza, y la mayoría de la población urbana ya no tiene, y nunca tendrá, posibilidades de insertarse a la economía formal. En segundo lugar, la puesta en valor de la tierra y de los recursos naturales profundizará la actual crisis ecológica y climática, indicios claros de los límites del actual modelo de desarrollo y ritmo de explotación de los recursos naturales. La destrucción del medio ambiente conlleva la destrucción de culturas milenarias. En tercer lugar, aumenta la presión de los actores multinacionales y el capital financiero sobre el Estado de modificar leyes que faciliten la titulación de tierras y su inversión, así como en la otorgación de garantías para los inversores. Brasil y Argentina, donde el proceso de acaparamiento de tierras es más acentuado, demuestran claramente la contradicción entre la presencia de gobiernos progresistas y las orientaciones económicas neo-extractivistas. Aquí cabe preguntarse de qué tipo de democracia podemos hablar si el Estado entrega su soberanía nacional, pierde su función social y como garante de los derechos humanos. Nº 313 - Abril 2011 1 El consumo local no puede ser abastecido por los propios productores, lo que significa que los alimentos deben ser traídos de lugares distantes, encareciendo considerablemente los costos de vida de una población donde la mayoría dispone mensualmente de G. 200.000 por hogar: un litro de leche en caja cuesta G. 6.000, un kilo de mandioca G. 3.000, un kilo de azúcar G. 7.000 y una docena de huevos G. 8.400. 2 Luis Galeano (2010). Las dinámicas en el mercado de la tierra en América Latina. El caso de Paraguay. Informe preliminar. 3 Según el economista del Banco Mundial Deiniger, las propuestas de arriendo y compra de tierras se triplicaron en el año 2008. La organización no-gubernamental GRAIN estima la inversión de US$100 billón para el acaparamiento de tierras. 4 China e India, con un alto crecimiento demográfico, no podrán satisfacer la seguridad alimentaria en un futuro inmediato. Otros Estados, sobre todo del Medio Oriente (Saudi Arabia, Qatar etc.), con escasas superficies de tierra cultivables y de reservas de agua, están invirtiendo en la producción agrícola extraterritorial y arriendan enormes cantidades de tierras en todo el mundo. 5 http://www.grain.org/biodiversidad/?id=467 6 Datos de FAO, citados en Fritz, Thomas (2009): Peak Soil. Berlín. FDCL 7 Ver diversos informes de la organización GRAIN 8 La empresa Casado, que aún posee 310.000 hectáreas en el Chaco, integra tanto Cresud como Cazenave en un emprendimiento de plantación experimental de jatrofa para el agrocombustible. 27 Los pueblos indígenas en la región casadeña y su lucha por la inclusión en la sociedad regional y nacional Enrique Amarilla Ayala* La fuerte proclama del 2008 en la asunción del nuevo gobierno nacional respecto de un cambio radical en la atención a los pueblos indígenas del Paraguay había regenerado sustantivamente la siempre sostenida esperanza de los pueblos indígenas de la región. A 3 años de aquella proclama, a pesar de algunas pocas buenas intenciones que están haciendo presencia en la región, se reafirma la idea de que en Paraguay lo indígena, aunque más visible, es aún profundamente ignorado y/o rechazado por las autoridades como por la propia sociedad nacional. Sin embargo, los pueblos indígenas fortalecidos desde su sabiduría ancestral afrontan decididamente el futuro, exigiendo cada vez con más fuerza la siempre postergada inclusión en igualdad en esta globalizada sociedad de exclusión. La centenaria resistencia En el distrito de Puerto Casado habitan actualmente 370 familias, 1.500 personas, del hoy autodenominado pueblo Maskoy1. Sin resaltar una gama de procesos anteriores de fines del siglo XIX, con la irreversible entra*De formación, antropólogo. Vive y trabaja con pueblos y organizaciones indígenas del Chaco paraguayo desde el año 1996. Anteriormente, desde el año 1984 estuvo realizando estudios y trabajos en diferentes áreas con los pueblos Mbya y Ava Guarani de la región Oriental. 28 da del blanco al territorio, los pueblos indígenas del Chaco oriental trataron de convivir con este frente extraño que se había instalado en sus lugares tradicionales. Sin embargo, la presencia blanca no estaba de la misma manera predispuesta a aceptar la de los “otros” vecinos. La empresa y los no indígenas ligados a la misma no venían con la idea de crear una buena vecindad sino, muy lejos de esto, querían en lo posible evitar, eliminar o exiliar a los vecinos indígenas de la zona. En la medida que funcionaban como buenos siervos o semiesclavos se les permitió la presencia en el lugar. De esta manera, la convivencia indígena-no indígena estaría signada por la resistencia indígena a la negación, la presión y/o la violencia sistemática en contra de sus comunidades y su vigente cultura tradicional2. A la violencia se agregaron las nuevas enfermedades, grandes epidemias de viruela y sarampión que arrasaron con comunidades enteras. La tuberculosis también hizo y sigue haciendo estragos. Los forzosos y riesgosos trabajos reservados para los indígenas en las fábricas, obrajes y estancias igualmente acabaron con jóvenes vidas y/o dejaron un buen número de discapacitados con los que las comunidades debieron de responsabilizarse. tema del mes nueva identidad, ajena, pero que les sirve para mantenerse unidos. Hasta hoy recuerdan algunos líderes que el aseguramiento de las 30.000 hectáreas constituía entonces el único seguro de vida posible en la región. Sin embargo, se entendía igualmente que las 30.000 hectáreas nunca les garantizaría la abundancia que anteriormente sostenían con las millones de hectáreas libres que controlaban como territorio. Tuvo que pasar más de medio siglo para que la Iglesia Católica, siempre ligada a la empresa, asumiera mayor compromiso con la terrible realidad que vivían los pueblos indígenas. En la década de 1970 se asume con mayor firmeza y protagonismo la defensa de la población indígena ligada al territorio controlado por la empresa, ante la iniciativa de un grupo de líderes. Desde entonces, también no cesa la lucha de los líderes que se iban sucediendo, para reivindicar finalmente un espacio propio en el tradicional territorio donde intentar preservarse y desarrollarse con identidad y dignidad3. Las 30.000 hectáreas y la lucha por la autonomía El logro del aseguramiento de las 30.000 hectáreas, en el año 1986, a favor de la población indígena constituyó un verdadero salto en su continuo intento de liberarse del oprobioso sistema esclavista y racista que la empresa Casado había sostenido casi un siglo. Tambaleando entre errores y aciertos pudieron superar todo tipo de presiones, violencia y llegar hoy a celebrar con mucho orgullo y dignidad 25 años de haber regresado a sus tierras ancestrales y sostenerse en relativa libertad como grupo con una Nº 313 - Abril 2011 De esta manera, desde la vuelta al territorio asegurado han buscado amigos en el propio entorno regional como en Asunción, históricamente sede y centro de poder, para emprender, además de los tradicionales, nuevos caminos con lo que asegurar su existencia física como cultural4. La gente de la Iglesia Católica, en quienes depositan casi exclusivamente su confianza, fue la que más procuró al lado de ellos. Desde la religión, la educación, la salud y otros ámbitos han trabajado junto con los líderes y miembros de las comunidades en constituir un camino propio de organización y desarrollo o sostenimiento material como cultural. Se ha procurado encontrar seguridad alimentaria, buena educación, buena salud, buena vecindad con los no indígenas, pero no es posible hasta ahora. Los líderes y dirigentes indígenas asumen sus limitaciones, sus discapacidades, pero sobre todo resaltan las malas y en algunos casos mal intencionadas intervenciones oficiales como privadas que desde fuera se suceden en el proceso de las comunidades. Han pasado ONGs, operadores políticos, algunas instituciones del Gobierno tanto central como del municipal y departamental de la zona, pero en la memoria no quedan sino pequeños refilones de buenos recuerdos y mucho de frustración y desesperanza por los históricos desvíos de fondos, promesas incumplidas, imposición de insostenibles modelos ajenos de organización, de producción, de aseguramiento de agua sin muchos resultados más que conflictos internos. Esta experiencia repetida ha afirmado la idea que sin presión y monitoreo permanente por parte de los líderes hacia las acciones externas no es posible ni sostenible ningún emprendimiento. 29 Las expectativas de la gente. La tranquilidad deseada La palabra que normalmente utilizan los pueblos indígenas chaqueños para referirse a una situación de bienestar material y psicosocial es la de tranquilidad. Con esto hoy hablan de la seguridad en el territorio amplio y libre, en la producción, en el trabajo y alimento seguro, en el espacio económico cultural, en la educación y salud integral (formal y no formal, ajena y tradicional), en la espiritualidad sostenida, en el equilibrio parental y comunitario, en la relación de amistad y reciprocidad con los vecinos indígenas o no indígenas (particulares y oficiales). La primera condición para tener “tranquilidad” es contar con su territorio donde pueden desarrollar libremente su vida sin presiones ni interferencias ajenas, lo que no significa aislarse. Una solicitud urgente que tienen los líderes es la de completar el deslinde de las 30.113 hectáreas aseguradas, también la de proveer una copia del título de dicha superficie a los líderes de cada aldea o comunidad miembro. Por otro lado, el actual territorio asegurado, además de desactualizado con el mínimo requerido por ley, 100 ha por familia, es insuficiente para sostener la propia sobrevivencia, menos aún la tradición cultural. Una actualización sobre el mínimo legal (100 ha x 400 familias) requiere de una ampliación de al menos 10.000 ha. Una actualización más acorde con el principio constitucional de “otorgar tierras en cantidad y calidad suficientes para el desarrollo de sus formas peculiares de vida” supone la ampliación con al menos 50.000 ha más. De no ser posible la ampliación es necesario establecer alguna forma de territorialidad compartida con los vecinos criollos y propietarios extranjeros, de manera que los pueblos indígenas no queden definitivamente privados del acceso a y uso tradicional de sus lugares tradicionales que hoy están en posesión o propiedad de los vecinos criollos y/o “empresas” extranjeras. La libre determinación es el otro elemento determinante de la situación de tranquilidad. Esto se desarrolla sólo fuera de la presión o a través de una relación más horizontal con los vecinos no indígenas y el Estado. No se niega ni reniega la 30 presencia de los vecinos no indígenas, misioneros, políticos, autoridades, etc., pero se necesitan respeto y reconocimiento de su identidad y su cultura específica. Aquí es donde debe guardarse un respeto religioso y una profundización más amplia y más práctica o real del derecho a la consulta previa, libre e informada que se debe a las comunidades en cualquier iniciativa privada y oficial que las pueda afectar. Aunque desde el año 93 el Paraguay ha ratificado el Convenio 169 de la OIT, hasta hoy siguen la discusión y la lucha por hacer efectivo el derecho a la consulta y participación de los pueblos indígenas en iniciativas que los afecten. Hoy se proclama abiertamente desde el propio Gobierno central este derecho, pero en su aplicación está aún bastante lejos de efectivizarse y consolidarse. En este sentido, es muy importante que las comunidades tengan y consoliden sus espacios de encuentros para celebrar, para reflexionar y para decidir sobre su futuro propiamente. La organización intercomunitaria del departamento (Organización del Pueblo Maskoy del Alto Paraguay) puede ser el canal para promover y facilitar estos espacios. Es necesario recordar que la consulta previa, libre e informada no se reduce a la presentación de propuestas en asambleas comunitarias y la apurada aceptación o rechazo. Se requiere de un proceso interno de reflexión, discusión y decisión que nunca se reduce a la asamblea comunitaria. Por otro lado, se requiere de un cambio radical de enfoque de las instituciones de manera que desde el diseño de propuestas, programas o planes en las comunidades se inicie con las propias comunidades y con sus propios mecanismos de participación y decisión. La libertad en el territorio posibilita a la manera propia acceder a los recursos necesarios para la alimentación de la familia y para las fiestas comunitarias. La espiritualidad se fortalece en el relacionamiento armónico con los dueños de la naturaleza, seres bien reales en la cultura como lo es actualmente el Dios cristiano, que funciona como deidad superior pero no niega dichas deidades de la naturaleza propias de la espiritualidad tradicional. Vivir libremente como grupos la cultura tradicional con algunos nuevos elementos tanto materiales como ideológicos del tema del mes cristianismo y/o cultura occidental es una razón más de la lucha cotidiana de la gente. Actualmente, alguno que otro habla de la necesidad de nuevas fuentes de trabajo, pero de hecho existen profesiones u ocupaciones que desde los inicios de Puerto Casado desarrollan ya como parte de su tradición, por ejemplo, la ganadería mayor y menor, y la agricultura. También algunos sueñan con las nuevas profesiones de enfermero/a, médico/a, agrónomo/a, profesor/a, etc.; pero el común sueña con tener recursos seguros en el monte, la chacra, el río, etc., y/o un trabajo más seguro, para sostener sus familias y tener algo más de comodidad en sus hogares. Existen muchos adultos que trabajaron en las fábricas como soldadores, carpinteros, mecánicos, etc., pero no tienen la infraestructura necesaria para desarrollarse en sus oficios. La escuela que se tiene es extremadamente ajena a la realidad chaqueña y más aún al de la propia historia y cultura de las comunidades indígenas de la región. Debe encontrarse la manera de continuar con el proceso de investigación y revitalización de las lenguas y culturas tradicionales autóctonas de los grupos que conforman estas comunidades, que se había iniciado hacia el año 1996 y quedó cortado hacia el 2000 por disposición del propio MEC. Los riesgos de la agricultura con el cambio climático los conocen, sin embargo, apuestan a tener siempre algún producto de sus propias chacras. Sin embargo, sobre las actividades que por cuenta propia pudieran realizar resalta el de la ganadería. La mayoría ha pasado o vivido en alguna estancia donde aprendió a manejar adecuadamente animales. Lo importante de tener presente cuando se apoya una actividad como ésta es lo que ellos mismos dicen: “Cuesta lo mismo cuidar una sola vaca que cien cabezas y nosotros estamos acostumbrados a manejar miles de animales en las estancias”. Con esto nos dicen que es infructuoso y frustrante para la gente arriesgarse a crecer como ganaderos a partir de una vaca. Sugieren entonces que los proyectos de ganadería no se frustren por el miedo tradicional a que no van a saber manejar y se les dote, consecuentemente, al propio ritmo de Nº 313 - Abril 2011 la gente, de cantidades importantes de animales para que los resultados, a la vez de inmediatos, sean sostenibles. Finalmente, la relación con los vecinos criollos con quienes se mantienen unidos y solidarios en la lucha por la tierra debe ser objeto de diálogos cada vez más profundos y continuos para ir revirtiendo el pasado poco grato en sus relaciones. Es importante discutir más sobre los mutuos prejuicios que a veces oscurecen la relación. Es necesario que en las relaciones primen el respeto y la consideración debidos a las opiniones como expectativas diferenciadas que como grupos culturales diferentes existen y van a seguir existiendo. Así se resume la esperanza de los pueblos indígenas de la región casadeña sobre la que, con o sin Estado, fundamentan su lucha cotidiana. 1 Originariamente son miembros de los pueblos Guaná, Toba Maskoy, Sanapaná, Angaité y algunos pocos de los pueblos Enxet Sur y Enlhet Norte. Están asentados en 6 comunidades dentro de una fracción de 30.113 hectáreas y en un barrio dentro de un predio de 16 hectáreas facilitado por la Iglesia Católica en un extremo del pueblo de Puerto Casado. Estas 16 hectáreas del barrio de Pueblito están en litigio actualmente con la empresa La Victoria de la secta Moon. 2 La resistencia originaria consistía en retirarse y evitar choques violentos. Zulma Suárez en el lanzamiento de libros en idioma Toba en Puerto Casado, en el año 2010, decía con lágrimas en los ojos: “Yo recuerdo de mis padres cuando cuentan que en Pueblito (el barrio obrero indígena del pueblo de Casado) teníamos prohibido usar el idioma y realizar nuestras celebraciones tradicionales. A escondidas la gente tenía que ir en burros o a pie entre 40 y 60 kilómetros a los lugares donde no llegaban los blancos y donde se realizaban clandestinamente nuestras fiestas. Nuestra historia con la empresa es muy triste, pues no sólo el territorio nos lo arrebató, también nuestro idioma y nuestra cultura…”. 3 En los primeros reclamos más generales que hicieron algunos líderes, aunque no se tiene certeza en qué año, se recuerda una criminal celada que el entonces mayor Cirilo Soto, empleado de Casado, emprendió para aniquilar a los principales líderes indígenas de entonces. Recuerda un antiguo dirigente: “… Reunieron a todos los líderes en un depósito del entonces retiro Castilla de la empresa, hoy sitio de la comunidad Castilla. Una vez reunidos, los encerró, acribilló y quemó a todos, junto con el depósito. Sólo dos personas (Cecilio y Noguera), que pudieron saltar por una ventana, pudieron huir al monte. Son los que quedaron para relatar el suceso…” (Carlos Alvarez, Castilla, 2010). Lógicamente, en aquellos tiempos no quedaba opción a la gente más que callarse y tranquilizarse en sus reclamos, pues las autoridades en la zona no eran otras que las de la propia empresa Casado. 4 Los propios criollos casadeños anteriormente rivalizados por diferentes circunstancias y hoy ligados a la lucha por sus tierras entienden, respetan y apoyan mucho más el proceso autónomo que como pueblos indígenas van sosteniendo en sus tierras aseguradas. Falta siempre algo más, pero hay algunos pasos importantes en torno a sostener la buena relación y a apoyarse mutuamente en sus luchas. 31 El Foro Social Mundial… Cristina Coronel Ovelar* He tenido la oportunidad de participar en el Foro Social Mundial; realmente fue una experiencia muy rica e interesante constatar que la lucha es siempre lucha y que una de las maneras de hacerlo es desde la gente, con la gente y para la gente. Ese ha sido uno de los puntos centrales en este Foro Social Mundial. El Foro Social Mundial (FSM) concluyó su última edición en Dakar (Senegal). Unas 50 mil personas (en esto una nunca se puede poner de acuerdo), una cifra muy importante, de organizaciones y movimientos sociales de todo el planeta, más de 123 países a través de sus representantes se dieron cita, en Dakar, del 6 al 11 de febrero, en la Universidad Cheikh Anta Diop, en otros espacios de la capital y en la isla de Gorée1 (es una isla ubicada en África, con una superficie de 17 hectáreas, se encuentra a tres kilómetros frente a Dakar, durante más de tres siglos fue el más importante mercado de esclavos destinado para aprovisionar de ellos a Estados Unidos de América , al Caribe y a Brasil, principalmente en esta isla se estableció el más activo comercio de esclavos), en un proceso/evento que se afirma imprescindible en el marco de la actual crisis sistémica, como espacio de encuentro y de articulación de redes, pero que muestra también sus límites y debilidades. Ha sido un gran impulso para la convergencia de movimientos y luchas del continente. Unas 1.200 actividades fueron programadas y, entre ellas, se ratificó el apoyo a la Carta de Migrantes, reconociendo el derecho de todas las personas a desplazarse, afirmando rotundamente la idea de que el mundo es un solo mundo y todas las personas deben tener los mismos deberes y derechos. Ha sido un espacio vivo de discusión y también de acción El Foro Social Mundial de Dakar se estructuró en torno a tres ejes estratégicos y 12 ejes temáticos: la crítica al capitalismo; luchas y resistencia contra el capitalismo, el imperialismo y la opresión; y construir alternativas democráticas populares. * Miembra del Servicio Paz y Justicia Paraguay (Serpaj-Py). 32 Dignidad y diversidad, Justicia Ambiental, Todos los derechos humanos, Migraciones, Derechos a los saberes y medios, Mundo libre, Justicia Económica, Democracia y participación, internacionales Paz y autodeterminación, África y Diáspora, Pensando el Foro Social Mundial y por último Mundo compartido fueron algunos puntos tocados en el foro. Es importante destacar que en África existen multitud de movimientos sociales que se oponen a las políticas neoliberales y a las nuevas formas de colonización. Sus élites políticas constituyen la principal barrera para el desarrollo en colaboración con las grandes multinacionales, controlando los recursos naturales, permitiendo la existencia de numerosas zonas francas, manejando la información y frenando sus luchas. Esta edición del Foro Social Mundial se llevó a cabo en un contexto innegable del carácter estructural y profundización de la crisis, después de que la última edición tuviese lugar en Belem (Brasil), en enero de 2009, meses después del estallido de la misma. La actual coyuntura pone encima de la mesa la urgencia de espacios que permitan la coordinación de luchas, avanzar en estrategias de acción a escala global y que visualicen que otro mundo es tan necesario como posible. En este Foro ha tenido lugar destacado el análisis de los 50 años de independencia y las luchas por la libertad y la democracia. Las presencias y las intervenciones del presidente de Bolivia Evo Morales y del ex presidente del Brasil Lula han sido referentes importantes para la acción: Si los países de América Latina están desarrollándose en este sentido, ¿por qué los países africanos no? En el Foro se honró la memoria de figuras emblemáticas de África y la Diáspora (líderes de la política, cultura, movimientos sociales, etc.). Se organizaron debates, conferencias, actividades y encuentros diversos de organizaciones, redes y movimientos internacionales. Una caravana de buses fue recorriendo el continente, recogiendo gente, jóvenes especialmente, durante el mes de enero, como antesala de lo que fue el Foro Social. Para África ha sido importantísimo, una oportunidad para el encuentro de movimientos de lucha, para coordinar acciones, debatir propuestas. Hay muchas organizaciones que están trabajando desde hace años, desde las más locales a movimientos regionales e incluNº 313 - Abril 2011 so de colaboración entre los países próximos. El Foro Social Mundial cumplió con el objetivo de mostrarse como un escaparate, una plaza de las alternativas, un punto de encuentro de una gran diversidad política y temática de colectivos, mayoritariamente africanos y muchos europeos. La presencia de América Latina y de Asia, lógicamente, fue más débil. Y ofreció un espacio indispensable para la urgente organización de las resistencias colectivas que tuvo su máxima visualización en las casi cuarenta asambleas de convergencia de grupos, redes y colectivos que se llevaron a cabo y, sobre todo, en la multitudinaria Asamblea de Movimientos Sociales, con más de tres mil asistentes, y que se convirtió en una de las actividades centrales y más visibles del Foro. Una Asamblea que reafirmó su compromiso en el combate contra el capitalismo y que aprobó un calendario de movilización con las fechas centrales del 20 de marzo, como jornada internacional en solidaridad con las revoluciones en el mundo árabe, y el 12 de octubre, como día de acción global contra el capitalismo. Asimismo, la generación de espacios de trabajo y confluencia antes y durante el FSM permitió, también, el encuentro, el debate y la coordinación de redes y organizaciones. Precisamente dentro de la Declaración de la Asamblea de movimientos sociales convergen todas las iniciativas y las luchas que las organizaciones hicieron y lo seguirán haciendo, han marcado el compromiso de seguir luchando y hacer los máximos de los esfuerzos porque el Otro mundo posible sea lo más posible cada día. A través de las luchas donde se puso énfasis en: la lucha contra las trasnacionales, la lucha por la justicia climática y la soberanía alimentaría, la lucha contra la violencia hacia la mujer, la lucha por la paz y contra la guerra, el colonialismo, las ocupaciones y la militarización de nuestros territorios. 1 Wikipedia isla Goree. 33 La lucha por la dignidad indígena en la época de la Independencia Margot Bremer, rscj Época de Civilización y Barbarie La época de la Independencia hace doscientos años fue marcada por el antagonismo de civilización y barbarie, es decir, entre la civilización occidental y las poblaciones autóctonas de Abya Yala, también los esclavos africanos. Sus raíces remontan en nuestro Continente a la época colonial cuando se justificaba las barbaridades de la conquista con la acción civilizatoria frente a los habitantes originarios con culturas y espiritualidades distintas a las de los europeos. Ser diferente fue la causa principal por ser “bárbaro” y ser usado para trabajos inferiores. En su gran mayoría el “indio” fue considerado como medio animal, llevado por instintos, y por tanto sin alma. Con la mirada de un fuerte eurocentrismo, los españoles vieron en el “indio” la antítesis de una persona civilizada. Tal ideología podía sostenerse hasta el momento de la Independencia. Justamente en esta época del siglo XIX, la dicotomía entre civilizado y bárbaro alcanzó su auge que se refleja en la obra del argentino Domingo Faustino Sarmiento, favorecido por la prevalencia de las ideas ilustradas y positivistas que buscaban consolidar su estatus y también por las aspiraciones de la clase burguesa en ascenso. Hasta entonces nunca fueron criticados estos conceptos sino aceptados como inevitables. Bajo estas circunstancias, Sarmiento escribió en 1845, desde su destierro en Chile, un libro con el título Civilización y Barbarie1. Allí intenta demostrar que el verdadero autor de la barbarie es la misma Naturaleza. Parte de un modelo de 34 pensar y creer hombre argentino originariamente sobresaliente y responsabiliza a la naturaleza –sobre todo la Pampa argentina– de su transformación en un bárbaro, el gaucho, que desembocará posteriormente en el caudillo, ejemplificado en la figura del dictador Rosas. Gracias a la concentración urbana, las personas, según Sarmiento, podían acceder a una educación de conocimientos europeos: las ciencias, las humanidades, las artes, la literatura, la historia, etc. De este modo él pensaba crear una sociedad liberal, facilitando la inmigración europea para poblar la inmensa superficie de Argentina, y garantizar de este modo la verdadera civilización. Consentía para este fin la aniquilación de los salvajes, los indios, en los que veía una amenaza de retornar al estado bárbaro. Dr. Francia, Hijo de esta Época Estas ideas de Sarmiento vinieron de Argentina al Paraguay: estaban ya en la atmósfera y por eso encontraron suelo fértil. También en el Paraguay predominaban la cultura y el pensamiento europeos. El Dr. Francia, marcado por esta corriente europea durante sus estudios en Córdoba/Argentina, daba mucha importancia al esquema político de Europa en que todo estuviera centralizado en el Estado y que ése constituyera la matriz del futuro paraguayo. El Estado era en aquel tiempo la Sociedad Política que estaba encima de la nación2. Esto hace sospechar que apuntaría al concepto de una nación uniforme y monocultural. Estas dos corrientes europeas, civilización versus barbarie y la visión de una nación monocultural, dominaban en las políticas de todos los países latinoamericanos que se habían independizado políticamente de Europa, pero no ideológicamente. De allí debemos enfocar la política indigenista de Dr. Francia. Como la gran mayoría de los países latinoamericanos, también Paraguay se apoyó en la utopía de la revolución francesa “Libertad, Igualdad, Fraternidad” y en la Guerra de Independencia de América del Norte para conseguir su propia independencia del régimen colonial. Sin embargo, no se consiguió una unidad en li- Nº 313 - Abril 2011 35 bertad, igualdad y fraternidad entre españoles, mestizos e indígenas, es decir, en la diversidad. Predominaba el concepto de unidad en homogeneidad y uniformidad cultural para formar una nueva nación. No había espacio para “otros” como los indígenas, por ser “incivilizados”, por ser “bárbaros” 3. Dr. Francia y los Indígenas Los pueblos indígenas que podían salvarse de la colonia intentaron luchar por su propia independencia, también en época del Dr. Francia. Entre 1814 y 1816 el Estado paraguayo desató nada más que tres guerras contra los indígenas Mbaya y sus aliados, los Guaná del norte del país. El Dr. Francia, en una correspondencia al general Ibáñez, se expresa como verdadero “hijo de su época” al tildar a aquellos indígenas de “bárbaros y enemigos”, mientras que Ibáñez, en su respuesta, les llama “infieles” y “nuestros invasores”. Francia, marcado por la corriente ideológica de su época, consideraba los valores de la sociedad europea como los mejores y universales. Eran la medida para comparar y juzgar a todas las demás culturas. Con esta visión era imposible apreciar y valorar a culturas diferentes a la occidental. Con esta toma de postura frente a todo lo noeuropeo, nos asombra el texto de un tratado de paz de Dr. Francia con el cacique Calapá’mi, un bárbaro e incivilizado. He aquí dos artículos de dicho documento: Art.1: ”El mencionado cacique ajusta y promete por sí, y por toda la nación y parcialidad de mbayás catibebos, que vivirán todos en adelante en perfecta paz, amistad y buena armonía con el Supremo Dictador de la República del Paraguay y con todos los vecinos, naturales o moradores en los establecimientos de ella, debiendo del mismo modo por parte de la república y del Supremo Jefe de ella, conservarse con ellos la amistad, paz y buena armonía, que se ha ajustado, poniéndose en olvido todo lo pasado, con declaración de que en la parcialidad de expresado Cacique se comprehenden seis caciques menores, que viven incorporados en ella, 36 y son de la misma nación Catibebo……como también las familias guanás Cainoconoes que dependen de presente cacique contratante y le tributan vasallaje”. Art. 6: … participarán obligatoriamente en las expediciones de la República contra cualquier tercera nación….; igualmente si son atacados, las Fuerzas de la República más próximas le protegerán y rechazarán como a una nación amiga que se halla bajo la protección de la república”. El documento habla de “ayuda mutua” en caso de ser atacada una de las dos partes. Indirectamente nos transmite un cacique Calapa’mí, quien se atreve a enfrentarse con soberanía al Jefe Supremo reclamando igualdad de derechos. Esto manifiesta una gran valentía de parte del indígena que juega su propia vida por la vida de su pueblo manifestando una milenaria conciencia de dignidad. Es llamativo que un indígena podía conseguir la denominación de “nación amiga” para su pueblo y que el cacique sea reconocido como “representante de su nación y parcialidad”. Con el término “nación” el otro, el Dictador Supremo, indirectamente pone el pueblo indígena a la altura de la nación paraguaya, manteniendo las diferencias. Por otra parte también es asombroso como un Dr. Francia, enmarcado en las estructuras y los pensamientos de su época, era capaz, romper estas barreras y dar el mismo derecho a uno quien era declarado “bárbaro e incivilizado” por su época. Defensoría India en época del Dr. Francia Vimos que a pesar de la corriente filosófica de aquella época con un concepto monocultural de la nación, que había llevado al Dr. Francia a una política integracionista, predominaba en él todavía más el sentido de justicia e igualdad. Estaba apasionado de formar una nueva nación con ciudadanos responsables. Esto nos demuestra otro documento sobre la Orden del Dictador de que el Cabildo de Asunción nombre anualmente a un cabildante para Defensor de Naturales, advirtiendo “que podrá recaer el señalamiento en cualquiera de los mismos”4 y un año más tarde5 pensar y creer aclara que los administradores de los pueblos de indios “no han tenido ni tienen facultad de sacar a los naturales de sus comunidades para “conchabarse” (conchabar significa contratar a alguien a un trabajo inferior). Esta explicitación hace suponer que el Dr. Francia se había enterado de los abusos a indígenas de algunos funcionarios del Estado y se había indignado de esta herencia colonial. Son dos muestras de reclamos, quejas y denuncias de parte de indígenas que particularmente fueron escuchados y tomados en cuenta por el Dictador Supremo. Conclusión Podemos decir que el Dr. Francia, a pesar de ser influenciado por la corriente filosófica de su época, tenía un gran sentido patriótico, también de justicia e igualdad. Sin embargo, bajo su régimen, conforme a la época, los pueblos indígenas han sido considerados no solamente como bárbaros e incivilizados, sino también como objetos de protección. Es decir, no fueron tratados libres y con derechos de adultos. En un Estado controlado y vigilado era más difícil arriesgarse a rebeliones y levantamientos como en la época colonial. La intervención máxima que podían practicar era presentar quejas y reclamos justificados. Parece que ya no había esperanza entre los indígenas de volver a ser ellos mismos, de existir como pueblo, como nación diferente. En realidad, la Independencia de 1811 había causado más dependencia a los pueblos indígenas que en la época colonial, fueron considerados como un problema para el Estado.6 Hay que destacar en todo eso que no son los Derechos de los Pueblos Indígenas que otorgan el Estado o las NN.UU. lo que va a poner en pie a los pueblos indígenas para re-establecer su autonomía e independencia. Son ellos mismos los que desde su profunda conciencia espiritualpolítica deben asumir la lucha por su independencia, apoyándose en los ejemplos y sueños de sus antepasados de la época colonial hace quinientos años y superar la sombra de la época de Independencia hace doscientos años. Mantener Nº 313 - Abril 2011 la esperanza en volver a ser una nación (en un futuro Estado plurinacional del Paraguay) es una herencia de los antepasados, pero también los paraguayos deben ser herederos de esta misma esperanza. Vale la pena escuchar otra vez las palabras de los antropólogos reunidos en Barbados en 1971, palabras que valen para cada auténtica lucha por la independencia: “Es necesario tener presente que la liberación de las poblaciones indígenas es realizada por ellas mismas, o no es liberación. Cuando elementos ajenos a ellas pretenden representarlas o tomar la dirección de su lucha de liberación, se crea una forma de colonialismo que expropia a las poblaciones indígenas su derecho inalienable a ser protagonistas de su propia lucha”.7 1 Publicó en el diario El Progreso una serie de artículos bajo el título: Vida de Juan Facundo Quiroga y aspecto físico, costumbres y hábitos de la República Argentina, que después se editó como libro. Su intención era elaborar un esquema para denunciar la inestabilidad cultural y política de la Argentina sometida a la dictadura de Juan Manuel Rosas. 2 Antes de 1811 la gente se constituía en una comunidad de conciencias, pero después el Estado les hizo pasar a la conciencia de comunidad, es decir, que a través de la política había llegado a la etapa de nación. 3 Desde 1811 hasta 1981 el Estado paraguayo había intentado incorporar a los pueblos indígenas a la sociedad nacional dentro del concepto de una Nación monocultural y desarrollaba consecuentemente una política integracionista que apuntaba a la asimilación plena del “indio”. 4 Orden del Dr. Francia, 16 de julio 1822, Vol. 235. Num. 11. S. Hist. 5 Aclaración del Dr. Francia, 16 de julio 1823. 6 Solamente hace un par de décadas, el P. Melià proféticamente declaró que, en vez de un problema, ellos serán la solución de nuestros problemas, palabra que se está haciendo verdad en este corto recorrido de tiempo. 7 Declaración de Barbados, citado en: Chase Sardi, Indios y Merco Sur, Asunción 1997, 38. 37 ENTREVISTA Palestina: un libro de crónicas de Mario Casartelli Foto proveída por el entrevistado Blas Brítez* *Periodista de Última Hora y escritor. Publica artículos de crítica literaria en el Correo Semanal. Es colaborador de diversas publicaciones. 38 Cada cierto tiempo (a veces demasiado) escuchamos y leemos noticias que vienen del Medio Oriente. Antes de la primera guerra y la segunda guerras de Irak y la de Afganistán, estuvo Palestina en esas noticias. Siempre está Palestina. Palestina e Israel, casi siempre, están como esos apellidos siameses que impiden separar a Ortega de Gasset. Solo que mientras el apellido del filósofo español no implica conflicto alguno, Palestina e Israel es probablemente el conflicto por antonomasia. En el centro de ese conflicto estuvo el escritor e ilustrador Mario Casartelli. Porque ama la cultura árabe, hay que decirlo, lo que ya lo había llevado a Siria y Líbano. El resultado de un mes de hurgar en tierras semíticas (pues tanto árabes como israelíes descienden del mismísimo tronco racial, aunque parezca una ironía) es el libro Palestina: La llave entre las piedras, en donde reunió crónicas y entrevistas hechas en este país que pelea por su soberanía territorial desde hace más de medio siglo, en medio de mistificaciones, malentendidos y ocultaciones por parte de Occidente. El libro está marcado, obviamente, por la política, por la auscultación de los motivos y las consecuencias de la ocupación israelí de territorios palestinos. Pero también por la descripción cultural de un país y una región llenos de riquezas. Casartelli contesta a mis preguntas desde Lima, Perú, a donde fue a presentar hace unos meses, justamente, su libro sobre Palestina. Pero sus conocimientos sobre la región hicieron también que fuera invitado como uno de los 25 expertos de América Latina y el Caribe a la reunión regional de la ONU que se desarrolló en Montevideo, Uruguay, los pasados 29 y 30 de marzo. –Uno tiene la impresión, por más que se sabe que has estado antes en Siria y Líbano y conoces bastante bien el mundo árabe, que este libro se fue haciendo a partir de cierta reserva o inocencia hacia lo que es realmente Palestina. ¿Adquiriste verdades y disipaste dudas en este viaje y con estas crónicas? –Líbano y Siria fueron los primeros países árabes que he visitado. Hasta entonces, era un mundo realmente desconocido, en todo sentido, para mí, limitado como está a las manipu- arte y letras ladas informaciones que, como la mayoría de los paraguayos, recibía a través de los medios de comunicación, generalmente desconocedores también de la situación árabe, sobre todo de los palestinos. En aquella primera experiencia escribí para la prensa lo poco que mi visión de entonces pudo recoger. Pero allí se despertó mi curiosidad. Y comencé a buscar informaciones más confiables. En Beirut visité Sabra y Chatila, donde en 1982 fueron masacrados 3.000 refugiados palestinos por fuerzas de la falange libanesa en contubernio con soldados israelíes. Y ese hecho de haber estado en Medio Oriente y tener las antenas alertas ya me proporcionó algunas herramientas para indagar con mayor profundidad. Fue, evidentemente, la antesala de lo que vendría después. Luego surgió la propuesta de viajar Palestina. Y sentí el peso de una enorme responsabilidad al aceptar la invitación. Desde ese momento no cesé de hurgar, auscultar, indagar, reflexionar sobre el caso Palestina. Una cosa es informarse a través de lecturas y otra visitar el lugar de los hechos y conversar con los protagonistas. Y sucedió lo que dices: la suma de previos conocimientos y experiencias in situ me permitió sopesar, confrontar y arribar a conclusiones como a las que llego en el libro. Disipando dudas alcancé ciertas verdades o, mejor dicho, reflejos más fidedignos de la realidad. –¿Qué significa el título del libro? –Las llaves y las piedras constituyen símbolos especiales en la Palestina árabe. Toda la geografía es pétrea. Y la primera intifada (levantamiento) de los fedayines (combatientes) fue en 1987, cuando los árabes enfrentaron con piedras a los tanques y soldados israelíes, después de que cuatro civiles palestinos fueran asesinados por aquellos militares. La segunda intifada fue en el 2000, cuando Ariel Sharon se paró en la explanada de la mezquita de Jerusalén. El hecho fue considerado una provocación, puesto que los árabes de extramuros no pueden visitar su templo y Sharon lo hizo deliberadamente, sabiendo a qué conduciría todo eso. Fue una de sus tantas estrategias para boicotear los intentos de paz entre ambos pueblos. Respecto a las llaves hay una marcha que, Nº 313 - Abril 2011 desde 1948, realizan los árabes cada 15 de mayo. La misma consiste en una caminata silenciosa en la que cada marchante porta un pequeño adminículo: las llaves que fueron de sus casas que fueron derrumbadas por medio del terrorismo israelí. Se le denomina la marcha de Al Nakba, es decir, La Catástrofe. –¿Cómo se explicaría rápida y sencillamente, si eso es posible, este conflicto en Oriente Medio? –Es difícil explicar con sencillez algo tan complejo, pero te resumiría en que Palestina es una zona geoestratégica codiciada por el imperialismo norteamericano, que está política y económicamente ligada a los intereses de los sionistas, es decir, la ultraderecha de los israelíes. Y es sabido que el lobby económico de los grupos sionistas de los Estados Unidos es poderosísimo, cuyos fondos de miles de miles de dólares anuales son proporcionados para seguir pertrechando a Israel con los más sofisticados armamentos del mundo. Una base en Israel permite el control de Medio Oriente, del mismo modo que una base en Colombia para ejercer la vigilancia en América Latina. –Una nueva realidad es el muro erigido por Israel. ¿Cómo es percibido por los palestinos? –El muro es una suerte de espejo de la cotidianidad de los palestinos. Hay que estar allí para sentir toda su presencia ominosa. Torres de control y murallas de hormigón, de 6 hasta 9 metros de altura, que corcovean como una cobra en todo el territorio, encerrando deliberadamente pueblos enteros, como el caso de Qalquilya, cuyos cultivos se inundan o secan por la pared que la encierra, contando ahora solamente con un fino pasaje de salida compuesta por dos checkpoints (puntos de control) donde soldados israelíes deciden en qué horarios permitir o no la entrada o salida. Hay zonas a las que, antes del muro, los granjeros palestinos llegaban en diez minutos. Ahora, para alcanzar el mismo punto pueden demorar dos horas o más. Y siempre rodeados de colonias judías que el gobierno de Israel sigue construyendo en desmedro del derrumbe de casas, plantaciones y libertad de 39 movimiento de los palestinos árabes. El agua potable, las señales de comunicación, el espacio aéreo, el comercio, la electricidad, incluso la lista de quiénes pueden o no permanecer en Palestina están bajo control israelí. A esto se suman las continuas humillaciones. Psicológicamente, se percibe en la población palestina sólo impotencia, rabia y cólera. Y una desesperación que suele arrojar a muchos de ellos a la acción kamikaze, suicida. No es para justificar tales reacciones, pero yo los comprendo. Y es imposible no sentir dolor antes estas cosas. –Has visitado medios de comunicación y entrevistado periodistas. ¿Cómo es el ejercicio del periodismo allá? –En Líbano tiene ciertos perfiles parecidos a los que abundan en nuestros países, con diarios que pertenecen a grupos de empresarios más interesados en manejos de sus intereses que en los aspectos sociales. Menos mal que en todo lugar hay siempre periodistas capaces de sobrellevar esas cosas, como un juego de ajedrez, dando pasos hacia atrás, para dar saltos mayores. En Cisjordania, el diario Al Haiat es de algún modo vocero del grupo Al-Fatah (herederos políticos de Arafat), es decir, de la Autoridad Palestina, que tiene sus luces y sombras en el forcejeo israelo-palestino. Lastimosamente, los israelíes no permiten a nadie ingresar a Gaza ni salir de ella, donde está el grupo Hamás, que tiene una posición política más radical respecto a Al Fatah. –¿Y las cosas bellas en Palestina? –Cosas bellas hay muchas. Los seres humanos sencillos y afables con los visitantes. El modo en que coexisten fraternamente la religión musulmana y la cristiana; sus plantaciones de olivos (no en vano se jactan de producir el mejor aceite de oliva del mundo); una cultura con perfiles bien definidos como cualquier pueblo del mundo; la poesía de Mahmoud Darwish y la capacidad de resistencia, aún dentro del sufrimiento, con la esperanza, inalterable, de alcanzar a convertirse en un Estado Independiente, con proyecciones de paz para todos, a través de una justicia humanista, sin manipulaciones de ninguna índole.