Reflexiones sobre  la  sentencia de la Corte Internacional de Justicia en la disputa marítima entre Perú y Chile

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 Refflexiones
s sobre la sentencia de
d la Co
orte Inte
ernaciona
al de
Jus
sticia en la disputa
d
marítim
ma entrre Perú
ú y Ch
hile...
Tras seis años de
e litigio ante la Corte Inte
ernacional de
e Justicia (CIJ), se conocció la senten
ncia que
pone fin a la disp
puta marítim
ma entre Perú
ú y Chile. Ell objeto de la
a controverssia era la soberanía
sobre
e 37.900 kmss. cuadradoss de espacio
o marítimo y cientos de millones
m
de d
dólares en ne
egocios
pesqu
ueros en tal zona. La de
emanda fue presentada en
e 2008 porr Perú en base a un reclamo de
mayo
o de 1986 (cconocido com
mo “memorá
ándum Baku
ula”) en el cual
c
se asevveraba que el
e límite
maríttimo entre Perú y Chile debía
d
pasar por una líne
ea equidistan
nte que parttiera desde la costa
hacia
a el sur, dessde el límite
e terrestre co
onocido com
mo el Punto de la Conccordia, confo
orme al
Trata
ado de Lima de 1929, dado
d
que loss tratados de
e 1952 y 19
959 referían tan sólo a materia
pesqu
uera. De acu
uerdo al Paccto de Bogotá
á, de 1948, ambos
a
paíse
es aceptaron la jurisdicció
ón de la
CIJ a los efectos de resolver esta
e
controversia.
Cabe
e recordar qu
ue esta disp
puta fue una
a de las consecuencias de la Guerra
a del Pacífic
co, que
enfre
entó a Chile con
c Bolivia y Perú entre 1879 y 1883
3. Este conflicto armado junto con la Guerra
de la Triple Alianzza -que enfre
entó a Argen
ntina, Brasil y Uruguay co
on Paraguayy entre 1864 y 1870fuerron dos de las contiend
das más laccerantes en la historia del
d Cono Su
ur que involucraron
intere
eses económ
micos foráneos. En la Gu
uerra del Pa
acífico, Perú perdió Arica
a y Bolivia la
a región
de Atacama
A
y su
u salida al mar
m (Bolivia demandó
d
en 2013 a Chile
e a los efecttos de negoc
ciar una
salida
a al Océano Pacífico).
Indep
pendienteme
ente del con
ntenido del fallo -que algunos tild
dan de salo
omónico, dad
do que
recon
noció para Perú
P
parte de
el espacio marítimo
m
que
e solicitaba, a la vez que
e ratificó los
s límites
que Chile
C
reclam
maba- es da
able destaca
ar que ambo
os países ha
an (habían) confirmado que lo
respe
etaran, y decclararon que lo cumplirán
n en forma completa y pa
aulatina.
Algun
nos podrían
n pensar qu
ue es inexp
plicable que
e dos paíse
es con exccelentes rela
aciones
econó
ómicas (com
mparten, entrre otros espa
acios, la Alia
anza del Pacífico así co
omo el UNAS
SUR), y
con un
u pasado hiistórico y cultura en común, hayan ne
ecesitado recurrir a un trribunal intern
nacional
para dirimir esta controversia
c
…
Sin embargo,
e
deb
bemos resaltar la volunta
ad manifesta
ada por amb
bos gobierno
os de acatarr el fallo
de la Corte Intern
nacional de JusticiaJ
cuyya jurisdicción es volunta
aria- reafirma
ando de esta
a forma
el vallor de la lega
alidad interna
acional.
Cabe
e destacar essta actitud en
e oposición al comporta
amiento de la
a mayoría de los miemb
bros del
Conssejo de Seg
guridad de la
as Nacioness Unidas y otras poten
ncias, renue
entes a dirim
mir sus
difere
endos a travé
és de la Cortte, órgano prrincipal de ONU.
O
Se no
os presenta como un so
oplo de aire fresco en un
na sociedad internaciona
al sofocada por las
flagra
antes violaciiones al Derrecho Intern
nacional, asíí como por el irrespeto de las norm
mas de
conviivencia más básicas.
Aunq
que algunos concluyan en
e que hay ganadores
g
y perdedores en este fallo, entendem
mos que
los prrincipales be
eneficiados han
h sido el Derecho Internacional y ell futuro de Am
mérica del Sur.
S
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