EDITORIAL

EDITORIAL
La Investigación Clínica
En esta primera edición a cargo de la actual gestión queremos hacer algunas reflexiones
acerca de la investigación científica en general y de la investigación clínica en particular.
La creación del Ministerio de Ciencia Tecnología e Innovación Productiva en diciembre de
2007 priorizó, entre otros objetivos “la creación, mediante el apoyo de políticas que
permitan la generación de conocimiento, tecnologías e innovaciones para dar
respuestas a numerosas demandas tanto sociales como productivas en el sendero
del crecimiento económico con equidad social”. La Disposición 003/10 Ministerio de
Ciencia Tecnología e innovación productiva, también explicita que “No obstante estas u
otras medidas de aliento a la I+D nacional le restaba dar un impulso a las actividades
de innovación en el sendero de crecimiento con equidad social …políticas
horizontales dedicadas al fortalecimiento del sistema científico tecnológico… en
áreas estratégicas para el país. Para ello el MINCyT se abocó al diseño y selección
de tres áreas estratégicas Biotecnología, Nanotecnología y tecnología de la
información y las comunicaciones y cuatro sectores estratégicos Agroindustria,
Energía, Salud y desarrollo social. La biotecnología y/o biomedicina es uno de los
sectores mas legitimados por la sociedad y tiene en la Argentina un desarrollo
relativamente importante”.
Es fundamental destacar que el desarrollo biomédico en nuestra región no es lo
suficientemente importante para encarar proyectos que resuelvan nuestros problemas de
salud, no por falta de recursos humanos y tecnológicos, sino por un defecto de integración
entre las disciplinas competentes en el tema.
Otras investigaciones tales como las referentes al campo de la salud mental deberán
también ser integrados a las disciplinas respectivas.
Este desarrollo impone asociaciones multidisciplinarias, salvando así una barrera que
impide la integración de nuestros grupos de investigación. El proyecto exige la colaboración
interactiva entre instituciones oficiales y académicas, la industria, fundaciones etc.
La falta de políticas científicas que promuevan este desarrollo ha producido una
caída importante en la producción de “ciencia aplicada” durante los últimos 30-40 años.
Entre ellas esta la investigación clínica.
La Secretaria de Ciencia y Técnica de la UBA ha realizado un estudio al respecto
determinando que solo el 2,8% del total de proyectos son de investigación clínica.
En nuestra universidad la situación, aunque no hay estudios al respecto, debe ser
similar. Los investigadores clínicos son muy escasos y siendo la investigación clínica una
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REVISTA DE LA FACULTAD DE MEDICINA - VOL.11 - Nº 1 (2011)
herramienta fundamental en la resolución de problemas de la comunidad se esta proyectando
implementar el programa de residencia-doctorado, cuya finalidad es la formación de un
médico-investigador. Con ello se sintetizan dos actividades, la clínica y la investigación que
permita, al tiempo que brinda ayuda directa a los pacientes, la generación de conocimientos
en lo que se entiende como investigación clínica y que ya se está llevando a cabo en la
UBA. Se desea formar un espíritu crítico e inquisitivo, para reconocer en la actividad
asistencial diaria el objeto de potenciales proyectos de investigación. De allí el nombre del
programa: doble hélice.
Siendo además la investigación clínica un elemento fundamental en el desarrollo de
muchas otras disciplinas científicas tales como la biotecnología o las ciencias humanísticas,
este decanato esta proyectando la forma de articular la investigación clínica con disciplinas
y centros de nuestra facultad, otras unidades académicas y otras universidades nacionales
o extranjeras para intentar resolver de manera concreta los problemas diagnosticados. Las
prioridades están definidas y debemos trabajar en ese sentido para promover en la Facultad
grupos con capacidad de concursar en convocatorias para la captación de recursos que
nos permitan desarrollar nuestros proyectos.
Prof. Dr Juan Carlos Valdez
Secretario de Ciencia y Tecnica
Facultad de Medicina-UNT
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