Liceo Miguel de Cervantes y Saavedra Departamento de Biología Nivel I medio Guía de Contenidos Tercero Medio Plan Común “COMPORTAMIENTO ANIMAL” Las reacciones de los seres vivos hacia otros seres vivos y hacia su entorno están basadas en respuestas instintivas simples o complejas (genéticamente programadas) a los estímulos. Dependiendo de la complejidad del cerebro de los seres vivos, estas respuestas pueden ser modificadas en varios grados por medio del aprendizaje. En general, entre más sencillo, subdesarrollado o inmaduro sea el sistema nervioso del organismo, servirá de base para un repertorio de conductas mucho más simples que aquellas que surgen de un sistema nervioso con mayor grado de desarrollo y madurez. Los aspectos de comportamiento que están bajo control genético han evolucionado mediante selección natural como una adaptación que permite la supervivencia. Se define comportamiento como un “conjunto de acciones (visibles o no) o movimientos que realiza un ser vivo en respuesta a las situaciones del ambiente, para asegurar la sobrevivencia del individuo y de la especie”. Los animales se comportan de maneras muy diversas y con pautas propias de cada especie, por ejemplo, imagina el cuerpo aerodinámico de un delfín cortando el agua y las manipulaciones de una araña para elaborar su tela, ahora imagina que cada uno tiene que realizar actividad del otro. Hasta dentro de la misma especie es posible observar distintos tipos de comportamiento, por ejemplo, algunas gaviotas pueden conseguir comida zambulléndose en el agua para atrapar peces; otras de la misma especie, cazan insectos mientras vuelan. El repertorio de conductas de una especie será siempre ilimitado. Los comportamientos se clasifican en innatos y adquiridos: Comportamiento Innato: Una mosca de la fruta colocada dentro de un tubo cerrado con una fuente de luz en un extremo y oscuridad en el otro, se dirige siempre a la fuente de luz; un bebé humano hambriento, si se le toca al lado de la boca, voltea la cabeza e intentará mamar. Estos son ejemplos de comportamientos innatos o instintivos. El comportamiento innato está programado por los genes y es transmitido de generación en generación. Ya que el comportamiento innato se realiza sin aprendizaje ni experiencias previas, tiende a ser muy estereotipado, lo que significa que se realiza de igual manera cada vez. Dentro del comportamiento innato encontramos los reflejos, los tactismos y los instintos. Tactismos: Los tactismos son movimientos que realiza un ser vivo en respuesta a un factor externo, este puede ser positivo cuando el movimiento se efectúa en dirección del factor externo, o negativo si se aleja de este. Gran parte de los organismos simples, incluidos los protistas unicelulares, son tactismos. Por ejemplo, el protista Euglena es fotosintetizante, pero su clorofila puede ser dañada por una luz intensa. Como es de esperar, la Euglena muestra un tactismo positivo hacia las luces tenues, pero una negativa hacia la luz brillante. Los tactismos se nombran de acuerdo al estimulo, por ejemplo, si el estimulo es luz se denominan fototactismos, si el estimulo es gravedad, se denominan geotactismos. Reflejos: Un reflejo es un movimiento instintivo de una parte del cuerpo. En contraste con los tactismos que requieren de la orientación del cuerpo entero, un reflejo es el movimiento de una parte del cuerpo, como parpadear o retirar la mano de una estufa caliente. Debido a que el cerebro consciente no participa, los reflejos generalmente son rápidos y estereotipados. Por ejemplo, al golpear suavemente la rodilla, se contrae el músculo del muslo provocando que la pierna se levante repentinamente. El “arco – reflejo” es la base funcional de un reflejo y se compone de los siguientes factores: mecanismo de recepción del estímulo (R), vía neuronal aferente o sensitiva (VS), un centro elaborador de señales de respuestas (CE), vía neuronal eferente o motora (VM), mecanismo elaborador de respuesta (E). Instintos: Los instintos son modelos específicos de conducta, el mismo en todos los individuos de una misma especie, que aseguran la realización de una serie de actos necesarios para la sobrevivencia. Son conductas complejas, heredadas que siguen un patrón fijo. Por ejemplo, un canario construye su nido igual que otros canarios, aunque se haya criado en un laboratorio y nunca haya visto construir un nido a otro canario. Lo más sorprendente de este instinto, es que lo hace en la época del año adecuada. ¿Cómo sabe el canario la forma de construir un nido con los materiales adecuados y en el momento propicio para recibir los huevos? La respuesta es por “instinto”, esto es una actividad conductual programada genéticamente, que implica una variada gama de conductas. Comportamiento Adquirido: La supervivencia se incrementa cuando un animal es capaz de modificar su comportamiento con base en la experiencia. Impronta: Algunos modelos de conducta están en la región fronteriza entre el instinto y el aprendizaje, tienen todas las características de instinto, pero requieren memorización. Se refiere a una asociación muy fuerte aprendida durante una etapa particular del desarrollo animal, llamado periodo sensitivo: empiezan poco después de nacer y duran unos pocos días. Por ejemplo, aves como patos, gansos y gallinas aprenden a seguir al animal u objeto que más frecuentemente se encuentran durante el periodo sensitivo. Habituación: Es una disminución en la respuesta a un estímulo repetitivo e inofensivo, es aprender a no responder a un estímulo particular. Esta habilidad para habituarse evita el gasto innecesario de energía y atención del animal hacia un estimulo irrelevante. Por ejemplo, si una Anémona se contrajera cada vez que la tocara un alga marina, gastaría una gran cantidad de energía y su postura retraída evitaría que atrapara alimento. Por ello se habitúa al estímulo repetitivo e inofensivo. Condicionamiento Clásico: Los primeros y más importantes estudios de esta forma de aprendizaje se deben a Iván Pavlov, fisiólogo ruso, quien experimentó con los mecanismos que intervienen en la producción de saliva en la boca del perro. En el cual, sonaba una campana justo antes de proporcionarle el alimento. Luego de varias repeticiones, el perro salivaba únicamente al oír la campana aunque no se le presente el alimento. La campana no es un estimulo específico para la conducta, pero se ha establecido una asociación. Las variaciones en las conductas de los diversos organismos, radican principalmente en la organización que estos tengan en su sistema nervioso, es decir, mientras más complejo es este, mayor repertorio de respuestas podemos encontrar. ¿Qué tipo de animales son más sencillos de acuerdo con la organización y estructura de su sistema nervioso? A continuación se presenta la organización del sistema nervioso de distintos grupos de animales, tanto vertebrados como invertebrados.