Generalidades del Sistema Nervioso. IRRITABILIDAD Es la capacidad de los organismos para responder a los estímulos del medio. Esta se manifiesta de diferentes formas en la escala evolutiva: Tropismos: Son movimientos que experimentan las plantas cuando necesitan adaptarse a condiciones ambientales más favorables. Los movimientos se producen por fenómenos de crecimiento vegetal, con aumento de la masa total de la planta, por lo que, a diferencia de los movimientos que se producen en el reino animal, no pueden deshacerse y son totalmente involuntarios. Se denomina positivo si crece hacia el estímulo y negativo si lo hace en sentido contrario. Los animales también han desarrollado conductas que les permiten adaptarse al medio ambiente. Estas son los tactismos, los reflejos y los instintos. Tactismos: Son un tipo de comportamiento realizado fundamentalmente por animales inferiores, en especial invertebrados. Son innatos, fijos e inevitables. Este movimiento puede implicar acercamiento o alejamiento al estímulo. A diferencia de los tropismos, los tactismos son movimientos rápidos, amplios y que implican traslación del organismo. Reflejo simple: es un mecanismo de respuesta innata e involuntaria frente a un estímulo determinado; por ejemplo, el reflejo rotuliano. Instintos: son reacciones innatas más complejas y elaboradas, en las cuales intervienen varios reflejos. El instinto es específico de los individuos de una misma especie; por ejemplo, las abejas poseen una organización social debido a su instinto. En el ser humano existen el instinto maternal o paternal, el de mamar, el de sobrevivir, etc. Reflejo condicionado: es una relación que se establece entre un estímulo y un refuerzo que implica aprendizaje y participación de la corteza cerebral. Función del sistema nervioso y su relación con el sistema endocrino. Para sobrevivir, los animales requieren mantener dentro de determinados rangos las condiciones de su medio interno, como la temperatura y la presión de la sangre. También necesitan desarrollar comportamientos que les permitan obtener su alimento, defenderse de posibles depredadores y protegerse de ciertas condiciones desfavorables del ambiente (precipitaciones, calor, etc.). Estas y otras actividades importantes para su vida, dependen en gran medida de la eficacia con que los animales reaccionen a los estímulos internos y externos. Para que esta respuesta sea adecuada, el sistema nervioso cumple tres funciones básicas: sensitiva, integradora y motora. • La función sensitiva se refiere a que el sistema nervioso “siente” o “detecta“ estímulos provenientes tanto del interior del organismo como del medio externo. • La función integradora consiste en el “análisis“ de la información captada, proveniente de los estímulos, “almacenar” algunos aspectos de ella y “tomar” decisiones respecto de la acción a seguir. • Finalmente el sistema nervioso “responde” a los estímulos iniciando contracciones musculares o secreciones glandulares, lo cual constituye la función motora. En los animales más complejos, en cuanto a su fisiología y organización estructural, existen hormonas que participan en la regulación de procesos internos, como el control de la concentración de azúcar en la sangre, el desarrollo de caracteres sexuales secundarios, etc. Estas hormonas corresponden a sustancias químicas producidas por glándulas endocrinas (que forman parte del sistema endocrino), que son transportadas por la sangre a diferentes órganos y tejidos del organismo. En estos animales, tanto el sistema nervioso como el sistema endocrino coordinan las respuestas del organismo. Diferencias Entre Sistema Nervioso y Endocrino Organización del sistema nervioso en los animales A medida que se avanza evolutivamente, el sistema nervioso tiende a centralizarse y a especializarse (formación de ganglios con distintas funciones), lo que permite diferenciar y dar una mejor respuesta a los estímulos del ambiente. La calidad de la respuesta depende de la especialización, direccionalidad y el número de interacciones neuronales entre las células nerviosas.