Enriqueta Morales

Anuncio
Enriqueta Morales. (Educadora y enfermera). Nació en la ciudad de Panamá, el 29 de marzo de
1891. Falleció el 10 de noviembre de 1986. Enriqueta Morales hizo sus estudios primarios en el
Colegio de las Hermanas de San Vicente de Colón y en el de las Hermanas Ucrós en Panamá.
Formó parte del Grupo de Mujeres que fueron becadas por el Gobierno Nacional a comienzos de
la República para realizar estudios en Europa. Hizo sus estudios secundarios el Wavre Notre
Dame de Bruselas, donde también recibió formación de: Profesora de jardín de infancia y,
posteriormente, la especialización en enfermería y en Organización de Sociedades de la Cruz
Roja. Enriqueta Morales provenía de un hogar liberal. Hija de Don Eusebio A. Morales, ilustre
político y economista destacado, y de Doña Enriqueta Bermúdez de Morales. En el marco
familiar seis hermanos de los cuales tres eran mujeres. Su estadía en Europa y, como dice Juana
Oller, 'El Ambiente de la Revolución Social' que invadía el Viejo Continente, contribuyeron a
definir sus ideas en pro de reformas de carácter feminista y social. Al terminar estudios en
Europa, Enriqueta pasó un tiempo en Estados Unidos en donde su padre era Embajador. Cuando
regresó a Panamá participó en la Fundación del Centro Feminista Renovación y fue miembro de
la Junta Directiva. Luego formó parte del Partido Nacional Feminista, en el que militó largo e
indeterminado tiempo y de cuya directiva fue miembro en varias ocasiones. Delegada en el
Primer Congreso Feminista de 1923, y en el Congreso Interamericano de Mujeres de 1926,
representando a la Cruz Roja. La lucha por los derechos de los marginados, las mujeres y los
desamparados, ocupó toda su vida, con una dedicación y una tenacidad que resultan admirables.
Octavio Méndez Pereira dijo: Enriqueta Morales trató de resolver con su trabajo los problemas
sociales antes de que en Panamá hubiera una política social, una legislación laboral, y fue la
Precursora de la Acción Social en Panamá. Al regreso de Europa, y durante dos años, dirigió El
jardín de infancia de la Escuela Anexa a la Normal de Institutoras. Después se hizo funcionaria
de la Cruz Roja Nacional, dirigida por Matilde Obarrio de Mallet. Ocupó primero la Secretaría y
después el puesto de Superintendente cuando Mallet se retiró. Desde esta posición pudo trazar su
plan de previsión y mejoramiento social. Con su trabajo le impuso a la institución un desarrollo
que, sin ella, sería impensable, y que es muestra de su enorme capacidad de servicio a los demás,
especialmente a la niñez y a la juventud. Desde la Cruz Roja coordinaba, además, los trabajos de
otras Instituciones de Beneficencia que recibían subsidios estatales. Bajo su dirección se
realizaron los siguientes proyectos: Creación de los Comedores Escolares; Fundación de la
Clínica Prenatal Popular, Fundación de la Primera Clínica Postnatal, Fundación de una Farmacia
Gratuita. Fundó con Amelia Lyons de Alfaro, la Primera Casa Cuna de Panamá, El jardín de
infancia de la Cruz Roja. Fundó, asimismo, el Dispensario y la Clínica para Tuberculosos, el
Asilo de la Infancia, los Programas de Protección a los Pobres de Solemnidad, y se ocupó
también de los enfermos del Leprosorio de Palo Seco. Enriqueta R. Morales como Directora de
Enfermeras del Hospital Santo Tomás coincidió con Arnulfo Arias, cuando fue Director Médico,
y lo enfrentó para impedir que acosara a las Enfermeras. Enriqueta Morales se retiró de la Cruz
Roja en 1940. En los años de la Guerra Mundial de 1941, estuvo en Estados Unidos y prestó sus
servicios como enfermera a las Tropas Aliadas. Durante 15 años fue Cronista Social de El
Tiempo, el Diario de Panamá, y la Estrella de Panamá. A su regreso de Estados Unidos en 1944,
a Enriqueta Morales se le eligió Presidenta de la Federación de Damas de la Acción Católica. En
1945, en la Primera Campaña Electoral en la que participaron mujeres, fue Miembro Destacada
de la Liga Patriótica Femenina. Enriqueta Morales, mujer de arraigados principios cristianos, los
que guiaron todos los actos de su vida, también fue ampliamente liberal, con la flexibilidad y
tolerancia que le permitían relacionarse con gente muy dispar. Su capacidad como organizadora
y empresaria fueron reconocidas por el Profesor Bonstet, de la Universidad de Panamá, quién
dijo que la Cruz Roja era “La única Institución Organizada, llevada con Inteligencia, que cumple
con sus objetivos”. En 1947, el Gobierno Nacional la designó Secretaria del Ministerio de
Previsión Social, Trabajo y Salud Pública, en reconocimiento a su labor. En 1950, con el ascenso
de Arnulfo Arias a la Presidencia, dimitió de su cargo y ya no tuvo ninguna actividad de carácter
público. El Papa Pío XII le concedió la condecoración “Pro Eclesia Et Pontifice”. Los últimos
años de su larga y fructífera vida los pasó apaciblemente en el seno de su familia, cuidando a su
hermana menor, Elena Morales de Morgan, y a sus sobrinos y sobrinos nietos. Como siempre
había hecho, disfrutaba paseando en su automóvil, viajando cuando podía, oyendo música,
viendo buen teatro. (Tomado de: Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. Mujeres que
cambiaron nuestra historia. -- Panamá: Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, 1996. -176 p.). (Actualizado: 25/04/05)
Descargar