Actualización del documento de posición (diciembre de 2009) pdf, 115kb

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1
Weekly epidemiological record
Relevé épidémiologique hebdomadaire
18 december 2009, 84th year / 18 décembre 2009, 84e année
No. 51-52, 2009, 84, 533–540 http://www.who.int/wer
Actualización acerca de las vacunas antirrotavíricas1
Los rotavirus son la causa más común de enfermedades diarreicas graves que aquejan a
los niños pequeños en todo el mundo. Según cálculos efectuados por la OMS en 2004,
cada año mueren 527 000 niños <5 años por infecciones rotavíricas evitables con la
vacuna; en su mayoría, estas defunciones ocurren en los países de ingresos bajos.1 A
nivel internacional se consiguen dos vacunas antirrotavíricas orales a base de virus
atenuados —Rotarix (GlaxoSmithKline Biologicals, Rixensart, Bélgica) y RotaTeq
(Merck & Co. Inc., West Point, Pensilvania, Estados Unidos de América)—; ambas se
consideran inocuas y eficaces para prevenir las enfermedades del tubo digestivo causadas
por los rotavirus. En el documento de posición sobre vacunas antirrotavíricas publicado
en 2007, 1 la OMS recomendaba la inclusión de la vacuna antirrotavírica en los
programas nacionales de vacunación de las regiones donde los datos de eficacia
experimental indicaran que se lograrían repercusiones considerables de salud pública, es
decir, principalmente en las Américas y Europa. Sin embargo, mientras la eficacia real y
la inocuidad no se hubiesen confirmado en todas las regiones, particularmente en Asia y
África, la OMS no estaba preparada para recomendar la inclusión de las vacunas
antirrotavíricas en todos los programas nacionales de vacunación.1
Se han realizado ensayos de vacunas antirrotavíricas en países asiáticos y africanos
clasificados en diferentes estratos de mortalidad en la niñez; también se han efectuado en
países donde el saneamiento es deficiente y donde hay una mortalidad elevada por
enfermedades diarreicas y una prevalencia elevada de infección materna por el VIH. La
vacuna Rotarix se ha evaluado en Malawi y Sudáfrica; la RotaTeq se ha estudiado en
Ghana, Kenya y Malí en África, y en Bangladesh y Viet Nam en Asia.
En abril y octubre de 2009, el Grupo de Expertos en Asesoramiento Estratégico sobre
Inmunización (SAGE) de la OMS examinó la información nueva sobre el poder
inmunógeno y la eficacia experimental de las vacunas antirrotavíricas procedente de
ensayos realizados en África y Asia, así como los datos de vigilancia posterior a la
concesión de la licencia de El Salvador (Rotarix), Nicaragua (RotaTeq) y los Estados
Unidos de América (RotaTeq). 2, 3 El Comité Consultivo Mundial sobre Seguridad de las
Vacunas (GACVS) también ha examinado la inocuidad de estas vacunas. 4, 5 La presente
actualización es una revisión del documento de posición de 20071 y debe leerse
1
2
3
4
5
Véase:
N.o
32,
2007,
pp
285–296.
Véase:
N.o
23,
2009,
pp
220–236.
Véase:
N.o
50,
2009,
pp
517–532.
Véase:
N.o
5,
2009,
pp
37–40.
Véase:
N.o
32,
2009,
pp
325–332.
2
conjuntamente con este. Teniendo en cuenta los nuevos datos de investigación, la OMS
recomienda ahora que todos los lactantes <1 año sean vacunados contra los rotavirus.
Eficacia
experimental
y
eficacia
real
En
julio
de
2008
terminó
un
ensayo
de
grandes
dimensiones
con
asignación
aleatoria,
placebo
y
grupo
testigo
de
la
vacuna
Rotarix
realizado
en
Malawi
(país
con
una
tasa
elevada
de
mortalidad
de
niños
<5
años)
y
Sudáfrica
(país
donde
dicha
tasa
es
intermedia).
La
vacuna
se
administró
junto
con
la
vacuna
antipoliomielítica
oral
(VPO)
y
otras
vacunas
del
Programa
Ampliado
de
Inmunización
(PAI);
no
se
excluyó
a
los
niños
infectados
por
el
VIH
ni
se
restringió
la
lactancia
materna.
Al
cabo
de
un
año
de
seguimiento,
la
eficacia
experimental
de
Rotarix
para
prevenir
la
gastroenteritis
grave
por
rotavirus
fue
de
61,2%
(IC
de
95%,
44‐73%)
en
las
poblaciones
de
estudio
combinadas,
de
76,9%
(IC
de
95%,
56‐88%)
en
Sudáfrica
y
de
49,5%
(IC
de
95%,
19‐68%)
en
Malawi.
A
pesar
de
la
menor
eficacia
experimental
en
este
último
país,
el
número
de
episodios
de
gastroenteritis
grave
evitados
por
la
vacuna
fue
mayor
(3,9
por
100
vacunados)
que
en
Sudáfrica
(2,5
por
100
vacunados),
lo
que
se
explica
por
la
incidencia
más
elevada
de
gastroenteritis
grave
por
rotavirus
en
lactantes
menores
en
Malawi.2
En
los
ensayos
clínicos
realizados
en
países
asiáticos
con
tasas
de
mortalidad
baja
o
intermedia
de
los
niños
<5
años
(China,
Región
Administrativa
Especial
de
Hong
Kong
y
provincia
de
Taiwán;
y
Singapur),
Rotarix
mostró
una
eficacia
combinada
de
96,1%
por
lo
que
hace
a
la
protección
contra
la
gastroenteritis
grave
por
rotavirus.
6
Ya
se
conocen
los
resultados
iniciales
del
estudio
de
RotaTeq,
un
ensayo
de
eficacia
experimental
en
la
fase
III
controlado,
con
doble
ciego,
asignación
aleatoria
y
placebo
que
se
realizó
en
África
y
Asia.
Terminó
en
marzo
de
2009
y
en
él
se
administraron
tres
dosis
de
vacuna
o
placebo
a
lactantes
a
las
6,
10
y
14
semanas
de
edad.
La
finalidad
era
analizar
por
separado
los
resultados
combinados
de
los
sitios
incluidos
en
tres
países
africanos
(Ghana,
Kenya
y
Malí)
y
en
dos
países
asiáticos
(Bangladesh
y
Viet
Nam).
RotaTeq
se
administró
junto
con
las
vacunas
del
PAI,
incluida
la
VPO;
no
se
excluyó
a
los
niños
infectados
por
el
VIH
ni
se
restringió
la
lactancia
materna.
La
eficacia
experimental
de
una
pauta
de
tres
dosis
de
la
vacuna
contra
la
gastroenteritis
grave
por
rotavirus
en
el
primer
año
de
seguimiento
fue
de
64,2%
en
África
(IC
de
95%,
40‐79%)
y
de
51,0%
en
Asia
(IC
de
95%,
13‐73%).7
El
cuadro
1
muestra
que
la
más
alta
eficacia
protectora
contra
la
gastroenteritis
grave
por
rotavirus
se
logró
en
los
grupos
del
estrato
de
mortalidad
más
bajo
(es
decir,
los
países
con
la
tasa
de
mortalidad
más
baja)
para
los
niños
<5
años
(estratos
de
mortalidad
definidos
por
la
OMS).8
Datos
de
observación
de
los
Estados Unidos indicaron que la eficacia real de la vacuna contra la
gastroenteritis
grave
por
rotavirus era de 85-95%. La vigilancia mediante laboratorios centinela demostró un
descenso de la actividad de los rotavirus en este país durante las dos primeras temporadas que siguieron a la
introducción de RotaTeq en 2006. En la temporada 2007-2008, la actividad de los rotavirus comenzó 11 semanas
después que la mediana del inicio en el período 2000-2006, y el número de pruebas positivas fue 64% más bajo
que en el periodo anterior a la vacunación. Aunque el número de pruebas positivas fue un poco mayor y la
temporada de rotavirus fue más polongada en 2008-2009 por comparación con 2007-2008, la actividad de los
rotavirus durante ambas temporadas fue considerablemente menor que en el periodo 2000-2006. Este descenso
también se observó en grupos de edad distintos de los vacunados, lo que aporta pruebas a favor de un posible
efecto protector colectivo.9
6
Ad‐hoc
group
of
experts
on
rotavirus
vaccines.
Detailed
review
paper
on
rotavirus
vaccines.
Ginebra,
Organización
Mundial
de
la
Salud,
2009
(se
puede
consultar
en:
http://www.
who.int/immunization/sage/3_Detailed_Review_Paper_on_Rota_Vaccines_
17_3_2009.pdf;
consultado
en
noviembre
de
2009).
7
Okwo‐Bele
JM.
Report
to
SAGE
on
achievement
of
previous
recommendations
and
progress
highlights.
Ginebra,
Organización
Mundial
de
la
Salud,
2009
(se
puede
consultar
en:
http://www.who.int/immunization/sage/Dir_report_26_Oct_09.pdf;
consultado
en
noviembre
de
2009).
8
World
health
statistics
2009.
Ginebra,
Organización
Mundial
de
la
Salud,
2009
(se
puede
consultar
en:
http://www.who.int/whosis/whostat/EN_WHS09_Full.pdf;
consultado
en
noviembre
de
2009).
9
Reduction
in
rotavirus
after
vaccine
introduction
–
United
States,
2000‐2009.
Morbidity
and
Mortality
Weekly
Report
MMWR
2009,
58;1146–
1149
(Editorial
note).
3
Un
estudio
de
casos
y
testigos
realizado
un
año
después
de
la
introducción
de
la
vacuna
RotaTeq
en
Nicaragua
demostró
una
eficacia
real
de
46%
(IC
de
95%,
18‐64%)
de
una
pauta
de
tres
dosis
de
vacuna
administradas
a
niños
<2
años
contra
una
afección
rotavírica
que
requiriese
hospitalización
o
rehidratación
por
vía
intravenosa;
la
eficacia
real
contra
la
gastroenteritis
grave
por
rotavirus
fue
de
58%
(IC
de
95%,
30‐74%)
y
la
eficacia
real
contra
la
diarrea
muy
intensa
por
rotavirus
fue
de
77%
(IC
de
95%,
39‐92%).10 Un
estudio
de
casos
y
testigos
de
Rotarix
realizado
en
2007‐2008
en
El
Salvador
demostró
una
eficacia
real
global
de
74%
(IC
de
95%,
51‐89%)
contra
la
gastroenteritis
grave
por
rotavirus
y
de
88%
(IC
de
95%,
47‐97%)
contra
la
gastroenteritis
muy
grave
por
rotavirus.6
En
los
países
que
aplican
la
vacuna
contra
la
difteria,
el
tétanos
y
la
tos
ferina
(DTP)
a
los
2,
4
y
6
meses
de
edad,
se
ha
demostrado
la
eficacia
real
de
dos
dosis
de
Rotarix
aplicadas
a
los
2
y
los
4
meses
de
edad
contra
la
gastroenteritis
grave
por
rotavirus.
Sin
embargo,
no
hay
datos
de
la
eficacia
experimental
ni
real
de
la
pauta
de
Rotarix
consistente
en
administrar
dos
dosis
a
las
6
y
10
semanas
de
edad.
En
Sudáfrica,
pero
no
en
Malawi,
hubo
una
reducción
no
significativa
desde
el
punto
de
vista
estadístico
de
la
eficacia
experimental
de
dos
dosis
administradas
a
las
10
y
14
semanas
de
edad
cuando
se
compararon
con
tres
dosis
administradas
a
las
6,
10
y
14
semanas
de
edad
(cuadro
2).
RotaTeq
se
ha
administrado
únicamente
según
una
pauta
de
tres
dosis.
Inocuidad
En
los
ensayos
originales
previos
a
la
concesión
de
la
licencia
de
las
vacunas
antirrotavíricas
el
intervalo
de
edad
para
administrar
la
primera
dosis
de
RotaTeq
fue
entre
las
6
y
12
semanas,
y
para
Rotarix
entre
las
6
y
14
semanas
en
América
Latina
o
entre
las
6
y
15
semanas
en
Europa.
La
edad
máxima
para
la
última
dosis
fueron
las
32
semanas
para
RotaTeq
y
las
24
semanas
y
6
días
para
Rotarix.11,
12
Los
datos
de
Estados
Unidos
posteriores
a
la
concesión
de
la
licencia
para
RotaTeq
no
indican
un
aumento
del
riesgo
de
invaginación
intestinal
si
la
primera
dosis
se
administra
en
el
intervalo
recomendado
de
las
6
a
las
12
semanas.
En
diciembre
de
2008,
el
Comité
Consultivo
Mundial
sobre
Seguridad
de
las
Vacunas
examinó
los
datos
de
inocuidad
de
los
estudios
de
eficacia
experimental
de
fase
III
de
Rotarix
y
RotaTeq,
así
como
los
datos
de
inocuidad
de
la
farmacovigilancia
procedentes
de
Australia,
América
Latina
y
los
Estados
Unidos.
El
Comité
llegó
a
la
conclusión
de
que
estas
vacunas
son
inocuas
y
que
puede
descartarse
con
confianza
el
riesgo
de
invaginación
intestinal
del
orden
del
asociado
con
la
vacuna
antirrotavírica
tetravalente
reagrupada
(RotaShield,
Wyeth
Lederle,
Filadelfia,
PA,
EE.UU.)
puesta
en
el
mercado
con
anterioridad,
pero
no
retirada.5
En
junio
de
2009,
el
Comité
declaró
que
no
hay
datos
que
respalden
directamente
la
hipótesis
de
que
la
administración
de
la
vacuna
antirrotavírica,
incluso
fuera
del
intervalo
de
las
6
a
15
semanas
para
la
primera
dosis
y
las
32
semanas
para
la
segunda,
se
acompaña
de
un
aumento
del
riesgo
de
invaginación
intestinal.5
Se
ha
constatado
que,
en
diversas
circunstancias,
las
vacunas
antirrotavíricas
no
interfieren
significativamente
el
poder
inmunógeno
ni
la
inocuidad
de
la
VPO
ni
otras
vacunas
infantiles.
Sin
embargo,
la
VPO
ejerce
un
efecto
inhibidor
de
la
respuesta
inmunitaria
a
la
primera
dosis
de
la
vacuna
antirrotavírica,
aunque
esta
interferencia
no
persiste
después
de
administrar
las
dosis
siguientes.
La
10
Patel M, et al. Association between pentavalent rotavirus vaccine and severe rotavirus diarrhea among children in Nicaragua. Journal of the
American Medical Association, 2009, 301:2243–2251.
11
Vesikari T et al. Safety and efficacy of a pentavalent human-bovine (WC3) reassortant rotavirus vaccine. New England Journal of Medicine, 2006,
354:23–33.
12
Ruiz-Palacios GM et al. Safety and efficacy of an attenuated vaccine against severe rotavirus gastroenteritis. New England Journal of Medicine, 2006,
354:11–22.
4
vacuna
no
afectó
al
estado
clínico
de
los
lactantes
infectados
por
el
VIH
ni
el
de
los
hijos
de
mujeres
infectadas
por
el
VIH.13
Recomendaciones
de
la
OMS
La
OMS
recomienda
que
las
vacunas
antirrotavíricas
para
lactantes
se
incluyan
en
todos
los
programas
nacionales
de
vacunación.
Dicha
introducción
se
recomienda
enfáticamente
en
los
países
donde
las
defunciones
por
diarrea
representan
≥10%
de
la
mortalidad
de
niños
<5
años.3
La
OMS
recomienda
que
la
primera
dosis
de
RotaTeq
o
Rotarix
se
administre
entre
las
6
y
las
15
semanas
de
edad.
La
edad
máxima
para
administrar
la
última
dosis
de
cualquiera
de
estas
vacunas
deberían
ser
las
32
semanas.
Se
recomienda
administrar
dos
dosis
de
Rotarix
con
la
primera
y
la
segunda
dosis
de
la
vacuna
DTP,
y
no
con
la
segunda
ni
la
tercera.
Con
ello
se
consigue
una
cobertura
máxima
de
inmunización
y
disminuye
la
posibilidad
de
una
administración
tardía
posterior
al
intervalo
de
edad
aprobado.
Este
calendario
se
examinará
a
medida
que
se
obtengan
nuevos
datos.
La
OMS
reitera
que
las
vacunas
antirrotavíricas
constituyen
una
medida
importante
que
puede
usarse
para
disminuir
la
diarrea
grave
causada
por
los
rotavirus
y
la
mortalidad
de
<5
años.
El
uso
de
estas
vacunas
debería
formar
parte
de
una
estrategia
integral
de
control
de
las
enfermedades
diarreicas,
la
cual
debería
incluir,
entre
otras
intervenciones,
el
mejoramiento
de
la
higiene
y
el
saneamiento,
la
administración
de
suplementos
de
zinc,
la
administración
en
la
comunidad
de
la
solución
de
rehidratación
oral
y
el
mejoramiento
general
de
la
atención
de
casos.
14
13
Steele AD et al. Co-administration study in South African infants of a live-attenuated oral human rotavirus vaccine (RIX4414) and poliovirus
vaccines. Vaccine [Publicación electrónica anterior a la versión impresa], 8 September 2008 (doi: 10.1016/j.vaccine.2008.08.034; consultado en
diciembre de 2009).
14
Diarrhoea: why children are still dying and what can be done. Ginebra, UNICEF y Organización Mundial de la Salud, 2009 (se puede consultar en:
http://www.who.int/child_adolescent_health/documents/9789241598415/en/index.html; consultado en noviembre de 2009).
5
Cuadro 1. Eficacia experimental de las vacunas antirrotavíricas según el cuartil de
mortalidad y el país
Estrato de
Cuartil de
Cálculos de la
Países donde se
mortalidad de la
mortalidad de
eficacia
efectuaron los
OMS
niños <años
experimental
estudios
Elevada
El 25% más elevado 50-64%
Ghana, Kenya,
Malawi, Malí
Intermedia
Elevado medio (el
46-72%
Bangladesh,
25% siguiente)
Sudáfrica
Bajo medio (el 25% 72-85%
Viet Nam; países de
siguiente)
la Región de las
Américas
Baja
El 25% más bajo
85-100%
Países de la Región
de las Américas y
de la Región del
Pacífico Occidental
6
Cuadro 2. Eficacia experimental de la vacuna antirrotavírica Rotarix según el
número de dosis administradas, Malawi y Sudáfrica
País
Número de dosis
Malawi y
Sudáfrica
Malawi
administradas
Sudáfrica
combinadasa
2 dosis (a las 10 y
58,7 (36-74)
72,2 (40-88)
49,2 (11-71)
14 semanas)
3 dosis (a las 6, 10 y 63,7 (42-77)
81,5 (55-94)
49,7 (11-72)
14 semanas)
a
Los valores corresponden a eficacia (%) (intervalo de confianza de 95%).
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