ALVARENGA JULIO MANUEL CNACAF Sala II del 26/2/2008 PROCEDIMIENTO PROCEDIMIENTO Determinación de oficio sobre base presunta. Incremento patrimonial no justificado SUMARIOS Más allá de cuál haya sido la causa o título del ingreso de dinero al patrimonio del contribuyente, es decir, el origen de los fondos, considerado por el Fisco Nacional como un incremento, lo cierto es que dicho ingreso se produjo con anterioridad al año del ejercicio fiscalizado. Para determinar de oficio la materia imponible, el Ente Fiscal hizo aplicación de la presunción establecida por el artículo 18, inciso f), de la ley 11683, vigente a la sazón, que establecía: "los incrementos patrimoniales no justificados con más un diez por ciento en concepto de renta dispuesta o consumida en gastos no deducibles, constituyen ganancias netas del ejercicio en que se produzcan a los efectos de la determinación del impuesto a las ganancias". Surge entonces que es condición "sine qua non" de la presunción que el origen del incremento tenga relación directa con el ejercicio en que éste se produjo, lo que no aconteció en la especie, pues el incremento patrimonial no data del año del ejercicio sobre el que se efectuó la determinación del impuesto a las ganancias, sino de una fecha anterior, razón por la cual la presunción no es aplicable al caso TEXTO DEL FALLO Buenos Aires, 26 de febrero de 2008 Y VISTOS: Estos autos, caratulados “DGI (en autos ‘Alvarenga Julio Manuel’) (TF 21596-I) c/.”, y CONSIDERANDO: I. Que el doctor Carlos Manuel Grecco integra la Sala II en los términos de la acordada (CNFed. Cont. Adm.) 1/2008. II. A fojas 6/19, Julio Manuel Alvarenga dedujo recurso de apelación contra la resolución dictada el 27 de enero de 2003 por la señora jefe de la División Técnica Jurídica de la Dirección Regional Posadas de la Dirección General Impositiva por la que se determinó de oficio en forma parcial la materia imponible en el impuesto a las ganancias. A fojas 79/80, el Tribunal Fiscal de la Nación revocó el acto recurrido. Impuso las costas al Fisco Nacional. III. Contra dicho pronunciamiento, el Fisco Nacional dedujo el recurso de revisión y apelación limitada de fojas 84. A fojas 85/96 vta., expresó agravios, cuyo traslado fue contestado por la actora a fojas 98/111 vta. IV. Para resolver como lo hizo, el Tribunal Fiscal de la Nación señaló que la norma aplicada era el artículo 18, inciso f) de la ley 11683, que establece que “...los incrementos patrimoniales no justificados con más un diez por ciento (10%) en concepto de renta dispuesta o consumida en gastos no deducibles, constituyen ganancias netas del ejercicio en se produzcan, a los efectos de la determinación del impuesto a las ganancias”. Indicó que el Fisco Nacional consideró producida tal diferencia patrimonial en el período 2001, en tanto no aceptó la justificación relativa al origen de los fondos ni consideró probado el ingreso de fondos del exterior a nuestro país. www.mrconsultores.com.ar 1 ALVARENGA JULIO MANUEL CNACAF Sala II del 26/2/2008 Consideró que eran razonables, entre otros, los argumentos fiscales relativos a la falta de precisión en cuanto al origen de los fondos y a la cantidad de años pasados desde la supuesta donación hasta el presente, pero que, sin embargo, los fondos que la actora manifestara tener depositados en el Citibank de la Ciudad de Encarnación, República de Paraguay desde 1994 hasta julio de 2001 fueron considerados por la inspección a efectos de ajustar el impuesto a los bienes personales en los años no prescriptos, materia en que el accionante se allanó, con lo que quedó admitido que dichos fondos eran de su propiedad. Señaló la vinculación existente entre el impuesto a las ganancias y el impuesto a los bienes personales, la lógica correspondencia en el retiro de fondos del Paraguay con fecha julio de 2001 para aparecer en los plazos fijos en Argentina en diciembre de 2001 y enero de 2002, y la presunción establecida por la circular (DGI) 264 del 10 de diciembre de 1949. Concluyó que “...si bien la actora no ha podido acreditar la recepción de los fondos por vía de donación, sí ha quedado acreditada que la masa de fondos del corralito tienen relación por monto y tiempo con los fondos depositados en Paraguay, lugar donde probado dicho parentesco se ha producido el incremento patrimonial y no en el año 2001, donde, al parecer el juez administrativo con su decisión ha querido evitar decir que dicha diferencia se remontaría a 1994, con las consecuencias consiguientes”. V. La recurrente se agravia por cuanto el Tribunal Fiscal de la Nación, si bien considera razonables los argumentos que sustentan la postura del Fisco Nacional para aplicar la presunción establecida en el artículo 18, inciso f) de la ley 11683, al momento de decidir soslaya totalmente tales fundamentos y resuelve en base a argumentos endebles y carentes de sustento tanto probatorio como legal, lo que convierte al fallo recurrido en una decisión contradictoria y arbitraria. Reseña los hechos que precedieron la determinación de oficio y cita jurisprudencia que considera aplicable. Señala que por aplicación de lo dispuesto por el artículo 18, inciso f) de la ley 11683 y del artículo 27 del decreto reglamentario de la ley de impuesto a las ganancias, el incremento acaecido en el patrimonio del sujeto pasivo como consecuencia de la existencia de bienes cuyo origen escapó al conocimiento de la Administración, permite presumir la existencia de un incremento no justificado del patrimonio cuyo efecto es colocar la carga de la prueba del origen de esas rentas que no han tributado al interesado. Afirma que la jurisprudencia sobre el tema puede interpretarse en el sentido de que “todo aumento patrimonial operado en determinado ejercicio fiscal, cuyo origen no pueda probárselo debidamente, no es sino renta capitalizada que debe tributar el impuesto”. Alega que “...la actora mediante afirmaciones carentes del mínimo sentido común y absolutamente incongruentes, solamente con dichos, incurriendo en contradicción y sin aportar elemento probatorio alguno que demuestre la real capacidad económica del donante -sus padres-, trata de justificar una supuesta donación de Gs 2.000.000.000,00 con el producido de la venta de un campo que fue enajenado sólo en Gs 18.711.445,00, en el año 1973; dinero que según sus propias manifestaciones ingresó al circuito financiero recién en 1994” (sic). Cita jurisprudencia que considera aplicable y efectúa algunas consideraciones en torno al criterio de la renta mundial. Aduce que en las presentes actuaciones, al no haber sido probado por la actora el origen de los fondos, correspondía sin más reconocer el criterio fiscal en cuanto a la existencia de un incremento patrimonial no justificado. Por último, en relación al ingreso de fondos a nuestro país que la actora sostiene trasladó en forma personal desde Encarnación a Paraná en innumerables oportunidades, sostiene que no se ha www.mrconsultores.com.ar 2 ALVARENGA JULIO MANUEL CNACAF Sala II del 26/2/2008 probado quien portó los fondos, cómo viajó ni cómo ingresó o egresó del país y que no puede dejar de valorarse lo insólito del método elegido para el presunto traslado del dinero, no obstante su legalidad. VI. El Tribunal Fiscal de la Nación analizó las probanzas obrantes en el expediente administrativo, para concluir que: a) resultaba admitido que los fondos cuestionados eran de propiedad del accionante -cfr. consid. IV, párr. 3 del fallo apelado-, y b) de ellas surgía que tales fondos no habían sido ingresados al patrimonio del contribuyente en el 2001 sino en una fecha anterior -cfr. consid. IV, penúltimo párrafo-. Por lo tanto, resolvió revocar el acto recurrido. El Fisco Nacional sostiene que el actor no probó debidamente el origen de los fondos en cuestión y que, por lo tanto, resulta aplicable lo dispuesto por el artículo 18, inciso f) de la ley 11683. Como puede apreciarse, la recurrente disiente con la valoración de la prueba efectuada por el Tribunal Fiscal de la Nación. Los agravios del apelante, en este punto, tal como han sido planteados, remiten a una nueva verificación por parte de esta Cámara, de los elementos de prueba obrantes en las actuaciones y que el tribunal a quo ponderó al resolver revocar el acto por el que se determinó de oficio el impuesto a las ganancias. El análisis de tales elementos no remitiría a la interpretación de las normas aplicables en la especie, sino a la valoración de cuestiones de hecho y prueba, por lo que de conformidad con lo establecido por el artículo 86 de la ley 11683, corresponde estar, en principio, a lo decidido por el Tribunal Fiscal de la Nación. En este orden de ideas, cabe agregar que el recurso consiste en insistir en contrario a lo interpretado por la instancia anterior, y en la falta de prueba que sustente la postura de la parte actora, sin que se acredite que el a quo incurriera en error en la aplicación de las normas, inaplicabilidad de ley o doctrina legal, como así tampoco en arbitrariedad, irrazonabilidad o indefensión, importando la presentación recursiva una mera discrepancia con lo decidido. VII. A mayor abundamiento, cabe apuntar que, a juicio de este tribunal, los agravios del recurrente no pueden prosperar en tanto el fallo recurrido resulta ajustado a derecho. Ello, por cuanto más allá de cual fuera la causa o título del ingreso de dinero al patrimonio del contribuyente -es decir, el origen de los fondos-, considerado por el Fisco Nacional como un incremento no justificado, lo cierto es que dicho ingreso se produjo con anterioridad al año del ejercicio fiscalizado. Para determinar de oficio la materia imponible en el impuesto a las ganancias del señor Manuel Julio Alvarenga, el juez administrativo hizo aplicación de la presunción establecida por el artículo 18, inciso f), vigente a esa época, que establecía: “Los incrementos patrimoniales no justificados con más un diez por ciento en concepto de renta dispuesta o consumida en gastos no deducibles, constituyen ganancias netas del ejercicio en que se produzcan a los efectos de la determinación del impuesto a las ganancias”. Surge con claridad meridiana del propio texto de la norma precedentemente citada, que es condición sine qua non de la presunción señalada que el origen del incremento tenga relación directa con el ejercicio en que éste se produjo. Lo que no aconteció en el “sub lite”, en que el incremento patrimonial no data del mismo año del ejercicio sobre el que se efectuó la determinación del impuesto a las ganancias -2001- sino de una fecha anterior -1994-. Dada la falta de correlación entre la fecha del incremento y el ejercicio cuestionados, la presunción antes señalada no era aplicable al caso y, en consecuencia, la determinación de oficio efectuada sobre tal base resultó improcedente. www.mrconsultores.com.ar 3 ALVARENGA JULIO MANUEL CNACAF Sala II del 26/2/2008 VIII. Por las razones apuntadas, corresponde rechazar la apelación deducida por el Fisco Nacional y confirmar la sentencia recurrida. Con costas de esta instancia a la vencida (art. 68 del CPCC). Así se resuelve. Se deja constancia que la Vocalía V se encuentra vacante. Hágase saber la vigencia de la acordada (CSJN) 4/2007. Regístrese, notifíquese y devuélvase. Carlos M. Grecco - Marta Herrera Fuente: Errepar www.mrconsultores.com.ar 4