2 DE ABRIL: DIA DEL VETERANO DE GUERRA Y DE LOS CAIDOS EN LAS ISLAS MALVINAS. Transitadas por Yamanas, descubiertas por Magallanes, disputadas por franceses, españoles, argentinos e ingleses, nombradas de diez maneras diferentes y ocupadas por las fuerzas armadas argentinas durante un breve lapso en 1982, las Islas Malvinas han sido un histórico territorio de disputa. Este 2 de abril se cumple un nuevo aniversario del día en que el presidente de facto Leopoldo Fortunato Galtieri envió tropas a plantar bandera en las islas, declarándole la guerra a la más poderosa potencia marina de la historia, el imperio británico. Según la historia oficial, la biografía de este rincón del planeta comienza en 1520, durante la famosa expedición alrededor del mundo encabezada por Fernando de Magallanes. Las naves buscaban un punto de cruce hacia el Océano Pacífico y, antes de atravesar el estrecho que posteriormente llevaría su nombre, el célebre navegante divisó las remotas y solitarias islas. A partir de este dato irrebatible, las versiones argentina e inglesa se bifurcan. Según la argentina, aún con anterioridad a este descubrimiento y a la llegada de los conquistadores europeos, las tribus yamanas, (cuyos asentamientos se encontraron en su mayoría en la actual provincia de Tierra del Fuego) habrían visitado las islas regularmente. Las pruebas: entre estos grupos nativos circulaba un resistente animal de preciada piel, el guará, especie de lobo (ya extinto) cuyo hábitat exclusivo eran las islas. Otro punto más de la justificación: por razones geográficas, el territorio de Malvinas integraría la plataforma continental argentina, una de las más extensas y ricas del mundo y fijada por convención internacional. Para los ingleses, tras el paso del navegante John Strong en 1690, numerosos asentamientos ingleses y posteriormente escoceses habrían comenzado a poblar las islas. En 1770, tras la batalla de su Imperio contra los Reinos de España y Francia (que reconocía a España como soberana legítima), estos pobladores habrían sido desalojados. Según tal versión, el descubrimiento de guarás en Tierra del Fuego responde a que esta especie habría accedido al actual territorio argentino a través de un puente terrestre en épocas de menor caudal oceánico y justifica su posición a través de los testimonios de los habitantes de las islas, que se reconocen como ingleses. En 1982, cuando la resistencia social al gobierno de facto que gobernaba desde el año 1976 era ya importante, la Junta Militar llevó adelante lo que muchos investigadores consideran un proyecto de larga data: la sorpresiva recuperación de las islas. El 2 de abril el general Menéndez desembarcaba con tropas del ejército en Puerto Stanley, capturaba a los marines ingleses y tomaba control del territorio. El gobierno de Margaret Thatcher en el Reino Unido, que tampoco gozaba de buena salud política, reaccionó seis días más tarde, con un despliegue militar muy fuerte, doblando en cifras, complejidad y entrenamiento a los equipos militares argentinos. Las autoridades argentinas nunca imaginaron que se concluiría en un conflicto armado y esperaron, en vano, la intervención favorable de los Estados Unidos y la ONU, que nunca se concretó. La improvisación militar, a partir de aquí, fue absoluta. Dos meses y medio después, el 14 de junio, la guerra concluiría con la rendición de las tropas argentinas. Este hecho aceleró la retirada de la Junta militar y el retorno a la vida democrática. En el siguiente extracto del documental “La República Perdida” podemos ver cómo, poco después de la derrota y retirada argentina, cae la dictadura militar. Toda guerra implica la barbarie y la sinrazón humana. Esta certeza es doblemente dolorosa si se considera que el conflicto de Malvinas fue el último y desesperado intento de una dictadura, debilitada desde diferentes frentes, por mantenerse en el poder. El reclamo de soberanía del pueblo argentino sobre las islas sigue vigente. Los errores políticos y militares de los gobernantes responsables no eclipsan el sacrificio y la entrega de quienes han sabido defender, incluso con sus propias vidas, la soberanía nacional frente al avasallamiento británico. Por esa razón, aquí va nuestro más sentido homenaje a todos los veteranos de guerra y caídos en combate en la guerra de Malvinas.