MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES DE FRANCIA En Francia

Anuncio
MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES DE FRANCIA
N.° 18 – Junio de 2012
El futuro de la alta velocidad está encarrilado
En Francia y en el mundo, el transporte
público terrestre se desarrolla. La tendencia se
inclina tanto hacia los trenes de alta velocidad
transfronterizos, como hacia los tranvías y los
trenes regionales. Las innovaciones tecnológicas se
multiplican y los expertos franceses, representados
en gran medida por la sociedad Alstom, gozan de
pleno reconocimiento.
Alstom acaba de presentar el automotor de
gran velocidad (AGV); sin embargo, ya está
El AGV del operador privado italiano NTV
trabajando en un nuevo modelo de tren de alta
velocidad. Este proyecto no tiene aún nombre; por lo tanto, la prensa lo ha bautizado con el nombre de
AGVII. Ya se sabe que podrá alcanzar una velocidad de 400 km/h y que estará disponible en diversas
versiones, con uno o dos pisos (doble) y para mercancías. El líder mundial en trenes de alta velocidad
y de gran velocidad no deja a un lado sus esfuerzos por la creatividad, indispensables en este mercado
tan competitivo. «La investigación y el desarrollo, que se llevan a cabo en un 80 % en Francia, de
manera interna y con los proveedores, suponen 800 000 euros de inversión al día —señala Jérôme
Wallut, director general de Alstom Transport en Francia—. En nuestro campo, si no avanzamos,
¡retrocedemos! Si queremos seguir siendo los abanderados en las exportaciones, la innovación es la
única vía sostenible».
Rusia, Brasil o Estados Unidos, entre otros, siguen de cerca estos proyectos. El nuevo
automotor de gran velocidad podrá admitir aún más pasajeros a bordo para, así, disminuir los gastos de
funcionamiento. Este es el precio del éxito: Algunas líneas están saturadas y, como los trenes no se
pueden alargar (no pueden sobrepasar los 202 metros, puesto que las infraestructuras, en especial los
andenes, no se adecuarían), se debe aumentar la capacidad de pasajeros respetando el confort. De esta
manera, se optimizan los aspectos técnicos para dejar espacio a los viajeros.
Por otro lado, el nuevo tren será interoperable en su totalidad. Esta palabra, algo curiosa, revela
una de los importantes desarrollos del transporte, que se ha simbolizado con la reciente inauguración
de la línea entre Fráncfort y Marsella, primera conexión internacional de largo recorrido (7 horas de
tren) a la que se debieran sumar otros destinos, en toda Europa. Sobrepasar fronteras gracias a trenes
de alta velocidad compatibles con los diferentes sistemas de suministro eléctrico, de señalización y de
seguridad es un rasgo específico de Alstom.
DIRECCIÓN DE COMUNICACIÓN Y PORTAVOCÍA
SUBDIRECCIÓN DE PRENSA
MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES DE FRANCIA
La llegada de operadores privados a este sector marca otro desarrollo. «Esta es la señal que
indica que el transporte de gran velocidad europeo va a seguir creciendo —afirma Jérôme Wallut—.
Ofrece la mejor relación calidad-precio en términos de desarrollo sostenible, y tanto Bruselas como
los gobiernos promueven las infraestructuras». El primer operador privado italiano, NTV, ha
comprado el automotor de gran velocidad. En Inglaterra, el grupo Virgin ha optado por el tren de alta
velocidad Pendolino, que dispone de un sistema que le permite inclinarse en las curvas y circular a
250 km/h en vías normales.
Según la expresión de Guillaume Pepy, director general de la sociedad nacional francesa de
ferrocarriles SNCF, «les trains de la vie quotidienne» (los trenes del día a día), son la segunda
tendencia principal. Los trenes regionales franceses circulan en Alemania, España, Italia, Suecia,
Reino Unido, Australia y también en Francia, donde el transporte regional se encuentra en plena
expansión. Alstom está acabando el tren Regiolis de un piso, encargado a gran escala por parte de las
regiones, con especial atención al confort de los asientos, la luz, la climatización, el servicio a bordo,
la información a los pasajeros y el nivel de ruido (consciente de que los competidores no son tanto los
otros fabricantes, sino la carretera y el avión). Del mismo modo, la empresa se esfuerza en ser la
excepción que confirma la regla de los transportistas ferroviarios, según la cual «se paga el tren dos
veces», mediante la creación de trenes más fáciles de mantener, que también son más ecológicos para,
así, disminuir el coste del mantenimiento con un sistema de recuperación de energía en el frenado.
En lo que se refiere al transporte urbano, los metros de Alstom están en servicio en diferentes
sitios: en Singapur, Shanghái y São Paulo; y los tranvías, tanto en Irlanda como en el norte de África.
Se han vendido más de 1700 tranvías Citadis, la mitad de los cuales se han exportado, y se acaba de
presentar la gama en Moscú, donde centenas de unidades están en juego. La tecnología y el diseño
franceses seducen, y a los que les resultan poco estéticos los cables eléctricos les encantará la última
gran innovación técnica: tranvías equipados con un sistema de suministro solar.
Además, los tranvías se adaptan a las ciudades más pequeñas compactándose, lo que reduce los
costes de las infraestructuras, los andenes y los almacenes. Otro eje de trabajo consiste en crear
transporte público que sea accesible para todos, sin escalones. «Las ciudades, las regiones y los
estados nos confían dinero público y tenemos la obligación de utilizarlo bien —destaca Jérôme
Wallut—. No solo estamos ofreciendo un tren, sino un servicio público. Nosotros damos una gran
importancia a la contratación, el desarrollo y la formación de equipos. De hecho, el conjunto de
competencias, ingenieros, laboratorios y universidades asociados es lo que hace que la red
ferroviaria francesa sea excelente».
Sylvie Thomas
DIRECCIÓN DE COMUNICACIÓN Y PORTAVOCÍA
SUBDIRECCIÓN DE PRENSA
Descargar