KARINA DEL POZO El caso de Karina del Pozo en 2013 es un ejemplo destacado en Ecuador donde se presentaron diversos tipos de pruebas. Karina, una joven de 20 años, desapareció el 20 de febrero de 2013 después de asistir a una reunión con amigos en Quito. Su cuerpo fue encontrado días después en una quebrada en Llano Chico, habiendo sido golpeada, violada y asesinada. En el juicio, varios tipos de pruebas fueron fundamentales para condenar a los responsables, se detalla cómo se presentaron estas pruebas, su admisibilidad por parte del tribunal y su impacto en la decisión final.: Pruebas Testimoniales: Testimonios de testigos y amigos que estuvieron con Karina la noche de su desaparición fueron cruciales. Estos testimonios ayudaron a establecer la cronología de los hechos y la última vez que fue vista con vida. Admisibilidad: Estos testimonios fueron admitidos sin objeciones significativas, ya que eran fundamentales para establecer la línea temporal y la interacción entre la víctima y los acusados. Impacto en la Decisión: Los testimonios ayudaron a confirmar la presencia de los acusados con Karina y contradecir sus coartadas, estableciendo su posible involucramiento en el crimen. Pruebas Periciales: Los informes periciales incluyeron el análisis forense del cuerpo de Karina, que determinó que murió debido a golpes y estrangulamiento. Además, se presentaron contrainformes de nuevos expertos en genética y tecnología (ADN) que pretendían reexaminar la evidencia presentada inicialmente, que confirmaban la presencia de material genético de los acusados en la escena del crimen. Admisibilidad: Las pruebas forenses y de ADN fueron admitidas y consideradas altamente confiables debido a la metodología científica empleada. Impacto en la Decisión: Los informes periciales fueron decisivos para establecer cómo murió Karina y vincular directamente a los acusados con el crimen mediante la evidencia genética Pruebas Materiales: Se incluyeron pruebas físicas como restos de tierra en los zapatos de uno de los acusados, comparadas con la tierra del lugar donde se encontró el cuerpo, para demostrar su presencia en la escena del crimen. Admisibilidad: Las pruebas materiales fueron admitidas después de demostrar una cadena de custodia clara y su relevancia para el caso. Impacto en la Decisión: Estas evidencias corroboraron la presencia de los acusados en la escena del crimen, reforzando la teoría del caso presentada por la fiscalía. Pruebas Tecnológicas: El dispositivo de rastreo del vehículo de uno de los acusados fue utilizado para desmentir la coartada presentada por los sentenciados, demostrando que no dejaron a Karina en el lugar que ellos afirmaban. Comunicaciones electrónicas y registros de llamadas entre los acusados antes y después del asesinato. Admisibilidad: Estos registros fueron admitidos tras verificarse su autenticidad y relevancia directa para el caso. Impacto en la Decisión: Las pruebas tecnológicas refutaron las coartadas de los acusados, demostrando que estuvieron en el lugar del crimen cuando ocurrieron los hechos. La combinación de pruebas testimoniales, periciales, documentales y materiales presentó un caso sólido contra los acusados, David Piña, Manuel Salazar y José Sevilla. La solidez de las pruebas fue fundamental para que el tribunal los encontrara culpables y los sentenciara a 25 años de prisión. La evidencia tecnológica y pericial, en particular, jugó un papel crucial al proporcionar datos irrefutables sobre la presencia y participación de los acusados en el crimen. Este caso ejemplifica la importancia de una presentación meticulosa y la correcta admisión de diversas pruebas en el proceso judicial, lo cual fue determinante para alcanzar una condena basada en hechos sólidos y verificables. David Piña, Manuel Salazar y José Sevilla fueron sentenciados a 25 años de prisión como responsables del asesinato. A lo largo del proceso, la defensa de Piña presentó varias apelaciones y recursos de revisión, argumentando que se basaron en informes periciales errados y testimonios falsos. Sin embargo, las sentencias fueron ratificadas en varias instancias judiciales. Este caso muestra cómo la combinación de distintos tipos de pruebas (testimoniales, periciales, materiales y tecnológicas) puede ser determinante en la resolución de un crimen y la condena de los responsables. La importancia de los métodos de prueba en los casos judiciales es fundamental para garantizar un juicio justo y basado en hechos verificables. En el caso de Karina del Pozo, la correcta aplicación y admisibilidad de diversas pruebas fueron esenciales para establecer la verdad y asegurar una condena adecuada. Los métodos de prueba, que incluyen pruebas testimoniales, periciales, documentales y materiales, permiten reconstruir de manera precisa y coherente los hechos ocurridos. Las pruebas testimoniales proporcionaron una narrativa clara sobre los movimientos y acciones de la víctima y los acusados, desmontando sus coartadas y situándolos en la escena del crimen. La evidencia pericial, como los análisis forenses y de ADN, aportó datos científicos que vincularon directamente a los acusados con el delito, siendo difícil de refutar por su precisión y fiabilidad. Las pruebas documentales y tecnológicas, como los registros de rastreo y comunicaciones electrónicas, proporcionaron evidencia objetiva que permitió mapear los movimientos de los acusados, reforzando la narrativa de la fiscalía con datos precisos y verificables. Estas pruebas fueron admitidas gracias a su autenticidad y relevancia, demostrando su valor en la reconstrucción de los eventos. Por último, las pruebas materiales, como las muestras de tierra, corroboraron la presencia de los acusados en la escena del crimen, añadiendo un contexto físico que fortaleció el caso. La importancia de estos métodos radica en su capacidad para ofrecer una visión integral y detallada del crimen, facilitando la comprensión del tribunal y fundamentando sus decisiones. Además, garantizan la transparencia y la confianza en el sistema judicial, demostrando que las sentencias se basan en evidencia sólida y verificable. En el caso de Karina del Pozo, la combinación de estos métodos de prueba no solo aseguró la condena de los responsables, sino que también reafirmó la eficacia y la justicia del proceso judicial, subrayando la necesidad de una preparación meticulosa y una presentación estratégica de las pruebas para lograr resultados justos y equitativos. BIBLIOGRAFÍA El Comercio . (s.f.). Un detenido por el caso Karina Del Pozo presentará pruebas. Obtenido de https://www.elcomercio.com/actualidad/seguridad/detenido- casokarinadelpozo-pruebas-asesinato.html Fiscalía General del Estado, . (17 de Enero de 2020). Sentencia condenatoria por delito de homicidio. Obtenido de BOLETÍN DE PRENSA FGE Nº 056-DC-2020: https://www.fiscalia.gob.ec/sentencia-condenatoria-por-delito-de-homicidio/ Fiscalía General del Estado,. (Octubre de 2013). Fiscalía General del Estado . Obtenido de Fiscalía General del Estado : https://www.fiscalia.gob.ec/caso-karina-delpozo-jueces-notifican-oficialmente-sentencia-para-los-responsables-de-lamuerte-de-lajoven/#:~:text=El%20Tribunal%20S%C3%A9ptimo%20de%20Garant%C3%A Das%20Penales%20de%20Pichincha,asesinato%20de%20la%20joven%20qu