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Funciones ejecutivas y rechazo alimentario (traducida) (2)

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Apetito 176 (2022) 106102
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Relaciones entre las funciones ejecutivas y las disposiciones de rechazo a los alimentos en
niños pequeños
Damián Foinanta,b,*, Jeremie Lafraireb, Jean Pierre Thibauta
aUniversité Bourgogne Franche-Comté, LEAD–CNRS UMR-5022, Dijon, Francia
bCentro de Investigación Institut Paul Bocuse, Ecully, Francia
INFORMACIÓN DEL ARTÍCULO
ABSTRACTO
Palabras clave:
Este estudio examinó las asociaciones entre los dos tipos principales de rechazo a los alimentos, la neofobia y la
quisquillosidad, y las funciones ejecutivas en niños pequeños. cuidadores de niños (norte=240) de 3 a 6 años de edad
completaron las medidas de la neofobia alimentaria y la quisquillosidad de sus hijos. Una batería de pruebas midió
las funciones ejecutivas y el conocimiento del mundo de los niños. Los niños con niveles más altos de neofobia y
quisquillosidad tenían puntajes de flexibilidad cognitiva más bajos que los niños con niveles más bajos de rechazo a
la comida. Además, la asociación entre la neofobia alimentaria y la flexibilidad cognitiva fue más fuerte que la
asociación entre la quisquillosidad alimentaria y la flexibilidad cognitiva. La memoria de trabajo, la inhibición y el
conocimiento del mundo no se relacionaron con el rechazo a la comida de los niños. Estos hallazgos desentrañaron
por primera vez la relación negativa entre la flexibilidad cognitiva y las principales barreras psicológicas a la variedad
dietética.
Funciones ejecutivas
Flexibilidad cognitiva
Neofobia alimentaria
quisquillosidad con la comida
Comportamientos alimentarios
Niños
1. Introducción
estudio que evalúa las asociaciones entre el rechazo a la comida de los niños
pequeños y sus funciones ejecutivas.
Las conductas alimentarias como el rechazo a los alimentos que reducen la variedad
El rechazo a la comida se divide principalmente en dos categorías, la neofobia
dietética han sido objeto de numerosos estudios durante las últimas décadas (Lafraire et
alimentaria y la quisquillosidad. La neofobia alimentaria, la tendencia a rechazar
al., 2016; para una revisión). El rechazo a la comida es común entre los niños en edad
alimentos novedosos, se observa generalmente durante la primera infancia (entre los 2 y
preescolar, pero sigue siendo frecuente en la adolescencia e incluso en la edad adulta (
los 6 años). Los rechazos neofóbicos se producen con la sola vista del alimento, antes de
Nicklaus et al., 2005). El rechazo de alimentos se dirige principalmente a frutas y verduras
ser degustado (Carruth et al., 1998), y puede incluir una comida completa si contiene un
y es un fuerte obstáculo para el cumplimiento de las recomendaciones dietéticas, lo que
alimento nuevo (Ton nu, 1996). Los niños neofóbicos muestran una fuerte renuencia a
puede contribuir al desarrollo de problemas de salud posteriores. De hecho, el rechazo a
probar alimentos nuevos y, en cambio, buscan constantemente los que les son familiares
los alimentos puede ser un factor de riesgo para las condiciones relacionadas con los
(Rioux et al., 2017). Por el contrario, la quisquillosidad alimentaria se define como el
alimentos, como la anorexia nerviosa.Herle et al., 2020;Nicholls & Viner, 2009) y la
rechazo de un número considerable de alimentos familiares, incluidos los ya probados.
obesidad (Knaapila et al., 2015;Proserpio et al., 2018). Sin embargo, los estudios que han
Taylor et al., 2015). Los alimentos previamente aceptados pueden rechazarse debido a
examinado sistemáticamente la relación entre el rechazo a los alimentos de los niños y el
cambios en la información sensorial (p. ej., sabor, textura, presentación o cocción) o en
estado de salud son escasos y, a menudo, han producido resultados contradictorios (
los contextos alimentarios (p. ej., alimentos que se comen en el almuerzo en lugar de la
Marrón et al., 2016;Laureati et al., 2015;Mascola et al., 2010;Mulle et al., 2013). A pesar de
cena o en el lugar de otra persona). Los caprichos para comer se asocian con patrones
los hallazgos contradictorios, se ha planteado la hipótesis de que el rechazo a los
rituales como la clasificación de alimentos mixtos, el examen en profundidad de los
alimentos puede tener consecuencias negativas en el desarrollo cognitivo y de la salud al
alimentos y el tiempo prolongado de masticación (Williams et al., 2005). Aunque la
reducir el consumo de grupos de alimentos ricos en nutrientes esenciales.Dovey et al.,
neofobia alimentaria y la quisquillosidad tienen diferentes manifestaciones conductuales,
2008; Lafraire et al., 2016;Taylor et al., 2015). Por lo tanto, descubrir los factores
distinguirlas puede ser difícil, ya que están fuertemente correlacionadas (Rioux et al.,
asociados con el rechazo de alimentos es crucial. El presente trabajo es el primero
2017;Smith et al., 2017) y algunos autores afirman que son construcciones diferentes de
la misma entidad (por ejemplo,Dovey et al., 2008).
* Autor correspondiente. Université Bourgogne Franche-Comté, LEAD – CNRS UMR-5022, Dijon, Francia.
Correos electrónicos:[email protected] (D. Foinant),[email protected] (J. Lafraire),[email protected] (J.-P.
Thibaut).
https://doi.org/10.1016/j.appet.2022.106102
Recibido el 23 de febrero de 2022; Recibido en forma revisada el 13 de mayo de 2022; Aceptado el 30 de mayo de 2022
Disponible en línea el 2 de junio de 2022
0195-6663/© 2022 Elsevier Ltd. Todos los derechos reservados.
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D. Foinant et al.
flexibilidad.
Más allá de sus correlatos comunes, como un repertorio de alimentos limitado o
comportamientos disruptivos a la hora de comer (por ejemplo, berrinches), ambos
Otra razón para observar las funciones ejecutivas es su relación con las
involucran patrones rígidos de alimentación, con la comida servida siempre con los
condiciones relacionadas con la alimentación, como la obesidad o la anorexia
mismos adornos, y la presencia de fuertes rituales de consumo, que es el sello distintivo
nerviosa. La obesidad se asocia negativamente con la memoria de trabajo (
de una falta de flexibilidad cognitiva (Braem y Egner, 2018;Diamante, 2013; Twachtman et
Maayan et al., 2011;Wu et al., 2017; pero miraCserjési et al., 2007yVerdejo-García
al., 2008).
et al., 2010quien produjo hallazgos nulos), inhibición (Groppe y Elsner, 2015;Rollins
Revisiones recientes que se centran en los factores subyacentes de la neofobia
et al., 2014), y flexibilidad cognitiva (Cserjési et al., 2007; Verdejo-García et al., 2010
alimentaria y la quisquillosidad señalan que las explicaciones actuales de estas
) en comparación con los controles sanos. Verdejo-García et al.' (2010) mostró que
disposiciones en su mayoría caen en influencias genéticas o ambientales (Cooke,
la flexibilidad cognitiva era la función ejecutiva más significativamente afectada en
2018;Lafraire et al., 2016;Nicklaus & Monnery-Patris, 2018; Ríoux, 2020). Las
niños con sobrepeso. En cuanto a la anorexia nerviosa, a la fecha no existen
estimaciones de los estudios de gemelos sugieren que tanto la neofobia
indicios de menor rendimiento en memoria de trabajo e inhibición (Rosa et al.,
alimentaria como la quisquillosidad tienen estimaciones de alta heredabilidad,
2012; Stedal et al., 2012). Por el contrario, la flexibilidad cognitiva se encuentra
alrededor del 50% o más (p. ej.,Smith et al., 2017). El rechazo a la comida también
consistentemente más baja en pacientes con anorexia nerviosa que en individuos
se ha asociado con varios rasgos temperamentales (Lafraire et al., 2016), tales
sanos.Roberts et al., 2007; para una revisión). Por ejemplo,Stedal et al. (2012)
como niveles más altos de emocionalidad negativa (Haycraft et al., 2011), timidez (
muestran que, a los 9 años, los niños con anorexia nerviosa no presentan
Bellows et al., 2013), y ansiedad (Galloway et al., 2003;Maratos & Sharpe, 2018).
dificultades específicas en tareas de funciones ejecutivas, excepto en la flexibilidad
Los niveles más altos de rechazo de alimentos también se han asociado con
cognitiva. En resumen, hay evidencia que muestra que las condiciones
niveles más bajos de búsqueda de sensaciones (Callejón y Potter, 2011), menos
relacionadas con los alimentos enmás viejolos grupos de edad están asociados
aproximaciones a nuevos estímulos (Modulación y Stifter, 2016), y “defensividad
con las funciones ejecutivas, en particular la flexibilidad cognitiva. Así, establecer
táctil” (Nederkoorn et al., 2015). Por ejemplo, se ha demostrado que los niños
asociaciones entre funciones ejecutivas yjovenel rechazo a los alimentos de los
defensivos táctiles (que reaccionan exageradamente a las experiencias del tacto o
niños, que se había sugerido para predecir problemas de salud relacionados con
se retraen de algunos estímulos táctiles típicamente inofensivos) son más
la alimentación en el futuro, es una cuestión de investigación importante.
neofóbicos y quisquillosos que los niños defensivos no táctiles (Smith et al., 2005).
Además, los factores ambientales, como la experiencia temprana con los
El presente estudio examinó las asociaciones entre el rechazo a la comida en
alimentos y las prácticas de alimentación de los padres, pueden debilitar o
niños de 3 a 6 años y su desempeño en tareas de memoria de trabajo, inhibición y
fortalecer el rechazo de los niños a los alimentos (Nicklaus & Monnery-Patris, 2018
flexibilidad cognitiva. También probamos el vocabulario de los niños para
). Por ejemplo, las estrategias comunes de alimentación de los padres, como las
desambiguar la contribución relativa del conocimiento general frente a los
recompensas con alimentos o la presión para comer, aumentan las tendencias de
factores ejecutivos. De hecho, dado que existe evidencia de que el conocimiento
rechazo a los alimentos de los niños.DeCosta et al., 2017). Por el contrario, la
relacionado con los alimentos puede verse afectado en niños con altos niveles de
introducción de una gran variedad de hortalizas al destete tiene un impacto
rechazo a los alimentos, es importante evaluar si estos resultados pueden
positivo (Cooke, 2018). Aunque ambas influencias explicativas generales juegan un
explicarse por diferencias en el conocimiento o por factores cognitivos. En el
papel importante en el rechazo de alimentos de los niños, existe un cuerpo de
presente trabajo, también evaluamos si la neofobia alimentaria y la
estudios de desarrollo que señalan la importancia de investigar la cognición como
quisquillosidad están asociadas con los mismos factores y con la misma fuerza.
una forma de comprender mejor la toma de decisiones relacionadas con los
2. Métodos
alimentos en los niños.DeJesús et al., 2018;Nguyen &Lafraire, 2020).
Por ejemplo, el conocimiento conceptual y la categorización son factores cognitivos
2.1. Participantes
fundamentales para la toma de decisiones relacionadas con los alimentos, que están
involucrados en el rechazo de alimentos (Foinant et al., 2021a,2021b;harris, 2018; Lafraire
Doscientos sesenta y ocho (268) niños de 3 a 6 años fueron reclutados de
et al., 2016;Pickard et al., 2021a,2021b;Rioux et al., 2016, 2018). De hecho, se ha
descubierto que el rechazo de los niños a los alimentos está inversamente relacionado
preescolares. Los participantes fueron excluidos cuando no completaron todas las
con su capacidad para categorizar las verduras y las frutas.Rioux et al., 2016), su
tareas que evalúan los factores cognitivos (norte=28). Esto dejó una muestra final
conocimiento sobre asociaciones contextuales (es decir, conocimiento de las funciones
de 240 niños (128 niñas; rango de edad = 46,5–76,0 meses; edad media = 60,6
complementarias de dos alimentos, como un pan de hamburguesa y una hamburguesa,
meses;Dakota del Sur=7.89). Eran predominantemente caucásicos y provenían de
o la relación entre un alimento en particular, un pavo, y su contexto típico de consumo,
áreas urbanas de clase media. Se obtuvo el consentimiento informado de su
acción de gracias;Pickard et al., 2021a) o su capacidad para generalizar las propiedades
escuela y de sus padres. El procedimiento estuvo de acuerdo con la Declaración de
de los alimentos (Rioux et al., 2018). El rechazo a los alimentos también influye en cómo
Helsinki y siguió las pautas de la junta de ética institucional para la investigación
los niños generalizan los efectos posteriores a la ingestión en la salud, y los niños
en humanos.
neofóbicos infieren más propiedades negativas (p. ej., "da náuseas") a los alimentos en
Para evaluar las disposiciones de rechazo de alimentos de cada niño, los cuidadores
comparación con los niños menos neofóbicos (Foinant et al., 2021a). Mientras que estas
completaron la Escala de Rechazo de Alimentos Infantiles (CFRS;Rioux et al., 2017). El CFRS se
habilidades pueden estar asociadas con la neofobia alimentaria y la quisquillosidad (
desarrolló para evaluar, mediante heteroevaluación, el rechazo alimentario de los niños de 2 a 7
Foinant et al., 2021b), la neofobia alimentaria a menudo se considera un mejor predictor
años en dos subescalas, una subescala que evalúa la neofobia alimentaria (6 elementos) y la otra
de la categorización y el razonamiento de los niños que su quisquillosidad alimentaria (
que evalúa la quisquillosidad alimentaria (5 elementos). En una escala tipo Likert de 5 puntos (
Foinant et al., 2021a;Rioux et al., 2018). Una interpretación de estos resultados es en
Muy en desacuerdo,Discrepar,Ni de acuerdo ni en desacuerdo, Aceptar,Totalmente de acuerdo),
términos de falta de los conocimientos necesarios para resolver las tareas de
se pidió a los cuidadores que calificaran en qué medida están de acuerdo con las afirmaciones
categorización. Sin embargo, la hipótesis central del presente trabajo es que los fracasos
sobre la neofobia de su hijo (p. ej., “Mi hijo rechaza un alimento novedoso incluso antes de
de los niños neófobos y quisquillosos pueden deberse a dificultades para procesar y
probarlo”) y quisquillosidad (“Mi hijo rechaza ciertos alimentos después de probarlos”). Luego,
utilizar con flexibilidad el conocimiento conceptual (Pickard et al., 2021b).
cada respuesta se codificó numéricamente con puntajes altos que indican una mayor neofobia
alimentaria y quisquillosidad (los puntajes pueden variar de 6 a 30 para la neofobia,METRO=14.9,
Los rechazos a la comida se caracterizan por conductas alimentarias rígidas y
Dakota del Sur=5,25; de 5 a 25 por quisquillosidad,METRO=16.6,Dakota del Sur=4,90; y el rechazo
dificultades de categorización que pueden interpretarse como una falta de flexibilidad
global a los alimentos de 11 a 55,METRO=31.5,Dakota del Sur=9.16).
cognitiva. Los niños neofóbicos y quisquillosos tienen dificultades para alejarse de las
diferencias en el gusto, la composición del plato, el proceso de cocción, los contextos
anteriores de presentaciones o las rutinas de alimentación. Las relaciones entre la
2.2. Procedimiento
función ejecutiva y el rechazo de alimentos nunca se han evaluado directamente hasta
La evaluación cognitiva se realizó en dos sesiones diferentes de 20 min
cada una, con dos tareas por sesión. El orden de las tareas fue aleatorio.
ahora. Aquí, siguiendoMiyake et al. (2000), evaluaremos tres componentes ejecutivos:
memoria de trabajo, inhibición y cognitivo
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D. Foinant et al.
Evaluamos el conocimiento del mundo a través de una prueba de vocabulario
más cerca de 0 indican mejores capacidades de inhibición (es decir, los individuos con
estándar. En este enfoque, los académicos argumentan que un vocabulario más
buena inhibición tienen velocidades de respuesta similares para ensayos incongruentes y
amplio es un buen indicador de un mejor conocimiento del mundo (p. ej.,Ashton
congruentes), mientras que las puntuaciones más alejadas de 0 indican capacidades de
et al., 2000;Gentner & Hoyos, 2017). También evaluamos los tres componentes de
inhibición más pobres. Todos los RT inferiores a 100 ms y superiores a 10000 ms o dos
las funciones ejecutivas descritos porMiyake et al. (2000): actualización en la
desviaciones estándar de la media se consideraron valores atípicos y se descartaron del
memoria de trabajo (es decir, responsable tanto de reemplazar continuamente la
análisis.
información desactualizada con nuevos datos relevantes como de suprimir el
2.2.3. Flexibilidad cognitiva
contenido que ya no es relevante de acuerdo con las demandas de la tarea;
Carriedo et al., 2016), flexibilidad e inhibición. Para las tareas de memoria de
Dimensional Change Card Sort es una tarea de cambio de reglas que evalúa la
trabajo y flexibilidad, adaptamos las tareas correspondientes de la batería de
flexibilidad cognitiva de los niños que ha sido adaptada de NIH Toolbox CB (DCCS;
cognición Toolbox de los Institutos Nacionales de Salud (NIH Toolbox CB).
Zelazo et al., 2013). Evalúa la flexibilidad cognitiva, comparando el desempeño de
Seguimos el mismo protocolo excepto que implementamos las tareas en Open
los niños en diferentes tipos de pruebas, involucrando (o no) el cambio de reglas.
Sesame y las instrucciones se dieron en francés. Evaluamos las habilidades de los
A los niños se les muestran dos estímulos objetivo (p. ej., un conejo azul y un bote
participantes con una computadora de pantalla táctil. Todas las pruebas han sido
rojo) y se les pide que clasifiquen una serie de estímulos de prueba (p. ej., conejos
estandarizadas para niños en edad preescolar (Catale & Meulemans, 2009;Tulsky
rojos y botes azules), primero según una dimensión (p. ej., color) y luego según al
et al., 2013;Zelazo et al., 2013).
otro (por ejemplo, forma). La tarea estuvo compuesta por cuatro fases:
familiarización, pre-cambio, post-cambio y mixta. En la fase de familiarización, el
2.2.1. memoria de trabajo
experimentador explica dos juegos de reglas, el de la forma o el del color (cuatro
La prueba de memoria de trabajo de clasificación de listas evalúa la memoria de
intentos con retroalimentación). En la fase previa al cambio, se usó una regla (p.
trabajo de los niños como parte de NIH Toolbox CB (Tulsky et al., 2014). Es una tarea de
ej., el color) durante cinco ensayos y le sigue la segunda regla en la fase posterior
secuenciación computarizada que requiere ordenar los estímulos que se presentan visual
al cambio (cinco ensayos). Finalmente, la fase mixta consistió en 30 ensayos,
y auditivamente. A los niños se les presenta una secuencia de imágenes en color que
incluidos 24 "frecuentes" (por ejemplo, color) y 6 ensayos "poco frecuentes" (p. ej.,
representan un elemento (p. ej., un animal) mientras escuchan su nombre (p. ej., “León”).
forma) presentados en un orden pseudoaleatorio (con dos a cinco ensayos
Cada elemento se mostró durante 2 s. Al final de cada secuencia, se les indicó que
frecuentes que preceden a cada ensayo infrecuente). La puntuación de flexibilidad
recordaran verbalmente todos los elementos, desde el animal más pequeño hasta el más
se calculó según la escala NIH (Zelazo et al., 2013). La precisión fue la suma de las
grande. El número de elementos comienza con dos estímulos y la tarea se detiene
respuestas correctas en la fase previa al cambio (5 intentos), posterior al cambio (5
después de dos errores consecutivos con el mismo número de elementos. Después de
intentos) y mixta (30 intentos) multiplicada por 0,125 para obtener una puntuación
esta versión de "1 lista", a los niños se les presenta una versión de "2 listas" con dos tipos
que osciló entre 0 y 5. Para niños cuya precisión fue inferior al 80% (<4) la
de estímulos (es decir, imágenes de animales y alimentos). En esta versión, se pedía a los
puntuación final equiparada al número de respuestas correctas. Para los niños
niños que organizaran los estímulos de una categoría (p. ej., comida), del más pequeño al
cuya precisión fue igual o superior al 80 %, la puntuación de flexibilidad también
más grande, y luego hicieran lo mismo con la otra categoría (p. ej., animales). Cada lista
incluyó su RT medio en intentos correctos poco frecuentes en la fase mixta
está compuesta por 8 secuencias y la puntuación de la prueba Clasificación de listas es el
después de una transformación logarítmica (base 10), creando una distribución
número de secuencias recordadas correctamente en cada lista. La puntuación máxima es
más normal. Todos los RT medianos entre 100 ms y 500 ms se fijaron en 500 ms y
16.
los RT medianos entre 3000 ms y 10000 ms se fijaron en 3000 ms. Al igual que la
puntuación de precisión, la puntuación de RT varió de 0 a 5. Los valores de
2.2.2. Inhibición
registro se reescalaron algebraicamente con la siguiente fórmula, de modo que
los valores de registro de RT más pequeños estaban en el extremo superior del
Utilizamos una versión computarizada de Real Animal Size Test (RAST; Catale &
Meulemans, 2009) que fue diseñado para evaluar las capacidades de inhibición de los
rango de 0 a 5, mientras que los valores de registro de RT más grandes estaban en
niños. El RAST es una tarea no alfabética similar a Stroop. Se pidió a los niños que
el extremo inferior. . La puntuación máxima de flexibilidad es 10 cuando la
categorizaran imágenes de animales según su tamaño real (del mundo), ya sea pequeño
precisión es del 100 % y los RT de 500 ms.
(es decir, una mariposa y un pájaro) o grande (es decir, un elefante y un caballo). La
prueba contrasta ensayos congruentes e incongruentes, siendo este último que el
Puntuación RT = 5 −
([
5*
tamaño del dibujo y el tamaño del animal son incongruentes (p. ej., un dibujo pequeño
de un elefante y un dibujo grande de una mariposa). La tarea se compone de tres fases:
registroRT−
registro (3000) -
registro (500)
])
registro (500)
2.2.4. conocimiento del mundo
la fase de control seguida de entrenamiento y ensayos de prueba. Antes del comienzo de
Para la prueba de vocabulario utilizamos el EVIP que es una versión en francés
la tarea, nos aseguramos de que los niños conocieran los cuatro animales y pudieran
(normas canadienses) del PPVT (Peabody Picture Vocabulary Test,Dunn &Dunn,
decir que el caballo y el elefante son animales grandes mientras que la mariposa y el
2007). La prueba está estandarizada para niños de 2 años.½a 18 años de edad. En
pájaro son animales pequeños. La fase de no interferencia, control, estuvo compuesta
esta prueba, los niños tenían que seleccionar una de las cuatro imágenes
por doce ensayos, con todos los animales exhibidos en el mismo tamaño mediano. Esta
asociadas a un sustantivo dado por el experimentador. Los puntajes se basan en
fase fue seguida por una fase de entrenamiento en la que se informó a los niños que el
el número de respuestas correctas y el puntaje estándar se proporcionó mediante
tamaño de la imagen cambiaría a través de los estímulos. Se les dijo que sin importar el
tablas, cruzando los puntajes brutos y la edad del niño (el puntaje máximo es 228).
tamaño de la imagen, tendrían que decir si es un animal grande o un animal pequeño
“en la vida real”. Se proporcionaron comentarios después de cada prueba. La fase de
prueba estuvo compuesta por animales grandes y pequeños, con ensayos congruentes y
ensayos incongruentes. Por lo tanto, los ensayos incongruentes provocaron interferencia
2.3. Análisis de los datos
relacionada con el tamaño de la imagen, ya que los participantes tenían que inhibir el
tamaño pictórico y dar una respuesta de acuerdo con el tamaño real del animal.
Datos anónimos y script R (Equipo central R, 2021) utilizados para el análisis estadístico están
Finalmente, la fase de prueba estuvo compuesta por treinta y dos ensayos (cuatro
disponibles,OSF:https://osf.io/wbtp4/? view_only=37444abdd3c44253bb3c19f9de5092fc. Las
animales presentados con los dos tamaños, cuatro veces cada uno) y ya no se
pruebas de Shapiro-Wilk revelaron que ninguna de las variables principales del estudio
proporcionó retroalimentación. En general,METRO=89% de las respuestas correctas,
(puntuaciones de rechazo de alimentos de los niños y puntuaciones de factores cognitivos) se
Dakota del Sur= 12%). Solo se usaron los tiempos de reacción (RT en milisegundos) para
distribuyó normalmente (pag <
las respuestas correctas para calcular una puntuación de interferencia. Restamos el RT
. 05). Por lo tanto, usamos las correlaciones de Spearman para probar asociaciones
promedio para las pruebas incongruentes (METRO=1518ms,Dakota del Sur=450 ms) del
significativas entre la edad de los niños y las principales variables del estudio. La edad de
RT promedio para los ensayos congruentes (METRO=1481ms,Dakota del Sur=404ms).
los niños se relacionó significativamente con las puntuaciones de varios factores
Puntuaciones
cognitivos y la neofobia alimentaria. Se encontraron correlaciones positivas significativas
entre la edad de los niños y las puntuaciones en las tres tareas de funciones ejecutivas,
3
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D. Foinant et al.
Clasificación de listas (ro=0.219,pag <.001), RAST (ro=0.251,pag <.001), y DCCS (ro=
3.2. Rechazo mundial de alimentos
0.300,pag <.001). La edad correlacionó negativamente con la neofobia alimentaria
(ro= −0.157,pag= .015), pero no con quisquillosidad (ro=
Tabla 3informa los modelos lineales generalizados utilizando las puntuaciones
− 0.059,pag= .360) y el rechazo global a la comida (ro= −0.105,pag=
globales de rechazo de alimentos de los niños como resultado y las puntuaciones de los
. 103). Además, independientet-Las pruebas examinaron las diferencias en la edad
factores cognitivos como predictores, controlando por edad. Nuestro modelo de mejor
de los niños, el rechazo a los alimentos y las puntuaciones cognitivas de niñas y
ajuste (M2) solo incluía flexibilidad cognitiva e inhibición. Nuestros análisis bayesianos en
niños. El t-las pruebas no revelaron ninguna diferencia entre niñas y niños en
M2 revelaron que la evidencia a favor de una asociación negativa entre el rechazo global
ninguna de estas medidas (pag >.05).
de alimentos de los niños y su flexibilidad cognitiva (β=
− 0.301,t= −4.68, FB10>100) fue “decisivo” (BF10>100;Wagenmakers et
al., 2011). Nuestros datos no proporcionan evidencia (BF<10) para una
asociación entre el rechazo de alimentos y la inhibición (β= −0.133,t=
− 2.15, FB10= 1,85).
En vista de estos análisis preliminares, se utilizaron modelos lineales generales
con puntajes de rechazo de alimentos de los niños (es decir, rechazo global de
alimentos, neofobia alimentaria y quisquillosidad) como resultados y puntajes
cognitivos como predictores (es decir, memoria de trabajo, inhibición, flexibilidad
cognitiva y mundo). conocimiento), controlando por edad. Los modelos se
construyeron mediante la adición iterativa de predictores al modelo nulo (M0 = el
3.3. Neofobia alimentaria
intercepto y ningún predictor, excepto la edad). Solo los predictores mejoran el
modelo a través de la bondad de ajuste evaluada por el Criterio de Información de
Tabla 4muestra los modelos lineales generalizados utilizando las puntuaciones de
Akaike (AIC; hu, 2007) fueron retenidos. Si no hubo disminución en el AIC, las
neofobia alimentaria de los niños como resultado y las puntuaciones de los factores
variables predictivas quedaron fuera de la siguiente iteración. En los mejores
cognitivos como predictores, controlando por edad. Nuestro modelo de mejor ajuste
modelos, realizamos estadísticas bayesianas utilizando el Cauchy previo estándar
(M1) reveló que la evidencia a favor de una asociación negativa entre la neofobia
no informativo con un ancho predeterminado de 0.707 (Andraszewicz et al., 2015).
alimentaria de los niños y su flexibilidad cognitiva fue decisiva (β= −0.319,t=
− 5.01, FB10>100).
Un valor de BF10<1 indica queH0está más fuertemente respaldado por los datos
que H1. Por otro lado, un valor de BF10>1 indica queH1está más fuertemente
respaldado por los datos queH0, con un factor de Bayes de 10 o más como
3.4. quisquillosidad con la comida
evidencia suficientemente fuerte para rechazar la hipótesis nula (Wagenmakers et
al., 2011).
Tabla 5muestra los modelos lineales generalizados utilizando las puntuaciones
de selección de alimentos de los niños como resultado y las puntuaciones de los
factores cognitivos como predictores, controlando por edad. Nuestro modelo de
3. Resultados
mejor ajuste (M4) incluía flexibilidad cognitiva, inhibición y conocimiento del
3.1. Estadísticas descriptivas
mundo. Los análisis bayesianos en M4 revelaron que la evidencia a favor de una
asociación negativa entre la quisquillosidad alimentaria de los niños y su
tabla 1proporciona las estadísticas descriptivas.
flexibilidad cognitiva fue decisiva (β = −0.301,t= −4.68, FB10>100). Nuestros datos
Las asociaciones estadísticas entre las puntuaciones de rechazo de alimentos de los niños, el
no proporcionan evidencia de asociaciones con la inhibición (β= −0.131,t= −2.07,
FB10= 1.87) y conocimiento del mundo (β=0.147,t=2.21, FB10= 2,45).
conocimiento del mundo y las funciones ejecutivas, controlando la edad de los niños, se pueden
En resumen, entre los cuatro factores cognitivos, solo la flexibilidad cognitiva se
ver enTabla 2.
asoció significativamente con las tres puntuaciones de rechazo a los alimentos (es decir,
global, neofobia alimentaria y quisquillosidad).
3.5. Neofobia alimentaria versus quisquillosidad alimentaria
tabla 1
A pesar de que la neofobia alimentaria y la quisquillosidad se asociaron con el
Estadísticas descriptivas para la edad, puntajes de rechazo de alimentos y puntajes de factores cognitivos
mismo factor cognitivo (es decir, flexibilidad cognitiva), probamos la hipótesis de
en función del género.
Edad (en meses)
Chicas (norte
Niños (norte
Gama de niños
(norte=240)
=128)
=112)
puntuaciones (posibles
comparar las fuerzas de asociación, utilizamos elhipótesis linealfunción de laauto
Significar (Dakota del Sur)
Significar
Significar
mínimo máximo
paquete en R (Zorro y Weisberg, 2019). Esta función requiere que la flexibilidad
(Dakota del Sur)
(Dakota del Sur)
puntuaciones)
cognitiva sirva como resultado, mientras que la neofobia alimentaria y la
60.6
60.3
61.1
46,5–76,0
quisquillosidad sirvan como predictores. Probamos la hipótesis lineal de que la
(7.89)
(7.98)
31.29
(9.39)
14.80
(5.41)
16.48
(5.10)
(7.79)
31.80
(8.91)
15.11
(5.08)
16.70
(4.68)
comida mundial
31.5
rechazo
(9.16)
Neofobia alimentaria
14.9
(5.25)
quisquillosidad con la comida
16.6
(4.90)
Laboral
memoria
5.92
(2.25)
RT congruente
1481
ensayos (en ms)
5.89
(2.35)
1476
5.95
revelaron que la flexibilidad cognitiva estaba significativamente más asociada con
la neofobia alimentaria que con la quisquillosidad alimentaria (t= −2.57,pag= .011).
Esto significa que, aunque ambas disposiciones de rechazo a la comida están
5–25 (5–25)
relacionadas con la flexibilidad cognitiva, este factor cognitivo está más
0–13 (0–16)
relacionado con la neofobia alimentaria que con la quisquillosidad alimentaria.
(2.14)
1487
(404)
1518
(358)
(452)
ensayos (en ms)
(450)
− 37.03
(264.4)
(397)
− 25.88
(238.3)
(505)
− 49.77
(291.9)
4.64
4.77
4.49
1,25–7,36 (0–10)
(1.23)
116 (19,9)
(1.24)
(1.21)
interferencia
quisquillosidad para explicar la flexibilidad cognitiva difería de 0. Los resultados
6–27 (6–30)
RT incongruente
1502
diferencia entre los coeficientes de regresión de la neofobia alimentaria y la
11–50 (11–55)
848–4137
(100–10000)
857–4392
(100–10000)
- 1257–1307 (9900–9900)
Inhibición
que pueden diferir en su fuerza de asociación con la flexibilidad cognitiva. Para
Niños
1537
4. Discusión
El presente estudio buscó asociaciones entre las disposiciones de rechazo de
alimentos de los niños (es decir, neofobia alimentaria y melindre) y factores cognitivos (es
decir, funciones ejecutivas y conocimiento del mundo). Nuestros resultados mostraron
puntuación (en ms)
Cognitivo
flexibilidad
Mundo
conocimiento
116
(18.2)
116
que el rendimiento de la flexibilidad cognitiva se asoció negativamente tanto con la
neofobia alimentaria como con la quisquillosidad. Sin embargo, no se encontraron
60–153 (0–228)
asociaciones con la memoria de trabajo o la inhibición. Es importante destacar que
(21.7)
tampoco se ha observado una asociación entre las tendencias de rechazo a los alimentos
Nota. Dakota del Sur: Desviación Estándar.
y el conocimiento del mundo.
Uno de los propósitos de nuestro estudio fue evaluar las similitudes y diferencias
entre la neofobia alimentaria y la quisquillosidad en términos de tres ejecutivos.
4
Apetito 176 (2022) 106102
D. Foinant et al.
Tabla 2
Coeficientes de correlación de Spearman, controlando por la edad de los niños, entre las puntuaciones de rechazo a los alimentos de los niños, el conocimiento del mundo y las puntuaciones de las funciones ejecutivas.
Neofobia alimentaria
quisquillosidad con la comida
memoria de trabajo
Inhibición
Flexibilidad cognitiva
conocimiento del mundo
Rechazo mundial de alimentos
Neofobia alimentaria
quisquillosidad con la comida
memoria de trabajo
Inhibición
Flexibilidad cognitiva
r= .908***
BF10>100
r= .876***
BF10>100
r= − .054
BF10= 0,19
r= − .165*
BF10= 1,52
r= − .280***
BF10>100
r= − .042
BF10= 0,11
r= .611***
BF10>100
r= − .105
BF10= 1,02
r= − .131*
BF10= 0,47
r= − .301***
BF10>100
r= − .129*
BF10= 0,87
r= .010
BF10= 0,08
r= − .166*
BF10= 1,79
r= − .180**
BF10= 6,02
r= .087
BF10= 0,18
r= − .049
BF10= 0,14
r= .263***
BF10>100
r= .369***
BF10>100
r= .053
BF10= 0,10
r= .036
BF10= 0,09
r= .346***
BF10>100
Nota.Para factores de Bayes (BF10), la distribución previa beta especificada afirma que todas las correlaciones entre − 1 y +1 son igualmente plausibles a priori. ***pag <.001, **pag <
. 01, *pag <.05.
Tabla 3
Tabla 5
La bondad de ajuste de los modelos lineales generalizados con puntajes de rechazo global de
La bondad de ajuste de los modelos lineales generalizados con puntajes de selección de
alimentos de los niños como resultado y puntajes de factores cognitivos como predictores.
alimentos de los niños como resultado y puntajes de factores cognitivos como predictores.
Resultados
Modelo
predictores
DF
AIC
R2
pag-
Resultados
Modelo
predictores
DF
AIC
R2
Alimento
M0
Edad
1
1448
. 002
. 469
M1
Edad + Cognitivo
2
1441
. 039
. 003
3
1439
. 055
. 047
4
1440
. 059
. 332
4
1436
. 074
. 028
valor
comida mundial
rechazo
M0
Edad
1
1746
. 012
pagvalor
. 081
quisquillosidad
M1
Edad +
2
1728
. 090
<.001
Flexibilidad cognitiva
M2*
Edad +
flexibilidad
3
1726
. 108
M2
. 032
Flexibilidad cognitiva
M3
+ Inhibición
Edad +
flexibilidad + Inhibición
4
1728
M3
. 108
. 825
Memoria de trabajo
+ Inhibición +
M4*
memoria de trabajo
Edad +
Edad + Cognitiva
flexibilidad + Inhibición +
Flexibilidad cognitiva
M4
Edad + Cognitivo
Edad + Cognitivo
flexibilidad + Inhibición +
4
1726
. 112
. 272
Conocimiento del mundo
Flexibilidad cognitiva
Nota.*indica el mejor modelo. M4 tuvo el AIC más bajo y, por lo tanto, fue el mejor modelo para
+ Inhibición +
explicar la quisquillosidad alimentaria de los niños dados los datos.
conocimiento del mundo
Nota.*indica el mejor modelo. M2 tuvo el AIC más bajo y, por lo tanto, fue el mejor modelo para
el desempeño en flexibilidad cognitiva es consistente con las descripciones conductuales
explicar el rechazo global de alimentos de los niños dados los datos.
de ambos tipos de rechazo de alimentos. De hecho, los autores describen a los niños
neófobos y quisquillosos como demasiado rígidos (p. ej.,Carruth et al., 1998) en cuanto al
Tabla 4
repertorio de alimentos y rutinas de alimentación, no tolerando cambios en los alimentos
La bondad de ajuste de los modelos lineales generalizados con puntajes de neofobia alimentaria
ofrecidos, modos de presentación o procesos de cocción. En este sentido, los niños con
infantil como resultado y puntajes de factores cognitivos como predictores.
altos niveles de rechazo alimentario pueden ser incapaces de adaptarse a los cambios en
Resultados
Alimento
neofobia
Modelo
predictores
DF
AIC
R2
pag-
su dieta, rechazando un alimento antes de probarlo o un alimento previamente aceptado
valor
introducido en otro contexto.
M0
Edad
1
1477
. 023
. 018
M1*
Edad +
2
1454
. 117
<.001
3
1453
. 130
. 064
3
1456
. 118
. 652
3
1456
. 117
. 816
Curiosamente, también se ha encontrado una pobre flexibilidad
cognitiva en la anorexia.Roberts et al., 2007) y la obesidad (p. ej.,VerdejoGarcía et al., 2010). Aunque el deterioro de la inhibición se asocia
consistentemente con la obesidad en varios grupos de edad, incluidos los
niños.Groppe y Elsner, 2015;Rollins et al., 2014), no parece estar asociado
con el rechazo a la comida. Sin embargo, en estos estudios anteriores no se
disociaron los déficits de inhibición y flexibilidad cognitiva, o no se midió la
flexibilidad cognitiva. Mientras que, en estudios que disocian la flexibilidad
cognitiva y la inhibición, se encontró que la flexibilidad cognitiva es el factor
explicativo más poderoso de la obesidad (por ejemplo,Delgado-Rico et al.,
2012;Verdejo-- García et al., 2010).
Flexibilidad cognitiva
M2
Edad +
Flexibilidad cognitiva +
Inhibición
M3
Edad +
Flexibilidad cognitiva +
Memoria de trabajo
M4
Edad +
Flexibilidad cognitiva +
Conocimiento del mundo
Según nuestros hallazgos, la flexibilidad cognitiva se relaciona negativamente con el
Nota.*indica el mejor modelo. M1 tenía el AIC más bajo y, por lo tanto, era el mejor modelo para
rechazo a la comida en niños pequeños. Otros estudios también han encontrado una
explicar la neofobia alimentaria de los niños dados los datos.
relación negativa entre la flexibilidad cognitiva y la anorexia/obesidad en personas
mayores (Delgado-Rico et al., 2012;Roberts et al., 2007; Verdejo-García et al., 2010). Por lo
funciones (Miyake et al., 2000) y el conocimiento del mundo. De hecho, aunque la
tanto, valdría la pena explorar si estas últimas condiciones pueden ser una consecuencia
neofobia alimentaria y la quisquillosidad son dosconductualmentedisposiciones
del rechazo temprano a los alimentos sustentado por déficits de flexibilidad cognitiva. De
distintas (como se presenta en la introducción), existe un debate sobre si difieren
hecho, la evidencia sugiere que los altos niveles de rechazo temprano a los alimentos
en términos de factores subyacentes (Dovey et al., 2008). Nuestros resultados
están relacionados con la anorexia posterior.Herle et al., 2020;Nicholls & Viner, 2009) y la
revelaron que los altos niveles de neofobia alimentaria y de quisquillosidad se
obesidad (Knaapila et al., 2015;Proserpio et al., 2018). Nuestra conjetura, dados nuestros
asociaron negativamente con la flexibilidad cognitiva, aunque la asociación con la
datos, es que la flexibilidad cognitiva podría ser un eslabón perdido entre la alimentación
neofobia alimentaria fue significativamente más fuerte. más pobre
temprana
5
Apetito 176 (2022) 106102
D. Foinant et al.
Declaración ética
rechazo y el desarrollo de ciertos trastornos alimentarios durante la adolescencia y la
edad adulta. Nuestros datos requieren estudios longitudinales que analicen si los niños
Los estudios con participantes humanos fueron revisados y aprobados por
con el rendimiento de flexibilidad cognitiva más bajo y los niveles más altos de rechazo
de alimentos son los que corren un mayor riesgo de problemas relacionados con la salud
un acuerdo oficial entre la Inspección Académique de Côte-d'Or y la Universidad.
alimentaria más adelante en la vida.
El consentimiento informado por escrito para participar en este estudio fue
proporcionado por el tutor legal/pariente más cercano del participante.
Nuestros resultados también tienen implicaciones para la relación recientemente
documentada entre el rechazo de alimentos y el conocimiento. En consecuencia, los
niños con altos niveles de rechazo a los alimentos se desempeñan mal en las tareas de
categorización debido a su escaso conocimiento de los alimentos, en comparación con
Declaración de competencia de intereses
los niños con niveles más bajos de rechazo a los alimentos (p. ej.,Pickard et al., 2021a;
Rioux et al., 2016). En el presente estudio, el conocimiento del mundo no se asoció con el
Los autores declaran que la investigación se realizó en ausencia de
cualquier relación comercial o financiera que pudiera interpretarse como un
potencial conflicto de interés.
rechazo a los alimentos, lo que sugiere que las dificultades de los niños neófobos y
quisquillosos en las tareas de conocimiento relacionadas con los alimentos no son el
resultado de deficiencias en el conocimiento más general. En otras palabras, la relación
informada entre el rechazo de alimentos y el conocimiento sería específica del dominio
Reconocimiento
alimentario. Tal interpretación sería consistente con la idea de que las tendencias de
rechazo a los alimentos evitarían que los niños aprendan sobre los alimentos pero no
Agradecemos a Yannick Lagarrigue y Eleanor Stansbury por su ayuda en la
afectarían el aprendizaje en otros dominios de su vida.
recopilación de datos.
Sin embargo, nuestros datos son compatibles con otra interpretación de estos
Referencias
estudios previos. Las dificultades reportadas que encuentran los niños con alto
rechazo a los alimentos en las tareas de categorización pueden no ser el resultado
Callejón, TR y Potter, KA (2011). Neofobia alimentaria y búsqueda de sensaciones. En
de una falta de conocimiento sino, más bien, de dificultades para usar de manera
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Andraszewicz, S., Scheibehenne, B., Rieskamp, J., Grasman, R., Verhagen, J. y
flexible sus estructuras de conocimiento sobre los alimentos (es decir, categorías y
relaciones conceptuales como las contextuales). . De hecho, la flexibilidad
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10.1177/0149206314560412
cognitiva está involucrada en la identificación de las dimensiones
conceptualmente relevantes y/o en la selección de la representación conceptual
apropiada (Blaye y Jacques, 2009;Lagarrigue & Thibaut, 2020). Evidencia reciente
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Bellows, LL, Johnson, SL, Davies, PL, Anderson, J., Gavin, WJ y Boles, RE
dePickard et al. (2021b)sugiere que esto podría, de hecho, ser el caso. Los autores
observaron que los niños neófobos y quisquillosos no logran cambiar entre las
relaciones conceptuales apropiadas cuando cambian las demandas contextuales
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efectividad longitudinal a corto plazo de un programa de actividad física y nutrición
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(p. ej., de una asociación de "guión", como los alimentos de la cena, a una
asociación "temática", como los alimentos que se sirven juntos). Los estudios
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Brown, CL, Schaaf, V., B, E., Cohen, GM, Irby, MB y Skelton, JA (2016).
futuros deberían medir tanto el conocimiento de los alimentos de los niños como
la flexibilidad cognitiva para examinar estas dos posibilidades en detalle.
Sin embargo, el estudio actual tuvo varias limitaciones. Solo teníamos una
medida de cada función ejecutiva. La investigación futura debería introducir más
Asociación de la comida quisquillosa y la neofobia alimentaria con el peso: una revisión
sistemática. Obesidad infantil, 12(4), 247–262.https://doi.org/10.1089/chi.2015.0189
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Skinner, J., Houck, K., III, M, J., Coletta, F. y Ott, D. (1998). El
medidas de funciones ejecutivas para replicar los hallazgos actuales y precisar qué
aspectos se ven afectados (p. ej., inhibición de una respuesta prepotente versus
inhibición de información irrelevante). Además, en comparación con estudios
previos sobre el vínculo entre el rechazo a la comida y el conocimiento categórico,
fenómeno de "quisquilloso para comer": un marcador de comportamiento en los patrones de alimentación de
para medir el conocimiento de los niños no utilizamos una tarea de categorización
los niños pequeños. Revista del Colegio Americano de Nutrición, 17(2), 180–186.https://doi.org/
sino una prueba de vocabulario. Sin embargo, el vocabulario se considera un buen
10.1080/07315724.1998.10718744
indicador para evaluar el conocimiento de un individuo (p. ej.,Ashton et al., 2000;
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doi.org/10.1016/j.appet.2007.04.001
categorización utilizando estímulos de dominios de conocimiento no alimentarios
(por ejemplo, artefactos o animales). A pesar de estas limitaciones, esta
investigación es un paso importante porque contribuye a revelar asociaciones
DeCosta, P., Møller, P., p.øst, MB y Olsen, A. (2017). Cambiando la alimentación de los niños
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