La Justificación de los escogidos. La Justificación de todos los creyentes, es un regalo divino por parte de Dios el Padre para demostrar Su Gracia en el tiempo perfecto a través del sacrificio de nuestro Señor Jesucristo. El Padre desde la eternidad permitió a su Hijo, tomar el lugar de los pecadores que estaban destinados a recibir el castigo de su ira y de esta manera cumplir la demanda de las leyes divinas. En este pacto eterno, también, hizo libres a los justificados de la condenación eterna, imputándoles la justicia, honores y bendiciones en Cristo Jesús. El trato legal que el Juez tenía anteriormente con ellos también se terminó y comenzó una nueva relación Paternal entre Dios y los hombres; recibiendo sus cuidados, el amor, la provisión y disciplina. De la misma forma, en la nueva relación, el Padre da a sus hijos Fe, capacidad para obedecer y entender las cosas de Dios, provee también de sabiduría, santidad y los persevera hasta el día final. Esta justificación es una, y es válida para todos los creyentes, tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo testamento tal como lo enseña el apóstol Pablo en el libro de Romanos 4:22-24 “por lo cual también su fe le fue contada por justicia. Y no solamente con respecto a él se escribió que le fue contada, sino también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro,”.