Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 EVALUACIÓN DEL RIESGO DE INUNDACIÓN FLUVIAL PARA LOS SECTORES RIBERA ORIENTE RÍO VERGARA, RIBERA SUR RÍO BIOBÍO Y FUNDO LOS TRALPENES, COMUNA DE NACIMIENTO, REGIÓN DEL BIOBÍO. C. Morales Gajardo 1, C. Arias Tapia2 y S. Toledo Valdés3 RESUMEN: La comuna de Nacimiento, en la Región del Biobío, ha experimentado históricamente inundaciones fluviales durante temporadas invernales detonadas por grandes eventos de precipitación, debido a encontrarse en la confluencia de los ríos Biobío y Vergara. El presente estudio evalúa el riesgo de inundación fluvial en Nacimiento a fin de identificar las áreas más propensas a ser afectadas. Para esto, se hace una caracterización geomorfológica e hidrológica del sector, mediante investigación bibliográfica, trabajo en terreno y análisis con software especializado. Primeramente, se estima la recurrencia histórica de las inundaciones en la ciudad. La zona se emplaza hidrográficamente en la cuenca del río Biobío, y geomorfológicamente en un llano de sedimentación fluvial y aluvional parte de la Depresión Intermedia, características que, sumadas al tipo de cobertura de suelos, favorecen el riesgo de inundación. Se estudia la hidráulica de canales abiertos y se realiza modelación hidrológica con períodos de retorno entre 5, 25, 50 y 100 años, para los caudales del río Biobío y los del río Vergara. Con el Coeficiente de Manning, se estima la peligrosidad y el riesgo de inundación para las personas en las zonas estudiadas. De todo lo anterior, se desprende un mapa de peligro de inundación. Finalmente, se concluye que las zonas Ribera Sur Río Biobío y Ribera Oriente Río Vergara no son aptas para edificación de ningún tipo, puesto que poseen una peligrosidad extrema de inundación, mientras que la zona Fundo Los Tralpenes no posee peligro, por lo que el emplazamiento de viviendas no estaría contraindicado. Se recomiendan, entre las medidas de mitigación, la replanificación, la educación cívica y como medida estructural, un dique de contención. PALABRAS CLAVES: Inundación fluvial; río Biobío; río Vergara. ABSTRACT: Nacimiento city, in the Biobío Region, has historically experienced river floods during winter seasons triggered by large precipitation events, due to being at the confluence of the Biobío and Vergara rivers. This study evaluates the risk of river flooding in Nacimiento to identify areas most likely to be affected. For this, a geomorphological and hydrological characterization of the sector is made, through bibliographic research, field work and analysis with specialized software. First, the historical recurrence of floods in the city is estimated. The area is located hydrographically in the Biobío river basin, and geomorphologically in a plain of fluvial and alluvial sedimentation part of the Intermediate Depression, characteristics that, added to the type of soil cover, favor the risk of flooding. The hydraulics of open channels are studied, and hydrological modeling is carried out with return periods between 5, 25, 50 and 100 years, for the flows of the Biobío River and those of the Vergara River. With the Manning Coefficient, the dangerousness and risk of flooding for people in the studied areas is estimated. From all the above, a flood hazard map emerges. Finally, it is concluded the Ribera Sur Río Biobío and Ribera Oriente Río Vergara areas are not suitable for building of any kind, since they have an extreme danger of flooding, while the Fundo Los Tralpenes area is not dangerous, so the site housing would not be contraindicated. Among the mitigation measures, replanning, civic education and as a structural measure, a containment dam are recommended. KEYWORDS: River flooding; Biobío river; Vergara river. 1 Estudiante, Ingeniería Civil Geológica, Universidad Católica de la Santísima Concepción, CHILE, [email protected] Profesor asociado, Departamento de Ingeniería Civil, Universidad Católica de la Santísima Concepción, CHILE, [email protected] 3 Profesor asistente, Departamento de Ingeniería Civil, Universidad Católica de la Santísima Concepción, CHILE, [email protected] 2 Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 1. INTRODUCCIÓN Los riesgos de inundación fluvial son muy comunes a lo largo del mundo, siendo riesgos naturales que amenazan la vida humana, su actividad y propiedad. Estos se generan principalmente en temporadas invernales donde las precipitaciones aumentan su intensidad, generando crecidas que agrandan significativamente los caudales de los cauces pudiendo producir un desborde (MOP, 2008). Estas inundaciones traen consigo grandes pérdidas humanas, económicas y sociales, clasificándose como un desastre natural hidrológico, y como se define por el Centro de Investigaciones sobre la Epidemiología de Desastres (CRED, por sus siglas en inglés), se requiere una solicitud a nivel nacional de asistencia externa porque el evento causa grandes daños, destrucción y sufrimiento humano (Rodríguez, Vos, Below y Guha-Sapir, 2009). Para realizar un pronóstico del riesgo, es necesario realizar una evaluación científica a partir de la predicción de los eventos. Esto se puede lograr a partir de la cuantificación de la peligrosidad frente a una eventual inundación fluvial. De esta forma, se pueden identificar los sitios en donde hay mayores peligros y determinar la planificación necesaria para gestionar los riesgos (DEFRA, 2006). Cabe mencionar que las inundaciones fluviales son inevitables, pero lo que se puede hacer es disminuir las consecuencias negativas sobre la población con medidas preventivas, y no esperar a que vuelva a ocurrir una inundación para buscar soluciones. En Chile particularmente, la mayoría de las inundaciones se relacionan con el evento El Niño, Oscilación Sur (ENOS), conocido antiguamente como el Fenómeno del Niño (SHOA, 2020). Según estudios de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), estos eventos se dan desde la región del Valparaíso hacia el Sur, siendo en los años 2000, 2002 y 2006, los eventos más grandes, donde fueron afectadas 272.111 personas, dejando a 99.742 damnificados, 11.685 albergados, una suma de 26 muertos y 3 personas desaparecidas (Rojas, Martínez & Jaque, 2010). Específicamente en la cuenca del Biobío se han sufrido crecidas frecuentemente, según información recopilada por ONEMI (2006). Por ejemplo, en junio de 1940, se generaron los desbordes del estero Quilque en Los Ángeles y del estero Andalién y río Biobío en Concepción. Diez años después se presentaron intensas precipitaciones durante nueve días seguidos que también afectaron a ciudades como Los Ángeles, Mulchén y Santa Bárbara. Luego, en agosto de 1965 nuevamente las lluvias causan estragos, dejando muertos y damnificados en las comunas de Santa Bárbara, Los Ángeles, Mulchén, Nacimiento y Chiguayante (ONEMI, 2006). Luego en los años 2001, 2002 y 2003 nuevas inundaciones en las comunas de Hualqui, Santa Bárbara, Negrete y Nacimiento por el aumento repentino y excesivo del río Biobío (Cámara de Diputados, 2006). Por estos hechos se implementó la Ley 20.304 sobre Operación de Embalses frente a Alertas y Emergencias de Crecidas, donde se estipula que los operadores de embalses deben realizar un monitoreo diario de los embalses, dando información diaria de los caudales a la Dirección General de Aguas (DGA), además de mantener y aplicar el Manual de Control de Represas (MOP, 2008). Esto debido a que en el tramo alto de la Cuenca del río Biobío, se encuentra las centrales hidroeléctricas de ENDESA-Chile S.A., con sus embalses Pangue y Ralco, los cuales comenzaron sus operaciones en 1996 y 2004, respectivamente. El embalse Pangue recibe las descargas del embalse Ralco, teniendo este último el volumen suficiente para cerrar totalmente el paso del río Biobío, por ende, al abrir o cerrar sus compuertas tiene la capacidad de generar o evitar daños aumentando o disminuyendo el caudal del río, de ahí nace su importancia ante la gestión en pronósticos del tiempo para la descarga anticipada y gradual del agua (Ureta, 2010). La zona de estudio se encuentra en la comuna de Nacimiento, que está ubicada en la región del Biobío, a 550 km al Sur de Santiago y a 108 km al sureste de Concepción. Esta comuna cuenta con una superficie de 935 km2, donde residen 28.392 habitantes y se sitúa en las coordenadas 18H 705621 m E 5846451 m S (Figura 1.A). El sector urbano e industrial de la comuna se ubica en su costado este, a 40 km de la ciudad de Los Ángeles. Esto es debido a que la Planta Celulosa de CMPC se encuentra en ese sector, y el resto de la comuna se compone por territorios de actividad forestal, con bosques nativos y de monocultivo (PRAGMAC, 2018). La ciudad de Nacimiento se encuentra en la cuenca Río Biobío, rodeada por el curso medio del río Biobío por el norte y dividida en dos partes por el paso del río Vergara (Figura 1.B). La confluencia de ambos ríos ha propiciado eventos de desborde en años anteriores (Tabla 1), los cuales han causado consecuencias en la zona urbana, porque se ha hecho construcción de viviendas en la llanura de inundación, debido a la ausencia de una planificación territorial que considere estos riesgos. En específico, las zonas de interés propensas a ser Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 afectadas por inundaciones fluviales son Ribera Sur río Biobío, Ribera Oriente del río Vergara y Fundo los Tralpenes (Figura 1.B). A B Figura 1: Mapa de ubicación de la zona de estudio. (A) Nacimiento en la Región del Biobío. (B) Zonas propensas al riesgo en la comuna: 1 Ribera Sur Río Biobío, 2 Ribera Oriente Río Vergara, 3 Fundo Los Tralpenes. Modificado de Bing Satellite, 2020. Tabla 1: Historial de inundaciones en la comuna de Nacimiento (PRAGMAC, 2018). Fecha Área afectada 20/06/1960 Ruta CH-156 (Nacimiento – Coihue) 21/06/1960 Ruta Nacimiento - Los Ángeles y Confluencia de los ríos Biobío y Vergara. 22/06/1960 Ruta CH-156 (Nacimiento-Coihue) 10/06/1969 Zona Urbana 02/07/1974 Camino Nicodahue – Choroico 23/06/1990 Sector Puente Viejo 08/08/1991 Confluencia río Biobío y Vergara 11/07/2006 Desborde de río Biobío 13/07/2006 Desborde de río Biobío en sector Tralpenes El principal factor desencadenante de inundaciones en la comuna, han sido las precipitaciones, que han afectado a la comuna en los años 1960, 1969, 1974, 1990 y 2006, donde las lluvias torrenciales ocurridas el 11 de Julio de 2006 generaron la mayor inundación hasta la actualidad (Figura 2) (PRAGMAC, 2018). La precipitación registrada en 24 horas fue de 241 mm, cuadriplicándose la cantidad de precipitación de los días anteriores, aumentando así el caudal del río Biobío a 7.897 m3/s, correspondiente a un período de retorno de 202 años (Ureta, 2010). Este evento se generó debido a que la isoterma cero se desplazó desde los 1.260 m s.n.m. a los 2.300 m s.n.m, por lo que la precipitación se volvió líquida por casi 1.000 metros más de lo normal, llegando directamente al río y aumentando su caudal (Cámara de Diputados, 2006). En la comuna de Nacimiento en específico, cerca del 20% de la ciudad se vio afectada por este fenómeno, entonces es muy importante definir los sectores de mayor riesgo ya que eventos como este están propensos a ocurrir cada vez más debido al calentamiento global que está elevando la isoterma cero (Cámara de Diputados, 2006). Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 Cabe mencionar, que la crecida registrada por la DGA provocó un caudal de 15.900 m3/s en la desembocadura del río Biobío, clasificándose como un evento extraordinario, ya que en el Alto Biobío la pluviometría entregaba normalmente un período de retorno de 30 años, y en esa ocasión la pluviometría en el final del río Biobío fue de 150 años (Cámara de Diputados, 2006). El objetivo principal de este estudio es evaluar y zonificar el riesgo de inundación fluvial en la comuna de Nacimiento. Con esto se busca indicar las zonas con peligro de inundación, mediante un mapa de peligrosidad que delimite la superficie afectada donde es insegura la realización de actividades humanas como la edificación y la industria, y de esta forma contribuir a la gestión del riesgo de inundación en la comuna, recomendando medidas de mitigación ante un evento futuro. Para ello es necesaria la identificación de la topografía, geología, hidrología y otras características geológicas de la comuna. A B Figura 2: Inundaciones en población El Progreso. (A) Fotografía de inundación en junio de 1990. Anguita, comunicación personal. (B) Inundación julio 2006. El Nacimentano, 2009. 2. MARCO TEÓRICO 2.1. Inundación La inundación, es un proceso que se da de forma natural en los sistemas fluviales (Lytle & Poff, 2004), donde la relación entre la cantidad y distribución de las precipitaciones en una cuenca produce que el flujo rebose el cauce (Chow, Maidment y Mays, 1994). El suelo de una cuenca cuenta con una cierta capacidad de retención del agua ante fenómenos pluviométricos, producto tanto de la porosidad propia del suelo, como del tipo y cantidad de cobertura vegetal que este posee (Cámara de Diputados, 2006). No obstante, al alcanzar cierta cantidad límite de precipitación, se ve saturado, volviéndose impermeable, por lo que el agua que sigue cayendo comienza fluir sobre este suelo impermeable escurriendo hacia la parte baja de la cuenca generando una inundación (Cámara de Diputados, 2006). 2.1.1. Recurrencia histórica La recurrencia histórica es muy importante de evaluar, para tener claro los eventos que se repiten a través de los años. Para ello es necesario realizar el cálculo de intervalo de recurrencia histórica (RH) a partir del número de años comprendidos en el intervalo que se requiere estudiar (N) y el número de casos de inundaciones fluviales ocurridos en esos años de registro (M), como se estipula en la ecuación 1, de Keller y Blodgett (2004): 𝑅𝐻 = (𝑁 + 1)⁄ 𝑀 (1) Analizando la recurrencia histórica basado en la metodología de Rojas et al. (2010), se evaluó la tasa de recurrencia relacionada a la magnitud histórica, esto basándose en datos de la duración del evento, los damnificados y los daños socioeconómicos (Tabla 2). Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 Tabla 2: Magnitud histórica relativa para inundación fluvial (Rojas et al., 2010). Tipología Duración del evento (Número de días) Peso Damnificados Peso Daños socioeconómicos Peso Evaluación Final 2.2. Magnitud Histórica Relativa Inundación Grande Inundación Mediana Inundación Pequeña 4 días 2-3 días 1 día 3 80 y más personas 6 Daños viales importantes Viviendas con daños estructurales Pérdidas agrarias Rutas cortadas Daños Superiores a 10 millones 6 Inundación Grande Inundación Media Inundación Baja 2 41-80 personas 4 1 1-40 personas 2 Daños viales importantes Viviendas inundadas sin daño estructural Daños entre 1-10 millones Daños viales aislados Daños inferiores a 1 millón 4 2 13-15 9-12 5-8 Geomorfología y Geología El área de la comuna de Nacimiento corresponde en su mayoría a la Cordillera de la Costa (Figura 3), también denominada regionalmente como Cordillera de Nahuelbuta, más específicamente a su faldeo oriental. Esta presenta en el sector cerros de altitud media, entre los cuales destacan el Cerro Catiray (390 m s.n.m.) y Cerro Los Aromos (774 m s.n.m.). La mitad oriental de esta zona cordillerana es cruzada por el río Taboleo, desde su origen hasta su afluencia en el río Biobío. Alrededor de una dieciseisava parte de la superficie comunal forma parte de la Depresión Intermedia, determinada en el sector por un llano de sedimentación fluvial y aluvional (PRAGMAC, 2018), producto de la confluencia de los ríos Vergara y Biobío en el borde oriental de la comuna. Este llano se compone de arenas de color blanco provenientes del volcán Antuco depositadas en las playas del río Biobío, producto de la meteorización del intrusivo granítico de la costa (PRAGMAC, 2018). Es en este sector donde se ubica el área urbana (la ciudad de Nacimiento), así como el área de estudio. Figura 3: Unidades Morfoestructurales de Nacimiento. Modificado de PRAGMAC, 2018. La geología de la comuna está conformada en su mayoría por dos unidades, una de rocas intrusivas y la otra de rocas metamórficas, ambas asociadas al Paleozoico. Estas son, respectivamente, el Batolito de la Costa (Hervé, 1977) y la Serie Oriental (Aguirre et al., 1972) (PRAGMAC, 2018). Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 El Batolito de la Costa (Hervé, 1977), de edad Carbonífero-Pérmico, abarca el 80% del territorio comunal (PRAGMAC, 2018) y comprende rocas intrusivas como granodioritas y tonalitas (Ferraris, 1979). Por su parte, la Serie Oriental (Aguirre et al., 1972) corresponde a una unidad metamórfica de pizarras, filitas y metareniscas, asociadas al Paleozoico Superior. Sumado a lo anterior, se encuentran al oriente de la comuna los depósitos de sedimentación fluvial y aluvial de edad cuaternaria que conforman la Depresión Intermedia en el área de estudio. 2.3. Clima El clima en la cuenca Río Biobío se da en una transición entre dos tipos, el Mediterráneo y el Templado Húmedo, donde hacia el interior de la cuenca se pueden producir precipitaciones medias anuales que llegan a los 1.330 mm (CADE-IDEPE, 2004). En la comuna de Nacimiento en específico se presenta un clima templado cálido, con precipitaciones máximas concentradas en los meses junio y julio, que según la clasificación de Köpen y Geiger, corresponden a un clima de tipo Csb, donde las precipitaciones se concentran en invierno y se tiene una estación seca en los meses estivales (PRAGMAC, 2018). Las temperaturas medias mensuales en la comuna varían desde los 6,7°C a los 21°C, concentrándose las más altas en los meses de enero y febrero y las más bajas en junio y julio, según los datos registrados por la DGA en la Estación María Dolores de Los Ángeles (PRAGMAC, 2018). Además, según antecedentes de precipitaciones obtenidos desde la DGA (2020), se ha considerado la estación Río Biobío en Coihue como la más cercana a la comuna, donde se presenta la distribución de precipitaciones que se muestra en la Figura 4. Figura 4: Precipitaciones Medias Mensuales Estación Río Biobío en Coihue (2009-2019). Modificado de DGA, 2020. Considerando los datos de la Estación Río Biobío en Coihue entre los años 2009 y 2019, se muestra que en el mes de junio se alcanzan las mayores precipitaciones del año con una media de 147,8 mm y un máximo de 309,9 mm (DGA, 2020). Cabe mencionar, que en junio y julio de 2014 se alcanzaron las mayores precipitaciones registradas de los últimos diez años, llegando a 309,6 mm y 287,8 mm respectivamente, y sumando una cantidad anual de 1051,5 mm de precipitación, frente a una media anual de 588,85 mm (DGA, 2020). Estos antecedentes de precipitación por sí solos no constituyen un riesgo de inundación, sin embargo, este proceso favorece la transformación directa de precipitación-caudal, donde la precipitación se transforma en caudal de ríos, cuando existe mucha cantidad de agua cayendo en un corto período de tiempo (Cámara de Diputados, 2006). 2.4. Antecedentes Hidrológicos e Hidrográficos La zona de estudio se encuentra emplazada en la cuenca del río Biobío, que corresponde a una de las cuencas más grandes del país con una superficie de 24.264 km2, comprendiendo parte de las provincias Concepción y Biobío, en la región del Biobío, y la provincia de Malleco, en la región de la Araucanía (PRAGMAC, 2018). El río Biobío tiene una longitud de 380 km, posee un régimen pluvio-nival, que en los meses de junio y julio cuenta con caudales máximos mensuales de 2.200 m3/s y en los meses de marzo y abril registra sus caudales mínimos mensuales entre los 180 y 220 m3/s (Valdovinos & Parra, 2006). Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 Este río nace en la Cordillera de Los Andes, desde la ribera oriental de la laguna Gualletué a 1.160 m s.n.m. (CADE-IDEPE, 2004), donde posee un caudal promedio de 30 m3/s (Valdovinos & Parra, 2006). Luego avanza por la llanura central hasta evacuar sus aguas en el sector Norte del golfo de Arauco, donde se tiene un caudal medio anual que va entre los 300 y 900 m3/s (Valdovinos & Parra, 2006). Cabe mencionar, que se estiman crecidas máximas de 8.000 m3/s en la desembocadura y que llegarían a los 17.000 m3/s al menos una vez cada cien años (Valdovinos & Parra, 2006). En su curso medio, el río Biobío recibe las aguas del río Vergara, en Nacimiento (Figura 5). El río Vergara es considerado el tributario meridional más importante del río Biobío el cual nace de la confluencia de los ríos Malleco y Rehue a pocos kilómetros de Angol (CADE-IDEPE, 2004). Luego, el río Biobío entre la confluencia con el Vergara y el Laja, recibe las aguas del río Taboleo y Guaqui (CADE-IDEPE, 2004). Figura 5: Cuenca hidrográfica río Biobío con sus principales afluentes. Valdovinos & Parra, 2006. 2.4.1. Frecuencia de las inundaciones Para realizar la estimación de los caudales, estos deben ir asociados a períodos de retorno donde se evalúan datos históricos. El medio oficial que entrega esta información es la Dirección General de Aguas (DGA), perteneciente al Ministerio de Obras Públicas de Chile. Esta estimación de la frecuencia de las inundaciones permite comprender el comportamiento probabilístico de los caudales máximos pudiendo estimar la magnitud de la crecida en períodos futuros (León, 2018). Para generar el mapa de riesgo de inundación del Río Biobío en la comuna de Nacimiento se utiliza la información fluviométrica de la Estación Río Biobío en Coihue, ubicada en Negrete en las coordenadas 18H 712964 m E 5840300 m S. Esta registra usualmente caudales medios mensuales mayores en los meses de lluvias y en los meses de deshielos, debido a su régimen pluvio-nival (CADE-IDEPE, 2004). Para determinar los caudales asociados a los períodos de retorno de 5, 25, 50 y 100 años se cuenta con los datos de caudales máximos entre los años 1983 y 2019 en el río Biobío, recuperados de DGA (2020). Esto se realiza en base a tres distribuciones probabilísticas: Normal, Gamma y Gumbel. A partir de la realización de estas tres distribuciones, se determina cuál de ellas se ajusta mejor a los datos para utilizarla en el estudio. Para la obtención de los caudales en el río Vergara en Nacimiento, no existe una estación fluviométrica específicamente en la zona, las dos más cercanas corresponden a la Estación Río Vergara en Tijeral y Estación Río Renaico en Longitudinal, ubicados a 25 km y 44 km respectivamente. Sin embargo, existen afluentes que no están considerados en ellas por lo que no es una información cercana a la realidad de la zona de estudio. Entonces, como no se cuenta con información fluviométrica, es necesario calcular la crecida del río Vergara a partir de información pluviométrica de precipitaciones diarias para período de retorno de 10 años según el Mapa de Isoyetas de Los Ángeles (MOP, 1991). Cabe mencionar, que el río Vergara se caracteriza por poseer Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 un régimen Pluvial el que se identifica por presentar caudales medios mensuales máximos en los meses de mayores precipitaciones en el valle central, los que corresponden a junio y julio (CADE-IDEPE, 2004). Mediante el Manual de cálculo de crecidas (MOP, 1995) se obtiene el caudal máximo en período pluvial (Q) correspondiente al río Vergara para la zona de estudio. Esto se obtiene mediante un coeficiente de escorrentía (C) asociado a cada período de retorno, la intensidad de la lluvia en cada período (i) y el área pluvial aportante (A) (Ecuación 2). 𝑄= 𝐶∗𝑖∗𝐴 (2) 3,6 2.4.2. Tiempo de retraso del peak Se debe tener en cuenta que en la parte alta de la cuenca del río Biobío se encuentran los embalses Ralco y Pangue, con un volumen de almacenaje de 1400 y 80 millones de m3 respectivamente (Cámara de Diputados, 2006), los cuales tienen información inmediata acerca de las precipitaciones, los caudales y sus crecidas. Por esta razón, ellos son los encargados de informar apenas se produzca una situación crítica que pueda producir una inundación que afecte a los sectores bajos de la cuenca según lo estipulado en la Ley 20.304, antes mencionada, donde se les obliga a los operadores a mantener un monitoreo de los caudales de afluentes y efluentes e informar diariamente aquellos registros a las autoridades (MOP, 2008). De tal manera ocurrió en 2006, ocasión en la cual las centrales de ENDESA dieron aviso apenas estaban abriendo las compuertas quedando un tiempo de 20 horas para que la crecida presentara un peak en la desembocadura (Cámara de Diputados, 2006) y entre 8 y 9 horas para llegar a la comuna de Los Ángeles (Ureta, 2010). 2.5. Cobertura de los suelos La inundación está controlada por las características geomorfológicas o del relieve, donde si se presenta un valle amplio se da paso a la expansión de las aguas, la que a su vez se puede ver controlada por la presencia de bosques naturales o acentuada por el talado y reemplazo de estos (Popolizio, 1983). En las llanuras de inundación, la presencia de vegetación arbórea protege a los suelos de la erosión ante la alta movilidad de las aguas; además, se favorece la perennidad de los cursos fluviales si existe la presencia de un bosque, ya que se favorece la infiltración (Popolizio, 1983). Cabe mencionar que la existencia de bosques de monocultivos aledaños a los ríos trabajan como filtros que retardan y contienen el flujo de las aguas, disminuyendo su energía; esto no detiene la inundación en sí, pero retarda su llegada (EcuRed, 2019). La cobertura vegetal puede ser evaluada mediante imágenes multitemporales otorgadas por los sistemas satelitales como LANDSAT, SPOT y NOAA (Muñoz, 2013). Esta cobertura vegetal se puede expresar mediante el uso de índices de vegetación, y se define como un parámetro calculado a partir de los valores de reflectancia a distintas longitudes de onda (Muñoz, 2013). Rouse et al. (1974), propone para esto el Índice de Vegetación Diferencial Normalizado, conocido por sus siglas en inglés como NDVI, que se basa en el análisis de las pendientes minimizando los efectos topográficos (Muñoz, 2013). El objetivo de este índice es la discriminación entre las cubiertas vegetales en base al comportamiento reflectivo que se presente, utilizando bandas rojo e infrarrojo cercano, correspondientes a las bandas OLI 4 y 5 en Landsat-8 (Olivo, 2017). Su escala va de -1 a 1, donde 0 representa el comienzo de la ausencia de vegetación y los valores negativos representan superficies sin vegetación (Muñoz, 2013). La ecuación (3) se utiliza para cálculo del NDVI, donde se considera la Reflectividad del píxel i en la banda Infrarrojo cercano (𝜌𝑖,𝐼𝑅𝐶 ) y la Reflectividad del píxel i en la banda roja (𝜌𝑖,𝑅 ) (Olivo, 2017). 𝜌 −𝜌 𝑁𝐷𝑉𝐼𝑖 = 𝜌𝑖,𝐼𝑅𝐶 +𝜌𝑖,𝑅 𝑖,𝐼𝑅𝐶 (3) 𝑖,𝑅 Los rangos de NDVI necesarios para discriminar entre las zonas con mínima y máxima cubierta vegetal son los presentados en la Tabla 3. Tabla 3: Valores de NDVI para la zonificación de la cubierta vegetal (Modificado de Olivo, 2017). Rangos NDVI <0 0 – 0,2 0,2 – 0,4 0,4 – 0,6 > 0,6 Presencia de agua y/o áreas con sombra Suelo desnudo Vegetación escasa + Suelo Vegetación dispersa Vegetación densa Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 2.6. Hidráulica de canales abiertos Para explicar la distribución de las velocidades de los caudales, considerando los efectos de roce y las pérdidas en un canal abierto, es importante tener claro el radio hidráulico (𝑅), donde se relaciona la sección del cauce con el perímetro mojado, como se muestra en la ecuación (4) (León & Martínez, 2013). 𝑆𝑒𝑐𝑐𝑖ó𝑛 𝑅 = 𝑃𝑒𝑟í𝑚𝑒𝑡𝑟𝑜 𝑀𝑜𝑗𝑎𝑑𝑜 (4) Para modelar la velocidad media del agua (𝜈) en una sección del cauce, se utiliza la Fórmula de Chézy, la cual relaciona el radio hidráulico, la pendiente de la línea de agua (𝑆) entre dos secciones y el coeficiente de Chézy (𝐶), como se expresa en la ecuación (5) (León & Martínez, 2013). 𝜈 = 𝐶√𝑅 ∗ 𝑆 (5) Cabe mencionar que para obtener el coeficiente de Chézy, se debe aplicar la ecuación de Manning (6), donde se necesita el parámetro de rugosidad de Manning (León & Martínez, 2013). 1 1 𝐶 = 𝑛 𝑅6 (6) 2.6.1. Coeficiente de Manning Existen diferentes métodos para la medición del volumen de los caudales de escorrentía en los ríos. Uno de los métodos más utilizados es la ecuación de Manning que refleja la cantidad de resistencia dinámica del flujo, fundamentándose en los parámetros de la sección hidráulica de la estructura de conducción y en la rugosidad de esa sección. Estos dependen del área del cauce, el perímetro mojado, el radio, la pendiente hidráulica y el más difícil de estimar, el coeficiente de rugosidad “n” de Manning (Osío, Valencia, Guevara & Cartaya; 2000). Este coeficiente es muy variable y depende de la experiencia del proyectista, según estudios de Burnham y Davis (como se cita en Fernández, León, Rodríguez, Martínez & Meneses, 2018) y lo que hace es representar la cantidad de resistencia al movimiento del agua en los cauces en función de la rugosidad, la vegetación, las irregularidades del cauce, el perímetro mojado, las obstrucciones, el caudal, el nivel y el cambio estacional (Chow, 1959). Primero que todo, la rugosidad del perímetro depende del material que lo recubre. Mientras no haya irregularidades el “n” se mantiene bajo y no se afecta por el cambio de profundidad del flujo, en caso contrario, si hay rugosidad del perímetro, el “n” es alto y afectado por la profundidad (León & Martínez, 2013). La vegetación retarda el flujo y este retraso se obtiene evaluando el aumento de “n” que depende de la profundidad relativa del agua, de la altura de la vegetación, de su tipo y de su densidad. Las irregularidades se dan por las variaciones en el perímetro mojado, siendo las más bruscas las que afectan el valor de “n” y las obstrucciones en el área mojada de la sección transversal como árboles, arbustos, plantas acuáticas y escombros también tienen influencia en el aumento del valor de “n” (León & Martínez, 2013). En cuanto a la alineación en planta, si el grado de curvatura es pequeño influye en el valor de “n”. La sedimentación en el lecho del cauce debe ser considerado como un proceso cambiante en el tiempo y que influye en el cambio de “n” (León & Martínez, 2013). El gasto y la profundidad relativa son influyentes en el valor de “n”, porque cambia a medida que cambia la profundidad, a mayor profundidad menor “n” (León & Martínez, 2013). Para calcular la “n” de Manning se debe tener en cuenta que sirve para canales en donde se tiene un alto número de Reynolds y altas rugosidades a lo largo del perímetro, siendo aplicable solo a flujos altamente turbulentos (León & Martínez, 2013). A continuación, se presentan los diferentes métodos utilizados en este estudio para la determinación del “n” de Manning (Chow, 1959; León & Martínez, 2013; Fernández et al., 2018). 2.6.2. Método de Cowan En este procedimiento se tiene n y m como se muestra en la ecuación (7), que son obtenidos de la Tabla 4, en función de los parámetros detallados en los párrafos anteriores (Chow, 1959). 𝑛 = (𝑛0 + 𝑛1 + 𝑛2 + 𝑛3 + 𝑛4 ) ∗ 𝑚5 (7) Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 Tabla 4: Valores de “n” para la fórmula de Cowan (Chow, 1959). Condiciones del canal Material del perímetro Grado de irregularidad Variación de la sección transversal Efecto de las obstrucciones Vegetación Curvaturas en planta Tierra Roca cortada Grava fina Grava gruesa Suave Menor Moderada Severa Gradual Ocasional Frecuente Despreciable Menor Apreciable Severo Baja Mediana Alta Muy alta Menores Apreciables Severas Valor 0,020 0,025 0,024 0,028 0,000 0,005 0,010 0,020 0,000 0,005 0,010 a 0,015 0,000 0,010 a 0,015 0,020 a 0,030 0,040 a 0,060 0,005 a 0,010 0,010 a 0,025 0,025 a 0,050 0,050 a 0,100 1,000 1,150 1,300 n0 n1 n2 n3 n4 m5 2.6.3. Método del Servicio de Conservación de Suelos de Estados Unidos (S.C.S.) El método de S.C.S, ahora Servicio de conservación de los Recursos Naturales (N.R.C.S.), utiliza la ecuación (8) y es parecido al método de Cowan, ya que usa la Tabla 4, donde “n” se determina a partir de un valor básico independiente, donde la turbulencia se usa como indicador de retardo (Fernández et al., 2018). 𝑛 = (𝑛1 + 𝑛2 + 𝑛3 + 𝑛4 + 𝑛5 ) (8) En este caso, como se señala en Fernández et al. (2018), las equivalencias con Cowan son que n1= n0; n2= n4; n3= n1; n4= n3; y n5 corresponde a una modificación por alineación, donde se consideran las curvas (𝑙𝑐) y tramos rectos en el cauce (𝑙𝑟). Ante esto, m5=0,00 si (𝑙𝑐/𝑙𝑟) posee valores entre 1,0 y 1,2. En cambio si los valores van entre 1,2 y 1,5; m5=0,15. Por último, si los valores son mayores a 1,5; m5=0,30, quedando 𝑛5 determinado por la ecuación (9). 𝑛5 = (𝑛1 + 𝑛2 + 𝑛3 + 𝑛4 ) ∗ 𝑚5 (9) 2.6.4. Método basado en fotografías Este método será utilizado según lo expuesto por Chow (1959) y es considerado de los más útiles, en este caso se compara la zona de estudio con fotografías de otros cauces que han sido estudiados anteriormente, a los cuales fue otorgado un coeficiente de rugosidad (Figura 6). Figura 6: Algunas fotografías de clasificación de Chow para valores de “n”. Modificado de Chow, 1959. Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 2.7. Peligro de inundación Según DEFRA (2006), el peligro de inundación se refiere a las condiciones en las que es probable que las personas sean afectadas, es decir, que sean arrastradas o se ahoguen en la inundación. Este criterio incluye en su evaluación la velocidad del flujo, la profundidad y la presencia de escombros, para luego poder clasificar la peligrosidad. Para estimar las profundidades y velocidades de las inundaciones es necesario utilizar un modelo hidráulico unidimensional, con el software HEC RAS 5.0.7, desarrollado por el Centro de Ingeniería Hidrológica para el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos (en inglés Hydrologic Engineering Center para el U.S Army Corp of Engineers). Este software permite simular flujos unidimensionales en régimen permanente gradualmente variado a partir de la ecuación de conservación de la energía. Además, es capaz de incorporar diversos tipos de estructuras, como puentes, coberturas, entre otros, resolviendo el flujo a través de ellas con formulaciones particularizadas (DEFRA, 2006). La clasificación del peligro de inundación (𝐻𝑅) se calcula usando la ecuación (10), donde se considera la profundidad de la inundación (𝑑), la velocidad (𝑣) y el factor de escombros (𝐷𝐹) que se obtiene de la Tabla 5. Finalmente, para calcular el peligro de inundación se deben combinar los resultados obtenidos y agregar una puntuación de escombros (DEFRA, 2006). 𝐻𝑅 = 𝑑 ∗ (𝑣 + 0,5) + 𝐷𝐹 (10) Tabla 5: Orientación sobre los factores de escombros para diferentes casos (Modificado de DEFRA, 2006). Profundidad Pasto/ Cultivable Bosque Urbano 0 a 0,25 m 0,25 a 0,75 m 𝑑>0,75 m y/o 𝑣 >2 0 0 0,5 0 0,5 1 0 1 1 Luego, se debe generar un mapa de peligrosidad frente a la inundación fluvial, que muestre la ubicación de las diferentes clases de peligro en áreas propensas a inundaciones (DEFRA, 2006). Esto se desarrolla en base a datos de caudales y niveles de suelo, donde se plasmen las condiciones hidráulicas que afectan la seguridad de las personas (Tabla 6). Tabla 6: Peligro para las personas (Modificado de DEFRA, 2006). 𝒅 ∗ (𝒗 + 𝟎, 𝟓) Grado de peligro de inundación <0,75 Leve 0,75 – 1,25 Moderado 1,25 – 2,5 Significativo >2,5 Extremo Descripción Precaución. “Zona de inundación con flujo de agua poco profunda o agua estancada profunda” Peligroso para algunos (por ejemplo, niños). “Peligro: Zona de inundación con agua profunda o que fluye rápido” Peligroso para la mayoría de la gente. “Peligro: Zona de inundación con aguas profundas de flujos rápidos” Peligroso para todos. “Peligro extremo: Zona de inundación con aguas profundas y de flujos rápidos”. Finalmente, en la Tabla 7 se muestran las categorías de peligro de inundación siguiendo lo estipulado en la fórmula (10). Tabla 7: Valores de peligro de inundación (Modificado de DEFRA, 2006). 𝑯𝑹 = 𝒅 ∗ (𝒗 + 𝟎, 𝟓) + 𝑫𝑭 Desde Hasta Clasificación Clase 1 Clase 2 Clase 3 0,75 1,50 2,50 1,50 2,50 20,00 Peligroso para algunos Peligroso para la mayoría Peligroso para todos Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 2.8. Riesgo de inundación El riesgo de inundación para las personas combina la información del peligro de inundación y la vulnerabilidad a la inundación, considerando un número de eventos para estimar un valor promedio anual individual o social del riesgo (DEFRA, 2006). El modelo de riesgo está basado en el peligro de inundación, la vulnerabilidad del área, la vulnerabilidad de las personas y el número de personas expuestas al riesgo, como se muestra en la Figura 7, para lo cual es importante tener claro el número oficial de habitantes de la comuna (DEFRA, 2006). Figura 7: Riesgo de Inundación. Modificado de DEFRA, 2006. 2.8.1. Vulnerabilidad del área La vulnerabilidad del área describe las características del área de la llanura de inundación que puede afectarse por exponerse al peligro de inundación (DEFRA, 2006). La vulnerabilidad del área de estudio se define en función a tres variables basadas en la DEFRA (2006) y URA (2013). Estas variables son la velocidad inicial del evento, la naturaleza del área y la alerta de inundación, a las cuales se les va asignando un puntaje de 1-3, los cuales varían entre muy bajo con 1 punto y muy alto con 9 puntos (Tabla 8). Tabla 8: Puntuación para parámetros de vulnerabilidad del área (DEFRA, 2006; URA, 2013). Parámetro Área de riesgo bajo (1 pto.) Área de riesgo medio (2 ptos.) Velocidad inicial Inicio de las inundaciones es muy gradual (muchas horas) Naturaleza del área Apartamentos de varios pisos Inicio de las inundaciones es gradual (aprox. una hora) Zona residencial típica (viviendas de 2 plantas); propiedades industriales y comerciales Alerta de inundación Operativo y asociado a planes de emergencia Operatividad limitada o no testeada Área de riesgo alto (3 ptos.) Inundaciones rápidas Bungalows, viviendas, carreteras con mucho tráfico, parques, escuelas, etc. No existente 2.8.2. Vulnerabilidad de las personas La vulnerabilidad de las personas describe las características de los habitantes que pueden ser afectados por la inundación y su habilidad para responder en favor de su propia seguridad y de sus pertenencias. Las variables consideradas en este aspecto son el porcentaje de residentes mayores de 75 años (𝑅75) y el porcentaje de residentes que tengan enfermedades de larga duración (𝑅𝐸) (DEFRA, 2006). Para determinar esta vulnerabilidad de las personas (𝑌), se considera un valor expresado en porcentaje como se expresa en la ecuación (11) (DEFRA, 2006). 𝑌 = %𝑅75 + %𝑅𝐸 (11) 2.8.3. Población expuesta La población expuesta corresponde a la cantidad de personas que residen en la zona propensa a inundarse (DEFRA, 2006). Esto puede delimitarse por manzanas y por registros del último censo acerca de la cantidad de personas que habitan el área. Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 3. METODOLOGÍA Para entender el contexto en el que se produce la inundación en la zona de estudio, se analiza la geomorfología, geología, topografía e hidrogeología. Además, factores importantes como el clima y la vegetación existente también son estudiados, para determinar su contribución en el desborde de los ríos. 3.1. Investigación bibliográfica Se realiza trabajo de gabinete pre-terreno, en donde se genera la recopilación de información bibliográfica de la zona de estudio, como la geología, geomorfología, topografía, hidrología, clima, vegetación e inundaciones históricas. Se define además los sectores propensos a presentar riesgo mayor de inundación, se observan imágenes satelitales de la zona, información y fotografías de inundaciones anteriores, y se organiza las salidas a terreno. 3.2. Investigación en terreno Se procede a la observación y caracterización de las zonas propensas a la inundación, se caracterizan las condiciones hidrológicas, el tipo de suelo predominante en la zona y la cobertura de suelos en las llanuras de inundación. También, se visitan viviendas que fueron afectadas durante la inundación del año 2006, generando una encuesta para la obtención de detalles de las personas afectadas, acerca de la velocidad de la inundación, los sectores que fueron afectados y si existió un sistema de alerta o algún plan de contingencia durante el evento. 3.3. Trabajo con software En trabajos de gabinete post-terreno se utilizan diferentes softwares donde se genera mapa geológico, mapa de pendientes, mapa de vegetación NDVI y mapa de peligro de inundación fluvial (uso de CIVIL 3D, HEC-RAS 5.0.7 y QGIS 3.8.3). Además, analizando la información obtenida de los datos recopilados bibliográficamente y en terreno, se recomiendan medidas orientadas a la mitigación del riesgo de inundación en la zona de estudio. 4. RESULTADOS 4.1. Recurrencia histórica A partir de la Tabla 1 se tiene que para el período entre 1960 y 2006, hubo un total de seis eventos de inundación fluvial que han afectado la comuna de Nacimiento. En junio del año 1960, la comuna fue aislada porque la inundación alcanzó una altura de agua de 1,5 metros (PRAGMAC, 2018). En julio de 1969 gran parte de lo que es ahora población El Progreso resultó inundada por el desborde en la confluencia de los ríos Vergara y Biobío y donde cerca de 20 familias resultaron damnificadas (PRAGMAC, 2018). Sin embargo, la inundación que más estragos ha causado es la de julio de 2006, donde el desborde del río Biobío dejó pérdidas materiales y humanas, ya que hubo dos personas fallecidas y 1.000 hogares damnificados (PRAGMAC, 2018). Desde esta inundación, no hay registros de que hayan ocurrido nuevamente hasta el año 2020. De acuerdo con la distribución de las inundaciones, solo en las décadas de los ‘60 y en la de los ‘90 se registraron dos eventos (Figura 8). El menor número de eventos se produjo en la década de los ‘80 y luego en el período comprendido entre 2010-2019. Figura 8: Frecuencia de inundaciones fluviales por década en Nacimiento (1960-2010). Elaboración Propia, 2020. Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 Ahora, de acuerdo con la clasificación de los eventos, se determinan diferentes magnitudes para cada uno de ellos, donde la Recurrencia Histórica (RH) es de 7,83 años y se ha calculado con 46 años de registros y un total de 6 inundaciones en dicho tiempo. Esta RH indica que cada año existe una probabilidad de inundación de un 12,77%. Además, la Magnitud Histórica Relativa de cada una de las inundaciones según las tipologías expuestas en la Tabla 2, son las presentadas en la Tabla 9. Tabla 9: Magnitud histórica relativa para inundaciones fluviales en Nacimiento (Elaboración Propia, 2020). Evento Peso Evaluación Final 1960 1969 1974 1990 1991 2006 8 11 5 5 5 14 Inundación Baja Inundación Media Inundación Baja Inundación Baja Inundación Baja Inundación Grande Una de las causas por las que la inundación del año 2006 es clasificada como una Inundación Grande, es debido a la gran cantidad de daños socioeconómicos, incluyendo daños viales, de viviendas y pérdidas agrarias, como también la alta cantidad de damnificados. Esto se puede considerar directamente relacionado al crecimiento urbano de la comuna, la cual ha crecido en sectores cercanos a los cauces de los ríos según los registros del Plan de Desarrollo Comunal 2018-2021 (PRAGMAC, 2018). 4.2. Zonificación Geomorfológica y Geológica de la zona propensa a inundación El río Biobío recorre sectores de bajas pendientes debido a estar en la Depresión Intermedia, por ello presenta una forma meándrica a 5,3 km al este de la zona de estudio. La llanura aluvial de este río está compuesta por depósitos fluviales asociados al Cuaternario con baja pendiente. El área de estudio se posiciona en suelos sedimentarios de terrazas fluviales y agrícolas (PRAGMAC, 2018). Las terrazas fluviales, corresponden a depósitos de gravas, arenas y sedimentos finos que se encuentran formando grandes plataformas alrededor de las cuencas de los ríos Biobío y Vergara. Y los sedimentos de suelos agrícolas se caracterizan por ser arcillosos y de color café a café-rojizo (Figura 9) (Ferraris, 1979). Figura 9: Mapa Geológico de Nacimiento y sus respectivas zonas de interés. Modificado de Ferraris, 1979. Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 Los sedimentos de los valles actuales no son extensos en la comuna y, si bien no influyen en la zona de estudio, nos dan una idea de la energía con que el río Biobío puede transportar sedimentos en el sector. Estos suelos están compuestos de gravas y arenas generadas en paleocauces (PRAGMAC, 2018), predominantemente de origen basáltico y andesítico (Ferraris, 1979). Según lo observado en las visitas a terreno realizadas como parte de esta investigación en diciembre de 2020, el río Biobío presenta un cauce de baja profundidad, donde la ribera norte del río se eleva hasta 3 metros y se encuentra cubierta por vegetación alta correspondiente a bosques (Figura 10.A), mientras que en la ribera sur se observa una llanura aluvial a nivel de las aguas, compuesta por materiales de sedimentación, esto es arena fina grisácea y gravas gruesas mayores a 30 mm (Figura 10.B). A B Figura 10: (A) Riberas de río Biobío y vista del cauce. (B) Material sedimentario de ribera Sur. Fotografías tomadas en diciembre de 2020. Por su parte, el Río Vergara (Figura 11.A) se presenta con baja sinuosidad en la zona de estudio. En su ribera oeste cuenta con materiales de sedimentación correspondientes a arena gruesa de entre 2 y 5 mm, principalmente compuesta de cuarzo (Figura 11.B) con vegetación baja y escasa. En su ribera este se intercala vegetación alta de bosques de Eucaliptus y zonas ocupadas por actividades agrícolas. Ambas llanuras de inundación del río Vergara no se elevan más de un metro con respecto a la superficie del agua del cauce. A B Figura 11: (A) Riberas de río Vergara y vista del cauce. (B) Material sedimentario de ribera oeste. Fotografías tomadas en diciembre de 2020. La acción recurrente de los desbordes de los ríos va provocando cambios morfológicos en los ríos y sus riberas, haciendo que exista retroceso erosivo en las orillas y formación de nuevos depósitos. En el caso específico de la afluencia del río Vergara en el río Biobío, se puede observar en la Figura 12 una tendencia a la formación de islas, y luego barras, a la vez que el punto de unión de ambos cauces se corre progresivamente al noroeste, Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 lo cual denota una disminución brusca de la energía del río Vergara, y que esta energía no se traspasa por completo al río Biobío al unirse ambos. Esto no sólo da razón de los depósitos fluvio-aluviales del área de estudio, sino que también indica que en un evento de inundación del río Vergara, este depositará en el sector una porción importante de los sedimentos que transporta. Figura 12: Diferencia en la cantidad de depósitos fluviales en la zona de confluencia de los ríos Vergara y Biobío entre los años 2007 y 2020. Modificado de Google Earth, 2020. 4.3. Cobertura vegetal Como se observa en la Figura 13, la cobertura vegetal de la comuna de Nacimiento en la mayoría del territorio se encuentra cubierto por vegetación densa, tratándose de bosques de monocultivo de eucaliptus y pinos y en un grado menor bosques nativos. La zona urbana se ubica en un extremo de la comuna, desarrollándose alrededor de la Planta de Celulosa CMPC, que según la clasificación de Rangos NDVI, posee vegetación escasa en su mayoría y ciertos sectores de vegetación dispersa. Además, como se pudo observar en las visitas a terreno, los suelos de uso agrícola están concentrados principalmente en las riberas de los ríos. Figura 13: Mapa de cobertura vegetal comuna de Nacimiento. Elaboración propia, 2020. Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 Cabe mencionar, que los bosques de eucaliptus ubicados en las riberas del río Biobío del Fundo Tralpenes (Figura 14.A) funcionaron como una excelente barrera natural, disminuyendo la velocidad de las aguas en la inundación del año 2006 y evitando la llegada de escombros de gran tamaño a Villa Las Araucarias, según lo mencionado por los vecinos de la zona entrevistados como parte de esta investigación. Esto se respalda con el estudio de Popolizio (1983) donde se especifica que la vegetación actúa frenando y disipando la energía hídrica, en gran medida en las bajas pendientes, como es en el caso de estudio. En la ribera del río Vergara, existe intercalación de bosques forestales de eucaliptus y terreno agrícola que se utiliza para la plantación de trigo principalmente (Figura 14.B). La ribera este del río es la más propensa a sufrir inundaciones, ya que, por ser una zona de menor pendiente el rebalse del río toma preferentemente esa dirección. Este sector se clasifica como Zona no Edificable por la Ordenanza Local del Plan Regulador Comunal de Nacimiento (Municipalidad de Nacimiento, 2009). A B Figura 14: (A) Barrera natural de bosques de eucaliptus junto al río Biobío en Fundo Tralpenes. (B) Ribera de Río Vergara con cobertura de suelo agrícola y forestal. Modificado de Bing Satellite, 2020. 4.4. Caudales máximos Para el análisis hidrológico se utilizaron caudales máximos de la Estación Rio Biobío en Coihue para el río Biobío, proporcionados por DGA. Este análisis se lleva a cabo a partir de datos obtenidos desde el año 1980 hasta 2020, y son analizados con las distribuciones de Gumbel, Gamma y Normal, donde se escoge la distribución mejor ajustada mediante el test de Kolmogorov-Smirnov con un nivel de confiabilidad de 95%, por lo que se elige la distribución que tenga el menor delta teórico. Estos caudales se calcularon para períodos de retorno de 5, 25, 50 y 100 años (Tabla 10). Tabla 10: Caudal Máximo río Biobío para período de retorno de 5, 25, 50 y 100 años (Elaboración propia). Período de Retorno (TR) Caudal Máximo (Q) (m3/s) 5 25 50 100 753,31 1071,99 1197,62 1319,39 Para el río Vergara, el caudal se obtiene a partir de información pluviométrica de precipitaciones diarias para período de retorno de 10 años según el Mapa de Isoyetas de Los Ángeles (MOP, 1991), donde mediante el Manual de cálculo de crecidas (MOP, 1995) se obtiene el caudal máximo en período pluvial (Q) para la zona de estudio. Esto mediante un coeficiente de escorrentía (C) asociado a cada período de retorno, la intensidad de la lluvia en cada período (i) y el área pluvial aportante de 119 km2 (Tabla 11). Tabla 11: Caudal máximo río Vergara para período de retorno de 5, 25, 50 y 100 años (Elaboración propia). TR C I (mm/h) Q (m3/s) 5 25 50 100 0,356 0,367 0,374 0,374 5,081 6,553 7,206 7,818 59,79 79,49 89,08 96,65 Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 4.5. Determinación de la “n” de Manning Para la determinación del coeficiente “n” de Manning para los ríos Biobío y Vergara, se aplican los métodos expuestos en el apartado 2.6. Cada uno de estos ríos posee un valor diferente debido a que presentan diferentes materiales, vegetación, obstáculos, irregularidades, etc. Estas características oponen resistencia al flujo, por lo que se entregan valores de “n” diferentes y que pueden estar orientados según la experiencia del proyectista. 4.5.1. Método de Cowan Para el río Biobío, n0 se consideró como grava gruesa con un valor de 0,028, el grado de irregularidad n1 se considera suave con 0,000. La variación de la sección transversal n2 se valora como ocasional con 0,005. El efecto de las obstrucciones n3 se considera menor con 0,010. En cuanto a la vegetación n4 esta se encuentra separada de la ribera inmediata del río, por lo que se considera baja 0,005. Por último, las curvaturas en planta m5 se consideran como apreciables con un valor de 1,150. Con estos valores se considera un “n” de 0,05. Para el río Vergara, n0 se consideró el material del perímetro como tierra con un valor de 0,020. El grado de irregularidad n1 se consideró suave con 0,000. Para la variación de la sección transversal n 2 se consideró gradual con un valor de 0,000 también. Para el efecto de las obstrucciones n3 se consideró como despreciable por lo que se le asigna 0,000. La vegetación por su parte n4 se considera mediana con 0,010 ya que se encuentra vegetación baja en las riberas y por último las curvaturas en planta m5 se consideran menores con 1,000. Con estos valores se considera un “n” de 0,03. 4.5.2. Método de S.C.S. Este método se basa en la misma tabla de Cowan, por lo que los valores son los siguientes: Para río Biobío, n1=0,028; n2=0,005; n3=0,010; n4=0,010; m5=0,000 (𝑙𝑐 =3,076 m y 𝑙𝑟=2,610 m); n5=0,000. Por lo tanto, el valor de la “n” de Manning es 0,05. Para el río Vergara, n1=0,020; n2=0,010; n3=0,000; n4=0,000; m5=0,005 (considerando 𝑙𝑐 =1,5776 m y 𝑙𝑟=1,493 m); n5=0,00015. Por lo tanto, el valor de la “n” de Manning es 0,03. 4.5.3. Método basado en fotografías de Chow A partir de las fotografías del documento de Chow (1959) sobre la Hidráulica de Canales Abiertos, se clasifica el río Biobío (Figura 15) como similar a las fotografías de la Figura 16, la que corresponde en (A) a un canal donde no hay suficiente limo a una velocidad demasiado alta, por lo que el fondo está revestido por cantos rodados, con n=0,028. Y se compara con (B) que corresponde a cantos rodados grandes en el fondo, con n=0,030. A Figura 16: Fotografía de clasificación (A) n= 0,028 (B) n=0,030. Chow, 1959. Figura 15: Río Biobío en zona de estudio. Fotografía tomada en diciembre 2020. B Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 A B Figura 16: Fotografía de clasificación (A) n= 0,028 (B) n=0,030. Chow, 1959. Por otra parte, el río Vergara (Figura 17) es similar a la fotografía de la Figura 18, que considera un n=0,020 que corresponde a un canal de irrigación recto y de arena lisa y compacta. Figura 17: Río Vergara en zona de estudio. Fotografía tomada en diciembre de 2020. Figura 18: Fotografía de clasificación n= 0,020. Chow, 1959. En base a los tres métodos utilizados, ahora se calcula y estima el “n” de Manning medio con su respectiva desviación estándar para concluir cual es el dato que se utilizará en el estudio (Tabla 12). Tabla 12: Valores de “n” de Manning para río Biobío y Vergara (Elaboración propia). Métodos “n” para Río Biobío “n” para Río Vergara Cowan S.C.S Fotografías de Chow Promedio Desviación Estándar Promedio ± Desv. Estándar 0,05 0,05 0,028 a 0,030 0,043 0,0115 0,032 a 0,054 0,03 0,03 0,020 0,027 0,0057 0,021 a 0,032 Entonces se decide usar para el río Biobío un n=0,054 y para el río Vergara un n=0,032. Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 4.6. Peligro de inundación La distribución espacial de la peligrosidad de la crecida de los ríos Biobío y Vergara en la comuna de Nacimiento se evalúa en los 500 metros contiguos a cada ribera de los cauces, debido a que las viviendas más cercanas a ellos se encuentran entre 100 y 400 metros de distancia, por lo que se deja un margen de confianza. Además, considerando el peor de los casos en suelo urbano, se utiliza el valor 1 para el Factor de Escombros (DF) en la obtención del Peligro de Inundación (HR), el que se clasifica según como se muestra en la Figura 19. Se puede ver en esta, que las inundaciones para los diferentes períodos de retorno se clasifican como de Clase 2 y Clase 3, siendo peligroso para la mayoría o para todas las personas que se encuentren en el lugar. En cuanto a la zona correspondiente a la Ribera Sur del Río Biobío, se obtiene que de un total de 0,598 km2, un 85% se encuentra bajo peligrosidad de inundación de grado significante a extremo. Donde un 4,1% de la superficie inundada corresponde a uso urbano. Para la zona Ribera Oriente Río Vergara, se tiene un área de 2,421 km2, de los cuales un 32,7% se encuentra en peligrosidad de inundación de grado significante a extremo. Estos sectores inundables corresponden a un 56,5% utilizados en agricultura y bosques, un 42,4% a uso industrial y un 1,1% correspondiente al sector urbano de la zona de estudio. Por último, la zona Fundo Los Tralpenes se encuentra fuera de peligro de inundación para todos los períodos de retorno estudiados. Mediante el análisis realizado, el grado de peligrosidad aumenta con relación al período de retorno, pero mínimamente, ya que solo creció un 2% entre los escenarios de los períodos de retorno de 5 y 100 años. Generalmente, para los períodos de retorno de 5, 25, 50 y 100 años en las zonas de estudio, se mantuvo un promedio de 47% de peligrosidad extrema, un 35% de peligrosidad significante y un 2,5% de peligrosidad moderada. 4.7. Riesgo de Inundación 4.7.1. Vulnerabilidad de las áreas de estudio La llanura de inundación puede afectarse al estar expuesta a la inundación y en base a lo expuesto en la Tabla 8 se da una puntuación a la vulnerabilidad del área, esto en base a la información recopilada en la encuesta a la ciudadanía afectada anteriormente por eventos de inundación. La velocidad inicial de las inundaciones en la comuna de Nacimiento es de forma gradual, la naturaleza del área es residencial típica, con industrias y comercio. En cuanto a la alerta de inundación existe una que aún no ha sido testeada, ya que se instauró luego de la inundación del año 2006 y no se ha producido una nuevamente. Por lo tanto, la puntuación alcanza los 6 puntos, es decir, un 66,7% de Vulnerabilidad del área. 4.7.2. Vulnerabilidad de las personas Los habitantes que pueden ser afectados por la inundación, son clasificados según el porcentaje de Residentes Mayores de 75 años (R75) y el porcentaje de Residentes que tengan Enfermedades de Larga Duración (RE) con respecto a la cantidad total de habitantes en zona de riesgo que son 7.900 personas. Para R75 se tienen 540 adultos mayores (PRAGMAC, 2018) y en RE se tiene 449 habitantes (PRAGMAC, 2018), que corresponden a un 6,8% y un 5,7% de la población. Entonces, la Vulnerabilidad de las personas (𝑌) es 12,5%. 4.7.3. Estimación de la población afectada La cantidad de personas que residen en la zona que es propensa a inundarse se considera contando aquellas casas que están en el área de peligro y se estima que en cada una de ellas residen cinco personas. Entonces, en el área de peligro se encuentran 40 casas, por lo que la cantidad total de afectados sería 200 personas, que corresponden a un 2,5% del total de personas en zona de riesgo y a un 0,7% de la población total de la comuna. 4.7.4. Riesgo de inundación fluvial para zonas de estudio Actualmente 200 personas viven en zonas de peligrosidad extrema, donde cada 7,83 años se producirán inundaciones fluviales. Aquí, las bajas pendientes en la zona y la falta de vegetación arbórea entre el río Vergara y las viviendas, beneficiarán el avance del flujo en el desborde de los ríos. Por esta razón, se estima que el riesgo de sufrir una inundación en el futuro cercano es considerablemente alto para estas personas, ya que un 84,5% de las áreas de estudio poseen algún grado de peligrosidad, un tercio del área es definida como vulnerable y hay un 12,5% de personas vulnerables. Se considera también, la afectación de sus viviendas y cultivos, causando pérdidas materiales y económicas, además es posible que se produzcan pérdidas humanas, pues ante un nuevo evento aún no existen planes de reubicación de la población, monitoreo de caudales en la comuna, sistemas de alerta o zonas de seguridad señalizadas que permitan actuar de manera eficiente. Figura 19: Mapa de peligro de inundación río Biobío y Vergara en Nacimiento, períodos de retorno 5, 25, 50 y 100 años. Elaboración propia, 2020. Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 5. CONCLUSIONES 5.1. Análisis de resultados de investigación La incertidumbre ante el riesgo producido por una inundación determina la importancia de la generación de mapas de peligrosidad, ya que mediante estos resultados se obtiene un aproximado de los riesgos de inundación y se puede utilizar para la determinación de las diferentes zonas de desarrollo, en cuanto a la cantidad de personas que estarán expuestas a ello y los diversos factores del sitio que podrían afectar a estas personas, ya sea si resultan heridas o mueren. La comuna de Nacimiento ha estado constantemente expuesta a inundaciones producidas por el desborde de los cursos hídricos superficiales que la rodean. La confluencia de los ríos Biobío y Vergara tiene lugar en la comuna, generando inundaciones en los meses de invierno. Y según los datos geomorfológicos de la comuna, se desprende que esta presenta bajas pendientes por lo que favorece la presencia de zonas propensas al riesgo. El análisis de los eventos de inundación fluvial en la comuna determina que cada 7,83 años se podría producir una inundación que sea capaz de causar daño importante. Además, según lo que muestra la recurrencia histórica, se podría esperar que entre los años 2020-2029 ocurran dos eventos de inundación fluvial, ya que ha sido bastante periódica la ocurrencia de estos. Si bien, en las zonas de estudio, la población expuesta al riesgo en los diferentes períodos de retorno estudiados se estima como un 0,7% de la población total (28.392 personas), esto no debe ser una razón para relajar las medidas de prevención y mitigación, pues cada vida vale los esfuerzos necesarios para resguardarla. A esto se debe agregar, la variabilidad de las condiciones climáticas en el futuro próximo, en vista al fenómeno del cambio climático que actualmente se observa en todo el planeta (Hyndman & Hyndman, 2009). Por ejemplo, el evento de 2006 generó inundación en todas las zonas de estudio, y aunque según Ureta (2010), este nivel de inundación se repetiría en 202 años, esto puede adelantarse, puesto que uno de los efectos reportados del cambio climático es la alteración de los períodos de retorno de una cuenca (Hyndman & Hyndman, 2009). Por todo lo anterior, al momento de generar la planificación y ordenamiento territorial se debe contemplar el peor escenario y la alternativa más segura. Un factor importante en la magnitud de los riesgos es la expansión de las ciudades ya que, al crecer el proceso de urbanización, aumenta la vulnerabilidad y exposición al riesgo, cuando se emplazan en áreas aledañas a los cauces fluviales (Rojas et al., 2016). Cabe mencionar, que el manejo adecuado de las llanuras de inundación de ambos ríos puede disminuir el impacto de las inundaciones. Por lo tanto, es necesario tener claro que tanto la zona Ribera Sur Río Biobío y Ribera Oriente Río Vergara no son aptas para edificación de ningún tipo, puesto que poseen una peligrosidad extrema de inundación. En cambio, la zona Fundo Los Tralpenes no posee peligro, por lo que el emplazamiento de viviendas no estaría contraindicado. Las inundaciones también tienen efectos ambientales que traen consigo costos monetarios para las municipalidades y deterioro en la calidad de vida de las personas. Se tiene principalmente en la comuna el daño de viviendas, por lo que es necesario contar con un sistema adecuado de alerta temprana. Entonces, este plan de alerta y la consideración del cambio ambiental contribuirán notablemente en la reducción de los efectos negativos de una inundación fluvial. 5.2. Recomendaciones La magnitud del impacto producido por las inundaciones puede reducirse tomando las medidas adecuadas de mitigación y gestión del riesgo, para ello son de gran ayuda los mapas de peligro de inundación pues permiten generar la planificación y ordenamiento territorial más conveniente. En cuanto a la comuna de Nacimiento, estos daños pueden mitigarse con diferentes medidas, como por ejemplo prohibir la realización de proyectos de construcción habitacional en las zonas que están clasificadas con algún grado de peligrosidad. En cuanto a las viviendas que ya se encuentran en las zonas de peligro, las personas que las habitan necesitan ser reubicadas en un nuevo lugar de la comuna que no esté clasificado como peligroso. Otra forma de mitigar el riesgo es cubrir la ribera de los ríos con vegetación arbórea y arbustiva que reduzcan la velocidad e impacto de las posibles inundaciones. También, si se le da uso agrícola, es aconsejable la utilización de seguros agrícolas por eventuales pérdidas económicas. Además, se debe evitar en todas las zonas de estudio, desarrollos de edificios que entreguen servicios a personas vulnerables, como por ejemplo hogares de ancianos y viviendas para Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 discapacitados. Tampoco, lugares donde se congrega gran cantidad de personas, como escuelas, hospitales, supermercados, entre otros. Es importante contar con instrumentación en la comuna para sistemas de monitoreo de variables hidrometeorológicas en la cuenca, además de un sistema de alerta temprana para que en caso de un nuevo evento se pueda informar con tiempo a la población, además de generar un plan de contingencia. Esto debe ser desarrollado en base a la velocidad de aparición de las inundaciones en la comuna, considerando los eventos históricos. Otra de las medidas de prevención que puede instaurarse en específico en la zona Ribera Oriente Río Vergara, es la construcción de una obra de defensa fluvial, que corresponda a un dique que rodee el sector urbano y le dé el espacio suficiente a la expansión y elevación del desborde del río, pero proteja el efecto de la inundación en las viviendas que están más cercanas al cauce. También, es necesario que las viviendas no se encuentren cercanas al dique y que el sector aledaño a este pueda ser utilizado como espacio de recreación ajardinado, ya que de esa forma es poco probable que en el momento del evento haya personas en el lugar. Una aproximación a priori del emplazamiento de este dique se muestra en la Figura 20; el diseño y trazado específico de esta estructura puede ser materia de su propia investigación. Por último, es de gran importancia la información de la población en cuanto a las zonas de riesgo, en vista de evitar la construcción de viviendas en dichas zonas, así como la educación de los pobladores acerca de cómo reaccionar a un evento de inundación. Esta simple medida puede evitar muchas pérdidas humanas y materiales. Figura 20: Vista en planta de diseño del dique. Modificado de Bing Satellite, 2020. Simposio de Habilitación Profesional Departamento de Ingeniería Civil Abril de 2021 6. REFERENCIAS Anguita, V. Archivo fotográfico privado. Comunicación personal, 13 de octubre de 2020. Aguirre, L.; Hervé, F.; Godoy, E. (1972). Distribution of metamorphic facies in Chile-An outline. Kristalinikum, (9), 7-19. CADE-IDEPE. (2004). Diagnóstico y Clasificación de los Cursos de Agua según Objetivos de Calidad: Cuenca del Río Biobío. Dirección General de Aguas (DGA). Cámara de Diputados. (2006). 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