Síndrome de Asperger Esta definición actual definida en el DSM V realiza un cambio a la definición anterior del DSM IV donde se incluía el Síndrome de Asperger en el concepto de Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD). Según la clasificación DSM-IV (anterior a la actual) los trastornos generalizados del desarrollo incluían como Clasificación: Trastorno Autista. Síndrome de Rett. Trastorno desintegrativo infantil. Trastorno de Asperger. Trastorno generalizado del desarrollo no especificado. En la clasificación actual del DSM V además de desaparecer el concepto de Trastorno generalizado del desarrollo, desaparecen como entidades diagnósticas el Síndrome de Asperger, el Trastorno Autista, el TGD no especificado y el Trastorno desintegrativo infantil. El síndrome de Rett es un diagnóstico neurológico específico. TRASTORNO DEL ESPECTRO AUTISTA El Trastorno del Espectro Autista (TEA) se define como la dificultad persistente en el desarrollo del proceso de socialización (interacción social y comunicación social), junto con un patrón restringido de conductas e intereses, dentro de lo cual se incluyen restricciones sensoriales. El concepto clásico de autismo ha variado mucho desde sus descripciones originales descritas por Leo Kanner (1943) y Hans Asperger (1944). El autismo es una constelación de síntomas debidos a disfunción del sistema nervioso central con grados variables de intensidad que traduce un trastorno profundo de la conducta con síntomas centrales que lo definen. Es una disarmonía generalizada en el desarrollo de las funciones cognitivas superiores independiente del potencial intelectual inicial. Existe una Tríada Clásica de síntomas que incluyen: • Socialización alterada. • Trastorno de la comunicación verbal y no verbal. • Repertorio restringido y estereotipado de conductas. Definición: El TEA es un trastorno del neurodesarrollo de origen neurobiológico e inicio en la infancia, que afecta el desarrollo de la comunicación social, como de la conducta, con la presencia de comportamientos e intereses repetitivos y restringidos. Presenta una evolución crónica, con diferentes grados de afectación, adaptación funcional y funcionamiento en el área del lenguaje y desarrollo intelectual, según el caso y momento evolutivo. La Definición de Síndrome de Asperger en el Manual DSM-IV Deficiencia marcada en el uso de múltiples comportamientos no verbales tales como contacto visual, expresión facial, posturas del cuerpo y gestos para regular la interacción social. SINTOMAS: Deficiencias persistentes en la comunicación y en la interacción social en diversos contextos, manifestados por lo siguiente, actualmente o por los antecedentes Deficiencias en la reciprocidad socioemocional; por ejemplo: Acercamiento social anormal, - Fracaso en la conversación normal en ambos sentidos, - Disminución en intereses, emociones o afectos compartidos, - Fracaso en iniciar o responder a interacciones sociales Deficiencias en las conductas comunicativas no verbales utilizadas en la interacción social; por ejemplo: - Comunicación verbal y no verbal poco integrada, - Anormalidad en el contacto visual y del lenguaje corporal, - Deficiencias en la comprensión y el uso de gestos, - Falta total de expresión facial y de comunicación no verbal Déficits en el desarrollo, mantenimiento y comprensión de relaciones; por ejemplo: - Dificultad para ajustar el comportamiento a diversos contextos sociales, - Dificultades para compartir el juego imaginativo o para hacer amigos, - Ausencia de interés por las otras personas. Patrones restrictivos y repetitivos de comportamiento, intereses o actividades que se manifiestan en dos o más de los siguientes puntos, actualmente o por los antecedentes (los ejemplos son ilustrativos pero no exhaustivos). Movimientos, uso de objetos o habla estereotipada o repetitiva; por ejemplo: - Estereotipias motrices simples, - Alineación de juguetes, Cambio de lugar de los objetos, - Ecolalia, - Frases idiosincráticas. Insistencia en la monotonía, excesiva inflexibilidad a rutinas, o patrones ritualizados de comportamiento verbal y no verbal; por ejemplo: Elevada angustia ante pequeños cambios, - Dificultades con las transiciones, Patrones de pensamiento rígidos, - Rituales de saludo, - Necesidad de seguir siempre la misma ruta o de comer los mismos alimentos cada día. Intereses muy restrictivos y fijos que son anormales en cuanto a su intensidad y focos de interés se refiere; por ejemplo: - Fuerte vínculo o elevada preocupación hacia objetos inusuales, - Intereses excesivamente circunscritos y perseverantes. Híper o hiperreactividad a los estímulos sensoriales o interés inusual por los aspectos sensoriales del entorno; por ejemplo:- Aparente indiferencia al dolor/temperatura, - Respuesta adversa a sonidos y texturas específicas, - Oler o tocar excesivamente objetos, - Fascinación visual con luces o movimientos Los síntomas tienen que manifestarse en el periodo de desarrollo temprano. No obstante, pueden no revelarse totalmente hasta que las demandas sociales sobrepasen sus limitadas capacidades. Estos síntomas pueden encontrarse enmascarados por estrategias aprendidas en fases posteriores de la vida. Los síntomas causan deterioro clínico significativo en el área social, laboral o en otras importantes para el funcionamiento habitual. Las alteraciones no se explican mejor por una discapacidad intelectual o por un retraso global del desarrollo. la interacción social y de la comunicación claramente anormales o deficitarios, y un repertorio muy retroactividades e intereses. La Discapacidad Intelectual (DI) y el TEA se encuentran frecuentemente unidas. Para poder realizar un diagnóstico del TEA y del DI con comodidad, la comunicación social debe situarse por debajo de lo esperado a nivel general del desarrollo. Epidemiología Estudios tempranos en autismo reporta tasas de prevalencia de 2-5 por 10.000 niños, posteriormente se han reportado tasas de 0,7-21,1 por 10.000 niños. Otros datos de APA reportan tasas de 1-1,2 por 10.000 niños. Varios estudios muestran que es 4 veces más frecuentes en varones Etiología En el enfrentamiento clínico del paciente con autismo encontramos 2 grandes grupos desde punto de vista etiológico: Características del síndrome de Asperger, de cada una de las alteraciones que lo constituyen: • Respecto a las deficiencias de las competencias de reconocimiento social, pueden ir desde: • Aislamiento e indiferencia hacia otras personas • Ausencia de contactos sociales espontáneos, así como Contactos sociales espontáneos de forma “extraña” muy vinculada a sus rituales y obsesiones, o también presentar solamente una Pobre comprensión de reglas de la interacción social. • En cuanto a deficiencias de las competencias de comunicación social podemos encontrar desde • Ausencia de motivación comunicativa. • Expresión de deseos como única forma comunicativa, así como • Expresión de comentarios y deseos pero sin intercambio social, e incluso un • Lenguaje elaborado, sin implicación en conversación recíproca (largos monólogos) • En cuanto a deficiencias de las competencias de imaginación y comprensión social podemos encontrar desde la Ausencia completa de imaginación significativa y juego simbólico. • Imitación, pero sin comprender el significado, así como que realice la • Representación espontánea y repetitiva de cierto rol, o que llegue a la • Apreciación de que “algo sucede” en la mente de los demás, sin comprenderlo, incluso una Habilidad para reconocer sentimientos de otros, pero más a nivel intelectual que empático. • Con respecto a formas repetitivas de actividades, pueden ir desde el Predominio de conductas estereotipadas (balanceo, aleteo de manos...), a realizar • Movimientos repetitivos más complejos de carácter ritual (ordenar objetos) o rituales sensoriales más complejos (oír repetitivamente una canción). Vinculación intensa a ciertos objetos, incluso puede que el alumno tenga una • Insistencia a realizar ciertas secuencias de acciones (ritual de irse a dormir), o la Preocupación obsesiva por ciertos contenidos intelectuales. NECESIDADES EDUCATICAS ESPECIALES DE LOS ALUMNOS CON AUTISMO 1- Alteraciones sociales, (consisten en aislamiento, falta de contacto social y afectivo con otras personas) los alumnos con autismo presentarán necesidades tales como… • Aprender que sus comportamientos pueden influir en el entorno de una manera socialmente aceptable, enseñándoles explícitamente cómo, dónde y cuándo lo es. • Aprender a relacionarse de forma concreta y afectiva en diferentes situaciones y contextos. Aprender a conocer y comunicar las emociones y pensamientos propios, así como comprender las de los demás, • Aprender a utilizar los objetos de forma funcional y creativa, • Disfrutar de un proceso de Enseñanza-Aprendizaje estructurado, donde tenga un rol activo. 2- Alteraciones cognitivas, (afectan principalmente a aspectos relacionados con la abstracción, la función simbólica, lenguaje, atención, percepción y memoria) presentarán por ello necesidad de: • Ambientes sencillos, poco complejos que faciliten una percepción y comprensión adecuada. • Aprender en contextos lo más naturales posibles como entornos significativos, inventarios ecológicos, además Realizar aprendizajes con los menores errores posibles (para evitar frustración) • Aprender habilidades y estrategias de control del entorno y de autocontrol, • Trabajar requisitos previos al aprendizaje como la atención, percepción e imitación usando estrategias que eviten que su conducta se disperse con estímulos irrelevantes, • Aumentar la capacidad de ponerse en lugar del otro (empatía) y asegurar la generalización y transferencia de los aprendizajes. 3- Alteraciones en la comunicación y lenguaje, en este aspecto, estos alumnos presentarán necesidad de: • Fomentar situaciones que provoquen comunicación de cualquier tipo (gestual, oral...) • Conseguir requisitos previos para la adquisición del lenguaje (atención, imitación, percepción de lo relevante, entonación, tono y volumen de la voz...) • Aprender a entender y reaccionar a las demandas de su entorno, • Comprender el significado social del lenguaje y su funcionalidad • Adquirir un sistema de comunicación efectivo y de rehabilitar las alteraciones existentes en cada momento. 4- Alteraciones en la conducta, (con acciones repetitivas o disruptivas) presentarán necesidad de: • Controlar las conductas estereotipadas, • Erradicar las conductas disruptivas, las autolesiones, las rabietas... • Aprender a relacionarse de forma concreta y afectiva en diferentes situaciones y contextos, • Aprender a conocer y comunicar las emociones y pensamientos propios, así como comprender las de los demás, • Aprender a utilizar los objetos de forma funcional y creativa, • Disfrutar de un proceso de Enseñanza-Aprendizaje estructurado, donde tenga un rol activo. 5- Alteraciones cognitivas, (afectan principalmente a aspectos relacionados con la abstracción, la función simbólica, lenguaje, atención, percepción y memoria) presentarán por ello necesidad de: • Ambientes sencillos, poco complejos que faciliten una percepción y comprensión adecuada, • Aprender en contextos lo más naturales posibles como entornos significativos, inventarios ecológicos, además • Realizar aprendizajes con los menores errores posibles (para evitar frustración) • Aprender habilidades y estrategias de control del entorno y de autocontrol, • Trabajar requisitos previos al aprendizaje como la atención, percepción e imitación usando estrategias que eviten que su conducta se disperse con estímulos irrelevantes, • Aumentar la capacidad de ponerse en lugar del otro (empatía) y asegurar la generalización y transferencia de los aprendizajes. 6- Alteraciones en la comunicación y lenguaje, en este aspecto, estos alumnos presentarán necesidad de: • Fomentar situaciones que provoquen comunicación de cualquier tipo (gestual, oral...) • Conseguir requisitos previos para la adquisición del lenguaje (atención, imitación, percepción de lo relevante, entonación, tono y volumen de la voz...) • Aprender a entender y reaccionar a las demandas de su entorno, • Comprender el significado social del lenguaje y su funcionalidad • Adquirir un sistema de comunicación efectivo y de rehabilitar las alteraciones existentes en cada momento. • Determinar el nivel de desarrollo potencial del alumno • Establecer el nivel y tipo de ayudas que necesita e • Identificar los procesos y estrategias que utiliza para realizar su tarea. Implicación en la Enseñanza-Aprendizaje En este punto tendremos en cuenta tanto los aspectos del alumno como los del entorno (escolar, familiar, social) y utilizaremos como técnica fundamental la observación a través de registros, diarios, fotografías, vídeos... Respecto a los contextos podemos diferenciar 2 tipos: En primer lugar el contexto próximo donde evaluaremos variables referentes al aula, a la práctica educativa y al maestro. Esta evaluación nos dará información sobre el espacio del aula, organización, objetivos y contenidos, metodología, actividades, actitudes, expectativas… En cuanto al contexto amplio tendrá en cuenta las variables del centro y del proyecto educativo, y nos ofrecerá información sobre la estructura y funcionamiento del centro, características del Proyecto educativo de centro, relaciones del tutor, clima de trabajo... presentarán necesidad de: • Controlar las conductas estereotipadas, • Erradicar las conductas disruptivas, las autolesiones, las rabietas.... ACOMPAÑAMIENTO PSICOPEDAGOGICO El síndrome de Asperger es un trastorno del neurodesarrollo incluido dentro de los trastornos del espectro autista. Se trata de un problema bastante conocido en la actualidad, que destaca por la presencia de dificultades en la interacción social y la comunicación (a pesar de que su nivel de desarrollo es normativo), la presentación de un patrón de comportamiento e intereses restringidos y monótonos y ocasionalmente hipersensibilidad a la estimulación. Principios y elementos para elaborar un programa-base de intervención psicopedagógica en autismo infantil: El abordaje de la intervención depende de cada caso concreto, según las necesidades, características y prioridades de cada persona, pero la intervención más eficaz hasta el momento presente es la psicoeducativa. Los modelos de intervención más conocidos son el modelo bioquímico; el modelo neurosensorial; el modelo psicodinámico; el modelo conductual (análisis funcional aplicado, ABA, etc) y el modelo educativo (TEACCH). Con independencia del método o los métodos elegidos es importante evaluar periódicamente los resultados obtenidos en las prácticas terapéuticas y educativas, pero también en todas las áreas y ámbitos en los que el niño participa, para poder preparar un programa base de intervención psicopedagógica. Estas terapias no deberían centrarse únicamente en las técnicas tradicionales para corregir esos déficits sino que deberían intentar el aprendizaje de conceptos viso-espaciales, orientación y causalidad viso- espacial, conceptos de tiempo, conciencia del propio cuerpo, utilizando narraciones y autodirección verbal y los mismos principios han de guiar el entrenamiento de las habilidades expresivas de la persona. Para realizar un plan adecuado de intervención (intensivo y temprano) no solo deben considerarse las cuestiones conductuales, pedagógicas o fonológicas, sino también las sensoriales, haciendo evaluaciones adecuadas por especialistas en todas las áreas; de esta manera se podrán establecer estrategias eficaces y acordes a las necesidades específicas de cada niño y su familia. Las situaciones concretas han de ser practicadas en un entorno terapéutico y puestas a prueba en situaciones que se dan de modo natural. Además es muy importante que la persona que intervenga llegue a convertirse en un reforzador gratificante para la persona que reciba la intervención. El contexto escolar, por ejemplo, es el que más ayuda al progreso en los casos de autismo infantil, si bien la intervención debe ser multidisciplinar y en ella debe implicarse significativamente la familia. No sirve de nada llevar a un niño o niña a una consulta psicológica una o dos veces por semana si luego en casa no se refuerza lo aprendido y no se siguen las rutinas, normas y orientaciones del psicólogo/a de peque. El trabajo con las familias es fundamental porque, además, entre los padres y madres los sentimientos de cansancio y decaimiento son normales y relativamente frecuentes. Así que es necesario ofrecerles apoyo, asesoramiento y ayuda constantes también a ellos. Hay que cuidar al cuidador. El objetivo básico de la intervención es mejorar en las áreas deficitarias tales como el lenguaje, comunicación e interacción social aunque puede haber objetivos previos en determinados casos (rabietas muy persistentes y autoagresiones, por ejemplo). Un programa base ha de configurar secuencias fáciles de comprender, de predecir y muy ordenadas, establecer límites claros y proponer gradualmente la gratificación, utilizar refuerzos discriminativos (positivos cuando el niño hace algo bien y negativos cuando deja de hacerlos), programar todo lo que se va a hacer, mantener relaciones estables, dar siempre instrucciones y consignas claras y simples, programar sesiones breves (de unos 15 minutos aproximadamente, con un descanso y otra sesión de 15 minutos; especialmente al principio) y mantener una actitud directiva. La estrategia de intervención debe ser relevante y/o deseable para el niño y debe incluir el contenido curricular, apoyo intensivo en el entorno de aprendizaje, estrategias de generalización, actividades rutinarias y estructuradas para favorecer la anticipación, el abordaje de los trastornos de conducta (si se produjeran), etc. Para lograr la generalización de los aprendizajes es necesario abarcar todos los contextos de la vida del niño y es importante que la intervención atraviese todas las etapas del desarrollo. Evaluación multidisciplinar. Para llevar a cabo este proceso se requiere la puesta en marcha de una estrategia coordinada de evaluación de carácter multidisciplinario, que asegure la participación de especialistas de la pediatría (en el caso de los niños y niñas), la/el psicología, la/el neurología y la/el psiquiatría. La valoración clínica con propósitos diagnósticos y terapéuticos requiere considerar el TEA como un continuo de déficits en los tres apartados de la tríada autista. Resulta interesante conocer algunos de los instrumentos utilizados en el proceso diagnóstico y saber que la mayoría de las pruebas de detección han sido ideadas para ser breves y fáciles de realizar. Pero cuidado, porque la mayoría de estas pruebas no han sido evaluadas mediante los métodos regulares de detección. Para la mayoría de las personas con Asperger el elemento más importante del currículo educativo y de la estrategia de tratamiento está relacionado con la necesidad de reforzar la comunicación y la competencia social. La práctica de la comunicación y las habilidades sociales no significa que la persona adquiera espontaneidad y naturalidad comunicativa o social. Sin embrago, prepara mejor a la persona con Asperger para enfrentarse a las expectativas sociales e interpersonales, aumentando su atractivo como interlocutores en una conversación, o como amigos o compañeros potenciales. Asperger: aspectos a tener en cuenta A la hora de elaborar o realizar diferentes actividades que puedan ayudar a niños con síndrome de Asperger es necesario tener en cuenta las particularidades que representa este trastorno para dichos menores. En primer lugar, es frecuente que los niños con Asperger presenten un elevado nivel de interés hacia algún tema o estímulo en concreto, como por ejemplo la informática, la música, los trenes o los dinosaurios. En muchos casos se vuelven grandes expertos en dichas materias. Esta temática puede explotarse para conectar con el menor, generando una mayor vinculación social y pudiéndose aprovechar para generarle interés o ayudarle a comprender otras áreas. Hay que recordar que se trata de menores que tienden a ser muy literales, analíticos y objetivos. Por lo tanto tenderán a preferir que las actividades que lleven a cabo se basen o se puedan resolver mediante el uso de la lógica. También se sienten seguros con los elementos repetitivos y rutinarios, siendo los cambios algo difícil de asimilar para ellos. Otro elemento relevante es la literalidad con la que estos niños suelen entender el lenguaje, siendoles complicado captar ironías, dobles sentidos o el sentido figurado de muchas expresiones. La adquisición de competencia para identificar este tipo de mensajes puede entrenarse a pesar de que les suele suponer una gran dificultad. Asimismo también tienden a presentar dificultades para identificar emociones, de manera que la práctica de actividades que puedan favorecer dicha identificación y puede serles de gran utilidad. A los que padecen síndrome de Asperger les suele ser complicado comunicarse de forma exitosa y tienen dificultades para relacionarse. Asimismo, un exceso de estimulación puede sobrecargarles y desorientarles. Es por ello que los juegos y actividades que se lleven a cabo tienen que permitirles y favorecer la interacción con otros pero a la vez sin forzarles a ello y respetando su espacio vital. Ejemplos de actividades con niños Asperger A continuación se detallan algunas actividades que favorecen la estimulación de niños con síndrome de Asperger. La mayoría permite estimular la comunicación y socialización, además de fomentar algunas otras habilidades. 1. El espejo Los juegos de imitación son una buena de manera de favorecer que el niño se fije en las conductas de los otros y aprenda distintas habilidades y secuencias de conductas. De este modo, puede utilizarse como una vía para el aprendizaje de acciones. Puede hacerse entre dos personas o en grupo. Una de las personas se coloca frente al niño o al grupo de niños y hace una acción, que los demás deben imitar. Las acciones a imitar pueden ser muy simples inicialmente, para ir complicándose según el niño va adquiriendo dominio en la habilidad en cuestión. También favorece el establecimiento de vínculos afectivos y la comunicación. 2. Pasar la pelota Un juego muy sencillo que favorece la comunicación y la observación de características. Se basa en que los participantes (sea la familia o el grupo clase) se pasen una pelota los unos a los otros, diciendo en cada pase una característica de la persona a la que le envían el balón. 3. Pictionary La interpretación es a menudo un aspecto complejo para los niños con Asperger. Mediante juegos como el pictionary en el que se forman parejas de los cuales uno ha de interpretar lo que el otro dibuja sin que medien más pistas, es posible estimular la capacidad de interpretar lo que el otro comunica. Se favorecen las relaciones interpersonales y el lenguaje. 1. El espejo Los juegos de imitación son una buena de manera de favorecer que el niño se fije en las conductas de los otros y aprenda distintas habilidades y secuencias de conductas. De este modo, puede utilizarse como una vía para el aprendizaje de acciones. Puede hacerse entre dos personas o en grupo. Una de las personas se coloca frente al niño o al grupo de niños y hace una acción, que los demás deben imitar. Las acciones a imitar pueden ser muy simples inicialmente, para ir complicándose según el niño va adquiriendo dominio en la habilidad en cuestión. También favorece el establecimiento de vínculos afectivos y la comunicación. 4. Teatro/Juegos de roles Interpretar una escena puede ser una forma amena de hacer a los niños con Asperger incorporar perspectivas externas. Hacer de médico, profesor o cocinero o que practiquen actividades como ir a comprar puede ayudar a desarrollar su teoría de la mente y la empatía al experimentar un rol ajeno al propio. Además también puede ayudar a adquirir mayor competencia en algunas habilidades básicas. Artículo relacionado: "Teoría de la Mente: ¿qué es y qué nos explica sobre nosotros?" 5. Mímica: Dime como me siento Una de las áreas en la que los sujetos con Asperger tienen gran dificultad es en el reconocimiento de emociones en otras personas, por ejemplo a partir de la expresión facial. También suelen tener dificultades en reconocer y expresar sus propias emociones. Trabajar este reconocimiento es esencial. Para ello, una actividad que puede llevarse a cabo es la representación de estados emocionales concretos a partir del modelado. Se puede llevar a cabo solo con el niño con Asperger o en grupos. El adulto debe seleccionar una emoción y lo representa a través de la mímica. Después de la representación, ha de explicar de forma sencilla una situación en la que puede sentirse así. El niño ha de intentar adivinar, de entre varias opciones que se le dan de antemano, que emoción se está trabajando. Después de ello deberá intentar representarla él mismo. 6. Fragmentos de películas El uso de cortos o fragmentos de películas puede ser efectivo de cara a mejorar el reconocimiento de emociones. Previamente a visualizarlas, se explicarán algunas características típicas de la expresión de determinadas emociones. A continuación se le proporcionarán cartulinas que representen una cara representando la emoción en cuestión. Después se emiten varias escenas escogidas en los que suceda la expresión de la emoción, y el niño en cuestión debe asignar una cara a cada una de las escenas emitidas. 7. Creación de horarios Las normas y la fijación de rutinas son elementos muy importantes para los niños con trastorno del espectro autista puesto que les permite tener un registro de lo que va a acontecer próximamente. Confeccionar junto con el niño un horario visual que pueda reconocer puede ser de utilidad para que se sientan seguros. Especialmente cuando se trata de niños pequeños es habitual emplear imágenes y fotografías representativas de una actividad y pegarlas en una tela mediante velcro, de manera que cada día puedan tener una visión más o menos clara de lo que toca realizar a determinada hora. 8. Juegos basados en la construcción y elaboración El uso de actividades en los que los niños con Asperger puedan observar y utilizar patrones lógicos puede servir tanto para desarrollar sus competencias cognitivas como para calmarlos en momentos de ansiedad. Un ejemplo es el uso de puzzles y juegos de construcción como los LEGO. También la creación de manualidades y el uso de barro y plastilina. Sirve para desarrollar su motricidad fina y su creatividad. 9. Compartir enseñando El hecho de que los niños con Asperger suelen tener intereses restringidos de los cuales pueden convertirse en grandes expertos puede ser aprovechado de múltiples maneras. Una de ellas se basa en exponer y enseñar sus conocimientos respecto al tema de su interés. Es posible mediante este tipo de actividad fomentar la interacción y fomentar la autonomía del menor, así como su capacidad de liderazgo. 10. Juegos y actividad física La realización de actividad física es fundamental para desarrollar la psicomotricidad. Se recomienda la realización de deportes en que puedan ir siendo poco a poco introducidos, sin precisar de un contacto repentino con un gran grupo de personas. También se recomiendan juegos que puedan requerir del uso de turnos, de manera que se aprenda a respetar el tiempo de los demás. Juegos como el escondite inglés o el pica-pared tienen normas fáciles de entender y aplicar.