Más allá del sexo cómo hacer el amor con amor ( PDFDrive )

MÁS ALLÁ DEL SEXO: CÓMO
HACER EL AMOR CON
AMOR
Jorge Pareta Fernández
Página legal
392.6 Par-M
Más allá del sexo: cómo hacer el amor con amor / Jorge Pareta Fernández. -- La
Habana : Editorial Universitaria, 2011. -- ISBN 978-959-16-1361-5. -- 97 pág.
1. Pareta Fernández, Jorge (Autor)
2. Horta Hayek, Ramón (Diseño de cubierta)
3. PALABRAS CLAVE: Lectura recomendada, crecimiento personal,
autoayuda, educación sexual, amor, autoestima, cómo encontrar pareja, cómo
seleccionar una pareja, cómo conquistar una mujer, cómo hacer el amor, cómo
mantener relaciones de pareja felices, cómo evitar el divorcio, sexo, erotismo
femenino, orgasmo, satisfacción femenina, erotismo masculino, eyaculación,
salud sexual, evitar el sida VIH, Feng Shui en la habitación.
Autor - Editor: Pareta Fernández, Jorge (Autor)
Digitalización: Dr. C. Raúl G. Torricella Morales ( [email protected])
Pareta Fernández, Jorge (Autor), 2011, http://www.relacionpareja.com
Registrado en el CENDA con el No. 2409-2010. Prohibida su
comercialización sin autorización del autor.
La Editorial Universitaria (Cuba) publica
bajo licencia Creative Commons de tipo
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Dedicatoria
A Bedelia, mi querida esposa.
A los jóvenes, para que encuentren los mejores caminos.
A los menos jóvenes, para que rectifiquen a tiempo y tengan paz en su hogar.
A las mujeres, para que sean más comprendidas por los hombres.
A los que han luchado y luchan por la existencia de relaciones de pareja y sexualidad de
forma sana, plena, placentera y responsable.
Prólogo
Más allá del Sexo es una obra de Jorge Pareta Fernández, que permite al lector adentrarse
en la realidad femenina, pero desde una óptica masculina y cálidamente cubana.
Puede situarle a usted tanto si es hombre o mujer, en una forma sencilla de llevar a cabo el
día a día para construir una sólida relación de pareja, donde se van revisando los factores
que son necesarios para mantenerla, una vez que lo hemos logrado.
Con un lenguaje directo, cálido y claro, nos va llevando a enfrentarnos a los sabores del
placer erótico, nos invita a jugar con los ingredientes de una buena dieta que nutra nuestra
estima, nos enseña qué tipo de alimentos son más sanos para el cuerpo, para el éxtasis y el
espíritu. Nos permite mezclar las cantidades y porciones que facilitarán a los cuerpos el
acompañamiento erótico, recomendando la pizca del condimento sublime que es el amor
para que ambos florezcan al placer de forma consciente, negociada y divertida.
Este libro no dejó olvidada la suculenta mesa donde se degustarán tales manjares, así que
incluso está el apartado para generar la atmósfera, poner los manteles largos que servirán de
marco para el encuentro, todo equilibrado, justo con el sencillo estilo narrativo que nos
permite a todos identificarnos en las anécdotas, o recordar algunas vivencias personales.
Por la forma en que se dirige a hombres, a las mujeres nos devuelve la fe y esperanza, al
descubrir que muchos de ellos reconocen con humildad que no todo lo saben, que puede el
ser humano estar en constante oportunidad de aprendizaje, y resulta un recreo para el
corazón el descubrirlos a través de la obra de Jorge Pareta Fernández.
Doctora Cecilia Peregrina Bancalari
Licenciada en Psicología Educativa. Máster
en Sexología y Terapia Familiar. Guadalajara, México.
http://www.ceassjalisco.com
Índice general
Más allá del sexo: cómo hacer el amor con amor..................................................................2
Página legal........................................................................................................................ 3
Dedicatoria......................................................................................................................... 4
Prólogo............................................................................................................................... 5
Índice general..................................................................................................................... 6
Prólogo del autor............................................................................................................. 8
Agradecimientos.............................................................................................................. 9
Introducción................................................................................................................... 10
Desarrollo...................................................................................................................... 13
1- ¿TE ENCONTRÉ?................................................................................................. 14
1.1- Prepararse para el encuentro..........................................................................14
1.1.1- Secreto 1: armonícense con el amor........................................................15
1.1.2- Secreto 2: identifiquen las sincronicidades................................................17
1.1.3- Secreto 3: no se crucen de brazos............................................................20
1.2- Descubra y seleccione su pareja.....................................................................22
1.3- El amor es más que el acto sexual..................................................................25
2- CONQUÍSTELA CON AMOR.................................................................................27
2.1- ¿Cómo saber si le gustamos?.........................................................................27
2.2- ¿Cómo enamorarla y que diga “SÍ”?................................................................28
2.3- Mi primera relación fue irresponsable..............................................................31
2.4- A los jóvenes de hoy........................................................................................ 34
2.5- Cuidado con el sexo alocado...........................................................................36
3- INTENTEN SATISFACERSE MUTUAMENTE.......................................................37
3.1- Ella es compleja y tierna..................................................................................38
3.2- Mapa erótico femenino....................................................................................39
3.3- El punto G, ¿dónde se encuentra?..................................................................40
3.4- ¿Qué es el orgasmo?......................................................................................41
3.5- La sexualidad en el hombre.............................................................................41
3.6- ¿Sabe usted realmente hacer el amor?...........................................................43
3.7- Una experiencia de amor inolvidable...............................................................45
3.8- Cuando termina el acto sexual........................................................................46
3.9- Las fantasías sexuales....................................................................................46
3.10- Qué sucede si nos apuramos........................................................................47
3.11- Un abrazo une a la pareja..............................................................................47
4- CULTIVE SU AMOR.............................................................................................. 49
4.1- La base de una unión duradera.......................................................................52
4.2- Dele besos de amor y abrazos........................................................................53
4.3- Cómo envejecer juntos y felices......................................................................53
4.4- Cómo comunicarse eficazmente......................................................................58
4.5- ¿Los conflictos ayudan?..................................................................................60
4.6- Cuidado con la violencia..................................................................................63
5- RECTIFIQUE A TIEMPO.......................................................................................65
5.1- ¿Cómo está su autoestima?............................................................................65
5.2- La trampa de la infidelidad...............................................................................67
5.3- ¿Podré vencer a los celos?.............................................................................70
5.4- ¿Tendré mala suerte en el amor?....................................................................71
5.5- Los cambios inesperados................................................................................71
5.6- Rectificar es de sabios.....................................................................................72
6- TENGA SALUD SEXUAL.......................................................................................74
6.1- La alimentación, ¿cómo debe ser?..................................................................74
6.2- ¿Cómo nos ayuda la Naturaleza? ..................................................................75
6.3- Impotencia y eyaculación precoz.....................................................................76
6.4- A ella le falta el deseo ¿Qué hago?.................................................................76
6.5- La mujer embarazada y el post parto...............................................................79
6.6- Cuando ya no somos jóvenes..........................................................................79
6.7- ¿Qué amenaza a mi salud sexual?.................................................................80
6.8- Cómo protegerse de las ITS............................................................................83
7- OCÚPESE DE SU NIDO........................................................................................ 86
7.1- Importancia de la privacidad............................................................................86
7.2- Arreglando la habitación..................................................................................87
Resumen de las siete claves para tener éxito en el amor.............................................91
Lecturas recomendadas................................................................................................ 94
Reverso de la Cubierta..................................................................................................... 97
Prólogo del autor
La obra está dirigida a jóvenes mayores de 18 años (los padres deberían decidir si
recomendar su lectura a los hijos adolescentes que se inician temprano en las relaciones
sexuales). El autor refleja opiniones, experiencias y sugerencias originadas a través de
diversas fuentes de consulta. Los datos que aquí se brindan se ofrecen sólo con el propósito
de suministrar información. En ningún momento se pretende sustituir la consulta
profesional. Ante cualquier inquietud acerca de su salud diríjase a ellos. No se garantiza el
resultado de los consejos aquí descritos, por lo tanto, no se podrá imputar responsabilidad al
autor de esta publicación, ni a su editor, al no obtener los resultados deseados.
Agradecimientos
Deseo agradecer a mis amigos de toda la vida por la asesoría que me brindaron para
aprender y para explicar de una manera sencilla y eficaz los temas que abarca este libro.
También he tenido la suerte de conocer a personas de incalculable valor que me han
brindado su amor y ayuda para que esta obra se haga realidad. ¿Y qué decir de las
mujeres?, que desde la época de mi adolescencia me enseñaron muchos secretos. ¡Muchas
gracias! ¡Les deseo suerte!
Gracias a usted que lee esta obra y quizás la recomiende a sus amigos. He sentido un
inmenso placer al escribirla y deseo que usted lo disfrute. Aprecio en mis amigos y amigas
de Argentina, Canadá, Cuba, España, Estados Unidos, Francia, México y Perú, el tiempo
invertido en escudriñar todos los aspectos del texto, brindarme opiniones, sugerirme
valiosas ideas, rectificarme errores, y por sus aportes desde el ángulo profesional de sus
respectivas especialidades. También por sus testimonios, apoyo logístico, diseño gráfico,
edición, apoyo en la difusión mundial y ayuda en general.
Un agradecimiento especial a Roberto Acuña, Ignacio Alazo, Orlando Álvarez, Arsenio
Areces, Yanamari Bancrost, Francisco Barrera, Méliz Cantero, Ana María Carbó, Roberto
Corral, Sabino Delgado, Odalys Espinosa, Beatriz Fernández, Alaina Galán, Marlen
García, Julio García, Gerardo Gavidia, Rosa Amelia González, Alina Guerrero, Daril
Gutiérrez, Bruno Henríquez, Nibaldo Hernández, Carlos A. Izquierdo, Marie Kern, Brian
Kerr, Miren Larrazábal, Bobby Leonard, Raúl de León, Antonio de la Nuez, Urania Pérez,
Jorge Luis Robinson, Iruma Rodríguez, Pilar Sa, Genoveva Salgado, Ernesto Sánchez,
Yoandra Suárez, Lino Tomasén, Aloima Torres, Alicia Valdés-Miranda, Maritza Verdaguer
y Mirta Yáñez. Gracias Cecilia Peregrina Bancalari, por confiar en mí. Mi gratitud a
Bedelia Romero, el amor de mi vida y mi principal fuente de inspiración, por su directa y
constante colaboración en la preparación de este libro. Sin dudas, cada página almacena
esa maravillosa energía de todos ustedes.
Agradezco a muchos que personalmente o a través del correo electrónico, a lo largo de
varios años me hicieron llegar sus impresiones, testimonios, opiniones, preguntas,
anécdotas y sugerencias acerca del manuscrito de este libro. Aunque no los cite aquí,
reconozco que sin ustedes esta obra no tendría “sabor”.
Doy gracias al equipo del programa “Nocturno” de Radio Progreso, que desde mi
adolescencia me hace soñar. Cuando escucho sus programas me lleno de recuerdos y fluye
amor por mis venas.
Por último deseo agradecer a todos los que de una forma u otra les interesa el
mejoramiento humano y desean ver parejas armoniosas y felices.
¡Gracias a todos!
Introducción
Si usted me preguntara para qué sirve esta obra, podría responderle en siete segundos: aquí
aprenderá cómo despertarse de madrugada, sintiendo de su pareja un tierno abrazo de
amor y un «te amo». Es, sin dudas, un libro para la pareja, sobre el amor y las
incertidumbres de la vida.
Recuerdo los consejos que mi esposa y yo brindábamos a nuestros hijos adolescentes
quince años atrás. Disponíamos de algunas notas escritas a mano, eran ideas tomadas de
algunos libros. Ellos necesitaban recibir orientación para no caer en el vacío en sus
relaciones de pareja. Deseábamos que estuvieran menos tiempo deambulando por las calles
en busca de algo que no encontraban, y que fuera mínimo el riesgo de caer en malas
compañías. Lo más difícil fue transmitirles esas enseñanzas de forma que prestaran
atención. Años después, ellos nos agradecieron nuestra preocupación y nos manifestaron
que en esa edad tan difícil sintieron nuestro apoyo, lo cual se refleja hoy al poder disfrutar
de relaciones de pareja estables y felices.
Esas notas las fui completando y perfeccionando con experiencias vividas por mí y con
enseñanzas recopiladas de decenas de obras de todos los tiempos y diferentes zonas
geográficas. Lo hice pensando en hacer llegar este conocimiento, de una manera simple,
pero eficaz, a otros jóvenes y también a los menos jóvenes, que ya no disponen de tiempo
para improvisar soluciones. Cuando pensé que había terminado el libro, unos cuatro años
atrás, lo hice llegar a amigas y amigos y también a profesionales de diferentes materias
(sicología, sexología, medicina, física, bioquímica, naturismo, bioenergética, literatura,
religión, etc.). Todos me retroalimentaron con valiosas opiniones, sugerencias y
testimonios.
Hoy me atrevo a asegurar que con este libro, usted: mujer u hombre, joven o viejo, soltero,
casado, o arrimado a alguien; sea ateo, creyente o practicante de alguna religión, aprenderá
cómo iniciar, compartir y mantener feliz una relación de pareja que, quizás luego, se
convierta en una familia unida e hijos estupendos. Estas informaciones también son útiles a
parejas del mismo sexo que ansían transitar por la vida, unidos y felices.
Hoy por la radio, televisión, Internet y otras vías recibimos constantemente mensajes acerca
del sexo, como si las relaciones sexuales por sí solas fueran la clave de la felicidad humana.
Al niño se le pregunta: ¿Cuántas novias tienes? También aprendemos a usar condones para
protegernos de las infecciones de transmisión sexual. Pero… ¡son tan pocos los que nos
hablan de cómo encontrar a la persona que más nos conviene y juntos cultivar un amor
perdurable!, ¡cómo ser felices y hacer felices a los demás!
Paradójicamente, he podido conocer que algunas personas al ver que su pareja ha llegado a
la casa con este texto, en vez de alegrarse, han manifestado: « ¿Para qué estás leyendo
“eso”? ».
La única fórmula para construir una vida de pareja no es el matrimonio. Hoy lo que primero
que se busca es vivir el momento. ¡Hasta eso se debe vivir a plenitud! Surgen nuevos
modelos de relaciones de pareja, que presentan variaciones según el país, las costumbres
locales, la modernidad. Muchos buscan no estar solos en la vida, pero tampoco desean
excesiva rigidez en la relación. Hay todo tipo de matices, llegando a existir relaciones
múltiples o a la eliminación de cualquier tipo de compromiso. Sin embargo, es interesante
ver que muchas personas que niegan la relación estable, cuando encuentran a alguien
especial desean continuar el vínculo.
Desde joven observé que en nuestras vidas existen “coincidencias” que no son tan
“casuales” y que se pueden aprovechar. Quizás, influenciado por mis estudios de ingeniería
en telecomunicaciones donde se estudian los campos energéticos, se combinó mi interés de
conocer la relación entre las “relaciones de pareja” y de otros misterios del pensamiento y
del subconsciente, desde ese ángulo.
En mi historia de amores y parejas, conocí mujeres estupendas y pasé por varias etapas de
aprendizaje. Como todos, viví momentos buenos, y malos también. Cometí errores. En la
búsqueda de respuestas a mis inquietudes tuve la suerte de encontrar cierto vínculo entre el
poder del pensamiento y las relaciones de pareja. Cuando recibí algunos conocimientos
sobre curaciones energéticas mis apreciaciones se enriquecieron y concluí que en las
relaciones de pareja existe un “campo sentimental” que uno puede emitir y que la gente es
capaz de percibir y que la unión espiritual es la base de la verdadera y perdurable
satisfacción sexual. Esa conexión energética invisible diferencia a una relación de otra, es
un mundo que podemos aprender a percibir si lo intentamos.
Muchos consideran que detrás de esa maravillosa perfección que encontramos en una
galaxia o en una partícula atómica, pasando por los cuerpos celestes y los seres vivos desde
el ser humano hasta una bacteria, pudiera estar lo que algunos llaman “el amor universal”,
una energía inteligente superior, sea Dios, o como usted le quiera llamar. Hay muchas
religiones en el mundo, y todas tienen un punto común. No es objeto de este libro emitir
juicios acerca de estas formas de pensar y por supuesto, respeto la suya. Lo importante es
encontrar armonía en la vida. A través de recientes teorías de la física cuántica se ha podido
encontrar respuestas a algunas interrogantes, aunque aún muchos asuntos esperan por una
explicación científica. Albert Einstein decía:
Es posible que todo pueda ser descrito científicamente, per no tendría sentido;
es como describir una sinfonía de Beethoven como una variación de las
presiones de onda. ¿Cómo describirías la sensación de un beso o un “te
quiero” de un niño?
En la obra “El Libro de los Secretos” de Deepak Chopra, encontré algo que llamó
poderosamente mi atención:
Cuando se afirma que no hay prueba científica de que el universo es
consciente, mi respuesta inmediata es: “Yo soy consciente, ¿y acaso no soy
una actividad del universo?” El cerebro, que opera con impulsos
electromagnéticos, es una actividad del universo tanto como lo es una
tormenta electromagnética en la atmósfera o una estrella lejana. Por tanto, la
ciencia es una forma de electromagnetismo que dedica su tiempo a estudiar
otra forma.
En vez de intentar conocer a fondo el fundamento de estos controversiales temas, me
pareció más importante aprender y también enseñar cómo aplicar algunos de ellos en la
práctica de la vida cotidiana, combinándolos con la vida social en la época en que vivimos.
En este mundo sediento de amor, todos se preguntan:
« ¿Cómo encuentro a la persona sin la cual no pudiera vivir? » Se trata de algo bien difícil,
pero nada imposible.
« ¿Cómo selecciono a la persona que más me conviene? » Es clave para lo que sucederá
después…
« ¿Cómo conquistarla y que me acepte? » Si usted no lo sabe y su rival sí, perderá
oportunidades.
« ¿Cómo hacer el amor y alcanzar satisfacción mutua? » Parece sencillo, pero muy pocos
lo saben.
« ¿Cómo alcanzar armonía y paz perdurables con mi pareja y en mi hogar? » Quienes
dominan este arte tienen una ventaja considerable. ¿Nunca ha perdido usted a alguien
que ama por no saber qué hacer? ¿Nunca ha vivido al lado de alguien, en un clima de
crítica constante: “tú tienes la culpa”, “siempre haces esto mal…”; discusiones e
incomprensiones, amenazas y hasta alguna forma de violencia? ¿No sería mejor disfrutar
una relación armoniosa?
También nos preguntamos: ¿Si todos lo hacen, debo hacerlo yo también? ¿Por qué mi
pareja me es infiel? ¿Cómo vencer los celos? ¿Por qué si llevo una vida sexual liberada no
soy feliz? ¿Qué estoy haciendo mal en mi vida de pareja? ¿Cómo evitar el divorcio? ¿Cómo
me protejo del VIH-Sida? ¿Qué longitud debería tener mi pene y qué puedo hacer para
resolver mi situación? ¿Cómo realizo el sexo oral? ¿Qué es lo que los hombres nunca deben
desconocer acerca de la mujer? ¿Cómo es el sexo con una mujer embarazada? ¿Qué pasa
después de los 50 años?...
En este texto intento responder todo eso. Es una síntesis de lo aprendido y experimentado a
lo largo de mi vida, con buenos resultados. No se desespere si cree que su vida es un
desastre. Tampoco crea que se llega de la noche a la mañana en un abrir y cerrar de ojos. En
la vida una situación le lleva a la otra…, a nada se llega directamente. Eso lo sabrá cuando
haya vivido bastante.
Es importante que comparta esta lectura con su pareja, para que construyan juntos los
cimientos del edificio de su felicidad. Es por ello que aunque casi siempre me dirijo a
“usted” en el texto, las claves que aparecen al final de cada capítulo están escritas en plural.
Intento que este libro sea útil a todos, no importa que usted sea cubano, norteamericano,
inglés, mexicano, español, chino, indú, africano… es el resultado del viaje que ha sido mi
vida.
Sin más preámbulos, les invito a ser felices. Conozcan… cómo hacer el amor, con amor
Desarrollo
1- ¿Te encontré?
14
CAPÍTULO 1
1-
¿Te encontré?
La felicidad humana generalmente no se logra
con grandes golpes de suerte, que pueden
ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas
que ocurren todos los días.
Benjamín Franklin
En este capítulo le sugiero mi método para identificar y seleccionar una pareja que pueda
satisfacer sus necesidades espirituales y sexuales
1.1-
Prepararse para el encuentro
El amor es el sentimiento más importante de la relación de pareja, es una decisión y
también es acción, hay que luchar por iniciarlo y por mantenerlo. Muchos me dicen que
desean tener una pareja para disfrutar del sexo y que de momento no les interesa pensar en
hacer eterna esa relación. Esto sucede sobre todo a los más jóvenes, que desean curiosear,
experimentar y aprender.
Yo también pasé por esa etapa. Creo que es inevitable. El riesgo de comenzar una relación a
la ligera es que cuando uno se entusiasma y llega a sentirse bien con esa persona, desea
mantenerse con ella. Pero si la otra parte no piensa lo mismo, no tiene interés en tener una
relación estable, poco se puede hacer. No se ha realizado una mutua selección.
Las personas son diferentes unas de otras; cada una tiene su propia personalidad, tienen
diferentes formas para relacionarse con otra, se auto-valoran y valoran a los demás a su
manera, se comunican de manera diferente. Unas son apasionadas, otras son flemáticas,
tienen diferentes intereses y escalas de valores. Las expectativas de cada una acerca de una
relación de pareja no son las mismas… pero pueden coincidir en muchos aspectos.
La Habana : Editorial Universitaria, 2011. -- ISBN 978-959-16-1361-5
1- ¿Te encontré?
15
Cuando se tiene una pareja, es importante intentar alcanzar la estabilidad. Hay que lograr
que el amor prevalezca, que exista respeto mutuo, que las expectativas que motivaron la
unión hayan sido realistas, que ambos sean capaces de vencer situaciones sociales y sean
capaces de renovarse en el tiempo. Se debe aprender a compartir la vida con alguien, a
convivir con otros familiares, si los hubiera, y buscar cómo tener un mínimo de condiciones
donde convivir. En fin, se debe buscar satisfacción con la relación, en sentido general.
Hay un refrán que dice: “lo que bien comienza, bien termina”. Es importante encontrar a
alguien con quien crear una feliz relación de pareja de la que siempre podamos sentirnos
orgullosos.
Luego de años investigando estos temas, he obtenido algunas respuestas. He logrado
comprender que todos llegan a su objetivo a través de diversas vías y formas, en cierta
medida convergentes, basadas en el pensamiento moldeado por el ambiente cultural de cada
época y país; y que existen importantes factores invisibles que van a ayudar a que la pareja
florezca o desaparezca en breve plazo.
A continuación le revelo mis “tres secretos” para facilitar su encuentro con la pareja soñada.
1.1.1-
Secreto 1: armonícense con el amor
¿Por qué no nos enamoramos siempre de la mujer o el hombre más “bello”? Se dice: «El
novio de ella, ¡que poco atractivo es!» Sin embargo, ese hombre irradia tanto amor, que
puede ser más fuerte que la belleza física.
Siempre recuerdo una canción que escuchaba hace años: “No la busques, hijo, muy bonita,
porque al paso del tiempo se le quita. Busca amor, nada más que amor”.
Si en nuestro pensamiento predomina el amor, se nos facilita llegar al corazón de otra
persona, amar y ser amados. Es lo que yo denomino “armonizarse con el amor”.
En el libro “El Secreto”, Rhonda Byrne expresa:
El sentimiento del amor es la frecuencia más alta que puedes emitir. Cuanto
más amor sientas y emitas, mayor es el poder que estás utilizando.
Al encontrarse dos personas que están armonizadas con el amor y percibir ese sentimiento,
es más fácil que se forme una estupenda e indestructible relación de pareja. Visto desde el
ángulo de mis conocimientos de ingeniería pudiera decir que existe una “sintonía” en las
frecuencias de sus campos sentimentales. A mayor sintonía, más profundo el amor mutuo
que experimentan.
Quizás usted se pregunte: «¿Cómo puedo armonizarme con el amor?» La respuesta es:
«aprenda a canalizar el amor universal». Para algunos esta frase pudiera resultar difícil de
entender, difícil de materializar o incluso ridícula.
En su obra “La Novena Revelación. Guía Vivencial”, James Redfield y Carol Adrienne
refieren:
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Usted no se obligue a amar. Deje que el amor entre en usted.
Es que usualmente, tenemos la tendencia a pensar en el amor como un sentimiento que sale
hacia el objeto de nuestro amor, y que emitirlo es nuestro fin. Esta breve aseveración nos
transmite que para alimentarnos de la energía universal, debemos abrirnos a ella. Abiertos,
podemos recibir energía, coincidencias y otros dones de la inteligencia universal.
Para armonizarse con el amor sugiero que comprenda y practique lo siguiente:
Viva la vida desde el corazón y no desde su mente. Aprecie la belleza de todo
lo que le rodea, el amanecer, la vegetación, los animales, las personas, los
colores de la naturaleza… Ofrezca a quienes le rodean un pensamiento
optimista, de amor, confianza, armonía y paz. Mantenga elevada su
autoestima y una mente positiva. Sea muy paciente y aprenda a pensar y
actuar preocupándose por los demás. Sea humilde y compasivo, no juzgue
superficialmente a los otros, no critique, sea tolerante (en el sentido de
aceptar los posibles defectos de los demás) y sepa perdonar. Aprenda a sentir
apoyo, refugio y consuelo en otra persona, a dar y recibir, a buscar sin tregua
la solución a los problemas de ambos, a cuidar, entender y brindar ternura a
un ser amado… y también a compartir junto a sus amigos y seres queridos la
alegría y seguridad.
Esta forma de pensar y actuar sostenida todo el tiempo, le crea un campo energético
positivo, que puede ser captado por otros y en particular por quien pudiera llegar a ser su
pareja. Pero falta decir que su deseo de encontrar pareja debe ser tan profundo, que se
convierta en fervor de que va a encontrarle, una convicción absoluta de que así será. No se
preocupe mucho sobre “cómo” ni “cuándo” va a ser que llegará a esa persona. Imagine con
fuerza que ya la encontró y disfrute ese momento como si fuera real. ¡Así mismo! Grabe esa
felicidad en su subconsciente. En otras palabras: sienta pasión y haga que suceda.
Ahora, deténgase a reflexionar un momento: ¿Cuántas veces al día usted dice: yo necesito
esto, me hace falta aquello, yo quiero esto…? ¿Cuántas veces dice: deseo esto para ti,
necesito esto para ti…? Si sólo piensa en usted, para usted, su subconsciente no está
preparado para el amor y posiblemente sufrirá bastante. Es necesario aprender a pensar por
los demás y también pensar en “nosotros”.
Si logra impregnar su subconsciente en estos aspectos positivos observará como por arte de
magia, sin darse cuenta se dirigirá directamente al sitio indicado, a la persona que necesita
encontrar, o ella se dirigirá a usted… Algo sucede a nivel cósmico que facilita esa necesaria
conexión. Es menester estar atentos para no perder la oportunidad y mantener esa forma de
pensar, manteniendo el encanto de la unión.
Por supuesto: si usted ya encontró su pareja, esta forma de pensar y actuar le ayudará a
conservarla. También ella debería hacer lo mismo. Establecerán una sintonía muy especial.
La Habana : Editorial Universitaria, 2011. -- ISBN 978-959-16-1361-5
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Paulo Coelho, en su libro “El Alquimista” expresa como tesis central: «Cuando quieres
alguna cosa, todo el Universo conspira para que la consigas».
1.1.2-
Secreto 2: identifiquen las sincronicidades
A mi amiga Natasha le sucedió algo especial que hoy llamamos “sincronicidad”:
Tenía mi pareja, pero “sabía” que él no iba a estar conmigo mucho más
tiempo… Una amiga me mostró una OUIJA y comencé a experimentar con
ella. Pregunté varias cosas, cuya respuesta conocía y mi amiga también.
Luego pregunté cómo se llamaría el hombre que iba a formar una verdadera
pareja conmigo. Leí: “Tony”. No conocía a nadie con ese nombre y realmente
no le puse mucha atención a esa respuesta. Una semana después miro la calle
desde mi apartamento ubicado en un tercer piso y observo a un hombre,
bicicleta en mano, que llamaba a una mujer que recién se había mudado a mi
edificio. Quedé impresionada, pues ese señor tenía algo que me gustaba en
extremo. Al percatarme de que mi vecina bajó y lo besó, pensé que no valía la
pena mirarlo más y entré. Tres meses después regalé a mi vecina unos panes
confeccionados por mí y poco después alguien toca a mi puerta. Se presentó,
era el ex novio de la prima de mi vecina y venía a preguntarme dónde había
aprendido a confeccionar el pan. Quedé pasmada, era el hombre que meses
atrás me había impactado al verle. Lo hice pasar y al preguntarle su nombre
respondió: «Tony». Para terminar les informo que nuestra relación de pareja
tiene ya 20 años…
Hay que decir que este concepto es polémico. A grandes rasgos, la sincronicidad podría
definirse como una coincidencia significativa de dos o más sucesos en la que,
aparentemente, parece estar implicado "algo más" que la posibilidad aleatoria. Recuerdo
sincronicidades que me impactaron. A continuación le relato una que jamás olvidaré:
En 1984 me encontraba en una universidad de Budapest, Hungría. Debía
desarrollar determinados temas de filosofía y defenderlos frente a un tribunal.
Me dirigí a una librería en el centro de la ciudad, muy seguro de que allí
encontraría algún libro que me ilustrara. Prácticamente todos los títulos
estaban en idioma húngaro. Al entrar, mi vista se dirige a la parte inferior de
un estante ubicado a unos tres metros de mí, era como si allí algo brillara. Me
acerqué y revisé. ¡Estaba allí!, un libro en idioma español. Lo tomé, le sacudí
el polvo y le dije: — ¡Me estabas esperando!— Lo compré, y para más
sorpresa su contenido y profundidad eran exactamente lo que necesitaba para
elaborar mi presentación, la cual defendí sin dificultad…
¿Fue casual que me dirigiera directamente a la librería y al estante donde se encontraba el
libro, publicado en mi idioma y con todo lo necesario para redactar mi trabajo? ¿Nunca ha
experimentado algo así? Haga un poco de memoria.
La Habana : Editorial Universitaria, 2011. -- ISBN 978-959-16-1361-5
1- ¿Te encontré?
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Encontré un artículo publicado en Internet, con unas palabras de Beatriz Fernández del
Castillo, creadora de un método que permite trabajar con la mente para influir
positivamente en nuestras emociones y actos, en la creatividad, proyectos de futuro,
relaciones… Este proyecto se llama “Autoevolución”:
Los momentos en que nos olvidamos de la seguridad, de lo conocido y
trillado, del plan establecido, de lo que se supone que debemos hacer, son los
que nos sumergen en un estado de alerta y apertura perfectos para ser
conscientes de esa dimensión simbólica de la vida que es la que al final nos da
la clave no sólo para la solución de nuestros problemas, sino para hallar
nuevas maneras de vivir intensa y conscientemente.
¿Qué le parece esta otra sincronicidad?:
Cuando tenía 12 años pasé unos días en una cabañita a la orilla de un
riachuelo y al pie de una elevación. Era un ambiente de montañas, agradable
y bello. De pronto, me sentí enfermo y algo me decía que regresara de
inmediato a mi casa. Recogí mis cosas y no tardé en salir, casi al anochecer.
No había recorrido más de un kilómetro cuando se desencadenó una fuerte
tormenta de lluvia y viento. Tuve que pasar la noche en el portal de una
escuela, pues el río creció y no se podía cruzar. Al día siguiente salió el sol, y
supe que de la loma se desprendieron algunas rocas. Una de ellas, enorme,
rodó y aplastó la cabañita que acababa de dejar atrás. ¿Cómo capté el
mensaje y me marché de allí poco antes de que ello sucediera?…
Eso me sucedió a mí. No habría podido escribir este libro. ¿Qué sucedió a mi amiga Elena?
Le cuento:
Hace unos 40 años trabajaba junto a una muchacha que al parecer tenía mala
suerte para el amor. No encontraba pareja. Me daba mucha pena, pues ella
tenía muy buenos sentimientos. No era fea, tampoco bonita. Me llamaba la
atención que nadie se le acercaba a cortejarla. Sin embargo, ella era muy
optimista y siempre tenía en su mente —Voy a encontrar a alguien y seré feliz.
— Sucedió que un día se le ocurrió salir a caminar por la Avenida del Puerto
—ella no sabe cómo fue que le vino la idea de dirigirse allí— y cruzaba la
calle para acercarse al mar cuando alguien se le acercó para hacerle una
pregunta. De la conversación surgió un interés mutuo de conocerse. Todo
desembocó en un gran amor. Se casaron. Varios años después la vi. Era muy
feliz. ¿Fue casual ese encuentro que cambió la vida de esa desdichada mujer?
En el capítulo que sigue le relataré cómo fue que conocí a Bedelia, mi esposa. Todo sucedió
en instantes…
De seguro usted también ya estará recordando situaciones extraordinarias que ha vivido.
¿Nunca pensó que eran demasiado “casuales”?
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Encontré respuestas a esta y a otras preguntas en algunas obras de Carl Gustav Jung. Este
renombrado psiquiatra suizo del siglo pasado, colega por varios años del famoso Freud,
pretendía dilucidar diversos casos extraordinarios de “coincidencias significativas”.
Jung indicó que una sincronicidad es un puente entre un hecho externo y un hecho
psicológico interno, que los eventos de este tipo ocurren a cada momento, transformándose
en sincronicidad en el momento en que se hacen conscientes. El significado que puedan
tener depende de la conciencia de la persona que la experimenta.
También encontré dos libros muy interesantes: “Sincrodestino” de Deepak Chopra y “La
nueva visión espiritual” de James Redfield, que abordan este tema. Hay muchos otros textos
que tratan estos temas.
Afirma Chopra:
“…Esta sincronía responde a una gran inteligencia omnipresente que reside
en el corazón de la naturaleza y que se manifiesta en cada uno a través de lo
que llamamos alma. Cuando aprendemos a vivir desde el alma, ocurren varias
cosas. Tomamos conciencia de los exquisitos patrones y ritmos sincrónicos
que gobiernan la vida…” “…Descubrimos que al prestar atención e intención
a estas coincidencias, podemos conseguir resultados específicos…”
“…la sincronicidad sólo ocurre cuando las personas, los animales o los
objetos tienen una relación estrecha, cuando están inmersos.”
Redfield, nos indica:
“…la luminosidad se refiere al fenómeno de percibir cierto lugar u objeto que
sobresale y atrae nuestra atención. El lugar u objeto parece tener mayor
presencia que todo lo que está a su lado.”
Entonces, ¿cómo encontrar a una pareja con los requisitos y cualidades que usted desea? Le
sugiero: «Abra bien los ojos. Notará que la vida está llena de sincronicidades».
Evite pensar: «Eso es algo que se me ha ocurrido,… no puede ser cierto», o: «Es sólo una
casualidad». Los hechos ocurren por alguna razón. Encontremos cuál es.
Las señales nos llegan en forma de casualidades increíbles y en forma de sueños mientras
dormimos. Recuerdo que hace unos 25 años debía escribir un “Manual del Usuario” de un
software empresarial. No sabía por dónde comenzar. Una noche, a las dos de la madrugada,
me desperté luego de soñar con lo esencial que debía escribir. Encendí la luz, tomé papel y
tinta y llené varias cuartillas. Luego desperté a mi esposa para leerle todo aquello. Ese texto,
con algunas correcciones, se convirtió en el documento que necesitaba presentar.
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1.1.3-
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Secreto 3: no se crucen de brazos
Cada vez que le ocurra un evento importante en su vida, pudiera preguntarse: ¿Es ésta una
sincronicidad? ¿Cuál es el mensaje que debo captar? Hay que aprender a ejercitarse en estos
menesteres, poner atención a tan importantes cuestiones.
Al hacerlo, para el caso de una búsqueda de pareja, se viabiliza el proceso de posible
encuentro y de comunicación entre usted y la persona con que pudiera crear una estrecha
relación. La descubrirá. Ella también lo encontrará a usted. No debe forzar la situación, pero
tampoco se cruce de brazos, pues las oportunidades a veces se dan una sola vez.
Cuando descubra una posible pareja es mejor actuar rápido, antes que alguien se le
adelante... Nunca olvide que la competencia existe. A mí me tocó perder una vez que ignoré
esa realidad. A mi hijo Jorge, también. Lo que él explica nos ha sucedido a muchos:
Siendo un adolescente, me encontraba intentando conquistar a una muchacha
que compartía ese verano con mi grupo de amistades. Como en aquel
entonces la timidez podía más que yo, sólo le decía pocas cosas y mis avances
eran muy lentos. El tiempo fue pasando y no atinaba a decirle nada mas allá
del “que linda estás hoy” o regalarle alguna flor a pesar de sentir que de ella
hacia mí existían sentimientos parecidos. Casi terminando aquellas
vacaciones la invité una noche, junto a otro amigo y su novia, a una discoteca
en la cual la pasamos muy bien. De regreso acompañé a mi “pareja” a su
casa. Al llegar, sacó su llave, abrió la puerta y nos despedimos con un beso en
la cara. Me di la vuelta para marcharme cuando me llamó, y de manera muy
lenta y hasta con cierta sensualidad me dio las gracias por aquella velada
mientras me miraba fijamente a los ojos. Le dije que no había de qué y volví a
dar la espalda. Ella volvió a dar las gracias, regresé de nuevo, y después de
repetirle “no tienes por qué darlas” le di otro beso en la cara. Comencé a
bajar las escaleras y ella volvió a decirme “gracias”, pero continué la
marcha. Cuando iba llegando abajo me di cuenta del error cometido. Subí
hasta la puerta de su apartamento, al no escuchar ruido en su interior, me
marché. Días después le confesé mis sentimientos hacia ella y me expresó que
no estaba interesada en iniciar una relación de pareja, deseaba estar sola. En
mi mente captaba: «Tu oportunidad con ella fue la noche de la discoteca».
Años después nos re-encontramos. Me vino a la mente aquella historia y se la
comenté, a ver si la recordaba. Me respondió: “Sí” y agregó que si aquella
noche la hubiera besado en la boca al momento de la despedida, todo hubiera
sido distinto. Le pregunté qué diferencia existía entre aquella noche y después,
cuando le confesé mis sentimientos hacia ella. Respondió que no sabía, pero
que la noche de la discoteca era la indicada.
Si siente que algo le guía, preste atención y siga adelante. Observe todo lo que pase por su
mente y en derredor suyo. A veces son pequeños detalles. Esto es aplicable no sólo a la
relación de pareja, sino a la vida en general. A veces me he dirigido en auto a determinado
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sitio y de momento he captado que debo doblar a la derecha. Al hacerlo, pocos metros
después, he encontrado a alguien que necesitaba ver y no sabía cómo encontrarlo. Lo que
sigue me sucedió a mí:
Años atrás, mi esposa y yo nos dirigíamos a la casa. De pronto, sin saber la
razón, le dije: «Necesito hacer una llamada telefónica ahora mismo». Detuve
el auto frente al primer teléfono público que encontré y se me ocurrió llamar a
Gina, una amiga que vivía a pocas cuadras de allí. Al tomar ella el auricular
estaba llorando pues minutos antes su hija Niné, había recibido una pedrada
en un ojo y necesitaba ayuda urgente. Entre las personas que Gina,
desesperada, intentaba localizar, estaba yo. Pasamos a recogerlas y en pocos
minutos su hija estaba en el hospital.
Ahora retornemos a donde le decía que sueñe despierto con la persona que ansía conquistar.
Una o varias veces al día, trabaje con su subconsciente. Debe programarlo de manera
positiva para obtener resultados eficaces. Para ello, realice meditaciones. Hay muchas
maneras de meditar. Escoja un sitio silencioso, tranquilo y preferentemente oscuro. Si
donde reside hay mucho bullicio, puede realizarla en horarios en que la gente duerme o se
va a trabajar. Escoja una posición cómoda, sentado o acostado (no tan cómoda que se vaya
a quedar dormido). Uno puede meditar hasta en un avión, un autobús o un metro, incluso
mirando el televisor. No es necesario practicar alguna religión para realizar una buena
meditación, aunque varias de ellas enseñan a hacerlo con sus particularidades. Trato de ser
práctico, el asunto es llegar al subconsciente. Usted decide la duración de ese proceso.
Pudiera ser 30 minutos.
Cierre los ojos y comience a despejar de su mente todo tipo de pensamiento. Yo lo hago
“mirando” con los ojos cerrados a un punto imaginario en la oscuridad. Luego comience a
soñar despierto con esa persona que ansía conquistar, con todo lo que va a sentir cuando la
tenga a su lado. Es necesario impresionar fuertemente su subconsciente imaginando que ella
de veras está a su lado, que conversa con usted sobre algún tema de mutuo interés y usted le
manifiesta con mucho respeto y a la vez con mucha intensidad, su sentimiento. También
puede hacerlo con una persona imaginaria. Disfrute con su “presencia”, aprecie cómo sonríe
y acepta su proposición. No se desespere, todo llega; su mensaje será recibido y en el
momento menos pensado se producirá el encuentro. Cuando ocurra, ya usted ha avanzado
en su propósito y la otra parte lo ha notado sin saber cómo. Debe hablarle como si fuera la
continuación del encuentro que tuvo en su mente. Siéntase seguro, pues todo va a
transcurrir exitosamente.
Tenga presente que en su vida diaria existen dos momentos importantes: uno, cuando está
meditando, su mente se va al sitio deseado y prepara el futuro, su encuentro con quien ansía
conocer. En ese periodo de tiempo concéntrese solamente en ello. El otro momento es el
ahora, que es cuando usted está consciente de lo que está realizando; es su mente lógica la
que trabaja y analiza las situaciones. Procure que al estar en el ahora no le interfieran
pensamientos sobre el futuro o el pasado y viceversa.
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Como parte de su auto preparación debe mantener bien alta su autoestima. Es importante si
busca pareja. También si ya la tiene y desea mantener feliz esa relación. Las actitudes
derrotistas, el miedo y la negatividad bloquearán sus intentos de triunfar en la conquista.
Así sucede: cuando hay dudas, nada se materializará.
Algo esencial: olvide el pasado. Lo que pasó, pasó, sea bueno o malo. No distraiga su
mente recordando malos momentos vividos. Lo vital es el presente. ¡Aprovéchelo!
A continuación comenzaremos a tratar temas un poco más “materiales”. Recomiendo que
no ignore lo que hemos tratado hasta aquí, por muy irreal que pueda parecerle. Serán los
cimientos de lo que haga a partir de ahora.
1.2-
Descubra y seleccione su pareja
Ya están uno frente al otro. ¿Qué hacer?
La sensualidad es una suma de factores en la que juega un papel fundamental algo que
llamamos “la química”. Es difícil de explicar. En nuestro organismo se localizan
determinadas sustancias y existen relaciones entre su abundancia relativa y nuestros
sentimientos amorosos y sexuales.
Nos enamoramos de una persona en especial. Hay cierta selectividad inconsciente, cuando
encontramos "la horma de nuestro zapato" o nuestra "media naranja", el pulso se altera,
nuestras manos sudan y el corazón palpita. Si esas condiciones se dan de ambas partes,
junto a lo citado sobre la sincronicidad algunas páginas atrás, podrá existir amor, sexo
placentero y duradero; incluso para cuando pasen los años y las pasiones disminuyan.
Debemos unirnos a quien nos atraiga, que comparta nuestros intereses, ideas y proyectos.
Es deseable que exista ternura y un común interés y preocupación por el sexo y el placer.
Cuando hemos encontrado a alguien que podría convertirse en nuestra importante relación
amorosa, debemos ante todo reflexionar y antes de seguir avanzando realizar un proceso de
selección. Muchas veces, nos dejamos llevar por aspectos físicos de nuestra posible pareja y
creemos que lo demás, se resolverá después. Quizás, ella también se entusiasme en la
primera impresión con nosotros y comience la relación.
El proceso de selección tiene tres aspectos clave:
1. Debe realizarse por ambas partes , para elevar las probabilidades de acertar y de
alcanzar la felicidad soñada.
Es favorable tener claras unas expectativas realistas acerca de la relación con la pareja en
potencia.
Una relación estable no se basa solamente en el amor, ni en los bellos momentos del inicio
de la relación. Debe existir una valoración mutua y el deseo de dedicar tiempo y esfuerzo a
esa relación.
Hoy día las cifras de divorcio o separaciones son elevadas. Entre las causas de ello se
encuentra la incorrecta selección de la pareja.
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En su libro “A orillas del río Piedra me senté y lloré”, Paulo Coello cita un pensamiento del
monje Thomas Merton:
La vida espiritual consiste en amar. No se ama porque se quiera hacer el bien,
o ayudar, o proteger a alguien. Si obramos de ese modo, estamos viendo al
prójimo como un simple objeto, y nos estamos viendo a nosotros como
personas generosas y sabias. Esto nada tiene que ver con el amor. Amar es
comulgar con el otro, es descubrir en él una chispa divina.
Formar una pareja es un asunto complicado. Luego de constituirla, hay que consolidarla, día
a día. Esa tarea es un asunto de los dos. Deben estar juntos en las buenas y en las malas,
intentar tolerar defectos menores en la pareja, complacer y ser complacidos, perdonar y ser
perdonados, respetar y ser respetados.
La selección de la pareja requiere de un acercamiento entre ambos, se valora la atracción
física y un mutuo agrado, ¡hasta el olor! Se debe conversar mucho, conocerse
profundamente, tomar en cuenta las valoraciones de ambos acerca de variados temas, el
comportamiento ante situaciones adversas que han vivido, etc. Cuando existe semejanza de
intereses, se facilita el proceso de interrelación y de adaptación como pareja. Es por eso
recomendable frecuentar sitios donde existen altas probabilidades de encontrar a nuestra
posible pareja ideal.
Busque en los ojos de esa persona el amor sincero, la bondad, la humildad, ¿puede llegar a
su corazón? Valore si en esos primeros encuentros predomina la alegría, el optimismo, los
sueños y el respeto mutuo. Esa es la base de todo el futuro de la relación de pareja.
No olvide que la vida es dinámica. Con el tiempo cambiará nuestro físico, cambiará nuestra
manera de ver las cosas, cambiará nuestra salud, cambiará el entorno…
Si encontró a su posible pareja y “sabe” que existe afinidad desde el ángulo sentimental,
todo es más fácil. Ahora deberá explorar otros aspectos complementarios para intentar saber
si de verdad pueden llevar, juntos, una vida feliz.
Cuando hay amor y decisión de establecer una sólida pareja todo se va ajustando y se va
llegando a un nivel de entendimiento mutuo. Cada parte debe evaluar si será capaz de
aprender a aceptar a la otra con sus virtudes y defectos. Debe estar claro que no se debe
buscar la perfección, pues no existe en ninguna parte.
Si hay un secreto para vivir feliz con una persona, ese secreto consiste en no pretender
modificarla, aunque uno mismo, por amor puede modificar ciertos aspectos, si lo considera
útil para la relación.
Debe evaluarse el comportamiento de la posible pareja desde el ángulo emocional y de
personalidad, escalas de valores de cada parte e intereses. Deberán estar de acuerdo en
concederse relativa libertad. Ello no es sinónimo de infidelidad. Existen muchos casos en
que el hombre aspira que la mujer permanezca en la casa. En cada país existen costumbres
y maneras de pensar diferentes. La situación económica también influye. Quizás, si la mujer
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no tiene esa libertad, la relación sea tensa, pero eso lo decide la pareja, acorde a sus puntos
de vista.
Es sano conversar acerca de lo que piensa cada parte en relación al presupuesto que
manejarán si se establecen juntos, sea mucho o poco, a la forma de gastarlo y las
prioridades en su distribución a otras personas (por ejemplo, a familiares que necesitan
ayuda). Resulta difícil ponerse totalmente de acuerdo en este asunto, pero si se analiza
utilizando la palabra “nosotros”, todo será más fácil.
También pueden transportarse al futuro y pensar: dónde vivir, cómo sería la manera en que
podrían mantener un hogar juntos, las tareas de cada cual, la relación de cada uno con los
familiares cercanos del otro, y la posible solución a las posibles dificultades que pudieran
enfrentar hoy. ¿Qué piensa cada parte en relación a los hijos que podrán tener más adelante?
¿Alguno de los dos ya tiene hijos? ¿Son aceptados?
Es importante conocer cómo se comporta esa persona cuando está enfadada. Todos tenemos
malos momentos, pero es bueno saber qué nos depara el futuro en esos casos con nuestra
pareja en potencia. ¿Aceptaremos esas manifestaciones de enfado? ¿Nos desencantará?
Luego de estas conversaciones y apreciaciones, cada cual puede obtener sus propias
conclusiones acerca del posible futuro que le espera y toma la decisión de seguir o terminar.
Hay que aprender a respetar las diferencias. Hay personas muy pulcras y ordenadas que
chocan en su relación con quienes se manifiestan de manera opuesta. Hay que enamorarse
de alguien que se alegre con nuestras alegrías, que respete nuestras maneras de pensar, que
sufra con nuestras tristezas, que nos de fuerzas después de un fracaso. Y no es sólo
enamorarse, sino mantener ese sentimiento a lo largo de la vida en común. Es mejor
mantener la relación cálida que tener que salir a buscar una nueva cuando la actual se haya
enfriado.
Pudiera resultar dañina para la futura relación de pareja la sobrevaloración de la posición
social o situación económica de la posible pareja.
La triste historia de alguna separación anterior no tiene por qué repetirse. Se requiere poner
mente positiva en todo momento.
— Usted debe “domesticar” a su pareja...
Le recomiendo que lea “El Principito” de Antoine de Saint-Exupéry. Es un pequeño libro
cargado de hermosos mensajes que las personas mayores debemos valorar.
Recuerdo, la conversación del zorro con el Principito, cuando le pidió a éste que lo
domesticara:
— ¿Qué significa ‘domesticar’?
— Es una cosa demasiado olvidada —dijo el zorro— Significa ´crear ligaduras...´
— ¿Crear ligaduras?
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— Claro —expuso el zorro—. Tú no eres para mí más que un jovencito parecido a otros
cien mil jovencitos. Y no te necesito. Y tú tampoco me necesitas. No soy para ti más que
un zorro parecido a otros cien mil zorros. Pero si me domesticas, nos necesitaremos
mutuamente. Serás para mí único en el mundo. Seré para ti único en el mundo...
— Comienzo a entender —dijo el Principito—. Hay una flor... creo que me ha
domesticado…
¿Nunca le han domesticado? A mí me sucedió y es algo muy agradable. Cuando usted
domestica a su pareja la convierte en un ser único en el mundo para usted. Sobre todo
cuando la ha protegido, la ha cuidado, ha dedicado buena parte de su precioso tiempo a ella,
con quien a veces se ha enojado y luego se ha reído. ¿Y si eso sucediera también de parte de
su pareja? ¡Sería estupendo!
1.3-
El amor es más que el acto sexual
Muchos de nosotros nos unimos en vínculo afectivo de pareja siendo muy jóvenes, cuando
el instinto biológico es muy fuerte y con esa relación aspiramos a vivir por el resto de la
vida. Cuando esta unión está basada en la atracción física y en ocasiones falta el amor, lo
demás tiene que ajustarse a eso. Si se ignoran las diferencias en la manera de ser y de
pensar de ambos. ¿Habrá comprensión mutua?
En otros casos hacemos el amor con nuestra pareja porque tenemos “derecho” al haberse
firmado un contrato matrimonial. Con el transcurso del tiempo aumentan cada vez más las
contradicciones y los conflictos, por consiguiente, la relación pudiera hacerse difícil.
El que ama acepta a su pareja tal y como es. Cuando falta el amor cada cual debe soportar a
su pareja. ¿Es lo mismo aceptar que soportar? Lo importante es disfrutar las diferencias, no
se trata sólo de aceptarlas. La vida sería aburrida si todo fuera exacto, perfecto, si no
tuviéramos puntos de comparación, fuentes para enriquecernos.
Jorge Bucay, en su libro “Amarse con los ojos abiertos” expresa:
Enamorarse es amar las coincidencias, y amar, enamorarse de las
diferencias.
Es un error buscar una pareja para que se resuelvan nuestros problemas, o para tener
seguridad, o por la felicidad añorada. Se debe buscar una pareja con vistas a disfrutar el
estar juntos, compartir los momentos buenos y malos de la vida, alguien con quien unirse
en equipo para trabajar por la construcción de un castillo virtual llamado Amor, que se nutra
del esfuerzo de ambos y que permita disfrutar esa unión en las buenas y en las malas, que
permita el crecimiento personal de ambos.
— ¿Se puede fabricar el amor?
El amor es cosa del corazón. ¿Qué puede pasar cuando la unión sexual se produce de
manera ocasional e instintiva? Si es sexo con más de una pareja, o sexo grupal, como
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sucede hoy día a muchos jóvenes, ¿podrá esperarse algo positivo de alguna de esas
relaciones?
Cuando falta el amor, intentamos adaptarnos, pero si sólo hay instinto sexual, es probable
que la relación sea difícil. Existiendo amor, el acto sexual alcanza un significado especial.
Ese acto no es un escape, ni hábito, tampoco una obligación.
Al seleccionar una pareja, debemos evaluar las probabilidades de mantener una relación
estable con ella y decidir si conviene seguir.
Deepak Chopra, en su libro “Las Siete Leyes Espirituales del Éxito” expresa:
…Nos hemos detenido momentáneamente para encontrarnos unos a otros,
para conocernos, amar y compartir. Este es un momento precioso pero
transitorio. Es un pequeño paréntesis en la eternidad. Si compartimos con
cariño, con despreocupación y amor, crearemos abundancia y felicidad para
todos y entonces este momento habrá valido la pena.
Entonces, la clave No. 1 es:
Aprendan a armonizarse con el amor. Disfruten intensamente esa
relación que ansían tener como si fuera realidad. Vivan atentos a su
alrededor, capten las señales y actúen. ¿Se encontraron?
Comuníquense, conózcanse y hagan una buena selección. Eviten
separarse si su corazón les dice que sin esa persona no podrá vivir.
A algunos les podrá parecer ridículo hablar de “conquista” en pleno siglo XXI. Si todo es
tan sencillo hoy día, ¿por qué usted no está abrazando ahora mismo a la persona que desea
realmente? Quizás sea bueno que preste atención al capítulo que sigue.
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2. - Conquístela con amor
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CAPÍTULO 2
2-
Conquístela con amor
Es más fácil quedar bien como amante que
como marido; porque es más fácil ser
oportuno e ingenioso de vez en cuando que
todos los días.
Honoré de Balzac
En el capítulo anterior analizamos algunos aspectos importantes que se tienen en cuenta
durante el proceso de encuentro con una posible pareja, que se aplican también en la
actividad de conquista. Cuando conquistamos a alguien de una manera efectiva y en el
momento oportuno, habrá mayor probabilidad de que nos acepte. Antes de aventurarnos a
hacerlo, deberíamos intentar conocer si le agradamos o si existe atracción física hacia
nosotros.
2.1-
¿Cómo saber si le gustamos?
Como hombre, me referiré a la conquista de una mujer. Lo invito a que aprenda a
interpretar su lenguaje corporal. ¿Cómo reacciona cuando nos acercamos y le hablamos?
¿Cómo se sienta frente a nosotros?
Le ofrezco algunos secretos que he leído y experimentado con éxito:
Existe una zona en derredor nuestro que tratamos de evitar que cualquiera entre en ella. Es
aproximadamente lo que miden nuestros brazos estirados. Si la mujer permite que entremos
a ese territorio, es síntoma inicial de que en cierta forma le agradamos.
Si usted le dice algo o la besa en la oreja izquierda o si le toca el pie, pierna, hombro y oreja
de ese lado, obtendrá mayor respuesta sentimental. En el lado opuesto la respuesta podría
ser carnal.
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2. - Conquístela con amor
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Si la mujer está sentada con la bolsa o cartera sobre sus muslos, lo más probable es que
estará negando todo lo que le propongamos. Mejor esperar un poco. También si está
inclinada hacia atrás nos está indicando que desea mantener la distancia. Debemos ser
cautelosos.
Si tiene los brazos cruzados no está dispuesta a recibir nuevas emociones.
La cabeza erguida es muestra de neutralidad. Ella está de acuerdo en cierta medida. Si
deseara más se inclinará hacia usted.
La palma de la mano hacia arriba es buena señal de que está de acuerdo con lo que le
decimos, o que admite que le agrada la conversación.
Si ella se acaricia las rodillas o los muslos estando en una conversación con usted, ello
pudiera indicar que ansía hacer el amor o tener una relación con usted. Algo similar será si
acaricia a algún muñequito de peluche o similar, donde ese objeto tendría el mismo valor
sentimental hacia usted.
Las piernas también pueden brindarnos información acerca de cómo piensa ella. Si las
coloca en posición similar a las nuestras ello indica que está de acuerdo con lo que
tratamos.
La mujer, cuando se abraza del brazo izquierdo del hombre indica que se siente protegida a
su lado.
Estos son sólo algunos elementos sobre el lenguaje corporal. Si usted es un poco observador
descubrirá otros.
En relación al “amor a primera vista”, opino: lo que existe es la grata sensación de haber
encontrado a alguien que puede cambiar nuestra vida. Su lenguaje corporal nos lo dirá. A
partir de ese momento se puede ir sembrando el amor.
En cada país existen costumbres, a veces antagónicas. En Cuba, el piropo es una vía muy
utilizada para establecer el contacto inicial con una mujer. Imagínese que usted va subiendo
una escalera detrás de una mujer y le diga: —Yo subiría los 102 pisos del Empire State con
tal de seguir contemplando sus piernas— Si ella se vira y sonríe, ya tiene usted la
oportunidad de iniciar una agradable conversación. Escribir sobre los piropos es tema para
un libro completo. Sólo deseo señalar que un buen piropo debe ser respetuoso, simpático y
original a la vez. Si se dice en el lugar correcto y el momento apropiado, pudiera ser el
inicio de una bella relación amorosa.
2.2-
¿Cómo enamorarla y que diga “SÍ”?
Esta fue la pregunta que hizo mi hijo Jorge cuando tenía 15 años. Todos nos preguntamos
cómo lograr que nos acepte; le expondré algunos secretos. Parecerán elementales y obvios,
pero lo cierto es que muchas veces los ignoré y por ello perdí oportunidades.
Si usted los aplica, tendrá otra oportunidad de conquistarla y si le interesa una prolongada
relación, lo logrará, haciéndola formidable. ¡Comencemos pues!:
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2. - Conquístela con amor
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Es importante que en la conversación mantenga un diálogo franco, que le abra la
imaginación y la invite a la fantasía.
Elija un sitio tranquilo para conversar con ella, donde exista una iluminación tenue y de ser
posible que predomine la luz roja, este color ayuda a aflorar los sentimientos, la pasión.
Pero precaución: si ella es muy nerviosa pudiera ser dañina esta opción.
Le voy a revelar algo que pudiera ayudarle: tener las manos calientes mejora las relaciones
interpersonales. Esto ha sido publicado en la revista Science por los científicos
estadounidenses Lawrence Williams y John Bargh. Una mujer es más afectuosa cuando
sostiene en sus manos una taza de café o té caliente, y se facilita nuestra relación hacia ella.
Háblele claro y sin temor. Olvídese de su timidez y persista hasta alcanzar el “Sí”. Las
palabras no puedo, fracaso, retirada y otras similares deben quedar fuera de su diccionario
personal. Antes de hablarle debe organizar sus ideas para que sean efectivas y convincentes
y que penetren mejor en la mente y en su corazón.
Tenga presente: cuando la mujer accede a una conversación con usted, en un sitio donde la
atmósfera es agradable, eso indica que todo va muy bien.
Es importante que evite hablar sobre usted y muestre interés por ella. Hágale preguntas para
que se sienta escuchada, lo que a su vez le permitirá conocerla mejor y seleccionar temas de
conversación que sean de su agrado. Recuerde que cuando usted habla y gesticula, su
subconsciente está emitiendo información acerca de su cultura, de su personalidad, y ella lo
captará.
Sea sincero, si la ama, dígaselo. Su intuición debe jugar un importante papel para decidir
cómo debe actuar en ese momento.
Al comenzar a expresarle acerca de su intención, recuerde que si sus razones son muy
importantes llegará a su cerebro; pero si las palabras van cargadas de emoción llegarán al
corazón y logrará su propósito de conquistarla.
Llame su atención, de forma tal que ella le escuche con sumo interés. Por ejemplo: —Tengo
que decirte algo...
A continuación dígale lo que piensa e intente despertar su interés, tanto, que la estimule a
seguirle escuchando y quiera saber más.
Recuerde que en el amor, no se debe esperar nada a cambio. El amor se entrega sin
condiciones.
Si ha despertado su interés, ahora podrá decirle más sobre sus sentimientos de amor. Ella lo
escuchará; háblele a su corazón, convenciéndola de lo que usted dice. Hágala entrar a ese
mundo bello que usted le propone. Tendrá la fuerza de la razón, el deseo y la sinceridad a su
favor.
Si en la conversación ella le confiesa alguna intimidad ya tiene por donde desarrollarse, con
cautela.
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2. - Conquístela con amor
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Es bueno que sea romántico, pero sin exagerar, pues ella pudiera pensar que usted es un
tonto o empalagoso.
Tampoco crea que va a lograr algo si intenta ir directo al sexo como vía para demostrar su
amor. Avance sin apresurarse.
Siempre que sea posible mantenga un buen sentido del humor, la risa es muy importante. Si
observa que ella lo disfruta, eso es buena señal.
Tenga a mano detalles inesperados para ella: una flor, un piropo bonito, un pequeño
regalo…
Deseche el nerviosismo y temor. Es mejor demostrar autoconfianza y seguridad, pero
cuidado con mostrar aires de superioridad ante ella. Tampoco manifieste su alegría, tristeza
o enojo de manera extrema. Eso causa mala impresión.
Nunca se precipite, hay que saber esperar el momento oportuno. Una buena técnica es
muestrear la situación como cuando usted toca una plancha para saber si está caliente.
Acerca su mano para sentir el calor, al notar su presencia la quita para evitar quemarse.
Si observa que su comportamiento es favorable, ha llegado el momento de hacerle la
pregunta final que la conduzca a dar su “Sí”. Puede solicitar que le responda. Como para
algunas personas tomar hasta la más mínima decisión supone un terrible esfuerzo, usted
podría facilitarle ese momento proponiendo una pregunta donde ella decida entre dos
opciones.
De las dos variantes propuestas, ella posiblemente escogerá la segunda, que es la que más
recuerda, aunque pudiera optar por la primera para mostrar que es ella quien domina en la
decisión. Utilice el sí en ambas opciones, acompañado de pequeñas diferencias o
preguntándole de manera jocosa “¿Sí o sí?”. En realidad se trata de una ligera
manipulación. Sólo es justificable si ella está a punto de decidirse a favor suyo, no lo acaba
de hacer y usted se desespera. En lo personal preferiría no hacerlo de esta manera, pero es
un recurso a tener en cuenta.
En todo momento manifieste su humildad, respeto, paciencia, confianza y sabiduría.
A veces es mejor que no haya pregunta, sólo una mirada profunda a sus ojos, sin dejar de
mirarla le toma sus manos y ese calor que intercambian los va acercando poco a poco hasta
besarse, sin necesidad de que medien palabras. La respuesta está allí: en los hechos.
Nuestras palabras siempre tienen que estar dirigidas a ella, que se sienta importante por
todas sus virtudes. Recuérdeselas.
La mujer va a percatarse de su actitud, observará si usted sólo habla de sí mismo o sobre los
intereses de ambos. No hable demasiado. Más bien escuche.
Si su corazón palpita de emoción, hágaselo saber a ella, pidiéndole tomar su mano y llevarla
a su pecho. Un hecho vale más que mil palabras.
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2. - Conquístela con amor
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A veces conviene no demostrar excesivo interés, alejarse algo, a fin de evitar la sensación
de que usted está desesperado por ella. Poco después podrá arremeter con más fuerza en su
conquista.
Jamás trate de aplicar la fuerza, ni siquiera de palabras. Sin embargo, sea constante en su
determinación de conquista. ¡No se rinda tan pronto!
He considerado que muchas veces un “no” dicho por la mujer pudiera significar un
“quizás”, y que un “quizás” es un “sí”. Esto es debido a ciertos patrones culturales que han
existido en el mundo, en cierta forma, favorables al hombre. Pero si la mujer que
intentamos conquistar presenta un buen desarrollo de su autoestima y autenticidad, entonces
el reto es más interesante. Inténtelo con ternura.
Si a pesar de todos los intentos usted no es correspondido, compórtese como un verdadero
hombre que respeta la decisión de ella.
En ocasiones, cuando traté por varias formas de convencer a una mujer para lograr una
relación sexual y no obtuve el “Sí”, apliqué una técnica que me dio buenos resultados; le he
dicho “–No lo vamos a hacer”. Así de simple. Y ella se ha quedado sin saber que decir, y
hasta en ocasiones ha sido quien ha tomado la iniciativa…
Por último, le recomiendo: si se presenta la ocasión, en vez de decirle ¿Te puedo besar?,
bésela y ya.
¡Éxitos!
Un detalle… a la mujer hay que enamorarla siempre.
Muchos de nosotros la enamoramos el primer día y luego se cae en la rutina. ¡Craso error!
Ahora se reirá de algunas intimidades mías…
2.3-
Mi primera relación fue irresponsable
Por doquier escuchamos: “la juventud de hoy está perdida”, “los jóvenes de ahora están
desorbitados, etcétera”.
Recuerdo mi juventud. Y lo que viví se parece bastante a lo actual, con las “pequeñas”
diferencias de que no existía el chateo por Internet, ni los celulares, ni las discotecas,… pero
los sentimientos de las personas eran idénticos.
Había excelentes personas como ahora y malas también. Las había responsables e
irresponsables en el sexo.
Había parejas felices e infelices, como hoy. Había divorcios, aunque en menor proporción;
la relación en las parejas se hacía más duradera y estable. Seguramente en ello incidían los
patrones machistas de la época y la mujer era menos independiente.
En esa época los jóvenes hacíamos lo mismo que hoy: estudiar, trabajar, ir a fiestas, a la
playa, a los clubes nocturnos, al cine, etc.
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2. - Conquístela con amor
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Lo que sí aprecio como diferencia es que ahora la juventud comienza a tener relaciones
sexuales más temprano. Con 17 años yo estaba comenzando y ya en estos momentos a esa
edad son muchas las parejas que tienen relaciones íntimas y hasta tienen hijos inesperados.
Debe ser la televisión, los filmes, Internet… Desde pequeños están viendo todo eso.
Haciendo un poco de memoria de aquellos tiempos y si lo comparamos con los que sucede
ahora a nuestros hijos, eran situaciones similares, ni más ni menos.
Recuerdo que cuando tenía 13 años tuve la primera novia, que tenía 16. Su nombre: Aidita.
Mi hermana Arminda me decía que la conquistara, que la muchacha estaba enamorada de
mí. Acepté, cuando llegó el momento la llevé al doblar de la esquina y de pie le tomé una
mano, las mías estaban temblorosas, el corazón se me quería salir del pecho. Entonces le
pregunté si quería ser mi novia y contestó que sí. Fue cuando le di un beso en la boca, lo
que selló nuestro noviazgo. Ese amor no pasó de la tierna relación de besos y caricias.
Con 16 años tuve a Teresa, una novia de mi edad. Fue impactante cuando, un sábado, en
casa de su tía, entre besos apasionados, vi y toqué emocionado sus pechos. Aún no hicimos
el amor, pero aprendí varios secretos.
Al año siguiente tuve mi primera relación sexual, totalmente irresponsable, como la que
criticamos hoy al hijo del vecino. Siendo las siete de la noche, deambulaba por “La
Rampa”, en La Habana, nombre que se asigna popularmente a la Calle 23 en el tramo que
presenta una pendiente, próxima al mar.
Una joven de 19 años se acercaba en sentido contrario y me llamó la atención su
sensualidad al caminar. Le hice una señal para que se detuviera y lo hizo con agrado.
Conversamos un instante y en el acto la invité a sentarnos un ratito a conversar.
— ¿Quieres dar un paseo? —le dije, emocionado con la belleza de sus ojos y su sonrisa
cautivadora: ¡Podemos ir al Malecón!
La muchacha me miró, observó su reloj y me dijo que sí. Comenzamos a caminar los 300
metros que nos separaban de ese balcón de varios kilómetros de largo que nos regala una
vista maravillosa del mar y de una buena parte de la ciudad. Se trata de un sitio preferido
por miles de caminantes para enamorarse y disfrutar de un ambiente único en el mundo. Así
que intentando no parecer descortés le puse una mano cariñosa en el hombro y pronuncié lo
siguiente con ternura:
—Será muy agradable, mi corazón me dice que pasaremos un rato especial —sonreí
sinceramente y luego le añadí que sería grato conversar con una muchacha tan bella.
Ella asintió y caminamos las tres cuadras. Nos sentamos en el muro y estuvimos dialogando
por espacio de 20 minutos, cuando me dijo:
— Me tengo que ir.
— ¿Porqué tan temprano? —le pregunté. Me sentía defraudado, ¡acababa de conocerla y ya
iba a perderla!
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2. - Conquístela con amor
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— Es que pasaron las siete de la noche y van a cerrar la reja de entrada de mi edificio —
dijo con cierta indiferencia.
— ¿Y a qué hora la abren? —pregunté, era el último recurso, ya me veía solo de nuevo por
La Rampa.
— A las siete de la mañana.
Presentí que aún quedaba una oportunidad y con toda seguridad le dije:
— ¿Y… si te quedas conmigo hasta mañana?
— Bueno,… pero ¿a dónde podemos ir?
— Yo conozco un lugarcito muy cerca donde podemos pasar la noche —El corazón se me
quería salir por la boca.
Nos dirigimos a una posada de mala muerte ubicada a unos 100 metros de nosotros, se
llamaba “La Diana”. En La Habana existían en esa época muchos sitios bautizados como
“posada”, donde se acudía en pareja a pasar unas horas de placer erótico. La mayoría de
estos sitios necesitaba mejorar su mala apariencia.
Tenía muy poco dinero y ella ninguno. Pagué las primeras tres horas y entramos.
Sin idea de lo que debía hacer, el instinto animal me guiaba. Por otra parte temía que se
descubriera que era mi primera vez.
Ella se dio una ducha y yo me desnudé, cuando entró a la habitación comenzamos con los
besos y caricias, le fui realizando las cosas como siempre había escuchado que se debían
hacer, incluyendo el sexo oral.
Luego de haber hecho el amor tres veces, sin condón, nos quedamos dormidos. Parecíamos
dos tórtolos. De pronto el posadero tocó a la puerta y con voz estrepitosa gritó: — ¡Se
acabó el tiempo!
Cuando fuimos a pagar por más horas de estancia nos dimos cuenta de que no teníamos
dinero y se me ocurrió una idea: dejé al posadero un carnet, indicando que dejaba a la
muchacha un rato en la habitación. Entonces me dirigí a la casa de mi amigo Abad, a 15
cuadras de distancia; ya se estaba acostando, cuando toqué a su puerta. Le conté lo
sucedido, me prestó algo y salí corriendo hacia la posada.
Llegué con la autoestima muy elevada, pues al parecer ella pensó que yo era un hombre
muy experimentado; pasamos la noche completa y al otro día la acompañé hasta cerca de su
casa y yo regresé a la universidad.
Lo curioso de todo es que al comenzar a tener los juegos sexuales desapareció el temor y
actué como si lo hubiera hecho muchas veces antes.
Aquel acontecimiento me hizo volver al sitio en que conocí a la muchacha para encontrarla
de nuevo; nunca más la vi. ¡Como la extrañé!
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2. - Conquístela con amor
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Conocí otras y hacer el amor comenzó a ser algo natural. Me uní a varios amigos de la
universidad y nos divertíamos conociendo muchachas, asistiendo a clubes para bailar, luego
íbamos a alguna posada o a un bosque cercano.
Teniendo 19 años inicié un bonito noviazgo con Alicia. Para asombro de amigos y
familiares, cuando llevábamos juntos un año, le solicité separarnos. Consideraba que aún
era muy joven e inexperto y quizás no estaba enamorado como creía que debería ser, a
pesar de que ella era una excelente muchacha. Es duro y triste romper un corazón. Sin
dudas, le hice daño y ambos sufrimos. Me impactó verla llorar, pero aún así me mantuve
firme en esa difícil decisión. Algo me decía que aún no estaba preparado para una relación
duradera.
2.4-
A los jóvenes de hoy
He querido mostrar con intimidades vividas, un ejemplo de lo que nos ha sucedido a
muchos en nuestra juventud, con el firme propósito de comprender mejor la situación de
hoy. Es bueno saber que algunas locuras que se cometían en 1970, ahora no pueden
realizarse sin la debida protección.
Ahora hay que ser más cuidadosos en la selección de una pareja. En estos tiempos se debe
utilizar el condón y se recomienda tener pareja estable.
Advierto a los jóvenes que al iniciarse en el tema sexo no deben quemar etapas.
Recomiendo ir paso a paso. Cuando llegue el momento del sexo, bienvenido sea, pero que
éste no sea el objetivo inicial de la relación. Desafortunadamente, muchos jóvenes se trazan
la meta de estar realizando el sexo a edades muy tempranas, pues consideran que son libres
de hacerlo, que “hay que aprovechar las oportunidades”, que es divertido hacerlo con
cualquiera. Muchos dirán, justificando sus actos: «Es que mis amigos (o amigas) ya “lo
hacen”».
Hay quien pregunta para qué hace falta el amor, si puede tener relaciones sexuales. Pero
desconoce que cuando el tiempo transcurre, se presenta algo nuevo: la frustración. Creo que
eso sucede tanto a las muchachas como a los muchachos. La realidad generalmente no es
como se piensa. El sexo indiscriminado hace mucho daño.
El acto sexual no tiene sentido a menos que exista verdadero amor y confianza mutua, una
verdadera unión espiritual. Decida por usted. Usted, mejor que nadie conoce cuándo es el
mejor momento para iniciarse y con quien. ¡No se precipite!
Es importante que los jóvenes conversen de estos temas con sus padres o familiares adultos
en primer lugar, pues aunque a veces existe el temor de ser incomprendidos o que ellos no
sepan qué decir, es conveniente escuchar lo que piensan, establecer una verdadera
comunicación con ellos, que desean lo mejor para sus hijos y pueden brindarle su apoyo
emocional. Como segunda opción pueden conversar con sus profesores en la escuela.
Muchos adolescentes no acuden a estas instancias y conversan con otros de su edad que
están en situaciones similares a la suya, y que también necesitan orientación, por lo que al
final no llegan a conocer lo que necesitan.
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2. - Conquístela con amor
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Hoy día se ve y escucha acerca de cómo protegerse de las infecciones de transmisión
sexual, pero muy poco sobre cómo cultivar el amor. Sentirse amado es importante, y amar
es una necesidad.
Antes de tener sexo debe preguntarse si tiene el deseo y la capacidad de realizarlo y si esa
persona con quien lo realizará es capaz de hacer algo más por usted que satisfacer su deseo
sexual y si le ama a usted sin condiciones. ¿Vale la pena hacerlo con esa persona?
Volviendo a lo que les contaba de mis primeras experiencias, les confieso que todo aquello
resultaba aparentemente divertido, pero en ocasiones era a su vez hueco, inmaduro, sin
sentido humano. En el fondo, yo buscaba mi media naranja, pero no la encontraba. En la
búsqueda de ese amor encontré muchachas estupendas y hubo algunos momentos de
romance bonitos que en su mayoría fueron transitorios. Todos resultaron ser importantes
para mi aprendizaje en la “universidad de la vida”.
Cuando conocí a Bedelia, mi actual esposa descubrí el verdadero amor, resultó ser un
flechazo. Caminaba junto a mi amigo Aldo por el lobby del hotel “Habana Libre”, en busca
de dos muchachas para dirigirnos a una fiesta. Allí estaba ella, conversando con una amiga
y la madre, ambas recién llegadas de Camagüey, para pasar unas vacaciones en La Habana.
Cuando la vi, algo me decía que era ella la persona que el destino me había deparado
(cuando aquello no había leído acerca de la “sincronicidad”). Estaba tan convencido de ello
que, sin pérdida de tiempo y sin importarme con quiénes estaba, me le acerqué y logré
entablar una breve conversación. Aunque no fuimos a la fiesta esa noche, aceptó tomar un
pequeño papel con mi número de teléfono.
Al día siguiente me llamó y nos vimos. Paseamos juntos y conversamos mucho. La
pasamos muy bien, al punto de que el tiempo transcurrió sin que lo notáramos. A diferencia
de los casos anteriores, encontré en ella a la mujer de mi vida, la mujer de mis sueños. Por
primera vez mi corazón palpitó de una manera diferente. Por suerte, ella pensó igual y poco
a poco nos conquistamos mutuamente, para felicidad de ambos.
Tal parecía que ella imaginaba que ese iba a ser un encuentro de ambos con el verdadero
amor. Lo cierto es que nos identificamos plenamente y a partir de ese momento todo lo
veíamos perfecto. Estábamos excitados y a la vez relajados. Nuestra existencia pasó a ser
mágica, la cual deseo para mis hijos y para los jóvenes de hoy; de ahí que les haya relatado
en este texto cómo sucedió todo en ese momento. Siete meses después nos casamos.
La enseñanza es: no se debe dejar perder la oportunidad si existe una coincidencia especial
y uno sabe que esa es la persona indicada.
Muchos dicen que no desean tener un compromiso formal, algo estable. Opino que lo dicen
porque no han encontrado a su ansiada pareja y quizás están aferrados a una triste
experiencia vivida.
Como encontrar a una pareja ideal es tan difícil, le recomiendo que el día que considere que
ha dado con ella, no la deje ir, aunque deba modificar su actual estilo de vida.
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2. - Conquístela con amor
2.5-
36
Cuidado con el sexo alocado
En nuestros días, la vida es alocada, los cambios tecnológicos y sociales influyen
notablemente, provocando que mucha gente tenga relaciones de pareja que resulten
inestables y cortas.
Recomiendo evitar caer en la trampa del sexo alocado y perverso, pues ello —
silenciosamente— afectará su vida futura.
Los tiempos cambian, la vida se moderniza, pero debemos ser cuidadosos. El sexo
irresponsable y grupal, así como muchas cosas que se hacen hoy pudieran causar adicción,
como sucede con el cigarro, el alcohol o las drogas.
Ese amor que inconscientemente buscamos no lo encontraremos participando en esas
actividades. Más bien, al introducirnos en mundos que se alejan del verdadero amor lo que
hacemos es desvalorizarnos. Retornar al amor pudiera ser difícil.
Los jóvenes de hoy están un poco desorientados con esa libertad que aprecian, aunque en
las escuelas se explique la importancia de que exista amor y la necesidad del condón.
Si usted se encuentra envuelto en estos temas de sexo vacío, rectifique cuanto antes. Estimo
que lo que le impulsa a cometer este tipo de locuras es el ansia de ser amado, de ser
reconocido. Mírese por dentro. ¿Será eso realmente?
Por ello le insisto en la necesidad de que priorice los sentimientos de amor, y cuando tenga
una pareja que le corresponda, haga ese sentimiento eterno, enamórela siempre.
Entonces, la clave No. 2 es
Aprendan a conquistarse con amor y a seguir conquistándose todos
los días. No hagan el sexo sólo por la simple razón de “todos lo
hacen”.
¿Está seguro de saber hacer el amor de manera que ambos queden satisfechos? Le confieso
que yo por mucho tiempo pensé que la mujer se comportaba sexualmente igual al hombre.
Para que a usted no le suceda lo mismo que a mí, lea lo que aparece en el capítulo que
sigue.
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
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CAPÍTULO 3
3-
Intenten satisfacerse mutuamente
La aventura podrá ser loca, pero el
aventurero ha de ser cuerdo.
Gilbert Keith Chesterton
Para comenzar, el poema “Silencio después del amor” que mi amigo Ernesto Sánchez, de
México, gentilmente ha extraído de su hermoso libro “Volar en otras alas” y lo ha puesto a
su disposición. ¡Disfrútelo con su pareja!
Silencio después del amor
Me gusta hundirme en el silencio
que me provocas
después de hacer el amor.
Es quizás el remanente sabor tuyo en mi boca
lo que ahoga cualquier intento de articulación
Me gusta sólo observar sin palabras
lo que a su paso nuestro huracán de pasión dejó:
Sábanas sin cama, almohadas sin funda,
y perdida entre mis cosas tu ropa interior.
Me gusta cómo enmudecidos
—cada uno y su alma—
piensa y medita sobre lo que somos hoy
o quizás nos hacemos preguntas mundanas:
“Ya viene la noche… ¿qué cenaremos hoy? “
Me gusta solo verte plena,
desmayada en mi pecho,
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
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y cómo nos miramos con devoción;
Hasta que uno de los dos rompe el silencio
con un estornudo, un “te amo”, un “te quiero”…
O simplemente un suspiro
que nace en el corazón.
La sexualidad es una condición humana. Es el resultado de la interacción de factores
biológicos, psicológicos, socio-económicos, culturales, políticos, éticos y religiosos o
espirituales.
Antes de continuar, deseo hacerle unas preguntas:
¿Hacer el amor es sólo sexo? ¿Qué otra cosa es hacer el amor?
Hacer el amor es más que sexo. Es unir dos almas, enfrentar la vida compartiendo felicidad,
superando los obstáculos que siempre aparecerán. Es aprovechar las inteligencias de ambos
buscando formas de convivencia placenteras a ambos, evitando caer en la rutina. Es
ayudarse mutuamente cuando uno de los dos está triste o enfermo. Es compartir las tareas
del hogar, disfrutar juntos la presencia de los hijos, que abrazados se sientan a revisar fotos
de la familia de años atrás. Es decirse “te amo” y la otra parte “yo también”.
Ahora vamos a detallar la componente “sexo” de “hacer el amor”.
3.1-
Ella es compleja y tierna
La experiencia me ha dicho que pocos hombres conocen a fondo algunas cuestiones sobre
el sexo y las particularidades de la mujer y que ello afecta sus relaciones de pareja.
No pretendo hacer un tratado sobre la sexualidad femenina. Deseo sólo ofrecer algunas
ideas e informaciones para que usted redescubra a su novia, esposa o amante y la haga feliz.
Es por ello que le presento aquí un texto rápido, nada convencional, práctico y claro, que le
permita poder complacerla y conducirla al placer de manera profunda. Ella se lo agradecerá
y usted también lo disfrutará. La relación a partir de ese momento será un éxito en el
aspecto sexual.
Lo que le voy a referir a continuación, a muchos les podrá parecer obvio o innecesario.
¿Cuántas veces ha llegado una amiga a su escuela o a su trabajo malhumorada, quejándose
de malestares físicos y frustraciones?
Quizás esté agobiada por los tantos problemas que la esperan a diario y que a veces cuesta
trabajo resolver. O quizás ha sido maltratada por su pareja. También es probable que haya
hecho el amor, pero incorrectamente y su efecto ha sido negativo.
Sucede que los hombres somos diferentes a las mujeres, aunque lo olvidamos en el preciso
momento de tener sexo. Nos parece que ella responde a sus instintos tan rápido como
nosotros, que todo es muy simple, que el orgasmo llegará enseguida y ya.
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
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Eso es lo que nos muestra la inmensa mayoría de los filmes que vemos: se dan un beso y a
los pocos segundos el galán la está penetrando.
El ser humano es complejo y tierno a la vez; la mujer ha enfrentado a lo largo de la historia
muchos prejuicios, discriminaciones, tabúes y miedo. Hoy día esa situación se revierte poco
a poco, pero su feminidad es inalterable y es menester conocerla bien.
3.2-
Mapa erótico femenino
El erotismo es la capacidad humana de experimentar las respuestas subjetivas que evocan
los fenómenos físicos percibidos como deseo sexual, excitación y orgasmo, que por lo
general se identifican con el placer.
La mujer posee muchos tesoros para nosotros los hombres: su pelo, sus ojos, sus labios, su
cuello, sus pechos, su cintura, sus caderas, sus manos, sus piernas… y además, su órgano
sexual, que consta del vello del pubis, los labios mayores, labios menores, clítoris y vagina.
¿Y qué decir de su sonrisa, sus gestos y su sensual voz?
Es interesante saber que el cuerpo de la mujer es un territorio erótico en su totalidad.
Muchos hemos creído por años que las zonas erógenas de ella son sólo los pechos y el
clítoris. Sin embargo, al estimular alguna zona de su cuerpo en determinada manera, se
lograrán mejores resultados que si se intentara en otra.
Cada mujer es un mundo. ¡Descúbralo! Por ejemplo: Una vez, una amiga me confesó que se
excitaba muchísimo cuando le acariciaban ¡las muñecas!
Otras zonas erógenas son los dedos de los pies y manos, la nuca, detrás de las rodillas, las
orejas —un susurro amoroso en un oído puede crear una enorme excitación sexual en ella
—. También son sensibles la base de la columna vertebral, los glúteos, el vientre, el
ombligo, el ano, en fin…
Mi amigo y excelente actor Bobby Leonard me decía recientemente que el aparato sexual
femenino por excelencia era… el oído. Compruébelo usted mismo.
Las zonas que intentamos conocer mejor son: el órgano sexual femenino con sus labios
mayores, labios menores y el clítoris; este último estimula la tensión sexual.
Luego viene la vagina, zona rica en sensaciones de placer, donde presuntamente se localiza
el punto G, y forma parte integral del mecanismo reproductivo de la mujer.
Cuando hay una estimulación efectiva, se logra una lubricación que puede facilitar la
penetración. En el hombre la erección es una expresión fisiológica directa al acto sexual, sin
embargo, en la mujer la expansión y lubricación vaginal son la invitación a este acto.
Las mujeres, al ser estimuladas eyaculan por la uretra un líquido incoloro, inodoro e
insípido. El mismo sale en ocasiones en forma de chorro, en otras, tan suave como una
cascada que baña sutilmente toda la vulva. La cantidad eyaculada varía en cada encuentro
erótico. Puede ser desde pequeñas gotas a un cuarto de litro.
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
3.3-
40
El punto G, ¿dónde se encuentra?
El punto G es una zona de mucha sensibilidad que influye muchísimo en el éxito de la
relación sexual; conocer cómo localizarlo y manipularlo es vital para que nuestra
compañera disfrute más de la relación, pues el orgasmo resulta increíble.
Se trata de un controvertido sitio ubicado a cuatro o cinco centímetros de la entrada de la
vagina, en la parte superior. Tiene un tamaño pequeño, como de medio centímetro de
diámetro. Esto puede cambiar para cada mujer.
Para localizar el punto G asegúrese de que ella esté muy excitada. Muy despacio deslice los
dos dedos centrales dentro de la vagina, con las yemas hacia arriba.
Cuando sienta el hueso púbico, ya estará muy cerca del punto G. Un detalle: ese punto se
dilata durante el proceso de excitación sexual, y se percibe al estimularlo, no antes.
Dice mi amiga Mercedes:
Los hombres siempre van a lo mismo. Y ni averiguan donde se encuentra el
punto G.
Para que la mujer sienta el máximo de placer debe estar cómoda con su pareja, sin
interferencias ni inhibiciones. Para estimular esa zona mueva los dedos en forma de círculo
o deslícelos hacia delante y hacia atrás, sin apurarse, e imprímales una ligera presión.
Realice esto por espacio de varios minutos. Intente sentir cómo comienzan a producirse
contracciones en la vagina y que a su vez se pone muy húmeda.
Durante ese proceso dígale a ella frases excitantes y recuérdele cuanto le gusta a usted; ella
debe recibir el máximo de placer y su mente deberá estar en armonía y total
correspondencia con lo que usted realiza. Debe olvídese de preocupaciones o malestares.
Si le besa el clítoris o lo estimula suavemente con la lengua o los labios simultáneamente a
la estimulación del punto G, podrá hacer que ella sienta un inmenso placer, pues además del
orgasmo y la eyaculación por punto G, podrá experimentarlo por clítoris. Un poco más
adelante profundizamos en el tema del sexo oral a la mujer.
Siempre recuerde que cada mujer tiene sus cualidades, particularidades y preferencias. Más
adelante le brindo detalles adicionales sobre el proceso de excitación femenina.
Aunque no está demostrado científicamente que el punto G exista como tal, muchos hablan
de él como algo real y extraordinario. Mercedes también me refiere:
Siempre se habla de penetrar. Un buen masaje del punto G puede ser tan
placentero o más que sentir la penetración. Una amiga mía que llevaba varios
años de casada tuvo un desliz con un hombre que la llevó a un club nocturno.
Allí él la masturbó y ella sintió por primera vez en su vida varios orgasmos. Al
día siguiente llegó al trabajo muy contenta contándoselo a sus amigas más
íntimas.
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
3.4-
41
¿Qué es el orgasmo?
El orgasmo es el punto máximo del goce sexual, una explosión de placer. El corazón late
más rápido y en la vagina se producen contracciones involuntarias. Mientras éstas
aumentan, mayor e intenso será el placer. En muchas mujeres esta situación puede repetirse
si se excita bien. A eso se le llama orgasmo múltiple.
Al hacerle el amor, con frecuencia nos olvidamos de que su proceso de excitación es
distinto al nuestro. Escuchando sus gemidos de placer nos imaginamos que ella está
arribando al orgasmo y debido a eso terminamos cuando ella aún está comenzando.
Debemos pues, conocer a nuestra mujer y saber identificar sus fases de excitación, a fin de
llevarla al pleno goce.
Es siempre una buena idea aprender los tipos de estimulación que prefiere nuestra pareja.
Pregúntele sin miedo, pero con delicadeza e incluso elija usted el momento. ¿Podría ser
durante el juego sexual?
3.5-
La sexualidad en el hombre
La sexualidad del hombre difiere de la de la mujer. Sus órganos, sin embargo guardan una
correspondencia con los femeninos.
Su órgano principal es el pene y está compuesto de tres partes: la raíz, el cuerpo y el glande.
Su longitud y volumen aumenta con la excitación sexual, se emiten impulsos nerviosos
desde el cerebro y se llenan de sangre los cuerpos cavernosos que contiene. A medida que
la sangre llega aumenta la presión y ello hace que el pene se ponga erecto.
El glande se encuentra en la parte delantera del pene y se distingue por su forma de
capacete. El mismo contiene un buen número de terminaciones nerviosas que lo hacen muy
sensible, por lo que al ser excitado se percibe una sensación voluptuosa. También existe la
uretra, que es un conducto empleado tanto para el paso de la orina como del semen. La
uretra está rodeada de otro cuerpo cavernoso.
El pene está cubierto de una piel fina llamada prepucio. Al existir la unión sexual, el mismo
se desplaza sobre el glande y el cuerpo del pene. Por el contacto del pene con la vagina de
la mujer, se refuerza la excitación de las terminaciones nerviosas y ello hace que en
determinado momento se produzca el orgasmo, descargándose semen.
El aparato sexual masculino consta además de los testículos, ubicados en una bolsa de piel
muy sensible llamada escroto, ubicada por debajo de la base del pene. Su función es
producir la testosterona, una hormona masculina y los espermatozoides, que se encargarán
de fecundar al óvulo femenino. También la próstata es un órgano muy importante; entre sus
funciones está la de aportar gran parte del líquido que conforma el semen y ayudar a que los
espermatozoides puedan salir con la rapidez necesaria. Esos tres elementos se encuentran
interconectados por conductos muy finos.
La estimulación del pene es algo bien simple, en nada comparable con la del aparato sexual
de la mujer. El Maestro Chian Zettnersan, en su interesante libro “Los secretos de la
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
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sexualidad taoísta”, indica que en el sexo oral al hombre, el pene es besado con delicadeza,
conformando caricias que van provocando la estimulación sexual. Una vez que se ha
despertado las diferentes zonas eróticas del pene, se puede concentrar las caricias en la zona
en que se muestre mayor sensibilidad, generalmente el glande.
El hombre también recibe estímulos excitantes del cerebro mientras prepara a su pareja y
durante el acto sexual. Ella puede reforzar ese placer con caricias y besos en su cuerpo,
incluyendo a los testículos.
Debe tenerse presente que en el hombre como en la mujer son zonas energéticamente
sensibles y erógenas la zona de la espalda, la columna vertebral y la cara interna de brazos y
piernas, las cuales pueden ser estimuladas durante un masaje erótico.
Muchos preguntan: ¿Cuál es la longitud que debería tener el pene? ¿Debería ser bien largo?
Zettnersan refiere que el pene erecto, como promedio, tiene una longitud de 15 centímetros
(otros autores dicen que es 14) y que la vagina tiene unos 13 centímetros de profundidad, a
lo que se debe sumar dos centímetros cuando se dilata durante el acto sexual. A esto yo
agregaría que estas dimensiones pudieran ser diferentes según la raza humana.
Pero lo importante para la satisfacción de la pareja no es si el pene tiene tal o cual longitud,
sino que la profundidad de la vagina sea similar. Cuando la vagina es mucho más larga que
el pene, quizás ambos no queden totalmente satisfechos. Si el pene es mucho más largo que
la vagina, pudiera ser placentero para él, pero doloroso para ella. Además, al penetrar
excesivamente, se corre más riesgo de infección del útero por bacterias y otros agentes
patógenos, inflamaciones y herpes. En casos extremos se pudiera llegar a transformaciones
celulares malignas en el ovario. Por tanto, si desea una máxima satisfacción mutua intente
encontrar una pareja con similares dimensiones a las suyas.
Si usted ya tiene su pareja y su pene posee dimensiones que exceden la de la vagina de ella,
la posible solución a este problema pudiera ser que empleen una posición apropiada; por
ejemplo: usted acostado boca arriba y ella encima, de rodillas. La mujer podrá controlar la
penetración del pene a un nivel que brinde placer a ambos, sin que ella sufra daños.
En caso de que su pene sea más corto que la vagina de ella, no tiene por qué avergonzarse.
Puede emplear la posición “del perrito”, que le permite penetrarla más. También debe saber
que la zona más sensible de la vagina se encuentra en los primeros centímetros desde su
entrada, por lo que con un pene pequeño se logra excitar convenientemente a la mujer,
aunque no sea lo óptimo. No se sienta acomplejado porque su pene sea más pequeño que el
de otros. Lo importante es que usted se sienta perfecto, que se ame a sí mismo y se apruebe.
Si tiene idea de alargar su pene, sepa que existen técnicas para que crezca unos centímetros.
La más sencilla consiste en realizar todos los días un estiramiento del mismo, como si lo
estuviera ordeñando. Estando el pene en reposo, se abraza con la mano en su base y se
avanza empujando la sangre ubicada en su interior hacia el glande. Ello hace que el pene
tome mayor tamaño y se mejore la erección. Debe repetir este ejercicio decenas de veces.
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
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Combine este ejercicio comprimiendo con la mano el tronco de su pene decenas de veces,
próximo al glande, hasta que se ponga bien duro.
En el mercado existen diversos productos y pomadas para ayudar a este propósito. Sea
cuidadoso antes de elegir alguna opción.
3.6-
¿Sabe usted realmente hacer el amor?
Lo más deseable al “hacer el amor” es realizarlo de manera que ambos queden satisfechos.
El hombre en sentido general queda satisfecho al eyacular y ello no resulta difícil; es por
ello que enfocaré la siguiente descripción desde el ángulo masculino.
La mujer, para alcanzar la satisfacción, necesita que su pareja sea paciente. Le pido que
preste atención a lo que explicaré a continuación.
Antes de comenzar a tratar este tema, debo enfatizar algo: el amor a la mujer se hace SIN
APURO, se disfruta. Ese acto no comienza cinco minutos antes de ir a la cama, ese es el
error que más cotidianamente cometemos los hombres y sus consecuencias son desastrosas
para la armonía de la pareja.
A los hombres nos basta mirar por instantes un cuerpo de mujer para sentir el deseo sexual,
nuestra imaginación es fenomenal. Las mujeres necesitan muchísimo más: necesitan estar
dispuestas hacia el sexo. Ello se logra cuando se sienten bien acompañadas, en un ambiente
seguro, relajadas, con la suavidad de las caricias de su pareja, el juego previo, las palabras y
susurros eróticos y de amor al oído…
Para que ambos alcancen la plena satisfacción, se debe ayudar lograr que ella disfrute del
acto sexual. Para ello, aprendamos a hacer corresponder nuestro funcionamiento de rápida
descarga con el de ella, el de entretenimiento. El coito es un juego de “ganar-ganar“, de
pasarla muy bien los dos, sin que el coito y los orgasmos sean el fin, sino un camino hacia
la unidad entre ambos.
Existen muchas variantes para realizar el acto sexual. Eso depende de las costumbres,
particularidades y preferencias de cada cual.
Expondré una de las mil formas de hacerlo, teniendo en cuenta que lo importante no es
entrar en detalles técnicos sino, que insisto que se evidencie en todo el proceso: la necesidad
de ir paso a paso, sin apuros. Eso es común a todas las variantes que sea posible utilizar.
Podemos comenzar besándola apasionadamente y tocando suavemente cualquier parte de su
cuerpo. Pasar los dedos, las manos bien suaves, de manera que provoquen un cosquilleo,
una picazón agradable, un deseo de rascarse. Puede ser por la cabeza, o por el cuello. O
intentar dar un masaje en los pies o en la espalda. La intuición le indicará por dónde iniciar
el proceso.
Si comenzamos por su cabeza, un rato después podemos ir bajando despacio hacia otras
partes del cuerpo.
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
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Vamos besando y acariciando suavemente sus pechos, creando un profundo deseo de que
los pezones sean tocados, sin tocarlos aún, nos vamos acercando a ellos. Vamos haciendo
que ella anhele y desee cada vez más que los toquemos.
Al rato, vaya tocando la aureola, con mucha suavidad, pero aún no los pezones, eso hará
que sienta más placer y deseo a la vez, su excitación irá en aumento. Puede ir dando la
vuelta a su alrededor, aproximándose cada vez más a ellos.
Roce los pezones una vez con suavidad. Vuelva a alejar sus dedos y regrese poco a poco.
Ella sentirá un enorme deseo de que lo repita. Vuelva y tóquelos de nuevo. Todo esto creará
un intenso deseo sexual. También puede besarlos y acariciarlos con la lengua.
Este proceso puede durar más o menos tiempo en dependencia de cada mujer. Usted debe ir
interpretando y conociendo los deseos de ella y observar si disfruta lo que usted le hace.
Cuando considere que ella está lista para pasar a la fase siguiente, puede iniciar un recorrido
turístico-exploratorio por su cuerpo. El mismo ha de ser lento y largo por toda la geografía
erótica, En ese camino también aplique besos y caricias suaves, ¡desarrolle su iniciativa!
Váyase acercando al vientre, a las caderas y luego haga aproximaciones sutiles y juguetonas
a la vulva, para que justo cuando sea tocada sea porque ella ya lo estaba pidiendo a gritos.
Acaricie sus genitales, comenzando por los labios mayores, sin apuro, los menores y el
clítoris. Puede tomar su pene con la mano y comenzar a rozarlo suavemente por el clítoris.
Ella quizás le pida que la penetre, pero demore un poquito manteniendo ese juego por unos
minutos. De seguro que usted estará muy excitado y deseoso de introducirlo, pero tenga
paciencia.
En este momento usted estará dominando la situación. Su pareja estará rogando que la
penetre, pero espere un poco más. Puede besar su clítoris y excitarla aún más si incorpora el
sexo oral. Llegará el momento en que ella alcanza tal clímax que le suplicará que la penetre.
Ya puede proceder a buscar y encontrar el punto G y comenzar a masajearlo con suavidad
usando sus dedos, lo cual va a hacerla estallar de placer. Otros sitios a tocar son el ano y la
zona entre la uretra y la entrada de la vagina (también llamada “Punto U”, que también
resulta muy sensible).
Poco después, cuando aprecie que ha llegado el momento, comience a introducir su pene
lentamente y a extraerlo. Repitiendo esta operación así poco a poco, lo va introduciendo un
poco más.
Ahora es que podemos buscar la posición más adecuada para hacer el amor. Hay infinidad
de ellas. Este tema es tratado por diversos libros y videos. Son famosas las posiciones
citadas en el Kamasutra, famoso libro escrito hace muchos siglos en la India. Existen
versiones actuales de estas obras y no es objetivo nuestro profundizar en el tema, existiendo
textos tan completos, que usted puede consultar.
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
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Sólo quisiera expresar que cada pareja escoge las posiciones que mejor les convenga, pero
sugiero prestar atención a las variantes que la mujer prefiere, pues para nosotros casi todas
son buenas.
Hay algunas que permiten la manipulación del clítoris en simultaneidad con la penetración.
Es importante explorar hasta encontrar las más apropiadas con ella y variar, para evitar la
monotonía.
Lo importante es facilitar a la mujer la llegada al orgasmo. El hombre puede ayudarla a
alcanzar el máximo clímax con cariño, manifestándole a su pareja cuánto siente por ella.
Llegará el momento en que el pene ya está todo dentro. Mientras más tarde usted en llegar a
la eyaculación, más placer sentirá ella. En determinado momento ella no resistirá más y
arribará al orgasmo. Lo recibirá con mucho agrado y la estremecerá. Si usted consigue
retardar la eyaculación y continúa penetrándola suavemente y acariciándole el clítoris,
logrará que ella tenga uno o varios orgasmos más, a cortos períodos de tiempo entre ellos.
Entonces, cuando usted eyacule podrá estar satisfecho del trabajo realizado, y su excitación
será superior, por lo que disfrutará mucho este momento. Usted apreciará que ella le
agradece todo lo que ha hecho por lograr su orgasmo.
El amor que profesan se corona con el éxito y se amplifica para beneficio de ambos. No es
necesario que ambos lleguen al clímax a la vez. Lo importante es todo lo expresado antes.
Pueden intercalar otras variantes donde el sexo oral tenga más peso, o incluso el sexo anal.
Hay mujeres que desean que su pareja la estimule más rozándole el clítoris y/o el punto U
mientras hacen el amor. En ello no existen límites, dependerá de la creatividad de ambos.
Tenga en cuenta que si penetra algún dedo o el pene en el ano de ella, no debe introducirlo
posteriormente en la vagina, para evitar infecciones.
Lo que le he descrito es tan sólo una guía con aspectos esenciales. Para todos los casos, el
secreto es: tardar en iniciar la penetración todo lo que se pueda, y disfrutar de la suavidad,
el cariño y los juegos amorosos.
3.7-
Una experiencia de amor inolvidable
En este caso me refiero al sexo oral a la mujer. Por ser tantas las que lo prefieren, es
menester aprender a hacerlo. Y si lo hace bien, ella nunca lo olvidará:
Primero comience besándola y excitándola paso a paso como hemos expresado en el
epígrafe anterior, de manera que cuando sus caricias lleguen al clítoris ya ella esté lista para
la fase que sigue. Esa zona deberá mantenerse húmeda y tibia, con el calor de nuestra
lengua.
Estando ella acostada boca arriba, usted se coloca a su derecha, o en la posición que les sea
más grata. Aproxime su boca a la vulva y comience a lamer las zonas cercanas al clítoris,
aproximándose a él y alejándose, para acentuar el deseo en ella. Luego acaricie suavemente
y despacio el clítoris con la lengua, moviéndola de un lado al otro. Si su lengua se cansa
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
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puede mover la cabeza, pero sin despegar la lengua del clítoris. También puede hacer
círculos alrededor del clítoris y hasta crear figuras imaginarias y de vez en cuando hacer
una pequeña succión. Todo ello la va excitando. Ahora vaya tocando la entrada de la vagina
e introduciendo uno o dos dedos lentamente, hasta pasar a excitar su punto G, sin dejar de
hacerlo en el clítoris. De vez en cuando excite también su punto U, utilizando su pulgar.
Es posible que ella disfrute más si a la vez le hace a usted el sexo oral, o si usted le acaricia
también los pezones (o sus zonas más sensibles). Recuerde que cada pareja es un mundo
aparte, lo que relato es sólo una idea de todo lo que pudieran hacer.
Llegará el momento del orgasmo y mientras dure éste no cese su masaje erótico ni cambie
su ritmo. Si todo se ha realizado sin apuro y bien, ella quedará satisfecha y muy feliz, se lo
hará saber.
3.8-
Cuando termina el acto sexual
Hacer el sexo con la persona que amamos se convierte en algo especial, se disfrutará
mutuamente y se facilitará la comunicación entre ambos para conocer cada parte si la otra
está disfrutando ese momento, hasta llegar a experimentar el clímax y la felicidad deseada,
provocando una estupenda unión de espíritu.
Bien, hemos terminado la parte carnal del sexo. ¿Y ahora qué? Todavía ella necesita algo
más…
Se trata de nuestra manifestación acerca de cómo nos gustó su comportamiento en la cama,
lo bien que nos sentimos luego de ese maravilloso rato de placer. Debe decirlo con ternura,
y si la abraza y la besa, mucho mejor. A veces es bueno dormir unos minutos y pasar al sofá
a ver el fragmento de una película tomados de la mano. Desarrolle su imaginación.
Bobby Leonard, en su simpático libro “Los Pollos No Vuelan Fritos” expresa su opinión
acerca de cómo hacer el amor a una mujer:
Disfrutar un buen show, bailar, si es posible quedarse esa noche en un buen
hotel, llenarle la habitación y la cama de rosas, tratarla como una señora, que
se sienta una mujer querida, atendida por un caballero. No hacer el amor sin
un rito especial. No utilizar el apuro para nada, no ser el que más veces lo
hace, sino el que mejor lo hace.
3.9-
Las fantasías sexuales
Bobby me contó que años atrás mantenía relaciones sexuales con una mujer, pero lo hacía
de una manera inusual: tenía que disfrazarse de Sherlock Holmes, con la pipa y todo. Ella se
excitaba y todo era fantástico.
Este ejemplo nos ilustra hasta dónde puede llegar el erotismo y las fantasías femeninas, y si
deseamos satisfacerla tenemos que seguir su juego, debemos aprender a excitarla, conocerla
cada día mejor.
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
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Es nuestro reto intentar conocerla a fondo, descubrirla de verdad, lograr que obtenga sus
orgasmos, y de ser posible se multipliquen. Parece algo muy simple, pero no lo es. Si
deseamos el éxito en nuestra relación amorosa-sexual debemos prestar especial atención a
estos aspectos.
Lo mismo sucede a los hombres. Nosotros también tenemos fantasías. Generalmente en las
mujeres las fantasías son orientadas al amor, mientras que en los hombres al sexo.
Siempre es bueno tener presente que a veces las fantasías son irreales y que no será posible
satisfacerlas en la vida real.
3.10-
Qué sucede si nos apuramos
La excitamos, con los pasos preliminares, ella arde en deseos, en ese momento nos creemos
que la podemos penetrar y... salvo excepciones no es el momento.
Si no logramos que la mujer llegue al orgasmo no siempre es su culpa. Debemos manejar
esa situación con mucho tacto, ayudarla a superar ese mal momento. Es muy probable es
que esa situación se haya producido por nuestra ineptitud, muchas veces por considerar el
acto sexual como una meta.
Si nos hemos apurado en penetrarla, o no era el mejor momento para hacerlo, ella al inicio
no lo percibirá, pero a los pocos minutos dejará de sentir, se enfriará, incluso puede que
sienta molestia o dolor y será cuando fingirá sentir placer y así terminar de una vez, o nos
dirá que está muy disgustada e insatisfecha.
Debemos ser muy cuidadosos con lo que digamos a nuestra pareja en ese momento. Ella se
siente en franca desventaja, su autoestima está en el piso. ¡Y muchas veces por culpa
nuestra!
Seamos autocríticos, pero de verdad, aprendamos de una vez la lección y hagamos las cosas
bien hechas, por el bien de ella y por el nuestro. Nada nos hará más felices que ver a nuestra
mujer arribar al orgasmo, sin fingir.
Es bueno saber que aunque no nos apuremos, una persona no siente lo mismo cada vez que
hace el amor, aunque lo esté haciendo con un “sex symbol”. El ser humano es muy
complejo y son muchos los factores que intervienen en su erotismo y que le facilitan llegar
a un orgasmo. Así que no se acompleje si no siempre tiene las mismas sensaciones.
3.11-
Un abrazo une a la pareja
Amigo lector: Para que conozca la importancia que doy al abrazo de la pareja, utilizaré un
texto que vino a mi mente mientras dormía. Me desperté a las 4 a.m. emocionado con mi
sueño. Tomé bolígrafo y papel y le escribí a mi esposa:
Bede: A continuación, lo que siento cuando me abrazas: Casi siempre, poco
antes de dormir, ya acostados, te viras hacia mí y me abrazas. Procuras que
no quede el más mínimo espacio entre tu pecho y mi espalda, y entre tus
piernas y las mías. Percibo que ese es, quizás el momento más romántico de
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3. - Intenten satisfacerse mutuamente
48
nuestras vidas. Quedas dormida, a veces roncas o respiras profundo. Tu brazo
izquierdo me rodea y tu mano se une a la mía, entrelazándose los dedos.
Inconscientemente, tu mano derecha hace lo mismo y logramos dormir
tomados de ambas manos, con nuestros cuerpos unidos cual montaña, capaz
de enfrentar una tormenta. Ese abrazo celestial se repite cada noche. Dormir
a tu lado se convierte en lo más bello del mundo. A veces estoy algo desvelado
y un apretón me despierta. Es tu subconsciente, que mientras duermes me
dice: “te amo”, y yo, sin hablar, te respondo: “yo también”. Mientras esto
sucede, pienso en lo maravillosa que es la vida al darme tu amor, tus besos,
tus caricias y tu cuerpo. Como regalo muy especial, al final de todo llega tu
sublime abrazo, amor mío. Gracias por tu beso de “hasta mañana” y por tu
abrazo encantador hasta quién sabe qué hora. —Hasta ahorita, mi amor. Te
amo. —Hasta ahorita… Yo también. Jorge.
Entonces, la clave No. 3 es:
El deseo se construye mutuamente a lo largo del día, con frases y
expresiones de amor. descubran sus zonas más erógenas y
satisfáganse, sin apuro.
Encontramos y seleccionamos a la persona de nuestros sueños, la conquistamos, nos aceptó,
romanceamos y tuvimos excelentes relaciones sexuales. Ahora viene lo más difícil: «
¿Somos capaces de preservar nuestra hermosa relación de amor? » Preste mucha atención a
lo que aparece a continuación.
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4. - Cultive su amor
49
CAPÍTULO 4
4-
Cultive su amor
No hay que confundir nunca el conocimiento
con la sabiduría. El primero nos sirve para
ganarnos la vida; la sabiduría nos ayuda a
vivir.
Sorcha Carey
Estando en un hospital, al cuidado de mi suegro, conocí a un anciano de 87 años que había
sufrido un accidente cerebral y no podía caminar. En dos semanas se fue recuperando poco
a poco, hasta que pudo recibir el alta médica.
Poco antes de partir, me decía que su mayor deseo era poder recuperarse y caminar, pues a
su esposa hubo que amputarle una pierna, por presentar diabetes, y sabía que ella lo
necesitaba.
Al preguntarle qué tiempo llevaban juntos, su respuesta me sorprendió: 67 años.
Con el pasar de los años, nos hacemos viejos, los apetitos sexuales disminuyen y tanto el
hombre como la mujer se vuelven más vulnerables. Opino que si existe un gran amor en la
base del edificio, podemos envejecer juntos y felices.
En contraposición a lo anterior, muchos dicen que hoy no podemos aspirar a una relación
estable, pues los tiempos han cambiado.
Es cierto que hoy el hogar está desapareciendo como centro del escenario social. Pero la
relación de pareja estable, sea cual fuere, no debe desaparecer.
Es cierto que hoy día, con el desarrollo y la modernidad las instituciones educacionales,
desde las guarderías infantiles han ido cambiando la función educativa, pues los niños
permanecen varias horas fuera del hogar. Hoy día la mujer tiene más independencia
económica y menos tiempo para atender el hogar. Son muchas las parejas que casi ni se
ven, pues trabajan en horarios diferentes.
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4. - Cultive su amor
50
Existen parejas que toman sus vacaciones por separado, “para descansar uno del otro”. Eso
no me gusta, pues si nos pasamos el año trabajando duro, a la hora del descanso y el placer,
¿no vamos a disfrutar juntos?
Como cada miembro de la familia tiene sus propios ingresos, sus círculos de amistades y
sus colegas de trabajo, a veces se resta importancia al hogar. Pero, sobre todo muchos
hombres ven el hogar como el sitio a donde se deben dirigir luego de terminar la jornada
laboral para que lo estén esperando con la cena servida. Por tanto, la familia de hoy es el
reflejo de nuestros tiempos.
Entonces, es aquí donde resulta esencial prepararnos para contrarrestar estos efectos
disociadores y alcanzar una relación feliz y estable.
Muchos hombres creen que el hogar es para las mujeres y que ellas deben asumir la
atención de los hijos. Es un error que se paga cuando los hijos son adolescentes, están
descarriados y andan con malas compañías.
Con la modernidad hemos separado mucho el sexo del amor, y es una pena porque se
vuelve mecánico. En algunos países se hace "casi" el amor por Internet, por videos, por
aparatos y no se utiliza el cuerpo de la pareja, el calor de su piel, el beso de ella. Es una gran
pena porque el amor es vida. Todo en la Naturaleza es hecho con amor, hasta la flor que se
abre al sol.
Las costumbres son distintas en cada rincón del mundo. Aún existen muchos países donde
predomina el machismo. Eso es un gran problema para la pareja, pues un buen número de
mujeres se pliega al hombre para no ser maltratada, o para sobrevivir económicamente y
entonces finge que es feliz y subestima el placer al hacer el sexo.
También existen mujeres empresarias, a quienes les cuesta trabajo encontrar una pareja
estable que esté acorde a su estilo de vida y no logran mantener relaciones amorosas.
Muchas se conforman con andar solas y disfrutan de los placeres de vivir sin compromisos.
Esto sucede con frecuencia en los países más desarrollados.
Se han eliminado tabúes y ya no hay que ir a un bosque como se hacía en los años 70, pues
ya es normal que una mujer reciba a un hombre en su casa. Incluso, ya en muchos sitios es
común observar a la mujer tomar la delantera en lo relacionado a la conquista de su pareja.
En fin, hoy la gente elige libremente su pareja, no hay tantos matrimonios como antes, la
unión se hace más espontánea, con menos formalidades.
Todo lo que hemos tratado en este libro hasta aquí es importante. Pero, ¿de qué vale hacer
el amor, sentirnos en la Luna, si después no somos capaces de mantener nuestra estupenda
relación?
La vida en pareja seguirá evolucionando, pero persiste la necesidad de tener estabilidad.
En gran medida sucede un proceso de “des-amor” por falta de orientación general, no es
sólo la modernidad. Hay que aprender a cuidar esa relación y a ser felices.
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4. - Cultive su amor
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Las parejas, al no saber cómo tratarse mutuamente en su vida en común, cometen errores en
su relación que conllevan la separación, una separación que no desean, pero no encuentran
otra alternativa. ¿No le ha sucedido a usted?
Pero si recordamos y aplicamos algunos elementos básicos de relaciones humanas que son
universales e independientes de la época en que se viva, estaremos en condiciones de
“salvar” nuestra relación de pareja, salvar la familia, y disfrutar la vida, adaptados a las
costumbres de los tiempos actuales.
Existen algunos secretos básicos que usted va a aprender al leer las páginas que siguen, y
que al parecer muchos desconocen o no aplican.
Cuando los tenga en cuenta, se percatará de que es posible lograr y mantener una relación
de pareja feliz y tener una vida feliz en general.
Por su importancia, recomiendo que analice profundamente este capítulo y practique sus
enseñanzas hasta que las domine plenamente y las aplique con el subconsciente, de similar
manera a como usted hace cuando conduce un automóvil.
Para que vaya dándose cuenta de cómo funcionan las reglas que aparecen a continuación, le
sugiero que a medida que las vaya aplicando observe detenidamente los resultados. ¡Se
sorprenderá! Descubrirá que su vida será otra, renovada y feliz. Y como curiosidad observe
a quienes lo rodean. Descubra cómo violan esas reglas y qué les está sucediendo.
Mis amigos Ernesto y Lourdes han descrito “su secreto del amor” en la vida en pareja:
Siendo jóvenes, hace 36 años, nos conocimos en la universidad, nos
enamoramos y también nos casamos. Muchos intereses comunes y conceptos
esenciales nos han unido: la familia, el trabajo y las relaciones humanas.
También, el desinterés por lo material, la coincidencia en gustos como la
música, el teatro, el cine y la lectura, entre otros. Aprendimos a respetar
nuestras diferencias. Dando continuidad a los principios en que fuimos
formados por nuestras familias, forjamos un hogar, consagrados en la crianza
y educación de nuestras dos hijas. Dios y la vida recompensaron esta entrega.
Nuestro amor no ha sido idílico ni de baratas novelitas rosa, pero hemos
sabido defenderlo. Ha vencido la prueba del tiempo y de los conflictos que
inevitablemente enfrentan las parejas. Nuestro secreto ha sido la unión en los
momentos felices como en los difíciles de uno, del otro, de los dos y de la
familia. Éxitos y penas de uno lo han sido del otro también. Nos esforzamos en
ayudarnos y en reconocer el esfuerzo de cada uno. Nuestro amor se alimenta
también de los recuerdos de momentos gratos y felices que juntos hemos
vivido…
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4. - Cultive su amor
4.1-
52
La base de una unión duradera
Cuando encontramos a un chico descarriado, si averiguamos, a menudo encontramos que
sus padres no eran felices en su vínculo afectivo de pareja y ello dañó la personalidad del
muchacho.
Por tanto, si nuestra relación de pareja es duradera, no sólo debemos aprender a ser felices
por nosotros, sino también por nuestros hijos. Tenemos que aprender a valorar una familia
feliz y a protegerla.
Aunque hago mención a los hijos, es bueno aclarar que éste es un libro sobre relaciones de
pareja. Existen parejas que no tienen hijos y también son felices; la esencia es mantener la
armonía en la convivencia familiar.
La base de una unión duradera es el amor y luego el sexo. Uno tiene que ser feliz desde
todo ángulo. Con cimientos de “buena calidad” no hay edificio que se derrumbe.
Sólo el amor puede abrir el corazón. Y es la educación basada en determinados principios o
valores la que puede ayudar a elevar el por ciento de parejas que siguen felices luego de
algunos años de existencia.
De aquí en adelante hagámonos el propósito de contemplar a nuestra pareja con amor. A
esta relación hay que ayudarla con detalles, elogios y sueños comunes y la felicidad nos
acompañará.
Nuestra pareja debe conocer lo orgulloso que nos sentimos al estar a su lado, debemos
halagarla, sin caer en hipocresías, respetarla, enamorarla, ayudarla en todo lo que podamos,
construir y reconstruir la relación.
Cuidarla...
¿Es tan difícil tener una pareja y ser feliz por muchos años? Ello requiere de un esfuerzo de
ambas partes.
Es clave para una relación duradera aceptar las diferencias en la pareja, aprender a
confrontarlas con espíritu positivo cuando es necesario y a disfrutarlas si fuera posible.
Hay que considerar al amor como cuando cultivamos una rosa: preparamos el terreno,
arrancamos las malas hierbas, sembramos nuestra planta, la regamos con amor, la cuidamos
de los depredadores y de las plagas. La protegemos de las intensas sequías o de los excesos
de lluvia.
Nunca olvidemos que en una relación, las cosas grandes son la suma de las cosas pequeñas
de todos los días.
Ame a su pareja, es decir, acéptela, valórela, respétela, dele afecto y ternura, admírela y
compréndala. Ayúdela cuando prepara sus cosas para ir al trabajo. Si ella tuvo que traer
trabajo a realizar a la casa, en vez de criticarla por ello, ayúdela en lo que pueda.
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4. - Cultive su amor
53
Sugiero que alguna que otra vez al año revisen las fotos y videos de cuando ustedes se
conocieron, de esos momentos que juntos disfrutaron y fueron estupendos… Al recordarlos
volverán a vivir. Será un momento de maravillosa unión.
4.2-
Dele besos de amor y abrazos
Es muy posible que usted haya olvidado sucesos de muchos años atrás. Lo que seguramente
nunca olvidará es su primer beso, o los besos apasionados que ha dado, o recibido. Besar es
un hecho romántico que se puede realizar estando en cualquier lugar. Sentados en un
parque, en un auto, en un avión… Y todos lo ven como algo hermoso.
El beso puede ser también la antesala de un juego sexual. Un beso ayuda mucho en este
propósito. Y si lo acompañamos de caricias, mucho mejor.
Un beso puede significar mucho: te deseo, te extraño, ¡cuánto te extrañaba!, te adoro, Cada
beso es un punto de contacto entre dos seres que se aman. Disfrútelo sin apuros, haga que
cada beso sea diferente al anterior.
Yo diría que un beso es la llave de la puerta para estar en las nubes. Multiplique sus besos
por su rostro, por su cuello, sus orejas, y de vez en cuando pase por su boca. ¿Existirá algo
más romántico que eso?
Al besar su pareja, usted puede crear la chispa para una intensa y deliciosa relación sexual.
Con un abrazo estamos diciendo: cuenta conmigo, estoy a tu lado, no te detengas, sigue
adelante, ten fuerzas.
Todo lo puede un abrazo lleno de amor.
Abrace a su pareja. Con sinceridad, con fervor, con una sonrisa en los labios.
¿Cuántas veces ha abrazado a su pareja hoy?
4.3-
Cómo envejecer juntos y felices
Usted habrá leído en muchas partes que la felicidad no es lo que tenemos o realizamos, sino
lo que pensamos acerca de ello. Esto es aplicable a la vida y a la pareja.
Aquí le ofrezco los principios que he descubierto y aplicado en mi vida y que me han dado
excelentes resultados. Unos los aprendí de libros, otros por referencias de amigas y amigos.
También por experiencias propias.
En lo adelante, cuando digo “ella”, me refiero en sentido general a “su pareja”. Si es algo
específico acerca de la mujer trato de precisarlo.
He observado cómo jóvenes de hoy a quienes he hecho llegar estos principios, los están
aplicando con éxito y entre ellos tengo la suerte de tener a mis hijos. Observo que están
relajados y felices. Disfrutan esta etapa de sus vidas. Le sugiero que a continuación los
descubra y analice cómo puede aplicarlos usted también. Relea muchas veces este texto
hasta que su aplicación se convierta en un hábito positivo.
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4. - Cultive su amor
54
Como la estabilidad de la pareja depende de dos, si una parte se pasa la vida obrando bien y
la otra no rectifica, al fin y al cabo se pierde la unidad de pareja. Es por ello que es
conveniente que ambos lean este libro, tomen su esencia y extrapolen los ejemplos a sus
propias condiciones.
Robert Frost decía: “¡Cuántas manzanas habrán caído sobre la cabeza de Newton antes que
comprendiera lo que le estaban sugiriendo!”. No obstante, siempre tendremos experiencias
propias y la mayor parte de nuestras experiencias las podemos sacar de nuestros errores,
tenemos que aprender a remediarlos. Con vistas a que no le caigan demasiadas manzanas en
la cabeza le recomiendo que preste atención a lo que sigue:
Al enamorar a nuestra pareja, le citamos muchas virtudes. Con el paso del tiempo, las
olvidamos. A ella le encantará que la continúe apreciando. Será un gesto muy positivo.
¿Cuántas veces usted le manifiesta a su pareja su aprecio? Aprenda a no dejar de
admirarla.
Reconozca con palabras o con un beso o una sonrisa cualquier gesto de su pareja que le
resulte agradable. A ella le encantará y de seguro seguirá cosechando gestos agradables.
¿Cuántas veces le ha dicho “Te amo” desde que están juntos? ¿Se lo dijo el mes pasado?
¿Ayer?
¿Le gusta insistir recordando lo que no le gusta de su pareja? Haga una lista de las
cualidades que considere son negativas en usted y que seguramente a ella no le gustan, pero
no se lo ha dicho. ¿Se da cuenta de que todos tenemos defectos? Recuerde lo que tratamos
capítulos atrás acerca de aprender a disfrutar las diferencias.
En vez de buscar lo malo, le sugiero que anote todas las virtudes de su pareja. Agregue cada
día nuevas buenas cualidades que aprecia en ella. Se sorprenderá.
Cuando debo decir a mi pareja algo que me parece hizo mal, es necesario ante todo
reconocer aspectos positivos que aprecio en ella. Luego le menciono mis errores, pues
nadie es perfecto ni nada que se le parezca. Al citarle mis errores, ella pondrá mayor interés
en escucharme y lo entenderá mejor.
Al intentar decirle algo que pudiera no gustarle, no lo hago directamente, ¿por qué decirlo
así? Por ejemplo: No me gusta que ella esté largas horas mirando la TV. Si le digo: — ¡Tú
te pasas la vida mirando la TV y no conversas conmigo!— de seguro que se sentirá molesta
y quizás queden pocas conversaciones.
Pero si uso otra expresión o sugerencia: —Quizás, si miras un poquito menos la TV
tendremos más tiempo para estar juntos y conversar, será mejor para nuestra relación—.
Ella va a reconocer que eso pudiera ser cierto y va a desear satisfacer esa petición.
Observe que se lo dije en forma de comentario indirecto, no de orden, nada de imposición,
nada de criticar o de humillar.
Esta forma de asumir un conflicto no es la única, de seguro existen otras.
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4. - Cultive su amor
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Desarrolle sus iniciativas y si usted es hombre, tenga presente lo siguiente: El que piense
que es más hombre dando órdenes, criticando y humillando a su pareja, menospreciando sus
cualidades, no la respeta ni la valora, y más temprano que tarde la perderá. Tendrá que
aprender a andar solo. Recuerde que cuando empiezan las críticas, está comenzando a
desaparecer el amor.
Pero si ella, después del comentario indirecto conversa más con usted y mira menos la TV,
¿Qué se debe hacer? Dígaselo, dígale que usted disfruta mucho al conversar con ella.
En mi opinión, cuando existe una bella relación de pareja se eliminan elementos de
egoísmo. Un ejemplo: en relación a las comidas, a veces sucede que una de las partes se
siente con más derecho a comer lo mejor de la cena. Disfrute mucho cuando en ese
momento usted sirve a su pareja la parte más deliciosa del plato cocinado, y quizás ella ni
se haya percatado que lo hizo.
Si esta acción se convierte en algo recíproco y cotidiano, será beneficioso para ambos. Esto
es aplicable también en la posesión de objetos personales y artículos de vestir.
Ahora pasemos a otra cuestión: supongamos que su pareja hizo algo mal y le ofrece una
explicación que no le convence. ¿Cómo reacciona usted? Si usted la aplasta diciéndole que
no es verdad, será la chispa de una innecesaria discusión.
Og Mandino, en su libro “El vendedor más grande del mundo” decía:
Cuando sienta la tentación de criticar, me morderé la lengua; cuando me
sienta inspirado a elogiar, lo proclamaré a los cuatro vientos.
Un error que se comete con frecuencia es intentar demostrar a la pareja que está haciendo
las cosas mal, decirle que es inútil, o asignarle un calificativo similar. Quien hace eso está
intentando inconscientemente de arruinar la relación.
En vez de hacer eso, es mejor hacer saber a la pareja lo que me pasa a mí, lo que estoy
sufriendo a causa de algo que está sucediendo. No se busca echar culpas, sino solucionar un
problema. Y casi siempre se va a requerir el esfuerzo de ambos.
Antes de hablar para quejarse de algo, colóquese en el lugar de su pareja y analice si a ella
no le sucede algo parecido. Traten de aprender juntos a resolver los conflictos, eliminando
sus causas y evitando a toda costa señalar quien es el culpable.
Perdone a su pareja. Si ante esa situación usted reacciona con amor, le permite rectificar, no
presta tanta atención a esa falta, y la perdona, ella será más cuidadosa la próxima vez.
Muchas veces se nos escapan frases hirientes e injustificadas por el simple hecho de que
estamos estresados o algo interno nos aqueja. Luego sucede que pedimos disculpas a
nuestra pareja por lo dicho minutos antes.
Recuerde: Quien no sabe perdonar, nunca va a ser feliz y hará infeliz a quien tenga a su
lado.
Y nunca olvide que todos cometemos errores a diario.
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Además, si en definitiva el asunto no es tan grave, ¿por qué no ayudarle haciéndole saber
que puede evitar que se repita ese error?
Si usted aprecia que su pareja ha reaccionado favorablemente a su petición de estar más
tiempo con usted en vez de mirar la TV y se lo hace saber, de seguro que ella se interesará
en buscar otras formas de compartir juntos.
¿Y cómo decir las cosas? He aquí un ejemplo:
Usted se comprometió en pintar la casa y hace seis meses que tiene la pintura pero no lo ha
hecho. Sin embargo, siempre duerme la mañana. Piense cómo su pareja le podría decir a
usted para que ¡al fin! Acabe de hacerlo.
Si le dijera: — ¡Tú estás siempre durmiendo y jamás pintas la casa! ¡Dale y ponte a pintar!
— usted se molestará y no tendrá deseos de hacerlo.
Pero si lo expresa de otro modo: —Amor, ¿verdad que nuestra casita se verá más bonita
cuando la pintes? Anímate, yo te ayudo— ¿Usted se resistirá a hacerlo? Seguro que no.
Esa forma es la correcta, decir las cosas de manera que la otra persona tenga un deseo de
hacer lo que uno le sugiere. Mientras no surja el ánimo de hacer las cosas, nada se hará.
¿Por qué esperar a que la situación se complique si ya sé que tengo algo que hacer? Hay que
aprender a ser activos, a solucionar los problemas al momento, o cuanto antes, que no se
acumulen. ¿Cree usted que es correcto permanecer horas mirando TV, en el momento que
hay tareas del hogar inaplazables y que deben ser ejecutadas por ambos?
Evite decir frases como: “siempre dejas regada la cama”, “ya no me besas cuando llego”,
“prefieres estar con tus amistades para celebrar tu cumpleaños”, etc. Esas críticas no ayudan
y, aunque no son graves, molestan. De seguro que usted también hace infinidad de cosas
mal, lo que en ese momento no lo recuerda. Yo preguntaría: ¿Por qué su pareja prefiere
estar con sus amistades para celebrar una fecha especial? En vez de criticarle, es mejor
analizarse uno mismo, buscando la causa. No es lógico que siempre sea uno solo “el malo
de la película”.
En todo momento intente ver a su pareja sin tratar de cambiarla. Intente lograr que se sienta
bien, que perciba lo que usted necesita y que disfrute al dárselo, esté atento para
corresponderle.
Lea estos ejemplos varias veces y extrapole los mismos a los problemas que presenta hoy
con su pareja. Observe que encontrará efectivas formas de expresarse. Aprenda desechar las
malas formas, sólo le causarán problemas.
Todas las personas tienen sus puntos de vista y sus razones válidas para hacer lo que hacen.
¿No logrará usted mejores resultados cuando solicite algo con respeto?
Cuando su pareja se queja de algo, ESCÚCHELA. No la interrumpa. Póngase en su lugar
para poder descubrir la causa de su planteamiento y para comprenderla mejor. La buena
disposición de escuchar ayuda a resolver las diferencias, a la toma de decisiones, a la
resolución de problemas y a la buena relación.
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En todo momento interésese por los asuntos de su pareja y ayúdela en lo que pueda. Eso es
de gran valor para ser felices. Dale Carnegie en su libro “Cómo ganar amigos e influir sobre
las personas” decía:
El que no se interesa por sus semejantes es quien tiene las mayores
dificultades en la vida y causa las mayores heridas a los demás. De esos
individuos surgen todos los fracasos humanos.
Recomiendo que cocinen juntos. Ese momento de la cocina y el fregado juntos une
muchísimo, es el momento en que se puede intercalar un “tocado”, un “pellizquito”, un
“pegadito” y todos esos detalles de contacto, no deje las caricias sólo para la cama; así
como ¿Te parece que está bien de sal? La cena se convierte en un delicioso producto de
ambos. Aprovechen para conversar tranquilamente y hacer sobremesa sin apuro disfrutando
ese momento. Cuando su pareja es quien ha cocinado, hágale saber lo deliciosa que le
quedó la cena. Si tienen hijos, inclúyalos en la mesa.
Ya expresé que no es objeto de este libro tratar el tema de la familia, la relación con los
hijos y hasta con otros parientes. Pero a veces hay que convivir con el resto de la familia y
puede que alguien intente entrometerse en asuntos que sólo atañen a usted y a su pareja. Si
usted vuelve a leer este capítulo y ahora sustituye algunos ejemplos citados por otros
relacionados con ellos, notará que podrá resolver a las buenas muchísimos problemas
familiares.
Esto nos ha sucedido a todos: pasado un tiempo de nuestra relación “descubrimos” que hay
cosas en nuestra pareja que no nos gustan. Entonces nos desgastamos queriendo que “ella
cambie”. ¿Lograremos algo? Lo que sí es posible es que aprendamos a amarle tal y como
es, al igual que deseamos que hagan lo mismo con nosotros.
Cuántas veces usted no ha dicho: —¡Estoy cansado de decirte que no me gusta esto o
aquello!— ¿Le ha servido de algo? Si deseamos que su pareja haga algo hay que lograr que
desee hacerlo. De nada valdrá pelear ni criticar.
Es importante aprender a “negociar” con su pareja. Quizás desee salir los sábados y usted
prefiere quedarse disfrutando de un partido de futbol por TV. Pero si en vez de disgustarse
y discutir, acuerdan salir el domingo, ambos lo van a disfrutar. Algo similar puede hacerse
con la música que prefiere escuchar cada uno. Lo más probable es que sus preferencias sean
diferentes. Pero siempre hay algo que guste a ambos y lo bailen gustosamente.
Hay que desarrollar la intuición mutua para saber cuándo cada cual se debe guiar por la otra
parte.
Haga un alto y reflexione sobre lo leído hasta aquí. Si toma la decisión de no cambiar,
entonces debe atenerse a las consecuencias de tal actitud. Usted tiene en estas
recomendaciones un tesoro. ¡Aprovéchelo!
¿Sonríe? ¿Acostumbra a abrazar y besar con pasión a su pareja? ¿Dedica a ella y a sus hijos
el tiempo necesario, sin prisas? ¿La hace sonreír?
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Mi amiga Lilliam opina:
Es muy importante que los hombres sepan que el acto sexual no comienza 5
minutos antes de meternos a la cama. Tampoco puede ser tan pronto cuando
ha estado todo el día ignorándome, o no tuvo tiempo para darme un beso o
una caricia, no le interesó algo que quería comentarle y que para mí era
imprescindible escuchar su opinión, un consejo, recibir su apoyo... O cuando
me interrumpió y me dejó con la mitad de la frase, o me maltrató con una
frase desagradable. A veces nos hemos hecho un cambio de peinado y no lo ha
notado. A pesar de todo eso, pretenden entonces que seamos unas geishas y
los dejemos complacidos y felices. Eso no funciona así, pues no existe un
interruptor para encender y apagar una mujer.
Esta opinión se repite en muchas mujeres. Parece que a nosotros los hombres nos resulta
difícil tratar correctamente a nuestra pareja. Reflexione al respecto.
4.4-
Cómo comunicarse eficazmente
Una efectiva comunicación es muy importante. Nunca asuma que su pareja sabe lo que a
usted le gusta: dígaselo. Tampoco crea que el amor por sí sólo es suficiente para que exista
una verdadera relación sexual. Mucha gente se casa o se une a otra esperando que en su
vida no existan frustraciones o conflictos.
A veces, cuando existe una deficiente comunicación surgen los malos entendidos. Muchas
parejas se han separado a causa de ello.
¿Qué hacer?
Ante todo: Aprender a escuchar.
En todo momento debemos prestar oído a las ideas y a las emociones de nuestra pareja,
buscando comprenderla. “En todo momento” significa “siempre”. No se trata de escucharla
una vez al mes e ignorarla el resto del tiempo.
También observar su lenguaje no verbal, es decir, sus gestos, la postura que utiliza al
hablar, le expresión de su cara, si le mira a los ojos. Para ello colóquese cerca de ella. A
nadie le gusta expresar sus sentimientos a alguien que se encuentra lejos.
Háblele sobre ella misma y otros temas de su interés o de interés mutuo. Puede ser su
belleza, sus cualidades como persona, su profesión, su hobby, etcétera. También puede
utilizar preguntas abiertas sobre aspectos que a ella le atañen. De esta manera se estimulará
y estará entusiasmada de conversar, lo cual es una importante vía de acercamiento entre
ustedes. Esto lo sugerí capítulos atrás, pero es importante recordarlo.
Cuando alguien nos escucha atentamente y se preocupa por conocernos mejor, pensamos:
esa persona es simpática, es comprensiva, acepta y respeta las opiniones de los otros, desea
ayudarme. ¿Qué pensará usted si quien está a su lado no presta atención a sus palabras o se
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ríe de lo que usted dice? Seguramente se dirá: no se preocupa por los demás, no es una
persona en quien confiar, no es seria, piensa sólo para sí…
No enjuicie las palabras que escucha ni interrumpa a su interlocutor. Cualquier tema, por
difícil que parezca puede ser tratado si usted tiene disposición de escuchar. Si se expresa
con sinceridad y se expresa algo que considera malo en usted, aproveche esa información.
No intente justificarse, le están ayudando a ser mejor. Malo sería si por temor a su reacción
no le dijeran algo importante.
Mientras escucha sonría, muestre interés por conocer lo que le expresa y no juzgue a su
pareja por lo que dice. Sea discreto y mantenga la confidencialidad si se lo pide. Póngase en
su lugar y trate de entender lo que está escuchando.
Evite frases como “eso no tiene importancia”, pues ello romperá la comunicación. Tampoco
saque conclusiones apresuradas.
Al final de la conversación, aunque el tema tratado sea negativo, trate de dar valor a lo
escuchado y si fuera necesario dígale frases que ayuden a resolver la situación. Por muy
negativo que haya sido lo escuchado, seguramente hubo algo positivo.
Quizás, al menos cabe la frase: “Aunque no esté totalmente de acuerdo contigo, me gustó la
manera tan valiente en que te has expresado…”. A ello pudiera agregar: “En un momento
más apropiado encontraremos solución a este asunto…”.
Dígale la verdad. Las mentiras crean desconexión en la pareja. No decir la verdad es
también una forma de mentir.
Evite intentar que su pareja cambie “por su bien”, cuando en realidad lo que usted desea es
que le satisfagan deseos que usted tiene en mente. No la obligue a no ser ella misma, ni a
mentirle.
No tiene por qué existir un modelo de vida único para ambos. Lo inteligente es respetar las
preferencias y que cada cual disfrute lo que le gusta, de vez en cuando.
Pero cuando se requiere que abandone lo que le gusta para ayudar a la pareja no lo piense
dos veces y hágalo sin quejarse.
Luis y Lilia, se disputan la palabra para expresarme detalles de sus hermosos 62 años de
convivencia en pareja:
— Cuando era un joven de 15 años tuve una novia en el pueblo del interior del
país, que era algo así como la esposa que iba a tener de manera
predeterminada por nuestros padres –expresa Luis–. Así era la cosa en
aquellos tiempos. Ella me escribía cartas de amor todos los días, pero la
relación fracasó. Años después, conocí a Lilia un día en que yo visitaba a otra
novia. Cuando la vi me impactó y me dije que esa mujer tenía algo especial.
Poco después, terminé con mi novia y enamoré a Lilia.
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— Entonces comenzó nuestra indestructible relación. – Dijo Lilia. – En
aquella época era un noviazgo de manos tomadas y algún que otro besito. Él
era un joven simpático, que gustaba a las mujeres. Hubo un momento de
crisis, al punto que nos separamos. El insistió tanto en volver que yo acepté.
En realidad se trataba de un hombre muy especial. Nos casamos a los seis
años de noviazgo. Desde el primer momento hemos mantenido un matrimonio
maravilloso, mucho amor y comprensión, siempre nos respetamos mucho.
Para cualquier cosa él me decía “Lilia, por favor…” y cuando yo lo
complacía me decía “Gracias”. Siempre ha sido muy cortés. Supimos
comunicarnos muy bien y logramos arreglar juntos situaciones
desagradables.
— Tuvimos dos hijos, de los cuales nos sentimos muy orgullosos. –comentó
Luis.– Su crianza corrió mucho a cargo de Lilia, pues en esos días yo
trabajaba mucho y llegaba tarde en la noche, cuando estaban acostados.
Trataba de llegar temprano, pero eran tiempos duros. Admiraba la particular
dedicación a ellos de parte de Lilia. Siempre fue una mujer de detalles, le
encantaba la higiene extrema. La he ayudado mucho en el hogar. Hoy estoy
limitado con la visión y ella me ayuda en todo. ¡Es extraordinaria!
Tenga en cuenta que no todos los días estarán llenos de pasión y romance. Si existe una
buena comunicación entre ambos, se podrá encontrar solución a los problemas que surjan
en el camino.
Como es imposible que ambos elementos de una pareja estén de completo acuerdo en todo,
una buena dosis de humor, alegría, sin ironías ni sarcasmo, y de optimismo les ayudará a
sentirse bien.
En algunos momentos me ha dado buen resultado reírme de mí mismo. En ocasiones he
dicho a mi esposa que debemos cambiar los espejos de la casa, pues al mirarme en ellos me
he visto cara de viejo. Mírese usted y quizás encuentre a un barrigón, o a un narizón.
Una estupenda forma de comunicarse es elevar la compenetración emocional acurrucándose
al estar en la cama, darse masajes, caricias, abrazarse después de hacer el amor.
4.5-
¿Los conflictos ayudan?
Es imposible evitar los conflictos en una relación de pareja. Pero si sabemos enfrentarlos
correctamente, la relación puede verse fortalecida. En ocasiones, un conflicto nos alerta
acerca de algo que anda regular o mal en nuestra relación, nos avisa acerca de alguna
insatisfacción, nos ayuda a rectificar a tiempo.
Las áreas de mayor frecuencia en los conflictos son: las relaciones con las familias de la
pareja, los intereses individuales, el manejo del dinero y la sexualidad.
Es preferible no discutir. Pero si no hay otra opción, tenga en cuenta esto:
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Traten de estar solos usted y su pareja. Es un grave error discutir delante de familiares o
amigos, pues el ser humano se transforma cuando hay otros presentes y la situación se
complica sin necesidad.
En vez de discutir, trate de analizar los problemas con espíritu constructivo. Controle sus
emociones y mida lo que va a decir.
Hay que analizar cada asunto por separado.
Es práctica común, y muy errónea por cierto, el “sacar a flote” temas no resueltos antes y
mezclarlos con el tema que se analiza. Eso contribuye al caos y a que todo se complique
innecesariamente.
Imagine que su pareja tuvo un gesto muy lindo hacia usted. En eso, usted le dice: “—Si
siempre hicieras lo mismo…”. Sencillamente, ¡echó todo a perder!
Mucha gente no se preocupa por saber si quiere a su pareja, sino por saber si es querida, si
es el centro del universo de su pareja. ¿Es eso amor?
Evite culpar a la otra parte por lo sucedido. En lugar de ello, trabaje de forma constructiva
en la búsqueda de las causas del problema y de su solución. Recuerde que tenemos la mala
costumbre de juzgar a los demás, sin analizar que muchas veces la causa de un conflicto
está en nosotros.
No hay necesidad de expresar los sentimientos u opiniones humillando a la pareja,
hiriéndola, o faltándole el respeto. O sea, es importante lo que se dice, pero también cómo
se dice.
Evite expresarse de forma que aparente ser usted una víctima del conflicto, cuando
seguramente sabe que tiene responsabilidad también. Tampoco se eche todas las culpas,
diciendo que usted es un desastre, que todo lo echa a perder, etcétera. No es correcto.
Déjela que hable y explique todo lo que siente, analice lo que plantea y trate de
comprenderla. Si está de mal humor, tenga paciencia y escuche. El simple hecho de
escucharla ayuda. Luego tendrá usted la oportunidad de expresar sus sentimientos. Pero
evite acalorarse usted también. Mantenga la calma.
Que se amen no significa que deban pensar exactamente igual.
Hay que alcanzar un diálogo sincero y donde predomine la confianza mutua.
Cuando hay un error de su parte admítalo con honestidad, pues generalmente en un
conflicto humano hay responsabilidad de ambas partes. Busque puntos de acuerdo entre
ambos.
¿No hay cuestiones que vayan bien y se puedan tomar como ejemplo de que sí se puede?
Por ejemplo: quizás ella pelee mucho, pero es muy cariñosa con usted. Lo que quiero
resaltar es que no todo es malo, y lo bueno se debe mencionar.
En ocasiones resulta útil insertar en la conversación recuerdos de instantes de placer, en que
la relación se fortaleció y se hizo bella por un beso, o por un gesto de amor, y la
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importancia de no perder esa bella relación por un conflicto que de seguro se podrá
resolver.
Usted no va a ganar nada si desea imponer su punto de vista o si dice que la otra parte está
equivocada. Ello empeorará las cosas, pues deja de ser una discusión cuyo ánimo es
resolver algo que afecta a la pareja, y pasa a ser un acto de imposición. Tampoco haga
promesas que después no cumplirá. Eso no ayudará.
Quizás demoramos demasiado para tratar un asunto muy “caliente” y ahora no sabemos
cómo salir de él. Pero si en todo momento mantenemos una actitud constructiva es muy
probable que aparezca una solución razonable.
A veces, aunque sepamos defender nuestros puntos de vista, conviene que aprendamos a
comprender el punto de vista de la otra parte, buscando encauzar el conflicto a un camino
de solución común. Eso no es ceder en nuestra posición, sino apreciar que puede haber una
vía favorable que no es la que creíamos nosotros.
Debemos comenzar nuestras palabras con preguntas y frases tales como: “¿Qué es lo que no
te gusta?”, “¿En qué consiste el problema?”, “Te comprendo…, sin embargo, creo que…”,
“Es muy posible que tengas razón, no lo dudo, pero quisiera que tuvieras en cuenta que…”,
“En mi opinión…”, “Creo que…”, “¿Qué podríamos hacer?...”.
En otras palabras, se debe demostrar que uno respeta el punto de vista de la otra parte
aunque pensemos diferente y que deseamos encontrar una posición común, o encontrar
dónde está la verdad, la causa del conflicto, para resolverlo de manera beneficiosa para
ambos.
Nunca debe regañar a su pareja, usar ataques, mostrar impaciencia o desesperación. Si el
momento de conversar no es el mejor, o si la situación se agrava al debatir el asunto, mejor
sería dejar la conversación para más tarde y quizás alcanzar un clima más amigable.
Una vez leí, no recuerdo dónde, una frase de Eugene Kennedy que decía:
Esa tentación de juzgar y condenar, esa pasión por la venganza, son
sentimientos que matan rápidamente al gozo.
¿Porqué nos gustará tanto juzgar a los demás? Es como si nos cegáramos y creyéramos que
nosotros somos infalibles, perfectos.
Y algo vital: Jamás llegue a expresiones o actitudes extremas de las que luego se
arrepentirá. Cuente hasta 100 antes de decir algo ofensivo o hiriente, o antes de decir que se
va de la casa, etcétera.
Es bueno que la discusión termine y no queden cuestiones pendientes. Lo que no ha sido tan
grave como para ser analizado en el momento es mejor aceptarlo para siempre, es imposible
estar de acuerdo en todo. A veces cabe preguntarse: ¿será tan grave esto que dentro de un
año (o un mes, o mañana) aún lo recordemos?
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Evite suponer algo, base su conversación en hechos reales. De nada vale que suponga “que
su pareja debía saber esto o aquello”, o que por siempre deba estar de su parte.
Tampoco suponga que el amor va a durar por sí solo eternamente. Recuerde que hay que
cultivarlo, como la rosa del jardín que nos cuenta “El Principito”.
Nada me ha sido más útil en la vida que reconocer anticipadamente mi error cuando sé que
estoy equivocado. Inténtelo usted mismo. A diario cometemos errores, a veces son
barbaridades. Pero si usted sabe que se lo van a señalar, nada mejor que de inmediato diga:
“me equivoqué”. Cuando le escuchen le agradecerán esas palabras y serán indulgentes con
usted.
Si la falta sucedió ayer — ¿Puede trasladarse al pasado a resolverla? ¿Debemos
preocuparnos por asuntos que son del futuro? Quizás ni estemos vivos para ese entonces.
¿Por qué debemos preocuparnos entonces? Por lo que está sucediendo hoy.
Resumiendo: Lo que resulta útil tener en cuenta cuando aparece un conflicto es: se debe
encontrar su solución en vez de culpar a alguien; cada parte debe poder expresar libremente
y sin acalorarse lo que piensa acerca de ello y la otra parte debe escuchar atentamente. El
ánimo de una discusión es intentar solucionar un problema, no querer demostrar que “yo
tengo la razón”.
4.6-
Cuidado con la violencia
Hoy día se escucha por doquier que se debe evitar la violencia dentro de la pareja y de la
familia. En la enciclopedia Wikipedia encontramos:
La violenca (del latín violentia) es un comportamiento deliberado, que
provoca, o puede provocar, daños físicos o psicológicos a otros seres, y se
asocia, aunque no necesariamente, con la agresión física, ya que también
puede ser psicológica o emocional, a través de amenazas u ofensas.
También se habla de la violencia de género, donde se discrimina, ignora y somete a la
pareja o cónyuge, por el simple hecho de ser del sexo opuesto.
La violencia de género no sólo atiende al sexo femenino, pero los casos de violencia de
género casi siempre son del hombre hacia la mujer.
Muchas veces estas manifestaciones surgen desde tempranas edades en las escuelas, donde
existen algunos grupos que promueven la violencia como si el que no la practicara fuera
menos hombre. Si a usted le ha sucedido ¡Salga rápido de ese grupo!
En Internet encontré un documento de Canadá (Women Abused in Intimated
Relationships), que indica:
En una relación de pareja, el maltrato o abuso se produce cuando una de las
dos personas en la pareja desarrolla un patrón de conducta controladora
sobre la otra. El compañero abusivo utiliza diversas tácticas para salirse con
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la suya, para demostrar que tiene dominada a la mujer y para impedirle que
rompa la relación con él. La mujer intenta modificar su comportamiento para
satisfacer las exigencias de su compañero, esperando que con eso pare el
abuso.
El alcoholismo y las drogas están muy relacionados con la violencia en la pareja. Si desea
que exista armonía con su pareja y hasta con sus hijos, haga todo lo que sea necesario por
no caer o por salir de estas adicciones. Acudir a un especialista lo antes posible pudiera ser
una decisión inteligente.
En ocasiones suceden la violencia y acoso sexual a la mujer en el ámbito escolar y laboral.
Sobre estos temas existen numerosos libros. Sólo deseo recordarle que si siembra violencia
no podrá cosechar amor.
Aprenda a disfrutar lo que puede lograr “a las buenas” y a no pelear por no obtener algo que
resulta imposible.
Una pareja es de dos, pero debemos ser independientes emocionalmente, tener espacios
propios, amar porque lo deseamos, no porque lo necesitamos.
Las amenazas o violencia crean un patrón de temor permanente.
Es importante disfrutar la individualidad sin abusar, y compartir los momentos que
tengamos en común.
Entonces, la clave No. 4 es:
Aprendan a vivir juntos, comunicándose correctamente. Acepten y
disfruten sus diferencias. Protejan la relación. Las soluciones deben
ser beneficiosas a ambos. Si siembran críticas y violencia no
cosecharán amor.
¿Es posible rectificar nuestros errores? A continuación le propongo cómo encontrar la
respuesta.
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5- Rectifique a tiempo
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CAPÍTULO 5
5-
Rectifique a tiempo
Intenta no volverte un hombre de éxito, sino
volverte un hombre de valor.
Albert Einstein
Este capítulo tiene el objetivo de hacerle reflexionar acerca de usted mismo, a su forma de
ser y a la actitud hacia su pareja. Es importante que usted descubra sus puntos fuertes y
débiles, que pueda plantearse acciones para mejorar su actitud, lo cual ayudará a la relación
de pareja.
5.1-
¿Cómo está su autoestima?
Cuando se habla de autoestima generalmente se asocia a la valoración de sí mismo y se
llama la atención sobre la importancia que esto tiene para lograr algo en la vida, para
satisfacer aspiraciones, para llegar a querernos. Autoestima es la consideración y aprecio
que se tiene de sí mismo. Es una valoración que se hace en cuanto a habilidades, defectos,
virtudes, manera de ser, potencialidades y diferencias. También es un sentimiento a través
del cual usted se rechaza o se acepta, se siente seguro o inseguro, alegre o triste.
La autoestima está relacionada con el triunfo. Las personas con actitudes positivas y un auto
concepto fuerte son las que generalmente triunfan en la vida. Se trata de una condición
adquirida, es decir que se forma condicionada por la opinión que recibimos de los demás y
con la educación que hemos recibido. Si una persona ha vivido con la crítica, aprenderá a
condenarse, si siempre ha sido ridiculizada aprenderá a ser tímido, si ha vivido avergonzado
posiblemente se sienta culpable de cualquier situación. En fin, nos llegamos a creer que
valemos muy poco y nos dejamos guiar por lo que otros piensan y deciden.
Si nuestra autoestima es alta, no importa lo que nos digan, sabremos interpretarlo
convenientemente.
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5- Rectifique a tiempo
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En la relación de pareja sucede todo esto. Hay quien por su baja autoestima no se atreve a
decir algo o si escucha algo que resulta natural puede que lo interprete erróneamente. Hay
que ser cuidadoso con lo que decimos a nuestra pareja para no afectarle su autoestima. Si
tenemos un hogar, esto debemos tenerlo en cuenta en el trato con nuestros hijos, padres,
suegros, cuñados, etc.
Cuando una persona aprende a vivir con aprobación aprende a quererse a sí mismo. En un
folleto de Rosenkranz titulado “Actitud constructiva ante la vida”, leí que alguien, intrigado
por la curiosidad, preguntó al escritor G. K. Chesterton qué libro hubiera deseado tener
consigo en el caso supuesto de que hubiera naufragado en una isla desierta. Cualquiera
hubiera pensado que el libro deseado hubiera sido de filosofía, arte o poesía. Su respuesta
fue: “Si yo hubiera de tener conmigo algún libro en una isla desierta, habría de ser un
manual práctico para construir una embarcación.”
Aún viviendo en un ambiente civilizado y rodeado de amigos, cada uno de nosotros puede
considerarse imaginariamente en una isla desierta. La isla es nuestra vida íntima. Nadie
puede mirarnos por dentro como nosotros lo hacemos. Por tanto, es a nosotros a quienes nos
corresponde encontrar cómo salir de la isla. Si conocemos nuestras presuntas limitaciones
podremos proyectar nuestro pensamiento al triunfo en la vida, procurando resolver lo que
sea necesario. Nadie puede hacerlo por nosotros.
De esta manera podremos vencer a la baja autoestima y también al egoísmo y a la actitud
negativa.
Podremos trazar una actitud sana, impulsada por el deseo de cooperar, que persiga intereses
comunes con nuestra pareja, y ello puede constituir un punto de partida para una vida
mejor. Debemos aprender a edificar positivamente nuestras vidas.
Aprendamos pues, a buscar siempre el aspecto favorable en las personas y en las cosas, en
lugar de considerarlas bajo un aspecto negativo.
¿Qué pensarán de usted si siempre se queja, todo le parece mal, se imagina que todo el
mundo está en su contra, que quienes están a su alrededor no lo estiman e incluso varios se
han puesto de acuerdo para ignorarle? De ser así, cuando alguien le propone una nueva
idea, su reacción inmediata es una crítica implacable. Condena sin investigar y casi nunca
admite la bondad en las cosas. Está firmemente convencido de: «Nadie se preocupa por mí,
estoy solo y todos me consideran un elemento despreciable». Incluso llega a expresar: «Los
demás son quienes tienen la culpa por eso que salió mal».
De ahí la necesidad de asumir una actitud constructiva y romper las cadenas que nos atan a
una constante negación.
Ahora supongamos: usted desde la primera vez observa el lado positivo de las cosas, no
expresa sus opiniones acaloradamente y, al proponer ideas, puede advertirse que tienen un
sello de optimismo. Se siente feliz y equilibrado. Se ha convertido en una persona
capacitada para bastarse a sí mismo, cuya compañía es un placer.
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¿Qué pensarán acerca de usted? ¿A quién elegirán como pareja? ¿Al primer “usted” o al
segundo? ¿Quién hará feliz la relación de pareja? ¿El primer “usted” o el segundo? La
respuesta es evidente. La única manera de lograr ser la persona que anhelamos es
examinarnos internamente y cambiar todo lo pesimista y negativo por optimista y positivo e
irradiarlo a todos.
Si su estado de ánimo es de desilusión o derrota, la solución es asumir una actitud
constructiva en su vida. No crea tener más defectos que los demás. Aprenda a reconocer
que todos somos diferentes. Deje de compararse con otros. Reconozca sus cualidades
positivas y trate de mantenerlas de esa forma. Descubra sus cualidades negativas y
trabájelas para ser cada día mejor.
No se obsesione con los fracasos, reconozca sus logros. Todos tenemos limitaciones que no
podemos solucionar, pero ello no significa que deban ser un obstáculo para nuestras vidas.
Seguramente habrá escuchado de la religión: “Amarás al prójimo como a ti mismo”.
Comience por usted mismo. Sepa quererse, respetarse, ser feliz, cuidarse,…
No podemos devaluarnos como personas, sintiendo valer menos, pensar que nuestra
felicidad depende de la otra persona. Debemos aprender a tener salud física y mental.
Trataremos con amplitud este tema en el capítulo “Tenga Salud Sexual”.
5.2-
La trampa de la infidelidad
Es cierto que cuando uno es joven busca nuevas experiencias. “¡Hay que vivir la vida!”,
decimos. La tendencia a pasar el momento, a estar hoy con una y mañana con otra, se
extiende cada día más y amenaza a la integridad de la pareja. Nos adaptamos a esa manera
de vivir y olvidamos que constituir una pareja implica un compromiso de lealtad mutua.
Nunca nuestra pareja será exactamente como lo deseamos. Eso lo analizamos en el proceso
de selección y tomamos una determinación. Pero al cabo del tiempo a veces olvidamos las
virtudes de nuestra pareja que tanto nos gustaban y ansiamos otras condiciones que desde el
inicio de la relación sabíamos que ella no tenía o que quizás perdería al paso del tiempo.
Usted ha logrado establecerse con una buena pareja, el amor ha llegado a su corazón, se ha
venido creando un clima de unión, quizás hayan hijos… y ahora de pronto aparece una
nueva relación.
La terapeuta española Annette Kreuz, en su obra “La infidelidad en la pareja” expresa:
Infidelidad, relación extramatrimonial, aventura, ligue, rollo, "one night
stand", lío. El lenguaje cotidiano tiene palabras que implican connotaciones
muy diferentes para describir situaciones que tienen una serie de ingredientes
en común: una persona, con una relación de pareja estable y en la mayoría de
las veces legalmente confirmada, está implicada en un contacto intenso de
duración variable con una persona, en la mayoría del sexo opuesto, que no es
su pareja habitual. Este contacto puede, pero no tiene por qué, implicar
relaciones sexuales. Las razones más frecuentemente expuestas para iniciar y
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mantener una relación de estas características son matrimonios que se viven
como penosos y/o vacíos, y un nivel de enfado considerable hacia el cónyuge
por falta de una respuesta positiva a demandas sexuales y/o emocionales.
Son muchos los actos de locura que se cometen cuando uno encuentra a una nueva pareja.
Es muy difícil darse cuenta de lo que está sucediendo.
Todo comienza con una sonrisa, una mirada que dice todo, aparentemente se trata de una
aventura formidable. Pero cuando uno menos lo piensa, el cielo se oscurece y comienza la
tormenta.
Si extiende esa extra-relación por un tiempo, podrá ser muy agradable. Experimentará
deseo, esperanza, excitación, pero también habrá sensaciones de culpa, miedo y decepción.
No olvide que cada día que pasa corre el riesgo de ser descubierto o de querer abandonar su
hogar, sus seres queridos, a veces sus bienes, para irse con la nueva pareja, a pesar de que
usted todavía no sabe si la nueva relación logrará satisfacer todos los requisitos que usted
necesita. Se trata, sin dudas, de una muestra de deshonestidad que no queremos reconocer.
¿Qué hacer? Sugiero que vaya a un sitio tranquilo y durante un buen rato reflexione y
coloque en una balanza las cosas buenas de su pareja actual, los estupendos momentos
vividos a su lado, los hijos, todos los encantos que usted ha descubierto en ella. En la otra
parte coloque las agradables sensaciones de lo nuevo, la aventura, la pasión prohibida, los
nuevos sentimientos que le cautivan y no lo dejan dormir. Si la balanza se inclina hacia su
pareja estable, no dude en terminar la relación infiel. ¡No lo piense dos veces!
Si la balanza que mencionaba antes, se inclina con facilidad hacia el extremo de la relación
infiel, quizás lo más probable es que su amor no era tan profundo, la relación de pareja que
llevaba no era tan sólida como parecía, está muy deteriorada por situaciones desagradables
vividas, etc. En ese caso debería analizar a fondo si es mejor no seguir con la relación
inicial.
¡Tenga cuidado! A menudo nos cegamos cuando vemos llegar un amor nuevo. He visto
varios filmes donde suceden situaciones de infidelidad. Seguramente usted los habrá visto
también. Me ha sucedido que he observado al protagonista tener una aventura con una bella
muchacha y se ha enamorado locamente de ella. Luego han aparecido escenas de él en su
hogar, con su esposa que lo adora y confía en él, con sus hijos, donde recibe caricias y
amor. Al ver todo eso he tenido la sensación de que el hombre es un vil desconsiderado, un
irresponsable, que corre el riesgo de perder su hogar, su amada y sus hijos por estar con
alguien que quizás conoció la semana anterior. ¿No lo ha pensado usted también?
Sin embargo, cuando pasamos por una situación similar ignoramos el daño que hacemos a
nuestra pareja y el que nos hacemos al hundirnos en el mundo de la infidelidad.
Lo que aparece de forma casual nos envuelve y cautiva de tal manera que olvidamos las
desagradables consecuencias y por ello, aunque a veces nos lo advierten los amigos,
seguimos actuando incorrectamente.
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La mejor manera de salir de esa trampa es no caer en ella. O si caemos, debemos intentar
salir cuanto antes. Hay que preservar a toda costa el compromiso de lealtad mutua que
establecimos con nuestra pareja actual. No tenemos derecho a jugar con sus sentimientos.
Tampoco deberíamos jugar con los sentimientos de la persona que ahora se ha aparecido en
nuestro camino.
Si la infidelidad se descubre, quizás nuestra pareja nos perdone, pero lo que es casi seguro
es que se despierta en ella la inseguridad y la desconfianza, lo que poco a poco va a
debilitar nuestra relación. ¿Podrá alguien amar con la incertidumbre de que le engañan?
Resulta difícil, pero si hay una actitud constructiva y sincera de parte nuestra podremos
recuperar la confianza perdida.
Si usted se ha topado con esa situación no demore un segundo más en comenzar a analizar
su caso y tomar una decisión. Tome la balanza y si se va a favor de su pareja del alma
abandone todo lo demás.
Sea valiente y decidido: enfrente esa situación. Si supo entrar en ella debe poder rectificar y
salir. No busque otra variante.
No todas las infidelidades tienen iguales causas ni todas iguales consecuencias. Hay quienes
son capaces de mantener relaciones amorosas con más de una persona y no dejan de amar a
su pareja. De ser así tenga cuidado, no vaya a cambiar su manera de pensar más adelante.
También he conocido varias personas, que de solo iniciar una nueva relación ya desean
abandonar a su pareja de sueños. Parece algo infantil, pero es la pura realidad.
Puede suceder que su pareja sea la infiel. Por algo habrá sucedido. Es probable que la causa
sea una insatisfacción emocional o sexual con usted. Es por ello tan importante una buena
comunicación clara, precisa y diaria, enamorarla todos los días, que sienta orgullo al ser
nuestra pareja.
Hay quienes aceptan la infidelidad. Otros no la aceptan. No es lo mismo un hombre infiel
que una mujer infiel. La sociedad no es justa. Generalmente se acepta como “menos grave”
la infidelidad del hombre, mientras que se mira con desprecio a la mujer infiel. Es más, se
considera “raro” encontrar a un hombre totalmente fiel. Como hombre, reconozco que esto
no es justo, pero es la realidad.
A usted, amigo lector, le recomiendo que aprenda todo lo que pueda acerca de las
relaciones humanas, pero cuando encuentre una persona que llegue al fondo de su corazón
haga todo por cuidarla, al igual que se cuida una planta en el jardín. Haga todo por cultivar
la fidelidad. ¡Y tenga siempre la balanza en la mano, si aún es temprano!
El amor pudiera compararse con el efecto de una cámara fotográfica; mientras mejor nos
enfoquemos, mejor saldrá la foto. Si nos desenfocamos perderemos su encanto.
¡Enfoquemos nuestra atención a quien amamos, que nos ama y que nos hace feliz!
Tenga siempre presente que la infidelidad causa hábito y destruye.
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5.3-
70
¿Podré vencer a los celos?
Esa es una pregunta que todos nos hacemos. La respuesta es SÍ, pero hay que esforzarse.
Todo depende de la gravedad de nuestra situación. Desde pequeños manifestamos celos en
diferentes situaciones: con nuestras amistades, en la escuela, en todas partes. Cuando llegan
los amores surgen los celos hacia nuestra pareja.
Debemos partir de que en una relación hay aspectos que no se pueden modificar, como por
ejemplo, la personalidad de cada uno. Infidelidad y celos son dos factores con los que
aprendemos a vivir, y hay alternativas para enfrentarlas: una buena comunicación.
Sentimos celos al pensar que somos “dueños”, “propietarios” de la otra persona, lo que de
entrada es un grave error.
Los celos generalmente nos ofrecen temores, inseguridad y expectativas sin fundamento.
En el hombre, el resultado es miedo a la pérdida de la relación, sentimientos de
humillación, pensamientos cargados de fantasías tristes y de odio que inundan nuestro
cerebro, sentir que estamos haciendo el ridículo ante todos. Es por ello que muchos de
nosotros tomamos una actitud hostil con amenazas, regaños, prohibiciones y otras
situaciones, donde se revela ¿qué cosa? nuestra inseguridad.
En la mujer, generalmente los celos se manifiestan de otra forma. Existe el temor a ser
abandonada, a ser excluida por su pareja. Incluso en ocasiones ella llega a “aceptar” que su
pareja tenga alguna que otra correría. Escribí aceptar entre comillas, pues posiblemente esa
situación tenga un límite.
Nos olvidamos que cuando dos personas se unen como pareja existe un compromiso a
respetar. Si existe desconfianza continuada de una de las partes o de las dos, esa relación
pierde su sentido. ¿Qué hacer? Aprender a confiar. No ver fantasmas donde no los hay. Si
los celos son un problema muy grande para usted, es recomendable que acuda a recibir una
ayuda profesional. Vale la pena.
La infidelidad puede ser el resultado de una crisis de la pareja no resuelta a tiempo.
Debemos conocer a nuestra pareja, brindarle amor y satisfacerla sexualmente. También
debemos reconocerla y satisfacerla espiritualmente. Debemos evitar que los problemas se
acumulen sin ser resueltos. Sobre este asunto también me referiré después.
Muy importante: jamás lograremos nada aplicando la fuerza o la intimidación. Eso no es
amor, así no tiene sentido vivir en pareja, pues usted sufre y hace sufrir a su pareja. Si hay
hijos, ellos sufrirán también.
El esperar lealtad o fidelidad es una expectativa para la cual no hay remedio. Apegarnos a
los valores a los que les damos sentido y respetar que la otra parte pueda coincidir o no es
una buena fórmula para no sufrir.
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5.4-
71
¿Tendré mala suerte en el amor?
Nunca he creído que la “mala suerte” sea la causa de los problemas amorosos. La verdadera
causa está dentro de nosotros. Es muy probable que no sea culpa de nuestra pareja lo que
sentimos, y sin embargo actuamos como si lo fuera.
Muchas personas se preguntan “¿cómo tener suerte en el amor?”. Se hacen esa pregunta con
más frecuencia que ¿cómo amar a mi pareja? Hay quienes aconsejan preparar hechizos y
muchas variantes de solución. Las respeto, pero pienso que eso solo no basta para ayudar a
quienes desean una respuesta eficaz.
Considero que he tenido suerte en el amor. Observo a mis hijos, creo que siguen mis pasos.
¿Cuál es mi secreto? Se lo refiero a continuación, con el deseo de que usted también “tenga
suerte”:
Hay que prestar especial atención a “mirarse por dentro”, aprender a
relacionarse con los demás, saber brindar amor a quienes tenemos a nuestro
alrededor (y no lo digo desde el ángulo religioso), incluyendo a nuestros
amigos. Debemos aprender a seleccionar y amar a nuestra pareja y saber
dejarnos amar. Aplicar las reglas básicas de convivencia humana. Prestar
especial atención a los hijos, si los hubiera. Cuando ellos aprecian nuestro
sentimiento y comprensión, nos revelarán sus problemas y podremos
ayudarles, entonces no tendrán que buscar fuera del hogar las respuestas a
cuestiones que les agobian. Se debe disfrutar cada momento feliz que se vive
con la pareja. Debemos saber perdonar, respetar, ser humildes, tolerar los
defectos de ella, al igual que ella tolera los nuestros, agradecerle todo lo
maravilloso que hace para hacernos feliz, ese beso, ese cuidado cuando
enfermamos,…
5.5-
Los cambios inesperados
A veces sucede que nos sorprende un cambio inesperado en nuestra vida. Muchas veces se
trata de algo que ya venía gestándose desde hace tiempo, pero que no nos dábamos cuenta.
Por ejemplo, cuando nuestra pareja nos plantea que desea separarse, casi siempre los
cambios no han sido súbitos, generalmente existieron pequeños cambios que en un plazo de
tiempo equivalen a un gran cambio.
¿Cuántas veces llegamos tarde a casa con algunos tragos encima?, ¿Nos descubrió alguna
infidelidad?, ¿Cuántas veces la ignoramos?, ¿Cuántas otras pequeñas barbaridades
cometimos? Cuando eso sucede y perdemos algo de valor, sea nuestra pareja, nuestro
trabajo, o algo que nos resulta importante, lo que generalmente hacemos es lamentarnos,
preguntarnos porqué nos ha sucedido eso a nosotros, etcétera. Muchas veces esos cambios
eran inevitables y no fuimos capaces de anticiparnos a ellos, o conociéndolo nos aferramos
a ilusiones sin fundamento y no les prestábamos atención.
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Por ejemplo: quizás pensábamos que nuestra pareja iba a soportar toda la vida que
llegáramos a la casa borrachos, o que iba a perdonar nuestras infidelidades. ¿Y qué decir si
hemos sido violentos con ella? Haga un alto y reflexione sobre esto.
Otras veces ha podido suceder que hemos tenido miedo de afrontar los cambios que
conocíamos que era necesario realizar. Por ejemplo: cuando cometemos una infidelidad nos
resulta muy difícil hacerle frente, o podemos sentir temor de abandonar esa situación por las
complicaciones que pudiera acarrear.
En la relación de pareja los cambios pueden comenzar desde temprano. Si no nos damos
cuenta, o no hacemos nada para resolver las nuevas situaciones que se van creando llegará
el momento en que se escapa de nuestro control y llegamos al fin de la relación. ¿Porqué
esperar a ello? La mejor forma de solucionar los problemas es buscando su causa al
momento de detectar que existen y actuando rápido.
Es preciso aprender a manejar los cambios que sabemos nos afectan en nuestras vidas. Y
también debemos aprender a cambiar nosotros mismos con la voluntad, firmeza y rapidez
necesarias.
Si el cambio se maneja como un reto, como una aventura agradable, será más fácil y
efectivo realizarlo.
Si es lector de La Biblia, en el Evangelio según San Mateo, 6-34, encontrará:
No se preocupen por el día de mañana, porque mañana habrá tiempo para
preocuparse. Cada día tiene bastante con sus propios problemas.
Lo que sucedió ayer no lo podemos cambiar. Lo que sucederá mañana es en cierta forma
impredecible. Lo que hagamos hoy es vital.
5.6-
Rectificar es de sabios
Es saludable que se detenga y evalúe su relación de pareja. Si desea mejorarla, debe trazar
un plan de acción para solucionar los aspectos negativos que haya encontrado. Trate de
autoanalizarse periódicamente y rectifique a tiempo, antes de que sea tarde. Reflexione
sobre cada aspecto a rectificar y anote para cada uno lo que se propone hacer y la fecha en
que se compromete cumplirlo. No se precipite, tómese su tiempo. Usted será quien se
controle. Si desea mejorar su situación debe dar seguimiento a cada aspecto hasta
solucionarlo. Una situación crítica en alguno de los aspectos señalados, aunque el resto no
esté tan mal, pudiera, de todas formas, tener como consecuencia que se afecte
sensiblemente su relación de pareja.
Entonces, la clave No. 5 es:
Rectifiquen a tiempo sus errores. Eviten a toda costa la infidelidad y
los celos. No se logra amor intimidando a alguien. Adáptense a las
nuevas situaciones que van apareciendo.
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5- Rectifique a tiempo
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¿Podremos ser felices con nuestra pareja si nuestra salud sexual es débil? ¿Cómo cuidarse
del VIH/Sida y de otras infecciones de transmisión sexual? Preste especial atención a las
informaciones que aparecen a continuación.
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6. - Tenga salud sexual
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CAPÍTULO 6
6-
Tenga salud sexual
Es mejor encender una luz, que maldecir la
oscuridad.
Proverbio árabe
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la salud sexual es la integración en el
ser humano de lo somático, lo emocional, lo intelectual y lo social para lograr un
enriquecimiento positivo de la personalidad que facilite las probabilidades de
comunicación, de dar y recibir amor. ¡Todo influye!
De nada vale estar muy enamorados y tener a una pareja excelente si no somos capaces de
expresarle nuestro amor, si no somos capaces de realizar el acto sexual. Quizás estamos sin
fuerzas o deprimidos, y peleamos injustificadamente por cualquier causa. Podemos estar
muy estresados. También sucede que fumamos en exceso, ingerimos alguna droga, café o
bebidas alcohólicas y ello reduce nuestra capacidad de brindar el amor. ¿Conoce usted el
daño que se está haciendo y el riesgo de perder a su pareja? ¿No valdría la pena analizar
estos aspectos detenidamente y encontrar una solución a su caso particular?
A continuación describiremos diversos aspectos que inciden en la salud sexual. Deseo
brindarle una panorámica sencilla, pero que le ilustre y le haga reflexionar acerca de este
tema.
6.1-
La alimentación, ¿cómo debe ser?
La alimentación es fundamental para poder disfrutar de una buena salud sexual.
Hoy día es costumbre ingerir comida rápidas, chatarra, muchos productos fritos, poca o
ninguna ensalada. Los refrescos o jugos naturales se sustituyen por refrescos instantáneos o
enlatados.
Ingerir alimentos fritos, la mantequilla, hígado de res o cerdo, o diversos productos grasos
provoca que las arterias y venas sean tupidas por la grasa y otras sustancias tóxicas.
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6. - Tenga salud sexual
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El cuerpo humano necesita disponer diariamente de determinadas cantidades de vitaminas y
minerales. Están la vitamina A, las del complejo B (B1, B2, B6, B12, y otras más), las
vitaminas C, D y E. Existen minerales que son claves para la salud humana, como por
ejemplo: calcio, magnesio, selenio, zinc, cromo,… Existen compuestos orgánicos
importantes como el beta caroteno, que se encuentra en varias plantas.
Las autoridades de salud pública de muchos países reglamentan estos aspectos,
recomiendan cómo deben ingerirse y la manera en que deben ser combinadas. Es
importante escuchar la opinión de su médico, pues cada persona tiene sus particularidades y
lo que en determinada dosis es bueno para una, pudiera ser dañino para otra.
Sugiero que usted averigüe y se mantenga al tanto de los resultados de investigaciones al
respecto. Es vital tener en cuenta este aspecto si se desea tener buena salud sexual.
En general se recomienda ingerir frutas y vegetales en su estado natural, preferiblemente
crudos. También consumir pescado y muy importante: limitarse en el consumo de azúcar.
Yo sigo esos consejos y me siento muy bien. Pienso que se puede comer de todo, siempre
que se eviten los extremos. Me gusta tomar miel de abejas, puede estar combinada con jalea
real, propóleo o polen de flores.
6.2-
¿Cómo nos ayuda la Naturaleza?
Mi amigo, el ingeniero bioquímico Jorge L. Robinson, que practica el naturismo y tiene una
salud estupenda, nos ofrece varias sugerencias: comienza recomendando ingerir un diente
de ajo, como mínimo, cada día.
—Lo ideal, —dice Robinson— es hacerlo en ayunas y recomienda masticar y ensalivar
lentamente el ajo y luego tragarlo. Su efecto es beneficioso para el funcionamiento del
sistema circulatorio del hombre y la mujer.
También señala nuestro amigo, que la Naturaleza pone en nuestras manos varios tesoros
para mantener la salud sexual.
Por ejemplo: la combinación aguacate con miel de abejas sirve para estimular la función
sexual masculina y la menta americana ayuda a eliminar la apatía sexual femenina. Aquí les
detallo algunas recetas de cómo se preparan:
Aguacate con miel. Se pela un aguacate maduro y se divide en trozos. Se echa miel a gusto
por encima. Se consume junto a las comidas.
Menta americana. Se pone a calentar una cantidad de agua equivalente a una taza grande
(8 Oz.). Cuando esté hirviendo se baja del fuego y se echa en la vasija un macito de
menta americana. Se deja refrescar y se sirve sin azúcar, para que esta terapia funcione
mejor. Tómese dos veces al día: la primera preferiblemente en ayunas y la segunda dos
horas antes o después de la última comida.
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6. - Tenga salud sexual
6.3-
76
Impotencia y eyaculación precoz
Es muy importante amarnos y cuidarnos a nosotros mismos para ser capaces de amar y
cuidar a nuestra pareja.
Como ya expresamos, de nada vale que seamos maestros haciendo el amor si no tenemos en
cuenta la preparación física y mental adecuada para poder llegar a disfrutar a plenitud este
maravilloso acto, o si nuestra apariencia es tal que no logramos ser atraídos por nuestra
pareja.
El científico alemán, Doctor en Ciencias Siegfried Schnabl, en su libro “El hombre y la
mujer en la intimidad”, refiere que un hombre es impotente o tiene perturbada su potencia
cuando es incapaz de sentir deseo sexual, experimentar una erección suficiente, gracias a
ella introducir el pene en la vagina, permitir fricciones en su interior por cierto tiempo, de
este modo llegar a la eyaculación y experimentar el orgasmo. Todo eso en una situación
apropiada y con una mujer con la cual la mayoría de los hombres estarían en condiciones de
efectuar el coito.
Para lograr una correcta excitación en el proceso de hacer el amor, se debe tener una buena
circulación sanguínea que es la que garantiza la hinchazón del clítoris y la erección del
pene. Si uno de los dos miembros de la pareja no lleva una vida sana, su irrigación
sanguínea será insuficiente, por lo que se afectan estos efectos, la función del cerebro y la
producción de hormonas.
Es importante que el hombre mantenga su pene en erección todo el tiempo posible hasta
que ella arribe al orgasmo. Cualquier hombre puede convertirse en un amante fenomenal si
aprende que su mayor potencia sexual reside en su habilidad para entender y controlar su
pene. Es importante la profunda convicción de que su aparato sexual funciona bien.
Otra disfunción muy común en los hombres es la eyaculación precoz. Hay mujeres que
quedan satisfechas en corto tiempo. Hay otras que necesitan de más tiempo para poder
alcanzar uno o varios orgasmos y sentirse satisfechas. Pudiera suceder que si su pareja tarda
poco en llegar al orgasmo, el hombre no perciba que presenta eyaculación precoz. El
hombre debe alcanzar el control de la erección, por el tiempo que sea necesario, a fin de
poder satisfacer a la mujer y también para quedar más satisfecho.
Entre las causas más comunes de estas disfunciones se encuentran: fumar, beber alcohol y
comer comidas grasas. También el sedentarismo. Es recomendable eliminar esas malas
costumbres y realizar ejercicios físicos con periodicidad.
Si su vida se mantiene en un estrés constante debe tomar medidas para al menos minimizar
esa situación. Debería considerar, además, fuentes de motivación, que le haga desarrollar su
intelecto y enriquecer su espíritu con el desarrollo socio-cultural.
6.4-
A ella le falta el deseo ¿Qué hago?
Entre las disfunciones más frecuentes en las mujeres, la número uno es precisamente la falta
de deseo sexual o deseo sexual hipo activo, y parece que entre las etiologías, el factor pareja
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6. - Tenga salud sexual
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es fundamental. O sea, a las mujeres se les están quitando “las ganas” y la tasa de orgasmos
es baja.
Influye en ello resentimientos por problemas no resueltos en la pareja, por infidelidad de
nosotros, el coraje por haber recibido maltrato o descalificación verbal, la frustración por
insatisfacción o experiencias sexuales traumáticas, un bajo nivel de autoestima, estrés por
ser ella quien duplica sus jornadas laborales fuera y dentro de la casa, además de las
funciones de maternidad que desgastan, y estudios que realiza, entre otras.
Existen muchas formas de saber cuándo es el mejor momento para hacer el amor. No es
necesario que ella nos lo diga con palabras, hay que ser un buen receptor, para captar la
señal y actuar en el momento óptimo.
Cuando existe fatiga o estrés de alguna de las partes, es mejor aplazar la realización del acto
sexual.
Si la mujer está estresada e insistimos en hacerlo quizás lo acepte por complacernos, pero el
resultado no será muy prometedor o quizás sea frustrante para ella al no poder alcanzar el
orgasmo. Es mejor proponerle un descanso y ayudarla a disipar las preocupaciones que la
tienen en ese estado y luego explorar su disposición para el acto sexual. En ocasiones, un
agradable masaje erótico por su cuerpo se puede ir convirtiendo en una fuente de excitación
y se alcanzan buenos resultados. Es por ello que le recomiendo que aprenda a realizarlo. A
ella le encantará.
A veces no nos damos cuenta que durante el día la hemos tratado mal, hemos discutido, la
hemos minimizado. Eso acrecentará su falta de deseos.
Si esa delicada situación se prolonga por días o semanas, los hombres tenemos por delante
una gran responsabilidad, debiendo ayudarla a superar la parte que a ella le toca. Quizás sea
necesaria una etapa “sin hacer el amor”. Debemos despertar sus deseos sin que ella se sienta
presionada a que después vamos a penetrarla. A través de juegos amorosos y de forma
gradual, debe sentir que el pene es algo agradable aunque de momento no lo acepte en su
interior. Es posible que en esa etapa usted también necesite de ella para liberar tensiones
mediante la masturbación. Cuando las condiciones estén creadas podrá introducir su pene
con mucho cuidado.
Hay mujeres, que aunque les gustan las caricias de su compañero y los juegos amorosos, no
logran llegar al clímax placentero del acto sexual. Eso puede suceder de manera ocasional,
transitoria o siempre, y debemos estar preparados para cuando esto ocurra, ayudarla ante
esa desagradable situación que influye negativamente en su autoestima y que se conoce por
anorgasmia.
Debemos saber que hay mujeres que nunca han experimentado el orgasmo. ¿Cómo serían
sus parejas anteriores? Si usted sabe hacer bien las cosas, logrará que lo sienta.
La anorgasmia se debe a diversas circunstancias, entre ellas el estrés y agotamiento físico o
mental; a veces esto sucede después del parto, en situaciones familiares complejas, como la
pérdida de un ser querido, cuando se hace el amor en un sitio inadecuado, o donde existe
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6. - Tenga salud sexual
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poca privacidad, etc. Un ligero ruido en la calle pudiera causar distracción y que
desaparezca la excitación.
Puede suceder que la mujer no sienta deseos o no alcance el orgasmo por no sentir pasión
hacia su compañero. Quizás diga que lo ama, que lo acepta como su pareja, que no tiene
nada en su contra y que llevan años juntos, pero en el trasfondo está la falta de pasión
amorosa. ¿Será que ella no hizo una correcta selección de su pareja? ¿O será que a veces las
mujeres tienden a idealizar a un hombre que fue su anterior pareja o a uno con que ni
siquiera han tenido relación y en la comparación usted sale perdiendo? ¿Ha sido usted
amoroso hacia ella, o la ha tratado con despotismo y amenazas? ¿Será que con el transcurso
de los años le estamos brindando menos cariño del que ella espera?
Es difícil encontrar una mujer con un cuerpo perfecto. Las hay altas o bajitas, gordas o
delgadas, más o menos bonitas, con la piel o el pelo de un tipo o de otro, de muchos o de
pocos senos, con muchas caderas o pocas, con las piernas de una forma o de otra, tienen
más o menos edad… las combinaciones son infinitas. Lo más importante es su encanto, lo
que emana de su ser. Pero sucede que las mujeres a veces se comparan con otras y si la
autoestima es baja se sienten en desventaja.
Debemos ayudarlas a sentirse seguras y queridas tal y como son. Por algo la seleccionamos
como pareja. Y si el tiempo transcurre y ella va perdiendo su belleza física, debemos
aceptarlo, al igual que nosotros también vamos perdiendo nuestro atractivo.
A veces un gesto de desprecio, una amenaza, unas palabras ofensivas, de los que al poco
rato ya ni nos acordamos, la ausencia de un elogio o de una caricia deseada o la sospecha de
que le somos infieles puede reflejarse negativamente en el momento de hacer el amor. Y si
se entera de que le somos infieles, eso complica más las cosas, pues posiblemente su
erotismo se apague bruscamente y resulte muy difícil volver a encenderlo.
Existen otras disfunciones femeninas, como el vaginismo, que provoca contracciones
involuntarias en la vagina y ello dificulta el acto sexual o impide su realización. Ello tiene
también un componente psíquico asociado a todo lo expresado antes, a lo que se puede
agregar el miedo al embarazo, el temor a ser controlada por un hombre, o el temor a tener
dolor durante el coito. Ayúdela a regocijarse con su sexualidad.
La mujer sabe que no somos perfectos, pero espera de nosotros amor y respeto, así como
una total comprensión y apoyo para recuperar la excitación, de poder hacerlo. También
espera ayuda para vencer cualquier situación desfavorable de salud que surja y afecte su
sexualidad. Es bueno saber que el orgasmo y la satisfacción de las mujeres, al igual que en
los hombres, no es igual en todas las ocasiones.
Debemos respetar sus deseos, ser muy pacientes y demostrar solidaridad y madurez en los
malos momentos. Estar a su lado el mayor tiempo posible. No se trata de estar minutos a su
lado, darle un beso, decirle “te amo” y salir de la casa.
Ellas reclaman un trato similar al que nos brindan cuando alguna vez hemos presentado
dificultad en la erección o cuando tenemos algún problema de nuestra salud que nos impide
hacer el amor.
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6. - Tenga salud sexual
6.5-
79
La mujer embarazada y el post parto
Es imposible generalizar sobre el deseo sexual en la mujer durante el embarazo, a causa del
carácter individual y personal de la sexualidad humana; sin embargo, está demostrado que
la mayoría de las mujeres continúan experimentando deseos y necesidades sexuales durante
la gestación.
Durante una gestación normal se puede mantener la actividad sexual habitual (siempre que
no existan evidencias de infección genital u otra complicación) sin temor a que se produzca
algún daño fetal, por lo que debe evitarse cuando exista amenaza de aborto o parto pretérmino. Es recomendable utilizar protección (condón) u otras variantes de sexo seguro para
evitar infecciones.
Son muchos los factores, aparte de los biológicos propios de la gestación, que se ponen en
juego para determinar tipos de conducta sexual durante el embarazo. La conducta de la
mujer ante la maternidad, la calidad y/o ausencia de la pareja, el nivel cultural y sus
expectativas, así como otras condiciones individuales ejercen considerable presión sobre la
conducta sexual.
En torno a este tema tan polémico, varios autores concluyen diciendo que estamos
empezando a aprender cómo las parejas normales y sanas responden en sus vidas personales
a este hecho. Al superar los viejos tabúes, se han ido esclareciendo temores ancestrales. El
embarazo, como también la sexualidad, puede convertirse en una parte de la vida llena de
gozo y satisfacción.
¿Y luego del parto qué? Sucede que muchas mujeres presentan depresión o sufren por el
estrés de la crianza de su hijo y pierden el “deseo”. Ello hace que deba transcurrir un
prudente período de tiempo (pocos o muchos meses) para que pueda retornar a la
normalidad en su erotismo.
En algunas parejas, esta situación pudiera llegar a ser tan grave que se convierte en causa de
disgustos y de separaciones. Debemos estar alertas a este problema y lejos de reprochar a
nuestra mujer, ayudarla a que vuelva a ser nuestra amada sensual.
6.6-
Cuando ya no somos jóvenes
No es lo mismo la sexualidad a los 18 años que a los 70... Cuando uno entra en edades que
superan los 50 años, debe resolver el dilema de que “casi” hace el amor todos los días:
“casi” el lunes, “casi” el martes, “casi” el miércoles…
Las publicaciones médicas afirman que un hombre o una mujer con salud física y psíquica
entre 50 y 70 años o, incluso, a edades más avanzadas, pueden mantener un aceptable nivel
de actividad sexual. En muchos aspectos los cambios que tienen lugar en la mujer madura
son muy similares al hombre; por ejemplo: la excitación es más lenta. La lubricación es
menos abundante que en la joven. Sin embargo, la hinchazón del clítoris durante el acto
sexual se mantiene de manera similar a las mujeres de menos edad. Podemos decir que a
pesar del tiempo, el orgasmo y la sensación de placer se mantienen, sin imponer un límite a
la sexualidad femenina.
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6. - Tenga salud sexual
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En el caso de los hombres, para lograr la erección del pene se necesita más tiempo y más
estimulación directa, las erecciones son menos firmes que cuando eran más jóvenes, se
reduce la cantidad de semen y disminuye la intensidad de la eyaculación. Pero se logra
realizar el acto sexual sin dificultades y es posible alcanzar la satisfacción de ambos.
Muchos hombres de edad gozan del sexo aunque no siempre eyaculen, pero si la compañera
no comprende que se trata de un proceso fisiológico subyacente, puede llegar a pensar que
él ha perdido la excitación, que ella carece de atractivo o que le falta destreza como amante.
Algo que debemos tener en cuenta es que la mujer, cuando se aproxima a los 50 años puede
comenzar a presentar un determinado clima de inseguridad, tristeza o angustia. Son
síntomas de la menopausia. Esta situación se acentúa con problemas de salud, la pérdida de
seres queridos, inexistencia de hijos o alejamiento de ellos. También por el estrés de las
responsabilidades familiares y laborales. Muchas veces no tiene tiempo para el juego
sexual. El cansancio y tensiones acumuladas y la falta de ilusión o de emoción también
provocan poco interés por el sexo. Se acentúa el temor a que se produzca la ruptura de la
relación de pareja por estar ella en desventaja desde el aspecto de la belleza física en
relación a las más jóvenes. Como resultado de lo anterior, ella tiene manifestaciones de
insatisfacción, resentimiento, deseos de complacer a otros y no a ella misma, etc.
Debemos comunicarnos con ella, sobre todo escucharla. Es importante brindarle
comprensión, amor y ternura, estimularla a que esos sentimientos y temores desaparezcan,
ayudarla a elevar su autoestima. Es en esta etapa cuando más deben coincidir los
pensamientos de ambos.
También debemos ayudarla a encontrar actividades diarias que la saquen de la rutina y del
aburrimiento y enriquezcan su intelecto. En esa época, una hora de paseo tiene un valor
especial.
6.7-
¿Qué amenaza a mi salud sexual?
Según la OMS, actualmente más de 170 millones de personas en el planeta padecen de
diabetes. La diabetes es un camino directo hacia la disfunción sexual.
Es importante aprender cómo prevenirla y si la padece debe recibir tratamiento médico
cuanto antes. Algo parecido sucede con la obesidad.
Fumar cigarrillos es muy dañino para la salud y afecta la correcta erección del pene. A los
fumadores, se les obstruyen las arterias y venas de forma gradual. Debido a ello, la
irrigación sanguínea al cerebro, al clítoris y al pene resulta inadecuada y se bloquean los
nervios sensitivos del sistema uréter-urinario.
El cigarrillo hace daño también a la boca, es uno de los factores de riesgo del cáncer,
mancha los dientes y provoca un aliento desagradable, del que no se percata el fumador.
Incide en la aparición de otras graves enfermedades cardiovasculares, la hipertensión
arterial y la aterosclerosis.
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Si usted fuma, es por tanto vital que deje el cigarrillo cuanto antes y “de una vez por todas”,
a fin de reducir el riesgo de estos procesos negativos que inciden directamente en su salud
sexual.
El café, cuando supera las seis tazas diarias, afecta el sistema nervioso. Por ser altamente
irritante, debe evitarse su consumo desmedido. Los nervios sensitivos antes citados se
bloquean, de manera similar a cuando se fuma.
¿La ingestión de bebidas alcohólicas mejora la sexualidad? No. Contrario a lo que algunos
piensan, el alcohol no mejora la sexualidad, pues interfiere con los centros del sistema
nervioso y endocrino que regulan la respuesta sexual y la producción y acción de algunas
hormonas. También favorece la aparición de la disfunción sexual y la incapacidad para
experimentar el orgasmo.
Existen muchas drogas que provocan adicción y daños terribles al organismo. Evite
probarlas “sólo una vez”. Si cae en ese vacío, será desastroso para su salud y para su vida de
pareja.
En el mundo actual, existe otra gran amenaza a la salud sexual: el estrés. Para vencerlo y
mantener una buena relación de pareja, se recomienda la alegría, el buen humor, el
optimismo, la paz y el entusiasmo. Una buena opción es bailar con quien amas, es ocasión
propicia para sentirse mutuamente, acariciarse, tocarse, apretarse… Es excelente cantar
juntos y seguir a dúo la letra, a toda voz.
Leí una vez que ante una situación tensa aparece el impacto del estrés. El problema no es el
estrés en sí, sino continuar viviendo con el estrés, sin que sepamos decirle “good bye”.
Mi amigo, Nibaldo Hernández, Doctor en Medicina y Profesor Titular de Fisiología, ha
estudiado por muchos años las respuestas ante la sonrisa o la risa.
Nibaldo afirma:
Cuando uno está de buen humor, mejora la defensa inmune, combatimos las
hormonas que intervienen en el proceso de estrés, la presión arterial se
normaliza, y se genera la producción de la hormona llamada endorfina, que
ayuda a tener una sensación de bienestar.
Cuando tenemos pensamientos positivos, todo resulta muy favorable a nuestro
cuerpo. Pero cuando estamos agobiados o tenemos pensamientos negativos, la
ira se adueña de nosotros, crecen los sentimientos de envidia, se crean en
nuestro organismo sustancias que son dañinas para la salud.
He encontrado en algunos textos que existe una relación entre el resentimiento y el cáncer.
Quizás, por haber leído esa aseveración he observado a varias personas que se pasaron la
vida hablando mal de los demás, criticando todo, sintiéndose perseguidos sin razón o
molestos por los logros de los demás, pronosticando un futuro pesimista y al final han
fallecido a causa de esta penosa enfermedad.
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También he leído que las personas que saben perdonar adquieren una enorme protección
contra ese mal y contra muchas enfermedades, entre ellas las mentales.
Gerald Jampolsky opina que perdonar es soltar el pasado. También este autor considera
que:
Perdonar no significa asumir una posición de superioridad y tolerar una
conducta en la otra persona que no nos gusta. Perdonar significa corregir
nuestra equivocada interpretación de que la otra persona nos ha hecho daño.
La mente que no perdona está llena de confusión, temor, es rígida, ve el
pasado y el futuro como lo mismo y se resiste al cambio, se ve a sí mismo
como inocente y a los demás culpables. Se alimenta del conflicto…
Le recomiendo que cada vez que tenga un pensamiento negativo, lo elimine enseguida y lo
sustituya por uno positivo. Si toma esa sugerencia como un hábito, notará los maravillosos
resultados y una mejoría de su salud en muy breve plazo. Recuerde que la mente es el
órgano más poderoso que tenemos. Es capaz de “todo”.
Otro elemento importante para vencer al estrés consiste en mantener la actividad física por
varios minutos al día, algunas veces a la semana.
Expertos de todas partes recomiendan dormir lo necesario acorde a las necesidades de cada
persona. Para contrarrestar el estrés y el cansancio físico intento dormir no menos de seis
horas diarias y cada vez que puedo descanso ocho o más horas.
Cuando me siento agotado por excesivo trabajo intelectual dejo todo a un lado y me acuesto
a dormir un rato. El cuerpo agradece esa pequeña atención.
Si deseamos disminuir el estrés, nada mejor que estar en contacto con la Naturaleza,
bañarse en el mar, cambiar de actividad y salir a caminar. Si se le presenta la oportunidad,
experimente caminar por la arena de una playa en horas bien tempranas. Disfrutará de un
espectáculo beneficioso en todo sentido.
Es que el amanecer es algo espectacular, nace el día y todo es energía y fuerza. El atardecer
también es bello, pero aunque se tiña de rojo, no lleva la energía del nacimiento, sino la
promesa de “llegará en pocas horas”.
La Naturaleza también nos ofrece productos para aliviar la depresión y el estrés.
En una ocasión, el profesor Robinson me sugirió ingerir dos plátanos fruta al levantarme y
luego dos cucharadas de semillas de ajonjolí. Buscando con qué acompañar a esas
semillitas descubrí que el yogurt de soya, el ajonjolí y un poco de miel hacen una
combinación estupenda. ¡Se la recomiendo!
Al inicio del libro mencionaba que para la mujer el estrés de la vida diaria se acentúa al
sumarse a todos los problemas del estudio, del trabajo y de la vida diaria, las tareas del
hogar y de la maternidad, y ello influye mucho en la falta de deseo sexual. Sugiero
compartir con ella las tareas del hogar y apoyarla en todo lo que esté a nuestro alcance. Al
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final de la jornada su estrés será menor, sus besos serán más cálidos y las caricias más
ardientes.
Las técnicas de meditación, o por lo menos, poner la mente en blanco y relajarse ayudan
mucho. Si usted dispone de algún tiempo, sea hombre o mujer, intente practicar Qi Gong,
Tai Chi o Yoga. Mi amiga Alicia me cuenta que ella no creía es tales beneficios, pero hizo
la prueba. Ahora siempre me dice lo bien que se siente.
Bedelia y yo recibimos cursos de curación bioenergética. Se trata de utilizar la energía de
fuerza vital (prana en sánscrito, Qi o Chi en el idioma chino, Ki en japonés). Lo aplicamos
de manera habitual y ha sido muy efectivo, pues podemos ayudarnos canalizándonos
energía cada vez que uno de los dos lo necesita. A veces uno se siente predispuesto por
desarmonía energética que puede ser resuelta en minutos, colocando las manos lugares
clave.
6.8-
Cómo protegerse de las ITS
Las infecciones de transmisión sexual (ITS), en especial el VIH, están muy relacionadas
con el comportamiento humano y vale la pena subrayar el carácter mundial de este
fenómeno.
Desde la antigüedad han existido enfermedades relacionadas con la sexualidad; sin
embargo, en nuestros días se presenta un incremento en éstas, debido a que existe una
entrada más temprana a la vida sexual activa, la libertad sexual es cada vez mayor y crecen
la comercialización del sexo, su industria y turismo.
En este apartado sólo deseo llamar su atención sobre la importancia de protegerse para
evitar contagiarse o contagiar a otra persona. Muchas ITS no causan síntomas y sólo
constituyen puertas de entrada y salida para otras infecciones, como la producida por el
VIH. Aunque no observe síntomas, esa infección puede ser transmitida.
Estas enfermedades afectan a hombres y mujeres de cualquier edad y de todos los orígenes
y niveles económicos. Conozco una pareja que decide separarse. Tenían dos hijos
pequeños. Como todo el mundo, cada parte buscó nuevas relaciones. Ella encontró una que
le pareció bien, pero ese hombre no sabía que tenía el VIH y la contagió. Ella murió, los
hijos aún eran pequeños…
Algunas ITS son curables. Otras lo son si se tratan en las primeras etapas. Otras no se
curan. Pero todas son prevenibles. A continuación hago una breve referencia a algunas de
las ITS, para que se tome conciencia de lo graves que pueden resultar:
El chancroide o chancro blando. Sin tratar suele provocar úlceras en los genitales y fístulas
en la uretra. A veces, las úlceras persisten durante semanas o meses y pueden llegar a
requerir cirugía.
La gonorrea. Cuando la gonorrea no es tratada, puede provocar problemas graves y
permanentes de salud tanto en hombres como en mujeres. La gonorrea puede propagarse
a la sangre y a las articulaciones. Esta afección puede ser potencialmente mortal.
Además, las personas con gonorrea pueden fácilmente infectarse con el VIH, el virus
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que causa el Sida. Las personas infectadas con VIH que tienen gonorrea tienen más
probabilidad de transmitir el VIH a otra persona.
Granuloma inguinal, también conocida como donovanosis. La enfermedad se disemina
sobre todo a través de la relación sexual vaginal o anal. Aproximadamente el 50% de los
hombres y mujeres infectados tienen lesiones en el área anal. Se presentan
protuberancias carnosas, rojas y pequeñas en los genitales o en el área perianal. La
enfermedad se disemina lentamente y destruye el tejido genital.
Hepatitis B. Se transmite por contacto con sangre, semen u otro líquido de una persona
infectada. La hepatitis hace que el hígado se inflame y deje de funcionar correctamente.
Linfogranuloma. La enfermedad comienza como una úlcera indolora en los órganos
genitales masculinos o en el tracto genital femenino. A medida que la bacteria se
disemina, los ganglios linfáticos en el área se inflaman y se tornan sensibles. La piel
alrededor del área a menudo es roja.
Sífilis. Esta enfermedad pasa de una persona a otra a través del contacto directo con una
úlcera o chancro sifilítico. La transmisión se da principalmente a partir de personas que
no saben que están infectadas. Las lesiones internas pueden aparecer muchos años más
tarde. Entre los signos y síntomas de la fase terciaria de la sífilis se encuentran la
dificultad para coordinar los movimientos musculares, parálisis, entumecimiento,
ceguera gradual y demencia. Estas lesiones pueden ser lo suficientemente graves como
para producir la muerte.
Esta es una muy pequeña muestra. Existen otras ITS como Virus del Papiloma Humano
(principal causa de muerte por cáncer cérvico uterino en México), Candidiasis Vaginosis
Bacteriana, Herpes Simple, Condiloma, Clamidia (algunos de sus serotipos se consideran
enfermedades de transmisión sexual, por ejemplo: el Manual Merck expresa que el C.
Trachomatis es una enfermedad de transmisión sexual bastante difundida en Estados
Unidos)… ¡Todas son tan dañinas!
VIH/Sida. En toda relación sexual, con un portador del VIH existe riesgo de contagio a
través de la penetración vaginal, anal y el sexo oral desprotegido. Para evitar el contagio
de estas enfermedades, y en especial el VIH, se practica el sexo seguro. Sexo seguro es
cualquier práctica sexual donde no se permita que el semen, la sangre o los fluidos
vaginales de una persona entren en el cuerpo de otra. partes del cuerpo donde existe más
riesgo de que el VIH penetre a la corriente sanguínea son el ano y el recto, la vagina, el
pene. Son zonas menos riesgosas la boca y los ojos. Hay que proteger estas partes del
contacto con los fluidos infectados por el VIH. El VIH no puede transmitirse a través de
la piel, a menos que haya llagas o cortadas sangrantes.
Cada vez que una persona tiene una actividad sexual, está escogiendo, de manera
consciente o inconsciente, el nivel de riesgo con el que se siente cómoda en ese momento.
La práctica del sexo seguro puede ser placentera porque ambos tienen menos
preocupaciones, incomodidad y temor al riesgo de contraer alguna enfermedad. Entre los
medios disponibles para la práctica del sexo seguro, el más usado es el condón. Existe otro
para la protección cuando hay sexo oral.
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En este texto no puedo decirle quiénes de los que están a su
alrededor están contagiados. Son millones de personas de todo el
mundo los que han adquirido alguna de estas enfermedades.
¿Podrá usted saberlo? ¿Sigue pensando en sexo sin protección?
En relación a las medidas de protección contra las ITS, quizás pensemos que el grupo más
vulnerable de infección son aquellas personas que tienen encuentros eróticos ocasionales. Y
que quienes estamos casados o que mantenemos una relación estable, logramos escapar a
esa grave situación. ¿Qué cree usted?
Pues le informo que en el primer grupo, por el desconocimiento mutuo o por la
desconfianza lógica, se usa el condón con bastante frecuencia. Sin embargo, en el segundo
grupo, son las señoras conservadoras, fieles, casadas, decentes, leales, amas de casa que se
entregan en cuerpo y alma a la pareja y a la familia, las que ahora abren los ojos a esta
realidad, pero que lo hacen justo cuando descubren que tienen una infección. ¡Cuidémoslas!
Es por ello importante que nunca olvidemos el riesgo que se corre en cada encuentro
erótico, sea éste el primero, el número 20 o el 1000, no importa que sea con la persona más
promiscua o con alguien que tuvo su primera relación sexual el día anterior.
Es curioso que cuando sabemos que hay un restaurante donde no se cumplen las normas de
higiene establecidas, no se nos ocurre ir a comer allí. Sin embargo en el caso del tema
erótico, a veces cometemos locuras.
Entonces, la clave No. 6 es:
Cuídense del estrés, realicen ejercicios físicos y eviten las drogas,
fumar y beber alcohol. Consuman vegetales y alimentos sanos. Si su
pareja presenta alguna disfunción sexual, ayúdela a superarla
brindándole comprensión, amor y ternura. Protéjase usted mismo y
proteja a su pareja de las infecciones de transmisión sexual.
Es importante disfrutar con nuestra pareja en un ambiente armónico y de privacidad. No le
reste importancia a este vital aspecto. Veamos los detalles en el capítulo que sigue.
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CAPÍTULO 7
7-
Ocúpese de su nido
Hay un secreto para vivir con la persona
amada: no pretender modificarla.
Jacques Chardone
Es importante escoger el sitio adecuado para la intimidad de la pareja y tiene enorme
influencia en el éxito de una relación sexual. Un espacio con poca privacidad, ruidoso,
cerca de otras personas será un mal lugar para establecer el nido de amor y quizás
contribuya a que la relación sexual sea un fracaso.
Cuando uno es joven no piensa tanto en eso. Recuerdo que teniendo 18 años me encontraba
en una fiesta en el lujoso Hotel Nacional de La Habana, donde conquisté a una muchacha.
Nos dirigimos al jardín cercano; comenzamos a besarnos y acariciarnos. La temperatura
subía y cuando comenzábamos a hacer el amor, de pie, detrás de unos arbustos, llegó un
guardia del hotel y bruscamente nos gritó: — ¡¿Qué hacen ustedes ahí?!
Mi amigo Manuel me contaba que, contando con 25 años de edad, se dirigió con una
muchacha al Bosque de La Habana, próximo al Río Almendares. En la época, ese sitio era
empleado por muchas parejas para establecer relaciones sexuales. Era gratis y no había que
hacer cola en posadas. La muchacha se acostó desnuda sobre la hierba y él la acariciaba, la
besaba y comenzaba a penetrarla. Entonces, ella comenzó a dar unos gritos tremendos y
Manuel se sentía muy hombre escuchando esos gemidos, hasta el momento en que ella se
levantó y le dijo: — ¡estoy encima de un hormiguero!
7.1-
Importancia de la privacidad
Para que la relación sexual sea exitosa, es importante que se desenvuelva en un ambiente de
privacidad.
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7. - Ocúpese de su nido
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La mujer es más sensible que el hombre en este aspecto y por tanto, si deseamos que
alcance el orgasmo y disfrute la relación, debemos resolver algunos problemas en nuestra
habitación.
Debe escogerse un sitio, totalmente independiente, donde estemos seguros de que en la
habitación contigua no se escuchen palabras, ruidos de la cama o algún gemido en el
momento de clímax de la realización del acto sexual.
Muchas veces resulta imposible a la pareja contar con ese “nido de amor” y sucede que la
mujer no puede experimentar el orgasmo, quedando disgustada o deprimida.
También, cuando uno o varios hijos duermen en la propia habitación, se reprime la
actividad sexual. La pareja, sin saberlo, se disocia al estar vigilantes para que no les
escuchen.
Debe realizar el acto sexual en un sitio donde la pareja no corra el riesgo de ser descubierta,
como me sucedió a mí en los jardines del Hotel Nacional. Al contar con la necesaria
privacidad, se eliminan frustraciones del acto sexual y la mujer, sobre todo, va a poder
experimentar el orgasmo como nunca antes.
7.2-
Arreglando la habitación
No es sólo contar con el sitio ideal para el logro de la unión amorosa; se necesita
complementarlo con detalles, como son: la atmósfera de la habitación, la iluminación tenue,
los muebles, la temperatura, el color de las paredes…
Los chinos han prestado gran atención al entorno en que vivimos desde miles de años atrás.
Un ejemplo de ello es el Feng Shui, el cual es tan antiguo como la acupuntura.
Feng Shui, que se traduce como “viento y agua”, es un sistema ancestral de estética chino
que pretende utilizar las leyes del Cielo (astronomía) y de la Tierra (geografía) para mejorar
la vida, es un arte que busca armonizar los flujos de energía de nuestro entorno, buscando
salud, felicidad y abundancia. Hablando en términos de mi especialidad, es una manera
apasionante de protegernos contra el estrés electromagnético.
La doctrina del Feng Shui se basa en la existencia de un aliento vital, Qi o Chi cuyo flujo se
ve modificado por la forma y disposición del espacio, las orientaciones (puntos cardinales)
y los cambios temporales. Algunas escuelas de Feng Shui ponen el énfasis en el estudio de
las formas: las montañas, los ríos, la estructura de la vivienda o lugar de trabajo, la
ubicación de un cuarto, etc.
Aunque esto pudiera resultar increíble para muchos, muchas universidades del mundo
toman en cuenta estos consejos en sus cursos de arquitectura y se han construido modernos
edificios aplicando esos principios. ¿Nunca ha visto la foto del Banco de Hong Kong? Se
trata de un imponente rascacielos.
Otro ejemplo: el Metro de Singapur. Se utilizó una antigua brújula de Feng Shui para
decidir acerca de la mejor manera de trazar las líneas, a fin de afectar al mínimo el entorno.
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7. - Ocúpese de su nido
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Le recomiendo lea libros sobre estos temas. Descubrirá cuestiones muy interesantes. Hay
personas que se han curado de una enfermedad crónica con sólo cambiar de sitio los
muebles y la orientación de su cama.
Existen varias escuelas de Feng Shui, a veces se presentan contradicciones entre lo que
plantea una escuela y otra. En ese caso aconsejo que ustedes como pareja apliquen la
intuición y decidan qué les conviene más.
Lo que sigue es una vivencia mía:
Hace como 7 años, estuve en un restaurante del Barrio Chino de La Habana,
pues iba a entregar a Consuelo, la dueña, unas tarjetas de presentación que le
había diseñado. Ella, amablemente me brindó una cerveza. Mientras la
tomaba observé todo a mi alrededor y anoté todo lo que me parecía que
estaba mal desde el punto de vista del Feng Shui. Ya había llenado de
anotaciones una servilleta cuando ella regresó a mi mesa. Al leerle mis notas
y explicarle detalles, me confesó que las ventas estaban muy bajas, y que
observaba cómo todos los clientes iban para el restaurante que estaba a pocos
metros del suyo. Me despedí y me fui, dejándole la servilleta. Pocos meses
después, me llamó emocionada para decirme que había hecho todo lo que yo
le había sugerido y que ahora su restaurante estaba repleto. Así surgió una
nueva amistad.
A continuación refiero algunos consejos generales que he experimentado por años.
Recomiendo que profundice en este tema buscando otras fuentes de información y que
analice su casa integralmente, así como el entorno en que se encuentra, para un mejor
resultado.
Por razones obvias, en este capítulo centraré la atención en la habitación. Para la relación de
pareja, el Feng Shui puede ayudar creando un ambiente de armonía entre las personas y la
habitación.
Tenga en cuenta que cada miembro de la pareja tiene su propia manera de ser, puede ser
que uno sea muy apasionado y el otro de carácter apacible. A veces, lo que a uno le viene
bien al otro le hace mal. Por tanto, no tome estos consejos como algo absoluto.
Algunos consejos básicos que pudiera comenzar a aplicar son los siguientes:
Su habitación es el sitio más privado de la casa. Es el espacio donde la pareja está la mayor
parte de su tiempo íntimo. Es un reflejo de ustedes. Cualquier persona no debería entrar a
este escenario. Sólo aquellos que ustedes inviten.
¿Es la última parte de la casa que ustedes decoran? Si es así, también se están dejando de
últimos en la vida. Si desean ser tratados con respeto, entonces deberían atender a su
habitación, pues ésta los representa.
La habitación debería estar situada en la parte trasera de la casa, la ubicación ideal es al
fondo y a la derecha mirando desde la puerta principal de la casa. Esta es conocida como el
área de las relaciones, y la energía en esa área es más suave y más femenina.
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7. - Ocúpese de su nido
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Su cuarto debe tener una atmósfera de seguridad, candor y cuidado.
Asegúrense de que no haya desorden, miren a su closet y desháganse de ropas, zapatos
entre otras cosas que tengan allí sin uso.
Este no es el sitio para almacenar libros, ni lo es para tener una oficina. De ser así, su sueño
será intranquilo, pues el subconsciente estará pensando en temas de trabajo.
El sitio perfecto para la cama es opuesto en diagonal con la puerta de la habitación y
debería tener la cabecera de madera recostada a una pared. Si no lo hacen así, pudieran
sentirse inseguros.
Nunca coloquen su cama de forma que los pies estén apuntando directamente a la puerta.
Esa posición les irá sacando todas sus energías y pudiera provocar constantes discusiones.
Si la cama está muy cerca de la puerta, entonces estarán al tanto de lo que ocurre afuera y
ello va a molestar su sueño y debilitar su salud.
La habitación debe ser rectangular o cuadrada. No deben existir vigas o estantes sobre la
cama, las cuales crean una división y crean problemas de comunicación graves a la pareja
afectando la salud.
Asegúrese de que ningún mueble tenga una esquina apuntando hacia ustedes.
Cuidado con los espejos en la habitación. Si tienen alguno, debe ser redondo u ovalado y
estando acostados no deben verse en él. Si no tienen otro sitio para el espejo, tápenlo con
una cortina cuando no lo estén utilizando.
La habitación debería estar pintada de color rosado, rojo, púrpura, amarillo, naranja,
lavanda, melocotón, terracota o crema, con vistas a atraer estabilidad y seguridad en la
relación sentimental. El azul y negro se pueden usar sólo en pocas cantidades. Los tonos
grises, el dorado y plateado deben usarse con precaución, pues reducen la energía femenina.
El techo debería llevar un color de la misma paleta que las paredes o más claro. Techos
oscuros absorben su energía y almacenan energía estática.
Es saludable colocar dos plantas en la habitación, con vistas a refrescar la atmósfera y otros
efectos positivos (recuerde colocarla cerca de una ventana para evitar respirar el anhídrido
carbónico). En la propia ventana pudiera colgar un cristal facetado o esférico para brindar
pasión a su relación.
Si la pasión es baja, utilice además dos velas rojas y coloque algo con tonos de verde.
También coloque piedras y cuarzos redondeados.
Es favorable ubicar fotos donde usted aparezca junto a su pareja, felices y sonriendo.
Para crear un ambiente de suavidad se debería usar cortinas.
No tenga televisor, computadora u otros equipos electrónicos en la habitación. Si no tiene
otra alternativa cúbralos.
La puerta debe poder abrir completamente. No coloquen objetos que obstruyan esa apertura,
ya que disminuye las energías positivas que recibirán.
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7. - Ocúpese de su nido
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Las mesas de noche deben ser a ambos lados de la cama. Ninguno de los integrantes de la
pareja debería estar pegado a la pared.
No sature su habitación de objetos de todo tipo, adornos, cuadros, mesas, etc., pues ello se
refleja en agotamiento, que limita la actividad sexual de la pareja.
Entonces, la clave No. 7 es:
Busquen armonía con el ambiente en su hogar y en su habitación.
Tengan presente que es importante mantener privacidad.
A continuación le muestro resumidas las siete claves para tener éxito en el amor. Recuerde
que las redacté en plural, pues deben ser tomadas en cuenta por ambos miembros de la
pareja.
La Habana : Editorial Universitaria, 2011. -- ISBN 978-959-16-1361-5
Resumen de las siete claves para tener éxito en el amor
1. Prioricen el amor
2. Conquístense todos los días
3. Satisfáganse mutuamente
4. Aprendan a vivir juntos
5. Rectifiquen a tiempo sus errores
6. Cuiden su salud sexual
7. Tengan armonía en su habitación
Epílogo
¡El secreto para ser feliz con alguien es simplemente saber relacionarse!
Mantener una relación de pareja estable es tarea de expertos. ¿Deseamos obtener resultados
favorables en nuestra relación? Será difícil lograrlo al azar. ¡Y qué triste es andar solos! Si
tomamos en cuenta lo que recomiendan quienes han estudiado al ser humano y lo hacemos
con constancia y pasión, disfrutaremos de una maravillosa relación.
Mi interés al escribir este pequeño libro es que usted tome conciencia de que el amor y la
relación de pareja son hermosos y difíciles a la vez. Hay que actuar con generosidad,
inteligencia y constancia.
Para sacar el máximo provecho a su contenido, es importante que tome conciencia de todos
los aspectos tratados, y que nunca olvide que mantener una relación amorosa y feliz es tarea
de todos los días y horas.
Para algunas personas será muy fácil la rápida asimilación de los principios y sugerencias
que aquí expongo. Para otras ello será más lento. Sea paciente y tómese el tiempo necesario
acorde a su necesidad. Vaya paso a paso. En la vida muy poco se logra de una vez.
En todo momento ambos miembros de la pareja deben mantener vivo y renovado el
romance que tan bien comenzó tiempos atrás, quizás desde la adolescencia, compartir y
disfrutar los momentos en que estén juntos, la crianza de los hijos, si los tuvieran, y su
educación. Buscar siempre armonía y comprensión mutua, solidaridad, paz y ternura. La
vida tiene que ser así: amorosa y romántica. Todo pudiera resumirse en una sola frase:
“No soltarse de las manos jamás”
Mensaje a Bedelia
Bede: hoy cumplimos 38 años de unión. Por mi mente pasan los recuerdos de aquel día, tan
caluroso como hoy. Estábamos desde temprano observando los preparativos para la boda.
Era toda tu familia disfrutando aquello, algo indescriptible e inolvidable. Todos trabajaban
hasta lograr el más mínimo detalle, los tanques de bebidas, las cervezas, los cerdos y
carneros asados, las mesas en el patio adornadas con hojas de palmas, los invitados, la
música, el abogado…
Ninguno de los asistentes podía imaginarse, ni nosotros mismos, que esa unión que iba a
producirse a las 5 p.m., iba a ser tan profunda. Aunque debo confesarte que mi yo interno
me lo hacía saber, pues desde el momento en que te conocí supe que había encontrado un
diamante, y yo trataría de hacerme digno de tanto esplendor.
Mi amor, cada nuevo aniversario juntos resulta conmovedor. Nunca dejo de pensar lo feliz
que he sido a tu lado. Siempre te he admirado y me he sentido orgulloso. Quiero darte las
gracias por tu amor, por tu dedicación de cuerpo y alma a nuestra relación, por haber sido
siempre la reina de este hogar.
A lo largo de estos años me has enseñado a ser mejor esposo y amante. Todavía, cada vez
que paso por el edificio donde vivías, rememoro el inicio de nuestra relación, nuestros
encuentros noche tras noche.
Hoy observamos orgullosos a nuestros estupendos hijos y nueras y pensamos: “¡Si ellos
pudieran sentir la felicidad y paz que hemos disfrutado nosotros en estos casi 40 años!”.
Siempre unidos, buscando puntos de vista comunes, hemos podido vencer todos los
obstáculos y hemos llegado hasta hoy. Ha triunfado nuestro amor, el que juramos aquel 21
de julio de 1973.
Bede, te seguiré amando toda la vida.
Tuyo siempre,
Jorge Pareta
21 de julio de 2011.
Lecturas recomendadas
Bucay, J., Salinas, S., Amarse con los ojos abiertos. Buenos Aires.
Byrne, R. El Secreto.
Carnegie, D., Cómo ganar amigos e influir sobre las personas. Ed. Sudamericana, Buenos
Aires, 1993.
Chopra, D., Las siete leyes espirituales del éxito. Ed. Edaf, Madrid, 1996.
Chopra, D., El libro de los Secretos.
Chopra, D., Sincrodestino. 2003.
Coelho, P., A orillas del río Piedra me senté y lloré. Ed.Grijalbo, México, 2003.
Coelho, P., El Alquimista.
Covey, S R., Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva. Ed. Paidos Mexicana S. A.,
México, 2002.
Cuauhtémoc, C., La última oportunidad. Ediciones Selectas Diamante, México, 1995.
Dyer, W. W., 10 secretos para el éxito y la paz interna. Ed. Random House Mondadori,
Barcelona, 2004.
Jampolsky, G., Love is Letting Go of Fear (Amar es liberarse del temor). Ed. Council Oak
Books, 2004.
Kingston, K., L´harmonie de la maison par le Feng Shui. Ed. J´ai lu., Paris, 2006.
Leonard, B., Pareta F. J., Pareta R. J., Los Pollos No Vuelan Fritos. Ed. Lulu. USA, 2009.
Melchizedek, D., El Antiguo Secreto de la Flor de la Vida. www.drunvalo.net
Pareta, J., El Poder Invisible de Curar. Ed. Lulu, USA, 2007.
Redfield, J., La nueva visión espiritual. 1997.
Redfield, J. Adrienne, C., La Novena Revelación. 1995.
Robinson, J. L., Dios bendice mis hierbas. Cuba, 2008.
Rosenkranz, L. J., Actitud constructiva ante la vida. Los Angeles, USA, 1937.
Sánchez, E., Volar en Otras Alas. México, 2008.
Schnabl, S., El hombre y la mujer en la intimidad. Ed. Científico-Técnica, Cuba, 1978.
Shurety, S., Feng Shui in the Bedroom. New Age Journal, December 1998.
Sayve, de, C. y Coudurier, A., Descubre tu pasado, sana tu presente. Ed. Alamah, México,
2001.
Stekel, W., La mujer frígida. Ed. Imán, Buenos Aires, 1951.
Zettnersan, C. Los secretos de la sexualidad taoísta. Ed. Edaf, Madrid.
Testimonios
Nada une más a la pareja que afrontar juntos
las dificultades. Los demás pueden ayudar,
pero no hacer suyo el problema.
Alicia y Tony
Amigo Pareta, he terminado de leer tu libro y aprecio en él la sabiduría que llevas en tu ser.
Desdichadamente, lo he recibido al llegar a mis 35 años, luego de haber pasado por
situaciones difíciles en mis dos matrimonios, uno que duró dos años y el otro diez. Incluiré
tus enseñanzas en el libro de mi vida, intentando encontrar plenitud y felicidad de ahora en
adelante. Un abrazo y gracias por dedicar tu tiempo a esta obra que contribuye, sin dudas, al
mejoramiento humano.
Orlando Álvarez, Ingeniero, La Habana, Cuba.
Jorge, este libro es excelente. Lograste abarcar todos los temas con refinada simpatía y con
la dosis exacta de instrucción, atrapando al lector de manera muy amena en una involuntaria
reflexión. Te confieso que aprendí y me divertí muchísimo leyéndolo, y lo volveré a leer.
Este material nos ayuda a ser mejores seres humanos y a entender y atender un montón de
temas del día a día que a veces pasamos por alto. Coincido contigo en que es clave del éxito
la correcta selección de la pareja. Gracias por contribuir con esta obra a que las mujeres
seamos más comprendidas por los hombres. Un abrazo.
Mireya Fariñas, Gerente Comercial, La Habana, Cuba.
Este es un buen libro, lúcido e instructivo que merece ser leído y analizado con
detenimiento.
Luis Carlos García, Técnico en Finanzas, La Habana, Cuba.
Hola Jorge, te comento que terminé de leer tu libro, y déjame decirte que es un texto
maravilloso. Sólo te puedo decir una frase: SI LO HUBIERA LEÍDO MUCHO ANTES
QUIZÁS NO HUBIERA PASADO POR TANTOS DOLORES, pero en fin hoy soy
inmensamente feliz al lado de mi esposa y me he dado cuenta que hay muchas cosas que no
conocía o había olvidado. Lo estoy poniendo en práctica porque quiero ser un esposo y
padre excelentes... Deseo felicitarte por el contenido tan hermoso, se ve que has vivido
muchas experiencias buenas y malas... este libro es un instrumento de sanación del alma y
la felicidad en pareja. Saludos,
Gerardo Gavidia, Empresario, Lima, Perú.
Jorge: Al leer tu libro he quedado impresionado acerca de la sabiduría que encierra. De
inmediato comencé a aplicar en mi persona y en mi hogar tus consejos y los resultados son
estupendos. Me gustan tus puntos de vista como cubano, acerca del amor, el sexo y la
pareja.
Brian Kerr, hombre de Negocios, Saskatchewan, Canadá.
Éste es un manual para tenerlo debajo de la almohada, junto al paquete de condones y una
rosa…
Bobby Leonard, actor de TV y cine, Estados Unidos.
Este libro pudiera ser una guía que nos lleve de la mano por el escabroso mundo de las
relaciones amorosas. Pero es más. Sus consejos bien documentados están apoyados por
anécdotas nacidas de la intensa vida de esta persona que no tiene reparo en regalarnos
recuerdos, secretos y su exquisito sentido del humor. Las citas tomadas de otros textos
fluyen dentro del discurso como si siempre hubieran estado ahí. Me pasó que muchas veces
me sentía reflejada en sus anécdotas. Otras veces describía situaciones de pareja que antes
había vivido y que la solución hubiera sido menos traumática si hubiera tenido a mano una
solución tan humana como las que nos da la enseñanza de esta obra. El libro será bien
acogido por quienes confían en la necesidad de rescatar la pareja como proyecto de vida.
Será agradecido por todos los que confiamos en el amor. Muchas gracias.
Esther Ponte, licenciada en Pedagogía, España.
Jorge: usted ha puesto a disposición de la sociedad una guía espiritual madura, a la vez muy
práctica, para que tanto hombres como mujeres aprendamos a sentar las bases más sólidas
al conformar una vida en pareja, una familia, un hogar. Le agradezco en nombre de todas
las mujeres que hoy luchamos por el amor en la estabilidad, también en nombre de todos los
hijos que merecen hogares equilibrados para crecer y poder dar continuidad a la familia,
sostén de la vida y felicidad plena. Que su hogar siga siendo lucero. Le admira
profundamente.
Elianis Soriano, doctora en Medicina, La Habana, Cuba.
Cuando mi amigo Jorge me llamó para pedirme que le dijera lo que opinaba de su libro y lo
que es peor, que se lo pusiera por escrito, pensé en lo difícil que sería enjuiciar un libro de
autoayuda, de lo cual hay miles y todos dicen cosas más o menos ciertas y en muchos casos
son aburridos y vulgares.
No quería herir a mi amigo ni a su esposa, que aprecio también profundamente por su
bondad, carácter apacible y valores humanos.
Sufriendo mucho, con mucha lástima por mí misma, me senté frente a la computadora para
cumplir la tarea, pensando que necesitaría por lo menos un par de días para leer y ¿por qué
no?... criticar. Pues me ha ocurrido que me lo he leído sin parar, que dejé de sufrir por la
obligación de la lectura, ya que este pequeño- grande libro, me atrapó de inmediato y no
me he levantado de mi puesto hasta la última página.
Gracias, Jorge, por decir en forma tan sintética las bases principales, no solamente de las
relaciones de pareja, sino de las relaciones humanas en general. En una forma sencilla y
concisa, has plasmado el ABC del amor perdurable y de la vida en común, siguiendo esa
frase que tanto me gusta: “No hay camino a la felicidad, la felicidad es el camino”.
Maritza Verdaguer, arquitecta, La Habana, Cuba.
Reverso de la Cubierta