Universidad Nacional Autónoma de México Colegio de Ciencias y Humanidades Plantel Sur “Narración de un Individuo en Proceso de Desarrollo que Encuentra las Ocho Etapas Propuestas por Erik Erikson” PROFESOR: Medellin Baños Fabian ALUMNOS: GARCIA RAMIREZ DIANA CAROLINA SILVA DELGADO OMAR VAZQUEZ JIMENEZ CARLOS FERNANDO ESCALANTE GALEANA DIEGO TONATIUH HERNANDEZ GARCIA JOSHUA URIEL GRUPO: 613 7 DE MARZO, 24 “Narración de un Individuo en Proceso de Desarrollo a Través de las Etapas de Erick Erickson” INTRODUCCIÓN: En el ámbito de la psicología del desarrollo, la teoría de las etapas de Erik Erikson ha sido fundamental para comprender cómo las personas atraviesan diferentes fases de desarrollo a lo largo de sus vidas. Esta teoría, que describe ocho etapas de desarrollo psicosocial, ofrece una lente poderosa a través de la cual podemos examinar el crecimiento personal y la evolución de la identidad a lo largo del tiempo. En este contexto, presentamos la historia de Sofia, una joven que personifica las experiencias y desafíos asociados con cada una de las ocho etapas propuestas por Erikson. A lo largo de su vida, desde su infancia hasta su adultez tardía, Sofia se encuentra con una serie de desafíos y oportunidades que la llevan a explorar su identidad, establecer relaciones significativas, dejar un legado duradero y reflexionar sobre el significado de su vida. A través del relato de la vida de Sofia, exploraremos cómo cada etapa del desarrollo psicosocial influye en su crecimiento personal, revelando las complejidades y el potencial transformador de la experiencia humana. Desde los primeros pasos titubeantes de la infancia hasta las reflexiones serenas de la adultez tardía, la historia de Sofia nos invita a reflexionar sobre nuestra propia trayectoria de desarrollo y las fuerzas que dan forma a nuestra identidad y sentido de propósito en la vida. DESARROLLO DE LA HISTORIA: Había una vez una joven llamada Sofía, cuyo viaje por la vida la llevó a enfrentarse a las ocho etapas del desarrollo propuestas por Erik Erikson. 1. Confianza vs. Desconfianza (0-1 año): En sus primeros meses de vida, Sofía dependía completamente de sus cuidadores para satisfacer sus necesidades básicas. Con cada sonrisa y gesto de atención, desarrollaba una confianza fundamental en el mundo que la rodeaba. 2. Autonomía vs. Vergüenza y Duda (1-3 años): A medida que crecía, Sofía comenzaba a explorar el mundo por sí misma. Sus intentos de independencia, como vestirse sola o alimentarse, fueron acogidos con aliento y paciencia por parte de sus padres, lo que le permitió desarrollar una sensación de autonomía y orgullo en sus logros. 3. Iniciativa vs. Culpa (3-6 años): Durante sus años preescolares, Sofía desbordaba de energía y curiosidad. Se aventuraba en juegos imaginativos y proyectos creativos, experimentando el mundo a través de la exploración activa. Con el apoyo de sus padres y maestros, cultivó un sentido de iniciativa y propósito. 4. Laboriosidad vs. Inferioridad (6-12 años): Al ingresar a la escuela primaria, Sofía se encontró con nuevos desafíos y responsabilidades. A medida que aprendía habilidades académicas y sociales, también enfrentaba la presión de compararse con sus compañeros. Con esfuerzo y perseverancia, logró superar la autoevaluación negativa y desarrolló un sentido de competencia y logro. 5. Identidad vs. Difusión de Identidad (12-18 años): La adolescencia trajo consigo una búsqueda de identidad para Sofía. Se cuestionaba quién era y qué quería ser en la vida. A través de la exploración de intereses, valores y relaciones, eventualmente llegó a una comprensión más sólida de sí misma y de su lugar en el mundo. 6. Intimidad vs. Aislamiento (18-40 años): Durante sus años jóvenes adultos, Sofía buscaba relaciones íntimas y significativas. A medida que cultivaba amistades cercanas y establecía conexiones románticas, enfrentaba la elección entre abrirse emocionalmente y correr el riesgo de ser herida, o retirarse y enfrentar el aislamiento. 7. Generatividad vs. Estancamiento (40-65 años): En la mediana edad, Sofía se encontraba en un período de reflexión y evaluación de su vida. Buscaba formas de contribuir al mundo y dejar un legado significativo, ya sea a través de su trabajo, su familia o su comunidad. Esta búsqueda de significado y trascendencia la llevó a experimentar una sensación de generatividad y satisfacción. 8. Integridad vs. Desesperación (65 años en adelante): En su vejez, Sofía reflexionaba sobre las experiencias y decisiones de toda su vida. Siendo consciente de la finitud de su existencia, buscaba aceptar su pasado, reconciliarse con sus logros y arrepentimientos, y encontrar una sensación de integridad y paz interior. CONCLUSION: En la vida de Sofía, hemos presenciado un viaje emocionante y revelador a través de las ocho etapas del desarrollo propuestas por Erik Erikson. Desde su infancia hasta su vejez, Sofía enfrentó desafíos, tomó decisiones difíciles y experimentó crecimiento personal en cada etapa del camino. A lo largo de su vida, Sofía demostró una capacidad notable para adaptarse, aprender y crecer a partir de sus experiencias. Superó obstáculos, construyó relaciones significativas y dejó un legado duradero a medida que avanzaba por las diversas etapas de su desarrollo. Al final de su viaje, Sofía no solo encontró un sentido de integridad y paz interior, sino que también dejó una marca indeleble en el mundo que la rodeaba. Su historia nos recuerda la importancia de enfrentar los desafíos de la vida con valentía, perseverancia y compasión, y nos inspira a abrazar nuestro propio viaje de desarrollo personal con determinación y gratitud.
