ASPECTOS BÁSICOS DE LOS EIA Un bolígrafo es un instrumento, por lo general plástico o de metal, que emite tinte a través de una punta metálica y nos permite escribir. Aunque fue perfeccionado y patentado formalmente por Marcel Bich en 1945 tras la II Guerra Mundial, el bolígrafo BIC es un invento de finales de 1938. Fue su creador, el periodista húngaro Ladislao Biró, quien se propuso resolver los problemas que le ocasionaba la escritura con su pluma, ingeniando así el primer birome (acrónimo de Biró y Mayne, su socio) . Gracias a los conocimientos químicos de su hermano logró crear una tinta muy útil para escribir a mano pero que se atascaba en la pluma. La idea de colocar una bolita en la punta le surgió mientras observaba a unos niños que jugaban con pequeñas bolas en el agua, dejando éstas a su paso un trazo en el suelo seco. Bien, pues tras este pequeño dato histórico nos enfocaremos en el ciclo de vida del bolígrafo BIC y en cómo se desarrolla cada una de sus etapas. El ciclo de vida de un producto (CVP) consiste en un conjunto de etapas por las que atraviesa dicho producto y permite estudiar sus beneficios y perjuicios, así como su salida en el mercado económico. Primeramente, se ha de hacer un estudio de mercado hacer una valoración de su demanda en la sociedad, las nuevas necesidades que genere en los consumidores, el modelo de desarrollo al que se ajusta o la competencia que supongan otros fabricantes. BIC es un bolígrafo de bajo coste y presenta una estructura octogonal que facilita la escritura y lo hace ligero. Cuenta con una gran aceptación dentro del mercado social y, aunque tiene competidores importantes como la marca PILOT, es uno de los más comprados y vendidos en todo el mundo. Desde la fundación de su empresa por el italianofrancés Marcel Bich en 1945, se han vendido más de cien mil millones en todo el mundo. Es un producto que avala el consumo responsable, así como un desarrollo sostenible en confort con el Medio Ambiente. La fabricación de este bolígrafo implica utilizar materiales plásticos y de metal que suponen un gran impacto medioambiental y que pueden provocar la acumulación de residuos tóxicos para el Medio Ambiente. El metal utilizado para la esfera de la punta es el Carburo de Tungsteno, formado por una aleación de Wolframio y Carbono. Se utiliza sobre todo por su dureza y resistencia al desgaste. El uso muy difundido del bolígrafo ha generado la necesidad de reciclar el material plástico (no biodegradable) proveniente de los mismos, para lo que la compañía BIC y TerraCycle se han unido con el fin de aprovechar estos materiales una vez que se desechan. El compromiso de BIC con el desarrollo sustentable le ha permitido reducir el consumo de agua y energía, y elaborar productos innovadores basados en materiales reciclados y en el concepto del eco-diseño. En 2014 disminuyó en un 10,3% el consumo de agua por tonelada producida en comparación con el año anterior, y en un 3,3% el consumo de energía en sus fábricas; todo esto a pesar de haber experimentado un incremento de un 4,4% en la producción el año pasado. Hay que tener en cuenta no solo su fabricación, sino también su comercialización: precio/coste, distribución, intermediarios, si forma parte de un comercio justo, publicidad, etc.; todo esto respetando los derechos de los consumidores. La empresa BIC tiene ventas en 160 países en los cinco continentes, vendiendo cerca de 23 millones de productos de papelería en todo el mundo. Como empresa líder de productos de consumidores globales, está comprometida en conducir su gama de actividades de negocios de fabricación a la comercialización y ventas , por lo que el 89% de las ventas de BIC resultan de productos fabricados en sus propias fábricas . Además de esto, cuenta con un Programa de Código de Conducta que deben cumplir tanto la empresa como los trabajadores, y que se basa en los siguientes principios: • Ambiente de Trabajo Seguro y Saludable. • Sueldos Justos y Carga Horaria Razonable. • Sin Trabajo Infantil. • Sin Trabajo Forzado. • Sin Discriminación. • Libertad de Organización de Clase. • Conformidad Legal. • Sin Experimentos en Animales. • Responsabilidad ambiental. • Publicaciones Por último, hay que estudiar tanto su uso como su desuso. El bolígrafo es un invento considerablemente ventajoso y útil por lo que seguramente habrá más de uno en nuestra casa, escuela o trabajo que nos permita hacer anotaciones o simplemente dibujar en el tiempo libre. Es debido al gran número de personas que lo utilizan que la empresa ha realizado mejoras en su estructura, como es el caso de el orificio que presenta en la parte superior de la tapa y el que tiene en uno de los lados del tubo de crista. Fueron hechos para evitar el ahogamiento por asfixia en caso de que se alguien (en especial los niños) tragara la tapa, mientras que el otro permite que si el bolígrafo se expone a un cambio de presiones el volumen de la tinta no varíe, de no ser así la presión lo haría estallar. Teniendo en cuenta la educación ciudadana con respecto al cuidado y protección de Medio Ambiente se llevan a cabo campañas de concienciación que fomenten el reciclaje y la reutilización del plástico por parte de las fábricas en lugar de materiales vírgenes. Una vez en desuso, los vertidos y residuos que se generan y la gestión que se lleva a cabo para reducir, reciclar y reutilizar los mismos son de vital importancia no solo para un mejor funcionamiento de la empresa, sino también para reducir la contaminación y los gastos económicos y energéticos de las mismas. Una alternativa ecológica al bolígrafo sería la utilización de materiales biodegradables para su fabricación y procurar mantenerlos regulados. otra alternativa sería utilizar acrílicos que no contaminasen, o que al menos su impacto fuera menor para la estructura de éstos. Aspectos básicos: 1. ASPECTO TECNOLOGICO El cambio de la pluma al bolígrafo nace de la necesidad de tener un elemento que fuera mejor y de mayor practica en la escritura, es decir que el resultado de su uso debía satisfacer las necesidades que el producto anterior no había logrado suplir, todo esto crea la idea del avance tecnológico; para lograr esto las ideas debían ser innovadoras y muy asequibles, es decir que cumplieran las característica social del "consumir, sustituir, consumir" y alcanzar que el producto fuese avanzando en sus tecnologías y por ende estas también lo hicieran. 2. ASPECTO SOCIAL La crisis empezó en la Segunda Guerra Mundial, con la llegada del bolígrafo. Los primeros bolígrafos manchaban y tocaba tener mucho ya que con cualquier toque se podría causar un manchón. Y si no se cometía ningún error igual la escritura con bolígrafo ya no tenía alma, estilo ni personalidad. Cuentan los abuelos que antes en las escuelas se dictaba un curso en el cual se obligaba a tener una excelente caligrafía para después poder usar las famosas plumas Parker. Mientras en la actualidad ya ni siquiera se les pide a los estudiantes tener buena letra. 3. ASPECTO CIENTÍFICO Se puede decir que el cambio al bolígrafo ha generado un gran impacto ambiental, pues el uso de la pluma era más económico y no solo económico, sino que también era de fácil acceso y obtención, esto debido principalmente a que extraer una pluma a un animal es sumamente fácil; se le puede quitar o recoger las que ya se le hayan caído. El bolígrafo por su parte recurre a plásticos y compuestos tóxicos que afectan a la naturaleza y quienes viven en ella. Cada año generamos individualmente unos 500 kilos de basura, la cual se compone aproximadamente de un 25% de plásticos. Este número va en aumento con el paso de los meses y, aunque las iniciativas contra las bolsas de plástico se han popularizado, todavía hay residuos que parecemos no saber evitar. Un ejemplo es el bolígrafo desechable. Ya sabes, el clásico boli de plástico de un solo uso que nos regalan en cualquier evento o reunión, que acumulamos por docenas en los cajones de nuestro escritorio, y que perdemos y volvemos a obtener a un ritmo casi vertiginoso. Aunque la gran mayoría de campañas se centran en buscar solución a las bolsas y a las botellas de plástico, la verdad es que los bolígrafos desechables tampoco son un problema pequeño, que digamos. Según un estudio de la EPA, cada año se tiran solo en América 1.6 billones de bolígrafos. Si añadimos la resta del planeta y lo multiplicamos por las décadas que hemos utilizado este producto para escribir, podremos comprender en parte las islas de basura del tamaño de Texas que se encuentran en el océano. Es fácil comprender la popularidad de los bolígrafos desechables: son de bajo coste, de cómoda utilización y pueden encontrarse en todas partes. Sin embargo, no dejan de ser productos con fecha de caducidad. Un bolígrafo puede durar entre 1 y 5 meses, depende del uso que se le dé. Además, su composición de plástico no biodegradable es muy difícil de reciclar, por lo que contribuye a la acumulación de tóxicos en el medio ambiente.