Caso 1: "La Transformación de Marta: Explorando Posibles Trastornos Psicológicos" Marta, una estudiante universitaria de 20 años, solía ser un rayo de luz en el campus. Su participación activa en clases, su energía positiva y sus excelentes calificaciones la distinguían. Sin embargo, en los últimos meses, ha experimentado un cambio drástico en su comportamiento que ha dejado perplejos a amigos, compañeros y profesores. El cambio se manifiesta en diversas esferas de la vida de Marta. Antes, disfrutaba de la compañía de amigos, pero ahora se muestra retraída y prefiere la soledad en su habitación, donde pasa horas aislada. Su apariencia física también ha sufrido cambios notables: ha perdido peso significativo, su vestimenta es descuidada y su rostro refleja un cansancio evidente. Incluso sus hábitos alimenticios han cambiado, y su falta de apetito preocupa a quienes la conocen. El aspecto más alarmante es el estado emocional de Marta. Ha sido vista llorando sin motivo aparente, y en una conversación con su mejor amiga, reveló pensamientos persistentes de inutilidad y desesperanza. Actividades que antes le brindaban alegría, como la lectura y la música, ahora le resultan indiferentes. Este deterioro también se manifiesta en su rendimiento académico, que ha experimentado una caída abrupta, y ha dejado de participar en actividades extracurriculares que solía disfrutar. Profesores han notado cambios notables en el comportamiento de Marta en el aula. Muestra dificultades para concentrarse, responde de manera apática a las interacciones y ha faltado a exámenes importantes sin previo aviso. Aunque inicialmente se consideró que podría estar enfrentando desafíos académicos, la complejidad y la persistencia de su comportamiento sugieren la posibilidad de problemas de salud mental, como la depresión o la ansiedad. El personal académico y sus amigos se han preocupado cada vez más por el bienestar de Marta. Caso 2: "La Obsesión de Javier: Un Estudiante Atormentado por Intrusivos Pensamientos" Javier, un estudiante de psicología de 22 años, ha experimentado un cambio significativo en su comportamiento que ha levantado preocupaciones tanto entre sus amigos como entre sus profesores. Antes conocido por su dedicación académica y su participación activa en actividades extracurriculares, Javier ahora muestra signos de angustia y obsesión. Su transformación es evidente en su rutina diaria. Javier solía ser un estudiante meticuloso y organizado, pero recientemente ha comenzado a llegar tarde a clases y a descuidar sus responsabilidades académicas. Sus amigos, quienes antes disfrutaban de su compañía, han notado que se ha vuelto retraído y evita las interacciones sociales. Además, ha dejado de participar en proyectos colaborativos y se muestra distante en reuniones sociales. Lo más inquietante para Javier son los pensamientos intrusivos y perturbadores que ha empezado a experimentar. Ha compartido con su compañero de cuarto que a menudo se ve invadido por pensamientos incontrolables sobre dañar a sus seres queridos, a pesar de que no tiene intenciones reales de hacerlo. Estos pensamientos le generan una gran ansiedad y malestar, lo cual ha afectado negativamente su calidad de vida. Además, Javier ha desarrollado una serie de rituales compulsivos para intentar calmar sus ansiedades. Por ejemplo, siente la necesidad de contar ciertos objetos repetidamente o de realizar acciones específicas en un intento desesperado por alejar los pensamientos intrusivos. Estos rituales han afectado su capacidad para cumplir con sus responsabilidades diarias y han contribuido a su aislamiento social. El personal académico ha notado la disminución en el rendimiento académico de Javier y su cambio en la interacción social en el aula. Aunque inicialmente se pensó que podría estar experimentando estrés académico, la naturaleza obsesiva y compulsiva de sus pensamientos y comportamientos sugiere la posibilidad de un trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) u otro trastorno relacionado. Caso 3: "El Enigma de Carlos: Un Estudiante con Cambios en la Percepción de la Realidad" Carlos, un estudiante de psicología de 23 años, ha experimentado recientemente una serie de cambios en su comportamiento que han desconcertado tanto a sus amigos como a sus profesores. Antes conocido por su mente analítica y su capacidad para concentrarse en tareas académicas, Carlos ahora muestra signos de desorganización y una percepción alterada de la realidad. Su transformación es evidente en su rendimiento académico y en su interacción social. Carlos solía destacarse por su participación activa en clases, pero ahora se muestra distraído y a menudo parece perdido en sus pensamientos durante las lecciones. Además, ha dejado de asistir a reuniones sociales y se ha vuelto cada vez más retraído, evitando las interacciones con sus amigos y compañeros. Lo más preocupante para Carlos son las experiencias perceptuales inusuales que ha comenzado a experimentar. Ha mencionado a sus amigos que a veces escucha voces que le dicen cosas desagradables y que siente que está siendo observado constantemente, incluso en lugares donde sabe que no hay nadie. Además, ha expresado la creencia de que sus pensamientos están siendo controlados por fuerzas externas. Sus amigos también han notado cambios en su expresión emocional. Carlos pasa de momentos de risa incontrolable a períodos de profunda tristeza sin razón aparente. Además, ha descrito episodios en los que se siente extraordinariamente eufórico y lleno de energía, seguidos de períodos de agotamiento extremo. El personal académico ha observado la disminución en la calidad del trabajo de Carlos y su dificultad para concentrarse en las tareas académicas. Caso 4: "Eva y el Peso de la Ansiedad Social" Eva, una estudiante de psicología de 21 años, ha experimentado un cambio notable en su comportamiento que ha generado preocupación entre sus amigos y profesores. Conocida anteriormente por su extroversión y participación activa en eventos sociales, Eva ahora muestra signos evidentes de ansiedad social que están afectando significativamente su vida diaria. Antes, Eva se destacaba por liderar grupos de estudio y participar animadamente en discusiones en clase. Sin embargo, en los últimos meses, ha comenzado a evitar situaciones sociales, incluso aquellas que antes disfrutaba. Se ha vuelto retraída y se retira rápidamente de las interacciones sociales, temiendo ser juzgada o ridiculizada. Sus amigos han notado cambios en su comportamiento en eventos sociales. Eva, que solía ser el alma de la fiesta, ahora prefiere quedarse en casa y evitar las reuniones. Cuando se ve obligada a participar en eventos sociales, muestra signos evidentes de nerviosismo, como sudoración excesiva, temblores y dificultad para mantener la conversación. En el ámbito académico, su rendimiento también ha sido afectado. Eva ha dejado de participar activamente en clases y ha comenzado a faltar a algunas sesiones debido a la ansiedad que experimenta al interactuar con sus compañeros y profesores. Sus profesores han notado la disminución en la calidad de sus contribuciones y la falta de expresión de sus opiniones en el aula. Eva misma ha expresado su malestar, describiendo pensamientos persistentes sobre ser juzgada negativamente por los demás y un miedo paralizante a cometer errores en público. Su preocupación por la opinión de los demás ha llevado a una disminución en su autoestima y a dudar constantemente de sus habilidades sociales. Caso 5: "Daniel y la Lucha contra la Adicción: Un Estudiante en Busca de Rehabilitación" Daniel, un estudiante universitario de 25 años, ha experimentado una transformación marcada en su vida que ha levantado preocupaciones entre sus amigos, profesores y familiares. Conocido por su inteligencia y dedicación académica, Daniel ha caído en las garras de una adicción que ha afectado negativamente todos los aspectos de su vida. En sus primeros años universitarios, Daniel mantuvo un rendimiento académico sobresaliente y participó activamente en actividades extracurriculares. Sin embargo, en los últimos doce meses, ha comenzado a descuidar sus estudios y ha dejado de asistir a clases con regularidad. Sus profesores han notado la disminución en la calidad de su trabajo, y algunos compañeros han mencionado su comportamiento errático en el campus. La adicción de Daniel se centra en el consumo problemático de sustancias. Inicialmente, empezó a experimentar con drogas recreativas en un intento de lidiar con el estrés académico y las expectativas sociales. Sin embargo, la situación ha empeorado y la frecuencia y cantidad de su consumo han aumentado considerablemente. Daniel ha perdido amigos y ha empezado a distanciarse de su familia, quienes han expresado su preocupación y frustración ante su negativa a buscar ayuda. Los cambios en su comportamiento no se limitan al ámbito académico. Su salud física se ha deteriorado, y la falta de sueño y la pérdida de peso son evidentes. Además, Daniel ha tenido encuentros con la ley relacionados con su adicción, lo que ha aumentado aún más la tensión en su vida. Los amigos de Daniel han intentado intervenir, pero él ha resistido cualquier esfuerzo de apoyo. La situación ha llegado a un punto crítico donde es necesario abordar la adicción de Daniel de manera urgente.