PALABRAS DE GRADUACION A Dios va nuestro eterno agradecimiento por permitirnos hoy vivir este momento tan esperado como lo es el hecho de que nuestros hijos recibirán hoy el certificado que les acredita el culmen de la etapa primaria en la educación. Momento que nos trae gran cantidad de recuerdos y muchas expectativas, a las puertas de un futuro por venir, donde la esperanza cobra vida una vez más y los sueños toman vuelo. Dar gracias a Dios que se hace presente en la tierra a través de los rostros sonrientes de estos pequeños. En nuestra memoria tenemos el día que les dejamos a la puerta de la institución por primera vez, llenos de emociones, curiosidades, nerviosismo, alegría (bueno, y alguna lágrima también)…; el tiempo ha pasado y nuestros hijos ya no son aquellos chiquillos que comenzaron: han madurado aprendiendo cosas extraordinarias y han crecido juntos emocional, física, espiritual y personalmente. “Cualquiera que hayan sido los logros de nuestros hijos, alguien los ayudó siempre a alcanzarlos”. Sí, porque detrás, o más bien con cada uno de ellos, han estado muchas personas, y eso resulta maravilloso porque quiere decir que sus logros, alegrías, recuerdos y ganas de dar gracias, se multiplican por cada persona que los han acompañado en este proceso. Cada uno ha cumplido su objetivo al estar hoy aquí y por eso es un buen momento para mostrar nuestro agradecimiento: A la Institución “Justina Paredes Vielma” como casa de Estudio que les proporcionó las herramientas para alcanzar su primer eslabón en la cadena de la vida. A todos los profesores, les damos las gracias por haberse ocupado de nuestros hijos más allá de instruirles, por regañarles y ser duros cuando no hicieron las cosas bien, por limpiar sus lágrimas, cuidarles y aconsejarles, por motivarles a salir adelante, por inculcarles el hábito del estudio y por enseñarles a no solo pensar en grande, sino ¡ser grandes!. Decía Pitágoras: “educar no es dar carrera para vivir si no templar el alma para las dificultades de la vida” Cuando pensamos en lo completo del papel que desempeñan los profesionales de la educación, siempre está presente una viñeta de Forges en la que un hombre sentado ante un ordenador dirigiéndose a la mujer que atiende le pregunta “profesión?”. Y esta responde: “Animadora, actriz, mamá, psicóloga, guía turística, traductora, psiquiatra, escritora y dibujante.” El hombre anonadado dice “todo eso no cabe en el renglón”. “Pues ponga Educador, que es lo mismo”…Señores: Educador, es el profesional más completo, si se quiere, pues irónicamente tiene que cumplir los roles de todas las profesiones para formar a los profesionales del mañana. Damos gracias a quienes les enseñaron y a quienes les permitieron enseñarles, a quienes les corrigieron y lo supieron hacer, a quienes les ayudaron en el estudio y en la vida, cuyos conocimientos, les sirvieron de guía para que llegaran hasta aquí, no solo por su constancia, dedicación y excelencia; también porque les han enseñado que cada uno de ellos pueden hacer y ser la diferencia, quienes han dejado su huella indeleble, nos referimos a los docentes especialistas…Inés, Dora, José Gregorio, Rafael, Liliana y Ana Cristina. A las madres colaboradoras y obreros… El mérito de este certificado, no es sólo de nuestros hijos. Ellos hicieron la parte más fácil: estudiar y aprobar. Uds. han estado ahí todo el camino, en el borde de la carretera, cumpliendo silenciosamente pero no menos importante, su trabajo…muchas veces con las manos atadas, pero casi siempre con una ración a flor de labios, rogando a Dios porque con los pocos recursos que contaban, pudieran alegrarles el día a los pequeños para que al llegar cada uno de ellos pudiesen encontrar las áreas limpias y una bandeja con alimentos, cuyo ingrediente principal de cada plato era el cariño y la sonrisa amable de cada una de ustedes. A los Licenciados: Lisbeth Puentes, Luciana Rodríguez, Clariza Toro, Yuraima Dávila, Luis Erney, Yadira López, Glenda Angulo, Lisbeth Velásquez, Arcenia Calderón y Leida: Tengan la certeza ustedes que cada uno de estos jovencitos llevan una estrella que les ayudará en un futuro no muy lejano a brillar con luz propia, pues la labor de ustedes fue colocar en cada uno de ellos esa chispa que en su debido momento, Dios y la vida misma les permitirá encender…Para ustedes van las palabras de uno de los más grandes e insignes educadores venezolanos de todos los tiempos, como lo fue Don Andrés Bello: “debemos tener el espíritu abierto a la luz de todas las direcciones”…Sí en algunos casos pretendemos desistir, los alumnos nos aportaran mil razones para continuar. La gratitud es la memoria del corazón y desde el corazón les damos las gracias…Dios los Bendiga a todos y no olvidemos que el Cielo es el Limite!!! Muchas gracias.
