4. Moviemientos políticos religiosos 4.1 Los Cármatas 4.2 Los Kurramitas 4.1 Los Cármatas Los cármatas ( الـقرامـطةal-qarāmiṭa) fueron un movimiento político-religioso surgido del islam ismailí de los siglos IX y X. Se los trata a veces de movimiento protocomunista, y siempre de secta guerrera. No existe, en cualquier caso, documentación abundante sobre ellos. Su surgimiento está ligado a la historia de los imanes ismailíes. Éstos, cabeza de esta rama minoritaria del islam chií, vivían ocultos por temor a la represión hasta que el fatimí, Ubayd Allah al-Mahdi reivindicó públicamente el cargo de imán. La mayoría de los ismailíes aceptó el liderazgo de Ubayd Allah, pero pequeños grupos en Irak y Baréin lo rechazaron, dando lugar al movimiento cármata. Este toma el nombre de Hamdan Qarmat o Qurmut ()ح ـ ـ ـ ـ ـ ـمـدان ق ـ ـ ـ ـ ـ ــرم ـ ـ ـ ـ ـ ــط, un campesino de Kufa que se destacó por su oposición a los fatimíes así como su lucha contra el Califato abasí y su intensa actividad propagandística, difundiendo una doctrina que reclamaba la plena igualdad. Hacia el año 886, uno de los miembros del movimiento, Abu Sayyid al-Yannabi, fue enviado por Qarmat a Baréin, donde fundó un Estado cármata. En 902 los guerreros cármatas, dirigidos por Zikrawayh ibn Muhrawayh, conquistaron algunas ciudades del norte de Siria (Alepo, Homs, Hama). Fueron derrotados por las tropas abasíes poco después. Otro jefe, conocido en la historia como el «Hombre de la Camella», atacó Damasco, batalla en la que perdió la vida. Un tercer guerrero, que se consideraba a sí mismo Mahdi (personaje que según la tradición islámica aparecerá al final de los tiempos), aterrorizó durante un tiempo parte de Siria, hasta que fue ejecutado por los abasíes en 904. Zikrawayh, por su parte, halló la muerte en 907, con lo que se puso fin a esta época de disturbios en Siria e Iraq. En 913 fue asesinado el fundador del Estado de Baréin, Al-Yannabi, y sucedido por su hijo, creándose así una dinastía de cármatas. En 930, reinando Abu Tahir, los cármatas atacaron La Meca, masacraron a sus habitantes y robaron la Piedra Negra de la Kaaba, que devolvieron, a cambio de un fuerte rescate y partida en dos, en el año 950. El poder militar de los cármatas se había debilitado considerablemente desde el año 939. Ese año permitieron la entrada de la primera caravana a La Meca, por primera vez desde el 930; esto se debió a las negociaciones entre el grupo y el califa abasí, que habían comenzado dos años antes. Dinastía cármata de Baréin 1. Abû Sa`îd al-Hasan al-Yannâbî (894-913) ()أبو سعيد الحسن الجنابي 2. Abû al-Qâsim Sa`îd (913-923) ()أبو القاسم سعيد 3. Abû Tâhir Sulaymân (923-944) ()أبو طاهر سليمان 4. Abû Mansûr Ahmad (944-972) ()أبو منصور أحمد 5. Abû Ya`qûb Yûsuf (972-977) ()أبو يعقوب يوسف 4.2 Los Kurramitas Los Kurramitas, Jurramitas, o Curramitas que significa en persa "los de la religión gozosa” fue un movimiento religioso y político iraní con raíces en el movimiento fundado por Mazdak. Un nombre alternativo para el movimiento es el de Muḥammira ( محمرة, "Los de rojo"; una referencia a su simbólico vestido rojo. La secta fue fundada en el siglo VIII d.C. por el clérigo persa Sunpadh y era una revitalización de una secta anterior que mezclaba el islam chiita y el zoroastrismo. Con todo, lo que realmente les hizo reconocidos fue el que Bābak Khorramdin la adoptara como base para su rebelión en contra del califato abasí. La secta surgió como respuesta a la ejecución de Abu Muslim por parte de los abasíes, y negaban que hubiera muerto, afirmando en cambio que regresaría como el mesías. Este mensaje fue reconfirmado aún más con la aparición de un profeta llamado al-Muqanna "el Velado", quien afirmaba que el espíritu de Dios había existido en Mahoma, Alī y Abu Muslim. Bajo el liderazgo de Bābak, los khuramitas proclamaron la desintegración y redistribución de todas las grandes propiedades y el fin del despótico gobierno extranjero. Aprovechando la agitación creada por la guerra civil abasí, en 816 empezaron a realizar ataques contra las fuerzas musulmanas en Irán e Irak. La represión abasí de la rebelión llevó a la huida de miles de khurramitas a Bizancio, donde fueron recibidos por el emperador Teófilo y fueron enrolados en el ejército bizantino bajo su líder iraní, Teófobo. Creencias Al-Muqaddasi menciona varios hechos. Observa que "la base de su doctrina es la creencia en la luz y las tinieblas"; más específicamente, "el principio del universo es la Luz, de la cual una parte ha sido borrada y se ha convertido en Oscuridad". "Evitan cuidadosamente el derramamiento de sangre, excepto cuando enarbolan la bandera de la rebelión." Están "extremadamente preocupados por la limpieza y la purificación, y por acercarse a las personas con amabilidad y beneficencia". Algunos "creían en el sexo libre, siempre y cuando las mujeres lo aceptaran, y también en la libertad de gozar de todos los placeres y de satisfacer las propias inclinaciones siempre que esto no suponga ningún daño para los demás" (su nombre deriva con mayor frecuencia de la palabra persa khurram "feliz, alegre”). En cuanto a la variedad de creencias, creen que "los profetas, a pesar de la diferencia de sus leyes y sus religiones, constituyen un solo espíritu". Naubakhti afirma que también creen en la reencarnación (metempsicosis) como el único tipo de vida y retribución después de la muerte, y en la cancelación de todas las prescripciones y obligaciones religiosas. Reverencian especialmente a Abu Muslim y sus imanes. En sus rituales, que son más bien simples, "buscan el mayor efecto sacramental del vino y las bebidas." En conjunto, fueron descritos por Al-Muqaddasi como "mazdeanos... que se esconden bajo la apariencia del islam “. Legado Según el académico turco Abdülbaki Gölpınarlı, los Qizilbash («Pelirrojos») del siglo XVI -un movimiento religioso y político en Azerbaiyán que ayudó a establecer la dinastía safávida- eran "descendientes espirituales de los khurramitas”.