A los dirigentes de la Escuela Sabática EMPIEZA EL ULTIMO TRIMESTRE DE ESTE AÑO, lleno de desafíos y metas que alcanzar. Y a medida que nos acercamos a los momentos finales de la historia de este mundo será más necesaria una consagración completa del pueblo de Dios. Hemos de orar más, predicar más y, sobre todo, estudiar más la Biblia. En lo que respecta al estudio de la Palabra de Dios, la Escuela Sabática tiene como objetivo acercarnos cada vez más a las Escrituras, forjar en nuestros jóvenes un carácter semejante al de Cristo e inculcar en nuestros niños los principios y valores que los harán ciudadanos terrenales ejemplares y dignos integrantes del remo de los cielos. Por eso es que la Iglesia Adventista del Séptimo Día da a la Escuela Sabática un lugar especial en el desarrollo de los servicios religiosos que cada sábado se realizan en nuestras congregaciones. En virtud de la importancia de la Escuela Sabática y los objetivos que la misma persigue, 1ADPA coloca en sus manos estos PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA. Es nuestra intención colaborar con usted, apreciado dirigente, y facilitar la organización que el departamento requiere. Por esa razón, el material que tiene entre manos es un instrumento especialmente útil para el «corazón de la iglesia». Antes de empezar a planificar y preparar queremos recordarle, apreciado dirigente, que estos programas son simples sugerencias, cuyo propósito es facilitar el trabajo de los líderes de la Escuela Sabática, sin limitar su creatividad. Con esta idea en mente hemos incluido secciones de testimonios en algunos programas para fomentar la participación de la iglesia. Así que, amado director o directora, siéntase libre de alterar y modificar estos programas según su preferencia para satisfacer las necesidades de su congregación. También, algunos programas sugieren el uso de recuerdos, marcadores y otros obsequios para los presentes. Hemos incluido modelos para los mismos que usted puede reproducir y recortar. Además, los programas están organizados siguiendo el programa general de eventos especiales de la División Interamericana y también tomando en cuenta algunas celebraciones especiales. Hemos colocado dichos programas en las fechas más comunes de nuestro territorio. Es posible, no obstante, que en su país estas celebraciones se lleven a cabo en fechas distintas a las aquí sugeridas. Por eso, y para lograr el mayor provecho de las programaciones, le rogamos que lea de antemano la lista de los programas, ubique las fechas especiales y. de ser necesario, haga los cambios correspondientes para ajustar las programaciones a las actividades de su iglesia local. Por último, resaltando nuestro compromiso con Dios y su iglesia hemos de recordar las palabras inspiradas: «Nuestras Escuelas Sabáticas, que están destinadas a la instrucción de nuestros niños y jóvenes, son demasiado superficiales. Los directores de ellas deben arar más profundamente. Necesitan dedicar más atención y más arduo trabajo a la obra que están haciendo. Necesitan estudiar más cabalmente la Biblia, y tener una experiencia religiosa más honda, a fin de saber cómo dirigir las Escuelas Sabáticas según las órdenes de Dios, y cómo guiar a los niños y jóvenes a su Salvador. Este es un ramo de la obra que ha venido sufriendo por falta de hombres y mujeres perspicaces, que sientan la responsabilidad delante de Dios de usar sus facultades no para llamar la atención a sí mismos, m para vanagloriarse, sino para hacer bien» (Consejos sobre la obra de la Escuela Sabática, sec. 6, p. 183). Con estas palabras en mente deseamos que Dios dirija su ministerio en este departamento y que pueda cosechar en la eternidad lo que ha sembrado en esta tierra. Que Dios bendiga a los fieles y esforzados directores y maestros de Escuela Sabática de la División Interamericana. KATHY HERNÁNDEZ DE POLANCO Envíe sus comentarios a [email protected] Tres técnicas de enseñanza de Jesús 1 JESÚS ES EL MAESTRO POR EXCELENCIA. Probablemente usted comparta la percepción de uno de los alumnos más sofisticados de Jesús, quien dijo de él: «Rabí, sabemos que tú eres un maestro venido de Dios» (Juan 3:2). Y quizás también comparta la opinión del guardia del templo que declaró: «jamás hombre alguno habló como este hombre» (Juan 7:46). Jesús enseñó de forma creativa, peculiar y cautivadora. Veremos tres de estas técnicas: (1) ilustraciones y parábolas; (2) solución de problemas y (3) el uso de lo concreto y lo abstracto. Ilustraciones y parábolas. En tiempos de Jesús, el uso de parábolas era el método favorito de enseñanza y la gente estaba acostumbrada a escucharlas. La palabra «parábola» viene del griego parabole, que significa «comparación», «ilustración» o «analogía». Hoy en día se usan comúnmente ilustraciones, pero no se usan mucho las parábolas. Tom Shepherd define así la parábola: «Un relato breve que enseña una lección por medio de comparaciones. Normalmente se toma del contexto de la vida cotidiana, que hace de símil o alegoría comparando o reuniendo la resudad divina y nuestra vida cotidiana. A menudo aborda realidades espirituales como el reino de Dios (“El reino de los cielos es semejante a…”) Mediante notables giros inesperados en la trama o llamativas presentaciones de la experiencia humana, el relato reta al oyente a tomar una decisión y acometer un cambio». 2 No es fácil componer una parábola. La mayoría de los maestros de Escuela Sabática simplemente usan las parábolas de Jesús para ilustrar una idea. Pero relatar una parábola rural en una clase compuesta por personas urbanas que nunca han visto una oveja en toda su vida, es perder el tiempo. Por otra parte, una declaración de Jesús: «Una ciudad asentada en un monte no se puede esconder» (Mateo 5:14), no es un misterio para ese mismo grupo urbano. En una clase de Escuela Sabática contemporánea, la razón para usar este método de enseñanza es hacer claro y entendible el punto central de la historia. El maestro puede unir esos conceptos, diciendo: «Entendemos el punto; ¿qué haremos ahora al respecto?» Otra característica de este método es que se mueve de lo conocido a lo desconocido. Jesús usó ilustraciones ce cosas familiares para enseñar realidades no muy conocidas. La solución de problemas. Jesús usó la solución de problemas con frecuencia A veces le llamamos a ello método de «caso de estudio» que consiste en lo siguiente: Alguien descube una situación a los miembros de la clase y estos tratan de resolver el problema. Una clase de Escuela Sabática tratará siempre de encontrar una solución bíblica válida. Por lo general Jesús no presentó los problemas. La mayoría surgieron de las personas en los grupos que le rodeaban. Él simplemente los guió a la respuesta. Esto es lo ideal en la clase de Escuela Sabática. Cuanto más participen los miembros de la clase, más aprenderán Algunos problemas son prácticos, surgen directamente de la experiencia y sus soluciones repercuten en la conducta. Otros problemas son teóricos. Se originan en la mente y sus soluciones son con frecuencia difíciles o imposibles de alcanzar. Aun si se resuelven, afectan muy poco o nada la existencia. Si se enfoca apropiadamente, el uso del método de «caso de estudio» crea soluciones sólidas, basadas en las Escrituras y resulta interesante y estimulante para los miembros de la clase. Es eficaz también para cambiar la conducta; precisamente lo que procuramos lograr al enseñar ética y religión. Uso de lo concreto y lo abstracto. Una de las tareas más difíciles en la clase de Escuela Sabática es hacer concretas las ideas e ilustraciones abstractas, a fin de hacerlas fáciles de visualizar y aplicar el concepto o principio que se está discutiendo. «Abstracto» es algo que no apela a los sentidos. Lo que apela a los sentidos es concreto. Por ejemplo, el concepto de «patriotismo» es abstracto; una bandera nacional ondeando en un asta, es concreto. Cuando se discute un principio bíblico, la pregunta «¿qué debemos hacer?» es abstracta. La pregunta «¿qué vamos a hacer al respecto?», es concreta. Obviamente, cuanto más concreta sea la enseñanza, más acción va a generar. El ideal es siempre unir lo concreto a lo abstracto Jesús usó muchas otras técnicas de enseñanza. Hemos compartido unas pinceladas de tres de las técnicas más comunes. Esperamos que sean de provecho para usted y su clase. JORGE L. RODRÍGUEZ editor de IADPA 1 Tomado de Buenos maestros, mejor Escuela Sabática (Doral, Florida: IADPA, 2016), tomo 2, p, 179. Tom Shepherd, «Interpretación de los símbolos, alegorías y parábolas», en George W. Reid, ed., Entender las Sagradas Escrituras, (Doral, Florida: IADPA, 2009), p. 272. 2 5 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Tus canas, causa de fiesta Programa especial con motivo del Día Internacional de las Personas de Edad (se celebra el 1º de octubre) Primer sábado 6 de octubre Obj etivo Comprender el valor que tienen las personas de la tercera edad para Dios y cómo debemos considerarlas los cristianos. Al director Este programa se puede realizar con entradas y salidas. Los más adultos serán los invitados especiales y se sentarán en los primeros asientos. La decoración puede incluir globos o flores que indiquen celebración. Sugerencias Colocar carteles con pensamientos que motiven el respeto por las personas de la tercera edad. Entregar cajitas de regalo a los invitados especiales. Invitar a los envejecientes de la comunidad. Preparar poemas y canciones para los invitados especiales con los jóvenes y niños de la iglesia. Días antes, asignar a cada joven un invitado especial para que 1o visite, ore con é1 y 1º cuide. El día de la celebración, permita que los jóvenes expresen su experiencia al tratar con la persona que se les asignó y que digan una cualidad positiva de él o ella. Permitirle a algunos de los hermanos de la tercera edad testificar cómo Dios ha estado con ellos a través de los años. Entregar un reconocimiento a los miembros más adultos de la congregación por su entrega a la causa. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 6 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Introducción Hoy, la Escuela Sabática está de fiesta, porque estamos reconociendo a personas que muchas veces son rechazadas. Hay diferentes formas para referirse a ellos: adultos de la tercera edad, ancianos, envejecientes, adultos mayores y abuelos. Hoy ellos decoran nuestra iglesia con su experiencia, ternura y sabiduría. Estas personas —que el cielo valora—, muchas veces son las menos favorecidas y marginadas por nuestra sociedad. Para muchos, hablar de un envejeciente es sinónimo de hablar de una persona que ha perdido la fuerza física, intelectual, laboral y social; personas que ya no son protagonistas de sus propias vidas. Pero la Biblia nos habla acerca de ellos y nos manda a honrarlos Hoy te invito a reflexionar en estas preguntas: ¿Cómo tratas a los mayores? ¿Qué lugar ocupan en nuestras iglesias? ¿Qué podemos hacer para hacerlos sentir amados y valorados? Esperamos que hoy muestres amor a aquellos héroes que, a lo largo de sus vidas, han dejado huellas positivas para los que transitamos este Camino. Primer participante (oración) Para Dios, los ancianos siempre han ocupado un lugar especial. En la Biblia se registra la historia de Simeón. Él tuvo el privilegio de ver el cumplimiento de una de las promesas más anheladas: la primera venida de Cristo. Sostuvo en sus brazos al Salvador del mundo y luego pronunció estas palabras: «Ahora, Señor, despides a tu siervo en paz, conforme a tu palabra, porque han visto mis ojos tu salvación» (Lucas 2:29-30). Entre tantos sabios y líderes religiosos, el Señor le concedió a este anciano, que probablemente no tenía valor ante la sociedad, la oportunidad de ver el cumplimiento de las profecías. Dios valora a aquellos que a través de los años le son fieles. Oremos de rodillas para que Dios nos ayude a serle fiel hasta que él venga en las nubes de los cielos. Segundo participante (himno) La Biblia también nos enseña que el Señor no desecha a sus siervos cuando alcanzan una edad avanzada. Él es fiel con aquellos que desde su juventud se han dedicado a servir e. Daniel es un ejemplo de ello. Durante su juventud no vaciló en poner en alto el nombre del Altísimo v aun en su vejez, el Señor continuó bendiciéndolo. Daniel era ya un anciano cuando Dios le reveló el porvenir del mundo. Como respuesta a las inquietudes que tenía el viejo profeta —que no estaba jubilado para Dios— Dios envió un ángel para consolar al anciano. Él mismo relata: «Entonces me dijo: “Daniel, no temas, porque desde el primer día que dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios, fueron oídas tus palabras; y a causa de tus palabras yo he venido"» (Daniel 10: 12). ¿No es maravilloso? Dios te escucha, querido amigo. No importa si para la sociedad ya no eres importante, para Dios sí lo eres. Solamente debes aferrarte a tu Señor. Cantemos el himno n° 408, «Cristo me ayuda por él a vivir». Tercer participante (lectura bíblica) En 2 Crónicas 10 encontramos la historia de Roboam, el hijo de Salomón. Cuando el pueblo fue a pedirle que le aliviara la carga que Salomón había puesto sobre ellos, él pidió consejos a los ancianos que sirvieron a su padre. Luego, habiendo despreciando su sabiduría, pidió consejo a los jóvenes que se habían criado con él. Como consecuencia, el pueblo lo rechazó como rey y su gobierno no fue estable. ¿Cuántos de nosotros hemos rechazado la sabiduría de aquellos que han transitado por la vida llevando en sus cuerpos las marcas de las victorias y errores cometidos? ¿Cuántos de nosotros, al igual que Roboam, RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © Tus canas, causa de fiesta 7 hemos tenido en poco los consejos de los héroes que han sobrevivido a las pruebas que nos da la vida? Busquemos en la Biblia Levítico 19:32 Cuarto participante (bienvenida) Las mujeres mayores también fueron de gran importancia para Dios. La Biblia nos habla de Noemí, una mujer que para la sociedad era una simple muda que había tenido un final triste. Pero Dios, en su misericordia, le concedió el amor y la fidelidad de Rut, que pasó a ser como una hija para esta solitaria madre. Hoy en día existen muchas señoras que viven solas, sin familia m amigos. Tú puedes ser un hijo o hija que vele por ellas. También puedes hacerles sentir que todavía son importantes y que pueden pertenecer a la familia de Dios. Si, como Noemí, sientes que eres de poco valor para muchos, recuerda que eres de gran valor para el Señor, y él puede convertir tus tristezas en gozo. Sean todos muy bienvenidos a la casa de Dios, disfruten de este programa especial preparado para ustedes (en este momento los jóvenes expresan su experiencia con las personas mayores que tenían asignadas). Quinto participante (música especial) Otra mujer distinguida fue Ana, la que estaba en el templo cuando Jesús fue dedicado. La Biblia nos dice que tenía ochenta y cuatro años siendo muda, y día y noche servía en el templo. Esta descripción nos indica que esta mujer no permitió que la muerte de su esposo le impidiera trabajar para Dios; y el Señor le dio el regalo de ver al Salvador del mundo «Esta, presentándose en la misma hora, daba gracias a Dios y hablaba del niño a todos los que esperaban la redención en Jerusalén» (Lucas 2:38). Queridos hermanos, el Cielo mostró su aprecio al trabajo abnegado de esta sierva de Dios, Servía en el templo a pesar de su edad. El Señor aceptó lo que su tuerza física le permitía hacer. ¿Qué trabajo o actividad realizan tus padres o tus abuelos? Valora sus esfuerzos, ellos todavía tienen mucho que dar, no los limites solamente porque carecen de la energía que tú tienes. En este momento seremos elevados al trono de la gracia por medio de una hermosa música especial (puede ser interpretada por algún adulto). Sexto participante (relato misionero) Hoy en día la sociedad tiende a rechazar a las personas de la tercera edad. Se limita su capacidad de trabajar y de pensar, pero muchas veces dichas limitaciones son provocadas por los mismos envejecientes, que se arrinconan y permanecen en el anonimato. Es su actitud frente a la vida lo que muchas veces da lugar al trato marginado que reciben. En la Biblia encontramos la historia de un personaje que no permitió que su edad avanzada lo aislara: Caleb. Su historia constituye un buen ejemplo de lo que Dios espera de ti, querido hermano. A sus 85 años estuvo dispuesto a luchar para adquirir la tierra prometida. No le importaba qué tan peligrosa pareciera su misión o la indiferencia de los que le rodeaban; el confiaba en Jehová de todo corazón. «Todavía estoy tan fuerte como el día que Moisés me envió. Cual era mi fuerza entonces, tal es ahora mi fuerza para combatir, para salir y para entrar» (Josué 14:11) Confía en Dios y él obrará maravillas en tu vida. Séptimo participante (Nuevos Horizontes) Abraham y Sara eran personas de la tercera edad. Él tenía cien años y ella noventa. Parecía que sus sueños y esperanzas se habían esfumado con el paso de los años. Al anuncio del Señor de que tendrían un hijo reaccionaron riéndose, aquello era imposible para los hombres (Génesis 17:17; 18:12). Pero Dios, mostrando su amor y misericordia hacia sus siervos, se manifestó; y esa promesa que parecía una www.escuela-sabatica.com 8 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA fantasía se hizo realidad en el tiempo en que menos lo esperaban. ¿Cuáles son esos sueños que tienes? ¿Cuál era esa ilusión que abrigabas con tanto anhelo? Recuerda que el Dios a quien servimos no se cansa y su poder es eterno. Todavía hoy él puede cumplir los deseos de tu corazón si están en armonía con su voluntad. Octavo participante (división en clases) La experiencia de Sansón constituye un ejemplo de las consecuencias que trae la desobediencia a los padres. A pesar de que ellos le aconsejaron que se casara con alguien del pueblo de Dios, Sansón puso su deseo carnal por encima de la voluntad de Dios, y como resultado tuvo un final muy triste. «Escucha a tu padre, que te engendró; y cuando tu madre envejezca, no la menosprecies» (Proverbios 23:22). Jóvenes, las mayores bendiciones las recibimos cuando somos obedientes a Dios y a nuestros padres. Ahora quedamos divididos en clases. Conclusión Todos debemos hacer un esfuerzo por entender a los mayores y tratar de saber qué sienten y cómo piensan, como una forma de hacerlos sentir amados. En esta edad necesitan que les mostremos más afecto, cuidado y que escuchemos sus historias y consejos. Con un gesto o una mirada les demostramos lo importante que son para nosotros. Un apretón de manos o abrazo, les avadará a superar el temor a la soledad. Por supuesto, no hemos de olvidar que dentro de unos pocos años nosotros también llegaremos a la tercera edad y nos gustaría que se nos tratara con amor y respeto. «No me deseches en el tiempo de la vejez; cuando mi fuerza se acabe, no me desampares» (Salmo 71:9). Esta oración fue expresada por David, hazla tuya hoy. Himno final N° 444, «No me pases». Oración final RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 5 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA «Niños firmes como la roca» Segundo sábado 13 de octubre Obj etivo Promover la firmeza de carácter desde los primeros años. Ofrecer modelos bíblicos para que los niños y adolescentes aprendan a tener un carácter firme. Al director Decorar o ambientar la plataforma para un panel con la participación de cinco niños. Preparar los niños para la exposición de los personajes, haciendo entrega previamente del material, para un mejor desenvolvimiento de estos. Preparar diapositivas o carteles con imágenes que sugieran los personajes de los que se hablará. Sugerencias Prepare marcadores para obsequiar en la entrada o durante la bienvenida. Al final de este programa encontrará modelos que puede fotocopiar. 10 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Bienvenida e introducción Sean todos bienvenidos a nuestro programa «Niños firmes como la roca». En la página 89 del libro El valor de los valores se encuentra el siguiente pensamiento: «Es en la más tierna infancia cuando se aprenden los comportamientos fundamentales de la vida. De ahí la trascendencia de que los padres, con cariño y con firmeza, enseñen los valores a sus hijos a través del ejemplo». El mismo Señor Jesús dijo algunas cosas interesantes acerca de los niños: 1) Que los niños nos sirven de ejemplo de la fe que salva: «Os aseguro, que si no os cambiáis y os volvéis como niños, jamás entraréis en el reino de los cielos» (Mateo 18: 3). 2) Que los niños constituyen un ejemplo de la humildad que agrada a Dios: «así, el que se humilla como este niño, ese es el mayor en el reino de los cielos» (Mateo 18: 4). 3) Que los niños prueban nuestra autenticidad: «Y el que recibe a un niño como este en mi Nombre, me recibe a mí» (Mateo 18: 5). Hoy hablaremos de algunos personajes de la Biblia que fueron fieles al Señor y firmes de carácter y lo demostraron desde su niñez y adolescencia. Pero antes de adentramos en nuestro programa les invito a que juntos cantemos el himno n° 282, «Brilla Jesús». El director del programa presenta a los panelistas. Primer panelista ¡Buen día, hermanos! Es un placer poder hablarles de una persona que demostró tener una confianza impresionante en Dios, ella es la sierva de la esposa de Naamán. Aunque ella era una esclava, y estaba muy lejos de su hogar, fue una fiel testigo de Dios y cumplió con el propósito para el cual Dios la había escogido. Mientras sema en aquel hogar pagano, sentía lastima por su amo, que padecía de lepra; y recordando los admirables milagros de curación realizados por intermedio de Elíseo, dijo a su Señora «Si rogara mi señor al profeta que está en Samaría, él lo sanaría de su lepra». Ella sabía que el poder del Cielo acompañaba a Eliseo y creía que Naamán podría ser curado por dicho poder. Y cuando el altanero sino dejó de lado el orgullo de su corazón, y se sometió a la voluntad revelada de Jehová, el milagro fue hecho. Siete veces se sumergió en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios. El Señor honró su fe; y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio. Sin duda fue un milagro asombroso el de Naamán. Y no debemos olvidar que todo comenzó con el testimonio de esta muchacha que era sierva de la esposa de Naamán. Seguramente gracias a sus padres hebreos que le enseñaron acerca de Dios, pudo ser fiel y en la casa del capitán sino pudo testificar por el Dios a quien había aprendido a honrar. Les invito a que busquemos en nuestras biblias Mateo 5:16. Elevemos una oración a nuestro Dios. Segundo panelista ¡Bendiciones para todos! El personaje del cual he venido hablarles tiene mi completa admiración y pronto van a saber por qué. Su nombre es Josías. Empezó a gobernar cuando tenía solo ocho años, fue hijo de un rey impío, así que podemos suponer que desde muy temprana edad fue tentado a seguir las pisadas de su padre, sin embargo se mantuvo fiel al Dios verdadero. Advertido por los errores de las generaciones pasadas, decidió hacer lo recto en vez de rebajarse al nivel de pecado y degradación en que habían caído su abuelo y su padre. Decidió obedecer las instrucciones que había recibido para dirigir a los gobernantes de Israel y su obediencia hizo posible que Dios lo usara. En este momento escucharemos una alabanza musical, seguida por el relato misionero de esta semana. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © Niños firmes como la roca 11 Tercer panelista ¡Feliz Sábado! Es un honor hablarles de uno de los personajes más famosos y admirados de la Biblia, quiero hablarles de David. David nació en Belén y fue hijo de Isaí. En su adolescencia se dedicaba a cuidar los rebaños de su padre. El sencillo pastor entonaba los himnos que él mismo componía y con la música de su arpa acompañaba dulcemente la melodía de su voz fresca y juvenil. El Señor había escogido a David, y lo estaba preparando, por medio de su experiencia en el campo con las ovejas, para la obra que se proponía confiarle en los años venideros. David, en la belleza y el vigor de su juventud, se estaba preparando para ocupar una elevada posición entre los más nobles de la tierra. Empleaba sus talentos, como dones preciosos de Dios, para alabar al Creador. Las oportunidades que tema de entregarse a la contemplación y la meditación sirvieron para enriquecerlo con aquella sabiduría y piedad que hicieron de él el amado de Dios y de los ángeles (presentar el Nuevos Horizontes). Cuarto panelista En esta ocasión tengo la oportunidad de hablarles de una jovencita tierna pero muy valiente. Esta joven es María. Ella vigiló a Moisés cuando su madre lo deposito entre los juncos. A esa temprana edad, María mostró su fortaleza de carácter al vigilar el cesto en que estaba escondido el niño Moisés. Su dominio propio y su tacto contribuyeron a salvar la vida del futuro libertador de Israel. Posteriormente ella misma colaboró con Moisés y Aarón en la liberación del pueblo de Dios. Quinto panelista Me siento honrado de poder hablarles del ejemplo más fiel y admirado de todos los tiempos. Les hablaré de la niñez de Jesús. El Salvador pasó su niñez y juventud en una aldea de montaña. No había en la tierra lugar que no habría resultado honrado por su presencia. Es admirable el breve relato que tenemos de sus primeros años. La Biblia lo resume todo en estas palabras: «Jesús crecía en sabiduría, y en estatura, y en gracia para con Dios y los hombres» (Lucas 2:52). Su inteligencia era viva y aguda; tenía una reflexión y una sabiduría que superaban a sus años. Sin embargo, su carácter era de hermosa simetría. Las facultades de su intelecto y de su cuerpo se desarrollaban gradualmente, en armonía con las leyes de la niñez. Durante su infancia, Jesús manifestó una disposición especialmente amable. Sus manos voluntarias estaban siempre listas para servir a otros. Revelaba una paciencia que nada podía perturbar, y una veracidad que nunca sacrificaba la integridad. En los buenos principios, era firme como una roca, y su vida revelaba la gracia de una cortesía desinteresada. División en clases Conclusión Como ya hemos visto, la Biblia muestra claramente que es posible ser fieles a Dios y firmes de carácter desde nuestra niñez o adolescencia. Sin lugar a dudas, esa es una de las razones por las que las historias de los personajes que hemos visto hoy se registraron en la Biblia. Dado que Dios es el mismo ayer, hoy y por los siglos de los siglos, y él guió la vida de aquellos niños y adolescentes, seguramente puede guiar la tuya. Te invito a que escojas a Jesús como tu modelo y que te mantengas firme como una roca en los buenos principios y en el amor a Dios. www.escuela-sabatica.com 12 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Himno final N° 344, «Entonad un himno». Oración final KENIA ALMANZAR ACOSTA Directora de Ministerios Infantiles de la Unión Dominicana «Así alumbre vuestra «Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre, que está en los cielos» luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre, que está en los cielos» Mateo 5:16 Mateo 5:16 RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 5 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA El Gran Chasco Tercer sábado 20 de octubre Obj etivo Recordar que Jesús vendrá, aunque nadie sabe el día y la hora. Fomentar la unidad de la iglesia aún en medio de las circunstancias más difíciles. Al director Este programa es una dramatización del Gran Chasco. Personajes: Elena G. de White (narradora), Dereck, William Miller, Sarah, Pastor Evangélico 1, Pastor Evangélico 2. Pr Brown, Robert, Thomas, Gean, tres o cuatro miembros de la iglesia. Elementos de ambientación: El mobiliario debe parecer antiguo, evocando el siglo XIX. Un escritorio, una silla, hojas en blanco, algunos libros viejos, una pluma para escribir y ropa de la época. Durante todo el programa aparecerá en la plataforma Elena G. de White, sentada junto a una mesa o escritorio, simulando que está escribiendo. Nota: Las narraciones fueron extraídas de Testimonios para la iglesia, tomo 1. Este día podría omitir el relato misionero y el Nuevos Horizontes para ahorrar tiempo. Se abre el telón y entran hacia la plataforma el hermano Dereck y William Miller. Simularán que van a iniciar el culto en la iglesia. Al mismo tiempo entran por el pasillo central, Sarah, Robert, Thomas y Gean. Vienen conversando de sus expectativas sobre el tema de la Segunda Venida. Se sientan adelante. Plataforma tradicional. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 14 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Himno N° 506, «¡De pie, de pie, cristianos!». Lectura bíblica Tito 2:13. Oración Drama Narrador: Es el mes de marzo del año 1840 en Maine, Estados Unidos. Dereck: Buenas días, hermanos y hermanas. Nos satisface contar con la presencia de todos. Gracias por estar aquí, y esperamos que el Santo Espíritu de Dios toque sus corazones en este día. Los dejo con un mensaje final que estará a cargo de un siervo de Dios: el hermano Miller Miller: Buenas días para todos. Que la paz y el conocimiento de Dios inunde nuestro ser. Hoy quiero presentarles un mensaje urgente. Durante mucho tiempo he estado analizando la santa Palabra de Dios y he comprendido una hermosa profecía. Jesús regresará pronto por su pueblo. El vendrá y salvará a todos los que lo acepten como Señor y Salvador. Debemos rendir todo nuestro ser al Señor. Es necesario hacer un examen minucioso de nuestros pecados. Él ha prometido en su Palabra que perdonará a todo aquel que venga con humildad y con un corazón arrepentido. Pronto Jesús aparecerá en las nubes de los cielos, así lo aseguran tas profecías: y se irán con él todos los que lo acepten como Salvador y le hayan confesado sus pecados En el nombre de Jesús les amonesto a que acepten su invitación; el tiempo se acaba y ya no habrá más oportunidad. Rinde tu vida a Jesús y cuando él aparezca en los cielos podrás ascender junto a sus santos ángeles y vivir con él Por toda la eternidad. ¡El día grande de Jehová está cercano! Sarah: (Se pone de pie) Yo deseo aceptar a Jesús como mi Salvador. Quiero estar lista cuando él regrese a la tierra. Miller: Dios te bendiga. Si le aceptas con todo tu corazón, él perdonara tus pecados y te llevará al cielo en su pronto regreso. Quiero orar por ti. Por favor, ven hasta aquí (pasa al frente). Oremos: Señor y Dios, alabo tu nombre porque otra alma ha sido apartada para tu remo. Úngela con tu Espíritu, abre su entendimiento para que ella pueda comprender tu Palabra, y que al tú venir a buscar a tu pueblo, ella sea una de los salvados. Toca el corazón de muchos para que te acepten y se salven Que tu promesa se cumpla y que nuestros ojos la vean. En el nombre de Jesús, amén (Miller abraza a Sarah y todos salen). Elena está sentada en su silla, en la plataforma, y simula escribir al tiempo que lee todo lo que dirá a continuación. Elena: En una reunión similar a esta fue que le confesé al Señor mi necesidad de asnada. Me sentía culpable y pensaba que nunca sería digna de ser llamada hija de Dios. Le comenté a mi hermano de mi desesperanza por ser pecadora y este, con lágrimas en los ojos me dijo: «Elena, estoy seguro de que si le pides con fe al Señor Jesús el perdón de tus pecados, él te perdonará». Sé que había muchas personas con sentimientos similares a los míos. Fue por eso que en una de las reuniones, me llenó de alegría escuchar este mensaje: Míller sube a la plataforma y se dirige a la congregación. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El Gran Chasco 15 Miller: Dios les bendiga, queridos amigos y hermanos. Una vez más nos encontramos en este lugar para compartir un mensaje especial con ustedes Quiero hacer referencia a una porción de la Biblia que probablemente muchos han escuchado: la histona del rey Asuero y la situación difícil que vivió y enfrentó Ester. Ella, siendo muy valiente, se presentó ante el rey sin ser llamada; y estando consciente del riesgo que corría su vida, dijo: «Si perezco, que perezca». Pero su sentido de misión y compromiso con su pueblo eran más importantes que su propia vida. Decidir sabiamente nunca ha sido fácil. Sé que muchos de ustedes están vacilando y no toman la decisión de entregarse a Jesús. Sienten temor. Anhelan ser salvados y recibir el perdón, sin embargo, mantienen la duda y continúan siendo esclavos del pecado y del temor. ¡Vengan a Jesús y encontraran un salvador lleno de gracia y perdón!, y así como el Rey Asuero extendió su cetro a Ester en señal de aceptación. Dios tiene sus brazos abiertos para perdonar a todo el que se rinda a sus pies. Extiende tu mano y toca el cetro de la gracia de Dios. Pronto Jesús aparecerá en las nubes del cielo y mi deseo es que estés listo para recibirlo e irte con él al cielo. ¿Hay alguien que desea aceptar a Jesús? ¿Hay alguien? ¿Habrá alguien que quiera recibir al Señor como su Salvador? Si no hay nadie, solo me queda decir que el tiempo se acaba. Si escuchas hoy su voz, no endurezcas tu corazón (sale Miller). Elena está sentada. Elena: Generalmente estas reuniones producían un despertar general entre los visitantes, otras veces no. El mensaje del advenimiento de Jesús llegó a los ordos de miles de personas. Sin embargo, muchas iglesias, por no decir casi todas, cerraron sus puertas al hermano Miller y su mensaje. Transcurrido el tiempo, el mensaje del advenimiento de Jesús era rechazado por pastores de varias denominaciones. Entran los dos pastores evangélicos a la plataforma. Pr. evangélico 1: Esto no puede continuar así. Hace algunos días invité al señor Miller para que tuviera el tema central del culto en mi iglesia y todo lo que hizo fue hablarle a la congregación de la profecía de los 2,300 días y de las 70 semanas. Él hace una buena exposición de su teoría y es muy elocuente. Parece que hablara con el poder del Espíritu Santo. Como es de esperar, provocó una gran conmoción en los hermanos y no quiero confusión en mi iglesia. Él es un fanático. Todos los temas que predica concluyen en la venida de Jesús para el año 1843. Pr. evangélico 2: ¡Qué bueno que me comenta esto, pastor! Yo he escuchado que el Sr. Miller es un hombre de Dios; he conversado con él en varias ocasiones y creo que su teoría tiene mucho de realidad, pero al igual que usted, no quiero que el temor se apodere de los miembros de mi congregación. Creo que debemos reunirnos para tomar medidas serias. No podemos permitir que esto se nos escape de las manos. Pr. evangélico 1: Tiene razón, pastor Vamos a organizar una reunión. Salen los dos pastores por el pasillo central. Elena continúa sentada, escribiendo y recordando. Elena: A pesar de todos estos impedimentos, el hermano Miller y muchos otros que habían decidido obedecer a Dios, continuaron anunciando el mensaje del regreso de nuestro Señor. Entre ellos se encontraban el Pr. Brown y el Pr. Stockman. Mi hermana gemela, Sara y yo decidimos ganar dinero y emplearlo en la compra de libros y folletos para distribuirlos gratuitamente. El tiempo era muy corto y sentimos la urgencia de llevar el mensaje de la segunda venida de nuestro Salvador. Este material lo entregábamos a personas de confianza para que lo enmaran al extranjero. Entra Sara con Wíllíam Miller. Sara: Hermano Miller, aquí tengo todos los folletos que se van a distribuir esta tarde. Muchas personas están conociendo del Señor y están rindiendo sus vidas a él. www.escuela-sabatica.com 16 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Miller: Es necesario que todos hagamos algo. Nuestro Señor viene a buscar a su pueblo y todos deben saberlo. Vamos a recoger a Elizabeth y luego saldremos a llevar estos folletos. Oremos antes de salir: Señor y Dios, nos colocamos en tus manos. Haz tú la obra y toca los corazones para que te acepten. Te amamos y anhelamos tu pronto regreso. En el nombre de Jesús, amen. Salen los dos por el pasillo central. Elena: Continuamos haciendo la obra a medida que los días transcurrían. Experimentamos la solemnidad del tiempo que estábamos viviendo y todo nuestro ser se estremecía al saber que el tiempo ya no sería más. Con sentido de urgencia procuramos purificar nuestras vidas a fin de estar listos para el encuentro con Jesús. El Espíritu de Dios impartía poder a todos los que se disponían a predicar y anunciar su verdad. En esas reuniones se sentía la presencia de los santos ángeles que se paseaban en medio de la congregación; y mucha gente se añadía diariamente al pequeño grupo de creyentes. Entran a la plataforma las personas que formaron la iglesia al principio del programa: Dereck, William Miller, Sarah, Robert, Thomas, Gean. Si es posible, incluya más personas para un mayor grupo. Hablan en mímica. Elena: Se aproximaba el punto culminante de la espera. El momento de nuestro anhelado encuentro con Jesús. Nos acercamos a ese momento con calma y solemnidad. Todos se arrodillan y se toman de las manos. Miller ora. Miller: Padre nuestro que estás en los cielos, alabado, glorificado y engrandecido seas, Señor Todopoderoso; nuestro Redentor y Salvador. Aquí hay un grupo de tus hijos fieles que anhelan ver tu rostro y ascender al cielo para estar en tu presencia para siempre. Venimos ante ti con corazones humildes, rendidos a tus pies; esperamos nuestra liberación. ¡Salva a tu pueblo Señor! Llévanos a tu santa morada, la patria celestial. En el nombre de Jesús, amen (se quedan de rodillas). Elena: Los verdaderos creyentes descansaban en una dulce comunión con Dios Ninguna de las personas que experimentó esta experiencia podría olvidar esas preciosas horas de espera. Nos presentamos ante Dios con vestiduras blancas, no literales, sino con un carácter limpio de pecado por medio de la sangre de Jesús. De pie, siguen conversando, en mímicas, a medida que Elena habla. Comienzan a mirar el reloj y a hacer gestos de cuestionamiento porque Jesús aún no llega. Algunos están tristes, otros decepcionados, irritados... Elena: Los asuntos mundanos fueron dejados de lado. Cada uno examinó cuidadosamente sus pensamientos y emociones más íntimas. Pero paso el tiempo de nuestra espera, y Jesús no apareció en los cielos. Robert: Hermanos, no es necesario seguir esperando. Hemos confiado en una mentira. Jesús no vendrá. Perdimos nuestro tiempo. Miller: La Palabra de Dios asegura que Jesús vendrá a buscar a su pueblo y yo lo creo. Ahora bien, puede ser que los cálculos que hicimos tengan un error. Pero sé que Jesús Nene, y nada ni nadie lo sacará de mi corazón. Él dice que si necesitamos sabiduría y se la pedimos, él nos la dará. ¡Hermanos, no desfallezcamos! ¡Sabemos que Jesús viene! ¡Y vendrá! Ahora nos toca investigar con mayor dedicación y él nos dará sabiduría. Robert: Pues yo no creo nada de lo que usted dice. Gean: Yo tampoco. ¡Vámonos de aquí! Salen por pasillo central. Los demás se arrodillan v oran. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El Gran Chasco 17 Pr Brown: (Con voz entrecortada) Hermanos, oremos: Señor y Dios, estamos tristes y no comprendemos lo que ha sucedido. Solo te pedimos que a pesar de todo lo ocurrido, nuestra fe salga fortalecida y que nuestra esperanza en tu venida no se apague. Ayúdanos a seguir adelante y muéstranos el camino que debemos seguir. Manifiesta tu gracia en tus siervos. Necesitamos un milagro: Haznos uno en ti, Señor, y danos las fuerzas y el valor, porque no sabemos cómo continuar en medio de esta gran crisis. Te amamos, Señor, creemos y esperamos en ti. En el nombre de Jesús, amen. Se quedan de rodillas. Puede reproducir la canción Haznos Uno del coro del Tabernáculo de Brooklyn. Luego salen todos. Elena: Aquella fue la primera gran prueba que soportamos los que aguardábamos el regreso de Jesús en las nubes de los cielos. Fue grande el chasco del pueblo de Dios. Los que se burlaban de nosotros y de nuestra doctrina sentían que habían triunfado Quedamos perplejos y chasqueados, sin embargo, no renunciamos a nuestra fe, ni nos desanimamos. Debíamos esperar y confiar sin dejar de reunimos para recibir más instrucción y valor para continuar con nuestra obra. Dios probó a su pueblo en 1843. Efectivamente habíamos cometido un error en el cálculo de los períodos proféticos. Pero esto no fue descubierto enseguida. Pero al orar fervientemente, descubrieron dónde estuvo el error. Entran hacia la plataforma el Sr. Miller y el Pr. Brown. Miller: Pr. Brown, el error consintió en que yo no tomé en cuenta el tiempo que se tardó la orden de la restauración del templo con relación al momento cuando se llevó a cabo dicha restauración. Pr. Brown: Efectivamente, hermano Miller. Y ese análisis de la profecía nos conduce a una nueva interpretación, Jesús regresará en 1844. Debemos anunciar esta nueva esperanza a todos nuestros hermanos. ¡Este es un mensaje urgente que todos deben conocer! Continúan hablando en mímica. Elena: Este nuevo mensaje estaba concentrado en la venida de Jesús para el año 1844. Fue llevado de ciudad en ciudad, y hasta las regiones más remotas del país. Fue proclamado por primera vez en verano de 1844. Entran hacia la plataforma los hermanos del principio del programa, el Pr. Brown y el Sr. Miller (con su Biblia en manos). Miller: Queridos hermanos, después de haber estudiado detenidamente la profecía de los 2,300 días y las 70 semanas, Dios nos ha mostrado dónde estuvo nuestro error y nos ha enviado una nueva luz. Es un mensaje urgente que debemos compartir con ustedes. Según las profecías, nuestro Señor regresará por su pueblo el 22 de octubre de 1844. No tenemos tiempo que perder. Proclamemos estas nuevas de salvación a todos (salen todos). Elena: Estábamos viviendo un solemne momento. El amor y el interés crecieron entre los hermanos a medida que los meses transcurrían y se acercaba el gran día de la liberación. La salvación de las almas era para nosotros más necesaria que la comida y la bebida. El Espíritu de Dios moraba en sus seguidores. División en clases Conclusión Entran por el lateral todos los hermanos, incluyendo a Miller y el Pr. Brown. Hablan en mímica. www.escuela-sabatica.com 18 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Elena: 22 de Octubre de 1844. El pueblo de Dios que aguardaba el segundo advenimiento, se aproximaba a ver el cumplimiento de la profecía. El momento fue aguardado con tierna espera. La liberación por fin llegaría y el pueblo de Dios le recibiría en el aire. Todos los hermanos miran constantemente al cielo, hay un ambiente de expectativa y curiosidad. Con actitud de expectación. Miller: ¡Oh Señor, aquí hay un grupo de tus hijos fieles! ¡Te esperamos! Elena: Las horas transcurrieron... (voz entrecortada) El sol se puso y Jesús no llegó. Fue un chasco muy amargo que sobrecogió al pequeño grupo de hijos de Dios. Pero nuestra fe era fuerte. Los hermanos hacen mímicas de cuestionamiento. Miller: (Voz entrecortada) Hermanos, tristemente Jesús no regresó. Siento profundamente lo sucedido. Cometimos algún error, sin embargo, por amor a nuestra salvación, pongamos nuestras mentes en el más allá; permanezcamos firmes, hasta ver que Dios nos envíe una nueva luz. Yo sé que Jesús vendrá en las nubes de los cielos y finalmente liberará a su pueblo. Sigamos adelante hasta que nuestros ojos vean ese día sin igual. Estamos chasqueados, pero no desalentados. El camino que nos ha tocado andar es estrecho. Creo sin lugar a dudas, que algo ha ocurrido hoy en el trono celestial. Estoy firmemente convencido que la profecía es verdadera. Sé también que Dios escuchará nuestra plegaria y se manifestará con poder. Dirigiendo su vista hacia la congregación y hacia el cielo, como haciendo una oración. Oh, Señor, vuelve pronto, es nuestra oración. Tu pueblo espera impaciente. ¿Cuándo aparecerás, mi rey? Anhelamos verte descender en gloria y majestad, por tus santos tú vendrás. Que tu promesa se cumpla y los que duermen sean levantados. Que nuestros brazos se extiendan para recibirte en el aire y verte venir en gloria y majestad, como Rey de Reyes y Señor de Señores. ¡Oh Señor, vuelve pronto, es mi ruego y oración! Dirigiéndose a los hermanos que están junto a él en plataforma. ¡Hermanos, que ninguno se desaliente! Sigamos adelante hasta ver a Jesús aparecer en las nubes. ¡Pongamos nuestra mente en el más allá, ese será un día sin igual! Se abrazan todos como en una cadena, Mientras están abrazados sale la parte especial. Elena: Permanecimos firmes en el Señor y Dios premió nuestra fidelidad. Después del chasco, investigamos cuidadosamente la Biblia con oración y gran atención; y Dios derramó su luz sobre las tinieblas que cubrían nuestra mente. El hermano Miller suponía que la purificación del santuario mencionada en Daniel 8:14 significaba la purificación de la tierra mediante el fuego y que esto se refería a la venida de Cristo y la destrucción de los impíos con fuego. Ahora vemos claramente que esta purificación se refería a la obra final de nuestro Sumo Sacerdote en el cielo, y a la conclusión de su obra expiatoria. Nuestro chasco no fue tan grande como el de los discípulos. Cuando Jesús entró en Jerusalén, ellos esperaban que fuera coronado rey Todos exclamaban «¡Hosanna al Hijo de David!». Habían creído que Jesús reinaría en el trono. Sin embargo, pocos días después, esos mismos discípulos vieron a su amado Maestro tendido sobre una cruz. Sus grandes esperanzas sufrieron un enorme chasco y quedaron rodeados por la desesperanza y la muerte. A pesar de esto, el sepulcro no lo pudo contener y al tercer día resucitó, venciendo la muerte para siempre y derrotando la maldad y el pecado. Luego ascendió al cielo y al mirar a sus discípulos prometió que volvería y así lo hará, un día aparecerá en las nubes para rescatar a sus hijos, para llevar RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El Gran Chasco 19 con él a todos los que permanecieron fieles aún en medio de las más extremas dificultades. Él les dará una vida nueva, un nombre nuevo y el gozo de estar en su presencia por toda la eternidad. Himno final N° 513, «Firmes y adelante». Oración final EVELYN SOSA DE GÓMEZ www.escuela-sabatica.com - Sufrir en la carne 5 Sufrir en la carne Cuarto sábado 27 de octubre Obj etivo Comprender lo importante que es para el cristiano someter nuestra voluntad a Dios y practicar la autonegación. Al director Distribuya los materiales a tiempo a cada participante para que tengan un buen conocimiento del mismo. Permita que los feligreses puedan compartir uno o dos testimonios en relación a alguna victoria obtenida sobre una tentación. Regale algunos recuerdos con mensajes alusivos al tema RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © Sufrir en la carne 21 Introducción El ser humano, cuando salió de las manos de su Creador, no fue diseñado para sufrir. Por lo tanto, rehuir al dolor es algo natural en nosotros. A la mayoría nos gustan las cosas fáciles, que nos cuesten poco esfuerzo y especialmente que no impliquen sufrimiento. La ley del mínimo esfuerzo propone que lo fácil es bueno, que es mejor abandonar el control y dejar que las cosas fluyan. Estos planteamientos han estado afectando la sociedad y aquellos que los practican son los primeros en oponerse a Dios y a su Palabra. La Biblia, contrario a estas teorías, nos llama a no solo a ejercer el control sobre nuestras acciones, sino incluso a entregar nuestra voluntad y control al Señor. Esto en ocasiones produce sufrimiento en un principio, pero al final, obtendremos la corona de vida. Les invito a prestar atención y disfrutar de nuestro programa especial. Primer participante (himno) ¿Qué ha hecho tan famosa a la psicología de la felicidad? ¿A qué se debe el éxito de los pastores que promueven el evangelio de la prosperidad? Seamos realistas, nadie quiere pasar por momentos de dolor y angustia, por eso a todos nos gusta escuchar mensajes de prosperidad y positivismo. ¿Qué nos enseñó Jesús durante su ministerio terrenal? (dé tiempo para que uno o dos de la congregación responda). Leamos 2 Timoteo 3:12. La fidelidad a Dios implica sufrimientos y dificultades; sin embargo, esto no implica ausencia de felicidad, pero mientras estemos en un mundo de pecado, no tendremos felicidad completa. Cantemos el himno n° 420, «Nunca desmayes». Segundo participante (lectura bíblica) Busquemos en nuestras biblias Juan 16:33. Contrario a lo que promueve el evangelio de la prosperidad, Jesús nos advierte que en algunos momentos de nuestras vidas experimentaremos aflicciones. Pero no nos dice solo eso, nos invita a confiar porque él ha vencido al mundo. Y ahí se encuentra la clave del éxito del cristiano. La paz está basada en nuestra seguridad de que a pesar del dolor y de no tener lo que deseamos, contamos con la ayuda divina. Tercer participante (oración) Leamos 1 Pedro 4:1. ¿Qué quiere decir este texto? ¿Cuándo sufrió Jesús por nosotros en la carne? (conceda tiempo para que una o dos personas de la congregación respondan). Cristo sufrió en su cuerpo, cuando fue tentado por Satanás en el desierto. Tres puntos fundamentales que Jesús tuvo que enfrentar fueron: la satisfacción del apetito, los bienes materiales y el poder o la gloria terrenal. Visto de esta manera parece simple, pero un estudio detenido de las tentaciones nos muestra que lo que Jesús experimentó fue mucho más difícil que las tentaciones que nosotros afrontamos hoy. Especialmente porque él es el rey del universo y como tal fue tentado a utilizar su poder infinito para ayudarse a sí mismo. Agradezcamos a Jesús por esta maravillosa victoria por medio de la oración. Cuarto participante (bienvenida) En 1 Pedro 4:1 se nos invita a imitar a Jesús, a no complacer la carne sino luchar contra los deseos que desagradan a Dios. Y resalta este texto que quien ha sufrido en el cuerpo ha roto con el pecado. ¡Esta es una maravillosa esperanza! Un predicador dijo en cierta ocasión que la tentación y el deseo duran una fracción de segundo. Así que un día, cuando me sentí tentada a comer algo que me estaba prohibido por cuestiones de salud, decidí luchar. La lucha me pareció una eternidad; sin embargo, al mirar el reloj, solo habían transcurrido unos pocos minutos. Tuve que luchar en vanas ocasiones más, pero con oración y RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 22 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA entregando mi voluntad a Dios obtuve la victoria. Sé que no siempre será fácil vencer, pero la clave del éxito es perseverar en la lucha, apoyados en Dios. Sean todos bienvenidos a la casa de Dios. Quinto participante (Nuevos Horizontes) «Fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado» (Hebreos 4:15) ¿No le causaron sufrimientos estas tentaciones? (dé tiempo para que contesten una o dos personas de la congregación). Y ¿qué piensan ustedes que el Señor espera de nosotros? Estamos llamados a sufrir en la carne, a abstenernos de complacer nuestros apetitos y pasiones. Debemos entregar a Dios el dominio sobre la conciencia, la razón y la voluntad. Sexto participante (relato misionero) «Convenía a aquel por cuya causa existen todas las cosas y por quien todas las cosas subsisten que, habiendo de llevar muchos hijos a la gloria, perfeccionase por medio de las aflicciones al autor de la salvación de ellos» (Hebreos 2:10). Este texto guarda armonía con lo que expresa la Sierva del Señor: «Las pruebas y los obstáculos son los métodos de disciplina que el Señor escoge, y las condiciones que señala para el éxito». 1 Somos llamados a sufrir en la carne, a ganar victorias sobre el pecado, absteniéndonos de aquellas cosas que hieren el corazón de Jesús y nos alejan de él. En esa empresa contamos con la ayuda de Dios. El relato misionero de esta semana viene desde... Séptimo participante (división en clases) El libro Desequilibrio fatal, página 174 dice: «Jesús era un ser humano, y poseía una carne humana que reclamaba la satisfacción de sus necesidades al igual que la anhelamos nosotros, y la única forma de soportar los ataques del diablo consistió en su disposición de sufrir en la carne para ganar la victoria sobre el pecado mediante el poder de Dios. Cuando el diablo los presione, cuando cada célula de su cuerpo les pida a gritos la satisfacción de sus ansias de pecar, lo único que pueden hacer es echar mano de las promesas divinas de victoria, y abrazarlas mediante una fe fría y desnuda. Van a experimentar momentos de terrible agonía, y se sentirán inducidos a creer que están a punto de morir. Entonces, cuando les parezca que ya no la pueden soportar un momento más, la tentación se desvanecerá, gracias al poder de Jesús». Con este pensamiento quedamos divididos en clases. Conclusión Debemos estar dispuestos a sufrir en la carne como Jesús lo hizo, porque contamos con su ayuda para apartar de nuestras vidas todo aquello que nos aleja de él. «Aparentemente no hay nada más desvalido, pero en realidad más invencible que el alma consciente de su insignificancia que depende totalmente de los méritos de su Salvador. Dios enviaría a todos los ángeles del cielo en auxilio de tal persona, en lugar de permitir que fuera derrotada». 2 Himno final N° 438, «Mira hacia Dios». Oración final DILEISI ALIMARIS PACHECO 1 Elena G. de White. El ministerio de curación (Doral, Florida: IADPA, 2011), cap. 40, p. 338. Elena G. de White. Testimonios para la iglesia (Doral, Florida: IADPA, 2008), tomo 7, p. 7. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 2 5 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA «Y no estuvo más triste» Quinto sábado 3 de noviembre Obj etivo Recordar a la hermandad que la oración ferviente, acompañada de la fe, garantiza nuestro crecimiento espiritual. La oración es el mecanismo establecido por Dios para comunicamos con él en todo momento. A través de la oración, Dios dará lo mejor y lo más conveniente a sus hijos, solo hay que confiar en él. Al director Se debe dar a cada participante su parte por anticipado para que pueda memorizarla y así tener un mejor dominio del programa en general y del tema. Sugerencias Anunciar con anticipación que la Escuela Sabática de ese sábado empezará más temprano, para incluir algunos testimonios sobre respuestas a las oraciones. Preparar recuerdos con textos bíblicos que inviten a la oración (al final de este programa encontrará algunos modelos). La parte especial debe ser acorde con el tema de la oración. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 24 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Introducción y bienvenida Qué difícil es irse en paz después de finalizar una oración, después de abrir nuestros ojos y volver a nuestra realidad de preocupaciones y aflicciones. Justamente estas fueron las palabras de Eli hacia Ana: «Ve en Paz, y que el Dios de Israel te otorgue la petición que has hecho» Resulta difícil tener paz cuando nuestros problemas continúan ahí, pero la respuesta de Ana a las palabras de Eli son sorprendentes: «Halle tu sierva gracia delante de tus ojos —respondió ella—. Se fue la mujer por su camino, comió y no estuvo más triste» (1 Samuel 1:17-18, la cursiva es nuestra). ¡Qué hermosa sensación! ¡Qué hermosa confianza! ¡Qué hermosa certeza ce que al irnos en paz, Dios nos concederá lo que hayamos pedido y nunca más volveremos a estar tristes! En este caso en particular. Ana pidió un hijo, pero, ¿por qué a diferencia de Ana en lugar de irme en paz y no estar triste, me sigo sintiendo afligida y triste? Ana tuvo la seguridad absoluta de que el Señor había escuchado su pedido y de que él tendría en cuenta su petición. El relato indica primero que ella «nunca más volvió a estar triste» y después entonces menciona la respuesta del Señor: «Y Jehová se acordó de ella». Así Ana quedó embarazada, pero Ana tomó la resolución de nunca más estar triste antes de saber cuándo el Señor respondería a su pedido y aún más, si respondería de acuerdo a la voluntad de ella Es importante, como hijos e hijas de Dios, que al llevar nuestras peticiones al Señor con fe, por medio de la oración, tengamos la seguridad absoluta de que él nos escucha y de que no pasa por alto el pedido sincero que proviene de un hijo suyo. Hemos de tener la certeza de que no importa lo que nos aflija o lo que nos entristezca, si lo contamos a Jesús, nuestro amigo, él tomará el control de nuestras preocupaciones y nuestras cargas. Esto es una realidad, no un discurso elaborado o palabras vacías y huecas. La confianza en Dios es uno de los elementos más esenciales de nuestro crecimiento espiritual. Sean todos bienvenidos a nuestro programa de Escuela Sabática, es nuestro mayor anhelo que la oración viva, eficaz y perseverante sea una realidad en nuestras vidas. ¡Bienvenidos! Himno Ana escribió una canción cuando el Señor contestó su petición: «Mi corazón se regocija en Jehová, mi poder se exalta en Jehová. [...] No hay santo como Jehová; porque no hay nadie hiera de ti ni refugio como el Dios nuestro» (1 Samuel 2:1, 2). Con estas hermosas palabras cantaremos todos el himno N° 374, «Dulce comunión». Oración Ana oró al Señor con la certeza de que ante él podía desahogar sus penas, pues tenía la plena seguridad de que el Señor escucha a sus hijos, cuando lo invocamos. La oración es el camino que Dios ha trazado para que podamos obtener lo que necesitamos. En el libro de Hebreos se nos dice: «Acerquémonos pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar la misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro» (Hebreos 4:16). Dios ha señalado un camino por medio del cual podemos buscar y obtener gracia y misericordia, y ese camino es la oración. Acerquémonos confiadamente al trono de Dios por medio de esta oración de rodillas. Alabanza especial La oración en el nombre de Jesucristo es el camino que él ha señalado para obtener plenitud de gozo. En Juan 16:24 se nos dice: «Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid y recibiréis, para que vuestro gozo sea completo». RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © «Y no estuvo más triste» 25 Al pedir en el nombre de Jesús lo reconocemos como una realidad en nuestras vidas. Dios llega a ser real para nosotros, es una bendición cuando entendemos que Dios no es una idea, sino una realidad (entra la parte especial, preferiblemente con alguna canción sobre la oración). Nuevos Horizontes En Filipenses 4:6-7, el apóstol Pablo nos dice: «Por nada estéis angustiados, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús». Este pasaje nos insta a presentar todo ante Jesús, grande o pequeño, a pedirle y darle gracias con la convicción de que él sabe lo que nos conviene y de que en su accionar, procurará siempre cuidar nuestros corazones. Escuchemos el Nuevos Horizontes de esta semana. Relato misionero La oración es el medio establecido por Dios para recibir al Espíritu Santo, en Lucas 11:13 Jesús nos dice: «¿Cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu canto a los que se lo pidan?». Si tan solo orásemos más habría más plenitud del poder del Espíritu Santo en nuestras vidas, no seriamos cántaros vacíos ni siervos inútiles, porque la plenitud del Espíritu estaría en nosotros. Veamos cómo el Espíritu está obrando en tierras lejanas a través del relato misionero. Sección de oración y división en clases En Lucas 21:34, 36 se nos dice: «Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y de embriaguez y de las preocupaciones de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día. [...] Velad, pues, orando en todo tiempo que seáis tenidos por dignos de escapar de todas aquellas cosas que vendrán, y de estar de pie delante del Hijo del hombre». Jesús nos exhorta a no desviarnos del camino de la oración constante, para presentarnos limpios ante Dios en aquel día. Pidamos a Dios como el salmista: Examíname, Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos. Ve si hay en mi camino de perversidad y guíame en el camino eterno» (Salmo 139:23, 24). Con la seguridad de que Dios nos escucha tendremos esta oración especial para dividirnos en clases. Conclusión Aquí se puede insertar otra alabanza especial, preferentemente alguna canción sobre la oración. A través de la oración obtenemos la sabiduría necesaria para comprender la voluntad de Dios (Santiago 1:5). Los caminos de Dios por lo general no son nuestros caminos. Lo que Dios quiere para nosotros no siempre coincide con lo que nosotros queremos, por eso no debemos desanimarnos ni perder la fe y la confianza en que Dios escucha nuestras oraciones y nuestras peticiones. Cuando Dios no se ajusta a nuestros parámetros específicos, el cómo y cuándo hemos de mantener la confianza en su sabiduría, en que su plan es real y mucho mejor para nosotros de lo que nos imaginamos. Dios tiene planes para nosotros, pensamientos de bien y no de mal (Jeremías 29:11). Si confiamos en él y aceptamos su respuesta cosecharemos buenos resultados. www.escuela-sabatica.com 26 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Ana nunca más volvió a estar triste y tomó esa resolución antes de saber si el Señor contestaría afirmativamente a su pedido. No te afanes, pide con perseverancia y fe, pero sobre todo espera en Jehová; él concederá las peticiones de tu corazón conforme a su voluntad, a su tiempo. Ten la certeza de que su voluntad en tu vida será una muestra más de su amor. Confía, y si no obtienes lo que pides, no pierdas la fe. Vive con alegría porque Dios escucha tu oración y ve en paz. Oración final EBELYN DE LA CRUZ – SANTOS «Examíname, Dios, y conoce mi corazón, pruébame, y conoce mis pensamientos. Ve si hay en mí camino de perversidad y guíame en el camino eterno» Salmo 139:23, 24 RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © «Hasta ahora nada habéis pedido en mi Nombre. Pedid y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido» Juan 16:24 5 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA ¿Dónde empieza la misión? Sexto sábado 10 de noviembre Obj etivo Mostrar cómo la familia es el primer campo misionero de cada discípulo de Cristo. Compartir ideas prácticas de cómo apoyar espiritualmente a la familia. Al director Este programa cuenta con la participación de cinco personajes bíblicos, los cuales deben estar vestidos según la época. Puede decorar con imágenes donde se está pintando de rojo los marcos de las puertas de las casas, como un recordatorio de que en el hogar donde está la sangre de Cristo, no habrá muerte. Sugerencias Proyectar una imagen de una familia junto a Jesús. Anunciar el programa durante la semana para motivar la puntualidad. Puede sustituir o complementar el relato misionero con testimonios de personas que llegaron a los pies de Cristo por medio de un familiar. En la parte del Nuevos Horizontes puede hacer una lluvia de ideas sobre lo que podemos hacer para ganar a nuestros familiares y/o confirmarlos en la fe. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 28 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Introducción Bienvenidos sean todos a esta programación de Escuela Sabática. Hoy vamos a tratar un tema muy interesante: El primer campo misionero. Me refiero a ese lugar tan especial para nosotros: el hogar. Esos lazo» eternos: la familia. Veremos cómo Dios bendice los esfuerzos que hacemos para llevar a nuestros familiares a Cristo y/o brindarles apoyo espiritual. Esperamos que esta programación sea de edificación y bendición para todos. Himno (Job) Mi nombre es Job y dentro de todos los detalles por los cuales me recuerdan, quiero que presten atención a uno en particular. ¿Recuerdan que al finalizar los días de banquetes de mis hijos, yo los llamaba para que se santifiquen y ofrecía holocausto por cada uno de ellos? Esto es porque yo era un hombre apartado del mal y temeroso de Dios, y siempre procuré que mis hijos también fueran así. Lamentablemente mis hijos murieron, todos en un mismo día, pero mi esperanza es, que al igual que yo veré a mi redentor con mis ojos, así también lo verán ellos. Siento gozo al pensar que nos veremos junto al rio. Esa es la meta familias juntas por la eternidad. Cantemos el himno N° 592, «Si Dios está, ¡feliz hogar!». Lectura bíblica (Andrés) Mi nombre es Andrés, soy discípulo de Jesús y dentro de lo poco que el relato bíblico menciona sobre mí, creo que una parte muy significativa que quiero traer a colación en esta ocasión es que cuando Jesús llegó a mi vida, de inmediato busqué a mi hermano Simón, a quien Jesús llamó Pedro, para que supiera que habíamos hallado al Mesías y ambos nos convertimos en sus discípulos y llevamos el evangelio a muchas personas. Otro ejemplo que nos ilustra cómo un familiar puede ser clave en el desarrollo espiritual de alguien. Leamos Hechos 16:31-34. Oración (Abraham) Mi nombre es Abraham y en este momento vengo a contarles un detalle importante sobre mi vida familiar: el altar al Señor. En mi tiempo, ese era el lugar designado para los sacrificios Allí nos presentábamos delante del Señor. También apartaba tiempo para transmitir las enseñanzas que el Señor nos encomendó para que se transmitieran de generación en generación. Luego que nos íbamos de ese lugar, el altar quedaba como un testimonio de que nuestra familia servía al único Dios verdadero A la luz de mi experiencia quiero que mediten en lo importante que es realizar el culto familiar y el testimonio que como familia debemos dar en nuestra comunidad y a nuestra familia extendida en general. Oremos por los hogares de nuestra congregación. Música especial (Pedro) Mi nombre es Pedro y brevemente voy a contarles un detalle sobre mi roda familiar. En una ocasión, mi suegra enfermó, el Señor la sanó y ella, muy feliz, nos servía en agradecimiento. Así es, nunca dudemos, en orar por nuestros familiares que nos necesitan. Nunca perdamos los pequeños detalles con ellos. Esto trae mucha alegría y armonía. Ahora escuchemos música especial. Relato misionero (Cornelio) Mi nombre es Cornelio y soy de origen gentil. He venido a contarles algunos detalles de mi vida familiar y cuál fue el secreto de mi éxito. Me conocen por ser piadoso y temeroso de Dios, al igual que todos en mi casa, pero mi gran secreto, como dice el texto bíblico es que yo «oraba siempre a Dios» (Hechos 10:2) RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © ¿Dónde empieza la misión? 29 Así es, una vida de oración. Y en respuesta a mis oraciones. Dios envió a un ángel para responderme y darme la dicha de recibir las buenas nuevas junto a toda mi casa. Escuchemos el relato misionero de esta semana. Nuevos Horizontes «La conversión de Cornelio y de su casa fue tan solo el primer fruto de una cosecha que había de juntarse en el mundo. Desde esa casa se emprendió una obra de gracia que se esparció hasta alcanzar a toda ciudad pagana». 1 División en clases Durante el programa hemos visto algunos personajes bíblicos que nos han dado detalles de sus vidas familiares. Job nos habló del trabajo que hizo con sus hijos. Andrés, con su hermano. Abraham nos habló del altar donde se reunían para el holocausto y el testimonio; Pedro nos habló del detalle de llevar a Jesús a su casa porque su suegra estaba enferma. Cornelio oraba a Dios pidiendo iluminación y le fue concedida. Estas son muestras de cómo se puede trabajar en el primer campo misionero: nuestra familia. Tanto para llevarlos a Jesús como para apoyarlos en su andar cristiano. Incluso si en principio no vemos los resultados deseados debemos confiar en que Dios nos guiara y ayudará con su poder. Ahora vamos a quedar divididos en clases. Conclusión En este momento vamos a tener un juego que nos transmite una hermosa enseñanza. Seis participantes (tres de cada lado) formaran una familia y se tomaran de las manos. Quien dirige tendrá una caja, cofre o frasco que contenga las letras del abecedario. Se saca una letra y se le pide a cada miembro de la familia que participará primero que diga un versículo que inicie con la letra seleccionada. Cuando cada uno diga su versículo toda la familia debe dar un pase hacia adelante. Si un participante no puede mencionar un versículo con esa letra, simplemente se quede detrás y dice «paso». Si la familia se aleja tanto de un miembro que tiene que soltar su mano, quede descalificada y debe sentarse. Gana la familia que llegue junta a la meta. Así es, debemos procurar todos llegar juntos a nuestro hogar celestial. Para concluir vamos a leer una cita: «Nuestra obra por Cristo debe comenzar con la familia, en el hogar [...] No hay campo misionero más importante que éste». 2 Himno final Cantemos con gozo el himno N° 558, «Ama a tus prójimos». 1 2 Elena G. de White. El evangelismo (Miami, Florida: IADPA, 1994); p, 406. Elena G. de White, Consejos para la iglesia (Miami, Florida: IADPA, s. f.), p. 108 www.escuela-sabatica.com El camino más cercano a Dios Séptimo sábado 17 de noviembre Obj etivo Familiarizarnos mejor con la oración, el camino más cercano a Dios Estudiar los diferentes tipos de oraciones y sus beneficios para nuestra vida espiritual. Al director Este programa se puede realizar con una plataforma tradicional o con entradas y salidas, como sea de su preferencia. Para la decoración puede poner una escalera en la plataforma e ir colocando los diferentes tipos de oración en cada peldaño. Puede ser en cartulina o algún material que se prefiera. Al final de la escalera habrá un cielo o arco iris algo que se vea celestial, mostrando que estas oraciones conducirán al cielo. Sugerencias Preparar para la decoración imágenes de manos en posición de oración con los nombres de los diferentes tipos de oraciones. Obsequiar el libro Promesas y oraciones. Obsequiar en la entrada separadores que contengan los diferentes tipos de oraciones (al final del programa encontrará algunos modelos sugerentes). Se puede motivar a la iglesia a escribir oraciones especiales a Dios. El camino más cercano a Dios 31 Introducción La oración abre nuestros corazones a la presencia y majestad de Dios. No hemos de temer a los desafíos, o creer que estamos luchando contra ellos con nuestras propias fuerzas. Un simple «¡ayúdame!» es más que suficiente para que centenares de ángeles acudan a socorrernos. El propósito de la oración no es repetirle a Dios todos nuestros problemas, sino que es un medio para aumentar nuestra fe en su Palabra. La oración es una de las mayores bendiciones de que disfruta el ser humano en esta vida. Por medio de ella podemos acercarnos a Dios. A través de la oración el cristiano puede encontrar el perdón de los pecados (1 Juan 1:9), tener paz en su corazón (Filipenses 4:6-7) y recibir fortaleza por medio del Espíritu Santo (Efesios 3:14-16). Por estas razones, Pablo exhortó con frecuencia a los cristianos a ser diligentes en sus oraciones: «Orad en todo tiempo con toda oración y súplica» (Efesios 6:18). «Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias» (Colosenses 4:2), «Orad sin cesar» (1 Tesalonicenses 5:17). La oración es de suma importancia en la vida del cristiano. Hoy aprenderemos de la oración, diferentes tipos de ella para ocasiones especiales y entenderemos que realmente ella es el camino más cercano a Dios. Primer participante (himno) El primer tipo de oración que deseo compartir con ustedes es la oración pidiendo bendición. «Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas y que tengas salud, así como prospera tu alma» (3 Juan 1:2). Este primer tipo de oración es aquella que pide una bendición completa para otros. Incluye la prosperidad física, emocional y espiritual. Cuando dices: «Dios te bendiga», no solamente le estás deseando lo mejor a alguien, sino que estás tomando parte activa en su bienestar. Ahora bien, cuando bendices a alguien también atraes el favor de Dios hacia ti. Por eso, hoy les deseo las más ricas bendiciones, porque al bendecirlos de todo corazón, también recibo una bendición especial. Reparte bendiciones dondequiera que vayas, ellas volverán a ti, cuando menos lo esperes. Cuando ores, no olvides pedir la bendición por tus familiares, amigos y hermanos. Que Dios te llene de bendiciones; y sabemos que él siempre está dispuesto a hacerlo. «En mi corazón existe un profundo deseo de recibir tus bendiciones, y la vida abundante que solamente tú puedes dar. Anhelo poseer un corazón puro, a fin de poder atraer a otros hacia ti. Te ruego, con la misma insistencia con que lo hizo Jacob en Génesis 32:24-29, que me bendigas. Mantenme cerca de ti y dame la fortaleza y el valor para obedecer tus mandamientos; para de esa forma recibir las bendiciones que me has prometido en Deuteronomio 11:26, 27» (Promesas y oraciones, p 42) Colocar un letrero con la palabra bendición en el primer escalón. Ahora cantemos el himno N° 376, «Dulce oración». Segundo participante (oración) La oración pidiendo perdón El perdón es algo que todos buscamos en algún momento de nuestras vidas, ya sea de un amigo, hermano, o de Dios. El perdón es esencial para la vida; nos libra de los errores del pasado y nos llena de esperanza RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 32 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA para el futuro. Jesús vino a la tierra a morir por nosotros para asegurar el perdón de nuestros pecados. Él mismo dijo: «Esto es mi sangre del nuevo pacto que por vosotros es derramada para perdón de los pecados» (Mateo 26:28). No desperdiciemos el perdón que Dios nos otorga. Él está dispuesto a perdonarnos, sólo tenemos que pedírselo. «Solamente tú puedes perdonarme y quitar la ira que hay en mi corazón. Siento que estoy a la defensiva y que un espíritu de venganza me invade cuando la gente dice o hace cosas que me lastiman. No siento el deseo de perdonarlos, especialmente si la ofensa se repite. Me parece imposible seguir la recomendación de Mateo 18:21-22 de perdonar hasta "setenta veces siete'’» (Promesas y oraciones, p. 170). Colocar un letrero con la palabra perdón en el segundo escalón. Oremos por el perdón, y también para que Dios nos dé su amor, a fin de poder perdonar a otros. Postrémonos ante nuestro Creador. Tercer participante (lectura bíblica) El tercer tipo de oración es la oración pidiendo obediencia Lucas 11:28 dice que si escuchamos y obedecemos la ley, seremos bienaventurados. Dios conoce nuestros corazones y sabe que somos débiles, por eso debemos acudir a él para pedir que nos ayude a obedecerle. Cuando sientas que el enemigo te incita a desobedecer a Dios, recuerda que el poder para resistirlo viene de él. Pídele la valentía y la fuerza para hacer lo correcto. Dile: «Señor ¡Quiero que mi vida esté llena de ti, y que pueda recibir tu bendición! ¡Tu ley es perfecta! Permíteme obedecer tus normas en todo momento No quiero ser culpable de agregar o eliminar parte alguna de tus mandatos, quiero hacer exactamente lo que tú me órdenes. Señor, te ruego que me des el poder de respetar y guardar tus mandamientos. Que no tome en cuenta las tentaciones de este mundo, porque obedecerte es el todo del hombre, como afirma Eclesiastés 12:13. Toma mi mano, Señor, y no me dejes ir. Quiero ser siempre obediente. Amén» (Promesas y oraciones, p. 152). Colocar un letrero con la palabra obediencia en el tercer peldaño. Busquemos en nuestras biblias Lucas 11:27-28. Cuarto participante (bienvenida) La oración de adoración Muchas veces hemos orado por un amigo, un familiar u otro caso específico. Estas son oraciones de intercesión, y Dios escucha las oraciones intercesoras con mucho agrado: pero hay un tipo de oración que es especial para él, es aquella que depende únicamente de él. No tiene nada que ver con lo que nos rodea, sino con lo que Dios es, su poder, su majestad y su gloria. Esta es la oración de adoración. Cuando oramos para adorar a Dios nos olvidamos de nosotros mismos y enfocamos nuestra mente en Dios; reconocemos su poder y esto nos llena de fe. La oración nos recuerda que tenemos un Padre amante y Todopoderoso que nos sustenta; que su poder sobrepasa la mente humana y nos libra de todo mal En numerosos salmos vemos a David recordando el poderío de Dios y adorándole de corazón y con todas sus fuerzas. Salmo 99:1-3: «Jehová reina! Temblarán los pueblos. Él está sentado sobre los querubines; se conmoverá la tierra. Jehová en Sión es grande y exaltado sobre todos los pueblos. ¡Alaben tu nombre grande y temible! ¡Él es santo!». RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El camino más cercano a Dios 33 Es bueno comenzar nuestras oraciones con palabras de adoración, como lo hizo Jesús cuando enseñaba a sus discípulos a orar. Dijo: «Vosotros, pues, oraréis así: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra”» (Mateo 6:9-10). «¡Qué impresionante y magnífico eres, mi Dios! Me inclino humildemente ante ti, con respeto y admiración, para reconocer que tú eres el único Dios del universo. Como dice el Salmo 29:2, te sirvo en la belleza de tu santidad. Tú eres grande, Señor, y tu entendimiento es infinito. Eres perfecto» (Promesas y oraciones, p. 22). Colocar un letrero con la palabra adoración en el cuarto escalón. Sean todos muy bienvenidos a la casa de nuestro Dios. Adorémosle con regocijo. Quinto participante (música especial) La oración de alabanza (esta parte la puede tener el mismo que interpretará la alabanza). «Creador del universo, Dios Todopoderoso, muchas veces he acudido a pedir tu intervención y tu dirección, pero esta vez no solicito nada. Hoy me acerco a tu trono por una sola razón: quiero alabar tu santo nombre. Porque como dice el Salmo 113:5-9: “¿Quién como Jehová, nuestro Dios, que se sienta en las alturas, que se humilla a mirar en el cielo y en la tierra? Él levanta del polvo al pobre y al menesteroso alza de su miseria, para hacerlos sentar con los príncipes, con los príncipes de su pueblo. Él hace habitar en familia a la estéril que se goza en ser madre de hijos. ¡Aleluya!”» (Promesas y oraciones, p. 26). Colocar un letrero con la palabra alabanza en el quinto escalón. Señor, con esta oración te dedico esta hermosa alabanza. Sexto participante (Nuevos Horizontes) La oración pidiendo salvación ¿Alguna vez has orado a Dios por tu salvación? ¿Recuerdas haber dicho alguna vez en tus oraciones: «Dios mío, ¡sálvame!»? Es interesante saber que ¡ya tenemos la salvación, es gratuita! El Señor Jesús nos la otorgó cuando murió por nosotros en la cruz del Calvario. Es un regalo que no merecemos pero, ¿has aceptado ese regalo que Dios te ofrece? «¿Cómo puedo agradecerte por la nueva arda que me has dado? Tu Palabra es mi consuelo y mi alegría. Aprecio ese don maravilloso que es la salvación. Me agrada parafrasear Juan 3:16: «Porque Dios me amó tanto que me ha dado a su Hijo unigénito, para que sí creo en él yo no perezca, sino que tenga vida eterna» Reconozco que debo pagar por mis propios pecados, pero coloco mis esperanzas en la promesa de 1 Tesalonicenses 5:9, donde dice que no estoy destinado a recibir un castigo, sino a recibir la salvación a través de mi Señor Jesucristo» (Promesas y oraciones, p. 196). Colocar un letrero con la palabra salvación en el sexto escalón. Séptimo participante (relato misionero) La oración pidiendo confianza en sus promesas «Querido Dios, tu Palabra está llena de promesas. En cada pasaje encuentro alguna frase que me da esperanza y valor para enfrentar los desafíos de este día: Te agradezco. Señor por recordarme que estás detrás de cada versículo registrado en tu Palabra. Disfruto mucho cuando leo la forma en que le hablaste a Moisés en Números 11:23, porque sé que tu poder www.escuela-sabatica.com 34 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA no tiene límites, y que hoy puedes hacer los mismos milagros que obraste en tiempos pasados. ¡Cuán formidable y poderoso eres!» (Promesas y oraciones, p. 60). Colocar un letrero con las palabras confianza en sus promesas en el séptimo escalón. Octavo participante (división en clases) La oración de agradecimiento Por lo general oramos para pedir algo, pero ¿cuán a menudo oramos para agradecer a Dios por lo que nos concede? Debemos ser agradecidos con el Dador de la vida. «Gracias, Padre misericordioso, por todas las cosas maravillosas que has hecho a mi favor ¡Eres un ser amable y generoso, lleno de gracia y bondad! Siempre trato de recordar que todo lo bueno viene de ti. Tú me has prodigado grandes bendiciones y no hay palabras que puedan expresar mi amor y gratitud hacia a ti. Filipenses 4:6 me dice que todos mis actos deben ser realizados con agradecimiento. Ayúdame, no solamente a pedir, sino también a desarrollar un espíritu de gratitud y de alabanza. Reclamo la promesa de Filipenses 4:7: “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús". Quiero sentir esa paz. Señor, sin importar lo que suceda, reconozco que puedo tener una actitud de agradecimiento. Quiero que las palabras del Salmo 100:1-3 sean mi guía: «Cantad alegres a Dios, habitantes de toda la tierra. Servid a Jehová con alegría, venid ante su Presencia con regocijo. Reconoced que Jehová es Dios; él nos hizo y no nosotros a nosotros mismos; pueblo suyo somos, y ovejas de su prado» (Promesas y oraciones, p. 24). Colocar un letrero con la palabra agradecimiento en el octavo escalón. Ahora quedaremos divididos en clases. Noveno participante (conclusión) Mateo 21:22 dice: «Y todo lo que pidáis en oración, creyendo, lo recibiréis». Recuerda que la oración es el camino más cercano a Dios, y ellas nos llevarán ante su presencia. Ora a Dios. No importa la forma, el momento o el lugar, solamente habla con tu mejor amigo. Él escucha, el responde. Dios es fiel, él te salvará. Himno final Para concluir cantemos el himno N° 376, «Dulce oración». Oración final RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El camino más cercano a Dios 35 www.escuela-sabatica.com - El diario de un j usto 5 El diario de un j usto Octavo sábado 24 de noviembre Obj etivo Hacer una comparación de nuestras vidas antes y después de haber recibido la justificación por la sangre de Jesús. Mostrar cómo la justificación es una bendición. Al director Este es un programa de entradas y salidas. Los participantes llegan juntos con telas manchadas sobre su ropa, simulando ropas viles. El director del programa, en la introducción, les entrega túnicas o batas blancas, y recibe las telas manchadas. No se necesita decoración adicional al nombre del programa. El participante que anuncie el informe secretarial debe tener una tela manchada adicional para presentarla sobre su túnica blanca cuando le corresponda, pero al final del programa, en la división de clases, ya no debe llevarla. La parte musical debe aludir al sacrificio de Cristo. Sugerencias Preparar una tarjeta o marcador con el mensaje de Efesios 4:24. Preparar una proyección con el mensaje de Proverbios 4:18 para la conclusión. Crear un librito o especie de diario, de 10.5 cm de ancho por 14 cm de alto. Entréguelo a los primeros en llegar, para que escriban allí sus oraciones y pensamientos. Al final de este programa encontrará una idea para la portada En caso de no ser posible, puede también obsequiar libretas para el mismo fin. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El diario de un j usto 37 Introducción Se lee el siguiente texto mientras los participantes van entrando cabizbajos con sus telas manchadas sobre su ropa y se colocan uno al lado del otro frente a la congregación. «Hace mucho tiempo, un grupo de personas con ropas siles caminaba por la vida. Conocieron al Señor Jesús y esto hizo que reconocieran su verdadera condición. Con corazón contrito y humillado le pidieron que los limpiara de sus manchas; él lo hizo y les otorgó el perdón de sus pecados, entregándoles túnicas blancas». Director: Muchas gracias por venir en esta mañana para recibir sus túnicas blancas (le coloca la bata blanca sobre la ropa a cada participante). Esta túnica estaba sucia y manchada por el pecado, pero ya está impecable. Ahora cada uno de ustedes tiene una misión especial: debe mostrar la blancura de su ropa a los que todavía no la poseen. Cuiden de no mancharse nuevamente mientras realizan su misión. Pero atraer a otros debe ser su principal tarea. Ahora que han sido justificados, no por sus méritos sino por los de Cristo, serán llamados «Justos». Vivan por fe y reflejen a su Salvador (reciben la túnica y se sientan en sus lugares en la plataforma para iniciar sus respectivas participaciones). Primer j usto (himno) En mi primer día como Justo mi corazón rebozaba de gozo y paz delante del Señor. Sabía que había tomado la mejor decisión de mi vida y que a partir de ese momento todo saldría bien. Muchos le llaman a esto «el primer amor». Cantemos el himno N° 346 «¡Feliz el día!» Segundo j usto (lectura bíblica) En mi segundo día como Justo empecé a adquirir conocimientos. Me encontré con verdades y principios que rigen las vidas de todos aquellos que desean cumplir la voluntad de Dios. Luego de la justificación toda mi vida cobró sentido, ya que la pena de muerte que había heredado había sido pagada por Cristo en la cruz del Calvario. Ahora viviré eternamente. Leamos esto en Romanos 5:6-11. Tercer j usto (oración) En mi tercer día como Justo debía iniciar mi misión de atraer a otros que no conocen al Señor, para que conozcan a Jesús y puedan pasar de muerte a vida. Este no es un trabajo sencillo, pero tampoco es imposible porque descubrí que el Espíritu Santo me dota de dones especiales para llevar ese mensaje. Él quiere ver en mí la disposición y el amor por aquellos que aún no conocen o no han aceptado el amor perdonador de Dios. Vamos a orar para que el Espíritu Santo nos use como instrumentos para traer almas a los pies de Cristo. Cuarto j usto (alabanza musical) Siendo el cuarto día, y después de haber salido a mostrar mi traje blanco a todos aquellos que todavía no lo tienen, me siento muy regocijado(a) porque tengo vida en Cristo. He meditado en lo que significa ser un «Justo» y eso me hace sentir muy especial. Mi precio es alto. Mi Redentor dejó su trono por mí. Siendo inocente, cargó con mi culpa y por sus llagas he sido sanado(a). Escuchemos esta canción sobre el sacrificio de Cristo en la cruz del Calvario y meditemos en lo que significa haberlo aceptado. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 38 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Quinto j usto (informe secretarial) Estoy muy triste porque mi traje se ha manchado. Siento mucha vergüenza y he intentado lavarlo con mis propias manos. Seguro si actúo correctamente podré quitar mi mancha. Creo que no es muy visible, así que la podré ocultar hasta que desaparezca. Me voy a quedar sentado(a) hasta que pueda borrarla y mientras tanto, escucharemos el informe secretarial. Sexto j usto (relato misionero) Hoy me he sentido desanimado(a) porque he logrado opacar mi mancha, ya no se ve tanto, pero siento que está presente. Esa situación me ha quitado el gozo que sentí al principio y la verdad es que no me siento motivado a mostrar mi traje a los que aún no conocen a Cristo. Seguiré actuando bien, pero les confieso que me siento angustiado(a) pensando en la venida del Señor. Siento que no estoy preparado(a). Quisiera un consejo sobre esto y lo voy a buscar en la Biblia, mientras escuchamos el relato misionero de esta mañana. Séptimo j usto (Nuevos Horizontes) Hoy ha sido un día de confrontación conmigo mismo(a). La Biblia me ha mostrado que no hay otro nombre en quien podamos ser salvos, sino en el nombre de Jesús. No debí tratar de lavar mis vestiduras, sino ir y ponerme a cuentas con el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Acudí a él y me ha lavado, luego me dijo: «Vete y no peques más». También me ha dicho que soy muy débil y que por mis propias fuerzas no podré mantenerme limpio. Necesito estar unido a él como las ramas a la vid. Saber esto me ha hecho muy feliz. Ahora, con mi traje blanco empiezo desde cero. Espero su venida y me ocupo en llevar las buenas nuevas de salvación. Escuchemos las ideas que nos trae el Nuevos Horizontes de esta mañana. División en clases Director(a): Muy bien, ha llegado el momento de reunimos a ver cómo les ha ido en su misión de Justos en la tierra. Antes de contarme sus experiencias voy a citar un texto que se encuentra en el libro En los lugares celestiales, p. 26 «La santificación es la obra, no de un día, ni de un año, sino de toda la vida». Ustedes que han recibido la justificación son los candidatos a la santificación. Su vida diaria está llena de luchas, crecimiento y lecciones aprendidas, muchas veces de forma dolorosa. También es una vida llena de responsabilidad y compromiso de amor a Dios y a nuestro prójimo. Ustedes son las personas especiales que viven por fe y son el punto de referencia para aquellos que quieren conocer el plan de Dios para la humanidad. Primer justo: Una vida de justicia es una vida de gozo. Quiero sentir ese primer amor todos los días. Segundo justo: Vivir en justicia es vivir en la verdad. Saber quiénes éramos y quiénes somos ahora. Un justo vive apegado a la voluntad de Dios y cada día desea conocerla aún más. Tercer justo: Vivir como un Justo es ser un instrumento del Espíritu Santo. Es una experiencia maravillosa recibir los talentos y capacidades especiales para ser las manos y los pies de Cristo aquí en la tierra. Cuarto justo: Ser justo significa saber quién soy y qué representó para mi Salvador el hecho de rescatarme, Es ser consciente de que la justicia me fue imputada y que no la merezco, por lo tanto me doy por entero a Aquel que se entregó a sí mismo por mí. Quinto justo: Vivir en Justicia es vivir dependiendo de mi Salvador. Ser consciente de que soy débil y que si caigo en el camino él puede limpiarme. Debo cuidarme de mi propia justicia y de guardar manchas en mi vida. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El diario de un j usto 39 Sexto justo: Vivo como Justo porque tengo una misión en la vida. Soy salvo y me pongo a disposición de mi salvador para que otros sean salvos. Séptimo justo: Ser Justo es una elección. Yo elegí aceptar a Cristo como mi Salvador personal. Elegí su voluntad ames que el yo. Elegí no permanecer con ropas mies sino llevar la vestidura blanca de su justicia Elegí escuchar su consejo: «no peques más». Elegí el reino de Dios y su justicia. Director(a): Amen. Gracias por compartir con nosotros su vida como Justos en la tierra. Sigan escribiendo en .as páginas de ese diario, que inicia aquí y continuará por la eternidad. En este momento quedamos aromaos en clases para compartir las lecciones de la Guía de Estudio de la Biblia. Conclusión Al finalizar esta programación nos llevamos un hermoso mensaje que nos insta a depender cada día de la justicia de Cristo. Esto, junto a la unción del Espíritu Santo, nos capacita en la importante misión de ser lumbreras para que otros conozcan la verdad de la salvación. Concluyamos con el texto de Efesios 4:24 y cantando con júbilo el himno N° 296, «Comprado con sangre por Cristo». Oración final www.escuela-sabatica.com - El baúl de los obj etos perdidos 5 El baúl de los obj etos perdidos Noveno sábado 3 de diciembre Obj etivo Comprender la importancia de utilizar sabiamente los recursos que Dios nos ha otorgado: talentos, tiempo, el templo de nuestro cuerpo y nuestros tesoros, y las consecuencias que puede tener malgastarlos. Al director Este programa se puede realizar con entradas y salidas Los participantes pueden estar sentados en los bancos y se ponen de pie a medida que les corresponda. Coloque un baúl o cajón en el centro de la plataforma. Dentro del baúl o cajón coloque un reloj (de pared preferiblemente), una estatuilla como un premio, o una medalla (ya sea de cartón brillante o de metal), una alcancía, y una manzana. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El baúl de los obj etos perdidos 41 Introducción Muy buenos días y feliz sábado. En esta mañana tenemos un baúl especial donde encontraremos algunos objetos que se han extraviado. Estos objetos no tienen el nombre de su dueño, pero esperamos que a media que los vayamos sacando, podamos entregarlo a sus respectivos propietarios Para nosotros es importante devolver estas pertenencias porque sabemos que pueden estar haciéndoles falta a sus dueños. Presten atención a cada una de las pertenencias. La primera pertenencia perdida es el talento (saca la medalla o estatuilla). «Dios ha confiado a los hombres talentos, un intelecto donde se original las ideas, un corazón para que sea el asiento de su trono, los afectos para que fluyan como bendiciones para otros, una conciencia para que convenza de pecado. Cada uno ha recibido algo del Maestro, y cada uno debe hacer su parte para satisfacer las necesidades de la obra de Dios» (Consejos sobre mayordomía cristiana, p. 120). No me puedo imaginar a una persona perder su talento otorgado por Dios. Y me surge la pregunta: ¿Cómo se puede perder el talento? Primer participante (himno) Ese talento es mío. Lo he perdido porque decidí no utilizarlo. Lo tuve en mis manos pero determiné que no lo usaría para no tener que rendir cuentas por él. Para mí era más fácil no tenerlo, pues ello significaba menos compromiso. Otra de las razones por las que no quise usar el talento es porque otros recibieron más talentos que yo. Pero hoy he descubierto que Dios a todos nos ha otorgado talentos y capacidades y que usarlos para el avance de la causa glorifica a dios y contribuye a llevar la salvación al mundo que tanto lo necesita. Necesito que me devuelva mi talento, pues voy a utilizarlo para mi Dios y mi prójimo (toma la medalla o la estatuilla). Cantemos con gozo el himno Nº 259, «Mi espíritu, alma y cuerpo». Segundo participante (lectura bíblica) «No es la posesión de talentos magníficos lo que nos habilita para prestar un servicio aceptable, sino el cumplimiento concienzudo de los deberes diarios, el espíritu contento, el interés sincero y sin afectación por el bienestar de los demás. En la asignación más humilde puede hallarse verdadera excelencia. Las tareas más comunes, realizadas con una fidelidad impregnada de amor, son hermosas a la vista de Dios» (Profetas y reyes, p. 164). Leamos en la Biblia 1 Corintios 12:12, 13. Tercer participante (oración) Otro de los objetos perdidos en el baúl es el Tiempo (saca el reloj). Lamentablemente este es un objeto que no podemos recuperar. Sí podemos reorientar la forma en que lo utilizamos en el presente, pero el tiempo pasado se queda dentro de este baúl (coloca el reloj en el baúl). La Sierva del Señor nos dice: «No tenemos tiempo que perder. Hay una obra importante delante de nosotros, y si somos siervos perezosos, perderemos ciertamente la recompensa celestial» (Review and Herald, 19 de diciembre de 1876). RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 42 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Oremos para que nuestro Dios nos permita hacer un buen uso del tiempo y los talentos que nos ha otorgado. Cuarto participante (bienvenida y alabanza musical) Sean todos y todas bienvenidos a esta Escuela Sabática. En el programa de hoy ya hemos visto dos pertenencias extraviadas. Uno ha sido recuperado, pero el otro no. Debemos estar pendientes de no perder nuestros talentos y nuestro tiempo ya que son muy valiosos para nosotros porque con ellos glorificamos a Dios y contribuimos a la salvación de otros. Uno de esos talentos es el canto, pues es una oración con música que nos permite alabar a nuestro Padre celestial. El tiempo que invertimos en alabar a Dios es precioso y nos eleva al trono de la gracia. Escuchemos a… en estos momentos en una alabanza especial. Quinto participante (informe secretarial) Otro de los objetos que encontramos en este baúl es la salud (saca la manzana). Esta pertenencia a veces se recupera y otras veces no. Es muy triste ver cuando alguien la pierde. Nuestra salud está estrechamente relacionada con nuestros hábitos y estilo de vida. Muchas personas gozan de muy buena salud gracias a que se cuidan, adoptando un estilo de vida saludable, absteniéndose de todo aquello que Dios prohíbe ingerir y poniendo especial atención a los ocho remedios naturales. «La salud es un gran tesoro. Es el bien más precioso que puedan tener los mortales. La riqueza, los honores y el saber se compran a precio muy alto, si es con la pérdida del vigor y de la salud. Ninguna de estas cosas puede asegurar la felicidad, si falta la salud» (Consejos para los maestros, p. 273). Así como necesitamos de salud física, también necesitamos nutrirnos con la Palabra de Dios para nuestra salud espiritual. Veamos el avance de nuestra iglesia por medio del informe secretarial. Sexto participante (relato misionero) Muy buenos días, mi nombre es ____________. Hace un tiempo todos me decían que yo tenía el talento de dar estudios bíblicos a las personas no creyentes. Siempre que daba un estudio, las personas me decían que Dios me ayudaba a mostrar las verdades de forma muy sencilla y muchas almas llegaron a los pies de Cristo luego de haberlas instruido. Al pasar el tiempo fui perdiendo el interés en dar estudios bíblicos, porque mi trabajo me agotaba mucho. Completé los estudios bíblicos con algunas personas y otras las dejé de visitar. Siempre decía que cuando tuviera menos trabajo dedicaría más tiempo a llevar el evangelio, pero cada vez tenía más y más trabajo. Así empecé a sentirme poco útil y muy cansado, hasta que luego sólo asistía a la iglesia y a veces tomaba algunas partes en la plataforma, pero no trabajaba en la ganancia de almas. Cuando llegaba el momento del relato misionero, escuchaba con atención y me sentía amonestado por mi indiferencia, pero nunca tomé cartas en el asunto. Una tarde estaba en el hospital, visitando a un compañero de trabajo. Él estaba compartiendo la habitación con un joven con quien yo había estudiado la Biblia, pero que había dejado de visitar. Su madre estaba con él y estaba muy acongojada. Luego de conversar con ella, supe que el joven me había estado esperando en varias ocasiones hasta que se dio cuenta de que yo no iba a volver a dar el estudio. Su padre lo había abandonado cuando era muy pequeño, así que a él le gustaba que yo me interesara en su vida y procurara que él conociera a Jesús, además de los consejos que le daba. También supe que, para mi pesar, que aquella primera tarde que no asistí, él me esperó para que yo le enseñara dónde estaba ubicada la iglesia. Pasado el tiempo, el joven encontró amistades con otros jóvenes que lo llevaron por malos caminos. Me sentí muy apesadumbrado y di gracias a Dios porque le preservó la vida a aquél jovencito y me comprometí con su madre a visitarlo y completar los estudios y a llevarlo conmigo a la iglesia. Gracias a Dios que lo encontré mientras aún había tiempo y tanto él como su madre llegaron a los pies de Cristo. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El baúl de los obj etos perdidos 43 Este relato es un ejemplo de lo que puede ocurrir cuando descuidamos un talento y desperdiciamos el tiempo valioso que podemos usar en mostrar a Cristo a otros que no le conocen. Cada uno de nosotros tiene al menos un talento, también Dios nos otorga el tiempo para utilizarlo. Dios devuelve con creces el tiempo que usamos en su causa. Dios detuvo el sol en Gabaón cuando Josué lo necesitó. Dios capacitó a aquellos que buscaban hacer su obra y los usó para hacer grandes milagros. Te invito esta mañana a usar los talentos y el tiempo en dar a otros ese regalo maravilloso que una vez recibiste. Séptimo participante (Nuevos Horizontes) Ha sido muy interesante saber que se pueden perder los talentos, el tiempo y la salud. Esto nos permite evaluarnos y ser más cautelosos, pero existe otra pertenencia que podemos perder en el baúl (saca la alcancía): los tesoros. Muchos estarán pensando que estoy hablando de las pérdidas de aquellos tesoros que invertimos mal, o aquellos que nos son sustraídos por otras personas o que perdemos descuidadamente. Esas son formas de perder los tesoros, pero en esta ocasión vamos a hablar de aquellos tesoros que perdemos porque dejamos de ser canales de bendiciones para otros. Esto lo explica la Sierva del Señor en la página 339 de El Deseado de todas las gentes: «El Señor dice: “Dad, y se os dará”. “El que siembra con mezquindad, con mezquindad también segará, y el que siembra generosamente, generosamente también segará […] Y puede Dios hacer que toda gracia abunde en vosotros, a fin de que, teniendo siempre toda suficiencia en todo, tengáis abundancia para toda buena obra”». Esta cita nos presenta la relación lógica que existe entre dar y recibir. Si poco damos, poco recibiremos. Dios es misericordioso y bondadoso, Él hace salir el sol sobre justos y pecadores. Él usa canales de bendiciones para expresar su carácter amoroso a la humanidad. Si un canal cierra y retienen más de lo que es debido, Él usará otro canal para seguir bendiciendo. La obra de dios en favor del ser humano seguirá creciendo, incluso sin nuestra participación. «Podemos impartir únicamente lo que recibimos de Cristo, y podemos recibir únicamente a medida que impartimos a otros. A medida que continuamos impartiendo, continuamos recibiendo, y cuanto más impartamos, tanto más recibiremos. Así podemos constantemente crecer, confiar, recibir e impartir» (El Deseado de todas las gentes, p. 337). Te insto esta mañana a que no pierdas los tesoros que Dios ha provisto para bendecir a nuestros semejantes y a su causa. Seamos un canal de bendiciones que Dios se complazca en usar. Si dejamos nuestros tesoros en este baúl (coloca la alcancía en el baúl), Dios seguirá bendiciendo, pero nosotros habremos perdido la oportunidad de participar de esa bendición y ser socios con Dios. División en clases Conclusión Al finalizar este programa hemos visto pertenencias que se pierden y se pueden recuperar, como los talentos; pertenencias que pueden recuperarse o no, como la salud; pertenencias que nunca se recuperan, como el tiempo y aquellos tesoros de las bendiciones de Dios, cuando retenemos más de lo debido. En todos los casos, desperdiciar estos recursos que Dios nos otorga es una pérdida cuantiosa, porque lo que está en juego es nuestra salvación y la de nuestros semejantes. Usamos sabiamente los recursos que Dios nos ha encomendado. Cantemos el himno Nº 253, «Tuyo soy, Jesús». www.escuela-sabatica.com - El perdón, una virtud 5 El perdón, una virtud Décimo sábado 10 de diciembre Obj etivo Presentar los diferentes pasos para perdonar a quienes nos han herido, comprendiendo que perdonar es uno de los requisitos para vivir en armonía con Dios, nuestro prójimo y nosotros mismos. Al director Invite a algunos jóvenes a participar en el desarrollo del programa. Coloque varias sillas, según la cantidad de participantes. Deben simular un diálogo o un debate. Sugerencias Colocar carteles con mensajes que motiven a ofrecer el perdón. Permitir uno o dos testimonios de cómo, al otorgar el perdón, su vida fue transformada. Realizar sección de oración donde se pida a Dios por las veces que hemos guardado rencor o resentimiento. Entregar una tarjetita a la entrada de la iglesia, para que los hermanos escriban palabras que expresen afectos. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El perdón, una virtud 45 Introducción Uno de los temas que Jesús más predicó durante su ministerio terrenal fue el perdón. «Por tanto, si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; pero si no perdonáis sus ofensas a los hombres, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas» (Mateo 6:14, 15) Así que una de las condiciones para recibir el perdón de Dios es estar dispuesto a perdonar a aquellos que en algún momento nos hayan herido, ya sea con palabras o con hechos. Nuestro corazón nos duele cuando otros nos maltratan y rechazan, de ahí surge el enojo, que con el tempo se convierte en resentimiento. Un sentimiento que si no superamos a tiempo, puede endurecer el corazón y adormecer los sentimientos, de tal forma que seamos capaces de hacer con los demás justamente lo que nunca hubiéramos querido que nos hicieran. Hay muchas personas que están convencidos de que perdonar a alguien que les ha ofendido sería darle un regalo que no se merecen. Así que deciden mantener la distancia emocional y el recuerdo del acontecimiento desagradable. Pero, como veremos en el desarrollo del programa, perdonar es un acto de amor hacia nosotros mismos, ya que el dolor que experimentamos cuando nos maltratan solo sana cuando cumplimos el mandato de Jesús de perdonar, incluso a nuestros enemigos. Bienvenidos, y disfruten de m programa de Escuela Sabática. Primera escena Aparece un grupo de jóvenes conversando. Luego aparece el líder del grupo, y ellos ocupan sus asientos. Líder: Buenas tardes, jóvenes; perdonen la tardanza. Mientras venía en el camino, escuché la historia de una joven que fue abandonada por su padre cuando apenas tenía tres años. Un día, sin dar explicaciones, se marchó y nunca más regresó. La niña se crio con escasos recursos económicos y privada del afecto de su padre e incluso de su madre, quien guardó en su corazón el dolor de su partida. Cuando creció, salió en busca de su padre; y su dolor fue mayor cuando, una vez que tuvo la oportunidad de verlo de frente, este no mostró ningún tipo de afecto hacia ella, ni siquiera se disculpó por su partida. Ella le explicó su situación: el maltrato que recibía en casa de su tía y los acosos sexuales de los que era víctima, pues su madre ya había muerto de tristeza y rencor. También le explicó cómo su mundo se le venía abajo. A todo esto, el padre respondió con una fría indiferencia, dejando en la vida de esta joven una herida que ningún medicamento ni tratamiento podría curar. Termino la historia diciéndoles que ahora el padre le pide su hija que le dé asilo en su hogar, porque ya es muy mayor y está enfermo, y no tiene dónde vivir. Ella ha aceptado a Jesús como su Salvador personal y junto a su familia asiste a la iglesia. La pregunta aquí es; ¿Creen ustedes que esta chica debe perdonar a su padre y aceptarlo? ¿Cómo podríamos enseñarla a perdonar? Primer participante (oración) Pedir perdón a Dios. «Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiamos de toda maldad» (1 Juan 1:9). Debemos pedirle perdón a Dios por todo el dolor, el odio, el resentimiento y deseo de venganza que hemos abrigado en nuestro corazón hacia la persona que nos ha ofendido. Si en medio de nosotros (mirando hacia la congregación) hay alguien que todavía no se ha librado de estos RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 46 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA sentimientos, en estos momentos vamos a orar por ti y por todos nosotros, que en algún momento hemos albergado ese resentimiento por los que nos han ofendido (hacer un círculo de oración). Segundo participante (lectura bíblica) Someter nuestros pensamientos a Cristo. Creo que es una situación difícil, pero la Biblia, que es la Palabra de Dios, nos dice en 2 Corintios 10:45: «Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo». Así que debemos rendirnos ante el señorío de Jesús, permitiéndole que gobierne nuestros deseos, pensamientos y emociones. Tercer participante (himno) Mostrar gratitud hacia Dios. Da la gloria a Dios porque te ha perdonado y te ayudará a perdonar. Reconocer las bondades de Dios por cada bendición recibida, por cada pecado perdonado, nos ayudará a mantener un espíritu de alabanza en nuestros corazones. Así no habrá lugar para el rencor, el odio y la venganza que surgen, cuando hemos sido heridos por aquellos a quienes amamos. Cantemos con júbilo el himno Nº 14, «¡Engrandecido sea Dios!». Cuarto participante (bienvenida) Perdonar a quien te ha ofendido. «Soportaos unos a otros y perdonaos unos a otros, si alguno tiene queja contra otro, De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros» (Colosenses 3:13). Debemos reconocer que no somos perfectos y que todos, en algún momento, hemos ofendido a alguien. Por eso, si reconocemos que somos pecadores que a diario ofendemos a Dios, pero que también somos perdonados por su amor, nos será más fácil perdonar a los demás. Con estas palabras le damos una sincera y cordial bienvenida a cada uno de ustedes, y los invitamos a que en el nombre de Jesús le dé una sonrisa al que está a su lado. Y si tiene alguna diferencia con alguien, durante el transcurso del programa pueda resolverla. Este es el momento de entregarle a esa persona la tarjetita, expresándole tus afectos. Parte especial Parte especial, entra sin anunciar. Quinto participante (relato misionero) Exprese sus sentimientos. «Mientras callé, se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día» (Salmo 32:3). Comunique a la persona lo mal que le hizo sentir, y exprésele su dolor, su frustración y tristeza que experimentó, sin ofenderla. Esto le permitirá sacar aquellos sentimientos que alimentan el resentimiento y el odio. Y experimentará paz y tranquilidad al liberarse del yugo que le oprimía. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © El perdón, una virtud 47 Sexto participante (Nuevos Horizontes) Olvide su pasado. «¿Qué Dios hay como tú, que perdona la maldad y olvida el pecado del remanente de su heredad? No retuvo para siempre su enojo, porque se deleita en la misericordia. Él volverá a tener misericordia de nosotros; sepultara nuestras iniquidades y echará a lo profundo del mar todos nuestros pecados» (Miqueas 7:18-19). Dios, el Dueño del universo, no solamente nos perdona sino que olvida nuestras ofensas, y es su deseo que nosotros le imitemos. Abrigar el resentimiento en nuestras vidas nos hará cada vez más miserables, infelices y, como consecuencia, nuestra salud se verá afectada. Es tiempo de librarnos del pasado. No podemos borrar de nuestra memoria lo que sucedió, pero sí podemos recordarlo sin ningún sentimiento de venganza. Séptimo participante (división en clases) No procure vengarse. «No os venguéis vosotros mismos, amados míos sino dejad lugar a la ira de Dios, porque escrito está: “Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor”» (Romanos 12:19) No permitas que los pensamientos negativos hagan nidos sobre tu cabeza. Si no puedes evitar esos pensamientos, clama a Dios; lee la Biblia, alaba al Señor. Evita hablar mal al que te ofendió, o expresar comentarios destructivos. Ahora quedamos divididos en clases. Conclusión Jóvenes, ha sido de mucho provecho para todos el tema que hemos analizado hoy. A veces creemos ser fieles cristianos, pero fallamos en el acto de perdonar. Si al igual que la joven de la historia, has sido abandonado, lastimado por algún ser querido, en estos momentos te invito a practicar las recomendaciones que hemos presentado. El perdón es un don divino, que trae felicidad no solo al que lo recibe, sino también a quien lo otorga. Es tiempo ya de que podamos disfrutar de la libertad que Cristo nos otorga y dejemos de vivir una vida amargada por un hecho que ya pertenece al pasado, y que no podemos cambiar. «Si alguno dice: “Yo amo a Dios", pero odia a su hermano, es mentiroso, pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto? Y nosotros tenemos este mandamiento de él: “El que ama a Dios, ame también a su hermano”» (1 Juan 4:20. 21). www.escuela-sabatica.com - Mis dones al servicio de Dios 5 Mis dones al servicio de Dios Decimoprimer sábado 17 de diciembre Obj etivo Utilizar los dones y talentos que el Señor nos ha dado para glorificar su nombre y predicar el mensaje del segundo advenimiento. Al director Este programa se puede realizar con una plataforma tradicional. Puede usar vestimentas modernas, aunque también va a necesitar un vestuario especial para el ángel. En la decoración se utilizarán muebles de sala o un comedor. Sugerencias Preparar marcadores bíblicos y carteles con frases que motiven al buen uso de los talentos (al final de este programa le sugerimos algunos diseños) Buscar personas para que testifiquen cómo, a través de sus talentos, han ganado almas para Jesús. Permitirle a algunas personas que testifiquen cómo descubrieron sus talentos, y cómo se han sentido al ponerlos a la disposición de la obra de Dios. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © Mis dones al servicio de Dios 49 Introducción Frecuentemente escuchamos hablar acerca de la importancia de poner nuestros dones al servicio de Dios, y algunas iglesias han motivado a sus miembros por medio de un cuestionario de dones espirituales. Pero la única forma en que podemos en realidad descubrir nuestros talentos es practicando en aquellas áreas en las cuales nos sentimos más cómodos o que sentimos que es el recurso que Dios ha puesto a nuestro alcance. «Porque en todas las cosas fuisteis enriquecidos en él. En toda palabra y en toda ciencia; así como el testimonio acerca de Cristo ha sido confirmado en vosotros. De tal manera que nada os falte en ningún don, esperando la manifestación de nuestro Señor Jesucristo» (1 Corintios 1:5-7). Como podemos notar en este texto, los dones espirituales los da Dios. No hay estrategia humana para adquirirlos; y él los otorga a cada quien según su voluntad. Él desea que cada uno de nosotros use sus dones para la edificación de la iglesia y el avance del evangelio. No para satisfacer su ego. Les invitamos a disfrutar de esta maravillosa programación y que sea el deseo de su corazón trabajar para el Señor con todos los dones que Dios ha puesto a su alcance. Primer participante (himno) Hoy día muchos de nuestros hermanos muestran preocupación con respecto a qué don Dios les ha otorgado o cómo obtener los dones que ellos desean desarrollar. Si usted desea servir al Señor quiero decirle que comience con lo que está dentro de sus posibilidades. Cuando María derramó el perfume a los pies de Cristo, ella hizo lo que estaba a su alcance. «El deseo que María tenía de prestar este servicio a su Señor era de más valor para Cristo que todo el ungüento precioso del mundo, porque expresaba el aprecio de ella por el Redentor del mundo» (El Deseado de todas las gentes, cap. 62, p. 531). Al igual que María tú puedes mostrar tu amor por el Señor con lo que esté a tu alcance. Vamos a entonar el himno Nº 610, «Escuchamos tu llamada». Segundo participante (oración) Debemos tener en cuenta que nuestros dones son para la gloria de Dios, la edificación de la iglesia y para llegar a aquellos que todavía no han aceptado al Señor. «No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda» (Hechos 3:6). Hoy, al igual que Pedro y Juan, podemos decir: «lo que tengo te doy», Señor. ¿Qué tienes para dedicarle a Jesús? Puestos de rodillas, vamos a comunicamos con nuestro Dios. Tercer participante (lectura bíblica y bienvenida) Cada uno de nosotros ha sido dotado de habilidades que nos diferencian de los demás, y esas habilidades, si las ponemos en las manos de Dios, se convertirán en los dones que el Señor usará para su obra. No debemos conformarnos con tener dones medio desarrollados, tenemos que ampliarlos y desarrollarlos mediante la práctica diaria. «Únicamente los que estén recibiendo constantemente nueva provisión de gracia, tendrán una fuerza proporcional a su necesidad diaria y a su capacidad de emplearla. [...] Diariamente están aprovechando las oportunidades de servir que están a su alcance. Diariamente están RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 50 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA testificando por el Maestro donde quiera que estén, ya sea en alguna humilde esfera de trabajo o en el hogar, o en un ramo público de utilidad» (Los hechos de los apóstoles, cap. 5, p. 42). Vamos a buscar en nuestras biblias 1 Timoteo 4:14. Con estas palabras jomadas de la Escritura queremos también extenderles una efusiva bienvenida a todos. Cuarto participante (música especial) «La música forma parte del culto tributado a Dios en los atrios celestiales y en nuestros cánticos de alabanza debemos procurar aproximarnos tanto como sea posible a la armonía de los coros celestiales. [...] El canto, como parte del servicio religioso es tanto un acto de culto como lo es la oración. El corazón debe sentir el espíritu del cante para darle expresión correcta» (Patriarcas y profetas, cap. 58, pp. 583, 584). Con estas palabras escuchemos una alabanza musical. Quinto participante (relato misionero) La historia de la viuda que echó las dos moneditas en el templo produce en la mayoría de los lectores un sentimiento de admiración, pero más que un sentimiento esta historia encierra la esencia de lo que es el amor hacia Dios. Ella entendía que con su contribución estaba ayudando para el mantenimiento de la casa de Dios, y era su deseo cooperar con tan maravillosa obra. Y según dijo Jesús: «Echó más que todos» (Lucas 21:3). «No son las cosas grandes que todo ojo ve y que toda lengua alaba lo que Dios tiene por más valioso. Los pequeños deberes cumplidos alegremente, los pequeños donativos dados sin ostentación, y que a los ojos humanos pueden parecer sin valor, se destacan con frecuencia más altamente a su vista» (El Deseado de todas las gentes, cap. 67, p. 582). Escuchemos el relato misionero de hoy. Sexto participante (Nuevos Horizontes) Dios nos capacita con dones y talentos para que glorifiquemos su nombre. Toda persona que en realidad desea agradarle les dará un buen uso. Disfrutemos del Nuevos Horizonte de esta semana. Drama Aparece una señora. Alguien toca la puerta y ella la abre. El visitante le entrega una carta y le dice: «Es de parte de Elena G. de White». Ella la lee. Allí inicia la narración. Narración: Cuando el Señor me mostró su caso, se me hizo recordar lo que pasó hace muchos años, cuando usted creía en la próxima venida de Cristo. Usted amaba y esperaba su aparición... (Ella sale mientras lee la carta y entra una mujer con ropas desaliñadas. Luego aparecen varios niños que lucen con ropas desgastadas. Ella les parte un pedazo de pan duro y les da agua. Mientras continúa la narración ella se postra a orar). Narración: La vi luchar con la pobreza, para sostenerse a sí misma y a sus hijos. Muchas veces usted no sabía qué hacer, y el porvenir parecía oscuro e incierto. En su angustia clamaba al Señor y él la consolaba y ayudaba, y en derredor suyo brillaban rayos de esperanza y luz (cerca de ella está su ángel observando la escena). ¡Cuánto apreciaba a Dios en esas ocasiones! ¡Cuán dulce era su amor consolador! Le parecía que tenía un precioso tesoro depositado en el cielo. Y al considerar la recompensa de los afligidos hijos de Dios, ¡cuánto RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © Mis dones al servicio de Dios 51 la consolaba poder llamarle «Padre»! Mi atención fue dirigida a sus deseos de poseer recursos. El sentimiento de su corazón era: Betty: ¡Oh! Si tan solo tuviera recursos, no los despilfarraría. Daría un ejemplo a los avaros y mezquinos. Les mostraría la gran bendición que se recibe al hacer el bien. Pero a esos codiciosos, a los que tienen grandes riquezas, que cierran su corazón al clamor del más menesteroso, Dios los visitará y los recompensará según sus obras. Hijo: Mamá, a mi amiguito Carlos le compraron un juguete que acaba de salir al mercado, pero dijo que nunca jugaría conmigo. Betty: No te preocupes, hijo, él, al igual que todos los ricos, son más pobres que nosotros a pesar de las necesidades que tenemos, porque tenemos a Dios en nuestro corazón y Él es nuestra mejor herencia. Él es nuestro verdadero amigo, y el mejor regalo que podemos obtener es su amor y protección (ella simula leer la Biblia con sus hijos y el ángel permanece a su lado). Narración: Cuando usted veía que estos hombres, orgullosos de sus riquezas, obraban con altanería, se compadecía y nada la habría inducido a cambiar de lugar con ellos. Sin embargo, usted deseaba recursos a fin de usarlos de una manera que reprendiera a los codiciosos. Dios: (Voz en off). (Llama al ángel. El ángel, mirando hacia arriba, hace una reverencia). La he probado en la pobreza y en la aflicción, y ella no se ha separado de mí ni se ha rebelado contra mí. Ahora la probaré con la prosperidad. Le revelaré un aspecto del corazón humano con el cual ella no está familiarizada. Le mostraré que el dinero es el enemigo más peligroso que puede encontrar. Le revelaré el engaño de las riquezas, le demostraré que son una trampa, aun para aquellos que se sienten seguros contra el egoísmo, contra la exaltación, la extravagancia, el orgullo y el amor a las alabanzas humanas. Narración: Me fue mostrado que ante usted se abrió el camino para que mejoraran sus condiciones de vida, y pudiera al fin obtener los recursos que pensaba usar con sabiduría para la gloria de Dios. ¡Cuán ansiosamente miraba su ángel ministrador esa nueva prueba, para ver cómo la resistiría! Alguien toca la puerta. Betty: (Abriendo la puerta) ¿Sí?, dígame. Visitante: ¿La señora Betty Hernández? Betty: Si a sus órdenes. Visitante: Esta es una carta de invitación para una reunión familiar acerca de una herencia por parte de su bisabuelo paterno. Debe asistir con puntualidad. Betty: Gracias, muchas gracias (lo expresa con mucho entusiasmo y asombro, sale con los niños del escenario). Narración: Cuando llegaron los recursos a sus manos, vi cómo, gradual y casi imperceptiblemente, usted se separaba de Dios. Gastaba para su propia conveniencia los recursos que se le habían confiado, y se rodeaba de las comodidades de esta vida Betty: (Entra vestida con ropas elegantes, y con algunos hombres a quienes ella les da instrucciones de dónde van a colocar los muebles y otras decoraciones para el hogar. Su ángel entra con ella. Hablando por el celular, dice:) Saludos. Es que estoy cambiando la decoración del hogar, tú sabes..., para mantenerme a la moda, y debo estar aquí para vigilar que no me dañen ninguno de estos muebles, ya que son muy costosos… (Continúa hablando por teléfono mientras sigue la narración). Narración: Vi que su ángel la miraba con gran tristeza, con el rostro decaído. Sin embargo, usted no se percataba de su presencia, y seguía comportándose de la misma manera. En medio de su prosperidad, usted no llevó a cabo las resoluciones que había tomado en la adversidad. El engaño de las riquezas la separó de sus propósitos. Aumentaron sus preocupaciones y se extendió su influencia. Los afligidos, al recibir alivio www.escuela-sabatica.com 52 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA de sus padecimientos, la glorificaban, y usted aprendió a amar las alabanzas de los pobres labios mortales. Usted dijo: «Tan pronto como pueda conseguirme una casa, daré para la causa de Dios». Pero cuando tuvo la casa, vio que había que hacer tantos arreglos, de modo que todo fuera conveniente y agradable en derredor, que se olvidó del Señor y de sus derechos, y se sintió menos inclinada a ayudar a la causa de Dios que en los días de su pobreza y aflicción. Betty: (Continúa hablando por el celular) En realidad no fue mi deseo mudarme pero tuve que hacerlo, ya que como sabes debo vivir rodeada de personas que estén a mi altura, a fin de mantener mi influencia y manejar mejor mis negocios. Sí, así es; debo llevarme de los consejos de quienes más me conocen. Sí, claro, todo lo que he comprado es de muy buena calidad, para que cuando mis amigos me visiten encuentren todo perfecto. Narración: Se olvidó de que estaba manejando el dinero de su Señor. Cuando gastaba el dinero — únicamente para estimular la vanidad—, no consideraba que el ángel anotaba las acciones cuyos recuerdos la avergonzarían. Hasta se jactaba usted de poder comprar estas cosas. Ángel: Te glorificaste a ti misma, pero no me magnificaste, dice el Señor. Hija: Mamá, no encuentro mis zapatos blancos. Betty: ¿Y para qué quieres esos zapatos? Usa cualquier otro. Hija: Es que me quiero poner el vestido rosado para ir a la iglesia. Betty: ¿A la iglesia? ¿Y qué día es hoy? Hija: ¡Oh! Mamá, viernes. Betty: No recordaba, pero... no vamos a la iglesia hoy, estoy muy cansada, tengo muchos compromisos que atender. Vamos a hacer el culto familiar y con eso cumplimos alabando a Dios en su día. Nuera: Hola Betty, veo que has cambiado la decoración, se ven muy bien (haciendo un gesto despectivo). Vine a decirte que en la familia se comenta que tú estás dedicando tu tiempo y tu dinero solamente a la iglesia, que te invitamos a las reuniones y no asistes, porque no estamos a tu altura, y que los niños ya no nos visitan por esas mismas razones. Yo no quiero ser chismosa, solo quería que te enteres para que mejores. Betty: Eso no es cierto; yo ni siquiera estoy asistiendo fielmente a la iglesia. El tiempo no me da ni para estudiar la Biblia (mostrando cansancio y desánimo). No estoy haciendo el culto familiar y me la paso en reuniones de negocios. Siempre las visito, pero no tengo tiempo para permanecer tantas horas en el hogar de alguien. Yo he ayudado a muchos en la familia, y tú lo sabes. Nuera: No deberías inculcar en los niños eso del cristianismo, cuando ellos sean grandes, entonces que elijan lo que quieran ser. No puedes obligarlos a estudiar la Biblia y que asistan tan frecuentemente a la iglesia. Llega el hijo de Betty. Hijo: Necesito dinero para salir a pasear con mis amigos, y que sea mucho, porque también iremos de compras. Betty: ¿Y qué piensas comprar? Tú tienes de todo, no te hace falta nada. Hijo: Aún no lo sé, quizá lo mismo que mis amigos compren. El momento decidirá qué es lo que quiero. Solo dame mucho dinero, no quiero pasar vergüenza con ellos. Betty: (Le pasa el dinero) ¡Y no llegues tarde! Nuera: ¿No me piensas enseñar todo lo nuevo que has comprado, Betty? Betty: Claro que sí. Mira, esto me lo recomendó mi amiga Bárbara, ella es experta en decoraciones (salen del escenario, mostrándose Betty muy animada por lo que compró). RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © Mis dones al servicio de Dios 53 Narración: No se apartó usted enseguida. Su apostasía fue gradual. Renunció a los cultos matutino y vespertino parque no eran siempre convenientes. Su nuera le planteaba problemas difíciles y penosos, que tuvieron mucho que ver para disuadirla de continuar los cultos familiares. En su casa ya no se oraba. Sus negocios se convirtieron en el asunto primordial, y el Señor y su verdad quedaron relegados a un segundo plano. Era su deber reconocer a Dios en su familia, sin tener en cuenta las consecuencias. Si hubiera sido fiel, Dios, que había sido su guía, no la habría abandonado a su propia sabiduría. Dios: (El ángel, haciendo reverencia, escucha atentamente, se escucha la voz de Dios en off). Yo dispersaré. Por un tiempo le permitiré andar en el camino que ha elegido; cegaré su juicio y le quitaré su sabiduría. Le mostraré que su fuerza es debilidad y su sabiduría insensatez. La humillaré y abriré sus ojos para que vea cuánto se ha apartado de mí. Si no quiere volverse a mí de todo corazón y reconocerme en todos sus caminos, mi mano dispersará; y el orgullo de la madre y de los hijos será abatido, y la pobreza volverá a ser su suerte. Mi nombre será ensalzado. La soberbia del hombre será abatida, y su orgullo, humillado. Betty sale escenario leyendo la carta. Narración: En la primera parte de su vida, el Señor le impartió los talentos de la influencia, pero no le dio recursos, y por lo tanto no esperaba que usted, en su pobreza, impartiese lo que no tenía, Como la viuda, usted dio lo que tenía. Aunque se veía restringida en su influencia y sus recursos, Dios aceptaba sus esfuerzos para hacer el bien y contribuir al progreso de su obra, según lo que poseía y no según lo que no tenía. Usted es por naturaleza afectuosa y generosa. Ha ejercido estos rasgos de carácter hasta cierto punto, pero no tanto como Dios requiere. La mera posesión de estos dones no es suficiente; Dios exige que se los mantenga en constante ejercicio, porque, valiéndose de ellos, él bendice a los que necesitan amada y lleva a cabo su obra en favor de la salvación del hombre. Vi que todavía tenía oportunidad de volver al aprisco. Jesús los ha redimido por su propia sangre, y le pide que emplee sus talentos en su servicio. Betty: (Quedándose pensativa, abraza la carta y sale con el rostro triste). Noveno participante (división en clases) Puede que haya personas que no utilicen los dones que Dios les ha concedido, o que crean poseer un don que en realidad no tienen, o que lo usen sin amor, solo por vanidad. Puede que, al igual que la hermana de la historia, los afanes del mundo y los placeres nos impidan reconocer a Dios como el Dueño de nuestros talentos, no utilizándolos para su gloria. Es por eso que a todos, el Señor les recuerda: «Cada uno según el don que ha recibido, minístrele a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios» (1 Pedro 4:10). Vamos a poner en práctica nuestros dones, recordando que el Señor nos pedirá cuenta por el uso que hagamos de ellos. Por eso, los que tienen el don de la enseñanza, este es el momento de ponerlo en práctica a través del repaso de la lección en la división en clases. Décimo participante (conclusión) Comienza a servir en tu iglesia con lo que Dios te ha dado. Tienes más talentos que los que puedes imaginar. Deberíamos hacernos siempre la pregunta: ¿Como estoy ejerciendo el don o dones que el Espíritu Santo me ha otorgado? ¿Cuáles son los frutos de dichos dones? Dios desea que explotes al máximo los dones que Él ha puesto en ti; no quiere que te preocupes o envidies aquellos dones que no posees. Debes descubrir tus propios talentos y aceptarlos tal y como son. Puedes descubrirlos trabajando para Dios. www.escuela-sabatica.com 54 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 5 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA ¡Ha nacido un Cordero! Decimosegundo sábado 22 de diciembre Obj etivo Mostrar el verdadero significado del nacimiento del Jesús para la iglesia. Al director Las personas deben ir vestidos con ropas bíblicas. En el caso del mesonero, lleva una toalla y una tinaja. Los pastores deben llevar sus varas. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 56 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Introducción Entra el mesonero. Mesonero: Belén siempre ha sido una ciudad tranquila, pero ahora está llena de gente. Augusto Cesar ordenó un censo y mucha gente ha venido a empadronarse. Muchos de ellos salieron hace varios días y no tienen familiares que los reciban. Ya las posadas están llenas. Y ahora me dicen que va a nacer un cordero y hay que prepararle un espacio. Los corderos nacen en un establo, así que voy a preparar el establo para que nazca este cordero (sale). Himno Entran tres pastores. Pastor 1: Nosotros somos pastores de ovejas y nadie sabe más del nacimiento de un cordero que nosotros. Estábamos cuidando nuestros rebaños y los hemos dejado solos porque vamos a ver un cordero que ha nacido. Un ángel del Señor nos ha dicho que este es un cordero muy especial y lo encontraremos acostado en un pesebre. Esto nos llena de gozo. Cantemos todos el himno Nº 87, «Se oye un canto en alta esfera». Lectura bíblica Pastor 2: ¿Saben ustedes por qué este oficio nuestro es tan especial? Nosotros, cuidamos a aquellos rebaños que luego servirán para expiar los pecados del pueblo. Pero esto es sólo un símbolo del Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Leamos Levítico 1:1, 2, 10, 11. «Llamó Jehová a Moisés, y habló con él desde el Tabernáculo de reunión, diciendo: “Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando alguno de entre vosotros presente una ofrenda a Jehová, podrá hacerla de ganado vacuno u ovejuno. [...] Si su ofrenda para el holocausto es del rebaño de las ovejas o de las cabras, ofrecerá un macho sin defecto. Lo degollará al lado norte del altar, delante de Jehová, y los hijos de Aarón, los sacerdotes, rociaran su sangre en el altar, por todos sus lados». Oración de rodillas Pastor 3: Cuando los ángeles se fueron al cielo después de haber cantado la hermosa canción, nosotros dijimos: «Tenemos que ir a Belén para ver este gran suceso». Fuimos a toda prisa y hallamos este cordero acostado sobre un pesebre, tal como el ángel nos había dicho. Ahora glorificamos a Dios y lo alabamos por haber visto y oído todo esto. Oremos de rodillas. Parte especial Salen los pastores y entra la parte especial sin anunciar. Sugerimos que canten el himno N° 84, «Ve, dilo en las montañas». Informe secretarial Ana: Tengo un informe especial que ofrecer sobre el nacimiento del cordero. Este vino de dos linajes, por parte de José, el linaje de los reyes, y por parte de María, del linaje de los sacerdotes. Así como lo oyen. María era de la tribu de Leví y José de la tribu de Judá. Esto quiere decir que nuestro recién nacido cordero es Rey y Sacerdote, según el orden de Melquisedec. ¡Qué cordero tan especial! También les tengo otro informe, es el informe secretarial del sábado pasado. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © ¡Ha nacido un Cordero! 57 Nuevos Horizontes Relato misionero Parte especial División en clases Narrador: Narrador: Lee Lucas 2:25-27. Simeón: Ahora. Señor, despide a tu siervo en paz, porque han visto mis ojos tu salvación que has preparado en presencia de todos los pueblos. Mesonero: ¿Qué es esto que dices? Yo acomodé el establo y vi ese cordero en el pesebre y no vi nada especial en él. Era un cordero común y corriente que fue visitado por pastores. Pastor 1: Nosotros les dijimos que nadie sabía más de ovejas que nosotros que somos pastores. Dejamos nuestro rebaño para ir a ver este cordero. Sabemos que es el Cordero de Dios, que representa salvación para la humanidad. Pastor 2: Este cordero es un regalo de Dios para nosotros. ¡Qué pena que será inmolado! Él es el cumplimiento de los demás corderos que fueron sacrificados para la expiación, ellos solo eran una sombra de lo que había de venir. Pastor 3: Este es el verdadero significado de su nacimiento: La redención de la humanidad. Juan: Oigan todos, he tenido una visión mientras estaba en la isla de Patmos. Vi de pie a ese cordero que había sido inmolado y tomó el libro de los siete sellos. Y veinticuatro ancianos se postraron ante él y decían: Voz en off de varios hombres. «Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos, porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje, lengua, pueblo y nación; nos has hecho para nuestro Dios un reino y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra». Sacerdote: Yo vi ese cordero que me fue llevado a los ocho días de su nacimiento, pero no vi nada especial en él. Solo realicé el ritual y lo presenté al Señor como cualquier primogénito. Simeón: Así es, para muchos este regalo de Dios no significa nada en sus vidas. Para otros, como yo, ha sido ver el mayor tesoro que pueda tener un ser humano. Este cordero significa vida para todos nosotros. Meditemos en lo que este regalo significa para cada uno de nosotros. Quedamos divididos en clases. Conclusión Sobre nuestro programa de esta mañana, la Sierva del Señor nos dice en El hogar cristiano, p. 434: «Dios ocultó el día preciso en que nació Cristo, a fin de que ese día no recibiese el honor que debía darse a www.escuela-sabatica.com 58 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Cristo como Redentor del mundo y el único que debía ser recibido y en quien se debía confiar por ser el único capaz de salvar hasta lo sumo a todos los que se allegan a él. La adoración del alma debe tributarse a Jesús como Hijo del Dios infinito». Nuestro objetivo fue mostrar el verdadero significado del nacimiento del Cordero de Dios que quita el pecado del mundo, con todas las evidencias de que él era de quien habían hablado las Escrituras. Cada símbolo era un cumplimiento fiel de su llegada al mundo y con él, la esperanza de la redención. Dios desea que explotes al máximo los dones que Él ha puesto en ti; no quiere que te preocupes o envidies aquellos dones que no posees. Debes descubrir tus propios talentos y aceptarlos tal y como son. Puedes descubrirlos trabajando para Dios. Himno final Cantemos todos el himno N° 78, «¡Al mundo paz!». Oración final. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 5 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA ¡Gracias, Señor Jesús! Decimotercer sábado 29 de diciembre Obj etivo Motivar la gratitud a Dios al reconocer las bendiciones recibidas; y cómo, a pesar de los problemas y sufrimientos, nos regala la oportunidad de ver un nuevo año. Al director En este programa los participantes estarán sentados entre la congregación y se irán presentando durante el desarrollo del mismo. Debe entregar las partes con tiempo para que la memoricen. También puede sustituir algunas de las participaciones por testimonios personales de ayuda divina y bendición. Sugerencias Escribir en tarjetas o cartulina mensajes que inviten al agradecimiento por las bendiciones recibidas y colocarlas debajo de los asientos. Puede también recitar un poema o interpretar una canción que exprese su gratitud (al final de este programa encontrará modelos sugerentes para las tarjetas o marcadores). Colocar carteles con palabras que expresen gratitud a Dios. Realizar un servicio de cantos donde se reconozca el poder y amor de Dios. RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 60 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Introducción La gratitud es uno de los primeros valores que nos enseñan desde que aprendemos a hablar. En la infancia nos motivan a decir gracias como una forma de reconocer las bondades recibidas de los demás. Al pasar el tiempo nos convertimos en personas menos agradecidas y más exigentes, como si Dios y la sociedad nos debieran algo. La Palabra de Dios nos insta a ser agradecidos. A través de sus páginas, podemos leer cómo el mismo Señor se regocijaba con su pueblo cuando estos reconocían su misericordia y bondad; y lo expresaban a través de alabanzas. La gratitud a Dios es una forma de adoración. 1 Tesalonicenses 5:18 nos dice: «Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús». Es la voluntad de Dios que a pesar de nuestros problemas, tristezas y dolores, podamos reconocer su presencia y dirección en nuestras vidas. Hoy, último sábado del año, te invitamos a disfrutar de nuestra programación y que juntos podamos decir a viva voz: ¡Gracias, Señor Jesús! Sean todos muy bienvenidos. Escena Entra una joven cantando una canción de gratitud. Mientras esta joven canta, aparece otra chica con rostro de tristeza. Carolina: Oye, Maribel, ¿qué te sucede? Anímate, ya casi está comenzando un nuevo año. Dios te ha dado una nueva oportunidad para alcanzar tus metas y mejorar tu vida espiritual. Debes estar feliz. Maribel: Pero, ¿cómo puedo estar feliz?, si todavía no comience el año y ya estoy recibiendo noticias negativas. A una compañera de trabajo se le murió el esposo, y ella tiene tres hijos. También hay una hermana de mi iglesia, una líder, que está muy triste porque su hijo no quiere volver a la iglesia. A mi mejor amiga la acaban de despedir y yo estoy enferma. Carolina: Oh, entiendo tu situación, pero la Biblia dice: «Dad gracias, en todo porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús» (1 Tesalonicenses 5:18). Mientras tu mente está cargada de tristeza y preocupación, no podrás ver las bendiciones que Dios te ha dado. Te voy a invitar a que me acompañes a la iglesia, donde todos los miembros están agradecidos por las bendiciones recibidas. Maribel: No estoy segura, no me siento con ánimo. Carolina: Vamos, ya verás que saldrás diferente, porque podrás sentir la voz de Dios hablando a tu corazón. Y al final del programa podrás decir ¡Gracias Señor Jesús! (ellas salen por la parte frontal de la iglesia y ocupan el primer asiento). Primer participante (himno) Buenos días, mis hermanos. Hoy es un día de gozo, porque este es el último sábado del año. Para mí este año ha sido difícil, perdí el empleo y no sabía cómo iba a mantener a mi familia. Pero el Señor ha provisto durante los últimos meses y hoy alabo su nombre, porque ya tengo empleo. En el año nuevo, que pronto empezará, Dios nos entrega una página en blanco para que la llenemos de las bendiciones y victorias alcanzadas. Es por eso que ahora vamos a agradecerle por sus bondades, y lo haremos a través de la alabanza. Hagamos nuestras las palabras dichas por el profeta Jeremías: «Saldrá de ellos acción de gracias y voz de nación que está en regocijo» (Jeremías 30:19). Cantemos con gozo el RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © ¡Gracias, Señor Jesús! 61 himno N° 1, «Cantad alegres al Señor» (al terminar de cantar, el participante dice: ¡Gracias, Señor Jesús!). Segundo participante (oración) Se levanta desde su asiento en la congregación. Yo también quiero agradecer a Dios porque sus misericordias conmigo fueron muchas. Yo estaba enferma y tenía que hacerme una cirugía, pero no tenía dinero. Como ustedes sabrán, no tengo hijos ni esposo; así que me llevaron de emergencia a una clínica muy costosa. Cuando mis familiares fueron a averiguar la suma que debíamos pagar, para la gloria de Dios, una joven nos dijo que ya alguien con mi mismo apellido había pagado la cuenta. Y solo dije: ¡Gloria a Dios! porque solamente él es capaz de darnos lo que necesitamos en el momento adecuado. Hoy, al igual que Jesús, puedo decir: «Padre, gracias te doy por haberme oído» (Juan 11:41). Es por eso que les invito a colocarse de rodillas para agradecer a Dios por sus muchas bendiciones. ¡Oremos! (al terminar de orar, ella dice: ¡Gracias, Señor Jesús!) Tercer participante (lectura bíblica) He estado escuchando desde mi asiento y no puedo quedarme callado. El año pasado ingresé a la universidad, y como algunos de ustedes recuerdan, tuve muchos problemas con las materias, ya que algunos profesores querían darme los exámenes en sábado Le pedí a la iglesia que orara, y para la gloria de Dios, aunque los maestros se mostraron renuentes a darme los exámenes en otro día, Dios permitió que surgieran algunos inconvenientes. Y de esta forma se vieron obligados a impartir las pruebas en días regulares de clases. Busquemos el salmo 100 y repitamos todos juntos las hermosas palabras de este salmo (al terminar de leer dice: ¡Gracias, Señor Jesús!). Cuarto participante (bienvenida) El gozo que hay en mi corazón es tan grande que no puedo quedarme en silencio ante la grandeza de Dios, Hace dos años que murió mi hermano, yo apenas tenía unos meses de bautizada cuando mi fe se vio grandemente probada. ¿Por qué permitió el Señor que su fiel siervo muriera a tan temprana edad? A pesar de tener diecinueve años, era un misionero. ¡Cuánto lo admiraba! Nos hablaba a todos en la casa de los Diez Mandamientos, la Segunda Venida de Cristo y el gran amor de Dios al enviar a su Hijo a morir por nosotros en la cruz. El tiempo ha pasado y he podido conocer a ese Dios de amor, y hoy tengo la esperanza de que muy pronto veré al Señor Jesús cara a cara y que podré abrazar a mi hermano otra vez. A ti, querido amigo, si has perdido un ser querido o alguna posesión material, quiero invitarte a conocer a ese Dios de amor. Él llenó mi ruda de paz y de un gozo que solo nosotros, los que tenemos a Cristo en nuestro corazón podemos comprenderlo. Sean todos muy bienvenidos a la casa de nuestro Dios. Les invito a que digan conmigo: ¡Gracias, Señor Jesús! www.escuela-sabatica.com 62 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Quinto participante (música especial) Desde pequeña disfruto cantar. Recuerdo que mientras mi hermano y yo íbamos a la iglesia cada sábado nos agarrábamos de las manos y cantábamos. En una ocasión una señora detuvo a mi madre y le expresó cuánto se alegraba cada vez que nos oía cantar y le preguntó a cuál iglesia pertenecíamos y mi mamá aprovechó esta oportunidad para predicarle. Todavía me regocijo al cantar en mi trabajo. Al escucharme alabar a Dios mis compañeras se muestran alegres porque sienten que la música las llena de paz y gozo. Mis vecinos un escuchado el evangelio de esta forma y los he sorprendido orando y cantando mis canciones. Hoy te quiero invitar a que junto a mí alabes a Dios. Debes cantar al Señor en todo tiempo para que se alejen los pensamientos negativos y pueda reinar un espíritu de gratitud y gozo en nuestros corazones, para poder decir: ¡Gracias, Señor Jesús! Escuchemos música especial. Sexto participante (Nuevos Horizontes) Si hay alguien que no ha de permanecer callada soy yo. Hace un ano fui diagnosticada con lupus. Imagínense, a mi edad y viviendo sola, fue una noticia que transformó mi vida. Comencé a quejarme ante el Señor, a exigirle, diciéndole todas las bendiciones que había derramado, cómo había dedicado mi vida a mi familia. Lo buena que era con mis vecinos, pero sentía que Dios no me escuchaba, Pero hoy glorifico el nombre de Jehová, porque en todo este año, a pesar de mis dolores y quebrantos, todavía puedo ir a la iglesia a adorarle. Sigo testificando de su amor. Los doctores están sorprendidos de cómo puedo mantenerme erguida y salir a trabajar cada día. Puse a un lado la tristeza y le pedí a Dios que me acompañara. ¡Gracias, Señor Jesús! Séptimo participante (relato misionero) Queridos hermanos, yo también me uno a los que glorifican el nombre de Dios. Quiero hablarles de la mujer que es responsable de que hoy yo esté aquí. Esta señora, todos los viernes en la mañana, preparaba un postre y elegía una familia para compartirlo; además oraba por ellos durante la semana. En una ocasión, a pesar de no ser de la iglesia y de ser nueva en el sector, ella me llevó de un sabroso postre que había hecho con amor. Un día nos dimos cuenta ele que ella no había preparado el postre, así que procedí a visitarla y a investigar el por qué no lo había hecho. Nos dijo que había asistido al médico, que tenía cáncer; y que como era sábado ya no podía hacerlo. ¿Sábado?, pregunté; pero si hoy es viernes. Entonces me explicó que casi era la puesta de sol; y me habló del mensaje del sábado y de los Diez Mandamientos. Nos invitó a la iglesia y hoy, junto a mi familia, esperamos el maravilloso retorno de nuestro Señor Jesucristo para encontrarnos con ella otra vez. ¡Gracias, Señor Jesús! Octavo participante (división en clases) Carolina se pone de pie y dice: Yo, al igual que todos ustedes, tengo muchos motivos para agradecer a Dios, y mi alma se deleita en el Señor. Durante casi dos meses, en el frente de mi casa, alguien tiraba varias botellas, y estas contenían un líquido que parecía una mezcla. De todo lo peor que ustedes se pueden imaginar, quien tiraba la botella lo hacía de una a dos de la mañana. Al otro día, solo encontramos los vidrios y el olor pestilente que esta dispersaba. Pues, como humana, ya me estaba cansando el tener que limpiar todos los días ese desastre, así que le pedí al Señor que me mostrara quién hacía esto. Algunos vecinos decían que era brujería, y que una maldición RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © ¡Gracias, Señor Jesús! 63 podía caerme. Un día en el culto familiar oramos a Dios y le pedimos que bendijera a esa persona y nos ayudara a perdonarla. Al pasar algunos meses, una vecina se acercó a mí, y confesó que su hijo era quien hacía esto, que ella me odiaba porque yo era cristiana, a pesar de que yo había sido muy buena con su madre. Ella me pidió perdón y aproveché la oportunidad para presentarle a mi Dios. Vamos a dividirnos en clases para compartir la Palabra de Dios y de esta manera crecer juntos en nuestra vida espiritual. ¡Gracias, Señor Jesús! Noveno participante (conclusión) Maribel se pone de pie y dice: Hoy al venir aquí, estaba llena de pesar y desánimo, mi corazón estaba cargado de tristeza, no podía reconocer las maravillas que Dios ha hecho en mi vida. Pero al escuchar sus testimonios, siento que mi fe ha vuelto a renacer, que un rayo de esperanza ilumina mi vida. Ahora puedo recordar las veces en que Dios me ha protegido de ladrones y accidentes automovilísticos durante todos estos años, camino a la universidad o a mi trabajo. He visto a muchos de mis hermanos en la fe descender a la tumba, pero con la esperanza de volvernos a reunir. También he visto su mano ayudándome a glorificar su nombre a través de mi trabajo, y poder testificar a mis vecinos acerca de su amor, ¡Gracias, Señor Jesús por tu amor, y por permitirnos finalizar con vida y salud este año! Y aunque no conocemos el futuro, en tus brazos estaremos seguros. Himno final Cantemos todos el himno N° 608, «Corazones siempre alegres». Oración final. www.escuela-sabatica.com