242 CAP. XXVII.—LAS SÍLABAS §§ 305-306 larga de la sílaba es consecuencia de ser esta sílaba cerrada. En otros casos, en cambio, prevalecía la pronunciación fonética, y así sabemos por Terentius Scaurus, VII, 12, 1 ss, que en el habla vulgar se pronunciaba nes-cio (en vez de ne-scio, como exige la etimología) ; en inscripciones se lee a veces pos-tea y en los manuscritos aparecen cesuras silábicas como ig-nota, tran-sisse. De todo lo expuesto parece que puede inferirse que el silabeo de las palabras compuestas venía determinado por el grado de cultura de los hablantes, así como por el ritmo de la conversación; en el sentido de que las personas cultas, cuando hablaban en forma cuidada y esmerada, se atenían en el silabeo a la etimología ; en cambio, la gente del pueblo, e incluso la personas cultas, en la conversación descuidada y rápida negligían la etimología y silabeaban de acuerdo con la fonética. 306. La determinación de los límites de las sílabas tiene en el campo de la fonética una especial importancia, porque la mayor o menor persistencia de los fonemas depende no sólo de sus características peculiares y propias, sino también de su posición en la sílaba; así existe una clara relación entre la resistencia de las vocales y la sílaba que ocupan, en el sentido de que las vocales en sílaba inicial son más resistentes que en sílaba interior, y éstas a su vez son también más resistentes que las vocales de las sílabas finales *. Los elementos vocálicos más débiles son los que constituyen el primer elemento de un diptongo, pues, como dice Juret, su articulación es móvil sin punto fijo ni al principio ni al fin. Tratándose de consonantes se ha establecido la siguiente escala de resistencia (de más a menos): 1) inicial de palabra y de sílaba ; 2) inicial de sílaba; 3) con bearse ob-Ugo v o-blego. En el primer caso la sílaba se convierte en cerrada y cuenta como larga; en el segundo, en cambio, la silaba es abierta y breve. * MANIET, § 112; MAROUZEAU, Stilistique, p. 105 s s . ; JURET, p. 22 ss. ; I D . , Dominance..., 10 ss. ; KRETSCHMER, p. 62 ss. ; L E U MANN, p. 54. INDIOE DE PALABRAS appello 273. Appius 260. aftas 267, 303. opud 250, 325. apur por apud 248. oput por apud 252. ligua 158, 261. aquai 184. oquam 316. aaMÍÍo 123. araneolom 70. íirftor 27, 159. arboris 159. íírftoj 319. orrcí 326. areno» 308. ariÍMí 165. arena 245. flr/uííí 248 n. 2. arguo 230. aridus 165. armaque 68. armiger 122. Arpiñas 66, 175, 329. Arpinatis nom. sing. 66, 175. arrogo 128. arj 170, 296. 6 f r i 263. otJi 296. Artcnnisius 301. arniter 214. Arunci 121. dundo 245. ar.r 32S. ascendo 125. asculta 121. asitius 213. »í/>¿ro 263, 285. SJÍO 285. ai por ad 248. ai 322. flíawe 177. aírojr 170. aíta 260, 282, 303. aitai 66. atiendo 282. attenuo 282. attingo 282. auarus 171, 210. awrr/>i 131, 163, 319. audacia 158. a«dax 172. audi'o 167. aiídi'ríT 242. audisse 2§4. awdj'í 66. avdiuisse 264. audi(u)it 329. auetat = habitat 234 auillus 120. au-ium 206. awiia 107. A«HUÍ 107. áurea 187, 206. áureas 131. aurícula 107. aurijex 131. aurum 108. auxiliaris 298. (Mrf'Ho 164, 289. acrn 241, 267. oara 261. Meca 261. Balería = Valeria 234. fiaí/ai = ualeat 114. barba 297. i a í i 318. 6aíú 243. 6aíí¡< 95. 275