Subido por Cleo san martín

Tesis.HabilidadesSocioemocionalesenlosniosenelcontextoeducativo

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Universidad
Veracruzana
Facultad de Psicología
Región Poza Rica-Tuxpan
Tesis para obtener el grado de licenciado en Psicología
Habilidades Socioemocionales de los niños en el
Contexto Educativo
Presenta:
Rosa Harumy Cuervo González
Director de tesis:
Dra. Alma Gloria Vallejo Casarín
Jurado:
Dra. Alma Gloria Vallejo Casarín
Mtra. Celina Márquez García
Mtra. Mercedes Margarita Méndez Flores
Poza Rica, Veracruz. A 17 de junio del 2021
Índice
Contenido
Lista de Tablas ............................................................................................................ 3
Agradecimientos ......................................................................................................... 4
Introducción ................................................................................................................ 5
Capítulo I .................................................................................................................... 6
Marco Teórico ............................................................................................................ 6
¿Qué son las emociones? ........................................................................................ 7
Competencia social en la primera infancia ............................................................. 8
Competencia emocional en la primera infancia ...................................................... 9
Infancia intermedia ............................................................................................... 11
Habilidades Socioemocionales ............................................................................. 12
Factores que Influyen en las Habilidades Socioemocionales ............................... 14
Importancia del apego para el desarrollo de las habilidades socioemocionales ... 15
Habilidades Socioemocionales y trastornos psicopatológicos ............................. 17
Juego en la infancia .............................................................................................. 19
Regulación emocional .......................................................................................... 20
Empatía ................................................................................................................. 21
Expresividad emocional........................................................................................ 22
Capítulo II ................................................................................................................. 23
Método ...................................................................................................................... 23
Participantes .......................................................................................................... 23
Lugar ..................................................................................................................... 23
Tipo y Diseño de Investigación ............................................................................ 23
2
Instrumento ........................................................................................................... 24
Procedimiento ....................................................................................................... 24
Capítulo III................................................................................................................ 24
Resultados ................................................................................................................. 24
Capítulo IV ............................................................................................................... 31
Discusión .................................................................................................................. 31
Referencias ............................................................................................................... 34
Anexos ...................................................................................................................... 40
Anexo 1 ................................................................................................................. 40
Anexo 2 ................................................................................................................. 44
Lista de Tablas
Tabla 1 Habilidades Socioemocionales de los niños de 6° grado ............................ 25
Tabla 2 Habilidades Socioemocionales por sub-dimensiones de los niños de 6° grado
.............................................................................................................................................. 26
Tabla 3 Aceptación Social de los niños de 6° grado ................................................ 27
Tabla 4 Habilidades Socioemocionales y Aceptación Social de los alumnos de 6°
grado ..................................................................................................................................... 28
Tabla 5 Habilidades Sociales de los alumnos de 6° grado de acuerdo a la evaluación
del maestro ............................................................................................................................ 29
Tabla 6 Habilidades Socioemocionales por sub-dimensiones de los niños de 6° grado
de acuerdo a la evaluación del maestro ................................................................................ 30
3
Agradecimientos
Al término de esta etapa de mi vida, quiero expresar un profundo agradecimiento
a quienes con su comprensión, apoyo, esfuerzo y sus consejos me alentaron a lograr esta
hermosa realidad.
A mi madre que es el ser más maravilloso del mundo, gracias por el apoyo moral,
su cariño que desde niña me ha brindado para seguir mi camino y estar junto a mí en los
momentos difíciles.
A mi padre porque desde pequeña ha sido para mí un hombre maravilloso al que
siempre he admirado.
Gracias por guiar mi vida.
4
Introducción
Las habilidades socioemocionales (HSE) son una herramienta fundamental para
obtener éxito en todas las etapas de la vida. Los seres humanos pasamos la mayoría del
tiempo relacionándonos con otras personas, por lo cual es indispensable que tengamos
unas HSE favorables para que la interacción con el otro sea de buena calidad.
A pesar de que somos seres sociales por naturaleza, las HSE no son innatas ni
predeterminadas genéticamente en su totalidad, sino que son conductas moldeables.
La infancia constituye un periodo, en el cual surgen los primeros contactos con el
mundo que nos rodea, llegándose a convertirse en el principal contexto social y de apoyo.
De esta manera resulta necesario que los niños adquieran HSE que les permitan
relacionarse de manera óptima.
La escuela es uno de los principales medios de socialización y es por eso que es
muy importante que las HSE sean trabajadas en el contexto educativo. Por lo cual sería
fundamental incorporar programas de HSE, para que se introduzca el aprendizaje y
desarrollo de estas habilidades, con el fin de evitar problemas futuros, como pueden ser:
la violencia verbal y física, ansiedad, hostilidad y trastornos psicopatológicos. Así mismo,
el hecho de que los niños cuenten con HSE adecuadas contribuye a su aprendizaje y
desarrollo intelectual, mental, afectivo y emocional.
La presente investigación consta de cuatro capítulos: el primero está dedicado a
los fundamentos teóricos en el cual se mencionan las características más relevantes de la
infancia y se centra en el desarrollo socioemocional destacando la importancia que juegan
las HSE en la misma, en el segundo capítulo se muestra el método de investigación que
se llevó a cabo tomando en cuenta el lugar y el tipo de población, así como los
cuestionarios de evaluación, en el tercer capítulo se encuentran los resultados de los
cuestionarios aplicados y por último el capítulo cuatro está dedicado a la discusión de los
resultados obtenidos, exponiendo las correspondencias y desacuerdos existentes en las
evaluaciones, así mismo se contrastan estos resultados con las afirmaciones teóricas. El
trabajo se complementa con las referencias y los anexos que figuran en la parte final.
5
Capítulo I
Marco Teórico
La sociedad siempre está en constante movimiento y sufriendo cambios
tecnológicos, biológicos, químicos, cambios en la forma de pensar, actuar y de
relacionarse con los demás, los cambios dentro de una sociedad siempre van a influir en
el desarrollo (cognitivo, físico, intelectual, mental, social) de las personas (Cabrera, 2016).
Por lo cual tener un adecuado desarrollo cognitivo y social depende de varios factores
(como la edad, la familia, los estilos de crianza, habilidades sociales y socioemocionales).
Para esta investigación nos centraremos en las HSE, dichas habilidades juegan un papel
importante en la vida de los niños ya que aquellos que no las desarrollan adecuadamente
llegan a tener algunas dificultades de aceptación, se vuelven agresivos, tienen problemas
emocionales y escolares, incluso pueden volverse delincuentes o desarrollar alguna
psicopatología en la adolescencia o adultez (sensibilidad interpersonal, ansiedad fóbica y
psicoticismo) (Landazabal, 2006).
El objetivo de esta investigación es analizar las HSE y su relación con la aceptación
social desde la perspectiva de los niños y la maestra de grupo. Así mismo investigar qué
estrategias se llevan a cabo dentro de las instituciones educativas con la finalidad de
mejorar, la regulación emocional, la expresividad emocional y la empatía en los
estudiantes.
La importancia de esta investigación radica en el impacto que tendrá en la vida
social, familiar y escolar de los niños, padres y maestros. Brindará conocimientos teóricos
sustentados, estrategias de intervención y recomendaciones para mejorar y fomentar el
desarrollo de las HSE dentro de los contextos educativos. Con el fin de lograr una mejor
convivencia entre compañeros, maestros, padres y con la sociedad en general. Así mismo,
los niños tendrán un mayor desenvolvimiento dentro y fuera de los salones de clase,
contarán con herramientas para cumplir de una mejor manera sus metas y resolver
problemas.
6
¿Qué son las emociones?
Casado y Colomo (2006) nos mencionan que la primera teoría de la emoción fue
establecida por Platón en el Filebo contraponiéndose en el diálogo entre Sócrates y
Protarco el dolor y el placer. Quien dividió la mente o alma en los dominios cognitivo,
afectivo y apetitivo, la trilogía básica de Platón es la razón, apetito y espíritu, que en
actualidad se corresponde en Psicología con la cognición, motivación y emoción. Pero
quizá la teoría más completa es la de Aristóteles en su obra “Retórica” donde considera a
diferencia de Platón, que las dos dimensiones del alma racional e irracional forman una
unidad, por ende las emociones poseen elementos racionales.
Al contrario de Platón y Aristóteles, los estoicos distinguen cuatro emociones
fundamentales: el anhelo de los bienes futuros y la alegría de los bienes presentes; el temor
a los males futuros y la aflicción por los males presentes. Así para los estoicos las
emociones eran juicios errados, opiniones vacías y privadas de sentimientos.
Por su parte, Descartes menciona que las emociones son afecciones pasivas
causadas por el movimiento de los espíritus vitales, es por ellos que la tristeza y la alegría
son las emociones fundamentales. Considera que existen seis emociones simples: el
asombro, el amor, el odio, el deseo, la alegría y la tristeza y que todas las demás existentes
son derivadas de ellas.
Baruch Spinoza, en cambio, consideró que eran 15 las pasiones básicas: la codicia,
la envidia, los celos, el orgullo, la humildad, la ambición, la venganza, la avaricia, el
trabajo, la pereza, el deseo, el amor pasional, el paternal y el filial y, finalmente, el odio
(Díaz & Flores, 2001)
En el ámbito educativo, Reinhard (2014) clasificó a las emociones que se pueden
hacer presentes en las aulas en cuatro categorías: a) emociones de logro, que se relacionan
con los éxitos obtenidos a lo largo de la vida de una persona; b) las emociones epistémicas,
las cuales son consecuencia de los problemas cognitivos, e importantes para aprender
tareas nuevas; c) emociones tópicas, es decir, son aquellas emociones resultantes de los
temas aprendidos en las aulas educativas y que pueden despertar el interés de los
estudiantes en el material de aprendizaje, y d) emociones sociales, que surgen de las
relaciones sociales entre pares y superiores en el aula y son especialmente importantes en
7
la interacción profesor-alumno y en el aprendizaje grupal. Finalmente podemos decir que
las emociones son el motor de vida de cada ser humano. Mora y Sanguinetti (2004 citado
en Mora, 2012) definen la emoción como “una reacción conductual y subjetiva producida
por una información proveniente del mundo externo o interno (memoria) del individuo”
p. 14. Es decir la emoción es una reacción inconsciente, que dispone a nuestro organismo
para reaccionar ante cualquier situación, sin embargo, en el momento en que esta emoción
se hace presente se vuelve consciente para el ser humano.
Por otro lado las emociones cumplen funciones específicas. Mora (2012) hace una
amplia explicación en cuanto a estas funciones. En mi opinión se pueden resumir en siete
apartados: a) las emociones sirven para defendernos de cualquier situación nociva a
nuestro cuerpo o integridad física y psicológica; b) las emociones permiten que las
reacciones de nuestro cuerpo sean acorde a la situación; c) las emociones sirven como un
todo único de alerta para el cuerpo; d) las emociones nos mantienen en un estado de
curiosidad por lo desconocido; e) las emociones nos ayudan a comunicarnos con la
sociedad en cualquier contexto o situación; f) las emociones ayudan a la memoria y el
razonamiento.
Competencia social en la primera infancia
En la actualidad se conoce que los bebés cuentan con habilidades sociales (HS) y
cognitivas que permiten su participación e interacción con los demás desde el principio
(Aitken & Trevarthen, 2001; Zeedyk, 2006). De esta forma, podemos observar que los
recien nacidos tienen la capacidad de responder a la interaccion social con un adulto a
pesar de las diferencias individuales (como el temperamento) (Guedeney, 2015).
En los lactantes se observa la capacidad de iniciar y mantener el contacto visual,
imitar expresiones faciales, hacer movimientos corporales para iniciar o mantener la
interacción y provocar una reacción en el entorno (Aitken & Trevarthen, 2001; Nagy,
2006). De igual manera los bebés pueden establecer relaciones emocionales cercanas con
sus cuidadores, estas relaciones se desarrollan dentro de la interacción de los recién
nacidos con sus padres o cuidadores primarios (Guedeney, 2015). Es por esto que un
componente clave del desarrollo temprano es, sin duda, la capacidad de sincronización de
la integración padres-bebé. La sincronización hace referencia a la correlación que se crea
8
en la interacción bebé-padres y que fortalece las habilidades para la cercanía social y la
empatía (Feldman, 2007).
Fabes et al., (2006 citado en Campbell et al., 2006) mencionan que los requisitos
previos para las HS tempranas incluyen el temperamento del niño, la capacidad de
autorregulación, la comprensión emocional, el procesamiento de la información social y
las habilidades de comunicación. Para conceptualizar el termino enfatiza que “la
competencia social se caracteriza generalmente como la eficacia de un niño en las
interacciones sociales con sus compañeros y adultos”.
Por otro lado expone las habilidades que un niño debe tener para ser socialmente
competente: (1) desarrollar relaciones positivas con los demás, (2) coordinar y comunicar
sus acciones y sentimientos con los interlocutores sociales, y (3) reconocer y regular sus
emociones y acciones en entornos sociales. Estas habilidades son generales dentro del
dominio de la competencia social, sin embargo pueden presentarse de manera diferentes
según el contexto.
Es importante mencionar que la competencia social es maleable, especialmente en
la primera infancia. A medida que los niños ingresan al entorno educativo o de cuidado
formal, la importancia de su entorno familiar y sus relaciones para el desarrollo de HS no
ha disminuido. Sin embargo, los cuidadores que no son los padres en entornos de
educación y cuidados infantiles informales y formales pueden apoyar la expansión de las
HS de los niños, especialmente porque los infantes a menudo interactúan con mayor
frecuencia con grupos más grandes de niños (Campbell et al., 2016).
Competencia emocional en la primera infancia
La competencia emocional ha sufrido tremendos cambios en los primeros cinco
años de vida, mostrando emociones más sofisticadas, sutiles y reguladas, así mismo se
comienza a comprender, identificar y simpatizar con las emociones de los demás.
Definimos la competencia emocional como la capacidad de expresar varias
emociones de forma intencionada y completa, comprender las emociones de uno mismo
y de los demás, y regular la expresión y la experiencia emocional cuando sea necesario
(Campbell et al., 2016).
9
Por su parte Saarni (2000) dice que la competencia emocional esta vinculada con
las demostraciones de autoeficacia al expresar sentimientos en las transacciones sociales.
La autoeficacia es la capacidad y habilidad que tiene un individuo para lograr las metas
deseadas. De acuerdo a lo anterior para que exista autoeficacia es necesario conocer las
propias emociones y capacidades para regularlas hacia los objetivos deseados. Entonces,
los resultados esperados dependen de los principios morales de cada individuo. Por lo
tanto, el carácter moral y los valores morales influyen en las respuestas emocionales para
promover la integridad de la personalidad.
La capacidad emocional madura debe reflejar una especie de sabiduría, que
conlleva un importante valor ético de la propia cultura. Desde esta perspectiva, la
importancia de la situación cobra relevancia: el espacio y el tiempo son los factores
moderadores de las capacidades emocionales. Debido a que no estamos preparados para
esta situación, todos podemos experimentar incompetencia emocional en un momento y
en un espacio determinado (Bisquerra et al., 2007).
Campbell et al., 2016 menciona que las HSE se han utilizado como parte de los
indicadores comunes de preparación escolar para indicar e impulsar las mejoras de las
capacidades de los niños para tener éxito en el jardín de infancia y las escuelas primarias.
Por lo tanto, los niños en edad preescolar muestran diversas emociones que son vívidas
en lugar de incapacitantes, y pueden distinguir sus estados emocionales y los de los demás,
así como hablar de ellos con fluidez.
Por otro lado es importante mencionar que existen tres aspectos importantes de la
capacidad emocional: (1) la expresión emocional duradera: surge cuando los niños
muestra su temperamento, que es una característica relativamente estable, (2) la
regulación de las emociones: durante el período preescolar, debido a las emociones cada
vez más complejas de los niños y sus necesidades para el mundo social, se hace muy
necesario regular las emociones, (3) el conocimiento emocional: esencial para llevarse
bien con compañeros y adultos, el cual puede predecir de manera única las HS
concurrentes y futuras, los ajustes en el aula y el rendimiento académico de la primera
infancia, independientemente del género, la edad y varios factores de riesgo (Campbell et
al., 2016).
10
Para finalizar mencionaremos la interesante propuesta de los estandares del
aprendizaje social y emocional (“Illinois Social Emotional Learning Standards”)
elaborados en 2004 por el ISBE ((Illinois State Board of Education). Estos estandares del
aprendizaje social y emocional dan sentido al plan de desarrollo emocional que se aplica
en los centros educativos de su competencia (ISBE, 2006). Este plan se concreta en: (1)
desarrollar habilidades de auto-conciencia y auto-gestion para lograr el éxito en la escuela
y en la vida, (2) utilizar la conciencia social y las habilidades interpersonales para
establecer y mantener relaciones positivas, (3) demostrar habilidades de toma de
decisiones y comportamientos responsables en contextos personales, escolares y
comunitarios.
Por su parte Bisquerra (2007) entiende la competencia emocional como “el
conjunto de conocimientos, capacidades, habilidades y actitudes necesarias para
comprender, expresar y regular de forma apropiada los fenómenos emocionales” (p. 69).
En definitiva la competencia emocional es un indicador importante de la
ciudadanía efectiva y responsable; su dominio, favorece una mejor adaptación al contexto
y potencia un afrontamiento a las circunstancias de la vida. Otros aspectos que se ven
favorecidos son los procesos de aprendizaje, las relaciones interpersonales, la solución de
problemas, la consecución y mantenimiento de un puesto de trabajo (Bisquerra, 2007).
Infancia intermedia
Si vamos a una escuela primaria, a la hora del receso o descanso, podremos
observar una cantidad de niños impresionante de todas formas y tamaños (altos, bajos,
corpulentos, delgados). Observariamos que el aspecto de los niños de edad escolar es muy
diferente al de los que son menores a esa edad (Papalia, 2010).
Campa & Contreras (2018) mencionan que durante la infancia existe un
crecimiento rapido en el que interviene la interaccion que se establece con el entorno. En
los primeros años de vida ocurren cambios fisicos (el cerebro incrementa su tamaño,
cambios en el sistema nervioso central y se alcanza el 80% del peso corporal), de manera
que se abren las ventanas receptoras que determinaran la capacidad de aprendizaje de los
niños.
11
Por otro lado, Bedregal & Pardo (2004) dicen que esta fase critica se modifica en
el eje central del desarrollo integral y que en ningun momento vuelve a ocurrir este
fenomeno. Este estadio representa un desarrollo complejo en el cual se sustenta la
evolucion biológica, psicológica y social en los primeros años de vida; se forman las
habilidaes perceptivas, motrices, cognitivas, lingüísticas y sociales, las cuales favorecen
una equilibrada interaccion con el mundo (Fernandez & Riquelme, 2006).
Durante la infancia intermedia o niñez media, que comprende de los 6 a los 12
años, se configura una gran diversidad humana, siendo resaltantes factores como el
genero, etnia, cultura, nivel socioeconomico y diferentes capacidades (Guillén &
Valenzuela, 2015). En esta etapa los niños crecen entre cinco y siete centimetros y medio
y casi duplican su peso, y las niñas conservan algo mas de tejido adiposo que los niños
(Carroll et al., 2004). Asi mismo se recomieda que la nutricion a estas edades sea variada
(granos, frutas, vegetales, carbohidratos) ya que es en esta etapa donde pueden surguir los
problemas alimenticios (obesidad).
Por otro lado Piaget (1942) menciona que a los siete años los niños entran a la
etapa de las operaciones concretas en la cual los niños no son tan egocéntricos como antes
y son más capaces en tareas que requieren razonamiento lógico, como distinguir la fantasía
de la realidad, clasificación (inclusión de clase), deducción e inducción, juicio causal,
sentimiento, razonamiento de transmisión, pensamiento espacial y unión conservada. Sin
embargo, su razonamiento se limita principalmente al aquí y ahora.
Habilidades Socioemocionales
Nuestra sociedad, necesita profesionales equipados con una gran variedad de
competencias, destacando aquellas que no se circunscriben exclusivamente a la educación
rigurosa, si no a las que se refieren a la actitud hacia los demás, la calidad y cualidad de
las relaciones, a la flexibilidad y capacidad de adaptación. Es por ello que para que un ser
humano sea competente ante una determinada tarea, no solo es necesario tener
conocimientos conceptuales (saber), procedimentales (saber hacer) y actitudinales (saber
ser y estar), sino que se requiere estar motivado para actuar (querer hacer), así como tener
ciertas características personales y propiedades de contexto favorables para poder
proceder (poder hacer) (Repetto & Pérez, 2007).
12
Al mencionar HSE hacemos referencia a las herramientas que permiten a las
personas comprender y regular sus emociones, entender las de los demás, sentir y mostrar
empatía por el resto de las personas, establecer y desarrollar relaciones positivas, tomar
decisiones responsables, así como definir y alcanzar metas personales (Hernández, 2018).
Henríquez (2021), menciona que existen varios tipos de habilidades (fisicas,
sociales, cognitivas, emocionales), destacando las sociales y emocionales, las cuales no
tienen una funcion aislada, sino que actuan en conjunto con las habilidades cognitivas
(capacidad para entender ideas complejas y hechos), debido a que se estimulan unas a
otras, incrementa la probabilidad de que se alcancen resultados integrales positivos,
incluso influyen en el establecimiento de un ambiente favorable (Bisquerra, 2005), y han
sido vistas como las herramientas que ayudan a regular y entender las emociones, instituir
y desplegar relaciones positivas y a lograr metas personales.
Incluir estas habilidades desde el ciclo preescolar es de vital importancia para el
desarrollo de las capacidades sociales, ya que a estas edades surgen y se mejoran las
habilidades motrices, sensoriales y cognitivas. Así como los nuevos aprendizajes, el
conocimiento de reglas y prohibiciones. En general, las HS y HSE de los niños pequeños
proporcionan la base para dominar varias capacidades que son esenciales para un buen
comportamiento académico y logros exitosos (Campbell et al., 2016).
Por su parte, Mishelson et al., (1987 citado en Cabrera 2016) plantea que las HS
se logran a través de la enseñanza y el reforzamiento social, por lo que la infancia es una
etapa crucial para la enseñanza de éstas.
Debido a su importancia, la educación socioemocional ha sido incluida al currículo
formal de la educación obligatoria en México, igualmente, en el modelo educativo se ha
incluido a las HSE como pieza importante del perfil de egreso de los estudiantes (Campos
et al., 2019).
En nuestro país se han establecido cinco tipos de HSE para la educación preescolar,
primaria y secundaria: la autorregulación, regulación emocional, expresión emocional,
empatía y colaboración (García, 2018). En esta investigación sólo abarcaremos la
regulación emocional, expresión emocional y la empatía.
13
Formar a los niños para la vida es uno de los grandes retos que enfrentan los nuevos
modelos educativos, considerando que en México el 21.3% de la población está
conformada por menores de edad (Gobierno de Mexico, 2018). Por lo cual, la integración
reciente de las HSE a la educación está siendo de carácter obligatorio en todas las escuelas
del país. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la
Cultura (UNESCO) señaló en el siglo XXI indispensable el aprendizaje de habilidades
como la colaboración, la comunicación, el aprendizaje informal, la productividad y la
creación de contenido (García, 2018).
Por otra parte, el National Research Council (NRC) y la National Academy of
Sciences (NAS) de los Estados Unidos (2012) organizaron las habilidades del siglo XXI
en tres categorías: a) habilidades cognitivas, b) habilidades interpersonales y c)
habilidades intrapersonales. En este sentido, Durlak & Weissberg (2007) informaron que
los jóvenes que participaron en el desarrollo de programas de HS y HSE mostraron
avances en la evaluación escolar (referida al desempeño de las asignaturas del curso) y
mejores puntajes en las pruebas de rendimiento académico (pruebas estandarizadas).
Factores que Influyen en las Habilidades Socioemocionales
Existen distintos factores que influyen en el desarrollo de las HSE: la herencia, el
apego, los estilos de crianza, el cuidado y las atenciones que los padres o tutores les
brinden a los infantes; también influye el entorno social en el cual el niño se desenvuelve
y los medios de comunicación (Cabrera, 2016)
Collantes (2015) expone que la herencia es el proceso por el cual los individuos
transmiten a su desendencia características fisiológicas, morfológicas y psicológicas. Es
un factor influyente en el desarrollo de las HSE ya que la conducta, la personalidad, el
temperamento y los talentos son aspectos psicológicos que se heredan, y aunque estos
tambien se encuentran influenciados por el entorno ya existe una predenominacion a
desarrollar algun tipo de conducta especifica.
La familia y los estilos de crianza que los padres o tutores establecen para los niños
juegan un papel fundamental dentro del desarrollo de las HSE, la familia es el primer
plano de desarrollo social del niño y es aquí donde se establecen las reglas, los valores,
14
comportamientos y conductas, asi mismo, es aquí donde ocurre el primer acercamiento
con la socializacion que este dirigida al cumplimiento de metas mendiante el afecto.
Cordoba (2014) “refiere que los estilos de crianza buscan regular las conductas y
marcar parametros que serán referentes para los comportamientos y actitudes de los niños”
(p.16). Expone cuatro estilos de crianza: a) autoritario, b) permisivo, c) democrático y d)
negligente. Cada uno de estos estilos de crianza tiene características específicas, pero en
general se establece que los niños con padres autoritarios tienden a tener una mayor
inadaptación personal y social, lo cual estará afectando directamente las HSE.
Es por ello que los niños que no cuentan con una adecuada atención por parte de
sus padres y familiares podrían presestar una baja autoestima y un deficit en el desarrollo
de sus habilidades.
Por otro lado los medios de comunicación como la television, la radio, el cine,
entre otros juegan un papel muy importante en el desarrollo de HSE, ya que los niños
actualmente pasan varias horas mirando el televisor y éstos generan modelos en los niños,
los cuales muchas veces no son los más adecuados (Cabrera, 2016).
Importancia del apego para el desarrollo de las habilidades socioemocionales
Las personas nacen en un estado de desvalimiento y eso implica una gran
dependencia de otro ser humano para sobrevivir. Específicamente el ser humano depende,
de la madre o de quien desempeñe la función maternal durante un largo periodo (Persano,
2018).
Persano (2018) menciona que esta dependencia en los primeros años de vida se
conoce como “apego”, el cual define como: “tendencia a establecer lazos emocionales
íntimos con individuos determinados como un componente básico de la naturaleza
humana, presente en forma embrionaria en el neonato y que prosigue a lo largo de toda
la vida” (p.158).
Las primeras investigaciones detalladas de las diferencias individuales en apego
fueron dirigidas por Ainsworth (1963) donde encontró una información muy rica para el
estudio de las diferencias en la calidad de la relación madre-hijo y su influencia sobre la
formación del apego. Esta información le llevó a identificar unos estilos de apego en la
15
interacción madre-hijo, que reflejan las normas que determinan nuestras respuestas ante
situaciones que los trastornan emocionalmente, es decir, nuestra forma primordial de
autorregulación emocional.
Ainsworth identificó los tres modelos principales del apego, apego seguro y apego
inseguro, este último se divide en apego evitativo y ambivalente; todo esto basándose en
una serie de observaciones realizadas a través de un procedimiento estandarizado de
laboratorio llamado Situación Extraña (Strange Situation), de interacciones madre-hijo.
El cual, es un procedimiento ideado para observar las relaciones de apego entre un
cuidador y un niño. Se aplica a niños entre las edades de nueve y 18 meses.
El apego seguro se da cuando la relación entre el niño y la madre es buena, existe
confianza, afecto, sintonía y sensaciones de bienestar, a lo que el niño se sentirá seguro y
no tendrá dificultad para explorar el mundo, además de que no se le dificultará pedir ayuda
en caso de necesitarla, sólo espera encontrar comprensión y apoyo; el apego inseguro es
cuando el infante tiene un apego de mala calidad con la madre o cuidador, lo cual
impidiera su habilidad emocional, este tipo de apego se divide en evitativo y ambivalente,
el evitativo se da cuando la relación existente es de desconfianza y no existe una
comunicación directa ni sincronizada, el ambivalente es cuando existe una dependencia
hacia la madre la cual provoca ansiedad de separación (Ainsworth et al., 1978).
Por otro lado Main & Solomon (1986) propusieron otro tipo de apego, denominado
como “el apego desorganizado”, este tipo de apego se caracteriza por el rechazo hacia la
figura del apego, ya que carece de estrategias para hacerle frente al estrés que le provoca
la ausencia de la madre. A menudo trae historias sin resolver, viene de familias con
violencia, abusos, o de abandonos emocionales.
Por otra parte Bolwby (1969 citado en Delgado, 2004) propuso un modelo basado
en la existencia de cuatro sistemas de conductas relacionados entre sí: el sistema de
conductas de apego, el sistema de exploración, el sistema de miedo a los extraños y el
sistema afiliativo.
El sistema de conductas de apego se refiere a todas aquellas conductas que se
encuentran en servicio del mantenimiento de la proximidad y con las figuras de apego
(sonrisas, llantos, caricias, etc. ). Estos tipos de conductas se activan cuando la distancia
16
entre la madre o el cuidador aumenta, con la finalidad de reestablecer la proximidad. El
sistema de exploración tiene una cierta imcompatibilidad con él, ya que cuando cuando se
activan las conductas de apego, la exploración del entorno disminuye. El sistema de miedo
a los extraños tiene relacion con el anterior ya que su aparición supone la disminución de
la exploración y el aumento del apego (Delgado, 2004).
Así mismo, Bowlby (1980) postuló que los seres humanos desde el nacimiento,
establecen relaciones afectivas con figuras de referencia para obtener protección y
necesidades básicas para la supervivencia. Por lo tanto podemos decir que el apego hace
referencia a una serie de conductas, cuya activación y desactivación va a depender de
diversos factores contextuales e individuales.
En este contexto se destaca la importancia de un buen apego con la madre o el
cuidador primario, para que de esta manera el infante pueda desarrollarse de una manera
eficaz con sus compañeros y maestros, así mismo pueda explorar su nuevo entorno social
sin miedos y tener una mayor facilidad de expresión con los demás (Cabrera, 2016).
Habilidades Socioemocionales y trastornos psicopatológicos
Las HSE tienen gran importancia dentro del desarrollo de los niños y no sólo por
su dimensión relacional, sino por su influencia en las diferentes áreas de la vida.
Las experiencias parentales positivas relacionadas con la calidez y la seguridad
están asociadas a una serie de indicadores de bienestar y ajuste psicosocial (como
felicidad, autoestima, seguridad social, relaciones interpersonales y pertenencia) (Ferreira
et al., 2018). Estas experiencias positivas promueven el desarrollo de la regulación
emocional, y se asocian con la autoconfianza y las HSE cuando se hace frente a
contratiempos estresantes y fracasos personales (Baldwin & Dandeneau, 2005).
Por otro lado, la exposición a experiencias amenazadoras (rechazo, abuso,
humillación, crítica, negligencia o falta de subordinación) en la infancia se ha asociado
ampliamente con una mayor susceptibilidad a los problemas de salud mental (Gilbert et
al., 2006). Así mismo las malas experiencias de crianza pueden registrarse como recuerdos
emocionales negativos o traumáticos, que pueden afectar el desarrollo de patrones de
trabajo internos negativos de uno mismo y de los demás.
17
Investigaciones anteriores han demostrado que las malas experiencias de crianza
y las experiencias de contacto temprano que carecen de calidez y seguridad parecen activar
comportamientos y procesos defensivos desadaptativos (como la vergüenza, la sumisión
y la autocrítica) (Cunha et al., 2012;Ferreira et al., 2016;Gilbert & Procter, 2006).
La autocrítica se refiere al proceso de regulación emocional desadaptativa, que se
caracteriza por el enfrentamiento de defectos, errores o atributos que pueden conducir a la
censura social negativa o al rechazo, y la relación negativa y punitiva entre el yo y el
individuo (Clarke et al., 2004). La autocrítica está altamente correlacionada con la
psicopatología, como los síntomas de la depresión y los trastornos alimentarios. De hecho,
se sabe que esta estrategia alimenta paradójicamente sentimientos de auto deficiencia y,
por lo tanto, está relacionada con sentimientos de inferioridad, comparaciones sociales
desfavorables y vergüenza.
En este contexto, la vergüenza se puede definir como la respuesta al amago social
de ser percibido negativamente en la mente de los demás, lo que pondrá al yo en peligro
de ser rechazado o criticado. Este sentimiento centrado en el yo es una experiencia
multifacética que tiene un conjunto de sentimientos (ansiedad, asco, ira), cogniciones
(pensamientos automáticos sobre el yo inferior, inadecuado y defectuoso) y acciones
(comportamientos defensivos) (Gilbert & Miles, 2002).
Se ha considerado la autodesvalorizacion, la autocondena y los sentimientos y
cogniciones autocriticos/agresivos como aspectos importantes de la psicopatologia.
Durante siglos la depresion se ha relacionado con sentimientos de inutilidad y
autodesvalorizacion (Radden, 2002). Freud (1917) concretó esta experiencia, pensando
que la autoevaluación y la crítica asociadas con la depresión provienen del ataque del
superyó contra uno mismo y el esfuerzo por proteger a los necesitados de la ira.
Por otro lado en la terapia cognitiva, los pensamientos negativos centrados en el
yo se consideran evaluativos, condenatorios y culpabilizadores, los cuales se encuentran
relacionados con la depresion (Beck et al., 1979). Kohut (1971, 1977) menciona que
debido a las experiencias tempranas, las personas pueden interiorizar la confianza en sí
mismas y la tranquilidad en caso de fracaso personal, o frustrar sus frustraciones a través
del fanatismo narcisista.
18
Juego en la infancia
Para el caso del desarrollo infantil, los teóricos e investigadores más importantes
en la historia de la psicología del desarrollo (por ejemplo Piaget, Vygotsky) mencionaron
la importancia del juego en el desarrollo cognitivo, emocional y social de los niños (Arauz
& Rojas, 2015), fue desde ese momento que el juego se identificó como un componente
que promueve el desarrollo cognoscitivo y la socialización de los niños.
En todo el proceso de desarrollo de los infantes, los intereses varían en la forma o
formato de juego. Alrededor de los dos años, los juegos están relacionados con la
exploración y manipulación de objetos, mientras que a los cuatro, siete y ocho años, los
juegos se centran más en imitar actividades culturales y juegos de rol, incluida la imitación
de los contextos sociales y culturales de los niños (Oers, 2012). En las siguientes edades,
los niños se enfocan a juegos organizados en equipo (como los relacionados con deportes),
o bien a los juegos de mesa y juegos electrónicos donde pueden desarrollar habilidades de
entretenimiento, interacción real o virtual. En este contexto un aspecto relevante es que
generalmente el juego va acompañado del componente emocional, pues usualmente para
el niño el juego se asocia a la diversión, la risa o el placer (Arauz & Rojas, 2015).
El juego se puede definir entonces como la situación en que al involucrarse
genuina y emotivamente en la actividad, el niño toma un rol en el que pone en juego sus
habilidades, conocimientos y emociones, facilitando la actividad (Oers, 2012).
Por otro lado Díaz et al., (2015) menciona que el juego es una actividad humana
natural, que es fácil de identificar y dura toda su vida. Por lo tanto, el niño expresa todo
su mundo interno a través de juegos: lo que le sucedió, sus sentimientos y sus
pensamientos y es a través de él que el niño desarrolla sus sistemas cognitivos,
emocionales y psicológicos. Específicamente desarrollan sus aptitudes físicas, su
inteligencia emocional, su creatividad, su imaginación, su capacidad intelectual, sus
HS, afianzan su personalidad, HSE, se transmite valores culturales, normas de
conducta y al mismo tiempo que desarrollan todo eso, disfrutan y se entretienen.
Los juegos están estrechamente relacionados con las condiciones, tendencias,
costumbres y valores históricos, sociales y culturales. Especialmente en la etapa de
imitación o juego de roles cuando los niños juegan cerca de la cultura social y es
19
importante distinguir la variación que ocurre entre grupos culturales para identificar cómo
estas variaciones culturales afectan el desarrollo de los niños de manera similar o diferente
(Arauz & Rojas, 2015).
Gaskins y Miller (2009) mencionan que cada grupo cultural o social hace las reglas
y términos del juego de acuerdo con las necesidades del juego (y generalmente las
necesidades de los adultos). Estas autoras realizaron estudios comparativos entre niños y
familias mayas en Yucatán y niños y familias anglosajones en los Estados Unidos, en los
que analizaron la forma en que la cultura configura el significado y la expresión emocional
en las experiencias diarias de los niños. Los resultados muestran que, en comparación con
los niños mayas de Yucatán, los niños estadounidenses de ascendencia europea participan
con mayor frecuencia en juegos de rol, que expresan sus emociones con más fuerza y
frecuencia.
En general podemos decir que el juego es una herramienta de aprendizaje muy
importante, contribuye al desarrollo de las funciones cognitivas, sociales, emocionales,
psicomotoras y al proceso de formación de la personalidad. Al interactuar con juguetes y
otros niños, el niño puede desarrollar su propio pensamiento, creatividad y sentar las bases
para sus estudios futuros.
Regulación emocional
Los seres humanos no nacemos con la capacidad de regular nuestras experiencias
emocionales, sino que las emociones desbordan facilmente y es necesario la constitución
de un sistema regulatorio (Amat & Castelli, 2016).
Gross (1999) dice que la regulación emocional se refiere a los procesos en los que
las personas ejercen poder sobre las emociones que tenemos, cuándo las tenemos y cómo
las experimentamos y decimos.
Otros autores definen la regulación emocional como los procesos externos e
internos encargados de monitorear, evaluar y modificar nuestras respuestas emocionales
para lograr nuestras metas (Thompson, 1994). Esta definición agrega algo esencial, y es
que, las personas en función de sus necesidades u objetivos activan el proceso de
regulación emocional, ya sea consciente o inconscientemente. En muchos casos, el
20
objetivo es reducir el estado emocional negativo porque se vuelve muy intenso o muy
persistente, pero puede haber otros objetivos. De hecho, en algunos casos, el objetivo
puede ser reducir el estado emocional positivo, por ejemplo, porque no es adecuado para
una determinada situación social (por ejemplo, un funeral). Por eso, aunque generalmente
decimos que la regulación de las emociones es un proceso muy adaptativo, no debemos
olvidarnos de trabajar duro al cambiar nuestro estado emocional, ya que pueden ser
efectivos y adaptativos, pero también pueden ser ineficaces, disfuncionales o incluso
contraproducentes (Hervás & Moral, 2017).
Sarmento (2017), refiere que desde los primeros años de vida, la regulación
emocional tendrá un gran impacto en la adaptación al entorno. Sin embargo, algunos
estudios recientes han demostrado que, en general, la capacidad de autorregulación,
especialmente la capacidad de autorregulación emocional, depende de múltiples factores,
como las costumbres culturales, el entorno, la experiencia familiar, el estilo de crianza y
el propio temperamento del niño.
Dentro del contexto escolar, la importancia de estas estrategias y habilidades
radica en la necesidad de controlar las reacciones emocionales que podrían ser disruptivas
para el aprendizaje. Cuando los niños experimentan emociones negativas focalizan su
atención en la información emocional, y los recursos cognitivos no se destinan al
procesamiento de la información educativa; si la información educativa no es atendida y
procesada no puede ser memorizada, por lo que la incapacidad de regulación emocional
interfiere con el rendimiento académico (Andres, 2017).
Empatía
Históricamente, la investigación ha estado discutiendo si la empatía es un
complejo emocional o cognitivo, o si ambos existen al mismo tiempo. Debido al debate
en torno a estos puntos de vista, en la última década ha existido una tendencia cada vez
más evidente a ver la empatía como un complejo multidimensional que engloba aspectos
cognitivos y emocionales (Sagastizabal et al., 2013).
En apoyo de la visión anterior, Belacchi & Farina (2012), mencionan que la
empatía se define como una teoría multidimensional que incluye componentes
emocionales y cognitivos. El primero está relacionado con experimentar las emociones de
21
los demás, mientras que el segundo involucra la capacidad de comprender la situación
emocional de los demás. Estos autores confirmaron que ambos componentes son
necesarios para responder adecuadamente a las expresiones emocionales de otras
personas.
Por otro lado, Feshbach (1978), propuso un modelo de tres partes y asumió que la
respuesta de empatía requiere: (1) la capacidad de distinguir y reconocer el estado
emocional de los demás (empatía cognitiva), (2) la capacidad de adoptar las opiniones o
roles de otras personas (empatía sentimental) y (3) la evocación de una respuesta efectiva
compartida (empatía por la acción) (Barnet, 1992).
Asimismo, investigaciones centradas en analizar la empatía en niños, adolescentes
y jóvenes han demostrado que ayuda a mejorar las HSE, especialmente las conductas prosociales (Garaigordobil & Galdeano, 2006). Otros estudios han confirmado que una alta
empatía se asocia con conductas más cooperativas (Rumble, 2004), y que la empatía
aumenta las conductas altruistas (Apodaka et al., 1994), que los niños empáticos tienen
mayor estabilidad emocional (Bear et al., 2004) y, finalmente, la empatía es un factor
protector frente a la violencia (Álvarez et al., 2004).
Expresión emocional
Como se mencionó en los párrafos anteriores, las emociones son una parte
importante de nuestras vidas y nuestro estilo de vida afectará nuestro bienestar emocional.
Por lo tanto, la expresión emocional se ha vuelto muy importante en el manejo de nuestras
emociones.
La expresión emocional es una herramienta para comunicar con otros las
emociones experimentadas y así poder predecir el comportamiento más probable del
individuo hasta cierto punto.
Cuando tenemos una emoción, especialmente cuando es negativa, es necesario que
la aceptemos y llevemos a cabo el proceso de integración y creación de la emoción. Una
vez que realizamos este proceso personal, debemos brindar una salida a las emociones que
lo necesitan. Por lo general, para integrar y procesar las emociones, es necesario expresar
22
nuestros sentimientos con las personas involucradas y permitirnos experimentar esta
emoción de forma natural.
Las reglas de expresión emocional (adquiridas culturalmente) imponen, inhiben u
oscurecen el patrón de expresión emocional según la situación o rol social. Durante este
tiempo de interacción con los compañeros, es de gran importancia. Porque esta interacción
requiere inhibición o retraso de la acción (autocontrol del impulso) y ajuste de efectos
positivos y negativos (Castillo, 2003).
Cuando este proceso es incompleto, surgen los problemas psicológicos como
ansiedad o depresión. Pero cuando expresamos nuestras emociones con firmeza,
obtenemos muchos beneficios. Lo más importante es estar a la altura de nuestras
emociones y resolver los conflictos. Además, nos permite aumentar nuestra autoestima y
valorarnos más.
Capítulo II
Método
Participantes
Se seleccionó una muestra de 11 infantes, estudiantes de nivel primaria. Del total
de participantes 6 son mujeres y 5 son hombres. Los cuales pertenecen al grupo de 6°
grado.
Lugar
La investigación se llevó a cabo en la escuela primaria “Guadalupe Victoria” la
cual se encuentra ubicada en la comunidad de Miguel Alemán Valdés, municipio de
Espinal, Veracruz. La escuela cuenta con 69 alumnos de los cuales 35 son mujeres y 34
son hombres.
Tipo y Diseño de Investigación
Esta investigación es de tipo cualitativo con un estudio descriptivo y comparativo,
con una muestra por conveniencia.
23
Instrumento
Se aplicaron dos cuestionarios para evaluar habilidades socioemocionales de los
niños, se utilizó un instrumento basado en el Inventario de Rasgos de Insensibilidad
Emocional (Frick et al, 2003) (ICU) por sus siglas en inglés, consta de 18 reactivos con 3
subcategorías, la regulación emocional, la expresión emocional y la empatía, tiene 4
opciones de respuesta: totalmente en desacuerdo, desacuerdo, de acuerdo y totalmente de
acuerdo.
Para evaluar la aceptación social se elaboraron 9 reactivos, 6 con aspectos
positivos y 3 con aspectos negativos, se colocaría como respuestas el nombre de 3
compañeros de acuerdo a su aceptabilidad social (alta, media y baja).
Procedimiento
El instrumento se entregó al maestro responsable del grupo quien se lo dio a cada
uno de los estudiantes para ser contestado. Una vez contestados los devolvió para su
análisis.
Capítulo III
Resultados
Como primer paso se calculó el puntaje de cada niño en el cuestionario de
habilidades socioemocionales y se consideraron niveles bajos, medios y altos, restando de
la calificación máxima la mínima que podían obtener y ese número se dividió en tres
niveles, bajo 18-35, nivel medio 36-54 y nivel alto 55-72. Los datos se encuentran
representados en la tabla 1.
24
Tabla 1 Habilidades Socioemocionales de los niños de 6° grado
Estudiante
Niveles
Bajo
Medio
1

2

Alto
3

4


5
6

7


8
9

10

11

Fuente: elaboración propia.
La tabla 1 nos muestra que solo un niño se considera bajo de habilidades
socioemocionales y que la mayoría se encuentra en un nivel medio de habilidades
socioemocionales.
Como segundo paso se calculó el puntaje de cada niño por sub-dimensiones en el
cuestionario de habilidades socioemocionales y se consideraron niveles bajos, medios y
altos, restando de la calificación máxima la mínima que podían obtener y ese número se
dividió en tres niveles, bajo 6-11, nivel medio 12-17 y nivel alto 18-24. Los datos se
encuentran representados en la tabla 2.
25
Tabla 2 Habilidades Socioemocionales por sub-dimensiones de los niños de 6°
grado
Regulación Emocional
Expresión Emocional
Estudiantes
Empatía
Niveles
Bajo
Medio
Alto
Bajo

1
Medio
Alto

Bajo
Medio
Alto

2

3



4



5

6


7






8

9

10

11











Fuente: elaboración propia.
En la tabla 2 podemos observar que solo uno de los participantes se considera bajo
en expresión emocional y dos cuentan con niveles bajos de empatía. La mayoría muestra
niveles medios y altos en las sub-dimensiones.
26
Como tercer paso se calculó el puntaje de cada niño en el cuestionario de
aceptabilidad social sumando las nominaciones positivas y negativas de cada estudiante.
Los datos se encuentran representados en la tabla 3.
Tabla 3 Aceptación Social de los niños de 6° grado
Estudiante
Nominación Positiva
Nominación Negativa

1
2

3

4


5
6

7

8

9

10

11

Fuente: elaboración propia
La tabla 3 nos hace referencia que aquellos niños que obtuvieron nominaciones
positivas tuvieron puntajes más altos en regulación emocional y expresión emoción
emocional y aquellos que obtuvieron nominaciones negativas tienen niveles bajos y
medios en regulación emocional y empatía.
La tabla 4 nos muestra nos muestra la recopilación de los resultados obtenidos a
partir de los cuestionarios aplicados.
27
Tabla 4 Habilidades Socioemocionales y Aceptación Social de los alumnos de 6°
grado
Regulación Emocional
Expresión Emocional
Estudiantes
Niveles
Bajo
1
Empatía
Medio
Alto
Bajo

Medio
NP
Alto

Bajo
Medio
Alto


2

3




4




5

6

7
11









10



8
9


NN















Fuente: elaboración propia
La tabla 4 nos muestra nos muestra la recopilación de los resultados obtenidos a
partir de los cuestionarios aplicados.
28
Como cuarto paso se pidió a la maestra de grupo que realizara una evaluación de
los estudiantes de acuerdo al cuestionario de habilidades socioemocionales. La tabla 5
muestra los resultados obtenidos utilizando el mismo proceso de calificación.
Tabla 5 Habilidades Sociales de los alumnos de 6° grado de acuerdo a la
evaluación del maestro
Niveles
Estudiante
Bajo
1
Medio
Alto

2

3

4

5

6

7

8

9

10

11

Fuente: elaboración propia
La tabla 5 muestra los resultados obtenidos del cuestionario aplicado a la maestra
de grupo donde se muestra que solo un niño se encuentra bajo de habilidades
socioemocionales y que la mayoría se encuentra en un nivel medio de habilidades
socioemocionales.
29
Como último paso se calculó el puntaje de cada niño por sub-dimensiones en el
cuestionario de habilidades socioemocionales respondido por la maestra de grupo. La
tabla 6 muestra los resultados obtenidos utilizando el mismo proceso de calificación.
Tabla 6 Habilidades Socioemocionales por sub-dimensiones de los niños de 6°
grado de acuerdo a la evaluación del maestro
Regulación Emocional
Expresión Emocional
Estudiantes
Empatía
Niveles
Bajo
Medio
Alto
Bajo
Medio
Alto
1

2



3




4
5

Bajo
Alto





Medio

6



7



8



9



10

11





Fuente: elaboración propia
30
En la tabla 6 podemos ver los resultados por sub-dimensiones de la evaluación
aplicada a la maestra, la mayoría de los estudiantes tienen niveles medios de regulación
emocional, dos niños se encuentran bajos en expresión emocional y la mayoría tienen
niveles bajos de empatía.
Capítulo IV
Discusión
El objetivo general que planteamos en nuestra investigación, es analizar las HSE
y su relación con la aceptación social desde la perspectiva de los niños y la maestra de
grupo.
De los resultados obtenidos se puede decir que las HSE de los niños pequeños
proporcionan la base para dominar varias capacidades que son esenciales para un buen
comportamiento académico, logros exitosos y un adecuado desenvolvimiento dentro de la
sociedad (Campbell et al., 2016).
Debido a su importancia, la educación socioemocional ha sido incluida al currículo
formal de la educación obligatoria en nuestro país, igualmente, en el modelo educativo se
ha incluido a las HSE como pieza importante del perfil de egreso de los estudiantes
(Campos et al., 2019).
En México se han establecido cinco tipos de HSE para la educación: la
autorregulación, regulación emocional, expresión emocional, empatía y colaboración
(García, 2018). Estas HSE son practicadas dentro de las aulas escolares y reforzadas por
los padres o cuidadores con la finalidad de que los niños las desarrollen plenamente.
De estos datos podemos concluir que la importancia de las HSE se reconoce cada
vez más porque favorecen el desarrollo personal y social de los individuos, mejoran la
cognición de uno mismo y de los demás, tienen un impacto en la autoestima y la cognición
y meta-cognición, promueven el aprendizaje mientras reducen el estrés emocional y los
comportamientos desafiantes.
Por otro lado, después de haber aplicado los cuestionarios a los niños pudimos
observar que ellos se consideran en un nivel medio-alto de HSE. Lo que es congruente
31
con los hallazgos en la literatura, que proponen que los niños o las personas en general se
autoevalúan exagerando sus calificaciones, con el afán de sobresalir (Arias, 2014).
De acuerdo a los datos anteriores podemos decir que los resultados no son muy
reveladores en cuanto a las verdaderas HSE que poseen los estudiantes, ya que como
anteriormente lo mencionamos ellos intentaran sobresalir del resto de las personas o
compañeros a pesar de no contar con dichas habilidades. Sin embargo nos dan un margen
de conocimiento de las habilidades que son capaces de adquirir y llevar a la practica, al
mismo tiempo que nos dejan ver como ellos piensan que las personas los perciben.
Por otra parte para los resultados obtenidos del cuestionario aplicado a la maestra
de grupo, es importante destacar que ella los conoce y ha convivido con ellos desde hace
cinco años, por ello podemos decir que su evaluación juega un papel muy importante para
nuestra investigación. Por tanto, podemos destacar que desde su perspectiva los niños se
encuentran en un nivel medio-bajo de HSE. Lo cual nos permite tener una visión más
certera de las verdaderas HSE que los niños poseen y que han desarrollado.
Los resultados anteriores tienen una estrecha relación con los resultados de la
evaluación de aceptación social, estos resultados demuestran que la mayoría de los
estudiantes no cuentan con una aceptación social positiva por parte de sus compañeros.
Esto debido al bajo nivel de HSE que los estudiantes poseen, el cual ha afectado la relación
con sus compañeros de escuela. Respecto a esto Masten & Morison (1991) mencionan
que la calidad de las relaciones socioemocionales tempranas tienen una gran influencia en
la autoestima, la estabilidad emocional y en la aceptación social durante la infancia, la
adolescencia y la adultez.
Los resultados obtenidos en esta investigación son parecidos al resto de las
investigaciones que han trabajado esta relación y estudiado las HSE (Arias, 2014; Ferreira
et al., 2018; Guedeney & Perez, 2015), sin embargo, es importante mencionar que no
deben ser adjudicados a la población en general ni tampoco a la población de estudiantes
de nivel primaria total. La población utilizada en este estudio, aunque es representativa,
no representa la población total de estudiantes de la primaria Guadalupe Victoria.
Por otro lado es necesario discutir algunos aspectos de gran importancia respecto
a los parámetros de HSE y aceptabilidad social, relacionados con este estudio. En primer
32
lugar, el diseño de los cuestionarios es una elaboración propia, que a pesar de estar basada
en un estudio más amplio no es la misma. Además, los cuestionarios fueron aplicados a
pocos niños y de un solo rango de edad, con lo cual no se puede saber con precisión las
variaciones y relación de las HSE con la aceptación social. En segundo lugar los
cuestionarios fueron contestados de manera auto-evaluativa y sin observación directa, lo
cual dificulta una apreciación profunda de los resultados.
Al mismo tiempo durante la realización de este estudio se presentaron limitaciones
que dificultaron el análisis y la interpretación de los resultados obtenidos. Dentro de estas
destacan: (1) el tamaño de la población: esta investigación se llevó a cabo con una muestra
de once niños, lo cual impide que los resultados sean generalizables a la población de
escolares. (2) pandemia: actualmente el mundo se encuentra en confinamiento por el virus
de SARS-CoV-2, lo cual impidió que los niños fueran evaluados de forma presencial y
con una observación directa. (3) comunicación: la comunicación con los niños fue muy
escasa o casi nula ya que muchos de ellos no cuentan con un servicio de internet en casa,
lo que provoco que los cuestionarios llegaran hasta ellos por medio de la maestra.
A pesar de estas limitaciones el estudio logro llevarse a cabo integrando información
relevante (conceptos claves de la HSE, relación HSE y aceptación social) para futuras
investigaciones. Para las cuales recomiendo estudiar más a fondo la aceptación social en
los niños de nivel primaria, realizar un estudio con una intervención directa, reconocer la
diferencia entre el juego de los niños y las niñas, así como incorporar los nuevos
descubrimientos sobre patologías asociadas con las HSE. Al mismo tiempo sugiero que el
maestro de grupo debe incentivar el desarrollo de las HSE mediante diferentes actividades
y estrategias para lograr una mayor socialización e interacción entre los jóvenes y sus
entornos sociales, educativos y familiares. Así mismo, los padres tienen la responsabilidad
de brindar un espacio de diálogo y permitirles participar en juegos con ellos, para que los
niños puedan establecer una relación de confianza con sus padres y tener confianza en sí
mismos.
Finalmente, creo que los docentes deben comprender, participar e interesarse por la
realidad en la que están inmersos los niños, esforzarse por convertirse en mentores,
orientadores y esforzarse por convertirse en una persona más creativa, activa y
33
participativa con la orientación correcta, con el objetivo de que los estudiantes aumenten
su amplio sentido de interacción y se conviertan en el participante más directo en
actividades que involucran el tremendo desarrollo de sus habilidades a lo largo de la vida
estudiantil. Igualmente es importante recordar que las HSE son comportamientos que son
necesarios para comunicarse e interactuar con los demás de manera emocional y
satisfactoria, porque son las habilidades y destrezas necesarias para ser competente en
tareas interpersonales.
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39
Anexos
Anexo 1
Nombre del alumno: _________________________________________________
Edad: _________
Grado: _____________________
Sexo: Femenino / Masculino
Instrucciones: Por favor lee cada oración y decide que tan bien te
describe. Marca tu respuesta con una X.
Por ejemplo: Juanito lee la oración que dice: cuando estoy enojado grito y
aviento cosas, si Juanito hace eso, el pondrá una X en totalmente de acuerdo.
Cuestiones
1. Cuando
Totalmente
en desacuerdo
Desacuerdo
De
acuerdo
Totalmente
de acuerdo
estoy
triste, pienso en
algo que me hace
feliz para dejar de
estar triste.
2. Cuando
mucho
tengo
miedo,
grito y tiemblo.
40
3. Cuando veo a un
abuelito
intentando cruzar
la calle le ayudo a
cruzar.
4. Cuando
quiero
sentir más una
emoción positiva
(por
ejemplo,
alegre
o
divertido),
modifico lo que
pienso sobre ello.
5. Cuando
estoy
feliz se lo cuento
a toda mi familia.
6. Cuando veo a una
niña o niño llorar,
me pongo triste.
7. Cuando me siento
triste,
respiro
profundo para no
llorar.
8. Cuando
estoy
enojado,
cuento
le
a
mi
41
familia
porque
me enoje.
9. Cuando
veo
a
alguien bailar, yo
también
quiero
hacerlo.
10.Cuando
quiero
sentir menos una
emoción negativa
(por
ejemplo,
tristeza o enfado),
modifico lo que
pienso sobre ello.
11.Cuando
estoy
feliz hago cosas
para que los de
más
se
den
cuenta.
12.Me siento triste
cuando no invitan
a jugar a una niña
o niño.
13.Cuando
estoy
sintiendo
emociones
positivas,
tengo
42
cuidado
de
no
expresarlas.
14.Cuando
estoy
preocupado se lo
cuento
a
mi
familia.
15.Aunque no sepa
por qué alguien se
está riendo, yo me
río también.
16.Cuando
hago
frente
a
una
situación
estresante, pienso
en ella de una
manera que me
ayude a mantener
la calma.
17.Cuando
estoy
emocionado
todos
se
cuenta
por
dan
mi
conducta.
18.Me preocupo por
los sentimientos
de los demás.
43
Anexo 2
Nombre del alumno: _________________________________________________
Edad: _________
Grado: _____________________
Sexo: Femenino / Masculino
Instrucciones: Por favor lee cada oración y escribe el nombre de tres de tus
compañeros. Comenzando por la persona que realiza más la acción que se presenta y
terminando con la que menos la realiza.
Por ejemplo: si la pregunta es ¿Quién de tus compañeros es el más juguetón en el
salón de clases?

Pedro (mas juguetón)

Luis (medianamente juguetón)

Alex (menos juguetón)
1. De tus compañeros/as ¿Quién es el que reacciona más agresivamente cuando le hacen
bromas?
2. ¿Quién de tus compañeros/as ayuda a los demás cuando tienen problemas?
3. ¿Quién de tus compañeros/as se pone feliz con el triunfo de los demás?
44
4. ¿Quién se enoja cuando lastiman a otro compañero/a?
5. ¿Quién de tus compañeros/as anima o consuela a los demás cuando sufren o están
tristes?
6. ¿Cuál de tus compañeros/as causa más problemas con los demás?
7. Si tuvieras que hacer equipo con alguno de tus compañeros/as para hacer tareas ¿A
quién elegirías?
8. De tus compañeros/as ¿Quién se porta mal en el salón?
9. De tu salón ¿Quién es el niño o niña con el que todos prefieren jugar?
45
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