«La Resurrección De Jesucristo: Trajo Esperanza»

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«La Resurrección De Jesucristo: Trajo Esperanza»
1 Corintios 15:12–23
INTRODUCCIÓN
Hoy celebramos uno de los días más importantes de la doctrina cristiana evangélica;
La Resurrección de Nuestros Señor Jesucristo con Poder y Gloria.
Jesucristo no está muerto, y menos colgado en una cruz, Él esta sentado a Diestra de
Dios Padre, y vive para Siempre.
Es por ello en esta ocasión nuestro tema es:
«La Resurrección De Jesucristo: Trajo Esperanza»
I. SIN LA RESURRECCIÓN DE JESUCRISTO, NO HABRÍA ESPERANZA
(15:12 – 19)
A. Nosotros Predicamos Que Jesucristo Resucito (15:12a)
«Pero si se predica de Cristo que resucitó de los muertos»
B. Algunos Predican Que Jesucristo No Resucito (15:12b)
«¿Cómo dicen algunos entre vosotros que no hay resurrección de muertos?»
C. Sí No Hay Resurrección De Muertos, Jesucristo No Resucito (15:13)
«Porque si no hay resurrección de muertos, tampoco Cristo resucitó»
D. Sí Jesucristo No Resucito, Vana Es Nuestra Predicación Y Fe (15:14)
«Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también
vuestra fe»
E. Sí Jesucristo No Resucito, Somos Falsos Testigos (15:15-16)
«15 Y somos hallados falsos testigos de Dios; porque hemos testificado de Dios
que él resucitó a Cristo, al cual no resucitó, si en verdad los muertos no resucitan.
16 Porque si los muertos no resucitan, tampoco Cristo resucitó»
F. Sí Jesucristo No Resucito, No Solamente Nuestra Fe Es Vana, Estamos
Todavía En Nuestros Pecados (15:17)
«y si Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aún estáis en vuestros pecados»
G. Sí Jesucristo No Resucito, Los Que Murieron En Él, Tampoco Tienen
Esperanza (15:18)
«Entonces también los que durmieron en Cristo perecieron»
H. Si Jesucristo No Resucito, Somos Dignos De Lastima (15:19)
«Si en esta vida solamente esperamos en Cristo, somos los más dignos de
conmiseración de todos los hombres»
II. HAY ESPERANZA, EN LA RESURRECCIÓN DE JESUCRISTO (15:20–23)
A. La Resurrección Del Señor Jesucristo Fue Un Hecho Real (15:20a)
«Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos»
B. Jesucristo En Su Resurrección, Fue Las «Primicias» Es Decir El Primero,
Para Que Los Que Mueran En Él Resuciten También (15:20b)
«primicias de los que durmieron es hecho»
C. Jesucristo En Su Resurrección, Trajo Esperanza (15:21-22)
«21 Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la
resurrección de los muertos. 22 Porque así como en Adán todos mueren, también en
Cristo todos serán vivificados»
EL AMIGO DEL HIJO
por Carlos Rey
Era la reunión del domingo por la noche en una iglesia cristiana evangélica.
Después que cantaron, el pastor se dirigió a la congregación y presentó al orador
invitado. Se trataba de uno de sus amigos de la infancia, ya entrado en años.
Mientras todos lo seguían con la mirada, el anciano ocupó el púlpito y comenzó
a contar esta historia:
«Un hombre junto con su hijo y un amigo de su hijo estaban navegando en un
velero a lo largo de la costa del Pacífico cuando una tormenta les impidió volver
a tierra firme. Las olas se encresparon a tal grado que el padre, a pesar de ser
un marinero de experiencia, no pudo mantener a flote la embarcación, y las
aguas del océano arrastraron a los tres.»
Al decir esto, el anciano se detuvo un momento y miró fijamente a dos
adolescentes que, por primera vez desde que comenzó la reunión, estaban
mostrando interés. Y siguió narrando:
«El padre logró agarrar una soga, pero luego tuvo que tomar la decisión más
terrible de su vida: escoger a cuál de los dos muchachos tirarle el otro extremo
de la soga. Tuvo sólo escasos segundos para decidirse. El padre sabía que su
hijo era seguidor de Cristo, y también sabía que el amigo de su hijo no lo era.
La agonía de su decisión era mucho mayor que los embates de las olas.
»Miró en dirección a su hijo y le gritó: “¡Te quiero, hijo mío!”, y le tiró la soga al
amigo de su hijo. En el tiempo que le tomó halar al amigo hasta el velero
volcado en campana, su hijo desapareció bajo los fuertes oleajes en la oscuridad
de la noche. Jamás lograron encontrar su cuerpo.»
Los dos adolescentes estaban escuchando con suma atención, atentos a las
próximas palabras que pronunciara el orador invitado.
«El padre —continuó el anciano— sabía que su hijo pasaría a la eternidad con
Cristo, y no podía soportar el hecho de que el amigo de su hijo no estuviera
preparado para encontrarse con Dios. Por eso sacrificó a su hijo. ¡Cuán grande es
el amor de Dios que lo impulsó a hacer lo mismo por nosotros!»
Dicho esto, el anciano volvió a sentarse, y hubo un tenso silencio.
Pocos minutos después de concluida la reunión, los dos adolescentes se acercaron
al anciano. Uno de ellos le dijo cortésmente:
—Esa fue una historia muy bonita, pero a mí me cuesta trabajo creer que ese
padre haya sacrificado la vida de su hijo con la ilusión de que el otro muchacho
algún día decidiera seguir a Cristo.
—Tienes toda la razón —le contestó el anciano mientras miraba su Biblia,
gastada por el uso.
Y, sonriendo, miró fijamente a los dos jóvenes y les dijo:
—Pero esa historia me ayuda a comprender lo difícil que debió haber sido para
Dios entregar a su Hijo por mí. A mí también me costaría trabajo creerlo¼ si no
fuera porque el amigo de ese hijo era yo.
D. Jesucristo En Su Resurrección, Puso El Orden Y El Tiempo Para Nuestra
Resurrección (15:23)
«Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de
Cristo, en su venida»
CONCLUSIÓN
Para concluir. No olvidemos las siguientes cosas:
1. La Resurrección de Jesucristo es una Realidad, por la cual murieron muchos.
2. Jesucristo está vivo, para dar vida al que esta nuestro espiritualmente.
3. Debemos predicar que hay poder en Jesucristo, y que es el único que: Salva, Sana,
Liberta, Bautiza y que viene otra vez para llevarnos al Cielo.
4. Nuestro compromiso es vivir en Fe y en Obediencia a Dios. Amén…
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