TEOLOGÍA DE LA PROSPERIDAD: ANÁLISIS DE SU HISTORIA Y FALACIA Érico Tadeu Xavier - Ph.D. Docente Facultad de Teología Universidad Adventista de Bolivia [email protected] EL TESTIMONIO DE LA HISTORIA Primeramente, algunos ejemplos de sufrimientos y martirios: considerando aquellos que fueron parte de los doce discípulos llamados por Jesús (Marcos 3:13-19). Los Doce Andrés: luego de la muerte y resurrección de Jesús, fue a predicar el evangelio a la región del Mar Negro, hoy parte de Rusia; posteriormente, según la tradición, predicó en Grecia, en Acaya, donde fue martirizado en una cruz en forma de X. De ahí que este instrumento de tortura fue conocido como la Cruz de San Andrés Bartolomé: predicó inicialmente en Arabia, después en Etiopía y al final, junto con Tomás, se desenvolvió como misionero en la India, donde fue martirizado. Felipe: Se atribuye a este apóstol la fundación de la iglesia en Bizancio, ciudad que más tarde fue conocida como Constantinopla. Posteriormente, predicó el evangelio en Asia Menor, en la región de Hierápolis, donde se hubo convertido la mujer de un cónsul romano a causa de su predicación. El cónsul, furioso por este episodio, mandó prender a Felipe y matarlo de forma cruel. Matías: Tomó el lugar de Judas Iscariote (que se había suicidado). La iglesia primitiva escogió a Matías como sustituto (Hechos 1:21-26). Según la tradición, Matías se tornó misionero en Siria, donde acabó siendo quemado en una hoguera por causa del evangelio. Judas Tadeo: según la tradición, predicó en Persia, donde también fue martirizado. Mateo: Desarrolló gran parte de su ministerio pastoreando la iglesia de Antioquía, donde también escribió su evangelio. Posteriormente se dirigió a Etiopía, donde fue martirizado a causa de la predicación. Pedro: Después de ejercer importante liderazgo en la iglesia de Jerusalén, este apóstol se trasladó a la ciudad de Roma, capital del Imperio. En el año 67 d.C., durante la persecución impuesta por Nerón, Pedro fue preso y condenado a morir crucificado. Relatos del segundo siglo afirman que el apóstol, antes de su ejecución, dijo que no era digno de morir como muriera Jesús, su Señor, y pidió que fuese crucificado cabeza para abajo. Así ocurrió. Simón el Zelote: Desarrolló su ministerio evangelístico en Persia, donde el culto al dios Mitras (dios Sol) estaba extremadamente desarrollado. Debido a conflictos con seguidores de Mitras, acabó siendo muerto por negarse a ofrecer sacrificio a esta divinidad. Santiago (hijo de Alfeo): Predicó el evangelio en Siria. Según el historiador Judío Flavio Josefo fue linchado y apedreado hasta la muerte. Santiago (hijo de Zebedeo): Según antiguas tradiciones citadas por Justo González, este apóstol desarrolló un trabajo misionero en España, predicando en la región de Galicia y Zaragoza. ―Su éxito no fue notable, pues los naturales de esos lugares se negaron a aceptar el evangelio. Al regresar a Jerusalén, recorrió el camino que dio origen al lugar hoy conocido como Camino de Santiago de Compostela en España. En Jerusalén fue preso, siendo enseguida decapitado por orden de Herodes Agripa, el año 44 (Hechos 12:1,2). Tomás: Según la tradición, desarrolló su actividad misionera inicialmente en la India. De allí se dirigió a Egipto, donde realizó un trabajo importante entre los habitantes de lengua copta, este ministerio dio origen a la comunidad cristiana existente hasta hoy. Que es conocida como la Iglesia Cristiana Copta. Está separada del catolicismo romano desde el siglo IV, teniendo en su liderazgo a patriarcas. Juan: este es, reconocido por la tradición y por los testimonios del cristianismo primitivo, como el último apóstol en morir. Murió en la vejez, alrededor del año 100, en la ciudad de Éfeso, donde residía con su familia. Este apóstol desarrolló su ministerio en Asia Menor, donde fue preso en los años 90, en la época de la intensa persecución impuesta por el emperador Domiciano al cristianismo. Acabó siendo deportado a la isla de Patmos, en el Mar Egeo, donde recibió la revelación del Apocalipsis, alrededor del año 96. Posteriormente liberado, permaneció en Éfeso enseñando hasta el final de su vida. Otros importantes líderes del cristianismo primitivo, además de los doce, dieron la vida por la causa del evangelio. Por ejemplo, es el caso, de Santiago el hermano del Señor‖, que ejerció fuerte liderazgo en la iglesia de Jerusalén. La historia dice que sacerdotes y fariseos colocaron a Santiago en la parte alta del templo y de allá lo lanzaron abajo, pasando enseguida a apedrearlo, viendo que no murió después decaer al suelo, mientras, arrodillándose pedía el perdón de Dios para sus agresores. De este modo sufrió el martirio. También Pablo, considerado nacido fuera de tiempo (1Corintios 15:8 NVI), se tornó en el gran líder de la iglesia entre los gentiles y propagador del mensaje de la cruz (1 Corintios 1:18-23). Él fue juzgado ante Nerón y condenado a ser decapitado. También Timoteo, discípulo de Pablo, según el testimonio de Nicéfero, en el segundo siglo, fue martirizado durante el reinado de Domiciano, en el año 96 d. C., en Éfeso, ciudad donde vivía cuando el apóstol le escribió las dos cartas. Hasta el tercer siglo de la era cristiana, la cruz realmente fue la pauta, en la actuación de la iglesia. Y prueba evidente de esto es el hecho de que tal periodo sea conocido como la ―era de los mártires‖. Aun el historiador Justo González describe con precisión otros hechos de este periodo, como por ejemplo, el testimonio de fe demostrado por Ignacio de Antioquía. Discípulo del apóstol Juan, que vivió en el periodo de 60 a 117 d.C. Se hizo célebre por la fidelidad a Cristo en medio de las persecuciones que sufriera y por las cadenas que enfrentó debido a la fe que profesaba. Siendo llevado a Roma, en algunas paradas obligatorias, no olvidaba escribir a las iglesias que lo recibían o le enviaban salutaciones. Por el testimonio vivo de Jesucristo, Ignacio estaba dispuesto a enfrentar la muerte. Camino al martirio, profirió las siguientes palabras: No quiero apenas ser llamado cristiano, quiero también comportarme como tal. Mi amor está crucificado. No me agrada más la comida corruptible… pero quiero el pan de Dios, que es la carne de Jesucristo… y quiero beber su sangre, que es bebida 1 W. Anglin y A.Knight, História do Cristianismo ,(Rio de Janeiro: Casa Editora Evangélica, 1947), 11, 12. 2 Ellen G. White, Atos dos Apóstolos (Santo André, São Paulo: Casa, 1976), 509. 3 Anglin y Knight, 15. 38 imperecedera. Porque cuando yo sufra, seré libre en Jesucristo, y con él resucitaré en libertad. Soy trigo de Dios, y los dientes de las fieras han de molerme, para que pueda ser ofrecido como polvo limpio de Cristo. 1 No es diferente el ejemplo de fe de Policarpo de Esmirna, el cual, ante la insistencia de las autoridades para que jurase por el emperador y maldijese a Cristo, para recibir a cambio la libertad, respondió: Viví ochenta y seis años sirviéndole, y ningún mal me hizo ¿Cómo podría yo maldecir a mi rey, quien me salvó? Y estando atado ya en medio de la hoguera, Policarpo alzó los ojos al cielo y oró en voz alta: Señor Dios Soberano… te doy gracias, porque me consideraste digno de este momento, para que, junto a tus mártires, yo pueda ser parte en el cáliz de Cristo. Por eso te bendigo y te glorifico. Amén. 2 BIBLIOGRAFÍA 1 Conciso Dicionário Bíblico (Rio de Janeiro: JUERP, 1985), 11. Biblia de Estudo Alfalit (Rio de Janeiro: Vida, 1996), 44. 2 Pantero de Alejandría dice haber ido a India, en el año 190, y encontrado cristianos viviendo allá, quienes atribuían a Bartolomé y a Tomás el origen del evangelio en aquella región. J. Thomaz ALMEIDA, As marcas de Cristo na História dos Homens, (São Paulo: Hierograf, 1989), 12. 3Justo Gonzalez, A Era dos Mártires, (São Paulo: Vida Nova, 1986), 42. 4 Conforme al video documental: A perseguição e o Triunfo da Igreja Primitiva- de Cristo a Constantino, (Parte I). Prod: Gateway Films en Asociación con Christian History Institute y Eo Television, (São Paulo: REBORN- Distribuidora de Video Ltda., 1990) 5 Biblia de Estudo Alfalit, 44. 6 Biblia de Estudo Alfalit, 44. 1 W.Walker, História da Igreja. Vol. 1,(Rio de Janeiro: JUERP, 1985), 54. 2 Conforme al video documental: A perseguição e o Triunfo da Igreja Primitiva- de Cristo a Constantino. (Parte I). Prod: Gateway Films en Asociación con Christian History Institute y Eo Television. São Paulo: REBORN- Distribuidora de Video Ltda., 1990. 3 Josefo, hijo de un sacerdote judío, nacido en Palestina en el año 37, fue uno de los líderes de la revuelta judía contra Roma, en el año 66 d.C. Al ser capturado por los romanos y llevado a la capital del imperio, recibió el nombre de Flavio, viniendo a ser un historiador de la Corte. En sus escritos sobre la historia de los judíos, hace importantes menciones sobre la muerte de Jesús, así como de algunos apóstoles. 4 Conforme al video documental: A perseguição e o Triunfo da Igreja Primitiva- de Cristo a Constantino. (Parte I). Prod: Gateway Films en Asociación con Christian History Institute y Eo Television. São Paulo: REBORN- Distribuidora de Video Ltda., 1990. 5 Gonzalez, 43. 6 Todavía hoy, místicos y peregrinos intentan rehacer este camino que fuera recorrido por el apóstol, el cual tiene una extensión aproximada de 800 km. 1 Almeida, 44. 2 O Novo Dicionário da Biblia, Vol. II, (São Paulo: Vida Nova, 1990), 831. 3 Gonzalez, 60. 4 Elena G. de White, en el libro Hechos de los Apóstoles , p. 456, afirma que ―Juan fue echado en una caldera de aceite hirviente; pero el Señor preservó la vida de su fiel siervo…‖. Ver también Justo González: A Era dos Mártires , p.41. Nota del traductor: El autor se refiere al ―Jacobo‖ del libro de Hechos. Santiago viene del latín Sanctus Iacobus o San Jacobo . Ver: Horn, Siegfried H., ed., Diccionario Bíblico Adventista (Buenos Aires: ACES, 1995) ―Santiago‖.