Tema 2 Los medios de comunicación. El lenguaje periodístico y publicitario 1. Los medios de comunicación de masas Los medios de comunicación de masas (mass media) constituyen un fenómeno de amplísima influencia hoy día. Televisión, radio, Internet son medios a los que acudimos diariamente para informarnos, formar nuestra opinión o simplemente para entretenernos. En cuanto a la prensa escrita –otro de los pilares del fenómeno mediático–, existe desde antiguo, pero fue la invención de la linotipia en 1884, por Otto Mergenthaler, el hecho que inició una época de esplendor que hoy se manifiesta también en la red de Internet. En cualquier caso, bien sea sobre el papel o en una pantalla, hemos de tener presentes cuando queramos hacer un análisis serio de la situación actual de nuestro idioma. No olvidemos que los usuarios de la lengua nos vemos sometidos diariamente a la poderosa influencia de los medios, tanto desde el punto de vista social como lingüístico. No es extraño que una gran mayoría tienda a imitar usos y giros propios de esos textos. 1.1 Tipos de medios de comunicación Medio Códigos Prensa escrita (periódicos y revistas) Televisión Además del código lingüístico utiliza el iconográfico (fotografías, dibujos, diagramas…), el tipográfico (tipos de letra, cuerpo de los caracteres), el cromático (color) y el espacial (página y lugar de ella en que se inserta la noticia, espacio que ocupa). Usa el código lingüístico, el iconográfico, el tipográfico, el cromático y el sonoro (voz, música y sonidos). Exige poco del receptor, gran poder persuasivo. Utiliza los códigos lingüístico y sonoro. Radio No obstante, la aparición y desarrollo del fenómeno de Internet ha revolucionado el concepto de medio de comunicación, ya que en la red es posible encontrar sitios web en los que se aúnan todas las posibilidades arriba mencionadas. Internet posee un hipercódigo. Es multidireccional, se retroalimenta, ausencia de unidireccionalidad. Cosas negativas: nada es gratis; siempre hay un interés de lucro detrás. El contenido se simplifica/deforma. Sigue los principios de la sociedad de consumo; los fomentan. Al tener un gran poder, debemos poseer capacidad crítica. MEDIOS DE COMUNICACIÓN Soporte Radio Características y uso Se trata, aparentemente, del medio más austero de todos, ya que solo utiliza los códigos lingüístico y sonoro. Sin embargo, su valor reside en la rapidez (es el primer medio en informar) y en su capacidad de adaptación. Permite ser simultaneado con otra actividad, dado que podemos llevar un reproductor de radio con gran facilidad. La radio es un medio ideal para estar al tanto de la actualidad más inmediata, para formar opinión (tertulias) o para entretenerse. Prensa escrita (periódicos y revistas) Tiene la ventaja de ser un medio en diferido (no en directo). Ello le permite reflexionar previamente el mensaje o distribuir los contenidos con suficiente tiempo. Nos permiten, además, consultar la información de forma permanente, cuantas veces queramos, reflexionar sobre la misma y analizarla adecuadamente. De hecho, las tertulias radiofónicas basan a menudo sus temas en los contenidos incluidos en la prensa. Un periódico con credibilidad representa una fuerza social de gran influencia y poder. Es un medio sumamente poderoso, ya que puede captar la total atención del receptor, quien casi no ha de hacer ningún esfuerzo para captar el mensaje. Se trata de un medio muy complejo que frecuentemente depende de la publicidad para poder subsistir (de ahí la guerra mediática y el cómputo de audiencias). Este hecho hace que las Televisión programaciones sean dispares, y dan lugar a la convivencia de programas de entretenimiento con otros más elaborados, de carácter informativo o formativo. Por otra parte, la implantación de la televisión digital ha provocado la aparición de canales temáticos o específicos, centrados en aspectos o asuntos concretos. Prensa escrita en Sus contenidos suelen estar actualizados de forma casi inmediata. Cuentan con la internet posibilidad de leer la edición impresa y con servicio de hemeroteca. Para concluir, además de la diversidad de códigos y usos, es conveniente considerar también las siguientes circunstancias: El receptor puede ser o no plural. En el caso de periódicos, cadenas televisivas o radiofónicas de carácter general, la comunicación se dirige a la mayoría y frecuentemente los productores y diseñadores de los programas adaptan la programación de forma que dé servicio tanto a un público formado como al que sólo pretende entretenerse. Nacen así fenómenos como el periodismo amarillo. Los intereses económicos e ideológicos de las empresas emisoras condicionan en gran medida el enfoque de los contenidos que se transmiten. La publicidad se ha convertido en el factor que financia los medios. Se ha posibilitado cierta retroalimentación entre los medios y su público. Recursos fónicos Pronunciación adecuada Énfasis Recursos tipográficos Tradicionalmente, en los medios audiovisuales se ha exigido a los periodistas que empleen una pronunciación neutra, desprovista de las características propias de cualquier modalidad regional. Hoy día este fenómeno está en regresión, aunque siempre se exige una adecuada vocalización y un ritmo que los oyentes puedan seguir con facilidad. En las tertulias radiofónicas es muy importante mantener el turno de palabra, de forma que no se solapen las intervenciones y así no se cree confusión. Existen subgéneros periodísticos o tipos de programas que requieren pronunciaciones específicas o énfasis. No se entona igual una retransmisión deportiva que un documental. Los textos escritos presentan recursos como las oraciones interrogativas (frecuentemente retóricas o apelativas) y exclamativas. Normalmente, estos recursos se encuentran en textos de opinión ya que, mediante los mismos, los autores pueden intensificar el tono emotivo de su mensaje o llamar la atención del receptor hacia algún aspecto determinado. Recursos morfosintácticos Supresión de determinantes Gusto por locuciones y construcciones perifrásticas Nominalización Abundante presencia de complementos Selección y combinación intencionada de los elementos Uso de frases cortas (en titulares) Aparición del estilo directo y de citas Presencia de oraciones impersonales o sin sujeto explícito Abundancia de oraciones pasivas Preferencia por ciertos tiempos y construcciones verbales —Este fenómeno (desaconsejable) se produce sobre todo en las retransmisiones deportivas: Se interna por la banda derecha y centra con pierna izquierda. —Este recurso pretende ofrecer la imagen de un lenguaje más elaborado. —Este recurso implica abundancia de construcciones con más categorías nominales (sustantivos y adjetivos) que verbales (verbos y adverbios). Se da sobre todo en los titulares por el deseo de concisión de esta parte de la noticia. —El deseo de condensar la información lleva a construir oraciones de cierta complejidad. —Los periodistas juegan con la organización sintáctica para destacar determinados aspectos que les parecen especialmente interesantes. La palabra inicial y la final de una oración son las que más llaman la atención de los lectores. —Este recurso pretende captar la atención de los lectores de manera rápida. —Para dar una mayor credibilidad y detalle a las informaciones aportadas suele acudirse a citas de los protagonistas de las noticias. Este recurso implica, a veces, la eliminación de los llamados verbos dicendi. —Se trata de un mecanismo que se emplea sobre todo en los titulares y cuando interesa más la acción que el protagonista de la noticia. —Se trata de un mecanismo que se emplea sobre todo en los titulares y cuando interesa más la acción que el protagonista de la noticia. —Recuperación del pretérito imperfecto de subjuntivo con su valor etimológico de perfecto simple de indicativo. —Empleo frecuente del pretérito perfecto simple, por ser este uno de los tiempos normales de la narración. —Uso del pretérito imperfecto del indicativo para acercar la acción a los lectores. —Uso del presente histórico para acercar el hecho a los lectores. —Uso del presente de indicativo (sobre todo, en los títulos) como muestra de la actualidad de las noticias. —Uso de la construcción verbal: a + infinitivo como adyacente de un sustantivo. Esto es un anglicismo, se recomienda su evasión. —Uso de la perífrasis pasiva: estar + siendo + participio. —Hay cierta propensión a alargar frases con: perífrasis, aposiciones, incisos, subordinadas, adjetivas explicativas, locuciones adverbiales, preposiciones y conjunciones, oraciones pasivas. En general, los textos periodísticos emplean un léxico de nivel medio y con suficiente grado de corrección, lo que hace que la comprensión sea fácil para múltiples lectores. Recursos léxico-semánticos Creación de neologismos Presencia de eufemismos Uso de tecnicismos Tendencia a la epicidad Recurrencia al lenguaje literario Empleo de apócopes, acrónimos, siglas, etc. —Se usan para designar aspectos de la realidad que surgen o cambian con la actualidad. —En muchas ocasiones se evita la designación directa de la realidad para no herir la sensibilidad de los receptores. Víctimas -> daños colaterales. —Cada tipo de publicación o sección del periódico emplea un léxico propio del tema tratado. —Este recurso lleva a la magnificación en el lenguaje. Además, implica la aparición de numerosos adjetivos y verbos valorativos, más próximos a la subjetividad y a la opinión que a la información objetiva. —Son frecuentes hipérboles, metáforas, metonimias, personificaciones, preguntas retóricas, etc. —Narco por narcotraficante. Muchas veces, estas siglas no se explican, y deben ser explicadas. —Se emplea también la sinonimia total, contextual o referencial. 3. Recursos no verbales o extralingüísticos Habría que destacar: La presencia de imágenes ilustrativas. El tamaño y tipo de color en todo el periódico o en el diseño de las páginas web. El tamaño y tipo de letra o la maquetación de la portada de un diario. Es frecuente, en este sentido, que las hojas impares en su zona superior izquierda se dediquen a los aspectos fundamentales y sean las más solicitadas por los publicistas. Lo mismo ocurre con la posición de los textos en la página: la mitad superior, por ejemplo, atrae la atención del lector antes que la mitad inferior. Este planteamiento puede ser modificado por la situación de una fotografía, tamaño de los titulares, etc. A mayor espacio, mayor importancia (portada, portadilla, faldón superior). La tipografía también cuenta. El tamaño y grosor (cuerpo) de la letra se comportan de manera parecida a la extensión. La publicidad es más cara en las páginas impares, en la portada y en el faldón superior. 4. Géneros periodísticos De entre los mass media prestaremos especial atención a la prensa escrita (tanto en formato papel como en Internet), ya que en ella se condensan las principales características lingüísticas propias de los textos periodísticos. Los textos periodísticos pueden ser de muy diverso tipo. De modo general, podemos clasificarlos en tres grandes grupos: Textos en los que predomina la información, planteada de forma objetiva. Hablamos, entonces, de género informativo. Prevalece en ellos la función referencial. Textos que ofrecen una visión subjetiva o interpretativa de los acontecimientos. Se trata del género de opinión. En este caso predomina la función expresiva, aunque también podemos hallar la apelativa ya que, en no pocas ocasiones, los medios intentan influir sobre nuestra conducta ante la realidad. Hay un tercer grupo de textos que combinan la información y la opinión. Se conoce como el género híbrido o mixto. Está compuesto por la crónica, la reseña crítica informativa, la entrevista de perfil. Actualmente, es el género que más está en boga. 4.1 Subgéneros informativos 1) Noticia Es el principal subgénero informativo; expone objetivamente hechos actuales e interesantes. Se constituye en noticia un hecho que atraiga a un número amplio de personas ya sea porque los hechos que narre son actuales, cercanos, trascendentes, emotivos, singulares o afecten a personas de relevancia pública. Deben ser concisas, precisas, claras y breves. Mientras más características incluyan, mejor serán las noticias. La estructura de la noticia suele tomarse como modelo para los demás textos periodísticos, aunque está anquilosada. Se compone de: Titulares (antetítulo, título y subtítulo). En ellos se ofrece una visión somera, superficial del hecho relatado. Son de suma importancia para los periódicos, ya que sirven tanto para atraer la atención de los lectores como para ofrecer un primer avance de los hechos ocurridos. Por otra parte, hemos de considerar que un amplio número de los lectores de periódicos —especialmente los ocasionales o de fin de semana— sólo lee los titulares para formarse una idea de la actualidad. Desde un punto de vista lingüístico, los titulares destacan por su brevedad y concisión. De los tres posibles componentes de los titulares, sólo el título es obligatorio. El antetítulo contextualiza, el titular lleva la información importante, y el subtítulo expone información secundaria. Entradilla (lead) o sumario. Corresponde habitualmente al primer párrafo de la noticia en sí. En ella se acumulan los elementos más relevantes de la información. Aparece en ocasiones con letra de diferente tipo o en negrita. El tamaño de la letra debe ser mayor al tamaño de la letra del cuerpo pero de menor tamaño que la tipografía del titular. Cuerpo o desarrollo de la noticia. A medida que avanzamos en la lectura se va perdiendo la cantidad de información y se acude a datos accesorios. Los párrafos son independientes. Para representar esta estructura de transmisión se acudió a la denominada pirámide invertida. A menudo, las noticias se acompañan de fotografías o infografías (técnica de elaboración de imágenes mediante ordenador). Estas últimas se realizan con elementos icónicos y tipográficos, y su finalidad es facilitar la lectura de la noticia. Estas fotos deben complementar, atraer al lector. Hay que tener en cuenta la objetividad (3ª persona). Se usan adjetivos especificativos, datos comprobados, valor denotativo, se hallan pocos adverbios de modalidad. El registro es culto, se deben explicar las siglas y los tecnicismos. La sintaxis se compone de oración simple o de oración compuesta coordinada. 2) Reportaje Es un trabajo periodístico de carácter informativo que necesita de una intensa labor de documentación e investigación por parte del periodista, que desea ofrecernos la visión de un hecho en profundidad. No está atado a la realidad. El periodista que realiza un reportaje ha de desarrollar un estudio completo de lo acaecido; habitualmente se desplazará al lugar de los hechos para recabar cuanta información sea precisa y entrevistar a las personas adecuadas. El carácter reflexivo y elaborado de los reportajes dificulta su aparición en la prensa diaria; en cambio, son muy frecuentes en televisión o en los suplementos dominicales de los domingos. No hay valoración ni opinión; apariencia de objetividad. El periodista suele ser más creativo. 3) Entrevista La entrevista plasma la conversación mantenida entre un periodista y una persona que vierte sus opiniones sobre un asunto de actualidad o sobre las actividades por las que es conocida. Suelen aparecer en los suplementos semanales. Un tipo particular de entrevista es el cuestionario, en el que se suele presentar siempre la misma relación de preguntas, independientemente del personaje entrevistado. Sigue el esquema pregunta—respuesta. El titular suele ir entrecomillado. En resumen, es un diálogo con estilo directo. 4.2 Subgéneros de opinión 1) Artículo de opinión Sirve para transmitir la opinión de un especialista sobre un determinado hecho de actualidad. Va firmado y suele admitir diversas extensiones según el autor, el medio de comunicación, etc. Se exponen unos hechos para aportar su valoración personal. La tipología suele ser expositiva-argumentativa o puramente argumentativa. Posee argumentos de analogía, de contraste. 2) Columna Texto similar al artículo, pero más concentrado, ya que sólo se dispone de una cantidad fija de espacio. Está firmada y los periódicos llevan a gala el tener buenos columnistas, que normalmente suelen dedicarse a la literatura. Tienen una periodicidad fija. El estilo es más libre, literario. 3) Editorial Artículo sin firma en el que se expresa la opinión del periódico sobre un tema actual. Suele aparecer en las primeras páginas de la publicación. Normalmente el lector conoce la noticia y busca en el periódico una orientación interpretativa; además, el periódico procurará convencer al lector de su postura e influir en sus respuestas sociales, ya que el editorial sustenta los puntos de vista y la orientación ideológica y político-social de la empresa editora. La estructura no es fija, pero suele responder al esquema piramidal con el clímax al final del texto. 4) Carta al director Los propios lectores del periódico mandan una serie de cartas al director del mismo, que se publican en varias páginas, en la sección de opinión. Los temas son variados. Estas páginas son un espacio fijo. Llevan firma. Con la llegada de las nuevas tecnologías, en lugar de cartas, se pueden mandar correos electrónicos. 5) Reseña crítica En este subgénero, se emiten una serie de juicios sobre acontecimientos normalmente de actualidad. 4.3 Subgéneros híbridos En este subgénero, los límites no están señalados. El periodismo actual avanza hacia este subgénero. 1) Reseña crítica informativa El autor informa y valora algún tipo de actividad cultural o artística (pintura, escultura, fotografía, cine, etc.). Suele aparecer al día siguiente de los estrenos, presentaciones o celebraciones. 2) Crónica Es otra variedad de información reflexiva en la que se mezcla la valoración del periodista con la exposición objetiva de los hechos. Por ello, muchos la clasifican como un género de opinión. El cronista, testigo de los hechos, cuenta, comenta y valora con un estilo que suele acercarse a la narración literaria. La temática es variada (deportiva, sociedad, sucesos, local, política, etc.). Posee intención valorativa, voluntad de estilo propio. Se usan figuras retóricas, ironía, humor, adjetivos valorativos, adverbios de modo. 3) Entrevista de perfil El entrevistador otorga un toque valorativo. No sigue el esquema pregunta— respuesta. A veces se introducen incisos de reflexión. El entrevistado no es actual, pero tiene personalidad y carácter. Suele aparecer en las contraportadas de los periódicos. Este formato es el más usado en la televisión y en la radio. Aparte de todos estos subgéneros, está apareciendo uno nuevo: noticia— comentario. Es mayoritario en los mass media. 5. La publicidad La publicidad es el arte de convencer o persuadir al receptor para que adquiera determinados bienes, servicios o ideas. Implica, además, la divulgación de noticias o anuncios de carácter comercial para atraer a posibles compradores, espectadores usuarios, etc. Desde una perspectiva sociológica, podemos afirmar que los mensajes publicitarios se encuentran entre los más utilizados en nuestra época. La publicidad busca desarrollar actitudes y comportamientos. Todo ello mediante el empleo de una fuerte carga argumentativa. Funciones del lenguaje más utilizadas en los mensajes publicitarios El emisor trata de atraer al receptor para modificar su comportamiento o Función apelativa Función poética Función referencial hábitos de consumo. El mensaje incluye, frecuentemente, numerosos recursos retóricos y figuras poéticas, tanto en el plano verbal como en el icónico. Se informa sobre el producto y se refieren sus cualidades. El proceso comunicativo de la publicidad presenta, además ciertas particularidades: El emisor es múltiple. El receptor es cualquier potencial comprador del producto y suele llamarse público objetivo. Entre el emisor y el receptor se produce retroalimentación cuando este adquiere el producto. Esta interacción se comprueba mediante el llamado control de efectos. El lenguaje publicitario presenta múltiples códigos integrados, tanto verbales como no verbales. Texto, sonidos e imágenes suelen complementarse para reforzar el efecto del mensaje. La calidad de un anuncio depende de la renovación constante de los diseños publicitarios. El deseo de vender provoca, cada vez con mayor asiduidad, la aparición de anuncios en los que se hace patente una cierta pérdida de valores éticos y morales. Este hecho nos obliga a incrementar nuestro sentido crítico y a valorar la posibilidad de adquirir o no los productos así anunciados. En este grupo también podríamos incluir la denominada publicidad engañosa. 6. Recursos lingüísticos de los textos publicitarios Los textos publicitarios presentan a menudo una serie de rasgos lingüísticos característicos. Debemos considerar que los publicistas pretenden modelar la mente de los receptores empleando diversos mecanismos semiológicos, como los colores, el tamaño de las letras, la música, las imágenes… Suelen agruparse del siguiente modo: Mecanismos de motivación. Son aquellos que se emplean para atraer al receptor haciéndole prestar gran atención no sólo al producto, sino también al anuncio. En un mundo saturado de publicidad, ganarse la atención del espectador es el primer gran reto del publicista. Mecanismos de grabación. Sirven para hacer recordar el anuncio. Se suele emplear mucho la repetición y la acumulación. Mecanismos de persuasión. Se emplean recursos propios de textos argumentativos, ya que la finalidad de estos mecanismos anuncios es vencer la resistencia inicial del receptor y convencerlo. Para ello, se utilizan argumentos de diversa índole (autoridad, exclusividad) de modo insistente. 6.1 Recursos fónicos Los anuncios transmitidos a través de canales auditivos (radio, televisión) presentan una riqueza fónica muy elevada, con la aparición de todos los matices propios de la lengua oral. En los textos escritos aparecen otros recursos: Aliteración, paronomasia, onomatopeya y rima son mecanismos de repetición de sonidos o estructuras que sirven perfectamente para la grabación de los anuncios en la mente de los receptores. El empleo de diversos tipos de grafías sirve como mecanismo de motivación de los compradores, que repararán atentamente en el texto. En esta misma línea se podrían situar las onomatopeyas o el ocasional empleo de faltas de ortografía intencionadas en los mensajes publicitarios. La variedad de tonos es útil para la persuasión de los receptores, ya que está estrechamente relacionada con la función apelativa del lenguaje y provoca reflexiones en torno a la compra del producto. 6.2 Recursos morfosintácticos Abundan los artículos y pronombres que ofrecen al producto una exclusividad que no deja lugar a dudas. En esta misma línea, suelen aparecer abundantes superlativos comparativos sin segundo término expreso, que dejan de lado a la competencia. También es útil a la persuasión el empleo de la primera y segunda personas o el imperativo, ya que se logra que los receptores se identifiquen plenamente con el producto o sientan que ellos mismos son los destinatarios exclusivos del anuncio. La utilización de sustantivos con valor ponderativo es cada día más frecuente. Es patente la supresión de preposiciones o tulización anómala de las mismas en gran número de eslóganes. Por último, en cuanto a mecanismos de persuasión, el uso de vocativos, verbos en indicativo, oraciones interrogativas y aseverativas rotundas, son otros elementos del nivel morfosintáctico idóneos para vencer y convencer al comprador. El empleo de llamativas construcciones nominales, la abundancia de oraciones sin verbo o la omisión de preposiciones, rozando a veces la agramaticalidad, son rasgos de atracción o motivación. Lo mismo ocurre con las frases cortas, la elipsis, o las oraciones exclamativas que aportan gran énfasis. La repetición de palabras, así como las anáforas o los paralelismos son mecanismos de grabación. 6.3 Recursos léxico-semánticos Los textos publicitarios, en líneas generales, se caracterizan por el empleo de un léxico positivo, en claro estilo argumentativo y buscando la persuasión. En este mismo sentido, y en muchas ocasiones, apreciamos cómo se manejan términos que aluden a sentimientos y valores comúnmente aceptados: respeto por el medio ambiente, la tradición, las minorías… son usuales en los anuncios actuales. En muchas ocasiones se pretende dotar al producto de valores de sofisticación técnica o de lujo. Frecuente el uso de tecnicismos para darle un barniz científico a aquello que se desea vender. También se crean términos nuevos que redundan en la idea de sofisticación y tecnología avanzada. La misma sensación persuasiva se alcanza con el empleo de abundantes acrónimos que colocan supuestamente a los productos en la vanguardia de la innovación tecnológica. También accedemos al lujo y a la idea de elegancia y distinción por medio del empleo de términos extranjeros. Son abundantes los anuncios parcial o totalmente en un idioma distinto al español. Como mecanismo de motivación, los publicistas acuden con frecuencia a figuras estilísticas que pretenden llamar la atención sobre el mensaje. Así, aparecen abundantes juegos de palabras o se acude a palabras polisémicas, creando dilogías (palabras con doble sentido). Otros recursos retóricos empleados son las sinestesias, las paradojas o mensajes sorprendentes, que nos llevan a lo contrario de lo que dicen, las personificaciones, las metáforas, las hipérboles, la comparación. Con esta lista no agotamos, por supuesto, todos los recursos. En el nivel propiamente semántico, ningún recurso supera en el lenguaje publicitario al aprovechamiento de las connotaciones. El publicista decide a qué público va dirigido el anuncio y, en función de esto, se apoya en los sentimientos más idóneos para este tipo de receptor. 6.4 Recursos no verbales Para motivar, persuadir y grabar, los publicistas no sólo acuden a los rasgos lingüísticos, sino que lo no verbal alcanza una relevancia elevadísima. Los anuncios cuidan al máximo la estética, los colores, los sonidos… se selecciona con minuciosidad a los protagonistas, los escenarios, la iluminación, la fotografía… todo para ganar nuestra atención como receptores, convencernos de la bondad de lo anunciado y hacerse memorable para así inducir en nuestras futuras acciones de compra.