UNIVERSIDAD PERUANA UNION FACULTAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES E.P- ADMINISTRACION CURSO Derecho para la Gestión TEMA: Análisis de los artículos 58 al 65 de la constitución política del Perú DOCENTE: Ovalle Huayllara Edwin ALUMNO: Josue Antony Valencia Guevara Grupo 1 | Ciclo 2 Filial Juliaca Artículo 58.- Economía Social de Mercado Establece que la iniciativa privada es libre y se ejerce en una economía social de mercado o que el Estado tiene un papel importante en la orientación del desarrollo del país, especialmente en las áreas de promoción del empleo, salud, educación, seguridad, servicios públicos e infraestructura. Aclara que es importante para la creación de riqueza, pero también reconoce la importancia de garantizar un acceso justo y equitativo a los bienes y servicios que se producen en la economía. Es decir, se busca un equilibrio entre la libertad de la iniciativa privada y la protección de los derechos y necesidades de la población en general. Artículo 59.- Rol Económico del Estado Establece que el Estado debe fomentar la creación de riqueza y asegurar la libertad de trabajo, empresa, comercio e industria. Esto significa que los ciudadanos tienen el derecho de emprender actividades económicas y generar ingresos sin restricciones innecesarias por parte del Estado. También establece una limitación importante a estas libertades económicas. El ejercicio de estas libertades no debe dañar la moral, la salud o la seguridad pública. El Estado puede regular ciertas actividades económicas que puedan tener consecuencias negativas para la sociedad. También el Estado debe proporcionar oportunidades para que aquellos que enfrentan desigualdades tengan la posibilidad de mejorar su situación, es decir debe fomentar el desarrollo de pequeñas empresas en todas sus formas para que los ciudadanos puedan emprender y generar ingresos de manera independiente. Artículo 60.- Pluralismo Económico Establece que el Estado permite la coexistencia de diversas formas de propiedad y de empresa en el país. Además, se establece que solo mediante una ley expresa se puede autorizar al Estado para llevar a cabo actividades empresariales directas o indirectas, pero solo por razones de alto interés público o de manifiesta conveniencia nacional. Es decir, el Estado puede realizar actividades empresariales solo en casos excepcionales, donde se considera que es necesaria su intervención para garantizar el interés público o la conveniencia nacional. También se establece que tanto la actividad empresarial pública como privada reciben el mismo tratamiento legal, lo que significa que no se puede establecer discriminación entre ambas formas de actividad empresarial. Esto implica que el Estado debe asegurarse de que las leyes y regulaciones aplicables a las empresas, ya sean públicas o privadas, sean justas e iguales para todos. Artículo 61.- Libre competencia Establece la importancia de la libre competencia en el mercado y la responsabilidad del Estado en facilitarla y vigilarla. El Estado debe combatir toda práctica que limite la libre competencia y el abuso de posiciones dominantes o monopólicas. Además, se prohíbe expresamente que cualquier ley o concertación autorice o establezca monopolios. También señala que la prensa, la radio, la televisión y los demás medios de expresión y comunicación social, así como las empresas, los bienes y servicios relacionados con la libertad de expresión y de comunicación, no pueden ser objeto de exclusividad, monopolio ni acaparamiento, ni por parte del Estado ni por particulares, directa ni indirectamente. Artículo 62.- Libertad de contratar Establece el principio de libertad de contratación, por el cual las partes tienen la libertad de pactar válidamente según las normas vigentes en el momento del contrato. Es decir, el Estado garantiza que las partes son libres de acordar los términos y condiciones del contrato sin interferencias indebidas del Estado u otras autoridades. Así mismo se establece que los términos contractuales no pueden ser modificados por leyes u otras disposiciones de cualquier clase, lo que significa que el Estado no puede interferir en los contratos previamente establecidos. Los conflictos que puedan surgir en la relación contractual solo pueden ser solucionados a través de mecanismos de protección previstos en el contrato o contemplados en la ley, tales como la vía arbitral o la judicial. Artículo 63.- Inversión nacional y extranjera Establece que tanto la inversión nacional como la extranjera deben sujetarse a las mismas condiciones. La producción de bienes y servicios, así como el comercio exterior, son libres. Sin embargo, en caso de que otros países adopten medidas proteccionistas o discriminatorias que perjudiquen el interés nacional, el Estado peruano puede tomar medidas análogas en defensa de este interés. Es decir, garantiza la igualdad de trato entre la inversión nacional y extranjera, y establece las normas y procedimientos que deben seguirse en los contratos con extranjeros domiciliados y en la solución de las controversias que puedan surgir. Artículo 64.- Tenencia y disposición de moneda extranjera Establece que el Estado garantiza el libre uso de la moneda extranjera, sin restricciones impuestas por el gobierno o cualquier otra entidad. También fomenta el comercio y las relaciones internacionales al permitir que las personas y las empresas utilicen moneda extranjera en sus transacciones. Aunque cabe resaltar que este derecho puede estar sujeto a regulaciones y restricciones en casos especiales, como en tiempos de crisis económica o para prevenir la evasión fiscal. En general, la libre tenencia y disposición de moneda extranjera es un aspecto fundamental de una economía libre y abierta. Artículo 65.- Protección al consumidor Establece que el Estado debe garantizar la libre competencia y evitar la competencia desleal en la actividad económica, protegiendo a los consumidores y usuarios. Como también, establece que el Estado puede establecer medidas de protección de la producción nacional en caso de necesidad por eso garantiza el derecho a la información sobre los bienes y servicios que se encuentran a su disposición en el mercado y en cuanto a la protección de la salud y la seguridad de la población, se establece una responsabilidad importante del Estado en la prevención de riesgos asociados a los bienes y servicios esto puede incluir la regulación de ciertos productos o servicios que puedan ser peligrosos para la salud o seguridad de las personas ya que es fundamental para proteger a la población y garantizar una economía justa y equitativa.