Patada a la escalera: La verdadera historia del libre comercio

Patada a la escalera: La verdadera historia del libre comercio
Diego Fernando Flórez Lizarazo
UNAB
Negocios Internacionales
Docente: Orlando Guzmán
Bucaramanga
2016
Con el paso de los años los países han adoptado medidas para fortalecer sus
industrias y abrirse a un mercado global, pero no todos lo han hecho de la
misma manera. Muchos países elaboraron diversas estrategias que
terminaron siendo efectivas, tan efectivas que, hoy en día los posicionan
como las potencias que mueven el mundo.
Uno de los primeros cambios en el mundo fue la época de oro del liberalismo
(1870-1914), en donde los países dejaron atrás el sistema mercantilista para
empezar a llevar sus economías hacia el comercio exterior.
Abrirse directamente al comercio internacional no fue precisamente el primer
paso de todos estos países, debido a que estas grandes potencias que
conocemos hoy, no eran la gran cosa hace algunos siglos, antes de que
sucediera la primera guerra mundial la intervención por parte de los países
era demasiado limitada y carecían de muchas políticas e instituciones que
intervinieran en la aplicación de políticas monetarias y políticas tributarias, el
primer Banco Central del mundo (Riksbank) se creó en Suecia en 1688 y el
primer país en aplicar un impuesto a la renta fue Gran Bretaña en 1842.
Además de esto sus industrias eran precarias y no tenían la suficiente
infraestructura para competir con el mundo.
Por este motivo adoptaron medidas proteccionistas por largos periodos, que
sirvieron para diseñar y crecer primeramente a nivel interno. Algunas de estas
medidas fueron el establecimiento de altos aranceles a las importaciones e
incluso algunas exportaciones, subsidios por parte de los gobiernos para
incentivar el trabajo en ciertos campos e inversiones para desarrollar
diferentes aspectos.
Gran Bretaña fue la cuna de la doctrina “laissez faire”, ya que ha sido el único
país que permitió durante algún tiempo el libre comercio absoluto, pero
después de la intervención de los reyes entre ellos Enrique VII que promovió
la creación de una Industria lanera altamente competitiva, pero el hecho más
relevante en el desarrollo industrial de Inglaterra fue la reforma introducida
en 1721 por Robert Walpole, quien instauró un sistema que beneficiaba de
muchas formas a la industria local con aranceles a las manufacturas
extranjeras, bounties (primas) a las exportaciones de diversos productos y
regulaciones a los productos exportados para garantizar la calidad de las
manufacturas y que estas no afectan la reputación de los productos británicos
en el mercado global.
Estados unidos hoy en día la principal economía que mueve al mundo, para
antes del final de la segunda guerra mundial tenía una de las tasas de
aranceles a las importaciones más altas del mundo, pero ¿para qué imponer
estos aranceles si lo que querían era abrir su economía al mundo?, la
respuesta es que durante este tiempo Estados unidos se estaba preparando
para lograr lo que es en la actualidad, y lo hizo no solamente poniendo estos
aranceles, durante ese tiempo incentivo una red de investigación agrícola en
la que permitió que escuelas de agronomía tomarán terrenos del gobierno
para realizar estudios y labores de campo. Por este motivo uno de los pilares
fue el establecimiento de institutos de investigación, que fueron apoyados
gracias a las inversiones publicadas a la educación en la segunda mitad del
siglo XIX. Por otra parte la intervención del estado apoyando las compañías
de ferrocarriles a través de subsidios permitió una comunicación más rápida
entre las diferentes ciudades. Todo esto se resume en que Estados unidos
logro crear una industria altamente competitiva, con una infraestructura
única que difícilmente podría ser igualada por otro país. Y cuando estuvieron
listos abrieron las puertas al mundo, imponiéndose como una industria
sólida.
Por estos motivos estos países llegaron a ser en la actualidad grandes
potencias mundiales, Gran Bretaña siendo el epicentro de la revolución
industrial que cambió completamente la forma de producir manufacturas.
Por su parte Estados Unidos que fortaleció su industria hasta llegar a ser la
número uno, y así podemos encontrar otros países que adoptaron estrategias
que produjeron grandes cambios en sus economías. Todas lo lograron gracias
a la inversión que hicieron en educación, investigación y desarrollo,
infraestructura, tecnología, maquinaria y muchas otras.
Algunos países como Alemania le apostaron a las inversiones de capital y la
captación de trabajadores extranjeros calificados, además de ser pioneros en
la reforma educativa todo esto con el fin de incentivar nuevas industrias.
Hasta llegar a ser el motor de la economía europea y la cuarta a nivel mundial
en la actualidad.
Por otra parte países como Japón que no tuvieron muchas ventajas para
aplicar medidas proteccionistas ya que estaban sujetos a acuerdos desiguales,
pero que sin embargo lograron establecer fábricas modelo para estimular la
industrialización, que luego fueron privatizadas pero siguieron recibiendo
ayudas de parte del gobierno y que hoy en día se posicionan como la mejor
en construcción naval y una de las más fuertes en materia de militar. Esto se
ve reflejado en el crecimiento que se vio en su PIB per cápita (8%) después de
la segunda guerra mundial.
Después de que estos países promovieron aranceles proteccionistas y
restricciones de todo tipo para llegar a alcanzar la cúspide del poder, donde
sus industrias y capacidad de transporte no se comparan con otras naciones,
es preciso darle esa patada a la escalera y hablar irónicamente de todos los
beneficios que trae el libre comercio y que ellos desaprovecharon mientras se
encontraban detrás de la puerta, pero que ahora al salir de ese lugar han
encontrado el camino correcto para llegar a la cima.