Subido por Luis Enrique Cataldo Fernandez

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INDICE
INTRODUCCIÓN
EL TÍTULO DEL LIBRO
SEDÚCETE A TI MISMA
DESNÚDATE
TÓCATE
PREPÁRATE PARA SEDUCIR
ASEO
VESTIMENTA
PEINADO Y MAQUILLAJE
SEDÚCELO
MENSAJES ERÓTICOS
SEXTING
LLAMADA TELEFÓNICA
INSINUACIONES EN PÚBLICO
SEDÚCELO EN CASA
PRELIMINARES
BESOS Y CARICIAS
MASAJES
SEXO ORAL
LA PENETRACIÓN
LAS PALABRAS
EL ORGASMO
EL TIEMPO
EL FINAL
CONCLUSIÓN
INTRODUCCIÓN
Cuando decidí escribir este libro, fue porque ya había leído otros tantos del
mismo tema, y lo que llamó mi atención, era que la mayoría de esos libros
habían sido escritos por hombres. Todos ellos mencionan como volverse una
“DIOSA EROTICA EN LA CAMA” y como “VOLVER LOCO A
CUALQUIER HOMBRE”, y todo eso no está nada mal, dan consejos
buenísimos, pero son muy pocos y en muy pocas ocasiones, los que se detienen
un momento a hablar del placer femenino. Es verdad que en este libro también te
doy consejos de cómo enloquecer a tu hombre, pero siempre de la mano a tu
placer y a tu disfrute.
Desde mi humilde punto de vista, de nada sirve ser una deidad sexual, si tu
placer no está en primer lugar. Para mí no es claro ni entendible el placer de solo
uno, cuando la relación es de dos.
Si realmente existieran los dioses del sexo, y estos realizaran milagros, Yo les
pediría un amante con el que tenga tanta química que todos nuestros encuentros
terminen en deliciosos orgasmos, y que estos orgasmos fueran incontables por el
resto de nuestras vidas. Yo no pediría volverlo loco, Yo pediría que
enloqueciéramos los dos juntos y solo de placer, Yo no pediría ser inolvidable,
Yo pediría nunca separarme de aquel que me lleve a lo más alto del clímax.
¿De qué trata este libro? Del placer mutuo y el reencuentro con tu sensualidad
perdida y oculta, una sensualidad sepultada bajo años de “EDUCACION” en la
que te hicieron pensar que el placer era malo e incorrecto. Te educaron para
pensar que si estas en un matrimonio estable, lo último que debes pensar es en
sexo y placer, que una esposa debe cumplir, nunca te mencionaron algo acerca
del deseo sexual y del goce que este trae. Te dijeron que decir ciertas cosas,
actuar de cierta manera, vestir cierta ropa, era de mujeres MALAS, y ti te
enseñaron a ser BUENA.
Muchas veces nos llenamos la boca diciendo que los tiempos han cambiado y
que la gente ya no piensa ya de cierta forma, deberías ver cuántas mujeres
conozco, que viven infelices, porque no se atreven a usar lencería de encaje.
Deberías ver cuántos hombres conozco que desean ver a sus esposas con
atuendos atrevidos y no se lo piden por pudor, pero prefieren desahogar su deseo
con prostitutas.
¿Por qué escribo este libro? Porque deseo que así como yo entendí, lo entiendas
Tú también. Soy una mujer, con deseos y sentimientos de mujer. Mi cuerpo y
mente, tienen necesidades, necesidades que deben ser satisfechas para que yo
pueda alcanzar mi felicidad, y entre esas necesidades está el placer sexual.
¿Para quién escribo este libro? Primeramente para mí, aunque se escuche
egoísta, y en segunda para toda mujer u hombre que crean que pueden aprender
algo de él, lo escribo para todos los que sienten lo mismo que Yo y desean
identificarse con alguien, y lo escribo para quien quiera pasarse un buen rato con
mis desvaríos.
Quedan varios temas en el tintero y espero poder tocar todos esos en futuros
libros. Mientras tanto, gracias por leerme y compartir conmigo su tiempo.
Deseo que tu lectura sea orgásmica.
EL TÍTULO DEL LIBRO
Para el título del libro, tomé un conocido dicho que dice algo así “Una mujer
debe ser una dama en la mesa y una puta en la cama” palabras más, palabras
menos. El asunto es que me basé en este refrán no en sus palabras, más bien en
su significado. ¿De qué habla? Pues fácil, que según las circunstancias y
momentos es como debemos actuar. Cuando sea necesario nos comportaremos
con cortesía y educación, pero en otras ocasiones debemos ser apasionadas y
fuertes.
La palabra “PUTA” aquí se refiere a una mujer que sabe ser apasionada y
deseada, que busca por todos los medios satisfacer a su hombre y a ella misma,
se trata de una mujer sin inhibiciones, dispuesta a llegar a lo más alto del placer
sexual sin sentir culpa ni vergüenza.
Y yo me fui un poco más allá de lo que habla el refrán, pues en él solo se refiere
a la cama, yo aumenté a propósito, todas las demás secciones de la casa
incluyendo hasta el auto. El placer lo puedes encontrar en cualquier parte, y al
experimentar ser PUTA en toda la casa, te darás cuenta que puedes gozar mucho
mas en otras habitaciones sin estar en la cama.
¿Te atreves a probar? ¿Te atreves a ser una PUTA como dice el refrán? ¿Serás
capaz de mostrar esa PUTA a tu esposo, novio o amigo?
No estás sola e este camino, habemos muchas mujeres queriendo sentir y probar
todas esas cosas que han estado a nuestro alcance, pero por temor no os
atrevimos a tocar.
Te invito ser una PUTA, a ser la PUTA que tu hombre desea tener en la cama, A
ser la PUTA que siente gozo y placer, a ser la PUTA que disfruta ser deseada y
tocada, a ser la PUTA que conoce su cuerpo y sus reacciones, a ser la PUTA que
es feliz en la cama, a ser la PUTA que disfruta de su sexualidad y la vive al
máximo.
SEDÚCETE A TI MISMA
Dice un refrán “No puedes encender la llama en alguien sino no está ardiendo en
ti” Y esta enseñanza funciona para muchas cosas pero yo la voy a enfocar al
sexo. Cómo encender la llama de la pasión en tu hombre si tu estas mas apagada
que nada.
Ahora empecemos por el principio “Tú”. Así es, Tú eres la primera pieza para
que todo comience a fluir, dejemos de culpar a los demás por lo que yo quiero o
no quiero sentir, “es que él ya no me mira” “ya no le intereso” “dejé de gustarle”
“estoy gorda” “no tengo tiempo” “estoy cansada” “él está cansado” ¡BASTA!
Basta de culpar a todo el universo porque “Tú” no tienes placer en la cama.
En mi vida he tenido los suficientes compañeros sexuales como para aprender
que no se trata de ellos sino de mí. Se trata de mi placer, de mis ganas, de mis
fantasías.
Lo primero que debemos hacer es seducirnos a nosotras mismas. Cómo sabré lo
que me gusta y dónde o cuándo me gusta si nunca lo he probado. Empecemos.
DESNÚDATE
Para este primer paso necesitaras un espejo de cuerpo entero, no uno de esos
pequeños en los que apenas cabe tu cara, yo hablo de un gran espejo en el que
mires tu reflejo completo en una sola mirada. Sé que has estado evitando esto
mucho tiempo, sé que tal vez llevas años sin verte desnuda y disfrutar de tu
cuerpo, pues eso se termina hoy.
Desnúdate frente al espejo: quítate prenda por prenda y ve aparecer tu cuerpo
frente a ti, quítate todo hasta los zapatos (si hace frio párate en un tapete, no
pongas pretextos) y ahora mírate, obsérvate. Yo sé que lo primero que vas a ver
serán tus “defectos” esas cosas que no te gustan, esas cosas que odias, pero date
tiempo, dale una oportunidad a tu cuerpo, deja que ese cuerpo te conquiste, deja
que ese cuerpo te enamore, necesitaras unos minutos para empezar a encontrar
tus partes encantadoras, búscalas, escarba hasta encontrarlas, todas las tenemos,
en todas las mujeres hay algo hermoso, búscalo. ¿Qué es? No lo sé, solo tú lo
sabrás, pueden ser tus ojos, tus manos, tus orejas, el dedo chiquito del pie, yo
que sé, búscalo.
Cuando hayas encontrado la parte más hermosa de tu cuerpo obsérvala
fijamente, disfrútate y cuando estés cansada de mirar busca otra parte hermosa
de ti, veras que ahora será más fácil que la primera vez. Y seguirás haciendo lo
mismo hasta que encuentres cinco partes hermosas de tú cuerpo, cinco partes de
ti que te parezcan hermosas. No busques consejos de nadie, en este momento
solo importa tú opinión, recuerda que lo único importante eres TÚ.
Yo pongo como meta cinco partes de tu cuerpo que te parezcan hermosas, pero si
a ti te parece que puedes encontrar más ¡ADELANTE!, eso es mucho mejor.
El espejo no miente solo nos muestra lo que nosotros queremos ver, si digo que
estoy gorda el espejo me muestra a una gorga, si digo que estoy vieja el espejo
me mostrará a una vieja, si digo que estoy acabada el espejo me mostrará una
mujer acabada ¿Has probado alguna vez decir que eres sexy y esperar a ver lo
que te muestra el espejo? No te rías ¿Lo has intentado? Ya ves que no lo has
hecho. De eso se trata este ejercicio y si lo haces como yo te lo digo veras la
diferencia, ya lo probé en mí y me funcionó.
En mi experiencia este ejercicio me causó un poco de problemas, cuando me
miraba al espejo solo veía a una mujer de baja estatura, piernas anchas, cadera
prominente, no soportaba mirarme, cuanto más lo hacía más defectos
encontraba. Intenté darme la vuelta a ver si por detrás me veía mejor y ¡Oh por
Dios! Casi me desmayo, vi celulitis, un trasero enorme y mil cosas más. Odie mi
cuerpo, me odie a misma, me sentí tonta por intentar buscar belleza en mí. Tengo
que confesar que lloré un poco, me sentía la mujer más fea del mundo, me decía
a mi misma todo tipo de cosas horribles, pensaba que ningún hombre desearía
estar conmigo, pues ¿Quién desearía a una mujer tan deforme? Que
equivocación.
Pues ahí estaba yo, desnuda frente al espejo maldiciendo mi figura y a la
genética por haberme hecho tan fea y cuando ya no encontré mas defectos en mi
cuerpo, me di cuenta que mi cintura era muy pequeña, mire mis senos y eran
hermosos (medianos pero hermosos), mi boca es sexy, mis ojos grandes, mis
manos delicadas y la cadena seguía creciendo con un montón de cualidades
físicas hermosas. Volví a llorar y me arrepentí de no haber visto todo eso antes.
Cuando hayas descubierto la belleza en tu cuerpo podemos pasar al siguiente
paso.
TÓCATE
(Para este paso ya no es necesario estar frente al espejo) Recórrete completa,
acaricia cada parte de ti, deben ser caricias muy suaves, no sientas con tus
manos, siente con tu piel, cómo reacciona tu cuerpo con cada roce, en cada
centímetro de ti, dónde te gusta o dónde no lo soportas, dónde o con que
intensidad te agrada mas. Empieza desde la cabeza, moviendo y alborotando tu
cabello, ¿Qué sensación te provoca? Desliza los dedos por tu cara, despacio,
pasa por tus orejas y tu cuello, en lo personal esa zona es muy sensible para mí,
las clavículas, los hombros, los brazos, tus manos. En este momento te darás
cuenta que no es necesario ir más allá para que te sientas excitada, ni tampoco
ser rudo para sentir algo, con esas leves y suaves caricias auto realizadas
empezaras a sentir “calor”
Ahora pasemos al resto del cuerpo. El pecho, sé que el pecho no te parece
emocionante y a tu hombre tampoco, él y tú están pensando en tus senos,
entonces acaricia tus senos, sé suave y gentil con ellos, recórrelos y reconócelos,
deja tus pezones todavía no los toques, siente esas formas redondas de tu cuerpo,
esa parte que tanto gusta a tu hombre, no importa el tamaño, seguramente son
hermosos, ahora sí, toca tus pezones, siente como se arrugan y reaccionan a las
caricias, tus pezones son tus indicadores de temperatura y de excitación, son
muy sensibles y receptivos, debes conocerlos bien, ellos están muy ligados a tu
placer.
Pasemos a los costados y al abdomen, te sorprenderás lo sensible que son tus
costillas y tu abdomen, también intenta acariciar tu espalda, yo sé que es difícil y
tendrás que contorsionarte un poco pero inténtalo.
Tu vientre, no pienses en si esta plano, abultado o muy sobresaliente, solo
acarícialo y veras lo lindo que es. Toca tus caderas, nalgas y muslos, esas curvas
que te hacen femenina y sensual. Detente un poco en la parte interna de tus
muslos, dale más tiempo a esa parte, has que tus manos suban y bajen, no toques
tu vulva, no nos estamos masturbando TODAVIA, pasa a tus rodillas,
pantorrillas, tobillos, pies, los pies también son muy sensibles, dales su tiempo, a
cada dedo dale un pequeño masaje, a la planta de tus pies también.
Llegó el momento de profundizar más. Si todavía no lo estabas, recuéstate, ponte
cómoda, separa las piernas y manos a la obra.
Vas a conocer más de ti, si ya te has masturbado antes esto será muy fácil, pero
sino no lo has hecho nunca, esto será delicioso.
A estas alturas de los tiempos son pocas las mujeres que no se hayan auto
explorado pero aun así las hay, y en ocasiones explorarnos no nos lleva a sentir
ni cosquillas. Esto lo hacemos para conocernos, para sentir, para disfrutar, para
adquirir experiencia y poder transmitirla a nuestro hombre.
Tocarse no es pecado, no nos quedaremos ciegas ni nos saldrán pelos en la
mano.
Ya que estas recostada con las piernas abiertas y después de haber acariciado tu
cuerpo entero tal vez estés un poco húmeda, tal vez tu cuerpo reaccionó a las
caricias y exista un poco de flujo vaginal en tu vulva, sino es así no te preocupes,
no pasa nada, si deseas ayudarte con un poco de lubricante vaginal es buena
idea.
Conócete, conoce tu vulva, tu clítoris tu vagina, las sensaciones que hay en cada
una de tus partes, qué sientes al acariciar esa zona, que pasa en ti cuando rozas tu
clítoris, hazlo con suavidad, reconoce su forma, su textura ¿Qué pasa en ti
cuando presionas ligeramente? Déjate llevar, tu cuerpo se comunica contigo,
debes entenderlo, Tú sabrás si debes tocar con más fuerza o más rápido, tu
cuerpo te dirá exactamente lo que necesita y Tú debes dárselo. Busca, explora,
adéntrate hasta que el placer llegue, no te presiones en llegar, hazlo con
tranquilidad, recuerda, lo más importante eres TÚ.
Cuando ya haya pasado y la electricidad haya recorrido tu cuerpo, y tus vellos se
hayan erizado y tu respiración se haya agitado, descansa, recupérate, levántate,
aséate y sigue tu vida.
Cuál es la finalidad de todo esto, pues al conocer tu cuerpo, al encontrar esos
puntos bellos en ti, encontraras fortaleza y seguridad, y ¿Qué pasa con las
mujeres seguras? Pues siempre ganan. No se trata de tener sexo con las luces
apagadas o con pijama o con ropa para que tu hombre no te mire, se trata de que
le muestres todo eso hermoso que hay en ti. Uno de los afrodisiacos más
infalibles es la seguridad en una misma, si tú eres segura, lo excitaras al máximo.
Después, cuando conoces lo que siente tu cuerpo al ser tocado en cada parte,
sabrás guiar a tu hombre a esos tus lugares favoritos, lo llevaras hasta ese punto
donde enloqueces y entonces el placer será mutuo.
NOTA: Y si vas a tener sexo con ropa, que solo sea porque es un rapidín en un
lugar prohibido ;)
PREPÁRATE PARA SEDUCIR
En este capítulo recordaremos como seducir a un hombre, y digo recordaremos
porque en realidad todas lo sabemos, solo que lo hemos olvidado. No será
necesario usar minifaldas o escotes pronunciados para lograrlo.
Después del primer capítulo ya aprendimos a ser más seguras de nosotras
mismas y ya adquirimos “armas” para llevar a cabo nuestra misión ¿Cuáles son
esas armas? Pues nuestra propia belleza y la seguridad adquirida al amarnos y
vernos hermosas a nosotras mismas.
Una de las grandes diferencias entre hombres y mujeres es nuestra forma de ser
atraídos hacia algo o alguien. Los hombres son visuales, ellos deben ver para
sentir, esto podría llevarte a pensar que debes ser una súper modelo para llamar
la atención, sí piensas eso te equivocas, la cosa es más sencilla.
ASEO
Lo pongo como primer punto pues sin esto cualquier relación queda arruinada,
nadie quiere ni puede, aguantar la respiración cada que está con su pareja, que
incomodo tener que mirar a otro lado para respirar aire fresco mientras se está
con alguien ¿Te ha pasado? Nadie desea irse a la cama con una apestosa. El aseo
diario es fundamental para la vida, en esto va incluido cualquier tipo de relación.
La limpieza embellece nuestra piel, la hidrata y la suaviza, es un gran beneficio
el aseo.
En la comunicación de pareja van incluidos los cinco sentidos y el olfato es
primordial, que bello acercarse a alguien y sentir su olor, ese olor de su piel y
cuerpo entero, después vendrá el olor de su perfume, jabones o cremas, pero
cada uno tiene su propio olor. Cien personas podrían utilizar los mismos
productos de limpieza personal, los mismos perfumes y nunca olerían igual, cada
uno de nosotros tiene su propio olor, es una marca individual así como la huella
digital.
Un cuerpo limpio siempre es atractivo y bello, siempre provoca ser acariciado.
VESTIMENTA
Como ya mencionaba antes, no es necesario usar traje de “dama de la noche”
para seducir a un hombre pero sí hace falta vestir bien ¿A qué me refiero con
esto? No hablo de ropa costosa ni de diseñador, hablo de usar la ropa con la que
te sientas bien, usar la ropa con la que te sientes bella y segura, ponte ese
atuendo que cuando te miras en el espejo dices “mami que rica estas” Cada una
de nosotras tenemos gustos y costumbres distintas, Tú sabrás cual es ese “outfit”
Pero resulta que no te sientes a gusto con ninguna de tus prendas, pues llegó el
momento de cambiar, experimentar y estrenar. En esta ocasión si podrías seguir
el consejo de alguna amiga o hermana o madre, alguien de tu completa
confianza, alguien que te pueda aconsejar sanamente y sin buscar perjudicarte,
Tú sabrás a quien invitar a realizar tus compras ¿Dónde compraras? Donde Tú
quieras, solo asegúrate de poder probarte la ropa antes de salir de la tienda para
no arrepentirte después y tener que cambiarla.
Es cierto que lo más importante son los sentimientos y que lo más bello de una
persona está en su interior, pero ¿Quién no se ha sentido arrebatadora por un
simple par de zapatos? O ¿Quién no se ha sentido la dueña del mundo por usar
un lindo conjunto? A mí sí me ha pasado, y esa seguridad que nos da la ropa es
una gran ayuda al momento de interactuar con el sexo opuesto.
PEINADO Y MAQUILLAJE
¿Debo ir al salón de belleza para poder seducir a un hombre? NOOOOOO, en
este caso usaremos el “menos es mas” La sencillez y la naturalidad son muy
seductores, es verdad. No te digo que vayas de cara lavada por el mundo, ni sin
pasarte el peine por la cabeza, solo digo que lo natural es muy hermoso, existen
tipos de maquillaje que sin ser cargados son bellos. Claro que siempre debes
tomar en cuenta la hora y la actividad que vas a realizar, no vas a ir de alto
peinado y maquillaje a la alberca, o a una velada nocturna sin maquillaje, todo
según la actividad que vayas a realizar, al trabajo en la oficina no te maquillaras
con ojos ahumados y seductores y la boca roja sangre, me dirás “pero hay quien
lo hace” solo te hago una pregunta ¿Te sentirás cómoda haciéndolo Tú también?
Solo recuerda que nadie quiere tener una noche de pasión con un payaso, a
menos que se tenga alguna fantasía sexual relacionada con los circos.
Recordando lo anterior, los hombres son visuales y les gusta ver a una mujer que
se preocupa por su aspecto físico, a ellos les gustan las mujeres que se arreglan
¿Qué me dirás ahora? “estoy en casa con los niños todo el día, no me da tiempo”
“Con los quehaceres del hogar no puedo pensar en arreglarme” “Trabajo muchas
horas fuera y cuando llego ya estoy muy cansada” “Lo único que quiera al llegar
a casa es quitarme el sostén y lo zapatos” Todas pasamos por eso y te entiendo y
te puedo decir que hasta usar pijama te puede hacer sentir a gusto contigo
misma, veamos las diferencias.
1.- Llegas a casa muy cansada del trabajo solo piensa en ponerte pijama y
ponerte a ver un programa.
a) Te pones pantalones deportivos viejos, la playera del partido político y un par
de calcetines de diferente color porque perdiste las parejas.
b) Te pones un juego de pijama limpio, y destinado solo para dormir, un par de
calcetines de uso nocturno.
¿Qué opción eliges? ¿Con cuál de las dos opciones crees que le gustaría más
verte a tu hombre? La respuesta es sencilla.
2.- Debes ir a recoger a los niños a la escuela.
a) Sales a la calle con lo que tienes puesto mientras haces el quehacer en casa,
pantalones desgastados, una camisa en no muy buen estado y un suéter
deshilachado y zapatos deportivos, el cabello mal recogido en un intento de cola
de caballo.
b) Te tomas veinte minutos para cambiarte de ropa y ponerte algo limpio y
presentable, te sueltas el cabello o lo recoges de forma correcta y te pones un
poco de gloss en los labios.
¿Cómo crees que le gustaría verte a tus hijos?
3.- Tu esposo llega de trabajar.
a) Tú lo recibes así como cuando fuiste por lo niños a la escuela, pantalones
desgastados, una camisa en no muy buen estado y un suéter deshilachado y
zapatos deportivos, el cabello mal recogido en un intento de cola de caballo, solo
que a esta hora ya estas mas cansada y de malas.
b) Ya te has bañado y aseado, te pones ropa limpia y linda, tal vez un poco de
maquillaje, lo esperas con una sonrisa.
¿Qué prefieres? ¿Cómo te gustaría verte a ti misma?
No creo que sea necesario poner más ejemplos, con estos es suficiente y cabe
mencionar que todo lo dicho aquí es verídico, yo lo he visto con mis propios
ojos, no miento ni exagero con estos ejemplos.
Hacer esos pequeños cambios no nos llevará mucho tiempo y si nos traerá
muchas gratas sorpresas.
Habrá quien me diga, “Todos los cambios los debo hacer yo como mujer y los
hombres ¿Qué?” “No es justo que ellos no hagan nada” “Esos son comentarios
machistas” Ya casi las escucho, pero las cosas no son así. Para ver cambios en
una relación de dos alguien tiene que ser el primero, y sino lo hace el hombre,
tendrá que hacerlo la mujer y viceversa, no es machismo ni feminismo.
SEDÚCELO
Empecemos a calentar motores. Para seducir a un hombre no es necesario
tenerlo frente a ti o cerca de ti, es más, no es necesario, ni siquiera estar presente,
Tú eres capaz de poner un hombre a mil sin que te vea ¿Cómo? Muy sencillo.
MENSAJES ERÓTICOS
Ahora la tecnología está completamente de nuestro lado, existe tanta facilidad
para comunicarnos de distintas formas. Los mensajes son un recurso maravilloso
cuando se trata de encender a tu hombre.
¿Cómo lo haremos? Primeramente Él no está cerca y no tiene opción de
desplazarse hacia ti en ese momento, está trabajando o estudiando o en el
gimnasio, donde sea, pero lejos. No vas a irte directo, tu camino comenzará
discreto, un saludo, preguntar cómo se encuentra y poco a poco subir el tono
¿Qué puedes decir? “Hoy hace tanto calor que estoy casi desnuda en casa” “He
estado pensando en ti y en cómo podríamos divertirnos juntos” “En este
momento estoy viendo una película muy candente y me acorde de ti” No es muy
difícil, es solo el principio, porque después la conversación tomara forma y fluirá
solita, todo depende de lo que Él te diga Tú sabrás que contestar, la conversación
subirá de tono rápidamente, a los hombres les encanta esto.
Muy importante, recuerda que el control lo tienes Tú, Tú vas a saber cuánto
tiempo durará esta conversación, Yo te recomiendo que no la prolongues mucho,
no permitas que sea Él el que termine, se Tú la que finalice, tienes que esperar a
llegar a la cúspide y a lo más emocionante de tus mensajes para solo despedirte,
siempre debes dejarlo con ganas de mas, no lo sueltes todo en una sola
conversación, sino para las siguientes te vas a quedar sin nada que decir, y no
nos gusta ser repetitivos.
Cuál es la finalidad de todo esto, invitarlo a usar su imaginación, si le mencionas
que andas desnuda por la casa, Él te imaginará de esa forma, todo lo que Tú le
cuentes tomará forma en su mente y lo hará explotar porque no puede ir
corriendo a donde Tú estás.
Esto solo es un juego previo a todo lo demás, puedes usarlo en varias ocasiones
pero procura no abusar de este recurso, ni, como ya te mencionaba, alargar
demasiado las conversaciones porque podrían tornarse aburridas y monótonas.
Tener una conversación erótica puede ser muy divertida, y si todavía no conoces
a tu hombre en el ámbito sexual, esta práctica te dará muchos indicios de sus
gustos y preferencias, te abrirá el panorama de su comportamiento sexual y
puede ser hasta un aviso de “stop” que te diga que no debes seguir en esa
relación.
Si por el contrario, tu hombre y Tú ya llevan tiempo de relación y esta es la
primera vez que le mandas mensajes de este tipo, créeme cuando te digo que lo
sorprenderás de manera muy positiva, Él quedará encantado con tu iniciativa y
cuando llegue a casa, lo último en lo que pensará es en la cena, lo único que
habrá en su mente será quitarte la ropa y hacerte el amor.
Nuevamente te digo que lo importante eres Tú, los textos que mandes deben ser
propios, lo que Tú sientes y deseas, no textées algo que te haga sentir mal o
contestes cosas que te molestan, encuentra lo divertido en esto y disfrútalo, el
control es tuyo y solo Tú sabrás donde empezar y donde terminar, solo Tú sabrás
lo que escribes y lo que contestas, dirige la conversación y dale forma.
Todo esto nos lleva a otra practica, también muy divertida, “el sexting”
SEXTING
¿Qué es esto? Fácil, es el envío de mensajes, fotos o videos de contenido sexual,
y lo mandas a través de tu teléfono celular.
Hacer esto es ir un poco más allá, yo te recomiendo que si piensas practicarlo
sea con una persona de tu plena confianza y no con el chico al que conociste
anoche en el antro, el sexting puede ser muy divertido si lo realizas de forma
adecuada, pero también puede ser muy destructivo sino tomas tus precauciones.
1.- Solo practica el sexting con tu pareja formal o con alguien de tu plena
confianza.
2.- Nunca, nunca, nunca, nunca, muestres tu cara ¿Por qué? Los celulares se
pierden, son robados, prestados y más cosas, no te arriesgues a encontrar un
video tuyo en la red solo porque tu novio perdió el celular con todos tus videos.
3.- Hazlo solo porque Tú así lo deseas, no permitas que nadie te presione a
“pasarle tu Pack”, Qué ya no te va a querer sino lo haces, qué te va a dejar y se
va a buscar otra, adelante, deja que lo haga, recuerda que nadie te puede forzar y
Tú no tienes porque ceder a cosas para las que no estás lista.
Después de los consejos de la “abuelita” procederemos a practicar el sexting, y
la pregunta de todas en ¿Cómo lo hago? Yo me pregunté lo mismo la primera
vez, pero yo tenía la fortuna de contar con una amiga muy experimentada en esta
rama y me dio algunos consejos. Cuando escuché todas las instrucciones de mi
amiga me sentí segura y tranquila, todo cambió cuando llegue a casa estando yo
solo frente a mi celular ya no sabía qué hacer.
Yo te recomiendo primeramente una buena iluminación, a diferencia de lo que
piensas, la luz ayudara a que tu piel se vea más limpia y tersa, no creas que
resaltará imperfecciones porque no es así.
Busca un lugar cómodo y con espacio suficiente para que puedas moverte,
procura no tener un fondo grotesco para tus fotos y videos, a qué me refiero con
esto, todos hemos visto imágenes en internet de personas que se fotografían en
baños sucios, en recamaras desordenadas y todo tipo de habitaciones sin asear,
cuida mucho esto por favor.
Procura poner tu teléfono en un lugar fijo para que puedas moverte a gusto, yo
prefiero la cámara frontal para saber qué es lo que está siendo captado y sentirme
más segura, si quieres también puedes tener el celular en la mano y dirigirlo a los
lugares que a ti te parezcan mejor.
¿Cómo debo posar o qué movimientos debo realizar en mis fotos o videos? Es lo
que te estarás preguntando, pues bien, procura que las fotografía resaltes esas
partes que para ti sean más hermosas, también esas partes de tu cuerpo que tu
hombre más ama. En los videos procura que tus movimientos no sean
exagerados sino mas bien suaves y lentos, muy sensuales, toca tu cuerpo,
recórrelo con tus manos, has que tu hombre sienta que es él mismo el que te
toca, tal vez quieras decir algunas frases calientes o gemir un poco mientras te
acaricias, eso lo excitará aun mas.
No es necesario que hagas un largometraje, con un video de máximo un minuto
basta, puede ser de menos tiempo y no pasa nada, y si además es tu primera vez
en el “mundo de los videos eróticos” con un lapso corto bastará, recuerda, no
eres actriz porno.
Te recomiendo tomar varias fotos y videos, analizarlos e inspeccionarlos antes
demandarlos, selecciona los que más te gusten y con los que te sientas
satisfecha, no querrás arrepentirte de mandar algo que no te gusta, cerciórate que
eso que envías es realmente lo que quieres que tu hombre vea. Y al hacer el
envío ASEGURATE que sea el destinatario correcto, me imagino que no deseas
enviar el archivo a tus padres o a tu jefe, eso sería muy vergonzoso.
Y cuando tu hombre reciba tus fotos y tu video, lo único que hará durante el día
será pensar en ti y en cómo te va a comer completita nada mas te tenga cerca.
Algunas personas mandan videos o fotos de masturbación o actos sexuales, Tú
sabrás hasta donde quieres llegar con esto, qué te conviene o qué es lo que te
hace sentir bien, diviértete mucho y además descubrirás que te ves muy bien en
pantalla y que la cámara te ama.
LLAMADA TELEFÓNICA
Esta práctica es muy diferente a las anteriores, ya que un mensaje no es
necesario que sea respondido en al momento exacto de ser recibido y una
llamada si no es atendida en el momento puede traer mucha frustración. Al
menos yo soy muy desesperada y si no me contestan la primera llamada ya estoy
pensando de todo, probablemente Tú seas igual, entonces, si piensas realizar
llamadas eróticas a tu hombre debes prever varias cosas.
Lo primero que debes preguntarte es ¿Mi hombre tiene tiempo de atender mi
llamada? Lo ideal sería que conocieras los horarios de tu hombre, así sabrás el
momento adecuado de realizar tu llamada. Sería muy frustrante, que ya
estudiaste tus diálogos, sabes cada palabra que vas a decir y ya te imaginaste
como se pondrá tu hombre con las frases candentes que preparaste, y resulta que
todo se interrumpe porque Él tiene que atender a un cliente. Piensa bien cuál es
el momento propicio para llevar a cabo tus planes sin que estos sean
interrumpidos. Piensa, es un medico, obrero, ingeniero, vendedor, de sus
actividades depende si tiene tiempo para contestarte y la respuesta que recibas en
la llamada. Eso es durante el día, ya que si no viven juntos le puedes llamar
durante la noche para hacerlo soñar contigo o quitarle el sueño porque no deja de
pensar en ti, también puedes llamar durante la mañana al comenzar el día, eso es
magnífico, cuando está saliendo de casa pensando en el transito o el trabajo
pendiente, Tú lo llamas para calentarlo un poco.
¿Qué dirás en esa llamada? Pues lo mismo que dices en los mensajes de texto,
solo que en esta ocasión tienes un recurso más “tu voz” procura escucharte clara
y determinada, utiliza algunas pausas y risitas traviesas, Cuando el te pregunte
de qué te ríes, Tú podrás contestar que se te ocurrió algo travieso, que te dieron
ganas de hacer algo con Él, puedes usar tonos suaves y sensuales mientras hablas
o escucharte muy misteriosa mientras le cuentas que le tienes una sorpresa para
preparada para esta noche, puedes contarle que te compraste un conjunto de
encaje muy atrevido y quieres una sugerencia para saber cuándo usarlo o que
quieres su opinión sobre cómo se te ve puesto. Hay infinidad de opciones, ponte
creativa.
Mi recomendación es muy similar a las anteriores, procura que la llamada no sea
muy larga, cuando sientas que se está poniendo muy caliente la cosa, termina la
conversación y despídete, déjalo pensando en ti.
Otra cosa muy importante y esto es para todas las practicas que te propongo
aquí, NO MIENTAS, no le prometas a tu hombre algo que no vas a cumplir,
porque eso te arruina, no le digas que tienes una puesta una lencería de seda
negra y muy atrevida sino cuentas con esa prenda, no le prometas una sesión de
sexo oral en el coche sino piensas hacerlo, debes decir solo la verdad y aquello
que estés dispuesta a realizar, si crees que no te atreverás, mejor ni lo menciones.
Después de estas técnicas que llevaremos cabo a distancia, cambiaremos el
ambiente un poco, vamos a realizar exactamente lo mismo pero en vivo y en
directo, sí, así como lo lees, todas esas propuestas indecorosas e insinuaciones
atrevidas que le hiciste a tu hombre por mensajes o llamadas ahora las harás de
frente.
Primeramente debes tomar en cuenta que todas estas prácticas no son para
llevarlo a la cama en ese instante, todo esto es para dejarlo ardiendo sin
necesidad de terminar en sexo, recuerda que los mensajes, fotos y videos se los
mandaste en un momento en el que no puede ir corriendo a tus brazos,
igualmente la llamada candente que le hiciste solo lo puso caliente, de la misma
forma todo lo que te voy a recomendar a continuación será para darle una
pequeña muestra de lo que eres capaz y de las maravillas que le esperan cuando
por fin te quite la ropa.
INSINUACIONES EN PÚBLICO
Esto es de lo más divertido que puedes hacer en tu vida, te lo recomiendo
ampliamente. Pero debes ser muy responsable de cómo y cuándo lo haces y
sobre todo con quién. No podemos andarnos insinuando por ahí con cualquiera o
en cualquier situación, debes ser respetuosa hacia tu hombre y hacia las personas
que los rodean, no queremos que piensen que estás loca o desesperada o muy
urgida.
Como había dicho antes, todo esto es solo para elevar un poco la temperatura en
tu hombre, y también se elevara alguna que otra cosa por ahí abajo, por lo tanto
procura ser discreta, lo que dirás y harás es solo para Él, toda la gente alrededor
no sabrá lo que pasa, mientras tanto dentro de ese hombre habrá una lucha por
evitar demostrar todo lo que le estarás haciendo sentir y pensar.
Iniciamos con:
1.- Miradas y Gestos, no es necesario hablar todavía, únicamente le vas a lanzar
algunas miradas, la primera será a los ojos, Él, en ese momento, seguramente
está distraído o pensando en cualquier cosa, Tú lo vas a mirar fijamente hasta
que se percate de ello, cuando quiera hacer contacto visual contigo, Tú desviaras
la mirada con una pequeña sonrisita picara, ATENCION, dije sonrisa picara, no
sonrisa de burla, encuentra la diferencia.
La siguiente mirada será hacia su cuerpo, pecho, hombros, manos, brazos,
cuando Él vuelva a notar tu mirada, nuevamente desvías la mirada, muerdes tu
labio inferior y vuelves a sonreír. En este momento, Él ya empieza a sospechar y
probablemente te pregunte qué ocurre, si es así, Tú solo haz una señal de
negación con la cabeza mientras sonríes con picardía.
La tercera mirada será directamente a su pene, con discreción, recuerda que estas
rodeada de gente, cuando tu hombre te mire, entonces ya puedes hacer contacto
visual con Él, míralo fijamente mientras sonríes, utiliza esa mirada de “Eres mío,
caíste en mi trampa” utiliza una mirada de cuando sales victoriosa después de
una travesura.
En este momento ya no hay marcha atrás, ya le plantaste en la mente tu idea, y
ahora es Él el que esta imaginando todo lo que te quiere hacer. Y es Él el que no
dejara de mirarte.
Ahora que tienes toda la atención de tu hombre, juega con tu cabello, y si tienes
algo en la manos, acaricia ese objeto de arriba abajo y has que Él lo note, eso
hará que por su mente pasen más cosas.
2.- Roces y Caricias: Ahora sí lo puedes tocar, pero vamos a empezar con muy
poco, recuerdas que tenias un objeto en tus manos, déjalo caer, y para levantarlo
recárgate en la pierna de tu hombre, cuando vuelvas a tu sitio sonríele como
agradecimiento, sacude el polvo que tiene en sus hombros, o limpia su labio si es
que está comiendo algo. Todo siempre acompañado de tu sonrisa traviesa y tu
mirada atrevida.
3.- Palabras: Para haber realizado todo esto, tu hombre debió estar cerca de ti,
ahora acércate un poco más, si puedes tomar su mano o brazo sería perfecto, y
háblale al oído. Cuéntale un secreto atrevido, por ejemplo “Sabes una cosa, no
traigo ropa interior y aun así me muero de calor” Él querrá comprobar por sí
mismo que no traes pantaletas, también podrías decirle, “Preferiría estar desnuda
en la cama contigo que aquí” o “Todo el día he estado pensando en lo grande que
es tu pene”. Ahora pon tu mano en su muslo y acércate mucho a la parte interna
de este, no toques su miembro, ni lo roces, no detengas tus movientes, acaricia,
sube y baja, mientras le dices cosas atrevidas al oído. Sin que te des cuenta Él
ya estará participando en tu juego, diciendo cositas atrevidas y riéndose, si todo
sale como esperas, pronto podrás ver un gran bulto en su pantalón, señal de una
gran erección provocada por ti.
Todas estas “Técnicas” de seducción son para que la lleves a cabo poco a poco,
no es necesario que las sigas como un manual paso a paso, Tú sabrás cual es la
que más te conviene y te divierte, porque si no es divertido para ti entonces no
tiene caso que lo hagas.
Disfruta cada cosa que hagas para que tu hombre se excite, y cuando veas que te
funciona y que lo traes loco por ti, Tú misma empezaras a inventar nuevas
formas de seducirlo y provocarlo, recuerda que la monotonía es la “asesina” de
toda relación, por lo tanto practica todo lo aprendido en diferentes momentos y
épocas, inventa tus formas nuevas según tus gustos y necesidades, y te sentirás
realmente satisfecha con los resultados.
Cuando Tú empieces a jugar, veras que tu hombre reaccionará igual y te
empezará a proponer otras cositas que no te habrías imaginado, será una cadena
interminable de placer, te lo garantizo.
SEDÚCELO EN CASA
Después de tanto coqueteo a distancia, mensajes y fotos, por fin están solos y
frente a frente. Si es que tienes a tu hombre contigo después de las prácticas a
distancias o las conversaciones picantes en público, no es mucho lo que tendrás
que hacer, pues ya viene que explota. Pero si por el contrario lo estas esperando
en casa para darle una sorpresa, son algunas acciones las que debes tomar, pues
seguramente Él viene del trabajo, escuela o tal vez de alguna otra actividad y
necesitará que lo pongas en la sintonía que Tú deseas.
Aquí hay dos vertientes, la primera si vives con tu hombre y comparten vivienda
y se ven todos los días, y la segunda, es si solo se ven algunos días a la semana y
normalmente casi todas las visitas que te hace terminan en la cama.
Tomaremos cada una pues son casos muy diferentes y no se actúa igual en cada
uno, el objetivo es el mismo, pero el proceso varia un poco.
Cuando vives con tu hombre: La mujeres que son casadas o viven con su pareja
definitivamente saben que vivir con Él y solo verlo de vez en cuando es muy
distinto, la diferencia es un mundo. Lamentablemente la mayoría de las
relaciones de este tipo son perjudicadas por la rutina y la actividades diarias,
verse ya no es una emoción ya no te preparas y tomas horas en tu aspecto solo
porque vas a ver tu hombre, simplemente sabes que llegará, que seguramente
desea cenar y ver televisión. Si tienes hijos, la cosa es todavía peor, y no digo
que tener hijos sea malo, son una bendición, y lo digo de corazón, me refiero al
asunto de las necesidades, los tiempos, las responsabilidades y los gastos
económicos. Todos estos detalles llevan a que las relaciones de pareja sean solo
para hacer cuentas de gastos, y cansar el cuerpo. No es culpa de las
circunstancias, si piensas eso estas muy equivocada, “Mi marido no me toca
porque llega cansado” “Tengo muchas obligaciones” “los quehaceres del hogar
acaban conmigo” “Lo que menos quiero en este momento es sexo”, todo esto lo
provocamos nosotros mismos permitiendo que el ritmo de nuestra vida nos
devore, recuerda que el ritmo lo marcas Tú, y solo Tú decides que pasará
contigo.
Sé que mientes cuando dices que no te interesa el sexo, cuando dices que lo más
importante es llevarse bien aunque Él no desee quitarte la ropa. Todas deseamos
sentirnos amadas y deseadas, todas deseamos ser acariciadas y disfrutar de ese
maravilloso don del placer sexual.
Incítalo: Como decía anteriormente, debes poner a tu hombre en la sintonía
deseada, debe suceder lo que Tú quieras que suceda. Si tu rutina es aburrida y
fría, lo que Él menos espera es que pase algo emocionante, entones lo
sorprenderás al máximo cuando te presentes ante Él con un baby doll de encaje
transparente o con un conjunto de seda roja.
Puedes llamarlo al trabajo y decirle que lo esperas con una sorpresa o enviarle la
foto de tu lencería y decirle que lo esperarás con eso puesto, Él ira corriendo a
donde Tú estás sin hacer paradas, tal vez se detenga a comprar condones.
Lo primero que deberás hacer es romper la rutina, debes cambiar la situación
dando un giro total, sorprendiéndolo, Él no entenderá que pasa pero lo menos
que necesitará son explicaciones, lo va a disfrutar y Tú harás lo mismo.
Cuando estés en casa tranquila con Él puedes aplicar la técnica de seducción en
público, Míralo, Acarícialo, Dile cosas atrevidas. No le pidas sexo directamente
insinúate poco a poco, Él entenderá el camino que le muestras y se dejará ir con
todo.
No esperes a que Él sea el que te busque siempre, es divertido de vez en cuando
tomar la iniciativa.
Invítalo a un cena romántica, invítalo a pasar la noche en un hotel, y si no es la
noche completa por lo menos unas horas.
Metete al baño cuando se esté bañando, lava su cuerpo con caricias suaves y
prolongadas y tengan sexo en la regadera.
Cuando viajen solos en el auto, insinúate con Él y cuando notes que ya está
caliente, abre su pantalón y acaricia su pene, esto les encanta, podrás darle
algunos besitos a su miembro y tal vez unos minutos de sexo oral, no mucho
tiempo, si van en carretera puede ser peligroso, no quieres morir por una
“Chupada” será solo un poco para ponerlo a tono antes de llegar a casa.
Despiértalo a besos un fin de semana, despertar con caricias es muy agradable,
no es necesario terminar en sexo, solo demuéstrale que lo deseas.
Se te ocurrirán más cosas, eres muy ingeniosa y conoces a tu hombre mejor que
su propia madre, entonces te será fácil saber cómo encenderlo.
La cosa cambia mucho si no compartes vivienda con tu hombre, en realidad en
estos casos la pasión está muy encendida y solo están esperando el momento de
verse para poder terminar en la cama. Pero qué pasa si ese hombre en el que
estas pensando seducir no es tu novio o esposo, qué pasa si estamos hablando de
un prospecto o un amigo al que ya le tienes muchas ganas.
Lo invitaste a tu casa y lo deseas mucho, sabes que Él también te desea a ti pero
no se decide a dar el primer paso, pues hazlo Tú.
Las conversaciones calientes con temas sexuales son de gran ayuda, nos llevan a
desinhibirnos y a entrar en calor, nos ayudan a acercarnos poco a poco y nos
guían a la cama.
Ponte cómoda, puedes empezar por quitarte los zapatos o abrirte un poco más el
escote, pues hace mucho calor, tal vez puedas cambiarte de ropa y usar un
atuendo más ligero.
Utiliza poses sugerentes, recuéstate en el sofá, acércate a Él, tócalo de vez en
cuando.
Utiliza un buen perfume, suave, no exageres, no quieres provocarle alergia, has
que sienta tu olor por la cercanía, no por el exceso de loción.
Pon música suave e invítalo a bailar, si dice que no sabe hacerlo entonces
ofrécete a enseñarle, en realidad no van a bailar se van a mover muy, muy juntos,
cuando lo hagan procura estar muy cerca, que sienta tu cuerpo y Tú siente el
suyo.
Háblale muy cerca, casi al oído, como si le contaras un secreto, sonríe siempre,
se muy coqueta y atenta.
Acércate tanto que Él pueda sentir tu respiración, acarícialo suavemente y
acércate a su boca, será Él el que te bese a ti.
Realizar estas acciones no es difícil, el problema es encontrar el valor para
ejecutarlo, a veces somos demasiado miedosas y por eso nos quedamos con las
ganas. No pasa nada si lo haces, al principio no sucederá tal como lo imaginaste
y tal vez tengas algunos tropiezos pero será igual de emocionante.
Cuando tengas todas tus técnicas bien definidas y tu seguridad esté al máximo,
veras que no existirá quien te detenga, y te encontraras disfrutando totalmente a
la par con tu hombre.
PRELIMINARES
Esta parte es de mis favorita, los preliminares .Nadie siente placer yéndose a la
cama con alguien así nada más porque sí, todos necesitamos esos juegos previos
que nos calientan al máximo y nos erizan la piel.
Cuando ya está decidido que el asunto terminará en la cama, que todas tus
tácticas y las de Él surtieron efecto y no hay más remedio que llegar a la cópula,
entonces vienen los preliminares.
¿Qué son los preliminares? Pues todas esas caricias y jugueteos que nos llevan a
elevar el calor y el deseo.
Sí, ya sabemos que Él y Tú se desean, que lo único que piensan es en
desnudarse, pero, aun ese simple acto de quitarse la ropa puede darnos un
enorme morbo y placer.
BESOS Y CARICIAS
Las primeras caricias, los besos húmedos y sonoros, las manos que buscan y
exploran, las pieles erizadas y el sudor que empieza a brotar por los poros, son
detalles a los que debemos darle importancia, son puntos cruciales para un
disfrute total.
Nuestro cuerpo es sensible a lo que ocurre al exterior y si lo que ocurre nos
gusta, el cuerpo reaccionará de formas agradables y gratificantes, pues quiere
seguir recibiendo eso que le agrada.
Todo empieza con miradas y caricias, primero son discretas, pero después se van
volviendo atrevidas y descaradas, debes saber llevar el ritmo de todo esto, no se
trata de un manoseo, se trata de ser tocada de forma agradable y sensual. Las
manos poco a poco irán buscando caminos, un escote, un botón, un cinturón;
abrirán, desabrocharan, tal vez romperán. Las manos también despeinan y
aprietan, pellizcan, rasguñan.
Recuerda no solo se acaricia con las manos, también sirven los pies, la cara, el
cuerpo. A la hora de amar se utiliza todo el cuerpo.
Cuando acaricies a tu hombre, procura tocar su cuerpo entero, no me refiero a
que le des un masaje total, eso del masaje lo veremos más adelante, yo hablo de
tocar su piel, de hacerlo sentir, así como a ti te gusta sentirte acariciada y
deseada, también a Él, toca cada parte de su cuerpo cuello hombros pecho, les
encanta que les toquen el pecho.
Antes y durante el acto sexual es importante que se toquen uno a otro, no solo te
botes en la cama esperando que Él sea el que haga todo, acarícialo, tócalo,
apriétalo, rasgúñalo, hazlo sentir vivo, hazlo sentir deseado. Todo eso lo hará
sentir alentado, es como si le echaras porras mientras juega futbol, entre mas
porras más goles meterá, lo mismo en la cama, mientras más le demuestres tu
deseo, sus ganas de amarte aumentarán y los minutos se volverán horas de sexo
sin límite.
Besar, es indispensable al hacer el amor, y es muy importante saber que no todos
los besos son en la boca, y que con los labios se puede hacer todo tipo de
milagros amatorios.
Al igual que las caricias, los besos se inician de forma discreta, siendo apenas un
pequeño roce, pero terminan siendo un huracán que devora completamente a la
pareja.
En la boca tenemos cuatro elementos “cruciales” para hacer el amor, y hablo de
los labios, los dientes, la lengua y la saliva, no sé qué sería del sexo sin estos
cuatro elementos.
Con la boca no solo se besa, también se lame, se chupa y se muerde, y si sabes
recurrir a todo esto en el momento correcto y con la intensidad adecuada, tu
experiencia sexual será inolvidable.
Puedes ir besando su cuerpo a medida que se vayan desnudando, demuéstrale
que su cuerpo te gusta, hazlo con caricias y besos. Puedes recostarlo en la cama
y darle una deliciosa sesión preliminar con tu boca y manos, empieza besando su
boca, procura que tus besos sean profundos y muy húmedos, ojo con eso, dije
húmedos no babosos, después besa su cara, pasa a sus orejas, puedes
mordisquearlas un poco, suavemente, recorre su cuello con tus labios y lengua,
llega a su pecho y acércate a sus tetillas, estas ya te estarán esperando, primero
lamelas llénalas con tu saliva, juega con tu lengua y dales unos ligeros
mordiscos, cuando hagas esto Él no podrá hacer otra cosa que soltar un gemido
de placer. Sigue así hasta su abdomen, recorre su ombligo con tu lengua y llega
hasta su vientre bajo, no toque su pene, eso es lo que Él quiere, pero no se lo des
todavía, baja hasta sus muslos, besa y muerde ligeramente la parte interna, sube
a su ingle succiona y mordisquea un poquito más. Para este momento tu hombre
está llegando al éxtasis y eso que todavía no te penetra.
Ahora te toca a ti, guíalo para que tu también seas tocada y acariciada, guíalo
suavemente a esos lugares que te gustan, ¿Cómo lo harás? Pues con gemidos y
miradas tal vez sea necesario usar palabras y pedirle lo que quieras que te haga,
usas tus manos para guiar las suyas, tal vez esta apretando muy fuerte o muy
suave y tu deseas más intensidad, llévalo de la mano por tu cuerpo, guíalo a tus
sitios favoritos y anúnciale con gemidos que es ahí donde necesitas ser
acariciada, que es ahí donde desea ser besada, que esa es la intensidad perfecta
de cada mordida.
Nadie es adivino, todos necesitamos cierta guía para saber cómo amar a esa
persona con la que compartimos el lecho.
Tú eres la única que sabe lo que te gusta, y Él lo sabrá también pero hasta que le
enseñes el camino.
Hay ocasiones en que estamos acostumbrados a que nuestros encuentros
sexuales sean grises y sin emoción, solo nos acercamos uno a otro, y sin
desnudarnos hacemos de lado la ropa que estorba y está hecho, cada quien toma
su lugar en la cama y a dormir. A muchas nos ha pasado, por eso urge un
cambio, y eres Tú la que debe tomar la iniciativa si Él no lo hace, no esperes
más.
Pero ¿Qué pasa si tu hombre no acepta el cambio? ¿Qué pasa si tu hombre no se
deja guiar?
Debes estar consciente que el cambio no se dará de la noche a la mañana y que
lo tomaras completamente por sorpresa, cuando inicies tu camino al placer.
No debes preocuparte por nada, un hombre normal y civilizado nunca lo tomará
a mal, al contrario a tu hombre le encantará todo lo que hagas, lo sacaras de la
rutina y pintaras un nuevo mundo ante sus ojos con innumerables opciones de
placer, lo invitaras a inventar juegos contigo y lo alentaras a sorprenderte.
Hasta aquí estamos hablando de un hombre normal y civilizado, pero a ti te
parece que el tuyo es todo lo contrario, debes ser mas paciente, entonces, toda
obra de arte lleva su tiempo, y si Él de verdad te ama, o si de verdad se interesa
en ti, Él mismo entenderá que es necesario llevar a cabo algunos cambios.
Pero resulta que tu hombre es un completo troglodita egoísta, que solo piensa en
su placer, y lo que menos le interesa es que Tú te sientas satisfecha y plena. Mi
único consejo para este caso es “DEJALO” si un hombre no muestra interés en
tus necesidades, se enoja si quieres inventar algún juego, o te tacha de “MALA
MUJER” por usar lencería o querer llevar a cabo alguna fantasía, ese hombre no
vale la pena, porque no es un hombre, los verdaderos hombres aman a las
verdaderas mujeres, y si tienes que esconder tus deseos porque tu pareja cree que
es “MALO” entonces no tienes nada que hacer ahí.
El placer sexual es una parte primordial de nuestras vidas, y en esto van
incluidos hombres y mujeres, nuestros cuerpos están creados de esa forma, si tu
hombre considera que tú no debes sentir placer, se equivoca, y si Tú piensas que
Él tiene razón, te equivocas.
El sexo es parte de nuestro valor, es parte de nuestra esencia, literalmente, es lo
que da vida a nuestra especie, y la naturaleza nos premia por ello.
Si estas con un hombre que te considera “PECADORA” por pensar en todo lo
que te muestro aquí, debes dejar a ese hombre y cambiar de pareja, por alguien
que si se preocupe por tus necesidades y tu felicidad.
No creas que apoyo el divorcio o las rupturas de pareja, Yo apoyo la felicidad, el
placer y el amor, que es muy distinto.
MASAJES
Los masajes son parte de los preliminares, son grandiosos y deliciosos, pero
debes tener cuidado con ellos, pues pueden ser un arma de dos filos. En estos
casos el masaje que vas a brinda será para despertar deseos sexuales, no para
relajar e invitar al sueño.
No te preocupes si no eres una experta masajista, tal vez nunca hayas dado un
masaje en tu vida, esos detalles no debes tomarlo en cuenta, pues no se trata de
experiencia en esa rama de la medicina, se trata de sensualidad, de lo que Tú
comunicarás con tus manos, del mensaje que enviaras a ese hombre que estará
desnudo y expuesto ante ti.
Lo único que necesitaras será, aceite para masajes, si es con esencias mucho
mejor, sino encuentras no pasa nada, solo asegúrate que sea aceite para masaje
corporal, también usaras una toalla pequeña para limpiar tus manos del exceso
de aceite, deberás usar muy poca ropa o una linda lencería y por último, un
hombre desnudo tendido en la cama.
No está de más apagar las luces y alumbrar con unas cuantas velas, procura crear
un ambiente especial, procura que, aunque se trate de tu habitación en la que has
dormido por más de diez años, se vea distinta, que se note que estás haciendo
algo especial. La luz de las velas es genial para estos casos, y las caricias saben
mejor a media luz.
Ya que tienes a tu hombre desnudo frente a ti, empieza el masaje por los pies,
quítale los calcetines, lo digo porque los hombres creen que desnudo es
sinónimo de sin ropa pero con calcetines, HOMBRES SE VEN TERRIBLES,
FUERA CALCETINES. Ahora que ya lo tienes realmente desnudo y boca abajo,
comienza por los pies, masajea sus dedos y planta de pies, sube por sus
pantorrillas y llega hasta sus muslos. Hasta el momento es un simple e inocente
masaje, todo cambia cuando llegas a la parte alta de sus muslos, antes de sus
nalgas, ahí empieza el jugueteo. Recuerda que tus movimientos deben ser firmes
y con confianza, no debes medio tocar, estás dando un masaje. Él debe sentir la
intensidad de tus acciones en cada movimiento de tus manos, no lo hagas con
flojera, hazlo con pasión.
Cuando llegues a esa línea entre sus muslos y sus nalgas, invítalo a que abra un
poco sus piernas y acaricia la parte interna de sus muslos, hazlo con la misma
intensidad de tus movimientos anteriores, y, muy importante, no toques su pene
ni sus testículos, eso lo dejaremos para después.
Sigue con las nalgas, masajéalas, conócelas, ábrelas un poco, no llegues más
allá, todavía no. Continúa subiendo por su espalda baja a la altura de su cintura,
aquí tus movimientos serán más largos, procura empezar a cubrir toda la espalda
hasta llegar a los hombros. En los hombros tal vez haya algo de tensión y sea
bueno que pongas algo de atención en ellos, brinda masaje en cuello y hombros,
y escucha a tu hombre diciendo lo rico que se siente.
Mientras haces todo esto, incluye algunas palabras en la que le digas a tu hombre
lo mucho que te gusta su cuerpo, a ellos también les gusta escuchar que nos
gustan.
Ahora pídele que se ponga en posición boca arriba y empieza nuevamente por
los pies, sube por piernas y muslos, acaricia su ingle, coquetea un poco, sonríele
cuando llegues cerca de su pene, pero no lo toques. Da masaje en su abdomen y
pecho, nuevamente en hombros, brazos y manos. Entonces acércate a su oído y
en tono travieso pregúntale ¿Quieres final feliz?
Llegó el momento, ve directamente a su pene, que debe estar ansioso de ser
acariciado por tus manos.
Empieza por los testículos, acarícialos suavemente con tus dedos, si tienes la
uñas un poco largas, úsalas para dar caricias suaves con estas, dije caricias no
rasguños. La línea entre los testículos es muy sensible, y a ellos les encanta ser
tocados ahí, puedes pasar tu dedos suavemente entre esta división, y mira como
tu hombre se estremece, sube tus dedos hasta su pene, y comienza tus caricias
dese la parte baja, sigue todo el tronco con tus dedos, realiza movimientos
circulares a todo el rededor y deja la punta para el final, puedes bajar y subir
varias veces, sin llegar a la cima.
El glande, la punta del pene, la parte más alta de este, es una de las partes más
sensibles, por eso lo dejamos para el final. Cuando llegues al glande es porque tu
hombre ya tiene una erección y su pene esta casi en su máxima expresión. Toma
la punta de su miembro y acarícialo con suavidad, da un pequeño masaje con
movimientos circulares y mientras haces todo esto mira a tu hombre a los ojos,
sonríele con picardía, dile que su pene te encanta, y por último da un pequeño
besito en la punta del glande. Esto nos lleva al siguiente paso “Sexo Oral”
SEXO ORAL
El sexo oral es un punto y aparte cuando de sexo se habla, porque puede ser
parte de los preliminares y también, si se desea así, ser el evento principal.
El sexo oral es delicioso, tanto darlo como recibirlo, es una práctica que ha
estado envuelta en todo tipo de mitos, fantasías y juicios. Existe quien lo practica
y lo niega, también hay que lo tacha de pecado o incorrecto, hay quien dice que
nunca en su vida lo haría, a diferencia habemos muchos en el mundo que lo
disfrutamos abiertamente y lo exploramos. Hay mucho que se puede obtener de
realizar sexo con la boca, empezando por el placer que causa, es maravilloso
tener la boca de alguien besando chupando y mordiendo tus partes más
sensibles, una boca succionando hábilmente, una lengua lamiendo con rudeza y
gentileza al mismo tiempo ¿No te gustaría sentirlo?
Cuando yo era muy joven y ni siquiera había tenido mi primera experiencia
sexual, tenía una amiga, muy experta, según ella, en el ámbito sexual. Ella decía
que le encantaba que su novio le hiciera sexo oral, pero que ella nunca se lo
haría a él, pues no quería tener un pene en su boca, decía “Que asco meter un
pene a mi boca”. En ese momento mi imaginación voló lejos y no se detuvo,
nunca había pensado en esa práctica sexual hasta ese día, lo imaginaba y no se
me hacia tan desagradable como ella decía.
La primera vez que recibí un cunnilingus no podía creer lo que me pasaba, fue
realmente delicioso. Debo aceptar que al inicio yo me preguntaba hacia dónde se
dirigía ese hombre, de besar mis labios se fue directamente a poner su boca entre
mis piernas. Yo solo veía como descendía por mi cuerpo mientras mostraba una
gran sonrisa, deje de hacerme preguntas cuando sentí su respiración en mi vulva.
Realizó maravillas con su boca, y desde ese día no concibo un buen encuentro
sexual sin una buena sesión de sexo oral.
La cosa fue un poco distinta cuando mi hombre me pidió reciprocidad, pues
deseaba que yo le diera lo mismo que, Él me daba a mí, era justo. Me costó un
poco de trabajo, al principio yo siempre le pedía que se pusiera condón, y la
única acción que yo realizaba era chupar mientras subía y bajaba mi cabeza muy
rápido. Me imagino que mi chico sintió un poco de decepción, pero fue muy
paciente y me enseño como hacerlo. Con el tiempo y la práctica me volví una
experta en felación, y también llegué a disfrutarlo muchísimo.
La comunicación es básica para que este barco llegue a buen puerto, en
ocasiones Tú le tendrás que decir por dónde y cómo lo quieres y en otras
ocasiones será Él el que te marque el camino. Créeme cuando te digo que
aprender será un camino divertido que logrará unirlos más.
Empecemos por el principio. El pene es un cuerpo sumamente sensible, pero no
es lo único que debe ser manipulado, tocado acariciado, chupado, etc. Toda la
zona que rodea al pene esta a tu disposición para que hagas lo que más se te
antoje.
Testículos: este par es algo especial, explóralos y acarícialos, son diferentes uno
del otro, conócelos. Lo que debes hacer con ellos es chuparlos y lamerlos, mete
cada uno en tu boca y llénalos con tu saliva, existe una línea divisoria entre ellos,
pasa suavemente tu lengua por esa línea y observa como tu hombre se estremece.
Puedes repetir esta acción varias veces, no corre prisa, hazlo con calma y ejerce
cierta presión con tu boca y lengua.
El perineo: ¿Qué es eso? Es esa pequeña área que se encuentra entre los
testículos y el ano, ese pequeño punto puede ser crucial a la hora del sexo oral.
Empieza con pequeñas caricias circulares, ve ejerciendo cada vez más presión,
observa a tu hombre, date cuenta de sus reacciones y sabrás cuando es el
momento de invitar a tu boca. Lame su perineo suavemente dando un pequeño
masaje con tu lengua. Recuerda que esto lo excitará muchísimo y puedes
ocasionar que eyacule, mídete al momento de realizar esta acción, a menos que
tu intensión sea que acabe en ese momento, pero si no lo es, entonces se un poco
más precavida al estimular esta zona.
Muy cera de ahí se encuentra el punto G masculino, este famoso punto está, en
realidad, en la próstata cerca de la entrada anal, a muchos hombres ni se los
menciones, pero algunos acceden a ser estimulados de esta forma, Tú y tu
hombre sabrán si lo experimentan o no, mientras tanto estimular el perineo es
algo que a ellos les sabe a gloria.
Pene: lo que Él tanto ha esperado, meter su pene en tu boca, pero la cosa no es
así de simple, lleva su tiempo y sus maneras. Inicia dando un suave masaje con
tus manos, realiza movimientos circulares alrededor del tronco del pene, de
arriba hacia abajo, acerca tu boca y empieza a lamer con movimientos
ascendentes y descendentes, aun no toques el glande. Para este momento tu
hombre ya tiene una súper erección y su pene esta en todo su esplendor.
Continua como vas y de vez en cuando míralo a los ojos, sonríele, emite unos
pequeños gemidos, todo esto hará que las cosas se calienten mucho mas. Ahora
sí, dale unos pequeños y tiernos besos en la punta del glande, tómalo como si
fuera un lápiz labial y pásalo por tus labios, llénalo de saliva y chúpalo como si
de una paleta se tratara, observa las reacciones de ese hombre, así se ve alguien
cuando toca el cielo.
Ahora vas a introducir ese pedazo de carne a tu boca, sino todo al menos la
mayoría, a veces no cabe todo, y no todas tenemos la garganta para recibir todo
eso. Te ayudaras con tus dedos pulgar, índice y corazón, estos te ayudaran a dar
estimulación al pene completo mientras entra sale de tu boca, tu mano también
subirá y bajará ejerciendo cierta presión sobre el miembro de tu hombre.
Atención, cuida que el pene no toque tu campanilla cuando quieras meterlo muy
profundo en tu boca, esto te puede provocar el vomito y no es así como quieres
terminar.
Procura que la presión que ejerces sobre las partes de tu hombre no sea
exagerada, podrías causar algún daño o molestia.
Cuidado con tus dientes, si, es verdad que en ocasiones morder un poco provoca
más pasión, pero hay ocasiones en las que sucede todo lo contrario, para una
felación exitosa lo mejor es olvidar que existen los dientes y ocultarlos lo más
posible. Tus dientes puedes lastimar y herir el pene de tu hombre, y si querías
que ese encuentro fuera memorable terminaras arruinándolo todo por falta de
cuidado.
También cuida tus uñas, hay zonas del cuerpo más sensibles que otras, y no creo
que tu hombre quiera ser rasguñado en pene, testículo o más allá.
En cuanto a ti, Tú sabrás como dirigir a tu hombre para que te de placer oral.
Aunque existen algunos varones que no necesitan señales, pues son expertos en
el arte del cunnilingus, algunos otros todo lo contrario y hay que explicarles
hasta donde se localiza un clítoris, pero todo se resuelve con un poco de
paciencia y comunicación.
Ahora viene otra gran incógnita Y ¿Qué hago si eyacula en mi boca? Solo hay
dos opciones, escupirlo o tragarlo, tal vez estimulaste a tu hombre de una forma
tan asombrosa, que ya no pudo más y se dejo ir en tu boca. No te ofendas por
eso, suele pasar. También es una de las grandes fantasías masculinas, eyacular en
la boca de la pareja, en la cara, cuerpo, senos, etc. Todo es cosa de
comunicación, Él te dirá lo que desea, ya Tú sabrás si lo quieres experimentar o
no.
Por el sabor no te preocupes, el semen no tiene mal sabor, tampoco es delicioso
pero no pasa nada si tragas un poco de este. Hay quienes dicen que el semen
tiene grandes propiedades, tal vez estarías recibiendo un beneficio si lo tragas.
Como lo he dicho a lo largo de este libro, todo depende de ti y de lo que quieres
sentir y hacer, la comunicación es primordial, pero también en ocasiones es
bueno ser un poco aventurera y probar cosas nuevas y locas, recuerda que la vida
aburrida que llevas no te ha traído mucha felicidad que digamos.
Tampoco se trata de ser sumisa y permitir todo tipo de vejaciones, solo se trata
de aventurarse un poco y disfrutar de la vida.
Como decía anteriormente, el sexo oral tiene la virtud de ser parte de los
preliminares, también puede ser la estrella principal, o puedes irlo intercalando
durante el acto sexual, Tú sabrás como te organizas, el asunto es que esta
práctica te hará sentir que vuelas y le harás sentir lo mismo a tu hombre.
LA PENETRACIÓN
El coito es la finalidad de todo esto y el orgasmo es la corona. De qué nos
serviría realizar todas estas técnicas sin llegar al orgasmo.
Ya preparaste el camino, todo salió según el plan, ahora viene lo que tanto han
esperado Tú y tu hombre, la penetración.
Ten en cuenta que no solo se trata de meter y sacar, no solo se trata de tirarse en
la cama con las piernas abiertas, mientras tu hombre se desvive entrando y
saliendo de tu cuerpo. Es una labor de pareja, los dos deben moverse juntos,
llevar un ritmo, sincronizarse.
Debes dejarte llevar, estar desnudo con alguien es maravilloso, en ese momento
se está lleno de pasión y deseo, si dejamos que esos sentimientos dominen
durante el encuentro sexual, será todo nuestro cuerpo el que se exprese, y cómo
será eso, pues con caricias, besos, mordidas.
No dejes de tocar a tu hombre durante todo el acto, deja que tus manos recorran
su cuerpo. No temas nada, a Él le encantará sentir tus manos. Siente la fuerza de
sus brazos y su pecho, recorre su espalda, siente sus muslos tensos en el
momento que te penetra, toma sus nalgas con tus manos, empújalo con fuerza
hacia ti y ayúdalo a llegar más profundo en tu cuerpo.
No dejes de moverte, Mueve tus caderas al ritmo que Él lo hace, realiza
movimientos circulares y laterales, alterna estos movimientos. Sí Tú eres la que
está arriba tendrás más libertad, cabalga a eso hombre, literalmente, móntalo
como si de un toro salvaje se tratara, muévete con fuerza, sostenlo entre tus
piernas, y sacúdete sobre Él.
Tus piernas también serán muy útiles a la hora del “Amor” envuélvelo con ellas
y no lo dejes ir, domínalo un poco con ellas.
Tu vagina no solo es el lugar donde Él introduce su pene, es un arma maravillosa
para el placer mutuo. Cuando Él esté dentro de ti, has presión con tu vagina,
esta, está formada por músculos que si lo ejercitas se volverán muy fuertes y
darán mucho placer al momento del coito.
Intenta hacer presión con tu vagina, como si estuvieras aguantando las ganas de
hacer pipi, Aprieta su pene de vez en cuando y hazlo con fuerza, a los dos les
encantará esto.
LAS PALABRAS
Las palabras son primordiales, también, cuando de sexo se trata. Si ya son una
pareja establecida se pueden decir cuanto se aman, si no lo son pueden hablar de
cuanto deseaban estar juntos. Es mucho de lo que se puede hablar y eso lo
deciden ustedes.
Una vez estuve con un hombre que me pedía le dijera palabras “SUCIAS”, yo no
entendía muy bien a qué se refería, y cuando le preguntaba exactamente qué era
lo qué quería, Él me decía, “Dime cochinadas”. Yo nunca pude decir
“cochinadas” no me imaginaba insultando en el momento de hacer el amor, así
soy yo, la relación con ese hombre duró bastante tiempo, el que yo no pudiera
decir cosas sucias no interfirió en nuestro placer, entendió que yo no era capaz
de hacerlo y nunca me lo pidió de nuevo, nos entendimos.
Cuando de palabras se trata, van incluidos, también, todos los sonidos que salen
de nuestra boca, me refiero a los gemidos. A la hora del sexo, existen mujeres
que pareen mudas, otras gimen un poco, y algunas gritan como si las estuvieran
matando. Tú sabrás como eres en esos momentos, lo que sí te puedo decir es que
a los hombres les gusta escuchar los gemidos de la mujer con la que están
compartiendo la cama. Tú descifrarás la cantidad de decibeles que aguanta su
oído o lo que desea escuchar, y lo que a ti te haga sentir cómoda, sin importar lo
que puedan pensar los vecinos.
EL ORGASMO
Por fin llegaste a tu orgasmo. Este punto es muy importante, pues es algo así
como “la Piedra Filosofal” solo lo encuentra el que no lo busca. Él orgasmo no
se busca, es algo que simplemente llega, llega en el momento correcto. Después
del disfrute en pareja recibimos esa enorme satisfacción personal, sí, es muy
personal pero está hecho para ser compartido. A tu hombre le encanta verte
cuando llegas al clímax, le gusta escuchar tus gemidos y sentir como tu cuerpo
reacciona al llegar a la cumbre del placer. A ti también debe darte placer verlo
cuando explota dentro de ti, y su piel se eriza y sus ojos se ponen en blanco de
tanto sentir. Y cuando pasa esto, que los dos han pasado por ese delicioso
camino de placer, se forma entre la pareja una comunicación que no tiene igual,
se inventa un lenguaje que solo ellos conocen y que no se puede usar en otro
momento más que compartiendo la misma piel.
Es muy bello cuando tu hombre se esmera para que Tú sientas esa satisfacción
maravillosa del orgasmo, y es igualmente bello, una mujer que busca el placer de
su pareja.
Casi siempre pasa que la mujer llega al orgasmo antes que su hombre, y para
fortuna de nosotras, podemos tener varios orgasmos en la misma relación.
Cuando llegamos a ese momento cumbre, todo nuestro cuerpo se involucra, no
hay una solo parte de nosotros que no sienta toda esa electricidad y placer. El
orgasmo es toda una combinación de sentimientos llevados a su máxima
expresión, no se parece a nada que hayamos sentido antes, es único, es delicioso.
Después de un orgasmo nuestro cuerpo queda muy sensible, y requerimos de
algunos segundos para retomar el ritmo, pero después de eso ya estamos listas
para más.
Los hombres son diferentes, después de su orgasmo, requieren más tiempo que
nosotras para sobreponerse, estos detalles debemos tenerlos en cuenta para no
atosigar a nuestra pareja y el consejo es para los dos, hombres y mujeres.
Existen ocasiones en los que la sincronización es tanta, que el orgasmo se deja
venir al mismo tiempo en los dos cuerpos, es maravilloso cuando el éxtasis se da
en sincronía. Verlo a Él sintiendo exactamente lo mismo que Tú y al mismo
tiempo, sentir como su corazón y el tuyo laten con la misma fuerza, como las
venas de ambos están que revientan, y como esos dos cuerpos tiemblan por
igual. Llegar a eso no se planea, es algo que simplemente pasa, pero pasa cuando
se ha sabido dirigir ese encuentro, y no hablo de métodos ni medidas o tiempos,
hablo de dejarse llevar por la pasión y el deseo, y en ocasiones, por el amor.
Muy importante, NO FINJAS UN ORGASMO, ¿Por qué? Porque nadie te lo va
a creer, y si tu hombre te cree, pensará que está haciendo bien las cosas y no se
esforzará por darte más placer, sí lo engañas solo te engañas Tú misma, y esto te
llevará a la frustración.
Si no llegaste al orgasmo, será mejor que te comuniques con Él y le pidas lo que
te da placer. También debes evaluar en qué momento te encuentras, si estas
cansada o tal vez no tenías ganas, no todo será culpa de Él y su falta de tacto
contigo. La comunicación es lo mejor a lo que puedes recurrir para casos así.
EL TIEMPO
Eso es lo menos debería preocuparte, que si el sexo duró solo veinte minutos o
tres horas, que si mientras más duren mejor, que poquito no sabe. Error, el sexo
empieza desde la primera mirada llena de deseo, desde la primera sonrisa picara
o el primer comentario lleno de lujuria. El disfrute se inicia con la ropa puesta,
Se pueden tener deliciosos encuentros sexuales aun sin desnudarme, aun sin
tocar a ese hombre, aun sin verlo de frente. Con simplemente una llamada
telefónica y kilómetros de distancia, lo único que se necesita es que los dos estén
en sintonía, hay conversaciones realmente candentes que nos llevan al éxtasis, y
todo eso rematará en su encuentro carnal con deliciosos orgasmos compartidos.
Si lo vemos de esa forma, un encuentro sexual puede durar horas o días.
Lo realmente importante es el disfrute que obtengas, que sí fue mucho o poco
tiempo no importa, la pregunta es, sí realmente lo disfrutaste.
EL FINAL
Se escucha triste pero no es así, cuando terminamos la faena sexual, viene un
tiempo para descanso y relajación. Para mi gusto, muy personal, me gusta una
plática amena, de cualquier tema, reír un poco y conversar sin prisas. Ya sé que a
los hombres casi siempre les da sueño después de tanta acción, pero a mi gusta,
y agradezco mucho el detalle, que mi hombre se aguante el sueño y platique
conmigo. A las mujeres nos gusta ser abrazadas y tratadas con cariño. No
conozco, todavía, a una mujer que simplemente termine sus actividades
amatorias e inmediatamente después, despida a su amante sin más, claro que me
refiero a cuando las cosas salieron bien, si resulta que tu amante en turno fue
todo un inútil en la cama, no me opongo, sácalo a patadas.
CONCLUSIÓN
Todo lo mencionado en este libro, y es necesario decírtelo, yo misma lo he
intentado, lo he realizado y lo he logrado, pero lo más importante, lo he
disfrutado muchísimo. Nunca te pediría que intentaras algo que no sé cómo se
lleva a cabo, no sería capaz de dar consejos de cosa que yo misma no he
intentado. El experimento lo llevé a cabo conmigo misma, y ahora te comparto
un poco de mis vivencias y experiencias. Espero que todo lo que escribo aquí te
sirva para llenar tu vida de buenas experiencias, con el amante que Tú decidas.
Lo que puedo concluir, con todo esto, es que el disfrute siempre es de dos, se
trata de una pareja, del tipo de pareja que gustes, pero es una pareja, y si uno la
pasa mal, el otro debe saberlo para poder lograr que ambos disfruten. Lo justo
es, si uno goza el otro también, y todos felices.
Durante todo el libro, te he repetido en innumerables ocasiones, que debes hacer
lo que a ti te de placer, que debes explorar cosas nuevas y arriesgarte de vez en
cuando. Te he dicho que debes amarte a ti misma, que debes adorarte, y
entonces, serás adorada y amada por los demás.
No permitas que alguien te utilice como su objeto de placer, no permitas que tu
hombre pase sobe ti sin importarle tu alegría y satisfacción, y sobre todo, no
permitas que falsas creencias y costumbres hagan que tu vida sea triste y gris.
Estamos en una era revolucionaria, por todas partes, voces se alzan y puños se
levanta para exigir derechos, derechos que existían, pero que de alguna manera
les habían sido negados. Únete a ellos, y exige tu derecho al placer y a la
satisfacción.
Deja de criticar a las mujeres que disfrutan de su sexualidad abiertamente, en el
fondo sabes que quisieras sentir un poco de lo que ellas sienten, que quisieras
vivir, aunque sea, una vez lo que ellas viven.
Deja de señalar, criticar y cuchichear en cuanto a la MORALIDAD de otras
mujeres, vive tu vida al máximo y disfruta de tu cuerpo, que para eso fue creado.
Nuestro cuerpo tiene zonas creadas exclusivamente para el disfrute sexual, si el
sexo fuera pecado, DIOS, no nos hubiera hecho de esta forma, piénsalo.
No aceptes imposiciones, Tú eres la que decide lo que pasa en tu vida, No
aceptes normas absurdas, Tú eres la que pone las reglas, no aceptes puertas
cerradas, Tú eres la que decide quién entra y quién sale, No aceptes la sumisión,
Tú ere libre.
Las última palabras para este libro son sencillas, VIVE TU VIDA A TU
MANERA, Y SÉ FELIZ, pero realmente feliz, no te engañes a ti misma, SÉ
FELIZ.
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