REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA DEFENSA UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LAS ARTES NÚCLEO LARA IDENTIDAD CORPORAL Alumna: Odalis N. Torrealba, 17.133.884 PNF: Artes Plásticas Mención: Fotografía Docente: Douglas Vargas Materia: Conciencia Exploratoria Barquisimeto, Julio 2022 Identidad Corporal - Perspectiva del área de Fotografía Son muchos los autores que se han aventurado a hablar y ampliar el término de “identidad corporal” y en ese supuesto hay que determinar cuál terminología se ajusta más a nuestras creencias actuales, tal es el caso de Grasso, quien enfatiza el hecho de que la identidad corporal reúne un conjunto de rasgos propios de un individuo o de una colectividad que los hace diferentes ante los demás, del mismo modo la conciencia que una persona tiene de ser ella misma y distinta a las demás. Tofo ello implica que cada individuo posee conciencia de su existencia y también de la existencia de sus iguales con ciertas diferencias que los hacen particulares entre sí. Este sentimiento de identidad se refiere a una convicción que tenemos como individuos de ser la misma persona a través del tiempo y en diferentes circunstancias. Sin embargo, este pensamiento contínuo no es permanente puesto que a lo largo de nuestra existencia se van sumando experiencias que enriquecen nuestro ser como individuos y como sociedad. Podríamos considerar la premisa de que el trabajo de identidad nunca acaba, dado que estamos en constante aprendizaje en el andar de la vida. En el proceso de ese andar vamos cambiando patrones, desechando creencias y acciones y por supuesto actualizando conocimientos que nos impulsan a unirnos a ese todo social, no en vano vemos como las distintas épocas se establecen comportamientos y creencias distintas y con el tiempo éstas van mutando para dar paso a nuevas líneas. Dicho esto, es necesario tener presente que la identidad puede definirse como un estado y como un proceso, cuando como estado se reúnen los suficientes indicadores o cualidades para calificar como tal, para establecerse o determinarse una noción específica y como proceso cuando se desarrolla como una construcción cambiante. En la práctica diaria se produce una movilización del estado-identidad y una construcción del proceso-identidad. En este proceso los afectos y las imágenes son protagónicos para brindarle dinamismo a la producción de identidades. Digamos pues que una persona califica con una identidad corporal de habilidad porque reúne condiciones establecidas, o muestra competencias validadas por él mismo y por su sociedad, que lo identifican como más hábil entre el resto. Como parte de esa identidad corporal es indispensable cultivar el cuidado de nuestra salud física y mental que en definitiva hará posible que disfrutemos de excelente estado, lo que se traduce en obtener excelentes resultados en las labores o tareas que nos autoasignemos como hobbie u oficio. En el área de la fotografía un individuo reúne un conjunto de rasgos que reconoce como propios y corresponden a todos aquellos rasgos que los caracterizan frente a los demás como fotógrafo, en ese proceso está implícito su sello, su forma, su manera de manejar la cámara, su estilo de fotografía que en definitiva lo harán distinto al resto entre profesionales de su área. En el descubrimiento y creación de una identidad corporal que construye es necesario poder integrar todas esas definiciones y características a nosotros mismos, es este sentido se hace necesario escuchar a nuestro propio cuerpo, conocer sus habilidades y sus limitaciones en el desempeño, así como el desarrollo de una conciencia corporal cuidando la salud tanto física como mental aceptando la forma y estructura de nuestro cuerpo llegando a un sentimiento de placer con nosotros mismos y con nuestros propios movimientos y que estos vayan en armonía con lo que decidimos hacer como oficio. El hallazgo de un estilo o un acento propio en la fotografía suele ser la primera dificultad a superar. La vida fotográfica está llena de logros y aprendizajes, de cimas y baches. ¿Qué necesitamos para llevar nuestra vida fotográfica a la plenitud? Es la identidad corporal la que nos va a llevar a desarrollar la madurez que necesitamos en este camino, que se traduce en un estado y un proceso, un camino y un punto de destino. La madurez tiene que ver, en primer lugar, con el ir haciéndose de recursos para lograr expresar con la cámara eso que tenemos que decir sobre algún tema determinado. Entre estos recursos tenemos los técnicos que van desde conocer la gramática fotográfica, hasta aprender los temas formales y todos aquellos elementos que van dando estructura y sentido a un discurso visual. Igualmente están los recursos intelectuales-culturales, donde ya no se trata solamente de usar la cámara sino en una amalgama compleja e interesante de nuestras influencias, reflexiones, propuestas y creaciones. Por otro lado, y no menos importante tenemos los recursos tecnológicos que figuran como todo aquello tangible como una cámara, un lente, un reflector de luz, entre otros; que serán instrumento de nuestro conocimiento, implicando saber usar esas herramientas de forma adecuadas y cuando haga falta; contar con ellas e identificar las condiciones y situaciones que exigen un cierto tipo específico de equipo. Pero también saber que, cuando se tiene algo qué decir, el instrumento tiene que ocupar un lugar pertinente: el segundo o tercer lugar porque siempre debe estar primero el recurso corporal; sentirnos cómodos con lo que estamos haciendo y por ende con el resultado que se genere.