LA IMPORTANCIA DE LA EVALUACIÓN EN EL PROCESO DE ENSEÑANZA APRENDIZAJE

INSTITUTO SUPERIOR DE ESPECIALIDADES PEDAGÓGICAS
“IGNACIO MANUEL ALTAMIRANO”
LA IMPORTANCIA DE LA EVALUACIÓN EN EL PROCESO DE ENSEÑANZA
APRENDIZAJE
Por: Bartolo Ponce García
La evaluación se puede entender de diferentes maneras, ya que es usado en
diferentes ámbitos y en la educación por citar algunas definiciones como por
ejemplo en la enciclopedia de humanidades se define “como un proceso dinámico,
que tiene por objeto analizar conductas, actitudes, rendimientos y logros
relacionados con una serie de objetivos planteados a priori”. Otro autor lo define
como “un proceso de análisis estructurado y reflexivo, que permite comprender la
naturaleza del objeto de estudio y emitir juicios de valor sobre el mismo,
proporcionando información para ayudar a mejorar y ajustar la acción educativa”.
Por otra parte, Foronda y Foronda (2007) sintetizan que la evaluación es parte
fundamental del proceso de enseñanza aprendizaje ya que es considerado como
un proceso sistemático de recolección de datos que permite formar juicios de valor
basado en evidencias para identificar fortalezas o debilidades y así poder tomar
decisiones para mejorar el proceso de enseñanza aprendizaje. Por lo que se
puede deducir que en el ámbito educativo la evaluación es indispensable en el
proceso de enseñanza y aprendizaje para poder mejorarlo, adecuarlo e innovarlo.
A medida que han ido surgiendo cambios en los modelos educativos, también se
han ido reestructurando o innovando los procesos de evaluación. Los diferentes
modelos de evaluación que se han presentado a lo largo de la historia son muy
diversos de acuerdo con Arias, Labrador y Gámez (2018), a continuación, se citan
algunos:
Modelo de evaluación como medición: se visualiza desde la corriente
conductista, donde se considera que los procesos de instrucción están
sustentados en adiestramientos y acondicionamientos del individuo
Modelo de evaluación como logro de objetivos: constituye el modelo de mayor
incidencia en la gran mayoría de prototipos que se han desarrollado
posteriormente y su principal exponente fue Tyler, que se fundamenta en la pre
especificación de los objetivos a lograr.
Modelo de evaluación para la toma de decisiones: Este modelo concibe la
evaluación como un proceso sistemático mediante el cual se delimita, recolecta y
proporciona información útil para la toma de decisiones.
Modelo basado en la crítica artística: este prototipo evaluativo es el que más
defiende el enfoque cualitativo de la evaluación de aprendizajes, como tal
considera la educación como un arte y a los participantes como artistas, donde el
evaluador es un experto que apoyado en experiencias propias emite juicios
críticos en función de observaciones para describir apreciativamente el valor del
objeto evaluado, que en este caso está representado por la adquisición de
aprendizajes por parte del estudiantado.
Modelo Respondiente: En principio se le llamó el modelo de la figura,
posteriormente al reestructurarse fue presentado como el modelo que se apoya en
dos componentes primordiales de un proceso evaluativo, como lo son la
descripción y el juicio.
Modelo Democrático: Representa un modelo evaluativo concebido con la
intención de desarrollar en toda su extensión las posturas cualitativas de la
evaluación.
Modelo de Evaluación Centrado en Procesos: Los métodos cualitativos de
evaluación están diseñados con la intención de orientar procesos de la práctica
educativa hacia la formulación racional de la acción didáctica (evaluación
formativa), razón por la cual, al evaluar, la información requerida no puede
obtenerse mediante pruebas netamente objetivas o test estandarizados sobre
rendimiento u otras formas de evaluación sumativa.
Al analizar los distintos modelos de evaluación descritos de manera breve aquí, en
general se pueden clasificar en enfoques de tipo cuantitativo, de transición y
cualitativo y las corrientes en la cual se sustentan principalmente son conductista y
constructivista. En donde, cada uno de ellos se han considerados adecuados,
novedosos y útiles en ciertos momentos de la humanidad en el proceso educativo,
pero con el paso de los años se han ido perfeccionando o sustituidos por otros
nuevos o más completos. La tendencia en la actualidad parece ser que es hacia la
evaluación formativa y la evaluación socioformativa. En el caso de la evaluación
formativa se concibe como un proceso permanente y sistematizado en el que se
recoge y analiza información para conocer y valorar los procesos de aprendizaje y
los niveles de avance en el desarrollo de las competencias y por su parte, la
evaluación socioformativa de acuerdo con Tobón (2017) retoma algunos
elementos de los otros modelos y se diferencia de los otros por su énfasis en
actuar ante los problemas del contexto, la colaboración continua, el trabajo con el
proyecto ético de vida y la formación del espíritu emprendedor.
Desde mi punto de vista, uno de los aspectos más importante de los modelos de
evaluación es la realimentación. En la literatura la realimentación se conoce con
otros términos tales como devolución, retroalimentación u orientación y se define
como el componente de la evaluación que evidencia el vínculo entre los procesos
de enseñanza aprendizaje y permite explicitar el avance en los logros de los
alumnos y da cuenta de la pertinencia de los métodos, las estrategias y los
recursos utilizados. Razón por la cual, al realizar la realimentación de manera
sistemática permitirá hacer ajustes en las estrategias o métodos empleado, con la
finalidad de realizar correcciones o refuerzos para que el aprendizaje sea de mejor
calidad y así elevar la calidad de la educación.
En conclusión, la evaluación juega un papel fundamental en el proceso de
enseñanza aprendizaje, por lo que los docentes deben diseñar los instrumentos
evaluación de manera adecuado, eligiendo los enfoques que permitan
retroalimentar a los estudiantes para que identifiquen sus fortalezas y debilidades
y así poder elevar la calidad de su educación, así como al docente para que
mejore sus estrategias o métodos empleado.
Bibliografía
Arias, Labrador y Gámez (2018). Modelos y épocas de la evaluación. Educe, vol.
23, núm. 75, pp. 307-322.
Foronda y Foronda (2007). La evaluación en el proceso de aprendizaje.
Perspectivas, núm. 19, pp. 15-30.
SEP (2018). EVALUAR CON ENFOQUE FORMATIVO: La importancia de la
realimentación.
Tobón, S. (2017). Evaluación socioformativa. Estrategias e instrumentos. Mount
Dora (USA): Kresearch.