ENSAYO5. PSICODRAMA FREUDIANO. 03+02+19

El Psicodrama Freudiano. 2019
ENSAYO No. 5:
“EL PSICODRAMA FREUDIANO”
Lic. Franz Daniel Fernández Vaca.
Especialista en Educación Superior.
Diplomando en Psicología Penitenciaria.
Docente Técnicas Psicodinámicas.
06 de Febrero del año 2019.
Como docente de la materia Técnicas Psicodinámicas de la Universidad Privada Franz
Tamayo siendo este mi tercer semestre, me veo obligado o me siento obligación de
hacer este tipo de ensayo o artículo, tomando en cuenta que uno de los siete temas que
dicto es “La terapia de grupo como técnica proyectiva: el psicodrama”. Pero para ser
sincero la primera vez que dicte esta materia fue otorgando el psicodrama un toque más
fenomenológico y biologicista que psicoanalista. Como usted señor lector posiblemente
sabrá, la psicología dinámica es un sub abordaje del más grande abordaje llamado
Psicoanálisis (recordemos que existen dos más: la cognitiva conductual y la
fenomenológica), que por ende abarca otros abordajes más: el psicoanálisis ortodoxo o
puramente freudiano, el psicoanálisis lacaniano, el psicoanálisis kleiniano, la teoría de
las relaciones objetales, la psicología del yo, etc. Aunque algunos incluyen estos otros
tipo de corrientes o escuelas dentro de la psicología dinámica (depende el punto de
vista desde el cual se miren las cosas), la cuestión es dentro de la gama de
psicoanálisis existen muchas otras formas de intervención (sin nombrar mucho algunas
tenemos también el psicoanálisis jungniano, la logoterapia –parte también de la
fenomenología-, el psicoanálisis existencial de Jean Paul Sartre, el psicoanálisis de
Winnicott, la psicoterapia comprensiva de Couderch, la psicoterapia de Karen Horney,
el psicoanálisis de Erick Fromm y Alfred Adler, el psicoanálisis infantil de Anna Freud, la
psicoterapia breve… en fin. Algunas de estas escuelas, corrientes y tipos de
psicoterapia algunos autores la incluyen en lo que se conoce como la psicología
dinámica o la psicodinámicas o técnicas de la psicología dinámica (todo esto también es
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cuestión de puntos de vista epistemológicos diferentes). Lo que concierne a nosotros es
determinar cuál de las escuelas o corrientes de psicodrama es la más apropiada para
nuestra asignatura de “técnicas de la psicodinámica”. Para ello primero dejaremos en
claro que se entiende por psicología dinámica: según algunos autores “es una
orientación dentro del campo de la salud mental que sigue una línea que recoge el
pensamiento psicoanalítico de la post modernidad basando en la premisa de que el acto
de la conducta es siempre un acto con sentido y con finalidad (especialmente
inconsciente), con independencia de que el sujeto posea o no, conocimiento de los
mismos. La metodología derivada de esta concepción apunta consecuentemente a la
exploración y objetivación de ese mundo interno (el inconsciente), del que el sujeto no
tiene conocimiento alguno, considerando lo inadvertido (o inconsciente) de la conducta
como un componente esencial de la misma, precisamente por considerar que lo no
consciente es lo que da sentido y soporte a la conducta manifiesta”. En este sentido los
dos principios más importantes de la psicología dinámica serían: que toda conducta
tiene origen inconsciente, y que todo sujeto debe ser valorado según su “singularidad”,
como señala Erick Fromm “Nunca la experiencia de una persona es idéntica a la
experiencia de otra… de hecho, hasta la experiencia de una misma persona no es
nunca la misma en ocasiones diferentes, porque nadie es exactamente el mismo en dos
ocasiones diferentes o dos momentos de su vida diferentes”.
Entonces, aclarado fielmente lo que sería desde el punto de vista de algunos autores la
psicología dinámica; tendríamos que valorar cuál de los tres psicodramas propuestos o
más conocidos hasta ahora (el psicodrama moreniano, el psicodrama de rojas
bermúdez y el psicodrama freudiano), es el correcto para nuestra asignatura o trabajo.
Bajo estas circunstancias pasemos a evaluar cada uno de ellos. El psicodrama en sí fue
fundado por Jacob Levy Moreno, un Rumano nacido en Bucarest en el año 1889; que
un principio fue alumno de Carl Jung 1913 (uno de los fieles seguidores de Sigmund
Freud y prácticamente su compañero durante mucho tiempo hasta su separación), para
después durante su vida universitaria de post grado de estudios de medicina en 1917
pasó a rechazar las teorías de Freud, para de esta manera empezar su propia forma de
ver la salud mental. Cabe señalar entre paréntesis, que sus estudios de medicina y
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psiquiatría de Jacob Levy Moreno los realizó en Viena Austria, pero que posteriormente,
continuó sus proyectos laborales migrando a Estados Unidos en 1925, especialmente al
Estado de Nueva York, donde empieza sus estudios grupales y teatrales en la conocida
zona de Broadway, con gente de la calle: prostitutas, drogadictos y vagabundos; con
quienes obtiene excelentes resultados; posteriormente Moreno ingresa a trabajar a un
hospital psiquiátrico del estado de Nueva York, donde va puliendo de mejor manera su
práctica clínica psicodramática, obteniendo muy bueno resultados con personas que
sufrían de trastornos psicóticos. Es de esta manera que su práctica clínica de Moreno
va adquiriendo importancia y relevancia, fama, a tal punto que pego el interés de otros
psicólogos y psiquiatra del área clínica; los resultados eran muy bueno en el campo de
la psicosis. Sin embargo una gran critica que siempre recibió Jacob Levy Moreno
acerca de su práctica fue que no tenía un “cuerpo teórico uniforma y sólido” (como
corrientes como el psicoanálisis, la cognitiva conductual, etc); entonces bajo esta
premisa dos personas posteriores a él, se dieron a la tarea de crear u otorgar este
marco teórico que tanto necesitaba el psicodrama posterior a la década de los 40. Fue
así que primero surge la figura de Lemoine o los Lemoines (un tal Paul Lemoine del que
no se tiene mucha información también intervino en la publicación del primer libro de
psicodrama freudiano); una psicoanalisistas lacaniana dedicada también a la literatura y
traducción de libros, que uso como seudónimo (vaya uno a saber porqué) el nombre de
Genie Lemoine (siendo su verdadero nombre de origen italiano –lo cual explicaría su
gran cantidad de obras traducidas de ese a otros idiomas- Eugénie Lemonoine
Luccioni). Este libro bajo el simple nombre de “Psicodrama” habría sido expuesto o
publicado en la década de los 40´ en el estado de Nueva York. Más tarde se tienen
registros de una publicación más en Francia en el año 1972. De esta manera en
definitiva la pionera del psicodrama freudiano se trataría de Eugénie Lemoine Luccioni,
nacida en Paris Francia el año 1912 y fallecida en el mismo lugar el año 2005. Como
psicoanalista lacaniana se encuentran registro sobre ella que entre los años 1945 y
1976 perteneció a la Escuela de la Causa Freudiana, trabajando junto a Lacan durante
más de 15 años publicando con él para la revista “Sprit”. Como una de las primeras
clínicas en criticar el psicodrama moreniano por considerarlo más una “experiencia”
(algo más práctico que teórico; algo más vivencial que con sentido epistémico) decidió
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adjuntarle a dicha “experiencia vivencial” todo el cuerpo teórico (abundante) del
psicoanálisis tanto freudiano como lacaniano (completando de esta manera el vacío o
sustento insuficientemente epistemológico que contenía la experiencia moreniana), con
las categorías de lo Real, lo Simbólico y lo Imaginario de Lacan y la forma de las
entrevistas establecidas por Freud (contribuyendo asimismo a la técnica psicoanalítica
en lo que concierne a psicoterapia grupal, en particular a la “función del juego y su
interpretación”; siendo esto una cuestión de compatibilidad extraordinaria debido a que
el psicodrama en sí se trata de poner en “acción” el mundo de fantasías del sujeto, lo
mismo que significaría el juego en los niños).
Y bueno; para cerrar respecto a estos tres grandes abordajes del psicodrama (cabe
señalar que actualmente hay un resurgimiento del psicodrama freudiano por parte de
algunos psicoanalisistas que han retomado los aportes de Lemoine y han ofrecido sus
propias contribuciones a este mundo especial de la clínica), tenemos que señalar al
psicodrama rojas bermúdez; que de todos, vendría a ser la escuela de mayor
trascendencia y conocimiento a nivel mundial, cuya sede se encuentra en España para
las siglas de APPG (Asociación de Psicodrama y Psicoterapia de Grupo). Podríamos
decir que esta asociación no sigue la clínica convencional de Moreno, por considerarla
al igual que lo hizo Lemoine, una intervención más vivencial que con sustento teórico
metodológico; de esta manera nace lo que muchos conocen como la gran figura de
Jaime Rojas Bermúdez, un psiquiatra, psicoanalista y más tarde psicodramatista,
nacido en Buenos Aires Argentina; que adoptaría con mucho entusiasmo el psicodrama
en 1957 iniciando actividades con dicha corriente ese mismo año en los hospitales de
su ciudad natal (Buenos Aires). Debido a ese entusiasmo toma contacto con Jacob
Levy Moreno en el año 1962 y es becado por el mismo para formarse profesionalmente
como psicodramatista en su Instituto Moreniano que por esa entonces se encontraba en
el Estado de Nueva York (obteniendo el certificado de director de psicodrama y
psicoterapia de grupo). De vuelta en Bueno Aires Rojas Bermúdez se apasiona más por
el psicodrama y funda la Asociación Argentina de Psicodrama y expande la escuela por
otros países de Latinoamérica como Brasil, Uruguay y la misma Argentina. Al final, el
gran aporte de este profesional argentino fue “hacer un progresivo replanteamiento de
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la teoría y metodología del psicodrama, elaborando nuevas técnicas y conceptos que
van articulando una intervención diferente al tradicional moreniano…”. Introduce
conceptos muy novedosos dentro de esta técnica como son el objeto intermediario y el
objeto
intraintermediario,
además
de
conceptualizaciones
muy
novedosas
e
interesantes de la personalidad del individuo y su psicopatología como ser: el sí mismo
fisiológico, los roles psicosomáticos, las áreas de la mente, el núcleo del yo, el sí mismo
psicológico, el esquema de roles, los roles sociales, etc., todo ello basándose en tres
disciplinas o ciencias: el psicoanálisis, la etología y la neurofisiología. Pero, la relación
de Rojas Bermúdez y Moreno no queda allí nomas; ambos establecen una relación
académica muy significativa por la que juntos llegan a publicar un libro a finales de la
década de los 60´; y en 1969 Rojas Bermúdez organiza el IV Congreso Internacional de
Psicodrama y Sociodrama en Buenos Aires Argentina, presidido por él y como
presidente honorifico a Jacob Levy Moreno. El próximo año organizaría el V Congreso
Internacional esta vez en San Pablo Brasil donde esta vez se ubica el mismo (Rojas
Bermúdez) como vicepresidente honorifico. A este congreso invita a Maxwell Jones
(pionero de la comunidad terapéutica) a ser parte de la reunión, lo cual posiblemente
disgusto a Jacob Levy Moreno por lo que el mismo decide no participar, nunca más
mantener contacto con Jaime Rojas Bermúdez y retornar solo a sus actividades en
Bacon – Estado de Nueva York; un mes de mayo de 1974 moriría en la misma ciudad y
el mismo estado; quedando como su legado el Instituto Moreniano y el reconocimiento
mundial de ser el padre del psicodrama (hasta hoy en día existen los llamados
psicodramatistas ortodoxos que continúan en menor número siguiendo las enseñanzas
viejas del maestro.
De esto se trata las tres escuelas más importantes de psicodrama a nivel mundial
entonces: están los morenianos ortodoxos, los freudianos un tanto nuevos y en menor
número, y los seguidores de rojas bermúdez en su gran mayoría expandidos y
organizados de mejor manera a nivel mundial… Cómo hemos visto, según la definición
de psicología dinámica; nuestra asignatura “técnicas psicodinámicas” se trataría de un
eje temático que abarcaría desde la conceptualización clara de lo que significa la
psicología dinámica y su diferencia con el psicoanálisis, y un conglomerado de las
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El Psicodrama Freudiano. 2019
diferentes técnicas seudo psicoanalistas fruto de la combinación del psicoanálisis con
diferentes tipo de escuelas, corrientes, técnicas, etc. De esta manera tenemos: la
entrevista y el psicodiagnóstico dinámico, la psicoterapia comprensiva, las técnicas
proyectivas como tests psicológicos, el psicodrama con técnica grupal y los
instrumentos para la recolección de datos cualitativos. Todo ellos producto de una
combinación entre psicoanálisis y psicometría, psicoanálisis y fenomenología,
psicoanálisis y estadística, psicoanálisis y humanismo, psicoanálisis y constructivismo,
psicoanálisis y psicodrama moreniano, psicoanálisis y psicoterapias focalizadas, etc.,
etc., etc.
El ensayo que nos reúne hoy para debatir en este nuestro pequeño espacio, es
primeramente acerca de la llamada “prueba de amor” (como dice el título) y en una
segunda parte “el uso del condón en adolescentes”. ¿Por qué nos interesa debatir o
analizar acerca de la llamada “prueba de amor”? Porque a nuestro entender hay
cuestiones, mitos y malos entendidos que aún se producen en torno a este tema, a
cómo se da el encuentro sexual entre un hombre y una mujer (y bajo toda esta lógica
creemos que estaría presente la problemática de “la prueba de amor masculina”) (2) (3).
Existe una mala interpretación con respecto a este asunto y a la responsabilidad con
relación al coito; se escucha mucho que toda la carga psicosocial en ocasiones recae
sobre el hombre acerca del sexo prematuro (en la pubertad y adolescencia) (2); siendo
que la tarea del sexo se trata de un asunto sistémico y dialéctico: que depende tanto del
hombre como de la mujer (4) (5). Por ejemplo, en un taller (en el cual fuimos participes)
que trataba de la labor que se estaba realizando respecto a la “Educación Preventiva
Comunitaria” en uno de los municipios cercanos a nuestra ciudad (Santa Cruz de la
Sierra); se abordó el tema de “las causas de los embarazos no deseados en las
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adolescentes” de dicha municipalidad (cuya cifra alarmante daba como resultado el
inicio de las relaciones entre 14 y 15 años, tanto para varones como para mujeres; entre
otras cosas), y el primer “indicador causal” (perceptivo según el estudio) de esa
problemática arrojaba como primera fuente la llamada “prueba de amor” 1(a) (principal
factor), y los subsiguientes indicadores pertenecían a lo relacionado con el “uso de
anticonceptivos”. Una vez establecida la primera causa, las miradas de complicidad
tanto entre la disertante y el resto de las mujeres presentes apuntaron hacia nosotros
los varones del taller (como si de nosotros se tratase la primordial responsabilidad de
los embarazos no deseados de estas menores en dicha jurisdicción), lo cual me empujo
a mi persona a cuestionar ciertas bases o aspectos de este taller educativo y su estudio
realizado. Para nosotros siendo esta una temática pedagógica y contextual (muchos
factores entran en juego) (5) a nuestro entender, que tiene que ver más con “educación
sexual” (6) tanto del hombre como de la mujer, qué, con buscar culpables o hacer
responsables a los varones de estos embarazos no deseados (2); no nos pareció justo
ni correcto en ese momento la postura de la disertante (y el resto de las mujeres) y no
nos parece adecuado hasta ahora lo que se produjo en este taller educativo (por eso
también estamos realizando este ensayo: para dejar en claro nuestro punto de vista sin
ganas de ofender a nadie, solo con la intención de expresar nuestra forma de ver las
cosas)… Asumir que el hombre es el responsable o el directo culpable de los
embarazos no deseados como primera opción suena mucho a “injusticia y sesgo” en la
mal llamada “encuesta” debido a que el “indicador” obtenido mayormente creemos que
responde al parecer, a una proporción superior de “respuesta femeninas” que
masculinas 2(h); porque a los ojos de la “lógica de la mujer” (4) (7) la “prueba de amor
del sexo” o “la prueba de amor sexual” es una “demanda masculina” caprichosa,
1
(a) La 2da. causa (según las que respondieron el cuestionario que posiblemente fueron mujeres) era “el no contar
con métodos anticonceptivos en el momento preciso y necesario”. En 3er lugar estaba “la falta de conocimiento
preciso sobre la utilización de métodos anticonceptivos”. El 4to. motivo era “el consumo de bebidas alcohólicas”. Y
el 5to. y último motivo era “la ausencia de los padres y la falta de orientación de parte de los mismos”.
2
(h) ¿Qué hombre en su sano juicio va pensar que por el hecho de llevar a su pareja al sexo o incentivarla a ello, la
misma va quedar embarazada? (existe la posibilidad de embarazos no deseados pero los hombres también son
conscientes de sus responsabilidades, sino porqué algunas parejas según el estudio terminaban casándose). De
seguro si la encuesta haya sido realizada a las parejas varones de las mujeres embarazadas, ellos hayan contestado
de una manera muy diferente, probablemente incluso arguyendo que el embarazo fue consecuencia de que su
compañera “no se cuidó lo suficiente o mal uso los métodos anticonceptivos disponibles”, condón o lo que sea que
hayan empleado, etc...
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chantajista y sin fundamentos (para ellas) dentro de la “dialéctica de la vida amorosa”
(que no tiene su razón de ser muchas veces). Para ellas no es necesaria, es
incomprensible (aparentemente) y con sabor a “chantaje” o “engaño” por parte de los
hombres. En este sentido cabe preguntarnos: ¿Si es un acto injustificado con “sabor a
chantaje” según la “lógica femenina” porqué la mujer “cede” frente a tal “inmoralidad”
con carácter delictivo? 3(e) (2). Ellas responderán obviamente que “por amor” (nosotros
le añadiríamos “por la lógica del amor que se dio o se da en ese tiempo”. ¿O es que
acaso el municipio X está lleno de “hombres perversos” que se aprovechan de “las
mujeres indefensas e inocentes del pueblo” bajo la “amenaza” de abandonar la relación
si estas no “cooperan” con sus demandas? No creemos que la trama se trata de este
sentido o vaya por este camino. Creemos que este tema hay que debatirlo con cuidado
porque suena mucho “la idea” que se presentó en este estudio a que las relaciones
entre el hombres y las mujeres en dicho municipio, son una relación de víctima y
victimario (8) (donde lógicamente los hombres son los “victimarios o abusadores” y las
mujeres son las “víctimas o mártires” de la película: “inocentes menores afectadas” aunque cabe señalar que los chicos tienen su misma edad- de los “deseos depravados
de los hombres”). Pero analicemos con detenimiento este cuestionamiento o
problemática…
La relaciones entre hombres y mujeres siempre se han caracterizado por tener su
“lógica propia” (4) y por tener cierto contenido de “rivalidad” ocasional (hablamos del
encuentro de 2 mundos, 2 realidades diferentes, 2 razas dirá Miller (4), que si bien
tienen
similitudes
también
tienen
grandes
incompatibilidades)
hasta
que
se
complementan; de ahí que cada quien intente imponer su propia “forma de ser” o “su
lógica de género” sobre el otro, hasta llegar a una armonía o consenso (como en toda
relación interpersonal), y al darse este “fenómeno social de articulación o consenso”
entre estas 2 personas de “sexos opuestos” no siempre se produce consecuentemente
el contexto deseado por las mujeres (7) (o al menos el ideal social que sería que ambos
adolescentes empiecen sus relaciones sexuales por encima de los 18 años), sino que
se producen las llamadas fricciones amorosas, una especie de “pulseta de amor” desde
la visión que cada quien tiene del afecto (el hombre del lado del “sexo” y las mujeres del
3
(e) Chantaje: Delito consistente en obtener dinero, ventajas, etc., de una personas mediante la amenaza de hacer
revelaciones comprometedoras, o bajo cualquier otra amenaza (1).
8
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lado del “amor”) (4) (5); y para nosotros aquí es donde entra la temática de “la prueba
de amor”: como parte de la “dinámica dialéctica de relaciones de poder” a veces que se
origina entre “ambos sexos” para establecerse como pareja; del varón al “demandar la
relación sexual” (“de una buena vez” o lo más pronto posible) y de su contraparte la
mujer al “negar esta relación sexual” al varón (lo que podríamos considerar
“abstinencia”), que también es un comprobante del “amor” o “prueba de amor” (muchas
veces incondicional, esta vez femenina) que este hombre debe demostrar hacia la
persona de la mujer para después conseguir lo deseado o “su” deseo (es decir, las
féminas piensan: “si en verdad me ama este hombre tiene que esperar”) (4). O sea la
“prueba de amor” en pocas palabras y a fin de cuentas viene de ambos lados: la mujer
también con “el hacer esperar al varón” lo somete a un “examen sentimental” o
“explora” hasta dónde llega el “afecto” de este susodicho hombre (candidato) para tener
relaciones sexuales (y esa es la “prueba de amor femenina” a nuestro entender; o sea
que es un tema que viene de ambos o se trata de producir por ambos bandos) (4) (7).
Entonces cabe preguntarnos con relación a esta problemática ¿Quiénes contestaron
como “percepción de las causas de los embarazos no deseados en adolescentes”: “la
prueba de amor”? (9) Es sin duda o se trata sin lugar a dudas de una “encuesta
sesgada”, pues creemos que el juicio (juicio equivocado a propósito desde nuestro
punto de vista), de que “la principal causa de los embarazos no deseados en
adolescentes es la prueba de amor-masculina” viene más por el lado de las mujeres o
por una “percepción femenina” que por una “percepción masculina” (es sin vacilación
alguna, “una encuesta realizada solo a las mujeres que quedaron embarazadas en
dicho municipio” (9))…
Que la “prueba de amor masculina” puede ser un chantaje a veces, “sí”; pero que
también se trata de parte de las “lógicas de la vida amorosa”, también es cierto; de una
“dialéctica” por momentos; de la “batalla antigua de los sexos” (4) por imponer cada uno
sus “lógicas o realidades”, y también se trata la temática de un real de la época: “el
varón como siempre buscando sexo” (por lo general), y “la mujer como siempre
buscando amor” (por lo general), y en esa “lucha de poderes” solo el “tiempo” dice y las
circunstancias de quién gana o quién es el vencedor (o perdedor), o si finalmente llegan
a un “consenso salomónico”. Que una idea se imponga sobre la otra depende de la
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“dinámica de la relación” (4) (5): qué está en juego en esta “interacción”, cuáles son los
“valores y principios” de cada quién, porqué entre comillas “las mujeres” se dejan
“chantajear” (supuestamente) con el tema de “la prueba de amor-masculina”, etc…
Algo que todavía nos cuesta entender a los seres humanos (nosotros creemos) es que
hombres y mujeres somos “diferentes” (4); que cada uno de nosotros tiene una
“concepción diferente de la realidad” (4); a tal punto llega esta disyuntiva que ya existe
en la ciencia de la psicología una Psicología Masculina (12) y una Psicología Femenina
(13) (porque cada sexo o género es un mundo aparte, con particularidades propias, y ni
qué decir de las mujeres que de los dos sería el mundo más complejo); que trata las
particularidades de cada sexo o género (la Otra Raza dirá Miller por las mujeres en
“Lógicas de la vida amorosa”). Lastimosamente la “naturaleza masculina apunta al
coito” (en general, en la lógica afectiva) (12) pero eso no quiere decir que los hombres
sean los principales culpables de los embarazos no deseados en X o Z lugar (de
prevalecer la “lógica femenina” o haber prevalecido totalmente la misma a lo largo de la
historia entonces la especie humana se haya “extinguido” desde hace miles de años).
Para nosotros “esto” (la prueba de amor”) se trata de una “dialéctica” que al parecer a
los ojos de las mujeres del municipio X la ganan siempre los varones (9) (¿Pero será
por exclusiva culpa de ellos? ¿Qué papel tienen o juegan las mujeres en esta dinámica?
Habría que ver)…
Pero No necesariamente tener relaciones sexuales es sinónimo de embarazo; acá
también está en juego mucho la “agudeza femenina” y su capacidad para postergar cualquiera sean las consecuencias en el vinculo de pareja- el mayor tiempo posible el
coito (4) (de ser factible hasta que ambos jóvenes tengan la mayoría de edad, 18 años);
y de darse el sexo o la relación sexual pues exigir al hombre el uso del condón (el
medio anticonceptivo más barato y sin muchas secuelas de todos los que existen); y
aceptar esto por parte de los hombres es “seguir agarrando al toro por sus astas”, no
reduce en nada su masculinidad, pero esto también tiene que ver con “educación
sexual” (6).
¿Por qué decimos que se trata de un tema de educación sexual? Porque simple y
llanamente se debería enseñar tanto a hombres como a mujeres (sobre todo tal vez a
las mujeres que son las “aparentes víctimas” en esta cuestión de la “prueba de amor”),
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que este asunto o esta problemática de “la prueba de amor masculina” es un “hecho”
que forma parte de la “lógica de la vida amorosa de pareja” o que forma parte de la
“dialéctica de la vida amorosa entre un hombre y una mujer” y punto (y no una artimaña
armada por los hombres) (4); o si hablamos con más propiedad desde la “percepción”
de quienes contestaron el cuestionario antes citado: “la prueba de amor del sexo”
(masculina) es parte de la “lógica afectiva masculina” y punto (entre otras cosas lo que
se podría hacer es realizar medidas preventivas para los embarazos no deseados)
4(f)…
Además esto no sucede solamente en los jóvenes; esto también se da en
personas mayores o adultos; la diferencia a nuestro criterio gravita en que la mujer
adulta es “totalmente consciente” (por lo general) de que esa “demanda de amor
masculina” es “natural o normal”, y que tarde o temprano se va producir en la dinámica
de pareja “para lo cual ellas deben estar preparadas” (aquí gravita la diferencia) (4).
También a esa edad hay conciencia de que la “prueba de amor masculina” no se trata
del algo que se reproduzca de la noche a la mañana; sino que es un tema que el
hombre va “calibrando”, trabajando o construyendo muy de apoco (generalmente),
ganándose la confianza del otro sexo para llevar a cabo su deseo; y la mujer también lo
va “pensando”, desarrollando y “calibrando” (consciente o inconscientemente), poco a
poco, evaluando si es conveniente “otorgar” o no otorgar, esa “confianza” o goce, a ese
“pretendiente” que demanda el placer de su cuerpo. Acordémonos del dicho: “El
hombre propone pero la mujer dispone”. Además que si de mujeres hablamos, ellas
también no se quedan atrás (como antes dijimos); ellas igualmente exigen su “prueba
de amor femenina”, que en este caso es la “abstinencia de relaciones sexuales” o la
“espera por las relaciones sexuales” (4) (7). Para ellas, si ese “hombre” en verdad las
“ama” tiene que “esperar o aguardar” el “tiempo que sea necesario” para tener sus
“anhelados deseos coitales” que tanto él anhela 5(g) (4) (7).
4
(f) Ojo que decimos medida y no engaño, porque al final es una parte más dentro de la lógica masculina para
llegar al sexo a una mujer; es una forma a fin de cuentas del macho humano para llevar a cabo su deseo sobre la
mujer (no se trata de algo malo o cosa tan mala en última instancia, sino que hasta cierto punto como se ha estado
repitiendo tiene su razón en lo que Freud llamó alguna vez “comercio sexual” (15): una compensación o
intercambio producto de algo que se supone hace el varón a favor de que tanto la mujer como él gocen de sus
cuerpos –o el cuerpo femenino-); a veces lo hacen de manera consciente como a veces lo hacen de manera
inconsciente los hombres (por el calor del momento) y/o porque las hormonas están a flor de piel en la
adolescencia…
5
(g) Si fuera por voluntad de las féminas o por su decisión, harían esperar a ese “pobre hombre” durante años o
toda su vida, o hasta evitarían el coito con el pretexto del “amor verdadero” (estamos generalizando ojo): “si en
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La mujer consciente o inconscientemente sabe en lo que se está “involucrando” al
momento de aceptar la “demanda de amor del hombre” (y sabe muy en el fondo porqué
cede a esa demanda o porqué termina cediendo a las peticiones de ese hombre (4);
tiene muy presente si ese señor vale o no vale la pena, merece o no merece gozar de
su cuerpo) 6(b) (4) (7) (13); además ellas también terminan “disfrutando” de lo que va
pasar y es más, un psicoanalista por dirá (Jacques Lacan (14)) que ellas experimentan
un “plus de goce” o “plus de placer” en esta situación de las relaciones de pareja porque
advierten un “doble beneficio” 7(c) (4)… Sin embargo a pesar de todo lo que estamos
analizando se nos quiere “vender el cuento” o el “prejuicio” a veces, a hombres y
mujeres; que las mujeres son “ingenuas” (2) por permitirse o dejarse “caer” en la
supuesta trampa de “la prueba de amor masculina” (2) (¿Algo deben hacer estos
hombres para que prevalezca su lógica no les parece?) y los hombres son unos
“caníbales sexuales” que lo único que buscan es “engañar” o aprovecharse de las
“pobres mujeres” (entre comillas ingenuas) y su crédula forma de pensar acerca del
“amor” (2); siendo como ya dijimos antes esto, un “asunto normal”, parte de las
relaciones sexuales o de la “lógica del amor entre ambos sexos”, que encuentra
sus razones en la “dinámica de la pareja” (4)… Y las cosas son así, repetimos, porque
las mujeres también “gozan de las relaciones sexuales” (aunque algunas lo nieguen) (4)
y son conscientes (tal vez unas más que otras), que simplemente están siguiendo un
“patrón afectivo o una dialéctica sentimental de pareja” por parte de su compañero al
ceder en el tema del coito (al fin y al cabo todo varón heterosexual apunta a eso, como
ya se dijo, tarde o temprano: a tener intimidad con su pareja (4); ahora, que existan
mujeres tal vez un tanto “ingenuas” o con falta de conocimiento consciente de este
“epifenómeno” es otro asunto). Ellas fácilmente pueden decir que “no” frente a la
demanda; que no es tiempo para ellas el tener relaciones y que “si en verdad las ama
verdad me quiere tiene que esperar mi voluntad o no verme como objeto sexual” (claro que estamos hablando de
generalidades que no necesariamente pertenecen al caso de todas las mujeres: no a todas la féminas les repudia el
coito, o no a todas la féminas el sexo les resulta un acto superficial y sin sentido de alguien que posiblemente no las
ama, etc.).
6
(b) Que tampoco necesariamente significa tener relaciones sexuales sin condón o preservativo (ese es otro tema
que abordaremos enseguida o más adelante).
7
(c) Porque el hombre –digámoslo así- se “gana” los favores sexuales de la fémina –en este caso del “goce de su
cuerpo”-, del cual la mujer misma también goza: o sea acá tenemos una doble ganancia o beneficio, un “Plus de
goce” por parte del sexo femenino, como decía Lacan (14).
12
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ese hombre con el cual están” este debe esperar el “tiempo necesario” para el coito; o si
estas mujeres en verdad quieren tener vínculos íntimos con su pareja deben ser
sinceras y atenerse a las consecuencias de ello: posibles embarazos prematuros al no
usar condón, mayor acercamiento emocional con su pareja, etc. 8(d); pero no negar su
parte de responsabilidad en esta problemática de los embarazos no deseados o
prematuros (9)… Esto es algo que no se acepta o al menos muchas mujeres no lo
aceptan: lógicamente que un hombre después de un tiempo (peor si se trata de un
varón de pocas represiones o inhibiciones o de una moral religiosa no muy fuerte (11)),
será “normal” que quiera tener relaciones sexuales con su compañera al cabo de un
periodo, porque así es la “naturaleza masculina” (como lo hablamos) (11). O sea a decir
verdad esto se trata al final de un “pacto de mutuo acuerdo” consciente o
inconscientemente (4) (que se da por cierta lógica, dinámica o dialéctica en la pareja) y
no es por causa de un “engaño u otra cosa” (al menos en la mayoría de los casos,
porque de ser de otra forma, estaríamos hablando de “hombres perversos” o “con
rasgos antisociales” que lo único que buscan es “engañar” a las mujeres en su mayoría,
para tener relaciones sexuales de forma inescrupulosa (2)). Ahora bien, que estas
relaciones carnales se están iniciando a muy temprana edad (en eso estamos de
acuerdo) es cierto; están siendo muy prematuras (14 y 15 años) las relaciones; pero
esto no se debe a las consecuencias de un “engaño” o por el hombre y sus malas
intenciones; se debe a un conjunto de grande de factores (5) que a nuestro entender
tienen que ver con la educación formal (la del colegio) y la educación informal (la de la
familia), y muchos más factores (pobreza, falta de proyecto de vida, falta de control
social, etc.). El estudio de este municipio también revela datos que indican mucha
“disfuncionalidad familiar” (9) en los hogares de estos adolescentes que terminan
embarazados prematuramente. Hay ausencia de los padres porque ambos trabajan o
porque la pareja se encuentra separada o porque están con problemas, y los
adolescentes prácticamente aprovechan esto y hacen “lo que quieren” al estar solos;
además también otro factor para el “sexo prematuro” podría ser que la ausencia de la
8
(d) Para eso se supone que deben de haber llevado un tiempo conociendo a su pareja antes de entrar en más
intimidad con él; si no para qué se supone que fue el “periodo de espera” al hombre; ¿No fue para llevar a otro
“nivel la relación de pareja”? ¿Conocerlo, asegurarse que es un “buen partido”, evaluar bien si valía la pena pasar al
otro nivel o “dejar hasta ahí” las cosas? Solo existen preguntas.
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“estructura
parental”
de
seguro
también
termina
afectando
a
los
menores
emocionalmente, haciendo que estos se sientan vulnerables, con un “vacío prematuro o
necesidad de compañía” que deberían experimentar a mayor edad y no prácticamente
en su pubertad y adolescencia (5). Eso es lo que nosotros creemos.
USO DEL CONDÓN EN ADOLESCENTES:
En segundo lugar a la disertante del taller educativo que antes nombramos se le sugirió
“el uso del condón y más detalles en su empleo” (17) (16), como algo muy importante y
que tiene que ver con “Educación sexual” (6) (el convencer a los varones de usarlo, el
enseñar técnicas de persuasión a la mujer, etc.) y que también se debería instruir; a lo
cual la disertantes nos respondió: “Eso es solo un tema para parejas `consolidadas´,
porque estos chicos tienen relaciones a escondidas, detrás de un árbol (a la “apurada”
en otras palabras) 9(j), (etc)…” (9). Pensamos mucho en la salida o respuesta que nos
otorgo o que nos dio la disertante, de si podría o no podría ser cierto lo que nos dijo; y
nuestra decisión fue mantener nuestra postura, que: una vez iniciada las relaciones
sexuales o antes, de ser posible; se puede convencer a los adolescentes de que el uso
del condón es necesario para el cuidado de ambos protagonistas (más allá de las ITS y
los diferentes métodos anticonceptivos: “si no tienen fe en lo que enseñan para qué lo
enseñan” cabe preguntarnos, porque la disertante eso demostró al no tener fe en el uso
del condón en los adolescentes; si lo más importante para ellos al final es la
“abstinencia” -porque contraindicó la facilitadora el resto de uso de anticonceptivos- y el
“proyecto de vida” -así lo entendimos nosotros- para qué instruyen acerca de estos
métodos) para prevenir embarazos no deseados (9). Si bien puede ser que estas
conductas coitales sean realizadas detrás de un árbol, a la “apurada o a las escondidas”
(como se dijo), eso no quiere decir que no exista la posibilidad del “uso del condón” en
ellas (las relaciones intimas). El coito (hemos visto en documentales de HBO, donde
se dan contextos semejantes en el tema de las “trabajadoras sexuales” 9
(j) O sea que para ella no daba la situación o el contexto para que se entre en más detalle acerca de la relación
sexual entre los adolescentes; la situación no daba como para que se invierta tiempo en demostrarle a los varones
adolescentes la no falta de placer que produce el condón; ni tampoco daba el contexto para que a las mujeres se
les enseñe técnicas de persuasión para que su pareja use el condón. Ella llamó a nuestra propuesta: “Es un tema
que solo puede ser trabajado con parejas adultas consolidadas”…
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El Psicodrama Freudiano. 2019
guardando la distancia y con el respeto que se merecen nuestras bellas
adolescentes- sí es posible el uso del condón detrás de un auto, a la apurada o
donde sea que se produzca la penetración, por más excitado e incomodo que se
esté; lo observamos y oímos en el documental (16)). Entonces frente a esta realidad
nos hacemos los siguientes cuestionamientos o sacamos las siguientes conclusiones:
primero, si el indicador No. 1 es “la prueba de amor-masculina”, se trata de parejas
adolescentes que ya llevan un “buen tiempo conociéndose o estando juntos”; por lo
tanto dudamos muchos que se le pida “prueba de amor” a una persona que recién
conoces hace una semana o que llevas conociendo apenas un mes; por eso no
creemos en el argumento de lo “inesperado” o “sorpresivo”, o algo que sucede mucho
“fuera de control” (son parejitas que sin duda llevan tiempo conociéndose y que no por
nada está apareciendo “la prueba de amor masculina”). Segundo, según el estudio
además estamos hablando de las primeras relaciones sexuales de estas adolescentes
o menores (14 y 15 años); lo cual nos indica que es complicado o difícil (según las
generalidades teóricas y prácticas (18) (7)) que una mujer facilite su primera relación
coital a un “recién conocido o desconocido” partenaire, se conocen pocas (aunque hay
de todo, con el respeto que se merecen) mujeres que entreguen fácilmente su
virginidad 10(i).
Por otro lado, Si bien es verdad que una de las causas para la falta de “uso del condón”
por parte de los jóvenes o menores (9), se trata por el elemento de la falta de privacidad
(en el pueblo, por parte del distribuidor de los preservativos) y el expendio de los
condones en un solo lugar (ambos elementos están juntos); también pueden estar en
juego otras variables en esta problemática. Esto también puede deberse a muchos
motivos más: al mito considerable de la gran cantidad de la pérdida del placer al usar el
condón; a la cuestión de muchas veces falla de la erección masculina supuestamente
por el uso del preservativo (el cual también es en parte un error pero en parte una
verdad, pero que sin embargo por eso, para que no se origine ello aquí se necesitaría
10
(i) Tal vez el estudio debió ser más profundo que preguntar simplemente “el motivo” de las primeras relaciones
sexuales o de las relaciones sexuales de los adolescentes, y se debió preguntar también el “porqué”: ¿Porqué
cediste ante “la prueba de amor de tu pareja” si en verdad no querías o sí en verdad pensabas que habían tantos
riesgos?; y en segundo lugar se debió indagar más exhaustivamente el asunto de la causa del “no uso del condón”
por parte de las parejas adolescentes (cuestión que la disertante contesto diciendo que simplemente las razones
fueron a que se trataba de un pueblo “chico” donde solo existía “una farmacia” y donde la dueña conocía a toda la
gente del pueblo, incluido los padres de los adolescentes que querían tener relaciones a escondidas).
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El Psicodrama Freudiano. 2019
de la participación más activa del comportamiento de la mujer), alergia al látex (lo cual
se subsana con el uso de otro componente del preservativo), etc…
El mito sobre la perdida de placer en parte es cierto, pero no en las cantidades
estimadas por la cultura popular; no se trata de un hecho tan significativo como para no
usar el preservativo (17) a menos que tratemos con hombres que quieran ir “más allá
del principio del placer” o “gozadores al extremo” como se dice (15), para que una pizca
de falta de sensibilidad les haga perder la erección, la concentración o todo el interés
sexual en la mujer (porque no es la realidad). En segundo lugar es real a veces, la
perdida de la erección producto de la tarea de ponerse el condón y dejársela toda la
tarea sexual al hombre; por eso aquí la mujer juega un papel muy importante; y si tanto
a ellas les interesa el “empoderamiento” (como se dijo en el taller de “Educación
Preventiva”: “empoderar a las mujeres”), también se trata de “empoderamiento” el
colaborar al hombre en el uso del condón (17), porque si ya se ha decidido consciente o
inconscientemente tener relaciones sexuales entonces “qué más da” en ir más allá de la
simple decisión y ayudar al hombre a mantener su erección poniéndoselo el condón (ya
sea con la mano o con la boca), masturbándolo, etc., y así evitar o evitando su “falta de
uso” (del condón) como una razón más para los embarazos no deseados (17)…
Como vemos a nuestro criterio, la disertante del taller donde asistimos, subestimó o
subestima demasiado “las habilidades de las adolescentes de su municipio” tanto para
ser conscientes de las supuestas “artimañas de los hombres” (que para nosotros no se
trata de “artimañas” “la prueba de amor masculina”) para tener relaciones sexuales con
ellas, como también para que ellas persuadan y convenzan al hombre del “uso del
condón” desde el inicio de la relaciones sexuales de la pareja
11(j)
(9) hasta donde sea
necesario (17). La disertante hablo de algo que “solo compete supuestamente” a las
“parejas ya establecidas o consolidadas” (acerca de la “persuasión” del uso del condón
de las jovencitas hacia sus novios o parejas); sin embargo algunas de las estrategias de
las que hemos hablado no vienen de experimentos o de las experiencias de parejas ya
consolidadas o que viven juntas; hablamos de las experiencias -con todo el respeto que
11
(j) Cabe recordar que las mujeres en la antigüedad desde la edad de los 12 años ya sabían cocinar; hacer las
labores domesticas de casa; cuidar a un niño; atender a su marido, etc. Sin embargo ahora al parecer hemos
involucionado con el tema de las responsabilidades en nuestros adolescentes (tanto para hombres como para
mujeres); ya que cada vez los mismos son más incapaces para desenvolverse “solos” debido al tema legal de
considerarlos menores de edad (sin supuesta consciencia de sus actos) hasta los 18 años.
16
El Psicodrama Freudiano. 2019
se merecen nuestras hermosas jovencitas provincianas- de las mismas “trabajadoras
sexuales” (16), que como ustedes saben no tienen “ese tiempo” de “conocer a la
persona” con la cual van a entablar un coito como para “convencerla” de que “use el
condón” en el momento de la penetración ni se tratan de ese tipo de relaciones de
“parejas consolidadas” (9); sin embargo dichas mujeres cuentan con “habilidades
persuasivas” que hacen que finalmente sus acompañantes sexuales acaben o
terminen “usando el preservativo”
12(k)
¿Entonces porqué ellas que tienen más difícil
el tema del “uso del anticonceptivo” por el tipo de pareja-cliente con el cual lidian o por
el tipo de trabajo que realizan, logran persuadir al varón; y por qué nuestras
adolescentes de las provincias no pueden hacerlo?: Cabe preguntarnos. Siendo que
nuestras chicas conocen supuestamente a ese muchacho, que al menos llevan un mes
saliendo con el mismo, con más tiempo todavía tienen para pensar a “la hora de la
verdad” (el sexo) cómo le van a hacer para que el mismo use el condón al momento de
la penetración (17) (6); cabe preguntarnos por qué estas menores no pueden o no
podrían hacer lo mismo o mejores cosas que las señoras “trabajadoras sexuales”... Sin
embargo sabemos que algunas mujeres dirán: “pero esas se tratan de `trabajadoras
sexuales´ expertas en la materia”, con años de experiencia, que no tienen nada que
perder, gente de la calle, etc.; pero no es así señoras. Muchas de estas mujeres
también son madres, esposas, parejas y al final mujeres comunes y corrientes, que se
dedican al oficio del “comercio sexual” por asuntos que solo ellas nos sabrán decir, y
que simplemente a nuestro modo de ver tienen la voluntad y la “personalidad suficiente”
(o fortaleza yoica) para cuidar de su salud física, psicológica y sexual lo
suficientemente; y por eso persuaden a sus clientes u hombres de protegerse. Entonces
¿Por qué nuestras adolescentes no han de poder tener las mismas habilidades que
ellas? ¿Es malo? ¿La vuelve prostituta a una adolescente el saber de estas cosas? ¿O
es que estamos hablando de una “generalidad femenina” de baja autoestima (8)?
Porque la realidad es esta y no está bastando con establecerles un “proyecto de vida” a
las jóvenes (y no creemos también que esto baste) y una “educación sexual” de solo la
enseñanza de las ITS y los diferentes usos de los preservativos no es suficiente;
12
(k) Nos referimos a “habilidades persuasivas” que finalmente hacen que personas “difíciles de lidiar” con ellas
como: ebrios, drogadictos, agresivos, violentos, etc., (peores que un simple novio -a no ser que se trate de un
pandillero- el susodicho novio) usen finalmente el condón.
17
El Psicodrama Freudiano. 2019
además que la DNNA no abastece para trabajar la disfuncionalidad familiar de estas
menores (9) así que ¿Qué más se puede hacer? Si usted señor lector con todo el
respeto que se merece sugiera más alternativas o tiene mejores de las que su servidor
ofrece, no hay problema, compártalas, pues dos cabezas piensan mejor que una…
Finalmente creemos que usted es el único autorizado para decidir si lo que ponemos en
la mesa de debate es cierto o es falso, factible o imposible, mito o realidad, buenas
ideas o cosas absurdas; simplemente nosotros proponemos algo más allá de la
incorporación de valores y principios (que es a lo que el plan de la disertante de nuestro
mencionado taller educativo apuntaba sobre todo) y de los famosos “proyectos de vida”
con los cuales el municipio que antes mencionamos está trabajando (9). Al final Usted
tiene la última palabra estimado lector, con todo el respeto que se merece.
20 de Julio del año 2018.
[email protected]
Whatsapp: 721-94109 / fono2: 781-05201
BIBLIOGRAFÍA:
(1) Diccionario Enciclopédico Larousse 1998.
(2) Club Planeta. Amor.com.mx. “La Prueba del amor”
www.amor.com.mx/mobil/prueba_del_amor.htm.
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pareja”. https://psicologiaymente.net/pareja/pruebas-de-amor.
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Aires – Argentina. Año 1991.
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https://es.wikipedia.org/wiki/Terapia_familiar_estructural
(6) Wikipedia. Educación Sexual. Enseñanza de la Sexualidad Humana.
https://es.wikipedia.org/wiki/Educación_sexual.
(7) Lozano Teruel José Antonio. Plataforma La Verdad. Ciencia y Salud. “Pensamiento
femenino”. Cienciaysalud.laverdad.es/8_3_13.html.
Aprende Seducción. “Cómo funciona la mente femenina”. 16/02/2016
www.aprendeseduccion.com/p3592=
18
El Psicodrama Freudiano. 2019
(8) García Ortega Verónica. Psicopedagoga y Neuropsicóloga infantil. Autoestima.
Monografía.com. Madrid – España. https://www.genero.bvsalud.org/docsonline/get
(9) Educación Preventiva Comunitaria. Estudio X que mantendremos en su mayor
anonimato para no ofender a las personas que están realizando el proyecto y
como respeto a su punto de vista acerca de la problemática adolescente.
(10) Plataforma eMujer.com. “Diferencia de pensamiento masculino y femenino”. El
magazine para la mujer actual. 17/10/2013.
https://www.emujer.com/diferencia-de-pensamiento-masculino-y-femenino.
(11) Escamilla Benítez, María José. “Mitos y Verdades sobre el Pensamiento
Masculino”. Plataforma En Pareja. 02/01/17.
https://www.google.com/amp/s/www.enpareja.com/amp/hot/Mitos-y-verdades-sobre-elpensamiento-masculino-20161210-0006.html.
(12) Gratacós, Marcel. “Psicología del hombre: 10 interesantes características”.
Plataforma Lifeder.com. Psicología - Categoría: Curiosidades. 24/01/17.
https://www.google.com/amp/s/www.lifeder.com/psicologia-del-hombre/amp/.
(13) Cabana, Betina. “Psicología de la mujer: 10 interesantes características”.
Plataforma Lifeder.com. Psicología – Categoría: Curiosidades.
https://www.google.com/amp/s/www.lifeder.com/psicologia-de-la-mujer/amp/.
(14) Rebollo, Isidro. “Sobre el Goce” (Plus de goce Femenino). Bases para la
Transmisión del “Seminario sobre el Goce”. Girona – Italia. 14/05/2013.
www.irevollo.net/index.php?option=com_content&viev=article&id=127:sobre-elgoce&catid=6:el-psicoanalisis-temas&Itemid=5
(15) Freud Sigmund. Más Allá del Principio del Placer, Psicología de las Masas y
Análisis del yo y otras obras. Volumen XVIII (1920-1922). Editores Amorrortu. Buenos
Aires – Argentina. Año 1992.
(16) Cadena HBO. Documentales sobre sexualidad humana.
(17) Plataforma la República.pe. Aweita.pe. “Día del Condón: La Verdad sobre los 8
mitos del preservativo que deberías conocer”. Sexo – Anticonceptivos - Métodos
Anticonceptivos. 13/0282017.
https://www.google.com/amp/s/aweita.larepublica.pe/magazine/7796-dia-del-condon-laverdad-sobre-los-8-mitos-del-preservativo-que-deberias-conocer.
19
El Psicodrama Freudiano. 2019
(18) Plataforma Ideas que Ayudan. “Mitos y realidades de la virginidad”. 12/03/18.
Ideas que ayudan.com/mitos-y-realidades-de-la-virginidad/
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