3.- Renovación educativa y comienzos psicoeducacionales BALBUCEOS PSICOEDUCATIVOS EN AMÉRICA: JAMES Y DEWEY Es en América donde, de manera explícita, se va a potenciar el proyecto de la psicología de la educación. A ello contribuyen en gran medida W. James y J. Dewey. El pragmatismo y el funcionalismo ideológico que defienden es una buena razón para exponer que la educación, si quiere ser eficaz, debe apoyarse en la ciencia psicológica. Además, este principio es alentado por el padre de la psicología estadounidense (James) y por el padre de la filosofía educativa (Dewey), cuya influencia fue bastante intensa en el movimiento de renovación pedagógica que tuvo lugar en Europa. Con estos argumentos es fácil comprender el nacimiento de la psicología educativa en América. William James W. James (1842-1910), además de ser el padre de la psicología estadounidense, es considerado el precursor de la psicología educacional por haber aportado algunas ideas relacionadas con la educación. Por ejemplo, W. James señaló que la psicología y la educación son inseparables, de forma que no se puede considerar temas educativos, teóricos o prácticos sin contar con su paralelo psicológico, siendo esta psicología principalmente funcionalista (Genovard, 1981, b). Independientemente de este tipo de alusiones específicas, James ejerció extraordinaria influencia en la educación estadounidense. Influyó en los conceptos psicobiológicos de la educación que se concretan en organizar y adquirir hábitos educativos importantes. También intervino en la conformación de la teoría de las emociones, pero su verdadera influencia posiblemente se deba a su filosofía pragmática, de la que es junto con Pierce, cofundador (Genovard, 1981, b): "la educación se basa en una epistemología, entendida, en este caso, como un tratamiento del funcionamiento de las ideas ... Una verdad ciertamente pragmática, la cual implica que las ideas verdaderas conducen a cosas y situaciones que funcionan". Dewey J. Dewey (1859-1952) quizá sea uno de los autores que más ha influido en la praxis educativa del mundo civilizado (Abbagnano y cols., 1957). Su punto de partida es la experiencia, pero no como conciencia ni subjetividad. El instrumentalismo del pensamiento consiste en resolver situaciones problemáticas reales de nuestra existencia. Para Dewey, la prueba de la verdad reside en las consecuencias de la experiencia. Así, no se trata de preparar para la vida; se trata de que la escuela sea vida. Por otra parte, Dewey promovió la idea de que la educación debe fundamentarse científicamente, en especial la psicología, de tal manera "que antes de la APA, en 1900, Dewey ya había realizado una defensa en favor de un programa para la psicología educacional" (Trow, 1977). Pero esta demanda de cientificidad para la educación, afirma, tiene que llegar hasta la actividad del propio educador, de forma que se erija en crítico de los resultados científicos y que la propia realidad profesional sea el lugar donde concluya tal verificación. Genovard y cols. (1981, a y b) señalan tres periodos en la formación de la psicología educacional: los comienzos (1880-1900), el desarrollo (1900-1918) y la etapa de estabilidad (19181941). Precisamente, la obra de James y la de Dewey se incluyen en el primer periodo. Genovard y cols. agregan que las demandas de la psicología de la educación quedan demostradas por los primeros libros de texto sobre esta materia, los cursos para maestros y los estudios acerca de la medida cuantitativa en el contexto de la educación, trabajos éstos que se concretarían en la obra de 1 Pedro Hernández (1991). Psicología de la educación: Corrientes actuales. México: Trillas, Capítulo 3 J. M. Balwin Mental development in the child and the race (1894) y en los escritos más explícitos de J. M. Rice (1897) acerca del rendimiento de la lectura. A todo ello habría que agregar aspectos organizativos y de profesionalización que se examinan en la sección correspondiente. EL MOVIMIENTO DE RENOVACIÓN EDUCATIVA Y LOS INICIOS PSICOEDUCATIVOS EN EUROPA También en Europa, a finales del siglo pasado y durante los primeros años del actual se registró un importante movimiento de renovación pedagógica. Abbagnano y cols. (1957) señalan que "a diferencia de los Estados 'Unidos, no fue una corriente de pensamiento y mucho menos una personalidad filosóficamente dominante, capaz de dar a este movimiento una cierta unidad de acción". Los principios más destacados que animan esta corriente son el enfoque social, la individualización de la enseñanza, el principio de actividad, el contacto con la realidad naturalsocial y la espontaneidad del ser humano. Experiencias con base ideológica Precursor del movimiento y fundador de una escuela nueva para hijos de campesinos, fue el ruso León Tolstoi (1828-1910). Su liberalismo pedagógico se expresa en este principio: "mientras menor sea la constricción requerida para que los niños aprendan, mejor será el método". Aparece la escuela del trabajo de Kerschensteiner (1854-1932), inspirada en las ideas de Dewey, con un enfoque activo y social. Otra filosofía defensora del carácter social de la educación es la de Natorp. En esos valores de la sociedad se basa Peter Petersen (1884-1952) para fundamentar su Plan de Jena, una escuela que fuera auténtica comunidad de vida, apoyada en la actividad de grupo. La visión sociológica aparece por 'primera vez en la obra del sociólogo francés Emile Durkheim (1858-1917), quien enseña que la pretensión de cambiar la educación variando los métodos e incluso al ambiente escolar, es ilusoria si no se transforma la sociedad, pues la educación es su expresión. Para otro francés, Roger Cousinet, la socialización es la esencia misma de lo educativo. Desarrolla el trabajo en grupo, al tiempo que favorece la individualización de las tareas en el seno del mismo. Es sobre todo la obra de Celestin Freinet (1897-1966) la que alcanza mayor difusión, incluso hasta nuestros días. Su enfoque es eminentemente social y simultáneamente se alienta la libertad, la actividad y la espontaneidad del alumno. Tales objetivos quedan establecidos en sus conocidas técnicas: a) la imprenta escolar; b) el texto libre, que puede ser publicado; c) la correspondencia interescolar; d) el dibujo libre; e) el cálculo viviente, derivado de verdaderos problemas económicos; f) el libro de la vida, confeccionado por los propios alumnos y que sustituye a los libros de texto; g) los ficheros y la biblioteca de trabajo, elaborados por alumnos y profesor; h) las asambleas; i) el buzón de críticas y sugerencias; j) los sistemas de observación, cuidado y medición de realidades naturales, realizados en el aula o en terrenos cercanos; por ejemplo, gráficas del tiempo, granjas, huertos, etcétera. Independientemente de los objetivos educacionales propuestos por estos movimientos de renovación, en el nivel psicoeducativo destacan los condicionantes motivacionales de los métodos, obtenidos mediante procedimientos intuitivos y experienciales y cuyos resultados favorables parecen cristalizar de manera específica en el método de Freinet. El análisis controlado de las bases psicológicas que fundamentan sistemas educacionales de este tipo aún no ha sido abordado por la psicología de la educación; creemos que seria una forma inversa, pero válida, de proceder. Fundamentación científica El mayor acercamiento a la psicología educacional lo tuvo la llamada pedagogía científica, porque en vez de fundarse en tendencias filosóficas o visiones del mundo `quiso apoyarse esencialmente 2 Pedro Hernández (1991). Psicología de la educación: Corrientes actuales. México: Trillas, Capítulo 3 en los nuevos conocimientos acerca del hombre y el niño, adquiridos sobre todo por ciencias nuevas y vigorosas como psiquiatra y la psicología (Abbagnano y cols., 1957). En este sentido hay que destacar en Italia la labor de María Montessori al crear la Casa dei Bambini, en 1907. Su metodología se apoya en la actividad sensomotriz, y propone distintas técnicas de lectura, escritura y cálculo. Los métodos de Montessori se aplicaron tanto a niños subnormales como a los normales. Su teoría se fundamentaba en Seguin, discípulo de Itard, quien había tratado de educar al salvaje de Aveyron (1799). Sante de Sanctis era un neuropsiquiatra que trabajó en Roma (1899), también en escuelas para subnormales. Los problemas planteados en el trabajo con niños deficientes mentales serán siempre un acicate para la investigación, y lo más probable es que más tarde redunden en la educación para personas normales. En Bélgica sobresale la figura de O. Decroly, quien en 1906 funda una sociedad paidotécnica y en 1907 la escuela activa L'Ermitage, en donde pone en práctica el método global en lectura y los llamados centros de interés. La globalización excluye las asignaturas consideradas como compartimentos. Asimismo, Decroly abogó porque se adoptaran en la enseñanza las técnicas de medición psicológica, y elaboró pruebas objetivas para evaluar el rendimiento académico. Los estudios psicopedagógicos de tipo experimental se aproximan a los planteamientos y a la metodología de la psicología de la educación. En Suiza hay que destacar la labor de E. Claparede, quien en 1905 publica Psicología del niño y pedagogía experimental. Su mérito radica en: Ir en más allá de los problemas limitados que se plantean en este marco y concebir una psicopedagogía general, resueltamente experimental, una verdadera psicología del escolar, al servicio de los maestros y sus alumnos (B. Andrey y J. Le Men, 1970). Su idea revolucionaria era promover en los educa-dores el espíritu científico, es decir, la aptitud de maravillarse ante los hechos cotidianos de su vida profesional, y el deseo de interrogarlos tratando de obtener una respuesta mediante la observación metódica y la experimentación. Al igual que Dewey, a quien admiraba, ponía en guardia a los profesores respecto del seudocientificismo, al que consideraba más peligroso que la rutina común. Abbagnano y cols. (1957), a quienes pertenecen los comentarios citados, agregan que la segunda preocupación de Claparede era la enseñanza individualizada, y de ahí el interés por ¿Cómo diagnosticar las aptitudes de los escolares?, obra publicada en 1924, cómo hacer La escuela a la medida (1920) o La educación funcional (1930). De estos aspectos de individualización se ocupó Robert Dottrens mediante el Sistema de fichas. Pero la más amplia y exacta justificación psicológica del concepto de educación funcional se debe a Jean Piaget (1896-1981). Estos conocidos autores, así como Bovet, Rey, Osterriethm Inhelder, etc., se asocian con la llamada Escuela de Ginebra, potenciada a través del famoso Instituto J. J. Rousseau, que se derivó del Seminario de Psicología Educativa que Claparede fundó en 1906, cuyos fines eran el estudio teórico y práctico de los problemas psicoeducativos, así como la formación de los maestros (Andrey y Le Men, 1970). Si se quiere encontrar en Europa la constitución científica de la psicología de la educación, es necesario citar esta Escuela de Ginebra. GUÍA DIDÁCTICA La renovación educativa se ha intentado en todas las épocas y ha surgido de la preocupación de quienes desean cambiar la realidad del mundo. Pero es a forales del siglo XIX y principios del xx cuando ese intento de renovación educativa cuenta con mayor respaldo social. Entre las razones de este interés educativo se incluyen el progreso técnico, el desarrollo científico y la expansión de las ideas liberales y sociales. ¿Qué motivaciones fundamentales, de las citadas, subyacen en los planteamientos de James y Dewey acerca de la renovación educativa estadounidense? ¿Qué objetivos principales aparecen en 3 Pedro Hernández (1991). Psicología de la educación: Corrientes actuales. México: Trillas, Capítulo 3 el movimiento europeo representado por Tolstoi, Kerschensteiner, Natorp, Petersen, Freinet? ¿Cuáles son las motivaciones de Montessori, Decroly y Claparede? Si se quiere encontrar en Europa las bases científicas de la sociología y de la psicología de la educación, ¿a quiénes hay que referirse? 4 Pedro Hernández (1991). Psicología de la educación: Corrientes actuales. México: Trillas, Capítulo 3