Dar la palabra Categoría: Buenas prácticas en el aula en el marco del Diseño Curricular. Escuela: Creando Huellas Autora: Encantadora de Palabras Prof. Encantadora de palabras –Esc. Creando Huellas –Proyecto Dar la palabra DAR LA PALABRA Comencé a desempeñarme como maestra suplente de 1º grado en el año 2009, en una escuela ubicada en el barrio de Chacarita, muy cerca del asentamiento de la calle Fraga. De allí asisten la mayoría de nuestros alumnos, una población, en general hijos de inmigrantes de países como Perú, Paraguay y Bolivia, además de argentinos que quedaron excluidos del sistema y con sus necesidades básicas casi insatisfechas. La población de nuestra escuela está conformada mayoritariamente con niños que provienen del asentamiento y también de otros sitios. Una parte importante de nuestro alumnado está compuesta por inmigrantes, peruanos , paraguayos bolivianos, que quedaron excluidos del sistema y con sus necesidades básicas casi insatisfechas. Los chicos que asisten al colegio, buscan no sólo adquirir conocimientos sino también vienen a ser escuchados, contenidos y ordenados. Muchos de ellos reciben tantos golpes diarios como nunca podría haberlo imaginado pero también son capaces de desarrollarse y progresar por mérito propio como ningún libro pudo contármelo. Todos son capaces de afrontar desafíos personales, familiares y escolares muy solos, tan solos que el esfuerzo propio pasa a ser el primer y único recurso con el que ingresan. Son niños rodeados de abandono, adicciones, violencia física y verbal, pero sobre todo falta de interés de aquellos que les dieron la vida. En lo personal, fue todo un desafío, mi formación pertenece al nivel inicial y allí fue donde me desarrollé durante toda mi docencia pero, de pronto, me encontré intentando descubrir y desplegar mis herramientas no sólo de formación sino también personales para afrontar la nueva tarea de enseñar en un primer grado. En realidad, vale decir que la nueva tarea era y es, aprender en primer grado. A medida que pasaban los días, comencé a pensar que se podía hacer mucho más y ofrecí a los niños un espacio donde pudieran expresar todo lo que sentían, no sólo en el ámbito escolar sino también familiar, estaba convencida que algo no decían, sus ojos tristes y sus sonrisas escondidas me lo advertían cada mañana al iniciar la jornada escolar. Pero también muchos emergentes surgían en el resto de los alumnos de la escuela donde los malos tratos entre ellos, la falta de comunicación y poca tolerancia me hacían pensar como hipótesis que la falta de lenguaje obstaculizaba la expresión de deseos, preocupaciones, emociones y conflictos que surgían constantemente pero además también el desarrollo de sus procesos de aprendizaje. 2 Prof. Encantadora de palabras –Esc. Creando Huellas –Proyecto Dar la palabra He visto niños tirarse del cabello en el baño sin decirse nada, simplemente tiraban y tiraban, he visto niños golpearse en el recreo, enojados y angustiados sin poder decir ni una sola palabra, ni siquiera hacia el otro miembro del conflicto. Creí que era el momento de hacer algo con todos esos emergentes que los niños estaban mostrando y comencé por primer grado ya que era allí donde me desempeñaba en la jornada escolar. Progresivamente fui incorporando el “Intercambio oral” a primera hora de la mañana, donde cada uno de los chicos podía narrar lo que tenían ganas de decir. La comunicación favorecería el intercambio y el exponer situaciones de dolor permitiría descubrir aquello que era común a todos en su propio contexto, como así también aliviar aunque sea un poco, tanta carga emocional. Con el tiempo, este espacio ya era de ellos, favorecía el establecimiento de los vínculos grupales y la construcción de un código en común. Paulatinamente aquello que expresaban corporalmente, comenzaban a ponerlo en palabras. El intercambio brindó la posibilidad de ampliar su vocabulario para poder contar más detalladamente lo que a ellos les preocupaba, para luego plasmarlo por escrito, comprendiendo así, la importancia de la lengua oral y escrita como medio de comunicación, expresión de deseos, emociones, etc. El tiempo del “intercambio” siempre nos quedaba corto y se me ocurrió ofrecerles la incorporación del “Diario íntimo”, la escritura espontánea que daba inicio al proceso de alfabetización, brindaba la posibilidad, de utilizar la palabra y comprender su función para la vida cotidiana. En algunos casos sus vivencias eran tan duras que hasta les daba vergüenza compartirla grupalmente, pero todos participaban muy activamente de la actividad. La sorpresa fue aún mayor, no sólo por lo que escribían en él, sino por las representaciones gráficas que acompañaban sus palabras. 3 Prof. Encantadora de palabras –Esc. Creando Huellas –Proyecto Dar la palabra Para iniciar el trabajo añadiesen poco a poco y que este recurso comunicativo, comencé dando un tema disparador hasta que ellos mismos pudieron establecer lo que necesitaban relatar. Mis primeras lecturas fueron impactantes, habitualmente se me hacía un nudo en la garganta, necesitaba mostrar a mis compañeros las producciones para compartir tanto dolor que en pleno proceso de alfabetización eran capaces de escribir. (Que me pegue mi mamá) Con el tiempo me fui adaptando pero nunca acostumbrando. El “diario íntimo” comenzó a ser sanador y más tarde necesario no sólo para los niños sino también para mí, me permitía realizar lecturas de emergentes individuales y grupales que obstaculizaban las tareas escolares y el desarrollo de los aprendizajes de los chicos. Muchos de ellos, solicitaban escribir en su diario en cualquier momento del día, pasó a ser su amigo y confidente. (Que no me quemen la ropa) 4 Prof. Encantadora de palabras –Esc. Creando Huellas –Proyecto Dar la palabra Como estrategia didáctica permitió observar el proceso de alfabetización y el paso por las diferentes etapas ya que se sostuvo durante todo el año. Permitió la escritura espontánea, el auto dictado y el desarrollo del lenguaje oral y escrito ya que para poder expresar todo lo que sentían necesitaban aquellas herramientas que durante las jornadas escolares se les ofrecía. (Me gusta jugar a la rayuela) El diario y el intercambio no solo se utilizaban para narrar lo que los entristecía, expresaban también deseos, gustos, miedos, necesidades e inquietudes. Permitió que realizaran auto evaluaciones, aspectos a mejorar en el ámbito escolar y personal, pero sobre todo habilitó la palabra en un marco diferente. (Quiero que no me pegue mi mama) 5 Prof. Encantadora de palabras –Esc. Creando Huellas –Proyecto Dar la palabra Hoy son una herramienta esencial en mis planificaciones y se utiliza como recurso para resolver emergentes grupales en situaciones de conflictos y ansiedades, como así también aspectos a mejorar en la enseñanza-aprendizaje, tal como lo propone el Diseño Curricular del primer ciclo del año 2004 en el área de Prácticas del Lenguaje, pag. 362 (Mi mamá tiene que leer la nota) El primer ciclo tiene la responsabilidad de contribuir a la formación de personas capaces de tomar la palabra, de escuchar y hacerse escuchar en las diversas situaciones. Hacer oir su voz para defender sus derechos y los de los otros, reclamar cuando no son respetados, o simplemente para dar sus opiniones, etc. La práctica de la oralidad está en primer plano porque el lenguaje oral es instrumento privilegiado de construcción de conocimientos. Es el medio a través del cual se negocian significados, permite confrontar conceptualizaciones acerca de los contenidos, intercambiar información, analizar, discutir problemas y soluciones. El desarrollo de la oralidad se hace posible a través del uso constante del lenguaje como instrumento de elaboración compartida del conocimiento. Uno de los propósitos es hacer del aula un ámbito en el cual se sientan convocados a intervenir y autorizados a expresar sus ideas aun cuando éstas sean diferentes de las de sus compañeros, un ámbito donde el disenso esté permitido y se constituya en el punto de vista de discusiones que inciten a comprometerse con los contenidos en las áreas, a fomentar las propias ideas ya a revisarlas teniendo consideración por los puntos de vista de los otros. La palabra es sanadora, permite desahogarse, relajarse y divertirse. . 6 Prof. Encantadora de palabras –Esc. Creando Huellas –Proyecto Dar la palabra Años después me ofrecieron desempeñarme como maestra de apoyo, en ese rol la disposición horaria era mayor y podríamos comenzar a pensar como ampliar esto de “PERMITIR LA PALABRA” a otros grados. Fue allí donde el maestro de 7º grado me transmitió su preocupación sobre su grupo de alumnos en cuanto a la falta de expresión a nivel grupal, surgiendo esto a partir de la propuesta del docente de solicitarles lecciones orales, los malos tratos y la falta de respeto habituales en horas de clase y recreos. Teniendo en cuenta la experiencia en 1º grado incorporamos un taller para ellos, de una vez por semana, para elaborar y reconstruir los vínculos grupales. Se plantearon dos objetivos generales: 1) Que los niños logren conocerse y apropiarse del espacio para expresar sentimientos y emociones utilizando el lenguaje oral y corporal de modo saludable como medio de comunicación 2) Que los niños se pregunten, debatan y acuerden sobre sus propios códigos grupales para mejorar su calidad de vida escolar y personal. 3) Que los niños construyan su propia trama grupal para fortalecer los vínculos. El taller propuesto se sostuvo todo el año y aún se realiza en la actualidad, en él por medio de diferentes dinámicas lúdicas y de expresión los niños pueden poner en palabras no solo cuestiones familiares o personales que los preocupa sino también resolver sus propios conflictos entre todos dando opiniones y modos de reparación lo que favorece el intercambio. Los niños hoy tienen asumido el espacio como propio, lo reconocen y valoran como un momento de ellos, para ellos y con ellos , fuera de los esquemas escolares prototípicos establecidos. Finalizando este taller los niños son capaces de pensar en un proyecto propio, continuar con sus vínculos más allá de la escolaridad primaria y reconocer que en otros se encuentran ellos mismos. Este largo proceso de cambio se amplió en niñas integradas de diferentes grados que necesitaban un espacio de contención y donde pudieran construir su propia identidad y se creó el “Grupo de mujeres”, también de un encuentro por semana, en él las chicas podían expresar sus intereses y dudas donde ellas mismas construyeron un cronograma de temas a tratar en cada encuentro. 7 Prof. Encantadora de palabras –Esc. Creando Huellas –Proyecto Dar la palabra Este taller también se llevó a cabo con diferentes dinámicas lúdicas y de trabajos grupales donde lograron apropiarse de dicho espacio para escucharse, pero también donde se confrontaban por actitudes que tomaban diariamente. Hubo cambios muy notorios, niñas más expresivas, mayor autoestima, mayor confianza entre pares, pero también hubo momentos muy duros de reclamos y pedidos a sus familias donde no fueron escuchadas. Se llevó a cabo un solo año por falta de recursos humanos y disponibilidad de tiempos pero los niños aún lo siguen reclamando. Esta propuesta pertenece a los Lineamientos curriculares de Ed. Sexual para la ciudad autónoma de Buenos Aires, donde se intenta promover a que los jóvenes aprendan a valorarse ya que los ayuda a sentirse mejor consigo mismos, con su cuerpo, con lo que cada uno es; permite adquirir confianza y sentir que “se puede”: se pueda a aprender, sentir, crecer, reflexionar y tomar decisiones en forma autónoma y decir “no” a aquello que dañe y/o ponga en riesgo la propia integridad. El desarrollo de la autoestima construye identidad. Teniendo en cuenta todo esto se propone como contenidos en esta área para 7º grado: La relación con los compañeros y amigos. Expresar sentimientos, tolerancia y respeto por el otro. Los Vínculos. Participando en diálogos y reflexiones de situaciones cotidianas en la que se manifiestan prejuicios y actitudes discriminatorias. Construir vínculos de afecto, cuidado y respeto mutuo, acciones posibles desde la vida cotidiana escolar. El derecho al buen trato, el armado de redes vinculares y los valores como la solidaridad, etc. Habilitar un espacio donde la palabra circule no es tarea fácil, debemos estar preparados para escuchar y soportar lo que el otro tiene para decir, para criticar y defender, pero sobre todo permite colocarse en el lugar del otro para comprender su historia, su dolor y sus deseos. En lo personal, yo lo aprendí, y me permitió no solo ampliar mis conocimientos, sino también resignificar mi rol como docente. 8 Prof. Encantadora de palabras –Esc. Creando Huellas –Proyecto Dar la palabra Hoy continúo trabajando como maestra de 1º grado en la misma escuela y acordamos con el maestro de 7º grado intercambiar un día para que el taller con estos niños se lleve a cabo. Amo lo que hago y aprendo cada día de lo importante que es para algunos de los niños que pasaron por mi vida en la docencia que hayan tenido la posibilidad de descubrir lo bueno que es hablar antes que callar y que siempre hay alguien dispuesto a escuchar, aunque sea la mayor tarea que un docente debe llevarse todos los días a su casa. (Quiero ser jugador) Aquellos niños que vi por primera vez cuando ingresé a la escuela hoy ya no son los mismos, pueden expresar enojos, preocupaciones, deseos, emociones, tristezas, etc. por medio de la PALABRA. Sólo es cuestión de HABILITARLA. (Necesito para portarme bien debo cambiar) 9