EL PORRO Por Dairo Meza El Porro es un ritmo, no es un género musical. No todo lo que suena en las bandas populares es porro.Desde mis comienzos como trompetista en la “Banda 8 de Septiembre de Sincé” en 1973, sigo escuchando de muchas personas del público la expresión: “tócame un porro alegre”. Con el deseo de complacer la petición del solicitante se le toca cualquiera de los tantos porros del repertorio de la banda. “Pero eso no es alegre” replicaba el oyente. “Tócame La Espuela del Bagre”. “Pero eso no es un porro, es una puya” me respondo yo mismo. De estas experiencias lo que concluyo es que la mayoría de la gente confunde el concepto de ritmo musical con el de género musical. Estas personas creen que todo lo que suena en la banda es porro. Por eso, para ellos los ritmos musicales alegres, como el fandango, la puya y el mapalé, “son porros alegres”. O sea, están confundiendo el género musical de bandas folclóricas con el ritmo musical llamado porro. La mayoría de las personas, incluyendo a muchos músicos desprevenidos, utilizan indistintamente los términos ritmo, género y aire musical.- ¿Qué es un ritmo musical? Según el diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, el ritmo es el orden acompasado en la sucesión o acaecimiento de las cosas. Otros diccionarios lo refieren como: la periodicidad en la sucesión de una serie de cosas; movimiento ordenado y repetitivo. Al hablar de acompasado y/o de periodicidad, se deja ver la presencia de una unidad de medida de tiempo que controla ese acompasamiento y periodicidad. Existe ritmo en las infinitas actividades que gobiernan la existencia de todo ser vivo. Por ejemplo, hablar del ritmo cardiaco se refiere a cuántas veces palpita el corazón en un minuto o en una hora, por decir algo. En música, el ritmo se refiere a un modelo o forma de organización y repetición (a intervalos regulares y a veces irregulares de tiempo) de sonidos fuertes y/o débiles, largos y cortos, y también los silencios en una composición. Es el elemento que controla la duración de los sonidos y silencios, mas no sus alturas (agudos – graves). La unidad de medida utilizada para las duraciones es el pulso musical, que es cada uno de los acentos o golpecitos que se marcan con las palmas, o cualquier otro medio, cuando ejecutamos o escuchamos una canción. A 1 este pulso también se le llama metro o tiempo, pero no es el tiempo en segundos o minutos que medimos en el reloj. Es preciso anotar que la velocidad del pulso es la que determina la rapidez con que se ejecuta la obra musical. A esta velocidad se le conoce como tempo o aire musical.En la música popular, y más específicamente en las músicas folclóricas, los acompañamientos de las melodías tienen sus propias formas de organizar y repetir los sonidos, convirtiéndose en unos esquemas particulares para cada caso. Por ejemplo, en un conjunto de millo, la melodía de una cumbia la expone el pito y/o las voces de los cantantes; el acompañamiento corre por cuenta de los instrumentos de percusión. Para cada uno de estos instrumentos acompañantes, existe un esquema o forma particular de organizar y repetir los sonidos durante la ejecución. A este esquema es a lo que se le conoce como ritmo musical, o simplemente “ritmo”. Como se puede observar, cada uno de los instrumentos tiene una forma particular de acompañar la cumbia, y cada vez que esta se ejecute, ellos aplicarán cada uno su esquema o ritmo particular.De acuerdo con lo anterior, el ritmo musical es lo que diferencia a una balada de un bolero, o de un pasillo, o de cualquier otra composición musical con otro esquema de acompañamiento diferente. O sea, cada uno de ellos es un ritmo musical. Una melodía musical puede ser montada o acompañada con diferentes ritmos, pero desde luego, cada versión sonará diferente una de las otras. Por ejemplo, La Pollera Colorá originalmente fue creada con ritmo de cumbia, pero se le han hecho otras versiones en otros ritmos, tales como salsa, ranchera, guaracha. Cada versión de estas, aunque tiene la misma melodía, suena diferente de las demás y es precisamente por el ritmo que la acompaña. Otro ejemplo de esto es el tema “Cosita Linda” del Maestro Pacho Galán, el cual originalmente fue compuesto y grabado en ritmo de porro, pero la versión que más gusta es la que el mismo Maestro grabara después en ritmo de merecumbé.- ¿Qué es un género musical? Es una categoría que reúne composiciones musicales que comparten algunos criterios de afinidad. Estos criterios pueden ser específicamente musicales tales como el ritmo, las características melódicas y/o armónicas, la instrumentación; otros criterios se basan en características no musicales, como la región geográfica de donde provienen, el período histórico, el contexto socio-cultural y otros aspectos más amplios de una determinada cultura. Es posible que una obra musical pertenezca simultáneamente a más de un género musical.2 Uno de los criterios más usados para definir los géneros musicales es el que tiene en cuenta al público al que va dirigida la obra. Según este criterio los géneros musicales son: Música culta, música ligera y música folclórica o popular. Este último género comprende las obras tradicionales de un pueblo, raza, o cultura. El pueblo es el creador, el intérprete y el receptor de estas músicas. Las obras de un género musical pueden estar compuestas en diferentes ritmos, como es el caso del género “salsa” donde se encuentran ritmos como la descarga, el guaguancó, la bomba, el mozambique, entre otros. Igualmente en el género vallenato de Colombia existen cuatro ritmos diferentes: el paseo, el son, el merengue y la puya. En el género de bandas folclóricas de la Costa Caribe colombiana los principales ritmos autóctonos en que se ejecutan sus obras son la cumbia, el porro, el fandango, el mapalé, y la puya.El porro es un ritmo musical de la Costa Caribe colombiana. Tal vez, es una de las expresiones musicales que más ha evolucionado en el aspecto interpretativo y variedad de estilos. Se ha escuchado en los Bailes cantados de los grupos afro descendientes, grupos de tamboras, grupos de hojitas de árboles (naranjo o laurel), grupos de gaita tradicional, conjunto de acordeón, grupos tropicales, orquestas nacionales e internacionales, grupos modernos, y por supuesto las bandas de viento populares.En cuanto a su origen, no existen investigaciones que hayan escudriñado con rigor científico su cronología y su sitio específico de origen. El Licenciado William Fortich Díaz, en su libro “Con Bombos y Platillos” ubica el nacimiento del porro en la época precolombina, sin especificar con exactitud un período en particular antes de la llegada de Colón a América. También afirma que surgió a partir de los grupos gaiteros de la región del Bajo Sinú, donde tomó el aporte de la rítmica africana, y de allí pasó a las bandas populares de vientos.Uno de los más connotados impulsores del porro fue el Doctor Guillermo Valencia Salgado “El Compae Gollo”. Él, afirmó que el porro se nutrió con la rítmica de las tonadas yorubas traídas por los esclavos africanos, quienes lo convirtieron en baile cantao, acompañado solamente por palmas y tablitas, pero no especifica las fuentes documentales en que basa sus afirmaciones.Igualmente, existen otras afirmaciones, sin evidencias, de personas que ubican el origen del porro en sitios como El Carmen de Bolívar, San Marcos del Carate y Corozal en Sucre, Momíl y por supuesto San Pelayo en Córdoba. Con respecto a este último, el historiador Orlando Fals Borda, cuya sapiencia y celo científico está fuera de toda duda, manifiesta: “El porro pelayero nació en 1902, en la plaza principal del pueblo, detrás de la iglesia y debajo de un palo de totumo”.3 De todos modos, para la primera década del siglo XX, en la Costa Atlántica, tanto el porro como el fandango y la cumbia eran ritmos establecidos tocados por las bandas de vientos, con trompetas, clarinetes, bombardinos, bombo, redoblante, platillos. Los intérpretes eran gentes de la localidad, generalmente hombres de origen social humilde, músicos de tiempo parcial contratados por terratenientes, políticos y, en general, miembros de las élites, para fiestas y eventos específicos.En las bandas de vientos, populares de la Región Caribe de Colombia, se interpretan dos tipos o modalidades del ritmo porro: el palitia’o y el tapa’o, aunque algunos músicos y folklorólogos no están de acuerdo con estos conceptos. La diferencia entre uno y otro radica más que todo en la forma como se organizan las partes o secciones de las composiciones. O sea, en la estructura de las obras. Características del porro palitia’o ● Más común en las bandas campesinas del Departamento de Córdoba, llamado también porro pelayero o sinuano. ● Basado en la improvisación ● Inicialmente sin arreglos. No se escribía ● Posee estructura particular ● Ritmo lento, cadencioso.- Estructura del porro palitia’o La mayoría de los porros palitia’os más conocidos tienen la siguiente estructura: ● Danza introductoria: Es la parte inicial del tema, y no tiene ritmo de porro, sino que parece ser derivado del ritmo habanera de Cuba. Generalmente es tocada por toda la banda. No se baila. ● Nexo preparatorio: Es una parte de preparación rítmica y armónica para pasar a la siguiente parte del tema. Algunas obras no la tienen. ● El desarrollo o cuerpo del porro: Es la parte central de la composición. En ella se establece una interacción entre la trompeta(s) y el resto de la banda, a manera de discusión. La trompeta va exponiendo, generalmente improvisando, y la banda responde siempre con la misma respuesta. ● Puente: En esta parte se acaba la discusión y cantan juntos las trompetas, los trombones y los bombardinos. 4 ● La Bozá: En esta parte se calla el bombo, el bombero golpea (palitea) con una baqueta (palito) sobre un accesorio de madera colocado sobre el cuerpo o vaso del bombo. El discurso melódico corre por cuenta de los clarinetes. El redoblante y los platillos sobresalen y el bombardino improvisa sobre el sostén rítmico-armónico que llevan los trombones y el bajo. ● Danza final: después de repetir nuevamente la estructura, a partir del desarrollo del porro, se finaliza con la misma danza introductoria.Un ejemplo de esta estructura la tiene el porro “El Pájaro”. También se debe anotar que existen algunos porros palitia’os famosos que no tienen esta estructura completa, como el caso de María Barilla, La Mona Carolina y Soy Pelayero. Entre los porros tradicionales palitia’os más famosos se encuentran: María Barilla, El Pájaro, El Ratón, El Binde, La Mona Carolina, Soy Pelayero, Sábado de Gloria, El Pilón. Entre los más recientes se encuentran: Río Sinú, La Lorenza, Palo ‘e Corraleja, Malala, Mochila, El Mezazo, La Chepana.- Características del Porro Tapa’o ● Es el más común en la Costa Atlántica Colombiana. Llamado también porro sabanero.● Es conocido no solo en los pueblos sino en los centros urbanos del país. ● Hizo su tránsito rápidamente de las bandas a la orquestas de baile.● No posee una estructura fija. ● Con arreglo ● Siempre ha admitdo texto (letra), aunque no todos la tienen.- A diferencia del palitia’o, el porro tapa’o no tiene una estructura fija, sin embargo, la conformación de sus secciones o partes son productos de la planeación previa del arreglista o compositor, lo cual le facilita realizar, a su acomodo, la instrumentación y la orquestación adecuada (arreglo), para el grupo que lo va a interpretar. Las familias o cuerdas de instrumentos de la agrupación lo pueden interpretar a voces, lo que requiere del uso de elementos armónicos. Al ser interpretado por grupos con cantantes, se le puede poner letra. En la banda, las partes de trompetas son fuertes y abiertas, por lo que el bombo y el resto de la percusión deben sonar duro. Pero en las partes de clarinete, de bombardino o cantante, se debe tocar suave, por lo que el bombero tapa con la 5 mano el parche izquierdo de su instrumento. Por esta razón se le llama porro tapa’o.- Entre los porros tapa’os más famosos se encuentran: Carmen de Bolívar, Sal si puedes, Arturo García, Atlántico, Cosita Linda (versión original), La Butifarra, Mario Jimeno, El Toro Negro, Fiesta en Corraleja, Mata de Caña, El Toro Balay, San Carlos, El Sincelejano, El Barrilete, El Arranca Tetas, y muchos más.Dentro de las bandas de vientos más prestigiosas que han interpretado y difundido el porro están: La Banda Bajera de San Pelayo, La Banda Cereteana, La Nueva Esperanza de Manguelito, La 11 de Noviembre de Rabo Largo, La Banda 19 de Marzo de Laguneta, La Banda Juvenil de Chochó, La Banda San Juan de Caimito, La Súper Banda de Colomboy, entre otras.En la década de los 40’s, el ritmo porro paso a las orquestas de baile de los centros urbanos, especialmente en Cartagena, Barranquilla, Medellín y Bogotá. Con la llegada de la industria discográfica, en esa época, este ritmo adquirió mucho prestigio y de la mano de grandes artistas y compositores como los maestros Lucho Bermúdez (con Matilde Díaz), Pacho Galán, Luis Carlos Meyer, entre otros, conquistó el corazón de los colombianos y rebasó las fronteras patrias y llegó a los más importantes escenarios de países como Argentina, Venezuela, Panamá, Cuba, Méjico, Estados Unidos. Las orquestas venezolanas Billo’s Caracas Boys y Los Melódicos tuvieron muchos éxitos con las grabaciones de los porros colombianos. En conclusión, es claro que el porro es un ritmo musical colombiano que está incluido en varios géneros musicales del país, tales como el género de bandas folclóricas, el género tropical, el género vallenato…No existen investigaciones rigurosas que muestren un sitio y un período específico donde se originó este ritmo musical. A pesar de ser las bandas populares quienes más han difundido este ritmo, fueron las orquestas tropicales, de la década de los 50’s en adelante, quienes llevaron el porro a su máximo esplendor, logrando traspasar las fronteras nacionales. En las bandas de vientos populares se interpretan dos modalidades del ritmo porro: el palitia’o, sinuano o pelayero y el tapa’o.- 6