Ficha Técnica N°05: CONDUCCIÓN SEGURA El aumento del parque vehicular, los trabajos en las vías, el cruce sorpresivo de peatones, las condiciones climáticas y los días conflictivos, entre otros, son un constante peligro al conducir vehículos hoy en día a lo largo del país. Por este motivo en esta ficha de seguridad se quieren entregar algunos consejos para tener presente antes y durante la conducción de vehículos en la jornada laboral. CONDUCCIÓN A LA DEFENSIVA USO DE CINTURÓN DE SEGURIDAD • Respeta las normas del tránsito vigentes y las indicaciones de la autoridad. • Mantén una distancia apropiada con el vehículo que te antecede. • Usa siempre el cinturón de seguridad y solicita a tus acompañantes que también lo usen. • Adopta una actitud amable hacia los otros usuarios de la vía, no dejes que un mal rato o una discusión te ocasionen un accidente. • Intenta reconocer el peligro y piensa anticipadamente lo que podría pasar. • Nunca efectúes maniobras peligrosas, podrías ser el causante de un accidente y de lesiones graves e incluso con resultados fatales. • No hables por celular mientras conduces. Asociada a las 10 reglas de oro EQUANS • Recuerda que debes tener siempre ambas manos en el volante. • Mantente siempre alerta sobre las maniobras de otros conductores. • Intenta hacer contacto visual con ellos para advertir sus intenciones de movimiento. • Detén el vehículo y desciende de él sólo en lugares aptos y seguros. Es la herramienta más eficaz en la prevención de consecuencias de accidentes de tránsito. Una persona que sale proyectada fuera del vehículo tiene 5 veces más probabilidades de morir en un accidente de tránsito. La causa de esta situación es porque al estar en el interior del vehículo, sus ocupantes se desplazan a la misma velocidad que el automóvil. En consecuencia al detenerse el vehículo sus ocupantes siguen viajando a esta velocidad chocando con el parabrisas. Un golpe de este tipo a 50 Km/Hr. equivale a caer de boca desde un segundo piso de un edificio. INSPECCIÓN DEL VEHÍCULO Se debe realizar una verificación diaria de al menos los siguientes componentes del móvil: Luces, Neumáticos. Espejos. Parabrisas. Limpia parabrisas. Niveles de agua, aceite, etc. Carrocería. Batería. Frenos. Motor. Sistema de escape. Amortiguador. Luz y placa patente CONDUCCIÓN SEGURA EN CONDICIONES CLIMÁTICAS ADVERSAS Al trasladarse y conducir un vehículo con lluvia, hielo o nieve, es importante conocer los peligros que se presenten, y adoptar las medidas preventivas necesarias. En condiciones climáticas adversas es indispensable que el conductor: • Preste más atención a la ruta y al vehículo. • Revise adecuadamente llantas, limpiaparabrisas, frenos y luces antes de partir. • Disminuya la velocidad ante las primeras señales de clima adverso en el camino. La lluvia La nieve La lluvia puede influir negativamente en la conducción dado que moja las calzadas y las cubre de una capa de agua que las hace peligrosamente deslizantes. Cuando caen las primeras gotas de lluvia, hay que tener mayor precaución, porque al mezclarse el agua con el polvo o el aceite que se encuentra en el asfalto, la calzada se torna muy resbaladiza, lo que representa un serio peligro para la seguridad de la circulación En estas circunstancias, los neumáticos desgastados son incompatibles con una conducción segura, ya que al no tener surcos suficientemente profundos no se “agarran” bien y el vehículo puede patinar y derrapar. Además, se reduce la visibilidad. Con nieve se reduce la adherencia de los neumáticos, disminuye el roce y, por tanto, hay peligro de deslizamiento. También se reduce la visibilidad. Cuando la nieve se congela o lleva tiempo en la calzada y se ha endurecido y apretado, sus efectos son similares a los del hielo. Cuando caen los primeros copos de nieve, la conducción es tan peligrosa como cuando caen las primeras gotas de agua, porque, al mezclarse la nieve con el polvo, el aceite y otros restos, y ser pisada por los vehículos, se forma un barrillo que transforma el pavimento en una pista sumamente deslizante. El hielo El viento El hielo es muy peligroso, porque hace que la calzada se torne sumamente resbaladiza y la convierte en una verdadera “pista de patinaje” donde la prudencia, la pericia y los reflejos del conductor se ponen a prueba, por lo que deberá extremar las precauciones. El viento fuerte, principalmente cuando en caminos de montaña sopla de lado, es otro riesgo para la conducción, ya que puede provocar la salida del camino o volcamiento del vehículo. La niebla La conducción en condiciones de niebla requiere precauciones especiales para circular seguro. La visibilidad puede reducirse drásticamente y las posibilidades de un choque de alcance se multiplican.