I NTENCIONES

INTENCIONES
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** Están hechas con el orden del Documento y no para ser dichas tal cual aparecen.
1. Para que este Año de la Fe nos introduzca más profundamente -a través de la Puerta de la
Fe- en la comunión con Dios y los hermanos. Oremos.
2. Para que cada vez más dejemos transformar nuestro corazón por la Gracia recibida en el
Bautismo. Oremos
3. Para que el camino de la FE que comenzó con nuestro Bautismo, culmine felizmente en la
Vida Eterna. Oremos
4. Recemos para que profesar nuestra Fe en la Trinidad: Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu
Santo, nos ayude a creer en un solo Dios que es Amor. Oremos
5. Para que este año, redescubriendo el camino de la Fe, renovemos la alegría y el
entusiasmo de nuestro encuentro con Cristo. Oremos
6. Para que renovando nuestra Fe en Cristo nos pongamos en camino para rescatar a los
hombres del desierto en que viven y los ayudemos a encontrar una Vida más plena.
Oremos
7. Para que renovemos nuestra Fe, y así la sal recibida no se vuelva insípida y la luz encendida
no permanezca oculta. Oremos
8. Para que en este Año Santo de la Fe, redescubramos el gusto de alimentarnos con la
Palabra de Dios y el Pan de Vida. Oremos
9. Para que volvamos a experimentar, personal y comunitariamente, la fuerza y la belleza de
profesar públicamente nuestra Fe. Oremos
10. Por toda la Iglesia, para que este Año de la Fe, sea un tiempo de especial reflexión y
redescubrimiento de lo que creemos. Oremos
11. Por el Papa y los Obispos reunidos en el Sínodo, para que encuentren nuevos caminos en la
evangelización y la transmisión de la Fe cristiana. Oremos
12. Para que este Año de la Fe sea un momento solemne en el que toda la Iglesia realice una
auténtica y sincera profesión de la misma Fe. Oremos
13. Para que la Fe Cristiana sea confirmada durante este Año de manera individual y colectiva,
libre y consciente. Oremos
14. Para que la Fe Cristiana sea confirmada durante este Año de manera interior y exterior,
humilde y franca. Oremos
15. Pidamos para que toda la Iglesia adquiera una exacta conciencia de su Fe, a fin de
reanimarla y purificarla. Oremos
16. Pidamos para que toda la Iglesia adquiera una exacta conciencia de su Fe, a fin de
confirmarla y confesarla públicamente. Oremos
17. Para que los contenidos esenciales de nuestra Fe sean confirmados, comprendidos y
profundizados de manera siempre nueva. Oremos
18. Para que profundizando de manera siempre nueva los contenidos esenciales de nuestra Fe
demos un testimonio más coherente ante las nuevas condiciones históricas en que vivimos.
Oremos
19. Para que redescubramos en las enseñanzas del Concilio Vaticano Segundo una brújula
segura que nos oriente en el camino del nuevo siglo que transitamos. Oremos
20. Para que el testimonio ofrecido ante el mundo por nuestra vida de creyentes haga
resplandecer la Palabra de Verdad que el Señor nos dejó. Oremos
21. Para que en este Año de la Fe todos nos sintamos invitados a una auténtica y renovada
conversión al Señor, único Salvador del mundo. Oremos
22. Para que la Fe recibida el día del Bautismo modele cada vez más nuestros pensamientos y
afectos, nuestra mentalidad y nuestro comportamiento en medio del mundo. Oremos
23. Para que la Fe recibida el día de nuestro Bautismo actúe cada vez más movida por el amor.
24. Para que la Fe recibida el día de nuestro Bautismo se convierta en un nuevo criterio de
pensamiento y acción que cambie toda nuestra vida. Oremos
25. Para que celebrando el Año de la Fe alcancemos un compromiso eclesial más convencido
en favor de una nueva evangelización. Oremos
26. Para que celebrando el Año de la Fe redescubramos la alegría de creer y renovemos
nuestro entusiasmo de comunicar la Fe. Oremos
27. Para que nuestra Fe siga creciendo como experiencia de un Amor recibido que nos llena de
alegría. Oremos
28. Pidamos por todos los que buscan a Dios con un corazón sincero, para que encuentren el
sendero justo y puedan acceder a la “puerta de la Fe”. Oremos
29. Para que nuestra Fe siga creciendo y se fortalezca, abandonándonos cada vez más en la
manos del Amor de Dios. Oremos
30. Para que todos los creyentes nos unamos al Sucesor de Pedro en este tiempo de Gracia
espiritual, para rememorar agradecidos el don precioso de la Fe. Oremos
31. Para que celebremos este Año de la Fe de manera digna y fecunda, ayudando a los
creyentes en Cristo a una adhesión al Evangelio más consciente y vigorosa. Oremos
32. Para que intensificando la reflexión sobre nuestra Fe, realicemos una adhesión al Evangelio
de Cristo más consciente y vigorosa, en este momento en que la humanidad vive un
profundo cambio. Oremos
33. Para que en este Año de la Fe sintamos la exigencia de conocer y transmitir mejor a las
generaciones futuras la Fe recibida en el Bautismo. Oremos
34. Para que aceptando la invitación del Papa, las comunidades religiosas, las parroquias y
todas las familias creyentes, encuentren formas de profesar públicamente la Fe. Oremos
35. Para que este Año de Gracia aprovechemos la hermosa oportunidad de confesar la Fe en
el Señor Resucitado en nuestras Catedrales e iglesias del mundo, en nuestras casas y con
nuestras familias. Oremos
36. Para que este Año de la Fe suscite en todo creyente la aspiración a confesar la Fe con
plenitud y renovada convicción. Oremos
37. Para que este Año de la Fe suscite en todo creyente la aspiración a confesar la Fe con
renovada esperanza y confianza. Oremos
38. Para que en este Año de la Fe encontremos una ocasión propicia para intensificar la
celebración de la Fe en la Eucaristía, cumbre a la que tiende la acción de la iglesia y fuente
de donde brota su fuerza espiritual. Oremos
39. Para que renovando y purificando nuestra Fe durante este Año, nuestro testimonio de vida
sea cada vez más creíble. Oremos
40. Para que en este Año de la Fe convocado por el Papa, cada creyente asuma como propio el
compromiso de redescubrir los contenidos de la Fe profesada, celebrada, vivida y rezada.
Oremos
41. Para que en este Año renovemos con mayor conciencia el acto de Fe con el que decidimos
entregarnos totalmente y con plena libertad a Dios. Oremos
42. Para que profesar nuestra Fe con la boca implique siempre un testimonio de vida y un
compromiso público. Oremos
43. Para que nunca pensemos que creer es un hecho privado, sin un compromiso social de lo
que creemos. Oremos
44. Para que durante este Año redescubramos que la Fe es decidirse a estar con el Señor para
intentar vivir públicamente como Él. Oremos
45. Pidamos el don del Espíritu Santo para anunciar a todos sin temor la propia Fe. Oremos
46. Pidamos el don del Espíritu Santo para que fortalezca nuestro testimonio en el mundo,
haciéndolo franco y valeroso. Oremos
47. Para que experimentemos que la profesión personal de nuestra Fe es al mismo tiempo
comunitaria con nuestros hermanos. Oremos
48. Para que este Año profundicemos el conocimiento de los contenidos de nuestra Fe, para
adherir más plenamente con la inteligencia y la voluntad a lo que propone la Iglesia.
Oremos
49. Pidamos por todos los que buscan con sinceridad el sentido último de su existencia y del
mundo, para que puedan entrar por la puerta de la Fe. Oremos
50. Pidamos para que todos encuentren a Aquél que no buscarían si Él no hubiera venido a
buscarnos. Oremos
51. Para que en este Año de la Fe encontremos en el Catecismo de la Iglesia Católica una regla
segura para el fortalecimiento de nuestra Fe. Oremos
52. Para que este Año de la Fe sea un estímulo para redescubrir y estudiar los contenidos
fundamentales de nuestra Fe, sintetizados en el Catecismo de la Iglesia Católica. Oremos
53. Para que redescubramos que nuestra Fe Católica no es una teoría, sino el encuentro con la
Persona de Cristo, que vive en la Iglesia. Oremos
54. Para que el fruto de este Año de la Fe sea creer más y evangelizar mejor. Oremos
55. Pidamos durante este Año de la Fe la gracia de tener la mirada fija en Jesucristo: en Él
encuentra cumplimiento todo anhelo del corazón humano. Oremos
56. Pidamos durante este Año de la Fe mantener nuestra mirada fija en Jesucristo, para seguir
encontrando en Él la alegría del amor y la respuesta al sufrimiento y el dolor humanos.
Oremos
57. Pidamos durante este Año de la Fe mantener nuestra mirada fija en Jesucristo, para seguir
encontrando en Él la fuerza del perdón ante la ofensa recibida y la victoria de la Vida ante
el vacío de la muerte. Oremos
58. Para que este Año de la Fe ilumine nuestra vida cristiana con los ejemplos de Fe que
marcaron los dos mil años de nuestra historia de salvación. Oremos
59. Para que durante este año valoremos agradecidos la Fe de los discípulos, que formaron la
primera comunidad reunida en torno a la enseñanza de los Apóstoles, la oración y la
celebración de la Eucaristía, poniendo en común sus bienes para atender las necesidades
de todos. Oremos
60. Para que durante este Año valoremos admirados la Fe de los Mártires en el Evangelio, que
los transformó hasta entregar sus vidas perdonando a sus perseguidores. Oremos
61. Para que este Año valoremos la Fe de tantos hombres y mujeres que han consagrado su
vida a Cristo, dejando todo para vivir en la obediencia, la pobreza y la castidad. Oremos
62. Para que este año valoremos la Fe de tantos cristianos que promovieron acciones en pro
de la justicia y en favor de lo más pobres y oprimidos. Oremos
63. Para que este Año valoremos la Fe de tantas mujeres y hombres de toda edad que han
confesado a lo largo de los siglos la belleza de seguir al Señor Jesús en la familia, la
profesión o la vida pública. Oremos
64. Para que estemos agradecidos de vivir por la Fe, mostrando vivo al Señor Jesús presente
en nuestras vidas y en la historia. Oremos
65. Pidamos que vivir el Año de la Fe sea una oportunidad para intensificar el testimonio de
nuestra caridad cristiana. Oremos
66. Para que como testimonio de la Fe renovada durante este Año, muchos más cristianos
dediquen sus vidas con amor a quiénes están solos, marginados o excluidos. Oremos
67. Para que nuestra Fe, purificada durante este Año, nos ayude a reconocer más fácilmente el
rostro del Señor Resucitado en quiénes necesitan de nuestro amor. Oremos
68. Para que este Año, sostenidos por la Fe, asumamos con renovada esperanza el
compromiso de mejorar nuestro mundo. Oremos
69. Para que este Año de la Fe escuchemos, dirigida a cada uno de nosotros, la invitación a
renovar nuestra Fe. Oremos
70. Pidamos renovar nuestra Fe durante este Año, para que nos permita distinguir con ojos
siempre nuevos las maravillas que Dios hace por nosotros. Oremos
71. Para que renovando nuestra Fe durante este Año nos convirtamos en un signo vivo de la
presencia de Cristo resucitado para bien del mundo. Oremos
72. Para que fortalecida en este Año la mirada de nuestra Fe, percibamos con más claridad los
signos de los tiempos en nuestra historia. Oremos
73. Para que nuestro mundo reciba los que más necesita hoy: un testimonio creíble de los que
fuimos iluminados en la mente y el corazón por la Palabra de Dios. Oremos
74. Para que el testimonio de nuestra Fe renovada ayude a muchos a abrir el corazón y la
mente a Dios. Oremos
75. Para que este Año de la Fe haga cada vez más fuerte nuestra relación de amistad con
Cristo, el Señor de la Vida. Oremos
76. Para que fortaleciendo nuestra relación con Cristo podamos mirar con renovada esperanza
el futuro de la humanidad. Oremos
77. Para que este Año de la Fe haga más fuerte nuestra relación con Cristo, como garantía de
que nuestro amor es auténtico y duradero. Oremos
78. Pidamos la fidelidad para todos los creyentes que en nuestros días son probados por el
silencio de Dios. Oremos
79. Para que se fortalezca en nosotros la certeza de que el Señor Jesús ha vencido el mal y la
muerte. Oremos
80. Para que una Fe renovada durante este Año nos ayude a descubrir en las pruebas de la
vida el misterio de la Cruz Redentora y a participar en los sufrimientos de Cristo. Oremos
81. Confiemos este tiempo de Gracia que es el Año de la Fe, a la Madre de Dios, proclamada
“feliz porque siempre creyó”. Oremos