Foto y Diseño: ARTMIX Fuentes: Grabados antiguos y Mundo Argentino, el cabecita negra. Seminario 1. Clase 3. Movimientos de Revisibilización Afrodescendiente en Argentina (fines del siglo XX-XXI). Foro de discusión. Tercera semana. 1) ¿Qué características tiene el proceso de revisibilización de la población afrodescendiente en la ciudad de Buenos Aires? 2) ¿Cómo caracterizarías la revisibilización de los santiagueños afro? 3) Establece y contextualiza las relaciones entre ambos procesos. Revisibilización afrodescendiente en Buenos Aires Aunque un golondrino no compone verano, me gustaría comenzar mis notas al Foro con el encuentro que tuve ayer con un porteño de algo más de 60 años, al que le comenté acerca de lo afroargentino en busca de respuestas directas. El hombre, al escuchar esta palabra, quedó de una pieza y me contestó, con una seguridad que se desprendía de su rostro: en Argentina no hay negros! En la Argentina, la década de 1990 marcó un antes y un después para los afrodescendientes. Luego de más de un siglo de invisibilización alevosa y premeditada, los movimientos de revisibilización afroargentinos comenzaron a tomar 1 cuerpo desde lo étnico-político y en el camino se fueron integrando otros grupos y asociaciones desde expresiones culturales como la música y el baile. El contexto externo, con el surgimiento de redes transnacionales de movimientos en pro de la revisibilización afro, enfiló sus fuerzas hacia Durban, ciudad sudafricana donde se celebraría, en el año 2001, la Conferencia Mundial contra el Racismo. Un objetivo primordial de estos movimientos afroporteños, afín a los emprendimientos internacionales sobre lo afro y lo afrodescendiente, es revisibilizar los aportes de esta comunidad a la formación y desarrollo de las naciones americanas, que en el caso de la Argentina fue importante (ONU, 2002). En Buenos Aires, como en el resto del continente, la estrategia del blanqueamiento de la sociedad se fundó y se justificó en el miedo al negro, a lo negro, a la negritud. Una forma de expresar el miedo blanco que siempre ha estado latente. Miedo que tomó forma y contenido en los mecanismos de control hegemónico sobre la política, la economía y la cultura de la nación. Ideas que aún se mantienen vigentes en las actuales sociedades latinoamericanas y que en la Argentina se exhibe como trofeo nacional (Alfonsín, Vivi, 2019). La homogeneización de las sociedades en Latinoamérica se arrastra desde las fundacionales nacionales de cada Estado, tras el afán de construir y desarrollar los estados modernos a imagen y semejanza europea. Las élites se encargaron de modelarlo e implementarlo, resultando fuera de su corpus todo lo que no fuera blanco y europeo. Las narrativas multiculturales son tendencia en el mundo actual y los movimientos afroargentinos transitan y se fortalecen a través de tales ideas. Una definición del autor Fernández Bravo (2016) ubica en tiempo y espacio lo afroargentino como: Espacio multilocalizado y de relaciones cambiantes, conformado por instituciones del Estado, redes de afrodescendientes organizados, grupos de población, activistas, agencias de cooperación internacional, estudiantes e investigadores. La Revisibilización, como expresan las autoras Lamborghini, Geler y Guzmán (2017), “es la reivindicación de la presencia afro en el pasado y en la actualidad, y de las contribuciones afrodescendientes a la cultura y la sociedad argentina. La lucha por la promoción social de los y las afrodescendientes (inclusión y ciudadanía igualitaria) y la lucha por la eliminación del racismo en la sociedad.” 2 El camino es largo y tortuoso pero posible, pues todo análisis que se haga del pasado presupone una relación con el mismo y la posibilidad de abordarlo desde el presente. Hurgar en las estructuras políticas, jurídicas, económicas y constitucionales que han sustentado durante tanto tiempo la invisibilización afroargentina. Durante los últimos años, en Buenos Aires se ha puesto en marcha un movimiento diverso y generador de programas pro afrodescendientes con el objetivo de diseñar e implementar políticas públicas, de realizar acciones afirmativas y desarrollar actividades y eventos relacionados con las expresiones artísticas y culturales afrodescendientes (Geler, Lea; et al., 2017). Entre otros, el importante proyecto Certificar nuestra existencia, de naturaleza multidisciplinar (teatro, etnografía e investigación cuantitativa). Estudio realizado por la colaboración entre Todo en Sepia Asociación de Mujeres Afroargentinas (TES) y el Grupo de Estudios Afrolatinoamericanos de la Universidad de Buenos Aires (GEALA), que ha sido pionero en la Argentina al focalizar la investigación en un grupo poblacional que se consideraba ‘desaparecido’, como expresan las autoras, así como por la metodología utilizada. El trabajo, que comenzó en el año 2016 en la población La Matanza, Gran Buenos Aires, tiene como objetivo conocer la vida de las mujeres afrodescendientes en el país, y en este caso las del territorio de esa localidad. Proyecto fundador en Certificar nuestra existencia, la meta fue la introducción de políticas públicas a través de las estructuras gubernamentales que estarían estrechamente relacionadas con los resultados de la investigación (Geler, Lea; et al., 2017). Tal es la actualidad de las creencias sobre la ‘desaparición’ de los afrodescendientes argentinos en el devenir histórico de la nación, que las autoras expresan existen grandes dificultades para obtener información oficial, incluso hasta de dialogar sobre el tema, dado que, la famosa desaparición de esta población debe entenderse como un complejo proceso de erosión de una alteridad interna racializada al estado nacional argentino, conocido como invisibilización ( Geler, Lea; et al., 2017:29). 3 Los datos que existen oficialmente, resaltan las autoras se resumen al Censo del año 2010, que registra una población afrodescendiente en el país de casi 150 mil personas, es decir, un 0,4% sobre el total de argentinos, cuando otras mediciones, por ejemplo la Prueba Piloto de Captación de Población Afro realizada en el año 2005, arrojó resultados de casi el 4% de la población, es decir, 1.8 millones de personas en el país se consideran afrodescendientes. Tal diferencia remite, además de otros factores que pueden haber influído, a la metodología utilizada en el Censo. Por ejemplo, el uso de la palabra afrodescendiente ya que es un vocablo de reciente aparición, así como la elaboración, consensuada con los movimientos y activistas afroargentinos, de cuatro preguntas para abordar el Censo. Dos para determinar la cantidad de afrodescendiente en el hogar y otras dos para conocer si había afrodescendencia en el entrevistado (Geler, Lea; et al., 2017:29). Los resultados del proyecto La Matanza confirman que es necesario seguir enfocados en el objetivo de Certificar nuestra existencia, que es la de visibilizar a la población afroargentina, generar y proponer a los estamentos oficiales herramientas más eficaces en la categorización censal de la población afrodescendiente y promover y participar en el desarrollo de investigaciones y estudios cualitativos y cuantitativos con el objetivo de establecer un diálogo constante con los gobiernos para lograr la aprobación e implementación de políticas públicas en beneficio de las mujeres afroargentinas, las de mayor invisibilización en toda la sociedad. Revisibilización afrodescendiente en Santiago del Estero El proceso de revisibilización rural de los afrodescendientes en la Argentina difiere del que se desarrolla en el Buenos Aires metropolitano, pues no solo está estrechamente relacionado al contexto actual de la provincia de Santiago del Estero y las necesidades apremiantes de su población, principalmente de las comunidades que viven semiaisladas por la pésima estructura vial, el desempleo y la falta de agua potable, sino porque a su vez todo se engarza en la cuestión nacional argentina, es decir, en la esencia misma de la fundación del Estado-Nación (Fernandez Bravo, Nicolás J., 2014). Según nos cuenta el profesor Fernández Bravo (2014), al analizar las relaciones de clase y raza presentes en la conformación de la sociedad nacional, la 4 visión porteña afincó su mirada en un ente simbólico nacional a semejanza del europeo blanco y moderno, que emigró por millones al continente tras las políticas de blanqueamiento que diseñaron e implementaron las élites criollas latinoamericanas tras sus independencias. Una herramienta clave que utilizó el poder blanco para invisibilizar lo no-europeo fue la homogeneización. Visión modernista que esconde la diferencia y que en el caso argentino, dejaba por fuera al cabecita negro. El arquetipo del ser rural argentino. Como expresa la autora Guber (1999) fue a la ciudad-puerto de Buenos Aires, adonde confluyeron los mayores contingentes migratorios ultramarinos de blancos italianos, españoles, rusos y polacos. Contingentes que poblaron mayormente al Gran Buenos Aires, al que también arribaron, desde la década de 1930 y sin estar invitadas, las oleadas de los cabecitas negras del interior argentino en busca de trabajo. Fue un shock para las clases medias y altas, las cuales no los concebían dentro de ‘su nación’ (Guber, Rosana, 1999:10-11). Pero en la Argentina rural las cosas no eran tanto así, pues el imaginario social distaba un tanto del porteño. Tanto, que Fernández Bravo (2014) expresa que es lo opuesto al del Gran Buenos Aires y que en dicha polarización es que se ha construido la idea de la afroargentinidad. A partir del encuentro frontal de ambos imaginarios en las décadas de 1940 y 1950, época en que el desarrollo del país demandó una gran fuerza de trabajo en las ciudades, del interior del país arribó el cabecita negra. Los espacios con mayor presencia afrodescendiente en el interior del territorio argentino son las provincias del noreste y el nordeste del país, por su presencia en la ruta del comercio trasatlántico de esclavos, tanto legal como ilegal. La ciudad de Santiago del Estero fue fundada en 1535 como uno de los puntos importantes en la Carrera de Postas o Camino Real al Alto Perú, que comunicaba Buenos Aires con Lima. Como el esclavizado era un producto más del comercio, los puntos importantes concentraban el mayor volumen de intercambio de la ‘mercancía africana’, en un proceso donde Buenos Aires era el último de la fila antes del año 1776 en que se convirtió en Virreinato y autorizada al comercio libre trasatlántico dos años después, por ende pasó a ser el centro del comercio del territorio (Rosso, Inés y Toledo López, Virginia, 2010). 5 En este contexto, según expresan las autoras, y cito (Rosso, Inés y Toledo López, Virginia, 2010:7-8): ... la Argentina se integra al área mercantil inglesa y surge así, en la llanura pampeana, un desarrollo ganadero que respondía a esta necesidad de abrirse a la oferta y a la de formar un área de monocultivo según las necesidades de la demanda. La modificación del centro dinamizador de la economía colonial impactó positivamente en la región del Litoral, por el contrario, las economías del Interior productoras de bienes que competían con las importaciones, comenzaron a sufrir una profunda crisis. A pesar del decrecimiento socioeconómico del territorio por la nuevas condiciones geopolíticas, los trabajos agrícolas, domésticos y de construcción siguieron encabezando el mercado laboral santiagueño, desde que en la colonia la provincia de Santiago del Estero se convirtió en importante productora y proveedora de los textiles que necesitaba Potosí, hasta finales del siglo XIX en que la dinámica producción de azúcar de caña en Tucumán generó el desarrollo del ferrocarril y con ello la tala de árboles para la construcción de los caminos de hierro. Pero, ¿dónde estaban los afrodescendientes en toda esta historia, calculando que la población negra de la provincia de Santiago del Estero para 1776, tanto en la ciudad como en el campo, sobrepasaba a la de blancos e indios? Para el año 2010, cuando el negro volvió a reaparecer en el Censo nacional desde que fue sacado en el siglo XIX, solo el 1.7% de los habitantes de Santiago del Estero se declararon afrodescendientes. Una cifra que se resiste a la lógica común. La cultura de la negritud, según expresan varios autores (Fernandez Bravo, Nicolás J., 2014; Rosso, Inés y Toledo López, Virginia, 2010 y Lamborghini, Eva; Geler, Lea y Guzmán, Florencia, 2017) pertenece por derecho propio a la memoria colectiva de los santiagueños. Detrás de la invisibilización existe el mito, el discurso ideológico nacional, la desaparición de las categorías censales que lo identifican, la mezcla étnica desde el mismo siglo XVI y la movilidad social de las poblaciones. Factores que contribuyeron en diferentes medidas a la desaparición del negro del cuerpo nacional argentino. Los cabecitas negras de Santiago del Estero y su pasado afrodescendiente 6 En el año 2010, las autoridades censales argentinas incluyeron la categoría afrodescendiente en el Censo de población, un logro de los movimientos de revisibilización liderados por la profesora Eva Lamborghini. Aunque los resultados del Censo no arrojaron los datos esperados, el hecho marcó una pauta legal para la comunidad afrodescendiente del país. De hecho, un grupo de personas que se definían como afrodescendientes se dieron a la tarea de promocionar la riqueza cultural de los pueblos africanos y sus descendientes entre periodistas, funcionarios del gobierno provincial e investigadores. Leyendas, mitos, danzas y otras formas de cultura de sus ancestros fueron tomando forma en las familias rurales, lo que generó un punto de partida identitario que los condujo participar en acciones públicas y a interactuar con otros movimientos afrodescendientes de la capital federal e internacionales (Fernandez Bravo, Nicolás J., 2014). Desde ese punto, es decir, del autorreconocimiento como motor impulsor de sus demandas, los santiagueños afrodescendientes comenzaron a actuar por su revisibilización en la sociedad. En este contexto, la importancia de lo logrado por el equipo liderado por Eva Lamborghini fue la semilla jurídica que impulsó el espectacular movimiento de revisibilización afrodescendiente argentino de las últimas tres décadas. Pero como afirma Fernández Bravo (2014), este proceso conlleva una gran complejidad, pues se trata de situaciones en que las personas luchan contra adversidades acumuladas a través de siglos, r ecomendando como ámbito privilegiado para interpretar el pasado de los descendientes de personas esclavizadas, y el futuro de los afrodescendientes en todo el mundo. El descubrimiento de África y sus diásporas está por venir aún, pues aunque el continente está de moda y es tendencia en la actualidad, los objetivos que persiguen los cada vez más interesados proveedores financieros internacionales y los pentimentos que esconden gobiernos y corporaciones transnacionales, son los mismos de hace medio milenio: sus recursos constantes y sonantes. Desde la megaoperación europea que resultó ser el comercio trasatlántico de esclavos y que sustentó, literalmente, el desarrollo de la revolución industrial que finalmente llevó al primer mundo occidental a convertirse en el centro del mundo, hasta los cinco siglos en que los ritmos africanos han puesto a bailar y a gozar a la 7 toda la humanidad, África y sus diásporas han sido esclavizadas, esquilmadas y negadas en el devenir. Diseño: ARTMIX Referencias Alfonsín, Vivi (2019). ¿Somos o no somos?. Contra el racismo. Hypermedia Magazine. Consultado en el sitio web, 9 de diciembre de 2019. https://www.hypermediamagazine.com/dosieres-hm/contra-el-racismo/racism o-somos-o-no-somos/?fbclid=IwAR0aSLfbhsMUmiorCpTK_KG2Vz3kBCTvd6 VBZ1jeu7uKhgOXVi1GYvStQLc Fernandez Bravo, Nicolás J (2014). El regreso del cabecita negra. Ruralidad, desplazamiento y reemergencia identitaria entre los santiagueños “afro”. XI Congreso Argentino de Antropología Social, Rosario. https://www.aacademica.org/000-081/48 Geler, Lea; Egido, A.; Recalt, R. y Yannone, C. (2017). Mujeres afroargentinas y el proyecto Certificar nuestra existencia. Una experiencia de trabajo multidisciplinar en Ciudad Evita (Gran Buenos Aires). Revista Población & Sociedad, VOL. 25, NÚM. 2 (2018). Facultad de Ciencias Humanas, Universidad Nacional de La Pampa. ISSN: 1852-8562. www.cerac.unlpam.edu.ar 8 Guber, Rosana (1999). El Cabecita Negra O Las Categorías De La Investigación Etnográfica En La Argentina. Revista de Investigaciones Folklóricas, 1999. Consultado en Academia.edu, 13 de diciembre de 2019. https://www.academia.edu/296627/_El_Cabecita_Negra_O_Las_Categor%C 3 %ADas_De_La_Investigaci%C3%B3n_Etnogr%C3%A1fica_En_La_Argentina Lamborghini, Eva; Geler, Lea y Guzmán, Florencia (2017). Los estudios afrodescendientes en Argentina. Nuevas perspectivas y desafíos en un país sin “razas”. Tabula Rasa. 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