La Guerra de independencia de Hispanoamérica, Guerra de independencia en América hispana o Guerra de independencia en América Latina, se inició entre 1808 y 1810 con la formación de las juntas de gobierno autónomas en las antiguas posesiones coloniales de España en América como consecuencia directa de la ocupación francesa de la península Ibérica y las abdicaciones de Bayona. Las colonias en el continente americano inicialmente declararon su lealtad al depuesto rey español, pero de inmediato se comenzaron a formar movimientos secesionistas que culminaron entre 1819 y 1824 con la independencia absoluta de los territorios hispanoamericanos. En octubre de 1807 los franceses y los españoles invadieron conjuntantamente Portugal, y para tal efecto se permitió el paso del ejército napoleónico por el territorio español. Pero una vez conquistada Portugal los franceses volvieron su mirada a España donde establecieron una ocupación de facto. El 2 de mayo de 1808 ocurrió el levantamiento de los españoles en Madrid contra la invasión francesa. El 5 de mayo los reyes Carlos IV y su hijo Fernando VII fueron obligados a renunciar al trono en las abdicaciones de Bayona para cederlo al hermano de Napoleón Bonaparte con el objetivo de establecer un Estado satélite. Los franceses intentaron imponer su autoridad en España sobre las posesiones coloniales en América. Pero una vez que las noticias de la invasión francesa llegaron al nuevo mundo se establecieron juntas de gobierno autónomas en respaldo al despuesto rey español Fernando VII, que pronto se convirtieron en proclamaciones y movimientos por la independencia absoluta. España enfrentó internamente su propia Guerra de la Independencia Española entre 1808 y 1814, pero paralelamente (y después de finalizada) intentaron sofocar las insurrecciones americanas. El proceso de descolonización de América se inició en 1765 con el estallido de la Revolución estadounidense, extendiéndose luego a lo largo y ancho del continente, hasta que los últimos ejércitos europeos fueron finalmente derrotados en la Batalla de Pichincha en Ecuador (1822) y la Batalla de Ayacucho en Perú (1824).