Elige tu modelo (Ejemplo personal) ELIGE TU MODELO: (Ejemplo Personal) Introducción: ¿Cuántas personas levantarán su mano para decir, ‘Pastor, me doy cuenta de que Dios me ha dado habilidades y recursos especiales, y levanto mi mano para testificar que Dios es la fuente de todo don bueno y perfecto’? Quiero leerles algo: La Mayordomía Es una Elección. Dios me ha dado habilidades y recursos especiales para ayudarme a llegar a ser la persona que Él desea que yo sea. Esto es Su don para mí. Yo debo elegir manejar estas habilidades y recursos para Su gloria y no la mía. Esto es mi don para Él. Ahora, no me pregunto si Dios nos dará las habilidades y recursos necesarios. Esto no me preocupa nada. Dios ya ha cumplido con Su parte. Lo que si me preocupa este mes al examinar algunos ejemplos bíblicos de mayordomos buenos y malos es esto, ¿qué estamos haciendo con los recursos ya recibidos? Por ende el tema, La Mayordomía Es una Elección. Cada persona presente hoy ha sido bendecida por Dios, todos tenemos recursos a la mano. La pregunta es, ¿Cómo vamos a responder a Sus bendiciones? Ahora, todos hemos recibido diferentes recursos y habilidades. No tenemos los mismos talentos, ni tenemos los mismos intereses. Somos diferentes. Dios nos ha dado dones. ¿Qué haremos con ellos? En la separata que han recibido hoy, se encuentra la definición de la Mayordomía: “Es el manejo de los recursos míos provenientes de Dios, para Su gloria y el bienestar de otros.” Hay tres perspectivas diferentes en cuanto a las posesiones: El Comunismo dice que somos instrumentos del Estado y que el individuo no tiene ningún derecho a la propiedad privada. El Capitalismo dice que todo lo que un hombre pueda comprar y controlar, le pertenece. El Cristianismo dice que Dios es dueño de todo. Lo que tengo no es mío, es algo prestado. (John Maxwell) Muchos son como el niño malcriado de los tiras cómicas que se acercó al pastor después del culto para preguntarle qué iba a hacer con los diez soles que su padre había echado en la 1 Elige tu modelo (Ejemplo personal) ofrenda. Él piensa igual como muchos de nosotros, que el dinero es nuestro. No sólo lo que pones en la ofrenda pertenece a Dios, pero lo que queda en tu bolsillo también le pertenece. Todo le pertenece. Algunos piensan que Dios es dueño del 10%, y que ellos son los dueños del 90%. ¡De ninguna manera! Todo le pertenece. ¿Amén? CUATRO MODELOS BÍBLICOS DE LA MAYORDOMÍA Hoy vamos a echar un vistazo a cuatro modelos bíblicos del mayordomo. Dos ejemplos son loables y dos son ejemplos malos de lo que se hace con los recursos divinos que tiene a la mano. En Lucas 12 encontramos el primer modelo, un modelo negativo: 1. EL MAYORDOMO QUE HACE POCO CON MUCHO. Son aquellos que han recibido muchas bendiciones de parte de Dios, sin embargo hacen muy poco con ellas. Cuatro Observaciones Iniciales: 1. El “Yo” recibió la primera consideración. Se consideró, ¿Qué hay para mí? 2. Cada uno tenía la oportunidad de ayudarle a otro. Aunque tenía recursos, optó por guardárselos sin ayudar a nadie. 3. Cada uno tomó una decisión equivocada. 4. Cada uno pagó por su decisión equivocada, pagó el precio. Empecemos con la parábola del Rico Insensato en Lucas 12:16-21 (Leer 12:16-21 haciendo énfasis en los pronombres personales). El hombre cometió un grave error, pensó que todo lo que tenía le pertenecía, “¿Qué haré con mis posesiones?” No tenía que guardarlo todo. Tenía la oportunidad de ayudar a otros. Hubiera podido dar a los pobres, a los necesitados. Hubiera podido avanzar el Reino de Dios. Dios no le llamó “necio” hasta después de haberse tomado la decisión tonta. Sólo después de tomar la decisión Dios le dijo que “venían a pedirle su alma.” Creo que hubiera sido posible usar sus bienes para la gloria de Dios, y que Dios le hubiera dicho “Bien hecho.” En vez de quitarle la vida esa noche creo que hubiera tenido una larga vida, gozándose de las bendiciones repartidas a muchas otras personas. Pero era un necio porque aunque tenía mucho, hizo poco con ello. 2 Elige tu modelo (Ejemplo personal) En Lucas 16, hay otro hombre que hizo poco con mucho (Leer 16:1931). Es un relato similar. Uno tenía mucho pero echado a su puerta había otro con poco. Sin embargo, en la vida venidera se cambia la situación. Y ahora el rico desea que sus hermanos escuchen un mensaje sobre la mayordomía, tal como el mensaje de hoy. Ellos necesitan escucharlo. Hay otro ejemplo similar en Marcos 10:17, de un joven que deseaba ser discípulo del Señor. Era un hombre admirable, hacía muchas cosas loables (Leer Marcos 10:17-25). Déjenme decirles por qué es difícil para una persona rica entrar en el Reino de Dios. Hay dos tentaciones: la primera es que tiene muchas opciones, y en este mundo tentador a menudo se escoge la opción equivocada. La segunda es que tiene demasiado control. A los ricos les cuesta someterse al señorío de Jesucristo, les cuesta dejarlo todo en las manos de Dios. Ahora algunos de Uds. se sienten muy cómodos. El mensaje les cae muy bien. Están pensando, “Amén, pastor. Dales duro a los ricos. Ellos tienen tanto y deben de estar compartiéndolo con nosotros.” Pero esperen un momento. Pronto llegaré a Uds. Pasemos al segundo modelo: 2. EL MAYORDOMO QUE HACE MUCHO CON POCO. Tal vez el mundo desprecie a las cosas pequeñas pero no nuestro Señor. No desprecia ni el “vaso de agua fría” dado en Su nombre ni “las dos blancas” echadas en el arca de ofrenda por la viuda. Dios observa las acciones pequeñas y bendice al que hace mucho con poco. En Hebreos 6:10 dice que “Dios no es injusto para olvidar vuestra obra y el trabajo de amor que habéis mostrado hacia Su nombre, habiendo servido a los santos y sirviéndolos aún.” Dios no pasa por alto lo que hacemos. En Juan 6 tenemos el ejemplo de alguien que hizo mucho con poco. Es el relato del muchacho que con cinco panes y dos pescados dio a comer a una multitud. Ese relato se encuentra en todos los Evangelios y es una muestra loable de alguien que hizo mucho con poco (Leer Juan 6:5-13). Aun uno de los discípulos de Jesús despreció el almuerzo del muchacho diciendo, “¿Qué es esto para tantos?” Hay dos tentaciones para la persona que no tiene mucho referente a la mayordomía. En primer lugar: apenas hay suficiente para las 3 Elige tu modelo (Ejemplo personal) necesidades nuestras. Nos tienta ser mayordomos malos cuando tenemos poco porque pensamos, “¿cómo puedo ayudar a los demás cuando apenas satisfago mis propias necesidades?” Es una tentación común para los que tienen poco. Una segunda tentación que nos impide ser mayordomos fieles es pensar que “Lo poco que tengo no ayudará en nada a un mundo tan necesitado.” Nos quedamos frustrados frente a las necesidades tremendas en el mundo. Debido a estas dos razones los que tienen poco muchas veces son mayordomos infieles. Déjenme hacerles una pregunta, ¿hay algunos matemáticos con nosotros hoy? ¿Cuánto dinero es 48 seguido por 17 ceros en dólares? Se ha calculado que si la viuda que tenía las dos blancas las hubiera depositado en el Banco de Jerusalén en vez de echarlas en el arca de ofrenda, con los intereses actuales hubiera tenido hoy la suma mencionada arriba. Ahora, si el mundo puede tomar una suma pequeñísima y convertirla en una suma tremenda, cuánto más Dios con lo poco nuestro en el Reino del Cielo. (John Maxwell) En 1858, un profesor de la escuela dominical, un Sr. Kimbel, guió a un joven empresario a los pies de Cristo. Su nombre era D.L. Moody. Se convirtió en evangelista y en 1879 despertó el celo evangelístico de un pastor de una Iglesia pequeña de Inglaterra. El pastor se llamaba F.B. Meyer. El Sr. Meyer predicó en una universidad americana y un alumno, J. Wilbur Chapman, aceptó a Cristo. Chapman comenzó a trabajar con jóvenes y asignó a un antiguo deportista, Billy Sunday, como evangelista. Sunday llevó a cabo una campaña evangelística en Carolina del Norte y los que asistieron se quedaron tan entusiasmados que planearon otra campaña en donde Mordecai Ham predicó. En esa campaña se convirtió el joven Billy Graham, quien ha predicado por todo el mundo. El Sr. Kimbel ya está en el cielo. Y un día Dios nos va a pasar el vídeo de su vida. Comenzó testificando a un joven en una tienda de zapatos, pero terminó predicando al mundo entero por medio de su testimonio. Esto es lo que sucede cuando un mayordomo utiliza lo poco que tiene para hacer mucho. Ahora tenemos otro modelo negativo: 3. EL MAYORDOMO QUE HACE POCO CON POCO. En Mateo 25 se encuentra la parábola del siervo quien recibió un sólo talento antes de que su señor prendiera viaje (Leer Mateo 25:24-30). 4 Elige tu modelo (Ejemplo personal) Hay cuatro observaciones en cuanto a la persona que hace poco con poco: 1. Hay que rendirle cuentas a Dios no importa la cantidad de talentos recibida. Hay la tendencia de pensar que debido a que recibimos pocos talentos o bendiciones de parte de Dios que no es necesario rendirle cuentas. No es cierto. Después del viaje, el señor hizo llamar a los tres siervos que habían recibido cantidades diferentes de talentos pero les hizo la misma pregunta. Y la recompensa correspondía a los talentos recibidos y la fidelidad mostrada. 2. Dios espera que multipliquemos los talentos recibidos. El no desea que sencillamente guardemos lo que hemos recibido para después devolvérselo. El espera que utilicemos los dones, talentos y habilidades recibidos con el fin de aumentar y ampliar lo recibido. 3. El pecado de no hacer nada es un pecado grande ante los ojos de Dios. El siervo nada hizo con lo que había recibido y el señor estaba muy molesto. 4. Lo que hacemos con los talentos hoy determinará cuántos talentos recibiremos mañana. El que hace poco con poco tiene dos tentaciones. En primer lugar, el talento recibido le podría parecer tan insignificante que termina despreciándolo en vez de desarrollarlo. Quizás sabía que el señor había dado cinco talentos a uno, y dos talentos a otro, pero él sólo había recibido uno. Quizás sentía lástima por sí mismo… por que no podía cantar en el grupo musical o ser miembro de la junta. Otra tentación muy peligrosa es este pensamiento equivocado, “Cuando yo reciba más bendiciones, comenzaré a ser un mayordomo fiel.” Todo el tiempo se dice, “Pastor no puedo diezmar ahora porque no gano suficiente dinero, pero cuando gane más, voy a comenzar a dar a Dios.” No es cierto. La mayordomía nada tiene que ver con sus posesiones. Ser fiel como mayordomo nada tiene que ver con la cantidad. Hemos visto que puedes ser un mayordomo infiel y tener mucho, puedes ser un mayordomo fiel y tener poco, puedes ser un mayordomo fiel y tener poco, o puedes ser un mayordomo infiel y tener mucho. Nada tiene que ver con la cantidad de las posesiones. Nada. Al finalizar este mensaje les indicaré la diferencia importante. En Lucas 16:10 dice, “El que es fiel en lo muy poco, también en lo más es fiel; y el que en lo muy poco es injusto, también en lo más es injusto.” En otras palabras, Jesús dice que si eres un fiel mayordomo 5 Elige tu modelo (Ejemplo personal) en lo poco, también lo serás en lo mucho. Si eres un mayordomo injusto en lo poco, también lo serás en lo mucho. Y el versículo 11 añade, “Si en las riquezas injustas no fuisteis fieles, ¿quién os confiará lo verdadero?” Terminamos con el cuarto modelo: 4. EL MAYORDOMO QUE HACE MUCHO CON MUCHO. Regresemos al Mateo 25 donde el señor pide cuentas de los tres siervos (Leer Mateo 25:19-23). Dios aumentará nuestros recursos después de que nos hemos probado ser mayordomos fieles. Para repasar el mensaje, ha habido dos modelos malos de la mayordomía y dos ejemplos buenos. Es interesante como la Biblia nos presenta la mayordomía. En estos cuatro modelos, hay un ejemplo malo de un hombre rico y un ejemplo malo de un hombre pobre. Hay un ejemplo bueno de un hombre pobre y de un hombre rico. Jesús quiere que entendamos que la mayordomía nada tiene que ver con tu nivel económico. LA DIFERENCIA Hay tres palabras que nos ayudarían resumir la diferencia entre un mayordomo fiel y un mayordomo injusto. La Mayordomía es una Elección, y hoy día vamos a elegir el modelo. 1. PROPIETARIO. Los mayordomos fieles entienden que Dios es dueño de todo, y eso no les es algo chocante. Los mayordomos injustos se consideran dueños de todo, “Son mis graneros, mis frutos, mis bienes. ¿Qué haré yo?” Cuando Dios reclama algo, responden, “Aquí tienes lo que es tuyo.” 2. CONFIANZA. Los mayordomos fieles pueden confiar sus recursos a Dios. Los mayordomos injustos no confían en Dios. La razón por la cual el joven rico se fue triste es porque no quería confiar sus posesiones a Dios, no porque tenía muchas posesiones. 3. ACTITUD. Los mayordomos fieles tienen buenas actitudes. Los mayordomos infieles son egoístas. Ahora les toca elegir su modelo. Si tienes poco: puedes hacer mucho o poco con lo poco que tienes. Si tienes mucho: puedes hacer mucho o poco con lo mucho que tienes. 6 Elige tu modelo (Ejemplo personal) TRANSFERENCIA DE LA CUENTA DE CRÉDITO Han recibido una tarjeta que dice, “Transferencia de la Cuenta de Crédito.” Con esto terminamos hoy. Déjenme explicarla. A cada uno de nosotros Dios le ha dado bendiciones. En la primera línea donde dice, “De la cuenta de…”, voy a colocar mi nombre, porque Dios me ha bendecido. En la segunda línea donde dice “A la cuenta de…” voy a poner el nombre de alguien porque creo que Dios quiere darle algo por medio de mí. Por favor, no des dinero. Piense en una persona con una necesidad que puedas cubrir. Quizás Uds. son una pareja de ancianos y reconocen que hay una pareja joven con niños que necesitan tener una cita y que Uds. están dispuestos cuidárselos. Tal vez seas una señora que te encanta cocinar, y sabes que alguien apreciará una comida hecha en casa. Coloca el nombre de esa persona. Por el lado opuesto indique lo que le vas a dar. TRANSFERENCIA DE CRÉDITO De la cuenta de A la cuenta de “Que sean ricos en buenas obras, dadivosos y generosos.” 1 de Timoteo 6:18 7