c i ón al d es a r r ól lo reg i on a I, d esde su presentan posibles soluciones que podríantomarlosigobiernos^ para resolver los proyectos de desarrolloen grgn.escgla y con g múltiples efectos. 5 V siglo veintiuno . editores MEXICO ESPAÑA ARGENTINA ' COLOMBIA', - desarrollo 333.917 B133D í; >■ i i» OJ&'Z- \ ' HfBigio |>-^eintiuno editores >> 5 a-edidon traducción de ROBERTO REYES DESARROLLO ECONOMICO REGIONAL enjo que por cuencas hidrológicas de México por DAVID BARKIN Y TIMOTHY RING MI siglo veintiuno editores MÉXICO ESPAÑA ARGENTINA COLOMBIA siglo veintiuno editores, sa CERRO DEL AGUA 248. MEXICO 20. D.F. siglo veintiuno de españa editores, sa C/PtAZA 5, MADRID 33, ESPAÑA siglo veintiuno argentina editores, sa siglo veintiuno de Colombia, ltda AV.Yq, 17 *73 PRIMER PISO. 8OG0TA, D.E. COLOMBIA 4 primera edición en español, 1970 quinta edición en español, 1986 © siglo xxi editores, s.a. de c.v. ISBN 968-23-0021-5 título original: regional economic development the river basin approach in mexico derechos reservados conforme a la ley impreso y hecha en méxico/printed and made in mexico ÍNDICE GENERAL PREFACIO ; ■1 I POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL EN LOS PAISES ME­ NOS DESARROLLADOS 4 los objetivos de la política de desarrollo regional, 4; el pro­ ceso del desarrollo regional, 8; política de desarrollo regio­ nal, 14; selección de proyectos, 23 ! II EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO ; 44 problemas del desarrollo regional y política desde 1821 hasta 1947, 52; el patrón del desarrollo regional reciente, 57 : III LA PREOCUPACIÓN MEXICANA POR EL DESARROLLO REGIO­ NAL ■ ■ 72 el proceso de decisiones políticas en México, 75; política econónrica y desarrollo regional, 88 i < IV POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL i ■ j í los proyectos de cuencas hidrológicas de 1946, 95; otras politicas de desarrollo regional, 117 j V LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC : | t ‘ fi- 95 121 características físicas, 121; la estructura socioeconómica de la región antes de 1950, 125; el programa de inversiones de la Cumisión del Tepalcatepec, 131; progreso económico en la cuenca del río Tepalcatepec, 1950-.1960, 139; servicios sociales, 151 ; VI EL EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC SOBRE LA * TIERRA CALIENTE j las inversiones de la Comisión en la Tierra Caliente, 154; deiarrollo regional, 155; la industrialización de la Tierra Caliente, 201; los efectos de las inversiones sociales de la Comisión, 205 j í \ \ VII UNA EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES DE LA COMISIÓN \ i el punto de vísta nacional, 211; el punto de vista regional, 230; el punto de vísta desde 1947, 233; la respuesta humana, 235 154 211 VIII ÍNDICE GENERAL; PREFACIO VIII LOS PROYECTOS DE LAS CUENCAS HIDROLÓGICAS Y EL DESARROLLO REGIONAL ‘ 238 el empleo de los proyectos de las cuencas hidrológicas integradas, 238; el crecimiento económico regional de México, 246; reconsideración de las políticas de desarrollo regional, 248 APÉNDICE I APÉNDICE II ÍNDICE DE CUADROS ÍNDICE DE FIGURAS ÍNDICE ANLÍTICO i Este libro tiene sus orígenes en nuestras tesis (para obtener el doctorado) y se basa en investigaciones hechas en México du­ rante los últimos seis años. La tesis de Ring fue escrita para 255 el Departamento de Economía Agrícola de la Universidad de California en Berkeley en 1963-64, Trata de los problemas de la 258 evaluación de proyectos de desarrollo en gran escala, realizados para obtener una multiplicidad de objetivos, y cuyo éxito de­ 260 pendió de la reacción del sector privado ante la acción del sector 26 b público, en el contexto de los esfuerzos mexicanos para promover el desarrollo regional mediante proyectos integrados de inver­ sión en cuencas hidrológicas y tomando al proyecto del Tepalcatepec como un caso de estudio. La tesis de Barkin, escrita para el Departamento de Economía de la Universidad de Vale, en 1965-66, estudió la contribución que la Comisión de Tepalcatepec había hecho al desarrollo regional y nacional mexicano con mucho más detalle. Después de alguna correspondencia epistolar, tuvimos oportunidad de reunimos, cuando estábamos en el Colegio de México en el verano de 1967, y discutir la posibilidad de hacer un libro en conjunto. Posteriormente pu­ dimos trabajar juntos durante breves períodos en Cambridge, en julio-agosto de 1968, y en Nueva York desde diciembre de f 1968 hasta enero de 1969. b Los primeros cuatro capítulos de este libro se basan de mane­ ra fundamental en la tesis de Ring y los últimos cuatro en la tesis de Barkin; pero la revisión de todas las reacciones fue con­ junta, tanto por la adición de nuevas ideas y datos como por la eliminación de material antiguo, de modo que el libro debe considerarse como un esfuerzo común, incluso si no fuimos ca­ ■j paces de unificar nuestros estilos de redacción. En esta forma, el primer capítulo del libro es un estudio sobre la manera en [ que las políticas gubernamentales podrían intentar resolver los problemas del desarrollo regional en los países menos desarrolla­ dos y, en consecuencia, de la forma en la cual deben evaluarse esas políticas. Los capítulos n-iv describen los problemas y po­ líticas mexicanos del desarrollo regional en sus aspectos eco­ nómicos y políticos, prestando atención especial, en el capítu­ lo iv, a la historia del desarrollo de las cuencas hidrológicas en México durante la posguerra, discutiendo también otros prof 250 T 2 PREFACIO! j PREFACIO gramas de desarrollo. En los capítulos v-vn, analizamos y evalúa-} mos en detalle el trabajo de la Comisión del Tepalcatepec ai ayuda para cristalizar esta partir de su formación en 1947. En el capítulo vni utilizamos; Agricultural Development esta evaluación, junto con los análisis previos de otros esque-í ington y Nueva York y 1: mas, para evaluar la estrategia de utilizar los proyectos de lasj cuencas fluviales como el núcleo de las políticas de desarrollo regional, en sus aspectos económico y político. Aunque ambos somos economistas, hemos tratado de hacer este libro inteligible para todo aquel que esté interesado en el des-i arrollo mexicano global, o en aspectos particulares políticos o económicos, que no tienen que ver con la economía de la eva­ luación de proyectos. Posiblemente no tengamos un éxito total, pues la última mitad del capítulo i en particular será difícil de entender para quienes no sean economistas; sin embargo,; puede omitirse fácilmente. La alternativa de explicar ese mate-; rial sin recurrir al “caló” económico y empezar con los princi-í píos elementales habría significado escribir un tipo de libro di-= ferente. í Durante el largo período de gestación de este libro, nos ayu-¡ dáron el consejo y el financiamiento de un gran número de: personas e instituciones, Es imposible mencionar el nombre de to-i dos los que nos ayudaron a ambos o a uno de nosotros. No; obstante, debemos mencionar nuestra gratitud a nuestros jurados^; de tesis en Yale y en Berkeley, cuyos presidentes fueron los pro-; fesores Lloyd Reynolds y David Allee respectivamente. Clarkl Reynolds, cuyo estudio extenso sobre México hizo sus consejos} especialmente valiosos para ambos, fue también miembro del ju-; rado de tesis de Barkin. Estamos muy agradecidos a un granf número de personas que nos ayudaron en México, en especiaf al Sr. Víctor Urquidi, al Lie. Gustavo Petriciolli y al Ing. César? Buenrostro, el cual como secretario ejecutivo de la Comisión del} Río Balsas fue de gran ayuda para proporcionarnos no sóloí consejos personales, sino también instalaciones y personal que} nos ayudara en los estudios. Otros miembros cíe la Comisión; también nos otorgaron generosamente su tiempo y sus conocí mientos. ‘ La investigación original fue financiada por donaciones dé­ la Giannini Foundation of Agricultural Economics y el Centro para Estudios Latinoamericanos, ambos de la Universidad del California en Berkeley; y por el Foreign Area Fellowship Progranr y el Yale University Councils on International Relations andi Latín American Studies. En México, el Centro de Economía; Agrícola de la Escuela Nacional de Agricultura nos ayudó aí superar muchos problemas y facilitó nuestra investigación. La¡ investigación en un libro provino del Council, las Universidades de Wash, Fundación Nuffield. DAVID BARKIN TJMOTHY RING !I ¡POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL o ¡sea que se defina ésta, y que en consecuencia no es inteligente, :por parte de los gobiernos, tratar de alterar el patrón regional !de crecimiento. Los gobiernos, por varias razones, generalmente POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL EN íno contemplan impasibles la desigualdad del crecimiento eco­ LOS PAÍSES MENOS DESARROLLADOS nómico regional, sino que adoptan una variedad de políticas para ¡tratar de reducirla. Este libro se ocupa, principalmente, de los ¡intentos del gobierno de México en este respecto, y en especial í de su adopción en la estrategia particular de invertir grandes 'cantidades en el desarrollo de las cuencas hidrológicas para ¡lograr este fin. LOS OBJETIVOS DE LA POLÍTICA DE DESARROLLO REGIONAL La preocupación que los gobiernos sienten acerca del desarro-p, ,i,n , . , . - lio regional podría referirse de manera principal ral ingreso per El proceso del desarrollo económico no afecta por igual en 1 ,F , F, ,- i i . / . *ji■i de quienes ya habitan en esa región, o bien al producto f S, .capita cualquier etapara todas las regiones de una economía. Patrones,, f, , , ,Qi i < , , ., ,. total de la región. importante b En el primer caso, el motivo mas de producción en cambio pueden causar patrones de localiza- , , . ■ ,F .. 1 r ., ,. , , -j i , . . -sera una preocupación porque el ingreso per capita se distribuya cion cambiantes de una actividad económica. El crecimiento in¿ T■rri &zi > , ., i, rían equitativamente como sea compatible con otros objetivos t en unas pocas zonas urbanas densamente . i ,■ . dustnal se concentrara •, i , r -n t i ,, , ., R . ^sociales. Esta preocupación podría ser sencillamente humanitaria, pobladas. Estas atraerán alimentos y materias primas desde cieiy ,r . r 1 -i r t. ,, _,Jn I pero en cualquier caso es probable que la nautopreservacion lo r r tas regiones agrícolas, que podrían florecer, quizas, a expensa... T , . , , . . , L ,• ° ,ir , . r. i exija, ya que el descontento regional podría originar una derrota de otras regiones agrícolas que antes estaban en crecimiento^ J- J M . or & jen las elecciones o una revolución interior. Otras regiones podrían seguir escasamente pobladas por falta de­ ; Las opiniones que se concentran en ciertas localidades ten­ demanda para su producción potencial o por ausencia de inver^ drán, en este respecto, proporcionalmcnte más influencia que las siones en servicios de transporte o energía. En etapas posteriores’/ 'que se encuentran dispersas en toda la población. Por lo tanto, de industrialización, regiones que dependen mucho de industrias/ los gobiernos se preocuparán más por los diferenciales regionales antiguas podrían perder terreno con respecto a las regiones en ..en el ingreso per capita. que por los diferenciales equivalentes que la estructura industrial es más nueva. Puesto que la movi­ entre diferentes grupos sociales. En algunas ocasiones los gobier­ lidad de los factores nunca es perfecta, es probable que los nos podrían estar menos interesados en el bienestar individual salarios de la mano de obra y los rendimientos del capital sean Jj:de los habitantes de las regiones atrasadas que en evitar la immayores en las zonas que están en rápida expansión que en| /presión de que están dejando a un grupo totalmente fuera del otras. En las zonas que están decayendo económicamente o cuy® ¡crecimiento económico que el resto de la economía disfruta, y crecimiento es relativamente lento, habrá un mayor desempleo , , ., , , . ,tp 1 de causar alteración 7 . , , . , , . ' a la imagen de modernismo que el resto de rPlaliVn V ln<; nrDHlirfrunc fpnrLrin r^whi^r pcf-.ie -znrtad ° relativo, y rprnrsnc los recursos productivos tenderán cambiar estas zonas! lia economía presenta. Como explicaremos, esta es una causa ímpor las regiones de mayor crecimiento económico. i ¡ portante de la preocupación mexicana por los problemas re­ Este patrón desigual de crecimiento regional es, en mayor o: gionales. En un caso semejante, el interés del gobierno podría menor grado, inevitable. La desigualdad regional es, en este :lno referirse sencillamente al ingreso monetario regional per capecio, como todas las desigualdades económicas. Si pudiera \ pita, sino al hecho de proporcionar ciertos servicios; los ejem­ tarse, la justicia social podría estar mejor servida, pero, en plos obvios son educación y sanidad. mundo en el cual los recursos naturales y los talentos están dis­ En otros casos, los gobiernos están menos deseosos de aumen­ tribuidos desigualmente, casi el único mecanismo que se liatar el ingreso regional per capita que de aumentar la pobla1 inventado hasta ahora para distribuir estos recursos y talentos ción de una región a la vez que incrementan el producto regioen sus usos más productivos es permitir que sus precios seanj J nal. En estas circunstancias, podría ocurrir el desarrollo regional una indicación de la escasez relativa y que las variaciones en sus¡ j aunque el ingreso per capita en la región disminuyera. Quizá precios se reflejen en los ingresos de sus poseedores. Esto no es¡ se creyera que dejar una zona escasamente poblada es invitar a argumentar que el libre juego del mecanismo del precio condu/ algún país vecino para que la tome abiertamente por la fuerza, eirá por lo general a la distribución óptima de los recursos, como CAPITULO I F ■I 6 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL; ? POLITICA DEL DESARROLLO REGIONAL 7 o la colonice en secreto. En la actualidad esto parece poco pro-: ., . - pasado cierta--da 7 consumo de otro tipo de servicios puede ser mayor, bable en la mayor parte del mundo, pero en el desarrollo re-:^oc^a haber sido deseable que los desempleados urbanos humente, ha inspirado los esfuerzos mexicanos de l hieran seguido viviendo con, y continuado siendo sostenidos gional. preocupen porH3Or’ sus ^amíhas rurales. Por otra parte, es probable que se Es más probable que los gobiernos modernos se i (requiera cierta cantidad de desocupación urbana para permitir reducir la congestión en ciertas regiones. Sin duda, existen ga a nancias para la sociedad por la localización cercana entre sí def industria en expansión recurrir a una corriente estable ce las empresas, A menudo a éstas se les llama “economías de agio-> ma-no de obra. El intento de hacer desaparecer ia desocupación meración”. Los clientes y los proveedores que están establecidos; Podría ,au^ntar el costo de la mano de obra para las empresas cerca el uno del otro reducen el costo de la comunicación entre¡industriales, las cuales se veián así inducidas a inyeitn en t.ceellos; pueden obtenerse economías de escala en la oferta de es-:n*cas Jue rempJcen mano de obra poi maquinal ra, ) pot pecialistas y servicios públicos, y pueden establecerse instituciones: consiguiente restrinjan el aumento de la ocupación. ___ > i ■ _ i . para entrenar . r i trabajo. , ripean zlí> mncúMiión pí nnnesrnvón especializadas una fuerza de Desde■» O el!F.l deseo de rprlnrír reducirIíí la congestión unan razón posible paia punto de vista de las familias, cuanto más grande sea la ciu-ídesarrollar zonas que en la actualidad están poco pobladas. Otra dad, mayor será la variedad de actividades culturales y de di-jes creencia de que en una zona existen tecui sos natuiales cuya versión que pueda ofrecer. Por estas razones, la tendencia natu-|exP^otac^n daría utilidades, pero que exigen un volumen mini­ ral hacia la concentración del establecimiento de la industria tieneímo de inversión mucho mayor que el que puede proporcionar la algunos efectos sociales benéficos. Pero los efectos benéficos de-Pnversión Pavada. Para varias actividades, incluyendo el abaste} cimiento de energía y el servicio de transporte, son importantes ben compararse con las desventajas de la congestión que surgen: • las economías de escala. Podría ocurrir que las inversiones allí por esta concentración de la actividad económica. Las fuerzas no se justifiquen económicamente, a menos que la economía normales del mercado, por sí solas, no asegurarán, desde ningún b regional haya llegado a cierto volumen mínimo, pero si esto punto de vista, que se obtenga el mejor equilibrio entre las [ocurriera pudieran entonces dar un rendimiento alto. En otras ventajas y desventajas sociales. Las empresas establecidas recien­ . palabras, podría existir una argumentación en favor de la acción temente por lo usual pagarán lo mismo por los servicios públicos’ , pública para promover el desarrollo regional paralelo al arguque las demás empresas en esa zona, pero como en donde existe L mentó de la industria “en nacimiento” para proteger a la indus­ 1 una congestión su establecimiento eleva los costos para todas tria nacional. Algunas veces se argumenta que la población de las empresas que ya existen en esa zona, lo que la nueva em­ (una región previamente subdesarrollada puede conducir de mapresa considera como costos subestima los costos para la sociedad; ; ñera inesperada al aumento de los recursos productivos de una en conjunto. El congestionamiento también aumenta los costos: | economía, quizá puede conducir al descubrimiento de recursos, para las familias, pero a menudo es difícil traducir esto a tér­ ; minerales, o atraer colonos pioneros, cuya iniciativa y espíritu minos financieros. ' . s 1' ' ’*se habían ■ Si en algún momento el gobierno considera que cualquier be-j de empresa no aprovechado’ antes, pero que■ •’ " apora neficio proveniente de economías por la aglomeración o por el > encuentran y aprovechan las oportunidades para empezar nuevas aumento del tamaño de la ciudad son superados por los costos j actividades que aumentan sus propios ingresos, emplean recursos sociales del congestionamiento, esto proporciona un motivo adi-1no utilizados y representan una adición al escaso talento emcional para tratar de descentralizar la actividad económica, Línf presarial de la nación. objetivo relacionado que algunas veces estimula la actividad re-! hos anteriores son algunos de los objetivos de una política grado gional es el deseo de disminuir la corriente de personas haciaj que se preocupa por las diferencias interregionales en el g las ciudades, con el fin de reducir al crecimiento de los barrios i de desarrollo. Por supuesto, no son todos los objetivos de la pobres y la desocupación urbana. Es cierto que esa comente i actividad gubernamental en una región particular. 'Iodos los crea problemas sociales, pero es la esencia misma del proceso j objetivos económicos nacionales —el crecimiento del ingreso nade industrialización. Es probable que la desocupación urbana 1 cional, la estabilidad de los precios, la diversificación de la ecosea más costosa socialmente que la desocupación rural, puesto i, norn^a’ fortalecimiento de la balanza de pagos, etc,— tienen la que debe transportarse alimento hacia las ciudades y la víviend misma probabilidad.de estar entre los fines dejas políticas rej gionales que los objetivos esespecíficarnente regionales. 8 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL j EL PROCESO DEL DESARROLLO REGIONAL Los objetivos particulares de un gobierno afectarán, por supues­ to, su elección de políticas; éstas se discutirán en la sección si­ guiente. Pero todas las políticas tienen la finalidad básica de promover el crecimiento regional y una comprensión del proceso del desarrollo económico regional es esencial al analizar políticas determinadas. A continuación se supondrá que el contexto del análisis es el de un país en desarrollo, implicando, por ejemplo, que más del 40% de la fuerza de trabajo está empleada en la agricultura, y que una considerable proporción de la fuerza de trabajo rural está subocupada, excepto, posiblemente, en las estaciones de gran actividad. La mayor parte de lo que se expone, sin embargo, no depende de estos supuestos y seria de igual im­ portancia para todos los tipos de economía. Mucho se ha escrito, desde el punto de vista de todas las dis­ ciplinas, sobre problemas regionales. Los problemas nacionales. tienen, por lo general, sus contrapartes regionales, de manera que los estudios sobre regiones pueden tener un campo tan am­ plio como los de las naciones. Además, toda acción económica y sus efectos tienen lugar en una u otra región, y por lo usual con un efecto regional desigual. Por lo tanto, una discusión del proceso del desarrollo regional podría incluir todo aspec­ to del desarrollo nacional. Pero lo que nos interesa son los ¡ puntos en qué el proceso de desarrollo regional diferirá, en ( grado y especie, del proceso de desarrollo nacional. Hay tres puntos de ese tipo: el papel que el comercio irregional juega en el proceso de desarrollo comparado con el comercio exte­ rior; los problemas de la manera en que el crecimiento en una región afecta al crecimiento en otras partes de la econo­ mía, y los mecanismos por los cuales deben equilibrarse los pagos interregionales. Discutiremos sucesivamente cada uno de esos puntos. En primer lugar, el comercio exterior representará una parte mucho mayor de la producción y del consumo de una región que de una nación. Excepto en una economía exclusivamente de subsistencia, es probable que, para cualquier zona, la importancia de las exportaciones sea una función del tamaño de esa zona.1; Un hombre puede depender por completo de su habilidad para exportar sus servicios; para el mundo, como un todo, no hay exportaciones. Obviamente sería menos realista elaborar una teo­ 1 Esto está indicado por Charles N. Tiebout en . “Exports and Regional Economic Growth”, Journal of Political Economy, lxiv, abril de 1956,. pp, 160-4. POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL 9 ría del crecimiento para, digamos, un condado sobre el supuesto de que ni bienes ni factores pueden trasladarse a través de las fronteras, de lo que sería para toda Norteamérica. Debido a la evidente importancia del comercio para el crecimiento regional, varios autores han dado gran importancia al papel de las expor­ taciones, La teoría del desarrollo regional de ‘‘base-exportación’’, tal como la expone Douglass C. North, es tal vez la presentación más clara de la misma, aunque muchos autores han discutido ideas similares.2 La teoría es muy sencilla. El crecimiento dentro de una región es iniciado y continuado por una demanda para los productos en los cuales la región tiene una ventaja compa­ rativa. La producción, la inversión y el ingreso regionales aumen­ tan y se establecen industrias complementarias. Los ahorros lo­ cales se invierten localmente y sus efectos multiplicadores son locales. En particular es probable que se desarrolle un número de “actividades para los residentes” dentro de la región que proporcionen bienes y servicios para el mercado local. En la ver­ sión de North de esta teoría, el sector de exportación continúa siendo dominante para la región, jugando un papel vital para determinar el nivel del ingreso en la misma y para trasmitir las fluctuaciones cíclicas nacionales a la región. El carácter de las exportaciones determina el carácter de la región, ya sea “indus­ trializada” o “agrícola”, y podría cambiar a través del tiempo de manera que una región podría empezar exportando principal­ mente productos primarios locales y exportar posteriormente mer­ cancías que . podrían denominarse localmente “móviles”. Como un modelo sencillo ele la forma en la cual crecen las regiones, el modelo de “base-exportación” no tiene rival. La fun­ ción exacta de la base-exportación será afectada, por supuesto, por la definición de la región elegida, y podría ser posible concebir regiones geográficas en cuyo crecimiento las exporta­ ciones sólo han representado una pequeña parte. Pero si se está considerando el desarrollo de regiones en los países menos des­ arrollados, en donde incluso los mercados interiores nacionales son una base pequeña para apoyar a las actividades industriales modernas, entonces está claro que el establecimiento de una baseexportación debe ser un objetivo principal de la política econó­ mica regional. La política particular adoptada en la búsqueda del desarrollo regional determinará la naturaleza de la base-ex­ portación y en consecuencia la clase de desarrollo regional que se puede obtener. El producto ideal para la base-exportación 2 D, C. North, “Locación Theory and Regional Economic Crov.'th’’, Jour­ nal of Political Economy, lxiii, junio de 1955, pp. 24 3-58. 10 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL tendrá claramente nruy buenas perspectivas económicas a largo plazo, y ofrecerá muchas oportunidades para invertir en indus­ trias que lo provean o usen sus productos (es decir, los efectos potenciales en ''‘cadena” son. grandes) con la condición de que pueda establecerse satisfactoriamente sin estas industrias comple­ mentarias, de manera que la cantidad mínima de inversión qué se requiere para empezarla no será prohibitivamente elevada. Por lo general, en donde la región está menos desarrollada que el resto de la economía, se esperaría que la base-exportación fue­ ran productos primarios. En unos pocos casos históricos, éste no podría haber sido el caso —por ejemplo, el reciente crecimiento en Puerto Rico, que para ciertos propósitos podría considerarse como una región de la economía de los Estados Unidos—, se ha basado en exportaciones de bienes manufacturados con materias primas importadas. Pero en donde, como sucede en este estudio, la región en cuestión es una zona escasamente poblada de un país menos desarrollado, al principio las únicas exportaciones po­ sibles serán de productos agrícolas o minerales. Elaborando sobre un análisis similar a la teoría de base-expor­ tación, otros autores han proseguido para discutir el grado en que, si se les deja solas, las fuerzas normales del mercado ten­ derán a concentrar el crecimiento económico en unas pocas re­ giones, dejando que el resto se atrase. Esto nos lleva a otra dife­ rencia entre el análisis económico del comercio interregional y el del comercio iníernacional, en esta ocasión haciendo diferentes supuestos sobre el grado de movilidad de los factores —y esto influye en la forma en que el crecimiento en una región afecta al crecimiento en otras regiones. la teoría del comercio inter­ nacional supone, por lo general, que los factores de la produc­ ción no tienen movilidad entre los países, y que, en cambio, tienen completa movilidad interiormente. Aunque esto no es del todo cierto, la migración internacional de mano de obra e inversión es lo siificienícmemc pequeña para hacer de ésta una aproxi­ mación aceptable para muchos propósitos analíticos. En el aná­ lisis del comercio interregional, sin embargo, la inmovilidad interregional de los factores sería una suposición muy poco real para hacer interesantes los resultados, y suponer una movilidad perfecta de manera que los factores se trasladen, para eliminar cualesquiera diferencias interregionales en la tasa de pagos a los factores también sería muy poco realista y este supuesto ten­ dería a eliminar una. de las principales razones del interés en el desarrollo regional. En coíisecuencía, debe suponerse alguna movilidad de los fautores, peto que sea insuficiente para suponer POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL remuneraciones de los factores y niveles de ocupación iguales en todas las regiones. La pregunta de si dejado a sí mismo el crecimiento tenderá a igualar las diferencias de ingreso regionales o hará que éstos diverjan ha producido mucha discusión y respuestas en conflic­ to, pero no es algo que pueda responderse sin hacer referencia a situaciones particulares. Los aspectos que determinarán la res­ puesta están, sin embargo, bastante claros. En primer lugar, la tasa de crecimiento de las exportaciones será de gran importan­ cia. Es probable que estas exportaciones sean de productos prh marios. Se acepta ampliamente que las perspectivas del mercado mundial no son muy prometedoras en un futuro previsible, aun­ que hay excepciones individuales. En particular, los productos de la agricultura tropical, se enfrentan a precios mundiales es­ tancados o en disminución. Considerando la demanda de tales productos, parece probable que -aumenten con relativa lentitud con respecto a los crecientes ingresos mundiales, y no es proba­ ble que una baja- en los precios tienda a producir un aumento compensatorio en la cantidad que se vende. En verdad éste es el caso para la mayoría de los productos alimenticios. La de­ manda de materias primas por lo usual aumenta con menor rapidez que la demanda de productos en los cuales se incorporan los materiales, puesto que a menudo se hacen economías en materias primas y se desarrollan sustitutos sintéticos. Siendo los costos de las materias primas sólo una pequeña proporción de los costos del producto terminado, es probable que las clasücicíadesprecio de la demanda de materias primas también sean bajas. Por parte de la oferta, puede esperarse que una producción creciente de materias primas conduzca a rendimientos decrecien­ tes en los recursos naturales fijos. Esto podría causar un aumento en el precio de algunos minerales, y, en el futuro lejano, de los alimentos producidos en las zonas templadas. Sin embargo, tal como son las cosas en el presente, es muy amplio cí campo para aumentar la producción de los productos de agricultura tropical en África y América Latina, y parece haber pocas perspec­ tivas de que la demanda tienda a superar a la oferta. Como re­ sultado, estos productos en particular se enfrentan a precios mi lu­ díales estancados o en disminución. Por esta razón, podría parecer que el cree uniente de las re- giones que dependen de exportación^.» agrícolas debería de ma­ nera inevitable ser más lento que el de las industriales. Ésta es una opinión simplista. Cualquier región es sólo un pequeño ah.mv tecedor de la producción mundial de una mercancía en especial, una expansión en ella tendrá pocos efectos sobre los precios 12 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL mundiales. Por supuesto, los precios mundiales y nacionales en disminución tendrán algún efecto adverso sobre los ingresos y por lo tanto sobre el crecimiento, de la base-exportación, pero éste sería muy compensado por el rápido aumento de la pro­ ducción. Hay otras razones, sin embargo, por las que los estudiosos han argumentado que el crecimiento tenderá a ser más rápido en unas pocas regiones, en las cuales se concentrará el crecimiento industrial, y que otras regiones tenderán a retrasarse cada vez más respecto a ellas. En el análisis regional de Myrdal las fuerzas del mercado abandonadas a si mismas tienden a este resultado.3 Al igual que en la teoría de North, el aumento en la demanda de bienes de consumo y de factores productivos que resulta de la inversión inicial repercute de manera principal dentro de la re­ gión en la cual ocurre la inversión. Las oportunidades rendirán más allí. La banca, el transporte, los servicios de comercio y otros elementos del capital social de operación se desarrollarán más allí que en otras partes. La movilidad de los factores tiende a reforzar este proceso acumulativo, reduciendo el aumento de los precios de los factores en las zonas en crecimiento, que de otra manera hubiera detenido la expansión. El crecimiento en una región se difundirá a otras zonas mediante una demanda de im­ portaciones provenientes de esas regiones, pero sólo en un grado limitado. Myrdal llama a estos efectos del desarrollo regional ‘'efectos de difusión” y argumenta que por lo normal son más importantes en los países desarrollados —lo que atribuye a una utilización más completa de los recursos humanos potenciales en esas regiones— de manera que el crecimiento presentará una ten­ dencia menor a concentrarse en unas pocas zonas. Éste es un punto importante: los diferenciales de salario y las diferencias en la disponibilidad de mano de obra entre las regiones podrían ser una potente fuerza para atraer la industria en los países des­ arrollados, como lo ha demostrado la experiencia de la posguerra en el sur de los Estados Unidos y en Puerto Rico. Pero por lo * general los países menos desarrollados se caracterizan por 'altos niveles de desempleo en todas las regiones y, desde un punto de vista económico, uno esperaría que los salarios no fueran muy superiores al nivel de subsistencia en todas partes. En muchos países, no obstante, factores políticos conservan los salarios ur­ banos muy por encima de los salarios rurales de lo que estaría justificado por la diferencia en el costo de la vida, aunque es 3 pp, 23-38. Gnnnar Myrdal, Rich Lands and. Poor, Nueva York, Harper, , 1957, POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL 13 poco probable que estos diferenciales compensen las otras atrac­ ciones de las zonas industriales —técnicas, servicios sociales ge­ nerales y empresas especializadas™ como un imán para atraer la industria. Hirschman, quien tiene un análisis similar, pero más optimista que el de Myrdal, ha indicado que es probable que los empresa­ rios sobres timen las economías externas que existen en una re­ gión en crecimiento, por falta de información sobre las oportuni­ dades que existen en otras partes, o por falta de una imaginación audaz para intentar aprovecharlas.4 Esto estimulará la polariza­ ción del crecimiento económico, y también lo hará el hecho de que las personas más móviles son las que tienen entrenamiento, habilidades o talento empresarial, que serán justamente las per­ sonas adecuadas para empezar el desarrollo en las zonas atrasadas. La tercera diferencia importante entre el análisis de problemas regionales y nacionales es la forma en que se ajusta el balance de pagos interregional. En cierto grado, este ajuste se facilita por el hecho de que la región tiene la misma moneda que el resto de la economía, y que, en consecuencia, puede usarse una amplia variedad de activos para financiar las transacciones interregíonales. Por lo tanto, no hay problemas regionales comparables al problema de la adecuación de las reservas de divisas para hacer frente a las fluctuaciones en el balance de pagos —nunca es un problema la adecuación de la "liquidez regional”. Por otra parte, un desequilibrio a largo plazo en el balance de pagos de una región puede ser mucho más difícil de corregir que el del balance de pagos nacional. Si una nación encuen­ tra que a las tasas de cambio actuales el equilibrio en el balance de pagos sólo puede obtenerse sufriendo un alto nivel de des­ empleo, siempre puede ajustar el valor exterior de su moneda y aumentar así los ingresos por exportaciones y llevar a la susti­ tución de las importaciones por producción interior, ¡jara permitir que se obtengan ocupación plena y equilibrio en el balance de pagos. Por una elección adecuada de la tasa de cam­ bio, será posible aumentar las exportaciones de los productos ' en los cuales la nación tiene una ventaja comparativa. Esto es cierto incluso si, después de los cambios en la tasa de cambios, el aumento de las exportaciones y la reducción de las impor­ taciones toman un tiempo y esfuerzo considerable de manera que, a corto plazo, tiene sentido hablar en términos do restric­ ciones del balance de pagos sobre el desarrollo económico, im1 A. O. Iliiscliman, La estrategia del desarrollo económico, Fondo de Cul­ tura Económica, México, 1961, pp. 184-201. 14 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL í . í: I pilcando que existen recursos interiores desocupados que no pueden utilizarse para obtener divisas (debido a posibilidades limitadas de sustitución).5 Diremos algo más sobre esto cuando discutamos, un poco más adelante, la evaluación de proyectos. La opción de modificar el tipo de cambio nacional no tiene un equivalente en la política regional. Deben estimularse las ex­ portaciones a otras regiones sobre la base del tipo de cambio ' existente. Es posible que las exenciones de impuestos indirectos, si se las otorga selectivamente por regiones, podrían tener algún efecto en este sentido, pero sólo si tales impuestos son un com­ ponente importante de los costos de producción. Desafortuna­ damente, con frecuencia es difícil obtener mucho mediante este enfoque, puesto que en las regiones atrasadas la base impositiva puede ser muy limitada, y no es posible sacrificar el ingreso proveniente de los impuestos indirectos, La posibilidad de que un mayor nivel de desocupación llevará a una disminución de los salarios y los precios es remota, ya que se acepta ampliamente la ínflexibilidad de la reducción en los precios monetarios, En particular éste es el caso para los precios de una -región en rela­ ción con los precios de otras zonas de la economía, ya que muchas de las fuerzas que determinan los precios actúan por igual en todas las regiones, y la producción de una región tiene que utilizar insumos importados de otras regiones. Por consiguiente, una fructuosa política regional tiene que en­ contrar un producto de exportación en el cual la región no sólo tenga una ventaja comparativa con respecto a otras regiones, sino que a la vez lo pueda producir a precios competitivos. La habi­ lidad de cualquier política regional para hacer esto debe ser un criterio importante por el cual debe juzgarse. El grado en el cual el desarrollo acumulativo y su naturaleza seguirán al esta­ blecimiento de una base-exportación debe también evaluarse cuando se seleccionen las políticas para promover el desarrollo regional. Los enfoques alternativos a que pueden recurrir los gobiernos para promover el desarrollo regional se tratarán en la próxima sección. POLÍTICAS DE DESARROLLO REGIONAL No es la finalidad de esta sección considerar en detalle todas las políticas alternativas que los gobiernos podrían seguir o han seB Hay mucho escrito sobre esto. Una buena exposición es la de R. L McKínnon, "Foreign Exchangc Constraints in Economic Development and Efficícnt Aid Allocation”, Economic Journal, lxxiv, junio de 1964, pp. 388-409. l’OLÍTXCA DEL DESARROLLO REGIONAL 15 guido en ciertas épocas. En lugar de eso, trataremos de clasificar los diferentes enfoques de la política en términos de los dife­ rentes papeles que asignan a la acción pública y privada y en términos de la clase de desarrollo que se prevé. Aquí se pueden diferenciar tres enfoques: el primero, es el enfoque negativo, que sólo restringe ciertas acciones del sector privado; en segundo lu­ gar están los enfoques que tratan de inducir a la acción a las empresas privadas - con frecuencia se describe a éstas como “per­ misivas”—, y en tercer lugar están aquellas que implican una acción más directa. AI discutir todos estos casos, suponemos el tipo de economía que es general fuera de los países socialistas. Aquí se estimula, en mayor o menor grado, a la empresa pri­ vada, pero el gobierno juega una parte activa en el planeamiento y la promoción del desarrollo económico. Por supuesto, la elec­ ción de la política regional podría reflejar el grado en que existen “esferas de influencia” claramente delimitadas para los sectores público y privado, y por ende el grado en el cual el. gobierno se considera capaz de asumir la iniciativa para realizar en una región actividades que el sector privado está realizan­ do en otra. El enfoque negativo implica el simple impedimento del libre establecimiento de empresas en regiones que se consideran rela­ tivamente muy desarrolladas o congestionadas. Pueden exigirse licencias, establecerse impuestos o adoptarse una prohibición (se­ mejante a la prohibición de construir nuevos edificios para ofi­ cinas en el centro de Londres). Las críticas que se presentan por lo general contra la exigencia de licencias u otros controles directos permiten que las ganancias que se deriven de esa polí­ tica sean apropiadas, en la forma de ganancias monopólicas, para quienes obtienen permisos para establecerse, o ya estaban esta­ blecidos. En un país desarrollado, se puede esperar razonable­ mente que Tas empresas que no se pudieran establecer en su región preferida se trasladen a otra parte, o que, cuando menos, los recursos productivos que se pudieran invertir en esa región se inviertan en otra; aunque, hablando rigurosamente, la in­ versión que sólo tendría un beneficio marginal en la región preferida, no se haría ahora. Pero, en cualquier caso, la pérdida de inversión será pequeña. En una economía en desarrollo, en donde cualquier -manifestación del espíritu de empresa debe alen­ tarse cuidadosamente, y en donde las diferencias en los atractivos de distintas regiones como puntos para el establecimiento de la industria son muy amplias, los controles sobre los lugares en que deben establecerse las empresas podrían reducir la inversión total. En particular, no será muy probable que las pequeñas 16 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL empresas que encuentran difícil la supervivencia y el crecimien­ to en cualquier caso, y que prefieren la seguridad de establecerse donde está claro que otros de la misma industria sobreviven y donde existen claramente mercados disponibles, se trasladen a regiones no industrializadas si no pueden establecerse en aque­ llas regiones que ya están desarrolladas industrialmente. Por esta razón, es probable que la política regional en los países en des­ arrollo no incluirá controles sobre el establecimiento industrial, sino más bien estímulos para el establecimiento en otras zonas. Estos estímulos tratan de reducir los costos o aumentar los in­ gresos para las actividades económicas que buscan ganancias con el fin de compensar las desventajas de las regiones menos des­ arrolladas. Debido a su preocupación por los problemas regio­ nales, el gobierno debe estar dispuesto a hacer esto incluso si su acción disminuye el ingreso nacional, aunque, como se observó, uno de los motivos para sus acciones puede ser la creencia de que una vez establecido el desarrollo regional demostrará ser;. socialmente provechoso. Las razones por las cuales las empresas! se establecen en un lugar en vez de otro nunca han tenido un lugar central en la economía; sin embargo, existe una gran can­ tidad de . literatura sobre el tema. La que ha surgido ha tomado uno de dos caminos; ninguna muy útil a los gobiernos para seleccionar su política de desarrollo regional. La mayor parte de las teorías del establecimiento se ha preocupado por aislar . los efectos de la distancia, ya sea en los patrones generales de la actividad económica dentro de una región, como en la obra .de von Thunen o Losch, o, como sucede en gran parte de la obra de Weber, en la decisión sobre el establecimiento de una empresa.6 Isard ha sugerido que el enfoque de von Thunen puede ser de más valor para el trabajo de los planificadores na­ cionales o regionales que el enfoque más limitado, pero no es fácil ver el porqué, puesto que por lo general los planificadores no se enfrentan a planicies aisladas de extensión considerable, y el desarrollo regional se ocupará en gran medida por una pro-' ducción para un mercado que está afuera de la región que interesa y quizá con una producción que trae materias primas de fuera de la región. Es verdad, sin embargo, que el planifica-. H Johann Ilcímich von Thunen, The Isohited SlaLe, cd. Pclcr Hall. Pcrgainon Press, Londres, 1965; Aitgnst Losch, The Eamomics of Localicm, tra­ ducido de la segunda edición alemana por Willíani H. Woglom (edición alemana, 1943), Vale Univcrsity Press, 1954; y Alfred Weber, Álfred IVcber’s Theoiy oii the Location of Industries, traducción al inglés y notas por C.avl J. Friendiich (edición alemana, 1909), University of Chicago Press, 1929, í X ‘POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL 17 ‘ dor puede enfrentarse realmente a una elección más limitada de í industrias que el empresario privado. ¿ Las teorías que explican la microeconomía de la decisión para /establecer una industria se han desarrollado por una amplia P variedad de circunstancias hasta un alto nivel de precisión. És­ tas incluyen modelos de programación que tienen en cuenta el hecho de que el comercio fluye en un sistema de redes más que : en un continuo en todas direcciones, y que hay diferentes limi\ raciones sobre los servicios de transporte y la disponibilidad de recursos.7 Otros modelos han incorporado factores espaciales den­ tro del análisis convencional de las funciones de producción.8 No todas las teorías del establecimiento insisten sobre la distancia. Algunas también mencionan factores de aglomeración (o de desaglomeración) y otros varios de costos relacionados con la i mano de obra, energía, agua, impuestos, seguros, interés (como pago por los servicios del capital), clima, topografía, con los medios . sociales y políticos y con otros conceptos? El análisis que se basa en tales modelos puede ayudar a los gobiernos a predecir los resultados de acciones para estimular la inversión privada, o para calcular la magnitud necesaria de las reducciones en los costos : con el fin de inducir una respuesta por parte de las actividades que buscan ganancias. Aparte de esto, los modelos no proporcio­ nan muchos detalles para guiar a quienes elaboran las políticas en la selección de las políticas reales. Las “políticas permisivas” implican o políticas fiscales que fun­ cionan, principalmente, para hacer a las actividades lucrativas aún más, o la provisión de varios tipos de capital general so­ cial (cgs) que disminuyen los costos. Este último puede im­ plicar simplemente que a una región olvidada se Heve el nivel de la norma nacional de escuelas, energía, transporte, etc. El tipo de inversión privada que será atraído dependerá obviamen­ te, entonces, de la naturaleza de la región y de las facilidades proporcionadas. Como es obvio, la irrigación estimulará el des­ arrollo agrícola, en tanto que la energía hidroeléctrica puede tener sus propios efectos particulares sobre el establecimiento de la industria. La inversión en cgs es una estrategia que provoca controver­ sias para el gobierno que la sigue y, como es usual en la ecoT Louis Lefeber, Allocation in Space: Production, Transport and Indus­ trial Locatíon, Amsterdam, North-Holland Publishing Co., 1958. ■ León Moses, “Locación and Che Theory of Producción", Quarterly Jour­ nal of Economics, lxxih, mayo de 1958, pp. 259-72. ’ Véase Walter Isard, Location and Space Economy, The Technology Press of M. I. T. y Wüey, Boston y Nueva York, 1956, p, 138. 18 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL 19 .como un asunto de fe, puesto que a menudo parece difícil aplicar nomía del desarrollo, la controversia sólo puede resolverse recu los tipos usuales de criterios de inversión, (Éstos los considerarriendo al estudio empírico. Es evidente que algún cgs es esencia "remos más adelante.) En donde Hirschman difiere más notablepara el desarrollo económico, y lo que lo distingue de otro F' 1 ’ " es sobre• la secuencia ’ ’ d. --------- ------------- de bienes de capital igualmente necesarios es que no puede se ¿mente de Rosenstein-Rodan necesaria importado (aunque la energía podría trasmitirse interregionaí Ha inversión del cgs y la inversión en actividades directamente mente, o incluso ¿nternacionalmente, las instalaciones para traq.productivas (adp). Por supuesto, se requiere un mínimo de cgs, initirla deben construirse dentro de la región que la recibe). Ade ¿se debe ser capaz de llegar a una región con el fin de desarro­ más, por lo general, se acepta que los gobiernos deben realiza! hilarla. Pero, dice, el campo de elección que se presenta eneste tal inversión. Con frecuencia hay economías de escala consi ¿asunto es mucho más amplio de lo que, por lo general, se supo­ derable, una política de precios que cargue a los consumido ne. Más allá de cierto punto mínimo, el cgs tiene rendimientos res sólo los costos marginales de proveerlos a ellos significará ■ decrecientes con respecto a la disminución del costo en lasaup. La diferencia, en esta etapa del argumento, entre las dos opi­ que la empresa tendría pérdidas. A menudo, debido a los efec J niones, es que, precisamente, por necesidad el cgs es “global”. Si tos de tales actividades para reducir los costos de otras en) presas, el beneficio total de la inversión no puede ser apropiad ¡ se acepta que un mínimo es necesario para el desarrollo, y que para la primera empresa y podría, incluso, ser imposible del tod? no se le puede llo seañadir le puede en cantidades añadir en cantidades estrictamente estrictamente marginales, marginales, tener una política práctica de precios, como es el caso en la iij’la diferencia hasta este punto está sólo en el tamaño mínimo como a firma Hí rsch m an, versión en carreteras. Independientemente de esto, podría seifde los “conjuntos?. Podría ser cierto, que, porque los planificadores del desarrollo se preocupan prindifícil en un país subdesarrollado encontrar inversionistas priva dos que estén dispuestos ’a realizar una inversión que tiene ur cipalmente por la inversión del gobierno y el cgs es un campo período de gestación y una duración a largo plazo. Es un desl indiscutible para la actividad gubernamental, tienden a sobresperdido, sin la duplicación, las instalaciones en esta zona, per< *timar tamaño el del “conjunto”. sin la duplicación la empresa privada tendría una posición m¡n Pero Hirschman va más allá al contrastar la inversión en cgs nopólica; también se acepta que el campo es de un tipo quh ¿con la inversión en adí>, y presenta algunas hipótesis que, aun­ requiere control gubernamental. Nadie negará la necesidad dé que no nos obligan lógicamente, sí ameritan un examen empí­ actividad mínima gubernamental en este campo. ¿ rico. Dado que la relación entre el cgs y las adp no está deter*Quienes recalcan la conveniencia de dar una importancia par ' minada, tecnológicamente, dentro de límites amplios, y dado ticular a este tipo de inversión van más lejos. Argumentan quf que el gobierno tiene fondos de inversión limitados y por lo como un capital de ese tipo es esencial para el desarrollo eco­ tanto debe elegir entre-la inversión en cada uno de ellos, argunómico y su período de gestación es largo, por necesidad debe ; menta que debe darse preferencia a la secuencia de la inversión ; que .lleva al máximo las decisiones “inducidas”. Esto concuerda preceder a la inversión en actividades más directamente produ¡r tivas y, al principio, no será provechoso en términos de los, con la creencia de que lo que impide el desarrollo es, más criterios privados. Paul Rosenstein-Rodan ha indicado, ademán que otros “embotellamientos”, la falta de iniciativa empresarial que la creación del cgs aumenta la demanda efectiva, y que dt para explotar los ahorros potenciales, y de que el gobierno debe, *,esa manera, conduce a inversión privada adicional y a un ere sobre todo, tratar de establecer los mecanismos para la utili­ cimiento acumulativo del ingreso.10 zación de. estos recursos. Sin aceptar, necesariamente, que la Por otra parte, Hirschman sostiene que se ha exagerado h ’ primera proposición es verdadera para todos los países en des­ importancia del cgs.11 Se ha hecho mucha inversión en él, dice, arrollo, ésta nos ofrece una función importante y exclusiva para el gobierno en una economía en desarrollo. Hirschman argu­ menta que la provisión de cgs antes de la demanda inducirá me­ 10 Paul N. Rosenstein-Rodan, "How to industrializo an underdevelopciH nos inversión privada que si se deja que el mismo cgs sea indu­ area”, Regional Economic Planning: Techníques of Analysis for less Dev& loped Areas, documentos y actas de la First Study Confcrcnce on ProblcnT cido por una escasez, haciendo que el primer paso de la secuencia of Economic Development Organised by the European Productivity Agcncyg * sea la inversión en adp. Afirma que el exceso de cgs es permi­ Bellagio, Italia, 1-19 de julio de 1960, ed. Walter Isard y John H. Cumj sivo. Invita a las personas para que lo utilicen. Por otra parte, berland, París, E. P, A., 1961, pp. 205-11. 11 Hirschman, op. cit,, pp. 83-97. : una escasez crea un número de personas que se ven afectadas 20 21 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGION AI EOLITICA DEL DESARROLLO REGIONAL *'directamente ^presentado por por la ella compra y así tienen de insumos un incentivo de otrasdirecto industrias pa y el r 1 remediar lalasituación. Se sosten? nnp ¿cfs» nna rnnddprnpMí , , como .insumos a otras *- _. industrias ______ *__ situación. Se sostiene quep«ésta es una consideración porcentaje vendido proporciona especialmente importante en ja estrategia del desarrollo regicun indicio de los efectos potenciales de cadena que podrían re­ nal, ya que la simple provisión de cgs no sería suficiente paríjsoltar del establecimiento de estas industrias. Esto es difícil de atraer a los empresarios a una región que ellos están acostun^^aceptar; un entusiasta del “crecimiento equilibrado” podría uti­ brados a considerar atrasada. jlizar la misma lista como la de las industrias que deben evitarse, Esto es plausible, aunque no del todo convincente. Por ejerí^porque son las que con más probabilidad provocarán los mayores pío, supongamos que la inversión en una carretera reducirá lo i“embotellamientos”. El problema de “cuándo un embotellamien­ costos de una industria potencial en un 20% que se establezc^to es un embotellamiento y cuándo es un estímulo para d en una región recientemente provechosa. Es posible que los cor,desarrollo adicional” sólo puede resolverse mediante la investi­ tos pudieran reducirse, alternativamente, en la misma cantidad,gación empírica. por inversión en una industria abastecedora. Es posible que 1 Una política de desarrollo regional que implique un poco más segunda inversión podría inducir el establecimiento de una in1 de intervención gubernamental es aquella que establece bienes dustna potencial, en tanto que la inversión en carreteras no ^industriales. Algunas veces esto sólo implica hacer tierra dispoaria asi, porque en su búsqueda de mercados es probable qulnjb£e para construir, y casi no puede diferenciarse de la estrala industria abastecedora sea más activa que los, constructores dqte ¡a £neral de proporcionar capital general social. Otros pro­ carreteras en sus intentos de estimular la actividad complemei|gralnas proporcionan fábricas para rentar. Si esto se hace de tana. Sin embargo, si ambos son del gobierno, éste no sería e,manera £undamental para1 reducir los costos iniciales de establecaso. AHpmat; nrnhci ni que a ñu» x»l . _ ., , ■< caso.. Además, pc es probable el desarrollo de una carretea cimiento a las pequeñas empresas, la renta podría ser la del mer­ redujera los costos para una serie más amplia de industrias qut cado privado. Una política más determinada podría cargar rentas h* «> a k-aU la inversión en una rama particular de las adp, y en consecuerf ^a; jas con el fin de subsidiar los costos de capital. Una política cía, elelefecto cia, efecto global global podríapodría ser mucho ser mayor, mucho incluso mayor,si, incluso si, 3 - • eí de bienes industriales podría, en su mejor aspecto, prometer ciertas líneas particulares de producción, hay empresarios poten obtencr relativamente rápido las economías de ' 'la’ i “aglomeración”, cíales que no aprovechan la ventaja de sus efectos sobre las ga . ................ y concentrando el crecimiento industrial en una zona de una nancias. En cualquier caso, los efectos de inducción reales sólcL^j l en especial, podría reducir algunos costos de urbanizapueden determinarse por amplios estudios empíricos, proporciL¡ón ten¿rían ¿e ejercerse ; en un desarrollo difuso al azar. nando eventualmente una muestra lo suficientemente grande parí p Vn usarse yt¡cas ¡ Pueden usarse políticas impositivas para promover el desarro­ aislar los efectos inducidos de diferentes tipos de inversión. llo regional de diversas maneras. Exención del impuesto sobre la La inversión en adp podría tener dos efectos de inducción/; renta o las utilidades, o asignaciones de depreciación mayores uno, en los proveedores de insumos (lo que Hirschman deno sobre la nueva inversión, podrían hacer- a la inversión que ob­ mina “efectos de cadena hacia atrás”), y otro, en los usuarios rí tiene menores ganancias antes de los impuestos en las regiones los productos (“efectos de cadena hacia adelanté”). Algunas in ; atrasadas que en otras, obtener una tasa relativamente mayor dustrias pueden considerarse “satélites” de una industria prin/ después de pagar los impuestos, En una economía en donde las cípal. En este respecto, Hirschman da un ejemplo que nos entre ganancias que se obtienen en diferentes re• « 1 ** * vidiferencias 1XG3X CX AUXdíf X1LX t A dO ti ílAlas A£X AÁV-X d □ ^-4 L+V*w\w> V Kx O íri^iAVÁ v->. t>v> interesa. Los molinos, dice, por lo general no tienen efecto?; ¡ no es industriales, de es decirj en muchos pa£ses 7° dp ri’r.Jnrr'í An de los productos agrí­ ° _ .. . .. *■ ,,, deradpns cadena hacia atrásntrác en pn la lnproducción ésta podría ser una inducción útil, pero es poco probable que colas que son procesados; .argumenta que es poco realista pensar atraiga a la inversión industrial pionera, a las zonas subdesarro­ que la producción de arroz, por ejemplo, es inducida por la exislladas en los países menos avanzados. tencia de procesadoras de arroz Esas empresas más bien deben Es ^obable qüe.Es lasprobable exenciones o reducciones en losoimpuestos que las exenciones reducciones en los impuestos considerarse como industrias satélites a través de un proceso <klocalg se ¡nJluso men03 e£ect¡vas que £as exenciones de los cadena hacia adelante. Empero, con frecuencia, como suceda impuestos de los gobiernos centrales. Los impuestos locales, pol­ en el caso de la industria azucarera mundial, las cadenas hacia lo general, son tan pequeños que resultan insignificantes para la atrás sí aparecen en las industrias agrícolas. mayoría de las decisiones para el establecimiento, y en aquellos Hirschman también sugiere que el porcentaje de producción casos en que sí implican una diferencia, es probable que las reA ü *'- a 22 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL 23 ducciones otorgadas por una autoridad impositiva local sean rápii SELECCIÓN DE PROYECTOS damente igualadas por las otras localidades, que también estáíE ansiosas de atraer a la industria. Desde el punto de vista de un; La sección anterior trató algunas de las consideraciones que de­ autoridad local siempre será mejor tener una industria que líp ben tenerse en cuenta cuando, un gobierno está eligiendo políticas pague impuestos, que no tenerla, y si éste fuese el caso, se otorga £ amplias para estimular el desarrollo regional. Esta sección se rán, entonces, concesiones generosas. Dando todas las autoridad^" ocupa más de la selección entre partidas particulares de gasto locales concesiones similares, los efectos sobre el establecimiento que de la estrategia general que está detrás de la selección de de la industria se compensarán, pero las autoridades locales ya sH políticas. Por lo general, los economistas han tratado estas dos vieron privadas de ingresos impositivos. Es más probable quL cosas por separado. Pero, en principio, no se Ies puede separar concesiones discriminativas por un gobierno central sean mucho de una manera satisfactoria. Un gobierno, por ejemplo, no puede más efectivas. Un ejemplo de un esquema que ha tenido apa^ seleccionar una política de fuerte inversión en transportes, sin rentemente gran éxito para atraer fondos de inversión es el qun algunos detalles del resultado de tal inversión que haga posible en la actualidad se está empleando en el noreste brasileño.1- la comparación con la inversión de una cantidad comparable de Las empresas han podido usar parte de los fondos que de otn: recursos productivos de algo por completo diferente, quizá un manera hubieran tenido que pagar en impuestos por inversión programa educativo. La selección de políticas debe tener en nes en la región. h cuenta el rendimiento de las inversiones individuales, para im­ Reducciones selectivas en los impuestos indirectos podrían in. pedir el desperdicio de recursos que resultaría si el empleo de fluir en el establecimiento de las empresas, pero la única fondos en un sector obtiene un rendimiento mucho menor que estas concesiones que probablemente tenga importancia real erf en otros sectores. La medición de los rendimientos de la inver­ los países en desarrollo es la exención de los derechos de ind sión, no obstante, sólo puede hacerse a la luz de los objetivos portación sobre importaciones de productos intermedios. Tal como que están detrás de la realización de esas inversiones, y estos se describirá en el capítulo iv, México ha adoptado este enfoque objetivos se determinan tanto por las metas como por la natupara estimular el establecimiento de industrias a lo largo de sip rdezM de las políticas más generales. Un proyecto de inversión, frontera con los Estallos Unidos. por ejemplo, puede evaluarse desde un punto de vista si su Una política regional alternativa implica inversión directa de; objetivo es elevar al máximo el- ingreso bruto de una región gobierno en actividades productivas. Acabamos de comparar ésto en particular, y desde otro punto de vista si su meta es un má­ con una estrategia de una política que invierte cuantiosamente i ximo ingreso per capita regional. Un proyecto elaborado para en instalaciones sociales generales. No podemos decir much^ estimular la iniciativa privada será evaluado de una manera más en abstracto. La razón básica para la inversión guberna -diferente de otro que sólo tenga como meta producir bienes mental directa es que o bien los rendimientos sociales de W de consumo. Aunque algo de lo que se dirá en esta sección podría apli­ inversión exceden los rendimientos privados, por una o más de las razones antes descritas, o, como ha sostenido Hirschman, poL carse a la elección de políticas impositivas o de controles di­ que el talento empresarial es escaso y necesita ser estimulado. Por rectos sobre la inversión privada, nos interesan de manera prin­ supuesto, podría argumentarse que si el talento empresarial en cipal los proyectos de inversión y en especial las inversiones para particularmente escaso es poco probable que el gobierno posea obtener los objetivos del desarrollo regional. Todo proyecto im­ mucho del mismo. No obstante, en donde la provisión de incen­ plica el uso de insumos en una corriente durante cierto tiempo tivos para aumentar la inversión del sector privado es un objetivé y la generación de productos durante cierto tiempo. El proyecto propuesto podría describir los insumos y los productos tan pre­ gubernamental importante, la inversión directamente productiva! cisamente como si el resultado del gasto fuera seguro, o podría puede ser la forma más eficiente de estimularla. reconocer cierta incertidumbre tratando de asignar probabilida­ des para diferentes resultados. En el caso de los proyectos de desarrollo regional, en los países en desarrollo, es casi seguro M A. O. Hirschman, "Industrial Developnient in the Brazilian Northeasí and the tax Credit Scheme o£ Article 34/18”, Journal of Development Stu que no se disponga de la información necesaria para prever tales probabilidades. 'Esto no significa que los planificadores de los dies, v, pp. 5-28. 24 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL: APOLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL 25 proyectos siempre elegirán el resultado esperado de sus cálculos ;un sector de la economía, no diferirá de la que se emplea en —podrían estar ansiosos, por ejemplo, de evitar una catástrofe y = otro sector. En la actualidad se acepta que podrían existir muactuar con seguridad, o la incertidumbre podría hacer provecho^ chas circunstancias en las cuales sería mejor, para el 1 gobierno so conservar tanta flexibilidad como fuera posible, incluso a ciertoí ‘ de un país subdesarrollado, calcular su propio sistema de contacosto. En este libro no nos ocuparemos mucho del hecho ineviá ineviá" bilidad o de precios sombra que usar los precios que imperan table de la incertidumbre o de sus efectos sobre el proceso de la¡ [ en el mercado. Los economistas han escrito mucho sobre los *toma de decisiones. Como sucede con la mayoría de los escritos precios más apropiados para usar y sobre la forma de usarlos. sobre este tema suponemos que el resultado de cualquier acción' De hecho, en algunas ocasiones, ha parecido como si el único es completamente previsible. El hecho de que las consecuencias problema en la selección de proyectos fuera la elección de pre­ de una actividad sólo pueden preverse imperfectamente ha sido; cios adecuados; después de todo, los precios pueden emplearse discutido en un interesante libro de A. O. Hirschman, quien su-; en fórmulas ya bien establecidas y automáticamente obtendremos giere que el fracaso en apreciar todos los problemas que puedan suficiente información para hacer una decisión sobre cualquier surgir en el curso de la operación de un proyecto podría tener ? proyecto. Diremos, empero, que ésta es una visión muy simplisus aspectos benéficos.18 A menudo, un proyecto de desarrollo^ , ficada de la evaluación de proyectos, cuando menos en el estado se ha encontrado con problemas inesperados que, si se hubieran;A actual de la técnica. Aunque es posible concepto al mente idear previsto, hubieran impedido su aprobación, pero al presentarse;q la determinación de algún conjunto de precios para medir los han demostrado tener solución. Es útil estar consciente de esto? costos y beneficios de todos los proyectos, estamos muy lejos de aunque sólo sea por significar que en el futuro se hará más fácil' hacer esto. Trataremos el problema de los precios reales que prever la capacidad humana para resolver problemas, y será; deben usarse, al final de este capítulo. importante preguntar, en nuestra descripción de lo que ocurrió La parte clave de la evaluación de proyectos es la medición con las políticas de desarrollo regional en México, en qué grado, í’de los beneficios del proyecto. En última instancia, los costos de el resultado era previsible y si los resultados inesperados fueron: cualquier proyecto son los beneficios que se pudieran obtener benéficos o perjudiciales. . ' ippor el uso de recursos del mejor proyecto que se ha rechazado Incluso si la ignorancia de los problemas que pueden presen-; para realizar otro proyecto. En consecuencia, hay que pregun­ tarse es benéfica en algunas ocasiones, por lo general uno debe tarnos cómo debemos calcular los beneficios de un proyecto de proceder sobre el supuesto de que las decisiones racionales re- i inversión que ha sido ideado para promover el desarrollo re­ quieren información y que cuanto más tengan, mejor. Pero la ; gional. información es costosa y algunas veces difícil de obtener y A procesar. Es cierto que, para quien toma las decisiones en uñó El manejo de los objetivos múltiples de la inversión pública gobierno centralizado, sería -imposible, en la práctica, obtener ; información suficiente sobre todos los cursos de acción poten- ;; Lo primero que debe observarse es la multiplicidad de objeticíales para comparar los resultados de cada uso posible de lcn L vos de los proyectos de inversión pública, tal como se ejemrecursos, por la gran cantidad de información que sería necesario^; plifican por nuestra discusión de las políticas regionales. Aquí, obtener y procesar. Parecería que el uso de los precios evitarías' los gastos tenderán a incrementar el ingreso nacional. No obseste problema. Proporcionando una indicación cierta de los gra-; tante, les interesará en especial aumentar el ingreso regional, dos relativos de escasez de diferentes factores de la producción- pero podrían referirse al ingreso per cepita o al ingreso regioy de diferentes productos, y permitiendo un cálculo dentro deb nal total. En donde la preocupación es el ingreso per cepita, el incremento del producto que podría resultar del usó de recursos"‘I gobierno puede estar interesado en el ingreso promedio per ca~ para inversión más que para el consumo corriente, hacen po-I 'pita regional o en el ingreso per cepita de ciertos grupos que sible establecer reglas para tomar decisiones, que dan alguna.! viven en la región. El proporcionar empleo puede ser una seguridad de que la base para relacionar el gasto público, en| meta independiente, y puede tener como fin la disminución de I la desocupación local o la atracción de mano de obra de otras “ A. o, Hirschman, El Comportamiento de proyectos de desarrollo, Mé-f regiones. El proyecto también podría llevai al descubi imiento y xico, Siglo xxi Editores, 1968. I utilización de otro tipo de recursos, sean recursos naturales, ha- 26 POLÍTICA DEL D bilidad empresarial o fuentes potencial manera no ce hubieran aprovechado. El resiiltado de cualquier proyecto grado en que se logren estos objetivos gro de objetivos será más que esto, po particularmente alto de un objetivo cularmente bajo de otro, y llegará los beneficios de un proyecto. Puest mas, en las que se expresan los obj tados directamente mensurables, deben netarios a los no expresados en térmi no sea posible, la mayoría de los ben todos, que no aumentan el ingreso n teoría, expresarse en términos de la d Así, podría desearse una mayor ocupa ticipación de los desempleados en el i considerarse perjudicial a la inflación versos sobre la distribución del ingreso ideal de los beneficios no implicaría ponderaciones para todos los resultado monetarios con anticipación, y el llev ponderada (la ponderación asignada a con el nivel de logro de otros objet de la desocupación podría ser un o los ingresos per capita fueran de $ 1 0 cia cuando fueran de $100. Enunciar lo que implicaría una medi tivos sería demostrar simultáneamente nerla. La alternativa que se sugiere hacer máximo el logro de un objeti ponderada de objetivos sujeta a limitac 15 metas deseables.14 Aunque conceptua alguna esperanza de que pueda aplic imposible imaginar que un gobierno explícitamente las limitaciones de, d la tasa de crecimiento en términos de bilidad de los precios. Los gobiernos 14 Varías de las afirmaciones que se hacen tratadas más extensamente por Tiroothy Rin Invcsínient Gritería: Coinplementary of Compe Economics, r.xxx, febrero de 1966, pp. 108-20, 15 Véase Otto Eckstein, "A Survey of the Criicna”, en The Public Piñonees: Needs, S rencia de la Universilies-National Bureau Con Princcton, Princeion University Press, pp. 439-94. S: POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL idea de lo que es un nivel tolerable de inflación Podría ser imposible, aunque sólo fuera por r que un gobierno enunciara el nivel de desocupac ción que tolerará, pero que, en el pasado, ha preferencias, lo suficiente para que un econom presarlas.16 Además, los economistas saben mucho ción de objetivos sujeta a limitaciones. Es más fácil manejar la función de objetivos al máximo un objetivo y establecemos como lim las otras metas deseables. Cuando queremos incl tivos dentro de la función y llevar al máximo rada, encontramos el problema de que es probab deración sea arbitraria y corremos el riesgo de dice Eckstein, "o una mezcla sin sentido o estare todos los objetivos diferentes a la producción tangible” Los intentos del U. S. Bureau of Reclamation un conjunto de medidas uniformes de los ben que no sean las contribuciones hechas por el pro nacional bruto, condujeron a tantos supuestos todo el concepto de beneficios, distintos a la efi ca, cayó en desprestigio.18 La precisión falsa pue la falta de precisión puesto que podría ocultar lo cuales hay que tomar decisiones. Dadas las dificultades implícitas en esto, sería cerse que no es necesario un intento complejo cuidadosamente una multiplicidad de objetivos. L gumentado esto, no sólo porque es difícil formular obje 1<! Arthur Maass demostró, en una discusión muy inte equivale a un punto de intercambio entre la eficienci objetivo menos económico puede surgir, y de hecho surg gislativo, de los Estados Unidos. Esto ha ocurrido en l rales de carreteras y ele habitación, aunque no en los arrollo de los recursos hidráulicos. Durante el proceso de una prolongada discusión y de la consideración de a a un tipo de intercambio. Como indica Maass, el reconocimiento explícito del de un objetivo por el logro de otro es un‘ progreso c punto de vista de que los proyectos deben elaborarse ex lograr un objetivo de eficiencia económica y enmendárse que la multiplicidad de objetivos afectará b. elaboración Véase Arthur Maass, "Benefit-Gost Analysis; lis Relevant ment Dccisions”, Quartcrly Journal of Economías, i.xxx pp> 208-26. 17 Eckstein, op. cit., p, 448. 1S Hay una discusión muy buena de esto en Hiischman to de proyectos de desarrollo. El capítulo final de su el análisis de esta sección en muchas punios. 28 POLÍTICA DEL DE porque ataca a todo el concepto de una jetivos) y medios, y también porque en un enfoque alternativo que implica políticas por pasos pequeños, tratando Sólo un campo limitado de objetivos pequeño número de alternativas posibles importante, ya que tal procedimiento ev ficultades mencionadas antes, con respec información en un proceso de decision hecho innegable de que todas las pred futuro incierto. Sin embargo, va en co hace, generalmente, al discutir la selecci hecho contra el supuesto que se ha hech las políticas deben seleccionarse despu cuidadosa y comprensiva de las alterna de los objetivos formulados con cuid blom denomina “sinóptico". La sociedad, argumenta Lindblom, no fines que busca de los medios que em que la sociedad es una colección de in miembros de la misma consideran como como medio para otro fin. En la socie seable aumentar el gasto para defensa el poderío nacional, y la reducción d medio para ese fin. Para otros, la f plena, y el aumento del gasto para d elegido. En estas circunstancias, es más sobre la política por seguirse que sob No obstante, debe observarse que la i ciales no es algo ajeno a la mayoría últimos parecen estar dispuestos a habl arrollo" o estar preparados para decir q ción social con respecto a otra, lo cu de objetivos sociales. Lindblom compara el problema de las virtudes de permitir que surjan p pequeños pasos no coordinados tomados lisis, la evaluación y la decisión políti dientemente en un gran número de pu 19 Lindblom ha expresado estas opiniones e ñas bigliográfícas, pero, pava la expresión más David Braybrooke y Charles E. Lindblom, A Evaluation as a Social Process, Nueva York, pp. 6-143. POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL sociedad. Este procedimiento permite la represe serie más amplia de valores en las decisiones po consideradas por una sola persona que tomara la donde resulta que pueden seguirse pasos posteri gir las consecuencias adversas no previstas de un grupo presiona y obtiene una política que tantes aspectos del problema, otro grupo los har nes toman las decisiones en el gobierno y otro supervisores para asegurarse de que no se descu lores. No obstante, hay grandes dificultades en este larmente en lo relativo a la correlación de error decisión de inversión podría con frecuencia sig perdicio extremo de recursos, o incluso ser imposible f ; Cuanto más se haya convertido un curso políti 't aceptada del contexto general dentro del cual decisiones, tanto más difícil es dar marcha atrás en él d : punto de vista político y económico. Además, í las políticas gubernamentales no están sujetas a pentimientos abruptos podría, en una economía í charse, ya que puede suponerse que una reducc tidumbre mejorará las decisiones privadas y ? mejor distribución de los recursos. En donde las políticas son virtulamente irreversibles 20 Es interesante, en este contexto, comparar las opin ' sobre un experto en tránsito, con las de Peter Hall s futuro de Londres. y “Un experto en el tránsito urbano, por ejemplo, podr í tránsito de ciertas calles se hiciera en un solo sentido. ; de predecir cuantos embotellamiento de tránsito surgirán y tante, podría hacer confiadamente sus recomendaciones, prop dida que se ocasionan los embotellamientos, se tomarán para resolverlo en ese momento, nuevos semóforos, asignac policía de tránsito, o una revisión del mismo plan d de la calle en un solo sentido. También podría prever, consecuencias, como las pérdidas de los negocios en c desviación del tránsito. Sin embargo, podría ignorar alg secuencias al elaborar su plan de tránsito. Para evitar e separado cada uno de los problemas previstos, decidirá ciones del estacionamiento, facilitará el tránsito de peaton o usará alguna otra política para reducir las pérdidas d no se consideraron de importancia en su primer pro (Lindblom & Braybrooke, p. 125.) "Al experto en tránsito se le paga para que haga de vehículos; hace sólo esto; no le importan otras cons ' ciudad tan mal planificada para el tránsito de vehícul s es Londres, el resultalo podría ser desastroso en térm ■ planeamiento. Hasta ahora, los dos casos más especta 30 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL ► POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL adoptarse algo del enfoque sinóptico, incluso si se consideran rr sobre las actividades de otras unidades descentralizadas.21 Pero, las dificultades implícitas, o si los resultados sólo tienen un éxito ;; en cualquier caso, la práctica administrativa, con frecuencia, ixatu parcial. Esto es cierto en donde hay una considerable interde- i; de hacer mínimas las consecuencias negativas de ignorar los pendencia entre las decisiones del gobierno, como ocurre £re- ;i. efectos colaterales estableciendo oficinas que tienen el poder de ¡i coordinar las actividades de otras personas que toman decisiones cuentemente con la inversión en los países en desarrollo. j precisamente en donde los efectos colaterales de sus políticas Por último, a menos que estemos seguros de que cada sección í í son más dañinos. Más que ver a un experto en tránsito como de la comunidad es servida por un fuerte interés de grupo, y í : ejemplo de las virtudes del enfoque de incrementos, m implicó que tales grupos están razonablemente equilibrados en el pro- í r que se requería un planeamiento urbano como uno Lase sinópceso político, hay poca garantía de que lo que surgiría del proceso ’’ 1 tica razonable. Sin embargo, es posible que la autoridad del de Lindblom de negociación sobre decisiones políticas junto con ) 1 planeamiento urbano no se preocupó mucho por las aguas ne­ correcciones frecuentes de las políticas existentes sería una mejo­ gras que la ciudad arroja al río. Quienes se preocupan de ello ría respecto a un intento sinóptico razonable. ; son los habitantes de la siguiente ciudad río abajo. En tal caso, No obstante, recuérdese que éste es un asunto de interés. El,’ ; el gobierno central puede crear una oficina para que coordine enfoque sinóptico no es operativo en un sentido total y com­ Ha evacuación de las aguas negras en una cuenca. pleto. Es posible concebir una situación en la que un enorme; í En nuestro ejemplo sobre México, discutido abajo, la Comícomputador, alimentado' con una función de bienestar social; completamente especificada y con una lista completa de todos'¡ sión de Cuencas Hidrológicas puede considerarse como si utilizara los recursos, pudiera darnos una solución simultánea a todas lasj| un enfoque sinóptico al tomar las decisiones para las cuencas decisiones políticas, pero es imposible creer que alguna sociedad,b • hidrológicas como un todo, pero ignorando los efectos colareintentara alguna vez eso. Es inevitable alguna descentralizaciónf ( rales exteriores de cada cuenca. Pero al hacer las proposiciones en el proceso de decisiones. Es útil recordar que no siempre es5 ; para el presupuesto, los funcionarios de otras instituciones ¡mdañino lo que a menudo es “suboptimización” por unidades des-;. ;■ pilcadas -la Secretaría de Recursos Hidráulicos, la Secretaría centralizadas, que podría implicar decisiones tomadas. con res-;-f de Hacienda y la Secretaría de la Presidencia— podrían también ‘ utilizar algo parecido a un enfoque sinóptico, pero basado en pecto a criterios que son inconsistentes respecto a los criterios; i consideraciones diferentes. El resultado neto está lejos de ser una niveles”, y que no toman en cuenta sus efectos de los “altos helara decisión sinóptica sobre la inversión con las alternativas o ponderadas a la luz de todos los objetivos. De hecho, es posible la desviación de una corriente principal de tránsito del West End a través ■ que algunos criterios de decisión utilizados por la Comisión conzona de la época del rey Jorge que ha logrado sobrevivir; de la más bella hacer que los camiones pesados que se dirigen hacia el. y el plan para tradigan el criterio del nivel más alto de la Secretaría de la. Pronorte desde los muelles y los centros de mercado pasen a través del antiguo • sidencia. Ciertamente, los procedimientos no ofrecen una gara mía centro aldeano de Híghgate. (Una nota de pie de página indica que este -'de que la productividad marginal de los últimos 100 000 pesos último plan íue modificado por el Ministerio de Transportes en enero de : gastados por la Comisión de Cuencas Hidrológicas, en términos 1963, después de considerables protestas, reivindicando así, quizás, a Lindblom en esta instancia particular.) Pero hay muchos casos que no son me­ del logro de un conjunto de objetivos nacionales., será la misma nos inquietantes, pero que tienen menos publicidad espectacular porque que la de los úldmos 100000 pesos gasiados por la Secretaría no implican aspectos de estética, o porque las personas afectadas se expresan :• de Comunicaciones y Transportes. Quizás pudieran ímeer algo, menos que las de Híghgate, Y cualquier Remanso residencial tiene' proba­ - sin embargo, para impedir que estos dos productos mm'ghmlm bilidad de ver terminada su paz y quietud por la desviación de una cosean muy diferentes. rrícntc principal de tránsito. "Basándose sólo en consideraciones sobre la corriente de tránsito, es pro­ : Retornamos aquí al punto de vista sencillo, pero no obvio, de bable que las técnicas de los expertos en tránsito reduzcan- el nivel de vida : que en la actualidad pudiera ser mejor enunciar los obpíivm aceptable del londinense con mayor rapidez que cualquier otro ñcontecimiem con tanta claridad como sea posible, o iudíoir de jmrrmmo pelo, Pero basados en una ponderación cuidadosa de todas las personas afec­ tadas —choferes, residentes, niños de escuela y compradores peatonespueden indicar el camino hacia un método barato y rápido que haga de Londres un mejor lugar para vivir y para manejar en él, hasta que podamos disponer de los recursos para una reconstrucción más radical.” Petcr Hall, [.andón 2 000, Fabcr and Fabcr, Londres, 1963, pp, 120-1. Y ai Para el problema de l;i siibopíiniizncíón vAsse Poíjih! N. Mcl-L .in, Effieif’ncy in Govcrruiiant. 'J'hyon^h Ó'.-Uroev ,1 js/g./.y, /Lv/Pm ou Water Re.wtures Dcvelo/miciil, A Kand ( bn potrti ¡<-i? Ih'ajrHi . Sludy, Yoik, John Wilcy & Sons, J958. pp. 99-31. 32 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL sibles variaciones compensatorias entre ellos en la medida en que i hgional.22 ¿Cómo debe' tratárseles en la evaluación de los pro­ puedan conocerse, como una guía para la elaboración de pro­ yectos? En los países avanzados, en los análisis de beneficio-costo, yectos de inversión. Cuando se presentan alternativas para la L; son por lo general ignorados por la correcta razón de que puede decisión, en la actualidad quizá lo más que puede esperarse e • £erse u6na ocupa°ción plei £ el aprovechamiento de las 1 . y... que A x H11P mnpstrp pl orrann Ha In.crm Haobjetivo rada AhiAtivn ruin HrtriHí ■*■ que secp muestre el grado de logro de cada y que donde i oportunidades de ganancia significa tomar recursos de otros usos es posible indicar las variaciones compensatorias, entre las alter­ ¿que casi son igual de lucrativos. Por lo tanto, el beneficio para nativas, éstas aparezcan con tanta claridad como sea posible. Ta ¿ : la economía proveniente de los efectos de cadena es insigninvez a largo plazo uno podría esperar que puedan crearse índices cante. Pero, incluso, en los países avanzados el hecho de que más satisfactorios del logro de objetivos. " ;^proyectos diferentes tienen diferentes efectos regionales podría don de ' ser una razón para seleccionar uno en lugar del otro, en la rael desarrollo regional es un objetivo importante. Ésta era secun\ zón que subyacía en el uso propuesto de los beneficios En este tipo de estructura de la selección de proyectos, ¿cómo , darios por el U. S. Burean of Reclamaron. incluyen los problemas de evaluación de inversiones a las con­ ; En donde los efectos de cadena se refieren a objetivos de in­ sideraciones aparentemente cualitativas del tipo mencionado eí, \ greso regional de ocupación, la evaluación del^xproyecto implica Urtl uouc Cv<uU™ la sección de políticas dé desarrollo regional?; por ejemplo, la (;tratarde de no elsin el proyecto. Mratar medir lo que ocurrirá proyecto, A la ocu- A la ocumedir lo que ocurriráo no 0 sin diferencia entre el capital general social y la inversión directa- ‘í pación . regionales, generados por las actividades y el ingreso’ regionales, generados por las actividades com- compacióu y el ingreso mente pioductiva. La diferencia no está en las razones por laQ pigmentarias, se les dará una mayor ponderación implícita, que cuales el gobierno persigue una política de desarrollo regional a una cantidad iguai de ingreso y ocupación que pudiera haCuando menos algunas de las formas en que los proyectos cum; 5erse generado en otras regiones. Esto no da lugar a ninguna píen sus objetivos son las mismas para todos los tipos de pro dificultad especial de evaluación. Mucho más difícil es manejar yectos de inversión. Todos los productos, que pueden venderá ha posibilidad de que el ofrecimiento de oportunidades de gadirectamente al consumidor, a los productores o que, cuando estp;- ...... . . no aprovechado - - y conducirá - •nancia liberará talento empresarial producto no puede ser apropiado adecuadamente por el produd a un cambio en el uso de los recursos del consumo hacia la tor y por lo tanto no le puede fijar precio, como una carre inversión. En el caso del aumento de ahorros, la dificultad surge tera, pueden cuando menos identificarse claramente y dárseles de la predicción de lo que sucederá. El problema del grado, un valor para los propósitos de evaluación del proyecto. Los en el que debe darse una mayor valuación a los ahorros que precios que se deben usar se discutirán en breve. : al consumo, es un asunto que se discutirá en breve, ya que En el caso de proyectos públicos, esto implica la venta d forma una parte esencial en la elección de precios sombra. productos al sector privado (incluyendo las familias) y con bas­ Es más difícil manejar el espíritu de empresa. Una década tante seguridad la compra de insumos al sector privado. Habrá = después que Hirschman expresó enérgicamente que una de las sin embargo, una diferencia en los tipos de proyecto en el grado principales tareas de los gobiernos en los países en desarrollo era encontrar formas de utilizar la existencia potencial de em­ en que hacen compras o venden al sector privado y por tanto eC presarios, hay muy poca evidencia empírica para defender o el número de oportunidades lucrativas que ofrecen para utilizar: rechazar esta opinión, y hay muy poco conocimiento sobre qué sus productos o para venderles importaciones. Habrá una diferenq tipo de proyectos lo hacen mejor. AI iniciar un proyecto de cía en la medida que tales oportunidades sean notadas por los empresarios potenciales o que ya existen, y en el tipo de empre­ " También se les puede describir como una clase importante de efectos sarios que serán capaces de tomar ventaja de esas oportunidades,; exteriores “pecuniarios” que un productor puede tener sobre los precios que confrontan otros productores. Los efectos exteriores “pecuniarios” no También habrá una diferencia en la medida en que se ofrece' implican una relación tecnológica directa entre la acción de un productor ocupación en otras industrias y en el grado en el cual las opor-j y la productividad de acción por otros productores; tal efecto exterior se tunidades de ganancia locales son mejores en otras partes. conoce, con frecuencia, como el efecto exterior tecnológico. Por lo general, se está de acuerdo que si existe una relación tecnológica entre dos pro­ Estas oportunidades de ganancias son, por supuesto, los efec yectos, se les debe planear y evaluar como si fueran uno solo. Hay mayor tos de “cadena” introducidos en la discusión de la política red Efectos en cadena desacuerdo en la forma que se debe tratar a los efectos “pecuniarios”. 34 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL ^POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL 35 crecimiento regional acumulativo, como es obvio, los pasos ini­ zada por carencia de las divisas necesarias para importar bienes ciales son críticos; el estímulo de los empresarios locales es intermedios y materias primas. El efecto de esto sobre el precio deseable. ¿Cómo debemos evaluar al espíritu de empresa? Los; de la divisa en términos de la moneda nacional —que es un factores normales pueden evaluarse en términos de una corriente elemento importante en cualquier cálculo de los costos y bene­ ele servicios ofrecidos —pero con los empresarios no es claro, de ficios de un proyecto— se discutirá en breve. En circunstancias modo alguno, cuál ha sido su contribución. No está cía-; en las que se espera que continúen las dificultades en el balance ro en qué grado y en , qué sociedades, dentro de los límites! de pagos, la aceptación de la inversión extranjera requiere un *deestudio recursos cuidadoso; para inversión, pero su seanálisis aprovechan está afuera las mejores de la oportuni presente dades. Es fácil observar que hay diferencias entre las sociedades^discusión. vy entre los grupos sociales i__ ___en_________ _i /__________ . ... de activi­• U’ __ .............. , la aparente búsqueda ; En resumen, el análisis de las “cadenas” debe tratar de eva­ dades que rinden ganancias y en el grado en el cual se llevan luar lo que habría ocurrido en ausencia del proyecto, no sólo a cabo actividades industriales más que en actividades comer­ en la región de que se trate, sino en toda la nación. Así, puede ciales. Un ejemplo obvio es la diferencia en el comportamiento; medirse la contribución neta del proyecto a los distintos ob­ económico entre los inmigrantes y el resto de las personas, tanto jetivos. en la sociedad de emigración como en la de inmigración. Pero puede discutirse, sin terminar nunca, la medida en la cual las Precios oportunidades han hecho a los hombres, o los hombres a las opor­ tunidades, y es incierta la medida en que lo “obvio” de las vXqui sólo se discutirán brevemente los precios de los insumos y oportunidades repeicute en esto. No obstante, está claro que de los productos que deben usarse al calcular el logro de objetivos, cuanto más pueda un proyecto regional descubrir el talento no porque no tengan importancia, sino porque ya se han discu­ empresarial dentro de una región, en lugar de traerlo de otras tido extensamente en otras obras.23 La selección de precios para partes, tanto mejor será. $hacer posibles las decisiones descentralizadas posiblemente sea Un problema relacionado se refiere a la inversión extranjera. ? aproximada. Observamos antes que, por varias razones (que tra­ En la mayoría de lis circunstancias, la inversión directa por taremos posteriormente), el gobierno podría dejar de usar los empresas extranjeras será bienvenida, puesto que ofrece al país 'precios del mercado y utilizar sus propios precios sombra. El receptor un aumento en la inversión total, respaldada, con fre­ ; conjunto ideal de precios sólo surgirá después de que se hayan cuencia, por el ofrecimiento de conocimientos y el entrenamiento1 comparado todos los usos alternativos de los recursos en térmide la fuerza de trabajo interior. La inversión extranjera podría í nos de su logro de todos los objetivos sociales y se haya elegido ofrecer “cadenas” que estimulen la actividad interior. En donde , el mejor programa de inversión' y producción. Pero si fuera po­ hay desocupación de mano de obra, y en donde se importa el sible y razonable hacer esto, entonces no habría necesidad de capital y los empresarios capacitados, la inversión extranjera po­ ’ decisiones descentralizadas y, por tanto, de precios. En conscdría no implicar un gran desvío de los recursos de otras acti­ ' J cuencia, los precios que se utilicen se calcularán sobre una base vidades, de manera que el producto total del proyecto podría -muchos menos ambiciosa y, por lo general, tratarán de repreparecer una ganancia neta. Contra esto, sin embargo, tienen . sentar la escasez relativa de los productos y factores en relación que sopesar las posibles desventajas políticas; a los gobiernos' : a un solo objetivo, el de obtener el mejor les desagrada mucho que cantidades significativas de los activos1 : consumo disponible. de capital del país estén en manos de extranjeros, quizás por­ \ Una dificultad en el uso de los precios de mercado es que que creen que esto implica cierta pérdida del control político.. i los precios relativos de los bienes podrían no reflejar los cosLa inversión extranjera tiene también efectos sobre el balance ' tos de producción, porque algunos se venden en mercados mode pagos —proporciona divisas mientras se hace la inversión nopolísticos, o porque el impacto de los impuestos indirectos inicial, pero establece futuras obligaciones potenciales en térmi­ 3? Una introducción bastante clara a este tema se publicó en Manual on nos de la salida de utilidades. En muchos países, una escasez Cosí Benefit Analysis, por I. M. D. Little y J. M. Mirrlees para el Centro en divisas parece ser el principal obstáculo sobre la tasa de de Desarrollo de la ocde, París, 1969. El haber leído un borrador prelimicrecimiento—, parece existir cierta capacidad interior subutili- ; nar de ciertos capítulos del Manual nos ha aclarado mucho esta sección. í I 36 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL O M a/ rios, y el nivel actual de calidad de los bienes manufacturados de todos tipos está lejos de ser idéntico. En donde los impuestos Lace a éstos inaceptables en el exterior, o, porque, del lado (incluyendo los aranceles de importación) se imponen claramente f de la demanda, el país ya tiene el máximo de ingresos prove­ para desalentar el uso o producción de una mercancía, entonces, ciente de otras exportaciones. Cuando menos es posible teórica­ estarán incluidos en los precios de los insumos y de los produce mente que haya un límite superior en las divisas sin importar tos. Pero en donde los niveles de éstos son casuales, resultando cuál sea la tasa de cambio o patrón de tipos de cambio múltiples principalmente de una serie de accidentes históricos, es muy atrac­ aunque sería poco real suponer que en la actualidad el tipo tivo, en teoría, el uso de un conjunto de precios que prevalecería -de cambio o las tasas múltiples puedan ajustarse libremente—, en condiciones de libre comercio con una tasa de cambio eii por un número limitado de exportaciones potenciales y un comequilibrio. ¿portamiento poco favorable de la demanda, y, quizás, por los La razón de este uso de los precios es que, en teoría, toda ¡.mercados exteriores controlados por acuerdos sobre mercancías la producción comercial está disponible para la exportación, o ¿o cuotas de importación. La dependencia de un solo tipo de remplaza una importación potencial, y que el uso del precio, ¡cambio sin impuestos de exportación, hace a este límite aún al cual sería exportado o remplazaría una importación, es su kmenor, pues la tasa de cambio no puede ajustarse para cada valor práctica, no es calcular la vdiui para paid laid economía. vcouumidEnisnla id piacucd, no fácil es raui taicuiar M ,mercanda de ^3^ para Hevar a un máximo los ingresos tasa de cambio adecuada. Si los niveles arancelarios son altos divisas es posible existente existente esté subvaluada, y es posible quequela tasa la de tasacambio de cambio esté subvaluada, y ef; V puede óbjetar> con razón< esta s¡tuación es poco incorrecta para el propóstto de calcular los. precios sombra. Una i pi¿0. Por t0/se necesitaría mucho ¿em. manera de superar este problema es trabajar con dólares, utila -po para que los productores nacionales y los importadores del zando precios internacionales. Esto no es argumentar que la' ¿exterior respondieran a los cambios en los precios, y existen política comercial de los países menos desarrollados debe ser .muchas razones que dificultarían la expansión de cierto tipo necesariamente de libre comercio, sino sólo que la protección ¡de exportaciones. Sería bastante difícil obtener un cambio de la proporcionada a una industria debe considerarse a la luz de las ^producción del mercado interno hacia las exportaciones en los necesidades de esa industria y que la utilidad social de otras f países desarrollados, en donde los cambios requeridos en la esindustrias no debe ser afectada por el hecho de que tengan que ¿tructura de la producción y en el comercio son menores, en comprar sus insumos a precios elevados de una industria pro­ donde los factores de la producción son más móviles y en donde tegida. Aquí puede surgir una objeción del argumento frecuente es probable que la respuesta ante los incentivos de precios sea de que el crecimiento de una economía está peculiarmente limi-jjpnás rápida. A corto plazo, tendría sentido distinguir, en la platado por una escasez de divisas, en tanto que los recursos inte-líideación en los países menos desarrollados, recursos exteriores y riores no se utilizan completamente. ¿Qué tan válido es esto ^recursos interiores, ya que los últimos no se pueden sustituir como objeción? con rapidez por lo primeros. Sin embargo, es mucho más dudoso Ciertamente, es posible concebir una situación en la que las hacer esto cuando se trata de determinar la estrategia de desposibilidades de producción dentro de una economía y el pa­ arrollo a largo plazo y suponer a priori que la especializa ción ral en los bienes, en que el país tiene una ventaja comparativa, no trón de demanda por los productos de la economía sea que haya recursos no utilizados que no pueden emplearse sin ¿proporcionará suficiente ingreso de divisas. En donde puedo divisas adicionales. La más probable razón de esto es qué la ‘ identificarse a la disponibilidad de divisas como el único “em­ inversión requiere importaciones que no pueden producirse den­ botellamiento” de la producción, siendo general la capacidad tro del país, pero también una elevada propensión marginal ¡excedente en otras partes de la economía, entonces la selec­ importar bienes de consumo combinada con un sistema imposi­ ción de proyectos estará limitada a llevar al máximo el logro tivo demasiado ineficaz, para presentar ingresos personales enkdc objetivos con las divisas disponibles. No obstante, esto no aumento, podría tener el mismo efecto. Las posibilidades de pro­ terminaría el problema de la elección de precios. Todavía sería ducción y de mercados podrían impedir el uso de recursos necesario fijar la tasa de interés y se necesitaría ajustar los sa­ internos no utilizados para obtener divisas, quizá porque del jados de la mano de obra, pero en esta ocasión sólo se consi­ lado de la oferta no están disponibles' los recursos naturales derarían el ingreso intertemporal y la asignación de divisas, en necesarios para aumentar las exportaciones de productos prima\ 38 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGI O N Al ¡ lugar del patrón temporal más usual de inversión y consumí:' globales. Dentro de poco discutiremos las tasas de salarios y d í interés. ü Sería difícil utilizar precios de libre comercio en el caso d? ciertos bienes, como la producción de los proyectos de capití f general social que no están sujetos al comercio internaciona [ Pero su producción usa importaciones que sí están sujetas a e$ i comercio o que pueden incorporarse a bienes que estén sujeto L al mismo. Recorriendo la cadena de producción es posible eit presar el costo de producción de los bienes no comerciales é i bienes comerciales y mano de obra. Sin embargo, hay problema adicionales al dar un precio a la producción de esos proyecto^ El uso de los precios reales (en donde pueden tenerse) podrí r *reflejar elementos de subsidio deliberado (esto es común, po ejemplo, en los proyectos de irrigación). Además, con frecuencia los proyectos sólo son económicos si se les realiza en gran e f cala, lo cual implica un cambio en los precios de los producto; y quizás también en los de los insumos. Ésta es una consecuencia probable de los proyectos de desarrollo regional, efectos en c^ dena, por ejemplo, quizá se manifiesten como cambios en lo precios que hacen lucrativas a otras oportunidades productiva En donde un aumento de la producción conduce a una baj; en los precios que prevalecerán en un mercado competitivo, tf multiplicar el producto por el precio al cual puede venderse suL estima su valor social, ya que parte de la producción pud haberse vendido a un precio mayor. En estas circunstancias, po; lo general, se acepta que la mejor medida del valor social di; proveer un bien o servicio es lo que los consumidores del biej o servicio pagarían por él. En donde las cantidades de que trate son grandes en relación con el gasto total de los consumí: dores, y el bien es un bien de consumo, es difícil calcular lo qtp los consumidores pagarían, puesto que pagar por esa cantidai afectará el ingreso disponible para otras mercancías y llevará y una redistribución del gasto. No puede obtenerse una medid; de lo que se pagaría observando sólo la demanda de una meo canela. No hay un efecto comparable al bien que se compiy como insumo de la producción. Así, el valor que se asigna a, abastecimiento de agua de irrigación se calcula por lo genera? sobre el supuesto de que, después de pagar el precio del med cado para todos los otros insumos, el productor estará, si e: necesario, dispuesto a pagar todas sus ganancias por el agua/? Esto está bien explicado en el libro de Stephen Marglin, Public Invesi': ment Criteria, Londres, George Alien and Unwin, 1967, pp, 41-4. POLÍTICA DE?. DESARROLLO REGIONAL 39 antes que pasarse sin ella. Consideramos el caso para realizar o no una inversión porque es la medida que debemos seguir, sin importar lo incongruentes que puedan parecer los resulta­ dos en algunas ocasiones. Si, en ausencia de inversión en obras de abastecimiento de agua que cuesten menos de un millón de dólares, no puede realizarse todo el desarrollo industrial de una cuenca hidrológica que rinda cientos de millones de dólares sobre los usos alternativos de los recursos, entonces los benefi­ cios de un pequeño gasto serán muy grandes en realidad. Si sin el proverbial "clavo de la herradura” el Reino está perdido, en­ tonces el rendimiento derivado de proporcionar tal clavo es en realidad muy alto. El hecho de que otros insumos son igual­ mente indispensables y de que el excedente sobre los usos alter­ nativos pueden por igual asignarse a ellos, sí su producción se incluyera en el problema, no altera el análisis. El dar un precio a los productos y a los insumos, al menos en el comercio internacional, es un asunto teóricamente mucho más sencillo que el asignar un precio a la mano de obra no ca­ lificada y la determinación de un procedimiento satisfactorio para el descuento de los beneficios futuros de un proyecto. Al discutir brevemente los problemas que presentamos aquí, debe­ mos prevenir al lector de que estamos navegando en aguas difí­ ciles. No es el propósito de esta discusión derivar fórmulas que nos guíen al hacer decisiones reales o tratar las diferencias muy complejas en las opiniones sobre el bienestar social que están implícitas en la elección de un criterio de inversión en lugar de otro,25 La sociedad ahorra e invierte porque al posponer su con­ sumo, puede obtener más consumo en años posteriores, siempre que el rendimiento sobre la inversión sea positivo. Debe supo­ nerse que cuanto más ahorro ocurre tanto más bajo se buce el rendimiento marginal. La sociedad, o cuando menos la inter­ pretación del gobierno de las necesidades sociales, no deseará normalmente, ver que se ahorra ingreso hasta el punto en el cual el rendimiento marginal del mismo se hace igual a cero. Se debe, por una parte, porque a medida que se hace disponible más consumo, la valuación marginal del mismo será probable­ mente menor, nadie argumentará que el indio común que vive en la actualidad debe sacrificar 10 rupias de consumo para que sus descendientes puedan disfrutar de 11 rupias de consumo un as Para una discusión adicional véase Lú'lc y Múrices, op. cit,; Marglin, Public Investment Gritería, pp. 47-71, y Stephen A, Marglin, "The Rate of Interest and the Valué of Capital with Unlimitcd Supplies of Labor” en Karl Shell ed., Essays on the Theory of Optima! Growth, Cambridge, Mass., M. I. T.,- Press, 1967, pp. 141-63. 40 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL Apolítica del desarrollo regional 41 l *• siglo después (viviendo quizás a los niveles europeos actuales). salario sombra esté mucho más cerca del consumo de un tra­ Por otra parte, se debe a que la actual generación es mortal, a bajador, obtenido de los salarios (quizá sea una proporción que es ella quien elige el gobierno y a que, quizá, sea limitado su Imuy grande), que de cero, sin importar lo baja que pueda ser deseo de sacrificar consumo para que sus hijos puedan consu­ da productividad marginal del trabajador en la agricultura, Los mir más. j^resultados se reforzarán si hay alguna tendencia a que un inNo obstante, el gobierno puede creer que la proporción dé ócremento en la ocupación aumente los salarios de todos los ingreso que se ahorra en el presente es inadecuada en vista del. trabajadores empleados, lo cual puede parecer poco probable alto rendimiento, en términos de consumo futuro, que puedft : en economías que tienen excedentes éfe mano de obra, pero que obtenerse por la inversión, pero puede ser incapaz de aumentar J sí puede ocurrir con proyectos de desarrollo regional en zonas la tasa de inversión, al nivel que considera adecuado, por su '.escasamente pobladas y. que en realidad ocurrió en el caso de habilidad limitada para establecer impuestos. Hay dos conse­ ; México. La elección y uso de una tasa de descuento implica dificultacuencias importantes de esto, una se refiere a la elección del salario sombra de la mano de obra, y la otra, a la elección de las : des semejantes. En las circunstancias descritas antes, la tasa de tasas de descuento de los beneficios futuros. En primer lugar, rendimientos sobre el proyecto marginal será mayor que la tasa una estructura de la inversión que conduce a un menor nivel - a la cual el gobierno cree que debe descontarse el consumo fudel consumo actual y a mayores ahorros sería preferible, si lo • turo. Ahora bien, es deseable que, si todo lo demás permanece demás permanece igual, a una estructura con un mayor consumo igual, la inversión tenga un rendimiento tan grande como sea actual y menores ahorros. Esto afectará la elección de los pro­ posible y, si estamos eligiendo entre proyectos que tengan una igual duración, con una proporción igual de reinversión de su yectos de inversión y las técnicas asociadas a ellos, ya que los ■ salarios sombra que se emplearán en la evaluación de proyectos producto y con iguales contribuciones al desarrollo regional y y en la selección de técnicas no sólo deben reflejar el costo de . otros desarrollos, no invertiremos en un proyecto que rindió oportunidad de la mano de obra en los usos alternativos, sino' : 3%, si hay otro que da 15%. Si el gobierno pudiera controlar toda la inversión y la reinversión y fuera capaz de predecir con también el efecto que el consumo actual de esa mano de obra exactitud el rendimiento que se obtendría durante varias déca­ tendrá sobre la corriente de consumo futura disponible para la economía. das, como resultado de una inversión particular que se hace ahora, sin importar la duración del proyecto particular de in­ En la mayoría de los países en desarrollo es probable que el versión de que se trate, seleccionaría entonces una tasa, de des­ costo de oportunidad de la mano de obra dependa directa o cuento que, cuando se usara para las tasas de descuento de todos indirectamente de la productividad marginal de la mano de obra los proyectos y para seleccionar todos aquellos cuyos valores ac­ en la agricultura y por lo general se calcula que ésta es muy tuales son mayores que cero, hiciera las inversiones totales por baja, mucho más baja que los salarios que recibiera el trabajador realizar iguales a la oferta de recursos para inversión. Haría laborando en la industria o en un proyecto público de inversión. esto, incluso, si la tasa de interés fuera considerablemente mayor Pero una mayor ocupación implicará, por lo general, más con­ que la considerada como tasa social de descuento. En estas cirsumo total y, por tanto, menos ahorro. El aumento del consumo í cunstancias, se supone que la cantidad total de inversión no se asociado al empleo de un trabajador en un proyecto resulta ' altera por la distribución entre los sectores públicos y privados. tanto del consumo adicional de quienes siguen en la agricultura . La tasa marginal de rendimiento en ambos sectores, por lo tanto, y que disfrutan de un ingreso mayor después de que el traba­ jador se fue, y del mismo consumo incrementado del trabajador, ; debe ser igual. í En la práctica, todos los supuestos hechos aquí no son reales. quizá considerable. Por supuesto, este consumo adicional no es La inversión pública podría financiarse con impuestos y despladel todo un costo para la economía, pero el gobierno lo con­ ’ zar, sólo parcialmente, la inversión privada. Podrían existir rasiderará de un valor social menor que si se hubiera ahorrado ■ zones políticas por las que el dinero obtenido de ese modo no todo el ingreso adicional. El “salario sombra” estará entonces j estuviera disponible para el sector privado y ésta pudiera ser entre la productividad marginal de la mano de obra y la tasa una justificación para que el gobierno invirtiera en proyectos real de salarios pagada. Little y Mirrleés demuestran que con ¡ que tienen una tasa de rendimiento menor que la que se puede supuestos posibles sobre las magnitudes de que se trata quizás el 42 POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL f POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL ■ obtener en el sector privado. La vida económica de todos lo; proyectos podría no ser la misma y podría diferir la reinversiói r proveniente de ingresos. Entonces el gobierno podría preferir un proyecto de larga duración con una tasa de rendimiento relativamente baja (aunque igual o mayor que la tasa social dr descuento) a un proyecto que diera un mayor rendimiento, coi. menor duración, y por el que quizás el ingreso se consuma eh gran parte o se invierta con un rendimiento muy bajo. Um. manera de tratar esto es que el gobierno utilice la tasa socia i de descuento al descontar proyectos, haciendo un cálculo de Ir reinversión esperada y elegir entonces (suponiendo que es igua ■ al grado de logro de otros objetivos) aquellos que tienen le mayor tasa de beneficio respecto de los costos, Marglin ha obtej nido una fórmula para calcular la tasa mínima beneficio coslt que debe satisfacer un proyecto, teniendo en cuenta el grado ef: el cual la inversión privada es desplazada por el proyecto, la tasó de rendimiento en^el sector privado y la proporción de ingreso! f reinvertido.20 Hemos usado en un sentido amplio la expresión “tasa mat ginal de rendimiento’’. Para un proyecto ésta puede estar asó. ciada con la tasa interna de rendimiento sobre un proyecto dr inversión marginal, la tasa de interés que hará el valor actual! de los beneficios menos el costo del proyecto igual a cero. Por’ desgracia, en algunas ocasiones, esta medida puede ser ambigua podría haber varias tasas internas de rendimiento definidas así. Y por las razones que acabamos de explicar no siempre se pre­ ferirá por la inversión un proyecto con una mayor tasa de ren­ dimiento interna a otro con una tasa de rendimiento internrí menor. Sin embargo, la tasa de rendimiento interna cuidado­ samente calculada podría ser útil para el analista en ciertas circunstancias. En el capítulo vii calculamos tales tasas para un proyecto mexicano bajo una variedad de supuestos. No tratamos de clasificar proyectos pues no tenemos información sobre lo que debe ser en México la tasa social de descuento. En estas circuns­ tancias, el uso de una tasa de rendimiento interna significa que no hay necesidad de seleccionar una tasa social de descuento. Este procedimiento proporciona una base fácilmente compren­ sible para comparar la tasa de rendimiento con. lo provechoso de los proyectos privados. En la práctica, sólo podemos calcular la tasa de rendimiento con respecto a los objetivos que se expresan fácilmente en tér; M En este libro no interesan los detalles. Véase Marglin, Public Investmenl Criterla, pp, 53-71, y “The Opportunity Costs oí Public Investment”, Quar terly Journal of Economics^, lxxvii, mayo de 1963, pp. 274-89. 43 minos de ingreso. Ésta no es razón para ignorar los otros obje­ tivos. De hecho, como veremos en los últimos capítulos, el pro­ yecto seleccionado para un examen detallado no satisfará nuestra prueba de aprobación, a menos que algunos de los objetivos, que no pueden medirse en términos monetarios, se incluyan en los cálculos. No obstante, antes de proceder a esta evaluación veremos la forma en la que las consideraciones que se presentan en ambas partes de este capítulo pueden influir en la historia de los esfuerzos de desarrollo regional en México. EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO CAPÍTULO II EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO En un país tan grande y tan variado geográficamente, como; México, son casi inevitables los niveles desiguales de desarrollo; económico regional y de tasas de progreso. México es muy mom tañoso, sólo una tercera parte de su superficie puede describirse como plana y más de la mitad del país está por encima de los 900 metros sobre el nivel del mar. La mayoría de la población siempre ha vivido en las zonas altas y, especialmente, en la Mesa. Central, parte media de una cadena de montañas y alta meseta que forman el espinazo del país. Separada de las zonas costeras situadas al este y al oeste por escarpadas alturas teniendo hacia el sur profundos valles y montañas selváticas, y hacia el norte; zonas desérticas, no ha sido, históricamente, fácil para los habi­ tantes de la Mesa Central salir de ella; por otro lado, han exis­ tido pocas razones para hacerlo. Sus habitantes nunca han com­ partido una sola cultura, en tanto que en otras partes la pobla-; ción ha estado dispersa en pequeños grupos en las relativamente pocas zonas en que el suelo ha sido lo suficientemente rico, la provisión de agua adecuada, y la pendiente lo bastante; plana para sostener el cultivo del maíz. En otras partes del país,, la movilidad interior también ha estado restringida por carao terísticas geográficas. Sólo en los últimos veinte años se conec­ taron las planicies calizas de Yucatán, en el sureste, con el resto7 del país por medio de ferrocarriles, y, en los últimos diez año$¿ por medio de carretera. Antes de eso, las dificultades para atra: vesar las planicies inundadas de la costa sur del Golfo o las montañas que están atrás de ellas impedían la comunicación por; tierra. El aislamiento cultural, lingüístico y económico de los. diferentes pueblos lia sido, en consecuencia, considerable. Dentro de las actuales fronteras de México hay cerca de 50 grupos lin­ güísticos indígenas distintos? Describir con detenimiento la variedad ele características geo-; gráficas y de economías locales dominadas por diferentes pro­ ductos y su desarrollo histórico sería una tarea inmensa. Los pá1 L eslíe Byrd Símpson, Many M exicos, Berkcléy y Los Ángeles, University of California Press, 1960, p. 10. 45 rrafos siguientes sólo tratan de bosquejar los principales rasgos del patrón de desarrollo regional. Las características principales de la Mesa Central resultaron de una actividad volcánica que ocurrió a través de una amplia falla, de unos 150 kilómetros de ancho y 1 200 kilómetros de largo, que va desde las costas del Pacífico hasta el Golfo de México. Una topografía más antigua de cerros redondeados, pen­ dientes suaves y amplios valles se volvió más montañosa por el surgimiento de los volcanes, y los ríos que drenaban los valles fueron bloqueados por material volcánico, formando así cuencas cerradas. Después, los ríos cortaron los profundos y estrechos valles a través de los cerros, y todas las cuencas, excepto el Vahe de México, son drenadas, en la actualidad, por ríos que llegan al mar. La altura de estas cuencas varía entre 1 500 metros sobre el nivel del mar, en la cuenca de Jalisco, y 2 500 me­ tros, en la cuenca de Toluca. Los miles de conos volcánicos son de alturas variadas; el del Orizaba, el más alto, tiene más de 5 500 metros. Desde las épocas que precedieron a la conquista, la i\ícsa Cen­ tral ha sido continuamente la región más impórtame de México desde todos los puntos de vista: político, económico y cultural. Al norte de la cadena volcánica, cuyo nivel general está entre 1 500 y 2 500 metros, la meseta presenta una ligera pendiente hasta la frontera con los Estados Unidos cuyo nivel está entre los 1 000 y los 1 200 metros. La superficie de la meseta no es plana en ninguna parte; su parte septentrional recuerda mucho al terreno del suroeste de los Estados Unidos, con bolsones de pendiente suave separados por sierras de montañas monolíticas que se elevan unos 1 000 metros por encima de ellos. Esta parte septentrional es seca en extremo, recibiendo algunas zonas menos de 250 mm de lluvia anual y otras menos de 500 mm. Más hacia el sur, la precipitación pluvial anual aumenta y en partes de la cadena montañosa excede de 1 000 mm. Por tanto, las tribus indígenas emigraron del norte más árido para establecerse y convertirse en pueblos agrícolas, alcanzando niveles de cultura mucho más altos que los que se llegaron a lograr en el norte en donde no era posible establecer la agricultura sedentaria. En la Mesa Central las tribus encontraron mía zona templa­ da, con densos bosques, muchos lagos y ríos alimentados pol­ las capas de nieve de los volcanes más altos. Por lo general, los pisos de siete cuencas (las tres que hemos mencionado y las cuen­ cas de Guanajo ato y Puebla, los valles de Aguasca lien tes y Moreíos) eran pantanosos, hubo asentamientos primero en los lí­ mites de las cuencas y en las laderas inferiores de los cerros, con 46 EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO tEL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO 47 •de las fuentes de éstos se encontraban en la Mesa Central o en mayor densidad que en las zonas más bajas. Los aztecas fueron potros lugares de la meseta hacia el norte, no hubo razón para la última de las tribus nahuas que se establecieron en el Valle" ¡un cambio notable en la distribución de la población durante de México y se vieron obligados a establecer su ciudad capital, el período colonial. En la época de la Independencia, las ha­ Tenochtitlan, en una isla en medio del lago porque era el único ciendas se concentraban principalmente en esta región, aunque sitio que estaba libre de asentamientos. Siendo una nación de también había algunas en Yucatán. guerreros, habían obtenido el dominio sobre gran parte de la: No tenemos una cifra aceptada para la población total de tierra del sur y tenían un sistema de tributos sobre ella, cuando ¡México en el momento de la conquista. Un cálculo común es Cortés entró en Tenochtitlan, el 8 de noviembre de 1519. En dos: ¡de 9 millones, aunque en ocasiones se lleva tan alto como 25 siglos, Tenochtitlan había crecido hasta tal punto que en tiem­ ¡millones. La mayoría vivía en la Mesa Central; cuando los espos de la conquista los españoles calcularon que su población pañoles llegaron ya estaba densamente poblada. Pero una vez superaba los 300 000 habitantes (posiblemente esto es una exa­ ¡que estuvo sujeta a las diversas epidemias que siguieron a la lle­ geración) y se maravillaron por su belleza. Más tarde uno de gada de éstos, la población disminuyó con rapidez y no se había ellos escribió: ^‘¡recuperado del todo cuando se logró la independencia en 1821. "Y desde que vimos tantas ciudades y villas pobladas en el La base de la existencia de la población indígena era, y sigue agua, y en tierra firme otras grandes poblazones, y aquella cal­ ¡siendo, el maíz, aunque también se cultivaban frijol, chile, zada tan derecha y por nivel como iba para México, nos que-; ¡calabaza, camote, maguey y otros. En las zonas montañosas bos­ damos admirados, y decíamos que parecía a las cosas de encan-¡ cosas los métodos de cultivo eran variedades de la "roza", que tamientos que cuentan en el libro de Amadís, por las grandes ■ha contribuido a los actuales problemas graves de erosión. En torres y cues y edificios que tenían dentro del agua, y todos de las zonas lacustres exigían el frecuente abandono de la tierra : calicanto, y aun algunos de nuestros soldados decían que si para que ésta recobrara su fertilidad, requiriendo migraciones aquello que veían si era entre sueños y no es de maravillar quej d<= tribus dentro de la zona. Las técnicas eran muy aquí ¿e ^uYhay^chPquE^^^ yo escriba aquí de esta manera, i ’ ' rar en ello que no sé como lo cuente: ver cosas nunca oídas, ní ? 7^°' £uero.n. lntroduc1ldos Pw‘“ “panoles. X.laI. , .. .. finada a menudo haqirsi H Ine AL™GenO,», mada a!nmenudo "la zona básica de los cereales", laU,Mesa aun soñadas, como veíamos." 2 ra! durante siglos, la principal región agrícola. Pero con I : Después del sitio y destrucción de Tenochtitlan en. 1521, Cory la introducción de los ferrocarriles y la irrigación en gran escala, tés fundó la ciudad de México en el mismo lugar y tomó po­ ¡zonas alejadas de la región de los cereales empezaron a desarro­ sesión del Imperio azteca en nombre de la Corona de España,k parse con mayor rapidez. La zona retiene su preeminencia en Como sitio para una ciudad capital, en aquel tiempo dejabaf Ja producción de maíz, por estar menos adaptada a la produc­ mucho que desear, y hoy en día aún más. En los meses dél ción de otros cultivos comerciales, como el algodón, cafe, azúcar, verano, la estación de lluvias en la mayor parte de México, los! frigo y vegetales de invierno, que comercialmente son mucho lagos en los cuales se construyó la citidad aumentaban con fre­ ínás importantes que la producción de maíz en otras zonas y cuencia su nivel, inundándola. Después de varios siglos de inil cuyo cultivo, durante el último medio siglo, ha sido la caracte­ *tentarlo, se logró el drenaje exitoso del lago a principios de este rística más .importante en México. El valor siglo, y desde entonces los problemas de la ciudad han cambiado^ ¿ , o - de la agricultura ....... ............... . 0 i sido supepero no han desaparecido. En la actualidad la ciudad se enfrenta» ^ producción agrícola de la Mesa Central ha tado ahora por el valor de la producción de la región agrícola a una seria escasez de agua más que a un exceso y se está hun­ rrigada del noroeste. La Mesa Central sigue teniendo tprcemiiconolacustre. iacuoLic.Tendremos . L.iiuik.ww más que Mt , , . . diendo en el esponjoso( lecho 13/” Us productos de ammalcs, porque el mercado ) HUÍS problemas cuando consideremos los actuales^ decir sobre estos | v importante está localizado en ella. del desarrollo regional. i ., , . , , „, :: -i vi HuíI<Al c i norte de la Mesa Central está una zona escasamente peJú.aeconómica de los españoles eratt namada ta l ■principal preocupación . ' . , ______a con frecuencia la Mesa del Norte. La industria M los minerales, en especial la plata y el oro. Como la mayoría! pera de la región ha estado estancada durante años, pero áreas ’ Berna! Díaz del Cast.illo, Historia verdadera de la conquista de la NWaImportantes han progresado mediante el des'irn'ñH ,M irrigaEspaña, Colección “Sepan cuantos../’, núm. 5, Editorial Porrúa, S. A., M6® *’ ’íción (aunque en años recientes la sequía ha ieníd efectos xico, 1964, p. 147. p jhiwu j W 48 49 EL DESARROLLO-REGIONAL EN MEXIgÍ F DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO arada una gran £aj a del desierto. La zona más merídioconsiderables). Sin embargo, en esta Mesa del Norte la irriga­ M Ir , J ^P s por os esta-dos de Sonora, Sinaloa y Nayarit, tiene una costeras aí ^ ción ha sido menos importante que en las zonas <------------------------- J. 'agricultura bastante diversificada, siendo el algodón el cultivo oeste y este de ella. Separando la meseta de las costas se eré ¡principal. (La sección del capítulo iv que se refiere a la Comi­ cuentran elevaciones abruptas que se conocen con el nombre ck: sión de la Cuenca del Río Fuerte contiene ¿más información la Sierra Madre Occidental en el oeste, y la Sierra Madre Orienj ¡sobre la agricultura de la zona.) La zona del río Colorado en tal en el este. Ambas forman barreras de importancia para el ¡Baja California, el sector mexicano del Valle Imperial, produce, movimiento de las costas hacia la meseta. En particular la Sierra r kasi exclusivamente, algodón y es la zona algodonera más im­ Madre Occidental, con un ancho de 160 kilómetros en algunajj portante de México. partes, ha sido difícil de penetrar, aunque en años recientes hV ¡ El algodón es también el cultivo principal en la zona costera sido atravesada por dos carreteras pavimentadas y por un feria del noreste. De especial importancia son las áreas irrigadas a carril. Sus picos se elevan a más de 3 000 metros, y varios ríd lo largo del río Grande (el río Bravo del Norte) que forma la montañosos que corren rumbo al sur, han cortado valles pro .frontera con los Estados Unidos, La frontera ha afectado a la eco­ fundos con paredes de gran pendiente en los acantilados y a / nomía del norte en toda su extensión. Hay considerable opor­ nadas a través de las estrechas serranías que las separan. tunidad de cruzarla, y esto atrae un gran número de personas Las zonas costeras del norte son muy importantes desde em­ ¡que buscan esta oportunidad. Por esta razón, las ciudades fron­ punto de vista de la agricultura. La costa noroeste es, en 1L terizas -son, paradójicamente, areas de ingresos, per capita rela­ actualidad, la principal región agrícola de México. La ComisiÓ! tivamente altos y de una alta desocupación. Como describiremos, de la Cuenca del Río Fuerte, cuyo trabajo se describirá en d tas Edades son ahora el objeto de un programa para ocupar igaciót ? capítulo iv, se encuentra allí, pero sus trabajos de irrig b - «rndustrialmente esta mano de obra desocupada. El efecto más sólo son una pequeña parte de la irrigación total de esta región notable de la cercanía de los Estados Unidos ha sido en el oeste. Allí la irrigación es esencial para la agricultura —lo que no tieijí Tijuana es en la práctica un apéndice de la economía del sur irrigación es normalmente un desierto— y tiene una larga tri de California, y Baja estado en que se encuentra dición. En lo que son en la actualidad los estados de Nayan L.. < . California, ; er y Sinaloa, los primeros exploradores españoles encontraron triM ? caPtta mAs alt0 cual^‘CT «indígenas que tenían agricultura con irrigación a lo largo ó ■ ‘ , las planicies fluviales. La zona nunca estuvo poblada densa embargo eí centro urbano más importante del norte no mente y en pocas décadas la mayoría de los pueblos T’.T,120 en la parte baja exterminados por las enfermedades o se les llevó para convd f ™ Paso conduc. 1 V* “' "V" “ e"la “ tirios en esclavos. Se ha calculado que hasta 1920 la poblaciá.1,Vhh, W i r, oSonora, „ r.uAnnn qtt «n ./idad,, es la segunda ciudad industrial en importancia. Ha crecido de Sinaloa y Nayarit llegó a 540 000,„ población en población de 30 000, en 1880, a más de veinte veces ese nú­ 3 existía cuando los españoles llegaron por primera vez, En une mero en la actualidad, como resultado del auge industrial estimu­ pocos valles lejanos, de los cuales el más importante es el Valí lado por su industria del acero. Aunque Monterrey no es un del Vaquí, existen todavía comunidades indígenas; pero la mí sitio que tenga mineral de hierro o carbón, está sobre la vía yoría se convirtió en propiedad de las haciendas. En los año dérrea que une a la capital con los Estados Unidos, y en los treinta, éstas fueron remplazadas por ejidos (las comunidad 5 primeros años del siglo parece haber tenido un clima político agrarias establecidas bajo la reforma agraria), o por pequeña para el establecimiento de la industria; éstas parecen propiedades privadas. 5 haber sido las. principales razones por las cuales, en 1903, la iny íiuiiicuua v. íiiviiztiius oucnii?-, * , * La zona tiene veranos calientes y húmedos c inviernos suavt. r d ,na lexlca a un formidable competidor d ® " " del acero tuvo aquí sus principios. y secos, y está demostrando ser i * ■ A lA nrcrn np la mds oriMni'd Af¿v»rAde la costa oriental de México, desde el sur de A lodnlargo California en ciertos mercados de los Estados Unidos e inten ^Monterrey, está la zona productora de petróleo que fue lo bas­ nacionales. En esta región están incluidas dos zonas agrícola cante productiva como para convertir a México en el segundo productor del mundo poco después de la primera guerra mun3 Presión E, James, Laim America, 3a, cd., Nueva York, Odysscy I’rei í{jiai. centro tradicional de la industria del petróleo ha estado A 1959, p. 606. 50 51 EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICÍ DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO en el norte en torno a Tampico, aunque su centro se ha de; fría, en los años treinta, y de la expropiación de las plantaciones, plazado ahora a los campos de Poza Rica cerca de Tuxpan. Lí los ejidos > no funcionaron con la suficiente eficiencia para con­ producción de petróleo en el sur de la región, en el Istmo d^{ servar bajos los costos y se descuidó el hacer nuevas siembras, lo Tehuantepec y en el estado de Tabasco, ha estado aumentan^ ;cual significó que la producción disminuyera con rapidez a prin­ su importancia. < .) cipios de los años cincuenta. Pero el lograr que la producción Esta zona meridional, que empieza en el río Támesis que form|:vuelva a su nivel normal (aunque sólo fuera la mitad de la del la frontera entre los estados de Tamaulipas y Veracruz en lí¡ año de 1916 en que se logró la máxima producción) no asegu­ costa del Golfo, también es importante debido a los productos ■ rará la prosperidad en el fuertemente competitivo mercado mun­ agrícolas que se cultivan allí. Estas planicies costeras son cálidasdial de las fibras. y húmedas. La lluvia es abundante, aumentando desde 100 j ■ Las otras regiones de México pueden describirse rápidamente. 125 cm en el norte cerca de Tampico hasta 200 y 250 cm ei| 0Ltx ......... --......... tAl sur de la parte oriental de la falla volcánica, la tierra des­ la parte sur de la costa del Golfo, En parte de las montañas di hiende hacía el valle del río Balsas, rodeado del otro lado por Oaxaca y de Chiapas, que se encuentran detrás de esta área das j qas imponentes montañas de laMadre SierradelMadre imponentes montañas de la Sierra Sur, quedel a Sur, que a que reciben las masas de aire saturadas de humedad procedentes igu vez están separadas del océano Pacífico por una faja costera del Caribe, la precipitación pluvial es, incluso, mayor. Los ríos de jang0Sta, inaccesible y, excepto Acapulco, subdesarrollada. La esta costa llevan cerca de la mitad del caudal total de los ríq ¡cuenca Balsas es la sede de la más reciente de las comisiones de México. El trabajo en esta zona de las comisiones del P« ¡as cuen cas hidrológicas, |de las cuencas hidrológicas,que queabsorbió absorbióa alalaantigua antiguaComíCoran paloapan y del Grijalva se describirá en el capítulo iv. Gran Tepalcatepec que había estado desarrollando la cuenca i parte de tierra a lo largo esta costa se inunda dela la tierra a lo de largo de esta costa anualmente se inunda anualmente^deqeuno tributarios este proyecto tributarios desdedesde 1947. 1947. Es esteEs proyecto del Te- del Teunodeqsus e sus pero se considera que tiene un alto potencial agrícola; hay up ‘palcatepec el que nos proporcionará nuestro caso de estudio, así campo amplio para aumentar el area cultivada; sus ríos ofrecej qUe tendremos ocasión de estudiar más esta área. El Balsas drena excelentes oportunidades para para lala producción producción de de energía energía hidra hidrolregión alta alta haciahacia el oriente quequeconecta mna región el oriente conectalala parte parte central central del i - j Oaxaca ■ * Mesa * . 1T *^1Sierra Madre del Sur n_„_, eléctrica; por esto podemos ver cómo el desarrollo de las cucn-- ;esta( con la Central. La 0 cas hidroeléctricas es, en cierto sentido, una estrategia natural) ¡en Oaxaca y Guerrero es una meseta erosionada, y la erosión para el desarrollo de la región. Los bosques y pastizales pantano! ¡fluvial ha dado como resultado una topografía de profundos ,..,--— fsos , , e; surrT^e Ver.ac™z y del estado de Tabasco han sido pocavapeSj quedando ya muy poca tierra plana. Hay i Z *u d.i unas pocas cuen* 1'1 d h I íl fiilí Han PTranexistido PvichHn nnac /-1Í Tt 1 J21 V/X/1 £ ..... JL •- ’l*ff 1 ...... poblados. unas pocas plantaciones que producen xas aisladas, como aquella en donde está la ciudad de Oaxaca. caucho, plátano, cacao, chicle, etc. El principal cultivo es el café, í La Sierra Madre del Sur desciende con gran pendiente hacia y no se cosecha en la tierra caliente tropical, sino en la tiem sel Istmo de Tehuantepec. Del otro lado hay otro grupo de rnontemplada, zona más fría situada entre los 900 y los 1 500 me-. dañas, la Sierra Madre de Chiapas, que corre paralela a la costa, tros de altitud. Aparte de las ciudades portuarias, las principales i Al noreste de esas montañas está el Valle de Chiapas, drenado ciudades de la región están en la tierra templada. Jalapa, CóM ¡por el río Grijalva en el que se concentra la mayoría de la po­ duba y Orizaba, en la carretera entre México y Veracruz, son ■ blación de esta área. Al otro lado del valle, las montañas vuellos centros de manufacturas. ^ven a elevarse a más de 3 500 metros antes de descender de Sólo hasta los últimos diez años fue posible cruzar la parte I nuevo hacia las planicies de Yucatán. Los principales cultivos sur de la región del Golfo por carretera en el verano para lle­ j del valle son el maíz y el café, y también es importante la pro­ gar a la Península de Yucatán; el ferrocarril no es muy ante­ ducción ganadera. rior. El resultado fue el aislamiento de la llana península caliza.'¡ En todas las montañas de México, pero en especial en las mon­ Esto no significa que Yucatán no tenía importancia económica.itañas de Oaxaca y Chiapas hay todavía muchas aldeas indígenas Después de 1880, el área en torno a Mérida se convirtió en el,r escasamente tocadas por las influencias europeas. El México ofiprincipal productor mundial de fibra de henequén. Yucatán hial, mestizo (de ascendencia europea e indígena) y orgulloso sigue siendo principalmente una economía de una sola cosecha, | de su herencia indígena, es muy consciente del problema que y esto ha producido dificultades económicas en el pasado y ofrece f representa. Robert Scott caracteriza la integración del indígena *sombrías perspectivas para el futuro. Después de la reforma agra ■ I y del campesino que habita en aldeas dentro de la nación me1 r *■ * - - - X X ** ¿T Vi i 52 EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO 53 xicana y su vida politicé como una de las más vigorosas metas i En las primeras dos décadas después de la independencia, la y principales logros de la Revolución mexicana.4 Argumenta que i figura dominante, tanto en las políticas económicas como en en comparación con la situación anterior a 1910 este proceso casi tíos escritos sobre ellas, fue Lucas Alamán, ministro principal se ha completado. Si la conciencia de la nación mexicana puedij fen la mayoría de los gobiernos de ese período. Educado en Eurotomarse como el elemento crítico, entonces esto puede ser cierto,; ; pa, e impresionado profundamente por lo que había visto de la Quedan, no obstante, pequeños grupos aislados que carecen i¿ ¡.Revolución Industrial inglesa y sus efectos sobre el poder nacluso de esa conciencia de nacionalidad, y para los indios de la j cional y el orden político, Alamán pensó que México debía montaña, por lo general, la integración política no ha implicado f también industrializarse. Pensó que la pequenez de la población un avance económico. Aunque tal avance es un importante ob­ í (cerca de seis millones) era un obstáculo para esto a través de jetivo de las políticas de desarrollo regional del gobierno mexi­ I una escasez de mano de obra para la industria y en escritos poscano, es incierto cómo puede ayudarse a esos indígenas. La i teriores también argumentó que eran necesarios incrementos en mayoría no vive en áreas que se presten a la adopción de téo : la población para proporcionar un mercado a la producción ocupaban nominalnicas agrícolas modernas,, Sus artesanías, aunque con frecuencia industrial. Los seis millones de habitantes 2. Alamán vio el peligro í mente más de 3 millones y medio de km son notables, no son una base suficiente para la prosperidad en el siglo xx. Pero, obviamente, el gobierno está poco dispuesto ^inherente en la combinación de tierras mexicanas vacías y un a dejarlos en su abismal, pobreza hasta que encuentren su camino ípaís vecino en crecimiento. El Istmo de Tehuantepec estaba hacia las barriadas de las ciudades, para hacer allí una transición ¡casi deshabitado y era una tentación potencial para los Estados extremadamente dolorosa, aunque relativamente rápida, hacia h Unidos, que buscaban una ruta hacia el Pacífico. Para prevenir vida moderna. Parte del trabajo de las comisiones de las cueri? • .esta amenaza, Alamán intentó colonizar el Istmo creando una nuecas hidrológicas se ha ocupado de la existencia de tales grupos; Aa provincia que tenía su capital en Tehuantepec. Se buscó ávida'mente la inmigración europea, ofreciéndose pasajes y préstamos diremos más sobre este problema posteriormente, ■'.para que se establecieran, y también se dieron otros estímulos. Sin embargo, la única colonización que tuvo éxito fue la ele PROBLEMAS DEL DE3ARROLLO REGIONAL Y POLÍTICA DESDE i Texas; propiciada inicialmente en 1823, ya hacia 1826 el resul­ 1821 hasta 1947 tado probable fue previsto por el gobierno mexicano que intentó en vano detener la colonización. En 1830 Alamán impuso varias En varias épocas desde la independencia, los problemas regio­ restricciones, entre ellas la prohibición a los colonos de traer nales han jugado un papel importante en el pensamiento y 1; esclavos. Pero estas medidas fracasaron, y el rechazo mexicano acciones de quienes elaboraban la política económica y sus con­ Ide la demanda texana de que se les convirtiera en un Estado sejeros. Por lo general la discusión sobre el desarrollo regional ¡ sólo irritó a los colonos. En la guerra que siguió, el ejército ha insistido en la colonización de las zonas escasamente pobladas i mexicano fue derrotado en 1836 y la admisión de la República alejadas de la Mesa Central. Esta sección describe los diferentes ¡ de Texas en los Estados Unidos, en 1845, produjo una nueva puntos de vista asumidos por los sucesivos gobiernos, hasta el ■.guerra, en esta ocasión contra los Estados Unidos, Derrotado de inicio del programa de las comisiones de las cuencas hidroló­ ■ nuevo, México se vio obligado a ceder la mitad de su territorio gicas en 1947. No trataremos sobre las razones económicas.) en 1848. políticas para las diferentes políticas; estudiaremos las políticas : Estas guerras sólo fueron parte de una serie de guerras civiles recientes en el capítulo siguiente. Pero este breve resumen his­ y extranjeras que mantuvieron a México en el caos político desde tórico tiene la intención de proporcionar el marco para nuestra ¡ 1830 hasta finales de los años sesenta. En consecuencia, la ecodescripción del estado contemporáneo del desarrollo regional de ¡ nomía se estancó, y posiblemente el ingreso disminuyó. Los inla última sección de este capítulo y para las políticas adoptadas r lentos gubernamentales de estimular la industrialización a prin­ para enfrentarse a los problemas regionales que se discutirán cipios de los años veinte, ofreciendo financiamiento a industrias en los dos capítulos siguientes. muy protegidas, fracasaron definitivamente a principios de los años treinta. La primera vía férrea, que conectaría la ciudad de 4 Robert E. Scott, Mexican Government in Transitíon, Urbana, Universítj México con Veracruz, se empezó bajo Alamán en 1837, y treinta of Illinois Press, 1959, p, 12. 54 EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO años después aún no se terminaba. El único suceso que tuvo ud ■ centrado, en su mayor parte, en la Mesa Central, para 1910 efecto significativo en la estructura del desarrollo regional fue uiu í se había extendido en el país. ley (la “ley Lerdo” incluida en la Constitución de 1857) que proq Las aldeas indígenas habían perdido sus tierras comunales, ya híbió a las corporaciones (es decir, a las organizaciones reli-■- que eran incapaces de demostrar su propiedad legal o un título glosas y las comunidades civiles) tener en propiedad bienes ral registrado cuando se los exigían las compañías deslindadoras, o ces. Aprobada por la facción política liberal, atacaba principal i tuvieron que abandonarlas después de perder sus derechos de mente el poder económico de la iglesia, pero también se esperaba j agua. Ocasionalmente, ocurrían rebeliones; después de que eran que el fraccionamiento de las tierras comunales indígenas crean ■ aplastadas, se confiscaba la tierra de las aldeas que habían par­ una nueva clase de pequeños propietarios, de acuerdo con loi' ticipado en ellas, y quienes tomaban parte perdían lo poco que principios de gobierno de Jefferson. En los años siguientes, li s poseían. Los indígenas despojados se encontraron viviendo en necesidad de fondos de los gobiernos liberales para financia! ’ haciendas y, poco después, atados a las mismas como peones por la guerra civil con los conservadores y para derrotar a la Ínter: .sus deudas. En 1910 cerca de 800 haciendas tenían el 90% de vención francesa llevó a una serie de contratos de colonizacióií ‘ la tierra.5 Más del 80% de las familias rurales carecían de tierra. La propiedad de la iglesia fue reducida en cierta medida poj ■ ■ Estas consecuencias sociales poco felices no fueron mitigadas las nuevas leyes, pero, sin embargo, logró retener gran parte di ? por resultados económicos favorables. Con excepción de ciertas sus posesiones y, bajo Porfirio Díaz, quien tomó el poder q j plantaciones comerciales que producían para la exportación, la 1876, esta parte de la Reforma se convirtió en letra muerta. Ü í;: hacienda no era una forma productiva de empresa agrícola. Pro­ institución que resultó más afectada fue la aldea que poseíí ■ bablemente la producción de cosechas alimenticias básicas, maíz, tierras. Díaz y sus “científicos” (el grupo de abogados y econo í trigo y frijol, disminuyó entre 1880 y 1890, y después de esa mistas que lo rodeaban) fueron de la opinión de que la inmi ■ fecha, su aumento apenas excedió el aumento de población.6 En gración no podía jugar en el desarrollo de México el mismí Min año malo, el maíz se tenía que importar, y en todos los años papel que había jugado en la Argentina y en los Estados Unidos ■se importaba trigo, harina, azúcar y carne salada. Aunque-por porque la única zona salubre, fértil y con adecuada provisión ■otros indicadores —kilómetros de vías férreas, aumento de la de agua era la Mesa Central, que ya estaba densamente poblada ¿producción de minerales, comportamiento de las exportaciones, Para establecerse en otras áreas se requerían grandes cantidad? ¡los prillcipios de la industria moderrna— los logros de la econo­ de capital y esto motivó que se otorgaran concesiones generosa mía bajo Díaz tuvieron mucho éxito, los costos sociales y ccoa extranjeros. En 1883 una ley permitió a las compañías que a ;nómicos de la política de tierras fueron muy altos. ocupaban de deslindar las tierras públicas reclamar una tercen I En 1910 se inició la Revolución, Principió como un llamado parte como pago y comprar las otras dos terceras partes a precia '.político de la clase media por el “sufragio efectivo, no reelec­ bajos. Esta ley especificaba que la reventa a colonizadores debí! ción” y adquirió ímpetu como un movimiento social popular, hacerse en lotes que no excedieran las 2 500 hectáreas. Además yunque sus objetivos no siempre estuvieron claros para quienes el gobierno de Díaz estableció algunas colonias modelo en domaban parte en ella, ni se tuvo un consenso sobre ellos. El meseta, que se ofrecieron, junto con algún capital de trabajo,! Afecto de lo ocurrido en el México prerrevolucionario sobre la inmigrantes, italianos. Se establecieron muy pocas colonias, y hadi ¿^propiedad de la tierra y la producción agrícola dio origen a 1894, cuando se derogó la ley de 1883, la idea de colonizaciót un gran descontento rural y entre las principales fuerzas revolu­ había sido virtualmente desechada como una política deliberad cionarias estuvieron una petición de tierras y los ataques a las de desarrollo regional. Sin embargo, las concesiones de tieni grandes tenencias. El primer efecto de la Revolución en la direccontinuaron como una forma de recompensar a los favoritos $ qe }a reforma social fue una ley de reforma agraria de líricos y de fortalecer el dominio de la dictadura sobre to que ¿espU¿s se incorporó a las disposiciones de reforma el país. La política de tierras tuvo menos efecto para colonizar lá ps Daniel Daniel jameSjMexico ’’* James, and the American?, Nueva York, Ercdeiick A, zonas alejadas que para cambiar la estructura de la propieda] ípraeger, 1963, p. 79. . , pment: The Roles de la tierra que se concentró cada vez más. En tanto que el SÍí f ’Raymond Vermon, The Dilemma of México’s Develop. ;t>í the Prívate and Public Sectors, Camgridge, Mass,, Harvard University tema de haciendas a finales del periodo colonial se había coi d;• Press, 1968, p. 53. O x * * - „J iUlilLi CliLCj tVHIUUl L<W EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO ! EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO 56 0/ jadas de la Mesa Central se debían colonizar y desarrollar, Uno agraria de la Constitución de 1917. Esta Constitución declaró de los famosos enunciados de esta naturaleza es el discurso que a la tierra y su subsuelo propiedad de la nación mexicana, y hizo'el presidente Ávila Camacho en 1941: estableció que el derecho de explotarlos era revocable. El nacró nalismo fue otra fuerza que impulsó a la Revolución, aunqué no se sintieron lo sufr j- El futuro de la agricultura está en las tierras fértiles de la costa, Una los primeros gobiernos revolucionarios de nuestra Mesa propiedad extranjera o t marcha hacia el mar aliviará el congestionamiento cientemente seguros para expropiar la extranjero en una escala f; Central, en donde las tierras agotadas deben dedicarse a cultivos que restringir las actividades del inversionista la política colonial les negó con el resultado de que el tradicional culreforma agraria limitaré : considerable. No obstante, las leyes de tivo del maíz de la población ha continuado siendo el dominante. La tierra. la habilidad del extranjero para poseer . fertilidad de las planicies costeras hará antieconómico cultivar mualdea que posee tierras . chos productos en la Mesa Central. Pero la marcha al mar requiere, La reforma agraria creó el ejido, la pero que en su mayor : como un prerrequisito, medidas sanitarias y de salubridad, la apertura que a veces se cultivan colectivamente y cada vez más con frecuencia sej cultivan individual- f de comunicaciones, la reclamación y drenaje de pantanos, y para hacer pane y cauaparte vez mas mas uctucuua se más « xxiu.jviu.uaK j posibles a esos proyectos, el gasto de grandes cantidades de dinero. mente por los ejidatarios, que pueden trabajarla y traspasarla i ; Será necesario organizar un nuevo tipo de agricultura tropical, que, a sus herederos, pero que no tienen propiedad sobre ella. Pqi ■ debido a la misma naturaleza de su producción, no puede ser del tipo lo usual los ejidos se han formado con tierras expropiadas (ca& i de pequeña escala.8 siempre sin compensación) a las haciendas. Los aspectos redifr Esto proporciona un claro enunciado de algunos de los ob­ tributivos de la reforma agraria se han realzado mucho mál ■ jetivos importantes en los esquemas que describiremos, y cuyos que la colonización. 1 efectos analizaremos. Sin embargo, no fue Ávila Camacho, sino El objetivo de colonizar tierras alejadas de la Mesa Central ; su sucesor, Miguel Alemán, quien dio los pasos más importantes ¡ no se abandonó como una política después de la Revolución : en llevar a la práctica esta política. que empezó en 19\0. Las regiones alejadas ofrecían la promesa de proporcionar tierna a quienes no se les podía dar en la Meseü EL PATRÓN DEL DESARROLLO REGIONAL RECIENTE Central. En 1926 se promulgó una ley de colonización, estabb ciendo las condiciones bajo las cuales los mexicanos podían esta? Desdé 1940 el crecimiento de la economía mexicana ha sido muy blecerse en tierras públicas, y aquellas en que podían hacerle L impresionante. Los cuadros n-1 y n-2 describen el crecimiento los extranjeros. Éstas fueron corregidas varias veces y eventual­ - del producto interno por sectores y las tasas de crecimiento de los mente fueron sustituidas por una ley de 1946 que creaba uró principales sectores. El crecimiento del producto ha promediado Comisión Nacional de Colonización para promover, administra! ‘ más del 6% anual en términos reales, de manera que a pesar y supervisar la colonización, con atribuciones para hacer los es­ j del extremadamente .rápido crecimiento de la población, que tudios necesarios, determinar las inversiones requeridas, y seleé cionar los colonizadores y los cultivos más apropiados. Cifras algí ■ esta^° en aumento durante todo el período y cuyo crecimiento ha t0llegado ahoraahora a un 3.5% per incompletas sugieren que 1 250 000 hectáreas, divididas entre cau llegado a unanual, 3.5%el ingreso anual, medio el ingreso medio per 14 000 lotes, fueron colonizadas entre 1919 y 1944/ Durante ]& caPlta aumentó considerablemente. La población actual (1970) primeros años años del régimen de Miguel Alemán (1946-52), se in 1 e}s aproximadamente 50 millones. En 1968 se estimó el pro­ primeros cremento la tasa de colonización. Fue bajo Alemán cuando ¿ . «meto nacional bruto por habitante, en 530 dólares. Los sectores con el mayor crecimiento fueron la energía elécinició el programa integrado de las cuencas hidrológicas, reía ■ trica, la industria manufacturera y el petróleo, habiendo hecho clonado en parte a este programa de colonización. Uas manufacturas la mayor contribución absoluta al incremento En todo periodo, desdecía Revolución, en reformas legislar en los distintos programas El patrón de desarrollo sector ha sido de colonización, t vas a las leyes uc UMU»it.va ^vg.oiiicw ' • i jdt • *1producción. J . de ----este -------—— Partido, en los discursos presidenciales y de otras formas, s ¡,e* ^e sustitución de las importaciones bajo un sistema de pro ­ reiteró continuamente la idea de que las regiones agrícolas ale Acción que se basa, de manera principal, en controles cuantitaldh luxiiv u 7 Moisés T. de la Peña, "Problemas demográficos y agrarios", Probleity Agrícolas e industriales de México, 11, núms. 3-4, México, 1950, p. 10. >■ * Citado por Sanford Mosk, Industrial Revolution in México, Berkeley ‘:y Los Ángeles, University of California Press, 1954, p. 220. í; 58 EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO CUADRO II-I Producto interno bruto, a precios de 1960, años seleccionados del período 1940-64 (miles de millones de pesos) 1940 1945 1950 1955 1960 196$ Agricultura, ganadería, silvicultura y pesca Manufacturas Minería Petróleo Electricidad Construcción Transporte Comercio Gobierno Otros 10.2 7.6 2.0 1,1 0.3 2.3 1.7 10.0 2.1 8.2 11.4 12.3 2.1 1.3 0.4 4.3 2.4 15.2 3.1 12.1 17.1 16.4 2.0 1.9 0.5 3.8 3.4 20.7 4.0 15.5 22.3 22.6 2.3 2.6 0.9 5.2 4.9 27.4 5.0 21.7 25.9 33.3 2.7 3.9 1.3 7.7 6.2 ' 36.9 6.2 31.7 30.E 45.7; 2T 5.2 1.9j 10.6! 6.9i 47-2 8.Í 40.0" TOTAL 45.4 64.5 85.4 114.9 155.9 198.8 • fuente: Comisión Intersectorial para la Elaboración de Planes de Desarroy lio, Manual de estadísticas básicas, 1939-1963, 2^ ed. México, 1964. CUADRO 11-2 Tasas promedio anuales de crecimiento bruto, por sectores 1940-5 Agricultura, gana­ dería, silvicul­ tura y pesca Manufacturas Minería Petróleo Electricidad Construcción Transporte Comercio Gobierno Otros TOTAL fuente: Cuadro ii-L del producto 1945-50 1950-5 interno 1955-60 1960-4 1940-61 2.2 10.2 El 3.3 3.9 12.9 7.4 8.7 8.3 8.1 8.6 5.9 -0.6 8.6 7.6 -2.2 7.4 6.4 5.2 5.0 5.5 6.6 2.9 6.4 9.6 6.4 7.5 5.8 4.3 7.1 3.0 8.1 2.8 8.7 8.9 8.1 5.0 6.1 4.4 7.8 4.1 8.3 0.3 7.0 10.1 8.3 ‘ 2.8 6.3 7.2 6.0 4.6 7.8 1.4 6.8 7.9 6.5 6.1 6.7 5.9 6.8 ¿ 7.3 5.8 6.1 6.3 6.3 6.3 t ; ' : ■ 1 r■ r EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO 59 > tivos sobre las importaciones, y sólo secundan amen Ce en los derechos de importación. La sustitución de las importaciones en l ,una escala significativa fue estimulada primero por la escasez > durante la segunda guerra mundial y, después de un rápido au­ gmento en las importaciones durante el período inicial de la posguerra, por dificultades en el balance de pagos. La preocupat ción del gobierno por el desempleo ante una tasa de crecímiento de la población tan rápida también estimuló la protección ¡Ó y promoción industrial. La sustitución de importaciones en bíe. nes de consumo no duraderos nunca ha tenido importancia desde / la guerra, si se la mide en términos de la proporción de la p demanda final que abastecen las importaciones, como es usual í; hacerlo.9 En especial desde 1950, la sustitución de importaciones f.se ha hecho principalmente en los bienes intermedios y de iib 5versión. No se. ha limitado a la industria manufacturera; tamybién ha sido importante en los cultivos de alimentos básicos, de =■ manera más impresionante en el trigo durante los años cincuenyta. En la actualidad prácticamente se ha logrado la meta, por largo tiempo buscada, de autosuficiencia en los productos áli.. mentidos. La agricultura creció con rapidez por normas inter­ nacionales y también ha contribuido en grado considerable al faumento de los ingresos por exportación que han hedió posible f el crecimiento de México. Los productos agrícolas son con mu{ cho el principal grupo de mercancías de exportación de 'México. Por supuesto, los recursos para el desarrollo de México han pro’ venido, de manera principal, de fuentes interiores, aunque casi ■ el 10% de la formación bruta de capital fijo interior se finanMió en el exterior.10 ?’ Como podría esperarse, el efecto regional del crecimiento ecoLnómico y de la industrialización ha sido desigual, y la desigual­ dad de los niveles existentes de desarrollo en el desarrollo repgional es la causa principal de la actual preocupación sobre los ^problemas de este último, preocupación manifestada en varios Uibros, así como en discursos políticos, artículos periodísticos, con6 Ésta no es una medida muy satisfactoria, ya que uno de los efectos de ingresos en aumento tenderá a aumentar la demanda más que propor­ ciona Intente para los bienes de consumo complejos y de mayor calidad, es .ulecir, para aquellos que por lo general se importan. Asi que puede ocurrir Cuna sustitución de importaciones a la vez que permanece sin cambio la {proporción de la demanda que es satisfecha con importaciones. p 19 Las cuentas nacionales mexicanas sufrieron revisiones muy importantes yen los últimos años. Tanto la cuenta de capital como la de producción jhan sido corregidas. Véase Banco de México, S. A. Departamento de Estu{dios Económicos, Cuentas nacionales y aceraos de capital consoliladas por i tipo, de actividad, 1950-1967, ed., México, 1969. i el desarrollo REGIONAL en MÉXICO I el desarrollo REGIONAL EN MÉXICO 6.1 > ferencias y otros.11 Para describir el patrón actual del desarrollo > regional es conveniente agrupar los datos de los estados en re® giones. Inevitablemente, las fronteras estatales no siguen muy > exactamente las divisiones físicas, pero la siguiente separación .» servirá para describir las variaciones regionales.12 <■' Pacifico del Norte > Baja California Norte, Baja California Sur, Sonora, Sinaloa y J Nayarit. ..>■ Piarte Coahuila y Chihuahua. tíNorte del Golfo B Nuevo León y Tamáulipas. '■W.Norte Central >: Aguascalientes, Durango, San Luis Potosí y Zacatecas, J Occidente cB Colima, Jalisco y Michoacán. > Cen/ro Distrito Federal, Guanajuato, Hidalgo, México, Múrelos, Pue> bla, Querétaro y Tlaxcala. J- Golfo > Tabasco y Veracruz. A Pacífico «fc Chiapas, Guerrero y Oaxaca. de Yucatán * Campeche, Quintana Roo, Yucatán. sj Sk W ” Véase en especial Erneto López Malo, Ensayo sobre, localización de industria en México, México, D. F., unam, 1960; P, Lamartine Yates, gfc’ÍI desarrollo regional de México, Banco de México, 1965; Secretaría de Eco<g»nomía e Instituto Mexicano de Investigaciones Económicas, Diagnóstico yK económico regional, 1958, bajo la dirección de Fernando Zamora, México, TL1959. Bassols Batalla, Ángel, La división económica regional de México, «vnam, México, 1967. $K 11 Los especialistas en aspectos regionales hr u empleado mucho tiempo 'aLpara discutir los prolJemas de la selección de los límites regionales pura . ^-propósitos analíticos y de planeamiento. Ha ocurrido, incluso, alguna disgkusión sobre si existe algo semejante a una “verdadera" región. Véase Waltcr oBlsard, “Regional Science, The Concept of Región, and Regional St ruciare”, '«Paperr and Proceedings of thc Regional Science Associalion, n, 1956, pp. 13-26, SBy Morris E. Garnsey, “The Dimensions of Regional Science'', ibid, pp. 27-39. «Ciertamente, él concepto, parece ser irreal. Normalmente se podría consiJB-derar que las fronteras geográficas naturales son mejores fronteras que las «administrativas para los fines económicos, aunque, incluso si el país fuera .»Byna planicie homogénea, podríamos seguir deseando hablar de regiones. «En México, los funcionarios de la Secretaría de la Presidencia han estado >. ^trabajando recientemente en una división regional que se pueda usar para ;é diñes de la planeación económica regional. 62 EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO®^ DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO ^’que en las regiones menos industrializadas, las industrias exisgentes1tengan una productividad muy baja de la ...........mano de ..........- - obra, *ílo ---cual quizás P ' implique industrias de pequeña escala y poco ^capital por trabajador. trabajador, r También son notables las diferencias regionales en la agricul­ tura, aunque aquítambién también podrían distorsionadas ÍUura, aunque aquí podrían estar estar distorsionadas sistema-sistemá­ ticamente las diferencias regionales. El cuadro n-5 nos propon piona estadísticamente las diferencias agrícolas descritas antes. En ? las zonas costeras del norte, en particular en el noroeste, están las á (áreas altamente productivas, con un elevado porcentaje de tierra CUADRO 11-3 ; dragada y una producción relativamente baja de cultivos de Densidad de población por regiones, 1960 ■ i subsistencia (como lo representa la baja participación del maíz). ■; Ta proporción de irrigación dada por estas cifras es quizás ex.aDensidad perada en ciertos aspectos. Éstas son las cifras para las áreas irride pobla­ ’í ; * gadas en los grandes proyectos administrados públicamente, y ción (perso­ Superficie '■ enseñan muy bien en dónde ha ejercido el gobierno sus mayores nas por kiló­ (miles de Población ■ 'esfuerzos de irrigación. Si hubiéramos usado las cifras totales del metro cua. kilómetros (miles de censo para irrigación de todos los tipos, mostrarían una particidrado) cuadrados) habs.) - pación relativamente más pequeña en las zonas costeras del nor­ 6.3 414 2 613 Pacífico del Norte te, ya que en las áreas central, occidental y meridional del país 5.3 399 2 135 Norte .una alta proporción de la irrigación se hace usando trabajos 14.6 144 2 103 Norte del Godo ] y bombas construidos privadamente, y no está controlada por el 10.9 263 2 870 Norte Central 1 distrito de riego local. Las cifras para esta irrigación son menos 30.8 145 4 459 Occidente 1 dignas de confianza, pero demuestran que las estadísticas de la 97.4 129 12 561 Gen tro Secretaría de Recursos Hidráulicos que se dan aquí solo cubren 33.2 97 3 224 Golfo aproximadamente la mitad de la irrigación. 17.7 233 4 125 Pacífico 5.9 142 *Como puede verse, la producción ganadera es comparativa 832 Península de Yucatán hente más importante en la zona del norte que en otras reglofuente: Censo de población, 1960, 1 bes; en las regiones central, occidental y meridional, la pro­ ducción de maíz representa la mayor parte del producto agrícola Irtf-nlLn--Por1----- 1 • — • ' - ■ *•■ • *ElÍ° cuadro H-4 muestra la. distribución del valor industrial agre “ implicación estas últimas regiones son las áreas rnás obres oe «,^1 del Censo industrial, g agrícolamente. También son las áreas de menor ingreso gado por región. Estas cifrasóbao se tomaron r caPlta totp “«“> se ve P<w la posición de sus estados comlos mejores datos disponibles, pudieran exaí r 1961. Aunque son I j los niveles de industrial^ ?0U2ntes er» el calculo del ingreso per capita y niveles de biengerar las desigualdades regionales en zacion debido ueomo a la wxu.a proporcionan los datos. Éíj Y’** (cuadro “-6)- Éste indica paridades zación forma en que se ab]LS entre los inSres°s medios per capua de los estados valor total agregado en el censo está muy por debajo del que'. J "°! \ -O" -O-- —' -X . - ¡más ricos í0s y los y los más pobres. Como dijo antes, problemas n-l)i más pobres. Como se se dijo antes, loslos problemas dan las cifras de ingreso nacional (compárese con el cuadro n-l)í f de os y parece probable que la exactitud y lo completo del censo ser^ & la montana preocupan a muchas 1 mayor en zonas que tienen una proporción relativamente altsj F"? ? los baJos mvees de ingreso monetario de estos de industrias en ¿an escala; en otras palabras, en las región^ “dl0„s. exPh,can en Pa«e disparidades evidentes en el cuadro real per capita * industrializadas. obstante, inclusoincluso sí consideramos unF S1" emhar ™&6. Sin embargo, es poco probable que el ingreso --------------* ----------más industrializadas.No No obstante, si consideramos una |n los.estados más ricos sea en realidad 10.5 veces mayor que en verseverse que las diferencias regionaleiregionales diversidad exagerada, exagerada,puede puede (pie las diferencias en el grado de industrialización son, de hecho, bastante consi] fes más pobres. Por ejemplo, en los estados más pobres, agrí­ alas, una mayor. proporción del producto nunca se llevará al derables. El producto por hombre empleado también sugiere El cuadro ri-3 muestra la densidad de población por regiones 1 según el censo de 1960. Puede verse que la población es más.] densa en la zona central. Esto no sólo refleja que la capital es el j ' principal centro de población y está localizada en esta zona, sino ] que todos los estados que rodean al Distrito Federal tienen denri sidades de población mayores que las de los estados en otras! regiones. Al alejarse de las regiones centrales la densidad de. i población disminuye. ■ J — rt,. .J . 1. *__ 'f 'T’í * en CUADRO n-4 per capita de Valor industrial agregado industria, 1960 índice (promedio nacional = 100) 876 1 333 1 250 461 887 8 160 791 174 241 335 624 594 161 200 650 245 56 289 80.2 149.4 142.2 38.5 47.8 155.4 58.7 13.3 69.3 14 172 418 100.0 Pacífico del Norte Norte Norte del Golfo Norte Central Occidente Centro Golfo Pacífico Península de Yucatán TOTAL Valor indus­ trial agregado per capita de la población (pesos) Valor indus­ trial agregado por hombre empleado en la industria (miles de pesos) índice ( promedio nacional =. 100) 18.3 24.0 15.4 11.0 16.0 16.8 17.8 11.1 9.6 110.1 144.1 92.3 66.0 96.3 101.3 106.9 66.6 57.6 100.0 16.6 fuente: Censo industrial, 1961. CUADRO 71-5 Valor de la producción agrícola y ganadera, producción de maíz y superficie de irrigación en gran escala por regiones, 1960 Produc­ ción agrí­ cola (miles de pesos) Pacífico del Norte Norte Norte del Golfo Norte Central Occidente Centro Golfo Pacífico Península de Yucatán TOTAL Produc­ ción re­ gional como % de la nacional Produc­ ción de maíz (miles de pesos) 2 581 I 210 862 1 347 I 385 2 550 1 804 2019 638 17.9 8.4 6.0 9.4 9.6 17.7 12.5 14.0 4.4 329 178 203 481 609 1 038 397 718 96 14 396 100.0 4 049 Produc­ ción re­ gional de maíz como % de la nacional 8.1 4.45.0 11.9 15.0 25.6 9.8 17.7 2.4 100.0 Produc­ ción de maíz como % de la produc­ ción re­ gional agrícola Irriga­ ción en gran es­ * cala (miles de ha) Irriga­ ción re­ gional como % de la na­ cional 12.8 14.7 23.5 35.7 44.0 40.8 22.0 35.6 15.0 693 254 300 19 95 237 7 10 2 42.9 15.7 18.6 1.2 5.9 14.5 0.4 0.6 0.1 751 859 473 695 659 I 068 671 620 206 12.5 14.3 7.9 11.6 11.0 17.8 II.2 10.3 3.4 100.0 6 002 100.0 28.1 I 617 =■ Irrigación en gran escala bajo la promoción de los distritos de riego de la Secretaría de Recursos Hidráulicos, 1959-1960. fuente: Censo agrícola, 1960. ProducValor de^ ción gala pro­ nadera ducción regional ganadera como (miles de % de la pesos ) nacional EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO l EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO. Valor indus­ trial agregado (millones de pesos) la población, y por trabajador empleado en la en EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO i EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO 66 67 . ' ; • ? '■ tividad agrícola también es muy baja. No es sorprendente encontrar una baja productividad junto con bajos ingresos, y estos Niveles de ingreso y bienestar en los estados más ricos y últimos limitan el mercado local para otras industrias. Por el pobres en los más pobres contrario, es probable que los ingresos sean elevados donde hay (expresados como porcentajes del promedio nacional ~ 100) mucha industria manufacturera, no sólo porque los salarios mo? nefarios pagados a la mano de obra no calificada pueden ser índice de mayores, sino también debido a la gran cantidad de personal cabienestar PNB per capi*según Yates ta 1: 960 k lificado, administrativo y empresarial. Esto a su vez tenderá a ~ proporcionar un mercado que puede atraer otras industrias, de 204 313 Baja California Norte ; manera que, independientemente de otras fuerzas concentradoras, 188 261 Distrito Federal i como la provisión de servicios especializados, en la disponibilidad 144 186 Nuevo León i de mano de obra calificada y otros, podemos esperar que ocurra 157 167 Sonora un proceso acumulativo de concentración industrial. 136 154 Tamaulipas 136 \ ¿Existen fuerzas que puedan disminuir considerablemente este 134 Coahuila 148 124 f proceso? Una escasez de mano de obra en aquellas áreas que Baja California Sur 147 110 i están experimentando el mayor crecimiento industrial podría, en Chihuahua algunos países, lljevar a un mayor aumento en los salarios con 65 49 Guana juato relación a un aumento en la productividad allí y no en otras 56 46 Zacatecas partes. Pero en México esto es poco probable, en vista de la 70 43 Querétaro desocupación, tanto la reconocida como la oculta, que se en­ 70 40 Tabasco cuentra en casi todas partes. La evidencia de esto se encuentra 52 38 Chiapas en el gran número de vendedores de billetes de lotería, lustra58 37 Guerrero 72 : dores de calzado y otros que se encuentran en buen estado físico 36 Michoacán 60 36 : y que están disponibles en todos los pueblos. A primera vista, Tlaxcala 65 33 : parecería que esto está en contradicción con los niveles diferenHidalgo 43 27 L cíales en los salarios mínimos de las diferentes zonas, lo cual se Oaxaca ! consideraría como indicador de una rigidez diferente en el merEl índice de bienestar según Yates es el promedio de una serie de ítt’j(cado de mano de obra no calificada en los distintos estados, En cada Estado, el recíproco de la tasa de mortalidad, la tasa dé 1966-7, el salario mínimo diario varió entre 35.7 pesos (2.86 dólares) en Baja California Norte, y 10 pesos (0.80 dólares) para los CUADRO 11-6 >CgUrO SUClcU; Gi Lunüumu -__ _____ _ _ lina, y el registro per capita de vehículos de motor. Para cada índice li puntuación de un Estado fue su porcentaje del promedio nacional. La ma­ yoría de los índices se refieren a 1958, pero algunos son de años anteriores. > trab Por supuesto, no se da un significado preciso a un índice semejante, perol rendas eñ el■costo» (U 1 VI r,pesos (2 dólares). Se dad de México, el salario mínimo fue de 25 a proporciona un complemento interesante a las estadísticas del pnb. >. d progreso económico _ __A . Vida,y pero que también tienen en Cuenta la productividad de cada zona. Desafor­ ¿ supone que los salarios mínimos reflejan principalmente difefuente: Paul Lamartine Yates, El desarrollo regional de México, p. 35. "~ j _— ta— tunadamente, no se puede tomar las cifras de los salarios mínimos como evidencia de que existen fuerzas del mercado que pre­ mercado, y nocifras está que clarodacuántas sionan para salarios más altos en algunos iugares que en otros está claro cuántas de las Yates, de st las curas que u<t en cuenta. El índice deVAK. bienestar según habría implicado que la desocupación no es tan geneno todas, tienen esto un AjJ. JL^V. ----------------- ,___ que b yates, perolalacifra > cifra Yates,muestra muestraun uncampo campode devariación variación^menor, menor, pero ma­ma-■ como lwmos sugerido)/ debido a qnCj es bien e n yor sigue siendo aproximadamente el 475% de la cifra mas baja. y j mínimo. Particularmás baja L ma oría de as zonas no se el salario Los estados menores niveles de bienestar y de ; niente est0 es cier£o en las zonas rurales Por supues£Oj n0 sólo Los estados que iLac" -a-X c ,-u que tienen los v de ingreso están comparativamente poco industrializados, ingreso están comparativamente poco industrializados, y eny en esa. es el precío locaI de Ja mano de übra con k estados la industria tiene muy baja productividad. La produ«| industrial, sino también el precio de otros recurproduej concentración concentración áriushal __ , . 1. -1 I ’____________________ 68 EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO . sos. Un candidato evidente es el precio de la tierra, que, ge ralmente, influye en forma importante para el establecimi de una industria manufacturera. Como explicaremos, en el Valle de México (el Distrito Fed y las zonas adyacentes) hay en la actualidad signos obvios costo creciente del congestionamiento y parece que esto está vando al establecimiento de las industrias hacia pueblos situ todavía en la región central, pero fuera del valle, aunque un fenómeno muy reciente.. Durante el período 1940-60, cuando menos, las fuerzas presionaban para una dispersión fueron más que compens por las que trabajaban en favor de una aglomeración. En primer capítulo describimos, en términos generales, economías la aglomeración para actividades localizadas cerca la una d otra. Un incentivo adicional para el establecimiento en el trito Federal en comparación con otras regiones del país, q fue la relativamente fácil disponibilidad de energía eléctrica los años posteriores a la segunda guerra mundial, cuando la rencia de energía eléctrica era un obstáculo importante par crecimiento industrial en otros lugares. El Valle de México tiene una situación especial en la actualidad, ya que las ta son iguales en todo el país, pero la estructura de tarifas no porciona un incentivo a las empresas para establecerse cerca d fuente de provisión hidroeléctrica» Como es casi esencial consultar a la oficina central de quier dependencia gubernamental para obtener los permiso licencias necesarios, así como para obtener exenciones de las gulaciones existentes, las empresas deben establecer conta regulares con altos funcionarios en la ciudad de México. ausencia de una red de comunicaciones altamente desarro y eficiente entre las oficinas del gobierno hace más tedios proceso de obtener aunque sea documentos rutinarios en zonas periféricas. Las empresas localizadas en otras partes frecuencia encuentran que es necesario establecer una peq oficina en el Distrito Federal para hacer sus transacciones negocios con el gobierno. Para apoyar a la industrialización se han hecho grandes versiones en educación, en especial para la capacitación téc Una característica importante del crecimiento del sistema ed tivo en las grandes ciudades es su flexibilidad en el desar de programas y horarios que permiten a los estudiantes te trabajos de tiempo completo, además de continuar sus estu Además, se está incrementando un programa especial de ed ción para adultos que no asistieron a los sistemas regulares EL DESARROLLO REGIONAL EN MEXICO 69 cativos primario y secundario. Por supuesto, esto atrae a las personas a la ciudad de México; las empresas también fueron atraídas por la oferta relativamente abundante de mano de obra educada y calificada. Por esto, no es sorprendente que en su libro Yates mostrara que estaba aumentando el grado de concentración de la industria en el Valle de México el porcentaje del valor industrial agre­ gado en. el valle, tal como lo dan los censos industriales de 1940 y 1955, aumentó de 40.1 a 52.5% entre esas dos fechas. En 1960 calculó que el porcentaje estaba entre 55 y 60%. Es verdad que López Malo da cifras basadas en el producto bruto y ajustadas con base en censos industriales anteriores que sugieren que la concentración de industrias no aumentó entre 1930 y 1950.13 Pero es probable que para nuestros fines, estas cifras den demasiada ponderación al procesado de la producción agrícola en las zonas de agricultura comercial en auge, añadiendo la industria sólo una pequeña parte de valor a la alta producción agrícola. Pueden calcularse cifras de la migración interna de la pobla­ ción con base en los censos de población.14 Las cifras para los períodos 1940-50 y 1950-60 muestran una inmigración notable hacia el Valle de México, y emigración de otros estados de la zona central. La tasa de crecimiento del Distrito Federal en rea­ lidad disminuyó un poco entre 1950 y 1960, pero las cifras dis­ ponibles sobre migración interior sugieren que el movimiento hacia otras partes del Valle de México compensó totalmente esto. Baja California Norte, con su nivel de vida más elevado que en . cualquier otra parte, experimentó la tasa más alta de crecimiento, y todos los otros estados fronterizos, excepto Coahuila, que no tiene ninguna ciudad fronteriza importante, experimentaron una inmigración neta. En todas las regiones del norte, la apertura de zonas de irrigación fue probablemente un factor para la in­ migración, aunque Sinaloa perdió población por esos moví• mientos. Las principales fuerzas que causan los movimientos de la po1 blación son obvias. Las regiones fronterizas están creciendo con rapidez, no sólo agrícolamente, sino también industrialmente; hay una floreciente industria del turismo, y existe la posibilidad 13 López Malo, op, cit.f p. 87. Esto se hizo por primera vez para la migración (le 1940-1950, utilizando el censo de 1950, por Nathaniel Whetten y Robcrt Burnight, "Internal Migration in México”, Rural Sociology, xxr, junio de 195Ó, pp. 140-5i. Pue. den encontrarse datos adicionales para el período de 1950-1960 en Timothy Ring, River Basin Projecls and Regional Deve lupia en t, texis para el docto­ rado en Filosofía, inédita, Universidad de California, 1905. 14 70 EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO ] EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO 71 de pasar permanente o temporalmente, legal o ilegalmente, a los u costos: costos de recursos debido a la necesidad de más capital Estados Unidos. El Valle de México ofrece ocupación industrial i social general y costos debido al creciente conges áonamiento y en expansión, aunque de ninguna manera a una tasa suficiente 1 ; viciamiento del aire a medida que crecen la población y la inpara absorber a todos los nuevos inmigrantes. El gran número] ;; dustria. de personas empleadas en las actividades de servicio relativa- • La afluencia de personas y de la industria hada la ciudad mente improductivas es testigo de la falta de plazas para las i (<> requiere una expansión de todo el campo de servicios públicos personas sin capacitación. Sin embargo, para estas personas los • ofrecidos a la población. Aunque la investigación cuantitativa servicios sociales disponibles en la ciudad son mucho más abun- ; sobre las economías a escala en los servicios públicos está lejos dantes que en las arcas rurales; además de alimentos subsidiados, : de ser adecuada, sugiere que una ciudad del tamaño de la ciu­ servicios médicos y educación para todas las edades, se tiene < dad de México está incurriendo en desecononrías considerables instalaciones recreativas para todos y son muy frecuentadas por en la provisión de estos servicios públicos como resultado del. los pobres. crecimiento urbano. El ejemplo más notable de esto es el pro­ Los factores que alejan a los emigrantes de muchos estados : blema del abastecimiento de agua en el Distrito Federal. La también contribuyen a las corrientes migratorias. La baja tasa ciudad de Méxic.» se construyó sobre un lecho lacustre, en cuyo de crecimiento de la productividad en la agricultura de subsis­ subsuelo se está hundiendo ahora. La consecuencia más grave de tencia, la falta de otras oportunidades de ocupación y el están-, . esto es que la mayor parte de la dudad está actualmente en la camiento de la industria minera han obligado a muchas perso­ . parte más baja de la cuenca y el drenaje implica bombear las nas a dejar sus estados nativos para buscar ocupación industrial. aguas negras hasta una altura de 13 metros. El hundimiento En resumen, las diferencias en los niveles de ingreso y las tasas’ continuará mientras el uso de las aguas subterráneas siga por de progreso son muy marcadas en México, y han causado muchas encima del nivel de absorción. La tasa de hundimiento es despreocupación. Las razones de esto pueden dividirse en las pura-, , igual, con el resultado de que las aguas negras continuamente mente económicas y aquellas que tienen fuertes elementos políq . amenazan la pureza del abastecimiento de agua potable. La ines­ ticos e ideológicos. La primera categoría incluye problemas sobre] tabilidad y plasticidad del subsuelo crea problemas de construcel tamaño global del ingreso nacional. El que la concentración? 1 ción y aumenta la vulnerabilidad de la ciudad ante los temblo­ de la industria tienda a disminuir o aumentar el ingreso nació, res.15 El exitoso drenaje de los lagos ha disminuido lo moderado nal depende de si los costos del congestionamiento superan a. .del clima y en la primavera han aumentado las tormentas de las economías de la aglomeración. Hemos discutido la natura-; polvo. leza de la aglomeración económica en el capítulo i. Desafortu4 7 El principal problema es la escasez de agua en el Valle de nadamente, no es posible dar ni siquiera una idea general dd ■ ¿México, debido a que esto origina directamente el hundimiento tipo de magnitudes implicadas en el caso mexicano, porque no1; áde la ciudad. Está claro que la expansión industrial en el valle se conoce ninguna forma de medirlas. Hay, no obstante, consi-' \ contribuye a ello. Es verdad que hay fuertes restricciones para derable evidencia de que los costos de concentración de la in-; * la apertura de nuevos pozos, pero no siempre de fácil aplica­ dustria en el Valle de México, cuando menos, si no es que de' ción. En la actualidad el agua se trae desde la cuenca del Lerma toda la región central, son muy altos; en el resto de este capítulo por un acueducto, a la tasa de 5 metros cúbicos por segundos. estudiaremos esta evidencia. Los factores políticos e ideológicos Esto fue aproximadamente una sexta parte de la cantidad total que crean preocupación por el estado del desarrollo regional se utilizada en 1960. Un estudio discute varios planes para importar discuten más apropiadamente en el capítulo m. agua bajo varios supuestos sobre la magnitud de la población El congestionamiento implica que tanto la migración a las y su distribución geográfica dentro del valle.16 No es necesario ciudades como el crecimiento de nuevas industrias impone costos? que nos ocupemos de sus detalles, pero dos de sus conclusiones a las personas y empresas que ya están establecidas en el área, a la vez que incrementa la demanda de servicios públicos. A nin­ w Federico Mooser, "La cuenca lacustre del Valle de México", Prablcinas guno de los dos grupos se le exige que pague estos costos y, en­ del Valle de México, Instituto Mexicano de Recursos Naturales Renovables, México, 1963, pp. 19-22. consecuencia, no meditan sobre la carga que imponen a los de-< 14 José Vicente Orozco, "Plan hidráulico pava el Valle de México’’, Prc;más. En el crecimiento de la ciudad se incurre en dos tipos de; blemas del Valle de México, pp. 51-113. EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO 72 EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO 73 individuo y empresa y a los recién llegados no se les exigirá que son interesantes. Suponiendo una disminución en la tasa de cre-; .tengan en cuenta su impacto sobre otras personas; los únicos cimiento de la población en el valle, de manera que la po­ -costos que deben hacer son los relativos al mayor tiempo e in­ blación de 1990 sólo sería un poco más del doble que su nivel conveniencia para sus propios asuntos. En la ciudad de México actual, sería necesario importar aproximadamente cinco veces ‘ se han proporcionado grandes proyectos de construcción de vías el volumen de agua importado a principios de los años sesenta, '■ de tránsito y sistemas públicos de transporte para ayudar a re­ aprovechando otras cuencas fluviales cercanas al valle, además solver el problema, pero éstas parecen sólo soluciones temporadel Lerma. Si no disminuye la tasa de crecimiento demográfi-: t les. El esfuerzo más reciente para tratar este problema es la co, una población de 16 millones en 1990 tendrá que importar ■construcción de un sistema subterráneo de transporte colectivo casi once veces el volumen de agua importada a principios de para reducir el congestionamiento en la superficie. los sesenta. El costo promedio del abastecimiento de agua aumen• El viciamiento del aire también es un problema importante ta con la cantidad de agua necesitada —de 20 centavos por metro, ‘ en la ciudad de México, agravado por su situación en un valle cúbico en 1960, hasta 60 centavos, en el supuesto de 12 millones, ^rodeado por montañas muy altas. Sin controles sobre el tipo de personas en el valle, y hasta 90 centavos si la población ..de gasolinas utilizadas y con la creciente concentración de in­ es de 16 millones.17 Con el costo promedio aumentando de esta dustrias pesadas en el área, la acumulación de desperdicios indosmanera, podemos ver lo alto que sería el costo marginal. Este1costo marginal no lo pagan las nuevas empresas a las : triaie$ en el aire puede ser muy densa. Las corrientes de aire ° ° . -A n'rp'uoU^Í Q'n *-^0 _ m_____li___ ____ r_._ que no se puede legalmente cobrar más por el agua que a i prevalecientes hacen poco para aliviar el problema vry con frelas empresas existentes. Además, no es probable que los habí-, Jcuencia la atmósfera es poco agradable. tantes del Distrito Federal soporten la mayoría de los costos 1 Los costos para proporcionar incluso aquellos servicios que se del abastecimiento de esta agua, ya que, al igual que el actual' requieren en donde vive una persona son más altos en el área acueducto de Lerma, probablemente el sistema será construido (metropolitana. La vivienda es el más obvio de estos costos debido por la Secretaría de Recursos Hidráulicos y financiado con img a la escasez de terreno y a los mayores costos de construcción puestos federales. Si fuera posible discriminar en los precios yí >.én las zonas urbanas; en las áreas rurales a menudo las casas cargar a los nuevos inmigrantes hacia el valle algo parecido alj .'pueden construirse durante los períodos de poca actividad, cuan­ costo marginal de abastecerlos de agua parece probable que se. do el costo de la mano de obra rural es muy bajo. Los mayores lograría una disminución de la concentración. : mostos de la urbanización se reflejarán en los costos de las em­ Se puede adoptar un razonamiento semejante en el caso de presas en la medida en que aquéllos se reflejen en el salario otros servicios municipales. Como ,lo indica Yates, en el Distrito ■ mínimo legal y éste en los costos reales de la mano de obra. Federal éstos son mucho mayores per capita que en' otras ciu-i ■'Aquí, nuevamente, las empresas pagarán costos medios, en lugar dades. Aquí incluyen gastos como el subsidio de la gasolina uti­ i de los marginales. A pesar de que las empresas no pagan todos los costos margilizada por los ómnibus y los alimentos subsidiados. En 1958, los • nales de su establecimiento en el Valle de México, sí parece que, gastos per capita del gobierno del Distrito Federal eran de 235 'independientemente de la medida en que los costos pagados son pesos, y el que erogaban los gobiernos de las ciudades de Guadalajara y Monterrey era de aproximadamente 50 pesos18 (nin­ .inferiores a los verdaderos costos sociales, son muy elevados para guna de las dos cifras incluye el costo del abastecimiento de algunas empresas. En los años sesenta ha ocurrido alguna des­ centralización de la industria hacia ciudades como Querétaro agua). El congestionamiento físico es otro problema asociado al ere-, y Toluca, que están bien comunicadas por transportes hacia la cimiento urbano. Como es el caso en el abastecimiento de agua : capital y otros mercados importantes. Esta descentralización su­ para la ciudad de México, la continuada afluencia de emigrantes; rgiere, de hecho, que si se obligara a las empresas a pagar los e industrias aumentará el costo de hacer negocios en el área y laí : costos marginales que imponen, la descentralización de la indusftria habría ocurrido antes y más extensivamente. inconveniencias de vivir allí. Estos costos son sufragados por cada P La mayoría de ,1a discusión política sobre el desarrollo regio­ nal no se hace en estos términos, sino que se preocupa más por 17 Id., p. 113. la falta de industrialización de las regiones más pobres, que 7R Yates, op. cit., p. 277. * ■< 74 EL DESARROLLO REGIONAL EN MÉXICO por su propio bien en el Valle de México. En el capítulo i sé 'capítulo iii discutieron algunas de las razones por las que es probable qué \los gobiernos se preocupen por los ingresos regionales relativos^ U PREOCUPACIÓN MEXICANA POR EL DESARROLLO ' En el siguiente capítulo examinaremos los motivos reales que REGIONALREGIONAL están detrás de la política regional mexicana y para hacer esto • debemos primero describir el proceso de decisiones políticas en ■ México. < ÍLa decisión de asignar fondos escasos de inversión a las dife¡rentes instituciones establecidas para desarrollar las cuencas hij Urológicas surgió principalmente por la necesidad persistente de aumentar la producción agrícola para los mercados internos y 1 piemos y para aumentar la oferta de energía hidroeléctrica. En a piras palabras, los proyectos se debieron a una meta principal i 3e política económica para aumentar el producto nacional per pipita con tanta rapidez como fuera posible. En este capítulo 'adiremos, posteriormente, un poco más sobre este objetivo. Tam­ bién resultaron del deseo del gobierno por una estructura más 4 equitativa del desarrollo regional, en parte debido a fuertes pre| piones políticas e ideológicas para mejorar las condiciones de vida de gente que pudiera creer que se les había dejado fuera de la y? corriente principal de progreso económico. La forma en que se .j lia promovido el desarrollo regional refleja las fuerzas políticas. En este capítulo presentaremos primero un breve bosquejo del | proceso de las decisiones políticas en México para ayudar a Explicar las fuerzas políticas e ideológicas que están funcionando, y después estudiaremos las razones para la actual preocupación Ó jor la estructura del desarrollo regional, ;el proceso de DECISIONES POLÍTICAS EN MÉXICO ’fil papel del presidente *En México el partido predominante, el Partido Revolucionario ‘Institucional (pri), controla la mayor parte del poder político en el país, sin oposición seria por parte de cualquiera de los ■pequeños partidos a los que se les permite funcionar. El presi­ dente del país es también el líder real del Partido y posee ^amplios poderes para dirigir el destino de la nación durante su túnico período de seis años. Parece difícil oponerse a su primacía jy no está claro qué límites hay sobre el ejercicio de su poder. Las funciones exactas del pri, del presidente y de los grupos ;de intereses en las decisiones políticas y, sobre todo, en la solee- 76 EL DESARROLLO REGIONAL FL DESARROLLO REGIONAL 77 ción clel siguiente presidente está envuelta en el misterio. Existió pedida,, responderá ante las presiones de los grupos de inf.crés dos interpretaciones diferentes. La primera recalca la importandí tconómico y social. del proceso de negociaciones dentro del pri, que, debido a h * amplia base de la organización del Partido, abarca la mayoría ideología de la Revolución de los sectores de la opinión pública.1 La segunda interpretad ción da mayor importancia al papel que tiene un pequeño grupí Revolución no fue un suceso claramente planeado para la de personas, denominado por Brandenburg “El consejo intei ¡tención de un conjunto .de objetivos consistentes y bien cletino de la Eamilia Revolucionaria”, y tiene aproximadamente J lídos. Como partido político cuya razón expresa es la de con­ miembros. Estas dos interpretaciones podrían en cierto gradj tinuar el espíritu y propósitos de la Revolución, el pri y sus permitir que haya una respuesta ante las presiones de los grupl [¡indidatos no tienen un manual, Biblia o credo marxista-lenide interés, pero ambas dejan al pri en los márgenes del proce| ftista que les proporcione un programa político. Sin embargo, la político.12 Cualquiera que sea la interpretación que uno adopl Jaturaleza de la Revolución ha dictado algunas de las direcciones sobre la selección del presidente, la influencia de la presión | |ue tomará la política, Será nacionalista, por ejemplo, la inverlos grupos de interés sobre el resultado de las decisiones relativa |ón exterior se acepta, en realidad es bien recibida, pero estrica los asuntos económicos es significativa. j bmente bajo los términos mexicanos. Tratará de mejorar la El proceso de selección del candidato del pri se inicia más di fuerte del campesino; por tanto, se dará importancia a la reforma un año antes de la elección, y durante varios meses ocurra kraria. Prometerá una ‘'mayor justicia” social; e intentará con negociaciones, consultas y vetos ocultos hasta que se llega a u ipergía promover-el desarrollo económico. Podemos ver que puede consenso. El presidente se elige en julio y asume el poder | fcstir un conflicto potencial entre algunas de estas metas. Un siguiente diciembre. Pero su nominación se anuncia en el otom presidente resolverá este conflicto dando importancia a una de filas, digamos, menos redistribución de la tierra y mayor interés anterior a la elección y desde ese momento, el candidato, que el presidente saliente, se convierte en la, figura política cej p la inversión agrícola; otro la resolverá de otra manera, dando tral en México. La elección del jefe del Ejecutivo es casi ui| mayor importancia, por ejemplo, a la redistribución de la tierra, formalidad, aunque ocasionalmente hay oposición real para tós río obstante, puede decirse que las consideraciones ideológicas cargos locales entre el pri y los partidos minoritarios. | jan interferido pocas veces de una manera sustancial con el No es fácil encontrar límites obvios sobre el poder de |eseo de promover el desarrollo económico y en pocas ocasiones las políticas adoptadas de una manera presidente una vez que ha sido elegido. Domina por compile# siguen siguen las políticas adoptadas de unadoctrinaria. manera doctrinaria, el escenario político. No sólo los secretarios y los principales M^luso los programas particulares que tienen un alto contenido cionarios civiles dependen de él para su nombramiento, sino qlMógico resultan ser pragmáticos en su funcionamiento, y Méademás el Congreso —que está compuesto por una mayoría abr®co parece haber evitado que las consideraciones ideológicas lo madora de miembros del pri, con unas pocas enrules reservac®evaran a invertir una gran cantidad de recursos en actividades para lalaoposiciónoposiciónexiste existe sólo para sólo aprobar para aprobar mecánicamente mecánicamente tienen relativamente la¡ pe tienen un bajo relativamente rendimiento un en términos bajo rendimiento de la en términos de la iniciativas presentadas por la administración. Como por dispqj ¡ronioción del desarrollo económico, sición constitucional no se puede reelegir no es necesario qujTl mejor ejemplo de esto es el programa mexicano de reforma se interese mucho en crearse una popularidad personal. Como se demostró en el capítulo h, la demanda de ticcomo recalcaremos, diferencias considerables entre las administré p Por quienes carecían de ella fue uno de los elementos de dones en el interés y estilo político. No obstante, es posibíÍRor importancia deja Revolución. La redistribución de h ¡ierra ;de los latifundios ha sido un programa principal de predecir que quienquiera que sea el próximo presidente, se ap fc sucesivas administraciones durante más de medio siglo. El gará ampliamente a la ideología de la Revolución y, en cier| «amaño máximo permitido para una propiedad agraria se lia «codificado de tiempo en tiempo y depende de la calidad y el 1 Véase Robert E, Scott, Mexican Government in Transición, Universílj que se hace de la tierra. En años recientes ha variado desde of Illinois Press, Urbana, 1959. I 1100 hectáreas de tierra irrigada hasta varios miles de hectáreas 2 Frank Brandenburg, The Makíng of Módem México, Englewood Clíffi |5ara la tierra dedicada al pastoreo. N. J., Preníicc Hall, "1964, ' 1 EL DESARROLLO REGIONM 79 EL DESARROLLO REGIONAL ■ A pesar de estas violaciones, el programa de reforma, agraria La reforma agraria se ha realizado a un ritmo muy desigual ha sido una parte importante de los esfuerzos de toda admi­ Durante las dos primeras décadas de reforma agraria —esto nistración para hacer sentir a las personas que está haciendo lo desde su h ielos en 1915 hasta el principio del período de Dj zaro Cárdenas en 1934- la distribución de tierras promedf^5 I>pd^ Para «alizar las metas de la Revolución. -- hectáreas -al año. --Ya antes -de —de las parcelas ejidales ha sido una forma muy vi400- 000 1934 al menos, un¡¡^¡asignación , ^■tdbíe de distribuir los frutos de la Revolución a un gran número político había manifestado que la tierra disponible para red| de campesinos, algunos de los cuales tienen tenues relaciones con tribuirse se había agotado, opinión que, desde entonces, se h ila economía de mercado y están conscientes marginalmente de expresado repetidas veces. Pero, bajo Cárdenas, la distribució ilos esfuerzos industrialización del gobierno central. central, de la tierra se hizo a una tasa que no se igualó nunca, anti ^esfuerzosde de industrialización del gobierno fotc esfuerzo ara dlstrlb r o después, distribuyendo más de 2 800 000 hectáreas al año. Ba ,, P “ la tierra no ha sido acompañado los siguientes tres presidentes, se hizo una redistribución de api ?e “versiones en gran escala para mejorar las cond tetones pro­ badamente 800 000 hectáreas al año. López Mateos redisl >du,cü™ en la agricultura en las zonas en que ha ocurrido la buyo aproximadamente 16 millones de hectáreas entre 1958 ^«bución. Una de las cosas notables del programa relativar ■ Garguero J Rente exitoso para mejorar la productividad agrícola en Mé1964, es quien más se lia acercado a la tasa de- Cárdenas, y *d'aunque'muy por ew concentradón en las zonas y en la tierra que no es tasa actual de distribución de la tierra, i -m predominantemente ejidal. Esta política ha producido una difede los niveles que tuvó con Cárdenas y López Mateos, sigí á íencia dramática entre el desarrollo de las economías agrícolas siendo bastante alta. La tierra tomada a las grandes haciendas, por lo general $ ¿ ,■^privada y ejidal; la productividad de las tierras privadas se in­ . crementó con rapidez debido a un importante programa ,de in­ compensación, ha formado el ejido. En algunas ocasiones el versión pública en recursos hidráulicos, crédito y facilidades de tierra ha seguido siendo poseída y trabajada colectivamente. P<ersión Publlca en recursos hidráulicos, crédito y facilidades mercado, en tanto que los ejidos sólo han experimentado -pequemuy pocas veces ha demostrado ser práctico el cultivo colecüyEL . - , . •, , - J ------------..la -__ r. ... 08 awMtos en de manera que en la actualidad menos del 3% de la tierra <¡í i’’ productividad a medida que se ha difundido el conocimiento ha dispuesto mejores semillas semillas yy fertilizantes, fertilizantes. ha sido expropiada se trabaja colectivamente. En la gran maya Rop^nto Y se ha y sedispuesto de demejores de los casos los ejidatarios tienen derechos de usufructo peí • A8Í> en tant° <lue ,e¿ gobiernose ha preocupado mucho por —«¡sus logros en la distribución de la tierra y en el cumplimiento petuos sobre una parcela que pueden heredar, pero que no pt^ ■ dwu'' ^as Promefias den enajenar de ninguna manera. Esto significa, por ejemplo L * del - programa de reforma agraria, no se ha conr* pitido a1^ limitar =Pronietidosua limitar su inversión el sector agrícola los ejidos. que no puede rentarse legalmente la tierra de un ejidatario.'endatarío inversión en el en sector agrícola a alos ejidos, ' ■ ‘ “Como resultado ha hecho sus inversiones agrícolas en las regiones en la práctica, las autoridades tienden a no fijarse en tales vil L , , . .. , , ,-, - . i• ¿a productivo de la tierra. Vui G . Air hubieran y .éstas se encuentran 1 ... laciones, puestoi.que1 aseguran el uso , sido las ~mas productivas, ,; ., E * ,. -principalmente en zonas no eudales, y ha sido capaz de a™1 apiaviolación que1 se permite, por razones practicas, es la de cod t . . J ,5 , 1 a millones de campesinos dándoles parcelas, muchas . . v, ~ 1 que propietarios privados de la tierra controlen vanas parcelé ■las cuales han sido siempre de baja productividad, con frccuencada una del máximo tamaño legal,. rbajo la propiedad nomina m - *, , ‘, . , . \ . s LCia n ai rprhhfhti nnhrpfertilidad v n 1 n y rl i ft rn! t ar I narti idanphtnn debido a su pobre y a las dificultades para irride parientes o amigos. Esto significa que, de hecho, no se n» ;garlas. Además del programa de redistribución de tierras, el go­ distribuido todas las grandes propiedades agrarias, y que htl d bierno puede indicar el gran éxito de su programa para mejorar cierta seguridad de que, cuando menos, las grandes propieda­ da productividad agrícola, omitiendo el asunto de quién es el nenevioh i<!.bu . r. , . . des restantes serán totalmente utilizadas. No tiene caso f' viuj« . ,. ' 'principal beneficiario de este progreso, 6 que el máximo per e r „1 ., , ., . 1, . la ley poseyendo ocultamente más tierra q n r Esta combinación de ideología v ora ■ sta combinación de ideología y práctica no es por necesidad mitido si no va a utilizarse para hacer una ganancia. El dejí físultado de un esfuerzo consciente por varias administraciones fe jevoJ . . .. .... la tierra sin trabajarla quizás origina una investigación por li lucionarias para dejar al ejidatario fuera del progreso.3 En autoridades agrarias y la subsecuente expropiación, puesto $:' tieii t 3 / en todas las zonas, hay una demanda insatisfecha por Agradecemos‘ ~ a Clark Reynolds su participación enjaslas muchas discu­ ejidal. Los ejidatarios tampoco deben dejar de trabajar sil lii piones que llevaron a' ’ tí 1 desarrollo de estas ideas. Se expresan con mayor desu iibro The Mercan Economy: Twenty.Ceniuiy struaure *rra más de dos años sucesivos, ya que pueden perder su dered l lIe Gro i/1 N™ Haveii, Have11’ Vale ¥ak Universk •Growlh University al usufructo de la tierra. •’ ■ "' t‘New y PressPress, - 197°-1970. P J K iuj vj ü pü 1<r 80 EL DESARROLLO REGIONAL®1 DESARROLLO REGIONAL 81 vez de eso, parece que esta situación surgió como producto d®?°nsideran básicas, entre las cuales están el petróleo, los peleó­ la combinación de diferentes presiones para aumentar la pro®uímicos básicOs> la electricidad, el transporte, el teléfono y las ducción agrícola y distribuir tanta tierra como fuera posible. AWMmm Daciones telefónicas y telegráficas. LaLa “mexicanización”, dar gran importancia a este esfuerzo para realizar las metas de®a venta ji ciudadanos^ mexicanos de una parte que les permita el ¡¡control de una subsidiaria extranjera, se estimula de varias ma­ la Revolución de distribuir la tierra, el gobierno convención" ~ ’ illeras, y podrían ser una condición para que se permita funa los campesinos de su intención de mejorar los ingresos rurales] Esta preocupación e interés oficial en los problemas del cana ícionar a una nueva empresa. Se sabe que la transferencia de *pesino se reafirma constantemente ante la evidencia acumula [control de los extranjeros a los mexicanos sólo es simbólica, péro tiva de un patrón de vida relativo en deterioro para este grupol fe un símbolo importante. Sin embargo, no hay una exigencia De esta forma, la sustitución de la ideología por los logro® Segal para que las empresas extranjeras se mexicanicen, y cuando económicos permitió al gobierno distraer menos recursos en prcá fee cree que el interés nacional de México es mejor servido pergramas de bienestar social de lo que hubiera sido necesario d| fcnitiendo que se establezca una nueva subsidiaria extranjera, a besar de su negativa para vender acciones a mexicanos, se le otra manera. ejemplo dWperm^bra °Perar a ta^ empresa. El programa de reforma agraria no es el único una combinación de práctica e ideología. El trato que da Méxi($ í a la inversión privada extranjera es similar. Con una historial grupos de interés con de relaciones problemáticas con inversionistas extranjeros, con] daños reales o imaginarios en ambas partes, México ha tenida ba República Federal tiene 29 estados, 2 territorios (sujetos a éxito para concebir una política hacia las inversiones extranjera! control central que los estados) y un Distrito Federal (la udad de ciudad de México yyzonas adyacentes). CadaCada una tiene pro-sus pro­ permite tanto satisfacer los fuertes sentimientos zonas adyacentes). una sus tiene que lelepermite tanto satisfacer los fuertes sentimientos nacional naciona? M listas como explotar los beneficios que puede producir la inver^ ?íos Aderes políticos. Los gobernadores son los líderes nominales • El — - - reconoce la valiosa - contribución que? 4el pri en cada Estado; son nombrados por la organización cen­ censión extranjera. gobierno ia inversión extranjera puede hacer a México. No sólo propor-ÍR1 Y aparentemente la elección para cada puesto es cuidadojámente estudiada por el Presidente. Los gobernadores actúan ciona cantidades importantes a la reserva de divisas, sino también; , más específicamente, es una fuente de ahorro exterior para la creciente existencia dd ¡siguiendo los lincamientos del Partido, y, . , , ? . „ . __ i-:_______ ______ _____________________ „ Ide su dirigente principal; la experiencia pretérita índica que se inversión fija, y quizá de mayor importancia; con frecuencia varíes puede remover y serán removidos, si sus acciones entran en acompañada de conocimientos técnicos escasos. México también) ¡‘fuerte conflicto con los intereses de quienes están en el centro. hace grandes esfuerzos para asegurar que su posición en la co-' munidacl económica internacional sea fuerte y se le considere, )No obstante, sirven como un canal para comunicar el sentícomo una nación política y económicamente estable con un am­ Caliento local a las autoridades centrales. De manera semejante, ■ hay muchas otras organizaciones en el Partido que pueden re­ biente favorable para la inversión. presentar los intereses de diferentes grupos de la población. Sin embargo, la hostilidad hacia el capital del exterior es una = Existen tres grupos organizados principales de interés dentro herencia de la Revolución y de la prolongada disputa con las, f de la estructura del pri, que canalizan opiniones a sus miembros compañías petroleras extranjeras que culminó con su nacionalk zación en 1938. El disgusto general ante la dependencia de ex-', y de éstos al centro político. El más grande, la Con federación tranjeros —ya sea como inversionistas, abastecedores o clientes-: ■'Nacional Campesina, fue fundada en 1938 por Lázaro Cárdenas está muy difundido y se expresa, por ejemplo, en las razonesJ p retiene su estructura organizativa original. A través de esta de México para su política de sustitución de importaciones.4 El .oiganización más de dos millones de ejidatarios pueden expresar ■sus opiniones y afirmar que se les consulta para las decisiones sentimiento nacionalista es complacido por una serie de regulaciones que limitan las actividades de la inversión extranjera. Se'gpoMticas a^través de las.secciones locales y de los,niveles regional y estatal. Existen organizaciones semejantes para los trabajadores; excluye a las industrias extranjeras de ciertas industrias que se' .... . .......... .......................................................... ¿a Confederación de Trabajadores de México se estableció en .1936 pero su historia ha estado marcada por frecuentes luchas * Para detalles adicionales véase Tnnolhy Ring, Mexican Indtistrialízatioii interiores que reflejan la amplitud de las opiniones políticas and Trade Molicies since 19f0, cap. v, Londres, Oxford Univcxsíty Press, 1970. 82 EL DESARROLLO REGIONAL! EL DESARROLLO REGIONAL 83 dentro del movimiento laboral de México y en la actualidad tien^ .tivo en elaboración de políticas. En última instancia todas las *como miembros a menos de la mitad de la fuerza de trabajo d( y/decisiones importantes se canalizan directamente al jefe del Eje­ México, aproximadamente 600 000 trabajadores. Finalmente, los *cutivo quien tiene el poder de veto final sobre todas las metrabajadores del gobierno tienen una organización, la Federacíó| Lídidas. Aunque todos los presidentes son nombrados por el pri, de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado, que es uih í la personalidad y las opiniones de un presidente individual miembro importante del pri y, por su misma naturaleza, uní determinan en gran medida el carácter de su administración, decidida defensora del gobierno; cuenta con poco más de 300 OOv FComo resultado han ocurrido diferencias considerables entre las ntíembros. f administraciones en los tipos de programas presentados y la im­ Además, hay varias otras organizaciones que existen para hacct <portancia que se da a diferentes partes del programa de desconocer las opiniones y puntos de vista políticos de sus mien| ■arrollo. bros ante el centro. Varios grupos diferentes de industriales^ i- Esta concentración extrema del poder también ha significado de hombres de negocios hacen, con frecuencia, pronunciamiento ,que ¡a mayoría de los programas deben elaborarse para termieconómicas y políticas en México. creó sobre las lascondiciones condiciones económicas y políticas en SeMéxico. Se creó fodo del presidente, anarse;en solo de seisdeaños, período del presidente. narseunen un periodo S0¡0 peidodo seis el años> el per otra organización cuando el mismo pri fue reformado por $ quien se le prohíbe por la Constitución buscar la reelección, predecesores (1946) para unir a muchos pequeños grupos indi jqada administración debe trabajar un programa propio y decipendientes, incluyendo a los trabajadores del gobierno (quiera prioridades; nono hayproceso un proceso de planeación • dir sus sus propias hay un de planeación propfas prioridades; aún funcionan independientemente), cooperativistas, pequen^ ?que ¡ntente atar a un régimen a los programas de otro. Incluso agricultores, intelectuales y profesionales, choferes de automóvil^ ,ja pianeación formal dentro del período de una administración de alquiler y otros no comprendidos por otros grupos de í * es reciente y su ....................... influencia sobre las decisiones económicas es muy presentación formal dentro del Partido. < discutible. A partir de los años treinta existieron documentos Los grupos de interés tienen una función muy importante llamados '‘Planes”, pero éstos, por lo general, fueron programas Proporcionan un medio a todas las personas, sin importar clase políticos y exhortaciones preparadas por el presidente y los funsocial ni ocupación, para sentir que en realidad están partió ¿cionarios del Partido, con muy pocas guías para la asignación pando en el proceso político, a pesar del hecho de que sólo ha) »de |Os recurí)0S nacionales o incluso de los fondos públicos, un partido político y se pueden predecir con anticipación loj pj gasto de los fondos públicos se hizo cada vez más difícil resultados de las- elecciones nacionales. Hacen esto proporciona . controlar a medida que los llamados “organismos descentran­ do una línea de comunicaciones formal y relativamente . abierh r uados” aumentaron en importancia. La creciente intervención del y los centrales de decisión entre los losindividuos individuos y organismos los organismos centrales de decisión d? J gobierno mexicano en nuevos campos de la actividad económica, pri. EnEn palabras, existen ¡numerables canales a través ejemplo, hapetróleo nacionalizado el petróleo o otrasotras palabras, existen ¡numerables canales a través <!Qa*m7dida “que7Lr\TeTpE,TZ^aci’on¡lirad¿Tr medida que, por los que se puede expresar el disentimiento y los intereses esP^;; comprado las compañías eléctricas con frecuencia ha tenido por cíales de una región; clase social o sector económico puedes f¿cd crear nuevos mecanismos de administración que reormovilizarse y encontrar algún medio de comunicar sus conflicto gardzar las funciones de una Secretaría. El resultado es la exisa los niveles de gobierno en donde vez se escuche, losaltos altos niveles de gobierno en tal donde tallesvez se lesI escuche, i qencja de m¿s de sjqq organismos descentralizados, que, frecuenpesar de la ausencia de partidos de oposición efectivos y el aitj ^.teniente, derivan su autoridad directamente del presidente. Desde grado de centralización de la autoridad en el jefe del Ejecutiv hasta 1962 se hicieron intentos para controlar y planificar la estructura de decisiones mexicana ha logrado conservar su| gasto público y, hasta 1962, la mayor parte de la llamada cíente flexibilidad permitir que que las opiniones de la minorf p]aneac¡¿tn” "pjaneación” consistió en distintos intentos de hacer intentos esto. flexibilidadpara para permitir las opiniones ele la?<(miñón consistió en distintos de hacer esto, lleguen hasta los niveles más altos para ser consideradas y f jy organismo más importante establecido durante este período pendidas. Hue la Comisión de Inversiones, creada en 1954, e informaba : directamente al presidente. La Comisión era responsable de la Planeación j formulación de los criterios para la inversión pública, la selec­ ción de proyectos y la coordinación de éstos con los planes naEl poder del presidente se refuerza..además por un sistema * Jcionales de desarrollo. Sus programas anuales estaban sujetos a A x gabinete en donde los secretarios pueden ejercer su poder col®pa revisión de la Secretaría de Hacienda, aunque el presidente EL DESARROLLO REGIONAL». 84 | ¿EL DESARROLLO REGIONAL 85 continuaba examinándolos cuidadosamente, Su primer intento de.J ■ planeamiento consistió en un plan de inversión de dos años que! :Para e %orar planes detallados de la inversión pública y se han más rígidos sobre la inversión de los orga­ se elaboró en 1956. ^estableado controles ,............................................. ' nismos descentralizados. Cuando López Mateos fue presidente, la Comisión se integrój : Este grado limitado de planeación central, incluso ha tenido dentro la nueva Secretaría de la Presidencia, dentro de la nuevadedecretaría ae ia rresiuencia, une ci<t que ■- era respon-^ -i '< .... ' 1_XrJiLiAn o . x _ _„£--------------------------------------------vuv j.-------------,---_ „ _actividade< .. sable, entre otras cosas, de la coordinación de las_ Si 5ÍÓ , dión de restringir la circulación del plan, y limita los electos económicas del gobierno. La reorganizada Comisión Nacional dé® ídel plan para promover la coordinación y el control de los pro­ Inversión Pública fue incapaz de hacer mucho en el campo de la® gramas de inversión pública. Incluso dentro del sector público, planeación, puesto que sólo pudo requerir planes de inversión»! pos planificadores económicos colocados en un alto nivel no a cada uno de los organismos queuno recibían y tratar de® a cada de losfondos, organismos que,recibían toncios, y* TaLai, uWüenen la última palabra sobre la ejecución de los programas supervisar sus gastos. Se dio atención especial al uso e ivisas|g(le inversión. En última instancia, el presidente toma las decisiopero no ocurrió un planeamiento comprensivo. W. ■nes sobre la asignación de los fondos de inversión, y la necesidad La Carta de la Alianza para el Progreso exigía a los países®, política de satisfacer ios intereses de ciertos sectores o regiones receptores la formulación de un plan de desarrollo. Se estable®' ¡debe en algunas ocasiones sobreponerse a las estrictas consideració una Comisión Interministerial para formular un nuevo plan® Mtiones económicas. Las innumerables decisiones por las cuales el y desarrollar un nuevo mecanismo de planeamiento. La Cómic ,í (gobierno afecta el comportamiento de la economía, por ejemplo., sión produjo un Plan de Acción Inmediata, que cubría el período! J las que se refieren a las licencias de importación, controles de de 1962-64 (prolongado, después, hasta 1966), que se sometió í precios y el permitir o no que funcionen empresas extranjeras, la Organización de Estados Americanos pero que tuvo una cir< jüo se consideran en el plan, que no está disponible para los funculación muy restringida en México, incluso en los altos niveles, .cionaríos que toman las decisiones, Aparte del planeamiento de del gobierno, Como resultado, el efecto del plan sobre las per-; fe inversión pública hay poca cooperación interministerial, y es sonas que estaban haciendo las decisiones sobre la política ecó?í i ^vidente una gran rivalidad política entre las secretarías refornómica sólo fue muy limitado, excepto en las secretarias q%. ^n¿ose esta competencia por la ausencia de un sistema de gase ocupaban—directamente del plan. riu nbn 'púnete. Aunque el sistema político mexicano se ha alejado del Aunque este plan ha sido sujeto a fuertes críticas, por adolecen personalismo, en que la influencia de los líderes políticos de­ de un modelo macroeconómico consistente de la economía para) spendía de sus seguidores personales, acercándose a un proceso basar sus cálculos de inversión y su efecto sobre el desarrollo(más formalizado de decisión política en que los grupos de interés nacional, fuenacional, el primertue intento en incluir tanto la inversión pú< ei primer funcionales juegan un papel importante, la influencia personal | - interno en uiciun umu ’ •f. • ti! blica 5como la privada, cuando menos en muchas in ustriaslos secretarios y de los directores de los organismos gubersicas. Sin embargo, como este plan no tuvo amplia circulacióu^v XUÍJ ÓCLÍ sigue contando mucho.6 esta coordinación no pudo tener mucho efecto sobre el proceso» a es de! decisiones, decisiones, en en especial especial en cu el ci sector ócuuíprivado. pnvfluu. >„ , 1 ‘ ’ -segundo ■ ■ - ...................................................................... Un plan también fue ¿riticado por* falta de exposil™ de deemon política practica: r . ,t comisiones de. las cnenen^t hidmlAfrimc pt comisiones de las cuencas hidrológicas ción ante las partes interesadas. La Comisión Interministerial preparó este documento durante los primeros años de la admij|> comisiones de las cuencas hidrológicas se crearon, con el nistración de Díaz Ordaz, para cubrir el período de 1966-70, peí espíritu que muchos de los organismos descentralizados, es4|LSm0 e!PÍ r* a los detalles deÉfeísmo incluso menos personas tuvieron acceso __ programas específicos que no encajaban claramente ra ieallZar b^W intento que en el caso anterior. La Comisión proyectó una tas ni rro de la organización gubernamental existente. No obstante, n> de crecimiento global del 6,5% anual y también proporcionó uffl jjesde el punto de vista técnico, carecen de la autonomía de los análisis detallado de algunos de los principales sectores de 1| ^Wganisnios descentralizados puesto que responden directamente actividad económica y del balance de pagos'. Este plan se ha usa<’ 1 Wiite la Secretaria de Recursos Hidráulicos. Una vez que se de^idió ejecutar un programa de inversiones en gran escala en unas .i ‘ .t i , . CJ Jl •/ r_x__________________ :..• ~ 3 Véase Miguel S„ Wionczek, "Incúmplete Forniel Planníng. México”, Planning Economic Dcvelopmenl, Irwin, Homcwood, Illinois, 1UG3, pp. UG'81W( .34 Véase Scott, op. ciE, pp. 4-33, ; ------ EL DESARROLLO REGIONALE-EL DESARROLLO REGIONAL 86 cuantas regiones aisladas del país, se crearon comisiones pai^- ■b~«vvü j 'políticos y que de uuurcxa otra manera tal,. vez hubiera debilitado al asignar los fondos y crear el mecanismo administrativo necesario^ Eartido si . no se integraba dentro del ________________ _______________ l "esfuerzo revolucionario”.. para su gasto. Una característica muy atractiva de estas organh ¡Cárdenas era apreciado por la mayoría del pueblo michoacano zaciones es su habilidad para trabajar en varios estados simultápy un político, que tenía la habilidad necesaria para obtener el neamente y para coordinar los esfuerzos de las diferentes secrec acuerdo político cuando se necesitaba para lograr las metas de la tarías para mejorar el capital general social.en una región. Comer _ ______en ______ ___ ^Comisión, .Más recientemente Cárdenas___ se convirtió directivo indicaremos en el siguiente capítulo, se ha encomendado a la^ de la Comisión del Balsas, que se formó en 1960 para ampliar comisiones de las cuencas hidrológicas una gran variedad el trabajo de. la Comisión ;el trabajodel de,Tepalcatepec la Comisión sobre del Tepalcatepec una zona sobre una zona tareas, y han demostrado ser un instrumento flexible de la políj mucho más amplia y que se incorpora a la Comisión del Tepaltica regional. En algunos casos las comisiones han asumido fe tatepec. Aunque parece que en años recientes Cárdenas perdió autoridad sobre inversiones regionales que eran la responsabilidad^ .hasta su muerte (1970), algo de la influencia política que tuvo de otras secretarías o gobiernos estatales. En algunas ocasione^ ■siguió siendo una poderosa figura política de izquierda y sin su función principal ha sido la planeación y la coordinación de; ¡duda esto le ayudó a obtener los recursos necesarios para conla inversión por otros. En el primer caso, el foco de interés obvio •servar el ímpetu de la Comisión del Balsas. de la inversión en recursos hidráulicos y construcción de sistfr .El puesto más importante de la Comisión del Papaloapan fue mas de irrigación, control de inundaciones y generación de enere ocupado por un ingeniero, Reynaldo Schega, aunque se ha pen­ gía hidroeléctrica sólo son parte de la inversión total de lasado que Miguel Alemán esperaba ocupar el cargo al dejar la comisión; también se hacen gastos en carreteras, escuelas, mejorar 'presidencia en 1952. El siguiente presidente, Ruiz Cortines, sin urbanas y servicios de salubridad públicos. La magnitud del 'embargo, nombró a otro ingeniero, Raúl Sandova.l Landázuri, papel jugado, en este respecto, ha dependido de la prioridad ¡muerto en un accidente cuatro años después. En su libro sobre que da el presidente y sus principales consejeros al programa $ proyecto del Papaloapan, Thomas Poleman recalca la irnporparticular de inversión elaborado por cada comisión. Dentro de jlancia de la persona que ocupa el puesto de Vocal Ejecutivo los límites impuestos por su presupuesto, cada comisión . puede í'V.La Comisión se vio privada por un accidente de aviación ocuparse con un amplio campo de medidas para la planificación ;de un Vocal Ejecutivo particularmente enérgico, y como resul­ regional comprensiva. El segundo tipo de actividad, la coo^ tado de una serie de decisiones de alto nivel sus actividades se dinación de las funciones de otros organismos que trabajan envieron limitadas considerablemente. Desde entonces ha estado en la misma región, es más problemática y depende mucho de h da defensiva”.7 Por varias razones políticas se redujeron mucho sus influencia y habilidad de su personal. La comisión ajkno puede aaxktxv ** l^últimos uaáauüaños íua^de ov ¡fondos avj en los la*.^década de los cincuenta, aunino sólo estimular tal cooperación y carece de los recalque exigir, sino _ . t los objetivos que seguía eran, y siguen siendo en realidad, . _ 1 por ' — ~ í —~ *¿-i «v 1 rt de *»< otros £t-.organisraoj rtn /Id r\trr\C CíVCf Olos T“O *t í£v\No Hat-i f-Dwique f-Aell^z» El rt de NT^, _1 *_-.___ . _ sos para realizar sí misma las funciones evidentemente delC’tTtAÍ gobierno. decimos director si éstos rehúsan su cooperación. Como es natural, la rivalidad] Juna comisión sea necesariamente un político importante para normal entre los organismos ha hecho esto difícil en la prácticí^ que tenga éxito la comisión; está manifiesto no ser el caso, ya que En este tipo de situación, la influencia del principal funci£ fe mayoría de las comisiones han estado en manos de técnicos nario ejecutivo puede ser crucial para determinar el éxito de k jhasta entonces desconocidos. Pero sí sugerimos que la influencia comisión, y el grado de su influencia política personal puedj-personal del director de una comisión es un factor importante ser una diferencia significativa. La elección del directivo de para determinar su grado de éxito al obtener los recursos para comisión ha sido por tanto una decisión importante. Cuand| ¡realizar su trabajo. En otras palabras, los fondos de inversión 1 el presidente Alemán creó las dos primeras comisiones estuv| r ---------------------------- sencillamente --* sobre*la base ’ de * un análisis .......... 90 se asignan impar­ consciente de esto y así seleccionó a los directivos. Como cabeza dal de costo beneficio. de la Comisión del Tepalcatepec eligió al general Lázaro Cá& denas, quien había sido presidente de México, originario de Michoacán, en donde iba a trabajar la Comisión. Esta designa ción también tenía la característica de dar un puesto de prestígi^ t; Thomas T. Poleman, The Papaloapan Project, Stanford University Press, a un hombre que tenía un número considerable de seguidor^ hnford, California, 1964, p. 98. Xd. y LlclUllXkAíXVI, UL O U. x p *wu ^ v/4-x XCl LLVUdLla, U.C XUü L1X1L, Ul i lld;*tíU-ll *¡ 88 EL DESARROLLO REGIONAL! EL DESARROLLO REGIONAL 89 í go, maíz y frijol, sus alimentos básicos. Esto ha ayudado directamente, al balance de pagos. También ha significado que .. sin una tendencia para incrementar la población y elevar los Objetivos económicos nacionales : ingresos que tendiera a aumentar los precios internos (o tú meComo indicamos en el capítulo i, algunos de los objetivos dé­ nos causar importación de alimentos), ha sido más fácil que en la política regional de desarrollo serán, por supuesto, los mis-i otros países latinoamericanos controlar la inflación, y esto indimos que los objetivos nacionales.8 En México, las principales, - rectamente le lia ayudado a evitar crisis en el balance de pagos. metas de la política económica son el aumento del ingreso peo . Además, las exportaciones agrícolas siguen siendo la mayor parte capita con tanta rapidez como sea posible, y proporcionar tanta" de las mercancías de exportación (aunque ahora las superan los ocupación productiva a la fuerza - de trabajo que en la actua­ ingresos por el turismo, incluyendo el gasto en las zonas fron­ lidad crece a un 3.5% anual. Una meta derivada que se men­ terizas), representando casi el 40% de los ingresos totales por ciona con frecuencia es el reducir la dependencia económica dej exportación. acontecimientos exteriores, aunque México ha tenido menos éxito La búsqueda de nuevas tierras para la agricultura ha sido mi en este respecto que en otros. Aunque es cierto que la susti-.. importante motivo que subyace en las políticas de desarrollo tución de importaciones ha tenido éxito para reducir la propor­ • regional. La apertura de nuevas tierras ha tenido gran imporción de importaciones con respecto a la demanda final, la com­ - tanda para explicar el crecimiento del producto agrícola desde posición de las importaciones ha consistido crecientemente de ; 1940. De 1927 a 1940, el área cultivada aumente) 2.2% al año, bienes de capital, materias primas y bienes intermedios. En con-, en tanto que el rendimiento por hectárea sólo 0.5%. De 1940 secuencia, será difícil disminuir las importaciones durante un ; a 1950, el área cosechada aumentó 3.1% al ano y los rendi­ período prolongado como consecuencia de una crisis de balance, mientos 2.6%.° De 1951 a 1960, el área cultivada aumentó 2.0% de pagos, sin producir una disminución en la tasa de creck al año y los rendimientos 3.0%. El asentamiento en tierras previamente no utilizadas o usadas sólo para un primitivo pastoreo miento de la producción. En este sentido, México sigue depen­ ■ diendo mucho de las importaciones. También conserva una con-: ha sido una meta importante de varios de los proyectos de vertibilidad total interna y externa, y en consecuencia ha tratad^ cuencas hidrológicas. También lo ha sido la provisión de servicios de impedir que surja cualquier situación que produzca una: de irrigación, ya que la disponibilidad de agua es de gran inr fuga de capital. México ha devaluado su moneda.dos veces desrie­ ■ portancia para determinar la productividad de la tierra cul­ la guerra, pero en la actualidad está decidido a conservar siij tivada. Otra forma por la que el patrón particular de desarrollo retasa de cambio. En consecuencia, una situación en donde hayaj 1 un de pagos y ausencia . ........ A * balance — m --- i ofavorable / de .'inflación, quel-gional del -que _ ' nos ocupamos en este estudio a ha acelerado el contribuye a lo anterior, es una meta muy importante de k 'desarrollo nacional ha sido por medio del incremento de la política. j r oferta de energía eléctrica. A principios de los años cincuenta, La forma en que el desarrollo de las regiones alejadas de lof < una escasez de 'energía eléctrica afectó a ciertas zonas indus­ centros urbanos del país contribuye a estos objetivos nación^ triales y creó un freno potencial sobre el crecimiento de la les es primoMialmente a través del desarrollo de la agricultura^ industria manufacturera, amenaza que ha sido contrarrestada por El crecimiento agrícola ha sido un componente significativo de¡ fel rápido crecimiento de la capacidad de ' generación de clcctricrecimiento total, y los logros en esto en comparación con vario! ' cidad. La energía hidroeléctrica ha sido una i característica de todos los esquemas de lasv cuencas hidrológicas y ha jugado una otros países latinoamericanos que tienen políticas industriad industrial^ : todos los esquemas de las cuencas hidrológicas ha j más o monos semejantes explican en gran parte el relativo éxit§ ■ parte en esta expansión. En 1965 la capacidad hidroeléctrica instaladaeraera casicasi cuatro cuatro vecesveces la de 1950, la dey representaba 1950, y representaba más económico mexicano. México ha dejado de ser un importad^ r¡-instalada de ciertos alimentos, en especial trigo, y se coloca en una situa­ j del 40% de la capacidad instalada en el país. Desde entonces f la inauguración de grandes obras hidroeléctricas aumentó consición tal que, frecuentemente, exporta grandes cantidades de tu POLÍTICA ECONÓMICA Y DESARROLLO REGIONAL f■ * Para una discusión más completa de tales objetivos y logros, véase Kui¿l; Mexícvm Jndtisl rializalion and Trade Policies since 19'10. j 8 Secretaría de Agricultura y Ganadería y otras dependencias gabeniaf mentales, Proyecciones de la oferia y la demanda para producios tigiPmtis > i y ganaderos en México de 1970 a 1975, México, 1965, pp, 145-6, 90 EL DESARROLLO REGIONAL . EL DESARROLLO REGIONAL 91 derablemente su importancia relativa. El crecimiento de la capa- ’ gresos disponibles para los pobres. La única concesión del go­ cidad termal fue mayor que el de la capacidad hidroeléctrica 1 bierno al deseo de un mayor consumo privado es el subsidio durante el período 1950-1965, pero el crecimiento en energía a los alimentos básicos que se distribuyen a través de los cana­ generada fue mayor para la hidroelectricidad. les oficiales a las personas en los barrios pobres urbanos y en las zonas rurales, pero éste no es de manera primordial un programa de desarrollo. Los objetivos del desarrollo regional Estos programas de inversión rural se consideran esenciales para hacer mínimo el peligro de disturbios regionales que al­ Aparte de la contribución que los proyectos regionales pueden terarían el delicado equilibrio que se ha logrado. Además, mu­ hacer al desarrollo nacional, y de los costos de la concentración, chos lideres políticos están comprometidos ideológicamente a me­ que se tratan en el capítulo n, el gobierno desea un desarrollo jorar la -suerte de las comunidades indígenas. Estos programas regional más equilibrado por el valor que tiene en sí mismo. están destinados a proporcionar a los grupos más pobres alguna En el primer capítulo discutimos algunos de los motivos gene- ; evidencia tangible del efuerzo de desarrollo económico, sin dis­ rales de los gobiernos. En el núcleo de la preocupación política traer una cantidad de inversión indebidamente grande de este mexicana por el desarrollo regional está un deseo de equilibrio : esfuerzo. También tienen importancia para reducir la corriente social. La importancia que se da a la industrialización y a la de emigrantes de las zonas rurales a las ciudades en donde crean sustitución de importaciones tiene su efecto principal en las zonas una pesada carga sobre las viviendas disponibles y los servicios urbanas del país. Se construyen nuevas fábricas y aumentan las públicos que se ofrecen a los residentes urbanos. oportunidades de empleo en las grandes ciudades. Las inversio- ’ Como se indicó en el capítulo anterior las características geo­ nes complementarias en capital social general han representado gráficas de la nación y la diversidad cultural de su gente pro­ una gran proporción del presupuesto de inversión dejando rela­ ducen innumerables grupos de personas que aún tienen ligas muy tivamente poco para las zonas rurales. Por tanto, no es sorpren- . tenues con. el resto de la nación. El Instituto Nacional Indige­ dente que las personas en estas zonas rurales hayan estado recia- ■, nista se ocupa directamente de este problema trabajando cotí mando, de una u otra forma, más atención y trabajos públicos. Estas demandas no han sido ignoradas por quienes elaboran j grupos indígenas aislados en varias partes del país. El programa la política. El gobierno mexicano está consciente de los proble- J lo empezó en 1936 el presidente Lázaro Cárdenas con la for­ mas que pueden surgir si explotara en el campo el descontento * mación de cierto número de “Misiones Culturales”, que propor­ cionaban alguna educación y toda una gama de actividades para total. Su programa de desarrollo tiene en cuenta tales presiones e intenta reducir el descontento latente, en donde éste puede des- j incluir a las comunidades aisladas en el esfuerzo educativo na­ truir la estabilidad política. Uno de los problemas que confronta d cional.10 También era una forma de establecer ramas locales de el presidente es el de encontrar un equilibrio adecuado entre los.' organizaciones políticas nacionales para aumentar en los cam­ requerimientos del programa de industrialización y las demandas ' pesinos la sensación de participación dentro de la nación. Este esfuerzo disminuyó después del período de Cárdenas y por un mayor consumo de los grupos más pobres. Parte de la •, respuesta al deseo de mejoras en las zonas rurales ha sido el es- j los actuales esfuerzos educativos y culturales del ini se dirigen fuerzo, durante la década pasada, de aumentar la distribución j .exclusivamente a aquellos grupos que siguen fuera del marco de la tierra bajo las leyes de reforma agraria. Como ya dijimos, I de la cultura “mexicana”. Aunque, frecuentemente, ofrecen ins­ ésta sólo fue compañada por una gran inversión en la agricultura 1 trucción en los idiomas nativos, estos programas están elabora­ dos para familiarizar a los grupos indígenas con la serie de en las zonas en que los rendimientos prometían ser elevados. Se han instituido otros programas para mejorar los sistemas de.<j servicios y oportunidades que en teoría tienen disponibles. Sólo carreteras rurales, difundir el programa de electrificación rural, J en raras ocasiones permitirá el gobierno a un grupo que re­ aumentar el número de sistemas de agua potable y, quizá de ma- ;- chace explícitamente un papel de participación activa en la yor importancia, difundir el sistema de educación rural. De 1 nación en favor del desarrollo de una subcultura viable, pero esta manera se combina el consumo colectivo de los bienes con 10 Para mayores detalles sobre este programa, sus objetivos y sus logros, inversiones básicas en capital general social en lugar de propor- ■ véase Ramón Eduardo Ruiz, México: The Challantes of Ponerly and Illiclonar mayores cantidades de bienes de consumo y mayores in- ? teracy, Huntington Library, San Marino, California, 1963. 92 EL DESARROLLO REGIONAL diferente. Se hacen concesiones a tradiciones que sobreviven las normas ceremoniales, pero parece que existe una firme in tencia en alguna asimilación con el resto de la nación. Los indígenas no son los únicos que están aislados físic culturalmente. En el país hay aún muchas zonas que han manecido sin ser tocadas por los esfuerzos del desarrollo. Alg se han convertido en feudos ideales para políticos locales esperan establecer su propio protectorado, o en refugio de minales que intentan evitar ser atrapados por la ley. Si zonas se tornan especialmente problemáticas, como era el de la cuenca del río Tepalcatepec, entonces se movilizan recursos gubernamentales para reducir la amenaza al régimen. El gasto rural no va mucho más allá de tratar de descen lizar la industria. Sin embargo, éste parece ser un obje general del gobierno, siendo una razón los costos de la c centración. Otra causa parece ser un disgusto por la sobrec tralización per se, que expresan la mayoría de los escritores s el tema, aunque no en términos económicos. Zamora com a la región central con un órgano gigantesco y decadente se conserva a expensas de las partes más sanas del cuerpo; L Malo indica la “excesiva concentración y localización defect de la industria’'’; Enrique Beltrán comenta sobre la “absurda tralización” del país y Yates compara a la capital con la R imperial.11 11 Diagnóstico económico regional, p. 371; López Malo, op. cit., p. Enrique Beltrán, “Los problemas del Valle cíe México", Problemas del de México, p. 341; y Yates, op. cit., p. 306. Debe notarse, sin embargo, Yates no predice que bárbaros procedentes del norte caerán sobre la c de la misma manera. En este contexto es interesante preguntar si el crecimiento de la c de México ha sido anormalmente grande, ya que en muchos país ciudad más importante es claramente mucho más grande que la segund tamaño. Podemos comparar la distribución del tamaño de las ciudade México con los resultados obtenidos en otros países viendo cómo explicárseles por la ley de Pareto que originalmente se ocupaba de la tribución del ingreso. La idea de hacer esto se obtuvo de Benjamín W Problems of Greek Regional Development, Research Monograph Series, 4, Atenas, Centro Para Investigaciones Económicas, 1963, pp. 59-77. V también Hans W. Singer, “The ‘Courbe des Populationsí a paralle Pareto’s Law”, Economic Journal, xlvi, junio de 1936, pp. 254-63, y Allen, “The ’Courbe des Populations’, a further analysis”, Bullelin o Oxford lustitute of Statislics, xvi, mayo-junio de 1954, pp. 179-89. S sostuvo que Y ~ aXb, en donde Y es el número de ciudades con una blación de cuando menos X y a y b son constantes, explicaba la distrib en el tamaño de las ciudades. Si esta ley es cierta, se deriva que la presión log Y ™ log a q- b log X DESARROLLO REGIONAL 93 Varios escritores que han atacado el exceso de centraliza5n, tienen diferentes opiniones con respecto al grado de cen­ tralización que sería deseable. Las recomendaciones políticas de Yates se referían a la descentralización del Valle de México uti­ lizando áreas de la Mesa Central. Se puede decir que esto tiende a ‘Ocurrir naturalmente. Zamora, no obstante, vio en el lento crecimiento de la zona central una especie de rendimientos de­ crecientes de la concentración, y el peligro de que éstos puedan actuar como un importante freno del crecimiento económico. Al igual que Yates, pedía una descentralización dentro de la región central, pero sólo como un primer paso para una descentrali­ zación más completa utilizando otras regiones. Los proyectos de las cuencas hidrológicas tienen esta meta mús radical para industrializar las zonas alejadas de las áreas cen­ trales de México. Esta meta ha sido muy explícita, y los proyec­ tos, de las cuencas hidrológicas son uno de los varios pasos que se han tomado para estimular a las personas y a las industrias para que se establezcan fuera de las tres ciudades más grandes, y otras medidas se destinan para hacer más atractiva la perma­ nencia a las personas en los medios rurales. Quizás el más im­ portante de éstos se ha proyectado para el desarrollo de la agri­ cultura, mejoras de carreteras y sistemas de comunicación de manera que los mercados rurales funcionen mejor. Parece que los políticos mexicanos están convencidos que una forma impor­ tante de reducir la presión sobre las ciudades es mejorar las oportunidades económicas en el México rural. En el capítulo si­ guiente diremos más sobre los detalles de tales políticas. En este apunto puede decirse, sin embargo, que, aunque sin duda el deseo •de descentralizar la industria es sincero, las medidas para mejorar la infraestructura rural —y en realidad no van acompañadas de ■será una linca recta. G. R. Alien lia hecho un examen más completo de esta ley, y la encontró verdadera, en general. Para México en 19(10, tal ¡línea se ajusta mejor para ciudades con menos de 100 000 habitantes, que ■para 17 ciudades que superan esc número. Singer también hizo la hipótesis de :quc cuando Y era 1, se encontraría que X sería un valor no muy alejado ■de la media geométrica de las dos ciudades más grandes. Alien encontró ique cuando se consideran los pueblos o suburbios vecinos a la ciudad, cu ¡lugar de apegarse a las fronteras legales, como hemos hecho aquí, once ;de cada doce casos apoyan esta hipótesis. Pero incluso para la ciudad de ¡México, no digamos para el Valle de México, esto no corresponde, Debido ¡a la exactitud general de la hipótesis, el tamaño de la ciudad de México y pie sus alrededores es en realidad anormalmente grande. Por supuesto esto ¡no demuestra la superccntralización. Para detalles adicionales de estos cálcu­ los, véase Ring, River Basin Projects and Regional Development. i. &• 94 EL DESARROLLO REGIONAL otras medidas— no han sido y no serán por sí mismas adecuadas ] para contrarrestar las tendencias a la aglomeración industrial j en las áreas centrales de México, Mostraremos esto con mucho | más detalle en el estudio que se presenta en el último capí- i tulo de este libro, CAPÍTULO IV POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL i; LOS PROYECTOS DE CUENCAS HIDROLÓGICAS DE 1946 i En el capítulo n describimos el marco de las políticas de dcsL arrollo regional desde la segunda guerra mundial, y también U hemos discutido sus razones políticas y económicas, aunque hei utos dicho poco sobre ellas. Lo haremos'en el presente capítulo, \ Nos interesaremos principalmente por los cuatro proyectos de J cuencas hidrológicas en que se ha hecho inversión en gran escala i y durante un largo período que representan la mayor parte h'de los esfuerzos de desarrollo regional de México desde la gue\ \ rra. Como mostramos en el capítulo anterior, las comisiones de L las cuencas hidrológicas han ofrecido una forma de planear y ■ •; coordinar el gasto público en una región en que era difícil ha¿; cerlo por medio de las secretarías y gobiernos estatales, indeé ? pendientemente de la conveniencia económica de las inversio, Ipnes destinadas a obtener un uso más eficente del agua, tan escasa en algunas partes de México y en ocasiones tan abundante en otras. De hecho, en uno de los casos, el proyecto del ’ 4 Lerma-Chapala-Santiago, que no ha pasado más allá de la etapa -;[■ de planeación, las posibilidades de coordinación general y de píaj.neamiento asociadas con la planeación integral de una cuenca ■J hidrológica, son claramente lo que ha atraído al gobierno meN xicano, más que el .deseo de planificar el uso de los recursos hi; dráulicos de una manera coordinada. El cuadro iv-1 sintetiza el ? "gasto de las comisiones de las cuencas hidrológicas. A pesar de i la naturaleza integral del trabajo de las comisiones y de su papG peí en la coordinación de la inversión pública, estas cifras no í ’ incluyen todos los gastos públicos dentro de cada cuenca, sino rí sólo aquellos que se canalizan a través de las mismas comisiones, ■ '.Como explicaremos, la proporción de la inversión pública tmal |len una cuenca hidrológica, controlada realmente por una coa misión, varía de año en año y de lugar a lugar. \ La "marcha hacia el mar”, tal como la representan los pro y byectos de las cuencas hidrológicas ha ocurrido tanto en dirección í del Pacífico como de las costas del golfo. Los trabajos de las q ‘ comisiones han estado determinados en gran parte por la dife- 1 o FlJFRTt ó Comisiones de estudio PAPALOAPAN / hidrológicas Operación Proyectos dé cuecas en construcción o éfi n GH J ALvA C/i 400 J O z > r-< 500 I MÍ wSc ^FcSÍ EÍF (millones de pesos) O r Papaloapan A precios de 1960 * Grijalva A precios corrientes A precios de 1960 * Años A precios "corrientes 1947 1948 1949 1950 1951 1952 1953 1954 1955 1956 1957 1958 1959 1960 1961 1962 1963 1964 7.8 16:0 21.0 37.5 77.9 111.6 115.1 99.7 96.6 88.9 89.0 ■ 102.8 40.8 24.3 30.0 21.1 23.7 20.0 18.6 35.8 43.5 70.9 122.3 167.4 174.9 137.6 117.9 103.1 98.8 110.0 42.8 24.3 29.7 20.5 22.5 19.8 5.5 9.9 13.6 26.3 28.0 34.8 24.3 57.9 49.4 246.9 412.3 135.0 8.4 13.7 16.6 30.5 31.1 37.2 25.5 57-9 48.9 239.5 391.7 129.6 TOTAL I 023.8 1 360.4 1 043.9 1 030.6 Tepalcatepec (incl. Balsas) A precios A precios de 1960 * corrientes 2.4 11.5 14.1 16.8 20.7 27.3 27.7 25.7 32.5 30.6 38.3 33.2 19.9 26.6 10.9 22.3¡1 53.9t’ 54.4^ 468.8 5.7 -A 25.8 29.3 31.8 32.5 40.9 42.0 35.5 39.6 35.5 42.5 35.5 20.9 26.6 10.8 Fuerte A. precios corrientes A precios de 1960 * x o > 2 > cr ü 51.2 52.2 2.9 38.0 111.6 144.1 121.9 60.2 35.7 20.0 32.9 23.2 25.3 42.0 62.2 3.8 57-8 154.0 175.8 141.4 66.8 38.2 21.0 32.9 23.0' 24.5 39.9 59.7 579.9 ’ 720.0 838.8 21.6 a Gastos corrientes ajustados por el índice de precios para la inversión pública, Manual de estadísticas básicas. Bco. de Méx. b Incluye gastos para toda la cuenca del Balsas. Para la cuenca del Tcpalcatepec exclusiva rúen fe, los gastes comentes en 1962 fueron 13.9 niillones, para 1963, 13.8 millones y para 1964? 10.4 millones. puente: México, Secretaría de Recursos Hidráulicos, Informe anualj varios años, e información rmcnx>~cionada o publi­ cada por las distintas comisiones. ü <Z> > o r r o 0 "' 98 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 99 rente naturaleza de los problemas hidrológicos encontrados en cada costa. En el Golfo, los problemas han incluido inundaciones periódicas y la falta consecuente de asentamientos en las tierras bajas costeras potencialmente fértiles, así como su aislamiento. En el Pacífico, el problema ha sido una escasez de precipitación pluvial que restringe el desarrollo de la agricultura, a menos que se practique la irrigación. Primero, describiremos el trabajo de los proyectos del Papaloapan y del Grijalva en la costa del golfo, después nos ocuparemos del proyecto del. Tepalcatepec (que después se convirtió en el proyecto del Balsas) y del pro­ yecto del Fuerte. La Comisión del Papaloapan La Comisión del Papaloapan se estableció en 1947 y se le en­ cargó del desarrollo integrado de la cuenca del Papaloapan. La cuenca no sólo incluye la zona de captación del Papaloapan y de sus tributarios, sino también la de un número de pequeños -i ríos que también desembocan en el Golfo de México a través j de la Laguna de Aivarado. Definida de esa manera, la cuenca 1 tiene una superficie de unos 46 500 km2, y abarca parte de los ] estados de Veracruz, Puebla y Oaxaca. El 45% de la superficie j de la cuenca es reía ivamente plana. La mayor parte de tierra.' plana es parte de una ondulante planicie costera, que está al j suroeste de la faja costera y que limita al noreste con la Sierra í de San Martín, y al suroeste por la más imponente Sierra Ma-.j dre Oriental. Estas montañas tienen una altura promedio de 1 más de 1 800, metros, pero el Pico de Orizaba, la más alta de México, asciende a más de 5 600 metros en la parte noroeste de la cuenca. Las partes más bajas de la cuenca tienen un clima tro- j pical húmedo, con temperaturas que promedian 25°C y la lluvia j entre 1 500 y 2 000 mm, concentrándose entre mayo y octubre. ? La ladera este de la Sierra Madre recibe un promedio de 3 000 ; mm y algunos lugares reciben más de 4 000 mm. Durante los \ meses del verano, las masas de aire saturadas de humedad sej mueven tierra adentro desde el golfo y pierden su humedad medida que se elevan y se enfrían sobre las montañas. Ferió-] ¿ticamente la zona se ve afectada por huracanes del Caribe, y las^ fuertes lluvias que traen, en su mayoría durante septiembre yj octubre, han sido una fuente principal de inundaciones. Éstasf tienen una larga historia, pero hasta 1944 parece que aumentaron^ debido al depósito pluvial en las partes bajas de la cuenca, red flejando por una parte la desforestación de sus partes altas jq por otra los eventos geológicos naturales. En 1944 la peor inund dación registrada anegó cerca de 200 000 hectáreas, además de las cerca de 300 000 hectáreas que se anegan anualmente. Más de cien personas perecieron, muchas perdieron sus casas, y otras , murieron por enfermedades en las condiciones poco sanitarias ■ que siguieron a la inundación. Aunque antes se había estudiado el problema de las inundaciones y se habían hecho recomenda­ ciones sobre su control, nada se llevó a la práctica. Ahora, un nuevo estudio, realizado bajo los auspicios de la Comisión Na­ cional de Irrigación (predecesora de la Secretaría de Recursos Hidráulicos) sugirió, en 1946, que el control de las inundaciones por medio de cinco presas en los tributarios del Papaloapan, bor. dos a lo largo de sus bancos y una canal de aforo aunque cos: tosas eran posibles.1 El informe de 1946 recalcó la falta de condiciones sanitaritrs ó y el aislamiento de la cuenca. En esa época algunos pueblos ■ ; grandes con alguna industria se encontraban sobre una de las p dos carreteras que unen la ciudad de México con Veracruz, y - usaban el Ferrocarril Mexicano que une estas ciudades, pero la L inmensa mayoría de la economía del resto de la cuenca era agrí­ cola y, en 1946, contaba sólo con facilidades de transporte del I todo inadecuadas. Prácticamente no existían caminos transitables r en ningún tiempo, y había unas pocas líneas ferroviarias mal equiÉ padas y en notoria necesidad de reparación. El tráfico fluvial i. había precedido cualquier otra forma de comunicación pero esta[ ba ya limitado en grado considerable por el azolve creciente de [ los ríos. Su principal función se había convertido en llevar caña I de azúcar, sembrada a lo largo de los bancos del Papaloapan I y del Tesechoacán, a los ingenios, conectados por ferrocarril con i? el resto del país. La caña de azúcar era, y sigue siendo, la más | importante cosecha comercial. Cuando menos durante quince años, la cuenca ha representado una cuarta parte de la producÉ. ción total de caña de azúcar en México. El ingenio de San GrisI tóbal es uno de los mayores del mundo y con mucho el más I grande de México. La caña de azúcar se cultiva en varias otras zo| ñas de la cuenca. También se cultivan en la parte baja de la I cuenca, en donde tienen acceso a medios de transporte, otras I cosechas tropicales, de las cuales la pifia es la más importante. | También se cultivaban plátano y tabaco, pero la importancia I de ambos está disminuyendo. I En zonas más altas, en la parte más fría pero libre de heladas 1 José S. Noricga, “Control del río Papaloapan: preparación del plan de estudios definitivos y programa de construcción de obras”, Ingeniería HiK dmu/ica en México, i, abril-junio de 1947, pp. 5-65, parte i, y i, julio-sepI' tiembre de 1947, pp. 5-48, parte 2. k. K 100 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONALPOLITICAS .j MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 101 que se encuentra entre los 1 200 y 1 800 metros, se cultivaba calé, * única cosecha comercial que no se cultivaba junto a. las vías, de : transporte. La principal cosecha de subsistencia era, y sigue siendo, el maíz, que representó más de la mitad de la zona culti- i vada de la cuenca y cerca de las dos terceras partes, en su zona j superior. En esta última sigue cultivándose con técnicas muy primitivas principalmente el tipo de la “roza”. La prevalencia j de las técnicas primitivas refleja el gran aislamiento de la cuenca. j Refleja lo mismo, aunque con más dramatismo, el que, en 1950, j una tercera parte de la población de la zona no hablaba español, 1 y entre ellos hablaban nueve lenguas indígenas diferentes. | El informe de 1946 recomendaba el establecimiento de una | organización con cierta autonomía administrativa para que asti- ■ J miera las investigaciones e iniciara las obras. La recomendación ] fue seguida por el presidente Alemán y se estableció la Comisión del Papaloapan. Se dio a la Comisión, que era responsable ante j el Secretario de Recursos Hidráulicos, autoridad plena para eL i planeamiento y construcción de los trabajos requeridos para | el desarrollo integrado de la cuenca. Su autoridad comprendía i no sólo la inversión en recursos hidráulicos para controlar las j inundaciones, irrigación, energía hidroeléctrica y agua potable, sino también para el establecimiento de todo tipo de sistemas de comunicación para todos los asuntos de desarrollo industrial y -j agrícola, urbanización y colonización. Era un paso adicional en 1 la tradición de intentar desarrollar regiones alejadas de la Mesa q Central; pero también marcó el inicio de un nuevo enfoque del i problema del desarrollo regional que aún se sigue, aunque algo •• modificada. En la época en que se creo la Comisión se hicieron q analogías explícitas entre ella y la Tennessee Valley Authority, j y en verdad los éxitos de la tva fueron responsables en gran | parte para el establecimiento de un programa de desarrollo in- ? tegrado de las cuencas fluviales en México. Sin embargo, no es 1 necesario llevar muy lejos estas analogías. No se adoptó en Mé- | xico la autonomía de la tva, ya que el presidente de la Comí- j sión era ex officio, el secretario de Recursos Hidráulicos. El campo de la responsabilidad de la Comisión era más amplio que el | de la tva, aunque, al igual que ésta, nunca tuvo control sobre ] todos los aspectos del desarrollo económico y social, ..puesto que | otras autoridades gubernamentales continuaron operando en hrj cuenca, y la Comisióii no puede forzarlas a actuar o impedirles ó que lo hagan. ., | La Comisión del Papaloapan fue en gran parte creación de | Alemán. Su establecimiento implicó un gran gesto ostentoso que j concordaba con el estilo enérgico, aunque algo grandioso, de su J administración y se ha marcado claramente la identificación de. este proyecto con su fundador. Alemán nació en la misma cuen­ ca y fue gobernador del estado de Veracruz, en donde so encuentra la mayor parte de la cuenca. La sede de la Comisión se estableció en una ciudad totalmente nueva, que se debía llamar Ciudad Alemán, y se previó que, aunque ya había varias ciudades dentro . de la cuenca, Ciudad Alemán crecería hasta ser una población. industrial con 150 000 habitantes. La primera obra importante ■ construida fue la Presa Alemán, ' y una de sus funciones era ■ abastecer de agua a la “Zona de Riego Miguel Alemán”. Alemán ; sigue siendo un personaje político sujeto a controversias y po: _ tencialmente poderoso en México. Parece que la identificación • del proyecto con políticos ha tenido algún efecto en las variables < fortunas políticas del mismo, desde las fanfarrias con que se inició hasta su actual estado de casi suspensión. En sus primeros años la Comisión inició con energía sus trabajos para el control de inundaciones. La Presa Miguel Alemán, c-sobre el río Tonto, es una de las mayores de América Latina, r Su vaso contiene casi 9 000 -millones de metros cúbicos y cubre l 50 000 hectáreas. Debido a que 22 000 indios mazatecos vivían L en esta zona, se necesitó un prolongado y difícil reasentamienLdo, pero sólo la mitad de los desplazados se quedaron en las [• zonas de reasentamiento planeadas para ellos. Además de’ la s presa, se construyeron bordos para proteger la ribera occidental r y las zonas más pobladas del banco oriental. Áreas considerables del noreste de la cuenca siguen estando sujetas a inundaciones, pero cerca de la mitad de la superficie, que antes estaba sujeta i a inundaciones, está ahora protegida. | La otra serie importante de inversiones, realizadas en las etaí pas iniciales del proyecto, fue la construcción de un sistema de £ comunicaciones. Se construyeron, dos carreteras principales desde | Ciudad Alemán. Una de ellas como carretera de primera clase, l a pesar de la insignificancia económica de la región en aquel | tiempo un signo extravagante y falta de planeamiento que ca­ racterizaron a las inversiones de la Comisión durante este período, |. Por ejemplo, la Presa Alemán se planeó para proporcionar irriga|ción complementaria a 160 000 hectáreas, sin un estudio adecuado I sobre si esto era deseable o posible. Después de la elección del | presidente Ruiz Gortines, cambió la administración de la ComíLsión y su política. Se abandonó la idea de irrigación proveniente |Me la Presa Alemán, ya que el canal principal era muy costoso |.para justificar el proyecto; el trabajo en la presa continuó, pero | se destinó un menor porcentaje de los fondos para medidas de Icontrol de inundaciones, y hubo mi cambio general de las obras 102 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL i POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 103 espectaculares en gran escala hacia la construcción de un sistema í tes. El cudro iv-1 muestra en términos financieros cómo dismi­ de comunicaciones secundario y carreteras de alimentación, y í nuyeron las actividades de la Comisión después le 1958. hacia medidas más pequeñas y más directas para promover el j Superficialmente, el proyecto da la apariencia, de haber sido desarrollo agrícola. Éstas incluían dos proyectos de irrigación para I , una especie de elefante blanco, un monumento a la inhabilidad regar un total de 34 000 hectáreas; *I Se empezaron varios esque /del gobierno mexicano para planear algo que perdure de una mas de colonización, junto con un programa de créditos agrí- j ■ ' administración a otras futuras, y un ejemplo perfecto de procolas, pero éstos no tuvieron éxito, y una gran cantidad de di- j ; yectismo, la tendencia a proclamar la intención de realizar granñero se perdió en las operaciones de crédito. Poleman, quien j . des proyectos, pero de fracasar para terminarlos con éxito. Éyler Simpson describe esto bien: ha estudiado con detenimiento la experiencia de las colonias, concluye que la principal causa del fracaso fue la dirección erró­ Así tenemos al mexicano que, habiendo vislumbrado una meta lejana, nea dada p>or la Comisión, que no había realizado experimentos previos sobre posibles patrones de cultivo.2 Las dificultades esta- | está propenso a gritar ¡vámonosl y sin pensar en su experiencia paban compuestas de un paternalismo exagerado y de directrices j sada o en la de otras personas, se lanza hacia adelante, sin considerar inflexibles dadas junto con el crédito. En 1957, terminaron las J das consecuencias. Éste es uno de los rasgos más atractivos del carác|..ter del mexicano, y sorprendentemente, en cierto tipo de empresas, operaciones de crédito virtualmente, y con ellas el intento de una j 1 conduce con frecuencia al éxito, Pero con igual frecuencia produce un colonización supervisada. | cansancio cósmico y la detención al lado del camino para una pro­ No puede decirse que las desafortunadas experiencias de 1953-7 M longada siesta de la cual uno se despierta, habiéndose olvidado de la intención original, descansado y listo para otra carga sobre algún fueron las únicas responsables del fracaso de los proyectos. De ® molino de viento lejano. En ambos casos, este tipo de comportamien­ hecho, un plan en 1955 proponía un esfuerzo coordinado de to es poco útil para lograr objetivos que requieren un cuidadoso pla­ colonización muy grande que comprendería 430 000 hectáreas. ! (— -------------------------------- , neamiento y una dirección estable durante un largo período de años? 0 En vez de esto, las colonias fueron la primera víctima de una B reducción violenta de actividades que fue acelerada por la muerte B Quizás ésta sea una exposición un poco ruda de las cosas, y del director ejecutivo de la Comisión en 1956. Supuestas irre-p sería injusto decir que el proyecto del Papaloapan se manejó de gularidades administrativas quizás contribuyeron a la actitud de j 1'jna manera común al manejo mexicano de los proyectos de desirrollo en gran escala. Pero cierto que lo logrado es muy Limitado. Un cálculo' extremadamente burdo de los daños evi:ados por el control de inundaciones entre 1950 y 1960 (que parece emplear precios de 1944) ha sido hecho por la Comisión, i asciende a 116 millones de pesos? En la cuenca, tanto la superficie cultivada como el valor de la producción obtenida aualentaron a una tasa mucho más alta que en el resto de la república, en tanto que antes la tasa de crecimiento de la pro¡facción agrícola de la cuenca había sido mucho menor. Entre 1947 y 1957, la superficie cultivada aumentó más del doble, y la producción de azúcar aumentó de 167 000 toneladas métricas en 1947-9, a 817 000 toneladas en 1956-8.» En 1958 la producción fue más de la tercera parte de la producción nacional. Se expe— « 1 f 1-t. wv-Lt'i 'tn/'fimu í4 ITTlíl f * Eyler Simpson, The Ejido, Mexico’s Way Out, Chape! Hill: University óf North Carolina Press, 1937, p. 581. 104 POLITICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL105 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL | se construyó una línea ferrocarrilera que atraviesa la región a rimentaron otros aumentos. Se estableció una fábrica de papel, . ■ un nivel un poco más elevado que la planicie costera, forman­ que tomó energía eléctrica de la planta de Temascal, una vez; : - -------- u do una cadena de unión terrestre entre la península de Yucatán aumentó'i 5 que comenzó a operar en 1960. La capacidad generadora aumentó y el resto del país. Villahermosa, capital del estado de Tabasco y de 37 500 kw hasta 251 000 kw entre 1947 y 1960, La mayor mayor; , no estuvo conectada parte—de la energía se utilizó fuera ele la cuenca. La apertura,' ¿ ciudad principal de la cuenca del Grijalva, — — ----------o— -- 1ynni’ el resto del país hasta la construí una una plantaplanta de aluminio en Veracruz, significa que: i en 1963, 1963,de de de aluminio en Veracruz, significa que; ■■por transporte terrestre conr™ o jla planta de Temascal de 154 000 kw --- -se está usando , ahorai.i-------. a toda j.ción de la primera carretera costera en 1958. Aparte del potencial agrícola de esta región, los cuantiosos su capacidad. Por tanto, el proyecto ha contribuido algo al pro-y decursos hidráulicos dan una promesa considerable de genera­ greso económico de México. Pero en términos del objetivo de; ción de energía hidroeléctrica para el consumo interior y para descentralización regional los resultados han sido desalentadores,• exportación a Centroamérica y el desarrollo de los recursos bh No hay una industria local nueva de importancia. La población; dráulicos continuará, naturalmente, concentrándose en el control de la cuenca creció entre 1950 y 1960, pero con menor rapidez; que la de la república.0 En parte la razón de esto puede estar'; ’.de inundaciones y en la generación de energía. en el fracaso de la estrategia general: el hecho de que es poco, 1 Hasta ahora sólo una cantidad relativamente pequeña del po­ probable que un esquema basado en la agricultura atraiga a la i tencial económico de la región ha sido utilizada. La Comisión se industria por sí solo, sin alguna otra atracción poderosa. Pero estoy ^concentró por completo en la cuenca del Grijalva que tiene una 2 no ha hecho que el gobierno de México abandone la estrategia: ^superficie de unos 50 000 km , de los que cerca de una décima del proyecto del Papaloapan. El proyecto del Grijalva, que en [ parte está en Guatemala. Inevitablemente, el progreso ha sido la actualidad se realiza con energía en una zona muy similar | dentó. Habiendo empezado sus trabajos en 1953, los primeros a la del Papaloapan, unos 320 km hacia el sur, tiene objetivos- ; cinco años de la comisión se usaron en estudios, trabajos de drej i naje y una carretera costera que requirió cuantiosos trabajos de idénticos a los del Proyecto Papaloapan. - ¡ drenaje y de defensas contra inundaciones. Como resultado de los i s-estudios se decidió construir la gran presa de Malpaso, de núcleo El Proyecto Grijalva ?; de tierra en varios aspectos la más grande de América Latina en En junio de 1951 el gobierno de México anunció la creación b1» época en que se construyó y los trabajos en una carretera de de La comisión para promover el desarrollo integrado de las! ;“eso * empezaron en 9t>8. La presa se termino en 190o con c . 1 j i •• i m TUuvnonnM tfrfac alvird t un costo de mas de mil millones de pesos. Desde entonces la Sóoo'k” í .™í *’xH» , M * CM.Camáó,, Fedml * 1WM ^««.,.1.. r Chianas Ésta es una zona suieta a las mismas tuerzas climática® r. , í1 i i~T• enlapas, J fnprtpí Producir casi 3 000 millones de kw al ano. La primera energía que la cuenca del Papaloapan, y también aquí caen fuertes ilug.r 1 *vias ¿ en altas montañas que se yerguen más alia de una planicie .. ' , construcción de la nresa de los tr i dpDendipr pmp lp H costera suieta a inundaciones regularmente. Los ríos se unen a® Independientemente de la construcción de la pic»a, de los U.iunos pocos kilómetros de Frontera, en Tabasco, desde donde flu-fbaJ0S de drenaJe Y de unas pocas actividades menores como et ven hada el Golfo de México. Su. caudal combinado representa!.^amiento de agua potable y sistemas de colectores, la Comíyen nacía ci ui . »sión se ha empeñado, principalmente, con la primera etapa ue *^sVeree^ue <I arparte! ptanaTde las cuencas son muy fértilel « quiere que sea un programa extensivo de coloni*e aunado importantes con productora!'potenciales la provisión de irrigación de productos-de y la promoción agrien® ^ e impuiid luí p r inundada®^ Ia agricultura tropical. La numera etapa de esto, el protura tropical. Pero la combinación de planicies costeras munaaaaw_ 6 , J; mDMó‘m lOfifi v se nhm une dure y de escabrosas montañas hizo a esta región virtualmente intranW^10 “e la Cliontalpa, empezó en lJbb y se planea que clme hable hasta hace poco, y la región sigue siendo insalubre, década, implicando drenaje e irrigación de M0 000 neciacasamente poblada y aislada del resto del país. Sólo hasta 195® ’ Ibidem, p. 30. A» 7 El nombre de Malpaso se usa con mucha frecuencia, pera en realidad W’se lefiere al lugar; el verdadero nombre de la presa es Netzahualcóyotl. 106 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL ¡POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 107 reas, de las cuales menos de la mitad se cultivan en la actúa- ■ ■ del proyecto de colonización para lograr los altos rendimientos lidad. Una etapa posterior del proyecto desarrollará cerca de; esperados depende de su éxito para superar este problema. otras 130 000 hectáreas. En la primera etapa se beneficiarán, apro-; ' Incluso si el proyecto de colonización tiene tanto éxito como ximadamente, 11 000 familias, con unas 63 000 personas, a un] jel que esperan sus patrocinadores, el efecto que puede tener para costo calculado de 125 millones * de dólares, de los cuales cerca ...alterar la distribución regional de la población agrícola de Me«íoiiiuwwvu de 110 son costo de las obras básicas de irrigación y de mejorasIxico y para aliviar la presión sobre la tierra en las sobrepobladas 1■ 1 1 una... pequeña . _ /Y _parte .._z. será pagada M <•» i3n *vmismos i -»r wlt íXÍ':llSr:,._ ’ i * » «. _ agrícolas. Sólo por a-los ^regiones centrales es, obviamente, limitado. Durante los primeros campesinos, al menos durante los primeros diez años.. Un cam_ qcinco años________________ de la década de los sesenta, la fuerza de trabajo napesino pagará por su casa quizá con ganancias derivadas. deltcionai en el sector agrícola aumentó, más o menos, 170 000 per1-proyecto y algo por la limpieza de la tierra, pero hará él mismof®'— -- ------------------ ■ - a cerca de - mil- -fami­ ’sonas anualmente. El proyecto- beneficiará las obras de drenaje interno. La Comisión afirma que los rendi’í lias al año, con dos o tres miembros de la fuerza de trabajo mientos esperados son altos; gran parte del gasto planeado ori­ en cada una, esto es, se afecta a, más o menos, 3 000 miembros ginalmente en las diversiones sociales de la zona se ha eli­ l'de la fuerza de trabajo al año, con un costo de más de 3 000 minado. ■ . ... ................................. . "dólares por cada uno, sin incluir el costo de__control de inundaQuienes se beneficiaron al principio ya habitaban esa zona.«ciones que proporciona la presa de Malpaso, La absorción de Sin duda los colonos que lleguen posteriormente provendrán «egl70 000 personas anualmente, al costo de 3 000 dólares por cada lugares fuera de la región. El problema, que quizá afronte el implicaría una inversión anual de más de 500 millones de proyecto, *> dólares, aproximadamente es el que redujo upa las octava oportunidades parte dede laéxito inversión de lostotal in tentos de colonización del Papaloapan y que surge porque l^Xde México. Debe observarse que esto pudiera no ser muy costoso condiciones agrícolas en las zonas altas densamente pobladas de|p se COmpara con el costo de dar ocupación a una persona en la México de donde provienen los colonos, son. muy diferentes ajindustria, pero los datos disponibles no permiten una comparalas de las tropicales de la costa del golfo. Significa que los bene-.f c¡¿n directa de los costos que implican crear un trabajo en el fíelos potenciales de la emigración desde las zonas densamente^ctor industrial, y uno en el sector agrícola. El censo industrial pobladas deben ser muy, ~grandes si se ^quiere^e México de 1961 indicó que cuando menos había £ 5 000 de i--------- - de - la ■ Mesa Central^ _ 1 inducir a un gran número de personas a *que se trasladen a la ~ 7"" 77-’- f invertido por cada trabajador en el sector de manufaccuenca del río < Grijalva. Debido - - a la . disponibilidad '• ...... ’ actual deftturas. Por desgracia, es poca la confianza que se puede dar al 5 mu ch as oportunidades para "A personas iniciativa deseos pcpaí decenso jnducon Este cálculo es mucho menor que el costo pro­ Strial. de arriesgarse en zonas en donde se está introduciendo irrigación bable de emplear un hombre adicional en la industria con téc­ sin programas de colonización, tales personas podrían sentirá nicas modernas, ya que las cifras del censo incluyen datos pro­ repelidas, más bien que atraídas, por las nuevas oportunidades e.( venientes de industrias en pequeña escala, mucho más antiguas, una región aislada y desconocida que está siendo administrada a estudio de las Naciones Unidas sobre la tecnología óptima por una nueva organización gubernamental con todos los pro para las empresas textiles latinoamericanas, calculó que en blemas burocráticos que esto pueda crear.8 Debido a las opo| 965 la inversión por persona ocupada era de ¿20 659 dólares, tunidades de alternativas y a los considerables estímulos dada n fábricas que trabajaban tres turnos,9 por el gobierno que ofrecen los proyectos de colonización, qui . Por supuesto, la ocupación en el proyecto de colonización su­ zás el tipo de personas que sean atraídas no desearán esperar 1( pervisado no es la única ocupación permanente que creará el varios años que se requerirán antes de que los rendimientos s royecto. Se utilizarán otras tierras con mayor intensidad una presenten. Mientras tanto, es probable que las condiciones sea ez que se las haya protegido de las inundaciones y la oferta difíciles, como sucede en cualquier zona fronteriza. La habilid: le la energía eléctrica generada contribuirá a una mayor ocuación industrial, aunque, quizá, gran parte de ésta ocurra fues Esto nos fue sugerido por varías personas relacionadas con varios pt de la cuenca. Se están estableciendo complejos petroquímicos yectos de colonización existentes y propuestos. ~ f f ***------------------ ------------------ --------------- - ---------- , — - ife iLgivatu LIC id pWMldLlUll dgiiCUicl Lie 1V.1C" JL. ¡ Véase Juan Ballesteros, Matthew Edel, Míchael Nelson, La colonizará en la cuenca del Papaloapan, Centro de Investigaciones Agrarias, Méxic 1970. ’ Citada en W. Paul Strassinan, Technological Chango and Economía Delopment: The Manufachiring Experience of México and Tuerto Rico, a, Nueva York, Cornell University Press, 1968, p. 154. 108 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL ^LITIGAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 109 _de_la costa del dT ZLL,y / éstos necesitarán energía eléctrica. iesatTollo integrado de la cuenca del río Tepalcatepec, Para este Golfo, energía generada por el proyecto Malpaso será, además, íncog tendíta todas las facilidades para el planeamiento, proposím y construcción de trabajos para irrigación y para el desarrollo perada dentro de una red nacional. En su cuarto informe prej .sidencial, ......................................................... __ el presidente Dial :las fuentes de energía, ingeniería sanitaria, establecimiento de hedió el 19 de septiembre de 1968, Órdaz relacionó la construcción de las instalaciones de energía Wunic a clones, incluyendo carreteras, ferrocarriles, telégrafos y *hidroeléctrica fefonos,y paraenlaMalpaso creación con y expansión la expansión de centros de las fábricas de pobla-de ahj minio, acero, automóviles, fertilizantes, papel y fósforo.10 Per^".11 También tendría autoridad en los asuntos industriales, ■: picolas, de crédito y de colonización y podría intervenir en no se divulgó lo que estaba implicado en cada caso. Al intentar evaluar los efectos combinados de los proyecto^ juntos agrarios, " ’ j.Ta cuenca del Tepalcatepec, de unos 17 000 km3, localizada, del Papaloapan y del Grijalva, se pone en claro que dos década: de cuantiosa inversión en la región del Golfo sólo han tenide su mayor parte, en el Estado de Michoacán con una pequeña un efecto muy limitado en términos de la descentralización en la Ra en el Estado de Jalisco, tiene una superficie de menos del localización de la actividad económica. Los proyectos hidroelét; del tamaño de la región desarrollada por la Comisión mucho tríeos no han ejercido una atracción notable sobre la industrií H Papaloapan, y toda la escala del proyecto lia sido mucho que requiere mano de obra intensiva, aunque las industrias p$ ^aor. Por ejemplo, entre 1947 y 1960, la Comisión del Papatroquírnícas de la costa del Golfo y las - industrias de aluminé íhpan gastó 927 millones de pesos, y la Comisión del T'epaL se han beneficiado por la abundancia local de energía. El dei Wec 323 millones de pesos (en ambos casos no se hicieron arrollo agrícola sólo lia ocurrido a un ritmo moderado y no hjWes para considerar los cambios en los precios), r Ta cuenca del Tepalcatepec se une a la cuenca mucho más producido muchos movimientos hacia la zona. Sin duda, u T n buena parte de la inversión realizada en comunicaciones podrí nde del Balsas. Los 100 000 km3 de la cuenca del Balsas se tan convertido en la responsabilidad de una nueva comisión de estar justificada en términos del deseo político de llevar un (¡miento de integración con la nacionalidad mexicana a las a ^nca hidrológica en 1960, y esta comisión absorbió a la Co­ munidades aisladas, incluso sí no estuviera justificada por criterio pión del Tepalcatepec, Al principio esto tuvo poco efecto ?bre el trabajo de la Comisión del Tepalcatepec, y en sus inicios meramente económicos. zona más activa de la nueva comisión siguió siendo la cuenca En la información detallada sobre la inversión en los.proye Tepalcatepec. Hubo pocos cambios en el personal; el directos de la costa del Golfo parece, a primera vista, que, desde e ir ejecutivo de la Comisión del Balsas es el ex presidente Lázaro punto de vista económico, ha ocurrido un gran desperdicié «lenas, quien sirvió personalmente con el mismo cargo en la aunque no lo hemos podido comprobar rigurosamente. En lé Amisión del Tepalcatepec. Bajo Cárdenas, la administración primeros años del proyecto del Papaloapan gran parte del gast 2 las comisiones ha tenido mucha más continuidad que la aT fue innecesariamente ostentoso, pero quizás no se pueda justifiq inistración de la Comisión del Papaloapan y parecería que el el cambio del proyecto del Papaloapan al del Grijalva en tó smbio de ideas de los sucesivos gobiernos mexicanos ha tenido minos económicos. )co efecto en el trabajo realizado. En años recientes, han dis¡nuido algo sus actividades en la cuenca del Tepalcatepec, a Los proyectos del Tepalcatepec y del Balsas Mida que se presta mayor atención al desarrollo de otras zonas |-la cuenca del Balsas, y falta todavía emprender desarrollos’ El proycto del Tepalcatepec, cuyas actividades describiremos ¡dónales, pero no ha ocurrido una total disminución con parmayor detalle en los siguientes capítulos de este estudio, fue .críticas del proyecto no empezadas, como fue el caso con la primero de los proyectos de las cuencas fluviales que se desarroU tnisión * del Papaloapan, Este hecho y el tamaño relativamente en la zona cálida y seca de la costa del Pacífico. La ComisW (ueño del proyecto hacen un poco más fácil evaluar sus efecdel Tepalcatepec se creó por decreto presidencial en mayo ’t sobre el desarrollo regional, que junto con una exposición 1947, con un mandato muy semejante al de la Comisión 4 Papaloapan establecido tres meses antes. Se le encomendó ‘Citado en Vicente Fernández Bravo, Estudio emolió mico-social de ¡a. 10 El Mercado de Valores, 9 de septiembre de 19GR, p. 59.5. del río Tepalcalepec, Tesis para el grado de licenciado en econoa, Escuela Nacional de Economía, unam, México, 1959, p. 23L 110 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL TICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL111 más detalladas de las actividades de la Comisión serán tema delj una especie de grupo de presión en los círculos oficiales para comPÍej° de fabricación de acero se estableciera allí y capítulo vi, ? :^Ue Es probable que la estrategia que se está adoptando en en otros lugares. cuenca del Balsas sea muy parecida a la adoptada para la cueiE c bl trabajo hecho por las comisiones del Tepalcatepec y del ca del Tepalcatepec. El Balsas, con un caudal de casi 14 000 paisas en esta zona ejemplifica tanto el empleo flexible que el millones de metros cúbicos, es el río más grande de México que gobierno federal ha podido hacer de tales organismos des central idesemboca en el Pacífico. Nace en la zona volcánica y moni ^¡dos con amplios poderes cuya autoridad traspasa otras fronter,. 'as tañosa de Oaxaca al sureste de la ciudad de México, la mayo^™inistrativas, como el que una vez establecido tal organism _ . ---------- o-----------lo retende convertirse en un grupo de presión en favor del des­ parte de su curso fluye hacia el oeste. La cuenca es muy mo arrollo regional. Si sigue gozando del favor político, como sucede lañosa, pero en sus zonas más planas, que están al norte de n la Comisión del Balsas, podría ser muy eficaz. Si, como río, ofrece posibilidades de irrigación. Al igual que plañid bajas parecidas a la de México, estas zonas secas y cálidas sí ocurre con la Comisión del Papaloapan, se le relaciona con po­ conocen como la Tierra Caliente. En la Tierra Caliente, cerca d líticos que están en contra, entonces el proyecto tendrá una exis­ Ciudad Altamirano, se lian construido dos presas, primera eta tencia azarosa, independientemente de los méritos económicos de de los planes para irrigar cerca de 80 000 hectáreas. La semejanzí la Comisión. entre esta región y la escogida en Michoacán, para un estudie Otros trabajos de la Comisión del Balsas han sido princiImente inversiones sociales en las montañas de Oaxaca, de manos llevará a decir más sobre ella cuando evaluemos las inv era similar a la realizada por la Comisión del Papaloapan en siones de la Comisión. Al oeste de Ciudad Altamirano el río se une con el Tepalq condiciones parecidas y antes por la Comisión del Tepalcatepec tepec y cambia repentinamente su dirección hacia el sur par n las zonas montañosas de Michoacán. correr a través de la Sierra Madre del Sur hacia el Pacífico. E este tramo final del río la Comisión ha construido dos grandí 0 Proyecto del Fuerte presas. El Infiernillo, la más grande, está generando actualment energía para la ciudad de México con una capacidad de 60000 á progreso de la agricultura de irrigación en los valles del kw. Una presa más pequeña, río abajo, en La Villita, se utilizar noroeste de la costa del Pacífico ha sido el evento más brillante eventualmente para producir electricidad para una fábrica 4 íi el desarrollo agrícola mexicano desde la guerra. Uno de éstos, kcuenca del río Fuerte, se convirtió en la responsabilidad de acero que se proyecta construir en la costa. Los hornos eléctrií utilizarán mineral de hierro de los cercanos yacimientos de E ia comisión de cuenca hidrológica, formada en junio de 1951 uiendo los lincamientos de las comisiones del Papaloapan y Truchas y se les unirá con el resto de México por un nu$ ferrocarril y un puerto que se construirá cerca de la desemb d Tepalcatepec, para promover el desarrollo integral. Con caudal anual de entre 5 y 6 millones de metros cúbicos (auncadura del Balsas. La Comisión del Tepalcatepec y la más ; ue ha variado entre 12 000 y 2 000) al año, el Fuerte es el río cíente Comisión del Balsas han jugado una parte importan lás grande de la región noroeste de México en términos de en la promoción del complejo de acero. A pesar de que los' tidal. Drena una zona de unos 29 000 km2 en los estados de Sicimientos de mineral de hierro están fuera de la cuenca 4 loa, Sonora, Durango y Chihuahua. Sin embargo, la comisión Tepalcatepec y su estudio se alejaba del campo normal de col cimientos de la comisión de la cuenca hidrológica, los estudl fio actúa en la parte inferior de la cuenca, totalmente dentro d estado de Sinaloa, y hasta ahora no ha trabajado en las zonas iniciales fueron hechos por la Comisión del Tepalcatepec, a casamente pobladas. de la Sierra Madre Occidental o de la dada posteriormente por la Compañía Krupp. En los años se$í. eseta, en donde hay recursos de madera y minerales no explota, cuando el sitio de Las Truchas era sólo uno de varios lugáf dos. La principal función de la comisión ha sido la mejora, posibles que se consideraban para el nuevo desarrollo del jeo: mservación y expansión del distrito de riego del Fuerte. De piejo de acero y en muchas formas no er¿i uno de los más p ho, se le ha criticado por su fracaso en realizar el desarrollo metedores, ya que, aunque los yacimientos de mineral de hiq egrado como se había previsto en la administración de Ale­ son ricos, no había allí servicios de ninguna clase y vírtq mán, y por su concentración en las posibilidades de irrigación mente no había población, la Comisión del Balsas se convir $ 112 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 113 i(POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL y los serios problemas de inundaciones de la cuenca inferior. Por 1j la presa era claramente muy pequeña, un hecho que quedó tanto, no es un buen ejemplo de un intento de promover el ,Jdemostrado por graves inundaciones en 1955, 1958 y 1960. La una cuenca desarrollo regional mediante una inversión en una cuenca hi<> hi­ última destruyó los cultivos de unas 40 000 hectáreas y destr uyó drológica integrada, pero la contribución hecha al desarrollo 1 instalaciones para irrigación. En consecuencia, se tuvo que agran­ agrícola del noroeste es en sí misma interesante e importante. I dar la presa entre 1962 y 1964. La cuenca y su desarrollo merecen una breve descripción. i; La Comisión Federal de Electricidad construyó una planta con ■ • *se-— ’ionn ,i j — --------------hasta 1890 cuando Éuna capacidad de 60 000 kw en la presa, contribuyendo al La irrigación en la cuenca se remon5a .íripido crecimiento de una próspera zona agrícola cuya princiexcavó el primer canal por una comunidad socialista de ameri- f si primer camu por uiw uuuxuimu1«u banco 3 í-Pa^ ciudad es Los Mochis. Además del ingenio azucarero, se canos seg:guidores de Owen,^ que bombea, ’ a aS’ua‘ canal^an establecido varias procesadoras de algodón, así como otras 12 meridional del río Fuerte. w as 1 ________ i ' Poco. después, ' ■ cons-Nacdvidades de procesado y servicio. Una vía férrea, propuesta pasaron a ser propiedad de Benjamín r.~ Comunidad de LosJ^e a hacía mucho, llegó a la zona en 1961 y ha contribuido truyó un ingenio azucarero en la ^pequeña conJ? Uesde^ < exportación de vegetales de invierno, en especial tomate, a Mochis en 1903, manejado por su Lmtec ugar los Estados Unidos. El mayor crecimiento ha sido del algodón, esta época la compañía dominó toda la tierra e ¡trigo y arroz, ’aunqueX estos dos últimos volvieron a disminuir -e cuenca ......... 1......... , . cuenca inferior inferior hasta hasta que que su su tierra y derechos de agua lueron^a^ después de alcanzar su máximo, expropiados en 1938, pasando la propiedad a la recientemente; creada sicae (Sociedad de Interés Colectivo Agrícola Ejidal). Sin? ( La propiedad de, la tierra en el distrito de riego se distribuye embargo, por un decreto presidencial de 1943, se obligó a los ejF ’proximadamente por igual entre la propiedad ejidal y la pil­ datarlos a continuar cultivando caña de azúcar para el ingenio ada. Los ejidos han hecho una importante contribución al cre­ lo hicieron así bajo protesta, puesto que argumentaron, no sin cimiento de la mayoría de las cosechas comerciales de la región razón, que la cana de azúcar era un cultivo relativamente 'poca ", están muy lejos del comportamiento tradicional de produc­ provechoso en una latitud tan septentrional.13 En la época de h es de cosechas de subsistencia que muchas personas asocian expropiación, se continuaba bombeando del río el agua para n los ejidos, una idea derivada de los logros ejidales en las irrigación. No obstante, en 1947, empezó a funcionar el Cairi mas agrícolas más pobres de la región central. Sin embargo, >$ ejidatarios siembran una mayor proporción de cosechas de sicae (posteriormente Canal del Fuerte), que potencialmente pe día irrigar 40 000 hectáreas, cerca del doble de la zona entonce Asistencia que dos agricultores privados, y menor proporción de M’go y tomate. En donde los riesgos son grandes, como con tosujeta a irrigación. La comisión agrandó posteriormente este ates perecederos que se exportan a un mercado de invierno nal. Otro canal, previo al trabajo de la comisión, se constrir ny competitivo e inestable en los Estados Unidos, los agrien el banco derecho para irrigar unas 25 000 hectáreas. Bajo 1 itores privados parecen más dispuestos a asumirlos, y el que comisión la zona de irrigación ha aumentado considerablement diferencia del ejidatario, puedan hipotecar sus tierras los hasta unas 230 000 hectáreas y, como puede verse en el cuactó conirte en mejores sujetos de crédito. v-2, igual ha ocurrido con la zona irrigada, excepto por Í1 futuro de esta zona parece prometedor. La salinidad ha sido sionales retrocesos debidos a inundaciones. f problema serio que dio origen a la necesidad de mejorar el El paso más importante en este desarrollo fue la construcció Aliaje de la zona para combatirla, pero ya es un problema su­ de la presa, con núcleo de tierra, Miguel Hidalgo que se con truyó entre 1953 y 1956. Un objetivo principal, aparte de 1 dado. Hay varios planes para aumentar la zona de irrigación, irrigación, era el control de inundaciones que habían sido grí “nentar la generación de energía y mejorar el control de inun­ ciones. Uno de esos planes, el proyecto El Sabino, tiene el ves en la cuenca inferior. Por desgracia, se redujo el tamañ Opósito de irrigar otras 60 000 hectáreas. Su primera etapa, que se planeó originalmente para la presa antes de construid [ar unas 40 OOQ hectáreas, la mayoría de las cuales no se 12 La historia del desarrollo de la cuenca puede encontrarse en Mari tivan actualmente, beneficiaría a unos 3 700 agricultores, que Gilí, L<? conquista del valle del Idievle, México, 1957. roximadamenfe 2 000 de ellos provendrían de fuera de la zona, n Hiidem, pp, 15G-ÍLL Centro de Investigaciones Agrarias, Las distritos.! embargo, al igual que ocurre con el proyecto Grijalva, la riego del naracsle: tenencia y aprovechamiento de la tierra, Instituto onización es costosa; el proyecto requiere una inversión inicial Investigaciones Económicas, 1957, pp. 78-81. X-JVt Ai X --------- A X ________ _ __ ____ __ 1AVOM.V4 A A«, tUUG 114 cuadro POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL iv-2 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 115 Lerma-Chapala-Santiago. El río Lerma nace en el estado de Mé­ xico, cerca de Toluca. Al dejar la cuenca de Toluca, el río des­ ciende abruptamente hasta la cuenca de Guanajuato. Después, con un descenso menos pronunciado, cruza la importante zona *1955-6 1952-3 1959-60 1962-3 1965-6 agrícola del Bajío en Guanajuato, el norte de Michoacán y Ja­ I lisco, desembocando en el Lago de Chapala. Toda esta zona está 50.3 28.6 48.7 12.7 12.2 Algodón en la densamente poblada Mesa Central. De Chapala sale el 26.3 55.7 0.9 Arroz 22.3 . río Santiago, cuya subcuenca es muy diferente. Desciende a través 11.2 11.0 7.7 8.4 Caña de azúcar 21.5 7.1 1.7 de cañadas en un territorio montañoso escasamente poblado, Cártamo 15.4 15.1 0.5 0.4 desembocando en el mar en Nayarít. Además de los cinco Insta­ Sorgo 17.8 32.1 1.5 17.6 0.9 dos mencionados antes, en la cuenca se encuentran partes de Trigo 51.1 31.7 37.3 ' 21.0 26.3 < Aguascalíentes, Durango, Querétaro y Zacatecas. Los 126 700 kmOtros 178.4 47.8 60.3 156.3 152.1 representan el 6.6% de la superficie de laue xa república, oupcxjuwc república,pero pero en TOTAL í ________ ~~ /o -----d|.196O, aproximadamente de 6.7 millones de personas, casi el 18% 1960 2.7 v-L wauiMw, cu ioyo r * 1 de junio de 1952 al 31 de mayp de 1953, e igual período Paia---------- la rvnhl^ríAn \de la población total vivía. .n?-.'-. aquí. "q'M. T „ ____ otros añbs. c La parte superior de. la cuenca, que incluye la mayor parte fuentes: Comisión del Río Fuerte, Boletín Valle del Fuerte, núm, 6, ma y abril de 1963, p. 23, y núm. 7, mayo y junio de 1963, p. 15. Wde la superficie drenada por el río Lerma, es muy distinta de las JEotras cuencas hidrológicas desarrolladas por otras comisiones, dól^Webido , a illnn^ ***X-U1JL1M4.ÍVO _________ _________ de dólares, o sea más o menos 13 500 a sU larga historia como una zona agrícola rica y como per familia, la cual es de aún46.5 másmcostosa que la delaiproyecto Gr|||^ ^n q e la del proyecto ^^centro industrial con altas tasas de crecimiento económico. La costosa U C0íltrwcuenca porcuenta fami ia, a .r Santiago, contiene muchas jaiva, y además esta cifra no tiene en cualquier * f • ,— — —rnT1tr~cuenca inferior, drenada por el rio______ ri° Santiago, bución hecha por la presa Hidalgo para el control de todo comunidades indígenas aisladas y atrasadas. En la cuenca supe­ río. El trabajo hecho aparte de la inversión en recursos hidrái rior, el Bajío es una fuente importante de frutas y vegetales, licos ha sido poco, aunque la comisión ha construido algún' Muyendo la valiosa cosecha de fresas que se exporta casi en carreteras locales, ayudó en la planeación urbana de Los Moct u totalidad a los Estados Unidos en una época en que los cui­ hizo instalaciones de agua potable y de aguas negras en c dadores norteamericanos no tienen producto para enviar al misma ciudad y proporcionó servicios médicos a sus emplead;’ cercado. Aunque recientemente su producción comercial agrícola También ha construido, en ,1o que es un desarrollo interesa^ a sido superada por el rápido crecimiento en otras reglones, que podría generalizarse en México, una serie de instalación ita zona continúa siendo una importante fuente de alimentos con dinero ejidal, Todas las personas que reciben irrigación ara la ciudad capital. Las industrias manufactureras en toda la gan una cuota de 100 pesos anuales por el agua, pero los ejk lenca han experimentado elevadas tasas de crecimiento en años tarios también pagan cuotas de cooperación por una cantil tientes (9.6% al año). Por último, las comunicaciones y otros similar durante 10 años. Estas cuotas se gastan a través de| rvicios sociales generales están así de desarrollados como en comisión en instalaciones para la educación y otros servicios^ ilquiér otra zona de la república. El producto regional fue instalaciones públicas en el ejido. No obstante, en esta zona/ ti el 16% del producto nacional en 1965 y estaba creciendo mayoría de la inversión complementaria de la inversión enj n'mayor rapidez que el de la nación. cursos hidráulicos ha sido hecha por otros organismos; no pare Esta breve descripción de la cuenca indica cuán diferentes *que esto haya disminuido de alguna manera la eficiencia de n sus características de las que hemos estado discutiendo, y inversión de la comisión en la región. ti claro que los objetivos que consideramos para los otros pro­ ntos no son congruentes para éste. El potencial para el des­ El Proyecto Lerma-Chapala-Santiago j tello de los recursos hidráulicos es aceptable. El caudal anual el Santiago arroja al Pacífico es de aproximadamente 6 000 La cuenca hidrológica más grande que se encuentra del ilíones de metros cúbicos. Ya hay proyectos que generan energía dentro de las fronteras de la República Mexicana es laj idroeléctrica de ambos ríos, pero el Santiago, en particular, Comisión del Río Fuerte: Superficie cultivada por cosechas principales, 1952/3-1966/7, años seleccionados (miles de hectáreas) v 116 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL | PolÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL 117 regional dentro de la cuenca, financiado por un préstamo del ofrece campo para mucho más. En la actualidad se irriga menos Banco Interamericano de Desarrollo. Es posible que las objecio­ del 3% de la zona cultivable de la cuenca; se han propuesto nes económicas al empleo de una comisión de una cuenca hifuturos proyectos de irrigación, pero en su mayoría son pequedrólogíca en el planeamiento para la Mesa Central estén más . ños. Aunque el agua es un importante recurso escaso en la ' que compensadas por las ventajas políticas de ser capaces de cuenca, los problemas compartidos de recursos hidráulicos difE í hacer algún planeamiento. cilmente parecen constituir un punto de atención central para j la planeación económica de la región a través de la cual corre el Lerma. Esto en parte se debe a que, al igual que ocurre en j OTRAS POLÍTICAS DE DESARROLLO REGIONAL la cuenca del Balsas en menor grado, lo que hay en la cuenca i es tan diverso, y aun más debido a lo que está fuera de la 4 Aparte de los proyectos de las cuencas hidrológicas, el gobierno cuenca. Exceptuando Guana]uato, Aguascalientes y Nayarit, me- I j. federal ha tenido poco que constituya una política de desarrollo nos de la mitad de cada Estado se encuentra dentro de la cuenca, í ¡■regional. Una crítica que se escucha con frecuencia sobre su proy con frecuencia las partes de los estados que se omiten com- í ¡ grama de exenciones impositivas para estimular la creación de parten problemas con las partes que se incluyen. El Valle de ¡ ji industrias manufactureras, bajo la denominada Ley de Industrias 1 Nuevas y Necesarias, es x que entre una larga lista de criterios X1Í-111V3 ruiu,visto, domina lad Ir ’ ■ ------ -----México no está en la cuenca, pclv peroWXJllU como hemos /’-1 (llle deben ser conisderados -- por la ' Secretará ’ ~ * ría de Industria y CoCentral. Como una unidad para® economía de toda la Mesa C___________ ~ — ’* para decir si otorga una exención nn -----» * rvronrfo incrcio _ ............ para decir ai otorga una exención, no se menciona el estael desarrollo regional la cuenca parece ser a la vez muy grande 1 Lblecimiento de la industria de que se trate.14 La Secretaría ........___ •’.................................. “_____________________________ico _____ baj_________ * ~~jo el sistema quena porque los problemas que tiene los comparte por igual | “ec , sl.una industr« merece protección licencias de importación. Sin embargo, en algunas ocasiones con 7asPzonas que la rodean, ‘es muy grande porque presentalde hcenc»s de tmportacwn. Sin embamo Pn todas las dificultades relativas a planeamiento de una gran reo podrían tenerse en cuenta factores de establecimiento cuando se gión, pero es muy pequeña para resolver los problemas maw |;hacen negociaciones directas entre empresas individuales y el fiestos en la Mesa Central. Sin embargo, está claro que el pla-| t gobierno, al igual que ocurre cuando una empresa propiedad neamíento de las cuencas hidrológicas es una forma aceptabtí f de extranjeros trata de obtener un permiso para funcionar. Una políticamente de obtener la cooperación de los gobiernos estataq t oferta de establecerse fuera del Valle de México podría ser les y de los organismos gubernamentales que podrían rehusar^ Fim argumento útil en las negociaciones para una empresa; el [gobierno podría ser capaz de hacer que el establecimiento fuera ceder autoridad a otros organismos, A ............................ conLa Comisión del Lerma-Chapala-Santiago se creó en noviem® Valle de México fuese una condiciónc para "da^almur fpsinnpq 0 as fcesiones particulares. Pueden encontrarse ejemplos en los que bre de 1950, No es una comisión como las otras, y ha trabajador , , íla presión política ha influido claramente en el establecimiento con un presupuesto mucho menor. Consiste de un representante! de la Secretaría de Recursos Hidráulicos, otro de la Comisión] í de una empresa. Pero no es posible saber con cuánta amplitud Federal de Electricidad y de uno de cada uno de los cinco estadoy |-y con qué energía se ha aplicado tal presión. principales: México, Guanajuato, Miclioacán, Jalisco y Nay^ .. Hay otras dos excepciones a Ja relativa falta de actividad del rít, además de consejeros técnicos. También está en la Comisión gobierno federal en el campo del establecimiento industrial. La un representante del Distrito Federal, que, aunque no está en h «primera fue el establecimiento de un complejo de industria pe­ cuenca, obtiene parte de su agua a través del acueducto dd cada en Ciudad Sahagún, Hidalgo, en una antigua y agotada zona Lerma. La principal función de la Comisión lia sido el estijj ¿minera en donde había mucha desocupación. Aquí la inversión dio de los problemas de la cuenca y hacer recomendación# ^principal ocurrió durante los años cincuenta, en su mayor parte a otros organismos del gobierno de México. No obstante, en kon fondos de la Nacional Financiera. La segunda excepción ha ocasiones se ha permitido realizad pequeños proyectos de in$ gación, control de inundaciones y de abastecimiento de agua e| 1J cooperación con las autoridades locales. De 1963 a 1967 su pera L Para deralles adicionales véase Timotliv Kiuís, AMv/r.v; Lí(LíV; Trade Policio since JMO, capítulo ¡v. sonal estuvo trabajando en un amplio estudio de desanol® * - - - - ------- VT 118 POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL sido la política para las zonas de México fronterizas con los Es­ tados Unidos. ¿POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL .erizas mexicanas son suficientes para hacer este proyecto niy atractivo para las empresas norteamericanas que realizan peraciones con mano de obra intensiva, y entre otras, han exfronterizas occidentales (esto es, resado un considerable interés las empresas electrónicas. Sin mbargo, no está claro qué es lo que esto significará en términos se permitía a estas zonas importar con e ocupación a largo plazo, y la cantidad de mano de obra , •■ i _ ___________ .... . aplicada en proyectos realizados o planeados era (hasta el otoj del país. Quintana Roo, parte aún más ;aislada de la Península po de 1967) de unos pocos miles. El éxito del programa depende de Yucatán que limita con Belice (antes Honduras Británica), ’ p un grado considerable del deseo de los Estados Unidos de también recibió concesiones semejantes. Ciertos pueblos que es-4 (obrar derechos derechossólo sólo la cantidad valor real­ agregado real­ por por la cantidad de valorde agregado taban situados más al oriente a lo largo de la frontera con los • mente en México, y no es sorprendente encontrar que el pro­ Estados Unidos recibieron concesiones menos generosas durantes faina ya ha provocado alguna oposición en los Estados Unidos. los primeros años de la posguerra. La persistencia de estas cond Jodemos suponer que a medida que crezca el programa crecerá cesiones a la importación a medida que han mejorado las comu­ oposición, y por tanto es dudoso el efecto que este programa nicaciones, y en una época en que muchas personas se han pre-‘: ?yede esperar tener en los problemas globales de la ocupación ocupado en México por el problema de si el mercado es lo j México. $fjiMéxico. suficientemente grande para permitir la explotación de las eco-:; arte esías políticas limitadas del gobierno federal para suficientemente gránete para pctmiuiia Mr a'" de" eliminar ®.^P ................ ............... .. j _ i:—f ] íerar el establecimiento de la industria, la mayoría de los estanomias de escala, refleja la imposi pi obstante, las_ lia concesiones privan a los xaon fahri-® ----- ---------------- i las concesiones. ., _No__________ __ cantes mexicanos de un gran mercado para algunos productos,1 tos tratan independientemente de atraer a la industria. Esto lo ya que las zonas tienen ingresos per capita muy altos, y hacen; bcen ofreciendo exención de los impuestos estatales, que en sí mucho más fácil la- introducción de contrabando al resto deb tósmos no son muy importantes, a las industrias que se están |tableciendo, a menudo durante un periodo considerable. Ésta país. A los manufactureros mexicanos se les da un subsidio del al 30% por los envíos en ferrocarril a todas las zonas fronterizas^ | en la actualidad una práctica tan generalizada que las dife(sea que se admitan o no libremente las importaciones). No obs^ pcias en este respecto entre las leyes estatales pueden escasamentante, las zonas que reciben concesiones para sus importaciones^ Kr ser un factor importante para influir en el establecimiento fedustrial. Incluso antes de que su práctica se generalizara, pa­ siguen tendiendo a ser dominadas por las mercancías de ite poco probable que la exención de impuestos haya tenido Estados Unidos. Las zonas fronterizas originan otros problemas para el gobiern jucho efecto sobre el establecimiento. Un estudio de las exenciono mexicano. Los ingresos son más altos en ellas, y esto se re-i p en el Distrito Federal concluyó que sólo para un pequeño fuerza por el hecho de que muchos residentes han sido absor-j |upo de industrias eran los impuestos un elemento significativo bidos por la economía de los Estados Unidos y cruzan diariamente »los costos, y que la atracción del mercado parecía ser una 15 la frontera para ir a trabajar. Los altos ingresos y la posibilidad; Byor influencia sobre el establecimiento. Zacatecas ha tenido íyes de fomento industrial que incluyen exenciones de impueseventual de ingresar a los Estados Unidos atraen una conside^ g desde 1930, Colima desde 1934, Aguascalient.es desde 1935, rabie inmigración neta y causan un problema continuo de| 16 Estos estados no ¡papas desde 1939 y Tlaxaca desde 1940. empleo. Debido a que la zona es visitada por millones dé| norteamericanos, la elevada desocupación es molesta para el| ib experimentado una industrialización de importancia. gobierno mexicano y desde 1961 ha existido un programa paral iptro medio utilizado por los gobiernos estatales han sido los mejorar las diversiones ofrecidas por las ciudades fronterí?| ¡fiques industriales. Un número de ciudades, dentro de la rezas. Desde 1966, se ha permitido a las empresas importar ma-í Bn central, pero fuera del Valle de México, los tienen. Por tenas primas libres de derechos, sin que se les exija añadir uní Egeneral esto ha implicado hacer disponible fácilmente, para las porcentaje mínimo de valor interiormente, siempre y cuando todaj K Gustavo Romero Kolbeck y Víctor Urquídi, La exención fiscal en el la producción a la que se da esa ayuda sea reexportada. Losj Igrito Federal como instrumento de atracción de industrias, México, 1952. diferenciales de salarios entre los Estados Unidos y las ciudades! BKrnesto López Malo, Ensayo sobre localización de la industria en Me~ unam, México, 1960, p. 216. U. 1U. 4111 X .. --------------------- ------------------------------. X JL ¡ * 'i; POLÍTICAS MEXICANAS DE DESARROLLO REGIONAL. CARACTERÍSTICAS FISICAS Los 18 000 km2 de la cuenca comprenden cuatro zonas geográ­ ficas distintas. Siguiendo la terminología usada comúnmenie en México, las describiremos como la Tierra Fría, la Tierra Tem­ plada, la Tierra Caliente y la Gosta Sierra. La Comisión definió su zona de actividad de tal manera que se extendía más allá de la cuenca hidrológica para incluir dos cordilleras montaño­ sas dentro de las cuales está la Meseta Central al norte, y al sur la Sierra Madre del Sur.1 La parte más alta de la Mesa Central se conoce como la Tierra Fría debido a su clima inhóspito. Con frecuencia las tempera­ turas descienden a menos de cero grados y caen más de I 200 mm 1 Como ocurre con la mayoría de las zonas geográficas, hay muchas for­ mas de definir los límites de la cuenca del Tepalcatepec. Ene estudio utiliza la definición de la Comisión del Tepalcatepec que ;c basa en la cuenca hidrológica. En el curso de su trabajo, la Comisión agrandó la zona para que incluyera algunos municipios que no están propiamente cu la cucn.ca hidrológica. De los 32 municipios de Michoacán que están, total o par­ cialmente, en la cuenca, sólo 27 tienen más de la mitad de su huí bono dentro de la cuenca, tal como se la define por la Comisión del Tepalca­ tepec; los otros cinco municipios no se incluyen por lo general en las .discusiones del efecto de la* Comisión sobre la región, práctica seguida en este estudio. Se puede encontrar una lista de los municipios incluidos en la cuenca en el cuadro v-2. 122 LA CUENCA DEL RIO TEPALC Fíg. 3. La cuenca del río Tepalcatepec LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC 123 de lluvia al año (cuadro v-1). La Tierra Fría es un cinturón volcánico que está en el límite meridional de la Mesa Central, Está a más de 1 700 metros de altura y aproximadamente al norte de Uruapan, la ciudad más grande de la cuenca. El punto Lmás alto de esta zona montañosa está a más de 4 300 metros ¡sobre el nivel del mar y está formado por un cono volcánico tllamado Tancítaro. La actividad volcánica más reciente formó el Paricutín, entre 1943 y 1952, y tuvo amplias repercusiones en ;toda la cuenca. Como resultado de los volcanes (en la región 'hay cerca de 800) y de los densos bosques, hay un suelo muy [permeable que descansa encima de una capa de roca volcánica [impermeable para formar una gran zona natural de depósito [para las fuertes lluvias que son comunes en esta zona. Las gran­ ides reservas subterráneas proporcionan aproximadamente 1 824 |millones de metros cúbicos de agua al año a los arroyos y ríos p¡un gasto casi constante de 57.8 metros cúbicos por segundo. A Ipesar de estos abundantes recursos hidráulicos, en otras caracteBjsticas físicas la Tierra Fría es la parte más pobre de la cuenIta. Como es una zona montañosa de densos bosques, su suelo ■es delgado y poco fértil debido a la acción volcánica y los siglos ule empleo de técnicas agrícolas primitivas. El suelo es tan per­ meable que no hay arroyos superficiales y la irrigación es extre­ madamente cara. B Hacia el sur y el occidente de la Tierra Fría está la Tierra ■Templada que va desde los 1 700 hasta los 650 metros. Gran fcarte de esta tierra tiene una pendiente pronunciada e incluso ftn algunas zonas cultivadas el suelo es pedregoso y desigual. Por general la zona es más seca y más caliente que la Tierra Fría, || partes de la región son a la vez cultivables e irrigables, ha­ biendo a esta zona mucho más importante que la Tierra Fría ®esde el punto de vista agrícola. En el noroeste de la. cuenca 3fiiay varias aldeas que están en lo que fue en algún tiempo lagos, abeto que desde hace mucho se drenaron e irrigaron. También ■p posible la irrigación en pequeña escala cerca de los centros wbanos de Uruapan y Ario de Rosales. «Los principales ríos de la cuenca tienen su origen en le, trroijBS de la Tierra Templada. El mismo río Tepalcatepec está WOrmado por la unión del Itzícuaro y el San Jerónimo que irrigan Sí' parte noroeste de la cuenca. Sus caudales son controlados por Mps presas de almacenamiento, una de las cuales fue construida ■rcr la Comisión, en tanto que la otra ya existía y fue mejofl|da por ésta. El Tepalcatepec corre hacia el valle conocido Homo la Tierra Caliente. Aquí se le unen, por su banco iz■ferdo sus tres principales tributarios, el Cancita (Los Bancos), 124 LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPECLA CUENCA DEL RIO TEPALCATEKEC i el Marqués, formado por la unión del Cupatitzio y el Cajones,' tuna vez que se han limpiado de piedras. El clima libre do heladas y el Casilda (La Farota). En el extremo sureste de la cuenca, [ permite dos ciclos de cultivo al ano. el Tepalcatepec se une al río Balsas en el punto en que el k Al sur de la Tierra Caliente está la Sierra Madre del Sur río dobla hacia el sur, para correr hacia el Pacífico. v i (Costa Sierra) que se eleva a 2 500 metros. El clima de la zona Los tres tributarios principales tienen un caudal combinado f en estas montañas es muy parecido al de la 'Tierra Templada, de aproximadamente 43 metros cúbicos por segundo, cerca de; Lpero como hay menos árboles que en la Mesa Central hacia tres veces el caudal del Tepalcatepec. Aunque el volumen de esteij f.el norte, su suelo está más erosionado y los rendimientos agrí­ caudal no es grande, cuando se le compara con el caudal de otrasj colas son menores. Unos pocos ríos, el más importante de los cuencas hidrológicas, su efecto económico es importante debidaj [■cuales es el Otates, descienden hasta el banco derecho del Tea la constancia --de corriente que eliminó la necesidad de consd 44. — - la — — -. .. _ . apaleatepec el *“ verano caen lluvias lluvias torrenciales torrenciales ei en •« f i1LC C1 U-- “en en truir grandes presas de almacenamiento para regular el i abasted®^^^^ *1C'K Z c,.Viul > ^durante ' *■ VC1 quequecaen a erra as con amiento de agua para electricidad y/o irrigación. Además, los® . ? ' ^ diciones naturales impiden el almacena Ien SU íerT neo cambios repentinos en la altitud o lo largo del Cupatitzio pro® , ° ^ de aguas. porcionan un medio geográfico natural para la localización d® \ SOCIOECONÓMICA DE LA REGIÓN ANTES DE 1950 tres series de turbinas hidroeléctricas. Estas mismas características® ______ _____ geográficas habrían hecho difícil, si no imposible, la construcción®^.^ ~ XXCAJi J.UUUUU1UU producido de las presas necesarias para controlar las aguas si la corriente®,.,. mrencias en el ambiente y en su historia______ hanJ --«diferentes patrones de asentamiento en las cuatro partes de la no hubiera sido constante. «cuenca, cuyos orígenes son anteriores a la llegada de los espawñoles.2 En la época de la conquista española, pueblos de habla CUADRO V-l ptarasca vivían en la Tierra Templada y en partes de la Tierra Datos meteorológicos en la cuenca del Tepalcatepec tKría, en tanto que en la Tierra Caliente y en la Costa Sierra |se encontraban grupos dispersos de tarascos así como gente de Costa ■ Jediabla predominantemente náhuatl. Los tarascos se sometieron a T ierra Tie rra T ierra Sierra Fría ríos españoles sin guerra y en consecuencia no se les sujetó a esTemplada Caliente iclavitud. La cultura tarasca casi no se alteró, excepto por algunas ^adaptaciones de su religión-anterior al cristianismo. Por supues­ Temperatura (°G) 15 10 15 26 Promedio to, como todos los indígenas del Hemisferio Occidental, los ta­ 21 18 21 32 Promedio-mayo rascos sufrieron las epidemias de enfermedades europea;’.s redeu15 12 15 25 Promedio-enero ■■il'temente introducidas, pero, a diferencia i. de los náhuatl de la Precipitación pluvial |Tíerra Caliente y de la Costa Sierra, i no fueron virtuahncnte (mm) ^exterminados.3 1 270 1 390 1 240 510 Promedio Parte de la devastación en las zonas meridionale. ..es____ d _ la cuenca A debió a la enfermedad. Hasta que la Comisión drenó los pan­ fuente; G. Agujrre Beltrán, “Problemas de la población indígena de 1 os cercanos a Apatzingán, la Tierra Caliente siempre fue cuenca del Tepalcatepec”, Memorias del Instituto Nacional Indigente toco salubre, y sólo la inmunidad de los lia hitantes a las enfervol, 3, México, 1952. aedades usuales había permitido la supervivencia. La iutroducEstos ríos corren hacia la Tierra Caliente, que tiene una ai AAguirre Beltrán examinó con mayor detalle la influencia tic los conplitud de unos 72 km y unos 120 km de largo.' El valle instadores sobre la población de la cuenca. En esta sección sólo muy esapáticamente se sugiere su colorida exposición a este respecto. Véase a m , 400 metros sobre el nivel del mar y sin irrigación sed ’roblcmas de la población indígena en la cuenca del Tepalcatepec”, Me­ una tierra desnuda con suelo rocoso; las altas tempera turase nas del Instituto Nacional Indigenista, vol. 3, México, 1952. parte 2. las escasas lluvias contribuyen a su apariencia esteparia, * Aguirre Beltrán calculó que la población de la parte, meridional de h parte de la cuenca tiene tierras llanas fértiles, parcialmente enea se redujo de 50 000 a sólo 4 000 personas entre 1520 y el iinnl del $o xvi, en tanto que la de la Tierra Fría y la Tierra Templada dismiviales, que son muy adecuadas para la agricultura mecanizr3 iyó de 58 000 a 30 000. ; LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC. 126 127 . que da oportunidad a la población de las zonas adyacentes de ción de nuevas enfermedades alteró este equilibrio precario. El ? : vender sus artesanías y comprar provisiones. Dentro de la ciudad esclavizamiento de la población nativa para trabajar en las plan— ? hay también una industria de artesanías de madera que se estaciones de cacao y en las minas de oro y cobre de la Costa ? p pecializa en lacas. Hay varias fábricas de trementina. Dos fáSierra y en los límites occidentales de la Tierra Caliente tam-j p bricas textiles de algodón, hilados y tejidos que envían a México bien produjeron una gran disminución de la población. d sus productos para ser terminados datan de principios del siglo, En los primeros años del siglo xvii se trajeron esclavos negros.; L aproximadamente, y fueron las primeras industrias de la cuenca para trabajar en las minas de cobre y en los ingenios azucareros^ Ique aprovecharon la energía hidráulica del Cupatitzio. Existen de la Tierra Caliente y de la Tierra Templada. A medida queF : otras actividades en Uruapan, como plantas embotelladoras, empre­ aumentaba lentamente la población, el mestizaje eliminó viró sas de construcción, agencias de automóviles y fábricas de tortitualmente a la población tarasca pura de las partes inferioresj ? lias, para hacer frente las Uk, necesidades de la población de la ___ a— --KI uc id de la cuenca. En el siglo xix Apatzingán obtuvo , noloI^u^ft-----------------1- Reyes y Ario de Rosales de la cuenca. En elnotoriedad^ siglo xix Apatzingán obtuvo ciudad y zonas irurales adyacentes. Los cuando se firmó allí la Constitución de 1814; esto provoc Jr son otras cju¿a¿es je mercado importante en la zona, ataque armado porarmado parte de españoles quienes destruyeron^ ataque porlos parte de los -— españoles quienes > Las cosechas comerciales de la Tierra Templada incluyen agua­ 1 1« >4 es /4pc ta mayor píte de la población’ en* su búsqueda de-4 los- ret~ y una pequeña cantidad de café, pero la principal cosecha, mexicanos. , j 175 OOóS'ComerC^a^’ durante varias décadas, ha sido la caña de azúcar. La Hacia 1900 la población había aumentado a mas e 1| irrigación y el drenaje precedieron al establecimiento de la Co­ personas y a pesar de un retroceso durante la Revoluci n, au < misión, y hay varios ingenios azucareros establecidos hace tiemtó a más de 300 000 habitantes hacia 1950 (cuadro v). 1. po, especialmente en la parte noroccidental de la cuenca. También embarco, la población de la Tierra Fría disminuyo ligeram se cuitivan cosechas alimenticias en la tierra irrigada. Esta atea. continuó dependiendo, como hoy en día, e Desde que se estableció la Comisión, la Tierra Caliente se ha cultura de subsistencia, siendo el maíz, con mucho, a co .j Converq¿o s¡n duda en la zona de mayor importancia económica de importante. LasTtécnicas as técnicas primitivas. Se usan más son son muymuy primitivas. Se usan ara­ ard’« de la cuenca. A principios de siglo, había ya dos sistemas de dos, no todos de metal, tirados por bueyes, pero se emplea pocoj ; irrigación funcionando en la Tierra Caliente. Pero, debido a su o ningún fertilizante artificial. Un sistema de rotación de dos| (aislamiento y al bajo valor de su producción agrícola, la región años con un período de reposo después de cada cultivo sigue! |no tenía importancia económica hasta que, en 1907, Dante Cussi, siendo la práctica general. En la Tierra Fría, los únicos produc-| un emigrante italiano, se estableció allí. Estableció las haciendas r tos importantes que no son de subsistencia son los bosques del ; de Nueva Italia y Lombardía bajo un contrato de colonización pinos que poseen comunalmente las aldeas. La madera se usal jcon el régimen de Porfirio Díaz. A pesar de las graves perturlocalmente para leña y techos de tabla delgada, y se vende a losS., . j híirmncc - Ir. x.. ■ -__ _ r_ ' ¡ ac aserraderos para hacer otros bienes de construcción. Se colectas *ones de la Revolución mexicana, que emnp/A Xi ioiV C"SSI resina para hacer trementina y brea. Además, las varias comufterm,nrt ln,K {.terminó en 1915 una serie de trabajos de > ■irrigación, - J'°’-incluidos dn el contrato de colonización, algunos de los cuales se siguen nidades de la región se especializan en diferentes productos, uc coionizacior — ■ ’ ’ “ lorcionan un amplio ejemplo de la ■jlos. Paracho, por ejemplo, es muy actualmente, Proporcic-;f ' han hecho así durante siglos. Paracho, por ejemplo, es muy con<$ UIliaa<a que los Cussi llevaron a la región. Durante los as y otros instrumentos musicales de cuerdas®, > años f 4z cido por sus guitarras y ’ ’ ‘*' u\entes’ ^os Cussi aumentaron sus propiedades bast? cwm comunidades producen vestimenta y frazadagB^ en tanto que otras ( f hectáreas de la tierra más rica de la Tierra Calknt¿ fueron el de lana. apropiadas por el general Lázaro Cárdenas, en una de las más La Tierra Templada, más accesible que la Tierra Fría y famosas medidas de reforma agraria de su administración;5 los saludable que la Tierra Caliente, ha tenido los principales cei| jCussi vendieron la tierra que les quedó y otros activos a las nuetros de población. Uruapan tiene el mayor mercado de la cuente fras comunidades ejidales que se crearon para trabajar colecti­ 4 Las cifras de Aguirre Beltrán difieren de las del cuadro v-2, debidcri| vamente la tierra. La agricultura comunal se concentró en los ± - - JL-------------- --O” las diferencias en las definiciones del tamaño de la región. Sus región^ fueron determinadas por características culturales, en tanto que las usada E1 Salomón Ecksein, El ejido colectivo en México, Fondo de Cultura Ecoen este estudio se basan en las de la Comisión del Tepalcatepec queSf! Húmica, México, 1966, pp, 157-63. fundamentaron en consideraciones geoeconómicas. *2CUADRO V rio oo Población en la cuenca del Tepalcatepec, 1900-1960 Superfi., r. ? , cié de la Población unidad3 ----------------- :--------------------- --------•------------------*) (km 1900 1930 1950 1960 CUENCA DEL Densidad de *población 1930 1960 214 278 308 95S 424 436 8-1 18.8 35256 8 707 43 887 7 480 3 314 63 067 15 283 6 246 119 411 Apatzingán. Buenavistac Gabriel Zamora11 La Huacana Parácuaro Tepalcatepec Zaragoza6 Jilotlán, Jal.f 6 038 806 713 211 1 648 370 714 50 1526 3.8 3.2 2.8 15 240 5 962 5 347 9 139 8 145 6 030 11295 5 742 9 502 7 427 7 572 19.8 38.4 19.8 37.5 10.4 30.7 21.1 23.1 5.0 TIERRA TEMPLADA 6 370 86 246 TIERRA CALIENTE 623 543 402 ■ 435 524 753 Ario de fosales Cotí ja Nuevo Urecho Peribán Los Reyes Tancítaro , -t* Manuel M. Diéguez, Jal.f Quitupán, Jal. Valle de Juárez, Jal.f TIERRA FRÍA Charapan N. Parangaricutiroj Paracho Santa Clara T angamandapio COSTA SIERRA Aguililla Arteaga Churumucok Tuníbiscatío1 .- 3&2 9 779 15 487 9 109 6119 4 881 3 088 10 737 7 789 625 •365 208 1 528 102 431 278 460 257 8 582 1 630 3 935 I 390 1 627 43 270 8 696 5 095 8 377 11505 9 597 12 430 6 445 5 985 109 954 15953 7 929 6 472 5 034 11 047 11 152 3 &1O 171 103 19 668 12 384 5 096 4 860 16 533 14 481 . 4 241 30 975 14 100 7 895 17 073 11 360 15 040 15142 7 826 2.4 11.4 7.1 204 229 16.2 32.1 24 236 16 035 5 186 7 288 19 298 16 232 13.3 14.3 29.3 20.1 14.8 24.1 5 178 13.1 38.9 29.5 12.9 16.8 36.8 21.6 14.7 37.0 3.8 3 702 4 170 5 225 16.8 6517 3 532 4 992 11 793 4 448 4 077 13 721 6 553 41 509 4 003 56 923 35 575 3 849 4 058 6 885 13 324 7 459 24 862 8 004 11 808 5 050 10 924 17 176 9 406 33 279 12 984 14 389 5 906 5 516 4 167 13 464 21 177 12 599 43 873 16100 12 570 8 428 6 775 37.4 89.3 102-7 125.7 51.2 97.8 58.3 103.9 3.4 19.4 . 23.2 29.5 1.8 50.0 16.7 12.1 22.1 . 17-1 9.5 14.3 36.4 6.5 37.6 31.5 25.2 -22.4 16.3 47.3 24.7 31.8 13.4 20.7 33.1 31.0 37.3 54.0 9.7 48.4 46.0 48.8 . 37.1 37-8 3.7 9.4 2.3 6.1 5.1 9.9 3.2 6.1 4.2 31.8 24.0 —14.5 42.7 23.3 23.3 33.9 a La superficie de los municipios y regiones es la de 1960. b Las densidades de la población se basan en las superficie de 1930 y 1960 respectivamente. c Buenavista era parte de Tepalcatepec en 1900. /I Z”' _ 1. -I . 11 Gabriel Zamora era parte hasta 1955. A de Uruapan---r — - -e ------------- ’ " Zaragoza era parte de Parácuaro hasta 1942í Jilotlán de los Dolores, Quitupán y Valle de Juárez, Jalisco, se crearon después de 1900. g Tocumbo era parte de Tingiiindin. en 1900. h Ziracuaretiro era parte de Taretán en 1900. í Manuel M. Diéguez, Jalisco, era parte de Jilotlán de los Dolores hasta 1939. i Nuevo ParangaricutirG formó parte de Uruapan en 1950; los datos para ______, ______ Paranugarlen tiro, son_ de antes de. 1943, cuando se incorporó a Uruapan debido a la desaparición de su capital por la acción del volcán Paricutín. l Churuniuco era parte de la Huacana en 1900. 1 Tumbiscatio de Ruiz fue creado con partes de Aguililla, .Arteaga y Apatzingán cu 1955. fuente: México, Secretaría de Industria y Comercio, Dirección Cene-ral de Estadística, 2, 5, 7, 8, censos de población (1900, 1930, 1950, 1960): Jalisco y Michoacán, México. LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC i. LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC 177 200 22518 TEPALCATEPEC Cambio en la pob ¡ación, 1950-1960 (%del cambio) rf )—i rio o 1 LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC rLA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC 130 cultivos que habían sido lucrativos para los Cussi: maíz, arroz, huertos de cítricos, así como ganado. El Banco Nacional de ■ Crédito Ejidal proporcionó ayuda financiera para todas estas , operaciones. Problemas internos de administración llevaron a la , desintegración del sistema colectivo de trabajo y a la acumula­ ción de una gran deuda con el banco. Sistemas modificados que se basaron en grupos más pequeños no resolvieron estos proble- : mas. Por último, en 1956, se dividió la tierra y ganado entre los . ejidatarios.8 Las tenencias de los Cussi no eran las únicas tierras mejoradas de la Tierra Caliente en la época en que se formó la Comisión. La Comisión Nacional de Irrigación calculó que en 1939 se_■ 131 por supuesto, que la nación en general, tal como lo evidencian cifras de la fuerza de trabajo. Esto es cierto para cada zona climática, aunque existían notorias diferencias entre ellas. La inj dustriahzación de la Tierra Templada estaba más avanzada que otras 7°nas. Había una diferencia similar en las tasas de 7 ^alfabetismo regionales (cuadro v-9), en la cuenca la proporción A personas alfabetizadas no era muy diferente al de toda la 1 nación, excluyendo la ciudad de México, pero el promedio de las , : zonas montañosas en particular y también de la Tierra Caliente ;■ estaban por debajo del promedio nacional. En resumen, sería injusto caracterizar a la cuenca en los años íní;Cr^?fCS, a. 1.a ^ormación de la Comisión como una zona estan..u --j con­ t tinuado sin la Comisión. Por otra parte, había grandes zonas que estaban atrasadas económicamente, en tanto que el desarrollo del recurso más importante, la tierra fértil pero sin irrigación, era j i obstaculizado por las condiciones poco salubres y las malas copmunicaciones, así como la falta de inversión en obras de recursos ObidráuHcos. El encomendar el desarrollo íntegra! de un área Una pea era una ostra™en“ ^rológb ;,as a otras 10 000 hectáreas adicionales. Estos. nuevos proyectos se localizaban en la parte occidental de la Tierra. Caliente en tie­ de propiedad privada. Sin----embargo, de J rras ClL UlV^iLVI..^ --- ----- U - el rápido desarrollo * la zona se vio obstaculizado por la falta de comunicaciones a e *cuadas generalmente o por las insalubres. condiciones Alacranes ponzoñosos, malaria y vitiligio o "mal del pinto" 7 eran las prin^Í^ZÍÍta asumió rápidamente trabajos para remediarlos, pero no todos j los nasos en el desan olio esperaron la realización de esa acción, |í Ix^LF *.P , los particular, pasos“ -- --, -------..r;i . , PROGRAMA DE INVERSIONES DE LA COMISIÓN DEL Tr.PAI.CATC PE rque En en IS10 se inauguró un ferrocarril unía a .portación de li-l «, U ruapan y Apatzingán. Éste se uso para la exp deis Presidente Miguel Alemán formó 1 a Comisión del Tepalcamones, arroz, azúcar y las principales cosechas que no eran 6 19 en época anterior la Comisión. i ij? ? ^'7 ten¡endo como objetivo “el desarrollo integral subsistencia en la época anterior a laaComisión. ■'...... i Estaba investida "'La ha sido una región de importancia eco-|A«cursos naturales de la región”. Estaba ■’ de ’ LaCosta CostaSierra Sierranunca ' q -j— — --------- ---- j^aia el "armonioso gesarrollo de la agricultura, educación, salubridad y bienestar, las otras zonas, continuó dependiendo incluso más de una agri-^ programas de comunicaciones que producirían beneficios, "no cultura primitiva. »d p° para los habitantes de la cuenca, sino también para la ecoLas cifras de 1950, mostradas en los cuadros, v-2, v-4, v-a, v-oj 8 pomía nacional". 1 v v-7 fv se discuten con mayor detalle en la última parte de este» capítulo') resumen la población, la fuerza de trabajo y las prfrjt omisión ha trabajado en la cuenca del Tepalcatepec duducciones industrial y agrícola tal como eran poco después queW dos décadas, y ha construido obras a un costo de casi la Comisión empezó a trabajar. La zona era mucho más agrícola,I 1'lon“ de Pesos- Se esperaba que estos gastos mejoraran la comisio e p j condiciones productivas en la zona y presentaran la infraes• Para los detalles de la expropiación y la historia subsecuente de estoOnictura social para el mejoramiento de las condiciones de vida ejidos véase Emilio Romero Espinoza, XntwedenfM de la. re!orm“ “P «■? elevación de tos niveles educativos y el desarrollo do cornu«XVomía,' Zíel^^l^XiZ^AÍ^a-iones más eficientes con el resto le la resto de la nación. En 1960 la 1950 V Tavier Hernández Segura, Estudio de las condiciones económic«®omision del Tepalcatepec fue absorbida por una nueva t orga1 íl kJ 1 1 X- 1 1 JL H V —■ *« ■ ”-------------- - .. . _ A ■ó- agrfcoíL deV1fc ^edades d^Nuáa 'italia, tesis, Escuela Nacional de Agri-W "“^Énferm'edad6^ la misma. provocada por un hongo que causa manchas ™ ^epec 1947 a 1952. autor fue secretario de Recursos Hiofficio de la Comisión del Tepaka- 132 LA CUENCA DEL .RIO TEPALCATEPEC LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC 133 linó a la irrigación y drenaje (cuadro v-3). Para facilitar la cons­ nización, la Comisión del Río Balsas, que ahora realiza funcio­ trucción y administración de los trabajos se establecieron tres nes similares en una zona mucho mayor que abarca ocho esta- . ^tos de rie80, Dos de ellos> los distritos de Cupatitzio-Caiones dos. No hubo cambios en la organización del trabajo dentro, ',y del Tepalcatepec, están localizados en la Tierra Caliente en de la región aunque se hizo obvio que debía dedicarse relativa-. ¡ tanto que el tercero, el Distrito de Cotija-Quitupan, está ¡ocamente mayor atención a otras zonas de la cuenca del río Balsas: tizado en la esquina noreste de la cuenca y es independiente que a la zona del Tepalcatepec. Este cambio se manifiesta en , ., los otros dos. De acuerdo a un cálculo reciente de la Comi­ las decrecientes asignaciones para el programa de inversiones y ¡ sión del Balsas, los canales pueden proporcionar agua a 92 000 operación de la Comisión en la zona del Tepalcatepec (cuadro ■hectáreas en los dos distritos de la Tierra Caliente, en tanto v-3). En el curso de esta sección examinaremos los gastos de ,que 11 500. hectáreas adicionales son irrigables en el Distrito de la Comisión para determinar los costos de los proyectos que.se. !. lego Cotija-Quitupan. Además, se construyeron un número están considerando, para después poder comparar los beneficios; i, pequeños proyectos de irrigación a través de la cuenca, que que produjeron. De acuerdo con los objetivos de ja Comisión; ; favorecieron a 6 000 hectáreas. Cuando se tiene en cuenta la del Tepalcatepec, los gastos principales eran inversiones “econó­ uhLT E estaba bajo irriSación en 1947, aproximadamente micas” (cuadro v-3) para irrigar nuevas zonas de cultivo en ; 15 500 hectáreas, la adición neta a las tierras irrigadas de la Tierra Caliente y para mejorar y ampliar los sistemas de ■ x--...... ....... 94 000 hectáreas. (.cuenca fue de aproximadamente ción existentes en otras partes de la cuenca. Los gastos de irr-p La mayor parte del área irrigable adicional está domi ----¡.nada por pación y drenaje se complementaban con carreteras para llevarqcanales construidos por la Comisión. Parte de la tie 6 — “erra en DE’ ■ producción , se promovió eljdmn lÍ-? Lotija-Quitupan fue reclamada __ ía creciente al mercado. TambiénTambién se promovió mediante canales de drecooperación con la Secretaría de Agrig i naje. Además, una pequeña proporción de la tierra, en c especial desarrollo agrícola en 108 ’ , , proyectos de irrigación más pequeños, depeáde'i de bomcultura. nura. Los esfuerzos para mejorar las condiciones de vida y elevar fletas para abastecer agua para irrigación. nivel ele alfabetización también fueron importantes metas de la^ Los gastos totales de la Comisión en el desarrollo de sistemas inversiones "sociales” de la Comisión. Se construyeron sistemas ¡de irrigación hasta 1965 fueron de 180 millones de pesos, a pie­ agua potable y drenaje-de aguas negras, así como escuelas. U| mos . corrientes, o aproximadamente 240 millones de pesos a campañas sanitarias y educativas se financiaron con subsidtosy . resultó en un costo....... .precios de 1960? Esto por hectárea de....... tierra r............... Las mejoras urbanas fueron parte de los esfuerzos para mejoras ^irrigable de aproximadamente 2 550 pesos, a precios de 1960 I a el ambiente, aunque sin duda también tuvieron un efecto bft anversión promedio en México por hectárea de tierra irrigada néfico en la estabilidad política de la región. La mayoría de lqg ** ue de aproximadamente 5 230 pesos (a precios de 1960) hasta programas de construcción han sido terminados, reflejando .i| 1958?» Las favorables características físicas de la zona explican importancia que se da a otras partes de la cuenca del río Balsa| ate costo promedio relativamente bajo por hectárea para meen que ahora está actuando la Comisión. ♦: r. Los gastos administrativos y de operación remplazaron H¿JSt°S §aSt,°S lnclll>en Ios clasificados como costos del desarrollo hidrainversión económica y social a medida que aumentaba el pj por.,la comlsión 7a TJC- según sus memorias, fueron utilizados para • sonal de la Comisión y a medida que las tareas, cambiaban d La. r'ra- de Cana eS CUya PrinciPal finalidad era la irrigación. Los la construcción a la operación de un sistema de irrigación, fcmie m1V¡dlra0IL e"tre a Comisión dcI Tepalcatepec y la Comisión FeC - ZA ■ Lúa CÓLUC.J. LOO jgwraA Inversión económica ----- ------------ - - ' * --------------------- ■ - Éstas son las inversiones de la Comisión del Tepalcatepec qiij permitieron a los campesinos aumentar su producción y cambig a cultivos más valiosos. Incluyen las inversiones en irrigación^ sistemas de drenaje, la red de carreteras y las estaciones agrícoW experimentales que se describirán posteriormente. 1 1] Irrigación. Más de la mitad de la inversión total se £1 .E eCtr,C’dalSegUnJa finaIi<lad principal para la cual se utilizaban los OMos, y la parte financiada por la Comisión del Tepalcatepec provee agua fatwlórt"3 del ..D1Síl'lt0, d? Rleg° CuPati‘2ÍO-Cajones. Puesto que la planta gdioeléctrica está completamente separada de los sistemas de irrigación no I» A'Sari°« ¿en“ 3 en cuenta en eI presente análisis. Véase pp 211 ss L°X ' °P\ Cit” PP' 161 Taks “niparaciones deben usarse con Función porque la mayona de los proyectos de irrigación incluyen ei Mo de grandes presas (costosas a la vez) de almacenamiento, que por LTmZSe necesMaban ™ la Tierra Caliente. En 1965 el costo fue dc gas dc 10 000 pesos por hectárea. 134 LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC ; LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC 1 ¡orar la productividad de la tierra usando el agua disponible ofrecet la mayoría de los aldeanos es su mano de obra. La para irrigación en la cuenca del rio Tepalcatepec. Comisión gastó aproximadamente 50. millones de pesos en estas 2] Comunicaciones. Las carreteras fueron el segundo concepto , carreteras secundarias hasta 1965. en importancia en el presupuesto de la Comisión; casi una cuarta Varias comunidades de la Tierra Caliente nunca hubieran pe­ parte de la inversión tenía este fin. Además del sistema de cadido prosperar sin esta red de carreteras secundarias. Desde un rreteras, se incluyen los gastos para cuatro pistas de aterrizaje y ppunto, de vista económico, puede considerarse a ésta como una muchos puentes pequeños que se construyeron debido al sistema < j inversión suplementaria necesaria a los trabajos de irrigación de canales. Dos carreteras, el puente-acueducto de Barranca Hondebido a que reducen los costos de transporte para el mayor 1 da/ y la sección de carretera construida encima de la presa producto agrícola. No obstante, otras carreteras, en especial Las Piedras Blancas en el Distrito de Irrigación de Tepalcatepec, nop de la Tierra Caliente, no tenían, como propósito primordial, una se incluyeron aquí porque las cifras no eran lo suficientemente^ finalidad económica; en cambio, estaban destinadas a facilitar la detalladas para separar el componente de carreteras. . y comunicación entre las comunidades que previamente sólo ha­ La carretera más importante construida por la Comisión, tantop bían tenido contacto marginal con otros centros cíe población. por su costo como por su importancia económica, fue la carre-j ■ Más adelante examinaremos el efecto de estas carrereras sobre tera Uruapan-Apatzingán. La construcción. ,de esta carretera em-jj el desarrollo continuo de la zona. TT el ; í pezó tan pronto como se c™ U creó la Comisión. Hasta entonces '* “ 1-53] El desarrollo agrícola. La Comisión del Tepalcatepec vaa.a traja sj único medio de comunicación entre la Tierra Caliente y lap; j bajó relacionada estrechamente con la Secretaría de Agricultura zonas — de --------tierras ------altas? Ganadería era una para carretera tierra las quetécnicas requería| ayudarde a mejorar amícoL las. Sus proximadamente un día de viaje (dependiendo de la ép 1 esfuerzos se dir¡gieron hacia el desarroilo de t ___ un número de esdel año) para del llegar a Apatzingán ^Uruapan, en Uruapan, vez de U en vez ; paciones experimentales para agricultura p-anadería v aviadtt año) para llagar adesde Apatzingán desde hora y media que se emplea en la actualidad. Esta carretera, dej... P aoricuituia, ganadeiia y ariculu en la Tierra Caliente, una estación apícola, un puesto zootécnico una unídad de inseminación artificial aproximadamente 100 linces ha constituido la principal ruta entre la Tierra GabentJ tación de piscicultura y un péquTño/n^eníó ^uctre/ Tí / u nación. construcción costó o menos 2^ )venión arero. a my el„1resto de la nación. Su Su construcción costó másmás o —---------------------en millones de pesos. £.millones de pesos indicados en los informes de la Comisión de­ También fue parte del programa una red de carreteras secufrj pido a que la Secretaría de Agricultura proporcionó una parte darías, incluyendo algunas transitables en todo tiempo con su­ perficie de terracería. perficie Se pavimentaron más pavimentaron o menos 50más *kilóme de terracería.'Se o menos 50 taiciÓXientoV/^as'lArÍ" En”íños LXnUT'ÍLdÍ tros de carreteras en la Tierra Caliente, ademas de la carr j Wnado una mencionada antes. Sin embargo, un mantenimiento inadecuado^ hizo desaparecer vestigio en'h'cuenca. L .____ -------------todo ------- o pavimento en muchas nrt^ d6n^ p^Za^le^ífoLV/ón ’ Además, se construyeron en la cuenca cerca de 1 600 km de ca-, rreteras no pavimentadas; de éstas, aproximadamente 100 *tiene .Inversiones sociales superficie de grava, 300 tienen terracería terminada, y el resto *son caminos vecinales. El programa de carreteras depende, e ^radón' deri¿° personas que se beneficiarán d|fcb f"'/Ias. inversiones sociales se hacen para mejorar el parte, de la cooj Se espera que los aldeanos contribuí ®blent« dondí viven las personas. No aumentan directamente rectamente con ellas. "efectivo o en especie, con ,cerca ., brTT dlsPonibfes para el consumo, pero podrían conyan, en (--------- x . de una tercera par® 1 llbuir a la may°r eficiencia de los factores de la producción ------------"® del costo de la construcción de estas carreteras de la . granja a| mercado” la experiencia ha demostrado que esta contribución «®¡1^le?tando el conocimiento y las capacidades que tienen los algo menor a ¿ tercera parte y que la ünica ayuda que puedej^i’. a .■! --------- ”O'—-------------------------- *'"■ y o. it.au.; pee tra- a ' , , ®hctívo mediante cosas como programas de sistemas de agua nota- Estructura con una finalidad doble: paso de vehículos y peatones; «jle 0 ¿e electricidad rural. Una característica común de estas de agua a través de un abismo. «aversiones es que no se les puede evaluar sencillamente por sus 11 CUADRO V-3 o Gastos de la Comisión del Tepalcatepec, 1917-1965 (miles de pesos) potable y alcan­ tarilla­ dos Otras inver­ siones Precios corrien­ tes Precios de 1960 * 6 514 1975 4 700 Servi­ cios ur­ 1 * banos Años Irriga­ ción y drenaje 1947 1454 1 1948 2 972 4 380 208 184 177 1471 9 392 1949 6 385 3 865 34 98 397 1049 1950 8 043 5 500 3 156 433 1951 10 448 6 052 64 55 202 1952 16 382 167 397 1953 18 775 t 4 997 r 3 431 280 1954 18 182 3 418 181 1955 21 269 5 447 134 221 530 243 1 379 29 223 35 652 1956 16 423 6 285 161 817 501 2 443 717 27 347 242 2 143 2 379 1958 12 059 10 526 267 2 153 1 539 1877 766 1959 5 789 6 640 377 681 631 1 184 1 182 1960 14 795 3 538 261 467 107 1255 1961 4 141 394 163 72 58 1962 72 2 934 58 1231 1963 259 2 352 92 1 575 1964 480 2 621 250 1965 655 yígricolas Educa­ ción Total Precios gastos corrien­ corrien­ tes tes Precios de1960b 416 2 391 5 691 21038 2 091 11483 25 722 11 828 24 602 2 251 14 079 29 284 583 14 718 27 817 2 089 16 807 31765 760 912 18 493 29 034 2 203 20 696 32 493 199 1277 877 24 296 36 444 2 981 27 277 40 916 32 276 604 1 255 24 653 37 473 3 004 27 657 42 039 57 109 560 495 23 002 31 743 2 713 25 715 35 487 3 275 32 498 39 648 31 723 3 224 30 571 35 462 34 309 >8 083 3 982 38 291 42 503 29 187 31 230 3 991 33 178 35 500 16 484 17 308 3 397 19 881 20 875 941 21 364 21 364 5 196 26 560 26 560 273 318 5 419 5 365 5 490 10 909 10 800 628 593 647 6 163 5 978 6 916 13 079 12 687 406 200 715 5 599 5319 8 283 13 882 13 188 420 230 3 020 7 021 6 740 6 760 13 781 13 230 730 1 627 1 546 8 729 10 356 9 838 312 100 76 991 389 091 szo 242 TOTAL Precios corrien­ tes 177 305 78 849 3 517 Precios de 1960^238 260 106 052 4 004 11 53S 6 286 14 655 19 950 12 740 7 464 18 127 26 512 413 159 t T!>n4I,C Se‘°S par:l, hosP'la3esPara control de enfermedades y electrificación G?-“í ."’dT,de ,nvcra,ón Púwi« de >» Secretaría de la Presidencia, Dirección de inversión l’úhHca ,™',e‘7c r cíe fueml. comisión del a» Balsas, Gerencia del Bajo Rfo Balsas. Departamento de Contabilidad. 90 529 503 688 LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC Comu­ nica­ ciones T otales Inversión total Sociales Económicas LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPECLA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC Aunque la mayor parte de las inversiones económicas se hizo efectos sobre la productividad. Esto no significa que no tengan en la Tierra Caliente, la mayoría de Las inversiones sociales so tal efecto, sino que éste es sólo una parte de las razones que realizó en otras partes de la cuenca. Como se sugirió en el ca­ llevaron a realizar tal inversión. pítulo in, el gobierno parece haber utilizado sus programas para En el capítulo in indicarnos que en México los gastos en in­ disminuir el resentimiento contra las zonas que se beneficiaban versión social se han restringido para conservar recursos para el económicamente por las inversiones de desarrollo de la cuenca esfuerzo de desarrollo. En la cuenca del río Tepalcatepec as­ fluvial. cendieron al 10% de todas las inversiones de la Comisión hasta 1965. Los gastos proporcionaron un mínimo de servicios a perso­ nas en todas las partes de la cuenca y se concentraron en las g PROGRESO económico en la cuenca del río tepalcatepec zonas en que el aislamiento cultural y físico era.mayor. Se.iia¡.- ;1950 *11950-1960 960 dado mucha publicidad a los proyectos que mejoran el. bien-: estar social, pero en último análisis parecen ser una forma poctq : Las. queque el trabajo de la Comisión afectó afectó el crecas formas i°rmas enenlaslas el trabajo de la Comisión costosa de demostrar el interés del gobierno en el pueblo. Mu-J i rán^ento cd la Tierra Caliente se describen detenidamente en chos problemas de evaluación surgen con respecto al problema;: ""- — ,i ■ el siguiente capítulo. En ese capítulo es posible usar cifras anís.s anísde Jas inversiones goales; se les considerará cuandox evaluemos el ¡ . tadas para la producción de Ias principales cosechas en la f jc. < trabajo de la Comisión. . _ Zjj ira Caliente . (esto se explica en el apéndice x). No se pueden La construcción de escuelas fue la más importante . de estas, , hacer tales ajustes para toda la cuenca; la siguiente descripción inversiones sociales, aunque representa sólo el 3% de. los gastos- “ general de los cambios que ocurrieron entre 1950 y 1960 se tomó totales. Se construyeron cuatro grandes escuelas técnicas, varias j í.de los datos del censo, presentados en los cuadros del v-4 al escuelas secundarias y muchas escuelas primarias. Dos de las es-.’ f V-7. Debe recalcarse que gran parte de la irrigación y del aumen*.cuelas técnicas capacitan estudiantes para el trabajo en la agrí ..to de la producción agrícola que puede atribuirse al trabajo cultura y una requiere solamente educación hasta el tercer grado.) ¡.••de la Comisión ha ocurrido a partir de 1960 y en consecuencia para ser admitido. Las otras escuelas técnicas son para la capa-, f no aparece en las estadísticas del censo. citación de profesores y de guardias forestales. . ; j Aparte de sus inversiones en la agricultura y campos relacio­ Los sistemas de agua potable, electrificación rural y mejora^ nados en la Tierra Caliénte y su inversión social dispersa en urbanas fueron parte de un esfuerzo cooperativo con las comtM • toda la cuenca, la Comisión realizó obras de drenaje e irrigaO nidades afectadas. Se esperaba que los aldeanos de las coinuni-: é ción en las zonas de cultivo de la caña de azúcar de la Tierra dades que recibían las mejoras contribuyeran, cuando menos, con; ^Templada, en especial en la parte noroeste de la cuenca. En la mano de obra necesaria para los proyectos, permitiendo que" testa zona la Comisión construyó una presa y rehabilitó otra un gran número de aldeas se beneficiaran a un bajo costo. Se-¡ durante .los primeros años de sus actividades. También funciona instalaron, aproximadamente, 85 sistemas de agua potable, e im-3 jun distrito de riego en esta región. La superficie cosechada con portantes mejoras urbanas en Apatzingán y Uruapan incluyeron caña de azúcar al año en la Tierra Templada , - m se ha más que 1 duplicado desde que se estableció la Comisión. Hasta ahora la calles, mercados, monumentos y un parque nacional que enmarca; las fuentes del río Cupatitzio (el río ele las aguas cantantes) Comisión no ha tenido influencia para aumentar la superficie en forma muy imaginativa. El consumo de electiicidad estimado^.. - cultivada en la Cesta Sierra, Uno de los proyectos aún no teraumentó dos veces más rápido que el promedio nacional entre/■ minados de la Comisión del Tepalcatepec es la construcción 1950 y 1960. ’’ ide una presa de almacenamiento para capturar y utilizar las paguas de esta fuente para irrigación durante los meses de seca. La Comisión también construyó instalaciones sanitarias y prod por clonó alguna pequeña ayuda financiera para la erradicad ón«E ■oblernos¿Merecimiento ¿Merecimiento de lalapoblación y deyla de fuerza trabajode trabajo del paludismo, patrocinada conjuntamente por los gobiernos población la de fuerza los Estados Unidos y México. Construyó varios hospitales y clí-W > . nicas comunales en la cuenca y en sus alrededores en donde»1 crecimiento de la población, durante la década 1950-1960, Uüa a °tra ?arte cuenca- El incremento más ráactúa, hoy en día, la Comisión del Balsas, ’ lhuo d 140 LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC CUENCA DEL LA pido fue en la Tierra Caliente, en donde la población aumentó más del doble en la década que siguió a la creación de la Comisión del Tepalcatepec. Él incremento promedio en toda la región fue del 40%; el crecimiento más lento ocurrió en las zonas templadas de la sierra de Uruapan y en las cordilleras montañosas del sur. La tasa "natural” de crecimiento de la población de la cuenca del Tepalcatepec (nacimientos menos muertes) aumentó en cer­ ca de 18% de 1950 a 1960 (cuadro v-4); en ese período fue mayor que el promedio nacional. Esto fue resultado tanto de una mayor tasa de nacimiento como de una menor tasa de mor­ talidad que las tasa’s promedio de la nación. Con excepción de la Tierra Caliente, todas las partes de la cuenca tuvieron tasas de mortalidad menores que el promedio nacional en 1950. Hacia 1960 incluso la tasa de mortalidad de la Tierra Caliente era menor que la tasa nacional. La tasa de natalidad también era ma­ yor que el promedio nacional, en todas las. regiones, excepto en la Costa Sierra. El crecimiento natural de la población estimado fue mayor que el dado por los censos de 1950 y 1960. Esto es, se informó que vivían en la cuenca menos personas en 1960, que lo que se hubiera esperado por una extrapolación del crecimiento natural (cuadro v-4). La migración estimada para la cuenca durante los arios cincuenta fue de aproximadamente el 6% de la pobla­ ción de 1950. Las diferencias interregionales en los patrones de migración fueron grandes; la Tierra Caliente fue la única zona con inmigración, que se calculó en casi el 40% de la población j en el año base. La emigración de otras zonas fue un reflejó J de la relativa falta de oportunidades económicas en la sierra de Uruapan.13 Al igual que es cierto para el resto de México, un poco me­ nos de una tercera parte de la población de la cuenca estaba dentro de su fuerza de trabajo según el censo de 1960. Las diferencias regionales dentro de la cuenca eran muy pequeñas/ comprendiendo el campo de variación desde un bajo 29% en_ la . . í ir Tierra Caliente y en la meseta tarasca hasta un máximo deJ ( 38% en la Costa Sierra. En 1960 el promedio para la cuenca^ fue del 31 por ciento. ,í í 1? ':®T Desde el censo de 1960 es probable que la inmigración hacia la Tierra,® Caliente haya aumentado como resultado de la creciente prosperidad. Así,®' o es posible que durante un mayor período la afluencia neta de personases| a la cuenca como un todo fuera positiva. ifZ: tí -tí tí g 8 co -O <o (/■> ‘tí tí -tí tí ir> <o <0 ce o, tíe ►fe oO tí >' ^-tí I + w> XH 'tí £ C¿ ’O o oí o t£J o OI OI i> ce OO CT) Gtí I tí *> ? O fe Ai -S 8 § tí ■S O. -tí jstí ►re CM 'f O tí £ 8 tí 9 s £ r I O OI I> ce CT) es CT) co <c !>■ OO -■tí 8 ;ofefe o _s \c *C O ■ l, tí -tí + OI 'f 'tí £ roi i> vz ri ■tí oO <c cr> ir> "tí Xf< <50 Ip o ife- ip 00 G¿ có OÍ i—i -tí Oí ere 00 ,re I cj tíj £ o►fe <á o <0 ►re títí1 tí tí s .. fe-l >■ O \© O *fe -9 tí -o w .& cr> có -tí Ift kS 10 OI en C<S ce cq i—i q¿ <50 CT) O 2; -o o< O fe ■■A O fe 'O re IJ fe □ fe Q\ '~n U5 tí y £ '~fe irj 'tí o o <S ir> CÓ 'tí 5; O U I> u fe a <E 'tí re g o h U 0J PL, <L> ■fei (Ti fe fe <L> U O u ’í3 'U £ ■ 'W S <Z) "(ti o tí H ,2 H re tí o H re 'S k< t/l O O a H g 5 re a S ja o O O > re ,E- P fe t: 1 <u 5 <0 k> bo cr> fe o fe o oS , 're o fe § -O fe o ■—. o c; -tí tí re -0 .*2 tí . re Ití L tí! re re ’u re § o Or ífe O ío' íT co fe tí 8 ;o 9 CM eS -tí tí tí fe tí tí tí cri <0 tí "tí tí S tí tí t£J O t£> -tí +títíj tí "tí oo en —< 142 LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC Estructura económica La economía de la cuenca sigue siendo fundamentalmente agrí­ cola. Incluso la Tierra Templada, la zona más industrializada, tiene una proporción más pequeña de personas trabajando en la industria que la nación como un todo (cuadro v-5). La fuerza de trabajo agrícola de la Tierra Caliente creció incluso con más rapidez que su fuerza de trabajo total, que a su vez creció un 75% durante la década. Este crecimiento fue una respuesta a las oportunidades económicas considerablemente incrementadas que resultaron de las inversiones de la Comisión del Tepalcate­ pec. La población de Apatzingán aumentó más del doble en los diez años que siguieron a la creación de la Comisión. El aumento de las oportunidades de ocupación agrícola indujeron un creci­ miento adicional de la ocupación necesario para introducir y conservar una tecnología agrícola más compleja. La Tierra Fría también experimentó un incremento en la im­ portancia relativa de su fuerza de trabajo agrícola. A pesar de una demanda creciente de muchos productos de artesanía por los que es bien conocida la región, la proporción de personas ocupadas en manufacturas disminuyó casi 20% durante la dé­ cada de los cincuenta. La Costa Sierra siguió ofreciendo pocas actividades económicas distintas de la agricultura. La minería aumentó su importancia en años recientes pero sigue ocupando menos del 1% de la fuerza de trabajo. Los censos industriales proporcionan una medida de la im- * portancia relativa de la producción industrial de la cuenca.13 Aunque la producción industrial de la cuenca aumentó de 1950 j a 1960, su participación proporcional en la producción industrial J nacional disminuyó. En ambos años representó menos del 1% 1 del total (cuadro v-6), pero en 1960 había disminuido de 0.7 a’i cerca del 0.2%. De esta producción, más de las tres cuartas i partes del valor se producían en la Tierra Templada. La par- ® ticipación relativa de la producción industrial en la Tierra Ca-J líente casi se duplicó de 1950 a 1960. Apatzingán, la segunda®, ciudad en importancia en la cuenca, aumentó su contribución ® relativa a la producción industrial regional desde menos del 10® a más del 20% del total durante el período. Uruapan sigue®. 13 No se dan cifras absolutas para la producción industrial en cada niu-ÍMa nicípio debido a lo incompleto de los censos industríales. A pesar hecho de que tales cifras se proporcionan para los totales de la cuenca,.jfb sólo pueden proporcionar una idea general del tipo de magnitudes ímpli-áK cadas más que un cálculo preciso en cada categoría. Probablemente losiK números relativos nos den más información. 143 \ CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC 04 ©£ 04 OO © 00 00 © © ""j xo en © en ¿ O g o tñ © o ó xr n 00 o © —« O xft 6 i¿ ¿ 6 o G0 O * o o CJ O) oñ © <© 0O> CO <JO 04 04 en © © © © O *«<' m» f-: © <O I> W ir; © £>* í*M ©I ©>*“•< W r—< I''- © © r-H Ó©OWÓ # 0O 0Q © l> 6 © <6 >-< 04 i> >• z> un © © en o o 6 t' c *)b. o W C0 V un 6 oi c 6 <?i ¿o r~< xO ren en © OI un GO so q » © © o xh 04 © en >-< O © H uñ © 04 © xH 04 © W >—< en © 00 © rC cC ó un 04 *b © © L iñ —■ 04 >—1 m» © * "4" o¿ o c C c¿ !>• i—< en ¡>j —< — 04 © ~-¡ xn o-t c 6 C 6 oi © 04 O' © G4 © —; t> 04 © 0¿ 04 © G¿ ¡>» 04 rh © on © © oó 04 04 © 04 ¡> © en G<ñ © I-C C4 © © ¡n >-< i* © © có oS & sncnc4b-i> en en un © go go xo íL 04 Ó 00 04 O ■rH r—4 un Censo de población, 1950 y 1960. 04 un eso fuente: xñ sñ © o eñ © r-< la cuenca del río tepalcatepec 144 la cuenca del río tepalcatepec 14o parte a casi la mitad. La construcción por la Comisión de un siendo la ciudad más importante de la región, pero su crecí- , de distribución de agua para irrigación, de los ríos que miento ha disminuido en años recientes y durante la década de : 1960 se observó emigración a otras partes de la cuenca y vienen de la Tierra Templada, produjo un aumento en la su­ 1950 a perficie cultivada1 de la Tierra Caliente de, aproximadamente, de la nación. En 1960 la En industria 1960 la industria más importante más importante en la en cuenca la cuenca era era la larere- ; 42 000 hectáreas a. 109 500 en 1965:- -------la m superficie irrigada aumen­ finería de azúcar. Aunque no es una industria nueva, represen- : U 1 *tó n■ aprpxlmadamente, 15 000 hectáreas a casi 72 000 en 1960 taba casi la tercera parte de la producción industrial de la cuen­ y a 89 500 en 1965. Así, en sus primeros quince años de opera­ raca. Empleaba una parte muy pequeña de la fuerza de trabajo ción, la Comisión puede reclamar el crédito por un aumento en industrial. La industria química era la segunda en importancia. la tierra cultivada de casi 250% y un cambio considerable de, Incluidos entre sus productos son la trementina y la brea que, , ■aproximadamente, una. tercera parte a cuatro quintas partes en junto con otros derivados de la madera, representan cerca deL a proporción de esa tierra irrigada. Sin embargo, según el cen­ 75c7 del valor producido por esta industria.14 Más de una ter­ so, la superficie cultivada en las otras tres partes de la cuenca cera parte de la producción industrial y más de una quinta parte en realidad disminuyó durante la década. de la ocupación industrial provinieron de los recursos foresta- r El rendimiento agrícola por hectárea cosechada en la cuenca les de la zona. En una época hubo planes para la construcción; c fue menoL.que el de la nación. Aunque se hizo algún progreso de una fábrica de papel que sería financiada por la Nacional. Jipara acercar los promedios nacionales-y regionales, en 1960 las Financiera, el banco de desarrollo mexicano, pero se selección [ curas de la cuenca'seguían siendo un 13% más bajas que las de naron otras regiones para esta inversión. . , ■ a .nación. La Tierra Caliente fue la única zona cuyas cifras se Desde el censo industrial de 1960, se han instalado varias des­ ■■ -acercaron al promedio nacional. La gran importancia de las comotadoras de algodón en la Tierra Caliente para procesar las- sechas de subsistencia explica estos bajos rendimientos. En 1960, *.crecientes cosechas. Son una fuente importante de' ocupación du f mas del 60% de la superficie cultivada en la cuenca se sembró rante una parte del año. Podrían, de hecho, constituir la mayan í con maíz, con una proporción mucho mayor de maíz en la Tierra industria de la cuenca en la época actual. Su papel en la econo-i . Sierra. En la Tierra Templada _____ se ____ pFna y en_ la Costa observó mía regional se discute posteriormente. Una fábrica procesado^ r una mayor diversidad en el censo de 1960. Caña de am 1 b, de la Tier#, ^.garbanzo, ---- frutas ocuparon lugares importantes de bario es otra adición reciente a la base industrial y varias en la Caliente. En han ocurrido, pocos de cambios, " el“ resto de' la’ cuenca - - ’------------producción la región. La agricultura de la Tierra Caliente en la estructura ----------o magnitud ele la industria. ., . J J:.es lazmás vanada de todas las regiones. En 1960 ajonjolí, arroz ( o___. ? y maíz fueron fue lalas actividad cosechas económica principales.mas En mapót. comparación con otras Aunque la *.agricultura -------- .nrnrhirp nncApoco másmasdel del1%i/0 dec 1®regiones, han ocurrido cambios significativos desde esa época tante de la —— cuenca,L la—zona produce l producción agrícola de la nación (cuadro v-7).15 Como sucede Como se describirá en el capítulo vi, el algodón, el melón y la con la producción industrial, esta participación disminuyó d| (sandia han aumentado su importancia a medida que se terminan rante la última década, aunque no con tanta rapidez. Durant| I las obras de irrigación y se hace disponible el crédito y conoesa década la importancia geográfica relativa de la zona cambi| [cimiento técnico. de manera impresionante. La proporción de la Tierra Calientg | Según el censo agrícola de 1960, el valor de la producción en la zona cultivada de la cuenca aumentó del 30 al 43%, y || fanimal vendida en la cuenca fue de aproximadamente el 60°7 V‘dor de las cosechas y de la producción de frutas (cuadro participación en la producción, de aproximadamente una tercera f V‘ / %urante los . años cincuenta la importancia de los productos 11 En 1967 se estableció una nueva fábrica de trementina y brea enfjl Animales disminuyó tanto en términos absolutos (a precios cons­ municipio de Paracho. Construida con ayuda gubernamental, es propieuaj ientes) como relativos. El censo de 1960 indicó que había una [disminución absoluta en el número de ganado en la región. La colectiva de los miembros de un ejido local y proporciona una v%a mostración de la continua importancia de los recursos forestales en la iJ ierra Caliente es la zona ganadera más importante de la cuen­ 15 Esta sección se basa en cifras del censo agrícola, a pesar de tea. Muchos residentes de la Tierra Caliente afirman que la chas deficiencias de esa fuente. A algunas de ellas nos referimos en|| apéndice I. Aunque se presentan cifras absolutas, quizá los órdene J|| [ganadería ha disminuido a medida que la irrigación usurpaba, |para el cultivo, gran parte de las tierras de. pastoreo. Sin erntivos de magnitud sean un mejor reflejo de la situación real. ■D üc UlUl'J V.O wuxvi ..... i 1___________ —------------------ ----------- -■ . . :S CUADRO V-6 *Actividad industrial en la cuenca del Tepalcatepec t 1950^ y 1960 Inversión de capitalA Número de esta­ blecimientos Valor de la producción 1950 1960 1950 *32 324 *100 081 *19 947 5434 715 2 789 609 *140 735 Número 0.7 0-2 0.5 0.6 0.7 0.4 0.8 0.3 Porciento 24.6 ■ 12.5 23.3 18.7 23.7 38.8 14.8 8.8 Tierra Caliente Tierra Tem­ plada 84.8 75.2 81.9 74.8 49.9 47.8 77.1 61.1 19.5 24.9 1.8 1.3 2.1 1.2 5.5 Tierra Fría 2.7 0.9 0.3 2.3 8.6 1.6 4.6 0.3 Costa Sierra 27.7 42.1 40.9 29.0 41.2 46.1 36.5 21.3 6.1 16.8 7.9 20.8 1.5 21.5 3.8 35.8 1960 1950 Número de empleados 1960 1950 1960 tepalcatepec0 municipios industrializados Uruapan Apatzingán . Otros municipios 70.5 54.7 g.s 9.5 11.4 15.7 43.7 28.8 58.1 21-6 ' 9.7 3.2 2.4 46.9 25.3 INDUSTRIAS PRINCIPALES6 Refinado de azúcar 32.6 30.3 4.3 Productos químicos 19.9 17.0 6.9 Fábricas de hielo 10.8 8.1 25.6 Textiles 7.6 3-0 5.3 Molinos de arroz 1.9 1.4 0.6 27.2 30.2 57.3 Otras industrias a Expresado como la parte relativa de la industria en cada región tal como aparece en el censo. Las cifras para 1950 omiten cuatro municipios de Jalisco. En 1960 estos municipios representaron menos del 01<7 del valor total de la producción en la cuenca. ’ /o c La cuenca del Tepalcatepec como porcentaje del total para México. Las otras zonas se muestran en términos de su importancia relativa dentro de la ai enea. d Incluye tanto el capital fijo como el de operación. « No están disponibles las cifras de 1950 para la industria en la cuenca. * Miles de pesos. fuente: 1950: México, Secretaría de Economía, y Estado de Michoacán Provecto de programa de gobierno del estado de Michoacán, México, 1957, pp. 202-204. Basados en cifras del Censo 'industrial de 1950. ?*éXtCO’ Secre^ría de Industria y Comercio, Dirección General de Estadística, 7? Censo industrial, 1960, México 19o5. Basado en hojas de trabajo no publicadas para el nivel municipal. LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC LA CUENCA DEL oo CUADRO V-7 Producción agrícola, ganadera y forestal, cuenca del Tepalcatepec, 1950 y 1960 Cuenca del Tepalcatepec 1950 . Tierra Caliente ~1950~ 1960 ~1960 Tierra Fría Tierra Templada 1950 Costa Sierra I95O " 1960 1960 1950 1960 agricultura» 49 769 LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC Superficie culti­ vada (hectá­ reas) Total 1 Relativa5 % de cambio Valor de la pro­ ducción (miles de pesos de 1960) Total Relativa5 % de cambio Rendimiento (pe­ sos por hectá­ rea, pesos de 1960) Total 12 148 Relativa5 como % de la superficie total GANADERÍA Producción ani­ mal (miles de pesos de 1960) Total Relativa5 % de cambio Cabezas de ganadoc Total Relativa5 % de cambio 45 996 0,8 -7.0 314 648 318437 16 395 35,6 130 3 046 135 969 PRODUCTOS FORESTALES Valor de la pro­ ducción (miles de pesos de 1960) Total Relativa5 % de cambio 1 517 20,1 a 7 oíal de la producción de cosechas y de frutas. .Las cifras relativas de la cuenca del Tepalcatepec proporción total n—> v 1' 1 ■ ' n as otras zonas las cifras son la contribución de la región al total de la cuenca, ' * ~ e Las cifras de 1960 se basan en el censo ganadero realizado por la agenciaPde la Secaría dería en Apatzíngán (véase el texto). ° ce ia Secretaría de Agricultura y Ganafven-te: Censos agrícolas 1950 y 1960 (cifras preliminares), excepto en donde se indica otra cosa. 5 i 150 LA CUENCA DEL RIO TEPALCATEPEC j LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC 151 bargo, un censo hecho por el jefe de la estación experimental Funcionan algunas minas de cobre; la extracción y procesado de ganadería en la zona indicó que esto no era cierto; esta del bario empezó en 1962. fuente comparada con el censo de 1950 muestra que la cantidad de ganado permaneció casi constante en la Tierra Caliente y í SERVICIOS SOCIALES disminuyó ligeramente en el resto de la cuenca.16 Probablemente 1 no hubo un cambio significativo en el número de ganado de la | región, y quizá el valor de los productos animales aumentó en | . La oferta de servicios sociales en la cuenca del Tepalcatepec íntérminos absolutos, incluso si la participación relativa de la pro | ! cluye la mayoría de los elementos esenciales aunque no tan ducción de la cuenca en el total de la nación disminuyó. j j abundantes como en otras partes del país. Su sistema de carroperas tiene actualmente cerca de 225 kilómetros de carreteras La producción de madera también es muy importante en la í pavimentadas. Una red complementaria de carreteras secundar!. economía regional. Hay mucha explotación poco científica de < .as [ y vecinales se ha construido a través de toda la cuenca. En los bosques en la Mesa Central, y como en su mayoría es ile­ todos dos pueblos hay servicio postal y en 16 comunidades hay gal, no hay informe del valor de los productos forestales de la oficí: ñas de telégrafos. Las principales ciudades tienen servicios teleregión. El censo agrícola indica un gran aumento en la pro- ¡ fónicos, incluyendo líneas de larga distancia. ducción forestal, pero, a la vez, muestra una disminución, en ’ ; Aunque en la zona había menos kilómetros de carretera pavíproporción, de la producción regional respecto de la nacional 1 ___ _—....... quu (cuadro v-7). El cambio más importante en la distribución de la Identada por. kilómetro cuadrado remedio c^.9ue elya nacional en 1958, es poco probable que producción, dentro de la cuenca, fue el importante incrementoBnac^onal en 1958 fUPer^cambie pr que las ca­ P(¡ rreteras actuales son suficientes para casi todas ias necesidades de la producción forestal en la Sierra Madre del Sur. Esto se j! . arhialpc v rv-> Uov, — debe casi exclusivamente a la apertura de superficies consíde-<^Uaíes y no hay planes, por"otr<f i "1 us n su super­ T* de lata Costa rabies cíe UiosraSierra oiaia aa las técnicas de explotación „ r comercial.T J Cn cuenca también tiene uX/r^-■ ra aunie a °> para aumentar aría que conecta £ Uruapan ycon Apatzingán iimótríy Apatzingán Esta producción representó más de la mitad de la producciótw? Uruapan la ca1^^ errov^ri ■ agrícola en 1960, en comparación con la insignificante produc®? ^42 y es una vía comercial ' ^sta ^nea se terminó 0 U re ión ción forestal en 1950. jfc otra Mnea, de ^s leyTa cT/U 8 - _ a Guadalajara, que conecta ¡esta región productora En resumen, la economía de la cuenca del río Tepalcatepec^ "" ' 1 ' de azúcar ’ •con su mercado. atalajara, que conecta está dominada por actividades agrícolas. Éstas proporcionan ocu| t Cerca de u^ cuarta parte de la población de la cuenca tiene pación para la mayoría de la fuerza de trabajo y producen la £gua potable en sus casas; el promedio nacional es de, aproxi­ mayor parte del ingreso regional. La estructura de la producciój madamente, 30%. Sin embargo, la mayoría de esta población se agrícola y ganadera no ha cambiado mucho en la zona; hub® encentra en las zonas templadas de la sierra de Uruapan. Casi cambios importantes en la agricultura de la Tierra Caliente, pexfl fedie en la meseta tarasca o en la Costa Sierra cuenta con este férvido. Durante el período de 1946-1963, se construyeron aprose presentaron después del censo de 1960. Otro cambio fue 3 pmadamente cincuenta sistemas de agua potable en la cuenca.17 incremento en los productos forestales en la Costa Sierra. La cuenj gtas comunidades- beneficiadas tienen una población en con­ ca sólo provee una pequeña proporción de la producción agr| feto de, más o menos, 160 000 personas, o sea cerca del 38% cola, ganadera y forestal de México. En términos de rendimientoj B la población de la cuenca. monetarios, su agricultura es menos productiva que de la nació| |3egún un estudio de la Secretaría de Salubridad y Asistencia, en conjunto. Sigue siendo un pequeño productor de mineral^ & cinco municipios ningún doctor residía en la cuenca en Ifcl, sino que sólo había 94 doctores ejerciendo su práctica M La disminución en una tercera parte del número de cabezas de gana.<¡g |r ella,18 pero once municipios carecían de instituciones médiregistrada en el censo de 1960, no es un buen reflejo de la situación p.como clínicas y hospitales. 1*■ ■ ’-—3 i-, * en la cuenca. También es probable que el censo haya subestimado eos» derablemcnte el valor de los productos animales en 1960, pero no tenerla disponible información adicional en este respecto. Los métodos de lección de información para las cifras sobre la ganadería fueron los mis^j que para la información agrícola y por tanto están sujetos a los mismos blemas que se discuten en el apéndice I. -jS X7 ^'México, Secretaría de Recursos Hidráulicos, Agua potable y alcantari­ llo, I de diciembre de 1946 - 31 de diciembre de 1963, México, 1964. %a información sobre los doctores y los servicios médicos proviene de ^archivos de la Comisión del Río Balsas. LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC LA CUENCA DEL RÍO TEPALCATEPEC 152 45% entre 1950 y 1960, aumentó con menos rapidez que la de la nación (excluyendo a la ciudad de México) que ahora es mayor que el promedio de la cuenca (cuadro v-9). CUADRO V-8 Educación primaria en la cuenca del Tepalcatepec, 1964 Tierra Tempiada Cuenca del TeTierra palcatepec Caliente Número de estudiantes matriculados en la escuela Total Relativa Proporción de la pobla­ ción en edad escolar matriculada en v * escuelas Proporción de estudian­ tes en el pri­ mer grado Proporción de estudian­ tes en el sexto grado Estudiantes/ aulas Estudiantes/ profesor Tierra Fría CUADRO V-9 Costa Sierra Proporción de personas alfabetizadas^ Méxicob 75 529 100 58.7 21 691 28.7 58.3 38 502 51.0 63.0 153 9 321 12.3 54.7 Cuenca del Tepalcatepec Tierra Caliente Tierra Templada Tierra Fría Costa Sierra 6 044 8.0 1930 1950 24,9 26.0 18.6 31.9 20.5 19,7 42.0 43.0 37.2 48.6 36.7 34.6 *El alfabetismo se define como la habilidad de leer y escribir, porción es el porcentaje de habitantes mayores de seis años años en 1930) que estaban alfabetizados. I 45.2 1960 47.0 45.4 43.0 49.6 41.4 37.8 La pro- (de diez : h No incluye la ciudad de México. 39.0 43.3 47,6 41.2 5.1 3.9 5.8 58 66 57 . 53 66 ■ 77 62 55 5,9 . ■ fuente: Censos dze población, 1930, 1950 y 1960. 47.7 % / A pesar de grandes esfuerzos para mejorar los servicios sociaúi les, hay menos disponibilidad de los mismos en la cuenca que % ;?en la nación en conjunto y la infraestructura social es menos i completa que en el resto de México. Sin embargo, en la cuenca p están disponibles servicios públicos esenciales, y con una distri3.6 q : bución geográfica adecuada de manera que ninguna región carece 55 q por completo de los beneficios que estos servicios proporcionan. . h...... .. . 71 a Basado en el número de niños entre 6 y 14 años de edad en I96C utilizando las cifras del censo y suponiendo que no ocurren muertes ri migración, -I fuente: Secretaría de Industria y Comercio, Dirección General de Estada tica, Departamento de Estadísticas Educativas, México. '41 Más de la mitad de los niños en edad de asistir a la escueg primaria se matricularon en escuelas en 1964 (cuadro v-8). Cer| de dos quintas partes de los alumnos de las escuelas priman® estaban matriculados en el primer grado, en tanto que sólo’4 cinco por ciento estaba en el último año de la primaria. El mero de estudiantes por aula y por profesor era un 20% mayg que el promedio nacional de cincuenta alumnos por profesor er la primaría. Aunque la tasa de alfabetismo aumentó del 48 C EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC CAPÍTULO VI EL EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC SOBRE LA TIERRA CALIENTE El programa de inversión, discutido en el capítulo precedente, tuvo un impacto significativo sobre el desarrollo del medio social y económico en la Tierra Caliente. Además de un cuantioso aumento en la tierra cultivada, en producción agrícola y en fuerza de trabajo a que hicimos alusión antes, el sector industrial de la región se expandió para incluir nuevas empresas desmo­ tadoras de algodón y hubo algún aumento en otras actividades no agrícolas. Sin embargo, los principales esfuerzos de las acti­ vidades de la Comisión del Tepalcatepec se dedicaron a la agri­ cultura. La segunda parte de este capítulo trata de los desarro­ llos de ese sector. La Comisión continuó y aumentó el programa de inversión que se había empezado en el Distrito de Riego de la ¿ Tierra Caliente por su predecesor, la Comisión Nacional de Irri- < gación, Aunque se siguen haciendo nuevas inversiones en la zona, q la creación de la Comisión del Río Balsas resultó de un nuevo; hincapié en los desarrollos de otras zonas cercanas que hasta hace ;; poco estaban olvidadas; los proyectos que se continúan en la Tierra Caliente son pequeños en comparación con los realizados j previamente. Una discusión de la industrialización y de su relación cong este desarrollo agrícola se presenta a continuación junto con una.?) descripción más general de la estructura económica de la regiónó y de sus perspectivas para el futuro. Estas variables económicas^ *que se relacionan con un desarrollo más equilibrado de la regíón, fueron de gran importancia para quienes tomaron las deci- J siones como ya lo hemos indicado; es necesaria una discusiónj de las mismas para facilitar la evaluación que se presentará en | el siguiente capítulo. Por último, se exponen esquemáticamente.^ las mejoras en el bienestar social. J LAS INVERSIONES DE LA COMISIÓN EN La TIERRA CALIENTE • 1 á J Los principales programas de la Comisión del Tepalcatepec en la^ Tierra Caliente se destinaron a aumentar la productividad agrí-3 cola y mejorar las condiciones de vida. Esta región incluye siete 1 •¿ 155 municipios que fueron el objeto de la mayor parte de la investi­ gación para este estudio debido a su posición preponderante en las actividades de la Comisión desde 1947. En el cuadro vi-1 se presentan por función y por ano los gas­ tos de inversión en la Tierra Caliente, como se hizo en los cua­ dros anteriores para todos los gastos de la Comisión. Casi el 90% de los gastos en irrigación fueron para obras en la Túrni Ca­ liente. Esta 'inversión en obras de irrigación represen! ó más de las dos terceras partes de los gastos en la Tierra Caliente. En comparación con los gastos en irrigación, la construcción de carreteras en la Tierra Caliente requirió menos de las tres cuartas partes de los gastos totales para comunicaciones dentro -de la cuenca. Esta menor proporción es, en parte, un reflejo de la importancia que se dio a la construcción de carreteras en la : meseta, parte alta de la cuenca, para proporcionar una cornil. nicación entre las comunidades aisladas de esa región y el resto ? del país. La menor proporción de las inversiones “sociales” que íse hizo en la Tierra Caliente refleja la necesidad general por ¡ estos servicios en toda la cuenca.1 I Una gran mayoría de los gastos en la Tierra Caliente, al igual que en toda la cuenca, se dedicó a la construcción de obras que proporcionaran irrigación para tierras que tenían mala irriga­ ción o sólo eran cultivadas durante la temporada de lluvias. Este ¡interés hacia la Tierra Caliente, que representó las tres cuartas ¡partes del presupuesto de inversiones de la Comisión, produjo ¡im aumento en la producción agrícola mucho mayor de lo que úe hubiera esperado si no hubiera intervenido la Comisión. Este [efecto es tema del presente capítulo. DESARROLLO AGRÍCOLA Esta sección presenta una descripción cuantitativa de los cam­ bios que ocurrieron en la Tierra Caliente; identifica y mide la Jarte del cambio atribuible a la intervención de la Comisión. Truniento en el valor neto de la producción desde la crea­ sen de la Comisión proporciona una medida de los beneficios Primarios del nuevo sistema de irrigación. Aunque ésta requiere fin ajuste para tener en cuenta el progreso que podría haber Barrido sin las actividades de la Comisión, lo consideraremos asta el siguiente capítulo en donde reducimos el valor neto 1 Cf. Henry Stelner, Criterio, for Planning Rural Roads in a Developing fymntry: The Case of México, Stanford, Institute of Engineering-Economic ^stems, Stanford University, 1965; capítulo v. Para un estudio més completo ¡Obre las inversiones sociales véase la última sección ele este capítulo. Cjx CUADRO VI-1 Inversiones de la Comisión del Tepalcatepec en la Tierra Caliente, 1947-1965 (miles de pesos) Irrigación y drenaje Educa­ ción Agri­ cultura Comuni­ caciones Agua po­ table, drenaje de aguas negras 1 Inversión total Sociales Económicas Servicios * urbanos n H o o Precios de 1960 * Otros Precios corrientes 74 1527 3 634 1947 1452 I 1948 1 706 4 303 159 158 69 681 7 076 15 850 1949 3 435 3 726 2 5 241 379 7 788 16 199 109 169 13 080 24 721 1950 7 521 5 281 1951 10 215 5 853 15 591 226 16 900 26 533 1952 16 068 4 820 45 923 50 21 906 32 859 1953 18 375 3 078 23 234. 157 21867 33 238 1954 17 893 2 902 8 84 30 20 917 28 865 1955 19 905 3 588 1 7 93 23 594 28 785 r > n o g ** ► 1 O' z ü ■r H hj > r o w 1958 1959 1960 1961 1962 1963 14 447 9 346 4 172 221 171 557 18 541 2 076 21 508 2 772 56 654 646 20 651 4 586 22 923 897 982 489 116 16 416 17 565 463 456 546 26 10 758 II 296 125 86 476 39 15 888 15 888 129 53 4 420 4 376 205 398 92 I 545 1499 43 167 280 1 985 1 886 180 173 41 39 5 647 3 525 14 045 I 117 4 131 69 844 1964 180 1965 41 95 21 55 31 737 21 23 575 76 TOTAL A precios corrientes 158 740 A precios de 1960 212 430 Incluye gastos para h Derla, clon ado con el fuente: Comisión deJ 50 361 247 4 785 1 991 5 288 3 668 75 004 247 5 456 2 282 6 824 5 594 225 080 hospitales, campañas de control de enfermedades y electrificación. índice de inversión pública de la Secretaría de la Presidencia, Dirección de Inversión Pública. Ría Balsas, Gerencia del Bajo Balsas, Departamento de Contabilidad. EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC 1957 Cjx OO CUADRO VI-2 Superficie cultivada en la Tierra Caliente, Michoacán, 1949-1950 ¡1964-1965 Proporción de aumento en la superficie cultivada Cosechas 1949-50 1954-55 Frijol Aíaíza Algodón 587 22 310 12 3 146 256 6 852 7 887 1 100 88 000 500 4 458 1 335 11 661 8 000 1 608 55 292 4 099 8 380 4 552 13 828 10 690 658 79 530 129 131 3 000 553 3 964 2 698 42 317 63 314 105 664 Limón Melón Arroz Ajonjolí Caña de azúcar Sandía Otros TOTAL 1959-60 1964-65 7954-55 1959-60 Distribución relativa de las cosechas (porciento) 796T65 ~1949-50 1954-55 ~ 1959-60 ~7o 64-65 -- 14.2 173.9 87.4 500 - 10.4. 147.8 47.9 20 000 42 000 4 066.7 34 058.3 349 000.0 154.3 166.4 41.7 8 000 2 243.8 42L5 1 678.1 6 000 75.1 101.8 70.2 12 000 52.1 35.5 1.4 12 000 5 000 4 000 —80.4 65.8 466.0 -16.0 4 917.7 409.1 109 500 53.2 149.7 b n.d. 6 229.1 654.7 7-4 0.6 16.2 18.6 1.7 52.1 0.8 7.0 2.1 18.4 12.6 1.5 52.3 3.9 7.9 4.3 13.1 10.1 0.5 18-3 38.4 7.3 1.6 0.2 1.3 0.2 0.2 4-7 0.5 3.8 2-6 n.d. 4.6 2.7 100.0 100.0 1.4 52.7 158.8; IQO.O 100.0 5-5 11.0 11.0 a Incluye maíz y frijoles intercalados, b Menos de 100 hectáreas. fuentes: 1950 y 1960: apéndice i. 1955 y 1965: Comisión del Río Balsas; Secretaría de Agricultura y Ganadería, México. «Mi ó» cuadro vi-3 Superficie irrigada en la Tierra Caliente, Michoacán, 1949-5011964-65 Aumento en la superficie irrigada sobre la de 1949-50 (porciento) Superficie irrigada (hectáreas) 194950 Frijol Maíza Algodón Melón Limón Arroz Ajonjolí Caña de azúcar Sandía Otros TOTAL 195455 mo­ do 196465 195455 195960 196465 0 133 1 107 0 a a 0 2 600 10 204 33 537 12 500 292.5 1 189.9 380.0 12 500 4 099 42 000 4 066.7 34 058.3 34 900.0 256 1 335 4 552 6 000 42L5 I 678.1 2 243.8 3 146 4 458 5 674 6 000 41.7 80.4 90.7 6 852 11 661 13 828 12 000 70.2 101.8 75.1 1 500 1 464 3 331 4 000 -2.4 122.1 166.7 658 79 265 15 368 129 131 1 500 31 515 553 3 964 1 349 0 5 000 2 000 -80.4 65.8 466.0 -16.0 4 917.7 409.1 71 999 89 500 105.1 368.5 - 100.0 6 229.1 654.7 —— --------- r Distribución relativa de la superficie irrigada (porciento) Proporción de la super­ ficie irrigada cultivada (porciento) 1949- 1954- 1959- 1964- 1949- 1954- 1959- 196450 55. 60 65 50 55 60 65 0 16.9 0.1 1.7 20.5 44.6 9.7 0.4 32.4 1.6 4.2 14.1 37.0 4.6 1.5 46.6 5,7 6.3 7-9 19.2 4.6 4.3 0.5 1.7 0.4 0.4 4.8 0.8 5.5 1.9 0 14.0 46.9 6.7 6.7 13.4 4.5 0 11.7 100.0 100.0 100.0 100.0 19.0 36.3 a Incluye maíz y frijol intercalados. 1950 y 1960: véase apéndice i. 1955 y 1965: Comisión del Río Balsas; Secretaría de Agricultura y Ganadería. México. fuentes: 12.1 68.8 0 30.9 60.7 62.5 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0 67.7 75.0 100.0 100.0 100.0 qí) d 18.3 31.2 0 100.0 100.0 100.0 5.6 100.0 100.0 100.0 2.2 50.0 50.0 50.0 482.4 100.0 100.0 100.0 100.0 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC EFECT° DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC Superficie cultivada (hectáreas) 49.8 0 100.0 50.0 6S.1 81.7 i—> co 160 DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPECEFECTO J 161 j : cipal, cubría más de la mitad de la tierra cultivada y se senii . braba en pequeñas parcelas. El ajonjolí tenía el segundo lugar j : por la superficie utilizada, y lo seguía muy de cerca el arroz, . que se había cultivado en la región durante .varias décadas. El 1 frijol representaba una parte muy pequeña de la superficie total, r. Sólo el 10% de la superficie cultivada, durante el ciclo agrí­ cola de 1949-1950 estaba sembrada con cosechas que tenían un La situación agrícola en 1950 • i rendimiento bruto de mil pesos o más por hectárea. Toda esta f tierra estaba irrigada, y en su mayor parte se utilizaba para En 1950 la producción en la Tierra Caliente todavía no había ! ^limones, que requieren poco esfuerzo para obtener una cosecha reflejado la presencia de la Comisión en la zona. Se seleccionó.! [ valiosa. Desde 1943 se introdujeron gradualmente en la región a 1950 como el año base porque, aunque ya se estaban cons-.» í melón y sandía, pero no ocupaban una parte importante de fruyendo varios proyectos, no se irrigó ninguna tierra adicional® ¿la tierra en 1950. En esa época el algodón era un cultivo expe­ hasta 1951 y 1952. Además, la elección de 1950 facilita el usoj rimental sembrado sólo en una parte de la zona. La producción de, los censos periódicos de población y agricultura que pro *® caña de azúcar disminuía a medida que se encontraban usos porcionan la descripción más completa disponible sobre la agri-Stíe caña defe'de azúcar disminuí^ para la tierra irrigada. A pesar de la pequeña cultura de la zona; fue necesario ajustar- estas cifras con loslánás lucrativos&nás nara Lalucrativos H^rr«superficie que hnwrfkL ocupaban, estas cinco cosechas representaban más datos obtenidos durante la investigación de campo? í cultivaron más de 42 una cuarta parte de la tierra TigaX% una proporción simi- de la producción en la misma proporción en que aumentó la producción agrícola en una zona de control. Algunos de los cambios cualitativos en la economía agrícola y en las vidas de los campesinos que resultaron por estos cambios se incluyen para hacer más completa la discusión. . campesinos de sus cion (cuadro vi-3). Alg , irrigada, en tant®osechas principales eran muy bajos Los ce os. Los costos de producción Car L Sa±chSaes no se cultivaba^ aW. En e>a 1950, obtenidos duranteT hrso de uuna investigación de s cuacuiao <»■<. que tas ___ __ A m 1907 rip sunerficiecon cultivada se restaron a losa rendimientos monimonetarios brutos para Jámpo, se restaron los rendimientos año sólo se irrigó el 12% cíe.la • superficie cultivada maí con ma®Ripo, febtener los rendimientos netos (cuadro vi-6)? Las cuatro principa­ y el 19% de la cultivada con ajonjolí. J les cosechas tuvieron todas rendimientos monetarios menores que Aproximadamente el 78% de la tierra se sembraba sólo durantá 00$ 350 pesos: el maíz rindió 97 pesos por hectárea; el ajonjolí, la estación de lluvias (cuadro vi-4), pero, entonces, el cultíy| $06; el arroz, 317, y el frijol sólo 26 pesos? i' Los rendimientos era precario debido a que la lluvia, según cálculos locales, ei' relativamente altos del arroz se debieron a sus bajos costos insuficiente para permitir cosechas lucrativas en más de tres de gultivo, una vez que se había hecho la inversión inicial en la cada cinco años.3 Por tanto, cualquier cálculo de la produedójj preparación de la tierra. Puesto que esta inversión se hizo en debería reducirse en cerca del 40% de la producción potencié |sta región antes de 1940, los costos de cultivo incluían sólo para reflejar adecuadamente su valor esperado en cualquier an| el trabajo de mantenimiento. La cosecha más lucrativa era la sanMás del 70% de'la superficie cultivada se .utilizaba para ciíá tro cosechas que rendían poco en términos monetarios: hijoj , Jp Los costos de producción a que nos referimos aquí y en otras partes maíz» la cosecha este capítulo incluyen la renta de la tierra, la mano de obra y los costos maíz, arroz y aj j ” ' *,e icnuiax ' jonjolí (cuadro Vl-b). |||e materiales, una asignación para el interés sobre el capital de trabajo, ■ Una descripción más completa del proceso de ajuste y de su signifkacW | administración. Los cargos por los bienes de capital fijo utilizados en la SJ '¡¡reducción se basan en sus valores de alquiler. Estas cifras no incluyen, es proporcionada en el apéndice i. s De la Peña comentó que "de 1942 a 1947 Pa región] experimentó aíra pago de impuestos, las tarifas de agua, y las primas por seguros, tal |tno se explica en el apéndice n de la obra de Barkin, Bconomíc Developnativamente un año malo y uno bueno, y antes, un año bueno por tn the Tepalcatepec Rivers Basin, tesis inédita para el doctorado, Vale dos malos durante un largo período, según los campesinos. Para el u® geni fcversity, 1966. de temporal.., hay quienes tienen la opinión de que dos años malos, |* Los campesinos continuaron sembrando maíz y frijol a pesar de sus años normales y un año bueno es la esperanza normal durante un de cinco años". Problemas y posibilidades de la cuenca del Tepalcatepía |jas utilidades debido al lugar predominante que ocupan en su dieta, costa michoacana, México, manuscrito inédito, p. 32. Durante la ínves® teto que temían Jas fluctuaciones en los precios de los bienes agrícolas ción del campo se aseguró que 1950 podía considerarse un buen afú® Kitrolatlos por los comerciantes locales, muchos de ellos recurrieron a los ||tivo$ de subsistencia de preferencia sobre Jos cultivos comerciales. términos de cosecha agrícola. 162 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC EJ día, que dio un rendimiento de 1 952 pesos por hectárea, siguiendo después el algodón con 1421 pesos. Los costos de producción de las cosechas comerciales eran re­ lativamente bajos comparados a los costos similares en otras par­ tes de México, La fertilidad de la tierra, poco utilizada antes, explica este hecho. Sólo se usaban desperdicios animales natu­ rales como fertilizantes. Había pocas plagas o enfermedades de manera que se necesitaban fumigadores o insecticidas, y no había vendedores locales de estos productos. El caballo y el buey, que podían conservarse a bajo costo debido a la abundancia de tierra de pastos, proporcionaban la principal fuente de. energía, No se- v asignaba ninguna renta a la tierra utilizada en las cosechas du- ;? k rante la época de seca, puesto que había mucha tierra vacante < disponible para siembra y pastoreo. ;j • El valor neto de la cosecha se convirtió a los precios de 1960,j f utilizando un índice de precios rurales elaborado por la Oficinaj 5 de Proyecciones Agrícolas del Banco de México (cuadro vi-6.? £ columna 4).6 Después se ajustaron estas cifras para tomar en®:, cuenta las pérdidas esperadas en las cosechas, sembradas sin la®, ayuda de la irrigación (columna 6), Como se explicó antes, se lsupuso que en dos de cada cinco años, no habría suficiente pro-® ducción para garant’zar una cosecha. - jL Las cifras de los párrafos precedentes se refieren a los nueveí principales productos de la Tierra Caliente durante el ciclo agrí^ i cola de 1949-50. Según el censo, el valor de otros productos^ ascendió al 12% de la producción total, aunque la superficie^ r; dedicada a su cultivo representaba sólo el 1.5% de la superficie^ g total en la Tierra Caliente. La mayor parte de ella se ocupói en la producción de frutas (en especial, plátanos, cocos y mangos); que rinden una cosecha de alto valor y ocupan relativamente £ poco espacio. Al ajustar los totales de los cuadros vi-2 y vi-5 utvj ?. que apa<j lizamos los cálculos conservadores de esta producción tendencia^ recen en el censo, cuyas cifras muestran una clara basados et * Debe recalcarse que éstos son rendimientos netos promedio i. Probable los costos y rendimientos calculados de la producción promedio, mente la dispersión de los ingresos reales es muy amplia. Obviamente es fácil obtener las cifras de éstos sin extensivos muéstreos. Sin embaió puede obtenerse un indicio por los resultados publicados por el Banco dal que dan los detalles de sus operaciones relativas al algodón para año 1961’2. El Banco paga los gastos de vida así como otros costos de pij ducción, desmota y vende el algodón, paga los impuestos y regresa? ganancia neta al ejidatario. Casi una cuarta parte de los ejidatarios ti pérdidas netas, la ganancia promedio por hectárea £ue de 1 529 pesos, 8.5% de los prestatarios hicieron una utilidad por hectárea que ex a los 4 000 pesos. T w o & I ÍCTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC © id S' 00 © •0 © c> 00 o © o OO CM OO CM e> © o áá © 5¿ © O O) © © CM ■M4 163 O O © © © o 6 © o © t-4 © CM O CÍ O © © 00 t-H a o o © xH © © t00 © iT 00 © r- © <rC CM r-. id r© © O © O © •tH cd 0O iO 1O © © O © t- © en o un © O t— © t— © t-M O CM © © T1 © © xf no xK ir- xW © £ en © xfí SO © 1^4 M4 O co 00 © *'M r*H Od •3 r~» © cm 00 © ©© íffi nn CM i.'101 G0 t- O0 »~H O CM *-M © CM « O» <3 C 0> <ü © © a» © ift cm d © oo oo es © 00 CM © en © r>. © CM .Rj v: 2 s+-k "tí KJ O ►J *< 0 H Apenaxce CM no © O O fuente: $* © en © CM 164 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPECf EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC Producción agrícola en la Tierra Caliente, Michoacán, 1949-1950 Super­ ficie (hectá­ reas) Rendi­ miento físico (kgfha) Frijola Maíza Algodón Limón Melón Arroz Ajonjolí Caña de azúcar Sandía Otros” 587 22 310 12 3 146 256 6 852 7 887 300 898 2 070 3 951 5 195 I 954 470 TOTAL 42 317 Cosecha 658 79 530 52161 8 082 - Rendimientos monetarios netos en la Tierra Caliente, J ; Michoacán, 1949-1950 Rendi­ Produc­ miento Va ción Precio mone­ (tone­ Miles rural tario (pesosf (pesos/ de ladas pesos métricas) ton) ha) 196 19 994 25 12 430 1 330 13 389 3 704 34 322 638 730 244 288 322 1 530 3 167 1 375 348 400 2 078 348 680 905 . 425 28 400 1460 3 233 452 lor --------- -- 143 6 427 38 4 324 532 ' 4 659 3 352 959 255 240 í Reía- q tino í A 0.7 ?■ '^vseCfiQ 30,7 0.2 í Frijol 20.7 f Maíz 2.5 22,3 * -i 16.0 ■ 6 ■ Maíz y frijol Á i Algodón 4.6 alimón 1.2 : Melón 1.1 (Arroz 1 495 20 929 100.0 valor a la disminución en los productos más valiosos. El pro de estos productos se obtuvo suponiendo (pe sus costos' de ducción eran las dos terceras partes de su valor bruto. Se supuso,¿ además, que la mitad de la superficie plantada con estos pro­ ductos era irrigada, y se calculó que el valor esperado de I? producción sería el 80% del de una cosecha en un buen añ< (cuadro vi-6, columnas 4 y 6). En el resto de la cuenca del Tepalcatepec la agricultura ni estaba tan cómercíalizada como en la Tierra Caliente. La mayo pane de la superficie se dedicaba al cultivo del maíz y su rq dimiento por hectárea era aproximadamente un 20% más baj que en la Tierra Caliente. Según el Censo Agrícola de 1950/ ( 94 000 hectáreas de tierrá sembradas durante el ciclo agrícola. T Para el resto, de la cuenca del Tepalcatepec se usan las cifras del so, debido a que el tiempo y los recursos no permitían investigaciones di: liadas de la' economía agrícola cíe Jos otros municipios. Costos totales pesos / ha Rendi­ mientos mone­ tarios netos pesos / ha (1) w :■ -'1 La superficie del maíz incluía 200 hectáreas sembradas con maíz y fri-j Taña de jol. Los productos se sumaron en las columnas 3, 6 y 7, pero no se toma-’- : azúcar ron en cuenta en los rendimientos físicos (columna 2). b Véase el texto, Sandía fuente: Apéndice i. Otrosa •% 165 CUADRO VlT CUADRO VI-5 D ~218~ 178 W' 191b 290 . 203 1 746 978 1 254 36.3 D 198 219b W 309 P 2 096 1 314” s 923 1 281 26 97 Palor y alar neto de la cosecha espera—— do de la Miles cosecha. Miles de Miles de­ de pesos de Por­ pesos de pesos 1960 ciento 1960 O) (O (0 15 25~ 0.2" 15~ 2 145 3 532 27.6 2 285 17 1 421 397 324 317 3 17 1 249 211 2 173 6 28 2 057 347 3 577 0 0.2 16.1 2.7 28.0 28 2 056 347 3 577 206 1 625 2 676 20.9 1 809 146 96 158 1.2 158 1 952 154 80 254 132 2.0 LO ok.í 7 768 12 792 —_ 100.0 — OTAL » Véase el texto. b Promedio. xz Tierra de irrigación. ~ Cultivo de temporal, =■ Plantación original, tez Cultivo subsecuente. "entes: Columnas: 4 105 10 638 Barkin, Eccmomic Development in Ihe Tepalcatepec River Badn. Cuadro vi-4, columna 5 y cuadro vi-5, columna I. Cuadro' vi-4, columna l X cuadro vi-5, columna 2: La columna tres se convirtió a los precios de 1960 mediante el índice precios rurales del Banco de México, Oficina para el-Estudio de las Progeiones Agrícolas, Proyecciones de la oferta y la demanda de productos rícelas endeMéxico para4,1970 y 1975, México, 1965, cuadro in-34, p. 182. Derivada la columna lMvo Basada en una expectativa de mi 60% de la cosecha en condiciones de de temporal. 166 EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC, EFECTO DE LA. COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC ! Í 167 costo por hectárea que en el -----resto de la cuenca. 1949-50 produjeron cerca de 37 500 000 pesos como valor de la pro­ • j< * A i ilillUJCXl 111’ También inducción a precios de 1950. Esto es, los otros 18 municipios del r arcan que la zona superior estaba afectada por el problema _ _ de _______ ,—uijiciiid ue Estado que se encuentran en la cuenca del Tepalcatepec cul­ tierra agrícola, posible },UllDtfú causas UX de la ; las pequeñas tenencias --de — Ibaja productividad observada en esta zona. diferenciaenen el el tativaban una superficie 120% mayor que la de la Tierra Ca­ baja productividad observada en esta zona. La La diferencia taliente pero sólo producían un 80% más en términos monetarios. «maño de lás tenencias agrícolas es, en parte, el resultado de las ________ ..—ve., c&Liit-ítciu u.e xas ;. rli (• •*»< *** ■»•« ** ’ -— La ganadería era una importante fuente de ingresos para mu­ diferentes características geográficas de las dos regiones. El resto chas personas en ambas zonas.8 Se usaban más de 417 000 hec­ de la cuenca, descrito — .-.U.JU1altitud LLALLA LAVAy y en C el capituloA "está a ---mayor 1„ _ *./- i • táreas para el pastoreo en ] ganado ascendía a ap_____’ mexicana, no se encontraban en las zonas La densidad de 18 municipios -sólo había 268 000 hectáreas de tierra de pastoreo, es más imontañoso que la Tierra Caliente. Lasaltas. grandes tenencias ; la de población también bajas, era mayor en la de la cuenca pero había casi 155 000 cabezas de ganado en esta tierra. El características las regiones antes departe la alta reforma agraria ... .................... «. -------------------------------------------------------------------------®pues el clima '---------------------------era saludable. También hubo presión para que ganado se criaba más.......... extensivamente en mexicana, la Tierran»Caliente, en v ® se repartieran las grandes propiedades que existían una vez que se donde la tierra probablemente tenía menos demanda para otras W promulgó lá reforma agraria. El resultado de la reforma agraria finalidades, que en el resto de la cuenca, en donde las condi- J 7“''“^"' i~ tierra. Había mási®7en la Tierra Caliente fue la división de las grandes tenencias en clones requerían un uso lj-XCVU? — v — — ___ intensivo, ^parcelas individuales, considerablemente mayores que en otras del doble de cabezas de ganado pormáshectárea en, los otros 18 municipios situados fuera de la Tierra Caliente, que en los seis t zonas, debido a que había menos solicitantes de tierra. A algunos cuitó que están dentro de ella. *ir r propietarios __ ______ todavía no se les expropia su tierra5UyEestán En la Tierra Caliente se ocupaba en la agricultura una mayoráftvando grandes proDiedadZs 7n Jerra y este proporción de la población que en otras regiones. En 1950, se- J® T ._•__ ’ ade gnnos ilegalmente, 7 La mayor relación tierra-mano obracasos en la Tierra Caliente tfue también un reflejo de su oferta relativamente gún el censo de población, había cerca de 62 000 personas tra% escasa de mano pe obra. A pesar de los salarios bajando enCUla agricultura y en la silvicultura en la cuenca del 1 notoriamente más altos que preD2LJÜXIU.V ** j Vi<rK 1 _ 'i ’ ’ -- - >1 ________________ “ representaban, aproximadamen-;®valecen en la Tierra Cal’ t d Tepalcatepec (cuadro vi-5), que Uit> te, el 70% de la fuerza de trabajo y el 22% de la población. ^><1^ son casi el doble de JoTd' 1 T°S CUaie ,s se ha informado la Tierra Caliente más de las tres cuartas partes de la fuerza-|B.ciones sanitarias ^.ciones sanitarias y la falta de ÍL_ercomunicaciones .ra í?r*a' ^as nia^as se condó v*i combinaban Jpara hacer el trabajo diario en de trabajo se ocupaba en la agricultura. En los 18 municipios,] ......... la agricultura lo suficientemente restantes era menor la proporción de la fuerza de trabajo dedi-J poco atractivo para crear una <. .. „ ____ escasez de trabajo. Izas activídacada a la agricultura, debido a que la zona tenía grande$| vdes de construcción, de la Comisión empezadas en 1947, agravaciudades que atraían a gran número de personas a los sectores^ hron este problema; la garantía de un salario fijo atrajo a muchas comerciales y de servicios. Sin embargo, la proporción no es tatú apersonas de la agricultura hacia los trabajos de construcción, baja como se podría suponer, debido a la mayor intensidad de, breando de esta manera presiones adicionales sobre la oferta de mano de obra en la explotación agrícola en la parte de la cuenca I-trabajo durante las estaciones de cosecha. La situación mejoró situada fuera de la Tierra Caliente. Si suponemos que toda| jen los últimos años cuando nuevas oportunidades de trabajo en las personas incluidas en estos sectores estaban trabajando sóláj fc agricultura y en la construcción atrajeron a un gran número tierra cultivada (esto es, no trabajaban en tierras de pastoreo 3 Be trabajadores a la Tierra Caliente y redujeron las presiones fcobre la tasa de salarios. en los bosques), entonces cada hombre en la Tierra Caliente taba cultivando un 15% más de tierra que la cultivada por cadj| hombre en el resto de la cuenca. Esta relación sería aún may® ^esarrollo agrícola desde 195(9 si pudiéramos hacer ajustes por el número de personas ocupad» en la ganadería y en la producción forestal. W pomo potaría esperarse, han ocurrido cambios significativos en Además, estas cifras confirman que la agricultura en la Tiera ja economía agrícola de la Tierra Caliente desde la iniciación Caliente usaba la tierra más intensivamente y quizá tenía meng Los errores en las estadísticas oficiales de la producción agrícola páre­ au x o va a t a— * Cf. de la Peña, op. cit.} p. 36 y capítulo vi. _____ _ la aumentar con el tiempo. La subestimación parece ser peor cuando están jbandonando las cosechas de subsistencia por las cosechas comerciales de 168 EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC EFECTO > DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC 1 69 del programa de construcciones para proporcionar irrigación a : una gran parte de la zona. La productividad se incrementó algo y la superficie cultivada ha crecido con rapidez. Las cosechas tradicionales han cedido su lugar a cosechas para exportación *cuyo de divisas valor janual es mayor que los costos totales *del jj programa. En esta sección examinaremos los cambios ocu rridos durante los primeros dieciocho años de existencia de la j Comisión. 1] Aumento de la superficie cultivada e irrigada, - El efecto más directo del programa de inversión de la Comisión fue el j ; -arroz y ajonjolí. Durante los siguientes cinco años, la situación cambió de manera impresionante. El algodón desplazó al maíz i como el más importante de los cultivos irrigados. La producción de melón y de sandía continuó ocupando una octava parte de la í tierra irrigada, al igual que en 1960. f* Una de las cosas más notables del cambio de los cultivos ira \ dicionales a los comerciales en la Tierra Caliente fue su ritmo j lento. No fue hasta el ■ ciclo agrícola de 1962-3 que la proÍL ducción de algodón cubrió más de una cuarta parte de la tierra ; cultivada en. la zona. El cambio se produjo al ser disponibles más créditos provenientes de fuentes públicas y privadas pura de la irrigación. Durante el período de quince años, 1950 J _ .créditos de producción que financiaran las cosechas. Las institu1965, hubo un incremento del 160% de * la tierra cultivada (cua 9 í ciones públicas Tenían fuertes limitaciones sobre la cantidad de dro vi-2). Aún más espectacular fue el aumento de la superficie 1 crédito que podían proporcionar, y sus esfuerzos empresariales irrigada, que en 1965 era un 480% mayor que quince años antes ? *rí-para siembraalentar de cultivos la de exportación de mayor (cuadro vi-8). La zona está ahora menos sujeta a las variaciones M valor estaban limitados por el grado de la cooperación privada. de la lluvia que en 1950, a pesar del gran aumento de la super- j j‘ Una vez que las fuentes privadas de capital de trabajo agríl cola observaron el éxito del aumento de las tierras dedicadas ficie total que está bajo cultivo. A medida que aumentaba la irrigación, hubo una tendencia 1 al algodón y el mercada establecido para las cosechas de melón, gradual a sustituir las cosechas tradicionales con cultivos más x- satisficieron rápidamente la demanda de créditos.10 Los cambios valiosos. Los canales de irrigación<_jredujeron el riego de una Jó oen Tierra Caliente, - los cultivos sembrados en la------------------------ p. por tanto, re­ humedad insuficiente e hicieron más efectivo el uso de nuevos m sultaron ser una función de la oferta de insumos para el proceso ara el proceso insumos aj agrícolas. Sin embargo, este cambio ocurrió con mucha $ de producción. La producción lucrativa de cultivos comerciales que J requiere relativamente cantidades relativamente grandes de capital ..... para?....... cono lentitud como H lo muestra el hecho -- de - __ “Xel maíz aún dominaba ■ requiere?.cantidades la producción de la Tierra Caliente en 1960 (cuadro vi-2). La 5J v prar semillas, fertilizantes, insecticidas y pagar el alquiler de mayoría de los cambios ocurrieron durante la década de los se-'j g maquinaría para trabajar adecuadamente la tierra. La oferta de senta. Hacia 1965 se dedicaba más superficie de tierra para el jX nuevo crédito no1 se dio con la misma rapidez con que se hacía . algodón que para el maíz. Los melones y las sandías represen- 3 disponible nueva-tierra irrigada. El proceso de ajuste fue pro­ taban una décima parte de la tierra cosechada. El maíz disminuyó^ longado porque era poca la experimentación que se había hecho 1 u'- U« 1 1 en importancia relativa, ocupando sólo una quinta parte de KM y el nivel técnico *'-' U'¿I, oíde 1 , UUI Majo U1Cl 11ULJUO de,ia región era tan bnjo tierra cosechada. íoup i™ M que los inversionistas consideraban que los riesgos eran grandes. *^El cambio en la estructura de los cultivos es más notable cuan > En la actualidad los factores de la demanda se han unido a do sólo consideramos la tierra irrigada (cuadro vi-3). Los cambio^ los factores de oferta para determinar la distribución de las co­ relativamente pequeños entre 1950 y 1960 contrastan notoria^’ bechas en la tierra disponible para cultivos. El debilitamiento mente con los observados en los siguientes cinco años. A pesar rdel mercado del algodón, y los crecientes costos de producción del aumento, casi de un 500%, en la tierra irrigada durante lo" fea la Tierra Caliente han reducido los atractivos de este produc­ años cincuenta, no hubo un desplazamiento significativo hadí to. Las ventas de melón están sujetas a la demanda en el mercado los Estados Unidos, y como ésta no ha aumentado significa­ nuevos cultivos; por el contrario, hubo un pequeño aumento relativo en la cantidad de tierra irrigada dedicada al maíz? tivamente durante los meses en que los cultivadores mexicanos me den ofrecer esta mercancía muy perecedera, hay un límite disminuciones significativas en la superficie dedicada al limój YU-UMCuj. --------- — ------ — m mayor precio. Se hicieron correcciones considerables con el fin de llegar., las cifras que se utilizan en esta sección. Véase el apéndice i para la dísd sión de este problema. •“Para una discusión más detallada de la relación entre las fuentes pú­ blicas y las privadas de financiamíento de la cosecha y sus efectos sobre á producción agrícola, véase más adelante la sección “Espíritu de empresa y anzas”. 170 EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPECEFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC 171 sobre la superficie que se puede sembrar, lucrativamente, con ? en donde aún predominan los cultivos tradicionales. Es común este producto. En fecha reciente ocurrieron otros cambios en la y utilizar utilizaraeroplanos aeroplanos para lalaaplicación de los aplicación de insecticidas. los insecticidas, e ■ estructura de la demanda que indican que es probable que haya Se enseñaron técnicas de cultivo a las personas de la Tierra nuevos ajustes en la importancia relativa de los productos en4 Í Caliente > por inmigrantes de otras regiones, incluyendo los que la Tierra Caliente; se tratará de ellos en la parte del presente fueron contratados por los bancos para supervisar el crédito agrí­ capítulo acerca de las perspectivas para los años futuros. cola, Poco trabajo de extensión agrícola fue hecho por las , 2] La estructura estacional del cultivo. El incremento en la .» superficie cultivada fue acompañado por un cambio en las épocas ' . agencias del gobierno, debido a que carecían de fondos y de de cosecha. La disponibilidad de agua para irrigación hizo po­ ¿personal capacitado. Se estableció una escuela de capacitación sible un aumento considerable en la superficie cultivada durante l ^agrícola en la región pará entrenar a los hijos de los campesinos la estación seca. Esto benefició a las cosechas de melones y san­ pn las nuevas técnicas de la administración de las propiedades días, ya que su éxito depende del calor y ausencia de humedad. f agrícolas y en la cría de animales. Estos programas no fueron El maíz, que gradualmente cedió su lugar al algodón en la pan efectivos como la ayuda dada a los prestatarios por los disestación de lluvias, fue sembrado en ambas estaciones agrícolas; ■ tintos prestamistas públicos y privados para proteger sus inven más de una quinta parte de la producción total se cosechó hiones. Pof este servicio le cobran al prestatario mediante una durante la estación seca en 1960 y aproximadamente el 50% en: í “cuota de supervisión” que es usual en muchos contratos de Lcrédito. tu anos recientes, ocurrió un cambio notable en las técnicas 1965 (cuadro vx-4).11 Enproducción, años recientes, notable 3] Cambios en 1la productividad y tecnológicos. Las técnicas lde en elocurrió métodoundecambio siembra del arroz del si...... ..... sistema d; de pr *-1-1i-, ,1 tja. r^o-^í rs/| rv z~fphleste cambio, impuesÓdüaión cambiaronEnoUblemente, durante el periodo, debí-| veteo, *an-ua los campesinos para irrigación por lacomo administración al culltoala de trasplante. Como resultado de _ ClU ItlllL'-J a del distrito de riego do a la intensivo disponi ucaen. la tierra ° irrigada. , T La introducción del mi <p tivotanto más | ara hacer mínimo el uso de agua para la producción de arroz, cultivo del algodón en la región trajo consigo muchos problemas j [los rendimientos aumentaron el doble y el triple sin añadir fer­ nuevos de plagas y de su control, desconocidas en la región | tilizantes. Muchos campesinos se oponían a este cambio y lo hasta esa época. A diferencia de otras zonas cultivadoras de al-1 |siguen aún, debido a los altos costos de producción y al trabajo godón, la Tierra Caliente no tiene un período de heladas durante | ímás intensivo que se requiere para obtener una cosecha. SimuL guuuu, iaxxttnu de vida latente y hongos, quewtáneamente, sin embargo, los mayores rendimientos, que llegan Lx _.v. ____ „ L- i el quer mate a losuninsec s ocho toneladas métricas por hectárea, y los mayores precios porañotanto, tienen efecto acumulativo. Cada año se utiliza ’>™3®|hasta unaj cantidad creciente de fumigantes y de insecticidas para protegetl bara el arroz, hicieron el cultivo de arroz más atractivo para a las cosechas de algodón, limón, melón y sandía. Su uso eoj sanchos. Como resultado, el arroz sigue siendo una cosecha im­ menos frecuente para las cosechas más tradicionales, pero se iíb portante en la región. forma que los campesinos que siembran ajonjolí están recurriendo; y La productividad de la tierra de la región aumentó con los a estos controles químicos con creciente frecuencia. qj Cambios en las técnicas de producción y el aumento en el agua La mayor intensidad del cultivo aumentó la necesidad de U ¿ara irrigación. El incremento en los rendimientos físicos (cuafertilización artificial, que se está convirtiendo en una necesidad Ero vi-7, columna 3) no fue grande en ninguna cosecha, con para cualquiera de los cultivos comerciales; se usa con menos ^cepejón del frijol cuya importancia estaba disminuyendo. Los frecuencia en el cultivo de maíz y ajonjolí. Para la aplicacióií ¿ambíos en la productividad del arroz no aparecieron hasta ,964. Sin embargo, los rendimientos monetarios sí aumentaron, de estos fertilizantes químicos se introdujeron los tractores eí gran escala, así como para trabajar la tierra. Los caballos se4 ^medida que cultivos más valiosos ocupaban una mayor propor­ ción de la superficie total; la parte de la tierra dedicada a las guen utilizando en muchas granjas, especialmente en las zonas cuatro ■ cosechas más valiosas (algodón, limón, melón y sandía) Amentó del 8% en 1950 al 20% en 1960, y al 56% en 1965. 11 Aunque el cultivo del algodón se prolonga más allá de la estación sed ptas cosechas representaban el 20% del valor de La producción por lo general, se cuenta durante' esa estación; generalmente hay suficieid |p 1950 y más del 40% del valor en 1960. tiempo entre una y otra estación para tener una cosecha de maíz, sí-ra í:4] La Tierra Caliente como parte de la cuenca del Tepalcatecampesinos desearan sembrarla. J 1 Ltc Viuuuvk.iuu •_. 1 1 í . , ------ -jy -- ----- ■■ -— X U VU v Í¿ vtl. ■ ¡-^ EFECTO DE LA COMISIÓN DEL 1EPALCA EE1 "EC efecto de la comisión del tepalcatepec 172 173 ' -'1 CUADRO VI-7 Producción agrícola en la Tierra Caliente, Michoacán, 1959-60 Cosecha Frijol Maíz3Algodón Limón Melón Arroz Ajonjolí Caña de azúcar Sandía Otros11 Super­ ficie en hectá­ reas (V Cam­ bio en el ren­ Rendi­ dímiento mien­ to físico 50-60 kg/ha V IV 700 1 049 2 436 5 000 6 956 1 959 685 553 54 898 3 964 9 937 2 698 Produc­ ción ton métri­ cas (4) Rendímiento Precio mone­ rural tario pesos/ pesos/ ha ton W____ (5) 1 669 133 17 57 393 18" 9 985 27 41 900 34 31 600 0 27 094 7 322 46 1 260 700 2 250 800 500 ' 870 1900 882 .734 5 481 4 000 3 478 1704 1 302 30 359 39 392 50 550 2 745 5 465 2 337 5 23 mente 76 000 hectáreas bajo cultivo en los veinte municipios de (la cuenca que están fuera de la Tierra Caliente, durante el ciclo 1959-60, que rindieron una cosecha que valía casi 71 millo■;®'nes de pesos. Esto indicó una disminución absoluta en la su’Wperficie-de cultivo del 19% y una baja del 7% en el valor de la ;®.producción a precios constantes.13 En esta zona más extensa se palor ^«informó que la tierra bajo cultivo representaba el 72% de la " «cultivada en la Tierra Caliente, pero sólo produjo en términos Miles PorMe valor un 30% del de aquélla. Es obvio que en J96O la Tierra de pesos ciento'Caliente dominaba la producción agrícola de la cuenca del Tepalcatepec.14’15 CT____ El número de cabezas de ganado permaneció estable de 1950 “"¡ir "TíoT ja e * n 1960 pimbas zonas. Según los cálculos de la estación expe22.2; 40 175 22 467 12.4'5 j’ipiental de' la zona, el número de reses aumentó ligeramente a 115 000 en la Tierra Caliente y disminuyó a cerca de 150 000 33 520 18.5' 8/H cabezas en el resto de la cuenca.16 En el censo de la tierra Cali­ 15 830 23 572 13.0 ‘ ficada corno de pastoreo aumentó aproximadamente en una 7-P 13 912 fuarta parte durante el período de diez años en los veinte mm Micipíos, en tanto que disminuyó un 7% en la Tierra Cadente. 1 518 •0.8;i Como puede esperarse, el número de hectáreas por cabeza dis21 666 i2.o;> Jninuyó a medida que aumentaba la presión sobre la tierra en sX' 6 304 1'714 181 067 100.0 •—.íz y frijol. Los prod » Incluye 1 603 hectáreas de (ierra sembrada con maíz no a los rendimientos los se han sumado a las columnas 4 y 6, pero ' ~ eos (columna 2). b Véase el texto, fuente: Apéndice i. no fue igualado por: pee. El progreso de la Tierra Caliente puede proporcionará resto de la cuenca. El censo, que sólo r„___________ x cálculo mínimo de la producción en el resto de la cuenca/? gistró rendimientos monetarios por hectárea, en esta zona,’ un 55% con respecto a las cifras ajustadas que se indicó se or vieron en la Tierra Caliente.13 El censo reportó aproximé 15 Esta comparación entre los ciatos del censo y cifras que alteran sí cativamente los datos del mismo es injustificada, en principio. Aunqu evidencia complementaria indica que hubo grandes omisiones en las'-'1 del censo correspondientes a los veinte municipios, como ocurre en la T| Caliente, la relación entre la superficie y las cifras de producción-; las propiedades agrícolas que se incluyeron es, probablemente, un reflej rrecto de la situación real. Si se usaran las cifras del censo para la Caliente en lugar de las cifras ajustadas para los rendimientos moxioentonces los rendimientos en el resto de la cuenca serían aproximadas" el 76% de los de la Tierra Caliente. w El tipo del mecanismo de recolección de datos del censo agrícola de ) es, probablemente, la causa de esas cifras tan bajas. Es poce probablete resultados semejantes a éste sean producidos por falsa de información e los incluidos en el censo, Aunque los totales, probablemente, son bajos, posible que los rendimientos sean representativos de los incluidos en el inso (véase el apéndice i). ,íl Un análisis de los censos agrícolas de 1950 y de 1969 (apéndice i) Sdicó que las cifras registradas en el primero representan mejor los hechos ¡je las del último. Una intensiva investigación de campo realizada en la ierra .Caliente sugirió que es probable que la falta de información sea iyor cuando una región está cambiando de las cosechas tradicionales a ¡echas de mayor precio. Sin embargo, los veinte municipios que estamos liando no experimentaron cambios estructurales en la agríenItura durante baños cincuenta. La única conclusión que podemos obtener de los restillos que se reportaron cuando se les compara con la situación real es é hubo omisiones importantes en el proceso de enumeración que no fuecaptadas por los trabajadores de campo. !5 Estas cifras proporcionan una información suficiente para inferir que las *jdicíones la producción de agrícola no cambiaron notable-mente durante ipeidodo íntcrccnsal en los veinte municipios que están fuera de la Tierra líente. En consecuencia, no se hizo ningún análisis de los cambios que rricron en esta parte de la cuenca para incluirlo deiiLro ■ de los bciicos que se pueden atribuir a la inversión en irrigación de la Comisión, ‘Estos cálculos, disponibles sólo en la agencia local de la Secreta ría de icultura, se usaron en lugar de los del censo debido a que estos últimos tCíiban una disminución, aproximadamente, del 37% en el I mi nievo de ezas de ganado en ambas zonas desde 1950. Eso m> es posible. ’ total 105 664 í 174 EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC i EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC 175 CUADRO VI-8 la Tierra Caliente. Con los rendimientos relativos disminuyendo para la agricultura en el resto de la cuenca, el costo de opor­ : Rendimientos monetarios netos en la Tierra Caliente ___ ! i1959-60 sn ■ * tunidad para la tierra de pastoreo también disminuía y la reía- j Michoacán, ción pastos-ganado aumentó, aproximadamente, una tercera par- y te. No obstante, la cría de ganado seguía usando más super- ( Valor fíele en la Tierra Caliente, en donde había casi un 50% más de :i Rendi­ Valor neto de la espera­ pastos por cabeza de ganado que en el resto de la cuenca. : mientos cosecha do de la La fuerza de trabajo agrícola creció con más rapidez (89%) Cosíos moneta­ cosecha en la Tierra Caliente que la población trabajadora (82%) en •; totales rios netos miles de miles de pesos ¡ha los años cincuenta (cuadro v-5). En el resto de la cuenca, la j; pesos¡ha pesos porciento pesos ocupación agrícola creció a casi la misma tasa que toda la fuer- i Cosecha w (2) 0) (0 (V za de trabajo (30%). La intensidad de la mano de obra en la ■ Frijol Tierra Caliente disminuyó en 30%, debido al cuantioso aumento 1 D 552 en la tierra cultivada (150%) había cuatro hectáreas de tierra í 683» 199 320 0.5 280 bajo cultivo por cada hombre en la fuerza de trabajo agrícola : W 742 en 1960, en tanto que diez años antes sólo había tres. Es pro- j Maíz bable que la intensidad de la mano de obra haya permanecido ; . D 491 constante o haya aumentado ligeramente en el resto de la región,? 595» 139 7 463 12.5 6 291 W pero es poco probable que haya aumentado un 30% como se í 663 551 356 indica en las cifras del censo.17 i Maíz y frijol 571 1.0 343 3 829 1 652 6 772 El que hubieran podido obtenerse rendimientós crecientes a . Algodón 11.4 6 772 Limón 2 269 1 731 14 506 24.3 la vez que se aumentaba la tierra cultivada por persona en laj ¡ 12 635 .Melón 2 222 1 256 5717 9.6 fuerza de trabajo demuestra la importancia de la considerable® Arroz 5 717 I 477 227 3 139 5.3 8 139 inversión de capital en la Tierra Caliente durante este periodo,® Ajonjolí en comparación con su relativa ausencia en otras partes de laj D 592 cuenca. Fuera de la Tierra Caliente los problemas de las pe641»> 661 7 066 11.8 5 123 quenas tenencias agrarias y los bajos ingresos agrícolas se inten-j W 748 sificaron durante el período 1950-60. En la Tierra Caliente, lo$í Caña de P 4 189 ingresos agrícolas netos aumentaron rápidamente, igual ocurriój 7 azúcar 2 541» 204 con la demanda de^ mano de obra, lo cual aumentó los salarios.. 113 0.2 113 s 1 718 No obstante, hubo grandes problemas de crecientes desigualda-j Sandía 2 334 3 131 12 411 20.8 des en el ingreso que acompañaron a este crecimiento. 7 12 411 Otrosa 1 576 2.6 I 261 5] Costos y valor netos de la cosecha. Las necesidades adicio-J nales *® T0TAL de las nuevas tecnologías y de los nuevos cultivos aumen 59 654 100.0 54 085 taron los costos de producción (cuadro v-8). Debido a que ___ __________________________________________________ 1 véase el texto, p — plantación original; S ~ cultivo subsecuente; D -oferta de mano de obra no creció con tanta rapidez como la de® manda de trabajadores agrícolas, se tuvo que traer trabajadores® ^promedio temPoraí: W = Tierra de irrigación. de otras regiones. Se necesitaron salarios altos, durante la épo®yUENTES. Columnas ca de la siembra y cosecha, para atraer a estos trabajadores a lí®T Barkin, Economic Development in the Tepalcatepec River Basin, Apéa­ Tierra Caliente. En esas épocas, con frecuencia más de una ter®dice n. cera parte del año, los salarios en la zona eran considerablemente®-^ Cuadro vi-7, columna 6; cuadro vi-8, columna 1. 0 n rn -'«,3: Cuadro vi-7, columna 1 X cuadro Vi-8, columna 2. Éste es un argumento adicional en favor de la creencia de que el censq®^Derivado de la columna 5. agrícola de 1960 subestimó considerablemente la superficie cultivada y, , sa*^° en un 60% de las expectativas de una cosecha consecuencia, el valor de la producción agrícola. cultivo de temporal. 11 176 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TETALCATEPEGEFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC 177 más altos que los del trabajo agrícola en .otras regiones cerca­ dicó que había gran cantidad de desperdicio en la aplicación nas. Durante la cosecha de algodón de 1965-66, se atrajeron cerca de los fumigantes debido a la ignorancia con que se "hace la producción del algodón no lucrativa”?9 de 15 000 hombres de fuera de la región para satisfacer la nece­ Como sucede en el caso del algodón, la sand.a y el melón sidad de mano de obra. En parte, la oferta inadecuada de trabajadores no calificados tienen altos costos de producción debido a los gastos en el con­ que residieran en la zona se debió a las condiciones .climáticas trol de plagas. ^Durante los primeros años de esta década, los poco atractivas de la región y a la falta de oportunidades de costos de algunos productores llegaron a niveles inaceptables muy trabajo permanente en la zona, que pudieran absorber a los tra­ altos, debido a que los cultivos eran dañados por los insectos o bajadores desocupados durante los períodos de poca actividad. los hongos. Los cultivadores de melón pensaron que la larga La mano de obra agrícola calificada para manejar equipo me­ historia del cultivo del melón en la región pronto llegaría a cánico y para servir como capataces para dirigir a los trabaja­ su fin. Hay un período óptimo durante el cual pueden culti­ dores no calificados era todavía más escasa. Ésta reflejaba una i varse melones y sandías lucrativamente antes que los costos sean falta de personas entrenadas en toda la nación. A medida que prohibitivos a medida que el suelo se hace menos fértil y más aumentaba la tierra irrigada con la terminación de nuevos ca­ caro el control de plagas. Los norteamericanos que estaban en la Tierra Caliente decían que la experiencia pasada indicaba nales y la mejora de los viejos sistemas de irrigación, aumentó, que este período es de aproximadamente siete años. la demanda de mano de obra y la presión para que aumenta-., ran los salarios resultó en mayores ingresos reales para muchos ó Como consecuencia de estos factores, el valor neto de la pro­ de los trabajadores.18 Este problema no era tan agudo, como lo ducción en 1960 indicó una proporción menor del valor bruto había sido en años anteriores, debido a que los trabajadores mi­ i de la producción que la representada años atrás; bajó del 37%, gratorios habían empezado a incluir a la Tierra Caliente en su en 1950, al 33%, en 1960 (cuadro vi-8). La sandía continuó itinerario durante Las épocas del año que sabían habría demanda Tiendo el cultivo más lucrativo, seguido por el limón, el algode mano de obra no calificada. Es a través de este mecanismo, Ldón y el melón (cuadro vi-8, columna 2). que un gran número de trabajadores subocupados en México Ó Se llegó al valor neto esperado de la producción, según los puede encontrar suficiente trabajo y aliviar así la presión sobre : cálculos hechos, de obtener una cosecha lucrativa en tres de cada I' cinco años en tierra no irrigada (cuadro vi-8. columna 5).20 El los salarios durante los períodos de gran demanda. El mismo incremento de la tierra cultivada explica parte de : aumento en el valor neto de la producción sobre el ciclo agrí­ los altos costos de producción. El precio de la tierra aumentó cola de 1949-50 fue la base para los cálculos de los beneficios a medida que la irrigación se hada generalmente disponible. Las ¿agrícolas netos que surgen de la disponibilidad de agua para SdíTirríJ r-íAv *en la zona (cuadro /« * - — —vj 9\ tierras ociosas que podían cultivarse casi desaparecieron. Se oh.®irrigación servaron grandes diferencias en las rentas entre las tierras irri-.^l ch<. cifras de producción se refieren sólo a los nueve cultivos q||. FEstas gadas y las no irrigadas, y se hizo cada vez más difícil encontrar ! ^principales en la Tierra Caliente durante el ciclo agrícola de RCÍKü fin. tu...-. ------ -------tierras no reclamadas sin irrigación por las que no tuviera que Sí 959-60; se hizo un' 'í" pagarse renta, o imputarse al costo de la ¿reducción. “ región usando .!E?e Paralas .,los otros P^uctos que se cul||ivan ~enu. la cifras preliminares del censo agrí.~ • rult¡vo nevó a deseconomías ex-jfcola de 1960, Se informó que estos productos cubrían el 5% de La creciente superficie *medida superficie quecultivada el aumento:® y representaban el 10% del valor bruto ternas para los cultivadores e a g la producción de la región. Al igual que en 1950 estos proeg los ínsectos en el número de mtensi a . -ones aéreas para controlar las®luctos fueron, fundamentalmente, frutas y también los más por unidad de tierra. Se ajustaron los cuadros vi-2, plagas. El aumento de ios eos os P ,nivor presión sobre el®v3, vi-4 y vi-7, como antes, añadiendo las cifras del censo a las de estas fumigaciones aereas ejercieiun aqt¿v0 con ej fin® JL [” 1 -'- campesino para que mejorara SUS t cuicas de obtener una cosecha lucrativa. La 1-------------------- lln.,Á o rfacnrrmri exnerimental F Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas, Secretaria de Agricub 'JaBiia y Ganadería, El cultivo del algodón en la cuenca del río 'Tepalcatepec, Michoacán, México, 1963, p, 8. 30 Al igual que para 1950, los campesinos afirmaron que la cosecha de reares” de alcodón ganaron hasta® ?/ ., ®&960 era buena. el cuádruple del salario diario normal en la región. , Durante la cosecha (le I9oj-nb, ’re i f 178 EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC;;EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC I 179 cifras de producción y de superficie ajustadas, ya discutidas. En perficie y el ajuste concomitante en la composición de los proel cuadro vi-8 se hicieron ajustes suponiendo que las tres cuartas ;■ ductos representó la mayor parte del aumento. Ambos factores partes del valor bruto de los productos adicionales representa­ ; explican el 67% de la mayor producción,23 en tanto que el ban costos de producción y la mitad de la superficie estaba irri­ ' f aumento en los precios que reciben los campesinos explica aprogada y no sujeta a las variaciones en la lluvia. ’ rimadamente un 8% del cambio y el incremento en los rendi­ 1 6] Producción agrícola neta. Con el fin de hacer un juicio mientos físicos, el 5%, Los tres factores se influyen mutuamente sobre el desarrollo agrícola, es necesario medir el valor de la para inducir un aumento adicional en la producción durante producción después de restar sus costos, Esta sección presenta | la década, que representó aproximadamente un 20% del cambio el valor neto de la producción, en tanto que la siguiente, los j total, La mayor parte de esta influencia mutua (15%) se debió desarrollos futuros en la región, como preámbulo para el cálcu- « al cambio en la composición del producto hacia productos cuyo lo de los beneficios netos obtenidos de la producción agrícola rendimiento físico aumentó, atribuible al programa de inversiones de la Comisión. Estas mejoras fueron acompañadas por cambios similares en el La presentación cuantitativa en la evolución de la estructura ; valor neto de la producción agrícola (cuadro vi-9). Durante los agrícola de la cuenca, desde la creación de la Comisión del años cincuenta, el valor neto del producto aumentó a más del Tepalcatepec, indica dos cambios considerables en la economía Jacuádruple, Se espera que durante la década de los sesenta se haya agrícola de la Tierra Caliente hasta 1960: un incremento del ¡ : duplicado. La medición de este progreso depende de las cifras 150% en la superficie cultivada y del 108^ en el rendimiento “ ^discutidas en la sección anterior. La información de cuatro años monetario bruto por hectárea. La producción aumentó 412% base, 1950, 1955, 1960 y 1965, proporciona un fundamento para durante la década final de desarrollo en la Tierra Caliente. la determinación de la cantidad de superficie cultivada durante el Este progreso es el resultado del aumento en la superficie, del ^período (cuadro vi-2 y vi-3, y el apéndice n); las proyecciones cambio de los cultivos tradicionales hacia las cosechas comerV enars icwo hicieron con la ayuda de la información resumida se *cíales de exportación, del incremento en los rendimientos físicosllPy 1970 fen la siguiente sección, Se combinó la información sobre las con­ y en los precios de algunos productos. La disponibilidad de irri- ® diciones del mercado con datos sobre los costos para obtener los gación facilitó el aumento de la superficie cultivada y el cambio ¡cálculos de ganancia y determinar el valor neto de la produc­ 1 hacia productos más valiosos. Los cambios tecnológicos, alentados i ción agrícola de ja región (cuadro vi-9, columna 2). No se in­ por la irrigación, permitieron el uso más efectivo de insumos J cluyó la producción agrícola del resto de la cuenca, como se modernos, como fertilizantes, insecticidas y equipo mecánico, para 1 .explicó antes, porque parece que no hubo importantes cambios compensar, e incluso superar, la influencia negativa de la dismi'.j 23 $ue nucíón en la fertilidad del suelo y el efecto creciente de las¿j| fa.-..puedan atribuirse a la intervención de la Comisión. plagas en los rendimientos físicos. No obstante, las tierras irri-j Ifonceptualmente los términos de la identidad representan: gadas necesitaban insumos mejorados y los campesinos debíanj 11] El incremento en la superficie multiplicado por el cambio en la comresponder a las condiciones del mercado si se quería realizar elj hasición de los productos; 2] los cambios en los precios; 3] los cambios potencial. 7¡¡án los rendimientos físicos, y 4] la interacción entre todos , t _j -------------------S esos factores, producción agrícola se desagregó;^ |gradecemos El aumento en el valor de la aaloslos doctores ShaneShane Hunt y Hunt WalteryHettich padecemos doctores Walter Hettich su ayuda en 21 El cambio en la su-| |le MÍA ÍÍYllAfnnr. enfoque. obtenido, v para determinar cómo se había luuu P Por desgracia, no fue posible separar la influencia del cambio, en la Imposición del aumento en la superficie, porque las dos se multiplican la identidad presentada en la nota anterior. fe” Como se dijo en el capítulo anterior, la Comisión invirtió en irrigaSÓn en la parte noroeste de la cuenca, en donde las cosechas importantes fe el trigo, garbanzo y la caña de azúcar. Aunque no se hizo ningún |tento para incluir los beneficios provenientes de estas inversiones en el |tal, los cambios en la Tierra Caliente superaron considerablemente los 2 (PWAYAA + YmAPAA 4- AmAPAY 4- APAYAA) | | la parte noroeste de la región, El cuadro vi-7 es, por tanto, una subestilición de los beneficios derivados de las inversiones en irrigación de la 1 r ------------- - -------------------------------------------------------------------------------------V P V.„A.. ^misión, debido a a este olvido; aunque se pensó que esto tendría una fluencia mínima en los resultados, las conclusiones cuantitativas sobre el bruto 21 del incremento —LaLjdesagregación Ü*Lganv UCSiig 11 UL., ----- ----* en la producción se logró utili-'': < * .'HK zando la siguiente identidad: (A ™/ Asuperficie, P — precio, * Y ™ rendimien ■A tos físicos, S = suma). SAs ff 2AA SAsA -------2 PsoY«jv ( Aw------- j | 2 Abo 2 PMYg0A«, á a 2 A^y ---------------- - ---------------- — I 4" ■" * —1 - * — 1 4 2 PmYmAso-------------------------2 PeAboAbo R 1 180 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC El valor neto de la producción agrícola aumentó rápidamente de 1961 a 1962, reflejando el cambio hacia el cultivo de algo­ dón. Antes hubo una tendencia continua hacia el ascenso en el valor neto, con un aumento repentino en 1957. Hubo otro aumento significativo en 1965 cuando comenzó a reflejarse la influencia de la nueva técnica de cultivo de arroz. La dismi- . nución en el producto agrícola neto, proyectado para el resto ; de la década de los sesenta, refleja las malas perspectivas del , mercado para el algodón y el melón, a ellas nos referiremos i ahora. 7] El futuro de la Tierra Caliente. La historia reciente de la | Tierra Caliente se caracteriza por el carhbio de las cosechas tra- | dicionales a cuatro productos comerciales importantes: algodón, 4 limón, melón y sandía. Esta orientación de las empresas agrí- j colas ha hecho de la Tierra Caliente uno de los principales : contribuyentes a las exportaciones mexicanas de algodón y melón., í Las perspectivas para estas cosechas, o para otras que pueden 1 ocupar su lugar,- determinarán si la región continuará prospe- 1 raudo, se estancará ó decaerá. El algodón es la cosecha de exportación más importante de i México y, en la actualidad, es la principal cosecha de la Tierra 1 Caliente. Prácticamente no se conocía en la cuenca cuando la | Comisión empezó sus operaciones allí, en 1947, aunque los habí- | tantes de. la región lo había cultivado en tiempos prehispánicos.-4 i La superficie cultivada con algodón aumentó de 12 hectáreas,, en 1 1950, a 4 100 hectáreas, en 1960, y después aumentó rápidamente I a 42 000 rectárea-s, en 1965. Varios factores limitaron la expan­ sión de esta importante cosecha: La disponibilidad de créditos para cubrir los costos de producción es limitada, los costos del cultivo del algodón aumentan continuamente debido a la cre­ ciente necesidad de control de plagas, las cambiantes condiciones del mercado mundial han hecho que su precio baje, y la bús-, queda de nuevos mercados se ha hecho más difícil. Los dos pro-, blemas que mencionamos primero se discuten en otra parte, pero el último nos interesa tratarlo ahora. El debilitamiento del mercado mundial se debe a un crecí-,, miento más rápido de la oferta que de la demanda y a un cambio J en las políticas de mercado de los norteamericanos. Como re< sultado, el campesino mexicano no recibió un aumento en el; 181 CUADRO VI-9 I Producción agrícola neta en la Tierra Caliente, Michoacdn, 19504970 Año en que terminó la cosecha 1947 1951 1952 1953' 1954 1955 1956 1957 1958 1959 1960 1961 1962 1963 1964 1965 1966 1967 1968 1969 1970 j | Superficie cultivada (hectáreas) ~~42 317 42 842 45 350 51625 55 625 63 314 67 300 76 150 82 600 92 450 105 664 106 600 107 400 106 500 107 700 109 500 109 000 103 000 108 000 114 000 109 000 Producción agrícola neta 10 637 11 375 13 200 15 777 17 653 20 804 26 994 44 622 47 429 53 784 54 483 68 851 91 578 103 971 108 990 139 064 138 218 131 039 134 918 122 003 113 743 1 q Mukntk; Apéndice n. ;i ; rante la estación de 1965-66 se combinaron precios mundiales en ; ^disminución,25 costos crecientes y presiones políticas en la Tierra ■4 | Caliente para ejercer presión contra el gobierno, que proporcio4 i nó subsidios para algunos campesinos fijando los precios pagados 4 - por el Banco Ejidal a los ejidatarios por encima de los precios 1 ■ mundiales prevalecientes.26 | Esta situación ha hecho surgir un grupo de personas que i argumentan que el cultivo del algodón debe desaparecer dede la parecer la ITierra Caliente. Hay quienes afirma an que nunca se debió es.timular el cultivo de algodón en la ~ y que cuanto antes .... i zona .-desapare proyecto podrían haber sido más favorables, incluso si se hubieran adjuiitadoífcg^. esos datos. 28 Aguirre Beltrán, op. cit., p. 146, W 55 Banco Nacional de Comercio Exterior, Comercio Exterior, noviembre Je .. 28 El Día, México, II y 22 de enero de 1966. 182 EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC ; 183 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC se cultivaba adecuadamente con irrigación para complementar las y chatamente después, de la cosecha. El único mercado, hasta ahora, lluvias, el campesino podía obtener la misma ganancia por hechan sido los Estados. Unidos y el Canadá; durante el período J tárea con una inversión menor de la mitad de la requerida por .% p enero a abril México abasteció casi todos los melones que se el algodón. Este grupo, compuesto, principalmente, por agróno- v’ consumieron en los Estados Unidos?8 La - demanda, según la mos y personal técnico que trabaja en la región, también indica ¡,gente de la Tierra Caliente, fluctúa con el clima y el número que la cría de ganado puede ser un importante potencial para ;, de convenciones en la ciudad de Nueva York. - ---------- — La fierra Caliente la tierra. Nos volveremos a ocupar de ambas sugerencias dentio.. es la región productora de melón más importante de México, de poco, "■ Por otra parte, hay un número considerable de personas queq aunque -su participación en el mercado está disminuyendo a 'tienen intereses creados en la continuación del cultivo del algoM medida que los cultivadores de melón se trasladan a nuevas dón. Los más notorios son los propietarios de las despepitadoras? zonas. En 1963, la Tierra Caliente representó cerca de las tres de algodón, de los cuales se informa que obtienen grandes ga-u cuartas partes de, las importaciones norteamericanas de melón nancias por sus operaciones, incluso cuando las condiciones de j cantalupo, pero hacia 1965 representaba sólo0 el 60% de las exhor­ mercado mundial no corresponden a sus esperanzas. Junto a ellos . taciones mexicanas a los Estados Unidos? Con frecuencia" los están los comerciantes que venden y dan servicio a la maquinaria j precios fluctúan mucho para la cosecha de exportación; durante agrícola, proporcionan fumigación aérea, y. distribuyen semillas,q una cosecha reciente, el precio de una fruta de la misma calidad fertilizantes y otros insumos. Estos grupos tienen gran influencia? ■variaba entre 60 y 20 pesos por cesto. Este precio mínimo, sin sobre la producción de algodón porque son fuente principal de< embargo, es superior al precio interior que, en su punto má­ es de, aproximadamente, 20 pesos por cesto para el cam­ créditos de producción cuando los campesinos no lo pueden ob- « ximo, pesino?0 tener de las fuentes bancarias. También cultivan superficies con­ Con estas condiciones, hay un incentivo fuerte para controlar siderables de tierra bajo contratos de arrendamiento. ~ -y & los costos debido a que los cultivadores, incluso los abastecedo*Es | poco Es poco pivodoie 4UC probable que se continúe durante muchos años el- Fies, tien tienen poca influencia sobre los precios en el mercado?1 actual programa de subsidio para el algodón, y los productores^ , ---, estos productores no tienen la influencia política sufide algodón de alto costo en la Tierra Caliente tendrán que en-i * d C!^nte, obtener un programa gubernamental de estabiliza¿ contrar sustitutos lucrativos. El principal obstáculo que retrasa t prod a, n 13 dito dito para para remplazar remplazar los los fondos fondos que que actualmente proveen lasJ l*> gteso en la Tterra Caliente vanan mucho y esto ir plantas despepitadoras. Por tanto, el gobierno u otros intereses• ÍS Cf. Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, Agricultura! privados tendrán que proporcionar crédito agrícola adiciona^ y F.Marketmg Service, Freth Fruit and Vegetable Shipments (ams-36, 1968'1 ! W™nSton’ Government Printing Office, mayo de 1964, pp. 19-20. alguna ayuda técnica para facilitar el cambio, si se quiere Hh - Departamento de Comercio de los Estados Unidos, Oficina del Censo terrumpir el programa de subsidios con un mínimo de pertur U S. Imports of Merchandise for Consumption, Washington, Government bación. .Prmting Office, abril de 1963 y abril de 1965. La experiencia reciente sugiere que habrá una disminución gnw Hay dos precios para el melón, que dependen del mercado en donde dual en la ^superficie sembrada con algodón a medida que y se venda. Los precios interiores son menores que los precios de exportación, ■y la calidad de la fruta para el consumo interior es, por tanto, inferior. productores de alto costo cambian a otros productos, Duran los cinco ciclos agrícolas que siguieron a la estación de 1964-5 J \ Los productores' tienen poco control sobre dos precios del melón debido a la organización del mercado. Los campesinos individuales tratan de ob­ superficie sembrada con algodón probablemente ha disminuí^ tener crédito del prestamista-distribuidor, intermediario entre los productores 27 hasta, aproximadamente, 30 000 hectáreas. y los compradores. Hay, aproximadamente, diez distribuidores que compiten La producción de melón y sandía también se enfrenta a., entre sí bajo condiciones de competencia imperfecta; cada uno tiene que considerar su efecto sobre la oferta total, pero ninguno puede controlar la *mitaciones impuestas por la demanda del producto. Debido pantidad total de melones en el mercado, su naturaleza perecedera, estos productos deben venderse • Los cultivadores ven al mercado como sí fuera perfectamente competitivo i « Esta reducción en la siembra de algodón probablemente será ito ñada por una disminución en la superficie , total cultivada en la región^ como por un retorno a las cosechas tradicionales. !La y „ x íiaoia CUlulcq demanda es una función retrasada del equilibrio del año anterior y la Oferta depende de la cantidad de crédito disponible. Los procesos del merado ' < con frecuencia, resultan en un ciclo de "telaraña”, cuyas fluctua­ ciones- son controladas por los distribuidores en competencia imperfecta. 184 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC 185 sido desastroso para algunos cultivadores. Actualmente se habla • rarse las técnicas de cultivo mediante la observación, la experi­ de trasladarse a otras zonas en donde el control de plagas sería mentación y la instrucción por agrónomos en el uso del agutí y . .la aplicación de “'fertilizantes. ' menos costoso, y de una estructura de cultivos rotativos, basada en un ciclo de siete años para reducir, a un mínimo, el daño t El ajonjolí és otra cosecha que puede tener relativamente un por las plagas. El resultado probable de las actuales tendencias . ...cambio importante. Cuando el campesino acepte nuevas técnicas a la consolidación será una pequeña disminución de la su per- ■: i para esta producción, y esto empieza a ocurrir, los rendimientos fície cultivada, unas 10 000 hectáreas para melón y sandia dentro 1 podrán aumentar de una a una y media toneladas por hectárea. de la Tierra Caliente, y un sistema de rotación dentro de la 1 También han aumentado los precios rurales para el ajonjolí, por zona. A la vez, habrá un aumento en las nuevas zonas produc- ; tanto la cosecha se hace cada vez más atractiva. Los funcionarios toras de melón, a medida que se localicen nuevas zonas ade- ... del Departamento Agrario creen probable que hacia 1970 se siemcuadas, se construyan las carreteras necesarias y se realicen expe- • ) bren 20 000 hectáreas con ajonjolí, y que una gran parte de esa tierra será irrigada. rimemos agrícolas. Hay un gran mercado potencial para estas ! Nos queda por discutir un aspecto del panorama agrícola: la frutas dentro de México, aún no desarrollado, porque la fruta disponible interiormente consiste en frutas rechazadas para la ■ ganadería. Se dijo antes, en este capítulo, que el número de cay bezas de ganado, en la Tierra Caliente, no varió durante el producción de exportación. En la actualidad, el Banco Nacional de Crédito Ejidal esta ...período 1950-60, aunque la superficie dedicada a pastos dis­ estimulando la producción de limón, como resultado de un con- ■ minuyó, al aumentar la demanda de tierra para cultivo. Esto no trato, a largo plazo, para la exportación de productos del limón ; continuó, porque, comojndicamos, la cantidad ele tierra cultivada recientemente firmado por la fábrica procesadora del Banco. La ; no aumentó mucho desde 1960. Por el contrario, posiblemente producción era muy reducida y sólo se estaba usando una pe­ ¿ hubo algunos pequeños aumentos en las tierras de pastos al hacerse más común la ganadería intensiva, queña parte de la capacidad de la planta antes de la firma del nuevo contrato. Los funcionarios del Banco esperan autorizar L Actualmente, dos bancos gubernamentales de crédito agrícola créditos suficientes para aumentar la superficie dedicada, exclu­ estimulan el desarrollo de una técnica intensiva para la cría de sivamente, a los limoneros hasta 10 000 hectáreas irrigadas, en el ganado sobre una base “piloto”. Sus operaciones, en conjunto, no implican a más. de 5 000 cabezas de ganado, pero hay gran espe­ futuro próximo. Probablemente la superficie cultivada con arroz no se incre­ ranza de que estos proyectos alentarán empresas similares por 1■ mentará en su actual nivel de 12 000 hectáreas durante los pró­ otras personas. Los bancos financian el mantenimiento de tierras ximos años, El requisito de que todo el cultivo se haga con el -j de pasto artificial y la mejora del ganado. Los resultados prelisistema chino o de trasplante y la cantidad limitada de agua j * minares confirman las esperanzas que los bancos tenían en esíc disponible para la producción desalientan su'expansión. El cam-t proyecto e indican que las ganancias netas por hectárea, derivadas bio hacia el sistema de trasplante era necesario por las crecientes) y de la ganadería, estarán entre 1 000 y 3 000 pesos. A pesar de demandas de agua para irrigación (el nuevo sistema í estos comienzos auspiciosos, es poco probable que en el futuro ---------- hace unj — ■ j. *i,|...incluso, próximo con haya esteun método cambiodesigmificativo uso más eficiente del agua), pero, ) en este tipo de actividad. cultivo el arroz requiere, aproximadamente, tres veces más agua;' I-Tal programa requeriría una gran inversión en capital fijo y --------- '____ _ ______ > Jlargo, _ 1de ges- . t , las otras cosechas. Como resultado, la administración que L._ _ delj ^de operaciones, . f así como un período, relativamente , x distrito de riego tiene pocos deseos de permitir una expansión^ ración antes de que la inversión produjera un rendimiento. La experiencia reciente indicaj El efecto combinado de todas estas tendencias adicional del cultivo de arroz.32 es que habrá utos del arroz hasta un proine-^ |tpocos cambios en la variedad de productos sembrados en la que pueden elevarse los rendí' m algunos rendimientQ^ Tierra Caliente durante los próximos Adiez años. Pa dio de cinco toneladas por hectárea, con Para época, —aesa época producirán al mejo^ i'habrá más de 80 000 hectáreas sembradas con algodón, limón de ocho o más toneladas; estos cambios se u arroz, ajonjolí y sandía. » La administración del distrito de riego controla la . siembra del arro$ p.: Ciertamente, el maíz no desaparecerá de la escena, y podría y otros cultivos otorgando permisos para cosechas específicas después que yTaber pequeñas cantidades de nuevas cosechas, en especial cogepagan las cuotas por el agua. Las tarifas del agua para el cultivo de anyH Fíales de alto precio y un interés renovado en el potencial de son tres veces más altas, por ciclo agrícola, que para las otras cosechas. ■ s. -------------------- - ---------------- r .------------------- ---- _ 1___________ _________ _____ ____________ _____ _________________________________________ _________ _________-______ L 186 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC : 187 sorprendente que las personas que controlan el crédito no sólo la región como productora de frutas. Pudiera, incluso, ocurrir • . pudieran determinar qué cosechas se sembrarían, sino también una disminución en la superficie cultivada, pero sería, teladquién las sembraría. vamente, pequeña y provendría de las partes no irrigadas de la . ; En esta sección estudiamos la influencia del crédito en el seczona. Se calcularon los beneficios provenientes de la irrigación ; ■ tor agrícola, durante sus años iniciales de crecimiento, agrupando en los años futuros sobre la base de este análisis y se añadieron ¿ ■ a los prestamistas según los motivos que tenían para proporcíoa tos que se observaron realmente (cuadro vi-9) para un cálculo ; i nar el crédito. Después de describir las actividades empresariales de los beneficios totales provenientes de la disponibilidad de ' ; de las instituciones bancadas públicas en la región, estudiamos agua para irrigación en la región. •J ■ las de lo.s cultivadores norteamericanos de melón. Otro grupo que entró tardíamente al panorama son los intereses de las desEspíritu de empresa y finanzas f pepitadoras privadas de algodón, ansiosas de asegurarse un abas| tecimiento continuo y estable de algodón en bruto, de manera Los desarrollos que acabamos de describir estuvieron fuertemen- : t que sus otras inversiones fueran lucrativas. Un tercer grupo, los te influidos por la disponibilidad de crédito agrícola en la Tierra j • comerciantes locales, estaba interesado en aumentar sus ventas de Caliente. Las instituciones, los negocios y los individuos que ; x abastos agrícolas y de otros bienes, en tanto que otro grupo, los proporcionaron el crédito agrícola han jugado un papel impor-.i .? bancos privados, participó en el financiamiento del desarrollo agrítante en el progreso de la región y en la deterininación de los 1 cola, como una extensión de sus fundones normales de préstamo. beneficiarios del programa de inversión pública. La mayoría de : En la Tierra Caliente funcionan dos de los bancos de crédito la producción agrícola comercial no puede continuarse sin la í agrícola del gobierno y han tratado de cumplir una función emayuda del crédito para gastos inmediatos, como semillas, fertili- presarial además de su función más tradicional de canalizar zantes, maquinaria y mano de obra, incluso si el campesino puede ■ i fondos a los ej i datar ios y a los pequeños campesinos con tierras sufragar sus propios gastos de subsistencia durante la estación 7 privadas. Al primer grupo lo ayuda el Banco Nacional de Créde crecimiento de la cosecha. ? dito Ejidal (Banco Ejidal), que es, prácticamente, la única fuenLo notable del desarrollo agrícola en la Tierra Caliente es la ■ ; te de crédito para el sector ejidal que, bajo la ley, no tiene el importante función que tienen los abastecedores de crédito en j la determinación de los productos introducidos y en la época j derecho de amortizar su tierra con el fin de obtener el capital 7 de trabajo necesario para la producción de cosechas comerciales, en que se hicieron los cambios. Varias fuentes de crédito tuvie-'¡ ron este papel por distintas razones que estudiaremos posterior-J i Otro banco, el Banco Regional de Michoacán, ayuda a los pe­ mente, pero al evaluar el desarrollo agrícola es importante ,ób- ; queños campesinos no ejidatarios en la Tierra Caliente; es una ^sucursal del Banco Nacional de Crédito Agrícola. servar que la iniciativa para las innovaciones en la Tierra GaU líente con frecuencia ha sido asumida por personas de fuera! í El Banco Ejidal presta dinero para cubrir los costos de proque tratan de aumentar la contribución de la región a sus ac-| Inducción y de vida y mantiene una constante supervisión sobre Edos prestatarios. El banco ha estado operando en la Tierra Ca­ tívidades comerciales, más que por los campesinos de la zonaj La experiencia pasada sugiere que cualquier grupo que deseaf ndiente durante más de dos décadas, localizándose sus operaciones introducir innovaciones en la región, por lo general tratará do Bmás importantes un Lombardía y Nueva Italia, ejidos coope­ rativos, en tierra que fue de los Cusa i. Experimentó grandes pér­ convencer a los campesinos para que acepten un crédito paráj didas debido a fracasos len las cosechas y mala administración sembrar nuevos cultivos. -4 Bdurante sus primeros quince años en la región; como resultado, Sin embargo, el crédito no sólo es importante cuando se estáijj Kse ha hecho más selectivo en sus operaciones de préstamo. Se cultivando nuevos productos. La mayoría de las cosechas lo rgi Retiró de varios ejidos a consecuencia de fuertes pérdidas y sólo quieren en cierto grado y la facilidad de acceso a la ayuda ffil ■foresta a los campesinos que han tenido más éxito en las comu­ nanciera es un determinante primordial de la prosperidad de3 nidades en que actualmente trabaja,33 Las operaciones del Banco. campesino. En un país en desarrollo quizá el crédito sea escasea e incluso más en una región próspera como la Tierra Calienta MÍ*Muchos de estos préstamos apoyaban la decisión política de ayudar a en donde las demandas de crédito aumentaron, dramáticamej|l Kps ejidos colectivos de Lombardía y de Nueva Italia a cualquier costo. Estos Kxpcrimentos en la agricultura comunal eran los ejemplos de lo que podía te, en un período muy corto. Debido a esta situación, no 188 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC Ejiclal se han concentrado en el maíz, algodón, limón y arroz; también ha jugado un papel empresarial importante para es­ timular la producción de algodón y reconstruir los huertos de limoneros que habían empezado a decaer. La influencia del Banco Ejidal fue de gran importancia para estimular la expansión de la producción de algodón en la Tierra Caliente. El banco construyó una planta despepitadora de al­ godón en 1956 con componentes usados de otras plantas, que habían dejado de trabajar en otras partes del país, y empezó a financiar la producción de algodón. En 1956, proporcionó crédito para 197 hectáreas de algodón34 y aumentó sus opera­ ciones a más de 2 000 hectáreas en el año siguiente.35 Hacia 1960, había aumentado aún más sus operaciones para cubrir más de 3 000 hectáreas. En 1964, prestó dinero para casi 12 000 hectáreas (cuadro vi-10) y estaba operando una segunda planta despepi-, tadora con maquinaria de alta velocidad para procesar la mayor producción; esto representó más de una cuarta parte de la su­ perficie sembrada total. El Banco Ejidal supervisa el cultivo de algodón desde las pri­ meras etapas de preparación de la tierra hasta la cosecha y pro­ cesado de los productos. Proporciona crédito en efectivo para cubrir los costos de producción directos, tales como el pago a los peones agrícolas y a otros empleados y los gastos de vida de la familia del campesino, durante la estación de crecimiento. Pro­ vee el resto del crédito en especie en forma de productos qub micos y semillas, maquinaria rentada y servicios, como ayuda técnica y despepitado del algodón que después deduce del valor de la cosecha que vende en el mercado mundial, junto con el( algodón de otras zonas productoras, como agente de los pro-.; ductores. Así el cultivador obtiene ganancias por la producción •• y procesado de sus productos y no tiene que pagar a un in-’ tcrmediario por su disposición, ya que el banco sólo carga lo$| costos incurridos en la administración de sus servicios más unj cargo, por interés mensual, del 1%. .ó La importancia del banco en el financiamiento de la cosecha-^ de algodón está no tanto en el volumen de sus operaciones, que| hacerse por medio de la reforma agraria. Este apoyo se ha hecho lectivo en los últimos ocho años. El banco también se retiró de dos en donde las políticas de préstamo fueron influidas, en un por la política. Su actual administración parece tratar de manejar sobre una base de obtención de ganancias, aÁ Banco Nacional de Crédito Ejidal, S. A. de C. V., Boletín de Especiales, México, viii, 88, 15 de mayo de 1957. 30 Id., ix, 130, 10 de .julio de 1958. 189 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC más otros ¿O principio al band|l TÍ .. CUADRO VI-10 Crédito agrícola en la Tierra Caliente : Fuente y ’• producto : % de la cosecha financia­ da con el préstamo Superficie cubierta (hectáreas) Crédito otorgado (miles de pesos) BANCO NACIONAL DE CRÉDITO EJIDAL k 1964/65 . Maíz Algodón Arroz , Ajonjolí Ganadería y apicultura Otros^ 15 052 56 054 1 843 11 667 960 1 582 9.5 27.8 8.0 13.2 .1 584 52 195 1 325 485 257 208 * BANCO REGIONAL DE MICHOACÁN . 1965/66 - Maíz c Algodón ■Ajonjolí ; Frijol sorgo ; Ganadería i BANCOS PRIVADOS enero de 1965 Agricultura 5 Ganadería f Plantas despepitadoras, 1964/65 6 Algodón [ Empacadores de I melón, 1965 |: Melón 6 409 ■ 2 277 2 777 752 595 14 472 11.7 6.9 ’ 5.4 n.d. 926 12 030 338 178 1 000 13 881 10 593 3 288 ■ 27 500 11 000 65.5 1 10 000 100.00 33 000 Incluye frijol, ingenio azucarero y equipo de bombeo, £n. d. No disponible. ^.'fuentes: |Banco Nacional de Crédito Ejidal, oficina de Apatzingán, Departamento de B Contabilidad. |'Banco Regional de Michoacán, oficina de Apatzingán, Departamento de | Contabilidad. I Bancos privados, Banco Nacional de México, S. A. .:>^l ^Plantas despepitadoras y empacadores de melón: los cálculos los hizo el Ájl |autor; tienen una exactitud con un campo de variación de aproximadaLuiente 15%. 190 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCA representan más de una cuarta parte de la cosecha, sino en ejemplo que proporcionó de lo lucrativo de tal empresa. intereses privados observaron de manera atenta los resul dos del banco del gobierno y respondieron a los resultados vorables con una inversión adicional en plantas para el proces inicial del algodón en bruto y con créditos para la producc del mismo. Aunque el banco proporcionó una gran parte crédito para la producción de esta cosecha, en las primeras pas del cultivo del algodón en la región, el ejemplo que es bleció, dando apoyo financiero a este producto muy costoso y procesado del algodón en la región en sus propias despep doras, fue de gran importancia para inducir a la empresa p vada a participar en la región. El Banco Ejidal por si mismo podía financiar la expansión adicional de la cosecha debido la falta de recursos financieros que plaga perennemente a institución. En años recientes los recursos financieros del banco han mentado y se han expandido sus operaciones de crédito en algodón. El sector privado se ha retirado un poco a medida aumentaban los costos de producción del algodón y sus gan cias marginales disminuían. Por tanto, incluso después que banco tuvo éxito para estimular los intereses privados, para asumieran la responsabilidad por una gran parte de la prod ción de algodón, ha continuado conservando su posición co una importante fuente de financiamiento para las cosechas y dado crédito en casos en que las plantas despepitadoras priva estaban renuentes a continuar financiando la cosecha. Las o raciones del banco con el algodón pueden considerarse como esfuerzo cooperativo, que incluye tanto al banco como a ejidatarios elegibles para el crédito. El problema con la situac actual es que Ja tierra que se ha puesto bajo cultivo ha pro nido de las partes más prósperas de la zona. Como resulta hay continuas quejas de discriminación contra las secciones me afortunadas de la región. Más recientemente (1965-66), el banco ha empezado a ejer una influencia importante en la rehabilitación de los huertos limoneros en la Tierra Caliente. La Nacional Financiera, co mexicano de desarrollo de propiedad pública, tran al Banco Ejidal una gran planta procesadora, para que la siera a trabajar. Ha estado trabajando a una capacidad con rableniente menor que la total, debido a una demanda i cíente en los mercados de exportación, pero recientemente fí un contrato para la exportación de concentrados de jugo limón y derivados oleaginosos. En un esfuerzo para alentar EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC 191 los ejidatarios a que mejoren sus huertas, ha proporcionado cré­ dito para producir la fruta y se ha prometido comprarla al ma­ durar. Esta planta es la más importante productora de derivados del limón, en 1a- región, y puede transformar el fruto en jugo, ácido cítrico y aceites, además de preparar los desperdicios para forraje y empacar la fruta para los mercados interiores y exte­ riores. Las actividades innovadoras del Banco Nacional de Crédito Ejidal no se limitaron al algodón y limón. A principios de los años cincuenta, el banco se unió a otros intereses, ya estable­ cidos, para financiar la producción de melón cantalupo para exportarlo al prometedor mercado norteamericano.313 Se. quejaría que este financiamiento complementara el crédito proporcionado por los intereses norteamericanos en el melón, que existían en la región desde hacía varios años, de manera que se pudiera -aumentar la superficie sembrada con melón. Este programa ter­ minó muy rápido, ya que el capital mexicano principió a fi­ nanciar está lucrativa cosecha y la aumentó a los límites de la ;demanda por el producto. El hecho de que el banco no pudiera . hacer arreglos satisfactorios para la venta del melón en el este de los Estados Unidos redujo las ventajas que el banco podía proporcionar a los ejidatarios sobre las fuentes privadas de cré­ dito, y el banco se retiró de este campo en 1957. Recientemente el banco empezó la construcción de un ingenio azucarero en Gabriel Zamora (Lombardía) para complementar ..los planes para la siembra de caña de azúcar en varias partes de la zona. Los experimentos en la estación agrícola, que el banco í ayuda a financiar, indican que los rendimientos serán casi cua­ dro veces más grandes que los obtenidos en 1950, cuando la caña ■de azúcar estaba en plena decadencia en la región. Hasta ahora Ise han hecho nuevas plantaciones y aún es demasiado pronto ’a juzgar los resultados de este experimento. Es indicativo, sin bargo, del estímulo que el banco da a la diversificación adinal de la economía agrícola de la región. El banco'también construyó un molino de arroz para procesar cosecha de arroz que estaba financiando en Lombardía y teva Italia. Esta cosecha ha perdido importancia en años re­ 192 DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPECEFECTO i 193 operaciones de una planta despepitadora, propiedad de algunos de sus prestatarios, Todas estas operaciones son, sin embargo, en una escala mucho menor que las del Banco Ejidal. Su re: dente ingreso en las actividades ganaderas indica que el banco , desea seguir la tradición del otro banco nacional en la región, estimulando la diversificación de la economía regional. De acuer­ do con esto, el director del banco estaba entusiasmado del posible papel que su banco podía jugar para evitar el están ca. miento, debido a la demanda limitada por los productos que - en la actualidad se producen en la región/9 Por consiguiente, ambas instituciones combinan sus funciones normales de provi. sión de crédito agrícola barato y ayuda técnica con nn esfuerzo empresarial, para asegurar la prosperidad futura de la región mediante la diversificación de la producción. . En el sector privado, el ejemplo más notable de tal actividad empresarial, con beneficios importantes para la región, es el au­ mento de la producción de melón y sandía. En la. actualidad estas cosechas son financiadas por los cinco o diez ’ empacadores interesados en conservar la producción para poder cumplir sus contratos de abastecimiento de fruta en los Estados Unidos. Se sembraron por primera vez en la región desde hace más de dos décadas como respuesta a las posibilidades que ofrecía el mer­ cado norteamericano y fueron financiadas por intereses norte­ americanos. En los años cincuenta, los norteamericanos alenta­ ron a sus trabajadores mexicanos para encargarse del financiamiento, producción y envío de la fruta, y permanecieron en la .región para asegurar un abastecimiento suficiente de frutas du­ dante los cuatro meses de invierno en que la Tierra Caliente [abastece al mercado. A la vez, los norteamericanos se están tras­ ladando a otras partes de México en busca de fuentes adicionales de oferta de melón y otras frutas. ó En 1965, se prestaron, aproximadamente, 33 millones de pesos .'a los agricultores para financiar su producción de melón, du£Tan te los tres meses del período de cultivo. Los mismos agricul<ÍAV<»r --------- ---------- ’--------Atoles proporcionaron otros 25 millones de pesos para pairar los r -O"- —" X i 40 N 37 AI hacer esto, el banco estaba fuertemente influido por la intervenaónvWostos que 1 que los prestamistas no cubren.40 No se cobra ningún los Costos prestamistas no cubren l' in­ • C0^la ningun in­ personal de individuos importantes en la región. Los arreglos políticos y las ..Wterés por 1 debe 1 •vender ° 56 teréslos porpréstamos los préstamos, pero el cultivador su coamistades establecidas, durante los años cincuenta, fueron importantes para.JE^ ni , j ’ , Cultivador debe vender su co­ £ mpacaaor que proporciona el crédito. La mayor parte ios intentos de consolidación del banco y causa de las quejas de que don (el cuadro vi-10 muestra que en 1964-5 el banco financió, 1 aproximadamente, 1 500 hectáreas de ajonjolí, 1 800 de maíz, y I menos de 1 000 de arroz), Lo más notable de la historia del banco en la Tierra Caliente ha sido su papel de innovador y empresario, estimulando,. en : la región, la diversificación de su economía agrícola y conven- ■ deudo a los intereses privados de la conveniencia de nuevas lí­ neas de inversión. Este panorama contrasta con la idea gene- : ral de que banco es un instrumento ineficiente del gobierno mexicano para subsidiar a los campesinos atrasados del sector ; agrícola colectivo. En la Tierra Caliente ha tratado de eliminar sus pérdidas y ha estimulado activamente la expansión de la agricultura comercial en cooperación con los intereses privados.37 El segundo banco de crédito publico es el Banco Regional de Michoacán, sucursal del Banco Nacional de Crédito Agrícola, que proporciona crédito para los pequeños propietarios agrícolas en . toda la nación. En la Tierra Caliente, el banco adquirió los ac­ tivos de un gran terrateniente, William Jenkins', cuando murió • en 1963; esas instalaciones se usan ahora para beneficio de los prestatarios del banco. Aunque sus operaciones son mucho me- . ñores que las del Banco Ejidal, han aumentado considerablemente ■ en años recientes y con este crecimiento ha llegado un esfuerzo para ser más innovador. En 1960 proporcionó menos de 2 midones de pesos de crédito para 1 500 hectáreas de tierra no irri­ gada cultivada con maíz, en tanto -que, en el ciclo agrícola de A 1965-66, prestó más de 14 millones de pesos a los propietarios j de más de 6 400 hectáreas para maíz, algodón, ajonjolí, sorgo y j ganadería (cuadro vi-10).38 La mayor parte de este crédito fue; i para 2 777 hectáreas de algodón, pero el banco también prestó: « un millón de pesos para 1 250 cabezas *j de ganado en un expe rimento para determinar cuán atractivas podrían ser las empresas de ganadería. En total, financió cosechas en cerca de una quinta 4 parte de la tierra de propiedad privada en la Tierra Caliente, ¿U El banco también opera una planta de hielo, y financia lar<i banco era el instrumento de las personas que estaban en mejores mej‘oresPR­ L’* Entrevista con Benilo Casares, director del Banco Regional de Michoasicioncs. Probablemente una gran parte de las pérdidas, durante los primeros;! ^án, abril de 1966. años, se debe a estos arreglos y algunos ejídatarios que ya no tienen acceso al crédito del banco fueron, posiblemente, las víctimas de la campaña parad». 10 Estos cálculos de la cantidad de crédito , proporcionada por los empaeliminar esta influencia perniciosa. ««lores y los cusios complemenúrios pagado? ’ ' s, están su­ 38 Banco Regional de Michoacán, oficina de Apatzingán, Departamento dej»Jdos a amplios márgenes de error auizá d? i • - ■ L pestnos, un co ambos casos ;t I3Sttí Contabilidad. , J *partir de las cifras mencionadas. 194 ; EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC J 195 el crédito para la producción, no proporcionado por los dos bandel crédito se proporcionó con fondos mexicanos acumulados de : . beneficios pasados obtenidos de las cosechas de melón en la j eos gubernamentales. Otorgaron créditos para más de 27 000 hec­ táreas de algodón en 1964, de, aproximadamente, 110 millones Tierra Caliente; algunos cultivadores fueron financiados por ! ! de pesos, más del doble del crédito dispuesto por el Banco ; el capital norteamericano, pero esta fuente de crédito ha perdido Ejidal para ese propósito (cuadro vi-10)A Las plantas despepiimportancia en el transcurso del tiempo. . i La actividad empresarial de los norteamericanos al establecer! ;; tadoras fueron obligadas a ampliar su crédito para asegurarse un mínimo de oferta de algodón en rama y un rendimiento el cultivo del melón en la Tierra Caliente no fue única; tam­ ; adecuado de su inversión fija en su equipo para desmotar albién se presentó en el norte de México con respecto a los pro­ ? godón. Las plantas despepitadoras tienen acuerdos semejantes a ductos agrícolas y otras frutas, que pueden transportarse en ca­ p los del Banco Ejidal con los abastecedores locales de insumes mión. En la actualidad se amplía hacia otras partes de México agrícolas, de manera que los cultivadores recibieron la mayor y el capital existente se desplaza a nuevas zonas a medida que parte de su crédito en especie. También supervisan al cultiva­ los intereses mexicanos penetran en las zonas establecidas. Este | dor y le proporcionan ayuda técnica para asegurarse que los cambió del capital extranjero hacia el nacional es alentado por i \ abastecimientos y el dinero se usan adecuadamente; al prestamuchos norteamericanos, porque significa que pueden continuar | ; tario se le cobra por estos servicios, aunque en realidad se trata ampliando sus fuentes de.oferta en los productos ya establecidos^ ! y experimentar con nuevos productos sin aumentar su inversión, j de una forma en que el prestamista protege su inversión. A diferencia de quienes piden prestado a los bancos gubernamenLos norteamericanos también proporcionan la oportunidad dej tales, la mayoría de los cultivadores que reciben crédito de los diversificar por igual la agricultura de nuevas y de antiguas re- j; procesadores deben vender su algodón en bruto a las plantas giones. En la Tierra Caliente, por ejemplo, se están sembrando,] l despepitadoras y no pueden obtener ganancias por el despepite; sobre una base experimental, calabazas y otros vegetales de 1 ; la diferencia puede ascender hasta 1 000 pesos por hectárea, una valor, para los cí ales existe un gran mercado potencial en los; consideración importante en vista de los crecientes costos del culEstados Unidos. , 1 divo del algodón. Al prestatario se le cobra un interés mensual J La oferta potencial de este tipo de inversión extranjera en! del 1.5% por el dinero que le prestan las plantas despepitaMéxico está aumeruando probablemente y puede jugar un papel;! doras. cada vez más importante, en la exploración del potencial pro-i ductivo de nuevas regiones y de las posibilidades de diversiÍH, < Un tercer grupo de prestamistas son los comerciantes que ; ¿venden insumos agrícolas y otros bienes a los campesinos loca­ cación en otras zonas. A medida que la tierra y la mano de obra, dles. Los abastecedores de insumos dan crédito en forma de pagos se encarecenh ch en lúa los Estados Unidos, se está -----estimulando el desq — ---t , A¡ ¿diferidos por los bienes comprados antes de la cosecha y cobran jal°J^Jyun 7 México de nuevas fuentes de oferta a más interés mensual 1 W Fedel 1.5%. Es raro que proporcionen efectivo un* nterésdel arrollo r olio en México de nuevas iutni.es ue VelÍf mensual Los norteamericanos han estado dispuestosi a pioporciona^^w|os gastos de subsistencia o el pago diario de los trabajacapital de trabajo y la ayuda técnica para tales empresas, flores. Puesto que estas empresas venden semillas mejoradas, ca zadas generalmente, en cooperación con mexicanos emP^ ^fertilizantes e insecticidas, sus clientes son miembros de la parte *En vista de los recursos limitados para la exp< dores m¿s avanzada técnicamente. Estos prestamistas servicio de extensión agrícola y la pequeña canil ac tpor lo general tratan con personas entendidas en combinar £erdesean trabajar en Jel campo, esta ■ , d utilizantes, mejores semillas y agua, para obtener rendimientos sa­ . ... la productividad de la agricultura de ayuda paranemos mejorarque embarg0> c¡fmpes¡nos no pueden obtener y podría ser estimulada por el gobierno. ILiDXa Los intereses privados de las despepitadoras de algodón taíft ^“it *a o de los bancos locales y deben recurrir este/rV.UiJLCllí; mas |caro; otros podrían no querer hipotecar susv tierras como C Io ma lo exige bién proporcionan crédito para asegurarse una fuente estable <61 típl rw>rlíii" _____ _____ ___ _ ' x í-.. zf .a. a ...i I—--— V *^algodón //. en bruto para sus despepitadoras y contratos de entrega^ pedir prestado a un banco/ya que la'podrían" A diferencia de los distribuidores de melón, estas compañía . r < pti er 41 Ésta es una estimación burda que probablemente varíe en un 15% de fueron las primeras en el desarrollo de la cosedla; a] contrario ^la cantidad prestada por las plantas despepitadoras en 1964-5. La mayor su tardío ingreso.es bastante sorprendente. .. [iparte de este capital proviene de organizaciones nacionales que financian la í producción en varias zonas de cultivo. Las plantas despepitadoras de algodón proporcionan casi to¡L i-.- i---------------------------- i ’’ ■ _ 196 EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC EFECTO DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC 197 ces de juzgar los resultados de sus clientes y asignar la escasa caso de fracaso en la cosecha. Los abastecedores de insumos agrí­ oferta de capital de trabajo entre los más productivos. Haciendo colas, que se benefician con las mayores ventas, serán más bené­ esto, asumen un gran riesgo, ya que muchos prestatarios no volos que los bancos para quienes no Ies cumplen en el plazo pueden dar ninguna garantía por los préstamos. El alto costo f i j ado. del capital para los campesinos que tienen que recurrir a estas Otros mercaderes locales proporcionan ayuda financiera para fuentes de crédito es un reflejo del menor potencial productivo algunos campesinos que siembran cosechas tradicionales: maíz,' y del mayor riesgo de las técnicas de cultivo más primitivas. No arroz y ajonjolí. Éstos se siembran sin fertilizantes y no se usan obstante, es indudable que los comerciantes obtienen ganancias semillas mejoradas; generalmente, el maíz y el ajonjolí no tienen ; monopólicas por sus actividades financieras. irrigación durante la época de lluvias. El crédito es necesario 1 Por último, el sistema bancario privado proporciona una pe­ para los gastos de vida del campesino y su familia durante el queña cantidad de crédito para la agricultura en la Tierra Ca­ ciclo agrícola. Éste es el tipo de préstamo más arriesgado para liente. La cartera total de los bancos privados en la región, para el prestamista ya que los campesinos son los menos avanzados y préstamos agrícolas, era de, aproximadamente, 6 millones de pe­ usan técnicas primitivas cuyo éxito depende del clima. Si la sos en 1961 y aumentó hasta casi II millones en 1965 (en com­ cosecha fracasa, como sucede con frecuencia, el prestamista pier-. paración con más de 50 millones de pesos de préstamos para de lo prestado. Es también el más desventajoso desde el punto de d cultivo de algodón del Banco Ejidal, en la cosecha del año vista del prestatario, por los términos poco favorables con que ¡ anterior). Los intereses ganaderos pidieron prestados 1.8 .millo­ se otorgan estos créditos (con frecuencia, un interés mensual del nes de pesos en 1961 y aumentaron sus deudas hasta 3 330 000 1.5% más un descuento sobre el precio de mercado prevaleciente).; pesos a principios de 1965?2 El rápido aumento en los préstamos La cantidad de crédito disponible del .Banco Ejidal para estos (empezando con una base muy pequeña) fue en parte el resill­ productos (cuadro vi-10) es limitada y por tanto la mayoría de; ado de fondos provenientes de la Alianza para el Progreso, que las personas que no pueden financiar su propia producción/ $e volvieron a prestar por el sistema bancario privado a los con los recursos de la familia o por su trabajo diario durantej pequeños campesinos con bajas tasas de interés (6% anual), Esel ciclo agrícola deben vender su cosecha “a tiempo”,*esto es, j jos bancos no podían prestar a los ejidatarios porque no tienen antes de que sea recogida. j&da para dar como garantía por los préstamos. No pueden Este crédito permite a los intermediarios tener una influencia pesad Mpótecar sus tierras y no tienen maquinaria agrícola u otro significativa en los precios de las cosechas de la región, a pesar cosecim^ ug ograma del huT° 6e capital que garantice el préstamo. Como resultado, los de los esfuerzos los precios ríe~las ----—x.n nmarai del gobierno para pr o por ci oirá subsistencia/ Uncos otorgan préstamos con un interés mensual del L. .5%, sólo apoyo a un j precio mínimo para los agncu rpntavW ^os agricultores comerciales de más éxito, l —el precio . oficial del maíz fue ae . .. ...... „ con mayores proAunque, en 1965, i el campesino, en raras ocasiones, _____ recíbi'ó"m¿ _____ _ "de 80 u 85 cerffwdades y que dan como garantía su tierra y equipo. /Hemos visto que en la Tierra Caliente el crédito agrícola ha tavos por su producto en época de la cosecha, a pesar delj (ido la cantidad de tierra agenciagubernamental gubernamentalque queapoya apoyalosxu» , importante para determinar ueiermmar la > semofrecimiento dedelalaagencia precio» L ........ j. muy a los productores. Layada para cada una de las cosecha tantldad de tierra semde comprar cantidades ilimitadas ...................de■ 1maíz i Comercia^e^ cuyo cultivo personas, a quienes se les exigía vender a los comerciantes qtuffi relativamente costoso v n- >s les habían prestado dinero para la cosecha, con frecuencia recil^drán tomar ventaja del poten * C.eterminar CU£íles campesinos rra. La ben 70 o 75 centavos por kilogramo, precio demasiado bajo. Loycisión de proporcionar crédito^- economíCO ke berra. La compradores de arroz y ajonjolí tienen, incluso, un control ** determinante de la estructura aeiEas cosechas es el prin-cosechas de ie\U íaníe en ^as c« ^cL._ yor sobre el mercado, porque son menos y las cosechas deben» región. El nan?l m d l. como de C1 lka E ida procesarse antes de poderse usar. novador en la canaLSn _ ____ JKJ ^ í ^ « VI líXS (.1^ Estas fuentes de crédito han jugado un papel importante reemsos un hacia las cosechas aportación de mayor valor >y en proporcionar ejemplo insHictivo, ha sido decisivo en el desarrollo pasado de la región. Las llenar el vacío dejado por las otras instituciones. En ausendwuc «entes de crédito privado empezaron a ofrecer capital de trabajo de facilidades de crédito proporcionadas por los comerciantes yPei las casas de abastecimientos agrícolas, muchos campesinos HQp Banco de México, hubieran podido sembrar su tierra. Estos prestamistas son capaq ’> 'RpmfiC iricf-rt roía z-.,, 1 '“V" ■ *■ ■ ■ 198 , EFECTO DE LA COMISION .DEL TEPALCATEPEC EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC 199 *arreglos ilegales o semilegales. 3 Esta práctica provoca a otros sectores de la economía agrícola que los bancos del go­ muchas bierno no podían o no querían satisfacer. La disponibilidad de : críticas por la forma en que se ha desviado ia reforma agraria crédito privado o público para algodón» sandía y melón» fue mexicana de mejorar la suerte del campesino. Según esto, per­ de gran importancia para determinar cutí Ies campesinos han sonas influyentes y agresivas aprovechan su posición para trabaprosperado gracias ai programa de inversiones públicas. Con fre­ i'jar grandes extensiones de tierra rentada a los ejidatarios. Un examen bajo este punto de vista indica que pudiera haber me­ cuencia, el crédito para las otras cosechas permitió al presta­ nos injusticia y más beneficios económicos por esta práctica, de mista controlar mejor los mercados y sus prestatarios. do que desearían creer los críticos. En circunstancias normales sería poco inteligente que alguien rentara su tierra si cree poder Tenencia de la tierra obtener un mayor provecho trabajándola él La investigación de campo en la Tierra Caliente no indicó razón en contra para Estos cambios en la agricultura de la región no se han originado . -que el principio anterior se aplique allí. Se buscaron explica­ sólo como una respuesta al programa de inversiones de la Comí- ’ ciones de las, posibles diferencias en los rendimientos potenciales sión del Tepalcatepec. Además de la importante influencia del' de la misma parcela. crédito agrícola en la producción de la Tierra Caliente, los ajus­ Muchos ejidatarios no tenían acceso a un crédito suficiente tes en ios patrones de la tenencia de ia tierra fueron un preñe-; piara utilizar su tierra en la más valiosa de las cosechas comer­ quisito importante para el éxito del proyecto de irrigación. Como ■ ciales. En algunas comunidades no había disponible crédito al­ hemos visto, la expropiación de las tenencias de los Cussi re­ guno, y en otras no era suficiente el crédito disponible para presentó un cambio importante en la estructura de la tenenci^ í presento tin iu;~--.. _ ’ t -ia—tierra - — i„y,alta Hp la mitad la tierra estáj de la tierra está/ tque todos los campesinos pudieran sembrar las cosechas comer­ de enorílarn:U actualidad, másdede la mitad nominalmente en manos de ejidatarios cuyos derechos están gaq ciales más costosas. Esto limitó el número de cosechas enne las rantizados bajo la Constitución. • -J que podían elegir los campesinos: la tradicional del maíz, ajon­ jolí y, en algunos casos, arroz. De manera irónica, algunas de las tierras distribuidas bajo £ A su vez, la -disponibilidad de crédito es una función de la caprograma de reforma agraria han pasado al control de los Btcidad técnica del individuo y de su experiencia pretérita con tereses monetarios privados que rentan la tierra a los ejidatarios; s cosechas comerciales. Así, una persona que nunca ha cultipara la explotación comercial, debido a qv? —.Utímnc caz >ado algodón y no tiene experiencia con los fertilizantes y los recen del capital de trabajo para una adecuada utilización de| controles químicos de plagas no tiene mucha probabilidad de que las tierras irrigadas. Tales arreglos de arrendamiento empezaron^ le otorgue un crédito para sus cultivos. El Banco Ejidal propoco después de 1960, cuando hubo necesidad de grandes inverj ferciona alguna ayuda técnica al igual que lo hace el agente siones para mejorar la tierra, de manera que pudiera utilizars®ot 'Kal de extensión agrícola, pero sus recursos son limitados y la maquinaria agrícola. El suelo en la Tierra Caliente es muy. coso y el costo para limpiar las parcelas estaba más allá de lo®ayor parte de ’ i -su atención es para las comunidades que tienen cu“lLlIH<4aues *"medios ? de los ejidatarios. Se elaboraron arreglos legales con lájpás éxito/Las fuentes privadafhan ? técnica, ÍJase L personas que deseaban trabajar la tierra, Los términos usualdEero, nuevamente, aquí el éxito II ^P^do ia-p.— a.*v*ama3.exit0 aj.n¡. la: tu y 211AS que ellos limpiarían la tierra en lugar de pagad™ ™ y Lis tilden que les penni¿obres no han podido obtener ,la ayuda inicial consistían en 1 1 -—1—---- i« (inrv'í /lurantá iría .cambiar sus métodos de producción. j ** -•-y —*tendrían el derecho de trabajar la tierra durant^ una renta |¿Por último, muchos no habían trabajado en tierras irrigadas dos años, por lo general, tiempo suficiente para obtener un pr<¿ Hites de la creación de la Comisión, y hay una falta de comvecho adecuado por la operación de limpia de la tierra. Despué| 6’ensión muy generalizada sobre la influencia del de esa operación, que limpió aproximadamente 40 000 hectárea^ agua proveinversionistas' ■ ®; algunos continuaron rentando su tierra a los "inversionistas'^ ^ nropias La oficina local de la Secretaría de Agricultura calculó trabajaban como peones por un salario diario ei 1 i lma cncuesca> cerca {lei G8% dc Ia Li(;rra epdaI obrada rras y en otras parcelas. - 1b fiaba rentando, situación que correspondía al 89% de k Ya dijimos en el capítulo ni que esto es ilegal, pero los fuá| ,_ _____ . x . Cupatitzio-Cajones en 1963. Para 1965 la oficina caí w ia aqiiHUi <-i prefijen **-q-------------:<mn»‘arlo Gran parte del 65% de la cosecha de algodón se recogía en tierras reneclonarlos de lacuregión cionanus uc ni a Wados. dón, sandía y melón se siembra en la tierra ejidal, rentada, bajé! UV+V una i i~i.ii.. * _ ... ------ — 'i 200 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC : EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC 201 ,i niente de una fuente estable sobre las cosechas. Incluso, después j i cuencia se argumenta que el traspaso de sus tierras a los peones de más de cinco o diez años de irrigación regular, muchas per- j ' que la trabajan actualmente significaría una disminución en los sonas causan graves daños a sus cosechas por la aplicación de j altos rendimientos obtenidos en el presente, porque los trabajamuy poca o de mucha agua. De esta manera, los rendimientos j dores carecen de crédito y de experiencia técnica. No hay cifras son incluso menores en las cosechas de subsistencia, de lo que ; § que nos permitan comparar los rendimientos de las grandes y podría esperarse de un campesino con alguna experiencia en la J las pequeñas tenencias en la Tierra Caliente. Sin embargo, de­ nueva tecnología. ] bemos esperar que las pequeñas propiedades agrícolas tengan El crédito insuficiente y la falta de conocimientos técnicos | cuando menos rendimientos por hectárea tan altos como los de se combinan para hacer más atractivo a algunos campesinos ren- s i*las grandes propiedades agrícolas, a .menos que tuvieran una tar sus tierras (o arreglar alguna variante de esa forma que | i., mala administración o padecieran gravemente por falta de crésea más legal) a otras personas que pueden hacer un mejor uso J : dito, ya que se aplica más mano de obra por hectárea. Además, de ella. Los campesinos parecen considerar sus derechos de usu-J el actual * arreglo Xes'"................................ ye wicí ___ be una distribución del fructo como donaciones de capital, las cuales tienen el derecho-F . .continuo al idealesdeimposible negar que ¡ ingreso más equitativa, No obstante, de utilizar en una forma que lleve a un máximo sus ren din lien- J el actual panorama de una exitosa agricultura comercial, de pro­ tos esperados. De esta manera, las alteraciones de la estructura piedad y financiamiento privados, es impresionante y está con­ ejidal ideal son benéficas desde el punto de vista del aumento ■! tribuyendo, considerablemente, a las metas del desarrollo regional de la productividad de la tierra disponible para el cultivo. Ade-q ; y nacional. más, con frecuencia, el ejidatario trabaja su propia tierra yd adquiere el conocimiento técnico sobre el cultivo de las cose-z ''"Bu industrialización de la tierra caliente chas más valiosas que puede, y con frecuencia lo hace así, aplí4 car a su propia producción en años futuros. De esta manera, elj |La economía de la Tierra Caliente no se ha diversificado mucho arrendamiento puede considerarse como una mejora para el biert-T ten respuesta a los estímulos proporcionados por el programa de estar individual debido a que el campesino se transforma en unj ¡inversiones d'e la Comisión del Tepalcatepec. Durante las dos agente libre, al grado de que desea pasar sobre la ley para disvi ¡¿décadas pasadas la infraestructura se amplió de tal manera que poner de sus recursos en -manera más productiva posiblej be dispone fácilmente de transporte y energía a bajo costo. La dada su propia preferencia' y sus funciones de producción pú-a actividad económica fue estimulada por el aumento en la tierra .cultivable y el incremento en el valor de la producción agu­ si bles. Una segunda distorsión de la legislación mexicana sobre re¿Jf atóla. A pesar -de vauuj estos cambios, han ocurrido pocas adiciones al forma agraria, discutida también antes, es la tenencia por unBhúmero ios, nan ocurrido _________ j m¿t yoría de ellas son sa­ esas solo propietario de una superficie mayor del máximo permitidqptfUif.^ J^„ Rustríales y la _mayorú télites . de los nuevos productos agrícolas de la región. para la Tierra Caliente, por lo general mediante familiares di Éste es el resultado que se hubiera previsto mediante el aná“prestanombres”. Parte de la razón por la cual la reformauiagrág irt *«■ x —................ ° de Hirschmann de los efectos en cadena, tratados en el U ¿¡viduales fue la inefiwprimer capítulo. Los productos primarios no proporcionan un de ia ra¿UU i^fue ría limitó el tamaño d~ ínAivíHuales ineff s \nla e - Áde las rrevo|ucionario. ®estímulo ele amplia base para la industrialización de una región. ciencia del latifundista en i el 1 'ue>a un papel tan importa^OSegún Hirschmann, incluso con las técnicas más modernas de México actual, la tierra yaia ya no juega un papel tan importante^ n0 1 en alguna io social como lo hizo ocasiónj " «producción que requieren un gran uso de equipo de capital, lo-, en términos de prestigio uc * ~f~ "je de tierra no cultivada iWeíectos en cadena habrían sido muy débiles.44 débiles.44 MíHpuíálty y la existencia ia de grandes super ici c S . expropia......... pación. comprobación de esta hipótesis se encuentra vita a la . Así, se estimula la utilización eficiente ____ encuentra en la c en la expeandes tenencias privadas por la nueva estructura instituí ¿rienda en la — Tierra Caliente. La h ii mayor parte de la diversificade gn....... . . L elemento que desaliente a hacéÉ i.a mayor i cional, aunque debe existir un más una respuesta a Lus SÍd° mfi . - ca] -apital grandes inversiones en ’ 1 fijo, que no podrían recuperará Unidades de cXn^ A en lapido ciccimiento ■ r----------------e un expropiada, Varios conocidos terratenientes. íl| a población míe a los efectos en cadena, hacia adelante si la tierra fuera inducidos, estimalanla Tierra Caliente hacen’ uluj un mi buen uso de su tierra empleando | y * :r Slrategy of Ecotjomíc Dez’elopment, p. ¡09. tecnología moderna y _ sembrando cosechas comerciales. Con M p Th. ící 202 EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCA tes del desarrollo económico. Las compañías de maquinaria agrí­ cola y de productos químicos establecieron sucursales locales parg vender sus productos. Varios grupos abrieron centros de servicio para maquinaria agrícola y fumigación aérea para satisfacer las necesidades de una tecnología agrícola crecientemente compleja, ; No obstante, las actividades que provienen de efectos en cadena J hacia atrás dan ocupación a muy pocas personas. Todas las , actividades manufactureras y comerciales emplean sólo una décima parte de la fuerza de trabajo de la región (cuadro v-5). Desde el punto de vista nacional el importante aumento en el ' uso de maquinaria agrícola en la región pudo haber contribuido j a efectos de cadena hacia atrás en la producción de equipo, pero los efectos regionales fueron muy pequeños. La Secretaría ' de Recursos Hidráulicos informó que había 900 tractores en uso, durante 1963, Un cálculo para 1966 nos da la cifra de J 2 000,15 También había 300 sembradoras y 371 vehículos de tía- J bajo de todos los tipos trabajando en tierras irrigadas de la ■ Tierra Caliente durante 1963;46 el número aumentó notablemente j desde ese año. Por último, varios aeropuertos dan servicio a muchos aeroplanos pequeños que se ocupan de la fumigación aérea durante las estaciones de cultivo de algodón y melón. El j ingreso por ventas y servicios es mínimo comparado con los in-J gresos agrícolas; toda la maquinaria agrícola empleada en la ó región vale, probablemente, menos que la mitad del valor de ;• la cosecha de algodón de 1965.47 La fabricación y mezcla de fertilizantes químicos fue la se , gunda industria en importancia, después de la fábrica de hielo, 1 en la región en 1960 según el censo industrial.48 Representó ,unayj quinta parto del valor agregado en la cuenca, pero dio empleo a menos del 5% de la fuerza de trabajo industrial. La mayoría ’¡ de los productos mezclados y empacados en la región se usan i México, Sccrcf.n'ía de Recursos Hidráulicos, Dirección General de trilos de Riego, Dcpm lamento ríe Estadística, Informe estadístico No. ba mecenízííción . zígrícola en los distritos de riego, ciclo 1962-63, Méx 1964 Hicimos el cálculo para 1966 en colaboración con el agente de e sión agrícola en la región. Idem. Esta comparación se ¡rasó en estimaciones sobre el valor promedi varios tipos de equipo hedías por los vendedores. Se ha tenido en c un margen suficiente de error para aceptar esta afirmación como indic del orden de magnitud. 44 El censo indicó que iuliía una instalación de gran tamaño para la ducción de artículos farmacéuticos medicinales en Apatzingán que, s las personas entrevistadas en la región, nunca existió. Es probable haya habido un error en la codificación y que los datos se refieran fabricación y mezcla de los fertilizantes químicos. EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALO A1 EPI'T. ¿'■T> localmente y no ingresan en los canales cíe clisiribucíón o e ;.-vil de las compañías que operan en la Tierra Caí ñaue. Han surgido otros elementos nuevos como paite del sector in­ dustrial regional. Los efectos en cadena hacia adelante han creado “industrias satélites”, las cuales están muy rehirió nadas a otra actividad cuyo valor agregado es pequeño comparado con el valor del producto agrícola. La más nueva e importante de : estas industrias es la planta despepitadora. En la actualidad hay . diez plantas despepitadoras que pueden procesar el algodón cu bruto antes de que se le envíe al mercado. Representan E mayor /inversión privada de cualquier tipo en la región,4!t " de las plantas son propiedad y son manejadas por el Ba:iu> njidah y l sirven sólo a los campesinos que trabajan en tierras expropia[das bajo el programa de reforma agraria. La primera que operó |..en la zona- se' construyó en 1956. Una de las instalaciones prip'vadas de-procesado es propiedad de una cooperativa y varias j otras son propiedad total o parcial de grandes organizaciones r nacionales con amplias operaciones en el algodón. | Este procesado aumenta el valor del algodón, en cerca de un 120%. El precio rural de una tonelada métrica de algodón au­ gmentó en cerca de un 20% en 1964, de 2 000 a 2 400 pesos una Evez que 'se ha despepitado la cosecha; para la cosecha como un ítodo esto representó cerca de 40 millones de pesos. El total de ¡.inversión fija en esta industria probablemente no excede de 50 ¡¡millones de pesos,-sólo, un poco más que el valor agregado por ¡el procesado ¿n un año. Estos establecimientos juegan un papel limportante en el financiamiento de los costos de la cosecha de I-algodón. Su capital de trabajo excede en mucho a la inversión Ifija en las despepitadoras. í Hay, además, una unidad para la extracción de aceites de la tsemilla de algodón. En la actualidad la mayoría de las semillas |se envían a otras zonas para su procesado. El Banco Ejidal platnea construir su propia planta de procesado en la 't ierra Calliente para evitar los costos del transporte de la semilla, increlínentando así las ganancias de los ejídat arios. I Hay otras “industrias satélites’' en la Tierra Gaiiem.c. El B.-m Ico Ejidal tiene tina planta secadora de arroz y una gíai> phmta rprocesadora ele limón. Además, hay once proccsadoms de arroz |.más pequeñas, siet,e plantas procesadoras de limón y cieno nimio iro de empacadoras de melón y sandía. Probablcmonte la inverComo siete de las grandes plañí as despepitadora1, fueron oiimnám Rlespiiés del‘censo industrial de 1961, no hay disponibles datos cimniiiatito/ gpmfiables para defender esta observación. K 204 efecto de la comisión del tepalcatepec EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC 205 ■ sión total en estos establecimientos no excedió los 15 millones nación, y por tanto anula así las ventajas de contar con abun­ de pesos. Al igual que en el caso del algodón, la inversión fija . . dantes ofertas de energía hidroeléctrica barata en zonas cercaes menos importante que el capital de trabajo utilizado para - ñas. Las facilidades en el transporte son una espada de dos financiar los costos de la cosecha. El .crédito ayuda a asegurar \ . filos desde el punto de vista del desarrollo regional: propon tasas adecuadas de utilización de la capacidad de proceso y a 4 ..'donan un acceso fácil a los mercados, pero también proporcíocumplir con los contratos de ventas. J ' *nan un acceso fácil a los bienes manufacturados en. otras re La falta de diversíficación en la zona resalta porque en 1960’ | . giones. La región no ha podido atraer una. fuerza de trabajo la principal industria de la región era la fábrica de hielo. Re- | .'permanente adecuada a sus necesidades agrícolas, y su lejanía presentaba las dos quintas partes del producto industrial y enr 1 zde otros centros de población hará más difícil atraer personas pleaba más del 70% de *j la fuerza de trabajo industrial. La pro 'calificadas para las ocupaciones industriales, incluso si estuvie*ducción- de hielo se ajustaba a las necesidacles comerciales ñor . . ¿ran disponibles. males, pero durante la cosecha de melón y de sandía todo el ; El programa de inversiones de la Comisión ha tenido un éxito hielo se usa para refrigerar los furgones en los que se trans- J Ilimitado en el inicio del desarrollo industrial de la región. Sólo porta la cosecha a los mercados de exportación. Durante lo más A establecieron unas pocas industrias satélites y la perspectiva intenso de la cosecha se trac hielo desde ciudades lejanas para-2 i para -una mayor industrialización es pequeña. Estos resultados satisfacer las demandas de los empacadores de me/k y ;eran de esperarse dado el tipo del programa que el gobierno ha Hay muy pocos otros desarrollos industriales, excepto el que realizado en. la cuenca y la falta de incentivos específicos para se ha presentado como respuesta a las demandas diarias de una establecerse en una región que, por sí sola, no puede ofrecer creciente población urbana. Las tortillerías y la elaboración de ninguna ventaja comparativa al inversionista. pan y otros productos alimenticios representan una parte im- : portante en el creciente número de establecimientos en la región.’* ■ LOS EFECTOS DE LAS INVERSIONES SOCIALES DE LA COMISIÓN En 1962 empezó a trabajar una gran planta para el procesado ¡ de bario y de caldo, que se extraen en el cercano municipio de ■ *Las inversiones sociales de la Comisión del Tepalcatepec mere Tepalcatepec. Probablemente su producción ha incrementado ] Ten atención especial debido al efecto que tuvieron sobre Jas cerca de una quinta parte el valor de la producción industrial 'J condiciones de vida de la zona y por la atención que se les ha en la región, pero emplea menos de 25 personas; por lo gene-> j •dado como, ’una justificación del programa de inversiones púral, en la mina se emplea un número igual de personas. J ■blicas en la región. Estos programas se dirigieron a la reducción No parece que habrá un desarrollo de nuevas industrias en,j Je las amenazas para la salud, la mejora de los niveles educala región en el futuro próximo. Las otras industrias que po- J divos y la ■"mejora de las instalaciones urbanas. drían establecerse por los efectos en cadena hacia adelante es- á i. Como se dijo en el capítulo v, el programa de inversiones tán limitadas y tienden a crearse en otras zonas en que hay.jI ¡sociales representó menos del 10% de los gastos d.e inversión de un obvio excedente de fuerza de trabajo y un clima más tenv i da Comisión en 1965, Es evidente (pie la principal responsabi­ piado. Desde que se redujeron los costos del transporte por 4 lidad de la. Comisión fue la explotación de los recursos natu­ carretera y ferocarril, hay menos incentivos para trasladarse a la#rales para el desarrollo económico, más que la oferta de facili zona con el fin de procesar algo que no sean las materias pri<# | Jades para mejorar la educación y la salud. Sin embargo, los *jmas más voluminosas como el algodón o el bario. Por lo gene •i gastos relativamente reducidos de la Comisión en este campo no ral, el procesado adicional (por ejemplo, el hilado del algódóni fueron las únicas inversiones públicas en la cuenca que tuviehace ‘cerca y la purificación del bario) se ....•de los grandes meij merd |Bon dichas finalidades; la Secretaría de Educación Pública, la vados. % 4 decretaría de Salubridad v .Asistencia y la Secretaría de Recursos A menos que se encuentren otras fuentes de recursos ___ icos proporcionaron la mayoría de los fondos de operales que requieran la construcción de otras plantas procesadoras'ab, " ¿ 'p ........,----- LWJ1. 1 as consti’l6das por la Comisión, en la Tierra Caliente, es difícil pensar en algún atractivo y----- JA, / construyeron i [otras con fondos de sus propios presupuestos. Dcsafortunada*el establecimiento industrial en la región. México está llevando, Juente, no estaban disponibles las cifras sobre la cantidad de a cabo una política que igualará las tarifas eléctricas en toda Ia| gastos de otras oficinas gubernamentales. Lh.Hj DE LA COMISION DEL TEPALCATEPEC EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPECEFECTO . 207 » (ion lates gastos limitados, era fácil predecir que el efecto del ? les, en 1947 hubo 77 homicidios que representaron cerca del programa de Inversión social de la Comisión del Tepalcatepec J 9% de las muertes totales.52 En 1964 se informó de 115 homicidios; casi el 8% de las muertes totales. Incluso suponiendo sería limitado. La mejora más notoria en las condiciones de vida fue la reducción de la tasa de mortalidad de la cuenca í que en 1947 la estadística no haya incluido todos los casos, paen, aproximadamente, una tercera parte durante los años cin-aj ” rece que la reciente prosperidad no ha reducido la tasa de cuenta, de 14.1 muertes por cada mil habitantes, en 1950, a 9.6, j ■homicidios, aunque es probable que actualmente las causas de esta violencia sean diferentes. Aunque ya no es un buen escondite en 1960. En la Tierra Caliente la disminución fue incluso ma­ ■ yor, de 16.5 a 10,6 muertes por cada mil habitantes (cuadro-i . para los criminales, la región tiene una gran población migra­ v-4)?° Esta disminución fue un poco mayor que la experimen- ' toria, en especial durante la época de la cosecha del algodón, tada para la nación, que bajó de 16.2 a 11.5 durante el mismo) y lo que produce tensiones y conflictos que con frecuencia se reperíodo. Parte de esa disminución se debió a la virtual erradi- i suelven violentamente. Sería difícil detei'minar la proporción de las muertes causadas por este nuevo factor, pero muchos resi­ cación del paludismo de esa región. En 1947 murieron 88 per *; sonas de paludismo en los seis municipios que integraban en-j lientes culpan de los disturbios a la fuerza de trabajo temporal ; agrícola. Cotices la Tierra Caliente; hacía 1955 el número se redujo al Por otra parte, la reciente prosperidad de la región también 25 defunciones registradas. Continuó disminuyendo hasta que,, en 1960, sólo hubo dos muertes, y en 1964 no se informó dEt ?ha contribuido a la disminución de la tasa de mortalidad por ninguna muerte por paludismo?1 La Comisión sólo hizo una) otras causas. El aumento en los ingresos regionales permitió a pequeña contribución a la campaña contra el paludismo que sej 4a población alimentarse mejor y obtener mejor tratamiento ruésigue sosteniendo por contribuciones del gobierno mexicano y; -dico. Es probable que, como resultado, tanto la productividad de la UNiCEF, La principal contribución de la Comisión a la re-¿ -como la espéranza de vida hayan aumentado. Estos beneficios, ducción de la tasa de mortalidad fue la construcción de sistemas- :potencialmente cuantificables, derivados ele las mejoras en las de agua potable y drenaje de aguas negras, que disminuyeron5 ¿condiciones económicas de la región, no se tomaron en cuenta el aumento de las enfermedades gastrointestinales. En 1947. hubo ien este estudio, pero lo haremos en la evaluación final. Además, más muertes por esas enfermedades que por el paludismo. Según; ¿sin duda hay beneficios derivados de un ambiente más saluda­ la Oficina de Defunciones, en 1947 murieron 141 personas al ble, no sujetos a cuantificación, sin embargo son electo de los causa de diferentes enfermedades intestinales. Desde esa época,! .logros de la Comisión. otra parte importante del pro­ la proporción de personas que mueren por esta causa ha dis4 Las mejoras educativas fueron minuido, aunque el número absoluto de personas que murieron^ grama de inversiones sociales de la Comisión en la cuenca. Se por las mismas en 1964 aumentó a 172. En 1947 los problemas^ .construyeron numerosas escuelas en cooperación con los gobier­ intestinales causaron cerca del 17% de todas las muertes y ehl nos estatales y locales y se proporcionó alguna ayuda financiera para pagar profesores extra en la cuenca. A pesar do esta aten­ 1964 el 11%. ! ción, la proporción de personas alfabetizadas aumentó con más Otra característica de la región, cuando se creó la Comisión^ lentitud que en toda la nación (excluyendo la capital) y hacia de homicidios. Se sabía bien que la falta dd| era su alta tasa u . condiciones sanitarias creaban ui| uní¿1960 esta proporción era menor al promedio nacional."'3 comunicaciones y las pobres condiciones sanitarias creaban ____fugitivos escondite ideal para los uc u de la ley. Su presencia erali; El impacto del gobierno sobre las condiciones de educación y x i los fugitivos la causa de muchos hechos ilegales. Según las estadísticas oficia®^ salubridad ciertamente es subestimado" .......en las cifras menciola causa de muchos hechos ilegales. Según Miadas. Sin duda, la calidad de la educación estaba mejorando IVrt kík, Xíi .» -------- ------------- la tasa de mortalidad es un reflejo de las mejoras e||í ,,i0 La reducción en l,i losa ................. ........ ........ .... - Ibidern, Probablemente hay una falla significativa en estas cifras poi las condiciones sanitarias, Estas mejoras, sin embargo, no se reflejan falta de información, especialmente en 1947. Por desgracia, no hay otras completo en estas estadísticas debido a que también resultaron en mayó® ¿(tientes que puedan ayudarnos a corregirlas. productividad para los miembros de la fuerza de trabajo y en mejores cótlK w” del analfabetismo es sólo una medida burda de las (liciones de vida, cu general. " Wm •La disminución ...... —uC. ^naimoensn 51 México, Secretaría de Industria’ y Comercio, Dirección General de EsjFTiras j educativas. Es piobabíc 'p-.c que uno de los efectos de la intervención :z- r —fueron sgA ’’’ la Comisión mdisíica, Departamento de Defunciones. Estas cifras no se basan en -las mejoras en la calidad y en la tlmaiión de la informes de los certificados médicos y, por tanto, deben considerarse coffi'iJlfecolaridad disponibles pura los niños en edad escolar. Hasta ahora no una forma satisfactoria de medir esto. una aproximación, íf 208 ’ EFECTO DE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC EFECTO I PE LA COMISIÓN DEL TEPALCATEPEC 209 al igual que las facilidades y oportunidades disponibles para > que sólc se quedaban durante el ciclo agrícola y durante el resto cada generación sucesiva. Las decrecientes tasas de mortalidad no ; i del año retornaban a sus hogares. reflejan las mejoras sanitarias para quienes continúan vivíen- ’ ¡ Como resultado de la inmigración de estos distintos grupos de do y que, por tanto, pueden ser más productivos y llevar vidas ... gente, las ciudades de la región crecieron con rapidez. Apatzinmás satisfactorias. Por otra parte, la comisión no era la única j gán aumentó más del doble su población durante ios años cinorganización oficial que trabajaba para mejorar las condiciones; '■■■ r .cuenta, de 8 300, en 1950, a 19 500, en 1960, en tanto que Zara: goza (Nueva Italia) aumentó de 4 750 a 8 900 durante el mismo en consecuencia la asignación de estos beneficios es difícil. ' La Comisión propició la colonización de tierras no cultivadas .? período.54 La región en conjunto experimentó una duplicación para lograr una utilización más racional del potencial económico ,tde su población durante la década y seguía creciendo con rade la región. Se formaron varios ejidos para quienes tenían de-J í pidez durante la primera mitad de la década siguiente. Se calcu­ recho a dotación de tierras bajo la reforma agraria, y no había . ló que casi 23 000 personas inmigraron a la región hasta 1960 suficiente tierra para ellos en otras partes de la Tierra Caliente J (cuadro v-4). o dedelaslas zonas vecinas. En 1958 organizaron 200 familias-00 en •. familias i Sin embargo, los inmigrantes permanentes a la Tierra Caliente zonas vecinas. Ense 1958 se organizaron una comunidad en la Tierra Caliente. Los emigrantes prove-•. , ueron menos numerosos que los emigrantes de otras partes de nían de la Tierra Fría y a cada familia se le dio una parcela-: a cuenca. Se calculó que más-de 17 000 personas abandonaron ejidal de diez, hectáreas para que la cultivara. No hubo otros j las regiones altas durante la década. Incluso el desarrollo de las intentos organizados para colonizar partes -de la región. No oW-. cosechas, que requieren mano de obra intensiva en una próspera tante, la población aumentó a medida que campesinos de otra «anonua agrícola, fue insuficiente para-absorber el crecimiento - - -------------—r.. partes de México llegaban en busca de tierra y_ trabajo. Se les.j <de la población y la fuerza de trabajo ociosa en las regiones unieron comerciantes y tenderos que buscaban oportunidades para, vecinas, en donde la agricultura estaba estancada. Las otras in­ hacer negocios en la próspera región. Algunas de estas personas, versiones sociales, como las facilidades para la educación, aumen­ se establecieron en la región y aprovecharon la disponibilidad> taron probablemente la emigración de las zonas altas, ai cono­ de tierra e irrigación para sembrar cosedlas comerciales. Se ford cerse formas alternativas de vida y difundirse las oportunidades 55 marón nuevas comunidades ejidales por algunos, en tanto que, de ocupación. otros compraron tierra que antes había sido estéril para el culq El mejor sistema de carreteras jugó su papel en la corriente tivo y transformaron pastizales en tierra de cultivo. Otros ingreó emigratoria cíe personas desde las zonas menos atractivas de la saron a la vida comercial de la comunidad. j cuenca, como la Tierra Fría, y en el aumento de la presión de Los trabajadores campesinos temporales inundaron la regiónj da población en otras ciudades en que la desocupación entre los para recoger las cosechas de algodón y melón. Durante Ta cose-j Trabajadores no calificados ya era un problema. Sin duda, las ca­ cha de algodón de 1964-65, la mayor en la historia ele la Tierríi-J rreteras también facilitaron la importación de nuevos bienes e Caliente, se necesitaron cerca de 15 000 hombres para complfrjfideas hacia la zona, estimulando, así, la demanda de productos mentar ia fuerza de trabajo local. Los trabajadores provenían.![por medio del efecto de demostración, Debido a la poca imporde otras zonas algodoneras, en su mayoría del norte de México^tancia económica con ■ ‘ ---- —------- - Jt< . - o-- 1-».- 'C la región así como de zonas rurales cercanas en que hay gran cantidad d|tnontañosn lontañosa, la mayor LífM. parte de la justificación &lan Parte dedeestas carreteras .»-4---1 r • - desocupación oculta. La estación de recogida del algodóu durfctá en el objetivo o-ene-M 1 11' '----casi cien días; la siguen la cosecha de melón y la de sandía, (®el desarrollo mexicano 1 evai) a^unos de los beneficios *manera ¿U' que la fuerza de trabajo absorbe un gran número de trajearreteras mejoraron la n /TT incÍ28'enas más remotas. Las bajadores temporales durante más de una tercera parte del a^®fecto en ambos sentídos° Rmano de obra, que tiene Trabajadores calificados fueron atraídos a la región por to®)¡enes de cons mío a la y ampdaron el mercado para ciertos a Vez ^Lle CUmpííun una importante funaltos salarios ofrecidos por los cultivadores e inversionistas, qu®/ M Censo de población 1960, Michoacán, p. 4. •; nes necesitaban capataces y operadores de maquinaria, .así conw -ts A partir de 1960, quizá aumentó la inmigráción a la Tierra Caliente agrónomos, vendedores entrenados y toda una serie de trab|« «libido a la prosperidad ocasionada por ■ los grandes aumentos cu la proL /T. ,. ef desarrollo de una eeononjMUtc¡ón ¡adores calhL...L-,rar ... ;..... . < pudiera invertido la tendencia hacia la emilifícados, esencia sp . región, sil^ rracíón netacomercial. observadaEsta durante los haber años cincuenta. agrícola. Muchas de estas personas no residían en la ~ • * -------- --ta efecto de la comisión del tepalcatepec CAPÍTULO VII UNA EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES DE LA COMISIÓN En la primera parte de este libro presentamos una discusión de los objetivos de los programas de las cuencas fluviales y ahora lo hemos ejemplificado con el estudio de las actividades de la Comisión del Tepalcatepec. Queremos, en este capítulo, utilizar este estudio para evaluar los resultados de la Comisión del Te­ palcatepec. La estrategia, en conjunto será considerada en el si­ guiente capítulo. Aquí indicaremos que el proyecto del Tepalicatepec fue en general atractivo y que su productividad justificó la decisión de realizarlo. Será necesario, sin embargo, hacer al­ gunas modificaciones a este juicio, ya que no se cumplieron sa­ tisfactoriamente los objetivos del proyecto y el ritmo del des­ arrollo agrícola fue muy lento para obtener un impulso. Empezaremos el análisis investigando los cambios que contri­ buyeron al desarrollo nacional sin considerar sus efectos sobre la economía’ regional. Estos cambios se debieron, básicamente, * al potencial agrícola liberado por la disponibilidad de agua para ] irrigación y el potencial hidroeléctrico de esta agua antes de ' ser distribuida por los canales de irrigación. No obstante, el ¡ proyecto ha hecho una contribución de cuantía al ingreso naj cional, y las ganancias de divisas también han influido en la j oferta de algunos factores escasos o superabundantes de la proIducción. / Después examinaremos los mismos desarrollos y otrós, excluí divamente, desde el punto de vista del desarrollo de la misma , región. En esta parte del análisis nuestro interés se limitará a los * .cambios en la' producción y en los niveles de vida que tuvieron ' un.efecto directo o indirecto sobre los habitantes de la Tierra i .Caliente, independientemente de su influencia sobre el resto de ■ ja nación. ■ft' jk PUNTO DE VISTA NACIONAL jilas inversiones de la Comisión de la Cuenca del Río Tepalcac ascendieron a más de 500 millones de pesos (a precios de durante los primeros dieciocho anos de su existencia. En rable subinversión en J|[ Secüon 1965 capítulo 1 212 EVALUACION DE LAS ACTIVIDADES EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES 213 CUADRO VII-1 ese tiempo se construyó una importante red de canales de' irri-, gación y un sistema de carreteras secundarías para facilitar el desarrollo agrícola en la Tierra Caliente. El aumento en la pro­ El sector agrícola en la Tierra Caliente y en la región de “control’' ducción agrícola, medida en términos de valor, es el principal beneficio producido por el programa de inversiones y el único Región de *Tierra Caliente que podía medirse. “control" * Trataremos por separado la generación de energía hidroeléc­ Población trica, en la que la Comisión cooperó con la Comisión Federal [ 1950 55 191 de Electricidad en la construcción de ciertos trabajos conjuntos.-; 1960 76 238 111 585 Los costos globales se distribuyeran según el principal usó que :j % del cambio 91 525 102.2 20.1 se hiciera de la parte del proyecto en cuestión. Por supuesto, Fuerza de trabajo no se pudo evitar la arbitrariedad inherente a toda asignación? 1950 .17 969 1■ 1960 24 396 de costos conjuntos. 32 739 % del cambio 82.2 El desarrollo agrícola Fuerza de trabajo agrícola 1950 No es necesario revisar el proceso por medio del cual llegamos 1960 al cálculo del producto agrícola neto en el capítulo vi; en lugar % del cambio 30 656 25.7 13 753 25 617 86.3 de eso tomaremos a este último como base para medir los be­ neficios agrícolas netos debidos a la irrigación. Este paso no es|hpeyfícíe cultivada difícil, pero implica hacer una pregunta hipotética: ¿Qué hubiera 1950 sucedido en la Tierra Caliente si no se hubiera creado la Co­ 1960 misión? Esta pregunta es importante, porque, incluso sin la in­ % úel cambio versión, hubiera ocurrido probablemente algún aumento en el valor de la producción agrícola, aunque hubiera sido menor queípalor de la producción el observado en la realidad. En 1947 ya existían obras de irri­ d (miles de pesos de 1960) gación en la Tierra Caliente; éstas hubieran podido aumentarse, 1950 34-479 23 786 privadamente. Es posible que hubiera ocurrido un cambio en JajJ 1960 181 067 47 297 . composición de las cosechas, por ejemplo, ya se había iniciado’ . % del cambio 425.2 üG.a la primera producción de melón y ésta hubiera aumentado sin láj 05 inversión de la Comisión. 1ten dina lentos rrionetat’i po* heutárea miles de pesos de 1960) Un indicio de la magnitud probable de tal cambio hipotético! 1950 815 puede obtenerse examinando los resultados agrícolas en una re-j 536 1960 . 1 714 825 gión que tenga un medio físico similar y no se haya beneficia! >% del cambio 1m 53.9 do con programas, en gran" escala, del gobierno hasta fechad!, recientes. Una región como ésa es la llamada Ciudad Altami-p rano, en el vecino estado de Guerrero.1 Puede obtenerse infor-j h Tierra Caliente incluye los municipios, de: Apatzingán, E. Buenavísia, mación, sobre los cambios agrícolas en la región durante los afwV gbriel Zamora, La H-uacana, Parácuaro, Tepalcatepec y Zaragoza, , en Micincuenta, de la información del censo agrícola. asacan. La historia del distrito de Ciudad Altamirano no permite :U región de control en Ciudad Altamirano comprende los municipios de: Coyuca, Pungarabato y Zirándaro, Guerrero, y San comparación exacta con la Tierra Caliente de la cuenca del Tf®oaCáñ. Lucas, Mi. líneas 1-9, 1 Agradecemos al ingeniero Cesar Buenrosuo de la Comisión del Balsar™' por la sugerencia en poner a esta región como zona de control. W censo de población, 1950 y 1960, Michoacán y GLielíneas 10-i8, apéndice i para la Tierra Caliente. Para la región control los censos agrícolas, 1950 y 1960, Michoacán y Guerrero. 214 EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES palcatepec. En 1950, sólo había en la región obras privadas de 1 CUADRO vn-2 irrigación en pequeña escala. En 1958, se creó el distrito de riego i de Ciudad Altamirano. Se instalaron varias bombas y se cons-' Costos y beneficios del programa de inversión de la Comisión del Tepalcatepec truyeron una presa para almacenar agua de irrigación y canales complementarios para riego, empezados en 1954. En cierta ma­ nera, esto aumenta el atractivo de Ciudad Altamirano como una Inversiones económicas Beneficios agrícolas región de control debido a que la zona de Michoacán tenía ca­ Costos de la Tierra Caliente Tierra Año totales nales de irrigación al principio del período de observación. Sin Total Caliente Te al es Alternativa embargo, como estos trabajos públicos de irrigación en Guerrero (1) (V P) (4) (5) no estaban construidos en 1950, las cifras para la región, por sí sola, exagerarían el progreso que pudiera haberse esperado en 4947 5415 23 447 Michoacán. Para compensar esto, se incluyeron otros dos muni­ 1948 1949 27 600 cipios en la región de control. Ambos pronto disfrutarán de los 1950 30414 frutos de la irrigación como resultado de la construcción de 1951 30 672 presas de almacenamiento para irrigación por la Comisión del 1952 37 558 Balsas. El incluirlos disminuye el efecto de la irrigación en Ciu­ 1953 40 132 dad Altamirano, a mediados del período, pero no lo elimina poí:i 1954 34 390 completo. En el cuadro vnd se presenta una comparación dej 1955 38 303 los cambios en la Tierra Caliente y en la región de control. I 1956 30 725 En la zona de control la tierra cultivada aumentó en un 29%| 1957 35 189 y los rendimientos un 54%, desde 536 hasta 635 pesos por hec­ 1958 28 195 1959 17 672 tárea, durante los años cincuenta (cuadro vu-1). Este aumento; 4960 24 245 en la productividad de la tierra (como resultado de la mejor 4961 9 938 tecnología y del cambio en la composición de las cosechas) y? ■1962 8 670 en la superficie cultivada formó la base para el ajuste en el vabi 1963 9 005 ' “ ' .i _ . Y La tasa de 1 creció 1964 fñe j del producto agrícola en la Tierrai •Caliente. 10691 : miento del valor de la producción agrícola en la región de con- 1965 7 898 ' de aproximadamente el 7% anual, se aplicó a la produqj1966« 7 000 7 000 ción incrementada q«o se observó en la cuenca del Tépalcatep^|j968 7 000 y se redujo la producción agru_mu de acuerdo con esto, ant^ggq 7 000 que se determinara el aumento en la producción agrícola netjjgyo 7 000 2 sobre el año base (cuadro vn-2, columna 4). El cTecímicnt<®971-99 7 000 de la producción agrícola, una vez deducidos los costos y siáfe--—— tener en cuenta los aumentos esperados en la productividad,Jafc>rAL 687 659 474 322 3 166 932 el cálculo de los beneficios que se atribuyeron a la inversión ------------------------ 741 638 1- . ...... „ ac b Esta tasa de incremento del valor neto de la producción agricola,J®|EÍÍT£.s. Columnas; recios constantes, constantes, es es muy muv alta, alta cad « = «-Cuadro v.g precios casi dnhlP el doble del promedio nacional, puede esperarse que continúe durante los cincuenta años de duración ( f v proyecto. En consecuencia, los beneficios medidos en este estudio son, 4' 3, Cuadro v-3. En estas columnas sólo se incluyen los costos imputables bablemente, un cálculo conservador de la situación real. Este efecto se W Cu; inversiones económicas y a ios gastos de operación corrientes^ Cuadro vi-9, compensado por la introducción de una tasa de descuento (véase más ro vi. aumento sobre „ vbase _ menos progreso anticipado. Véase lante) que hace a los. ingresos futuros mucho menos importantes que 4® producción presente, ® Columna 4, adelantándola 5 años, véase el texto. 3 el 215 216 EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADESEVALUACIÓN. DE LAS ACTIVIDADES 217 irrigación por la Comisión del Tepalcatepec durante el período i 1950-1970.3> * AI calcular los costos y los beneficios hemos aceptado valores en pesos (convertidos a precios constantes) con los que se hicie­ ron las transacciones en el mercado. Como dijimos en el ca­ pítulo i, es poco probable que ésta sea la forma ideal de hacer ? una evaluación de proyectos de inversión en los países subdes­ arrollados, ya qué los precios de mercado de los productos e insumos del proyecto, por lo general, están lejos de representar la escasez relativa social de los productos y los factores. El uso = de un conjunto de precios más complejo hubiera requerido mu- , cho más información (y tiempo) de la disponible, y también hubiera exigido juicios de valor difíciles de hacer, por ejemplo, ■ ¿logró México un equilibrio ideal entre la inversión y el con- . sumo durante el período 1947-1965, o debió consumir menos e ■ invertir más? 3 Aunque no hicimos ningún ajuste en los precios, vale la pena ; ; *iindicar do podría en qué necesitarse sen hacer los ajustes. Necesitamos considerar si hay alguna desviación, en los valores del , mercado, de valores sociales más adecuados, que pueda afectar los beneficios o costos de manera sistemática haciendo así ten­ denciosa nuestra evaluación. Considerando primero el lado de los . costos, nuestros dato, no nos permiten separar los gastos en in- : sumos de mano de obra directa y en otros insumos, y, mucho menos, valorar los insumos intermedios y los bienes de capitala los precios mundiales. Aunque existe, como hemos dicho, una.: gran cantidad de desocupación en México y aunque la creación de ocupación es uno de los objetivos principales nacionales clel, ¡ gobierno de México, la utilización de salarios monetarios reales):; en lugar de salarios ".sombra” estimados podría no ser muy des-7 orientadora. En la misma cuenca hay mucha evidencia de una ocupación casi plena, cuando menos durante las estaciones de mayor actividad, con una tendencia a que cualquier aumento notorio en la actividad económica produzca a su vez un aumento en los salarios. En otras palabras, los salarios monetarios no sub­ estiman seriamente el costo de oportunidad de la mano de obra dentro de la cuenca. Podría objetarse que el costo de oportunidad, a corto plazo, de un aumento de la ocupación en la cuenca sobrestima el costo de oportunidad social para toda la nación. La expansión de las oportunidades de ocupación, en la cuenca, da a la mano de obra desocupada la oportunidad de trasladarse a la cuenca y emplearse productivamente. Pero los costos en términos de consumo adi­ cional implicados en este proceso probablemente sean grandes y, como se argumentó en el primer capítulo, no es probable que el salario "sombra” adecuado para la mano de obra no calificada que de otra manera estaría desocupada, se aleje mucho del sa­ lario monetario pagado. En donde el aumento en la ocupación de mano de obra implica el empleo de personas entrenadas y calificadas, que de ninguna manera sufren desocupación en Mé­ xico, no hay razón para valorar sus servicios a menos del salario del mercado. Los insumos de bienes y servicios comprados por la misma co­ misión y por los campesinos que producían mercancías auspicia­ das por el proyecto provinieron tanto de productores nacionales como extranjeros. Como describimos en el capítulo u, la política de México ha sido la sustitución de importaciones mediante altas tarifas protectoras. Los diferenciales promedios del precio entre los bienes manufacturados interior y exteriormente se calcularon recientemente en el orden de un 25% (con un amplio campo de variación),5 Si, como dijimos en el capítulo I, los gastos en insu­ presentados en el —-cuadro vn-2, columna 4, se calen-..; mos producidos interiormente se valoraran a los precios mundia3 Los beneficios netos, prcsenuiuvo v. ........... , i^.-, vi-5 a vi-8. .MLa1 marcada v; 8. .... ------------laron con los ciatos de los cuadros disminución 1 les, probablemente serían menores. La mayoría de los insumos después de 1966 se debió, en los beneficios netos ! proyectadosa para ' ~ en gran.™ * importados consistía en bit.net de producción, que ingresan ai a , para — I producción de algodón en la región^ r._ . a las malas perspectivas parle, país con tarifas muy bajas, y ui ellos el uso de los precios mun­ Incluso, si estas proyecciones son erróneas por un gran margen, afectará».^ L.d......... diales significaría relativamentt poca diferencia, Pero una vez con­ muy; poco la tasa ___ ‘ interna de rendimiento debido al efecto del descuento^ siderados todos los aspectos, > as gastos del proyecto expresados en 1.los . beneficios . " ’ y costos en una época tan alejada como ésta del principio^ de la construcción. dos de 1a irrigación atribuye iodo" ;£n términos’ de ios precios mexicanos son mayores que ri si se hu___ mét~..~ ..ratodo —de medición de los beneficios de la ini; ■ 4 Este solo factor de la producción: ¿oleran usado los precios mundiales. 1 el incremento en la productividad a un C.. atribuidle a este ín-Oj En comparación, la producción agrícola del provecto se mml-’ó agua. En efecto, es un cálculo de la renta ricardiana 1competitivos gn sn «rn-ni-L o , piuyct.io ,>c > tilmo factor después que se han pagado a .sus precios competitivos todos todosles.lríJ| óvnputo hipotético-de 1^ ' n SU m’l>olía a los precios mundiales o a precios inferiores. Es 1 demás factores del proceso de producción. Es "un córni \ - a pagar si fuerai^ ; cantidades máximas que lo.s campesinos estarían dispuestos a pagar si fuerath 'Para un?, discusión adicional o'-a.-.e Tirnothv Kimj. empresarios peí rectamente racionales" (O. F.ckstein, op. dt., p. 19). Las .ra-1 ‘ zones de esto se discutieron en ■ el capítulo n -1 salitm and í'rade Policies sinea JO-/Ó. ‘‘ 218 EVALUAC cierto que los precios interiores para la frijol son mayores que los niveles m ducciones tienen relativamente poca im producción exportada, que incluye las de algodón y melón, reciben, por lo ge los mundiales, ya que, durante todo el han estado sujetas a impuestos. En dond cios mundiales, esto ha sido seguido con nución o exención total de los impuest la adopción de una escala decreciente que de Por tanto, parece que nuestro método ficios y de los costos tiene el efecto d sociales y sobrestimar los costos sociale de esto, el rendimiento sobre los gastos las oormas que se aplican generalmente lo suficientemente bajo para dejar plant se hubieran obtenido rendimientos más dos en otras partes de la economía. En el cuadro vn-2, los costos se anal con el fin de examinar la sensibilidad d en los supuestos, así como para ver p de utilizar los recursos de inversión pú na del cuadro vn-2 incluye todos los Comisión, desde su formación en 1947. de separar los gastos que se hicieron vida de las personas en la región, pe aumentado el producto económico mens se hace en las columnas 2 y 3 en dond versiones que pueden clasificarse como tulo v, junto con alguna parte de los g atribuirse al funcionamiento del sistema mínistración de los proyectos de inv tercera columna sólo se presentan los c versiones económicas de la Comisión e se hace con el fin de compararlos dir de beneficios utilizada en este libro: l cola de la Tierra Caliente que tiene su de la Comisión del Tepalcatepec.6 * • Las corrientes de tiempo en el cuadro vn-2, se pr para proporcional' información para la duración estim del proyecto. Estas proyecciones se hicieron con ayu Comisión del Balsas. Debido al efecto de la tasa de d rendimientos que se tendrán en el futuro distante, aju la cuantía de las diferentes corrientes sólo afectan, m sultados del análisis de la tasa interna de rendimiento EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES En el capítulo i discutimos las razones para n la tasa de rendimiento interior. En el cuadro resultados para una serie de alternativas diferent lisis más severo, esto es, cuando se comparan los Tierra Caliente con los costos totales del proy mostró una tasa de rendimiento de aproximada Cuando sólo se usaron como base del costo las in micas en la Tierra Caliente, la tasa interna aumentó hasta el 11%.7* Dados los factores que determinan los valore producción y las distorsiones resuham.es en nue tasas de rendimiento pueden considerarse acep embargo, algo bajas en términos de las tasas m dimiento disponibles en el sector privado, aunq obtener buena información para determinar cuá nivel. Nuestras conversaciones con comerciantes cias, como el hecho de que se observó que los prestado a los bancos privados a tasas de inter realidad (se informa que en algunos casos éstas p sugieren que’la tasa de rendimiento esperada sob siones es considerablemente más alta que el prom que se obtiene en los Estados Unidos.9 Las tasa menores al 15-20% nos tientan a la conclusión d obtenido una mayor tasa de rendimiento usando el sector privado de las manufacturas.10 La Secretaría d 7 Debe recordarse que en varios puntos de nuestro análisis los dujeron cálculos conservadores de los beneficios agrícolas obten programa de inversiones de la Comisión del Tepalcatepcc. Uno importantes de estos factores que hace que nuestros resultados ti menores es el progreso que se hubiera esperado en la región si n biera realizado el proyecto. Sí no hubiéramos ajustado los benef tener en cuenta el crecimiento esperado en ausencia de! proyect rendimiento interna en este último habría sido del 18.4%. * W. Paul Strassman, Technological Changas and Economía E Ithaca, Nueva York, Cornell University Press, 1968, pp. 124-5. * Tobín informó que "Phelps... calculó que la tasa a de la inversión tangible (privada) en los Estados Unid madamente, 14% en 1954". "Ecoaomic Grotvth as an Ob PolícyL American Economic Reuiew, uv, mayo de 1964, p que la tasa media de rendimiento en las industrias ma 6.26% en 1954, pero esta tasa casi debe duplicarse p el efecto de los impuestos a hs empresas sobre lo tasa d and Rates of Retnm m Manufacturing Industries, Prince ersity Press for the National Burean of Econotnic Research. 196 w Sin embargo, debe observarse que los altos rendimie mucho a la protección, mencionada antes; si se evalu mundiales la tasa de rendimiento en las manufacturas sería muc 220 EVALUAC Hidráulicos, de México, usa una tasa sus análisis económicos y está claro qu esa tasa, y el criterio de la Secretaría se logró también. Muchas de las personas implicadas e sobre la Comisión del Tepalcatepec se el proyecto sólo puede considerarse mar rendimientos económicos. Por lo general notable éxito. Esto refleja el problema de las tasas de descuento, ya sea para las inversiones alternativas o para prop preferencias sociales de tiempo. Si no se to, entonces el proyecto es en verdad descuento (esto es, el costo de oportun proyecto muestra una relación beneficio comparan los beneficios en la Tierra C tales del proyecto (cuadro vu-3); esta 6,7 si sólo se usan los costos de la Tierra Cal CUADRO Vll-3 Medidas de. los rendimientos del programa Costos totales A. Beneficios reales Tasa interna de rendimiento (%) Relación B/C descuento 0% descuento 10% descuento 20% 4.3 1.0 0.4 17.3 Relación B ,'C 0% io% 20% fuente: Cuadro viR. y pro 10.2 B. Beneficios, 'I’asa interna de rendimiento (%) Cos inve eco 4.8 1.6 0,9 altern EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES i La diferencia entre los dos análisis es resultado retraso en el tiempo entre la terminación de las ob ción y el impresionante crecimiento de la producción años recientes. El poco deseo o la falta de capacida toman las decisiones de política para incorporar las ta cuento en sus evaluaciones del proyecto ha signifi hayan entendido cuán costoso fue ese retraso. En e describimos la lenta respuesta de los campesinos y d proporcionaban crédito ante las nuevas oportunidades las inversiones de la Comisión en la 'fierra Caliente adicionales para la experimentación y extensión agríc aportaciones de crédito han acelerado la transición agricultura moderna comercial que es en la actualida tica de la zona. Esto también hubiera podido ayud algunos de los problemas de desigualdad en los ingr tenencia de la tierra que han surgido en la región. Tal inversión complementaria en el desarrollo a haber aumentado, si hubiera sido efectiva, la corrien ficios antes de lo que ocurrió en la realidad. Para efecto que tal cambio podría haber ti nido sobre la adelantó cinco años la corriente de beneficios compa los costos. La corriente de beneficios alternativa (cuad lumna 5) dio tasas internas de rendimiento notor altas (17.3%, cuando se incluye todos los costos, y la inversión en la Tierra Caliente únicamente) y rela ficio costo favorables con el empleo de tasas de des riores a cero (cuadro vn-3). Este descubrimiento c una adaptación más rápida al nuevo ambiente por to tores habría hecho al proyecto mucho más provechoso en la relación beneficiq costo con una tasa de descu cero no es tan notorio como cuando la tasa es mayo como base los costos de la Tierra Caliente, la nu 12% más ¿tita que la estimación original sin una descuento, y fue del 64% mayor con una tasa del 10% (cuadro vn-3). En conclusión, el proyecto pudo mejorarse de man rable si se hubieran invertido recursos adicionales en ule las técnicas apropiadas y en la creación de suficientes fa • 11 Este retraso, de respuesta a la oportunidad de produc puede explicarse satisfactoriamente sólo con las fuerzas cid in el período 1950-55 la producción total de algodón cu Méxic mente, se duplicó, pero la producción casi do existía en la ' en tanto que la superficie irrigada cultivada con maíz am cuádruple. • £• i EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES 222 EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES 223 gía al sistema, sino que, además, los costos de producción disdades para el crédito, con el fin de acelerar la respuesta ante el ■ minuyeron de manera impresionante. Una de las razones más nuevo ambiente. Una conclusión importante de este estudio, por importantes para esta baja en ios costos fueron los bajos costos tanto, es que debe darse más importancia a los problemas del 3 iniciales de construcción y las atractivas características de ope­ ajuste de la estructura productiva de la región para nuevas in­ ración proporcionadas por el río; debido a la corriente, casi versiones con la suficiente rapidez, para aprovechar, de manera constante durante todo el año, desde las fuentes que ¿iKmentaplena, una adición indivisible al capital general social de la región. Si la iniciativa privada no está preparada para asumir la tarea . ¡ ban al Cupatitzio, no fue necesario construir grandes presas para el almacenamiento de agua, de proporcionar esos elementos, entonces el gobierno debe or­ No se anticipa un aumento en la capacidad generadora insta­ ganizar el esfuerzo para asegurar que su inversión sea empleada lada dentro de la cuenca del Tepalcatepec durante la próxima plenamente con la mayor rapidez que sea posible. década. El consumo regional no aumenta con suficiente rapidez para requerir inversiones adicionales, como veremos en breve, y Hidroelectricidad . cerca hay varios otros proyectos hidroeléctricos que tienen mayor Aunque la Comisión no tuvo un papel importante en el desarrollo ¡ prioridad para la asignación de fondos de inversión. En el Estado del potencial hidroeléctrico de la región, sí cooperó con la Co- j de Michoacán, en 1971 estarán disponibles cerca de 336 00 ki: lovatios de capacidad adicional cuando se termine La Villita misión Federal de Electricidad (cfe) en la construcción de las ■ dos presas. Estos proyectos no se han discutido hasta ahora, por- i en la cuenca del Balsas, cerca de la costa del Pacífico. Este pro­ que son partes completamente separadas del programa de desarro- J yecto, parte de los esquemas de desarrollo regional de la zona lio, aunque este potencial hidroeléctrico fue, quizás, un factor j ; costera, proporcionará energía para una fábrica de acero inte­ importante en la selección de la cuenca para el desarrollo. j grada verticalmente, así como para las necesidades del crecimiento futuro de .la zona para muchos años. Otro proyecto del río Bal­ Cuando la Comisión empezó a trabajar en la cuenca, la peque- i sas, El Infiernillo, empezó a funcionar en 1964 y en la actuaña cantidad de energía hidroeléctrica generada en ella se desti-, a j lidad tiene instalada una capacidad de 672 000 kilovatios, con naba por entero a los mercados locales. La generación de electrici- 4 . los que se abastece al creciente mercado de la ciudad de Médad aumentó considerablemente durante el período 1950-65, al xico. Ninguno de estos proyectos está relacionado de manera construirse dos grandes plantas en el curso del río Cupatitzio, Las ..j directa con las plantas del río Cupatitzio, que forman el Sistema dos plantas, la Cóbano y la Salto Escondido, se localizan en eL Lázaro Cárdenas. rio, exactamente arriba de la Tierra Caliente, en donde el agua | se usa para irrigar los campos de algodón y de arroz (figura 4)./j ; El consumo de electricidad en la cuenca no aumentó con igual rapidez que la producción, a pesar de que su crecimiento ha sido En la evaluación preliminar del potencial económico de la zona,ni imás * que rápidd el promedio nacional.. En 1964 la electricidad d equipo de ingenieros observé) que el Cupatitzio: j disponible para la venta en México fue casi 2562', mayor que la importante corriente que proviene de sus arroyos —15 M 4a disponible en 1950, pero en 1964 las ventas de la región íucDebido a ...’/s en L estación seca— así como a la pronunciada pendiente de.5 ron un 533% mayores que en 1950T Como resultado del rápido 17 ni’ó. v lecho. que en 30 Rilóme iros desciende 1 200 metros, ofrece uno®láumento en 1.a producción, había disponibles grandes mu calcules su los potenciales hidroeléctricos más importantes en la República»W. Ijiara exportarlos a las regiones vecinas, en donde las demandas de sólo debido a la capacidad de generación potencial, sino lankfB industriales eran grandes y estaban en continuo crecimiento (cuano ios bajos costos unitarios de los trabajos, que también se®'“ bien por ■ i.orúi para dirigir el agua a las tierras irrigables en las planicies *Los datos sobre el consumo de consumo de energía eléctrica se obtíh ícron pm.i zo,la de operaciones de la Con; \niúnez.,: .. ... ^,x,ni¡5Íóii Federal do Elcctriiidad «que c< ÍHjayor que la cuenca hidrológica definida por la Secreta) ía de Recurso', íliricncin apoyó esas observaciones, como puede verse ( úajpráulicos. Cerca de dos (cu ---- Federal ' ■ ucvras '-'■'■y io\ non kilovatios de £ne|®!e la Comisión de partes de la energía rendida en el Dimite vio-i. No sólo se aña..ñadieron — ¿«kingán, Zaragi ......... c Electricidad se tendió a los distritos de Apal.... goza y Uruapan en 1965. La cuenca representó aproximadamente ■-« |l 80% de toda la energía que se informó en el cuadro vu ■{ fue vendida , « repalcuepe.. </, le de, T'P<M ‘-áKln la región. 1950. p. 9. w. EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES EVALUACIÓN de las actividades 224 i dro vn-4). Puesto que no hay diferencias en las tarifas de la electricidad en las diferentes regiones, no hay ninguna ventaja I local en construir una fábrica cerca de tina fuente de euereía o y así la disponibilidad de ésta no proporcionó un estímulo a la industrialización de la región, i Según sus proyecciones, la cfe no prevé un aumento notorio en el consumo regional de electricidad durante la próxima déj cada. Su programa de construcciones se basa en el supuesto de ;i una continuación de la estable tasa de crecimiento en la demam • da de poco menos del 10% que resultará de los mayores in. gresos, el crecimiento normal del comercio y el programa de ! electrificación rural. La mayor parte de esta demanda incrementada se abastecerá con la capacidad generadora existente, K.O PROA TZARAÍU.'.LA -FRESA TZARARACUA ukel n(5m, i nt¡ M | CUADRO VH-4 TÚNEL NÚN- 2 “O H TÚNEL NU«. 3-700 M Producción de -electricidad en el Sistema Lázaro Cárdenas, 1950-65 TÚNEL KIÍM- <-»<> M SiFÍN DEL «ORAL ■i . . PUENTE SIFÓN BARRANCA HONDA SnEL NÚM. 5 BARRANCA HONDA 731 M ñama Capacidad instalaba (kw) SIFÓN EL SALVADOR túnel NdM. sjoo M presa JICAlAN Iño TANQUE REGULADOR \ planta hÜm tubería oe alimentación OE lOMBAflOU 1950 1951 PRíU be DERIVACIÓN TÚNEL NÓM. Í'2SW^ u ruaran .apawhgÍk zonas irrigadas l;ig. ... Obias lúdroelccu'icas en e! río Cupaüuio Venta total - ------- " í(,a HF \ PRESA 0E OERIVAC.ÓK El COBAND LCW&AADIA ' Costos de generación Ventas de electricidad por hvh (a precios Dentro de Fuera de de 1960) la región la región 8 010^ 8 090 8 090 8 090 8 090 34 100 60110 60 110 60 110 60 110 60110 60 110 \ 132 560 132 560 132 560 132 560 13 183 10 771 12 177 11 318 7 651 4 418 2 850 3 659 5 521 8 303 6815 5 249 4 304 3 051 3 922 12 397 12 985 19 379 20 269 9 069 14 500 17 926 20 785 26 910 32 556 37 278 50 811 51 804 69 045 78 470 93 950 2 984 5 079 6 207 13 275 5 359 74 685 144 990 185 025 143 596 105 324 151 614 218 254 268 417 471 345 534 944 546 744 15 381 18 064 25 586 33 544 14 428 89 186 162 917 205 810 170 506 137 881 188 892 269 064 302 221 540 390 613 415 640 694 e: Comisión Federal de Electricidad, información preparada a solí1 de los autores e informes financieros. i EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES í EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES 226 22'7 mientras se construyen nuevas plantas en otras partes de la Re­ j EZ sector externo pública, para satisfacer las demandas de las regiones situadas fuera de la cuenca y que en la actualidad son abastecidas por En el capítulo i, examinamos la opinión de que una escasez el Sistema Lázaro Cárdenas. Es posible que se añada un tercer en los recursos exteriores puede imponer una limitación sobre generador a la planta Salto Escondido, durante los años el desarrollo independiente de una escasez en los recursos inte­ ese pro­ setenta aunque no se han elaborado planes para riores. La distinción pareció más válida desde el punto de vista cacidad instalada yecto. Esto aumentará en casi un 25% la ca¡ 1 de la planeación, a corto plazo, que para la duración del período en la región. durante el cual estamos considerando el funcionamiento de la Los intentos de calificar la tasa de rendimiento de las inver­ Comisión del Tepalcatepec. Durante un largo período hay muchas siones en la producción hidroeléctrica fracasaron debido a la cosas que casi todos los países pueden hacer para igualar la falta de información suficiente y a las políticas de precios que ¡escasez relativa de los recursos interiores y de los exteriores. Du­ tienen como fin estimular el uso de la energía eléctrica por la rante la existencia de la Comisión del Tepalcatepec, México industria. Los datos proporcionados por la cfe muestran que ha devaluado su moneda dos veces, ha sustituido la importación las inversiones a lo largo del río Cupatitzio tienen un rendi­ por producción nacional en una escala considerable, ha consermiento negativo. Sin embargo, es posible que la tasa de rendi­ ¡ fado además la libertad de cambio y, por consiguiente, es difímiento social de la inversión en instalaciones de energía eléctrica *las considerar divisas como una limitación sobre su des­ haya sido alta, ya que dos costos unitarios dé construcción fueron lio. . bajos y las plantas tuvieron una tasa alta de utilización. En No obitante, la necesidad de na.sido sido vapunacionesha nuevas exportaciones parte la explicación de este rendimiento negativo está en las ta­ Ina ansiedad continua entre los políticos mexicanos. Sin duda, rifas relativamente bajas cobradas a los industriales que usan precian proyectos como el del Tepalcatepec, que hace una adila energía eléctrica en su producción, y que representaron la í ión neta considerable a los ir V-L/MÜ ingresosVIL de divisas, mucho más mayor parte del co rsumo de la energía producida en la región. j ue un proyecto de igual provecho interior ■ pero que no hace Otro factor podrían ser las prácticas de contabilidad dé las di­ Jinguna contribución r:i„ „ L neta a la mejora en el balance de pavisiones dentro de k Comisión Federal de Electricidad; es posible í os. La Comisión del Papaloapar. i calculó que el contenido que la energía se venda a las divisiones de distribución a un ; e importaciones de su inversión total, 1,inen el período 1947-1956, bajo precio y estas últimas sean las que en realidad obtengan 14 ie del 31.7%. Utilizando aquí un porcentaje, aproximadaganancias. Se necesitaría un examen más cuidadoso del tema para lente similar (qi ¡ue quizá sea exagerado para los proyectos de asegurar cuál de estas dos explicaciones es más importante y si 4r\"' ■Comisión del Tepalcatepec, ya que son a una escala más hubo otros factores que produjeron los resultados . inesperados. Jkqueña), tendríamos ... mi^unaciunes ae, más me o me—1 '_____ 5 un «v total de importaciones de,omás En la época en que se empezaron a construir las plantas había >«8, 160 millones de pesos (a precios de 1960) entre 1947 y 1965. una grave escasez de electricidad en los estados industriales ve­ ' . «lemás, otras inversiones, en especial la maquinaria agrícola, cinos y se necesitó la energía de la planta Cóbano para el cre­ Jpbién habrán absorbido muchas divisas, Pero la Comisión cimiento continuo de la región. Desde ese tiempo, esta energía llculó el valor de la producción de algodón, i, en el ciclo 1962-3, 20Q -----se ha integrado a la red nacional y representa sólo una pequeña ,>209 millón-Jshd~ " r mí-----------" es s proporción de la producción nacional. Esta producción, no obs- ,,Jcomn H XluxZ ^ ^el‘ algodón es la cosecha de pomo exportación más importante conI México, esto f puede considerarse tante, es aproximadamente veinticinco veces mayor que el como 209 millones de pesos J divisas. Esto cubriría el uso de avisas que m divisas que hace la Comí____ sumo de la cuenca, incluso después del reciente aumento1 en' la-----una > jML Utia de la cuenca, hiuuou — r............ . -W» Y probablemente la mayor parte de las que se necesitan 1 representó se necesitan 9Ur°-dad económica. Por esto, la electnci económico de los esta-A comprar tractores, despepitadoras de algodón, aeroplanos, actlV1 contribución im¡ portante para el desarroi • ;dad era escasa yjE Además, ya han ocurrido varios otros ciclos agrio ' dos vecinos en unar ,época en que u --------------------Jyjfclón, cada uno tan productivo como la cosechaotros « la elec < , de ciclos agrícolas del desde entonces la energía barata de esta región se ha utilizadoj 1962-3, ?®gual que de melón cantalupo, melón y sandía, así como como una base de energía dentro de la red nacional de elec-J t I tricidad. ■.i’ • «Comisión del Papaloapan, Economía del Papaloapan, vol. 1, p. 202. 1 228 evaluación de las actividades EVALUACIÓN de LAS ACTIVIDADES otras cosechas. Por tanto, el proyecto es claramente un proveed0Como°d^ÍSante la región también ha experimentado el S, retiro de mucho capital extranjero del ímancianuento de las cosechas y su sustitución por capital local acumulado con g E“,“ai Xia, ¿«a. *>. mi extraniero ha continuado utilizándose en otras paites México pala alentar la búsqueda de nuevas regiones en que pue­ dan cosecharse, lucrativamente, cultivos que tienen gran demanda los Estados Unidos. En este sentido la cuenca del repalca en urocc te pee no no sólo ha sido una fuente de divisas sino también que se les liberado recursos que necesitó originalmente, para use en otras partes de México» . La oferta de factores internos de la pr&duccion tieran fuentes de capital no utilizadas en la repión antes llegando a «.T’.'"? a£C,:^ntl> <’e b praetaJÓ, o,¡á C probabIe Que las ganancias futuras no serán igualarla, nU aS ! versiones ntóó te / n X " - E1 capital norteamericano J LL U Slembra.(i« «elón y sandía ya ha sido capaz de trt’h darse a otras regiones, siendo remplazado con capital loc-il L, importancia Ha existido una considerable consiaciauit-. controversia sobre ------------la * -i cascz relativa que la escasez ( de determinados factores de la producción , P8SadaS La ’-ersióXn J íquipo limitación de la tasa de desarrollo económico.., S'deX'1 tiene como una 1............ ...... tísico de las despepitadoras de algodón se recuperó denml U • ipítulo i, esto es, en gran parte, un pros Como indicamos en el ca] dos ciclos en todos los casos, (hacia 1966-7), sqX una fuente Mema 'práctico, y es de utilidad cualquier aclaración que robre; CXn£bCXí!an? " regÍÓn' y Us é hagan estudios como éste. El aprovechamiento de recursos y tÍpS - ddade d V «pial de trabajo fueron satisfechas, por las ganancmde talento empresarial no explotados, hasta el momento, son potencialmente una valiosa contribución de un proyecto de - ‘ apodrfeSPUéS X CCrCa dC tinc° dclos de siembra en gñi? escala versión nública al desarrollo nacional. -vado nudo" en1"'61'683?116 °lTrVar qUe 61 sistema bancXio pX ParecePque la falta de espíritu de empresa redujo, efectiva-. ■en años r’ ’ gene‘a ’ «nallzar fondos hacia fuera de la reo-ron en 1965 a nJnte el hendimiento de la inversión durante los primeros an«. meno de sTXui TItera * Pléstamos tendió .3 menos de 20 millones de pesos, mientras que en ese año había ?? nrovecto pero que posteriormente el proyecto pudo tent?; .......... í® Ia \e8iód depósitos a la vista que ascendían a casi 30 mi aumenlr e? número de campesinos con imciativ^ aban 12 ^XtXa «iZ^En^^tulo^, « ’w^es X-dXÍ X limitaciones incluidas en . iue el lento principio en la utiliza^ i.ZX/X™0’'la regi6n ha podido atraer muchos inmigrantes desarrollo del Tepalcatepec fue el temoprincipio 86 blibiei““ L“'oi<luan trasladado a los centros de rsos que proporcionaron los trabajos dS ' ción de los nuevos recursos de considerables estímulos por parte dej 4^ ™ desocnnnHíi T ■-> tí (XóXdX Te^e^c picada desocupada? La' BÍTÍaJoimldlTcrédrtoV^¡“empezó la región a el potencial que se había desarrollado. En el proceso se ent n| ídbaXoedeeceírdenOTnente "UeVa gCnte' Se realizó <1 ron campesinos y empezaron a funcionar losq | ETlí rec /n X h" pr°srama de Colo“izació“' pero la mílE n de ios recién llegados no necesitaba de incentivo, especiales mercado, de manera que los,residentes dispuestos a tomtu riega XezaXn a aprovechar las oportunidades de cultivo de nue| ? ireSPUeSta 3 h PlétOTa * P tdad s migración ha continuado, quizás a una usa tXroas para su propio beneficio. Este estímulo inicial fue ,p| LvX V *•! 1 pO51ble (3ue e“ la O ' actualidad la inmigración hacia la ins j porcionado, quizás un poco tardíamente, por una ““^ " j qUC COm ense Ia e ?a mP emigración de otras parres Dudo r«,Sma' íuera.° éste el «so, hacia 1960 el proyecto |udo retener, aproximadamente, 40 000 personas más en la redecir que los recursos que alentó son realmente empresan | 23q evaluación de las actividades ; EVALUACIÓN LE LAS ACTIVIDADES 231 gión de lo que se hubiera podido esperar y esta cifra aumenta I ver la plena utilización de las obras de inversión construidas con el transcurso de los años.15 i por la Comisión y para asegurar las inversiones complementaPara resumir el punto de vista nacional, está claro que una rías por los intereses privados que resultarían en un desarrollo evaluación únicamente cuantitativa de los resultados de la m - : regional equilibrado; el desarrollo regional era un bien imporyor producción agrícola en la Tierra Caliente no bastan para . . tante para quienes elaboraron originalmente el programa de in­ justificar la inversión de la Comisión en el caso extremo en que ; versiones públicas en la región. A pesar del resultado en general se usa una tasa de interés de 20% como unidad de medida pero favorable del análisis, examinado en la sección precedente, está sí se obtuvo una tasa de rendimiento aceptable. Hay, adem , claro que estos desarrollos no tuvieron los efectos deseados sobre otros beneficios que no se cuantificaron y que pueden incluirse , la región; los beneficios fueron para la nación como un todo, v con iustificia en el análisis. La creciente producción de madera para ciertos individuos, pero el efecto regional fue limitado en la Sierra Madre del Sur, mencionada en el capítulo v, y la Esto aparece con más claridad en la descripción del desarrollo nueva mina y planta procesadora de bario deben su existencia ? a las carreteras construidas por la Comisión en re aci n , industrial en la región. La inversión inducida en las industrias relacionadas fue muy limitada, y sólo las industria; programa de irrigación. La mayor ocupación y la contribución , •ias cuya estruo ceica de la a los ingresos de divisas contribuyeron al esfuerzo de j tura de costos hizo determinante la estabilización lio nacional aunque estos efectos son, en teoría, explicados, Sj fuente de materias primas se encuentran hoy c« d.d CI1 men día en la zona. se acepta la estructura de precios empleada al hacer los cálculo ; Sin una política favorable de precios de la electricidad , 1OS de beneficios y costos. Cuando se añaden estas consideraciones, abundantes recursos de energía de la región no contribuyeron al análisis cuantitativo los resultados son suficientes para reco­ a as otras características de la misma para atraer una base inmendar este uso particular de los fondos de inversión guber-; dustnal más diversificada. El desarrollo agrícola sí aumentó los ingresos de las personas namental. Este descubrimiento, sin embargo, no reduce la im-j en la región. No sólo se abrieron nuevas tierras para el culti­ portancia de la observación de que hubieran podido hacerse, vo, sino que las tierras antiguas se hicieron más productivas. El grandes mejoras si se hubiera prestado más atención al proble­ efecto de este desarrollo se transfirió, en gran medida, a otras ma de acelerar el ritmo de la adaptación al nuevo potencial de; la economía como resultado del programa del gobierno. ó regiones debido a la industrialización limitada de la cuenca del no. Tepalcatepec. Hay dos componentes del crecimiento econó­ mico en la cuenca: el crecimiento como resultado del mayor EL PUNTO DE VISTA REGIONAL numero de habitantes y como resultado del mayor iiweso para La contribución del proyecto al desarrollo nacional también ha esas personas. El primer tipo de crecimiento aumenta la deman- ' sido su contribución al desarrollo regional. Pero como en h da de productos alimenticios y de servicios básicos que con frerealización del proyecto se tenían objetivos regionales econó cuencia se proveen ¡ocalmente, en tanto que el segundo depende eos y sociales específicos, sus resultados deben examinara , mucho más ■ de bienes manufacturados y procesados y servicios luz de esos objetivos. j que son proporcionados desde afuera de la región debido a la falta de una base industrial local. El desarrollo económico regional Xa ciudad más grande en la Tierra Caliente, Apatzingán, cre­ ció rápidamente, como dijimos, para convertirse en un centro A lo largo del cuarto capítulo de este libro se hizo referencia^ ■ de distribución de bienes producidos en la región e importados de la ausencia de políticas cuidadosamente estudiadas para promq ó , d ; -otras, 1 ------------j Uc.i y del IVlUCllc partes del país exterior. Mucha de esta mayor actieconómica puede de la región de control Miran que en la Tierra Callente | al n, d(? i i .í vaIVUU1, bi:a Do^o1un7%mV:drn‘‘d“e¡ ¿2^'de U - ZameTdtad^MeVíejorado las condición^ ;« ^as a lat región por elrama programa de inversiones de" la Code inversiones de la Codurante decada, i a,---------------.mmón cultiva^ZT.^7 piones en la Tierra Callente j. * del Tepalcatepec. Los mayores ingresos de los uuiiivaa 37 465 personas mas a la región de lo que se hubrera esperado^«Ja ~ -------------. . aores y los J mores y losaumentos pequeñosobtenidos aumentospor obtenidos por los trabajadores pequeños los trabajadores “ misión no existiera; este número es un poco menor que el de los y lariQ d¡ar¡0 comr¡buyeron a¡ Acimiento ---- u contribuyeron al crecimiento de Apatemigraron de otras parte se de la cuenca. | >nngán. Sin embargo se tuvo traer partes de-otras se tuvo que traerque de-otras delpartes país del país 232 í EVALUACIÓN DE LAS actividades se consumían a la mayoría de los bienes manufacturados que en la región. El efecto regional fue limitado además por la forma en que 4 evolucionó la agricultura de la Tierra Caliente. Con la firma de ? acuerdos de alquiler y la disponibilidad limitada de crédito, sólo • una pequeña proporción de las personas de la zona pudo par- 1 ücipar en la prosperidad que trajo el proyecto de irrigación. La mayoría de los ejidatarios en cuyas tierras se cultivaban algodón y melón se vio forzada a rentar sus parcelas a los cultivadores privados y ejidaies que tenían acceso al crédito de] Banco Eji- . dal o de las plantas despepitadoras. Trabajaron como peonesL con salario diario, con frecuencia, en sus propias tierras, y re­ cibían un salario por este trabajo además de la renta por sus tierras. Este ingreso es una mejora sobre los rendimientos que hubieran podido esperar si hubieran continuado sembrando en i la tierra las cosechas tradicionales. Los que han recibido crédito gozaron de considerables mejoras en su ingreso; aunque gran parte de éste se volvió a invertir, hubo algunas mejoras en los ¡ niveles de vida de estos campesinos. Por tanto, incluso en esta ; zona se concentró con rapidez el ingreso en las manos de unos pocos campesinos.16 Evaluación de las inversiones sociales EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES 238 Incluso si fuera posible medir con claridad la producción de la educación, sería un error considerar los gastos en educación únicamente como una inversión para aumentar la productivi­ dad. En gran parte la educación es un bien de consumo dura­ dero que puede enriquecer las vidas de las personas que la reci­ ben. Este aspecto social del trabajo de la Comisión en toda la cuenca es -un intento de traer los beneficios del progreso hecho por la nación mexicana a las zonas rurales. Éste es tanto un intento de redistribución del ingreso, con el fin de asegurar 1 un nivel mínimo de vida para todos los ciudadanos, como, es­ pecialmente en la Tierra Fría, un reflejo de la creencia de que México no puede ser una nación verdaderamente unida mientras grupos de mexicanos sigan siendo excluidos de los progresos que . se han hecho desde el siglo xvi. I Estas afirmaciones son adecuadas igualmente para las medidas l de salubridad y para muchos de los gastos en carreteras secun­ darias, en las. zonas de tierras altas, con las que se comunicó, i por primera vez, algunas comunidades con las rutas de transporte i público. Las obras urbanas, descritas antes, también sirvieron a esta función y son una fuente de orgullo para los residemes de la región, tantoy urbanos como rurales. Son un símbolo de que la i Revolución mexicana ha sido capaz de llegar a las partes más distantes de la nación y de unirlas en un solo pueblo. A pesar de estas contribuciones, quizá el efecto m¿ís impor­ tante que la Comisión ha tenido sobre el desarrollo regional fue la atención que creó sobre la zona como un foco de la inversión 4 , gubernamental. El programa de inversión social fue mínimo en „ relación con las necesidades, pero los gastos inducidos hechos . por otros organismos y por las mismas comunidades fueron de gran importancia para mejorar el bienestar de los habitantes. El aumento de la población en la Tierra Caliente, durante la ? primera década de funcionamiento del proyecto, fue acompañado ■ de mejoras significativas en las condiciones de salubridad y sa- » nidad. El paludismo había desaparecido casi por completo como, *una j amenaza a la salud, en tanto que se habían disminuido sig nificativamente otras enfermedades, incluyendo los malestares in- ■ testinales, por la construcción de sistemas de drenaje de aguas negras y otras obras. El analfabetismo también disminuyó mucho , EL PUNTO DE VISTA DESDE 1947 mediante campañas intensivas y la expansión del sistema esco-J| *lar. El problema de la evaluación de las inversiones sociales, que ■ En el capítulo i sugerimos que cualquier cvaiuacio] uier evaluación a póster i orí tuvieron un efecto importante sobre las condiciones de vidOf 'del proyecto deberá estudiar la predictibilidad del iLJuud'ju ue i resultado de 5WUn proyecto. ¿En qué medida habría sido posible anticipar el tanto en la Tierra Caliente como en el resto de la cuenca, ri® *"bl~ varias medidas desarrollo futurodedelaun programa muy difícil. Por ejemplo, son ¡ h: para justificar así sus benefí0S1 • - cualquier grupPW °nT®cios antes de que se hiciera la construcción? Con el conocimiento producción de la educación: el Pporcentaje de particular de edad que está matriculado, el número de profe-1. obtenido por el. transcurso del tiempo, podemos ahora decir que sores por habitante, el nivel de alfabetismo, etc. ó® probablemente el proyecto valía la pena, pero uu hex no hemos respondido a la pregunta de si un economista habría hecho . ----- .o un jniPara un análisis más completo de este proceso de concentración de®■ció semejante en 1947. ingreso, asi como algunas sugerencias para la redistribución del mismo® El principal aspecto de este problema seria la habilidad de los véase David Barkin, “Concentración del ingreso dentro del proceso de des® expertos en 1947 para predecir el curso de los acontecimientos arrollo agrícola”, Comercio Exterior, xix, 11 (noviembre de 1969), pp. 8704® .i 234 EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES j EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES 235 y bien integrado al sistema nacional de transportes y comuni­ en el desarrollo agrícola de la región. Al crearse, uno de los ¡ caciones se cumplieron a principios de la existencia de la Comi­ primeros actos de la Gomisión fue el establecimiento de una esta- í sión. En las zonas más altas de la cuenca, la gente y las comu­ ción experimental en cooperación con la Secretaría de Agri- j nidades habían estado aisladas durante décadas y el programa cultura, que centró su atención en el algodón. Aunque sólo había J de construcción de carreteras y de escuelas de la Comisión, ade­ doce hectáreas de algodón sembradas en 1950, parece claro que j más de la electrificacióh, jugaron un papel importante en la los agrónomos estaban convencidos del valor potencial de este j integración de la región a la nación. También pudo haber ace­ producto al principio de la existencia de la Comisión. Quizás j lerado el ritmo de la emigración a otras zonas más prósperas el analista no hubiera previsto, en 1947, el largo lapso entre el . del país. desarrollo de la tecnología para sembrar algodón y su adapta­ Finalmente, podría preguntarse si “la mano oculta'’ observa­ ción, mencionadas en otras partes del libro, y quizás hubiera pre­ da por Hirschman tuvo algún impacto sobre el progreso en la dicho una estructura de beneficios más parecida a la alternativa cuenca del río Tepalcatepec.17 Podría ser un tributo ¿1 los inge­ presentada en este capítulo. nieros. y planificadores del proyecto o a la generosidad de la La contribución de la producción hidroeléctrica fue de gran ; dotación física de la región que no parece hayan surgido obs­ importancia para la nación a principios de los anos cincuenta- : táculos no previstos que requirieran grandes cambios en los pla­ cuando ocurrieron interrupciones ocasionales de la corriente en i nes o que, si se hubieran anticipado, habrían amenazado la toda la parte central del país debido a una escasez en la capa- ; incorporación del proyecto dentro del programa de inversiones cidad generadora. Las diferentes plantas de energía que se cons­ públicas de México. Un posible acontecimiento positivo fue el truyeron fueron previstas y anticipadas con impaciencia por los descubrimiento de grandes depósitos con un alto contenido de planificadores gubernamentales y por los industriales. ; mineral de hierro en una zona cercana; actualmente desarrolla­ Por otra parte, la afirmación de que la presencia de la Comí- ; da por la industria del acero en cooperación con el gobierno. sión del Tepalcatepec diversificó el crecimiento económico en i ■De esta manera, el .analista que hacía una evaluación similar la cuenca o incluso en la Tierra Caliente, además del creci­ a la presente, pero hace 20 años, podría haber terminado su miento de la producción agrícola, parece ser injustificadamente informe con una Recomendación entusiasta para la ejecución in­ optimista, incluso para 1947. Es difícil saber en qué se basaban mediata del programa de inversión. Sus descubrimientos podían tales predicciones de una industrialización extensiva, pero en ver­ haber sido que la tasa de rendimiento excedía del 20% y que dad sería difícil fundamentar algo más grande que las plantaslos otros beneficios por los cambios en las condiciones de vida proceshdoras y centros de servicio que surgieron durante las dos y la. posible atracción de personas alejándolas de la Mesa Cenprimeras décadas de crecimiento. La Tierra Galiente sigue es-y tral eran más que suficientes, para justificar el proyecto, incluso tando muy distante de los principales mercados de la Mesa | : si no aseguraba el crecimiento espontáneo de la región más allá Gentral a pesar de la construcción de buenas carreteras y lal del aumento en la producción agrícola. inauguración de un servicio regular de ferrocarril. El clima exige j aire acondicionado en la mayoría de las oficinas y en las fá­ L LA RESPUESTA HUMANA bricas que no pueden dejarse abiertas para su ventilación. Pou último, hay una escasez de mano de obra que, sin duda, influye: y Los grandes cambios en la economía y la estructura social de la en las decisiones sobre el establecimiento. Por tanto, la producción; Tierra ..Caliente han sido acompañados por cambios en las acti­ manufacturera y los costos de transporte serían relativamente; tudes de los campesinos. Las diferencias en la habilidad técnica altos. A la luz de estas consideraciones, la opinión que considera ;.y en. la-riqueza que se observan en la actualidad en la región a la Tierra Caliente como un nuevo polo de crecimiento, y que Aon el resultado de las diferentes respuestas de los campesinos ante 1 parece haber sido creada por quienes desean esas inversiones,!t ________ I*! _ _ no debe considerarse más que como un artificio retórico al eva-jf ^nteryención gubernamental : Quizá las grandes diferencias en la riqueza y en el ingreso luar el proyecto, porque no se tomó ninguna medida para esfl son resultado de la disponibilidad limitada de crédito, debido timular el crecimiento industrial de la región. En el campo social, los planes para cambiar al medio ambicn- ; 17 Véase el capítulo 1. te y hacer de la Tierra Galiente un lugar saludable para viyM W ----- 236 EVALUACIÓN DE LAS ACTIVI a la pequenez del mercado para los nuevos productos comerc les. Quienes estaban más dispuestos a asumir un riesgo aprovec ron las ofertas de ayuda, al principio, y continúan recibiendo c dito si sus cosechas son lucrativas, en tanto que quienes vacila aceptar no han podido obtener crédito. Una de las formas importantes de acelerar la adaptación nuevo potencial agrícola de la región es reducir el riesgo a rente para el c^^esino debido a la experimentación. Esto pu hacerse garantizando al campesino su costo de oportunidad cosechas de subsistencia por la. tierra que siembra con produc comerciales.18 De esta manera, puede usarse un sistema p costoso para reducir los riesgos, con el fin de acelerar la tran ción de una agricultura tradicional a una moderna y mejo así los rendimientos de las inversiones públicas hechas en agricultura. Para terminar, los campesinos que tienen acceso al crédito y conocimiento de nuevas técnicas de cultivo demuestran que r ponden a los cambios en los precios y varían las cosechas se lo amerita la situación económica. Se espera que la producc de ajonjolí aumente a medida que las personas encuentran f mas de mejorar los rendimientos de la cosecha y se quita control del mercado a los pocos comerciantes de Apatzingán, lo dominan en el presente. No hay razón para dudar que e grupo de campesinos continuará mostrando esta capacidad ajuste y quizá proporcionará algunos de los recursos financ ros que otros campesinos necesitan para empezar a cultivar cosechas comerciales de mayor valor. Este análisis añade evidencia adicional a la creciente lite tura sobre la racionalidad de los campesinos. No indica que campesinos de la Tierra Caliente no actuaron como mejor co venía a sus intereses ya sea aceptando o rechazando las ofer de ayuda para la limpieza de sus tierras. Antes bien sugiere si se redujeran los riesgos a que se enfrentan podría acelera el desarrollo agrícola. Esta afirmación de la racionalidad del campesino no sig fica, sin embargo, que puede dejársele sólo para que se las ar gle por sí mismo. Las diferencias en los niveles económicos la región son, en su mayoría, resultado de un acceso desigual crédito y a la asistencia técnica. El campesino sin estos recur necesita ser protegido contra quienes buscan obtener el control^ 1S La garantía tendría que ser sobre el cultivo real de una nueva cos en la tierra que actualmente se siembra con cultivos de subsistencia, evitar una situación en la que la tierra no se siembra por esperar un greso mínimo garantizado por el gobierno. ■■ EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES 237 de la tierra que arriendan; la prohibición contra la venta de la tierra,, que se‘ da bajo la disposición de reforma agraria de / la“Constitución, sirve a este propósito. Bajo la misma, el cam­ pesino siempre tiene la opción de terminar el contrato y reiornm a la tierra una vez que ha obtenido los recursos necesarios, p sean propios o de. fuentes del gobierno. Por tanto, la racionad' dad económica no debe implicar, como se argumenta a veces, que el gobierno' puede- abandonar al campesino y dejarlo que reaccione a las fuerzas libres que operan en el mercado. LOSi PROYECTOS ¥ EL DESARROLLO REGIONAL vm LOS PROYECTOS DE LAS CUENCAS HIDROLÓGICAS Y EL DESARROLLO REGIONAL capítulo La estrategia de promover el desarrollo regional mediante los proyectos de las cuencas hidrológicas tiene aspectos económicos y políticos, como ya vimos. Desde un punto de vista de la eco­ nomía nacional, tal estrategia implica cuantiosas inversiones en la agricultura y en energía hidroeléctrica. Ya hemos discutido la contribución que tales inversiones han hecho al crecimiento eco­ nómico nar.oj al. En el caso de un proyecto que tiene éxito, como el dei Tepalcatepéc, esta contribución ha sido impresio­ nante. Es probable que el proyecto del Fuerte también demos­ trará tener un alto rendimiento sobre la inversión, pero no medimos esto con detalle. Por otra parte, el proyecto del Papaloapan parece haber tenido relativamente poco éxito. Es poco lo que podamos añadir, con provecho, sobre esto, aunque sí di­ remos algo sobre los efectos de los proyectos en la oferta de los factores que contribuyen a los objetivos del desarrollo nacional y regional. D a? airemos, primero, las razones para utilizar los proyectos de las cuencas hidrológicas integradas para realizar la inversión pública en irrigación, obras de energía hidroeléctrica y en el capital social general, en lugar de asignar cada concepto de inversión a otros organismos que por lo normal hacen esas inversiones en México. Necesitaremos enfocar la pregunta tanto desde un ángulo económico como político. Después terminare­ mos resumiendo las contribuciones económicas que los proyectos han hecho a los objetivos del desarrollo económico regional mexi­ cano, basándonos tanto en el análisis detallado del proyecto del Tepalcatepec, presentado en los últimos capítulos, como en las descripciones previas de los proyectos de las cuencas hidrológicas descritos en eL capítulo iv, y considerando de manera general las implicaciones para las políticas de desarrollo regional. EL EMPLEO DE LOS PROYECTOS DE LAS CUENCAS HIDROLÓGICAS INTEGRADAS 239 do nuevos organismos para administrar los programas de des­ arrollo regional si no hubieran mostrado perspectivas de contri­ buir considerablemente al esfuerzo del desarrollo nacional, además de su efecto sobre las regiones en donde se localizaron los pro­ yectos. La distinción entre los efectos de los programas sobre el crecimiento- del ingreso nacional y su distribución regional es importante al considerar las políticas de desarrollo regional. En la mayoría de los casos estudiados, el punto focal de las inversiones ha sido la utilización de los recursos naturales exis­ tentes como parte del esfuerzo nacional de desarrollo. El go­ bierno nppca ha, proporcionado incentivos especiales para que -Has nuevas empresas se establezcan en estas cuencas lUUlU hidrológicas Jen lugar de otras partes. Más bien, los programas de las 1 ' 5 cuencas hidrológicas se han enfocado a propórcionar el capital general social básico y a desarrollar el potencial agrícol: 'a e hidroeléctrico 1 de una región? Con una atención centrada en las actividades pri­ marias y sin algún estímulo específico para cambiar sus patrones de localización tradicionales, las nuevas empresas muy pocas ve­ ces encuentran ventajas en establecerse en regiones muy alejadas de los grandes centros de población y del centro del poder. ; Este tipo .de desarrollo regional dependerá, en ausencia de es"tímulos positivos, del establecimiento de utJ una base de exportación. Las ventajas comparativas de cualquier : zona recientemente desarrollada, ,si las tiene, probablemente se encontrarán en la ^producción primaria, lo que determina el -------------- JU un.K carácter de suHC base de deportación inicial. El hecho de que los proyectos de las cuencas hidrológicas harán más importante, si tienen éxito, a la agri­ cultura como la base de exportación (excepto en donde la dis­ ponibilidad de materiales y de energía hidroeléctrica barata atrae? :án industrias, metalúrgicas) c" ________ — .vi. líe­ es¿un punto en su ...favor. Como henos visto con los proyectos del Tepalcatepec y del Fuerte, el Iesarrollo de la irrigación puede tener Uuuntícuu efectoiuq impresionante obre la producción agrícola y los ingresos locales. I. Los resulta•i ios del proyecto del Papaloapan nos recuerdan, si ** si n embargo, que J se no es un resultado inevitable del desarrollo de las _ _L Ls cuencas . lidrológicas. Allí, la irrigación ha sido en especialucixucnia desalentadora: : ay obras fueron muy caras y es poca su utilización. Aunq' ¡ue la j ligación en la región del Golfo ha tenido efecto sobr re la pro­ ■ - Actividad, los críticos que argumentan que debió tener prio? idad la irrigación en las zonas en que es realmente indispensabl ” -pensadle J robablemente tengan razón.1 Sin embargo, el principal trabaj io i Las razones económicas Como sugerimos en los capítulos n-iv de este libro, en especial en el capítulo ni, quizás el gobierno mexicano no hubiera crea- ’ J Moisés T. de la Peña, El pueblo y su tierra: mito y reriidad de la '.forma agraria en México, México, Cuadernos .Americanos, Rml-, pp. 455-6. 1 240 LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REG de la Secretaría de Recursos Hidráulicos siempre ha sido la irr gación, de manera que parece inevitable una tendencia en e sentido en los proyectos del Papaloapan y del Grijalva. En u país tropical árido como México, en la mayoría de las regio nes, la irrigación es una condición necesaria para una al productividad agrícola. El desarrollo agrícola que México h experimentado en las décadas recientes se atribuye por, lo ge neral, principalmente el crecimiento en una zona irrigada.2 Pe un aumento de la zona irrigada no es una condición suficien para el progreso agrícola. Son necesarias inversiones en comun caciones, crédito, ayuda técnica y, quizá, otras en capital soci general. Así, ya estén o no coordinados dentro de un organism los elementos básicos de la estrategia parecen bien elegidos pa promover el desarrollo agrícola, y es difícil pensar en cualqui estrategia alternativa que pueda haber obtenido resultados co un éxito semejante en este respecto. Pero para el desarrollo continuo la agricultura podría est alejada de lo ideal como una base de exportación. En prim lugar, sus productos son aquéllos para los cuales, al menos m allá de cierto punto, es probable que las elasticidades del ingres de la demanda sean bajas, y los términos del comercio entre región y el resto del país pueden empeorar. En segundo luga los efectos en “cadena” sobre otros productores serán pequeño Incluso aunque una agricultura avanzada compre una alta pr porción de sus insumos a fuentes no agrícolas, especialmente t mercado es muy difuso y no parece tener mucho efecto sob el establecimiento de las principales industrias. Un ejemplo d ese caso puede ser la falta de industrias en grandes zonas d medio oeste de los Estados Unidos, en especial en los estado de las planicies. Esto será incluso más cierto para la agricu tura en una economía subdesarrollada, que estará menos meca nizada y por tanto comprará una menor proporción de sus in sumos a otras fuentes no agrícolas, Lo mismo es cierto co respecto al establecimiento de las industrias manufactureras d bienes de consumo. Por tanto, los efectos en “cadena” hacia atr son pequeños. Además, el valor agregado en el procesado de mayoría de los productos agrícolas es una proporción muy pe queña del valor bruto de la producción. Tanto la experienc del proyecto del Tepalcatepec como del proyecto del Fuert apoyan este argumento. Otra producción primaria y procesad local, como las de los productos forestales, podrían aprovecha las obras de capital general social que existen actualmente en 2 Por ejemplo, ibidem, p. 206. LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGIONAL 241 cuenca. Ejemplos de esto son la Fábrica de Papel Tuxtepec, en la cuenca del Papaloapan, la planeada (pero que nunca se cons­ truyó) en la cuenca del Tepalcatepec, y los trabajos en el bario con su planta en Apatzingán. Pero la experiencia mexicana su­ giere que quizás tal producción tenga algo más que un efecto menor sobre el ingleso bruto regional. La ausencia de cualquier desarrollo económico regional autosostenido es importante en especial en vista de nuestra discusión de los problemas a que se enfrenta la ciudad capital de Mé­ xico. En el capítulo n indicamos que los costos del “congestio­ namiento'’ originado por el rápido desarrollo de la industria en el Valle de México y el crecimiento de su población, han aumentado con rapidez y son causa de gran preocupación para algunos políticos. Es probable que los beneficios provenientes de las economías de la aglomeración ya no están aumentando e, ' incluso, podrían estar disminuyendo por el crecimiento del Dis­ trito Federal; en vista de esto, no parece sorprendente que otros centros industriales se desarrollen en los estados vecinos, exac­ tamente fuera del Valle de México, pero quedándose a una dis­ tancia de la capital fácil de recorrer. No obstante, los programas de desarrollo de las cuencas hi¡ drológicas ¡d facilitaron el proceso de incorporar economías técni■ cas externas dentro de cada cuenca directamente en el proceso de planeación. En la cuenca del río Tepalcatepec, la ejecución simultánea de los segmentos de irrigación y de energía hidroeléc­ trica de los planes de desarrollo fue, probablemente, la forma más eficaz de utilizar los fondos gubernamentales. De manera similar, la construcción de carreteras para fines de comunicación también requiere alguna coordinación con las demandas futuras del comercio y de los pasajeros por transportes de superficie. Sin embargo, la coordinación por la Comisión no implica que dentro del proyecto se asignen cantidades adecuadas de inver­ sión. Por ejemplo, no hay ninguna cantidad determinada técni­ camente en inversión en carreteras que deba combinarse con un determinado proyecto de irrigación. Es posible que haya un mí­ nimo absoluto de carreteras indispensables antes de que los pro­ yectos de irrigación puedan hacerse productivos. Más allá de este punto, que podría representar unta gran inversión, los “insumos . adicionales en carreteras” continuarán aumentando la producti­ vidad del proyecto de irrigación, pero, eventualmente, lo harán a una tasa decreciente que podría, incluso, disminuir hasta cero. Es probable que los problemas más interesantes sobre las polí­ ticas de transportes estén en la etapa en que la productividad marginal disminuye, pero, sigue siendo positiva. Es aquí donde 242 LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGI quizás se. tenga que decidir si debe pavimentarse una carrete o, en “una economía desarrollada, si debe construirse una auto pista. En el capítulo i encontramos el argumento, de Hirschma de que podría ser mejor dejar que el gobierno se vea inducid a ampliar el sistema de carreteras por el crecimiento previo d sector privado, más que ampliar el sistema y esperar que indu cirá a la actividad privada a- utilizarlo. Este argumento es má plausible durante esta etapa. Existe el peligro, como indica Hirschman, de que los orga nismos gubernamentales lleven muy lejos la construcción de ca rreteras; puede considerarse a un- “embotellamiento” mucho me nos deseable políticamente que la menos obvia subutilizació Podría incluso llevarse la construcción de carreteras más allá d punto en que un aumento en la inversión no tendrá ningún efec to sobre la productividad. Quizás tal es el caso con algunas d las carreteras de la cuenca del Papaloapan. El otorgar a u organismo el poder de coordinar las inversiones, no elimina evidentemente este riesgo. En justicia, debe recalcarse que subutilización puede surgir por aspectos de indivisibilidad, y qu las economías a escala podrían justificar que se le construye antes de la demanda. Aunque la productividad de todas las actividades en la cuen ca depende hasta cierto grado de la existencia de una red d carreteras, habrá variaciones obvias en esto. La etapa en la cu las mejores carreteras no tienen un efecto sobre la productiv dad podría alcanzarse para algunas actividades mucho antes qu para otras. Si todas las actividades se plantearan de manera s multánea y centralizada, entonces, conceptualmente, una activ dad o un grupo de actividades determinará en dónde estaba punto marginal de la construcción de carreteras. Esto es clar en particular, cuando estamos considerando la expansión en tér minos de un sistema de carreteras de mayor densidad, más qu en términos de un aumento en el volumen del tráfico que un carretera en particular pueda manejar en un período determ nado (porque la demanda total sería inevitablemente parte d cálculo). Hacer de mayor densidad el sistema de carreteras el tipo de expansión que más interesa al desarrollo de las cuen cas hidrológicas en México, pero en la Mesa Central, la amplia ción de la capacidad de transporte de las carreteras es, quizá de igual importancia. Las decisiones sobre la pavimentación d una carretera tienen algo de ambos aspectos, ya que no sólo afecta a la capacidad de transporte de una carretera, sino tam bién a la calidad de servicio que puede dar. Con frecuencia, en una región agrícola recientemente “abie LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGIONAL 243 ta”, la irrigación podría ser una de un grupo de actividades que determina la extensión del sistema. Pero también es posi­ ble que sea más necesario coordinar la mayor parte de la inver­ sión en carreteras con el aumento de las actividades en una región vecina, o con la minería, o con el turismo. En el caso de la cuenca del Fuerte, por ejemplo, la carretera que forma la principal ruta turística y comercial entre el México central, Baja California y la costa del Pacífico de los Estados Unidos cruza la parte baja de la cuenca. El que la Comisión del Fuerte se haya preocupado poco por utilizar su poder de construcción de carreteras refleja el hecho de que la zona a la cual sirve ha tenido buenas carreteras para otros propósitos, y que una inver­ sión adicional en carreteras por su parte —excepto en carreteras locales para transporte de productos agrícolas— habría tenido poco efecto sobre la productividad de sus otras inversiones. Es probable que uno pueda argumentar de manera análoga respecto a otras inversiones de capital general social, aunque deben mencionarse dos cosas: El componente de consumo de tal inversión quizás sea más importante aquí que en el caso, de la inversión en transportes, de manera que los efectos de la produc­ tividad no tengan importancia en la decisión al margen de cuánto debe gastarse en cada una. Se ha trabajado poco con la relación técnica entre tal inversión y la productividad de otras inver­ siones, y es mucho más difícil hablar de manera general sobre los efectos de diferentes cantidades sobre la productividad. Las razones políticas Aunque el argumento económico para hacer de las cuencas hi­ drológicas el punto de coordinación de la inversión pública regio­ nal no parece, por lo general, ser particularmente fuerte, en Méxi­ co la estrategia tiene mucho más sentido si además de los factores económicos consideramos factores políticos. Como hemos discuti­ do, con frecuencia ha demostrado ser muy difícil para el gobierno mexicano lograr alguna planificación coordinada de la inversión pública y existe un gran número de organismos descentralizados con poder de gasto. Las comisiones de las cuencas hidrológicas representan un intento de coordinar el gasto del gobierno bajo un organismo semiindependiente sobre la base regional. Las dificultades en la coordinación de la inversión pública, frecuentemente, han reflejado, en el pasado, el patrón fuerte­ mente personalista de las políticas mexicanas en las cuales .. Jos líderes nacionales. .. se han identificado con determinadas ideas 244 LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGIO o políticas. Aunque Scott informa que recientemente este rasgo de personalismo entró en decadencia,3 el proyecto del Papaloa pan es un buen ejemplo de un esquema en el cual se identificó a su fundador con su desarrollo. Un síntoma de esta decadencia es la desaparición de los viejos “caudillos" líderes cuyo poder se derivaba, no de la autoridad constitucional, sino de sus segui­ dores personales y militares. Esta decadencia puede hacer má fácil lograr la coordinación, lo que pudiera ser la razón por la que ha existido una tendencia a que las comisiones se trans­ formen de un organismo que sólo gasta el dinero en uno que planifique y coordine también la inversión que no se destine a recursos hidráulicos, incluso aquella que será hecha por algún otro organismo gubernamental. Es interesante que las dos secre­ tarías que tienen una responsabilidad especial en la coordinación de las inversiones públicas, la Secretaría de la Presidencia y l Secretaría del Patrimonio Nacional, hayan sido establecidas hac muy poco tiempo (durante el régimen de López Mateos). N obstante, aparentemente es cierto que los celos y rivalidades po­ líticas y el liderazgo personal siguen haciendo difícil la coordi­ nación. Según Scott, el personalismo ha sido remplazado po un proceso de elaboración de políticas más formal que da un mayor papel a la burocracia profesional y a los grupos de inte­ reses funcionales? Ninguno de esos hechos hará probablement más fácil la coordinación: los organismos administrativos pueden estar tan ansiosos de no compartir sus funciones con otros orga­ nismos, como los políticos lo están de no dividir su poder entr otros políticos. Una de las razones para utilizar a las comisiones de las cuen­ cas hidrológicas con el fin de lograr la coordinación de la inver­ sión pública dentro de una región es que ésta parece ser un forma ampliamente aceptada para que un presidente trate d hacerlo. Puede argumentar, basándose en el éxito de la Comisió de Río Tenneessee (tva), que hay una necesidad especial par integrar las actividades dentro de una cuenca hidrológica. Algun otra unidad espacial podría parecer más razonable, pero ést puede originar una fuerte oposición. Las cuencas hidrológica atraviesan las fronteras de los estados, y esta estrategia puede se la única forma práctica de coordinar las inversiones en diferen­ tes estados. Podría parecer la única forma legítima de evitar l canalización de los fondos a través de un corrupto gobiern estatal. Habiendo establecido una comisión, el presidente pued Scott, op. cit,, p. 13, * Ibidem, p. 9. 3 LOS PROYECTOS Y FJ, DESARROLLO REGIONAL 245 entonces utilizarla de una manera flexible para una serie de ac­ tividades; la Comisión del Tepalcatepec fue utilizada para estu­ diar el desarrollo potencial de los depósitos de mineral de hierro que ni siquiera estaban dentro de la cuenca sobre la que tenía jurisdicción. Por otra parte, como vimos en el capítulo iv, hay muchas si­ tuaciones en que parece poco apropiado utilizar una cuenca hidrológica como la unidad de planeamiento. Sí la planificación a nivel de cuenca es útil, es porque las interdependencias entre los diferentes proyectos de inversión dentro de la cuenca son considerablemente mayores que las existentes entre las inversiones interiores en la cuenca y las hechas en el exterior de ella. Si la cuenca es muy variada, como ocurre con la cuenca del río Bal­ sas, entonces' esto es cierto sólo para una pequeña gama de inversiones; y si, como es el caso con la cuenca del Lerma, las fronteras de la cuenca tienen poca importancia desde el punto de vista económico, entonces esta condición no se presentará. Aunque la flexibilidad de las comisiones las lia sacado en algunas ocasiones de sus cuencas para diversos trabajos, hasta ahora no se les ha dado poder para hacer una planeación extensiva fuera de la cuenca. Podemos expresar esto en términos de nuestro aná­ lisis previo. En el capitulo i discutimos el concepto de un aná­ lisis sinóptico incompleto a diferentes niveles de la decisión po­ lítica. Las comisiones de las cuencas hidrológicas representan un ejemplo de esto, más en su planeamiento que en sus funciones de inversión. No consideran todos los objetivos nacionales en su trabajo; sólo se ocupan de pequeñas zonas del país, e ignoran los efectos laterales (con frecuencia denominados '‘efectos exte­ riores” o “desbordes” en Jas discusiones sobre inversión pública) en otros objetivos como la estabilidad de precios, c ignoran los efectos afuera de la cuenca. Pueden considerarse como el resul­ tado de decisiones políticas sinópticas incompletas hechas a un nivel más alto. El éxito de tal estrategia depende de dos cosas. Primero, de los problemas que pueden resolverse dentro de la cuenca, con efectos laterales insignificantes sobre decisiones políticas con res­ pecto a problemas en el exterior de la cuenca u otros objetivos, de manera que éstos pueden razonablemente omitirse por las comisiones. En segundo lugar, depende del grado en que las so­ luciones a que se llegue en las decisiones políticas no se vean afectadas por efectos laterales de otras decisiones políticas. La coordinación centralizada del proceso de decisiones impone un costo en manejo de información y flexibilidad. Además, pu­ dieran existir otros costos en términos de la libertad individual 246 LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REG de decisión, la oportunidad para tener iniciativas, el estímulo tipo Hirschman, etc. La descentralización de la decisión impo un costo en donde, al descuidar la interdependencia de las dec siones, la productividad total del sistema es menor de la q hubiera sido bajo una coordinación ideal centralizada. La ele ción de una unidad de planificación incluye el equilibrio en estas dos. Podría plantearse la hipótesis de que si se convirtie la cuenca Lerma-Chapala-Santiago en una verdadera unidad planeación, sería una mala unidad. Con una economía com pleja y grande, muchos costos en que incurrió la coordinaci centralizada sucederían aquí. Sin embargo, debido a que la cue ca está tan ligada con el desarrollo de toda la Mesa Centr incluyendo al Valle de México, es probable que exista un gr número de interdependencias entre las decisiones de inversi en la cuenca y fuera de ella, y el omitir las que se tomen fue sería aún muy costoso. Otras cuencas hidrológicas podrían ser mejores unidades planificación, debido a que tienen algunos problemas comun cuyas soluciones no dependen de manera significativa de inve siones hechas fuera de la cuenca, No obstante, incluso en ell los principales problemas comunes de las cuencas altas no ser probablemente iguales a los de las cuencas bajas, lo que cau la dicotomía de funciones de las comisiones del Papaloapan del Tepalcatepec, e hizo que la Comisión del Fuerte ignore parte alta de la cuenca. EL CRECIMIENTO ECONOMICO REGIONAL DE MEXICO Un rendimiento satisfactorio sobre la inversión en un proyec de una cuenca hidrológica, semejante al que hallamos para proyecto del Tepalcatepec, implica que el proyecto hizo u contribución satisfactoria al aumento del ingreso nacional glob Ésta es probablemente una justificación suficiente de las po ticas mexicanas, al menos en las cuencas del Tepalcatepec y d Fuerte. Sin embargo, deben estudiarse los proyectos a la luz otros objetivos. En primer lugar debe evaluarse, como discutim en el capítulo i, el efecto de los proyectos sobre la oferta factores de la producción. En segundo lugar, aunque el rend miento de un proyecto puede ser satisfactorio en términos n cionales, los resultados pueden ser desalentadores para quien esperaban que produjera un mayor desarrollo regional. Puede considerarse el efecto de un proyecto sobre la oferta los factores de la producción separando sus efectos sobre la a sorción de mano de obra que de otra manera estaría desemplead LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGIONAL 247 y sus efectos en el aprovechamiento de ofertas no utilizadas de recursos humanos y naturales e insumos de capital, Ambas son benéficas para la economía, por supuesto, pero es probable que la primera sea un objetivo gubernamental más directo debido a que mejoraría con claridad la distribución del ingreso y eli­ minaría una fuente de descontento político. La importancia de la segunda depende del aspecto empírico de la existencia o ausen­ cia de recursos no utilizados; si existen, y pueden aprovecharse, tienen un efecto acumulativo que lleva a la explotación de otros recursos no utilizados. En México, el número de personas que se benefician directa­ mente por los proyectos ha sido de hecho muy pequeño en relación con la población total agrícola, o incluso comparada con quienes ingresan a la fuerza de trabajo. Como una estrategia para lograr la descentralización de la actividad económica o para reducir la corriente de emigrantes hacia las zonas urbanas los proyectos han logrado muy poco. En el capítulo iv dimos algu­ nos indicios aproximados del costo marginal de ocupación de los hombres en los proyectos de colonización, excluyendo los costos por los principales conceptos de gasto de capital, como las presas-que tienen múltiples fines y las carreteras principales, cuyos costos no es posible asignar a partes separadas del pro­ yecto. Estas cifras sugieren que el costo en proyectos adecuados para tener un efecto importante en la estabilización de la po­ blación agrícola serían enormes. Por otra parte, es probable que sea verdad que el costo de equipar a un hombre adicional con técnicas industriales modernas sería mucho mayor, y en este respecto los efectos sobre la ocupación de estos proyectos deben considerarse satisfactorios. El éxito de los proyectos en la utilización de recursos no apro­ vechados hasta entonces depende de dos cosas: Primero, deben existir esos recursos, y segundo, debe formularse tina estrategia correcta para aprovechar estos recursos que sí existen. La expe­ riencia mexicana que estudiamos no sugiere que baya grandes cantidades de talento empresarial potencial o de ahorros frus­ trados que están esperando ser utilizados en las regiones perifé­ ricas. Pero los proyectos de mayor éxito sí lograron alentar in­ cluso a pequeños campesinos para que cultivaran cosechas más lucrativas, aunque de más riesgo y mayor trabajo, y sí hubo ahorro local e inversión inducidos por 'ellas. Por supuesto, se uti­ lizaron ampliamente recursos naturales no utilizados hasta en­ tonces: en su mayor parte los efectos de esto se calculan en cual­ quier estimación del rendimiento sobre la inversión agrícola e hidroeléctrica, . 248 LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REG Pero al realizar el potencial en esos aspectos el proyecto d Tepalcatepec, cuando menos, sólo produjo una lenta respue en el sector privado, incluso en industrias primarias en que inversión gubernamental redujo los costos y aumentó las g nancias potenciales para toda una serie de negocios posibl Por lo general los proyectos de inversión pública están diseñad sobre el supuesto de que no será necesaria una intervención ad cional del gobierno para proveer el capital fijo y el capital trabajo. Si la respuesta del sector privado es lenta, entonces reduce mucho el rendimiento de la inversión pública. Tamb pudiera ser administrativa o políticamente imposible para el g bierno encontrar recursos financieros o personal para proporci nar todos los recursos complementarios que se necesitan. Con las varias calificaciones que hemos discutido, está cl que los proyectos de más éxito han hecho una valiosa contrib ción al' desarrollo de México. En donde han desilusionado m es en sus efectos acumulativos sobre el crecimiento regional, p las razones que expusimos en la primera parte de este capít lo, El gobierno mexicano no intentó una estrategia que fu capaz de conducir u la industrialización regional cuando men en un período previsible. Cualquiera que haya sido el apo verbal que haya dedo la idea, es probable que supiera perfe tamente que la industrialización regional habría exigido un e foque muy distinto. Probablemente en la mayoría de las r giones la industrialización no puede lograrse, excepto al co de un subsidio continuo proveniente de otras regiones. La e cepción de esto se encuentra en regiones que están dotadas c materias primas cuyo procesado, por lo general, se hace ce de su localización, y no cerca del mercado, como el acero en cuenca del río Balsas y los petroquímicos en la costa del Gol Está claro que el gobierno mexicano no ha deseado promo el desarrollo regional al costo del crecimiento económico n cional. RECONSIDERACIÓN DE LAS POLÍTICAS DE DESARROLIjO regional En el primero y en el tercer capítulos sugerimos que la preoc pación por el desarrollo regional surge por dos tipos diferen de problemas: las desigualdades regionales y los costos de aglomeración urbana. El primer problema produce el desconte to con respecto a la distribución regional del ingreso existe y con frecuencia fuertes presiones políticas que buscan un camb Las economías de la aglomeración, que hacen atractivo pa las personas y las empresas establecerse cerca unas de otras, c LOS PROYECTOS Y EL DESARROLLO REGIONAL 249 frecuencia son más que compensadas por los costos del "congestionamiento” impuestos sobre las personas y los servicios públi­ cos en una gran zona urbana. Aquí también existen presiones para la creación de políticas especiales que estimulen la des­ centralización del crecimiento futuro, si no es que presionan por la dispersión actual de la actividad económica y la población existentes. La experiencia mexicana sugiere que la combinación de estas presiones, analizadas con más detalle en los capítulos ii-iv ele este libro, fue insuficiente para producir costosas políticas de descen­ tralización que debilitarían el esfuerzo nacional de desarrollo. Los programas de desarrollo regional que llevó a cabo el gobierno mexicano parecen haber sido realizados de manera principal con la esperanza de que hicieran importantes aportes para las metas del desarrollo nacional, más que para redistribuir el ingreso a las personas infortunadas que han sido dejadas fuera del pro­ greso económico mexicano. Al analizar esta experiencia, parece estar claro que los políticos han deseado sacrificar muy poco en respuesta a las demandas de una distribución regional más equi­ tativa del ingreso nacional. Además, la experiencia mexicana nos indica que la creación de un& base de exportación no es una condición suficiente para el crecimiento económico acumulativo de una región. La expe­ riencia obtenida durante las décadas pasadas sobre la importancia de los efectos en "cadena” se ve confirmada por nuestro estudio. Sin incentivos obligatorios técnicos o financieros para la locali­ zación de la nueva inversión en una zona, es probable que jue­ guen un papel dominante otras consideraciones, como la cercanía al mercado y las economías de la "aglomeración”, en las dc<isiones de localización. Por consiguiente, parece claro que se necesita una estrategia más positiva que los proyectos de las cuencas hidrológicas para lograr el desarrollo de las regiones atrasadas. El capital genera! social sólo es una política paliativa que no traerá, por necesi­ dad, el desarrollo consigo. Además, es muy ÍYuii proporcionar mucha inversión y es difícil para el político decidir sobre el nivel adecuado para inducir a la inversión privada necesaria sin que ocurra desperdicio. Una política regional más eficaz debe tam­ bién incluir algunas limitaciones sobre la inversión en otras re­ giones o dar estímulos positivos para invertir en las regiones en desarrollo. Es probable que una política semejante exija algún sacrificio del crecimiento económico en aras del logro del obje­ tivo del equilibrio regional. APÉNDICE I J J, APÉNDICE I CUADRO A-l CAMBIOS EN LA BASE ESTADISTICA PARA EL ANÁLISIS DEL PROGRESO AGRÍCOLA EN LA TIERRA CALIENTE1 Datos para el ciclo, agrícola de 1949-50 *Michoacán (cosechas principales) Superfi­ cie cultiFuen- vada Cosecha te (ha) Durante el curso de la. investigación de campo en la Tierra Ca­ liente, se hizo evidente que el censo agrícola de 1960 era del todo inadecuado para los propósitos del estudio. Con el fin de cuantificar los beneficios provenientes de la construcción del sis­ tema de irrigación discutida en este libro, fue necesario obtener un panorama tan realista como fuera posible de la situación para poder analizar los cambios ocurridos desde el año base hasta el presente. Este apéndice presenta las cifras oficiales que indicaron la necesidad de las revisiones que se hicieron para esta evaluación. Con el fin de ajustar los datos del censo, se usaron dos fuen­ tes de estadística agrícola y se relacionaron con la otra infor­ mación disponible en el campo para obtener un panorama com­ pleto de la situación agrícola durante el período 1950-1960. El censo se basa en un procedimiento de enumeración con la in­ formación proporcionada por los campesinos o sus representantes en el campo. Se supone que las cifras incluyen todos los esta­ blecimientos agrícolas del país, agrupados por el tipo y tamaño de la tenencia de tierra: propiedad privada de más de cinco hectáreas, propiedad privada de cinco hectáreas o menos, y tie­ rra distribuida bajo la reforma agraria, independientemente del tamaño de la tenencia individual. Además, se distribuye un cues­ tionario especial con el censo de población para obtener infor­ mación sobre el ganado que hay en pueblos y aldeas. Estas cifras, según la ley de estadísticas de México, son confidenciales y no pueden usarse para ninguna finalidad fiscal. A pesar de esa dis­ posición y de los esfuerzos de los directores del censo para expli­ car sus características, muchas personas creen que su informa­ ción no será confidencial y dan información poco precisa y en ocasiones falsa. Con frecuencia ocurre también que no recuerden la información que se les pide en el censo porque no tiene im­ portancia para la administración de sus propiedades agrícolas. 1 Este apéndice’ está tomado de una monografía de Barkin: Cambios en la agricultura de la zona de Tierra Caliente, Michoacán, 1950-1960f Chapingo, México, Escuela Nacional de Agricultura, 1965. Frijol Ib 2b 1° Maíz 2 Algodón Limón Melón-'Arroz Ajonjolí Caña de azúcar Sandía total J 1 2 1* 2* 1 2d 1* 2* 1* 2* 1 2 1 2d 1 2 587 168 20 208 6 950 12 Volumen (ton) 196 155 17 503 5710 25 2 580 1 513 1 79 4813 7 468 7 539 3 765 289 .665 89 79 en la Tierra Caliente Valor (miles de pesos) Rendi­ miento (kgjha) Precio rural (pesos/ ton) 143 113 5 612 1 759 38 334 323 866 822 2 070 729 730 321 308 1 520 4 328 6 200 3 150 4 544 2 338 1 841 472 439 348 350 369 400 347 319 905 900 8 881 3 285 I 144 3 901 4 381 3 219 1 487 15 601 32 060 215 522 468 862 75 209 53 983 48 211 5 506 6 608 30 27 351 400 36 068 20 687 j a La Tierra Caliente incluye los municipios de Apatzingán, Buenavista, La j Huacana, Parácuaro, Tepalcatepec y Zaragoza. Además, se incluyó el muni| cipio de Uruapan ■ cuando era evidente que los datos se referían a Lomí bardía. Esto se indica mediante < *). . b Incluye, el volumen y el valor del frijol intercalado con maíz, pero no , su rendimiento. c Incluye la superficie, el volumen y el valor del maíz intercalado frijol, pero no su rendimiento. Las cifras se refieren a 1950 ya que la cosecha ocurre er¡ el primer mestre del año, con tri- fuentes: México, Secretaría de Industria y Comercio, Dirección General de Estadística, III censo agrícola, ganadero y ejidal, 1950, “Michoacán", México, 1957. México, Secretaría de Agricultura y Ganadería; Dirección de Economía Agrí­ cola, cifras correspondientes a 1949. APÉNDICE I 252 253 CUADRO A-2 CUADRO A-3 Datos para el ciclo agrícola 1946-47 en tierras irrigadas en la Tierra Caliente, Michoacán Cosecha Camote Maíz» Frutas Limón Pastos Arroz Caña de azúcar Vegetales TOTAL APÉNDICE i Superficie cultivada (ha) 33 2 931 I 198 970 313 3 164 ' 1 035 57 9 701 Volumen (ton) 99 2216 8 725 10 955 6 961 51 750 Datos para el ciclo agrícola 19)9-60 en la Tierra Caliente, *Michoacán (cosechas principales) Valor (miles de pesos) Rendi­ miento (kg/ha) Precio rural (pesos/ ton) 20 I 158 2 480 1 745 66 2 784 I 552 80 3 000 756 200 522 8-995 35 000 2 200 50 000 200 6 400 30 Superficie culti­ vada Cosecha te Frijol Maíz 9 885 De estas 2 931 hectáreas, 53 se sembraron con chile y maíz, con un valor <ie 1 19 280 pesos, y 300 hectáreas se sembraron con maíz y fríjol con un valor de 371 250 pesos. ruENTES: México, Secretaría de Agricultura y Ganadería, Dirección General de Distritos de Riego, División de Planeación, Sección de Estadística Agrí­ cola, Informe Estadístico ¡\rot ¿2, Mexico, 1948. (ton) 692 515 Algodón íl Valor Volumen (miles de '' ' pesos) Fuen- tareas) Limón Melón Arroz 728 26 600 12910 33 974 1 599 4 045 4 100 3 354 4614 I 280 5 180 4 362 6 166 7 745 12 090 10 136 5 988 7 098 474 n.d. 728 5 620 4 510 33 974 1 134 4 045 4 100 n.d. 4 614 1 251 5 180 4 362 4 766 6 545 12 090 2 379 730 7 098 583 728 617 1 092 2 184 25 553 18 973 10 740 7 196 76 922 61 588 2 749 6 203 9 854 24 524 12 300 28 900 9 282 7 240 — no disponible — 28 656 7 997 5 611 2691 32 742 16041 32 534 32534 9 218 7946 11617 10 025 40 860 35220 5 723 10928 3 907 7384 4 478 10757 471 Precio Rendí- rural miento (pesos/ (kg/ha) ton) 565~~T250 360 1 310 1 500 2 000 986 743 832 670 . 2 264 800 1 719 2 256 2 486 2 489 3 000 2 350 2 612 863 1 También hay un coeficiente no conocido de evasión censal, esto es, propiedades agrícolas que no se incluyen en el censo. Con Ajonjolí estas consideraciones en mente, creimos necesario revisar los datos para obtener una mejor idea de la magnitud de las desvia­ ciones en los datos del censo con respecto a la situación real. Taña de Una segunda fuente de estadística agrícola es el Departamento j azúcar 1 Tí 17 1 098 de Economía Agrícola de la Secretaría de Agricultura y Gana­ j 2 337 337 16 988 dería (sag). El dea publicó información sobre la superficie cul­ .3 269 269 1 614 tivada, rendimientos y producción para cada cosecha. Utilizando Sandía 4 • 1 724 1 604 10 897 9<i la información sobre precios rurales uno puede contabilizar el 3 451 3 451 26 .361 3 valor de la cosecha. Estas cifras son edículos de la producción 3 624 3 621 68 232 anual en cada municipio hechas por los presidentes municipales ¡TOTAL 1 aFttT ~Í7Tir y es poco probable que se haga una encuesta cuidadosa. Se 2 40 171 24 798 hacen ajustes para agregar estos datos en los niveles estatales y i 3 70 859 70 859 municipales. Las estadísticas del dea sólo pueden dar un indicio f aproximado de la situación en un año determinado, debido a T‘La Tierra Caliente incluye los municipios de Apatz.ingán, Bucnavir.ta vista. Gabriel Zamora (Lombardía), la Huacana, Tepalcatepec, Zaragoza y Pala forma en que se recolecta la información. tácuaro. La última fuente de información sobre la producción agrícola . 1 Incluye el volumen y el valor del frijol intercalado con maíz, pero no su es la administración de los distritos de riego para aquellas zonas rendimiento. controladas por la Secretaría de Recursos Hidráulicos ($ rh \ Lab * 1 \ aosu rendimiento. : Incluye la superficie, volumen y valor del maíz intercalado con fríjol, peto i .......... . 254 apéndice i APÉNDICE XI información es proporcionada por quienes están a cargo del fun­ cionamiento de los canales de irrigación y verificada por medio de los permisos que se supone debe obtener cada uno de los campesinos antes de cada ciclo agrícola. Por desgracia, la reco­ lección de esta información sólo ha sido obligatoria desde 1958 y los distritos controlados por organizaciones descentralizadas, como la Comisión del Tepalcatepec, fueron los últimos en cum­ plir esas reglas. Esta información sólo se refiere a la tierra irri­ gada y por tanto no incluye datos de la producción en tierra de temporal. Las cifras de la producción son cálculos que se basan en rendimientos teóricos y en precios rurales fijos. Con frecuencia son cálculos poco reales y como resultado sólo las ci­ fras para la superficie cultivada son de confiar, e incluso éstas presentan deficiencias. Cada fuente reúne un tipo diferente de información. El censo proporciona la mejor idea de la producción de subsistencia, que no llega al mercado y predomina en las propiedades más pe­ queñas debido a que es el único que hace encuestas entre los pequeños campesinos. Por otra parte, parece qué el censo es menos adecuado en lo relativo a la producción comercial. En estos casos, existe la posibilidad de que la producción calculada por los presidentes municipales o por los trabajadores en los distritos de riego se acerque más a la realidad. La información de la Secretaría de Recursos Hidráulicos es un control útil para analizar las otras fuentes cuando se refieren a la producción en tierras irrigadas. Los cuadros a-1 a a-3, presentan los datos reales de las tres fuentes mencionadas antes. Comparándolas con las cifras corre­ gidas utilizadas para la evaluación del progreso real en la Tierra Caliente (cuadros vi-5 y vi-7) es posible apreciar la magnitud de los errores que tienen las publicaciones oficiales. El proceso de ajuste se describe con más detalle en la monografía citada , al principio de este apéndice, o en la tesis doctoral de Barkin. d Las cifras son para 1960 ya que la cosecha se hace en el primer trimestre , del año. fuentes: 1. México, Secretaría de Industria y Comercio, Dirección General J de Estadística, ZF censo agrícola ganadero y ejidal, 1960, "Michoacán” (d* ¡ fras preliminares). 2. México, Secretaría de Agricultura y Ganadería, Dirección de Economía Agrícola; cifras para i 959. 3. México, Secretaría de Recursos Hidrálicos, Informe de labores, 1959-60, México, D. F,, 1961, pp, 594-96. ELABORACIÓN DE LAS CIFRAS DE BENEFICIO AGRÍCOLA NETO EN LA TIERRA CALIENTE, MICHOACÁN Los beneficios agrícolas netos derivados de la irrigación (cua­ dro vx-9) se basaron en la información de la producción bruta presentada en los cuadros vi-5 y vi-7 y los datos de costo sinte­ tizados en los cuadros vi-6- j . . y vi-8. Este elj-'GilLilL apéndice describe ____ _ las mrn U --- *2 - J i bases para la elaboración de las cifras de beneficio n^o y la base ■ estadística para el cuadro vi-9. El primer paso, al calcular los beneficios, fue la determinación j de las ganancias provenientes de la producción agrícola en la ! Tierra, Caliente durante el período 1950-65 y estimaciones para ’ las ganancias para el período 1966-70. Esto se hizo determinando la distribución de la tierra en cada año por tipo de cosecha (cuadro b-1) y obteniendo después la magnitud de la ganancia . que podría esperarse de cada tipo de cosecha en cada año. El 1 nivel anual de las ganancias para cada cosecha se obtuvo deter­ minando la tendencia de las ganancias de 1950 a 1960. En la práctica, se tomó un promedio ponderado de las ganancias en 1950 y 1960, con las ponderaciones cambiadas para cada año. Gon excepción del arroz, que se ajustó para el período 1965-70, 1 con el fin de tener en cuenta el importante cambio en tccno; logia que se discutió en. el capítulo vi, las ganancias de 1960 ■ se aplicaron para el período 1960-70. - Este método para determinar las ganancias provenientes de la j producción agrícola se basa en el supuesto de que la producción ¡en la Tierra Caliente no influyó en los precios de los productos ! que estaba ofreciendo y que los precios agrícolas utilizados en el cálculo del rendimiento se basaron en la situación agrícola en un año promedio. En el caso del algodón, el precio era de­ terminado en el mercado mundial. En el caso del melón y la sandía, el precio era determinado en el mercado de los Estados 1 1950— j como 1960 fueron con---- -- tanto ■_____ d Unidos. i Afortunadamente, isiderados años "normales” por los agricultores de la región. 1 es ¡I Aunque la Tierra Caliente ______ un abastecedor importante de melón y sandía para el mercado norteamericano, durante el breve período eti el que ■los productores norleamericanos no tienen producto para enviar al mercado, los compradores basan sus programas de compra en las condiciones de de- APÉNDIC 256 CUADRO B-l Superficie sembrada según las cosechas en la Tierra Caliente, Michoacdn, 1950-70 , Fri Año 1950 195! 1952 1953 1954 1955 1956 1957 1958 1959 1960 1961 1962 1963 1964 1965 1966 1967 1968 1969 1970 Total 42 317 42 842 45 350 51 625 55 625 . 63 314 67 300 76 150 82 600 92 450 105 664 106 600 107 400 106 500 107 700 109 500 109 000 103 000 108 000 114 000 109 000 Húme­ do 1 000 1 107 1 000 500 Jol Seco 587 700 800 900 I 000 I 100 1 000 I 000 1 000 500 501 500 500 500 500 500 Maiz Húme­ do 2 600 2 500 3 000 5 000 7 000 10 200 10 500 12 000 15 000 22 000 33 537 29 000 22 000 16 000 14.000 12 500 12 500 14 000 14 000 15 000 15 000 Seco 19510 19 300 19 250 20 100 21 000 22 200 21 500 20 800 20 600 19 500 20 152 16 500 11 000 9 200 9 500 7 000 7 000 4 500 4 500 4 500 4 500 Maíz y Algodón frijol 200 200 250 400 500 600 1 000 I 200 4-100 1 500 1 603 1 500 1 000 800 500 500 500 500 500 500 500 12 12 150 200 300 500 I 500 5 000 4 000 8 450 4 099 12 000 25 000 34 000 36 000 42 000 40 000 35 000 35 000 35 000 30 000 fuente: Véase el texto. Los cálculos de ganancias agrícolas netas (cftadro vi-9, colum na 2) tuvieron que ajustarse aún más para tener en cuenta cam bios en la productividad que pudieran haber ocurrido si la C misión no hubiera intervenido en la región. Estos cambios, com se explicó en el capítulo vii? podrían haber ocurrido debido un aumento en la superficie irrigada como resultado de irrig ción financiada por el sector privarlo, de un aumento de maiida del mercado, que pueden prever con facilidad. El programa de c sechas se ajusta a esc esquema partí limitar la oferta de fruta en el merca y conservar así alguna estabilidad en los precios. Los precios utilizados p estas cosechas en el cálculo de la.s ganancias agrícolas fueron promed que tenían en cuenta ese factor. Esto se discute con más amplitud en capítulo vi. APÉNDICE II Lim Humedo 3 146 3 200 3 500 4 000 4 000 4 458 4 500 5 500 5 500 4 500 5 674’ 6 000 6 000 6 000 6 000 6 000 8 000 9 000 10 ooo 10 000 10 000 257 ón Seco 2 000 2 500 2 706 2 000 2 000 2 000 2 000 2 000 A/on joli Melón Arroz Húme­ do Seco 256 250 300 400 1 000 1 335 4 000 4 000 3 900 4 200 4 552 5 100 6 200 5 800 6 200 6 000 6 000 6 000 6 000 6 000 6 000 6 852 7 000 8 000 10 000 10 000 11 661 12 000 12 000 13 000 13 000 13 828 14 000 13 500 12 000 12 500 12 000 12 000 12 000 12 000 12 000 12 000 1 500 1 500 1 500 1 500 1 500 1 464 1 500 1 500 2 500 2 500 3 331 3 500 3 500 4 000 4 000 4 000 6 000 7 000 10 000 15 000 15 000 6 387 6 500 6 500 6 500 6 500 6 536 6 500 7 000 7 000 7 000 7 359 8 000 8 000 8 000 8 000 8 000 8 000 5 000 5 000 5 000 5 000 Caña de azú­ car Sandia 658 600 500 500 200 129 150 150 300 300 553 500 200 100 79 80 100 125 125 131 150 3 000 3 400 3 000 3 964 4 500 5 000 4 600 5 000 5 000 5 000 5 000 5 000 5 000 5 000 Otros 530 1 000 1 500 2 000 2 500 3 000 3 000 3 000 3 000 2 500 2 698 2 500 3 000 3 500 3 500 -1 000 4 000 5 000 6 000 61100 6 900 agricultura de temporal, o de aumentos en la productividad como resultado de mejoras tecnológicas. Estos factores combinados resultaron de una duplicación de la producción agrícola, durante la década de los años cincuenta, en la región control de Ciudad Altamirano. La duplicación im­ plica una tasa compuesta de crecimiento de la producción agrí­ cola en la región, un poco mayor al 7% anual, tasa que se usó al tratar de eliminar de los cálculos de los beneficios netos la influencia ‘‘independiente” del progreso "normal” durante el tiem­ po. La última columna del cuadro vn-2 presenta los resultados de estos cálculos. ÍNDICE DE CUADROS ¡i-1 Producto interno bruto, a precios de 1960, años se­ leccionados del periodo 1940'64 n-2 Tasas promedio anuales de crecimiento del pro­ ducto interno bruto, por sectores n-3 Densidad de población por regiones, 1960 n-4 Valor industrial agregado per capita de la pobla­ ción, y por trabajador empleado en la industria, 1960 ii-5 Valor de la producción agrícola y ganadera, pro­ ducción de maíz y superficie de irrigación en gran escala por regiones, 1960 ii-6 Niveles de ingreso y bienestar en los estados más ricos y en los más pobres iv-1 Gastos por las comisiones de las cuencas hidroló­ gicas, 1947-’964 iv2 Comisión dt1 Río Fuerte: Superficie cultivada por cosechas principales, 1952/3-1966/7, años seleccio­ nados v- 1 Datos meteorológicos en la cuenca del Tepalcatepec 2 vPoblación en la cuenca del Tepalcatepec, 1900-1960 3 vGastos de la Comisión del Tepalcatepec, 1947-1965 4 vMigración en la cuenca del Tepalcatepec, 1950-1960 v-5 Distribución de la fuerza de trabajo por activida­ des, 1950 y 1960 v-6 Actividad industrial en la cuenca del Tepalcatepec, 1950 y 1960 v-7 Producción agrícola, ganadera y forestal, cuenca del Tepalcatepec, 1950 y 1960 v-8 Educación primaría en la cuenca del Tepalcatepec, 1964 v9 Proporción de personas alfabetizadas vi- 1 Inversiones de la Comisión del Tepalcatepec en la Tierra Caliente, 1947-1965 2 Superficie cultivada en la Tierra Caliente, Michoavicán, 1949-1950/1964-1965 3 Superficie irrigada en la Tierra Caliente, Michoavicán, 1949-50/1964-65 ÍNDICE DE CUADROS Superficie cultivada en la Tierra Caliente, Michoacán vi-5 Producción agrícola en la Tierra Caliente, Miclioacán, 1949-1950 vi-6 Rendimientos monetarios netos en la Tierra Calien­ te, Michoacán, 1949-1950 vi-7 Producción agrícola en la Tierra Caliente, Michoa­ cán, 1959-60 vi-8 Rendimientos monetarios netos en la Tierra Calien­ te, Michoacán, 1959-60 vi-9 Producción agrícola neta en la Tierra Caliente, Mi­ choacán, 1950-1970 vi-10 Crédito agrícola en la Tierra Caliente vii- 1 El sector agrícola en la Tierra Caliente y en la re­ gión de “control” vii-2 Costos y beneficios del programa de inversión de la Comisión del Tepalcatepec vii-3 Medidas de los rendimientos del programa 4 Producción de electricidad en el Sistema Lázaro viiCárdenas, 1950-65 A-l Datos para el ciclo agrícola de 1949-50 en la Tierra Caliente, Michoacán (cosechas principales) a-2 Datos para el ciclo agrícola 1946-47 en tierras irri­ gadas en la Tierra Caliente, Michoacán a-3 Datos para el ciclo agrícola 1959-60 en la Tierra Caliente, Michoacán (cosechas principales) b-1 Superficie sembrada según las cosechas en la Tierra Caliente 259 vi-4 163 164 165 172 175 181 189 213 215 220 225 251 252 253 256 ÍNDICE DE FIGURAS 1 México: estados y regiones administrativas 2 México: comisiones de cuencas hidrológicas 3 La cuenca del río Tepalcatepec 4 Obras hidroeléctricas en el río Cupatitzio ' ÍNDICE ANALÍTICO acero, 49, 110, 223, 235 agricultura, 48-9, 58-9, 63-5, 88-9, 108; maquinaria, 170, 178, 202, 227; véase también fertilizantes; cuenca del río Tepalcatepec; Tierra Caliente; trabajo; pro­ ductos agrícolas por separado agricultura de subsistencia, 113, 126, 160 agua, abastecimiento de, 71-2 agua potable, véase capital gene­ ral social aguacates, 127 aguas de albañal, véase capital ge­ neral social Aguascalientes, 45, 61, 115-6, 119 ; Aguirre Beltrán, G., 125-6, 180 ’ aire, viciamiento del, 73 ajonjolí, 145, 158-65, 172, 175 Alemán, M„ 56, 86, 100-1, 111, 131 algodón, 47, 49, 113-4, 145, 158-65, 168-72, 180-2, 198-9, 225, 232, 234, 253; baja respuesta a las i oportunidades, 168-9; costos, 165, - 172-7; financiamiento, 188-92; in­ troducción, 169-70; procesado, • 194-5, 203; prospectos, 180-82 Alianza para el Progreso, 84, 197 ■ Altee, D., 2 ; Alien, G. R„ 93 ' Apatzingán, 125-6, 138, 142, 146, ' 231, 236 apicultura, 135, 188 | Ario de Rosales, 123, 127 ¡arroz, 113-4, 130, 145, 147, 158-65, 171-2, 175, 184, 188-9, 191-2, 196, 199, 203, 251-3, 257 'asistencia técnica, véase agricultuí ra; crédito; Tierra Caliente ¡Ávila Camacho, M., 57 azúcar, 47, 49, 103, 112, 113, 126127, 135, 139, 144-5, 147, 151, 158-9, 161-5, 172, 175, 191, 251-3, 257 Baja California Norte, 49, 61, 66-7, 69, 243 Baja California Sur, 61, 66 Bajío, 115 balance de pagos, 34-5, 88; interre­ gional, 8, 13 Balsas, río, véase Comisión del Río Balsas; cuenca del río Balsas Banco de México, Oficina de Pro­ yecciones Agrícolas del, 162, 165 Banco Interamericano de Desarro­ llo, 115 Banco Nacional de Crédito /Agríco­ la, 187, 192 Banco Nacional de Crédito Ejidal, 130, 162, 184, 187-93, 196-7, 199, 203-4, 228; actividades empresa­ riales, 187-91 Banco Regional de Michoacán, 187, 192 bario, véase industria minera fíarkin, D., 1, 161, 232, 250, 254 Bassols Batalla, Á„ 61 Belice, 118 Beltrán, E,, 92 beneficio, indirecto, 27, 33; en Tie­ rra Caliente, 215-21, 230; razón beneficio-costo, 42, 220 Brandemburg, F., 76 Braybrooke, D., 28-9 brea, 126, 144 Buenrostro, C„ 2, 212 Burnight, R., 69 cacao, 50 café, 47, 50-1, J 00, 127 I i 262 ÍNDICE ANALÍTICO ÍNDICE ANALOGO 263 calcio, véase industria minera cambio, tasa de, 13, 36-7, 227 Campeche, 58-9 campesino, racionalidad del, 236 cantalupo, véase producción frutal capital, fuentes utilizadas, 228; mo­ vilidad, 10, 12; por trabajador, 107; véase también capital gene­ ral social capital general social, 14-9, 32, 71, 90, 106, 114, 131-3, 138, 150, 156-7, 201, 238, 243, 249; efectos, 205-10, 232-3; véase también cuenca del río Tepalcatepec; educación; Tierra Caliente Cárdenas, L., 78, 81, 86-7, 91, 109, 127, 229 carreteras, véase comunicaciones Casares, B., 193 caucho) 50 caudillos, 244 Ciudad Alemán, 101 Ciudad Altamirano, 110, 212-3 Ciudad Sahagún, Hgo., 117 Coahuila, 60-1, 66, 69 Cóbano, planta, 222, 226 coco, véase producción frutal Colima, 61, 119 colonización, 5-7, 52-6, 102, 106-7, 113, 208, 229, 247 comerciantes, 195-6 comercio iuterregional comparado con el comercio exterior, 8-10; véase también exportación; im­ portación Comisión del Río Balsas, 87, 94, 108-11, 132, 153; véase también Comisión del Río Tepalcatepec Comisión del Río Fuerte, 48, 97, 111-4, 238-40, 243, 246 Comisión del Río Grijalva, 50, 95, 104-8, 240 Comisión del Río Papaloapan, 50, 87, 94, 98-104, 108-11, 238-41, 244, 246 Comisión del Río Tepalcatepec, 12, 51, 86, 97, 108-11, 121, 238, 240, 245-6; evaluación, 211-37; respuesta humana, 235-7; progra­ ma de inversión, 131-9, 154-5, 156-7; véase también descuento, tasa de Comisión Federal de Electricidad, 105, 113, 116, 222-6 Comisión Interministerial, 84 Comisión Lerma-Chapala-Santiago, 95, 114-7, 246 Comisión de ColonizaNacional ción, 56 Inversión Comisión Nacional de Pública, 83-4 Comisión Nacional de Irrigación, 99, 121, 154 comisiones de las cuencas hidroló­ gicas, 85-7, 95, 120, 238-49; gas­ tos, 94; razones económicas, 238243; razones políticas, 243-6 comunicaciones, 134-6, 156-7, 205; carretera Uruapan-Apatzingán, 134; carreteras, 50, 114, 134, 151, 233, 241-3; correos, 151; ferroca­ rril Los Mochis-Estados Unidos, 113; ferrocarril Los Reyes-Guadalajara, 151; ferrocarril MéxicoVeracruz, 99; ferrocarril Méxi­ co-Yucatán, 44; teléfonos, 151; telégrafos, 151 Confederación de Trabajadores de México, 81 Confederación Nacional Campesi­ na, 81 congestionamiento, 6-7, 68-73, 94, 241-9 convenciones, en Nueva York, 183 Constitución política, de 1814, 126; de 1857, 54; de 1917, 56 Cortés, H„ 46 Costa Sierra (Sierra Madre del Sur), 51, 121-2, 125-6, 129, 139143, 148-53 costos, 215, 218-9 Cotíja-Qúitupan, 133 crecimiento equilibrado, 21 crédito, véase agricultura; Tierra Caliente cuenca del rio Balsas, 51, 109-10, Distrito Federal, véase México, 223, 245, 248 ciudad de cuenca del río Fuerte, 243 Durango, 61, 111, 115 cuenca del río Lerma, 71-2, 245 cuenca del río Papaloapan, 99, 104, 241-2 Eckstein, O., 26, 27, 216 Eckstein, S., 127 cuenca del río Tepalcatepec, 92, economías, de aglomeración, 6, 2!, 108, 121-237, 240; actividad in­ 68-70, 241, 248; de escala, 6-7 dustrial, 130, 142-5; agricultura, educación, 68-9, 132, 152-3, 156-7, 126, 132, 135, 142, 144-5, 148-9, 210, 233; construcción de escue­ 171-3; características físicas, 120las, 138; mejoramiento, 207-8 125; estructura socioeconómica I efectos en cadena, 21, 32-5, 38, antes de 1950, 124-31; fuerza de 201-4, 240; potenciales, 21 trabajo, 140, 142, 166-7, 174, efectos externos, pecuniarios, 33 176; inversiones sociales, 185-9, ejidos, 56, 78-81, 113, 197-9, 208 151-3; irrigación, 140-2, 166-7, El Infiernillo, presa, 110, 223 174, 176; migración, 139-41, 208; electricidad, véase energía eléctrica población, 126, 128, 139-41; véa­ I empresas, 13-4, 19-20, 22. 34, 169, se también capital general social; 186-98, 228; norteamericana, 194; comunicaciones; educación véase también Banco Nacional Cupatitzio (río de las aguas can­ de Crédito Ejidal tantes), 124, 138, 210, 222-3, 226 energía eléctrica, 57-8, 68, 86, 89, Cupatitzio-Cajones, 133, 199 104-5, 107-8, 115, 205, 212, 222-6, Cussi, D,, 127-30, 187 234, 239; consumo, 222-3 esclavos negros, 126 Chapala, lago, véase Comisión Lerestablecimiento, véase colonización ma-Chapala-San tiago estación experimental, 135, 176 Chispas, 51, 61, 66-7, 104, II9 estación piscícola, 135 chicle, 50 exportación, 9-10, 88-9, 227-8, 239Chihuahua, 61, 66, 111 240, 249 Chontaipa, proyecto, 105 i demanda, 240 Departamento Agrícola de la Secre­ staría de Agricultura y Ganade­ ría, 252 desarrollo regional, 4-22; mexicaí no, 44-94, 246-8; objetivos, 4-14; políticas, 14-22, 95-120, 248-9 descuento, tasa 41-2, 218-22; , Comisión del río Tepalcatepec, j 218-21 ■ desigualdad .regional,. 4-5, 11-2, 59, 70, 248 Díaz, P„ 54-5, .127 , Díaz del Castillo, B., 46 . Díaz Ordaz, G., 84, 108 j difusión, efectos de la, 12 Federación de Sindica tos de Tra­ bajadores al Servicio del Estado, 82 Fernández Bravo, V,, 109 ferrocarril, véase comunicaciones fertilizantes, 162, 178, 202 fresa, véase producción frutal frijol, 47, 55, 89, 158-60, 161-2, 172, 175, 189, 251-3, 256 Fuerte, río, véase Comisión del Río Fuerte; cuenca del río Fuerte fumigantes, 170, 176 Gabriel Zamora (Lombardía), 128, 191 ganado, 51, 58, 63, 65, 130, 135, 264 144-£, 146-7, 166, 173-4, 185, • 189, 192 Gilí, M., 112 Grijalva, río, véase Comisión del Río Grijalva; cuenca del río Gri­ jalva grupos de interés, 81-2 Guadalajara, 72 Guanajuato, 45, 61, 66, 115-6 Guatemala, 104 Guerrero, 51, 60-1, 67, 214 guitarras, 126 Hall, P„ 30 henequén, 50 Hernández Segura, J., 130 Hidalgo; 60-1 hidroelectricidad, véase energía eléctrica hielo, fábricas de, 147, 192, 204 Hirschman, A. O., 13, 18-20, 22, 24, 27, 33, 201, 235, 242, 246 homicidios, 206 importación, 183; sustitución, 57, 88, 217; véase también industria, estímulo para su establecimiento índice de bienestar, 61, 66-7 industria, descentralización, 73, 9294; estímulo para su estableci­ miento, 16-23, 117, 119, 239; ma­ nufacturera, 55-6, 115; políticas restrictivas, 16; valor agregado, 60; véase también cuenca del río Tepalcatepec; Tierra Ca­ liente industria minera, 47, 58; bario, 144, 204, 230, 241; calcio, 204 industrias satélites, 20, 203 ingreso nacional, 57-9; distribución regional, 66, 239 insecticidas, 171, 178 Instituto Nacional Indigenista (tNi), 91 instrucción, véase educación insumos, abastecedores de, 196; véa­ se también efectos en cadena ÍNDICE ANALÍTIC inundaciones, control de, 89-103, 116 inversión, desarrollo industrial, 221; extranjera, 34-5, 80-1, 194; inducida, 231; objetivos múltiples de la inversión pública, 25-32, 247; razón, 22; selección de pro­ yectos, 23-43; véase también ca­ pital general social irrigación, 47, 63, 65, 86, 101-2, 105106, 111-6, 178, 214, 228, 241-3; véase también cuenca del río Te­ palcatepec; Comisión del Río Tepalcatepec; Tierra Caliente Isard, W., 16-7, 61 Jalisco, 45, 61, 109, 115-6 James, D., 55 Jenkins, W., 192 Johnson, B. F., 112 La Villita, presa, 110, 223 Lefeber, L„ 17 Lerma, río, véase Comisión LermaChap a la-Santiago; cuenca del río Lerma Ley de Industrias Nuevas y Nece­ sarias, 117 Ley Lerdo, 54 Lindblom, Ch. E., 27-31 Little, I. M. D., 35, 39-40 Lombardía, 127, 187 López Malo, E., 61, 69, 92 López Mateos, A,, 78, 84, 102, 244 Los Mochis, 114 Losch, A,, 16 Lucas Alamán, M., 53 Maass, A., 27 maíz, 47, 51, 55, 63, 65, 89, 100, 126, 130, 145, 148-9, 158-61, 163165, 168-9, 172, 175, 185, 188-9, 192, 196, 251-3, 256; programa de inversión, 186 mango, véase producción frutal Marglin, A„ 39, 42 McKean, R. N„ 31 McKinnon, R, L, 14 ÍNDICE ANALÍTICO melón, véase producción frutal Mesa 'Central, 44-7, 54-7, 100, 106, 114-6, 120, 234, 242 Mesa del Norte, 47 mexicanización, 81 México, ciudad de, 61, 66-9, 71, 116, 119, 121, 131 México, Valle de, véase Valle de México migración de mano de obra, 10, 12, 47, 69-70, 91, 106; véase tam­ bién cuenca del rio Tepalcatepec; Tierra Caliente Mirrlees, J. M., 35, 39-40 Monterrey, 49, 72 Mooser, F., 71 Múrelos, 45, 61 mortalidad, tasa de, 206-7 Moses, L„ 17 Myrdal, G-, 12 Nacional Financiera, 117, 144, 190 naliua, 43, 125 Nayarit, 48-9, 61, 115-6 Noriega, J. S., 99 North, D. C„ 9, 12 Nueva Italia, Michoacán, 127, 187 Nuevo León, 61, 66 Oaxaca, 51, 61, 66, 98, 110-11 Organización de Estados America­ nos, 84 Orive Alva, A., 131, 133 Orozco, J. V„ 71 paludismo, 138, 206, 232 Papaloapan, río, véase Comisión del Rio Papaloapan; cuenca del río Papaloapan papel, 104, 144, 241 Paracho, Midi., 126, 129, 144 parque nacional, 138 parques industriales, véase indus­ tria, estímulo para su estableci­ miento Partido Revolucionario Institucio­ nal, 75-7, 81-2 265 Peña, M. T. de la, 56, 160, 166, 239 personalismo, 85, 243 Petriciolli, G., 2 petróleo, 50. 58; nacionalización, 80-1 Phelps, E„ 219 pina, véase producción fruta! Plan de Acción Inmediata, 84 planeación, 80-7, 243-4 plátano, véase producción frutal población, conquista de México, 46-8; México 1960, por región, 62; México 1968, 57; México fu­ turo, 72; véase también coloni­ zación; cuenca del río Tepalca­ tepec; migración de mano de obra; Tierra Caliente Poleman, T., 87, 102 políticas sinópticas, 245 precios, 24-5, 35-43, 182 precios sombra, 25, 35 presidencia, 75-7, 242; planeación y, 82-5 Presión, E. J,, 48 producción frutal, cantalupo, 227; coco, 62; empacadoras, 203; fresa, 115; intereses americanos, 182-3, 191; limón, 130, 158-64, 171-2, 175-7, 184, 188, 190-1, 251, 253, 257; mango, 162; melón, 145, 158-64, 168-72, 175-7, 180-4, 189, 193-4, 198, 227, 251, 253, 257; pina, 99; plantas procesadoras, 203; plátano, 50, 99, 162; sandía, 145, 158-64, 168, 170-2, 175-7, 180-4, 193, 198, 227, 251, 253, 257 producto nacional bruto, véase in­ greso nacional productos animales, véase ganado productos forestales, 126, 149-50 programa fronterizo, II8-9; desocu­ pación, 49 proyecto, predictibilidad del resul­ tado, 23, 233-5; véase inversión proyecto Chontalpa, 105 266 Puebla, 45, 61, 98 puesto zootécnico, 135 punto de vista regional, 92'3 Querétarp, 61, 66, 115 Quintana Roo, 61, 118 reforma agraria, 55, 77-80, 167; dis­ torsión, 197, 200-1 regiones mexicanas, 59-62 renta, 198-9, 232 retraso en el tiempo, 221 Revolución mexicana, 52, 56. 127, 233; ideología, 77-81 Reynolds, G, 2, 79 Reynolds, Ll„ 2 Romero Espinoza, E., 130 Romero Kolbeck, G., 119 Rosenstein-Rodan, P., 18 Ruiz, R. E., 91 Ruiz Cortines, A., 87, 101 salario mínimo, 66, 73 salarios, diferenciales de los Estados Unidos y ciudades fronterizas me­ xicanas, 118-9 salarios sombra, 40-1, 216-7 salinidad, 113 Salto Escondido, 222 San Luis Potosí, 61 sandía, véase producción frutal Sandoval Landázuri, R,, 87 Santiago, río, véase Comisión Lerma-Cliapala-Santiago Scott, R, E., 51, 76, 85, 244 Schega, R., 87 Secretaría de Agricultura y Gana­ dería, 135, 252 Secretaria de Comunicaciones y Transportes, 31 Secretaría de la Presidencia, 31 Secretaría de Obras Públicas. 220 Secretaría del Patrimonio Nació nal, 244 Secretaría de Recursos Hidráulicos, 31, 63, 72, 99, 205, 219, 240, 252 Secretaría de Salubridad y Asisten­ cia, 151 ÍNDICE ANALÍTI sector externo, 227-8 Sierra Madre del Sur, véase Costa Sierra Simpson, L. B., 44 Sínaloa, 48-9, 61, 66, 69, 111 Singer, H. W„ 93 sistema bancario privado, 197 sistema de hacienda, véase tenencia de la tierra Sociedad de Interés Colectivo Agrí­ cola Ejidal, 112 Sonora, 48-9, 61, 66, 111 sorgo, 114, 189, 192 Steiner, H„-.155 Stigler, G.t 219 Strassman, W. P., 107, 219 tabaco, 99 Tabasco, 50, 61, 66, 105 Tamaulípas, 50, 61, 63 tarascos, 125-6 tasa interna de rendimiento, véase descuento, tasa de tenencia de la tierra, 55-6, 167 198-201, 232, 250; véase tambié ejidos Tennessee Valley Authorithy, 100 244 Tepalcatepec. río, véase Comisió del Rio Tepalcatepec; cuenc del río Tepalcatepec textiles, 127, 147 Thünen, J. H. von, 16 Tiebout, Ch. N„ 8 'fierra Caliente, 110, 121-2, 123-31 133-4, 139-50, 142-5, 152, 154-237 250-7; actividad industrial, 142 144, 146, 201-5; agricultura, 156 186, 212-22: bajo nivel técnico d los campesinos, 169, 201-2, 248 colonización, 229; costos, 161.174-8; crédito, 169, 182, 186-201 espíritu de empresa y finanza 186-98, 228; inversión social, 205 210; irrigación, 154-60, 167-7 178, 199-200, 214, 252-3; migra ción, 173-4, 208-9, 229; pobla ción, 208-9, 213; productividad ÍNDICE ANALÍTICO 162-73, 177-89; prospectos futu­ ros, J 80-6; tenencia de la tierra, 198-201; trabajo, 166-7, 174, 208209, 213; véase también comu­ nicaciones; cuenca del río Tepalcatepec; energía eléctrica; ga­ nado Tierra Fría, 121-2, 125-6, 129, 141143, 148-9, 152 Tierra Templada, 50, 120-9, 139147, 152-3; industrialización, 131 Tlaxcala, 61, 66, 119 Tobin, j„ 219 Toluca, 45, 73, 115 toma de decisiones, 75-87, 245-6; des­ centralización, 246; enfoque si­ nóptico vs. enfoque de incremen­ tos, 28-31, 244-5 tomate, 113 trabajadores campesinos temporales, 208-9 trabajo, calificado, 208; crecimien­ to, 86, 107-8; desempleo, 6-7, 12, 49, 67, 209, 246; escasez, 67, 167, 234; fuerza de, 142, 174; no cali­ ficado, 39, 67; véase también cuenca del río Tepalcatepec; mi­ gración; Tierra Caliente 267 trementina, 126-7, 144 trigo., 47, 55, 88-9, 1 14 Ü. S, Burean of Reclamation, 27, 30 UN1CEF, 206 United Sugai’ Company, i Í2 Urquidi, V„ 2, 119 Uruapan, 121-3, 127-30, i 38, 142, 146 Valle de México, 45-6, 68-74, 93, 116, 119-20, 246 ventaja competitiva, 239 Veracruz, 50, 61, 98. 101, 104 Veruon, R.> 55 Ward, B., 92 Webcr, A., 16 Whetten, N„ 69 Wionczek, M. S„ 84 Yates, P, Lamartine, 61, 6t3, 69, 92 Yucatán, 44, 50, 61, 64, 105, 108 Zacatecas, 61, 66, 115, 119 Zamora, F., 61, 93 zona de control, i'éa.se Ciudad Al­ tamirano zootecnia, véase puesto zootécnico