7 Sistema óseo OBJE TIVOS DE L CAPÍTUL O 1. Enumerar los huesos de la cintura escapular y la extremidad superior y señalar sus rasgos superficiales más destacados. Extremidades 2. Identificar los huesos que forman la cintura pélvica y la extremidad inferior y exponer sus rasgos superficiales más destacados. 3. Examinar las diferencias estructurales y funcionales entre la pelvis de una mujer y la de un hombre. 4. Explicar por qué el estudio del esqueleto puede revelar información importante sobre un individuo. 5. Resumir las diferencias óseas entre hombres y mujeres. 6. Describir con brevedad la repercusión que ejerce el proceso de envejecimiento sobre el sistema óseo. Introducción 175 Cintura escapular y extremidad superior Cintura pélvica y extremidad inferior Variabilidad individual en el sistema óseo 176 186 200 CAPÍTULO Si elabora una lista con las cosas que haya hecho hoy, verá que el esqueleto de las extremidades ocupa un lugar importante en su vida. Estar de pie, caminar, escribir, comer, vestirse, estrechar una mano y pasar las páginas de un libro; la lista crece sin cesar. El esqueleto de la cabeza y el tronco protege y sostiene los órganos internos y participa en funciones vitales, como la respiración, mientras que el de las extremidades le permite controlar el entorno, cambiar la posición en el espacio y moverse. El esqueleto de las extremidades incluye los huesos de los miembros superior e inferior y sus elementos de apoyo, llamados cinturas, que los ponen en conexión con el tronco (v. figura 7.1). Este capítulo describe los huesos que SISTEMA ÓSEO ESQUELETO DE LA CABEZA Y EL TRONCO 80 7 . Sistema óseo: Extremidades 175 forman el esqueleto de las extremidades. Igual que en el capítulo 6, su exposición insiste en las características superficiales que tienen importancia funcional y hace hincapié en las interacciones entre el sistema óseo y otros sistemas. Por ejemplo, muchos de los rasgos anatómicos señalados en este capítulo corresponden a las áreas de inserción para los músculos estriados o a los orificios para el paso de los nervios y vasos sanguíneos que abastecen a los huesos y otros órganos del cuerpo. Existen unas conexiones anatómicas directas entre los sistemas óseo y muscular. Tal como se señaló en el capítulo 5, el tejido conjuntivo de la fascia profunda que rodea a un músculo estriado se continúa con el de su tendón, se 206 ESQUELETO DE LAS EXTREMIDADES (v. figura 6.1) Cinturas escapulares 4 126 Clavícula 2 Escápula 2 Húmero 2 Radio 2 Cúbito 2 Huesos del carpo 16 Clavícula Escápula Húmero Miembros 60 superiores Radio Cúbito Hueso coxal Huesos metacarpianos 10 Cinturas pélvicas 2 Miembros 60 inferiores Falanges 28 Huesos coxales 2 Fémur 2 Rótula 2 Tibia 2 Peroné 2 Huesos del tarso 14 Fémur Tibia Peroné Huesos metatarsianos 10 Falanges 28 (a) Figura 7.1 Esqueleto de las extremidades Diagrama que muestra la relación entre los elementos óseos de las extremidades: las cinturas escapular y pélvica, y los miembros superior e inferior. (a) Vista anterior del esqueleto, tras resaltar los componentes de las extremidades. El número de cada casilla indica la cantidad total de huesos de ese tipo o categoría que hay en el esqueleto del adulto. (b) Vista posterior del esqueleto. (b) 176 SISTEMA ÓSEO sigue del periostio y acaba por formar parte de la matriz ósea en su punto de inserción [pp. 116-117] . Los músculos y los huesos también poseen unos vínculos fisiológicos entre sí, pues las contracciones musculares sólo pueden tener lugar cuando las concentraciones extracelulares de calcio permanecen dentro de unos límites relativamente estrechos. El esqueleto contiene la mayor parte del calcio corporal y estas reservas resultan vitales para su homeostasis. Cintura escapular y extremidad superior [v. figura 7.2] Cada brazo se articula con el tronco en la cintura escapular, o cintura del hombro. La cintura escapular está compuesta por la clavícula, un hueso con forma de «S», y la escápula (omóplato), que es ancha y plana, tal como se observa en la figura 7.2. La clavícula se articula con el manubrio del esternón y este es el único punto de contacto directo entre la cintura escapular y el esqueleto de la cabeza y el tronco. Los músculos estriados son los que sostienen y ponen la escápula en su posición, pues este hueso carece de conexiones óseas o ligamentosas con la jaula torácica. Cada una de las extremidades superiores está compuesta por el brazo, el antebrazo, la muñeca y la mano. Su esqueleto lo forma el húmero del brazo, el cúbito y el radio del antebrazo, los huesos carpianos del carpo (muñeca) y los huesos metacarpianos y las falanges de la mano. Clavícula Escápula Húmero Cúbito Huesos del carpo Huesos metacarpianos (I a V) Falanges Figura 7.2 Los movimientos de la clavícula y la escápula ponen la articulación del hombro en posición y ofrecen una base para realizar los movimientos del brazo. Una vez colocada la articulación del hombro, los músculos que se originan en la cintura escapular sirven para mover la extremidad superior. Por tanto, las superficies de la clavícula y de la escápula son importantísimas como zonas de inserción muscular. En los lugares donde se fijan los músculos principales, dejan una huella, lo que crea crestas y pestañas óseas. Otras señales presentes en los huesos, como los surcos o los agujeros, indican la ubicación de los nervios o los vasos sanguíneos que controlan los músculos y alimentan los músculos y los huesos. Clavícula [v. figuras 7.3/7.4] La clavícula (v. figura 7.3) conecta la cintura escapular con el esqueleto de la cabeza y el tronco. Además, asegura el hombro y transmite una parte del peso de la extremidad superior al esqueleto del tronco. Cada clavícula se origina en el borde craneolateral del manubrio esternal, en una zona lateral a la escotadura yugular (v. figura 6.27a, [p. 169] y figura 7.4). Desde su extremo esternal de forma más o menos piramidal, la clavícula realiza una curva lateral y dorsal en forma de «S» hasta articularse con el acromion de la escápula. Este extremo acromial es más ancho y plano que el esternal. La cara superior de la clavícula es lisa y queda justo profunda a la piel; la inferior de su extremo acromial es rugosa y está surcada por unas líneas salientes y unos tubérculos que indican los lugares de inserción para los músculos y los ligamentos. El tubérculo conoideo está en la superficie inferior del extremo acromial, y la tuberosidad costal en el extremo esternal. Estas dos áreas son zonas de inserción para los ligamentos del hombro. La interacción entre la escápula y la clavícula puede explorarse sin problemas. Después de poner los dedos sobre la escotadura yugular, se localizan las clavículas a ambos lados [p. 169] . Al mover los hombros, puede palparse su cambio de posición. Al estar tan cerca de la piel, es posible seguir su recorrido en sentido lateral hasta llegar a la articulación con la escápula. Los movimientos del hombro se encuentran limitados por la posición que adopte la clavícula en la articulación esternoclavicular, tal como se observa en la figura 7.4. La estructura de esta articulación se describirá en el capítulo 8. Las fracturas de la clavícula en su porción medial son frecuentes, porque las caídas con el brazo extendido apoyando la palma de la mano producen fuerzas de compresión que se transmiten hasta el hueso y su articulación con el manubrio. Afortunadamente, estas roturas suelen consolidar con rapidez sin escayolar. Escápula [v. figuras 7.4/7.5] Radio (a) Cintura escapular (b) Cintura escapular y extremidad superior Cada miembro superior se articula con el esqueleto de la cabeza y el tronco a nivel de este último mediante la cintura escapular. (a) Extremidad superior derecha, vista anterior. (b) Radiografía de la cintura escapular y la extremidad superior derechas, proyección posterior. El cuerpo de la escápula forma un triángulo amplio que presenta numerosas marcas en su superficie como manifiestación de la inserción de músculos, tendones y ligamentos (v. figura 7.5a,d). Los tres lados del triángulo escapular son el borde superior; el borde medial, o vertebral; y el borde lateral, o axilar (axilla, axila). Los músculos que sitúan la escápula en su posición se insertan a lo largo de estos bordes. Los ángulos del triángulo escapular se denominan ángulo superior, ángulo inferior y ángulo lateral. El ángulo lateral, o cabeza de la escápula, configura una amplia eminencia sobre la que se apoya la cavidad glenoidea, o fosa glenoidea, que tiene forma de copa. A través de la cavidad glenoidea, la escápula se articula con el extremo proximal del húmero, el hueso correspondiente al brazo. Esta articulación es la articulación glenohumeral o articulación del hombro. El ángulo lateral está separado del cuerpo de la escápula por un cuello redondeado. La fosa subescapular, cuya superficie es cóncava y relativamente lisa, ocupa la cara anterior de la escápula en su mayor parte. Dos grandes apófisis salen del borde superior de la cavidad glenoidea, por encima de la cabeza del húmero. La prolongación anterior más pequeña es la apófisis coracoides (korakodes, parecido al pico de un cuervo). Este saliente adopta una dirección anterior y un poco lateral, y sirve como zona de inserción para la cabeza corta del músculo bíceps braquial, que resulta CAPÍTULO 7 . Sistema óseo: Extremidades 177 Extremo esternal LATERAL MEDIAL Extremo acromial Carilla para la articulación con el acromion (a) Vista superior Extremo acromial Tubérculo conoideo Carilla esternal MEDIAL LATERAL Figura 7.3 Tuberosidad costal Clavícula La clavícula es la única conexión directa entre la cintura escapular y el esqueleto de la cabeza y el tronco. Vistas superior (a) e inferior (b) de la clavícula derecha. Extremo esternal (b) Vista inferior Retracción Escápula Protracción Articulación acromioclavicular Articulación esternoclavicular Manubrio del esternón Clavícula (a) Huesos de la cintura escapular derecha, vista superior (b) Vista superior Elevación Depresión Figura 7.4 Movilidad de la cintura escapular Representación esquemática sobre los movimientos normales de la cintura escapular. (a) Huesos de la cintura escapular derecha. (b) Cambios en la posición del hombro derecho que suceden durante la protracción (movimiento anterior) y la retracción (movimiento posterior). (c) Cambios en la posición del hombro derecho que suceden durante la elevación (movimiento superior) y la depresión (movimiento inferior). En cada caso, obsérvese que la clavícula es responsable de limitar la amplitud del movimiento (v. figura 8.5d,f). (c) Vista anterior 178 SISTEMA ÓSEO Acromion Tubérculo supraglenoideo Borde Apófisis superior Ángulo coracoides Escotadura Acromion superior de la escápula Acromion Apófisis coracoides Apófisis coracoides Borde superior Espina Cavidad glenoidea Fosa subescapular Reborde de la cavidad glenoidea Tubérculo infraglenoideo Ángulo lateral Cuello Fosa supraespinosa Espina Fosa infraespinosa Cuerpo Borde medial Borde lateral Borde lateral (borde axilar) Cuerpo Borde lateral Borde medial (borde vertebral) Ángulo inferior Ángulo inferior Ángulo inferior (b) Vista lateral (a) Cara costal (anterior) Acromion Apófisis coracoides Borde superior Ángulo superior Acromion (c) Cara posterior Tubérculo Apófisis supraglenoideo coracoides Fosa supraespinosa Borde superior Apófisis coracoides Acromion Cuello Ángulo lateral Espina Fosa subescapular Cuerpo Espina Cavidad glenoidea Fosa infraespinosa Cuerpo Borde lateral Borde medial Borde medial Borde lateral Borde lateral Ángulo inferior Ángulo inferior (d) Vista anterior Figura 7.5 (e) Vista lateral Escápula La escápula, que forma parte de la cintura escapular, se articula con la extremidad superior. Vistas anteriores (a,d), laterales (b,e) y posteriores (c,f) de la escápula derecha. (f) Vista posterior CAPÍTULO claramente perceptible en la cara anterior del brazo. La escotadura de la escápula es una hendidura situada en una posición medial a la base de la apófisis coracoides. El acromion (akron, punta + omos, hombro), la prominencia posterior más grande, se dirige hacia adelante desde el extremo lateral de la espina de la escápula formando un ángulo de 90°, y sirve como punto de inserción para una de las porciones del músculo trapecio de la espalda. Si los dedos se deslizan siguiendo la superficie superior de la articulación del hombro, se palpa esta prolongación. El acromion se articula con la clavícula en la articulación acromioclavicular (v. figura 7.4a). Tanto el acromion como la apófisis coracoides están unidos a unos ligamentos y tendones asociados a la articulación del hombro, que se describirá más a fondo en el capítulo 8. La mayor parte de los detalles presentes sobre la superficie de la escápula representan las áreas de inserción utilizadas por los músculos encargados de poner en su posición el hombro y el brazo. Por ejemplo, el tubérculo supraglenoideo señala el origen de la porción larga del músculo bíceps braquial. El tubérculo infraglenoideo marca el origen de la porción larga del músculo tríceps braquial, un músculo igual de relevante, pero en la superficie posterior del brazo. La espina de la escápula cruza el cuerpo escapular antes de acabar en su borde medial. Este relieve divide en dos regiones la superficie dorsal convexa del cuerpo. La zona superior a la espina constituye la fosa supraespinosa (supra, encima); la región inferior es la fosa infraespinosa (infra, debajo). Las dos caras de la espina separan el músculo supraespinoso del músculo infraespinoso, y su cresta posterior saliente sirve como zona de inserción para los músculos deltoides y trapecio. Extremidad superior [v. figura 7.2] El esqueleto de cada extremidad superior comprende el húmero, el cúbito y el radio, los huesos del carpo en la muñeca y los huesos metacarpianos y las falanges de la mano (v. figura 7.2, p. 176). Húmero [v. figura 7.6] El húmero es el hueso proximal de la extremidad superior. La porción superior y medial de su epífisis proximal es lisa y redondeada. Se trata de la cabeza humeral, que se articula con la escápula en su cavidad glenoidea. El borde lateral de la epífisis presenta una gran prolongación, la tuberosidad mayor del húmero (v. figura 7.6a,b). Esta tuberosidad forma el borde lateral del hombro; para dar con él hay que palpar una protuberancia que ocupa una posición anterior e inferior a pocos centímetros de la punta del acromion. Sobre su superficie lleva tres impresiones planas y lisas que sirven como zonas de inserción para tres músculos cuyo origen está en la escápula. El músculo supraespinoso se inserta sobre la más superior, el músculo infraespinoso lo hace en la intermedia y el músculo redondo menor en la más inferior. La tuberosidad menor se halla en la superficie anterior y medial de la epífisis, e indica el punto de inserción de otro músculo escapular, el subescapular. Está separada de la tuberosidad mayor por el surco intertubercular. El tendón del músculo bíceps braquial recorre este surco procedente de su origen en el tubérculo supraglenoideo de la escápula. El cuello anatómico, un estrechamiento de situación inferior a la cabeza del húmero, señala el límite distal para la cápsula articular de la articulación del hombro. Está situado entre los tubérculos y la superficie articular lisa de la cabeza. En cambio, en una zona distal a los tubérculos, el cuello quirúrgico es estrecho y corresponde a la metáfisis del hueso en crecimiento. Su nombre refleja el hecho de que las fracturas suelen producirse a este nivel. La parte proximal del cuerpo del húmero, o diáfisis, aparece redonda en los cortes transversales. La tuberosidad deltoidea es una elevación que recorre el borde lateral del cuerpo, y baja hasta algo más de la mitad de su longitud. Recibe este nombre porque el músculo deltoides se inserta en ella. En la cara anterior del cuerpo, el surco intertubercular continúa a lo largo de la tuberosidad deltoidea. El cóndilo articular es la estructura que domina la superficie inferior distal del húmero (v. figura 7.6a,c). Lo cruza una cresta poco elevada, que 7 . Sistema óseo: Extremidades 179 lo divide en dos regiones articulares distintas. La tróclea (trochlea, polea) es la porción medial con forma de carrete, que se articula con el cúbito, el hueso medial del antebrazo. Esta estructura se extiende desde la cara anterior a nivel de la base de la fosa coronoidea (corona) hasta la posterior en la fosa olecraniana (v. figura 7.6a,d). Cuando el codo se acerca a la flexión completa (codo doblado) o a la extensión completa (codo recto), las dos depresiones citadas acogen otras dos prominencias que surgen de la superficie cubital. El capítulo redondeado forma la superficie lateral del cóndilo, y se articula con la cabeza del radio, el hueso lateral del antebrazo. Una fosita radial poco profunda que queda por encima del capítulo aloja una pequeña parte de la cabeza radial cuando el antebrazo se aproxima al húmero. En la cara posterior (v. figura 7.6d), el surco para el nervio radial recorre el borde posterior de la tuberosidad deltoidea. Esta depresión marca el trayecto del nervio radial, un nervio grande que tiene a su cargo transportar la información sensitiva procedente del dorso de la mano y el control motor de los grandes músculos que estiran el codo. El surco para el nervio radial acaba en el borde inferior de la tuberosidad deltoidea, donde el nervio gira hacia la cara anterior del brazo. Cerca del extremo distal del húmero, el cuerpo se abre hacia ambos lados, y forma un triángulo ancho. Un epicóndilo es un saliente que surge en la zona proximal a una articulación y ofrece una superficie extra para la inserción de músculos. Los epicóndilos medial y lateral sobresalen de la parte distal del húmero hacia ambos lados en la articulación del codo (v. figura 7.6c,d). El nervio cubital cruza la cara posterior del epicóndilo medial. Cualquier golpe recibido en la vertiente humeral de la articulación del codo puede repercutir sobre este nervio y producir un entumecimiento transitorio con parálisis de los músculos correspondientes a la cara anterior del antebrazo. Debido a la extraña sensación que genera, esta zona a veces se denomina hueso de la risa. Cúbito [v. figuras 7.2/7.7] El cúbito y el radio son dos huesos paralelos que sostienen el antebrazo (v. figura 7.2). En la posición anatómica, el cúbito queda medial al radio (v. figura 7.7a). La punta del codo está formada por el olécranon del cúbito (v. figura 7.7b). Esta eminencia representa la porción superior y posterior de la epífisis proximal. En su cara anterior, la escotadura troclear (o cavidad sigmoidea mayor) encaja con la tróclea del húmero (v. figura 7.7c-e). El olécranon constituye el labio superior de la escotadura troclear, y la apófisis coronoides, su labio inferior. Cuando el codo está recto (extensión), el olécranon se mete dentro de la fosa olecraniana que hay en la cara posterior del húmero. Si el codo está doblado (flexión), es la apófisis coronoides la que entra en la fosa coronoidea de la cara anterior del húmero. En un área lateral a la apófisis coronoides, la escotadura radial es lisa (v. figura 7.7d,e) y deja espacio para alojar la cabeza del radio y configurar la articulación radiocubital proximal. El cuerpo del cúbito es más o menos triangular en un corte transversal, su cara medial es lisa y ocupa la base del triángulo y el borde lateral corresponde al vértice. Hay una lámina fibrosa, la membrana interósea del antebrazo, que pone en conexión el borde lateral del cúbito con el borde medial del radio y suministra una superficie suplementaria para la inserción de músculos (v. figura 7.7a,d). En su parte distal, el cuerpo del cúbito se estrecha antes de acabar en una cabeza cubital disciforme cuyo borde posterior sostiene una apófisis estiloides (styloid, largo y en punta) corta. En esta apófisis estiloides se fija un cartílago articular triangular, que aísla la cabeza cubital de los huesos de la muñeca. La articulación radiocubital distal queda cerca del borde lateral de la cabeza del cúbito (v. figura 7.7f). La articulación del codo es una articulación estable formada por dos elementos, que funciona como una bisagra (v. figura 7.7b,c). Gran parte de su estabilidad se explica por el engranaje creado entre la tróclea del húmero y la escotadura troclear del cúbito; esta es la articulación humerocubital. La otra porción de la articulación del codo consiste en la articulación humerorradial, constituida por el capítulo del húmero y la superficie superior plana de la cabeza del radio. En el capítulo 8 examinaremos la estructura de la articulación del codo. 180 SISTEMA ÓSEO Surco intertubercular Tubérculo Tubérculo mayor menor Cabeza Tuberosidad menor Tuberosidad mayor Cabeza Cuello anatómico Tuberosidad Cuello Cuello anatómico Cabeza mayor anatómico Surco intertubercular Cuello quirúrgico Surco para el nervio radial POSTERIOR Tuberosidad Surco menor intertubercular (b) Porción proximal del húmero, vista superior Tuberosidad deltoidea Surco intertubercular Cuerpo (diáfisis) Surco para el nervio radial Tuberosidad deltoidea ANTERIOR Capítulo Surco intertubercular Tróclea Epicóndilo Fosa Epicóndilo lateral olecraniana medial (c) Porción distal del húmero, vista inferior Fosa coronoidea Fosa radial Fosa radial Epicóndilo lateral Epicóndilo lateral Epicóndilo medial Epicóndilo medial Capítulo Tróclea Capítulo Tróclea Cóndilo Cóndilo (a) Cara anterior Figura 7.6 Húmero (a) Vistas anteriores. (b) Vista superior de la cabeza del húmero. (c) Vista inferior de la porción distal del húmero. (d) Vista posterior. CAPÍTULO 7 . Sistema óseo: Extremidades 181 Cabeza Tuberosidad mayor Tuberosidad mayor Cabeza Cuello anatómico Cuello anatómico Cuello quirúrgico Tuberosidad deltoidea Tuberosidad deltoidea Surco para el nervio radial ANTERIOR POSTERIOR Fosa olecraniana Fosa olecraniana Epicóndilo medial Epicóndilo lateral Epicóndilo medial Epicóndilo lateral Tróclea Tróclea (d) Cara posterior Figura 7.6 (cont.) Radio [v. figura 7.7] El radio es el hueso lateral del antebrazo (v. figura 7.7). Su cabeza disciforme, o cabeza radial, se articula con el capítulo del húmero. Desde la cabeza radial se extiende un cuello estrecho hasta llegar a una tuberosidad del radio saliente, que marca la zona de inserción del músculo bíceps braquial. Este músculo dobla (flexiona) el codo, lo que hace pivotar el antebrazo hacia el brazo. El cuerpo del radio toma una curva a lo largo de su longitud, y la extremidad distal de este hueso es considerablemente más grande que la porción distal del cúbito. Como el cúbito está separado de la muñeca por el cartílago articular y por un disco articular, nada más que la extremidad distal del radio participa en la articulación de la muñeca. La apófisis estiloides situada sobre la superficie lateral de la extremidad distal sirve para estabilizarla. La superficie medial de la extremidad distal se articula con la cabeza del cúbito por medio de la escotadura cubital del radio y forma la articu- 182 SISTEMA ÓSEO Olécranon Húmero Articulación radiocubital proximal Cabeza del radio Fosa olecraniana Cuello del radio Epicóndilo medial del húmero Olécranon Tróclea del húmero Cabeza del radio Cúbito RADIO CÚBITO (b) Articulación del codo, vista posterior Membrana interósea del antebrazo Húmero Epicóndilo medial Tróclea Capítulo Escotadura cubital del radio Cabeza del cúbito Escotadura cubital del radio Apófisis coronoides del cúbito Apófisis estiloides del cúbito Cabeza del cúbito Apófisis estiloides del cúbito Cartílago articular Cabeza del radio Escotadura radial del cúbito Apófisis estiloides del radio Extremidad distal del radio Apófisis estiloides del radio Extremidad distal del radio (a) Vista posterior Figura 7.7 Radio y cúbito El radio y el cúbito son los huesos del antebrazo. (a) Vista posterior del radio y el cúbito derechos. (b) Vista posterior de la articulación del codo, que muestra el acoplamiento entre los huesos que participan. (c) Vista anterior de la articulación del codo. (d) Vista anterior del radio y el cúbito. (e) Vista lateral del extremo proximal del cúbito. (f) Vista anterior de las porciones distales del radio y el cúbito, y de la articulación radiocubital distal. (c) Articulación del codo, vista anterior CAPÍTULO 7 . Sistema óseo: Extremidades 183 Olécranon Escotadura troclear Apófisis coronoides Olécranon Escotadura radial del cúbito Cabeza del radio Escotadura troclear Cabeza del radio Apófisis coronoides Cuello del radio Escotadura radial Tuberosidad del cúbito Tuberosidad del cúbito Tuberosidad del radio CÚBITO (e) Cúbito, vista lateral RADIO Membrana interósea del antebrazo Superficies de inserción para la membrana interósea Escotadura cubital del radio Cabeza del cúbito Articulación radiocubital distal Cabeza del cúbito Escotadura cubital del radio Apófisis estiloides del radio Superficie articular para el carpo (cont.) Apófisis estiloides del cúbito Apófisis estiloides del radio (d) Vista anterior Figura 7.7 Articulación radiocubital distal Apófisis estiloides del cúbito Superficie articular para el carpo (f) Porción distal del radio y el cúbito 184 SISTEMA ÓSEO lación radiocubital distal. La articulación radiocubital proximal permite la rotación medial o lateral de la cabeza del radio. Cuando se realiza una rotación medial, la escotadura cubital gira alrededor de la superficie redondeada de la cabeza del cúbito. A su vez, la rotación medial de las articulaciones radiocubitales rota la muñeca y la mano desde la posición anatómica en ese mismo sentido. Este movimiento de rotación se denomina pronación. Su inverso, que supone la rotación lateral de las articulaciones radiocubitales, se llama supinación. Huesos del carpo [v. figura 7.8] La muñeca, o carpo, está constituida por los ocho huesos del carpo. Estos huesos forman dos hileras: cuatro huesos proximales del carpo y cuatro huesos distales del carpo. Los huesos proximales del carpo son el escafoides, el semilunar, el piramidal y el pisiforme. Los huesos distales del carpo son el trapecio, el trapezoide, el grande y el ganchoso (v. figura 7.8). Los huesos del carpo se encuentran unidos entre sí por articulaciones que permiten unos deslizamientos y unos movimientos de torsión limitados. Los ligamentos actúan como conexiones entre ellos y sirven para estabilizar la muñeca. Huesos proximales del carpo ■ ■ ■ ■ El escafoides es el hueso proximal del carpo situado en el borde lateral de la muñeca, en contigüidad a la apófisis estiloides del radio. El semilunar (luna), con su forma de coma, se halla medial al escafoides. Igual que él, se articula con el radio. El piramidal (hueso triangular) ocupa un lugar medial al semilunar. Tiene la forma de una pequeña pirámide. Se articula con el cartílago que separa la cabeza cubital de la muñeca. El pisiforme es pequeño, posee forma de guisante, queda en una posición anterior al piramidal, y es el hueso que alcanza un nivel más medial que cualquier otro hueso del carpo de las hileras proximal o distal. Huesos distales del carpo ■ El trapecio es el hueso lateral de la hilera distal. Forma una articulación proximal con el escafoides. Radio ■ ■ ■ El trapezoide se encuentra en una posición medial al trapecio con su forma de cuña; es el más pequeño de los huesos distales del carpo. Como él, tiene una articulación proximal con el escafoides. El grande es el hueso del carpo de mayores dimensiones. Está situado entre el trapezoide y el ganchoso. El ganchoso es un hueso en forma de gancho que ocupa el extremo medial de los huesos distales del carpo. Para recordar los nombres de los huesos del carpo en el orden señalado, sirve la frase siguiente: «Es sabio poner paz; también transmite gran gozo». La primera letra de cada palabra coincide con la primera letra del hueso, desde la zona lateral hacia la medial; los cuatro primeros son los proximales y los cuatro últimos, los distales. Huesos metacarpianos y falanges [v. figura 7.8b,c] Los huesos distales del carpo se articulan con los cinco huesos metacarpianos, que sustentan la palma de la mano (v. figura 7.8b,c). Para identificarlos se utilizan los números romanos I-V, comenzando por la parte más lateral. Cada metacarpiano tiene el aspecto de un hueso largo en miniatura, formado por una base proximal cóncava y ancha, un cuerpo pequeño y una cabeza distal. Por esta parte distal, los huesos metacarpianos se articulan con los huesos de los dedos, o falanges. Hay 14 falanges en cada mano. El pulgar tiene dos (falange proximal y falange distal) y cada uno de los otros dedos tiene tres (proximal, media y distal). Nota clínica Fracturas del escafoides El escafoides es el hueso del carpo que se fractura más a menudo, normalmente debido a una caída con la mano extendida. La fractura suele seguir un trayecto perpendicular al eje longitudinal del hueso. Como el riego sanguíneo que recibe su porción proximal disminuye con la edad, las fracturas de este segmento óseo por regla general consolidan mal, y muchas veces derivan en la necrosis del segmento proximal del escafoides. Cúbito Cúbito Semilunar Radio Semilunar Escafoides Piramidal Grande Pisiforme Trapecio Escafoides Pisiforme Grande Piramidal Trapecio Ganchoso Ganchoso Trapezoide Trapezoide I V II III I V II IV (a) Muñeca derecha, vista anterior (palmar) Figura 7.8 Huesos de la muñeca y la mano Los huesos del carpo forman la muñeca; los metacarpianos y las falanges forman la mano. (a) Vista anterior (palmar) de los huesos de la muñeca derecha. (b) Vista anterior (palmar) de los huesos de la muñeca y la mano derechas. (c) Vista posterior (dorsal) de los huesos de la muñeca y la mano derechas. III IV CAPÍTULO 7 . Sistema óseo: Extremidades 185 Radio Radio Cúbito Semilunar Semilunar Pisiforme Escafoides Piramidal Grande Pisiforme Escafoides Ganchoso Trapecio I Ganchoso Trapecio Trapezoide Grande Trapezoide Piramidal I IV II V IV Huesos metacarpianos II V III Huesos metacarpianos III Falange proximal Falange proximal Falange distal Falange media Falange distal Proximal Falanges Media Distal (b) Muñeca y mano derechas, vista anterior (palmar) Apófisis estiloides del radio Radio Apófisis estiloides del cúbito Apófisis estiloides del cúbito Escafoides Escafoides Semilunar Semilunar Trapecio Trapecio Pisiforme Pisiforme Trapezoide Trapezoide Piramidal Piramidal Ganchoso I I Grande V II IV III Grande Ganchoso Huesos metacarpianos V IV III II Hueso metacarpiano Falange proximal Proximal Media Falanges Distal (c) Muñeca y mano derechas, vista posterior (dorsal) Figura 7.8 (cont.) Falange media Falange distal