CAPITVLO XXXVII La vida de Iray Pedro de Armenteros hI', professo del monasterlo de San Leonardo.o de Alua. En este conuento se han criado grandes sieruos de Dios, y varones de mucha importancia; y aunque parece, que por estar eerca la vniuersidad de Sa1amanca, auian de ser hombres de muchas letras, muchos dell os han sido de los hermanos legos hombres idiotas, de la sabidur'a humana, aunque lIenos de la sciencia de los santos. Contraponiendolos Dios alii, a la vista de donde se platican tantas diferencias de letras, porque digan los letrados de aquella vniuersidad, oyendo la fama de aquelJos sieruos de Dios, 10 que otro tiempo dixo S. Agustin, quando entendio la vida admirable del gran padre San Anton. Leuantanse los ignorantes, y lIeuanse el reyno de los cielos, y nosotros con nuestras 1etras decendemos al infierno. EI primero en numero dest08, sea vn hermano lego, lIamado fray Pedro de Armenteros, hombre bien nacido, y des de el punto que recibio el habito (fue de los primeros de aquel conuento) trabajb en todos los oficios de' la obediencia animosamente, sin tener otro respeto a su vida, ni salud, sino solo a hacer aquello que sus prelados Ie mandauan, porque entonces no era la , obediencia tan discreta, 0 resabida como agora, que no procuraua mas de asegurar la consciencia. Arrojauanse los finos obedientes en las manos de Dios, sin consideracion de cos a criada, aun en los peligr08 manifiestos, como 10 vimos agora en los exempl08 que pusimos, y como 10 enseBaron los santos padres antiguos, para poder dezir dellos 10 que dixo el Apostol del obediente Abraham: Creyb en la esperan~a contra esperan~a. Harto desto podemos dezir de fray Pedro de Armenteros, pues de puros trabajos, fiado en la virtud de Dios, y en la obediencia, vino a estar muy enfermo. Durole muchos dias la dolencia, y al fin quedo tullido de todos los miembros del cuerpo, que aun comer no podia, sino por mano agena. Recibio esto de la mana del SeBor con alegre semblante, y haziendole muchas gracias, porque castigaua sus defetos en esta vida, con vn castigo Iigero y breue, para perdonarle en la eternidad. Estando ansi sin tratar de medicos, ni de medios para su Digitized by Google HlSTORIA DB LA ORDEN DE SAN OERONIMO 523 salud, porque nunca hizo caso delio, y su enfermedad estaua assentada, y como sin remedio. Vino la fiesta de la Natiuidad de Nuestro Sellor lesu ChristQ, tan regocijada y lIena de consuelo para todos, para los que la celebran de veras, y saben a que viene, y aun para los que estan dormi~os, y la conulerten en vna ocasion de of ens as del mlsmo SeHor, aunque el regocijo es de tan diferente caUdad. Sintio desde la cama el pobre enfermo el alegria que hazlan sus hermanos, como se despertauan vnos a otros, y se prouocauan a las a1aban~s diuinas, y can tar los Maytines, y a guisa de aquellos simples pastores, se esfo~auan con instrumentos rUlticos, cada qual como podia, a demostrar el viuo sentimiento, y comunicarlo fuera, perdiendo en parte aquella noche la seuera compostura que siempre guardan. Uenaronsele los ojos de agua, y el corac;on de santa Inuidia: y con la trlsteza grande del pecho, viendose priuado deste gozo, comenc;o a querellarse tlernamente, y a dezir a nuestro SeHor: 0 padre lIeno de bondad y c1emencia, como Seftor me oluidays tanto? Es possible que sea yo el desechado, y el Indlgno de entrar a la parte del gozo de vueltros hijosl Que a todos Seftor mlo infundays en las almas en esta noche tan dichosa, en que distel vuestro hljo al mundo para sanarle de su vejez, y de sus males tanta alegrla y consuelo, y yo miserable y triste este amarrado en este sepulcro, y no sea partlcipante de vuestros diuinolloores. No puedo Sellor creer que me amays. AcabO de dezir estas palabras con tanto estremo de tristeza, y de desconsuelo, que el demonio enemigo y diestro, que no plerde ocasion, Ie lanc; o vna sublta desesperacion en el alma, reboluiendo el humor melancolico a las telas del corac;on. y turbandole el juyclo, ansi como rabioso y desesperado se determlno a leuantarse de la cama, rastrando, y como pudiesse y echarse vn corredor abaxo, y acabar de vna vez con tanta miserla. Mas el pladoso Sellor, que no permlte sean sus sieruos tentados. sobre 10 que pucden sus fuerc;as, y como dize el Profeta real: Si el justo cayere, no sera quebrantado, porque el Seftor pone su mano debaxoj acorrlo luego con su gracia al sieruo afligido. Diole lumbre para que boluiesse sobre sl, y aduirtiesse su mal pensamlento, y torciesse la rienda del juizio, y deIiberacion a mejor camino, conociendo el engallo del enemigo. EchO de ver luego el mal conceto, antes que se pariesse el pecado,· y lastimado dello boluiose al Seftor, y oro con muchas lagrymas dizlendo: Poderoso y clementissimo SeHor, yo te ruego por tu santo Nacimiento, que ansi como en tal noche tuuiste por bien salir a nuestros ojol del vlentre virginal de tu santa madre, ansi te plega de auer pledad de mi, porque no perezca en manos de mi enemigo. Acabada esta oracion breue, aunque lien a de vn ansia viua, y dolor entrallable, Ie vlno vn suefto muy suaue con que se quedo dormido. Comenc;o luego a softar que estaua en la Iglesia, y que via entrar por la puerta della vna procession de nillos muy hermosos y resplandecientes, todos vestidos de blanco. Tras estos se seguia luego vna esquadra de mancebos, lIenos de gran resplandor, vestldos de preclosas ropas de colores varios, cantando los vnos y los otros suauemente loores diulnos. Sigu10le luego otra procession de viejos venerables, entre estos Ie parecia que venian dos mas sellalados, como presidentes de aquel choro. Estando ansi mirando los semblantes, y hermosura graue de los vnos, y de los otros, se lIegaron cerca del estos dos viejos, y dixo el vno al otro: Sanemos a este frayle, porque pueda ir a May tines, y goze de la fiesta con sus hermanos. Pareciole que Ie tomaron luego por las piemas, y por los brac;os, y se las estiraron junto con las demas partes del cuerpo, y que 10 sacaron de la cama en que estaua acostado, sintiendo gran dolor quando Ie estirauan, y ansi Ie dexaron sano, y desparecieron. Desperto luego, y espantado delo que auia visto, se hallo sano, y fuera de la cama, y de la celda, en vn corredorcillo que estaua alii, donde Ie pusieron aquellos varones an cia nos. No sabia si dormia, 0 sl velaua, si se estaba sollando, o que era aqueJlo. Atonito, y marauillado meneaua las piemas y los brac;os, hallauase sano, y bueno, sin dolor, ni sentimiento alguno, vestido con sus habitos, fuerte, y entero, no 10 crehia, siempre pensaua que softaua, andaua, meneauase, hazia reftexiones, acordauase de su tristeza passada. Entendio aI fin y certificose que no era suello, sino veras, y que de hecho el Sellor auia vsado con el tanta misericordia, que no solo Ie perdonaua, mas aun Ie daua aquella salud tan cumplida. L1eno de lagrimas, y de a1egria se postro en tierra, haziendole infinitas gracias por tan ex traordinario fauor, a tiempo que tan lexos estaua de merecerlo. Leuantose, y fuese a la Iglesia, a este punto comenllauan la primera Missa de las tres de aquel santo dia. Pusose en pie junto al altar mayor con rostro alegre, el Prior y los ministros que Ie vieron venir con tan buen semblante, y estar alii en pie, al que ten ian tan inutil en la cama, marauillaronse mucho. Estuuo alii toda la Missa derramando muchas lagrymas, que Ie yuan hilo a hilo por el rostro lie no de regozijo. Desseauan todos en tender el caso, y la nueua marauilla: el Prior era hombre prudente, desnudose las vestimentas sacras, Uamole a parte, y pregun tole, mandan dole en virtud de su santa obediencia no Ie encubriesse nada, que Ie awa acontecido y como estaua alii tan sano. Contole todo el discurso, sin faltar vn punto de 10 que hemos dicho: lIamo luego a todos los Religiosos, y contoles 10 que auia entendido. Hizieron luego todos juntos gracias a nuestro Seftor, por el fauorque aquel hermano, y todo el cotluento auia recebido en tan santa noche. Viuio despues dos aft os el sieruo de Dios, trabajando en la obediencia con mayor heruor, y mas seguridad que hasta alii, sin perdonar a su cuerpo en nada, con gran edificacion de los hermanos, que entendieron bien en esto auia sido la salud del cielo. Vino eJ tiempo del descanso, y de recebir el denario diurno. Tuuo en esta vltima enfermedad grandes consuelos del cielo. Estuuo hasta el punto que murio diziendo palabras de amorosos sentimientos a su Dios y seftor. Vnas vezes lIamaua a los santos, en quien siempre auia tenido particular deuocion, otras se conuertia a razonar con la Virgen, era consuelo grande estar alli con el. Vn poco antes que espirase se Ie mudo el rostro, en vn color tan alegre y encendido, que parecia de vn hombre muy sano. Preguntole el Prior, que auia visto, y que era la causa de tan subita mudanlla. Dixole en secreto, que estauan alli Ires grandes santos y principes del cielo, en quien el tenia mucha deuocion, que venian a acompaftar su alma, y presentarla en el acalamiento diuino. Dicho esto besG la mano al Prior, y pidiole la bendicion para la partida, diosela, y fue a reynar con lesu Christo, por auerle imitado en ser obediente hasta la muerte. CAPITVLO XXXVIII De otros dos santos relig/osos del mismo conuenlo de S. LeonardQ, fray Rodrigo • Stuilla, y fray Sancho. EI primero de estos dos Religiosos, que se lIamaua fray Rodrigo, era natural de Sewlla, de nobles padres. Entre muchas virtudes que se conocieron en el, y por elias inuidiado santamente, que seria largo contarlas se seilalo mucho en dos, humilde por excelencia, y en el mismo grado deuoto del santo Sacramento, porque desde el dia que se vistio los santos habitos de la religion, fue creciendo en entrambas cosas con euidentes mejoras. Quando venia el dia de la Comunion segun la costumble, y leyes de la orden (no eran tan frecuentes como agora, yassi 10 vsaron siempre los monges antiguos) eran tantas las Iagrymas que derramauan sus ojos que ponia admiracion a los que Ie comulgauan y a los que comulgauan con el, despertandolos a todos a sentir parte de 10 mucho que sentia en su alma. Quisiera el sieruo de Dios no hazer esta demostracion en publico, y eDcubrir su sentimienfo, mas no podia porque no eran suyas sino dadas del Sellor, para beneficio de muchos. Ansi parece que se derretia su alma al calor de aquella llama del amor diuino que tenia delante, como Ia cera aI fuego. Marauillauase el, como no sallan los hombres de si mismos con la consideration de tan excessiuo don, viendose con el en las manos, y hechos vasos de tan precioso liquor. Dezia algunas vezes, que el gusto de tan precioso combite sobrepujaua con infinitas ventajas a quantos regalos han sabido inuentar los apetltos humanos, y que recibiendo aquel santissimo cuerpo Ie parecia cosa fadl sufrir muerte, y tormentos grauissimos, no solo por el mismo Christo que es la cabella de todo este hermoso cuerpo de la yglesia, sino por el menor de sus miembros, y por el mas pequeftito Christiano, y dezia mas, que esto Ie pareda a el mas natural que ala mano ponerse a sufrir el golpe que va a herir la cabeza. Alto sentimiento de tan viuo y soberano misterio, dichosos los que aqui lIegan, pueden dezir con verdad los tales, que comulgan, y que hazen la vnion perfeta, que el Autor de los Sacramentos pretende en esta comunion. Con esta pujan~a de virtud cQrrja fra), Rodriso en 111$ primeros aftos de frayle, que aun para los postreros era mucho. Vino vna general peste por aquella tierra de Salamanca y Alua, y arrebatole en la flor de su juuentud aunque con muchas canas de sesso, y largos allos de aprouechamiento y meritos, y assi passo a la gloria soberana; sucedio a pocos dias de su muerte, que en el mismo conuento estaua vn religioso varon docto, dado todo al estudio de la santa Escritur:a, encontraua algunos lugares dificiles que no podia salir de1I0s, con estudio ni con Ingenio (vale poco aqui el ingenio humano, porque como dize el Apostol la reuelacion de la santa Escritura, no la a1can~ el ingenio proprio, sino con la Iwnbre diuina, con quefue inspirada)suplicaua a nuestro Selior Ie hiziesse este fauor,le diesse claro entendintiento de estos lugares, pues los queria solo para su gloria, y bien de su alma. Oyo el Sellor la ora cion de su sieruo, porque siempre esta atento su oydo aI que con Iimpia fe Ie llama, y se conoce falto de sciencia, como 10 dize el Apostol. Embiole una noche estando dormiendo, despues de auer tenldo larga oracion, el anima de este su sieruo fro Rodrigo, y la de otro su compaliero de habito y religion, que aula tambien muerto en la misma peste, que se lIamaua fro Sancho gran sieruo de Dios. Estas dos bienaventuradas almas Ie declararon en sueftos todos los lugares que dudaua, y quedo tan cierto con Ia exposicion venida del cielo, que como el dezia despues no solo entendio aqueUo en que dudaua, sino otras muchas cosas que jamas cayera en elias por su ingenio ni por su estudio. Dezia bien, porque la Escritura santa es como vna cadena de oro, hermosa mente trauada, y quien bien conociere la junta y el primor de algunos principales eslabones, por alii tendra gran noticia de otros muchos que prenden tras ellos. En vn quaderno antlguo, que haUe de los religiosos notables de aquel.conuento dezia vna cosa que es bien publicarla. AI punto que el buen fray Rodrigo de Seuilla queria espirar, poco mas de un hora antes vinieron a combatirle los demonios, en formas de bestias fieras, ponianle pensamlentos de desesperacion y de blasphemia; representauanle las culpas de la vida passada, viuas y feas, y los descuydos que auia cometido en la religion. Hacian algunas vezes ademanes, y amenazas de tragarle. Boluia el sieruo de Dios sus ojos aI cielo, pidiendo socorro It su Selior lesu Christo, y no tardo en embiarle. Vio luego que entraua en la celda el glorioso Doctor su padre San Geronimo, amenazo a los demonios, y salieron luego huyendo. Todo esto passaua alia en secreto, y en vision ocuUa, sin que 10 entendiessen los circunstantes, y vn poco antes que muriesse les dixo: 0 padres que tran~e tan dificil es pelear en este punto con los demonios, y verlos en sus formas abominables, si el Selior no me socorrlera embiandome a nuestro padre S. Geronimo, estaua a punto de perderme, quedad con Dios, que con el me parto a la gloria: diziendo esto espiro. En el mesmo conuent.) auia otro religioso de los que lIamamos nueuos, y estan en la disciplina del maestro. Llamauase fray luan de Valladolid, tenia este hermano mucha fe, y credito de la santidad de fro Rodrigo. Pidio aI Prior que Ie hizie!lse merced que Ie diesse la cama en que dormia quando estaua con el en el dormitorio. La primera noche que se acosto en ella, hizo a nuestro Seftor esta peticion diziendo: Selior lesu Chrtsto, aunque soy pecador y miserable, te supUco con todo mi cora~ on, quieras mostrarme alguna partecilla de la gloria que mi hermano Rodrigo possee contigo en el cielo. Acabada la oracion breue que Dios Ie puso en el alma para manifestar la gloria de su sieruo, Ie vino suelio y durmiose. Apareciole luego su hermano fray Rodrigo (no era mas de Subdiacono) vestido de vna casulla muy rica como Sacerdote, y en vn altar de grande Magestad y ornato, dixo vna Missa con mucha solennidad. Marauillose mucho desto, porque no podia entender como fray Rodrigo dezia Missa, no teniendo mas ordenes de Subdiacono, desperto y entendio luego el mysterio, y que el Seftor Ie daua a en tender con esto, que por la gran deuocion, y reuerencia con que seruia al Altar y comulgaua, tenia en el cielo dignidad y gloria de Sacerdote, por la regia que el mismo Selior ha dado, que el que recibiere al Profeta 0 al Apostol en nombre, y reuerencia de 10 que significa el ministerio recibira galardon de Apostol, y de Profeta, y por esta list a 10 demas. Quedole a fro luan de Valladolid tan impressa la vision en el alma, que se acordaaa del olicio de la Missa que auia oydo. Era el de la segunda feria de Pascua de Resurrecion, que comiemra, Introduxit liDS Dominus in terram jluentem lac S. mel. Muy a proposito Digitized by Google ....i ,. HlsfoRIA DE LA ORDEN DE SAN QERoNIMO de la gloria que se goza en aquella verdadera tierra de Promission, donde estan tod08 los bienes en su colmo con plenitud de dul~ura incomparable, significada por la abundancia de la miel y de la leche. Rezaua de coro tambien la oracion del mismo dia, que en toda su vida auia reparado en ella ni la auia oydo sino qual que vez, porque ni era Sacerdote ni ordenado, sino que el que Ie mostro la vision Ie imprimio tam bien la memoria de toda ella. Este fray Iuan crecio Mucha en el seruicio de nuestro Seftor, alentado con estos regalos, desseando alcan~ar la bienauenturan~a que el Seftor promete a los que bien caminan. Hizieronle luego procurador de los bienes temporales, por su buen termino y discrecion con todos. Dezian sus hermanos quando se ofrecia hablar del, que no era hombre sino Angel, porque estaua 8iempre tan compuesto, y tan sin turbacion de todo, 10 que suele menearnos, que parecia viuia en otra region fuera de la nuestra, y ansi encarecen esto mucho los que nos dexaron alguna memoria de su vida. Fue de los primeros que recibieron el habito despaes que quitaron la casa a los Premonstratenses, como ctixlmos en la fundacion Estaua tan mal parado todo, y tan por el suelo que fuera mas facit hacerla de nueuo. Este sieruo de Dios con su buena mafta, 0 con su buena alma, la puso como si dixessemos en forma, y en termino que pudiessen habitarla hombres, y venir a tener clausura, religion y culto diuino. Aunque puesto en tantas ocupaciones, y embara~os nunca perdia de vista el recogimiento interior, como 10 mostraua la compostura de fuera, pOI"" donde nos da licencia el Espiritu santo, que juzguemos de 10 de dentro. Andaua siempre cuidadoso de no perder la preferencia de Dios, ni hazer ausencia de su acatamiento. Grande freno y rienda eficacissima para andar vn alma dentro y fuera compuesta, porque desde alii se gouierna todo. Afirman del 10 que San Bernardo, de San Malachias Obispo, que nunca meneo la mano, nl boluio los ojos sin para que y importancia. Quando negociaua con los seglares, tenia la misma me8ura que quando estaua en el choro, y sus palabras eran tan medidas que no se Ie pudo no tar vna que mereciesse nombre de ociosa. Desta manera viuio veynte aftos en la religion, para 10 que Ie auian menester, pocos, por sus desseos muchos, por el ansia que tenia de yr a gour t!1 fruto de tan buenos trabajos a la glorta. CAPITVLO XXXIX De algunos olros religiosos deste conuento de san Leonardo de Alua rellltados breuemente. Otro mancebo florecio casi por este mismo tiempo, 0 poco despuea de los que aqui acabamos de referir. Llamauase fray Diego, hiZ08e presto viejo en las costumbrea, y tatl maduro en la religion que otros mas ancianos parecian verde8 en 8U comparacion. Entro en 1a orden siendo ya buen estudiante, traya en la cabe~a muchas Metaphisicas, formalidades y distinciones, y aun confusiones, acordo trocarla8 todas por la claridad de la8 aguas del rio de la santa Escritura, donde segun dize vn Doctor santo (I), se ahogan los camellos altos y gibJsos, Y los corderos simplecilJos, passan nadando 8uauemente. Aprouecho mucho en esta lecion juntandola con la oracion continua, porque se ayudan admirablemente. Acerto vna vez a encontrar con vn lugar, no se si de san Pablo 0 de vn Propheta de quien c:tize san Pedro, que ay en sus Epi8tolas muchos may dificiles, que los neci08 y poco constantes en la buena dotrina tuercen, y corrompen como las dema8 escrituras. EI sieruo de Dios quisiera penetrar el pensamiento, '1 aalir de duda; rogo a nuestro Sei'ior con mas prolixa oracion que otras vezes Ie 'enseftasse aquello. Acostose con esta oracion, y desseo. Vino estando dormiendo el glorioso san Bernardo, a quien el frayle seruia con particular deuocion, y dixole que el auia e8crito vn Iibro donde auia declarado aquel lugar. Seftalole el Iibro, para que 10 estudiasse alii, y desaparecio luego. En despertando el 8ieruo de Dios, como lIeuaua fixo en el pensamiento el suelio. y la uision, fuesse a la libreria, abrio a 8an Bernardo, y encontro luego con el Iibro, y con el lugar seftalado, Ie yolo y salio de duda, y hizo a nuestro Senor gracias, por tan gran fauor. Es buena manera de entender escrit.ara con oracion lIena de fe, y con mirar los santos atentamente, porque otros papeles de rincones no sacan el pie del lodo, y las mas vezes no son muy Iimpio8. Murio este religioso poco despues de la peste que diximos, lIeno de vritudes, auiendo aprendido en Ia tierra \0 que perseuera siempre con el en el cielo, por assentar este consejo de san Geronimo en su alma. . Combatia fuertemente en estos primeros tiempos el demonio a los santos que se criauan en la religion de san Geronimo, viendo resuscltar en sus hijos el espiritu de tan gran padre. Acometiales por todas las partes que alcan~ua su ingenioaprouechandose de todas las ocasiones, ayudandose de los naturales (que los conoce bien) y aprouechandose de todos los elementos, permitiendolo Dios para su mayor corona. Porque ya que faltauan en Espaila tyranos, y verdugos Principes idolatras, que como en los primeros tlempos de la yglesia los martyrizassen, porque negassen a leau Christo, no les faltasse la rabia de su inuidia, que con mil generos de tentaclones les dixesse, y forc;asse a negar el camino de la virtud Christiana. Aprouechauase algunas veces de las pestes, y de los ayres inficlonados, para que 0 muriesssen 0 perdiessen la paciencia, 0 desemparassen la religion. En este monasterio se muestra bien claro, por los que murieron en la flor de sus edades, religiosos de grandes esperanc;as, y que segun las gran des muestras que dieron, prometian frutos de gran hermosura, como 10 hemos visto en los passados. Tras e\los diremos de otros que confirman bien esta verdad, y el sentimiento. A vn mancebo que se \lamaua fray Pablo, perseguia, desde el punto que tomb el habito, crudamente. Viole comenerar vna vida lIena de gran humildad, con mucho alien to, para correr por la senda hollada de pocos que camina a la vida, huyendo de la carrera ar.cha que \leua a la perdicion, imitando quanto podia a los pocos y fuertes que hazen violencia al cielo. abrac;ando alegremente, el menosprecio, y proprio aborrecimiento, entregandose al trabajo de la religion, y oluidado de su cuerpo y de su vida, atento y considerado a todo 10 que era perfecion, desseoso de hallar aquella pureza de coraeron sin la qual no puede verse 10 que tanto se dessea. Para esto velaua de noche el tiempo que la obediencia Ie daua para dormir, y otros. ratos que el podia sisar sin escrupulo, meditaua en la vida de su Seilor, considerando aque\la Magestad diuina humillada para enseilar a los bombres el camino de la salud, y para ender~ ar nuestros pies, y nuestras costumbres en eI camino de la paz. Con estos tales exercicios se yua leuantando esta nueua plant a con gran pujanza, y dauan ya sus flores suaue olor de Christo. Bramaua con esto elleon sangriento buscando entrada por donde po- . derle lanerar en sus gargantas sedientas. Tirauale de secreto flechas ardientes de luxuria con pensamientos deshonestos, para ver si prf'ndia alguna, y si pasauan de la ropa. Recibialas el sieruo de Dios en el escudo de Ia fe, fortaleciendose en este combate con los lugares y sentencias de la santa Escritura que tenia en la memoria aparejadas para estas prisas: sabiendo que no ay contra este enemigo armas que ansi defiendan y Ie of endan. Apr.endiolo de su Maestro y Seilor: porque en el desafio que hizo con el tentador de solo a solo en el monte, no vso de otras, y con eUas alcanc;o tan gran victoria que se derrlbaron a sus pies los Angeles y Ie siruieron, agradeciendole por los hombres la nueua escuela qne auia abierto, para saber de alIi ade- • lante no solo resistirle, mas vencerle. Quando por aqui no aprouechaua Ie tocaua con vna ambiclon secreta el pecho, persuadiendole que bolasse por el ayre, y estimasse en mucho la estima que del hazian los hombres, y como Ie tenian todos por santo, cosa que no ge alcan .. a facilmente, aunque Ie procuran muchos, que mirasse hablauan ya del como de persona leuantada que no ponia los pies en el'suelo, caminando por via extraordinaria, singular, milagrosa. Otras vezes Ie ponia en el pensamie~to que segun la buena opinion, y la prudencia que en else conocia, no tardarian mucho en hazerle Prior, y que entonces seria seilor de aquella casa, de alii a poco Ie harian General, y ansi 10 seria de la orden, y no pararian aqui sus cosas. Todas estas imaginaclones, y torres de viento Ie arrojaua en la fantasia. EI sieruo de Dios como prudente conocla bien de donde nacian tan malas semillas. Postrauase en tierra, y suplicaua a nuestro Seilor no Ie desamparasse, pues el conocia su miseria, y su vileza. Ponia sus ojos en la vida passada, y en los defetos que hazia en la presente quan lIenas de manchas, y asquerosas eran todas sus obras, para ponerlas delante de los ojos de Dios. Consideraua que ni aun vn Pater noster no podia rezar .tentamente, sin mezclarse en el mil tentaciones de pensamientos vanos, distrayendose del fin verdadero, con esto se huDigitized by Google 528 HISTORIA DE LA ORDEN DE SAN GERONIMO miDaua y se tenia no solo por sieruo inutil que no trae prouecho a su Sellor sino por malo, y desperdiciador de los bienes que Ie . encomendaron. Como vio el enemigo que no aprouechaua combatirle como dragon astuto en 10 secreto, y con asechanzas, acometiole abiertamente en campo raso, como Leon rabioso. Apareciale visiblemente en figuras horribles, como quando en los yermos pretendia espantar con elias aquellos valerosos Capitanes de esta milicia Monastica. Despues de Completas, tiempo en que este sieruo de Dios se recogia a sus santos exercicios en la celda, se lan~aua tras el tomando alii formas de bestias terribles y disformes, pareciendo que no podia caber aUi dentro otra cosa ni darle lugar donde el se pusiesse sino arrlmado y pegado a ella, que era vna cosa asquerosisslma lIena de horror y de espanto: lan~aua vnas vezes centellas viuas de los • ojos, relampageaua con ellos fariosamente, otras hazia amenazas, yacometimientos de quererle tragar abrlendo vna boca tan descomunal que pareeia la del infierno. Armauase el santo con la sellal de la Cruz, y llamaua el nombre de lesu Christo, diziendo Iibradme Seftor de este dragon hambriento, y al punto se desuanecia como humo aqueUa sombra dando bramidos, y aullidos temerosos. Cantaua el sieruo de Dios luego con alegria diziendo, leuantose el Seilor y fueron desmenuzados sus enemigos, huyeron de su cara, como la cera se derrite al fuego, y desuanecieronse como humo ante I~ faz del viento. Otras vezes no hazia caso de estas visiones, y dauale el Seilor tanto animo, y tanta quietud en su oracion, que aunque la bestia sangrienta hazla todas sus apariencias yamenazas, el sieruo de Djos no cessaua de su oracion. Como aquel santo padre de quien cuenta san Nilo (') que aunque los demonios Ie trayan por el ayre jugando con el como con pelota, mucho tiempo, jamas perdia la atencion de su meditacion. Algunas vezes despues de estas luchas tan fieras embiaua nuestro Sellor sus santos Angeles (ansi 10 manisfestb el a su confessor en la vltima confession) y Ie consolaaan y animauan para perseuerar en el exercicio de su oracion, y a su venida desaparecian huyendo aqueUos monstruos, quedando el santo como en gloria, oyendolos ('I Cap, lOG. de oratioDe. can tar en dulce tono alaban~ dillinaa. Despues que huuo alcan~ado tantas victorias de sus enemigos no Ie osauan acometer mas, 0 no se les permitio, porque tozasse aan aqui de la paz, y sossiego del alma en el modo qae puede participarse de aquellos que legitimamente pelean. Con esto comen~b a dessear mas viuamente la vista perfeta de sus amores. Andaua tan heruoroso que cada dia se Ie hazia vn siglo, 1I0rando la ausencia de aque! bien por quien gime toda criatura. Quando en aquella felicidad infinita ponia los ojos (tenia gran conocimiento della, y de ay nacia mayor ansia) pareciale que estaua en vn destierro insufrible, porque acongoja grandemente a las almas esta sed de verse engolfados en aquella fuente viua, y hasta que viene sobre elias el impetu de aquel rio caudaloso no tienen alegria. Quiso al fin el seftor cumplir sus desseos, y darle la corona cumplida de sus vitorias. Aun no tenia doze anos cumpJidos de religion (tanta prisa se auia dado a camlnar) y embiole Dios vnas fiebres agudas, con que vino presto a la pOltrera, aunque a el se Ie hazia tarde. Vn poco antes de su muerte rogb al Prior y a los otros religiosos que estauan alli presentes que a imitacion de su padre san Oeronimo Ie sacaslen de Ia cama, y Ie pusielsen en el suelo. EI Prior por darle aquel consuelo mando que ae hiziesse; quando alli se vio con grande alegria dixo, que rezassen las Letanias, puso el sus manos, y ayudaua con buen sembi ante a quanto se yua diziendo,'como lino tuuiera mal nmguno, y en acabandola dio el alma a nuestro Seilor. Otros muy claros varones han ftorecido en este conuento y de otIo en particular se refieren aunque con mucho descuydo, y sin saber como se lIamaua, que fue tan perseguido de los demonios con tentaciones tan furiosas, en bataUas espirituales secretas, y publical acometiendole visiblemente, que poco men os segun Ie trayan desuelado eatuuo para perder el sesso, y a no tenerle tan bueno sin duda peligraria. No osaua al principio descabrirlo, mas despues como se vio tan alcan~ado y derribado de sus fuer~as. dlo cuenta de su trabajo al Prior, y a otros antiguos, para que Ie ayudaasen con sus oraciones y consejos, y con tan buena ayuda, y por auer reconocido su ftaqueza vino a ser tan animoso, y tan fuerte que no osauan acometerle, aunque los desafiaua, y dezla que con sola la sellal de la Cruz, puesta con fe viua en la frente del Christiano, no auia demonio que Ie osasse toear en el cabello. Hallase tambien de otro la mlsma relacion, y tambien oluidado el nombre, como sino fu~ran estas hazaflas dignas de memoria perdurable. Contentaronse solo COil dezir que era vn religioso de gran santidad, y de gran reuerencia, y que muchas vezes estando dormiendo los demonios venlan a despertarle, por derribarle de su sufrimiento, y procurarJe algun desassossiego que Ie agotasse la paciencia, 0 que por 10 menos la falta del sue flo Ie hiziesse faltar a May tines. Hazian ruydos estraflos en la celda, quitauanle la ropa de la cama, despertaua el santo, y deziales con mucha autoridad, y como mandandoles: Ydos de ay malauenturados, y dexadme dormir, que aunque no querays me he de leuantar a Maytines. Temianle tanto que luego los cuytados diablos se yuan huyendo. Por la frequencia grande de estos aparecimientos, y las continuas victorias que alcan~aua de estos enemigos, Ie parecio que era negoclo largo ponerJas en escrito. Acontecia esto a los principios de esta religion tan de ordinario, y en tantas casas, 'I a tantos religiosos que era menester estar proueydos de agua bendita en las celdas. Sentian tanto estos espiritus malos la solemnidad, y el reposo con que vian estarse a los frayles de S. Geronimo, la mayor parte de la noche celebrando el oficio de los May tines, que procurauan con todo su ingenio estoruar cuanto podian esta gloria de Dios, con desassossegar a sus sieruos. A vn nouicio heruoroso y de gran espir!tu no Ie dexauan los demonios vn punto, persigulendole en cuantas maneras sabian, aparecianle visiblemente formando estas mascaras que suelen, tanto que acometiendole en figuraa espantosas, y cogiendole desapercebido, solian espantarse tan reziamente, que dauan con el en el suelo de improuiso. EI pobre nouicio no osaua dezir 10 que via, por parecerle que no Ie creerian, 0 que tambien aconteda a otros, y que como no eran tan f1acos ni espantndi~ os no hazia en ellos tanta impresion. Pensaron los frayles que era enfermo de algun mal de cora~on 0 que Ie tomaua gota coral, que lIaman morbo caduco, y con esto tratauan de quitarle el habito, porque ni podia serulr en la religion, ni sanaria de la dolencla con el encerramiento. Algunos frayles mas Philosophos 0 mas espirituales, miraron con H. DE LA O. DB S. Gaa6~I.O. - 34 atencion en algunos accidentes, y no les parecio que aqueUo procedia de la enfermedad de dentro, ni padecia 10 que suelen quien esta toeado de eltas enfermedades. Preguntaronle al nouicio sl auia tenido algo de aqueUo en el siglo, dixo que no, replicaron pues que sentis vos hijo que es elso. Entonces cobrando alguna osadia dixo, yo pensaua padres ql.&e estos que yo padezco otros muchos 10 vian, los demonios se me ponen tan fieros y tan espantosos delante que es marauilla, como no me muero, y algunas vezes me cogen tan de subito que no tengo fue~a ni habilidad para socorrerme: porque me turban el juycio y me derriban, deue de ser por mis pecados. Entendieron luego la tra~a del enemigo, que pretendia con eUo desacreditar al sieruo de Dios, y porque Ie echassen del conuento, y no Uegasse a hazer. profession, consolaronle, y animaronle quanto pudieron diziendo, que lIamasse a nuestro Seflor lesu Christo, y a nuestro padre san Geronimo en su ayuda. Dieronle luego la profession, y desde aquel punto nunca mas Ie aparecieron, y tenian razon de fatigarle por el dano que se les auia de seguir de vn tan buen frayle.