Mateo Angeli – Mateo Tacconi SHERLOK HOLMES Y EL MISTERIO

Mateo Angeli – Mateo Tacconi
-Hola ¿Hablo con el Sr. Holmes?
- No con Watson ¿Qué le quiere consultar?
- Es sobre un misterio de mi vecino el sr. Manton últimamente se han escuchado ruidos muy raros en su
propiedad y no lo veo salir ni a él ni a su flia. desde hace semanas.
- ¿Cree que haya sido un asesinato?
- Quizás.
- Le diré a Sherlok sobre el asunto su apellido y dirección.
- Nueva York en Bustley al 1613 y King.
- Adiós, estaremos allí en 3 días-corta la llamada y explica lo sucedido a Holmes.
3 días después…
Ring ring ring: Suena el timbre en la casa del Sr. King.
- Hola ¿Sr. King?- dice Holmes que esperaba verlo más arreglado.
- Hola quiere pasar.
- Con permiso- pasan hasta la cocina donde ya estaba servido el té – no sabe nada sobre el personal de
trabajo de la casa.
- No, solo sé que había una empleada per creo que esta presa o algo así.
- Muchas gracias, adiós, luego vuelvo-inmediatamente, Sherlok, fue hacia la cárcel del pueblo.
Ya adentro de la cárcel el Sr. Holmes se acerca al guardia le muestra su placa de investigador y
dice:
- Busco a la ex empleada de los Manton.
- Celda 18 – responde el guardia.
Cuando Holmes llega:
- Hola usted trabajaba en la casa de los Manton.
- Sí - responde de mal modo la Sra.
- ¿Por qué esta en la cárcel?- pregunto con su mejor tono Holmes.
- El loco de Manton me mando porque tenía miedo de que cuente sus crímenes.
- Ahora que el está muerto yo te puedo sacar de acá, claro si me cuentas – la trata convencer Sherlok.
- ¿¡Él murió cuando fue, qué paso!?
- Lo estoy investigando, sería de mucha ayuda que me contaras que paso.
- Si él está muerto me debes liberar el mató a su familia sacándole la cabeza, es lo único que te servirá
en este caso.
– Adiós, gracias.
Mateo Angeli – Mateo Tacconi
Sherlok decidió entrar a la casa de Manton para ver si había cadáveres y huellas en ellos, pero
cuando entro a la casa solo vio unas huellas de pies a las que les faltaba un dedo. Él decidió quedarse a
revisar cada rincón y se hiso de noche, luego se sentían voces extrañas, las siguió y vio al Sr. Manton
muerto sobre una carretilla y una fantasma que era su mujer, con cicatrices en el cuello, los pies sin un
dedo y que mientras se iba dijo:
- El me mato a mí y a mis hijos yo le devolví el favor- luego
desapareció sin decir nada.